5 formas de auto-sabotaje que retrasan el camino al Éxito
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5 Formas De Auto-Sabotaje Que Retrasan El Camino Al Éxito
El éxito de cada persona en los negocios, es un deseo profundo que nace del ser.
Tener un sueño, una idea genial y el entusiasmo suficiente, es lo que determinará
la llegada a la meta. Sin embargo tener una gran idea y construir ese sueño
diariamente, resulta difícil para muchos que finalmente fallan en su intento. Para
clasificar entre las personas que alcanzan el éxito, debes dominar ciertas
disciplinas que te ayudarán a evitar sabotear tu propio éxito.
1) ¿En qué crees?
Tus pensamientos determinar la forma en que ves la vida y en última instancia,
determinan tu destino. Para tener éxito, debes revisarte antes que nada a ti
mismo, ¿cómo te percibes a ti mismo, tu potencial, y en lo que crees que eres
capaz de llevar a cabo con éxito? Siempre mantén una actitud positiva.
Obtener el pensamiento negativo es fácil, se requiere un esfuerzo cero y crea
barreras imaginarias a tu éxito en cualquier dirección que escojas. Por tanto, no es
probable que tengas éxito en tu vida, si dejas que el pensamiento negativo se
anide en tu mente. No debes tolerar este tipo de pensamientos. En lugar de esto,
recurre a tu pensamiento más innovador. El pensamiento negativo es rígido,
estático y trabaja en contra de la corriente de tu vida. Para tener éxito hay que
entrenar tus pensamientos para llegar a ser flexible, esperanzado y creativo.
Hazte consciente de tus pensamientos, para dirigirlos correctamente. Cuando
estás en control de tu proceso de pensamientos no habrá obstáculo que pueda
estancar tu creatividad. Si quieres tener éxito, tienes que comer, dormir y pensar
de una forma saludable, camino al éxito. Abrazar tus pensamientos con la
esperanza, la pasión, la positividad y la confianza te hará ser cada día mejor. No
des lugar a los pensamientos derrotistas, porque las acciones siguen a los
pensamientos.
Una mente negativa, es un asesino del éxito. Deja que la forma de pensar sea tu
mayor activo y no un obstáculo en tu vida.
2) Falta de compromiso
Tú no puedes cumplir tus sueños si no estás seguro del camino que te has
comprometido a trabajar. Nunca asumas que el camino al éxito será fácil. Los
supuestos de facilidad de esfuerzo, descarrilan tu éxito casi de inmediato. Cuando
las cosas se tornen más difíciles de lo esperado, las frustraciones y el
resentimiento matan tu unidad de esperanza.
No hay mayor asesino del éxito que la frustración respaldada por el resentimiento.
Para vivir con el propósito de llegar al éxito, no debes albergar ni una sombra de
duda de lo que quieres. El éxito sostenible requiere un profundo y tenaz
compromiso junto a un plan detallado y sólido de acción. Tener un compromiso
claro, corta la confusión y la duda a que te enfrentas en tu camino hacia el éxito.
Sin un verdadero e inquebrantable compromiso con tu propósito, tus metas
pierden importancia y valor. Una falta de compromiso crea retrasos, el caos y la
frustración de cualquier objetivo en tu vida.
Nunca dejes de vista tus metas, no importa si parecen estar muy lejos. Si quieres
tener éxito a nivel global, debes estar dispuesto a sacrificarte.
3) Falta de autorregulación
Aprender a comprender y controlar tus propias emociones te ayudará a que estas
no se conviertan en turbulentas olas que terminen por descarrilar tu éxito.
Si eres emocionalmente intermedio, debes ser consciente de tu estado de ánimo
en cada situación para tomar las decisiones correctas. Las decisiones que se
toman a través del miedo o la ira te llevarán fuera del curso de tu vida y con
frecuencia arruinarán las relaciones y conexiones que puedas llegar a tener con el
éxito. Las decisiones tomadas en la cumbre de la felicidad te pueden llevar a la
impulsividad lo que acarrea que tu vida se anide más tarde en el sentimiento de
culpa por lo que hiciste. Sin embargo, en los momentos emocionales planos y
aburridos es donde mayor peligro se radica porque estos tiempos pueden causar
inmovilidad cuando deberías estar moviéndote hacia adelante.
Para tener éxito hay que avanzar y trabajar fuertemente. No se puede ganar el
juego de hoy, basados en los puntos de ayer, tampoco hay que dejar de ser
innovador, ni esperar demasiado tiempo a que las cosas ocurran. Cada día
levántate más tranquilo y decidido. Asegúrate de ser radical antes de tomar
decisiones importantes. Mantente consciente de que las emociones erráticas
conducen a malas decisiones.
4) La falta de gestión de tiempo y estructura
Ser emprendedor implica libertad para gestionar tu tiempo. Tienes la libertad de
establecer tu propio horario, decidir cuándo trabajarás y lo mucho que lo harás. La
libertad es maravillosa, pero se puede convertir en caótica si no tienes una
autodisciplina. Si no eres auto-disciplinado, esto te podría estar conduciendo a la
pereza y al fracaso.
Demasiada libertad puesta en las manos de la persona indisciplinada y
desorganizada, no mostrará ningún resultado positivo. La incapacidad para
manejar el tiempo conduce a una toma de decisiones pobres, una incapacidad
para priorizar y otros hábitos más. Este tipo de comportamiento no permite
siquiera despegar una idea.
El tiempo puede ser una energía enorme y opresiva de manejar cuando hay
demasiado de él en tus manos.
Es importante crear un calendario organizativo como si estuvieras trabajando para
una empresa. Así tu propia corporación tendrá orden y siempre estarás
programado para seguir en el camino del logro de tus metas.
Si no puedes mantenerte al día con el tiempo que tienes, no podrás hacerles
frente a tus competidores. Tienes que hacer las cosas mejor que tus competidores
en cuanto a la gestión del tiempo y organización si quieres salir adelante. Estar
programado te permite entre otras cosas valorar y disfrutar el tiempo libre y
personal.
Para ser un empresario exitoso necesitas más que un gran sueño y un gran
horario. Se requiere de una gran cantidad de auto-disciplina, la organización de
tus recursos y la voluntad de trabajar.
5) Falta de paciencia
Como empresario puedes tener las ideas más grandes del mundo, pero sin la
paciencia no es probable verlos de manifiesto, no importa que tan genio eres. Para
tener éxito hay que aprender a tener paciencia. La paciencia es algo que se
desarrolla, no es algo que se tiene. La paciencia es como un músculo. Entre más
lo uses, más éxito tendrás. Las personas sin paciencia ceden a la frustración y se
dan por vencidos fácilmente, el éxito duradero y sostenible no se basa en la
satisfacción inmediata. El verdadero éxito es un proceso dinámico construido
sobre el cambio, el desafío y el crecimiento.
La paciencia te da la determinación de seguir tras la meta, sin importar las
probabilidades de éxito. La paciencia ayuda a cultivar la persistencia, la
aceptación y la esperanza. Te permite ver la imagen grande y pequeña del éxito,
lo que te da el control sobre tu mente e impulsos cuando las cosas parecen
sombrías. Cuando eres paciente aumentas en gran medida las probabilidades de
que tus sueños se hagan realidad.
El éxito es un arte y una disciplina, no solo un codiciado ideal. Por esta razón,
muchas personas persiguen un ideal sin las habilidades necesarias para llegar allí.
Una persona que no es capaz de disciplinar sus pensamientos, gestionar y
organizar el tiempo, controlar sus emociones, estar completamente comprometido
con la causa y no tener la paciencia para través los desafíos, no podrá alcanzar
los resultados que anhela. Va a quedar atrapado en el pensamiento negativo y la
molestia. Para este tipo de personas la frustración triunfa sobre la paciencia y
antes de que esta persona se dé cuenta, ha saboteado su sueño. No dejes que
esto te suceda