8 prÁctica del instante santo

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PRÁCTICA DEL INSTANTE SANTO 1. ¿Puedes imaginarte lo que sería no tener inquietudes, preocupaciones ni ansiedades de ninguna clase, sino simplemente gozar de perfecta calma y sosiego todo el tiempo? 2 Ése es, no obstante, el propósito del tiempo: aprender justamente eso y nada más. 3 El Maestro de Dios no  puede sentirse satisfecho con Sus enseñanzas hasta que éstas no constituyan lo único que sabes. 4 Su función docente no se consumará hasta que no seas un alumno tan dedicado que sólo aprendas de Él. 5 Cuando eso haya ocurrido, ya no tendrás necesidad de un maestro, ni de tiempo en el que aprender. 2.  La razón del aparente desaliento del que tal vez padezcas es tu creencia de que ello toma tiempo y de que los resultados de las enseñanzas del Espíritu Santo se encuentran en un futuro remoto. 2 Sin embargo, no es así, 3  pues el Espíritu Santo usa el tiempo a Su manera, y no está limitad o por él. 4 Él tiempo es Su amigo a la hora de enseñar. 5  N o  causa deterioro en Él como lo hace en ti. 6 Todo el deterioro que el tiempo parece ocasionar se debe únicamente a tu identificación con el ego, que se vale del tiempo para reforzar su creencia en la destrucción. 7 El ego, al igual que el Espíritu Santo, se vale del tiempo para convencerte de la inevitabilidad del objetivo y del final del aprendizaje. 8 Él objetivo del ego es la muerte, que es su  propio fin. 9 Mas el objetivo del Espíritu Santo es la vida, la cual no tiene fin. (T.15.I.1-2) 8. El Espíritu Santo quiere desvanecer todo esto ahora. 2  No es el presente lo que da miedo, sino el pasado y el futuro, mas éstos no existen. 3 El miedo no tiene cabida en el presente cuando cada instante se alza nítido y separado del pasado, sin que la sombra de éste se extienda hasta el futuro. 4 Cada instante es un nacimiento inmaculado y puro en el que el Hijo de Dios emerge del  pasado al presente. 5 Y el presente se extiende eternamente. 6 Es tan bello, puro e inocente, que en él sólo hay felicidad. 7 En el presente no se recuerda la oscuridad, y lo único que existe es la inmortalidad y la dicha. 9. Est a lección no requ iere tiempo para apren derse. 2 Pues, ¿qu é es el tiempo sin pas ado ni futuro? 3 El que te hayas descarriado tan completamente ha requerido tiempo, pero ser lo que eres no requiere tiempo en absoluto. 4 Empieza a usar el tiempo tal como lo hace el Espíritu Santo: como un instrumento de enseñanza para alcanzar paz y felicidad. 5 Elige este preciso instan te, ahora mismo, y piensa en él como si fues e todo el tiempo que existe . 6 En él nada del  pasado te puede afectar, y es en él donde te encuentras completamente absuelto, complemente libre y sin condenación alguna. 7 Desde este instante santo donde tu santidad nace de nuevo, seguirás adelante en el tiempo libre de todo temor y sin experimentar ninguna sensación de cambio con el paso del tiempo. (T.15.I.8-9) 5. Aún no has tenido la experiencia del instante santo. 2 Pero la tendrás y la reconocerás con absoluta certeza. 3  Ningún regalo de Dios se reconoce de otra manera. 4 Puedes practicar el mecani smo del instante santo y aprend er mucho de el lo. 5 Mas no pu edes su pl ir su deslumbr ante y reluci ente fu lgor, qu e li teralmente te cegasólo con que lo veas, impidiéndote ver este mundo. 6 Y todo ello se enc uen tra aqu í, en este mis mo ins tan te, completo, consumado y plenamente otorgado. 6. Empieza ahora a desempeñar el pequeño papel que te corresponde en el proceso de aislar el instante santo. 2 Recibirás instrucciones muy precisas a medida que sigas adelante. 3 Aprender a aislar este segundo y a experimentarlo como algo eterno es empezar a experimentarte a ti mismo como que no estás no separado. 4  No tengas miedo de que no se te vaya a ayudar en esto. 5 El Maestro de Dios y Su lección respaldarán tu fortaleza. 6 Es sólo tu debilidad lo que se desprenderá de ti cuando comiences a practicar esto, pues al hacerlo experimentarás el poder de Dios en ti. 7 Utilízalo aunque sólo sea por un instante, y nunca más lo negarás. a ¿Quién  puede negar la Presencia de aquello ante lo cual el universo se inclina con júbilo, y agradecimiento? 9 Ante el reconocimiento del universo que da testimonio de Ella, tus dudas no  pueden sino desaparecer. (T.15.II.5-6) El dolor no tiene objeto, ni causa, ni poder alguno con que lograr nada. 2  No puede aportarte nada en absoluto. 3  No te ofrece nada y no existe. 4 Y todo lo que crees que te ofrece es tan inexistent e como él. 5 Has sido esclavo de algo que no es nada. 6 Sé libre hoy de unirte a la feliz Voluntad de Dios.

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PRÁCTICA DEL INSTANTE SANTO

1. ¿Puedes imaginarte lo que sería no tener inquietudes, preocupaciones ni ansiedades deninguna clase, sino simplemente gozar de perfecta calma y sosiego todo el tiempo? 2Ése es, noobstante, el propósito del tiempo: aprender justamente eso y nada más. 3El Maestro de Dios no

 puede sentirse satisfecho con Sus enseñanzas hasta que éstas no constituyan lo único que sabes.4Su función docente no se consumará hasta que no seas un alumno tan dedicado que sóloaprendas de Él. 5Cuando eso haya ocurrido, ya no tendrás necesidad de un maestro, ni de tiempoen el que aprender.2.   La razón del aparente desaliento del que tal vez padezcas es tu creencia de que ello tomatiempo y de que los resultados de las enseñanzas del Espíritu Santo se encuentran en un futuroremoto. 2Sin embargo, no es así, 3 pues el Espíritu Santo usa el tiempo a Su manera, y no estálimitado por él. 4Él tiempo es Su amigo a la hora de enseñar. 5 No causa deterioro en Él como lohace en ti. 6Todo el deterioro que el tiempo parece ocasionar se debe únicamente a tuidentificación con el ego, que se vale del tiempo para reforzar su creencia en la destrucción. 7Elego, al igual que el Espíritu Santo, se vale del tiempo para convencerte de la inevitabilidad delobjetivo y del final del aprendizaje. 8Él objetivo del ego es la muerte, que es su  propio fin.9Mas el objetivo del Espíritu Santo es la vida, la cual no tiene fin. (T.15.I.1-2)8. El Espíritu Santo quiere desvanecer todo esto ahora. 2 No es el presente lo que da miedo, sinoel pasado y el futuro, mas éstos no existen. 3El miedo no tiene cabida en el presente cuandocada instante se alza nítido y separado del pasado, sin que la sombra de éste se extienda hasta elfuturo. 4Cada instante es un nacimiento inmaculado y puro en el que el Hijo de Dios emerge del

 pasado al presente. 5Y el presente se extiende eternamente. 6Es tan bello, puro e inocente, queen él sólo hay felicidad. 7En el presente no se recuerda la oscuridad, y lo único que existe es lainmortalidad y la dicha.9 . Esta lección no requiere tiempo para aprenderse. 2Pues, ¿qué es el tiempo sin pasado nifuturo? 3El que te hayas descarriado tan completamente ha requerido tiempo, pero ser lo queeres no requiere tiempo en absoluto. 4Empieza a usar el tiempo tal como lo hace el EspírituSanto: como un instrumento de enseñanza para alcanzar paz y felicidad. 5Elige este precisoinstante, ahora mismo, y piensa en él como si fuese todo el tiempo que existe. 6En él nada del

 pasado te puede afectar, y es en él donde te encuentras completamente absuelto, complementelibre y sin condenación alguna. 7Desde este instante santo donde tu santidad nace de nuevo,seguirás adelante en el tiempo libre de todo temor y sin experimentar ninguna sensación decambio con el paso del tiempo. (T.15.I.8-9)5. Aún no has tenido la experiencia del instante santo. 2Pero la tendrás y la reconocerás conabsoluta certeza. 3 Ningún regalo de Dios se reconoce de otra manera. 4Puedes practicar elmecanismo del instante santo y aprender mucho de ello. 5Mas no puedes suplir sudeslumbrante y reluciente fulgor, que literalmente te cegará sólo con que lo veas,impidiéndote ver este mundo. 6Y todo ello se encuentra aquí, en este mismo instante,completo, consumado y plenamente otorgado.6. Empieza ahora a desempeñar el pequeño papel que te corresponde en el proceso de aislar elinstante santo. 2Recibirás instrucciones muy precisas a medida que sigas adelante. 3Aprender a aislar este segundo y a experimentarlo como algo eterno es empezar a experimentarte a timismo como que no estás no separado. 4 No tengas miedo de que no se te vaya a ayudar enesto. 5El Maestro de Dios y Su lección respaldarán tu fortaleza. 6Es sólo tu debilidad lo que sedesprenderá de ti cuando comiences a practicar esto, pues al hacerlo experimentarás el poder de Dios en ti. 7Utilízalo aunque sólo sea por un instante, y nunca más lo negarás. a¿Quién

  puede negar la Presencia de aquello ante lo cual el universo se inclina con júbilo, yagradecimiento? 9Ante el reconocimiento del universo que da testimonio de Ella, tus dudas no

 pueden sino desaparecer. (T.15.II.5-6)

El dolor no tiene objeto, ni causa, ni poder alguno con que lograr nada. 2 No puede aportartenada en absoluto. 3 No te ofrece nada y no existe. 4Y todo lo que crees que te ofrece es taninexistente como él. 5Has sido esclavo de algo que no es nada. 6Sé libre hoy de unirte a lafeliz Voluntad de Dios.

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Ayudarte a encontrar la felicidad que la Voluntad de Dios ubicó en ti. 2Ahí se encuentra tuhogar y tu seguridad. 3Ahí se encuentra tu paz y ahí no hay miedo. 4Ahí se encuentra lasalvación. 5Ahí por fin encuentras descanso.4. Da comienzo hoy a tus sesiones de práctica con esta declaración de que aceptas lo que laVoluntad de Dios dispone para ti:

2Comparto con Dios Su Voluntad de que yo sea feliz.aY acepto ahora la felicidad como mi función.

3Busca entonces esa función en lo más recóndito de tu mente, pues está ahí, esperando tansólo tu decisión. 4 No puedes dejar de encontrarla una vez que te des cuenta de que ésa es tudecisión y de que compartes con Dios Su Voluntad.5. Sé feliz, pues tu única función aquí es la felicidad. 2 No tienes por qué ser menos amorosocon el Hijo de Dios que Aquel Cuyo Amor lo creó tan amoroso como Él Mismo. 3Ademásde estos descansos de cinco minutos cada hora, haz frecuentes pausas hoy para decirte a timismo que ahora has aceptado la felicidad como tu única función aquí. 4Y ten por seguroque al hacer esto te estarás uniendo a la Voluntad de Dios. (L.102)