aam boletín_67 2012

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de la Asociación Argentina de Musicología Año 27, Número 67 Córdoba, abril de 2012 Editor Héctor Rubio El Boletín de la AAM es de edición semestral. Los artículos firmados no reflejan necesariamente la opinión de la Comisión Directiva.

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  • Boletn

    de la Asociacin Argentina de Musicologa

    Ao 27, Nmero 67

    Crdoba, abril de 2012

    Editor Hctor Rubio

    El Boletn de la AAM es de edicin semestral. Los artculos firmados no reflejan

    necesariamente la opinin de la Comisin Directiva.

  • COMISIN D IRECTIVA

    Leonardo Waisman

    presidente

    Hctor Rubio

    vice presidente

    Silvina Argello

    secretaria

    Omar Garca Brunelli

    tesorero

    Federico Sammartino

    vocal titular

    Lisa Di Cione

    primera vocal suplente

    Clarisa Pedrotti

    segunda vocal suplente

    Mara Fernanda Escalante

    vocal estudiantil titular

    Jorge Gaiazzi

    vocal estudiantil suplente

    RGANO DE FISCALIZACIN

    Myriam Kitroser

    Cecilia Argello

    titulares

    Lucio Carnicer

    Carmen Aguilar

    suplentes

    La AAM es una asociacin civil sin fines de lucro, fundada el 5 /1 0/1 985 y constituida legalmente el 1 9/1 2/1 986. Obtuvo su

    personera jurdica en abril de 1 988 por Resolucin 268/88 de la Inspeccin General de Justicia, nmero de identificacin

    360.1 09.

    Direccin postal:

    Mxico 564, (At. Omar Garca Brunelli) CP 1 097, Ciudad Autnoma de Buenos Aires

  • 4 EDITORIAL

    7 NUEVA FACULTAD DE ARTES EN LA UNC

    1 0 LA CANCIN DE RAZ FOLCLRICA EN LA OBRA

    MUSICAL DE CARLOS GUASTAVINO

    1 9 RESEAS

    29 CONVOCATORIAS, JORNADAS, ETC.

    NDICE

  • 4D

    os acontecimientos importantes para la comunidad musicolgica argentina se aproximan

    este ao. Asistiremos en abril (del 1 8 al 22) al X Congreso de la IASPM Rama

    Latinoamericana (Internacional Association for the Study of Popular Music. Rama

    Latinoamericana), que tendr lugar en Crdoba, y a la XX Conferencia de la Asociacin

    Argentina de Musicologa en Buenos Aires del 1 6 al 1 9 de agosto.

    E

    n atencin al nmero de trabajos presentados y aprobados para su lectura y de las

    comunicaciones recibidas, el congreso de la IASPM amenaza con una presencia masiva, que

    puede rondar fcilmente las doscientas personas, slo de fuera de Argentina, o ms. Todo un

    desafo para la cordialidad cordobesa, que deber multiplicarse para atender tanta gente.

    Como en ocasiones anteriores, la modalidad de desenvolvimiento no podr ser otra que la del

    funcionamiento de mesas paralelas. Se espera la concurrencia de personalidades destacadas en

    el campo de los estudios de la msica popular particularmente latinoamericana, como Ana

    Mara Ochoa, Martha Tupinamb de Ulha, Nicholas Cook y Julio Mendvil. Entre los invitados

    del pas, figura a cargo de la conferencia inaugural Sergio Pujol. La imposibilidad de asistir a

    todas las ponencias y a todas las sesiones exigir de los asistentes una forma selectiva de

    participacin. Ya sabemos que ante congresos multitudinarios, no queda ms remedio que

    concentrarse en aquellas mesas donde se desarrollan las discusiones ms afines a los propios

    intereses de cada investigador. Una vez ms, ser importante lo que ocurra no slo en las salas

    de sesiones, sino en los contactos que se establezcan personalmente y porqu no? en las

    EDITORIAL

    conversaciones de pasillo, a veces tan sabrosas.

    D

    esde su creacin en 1 981 , la IASPM se ha definido por su vocacin de abordar el campo de

    estudio desde una perspectiva interdisciplinaria. Por ello, nos parece que, entre los

    interrogantes que esta convocatoria se formula, uno de los ms significativos es el que dice as: Ya

    que el principal (nico?) objetivo del estudio interdisciplinario de la msica es el esclarecimiento de la

    mediacin entre lo sonoro y lo socio/cultural, es la interdisciplina el camino nico/privilegiado para

    investigarlo?. Y, a continuacin, propone la demanda, que pregunta por los logros alcanzados en ese

    terreno de lo interdisciplinario por parte de sus adeptos. Seguramente este enfoque no es ya del

    todo nuevo ni exclusivo de la musicologa de la msica popular. Hace un rato que est planteado en

    el campo de las ciencias sociales; es la aspiracin que, quizs, con ms insistencia ha venido

    reiterndose en los estudios que corresponden a ese mbito del conocimiento. Tambin se hace

    necesario recordar que los resultados alcanzados bajo esa perspectiva no han sido todo lo fructferos

    que se esperaba hasta ahora. Por ello, se aguarda con inters lo que los investigadores de varios

    pases de Latinoamrica vendrn a contarnos de sus esfuerzos en las respectivas reas de su

    eleccin.

    L

    a Comisin Directiva de la AAM, con sede en Crdoba, no podr sustraerse a la demanda de

    colaborar con el Congreso de la IASPM en todas las formas. Aunque nuestra entidad no aparece

    auspiciando el evento, ni est convocada para participar oficialmente de l, un nmero de miembros

    del cuerpo directivo de la AAM son socios de la IASPM, presentarn trabajos en el encuentro,

    moderarn mesas de expositores y se harn cargo, en los hechos, de las cuestiones organizativas de

    un acontecimiento de vastas dimensiones dentro de la extensin disciplinar.

    C

    on el Congreso de agosto, la AAM renovar la tradicin de realizar ese evento junto con el

    Instituto Nacional de Musicologa Carlos Vega, para quienes constituir las XVI Jornadas

    Argentinas de Musicologa . Este ao estar dominado el encuentro por la cuestin de la

    Musicologa latinoamericana y los paradigmas disciplinares. Sigue rondando, ante los constantes

    remezones que los estudios musicolgicos acusan en el contacto con disciplinas afines o vecinas, la

    necesidad de repensar los lmites y alcances de los estudios que pretenden ser cientficos en el

    campo de la msica. Para ayudar a reflexionar sobre estas cuestiones, la XX Conferencia contar con

    la contribucin de Rafael Jos de Menezes Bastos y Malena Kuss, quizs tambin de Julio Mendvil.

    Est previsto realizar un homenaje a Menezes Bastos y a Kuss por su amplia trayectoria y porque se

    acercan a la edad de retiro (Menezes) o acaban de alcanzar la situacin de jubilado (Kuss). Para esta

  • 5ocasin, se espera una asistencia menos masiva y tambin un poco menos internacional que la de la

    IASPM. Adems de los trabajos relacionados con la temtica central, otros asuntos de libre eleccin

    podrn ocupar el inters de participantes y oyentes. En lo que a la temtica central respecta, se

    esperan tanto trabajos de conceptualizacin terica como estudios de casos. Habr, como es

    habitual, una Comisin de Lectura. En cuanto a la Comisin organizadora, ella est constituida por

    Leonardo Waisman, Hctor Goyena y Lisa Di Cione.

    U

    na cuestin que ha dado pie a la reflexin ha sido la de la presencia estudiantil en las sesiones de

    los congresos y simposios. Normalmente destinados stos a los especialistas, pocas veces se ha

    considerado la posibilidad de seducir a los jvenes estudiantes para que asistan a los debates y se

    interesen por los aportes originales al conocimiento. Sin embargo, la experiencia ha mostrado que,

    en lugares donde las ocasiones de confrontar ideas y escuchar planteos inditos escasean, la

    curiosidad se despierta espontneamente y la juventud acude movida por su natural instinto de

    aprender. Claro que para ello han debido darse ciertas condiciones propicias para esa concurrencia,

    como suspensin de otras clases, proximidad del lugar donde se desarrolla el congreso, participacin

    de sus docentes en l, a fin de que la espontnea estimulacin se viera entonces favorecida e

    incentivada.

    O

    tra forma de ir propiciando la incorporacin de fuerzas juveniles a las discusiones acadmicas ha

    sido la de generar un espacio para que, dentro del congreso, noveles investigadores puedan

    presentar los temas que han provocado su afn de explorarlos y les han permitido sacar las primeras

    conclusiones a las que han sido capaces de arribar en sus abordajes. Como es natural, a ese mbito

    son convocados, por excelencia, sus pares, es decir, estudiantes y recientes egresados, que estn

    probando sus primeras armas en el terreno de la investigacin. Cada vez, se ha notado ms la

    presentacin de ponencias que son el resultado de trabajos en equipo, por lo cual dichos escritos

    aparecen rubricados por dos, tres o ms investigadores, que han discutido en conjunto. Es el deseo

    de la Comisin Directiva de la AAM que ese tipo de participaciones se incremente y, de hecho, esa

    circunstancia se ha ido verificando desde la primera vez que se implement la modalidad.

    Ser necesario traer a la memoria de los asociados de la AAM y de los estudiosos interesados en

    participar de la vigsima Conferencia de agosto que la fecha lmite para la presentacin de los

    resmenes de sus trabajos es el prximo 2 de mayo? Recordamos que este deadline result de la

    extensin, que se resolvi acordar en vista de los pedidos llegados a la Comisin para que se

    contemplara un plazo mayor del originariamente fijado.

    T

    ambin el 2 de mayo es el da indicado para completar el envo de los artculos destinados a

    constituir el nmero 1 2 de la Revista Argentina de Musicologa. Ya mencionamos en el Boletn

    anterior que la modalidad de la publicacin se modificar en esta oportunidad, ya que la misma

    estar integrada por trabajos que responden a una temtica preestablecida, que se dedicar a

    controlar su editor invitado, Enrique Cmara de Landa. Habr, por supuesto, tambin contribuciones

    libres, que escapan a ese condicionamiento. Entre ellos, podemos anticipar la publicacin de la

    traduccin del ingls de la conferencia que Nicholas Cook tiene destinada a la X Conferencia de la

    IASPM y a cuyos efectos el autor ya ha dado su autorizacin.

    C

    on esta resea, aspiramos a dar cuenta de las cuestiones de la disciplina que la Comisin

    Directiva de la AAM se trae entre manos. Ellas, nos parece, constituyen una seal clara del vigor

    de los emprendimientos, que por este ao ocupan la atencin y las energas de quienes comandan

    circunstancialmente los destinos de la institucin. Aspiramos tambin a seguir incorporando sangre

    nueva, de la que tanta necesidad tiene la Asociacin para seguir creciendo y abarcar proyectos an

    ms ambiciosos de los que se han sostenido hasta ahora.

    Hctor E. Rubio

  • 6Estimados socios:

    La Comisin Directiva de la AAM desea recoger

    la opinin de los socios respecto al Boletn que se ha

    venido distribuyendo de manera semestral.

    Consideramos que esta publicacin ha dejado

    de interesar a los socios como sola hacerlo en otros

    tiempos; las razones pueden ser diversas, pero

    creemos que fundamentalmente se debe al hecho de

    que gran parte de la informacin que brinda

    (congresos, becas, novedades de socios, etc.) nos llega

    por la lista de discusin de la AAM.

    La falta de inters se ha puesto de manifiesto

    en el ltimo nmero, cuya realizacin demand un

    gran esfuerzo, no slo por el contenido sino por la

    diagramacin (a cargo de Federico Sammartino), y sin

    embargo no recibi ningn comentario, a pesar de que

    solicitamos que nos hicieran conocer su opinin

    respecto de los cambios introducidos.

    Es por este motivo que los invitamos a

    responder el cuestionario disponible en

    http://goo.gl/lMEPq a los fines de recoger sus

    opiniones sobre el Boletn de la AAM.

    Sin ms, agradecemos su colaboracin y los

    saludamos cordialmente.

    Comisin Directiva

    AAM

  • 7NUEVA FACULTAD DE

    ARTES EN LA

    UNIVERSIDAD NACIONAL

    DE CRDOBA

    QUINCE AOS DESPUS DEL PRIMER PROYECTO, SE VOT EN FORMA UNNIME LA

    CREACIN DE LA DECIMOTERCERA FACULTAD DE LA UNC.

    ... 3, 2, 1 , 0!! ! El muro cay y las cajas de zapatos forradas con carteles de Facultad de Artes

    1 996201 1 volaron, giraron y se desparramaron por todo el piso lustroso, dejando pasar una

    avalancha de estudiantes, egresados y profesores que

    salieron corriendo y pateando, con infinita alegra, la falsa

    pared que divida en dos el inmenso hall de ingreso del

    Pabelln Argentina. Esta cada simbolizaba el fin de un

    largo y sinuoso proceso de trabajo institucional, porque el

    1 2 de noviembre de 201 1 la Asamblea Universitaria, rgano

    mximo de gobierno de la Universidad Nacional de Crdoba

    creaba la Facultad de Artes con 21 0 votos, 1 5 aos despus

    de la presentacin del primer expediente pro facultad en

    1 996.

    N

    o slo se trat del producto de un trabajo sistemtico

    poltico, administrativo y de gestin, de toda la

    comunidad de la en ese entonces Escuela de Artes, sino

    tambin el reconocimiento del arte como campo de

    conocimiento: Quiero destacar el campo del arte como

    espacio de encuentro de disciplinas que inauguran otras

    formas de comunicar, de poner en circulacin la produccin

    de saberes cientfica y socialmente relevantes para nuestro

    tiempo. Destacar tambin, y por lo mismo, a las artes como

    poderosos instrumentos de transformacin social y cultural,

    en tanto permiten darvisibilidadyhaceremerger -a travs de

    Myriam Kitroser

    La comunidad de la flamante Facultad de Artes

    derrumbando el muro

  • 8los ms diversos materiales y soportes-

    problemticas y conflictos de sujetos,

    grupos, instituciones, comunidades que

    permanecen en muchas ocasiones

    silenciadas u opacadas. Palabras

    pronunciadas en la asamblea por la en ese

    momento Decana de la Facultad de

    Filosofa y Humanidades, Dra. Gloria

    Edelstein

    BREVE CRONOLOGA INSTITUCIONAL

    L

    a actual Facultad, se origin, hace

    sesenta aos en la Escuela Superior

    de Bellas Artes fundada en 1 948 por el Arq. Lo Celso, dependiendo directamente del

    Consejo Superior universitario. En 1 950, las actividades acadmicas se centraban en las

    disciplinas artsticas de plstica y msica.

    E

    n 1 962, el Arq. Ral Bulgheroni, a cargo de la direccin, propuso una reestructuracin

    que cambi la denominacin original por la de Escuela de Artes y cre las condiciones

    para la apertura de los Departamentos de Teatro y Cine. sta se concreta en los aos 65 y 66

    respectivamente.

    E

    n 1 967, todava dependiendo directamente del Consejo Superior, era la nica Escuela de

    Artes de nivel universitario en el pas, que reuna en una estructura departamental las

    cuatro disciplinas: Msica, Plstica, Teatro y Cine.

    E

    n 1 975, con la intervencin de la Universidad Nacional de Crdoba, la Escuela pas a

    formar parte de la Facultad de Filosofa y Humanidades, perdiendo las partidas

    presupuestarias propias. En esta poca, se cerraron y desmantelaron los departamentos de

    Cine y Teatro, y desaparecieron todos los organismos de extensin.

    C

    on el advenimiento de la democracia, se volvieron a abrir los departamentos cerrados,

    comenzando un largo proceso de reestructuracin, el cual vino a culminar con la creacin

    de la nueva Facultad.

    H

    oy, a la Facultad de Artes asisten 4500 alumnos, quienes cursan algunas de las 7

    licenciaturas con distintas orientaciones, una tecnicatura o cualquiera de los cuatro

    profesorados que se ofrecen en los distintos departamentos.

    L

    as carreras de posgrado incluyen el Programa on line en Artes Mediales que se dicta

    mediante un convenio con la Universidad de Caldas, Colombia, y la Universidad de Chile, y

    el Doctorado en Artes, que ha contado con destacadas personalidades entre sus profesores,

    como Patrice Pavis, Marco de Marinis, Arlindo Marchado, Markus Solomos, Anna Maria

    Guasch, Alejandro Madrid entre los extranjeros, Jos Emilio Buruca, Ricardo Fantoni, Lucas

    Fragasso, Federico Monjeau, Carmelo Saitta, entre los nacionales.

    F

    uncionan adems ocho centros de investigacin, produccin y extensin. CEPIA (Centro

    de Produccin e Investigacin en Artes), CDA (Centro de Documentacin Audiovisual) ,

    CEAN (Centro de Experimentacin y Animacin), Tv5 canal escuela, CPA (Centro de

    Produccin Audiovisual) , LEIM (Laboratorio de Electroacstica e Informtica Musical) , Cine

    Club universitario y el Mtodo Suzuki .

  • 9VANGUARDIAS ARTSTICAS DE LOS 60 Y 70 EN LA ESCUELA DE ARTES DE LA UNC

    D

    urante los aos `60 y comienzos de los ` 70 se desarrollaron en la Escuela de Artes

    proyectos que fueron pioneros en sus disciplinas respectivas. En teatro, la creacin

    colectiva como principal recurso expresivo, se puso en prctica y se profundiz en el seno

    del Teatro Estable de la Universidad y el Libre Teatro Libre (LTL), ambos bajo la direccin de

    Mara Escudero, principal exponente dentro de esta corriente teatral.

    L

    a creacin del Departamento de Cine estuvo marcada por la experiencia santafecina, ya

    que en l ense Fernando Birri, inmigrante italiano imbuido de la esttica del

    neorrealismo italiano y del documentalismo ingls, quien fund el Instituto de Cine

    Documental de Santa Fe. Crdoba incorpor a su vez el gnero experimental del canadiense

    Norman McLaren, a travs del profesor Vctor Iturralde Ra.

    E

    n la msica de vanguardia, fue sede del Centro de Msica Experimental, en el que

    trabajaron compositores que alcanzaron luego prestigio internacional como Oscar

    Bazn, y Horacio Vaggione, entre otros. Entre varios otros, ellos organizaron y participaron

    en las primeras Jornadas Internacionales de Msica Experimental realizadas en el auditorio

    de Radio Nacional, en el marco de la tercera Bienal Americana de Arte.

    P

    or las aulas de la Escuela de Msica pasaron maestros como Sigfrido Prager, Hilda

    Dianda, Ornella Balestreri de Devoto (ejecutante por primera vez en Argentina de la

    obra integral de Arnold Schoenberg para piano), Emilio Napolitano, primer violn de la

    Sinfnica Nacional, el director de orquesta Simn Blech , Cesar Franchisena, Pedro Echarte,

    Graciela Castillo, y el historigrafo y director Kurt Pahlen.

    F

    uncion el Coro Universitario bajo la direccin de Cesar Ferreyra, un Cuarteto de

    Cuerdas, y una Orquesta de cmara, que terminaron de desaparecer durante la dictadura

    militar.

    E

    n el campo de las artes plsticas, podemos mencionar como profesores a artistas de la

    talla de Ernesto Farina, Jos De Monte, Pedro Pont Vergs, Eduardo Moisset de Espans,

    Tito Miravet, Ral Pekert, Cesar Miranda, Antonio Monteiro, Carlos Peiteado.

    E

    n la actualidad, la Facultad de Artes enfrenta diversos desafos en el terreno de la vida

    acadmica y la formacin artstica, desarrollando tanto la labor creativa como distintas

    vas en la investigacin y la experimentacin.

    Luego de la Asamblea

    Universitaria, el festejo...

  • LA CANCIN DE RAZ

    FOLCLRICA EN LA

    OBRA MUSICAL DE

    CARLOS GUASTAVINO

    A

    gradezco a los organizadores de este ciclo de conferencias Anlisis e Historia en la Msica

    Popular, de la Universidad Nacional de Crdoba, la cordial invitacin a participar del mismo. El

    campo de los estudios de msica popular es un rea que me merece el mayor de los respetos y en la

    cual he incursionado tangencialmente. Me apresuro a aclarar esto, ante eventuales conexiones o

    derivaciones que pudieran surgir a partir de mi exposicin, ya que tenemos planeada la posibilidad de

    realizar comentarios y preguntas al final, que con gusto tratar de dilucidar.

    C

    oincide cercanamente la fecha de hoy con la recordacin, muy presente en esta universidad, de

    otro aniversario del Golpe Militar del 24 de marzo de 1 976. Decid por tanto, adherir a ese

    recuerdo mediante la dedicatoria de este trabajo a la memoria de mi hermano Carlos.

    M

    i conferencia est dedicada a la cancin de raz folclrica en la obra musical de Carlos

    Guastavino, compositor argentino, nacido en Santa Fe, de quien se cumple en 201 2 el

    Centenario de su nacimiento.

    Cmo surgi mi inters por este sector del repertorio guastaviniano, el de la cancin de raz

    folclrica? Bueno, al comprobar hacia fines de los aos 90, que en cierta bibliografa especializada

    se mencionaba de manera algo condescendiente que Guastavino haba hecho unas incursiones

    involuntarias en el campo de la proyeccin folclrica (Fuenzalida, 1 998: 35). Recuerdo que al leer

    este concepto, pens Puede alguien incursionar involuntariamente en un campo artstico? O sea,

    puede un compositor llegar a producir alrededor de un centenar de canciones de raz folclrica, sin

    Silvina Luz Mansilla

    Alconmemorarse el5de abrilde 2012 elCentenario delnacimiento deCarlosGuastavino,

    se publica esta conferencia presentada en elAuditorio CEPIA de laUniversidadNacional

    deCrdoba el26demarzo de 2012.

    El evento cont con elpatrocinio de la Secretara deCultura de la Presidencia de laNacin.

  • 1 1

    quererlo? Sin tener verdadera voluntad de realizar un aporte a ese cancionero? Confieso que

    entonces no tena nocin exacta de cuntas ni cules eran las canciones de raz folclrica que nutren

    el catlogo guastaviniano, pero s conoca ya, que aquella cancin que haba escuchado y cantado en

    las guitarreadas setentistas de mi familia puntana "La tempranera" es de Guastavino.

    H

    aba en aquella expresin (lo deduje aos despus), una postura que no poda evitar emitir un

    juicio de valor sobre la produccin de raz folclrica que hizo Guastavino. Era ese,

    evidentemente, un repertorio molesto, que incomodaba puesta al lado de su msica instrumental

    de corte nacionalista, de gran circulacin en conciertos. En l, pueden situarse como en un pedestal

    el Bailecito para piano, las infaltables tres Sonatas para guitarra, la Presencia N 6 Jeromita Linares,

    para guitarra y cuerdas, la Sonata para clarinete y la raveliana Sonatina en Sol menor, para piano,

    entre varias otras obras. A Guastavino haba que perdonarlo entonces, por aquellas incursiones

    involuntarias, por aquellas cancioncitas que un poco, contrariaban, sus aportes al repertorio

    clsico argentino.

    A

    os despus, en 2003, buscando alguna clase de patrocinio para mis trabajos de investigacin y

    ya admitida al programa de doctorado de la Universidad de Buenos Aires, tuve la idea de

    postularme a una beca nacional de las que ofrece el Fondo Nacional de las Artes. Intuyendo que esas

    becas se destinan ms a instrumentistas, cantantes y creadores, que a investigadores, decid

    entonces realizar mi propuesta ante la comisin de Expresiones folclricas del FNA, antes que a la

    de Msica. Diagram entonces un proyecto que me permitiera relevar informacin que no constaba

    en las para m habituales fuentes de informacin y que atendiera, especficamente, al recorte del

    repertorio folclrico.

    T

    ermino este breve prolegmeno, indicando ahora un agradecimiento, que no puedo soslayar: fue

    de vital importancia para mis pesquisas de entonces, la colaboracin siempre cordial y

    desinteresada, de Emilio Portorrico. Sin duda, una persona conocedora del tema y cuyo archivo me

    fue puesto a total disposicin.

    Cmo y cundo se produjo el ingreso de Guastavino al mbito amplio, masivo, del folclore?

    Intentando una respuesta rpida, puedo decir que se produjo tmidamente, en 1 961 , cuando el

    boom folclrico estaba en pleno desarrollo. Su entrada consisti en una primera participacin en

    radio y televisin, en un ciclo organizado por Yacimientos Petrolferos Fiscales, que conduca Julio

    Marbiz. El ciclo se emita los lunes a las 21 horas y sala al aire por LS82 TV Canal 7, y por LR3 Radio

    Belgrano, ms su cadena y una red especial de emisoras del interior del pas. Quiz podra decirse

    que esa ocasin haya sido una de las primeras, si no la primera, en que Guastavino apareci en vivo,

    ante el pblico masivo de la msica popular argentina de entonces.

    A

    comienzos de 1 963, el compositor recibi una alentadora invitacin del editor Rmulo Lagos. La

    sala de reuniones de su imprenta se convertira, poco a poco, en el espacio fsico donde se

    concibieron y proyectaron muchas de las obras pertenecientes al llamado Nuevo Cancionero. La

    iniciativa del editor por generar voluntades en torno al repertorio de raz folclrica, ms la cualidad

    aglutinante que tena su personalidad, condujo a Guastavino al conocimiento de numerosos poetas.

    Ao tras ao, durante la dcada de 1 960 y la primera mitad de la de 1 970, musicalizara una y otra

    poesa, generando as su nutrido repertorio en el mbito de la cancin popular.

    D

    ir dos (o quiz tres, o cuatro!) palabras sobre el boom del folclore, fenmeno de auge de ese

    repertorio musical, que se produjo en Argentina a partir de 1 960. Quienes lo han estudiado,

    Ariel Gravano, Pablo Vila, Emilio Portorrico, nos explican que se manifest por un mximo nivel de

    difusin de este repertorio en los medios masivos, que alcanz su punto culminante hacia 1 965 para

    luego consolidarse hacia fines de esa dcada y comienzos de la siguiente. El trmino boom, que es un

    anglicismo, sugiere que fue una suerte de estampido, algo que aparece en forma repentina, como

    una suerte de prosperidad que crece rpidamente. Gravano nos comenta que la palabra habra

    tenido su origen en los medios de comunicacin, ya que fue all, donde justamente fue prspero y

    repentino.

  • 1 2

    E

    l boom se caracteriz por la multiplicacin del repertorio de canciones de raz folclrica, la

    creacin de instituciones dedicadas a la enseanza y al cultivo de las danzas nativas y el apogeo

    del inters por el estudio de la guitarra como instrumento acompaante. El gusto por la guitarra

    afloraba sobre todo en la juventud y se perciba en todos los mbitos cotidianos, lo que origin un

    aumento en la produccin y comercializacin de guitarras, industrializndose la artesana del

    instrumento. El boom implic, por su alcance masivo y por su insercin en los medios tecnolgicos,

    un fenmeno popular urbano. La aparicin de programas y concursos televisivos y radiales dedicados

    a su difusin, la edicin de publicaciones alusivas, la inauguracin de numerosas peas folclricas y la

    realizacin de festivales que convocaban a pblico e intrpretes, conformaron toda una red que

    signific un indiscutible esplendor de la msica de raz folclrica. No querra abundar en demasiados

    datos, pero Gravano habla de un promedio de diecisis espacios radiales diarios dedicados al folclore,

    en 1 962, y de unos diez programas semanales de televisin. Entre las publicaciones especializadas,

    aludo, obviamente, a los llamados cancioneros, que se podan adquirir en todos los kioscos, y a la

    revista Folklore, la ms difundida, de aparicin quincenal.

    H

    ar tambin una mencin brevsima acerca del Nuevo Cancionero. Iniciado en Mendoza en

    febrero de 1 963, se present en sociedad a travs de la publicacin de un manifiesto en el

    peridico Los Andes. Fueron sus fundadores los msicos Manuel Oscar Matus, Tito Francia y Juan

    Carlos Sedero, los poetas Armando Tejada Gmez y Pedro Horacio Tusoli, la cantante tucumana

    Mercedes Sosa y el bailarn Vctor Nieto. El Nuevo Cancionero tuvo un claro afn de innovacin en la

    poesa y en la msica, buscando apartarse de todo aquello que fuera mercantil. Su ideologa

    coincida a grandes trazos con el pensamiento de las izquierdas y el progresismo, y guardaba

    similitud con la de otros movimientos sudamericanos que paralelamente se dieron en Chile, Uruguay

    y otros pases. Haba entonces un sentido latinoamericanista, una preferencia por las temticas

    testimoniales, que fueron efectivos sobre todo durante la segunda mitad de la dcada de 1 960. La

    audiencia ms dinmica parece haber sido la clase media universitaria, y con la aparicin descollante

    de Mercedes Sosa, las matrices de pensamiento poltico que se compenetraron cada vez ms al

    significado profundo del folclore, estuvieron dadas por el revisionismo y el antiimperialismo.

    P

    ero quiero retomar la figura de Guastavino en este mbito y cmo se inserta su obra. Como dije,

    su participacin se inicia tmidamente, como algo que, al menos en los comienzos, no es fruto de

    su propia iniciativa, sino de invitaciones puntuales. La mediacin de la editorial Lagos no es un tema

    menor en ese proceso. Es don Rmulo Lagos quien, mediante la intermediacin de Juan Jos Barbar

    en 1 963, comienza a instar a Guastavino a que produzca nuevas obras vocales para el mbito popular.

    Guastavino muy probablemente ya estaba observando y viviendo ese fulgor cada vez mayor del

    gnero vocal que estaba teniendo lugar.

    L

    a actividad de la editorial Lagos haba comenzado a principios de los aos 50. Pero fue con las

    migraciones de artistas populares desde las provincias a la capital argentina que sucedi hacia

    fines de aquella dcada, cuando Lagos, decidi brindarles el apoyo de su empresa para difundir su

    produccin musical. As, el mundo del arte ligado a la cancin de raz folclrica encontr en la oficina

    de Lagos uno de los espacios fsicos donde se conceban y proyectaban las ideas a partir de un

    trabajo que era conjunto. La importancia del editor como generador de voluntades cooperativas en

    torno al repertorio estudiado fue confirmada por varias personas a quienes pudimos entrevistar:

    entre otros, Ramn Mirez, Carmen Guzmn, Ivn Cosentino y Alicia Lagos, la hija de don Rmulo. Al

    parecer su personalidad y gran iniciativa fue la que hizo de a poco, hacer coincidir los esfuerzos de los

    artistas interesados por el repertorio folclrico.

    E

    duardo Fal, Ariel Ramrez, Hamlet Lima Quintana, Len Benars, Alma Garca, Armando Tejada

    Gmez, Horacio Guarany, Ariel Petrocelli , Atahualpa Yupanqui, Mercedes Sosa, estuvieron entre

    los convocados por esa editorial. Entre los artistas plsticos, Carlos Alonso, Primaldo Mnaco,

    Ricardo Supisiche, Juan Carlos Castagnino y, Rodolfo Campodnico tuvieron, sin duda, una fluida

    relacin con Lagos y participaron de una u otra manera en la extendida difusin que alcanz la

    cancin argentina, el Nuevo Cancionero y una coleccin que reuna poesa, pintura y msica, que se

    denomin Cancin Estampa.

  • 1 3

    L

    a personalidad del msico, caracterizada por una marcada sobriedad, vida austera y falta de

    entrenamiento para la vida social y las reuniones hacen pensar que su manera de participar en el

    mundo de Lagos haya sido lateral. Accedi a componer canciones, eso s. Y trat con artistas como

    Eduardo Fal y Atahualpa Yupanqui, con quienes sola mantener largos encuentros para hablar de

    msica y poesa.

    S

    i el lugar donde se pergeaban posibles encuentros literario-musicales era la editorial Lagos, el

    sitio donde se ejecutaba en vivo gran parte de ese repertorio en la ciudad de Buenos Aires era la

    pea El hormiguero. Segn Hamlet Lima Quintana, uno de los poetas cuyos textos musicaliz

    Guastavino, despus de la declinacin de Cerrito 34, el lugar que alberg a los cantores, msicos y

    poetas llegados de diferentes provincias fue El hormiguero. Cerrito 34, que quedaba precisamente

    en esa direccin, haba sido el hotel Du Midi, un punto de reunin que fue una suerte de santuario

    del Nuevo Cancionero. El Hormiguero, hasta donde he podido entender, era un subsuelo en la calle

    Marcelo T. de Alvear, entre Suipacha y Carlos Pellegrini. Tpico reducto donde se atrincheraba la

    msica folclrica, se acceda bajando por una estrecha escalera circular con paredes y techo color

    tierra, lo cual justificaba esa peculiar denominacin. En su interior, la calidez de las paredes se deba a

    unos murales de Rodolfo Campodnico, entonces joven artista plstico, enrolado tambin en la idea

    de un arte popular.

    M

    oncho Mirez me relat que aquel lugar fue un hervidero de ideas y de cosas, fundamental.

    La mecnica de funcionamiento de esta pea ha sido bien descripta por Lima Quintana. l dice:

    all haba que largar la voz (porque no contaban con micrfonos) y la guitarra pasaba de mano en

    mano. Todos los encuentros incluan siempre msica de guitarra y muchas veces poesa dicha

    como sembrando al voleo (Lima Quintana, 1 994: 1 5) Ivn Cosentino, gran promotor de la msica

    argentina, me lo confirm adems, al decir que la pea naci como un reducto de la danza. Despus

    empez a dejar de ser un lugar para bailar, para pasar a ser un lugar para or. Entonces, me dijo

    Cosentino, la gente iba all, porque quera escuchar las canciones que no oa en otro lado.

    V

    eamos el ejemplo de "Hermano", de Lima Quintana y Guastavino, en la interpretacin de

    Mercedes Sosa y Moncho Mirez. Es una cancin tpica de esa pea, en los meses posteriores al

    advenimiento de la dictadura del general Juan Carlos Ongana, esto es, hacia fines de 1 966.

    C

    un poltica poda ser esta cancin en 1 966? Si pensamos que se cantaba tal cual como se grab,

    por esa cantante con tan solo una guitarra que acompaaba, que el marco era la pea El

    Hormiguero, que ya haba transcurrido La Noche de los Bastones Largos, bueno, no es descabellado

    adjudicarle un tinte contestatario, a ese cantor, que en primera persona del singular, se atribuye,

    ante todo el orbe, la representatividad del pueblo.

    R

    ecordemos que desde 1 966, hablamos de una etapa, al decir de Luis Alberto Romero, de shock

    autoritario (Romero, 2001 : 1 71 ) . Se disolvieron los partidos polticos y se les confiscaron y

    vendieron todos sus bienes, como para

    confirmar que la clausura de la vida poltica era

    irreversible. Recordemos tambin que se

    combati especialmente al comunismo, sobre

    todo en las universidades pblicas y que

    Hamlet Lima Quintana, el autor de la poesa de

    "Hermano", estaba ya afiliado al PC. Romero

    explica que las redes intelectuales y

    acadmicas (yo agrego, las redes artsticas

    tambin) debieron sobrevivir trabajosamente

    en espacios semi - ocultos, debido a la amplia

    extensin que alcanz la censura en aquellos

    meses.

    M

    sica para ser escuchada all porque no

    era escuchada en otro lado, como me

    Mercedes Sosa y Carlos Guastavino, en la

    revista Folklore. Nmero Extraordinario

    dedicado a la cantante tucumana. C. 1 966.

  • 1 4

    dijo Ivn Cosentino Efectivamente, aunque Hermano se incluye y le da el nombre a un disco LP de

    Mercedes Sosa, que es el segundo que realiza para Philips, puede decirse que no pasara a mayores. A

    mi entender, constituye una evidencia bastante significativa de la simpata del compositor

    santafesino con los postulados centrales del manifiesto del Nuevo Cancionero y por ende, con su

    lnea de pensamiento. Pero no alcanzara "Hermano", al gran pblico del boom folclrico. Era ella,

    una cancin prototpica de lo que la revista Confirmado denomin un Folklore difcil. Haba all un

    inters de Mercedes Sosa por apartarse del pblico masivo que tanto la haba celebrado en su

    primera aparicin en Cosqun, en 1 965. Estaba ella, como sus amigos que integraban el Nuevo

    Cancionero, rechazando todo regionalismo cerrado, oponindose a toda produccin burda y

    subalterna que tuviera finalidad mercantil, como deca el manifiesto. Guastavino era entonces, una

    figura adecuada a ese objetivo. Su procedencia de la msica de conciertos y el respeto ganado en el

    mbito de la cancin de raz folclrica combinaba bien con el inters de la cantante de desarrollar un

    estilo autorizado, vlido, que sirviera para decir cosas importantes, alejadas del puro documento

    y del estilo panfletario.

    P

    ero volvamos un poco hacia atrs en el tiempo, ms hacia comienzos de los aos 60, y veamos

    cmo se fue ligando el nombre de Guastavino al mbito de la msica de raz folclrica. Fui

    encontrando algunos datos de inters a la par de estudiar su dedicacin a la composicin. Por

    ejemplo, a travs de la revista Folklore, me anotici que desarroll una labor docente en el mbito

    privado, en un instituto que se llam Instituto Experimental Musical Argentino, donde dictaba clases

    de armona. Tambin, que actu como Jurado en 1 963, en un concurso de zambas en el marco del

    Primer Festival Folklrico del Noroeste y que presidi ese mismo ao el Jurado del Festival Odol de

    la Cancin, concurso que tuvo una convocatoria de unas tres mil quinientas composiciones. Las

    rondas finales se transmitieron por los dos canales de TV existentes y por una red nacional de

    emisoras radiales, lo que expuso a Guastavino ante un pblico masivo.

    L

    a revista Folklore parece haber cumplido un rol importante en la construccin de la imagen de

    Guastavino como compositor de canciones populares. Hay dos extensas entrevistas que

    aparecieron en 1 963, en las que destaca el respeto que el compositor ya acusaba en estos ambientes.

    La primera es una extensa nota de Len Benars, quien realiza una entusiasta resea de la obra del

    compositor y hace pblica su determinacin de hacer msica para el pueblo. El tono del escrito

    pone de relieve la legitimacin que se intentaba dar al compositor y, a su vez, muestra la

    diferenciacin categrica de los gneros culto y popular que prevaleca entonces. La otra entrevista

    fue realizada por Ivn Cosentino, en su columna "Una pregunta para dos respuestas", una propuesta

    periodstica doble y simultnea, ilustrada con fotografas de ambos invitados. En este caso el dilogo

    que dara ms bien la impresin de haber sido una entrevista que los artistas contestaron por

    escrito alcanz a Guastavino y a Juan Carlos Castagnino, el pintor argentino, remitindose las

    opiniones de Cosentino a unos breves prrafos, para dar lugar a las voces de sus entrevistados. Las

    preguntas tocaron temas muy diversos: desde la actualidad nacional a la crtica, desde la situacin

    del artista en la sociedad a las polticas de edicin y difusin del arte. Cosentino coincidi con

    Benars en el intento de ensalzar el rescate de una cultura propia, promoviendo en el lector un

    fuerte sentido de pertenencia, casi imperativo. El mundo del arte de Lagos como queda visto, se

    extenda como una red hacia la revista Folklore. Len Benars integraba ambos circuitos, el primero

    como poeta, el segundo como periodista. Cosentino, ligado desde entonces hasta hoy a la grabacin

    y difusin de la msica argentina, comparta el rol de periodista en su columna de Folklore.

    Q

    uiz convenga aqu, que haga una suerte de parntesis terico-metodolgico y que explique las

    ideas fuertes que guan mi visin de todo este asunto, que las he venido dando por conocidas,

    pero no las he explicado a pesar de haberlas mencionado ya varias veces. Cuando hablo de toda esta

    red de personas que interactuaban, aludo, como vieron, a un mundo del arte. Es esta una nocin que

    acu Howard Becker (2008) para aludir a ciertos modelos de actividad colectiva en los que se

    conforma una verdadera red de colaboracin que conforma un tejido complejsimo de intereses de

    todo orden. Se engloban en ese tejido no solamente los artistas, sino tambin los consumidores,

    mecenas, editores y crticos. Todo trabajo artstico, dice Becker, involucra la actividad conjunta de un

    nmero de personas y todas las artes involucran la cooperacin de otros. Este es otro trmino clave:

  • 1 5

    la cooperacin. Becker da importancia a la red de gente que concurre en pos del resultado final de la

    obra, y cuyos trabajos son esenciales.

    L

    a tradicin dominante en la sociologa del arte tiende a enfocar al artista y a la obra como centro

    del anlisis, ms que a la actividad de cooperacin que les resulta inherente. En un intento por

    salirse de esa tradicin, Becker concibe, en cambio, que todo trabajo artstico, como toda actividad

    humana, implica una accin conjunta en la que se involucra un nmero de gente, a menudo grande.

    Todas las artes que conocemos necesitan de la contribucin de otros y cualquier expresin artstica

    descansa sobre una divisin extensiva del trabajo. Lo que Becker resalta en su planteo es la ubicacin

    central del artista en medio de una red de gente que est cooperando y cuyos trabajos son

    esenciales para el resultado. Hay una idea de consenso grupal, de acuerdo permanente del artista

    con quienes colaboran en esa red, que implica que l pueda compartir cada detalle de sus ideas con

    otras personas. Afirma tambin que los individuos que cooperan para producir una obra de arte

    usualmente no deciden las cuestiones en forma aislada. Hacen acuerdos permanentemente que

    luego se vuelven costumbre, respetan convenciones, esto es, maneras de hacer las cosas, y deciden

    qu materiales utilizar para la concrecin de las obras. Las convenciones se dan, por consiguiente, en

    sistemas interdependientes, de manera que un cambio requiere una variedad de otros cambios.

    B

    ien. Hablar ahora de "La Tempranera". Esta zamba, extensamente difundida dentro del

    repertorio de raz folclrica, fue creada en pleno contexto del boom folclrico, en 1 963, y

    constituye un tpico de inters para comprender los procesos de recepcin artstica vivenciados por

    algunos cultores de este repertorio. Muy similar a otra meloda de raz folclrica, "La tempranera" ha

    mantenido su vigencia hasta el presente.

    L

    a gnesis de "La tempranera" aparece bien explicada en un artculo de la revista Folklore, de

    1 965. Es curioso que, siendo una obra que en ese momento contaba con dos aos de existencia,

    aquel artculo de la revista Folklore firmado por Alma Garca se incluyera en una seccin titulada

    "Historiando cantos". Me pregunto si este no fue ms que un recurso para lograr que definitivamente

    la cancin hiciera historia. No obstante, en ese escrito, la autora transcribe y comenta una entrevista

    realizada al escritor Len Benars, que permite conocer varias circunstancias relacionadas con el

    contexto de produccin de la obra y con su indudable amplia difusin.

    E

    l poeta puntano Len Benars, con quien Guastavino cre una parte mayoritaria de su produccin

    vocal, ofrece en esa fuente varios datos de inters sobre la cancin. El primero es el de la

    existencia previa de la msica, caso excepcional en la produccin conjunta de Benars-Guastavino

    que, hasta donde se sabe, sola funcionar casi siempre desde la poesa primero para pasar a la msica

    despus. Guastavino musicalizaba el texto y luego corregan la rtmica en funcin de la apropiada

    comprensin del mismo. Tambin surgen de este artculo, junto a una visin casi panegrica de la

    trayectoria artstica del compositor, otros elementos como los datos exactos respecto de la ocasin

    en que ambos artistas se conocieron, el inters por parte del msico en que su arte se insertara en el

    gusto popular y la datacin del estreno. Benars explica que se encontr por primera vez con el

    msico a raz de un reportaje que deba realizarle para la misma revista Folklore, el 28 de marzo de

    1 963. Benars manifiesta que el msico le result un hombre de estupenda calidad humana y fina

    sensibilidad y que le confi en aquella conversacin que [] estaba dispuesto a volcarse a la msica

    popular, que sera feliz oyendo a alguien silbar en la calle una de sus composiciones. La primera poesa

    suya musicalizada por Guastavino fue la milonga "El sampedrino", a la que sigui al mes siguiente "La

    tempranera". Guastavino ya haba escrito la msica y Benars la recogi en su grabador. El

    compositor le propuso que utilizara alguna leyenda sobre un pjaro o una flor, pero el escritor

    encontr que la meloda le sugera un amor de adolescencia. As fue que escribi el poema y,

    concluida la colaboracin, decidieron ofrecerla para su estreno a Eduardo Fal.

    R

    esulta importante considerar que Guastavino no tena un conocimiento especfico de las msicas

    folclricas ni de los esquemas formales correspondientes, hasta unos meses antes de este

    momento. Su estilo nacionalista presente en obras previas, de concierto, configura el producto de

    una actitud emprica, en la que apenas diferenciaba algunos ritmos y mtricas y en la que prim

  • 1 6

    siempre la sola intencin de evocar el imaginario criollo musical. Hasta donde se sabe, su

    aprendizaje concreto de las convenciones musicales ms usuales y de las estructuras bsicas del

    folclore fue realizado en forma muy veloz por esta poca con Fal, como escuchbamos en la

    grabacin de la entrevista, teniendo como modelo la "Zamba de la Candelaria".

    S

    eala el socilogo Pablo Vila que el primer lustro de la dcada de 1 960 asiste ms que a un boom

    del folclore, a un boom de la zamba. Por eso, no es de extraar que, gracias a las indicaciones de

    Fal, Guastavino eligiera adentrarse en las caractersticas estilsticas que ese tipo de msica conlleva

    a travs de esa danza de galanteo tan en boga en ese momento, adecuando as, progresivamente, su

    expresin y su manera de componer a ste para l nuevo gnero.

    L

    o expuesto explica en parte un tema delicado ocurrido en relacin a esta cancin, que Alma

    Garca no pudo evitar desmentir en su artculo: un rumor de plagio, que creci por entonces

    alrededor de la obra. Sucede que el comienzo de la meloda de esta cancin guarda mucha similitud

    con otra, de Pedro Belisario Prez, titulada "En una zamba" y registrada en 1 962, y que este pianista

    y compositor trabajaba hacia 1 963 como arreglador en la editorial de Rmulo Lagos. El comienzo de

    ambas zambas es prcticamente el mismo, tanto en los giros meldicos como en la armona. El

    perodo de aprendizaje en el que se encontraba Guastavino, tratando de sumergirse en los

    parmetros y convenciones del repertorio del boom como se ha mostrado, habra quedado expuesto

    en forma bastante descarnada, justamente en la primera frase.

    L

    a poesa de "La tempranera" corresponde a una historia de amor juvenil, que quien canta

    recuerda con nostalgia y profunda ternura. La circunstancia en que el protagonista confiesa

    haberse enamorado definitivamente de la muchacha est narrada en el estribillo: su amor ha salido a

    la luz durante la ejecucin de la danza y la cercana fsica que exige la coreografa suavemente

    insinuante en el paso final, (la coronacin: el momento en que varn y mujer se encuentran cara a

    cara, cruzando sus pauelos) ha sido el instante en que el joven supo que ella corresponda a sus

    sentimientos.

    C

    on dedicatoria a Eduardo Fal, la partitura llev en la tapa ilustraciones de Benicio Nez

    primero y de Mario Mollari despus, dentro de lo que la lnea editorial haba dado en llamar la

    Cancin Estampa. Hacia agosto de 1 964, Lagos llevaba vendidas varias tiradas que sumaban unos seis

    mil ejemplares, lo que da idea de su condicin de indudable hit.

    D

    e manera casi inmediata, en los meses posteriores al estreno, "La tempranera" se arraig en el

    gusto popular, siendo decisiva la difusin didctica que la revista Folklore realiz entre los

    aficionados en su seccin titulada "Folklore ensea guitarra". La finalidad didctica de la misma

    colaboraba ampliamente con la difusin del nuevo repertorio y obraba como sistema de filtro y

    seleccin, logrando que determinadas obras efectivamente tuvieran mayor auge. La letra apareca

    completa, con todas las indicaciones para la ejecucin, siendo la modalidad de enseanza

    metodolgicamente accesible: se indicaban los acordes empleados, exactamente debajo de las

    Eras la tempranera,

    nia primera, amanecida flor

    suave rosa galana,

    la ms bonita tucumana.

    Frente de adolescente

    Gentil milagro de tu triguea piel

    negros ojos sinceros,

    paloma tibia de Monteros.

    Al bailar esta zamba fue

    que, rendido, te am...

    Eras mi tempranera,

    de mis arrestos prisionera.

    Ma, ya te saba,

    Cuando por fin te coron.

    Era la primavera

    la pregonera del delicado amor.

    Lloro amargamente

    aquel romance adolescente.

    Dura tristeza oscura,

    frgil amor que no supe retener

    Oye, paloma ma

    esta tristsima elega.

  • 1 7

    slabas subrayadas del texto donde deban

    atacar por primera vez, y se dejaba a criterio

    del intrprete la recordacin de la meloda y,

    segn sus posibilidades tcnicas, la ejecucin

    del acompaamiento. ste poda implicar una

    utilizacin elemental del instrumento esto es,

    tan solo rasguear el ritmo criollo sobre el

    acorde indicado o bien la realizacin de un

    arreglo de mayor elaboracin utilizando algn

    tipo de arpegio o de punteo, si el intrprete

    estaba capacitado. Sobre todo en el fragmento

    introductorio, se sola requerir un mayor

    trabajo instrumental. En el caso de la zamba,

    que usualmente repite los versos tercero y

    cuarto de cada estrofa, se indicaban entre

    parntesis, de ser necesarios, los acordes que

    cambiaban en el bis.

    A

    lo largo de 1 964, la misma revista la

    incluy en su Tabla de popularidad entre

    las diez canciones preferidas del momento.

    Acaso uno de los primeros grupos folclricos

    que populariz esta cancin haya sido Los cantores de Quilla-

    Huasi. Grabada en 1 964 en el disco Distinguidos en Folklore, su

    versin se difunda desde la revista Folklore junto con el poema completo, cual si fuera un modelo, y

    adjuntando una foto de los cuatro integrantes que deca: Aprovechan al mximo las delicadas

    armonasdeGuastavino y los bellos versosde Len Benars.

    N

    o puedo ahondar ahora en una historia de las versiones que incluye desde aquella que hicieron

    el do integrado por Dorothy y Peter Sensier, (Dorita y Pepe era su nombre artstico), hasta

    otras versiones posteriores como la del Tro Guayacn, triunfadores como Revelacin en el Festival

    de Cosqun de 1 964.

    S

    voy a detenerme, y ya para ir cerrando, en una versin grabada en 1 983, que hizo eco en las dos

    dcadas posteriores por su amplsima difusin: la de Mercedes Sosa. Imposible imaginar que ella

    no abordara una cancin que relata tan delicadamente el despertar sentimental de una nia de su

    provincia. Ntese que La tempranera est incluida en el lbum Como un pjaro libre editado en 1 983,

    apenas restablecido el rgimen democrtico en Argentina. Dos memorables recitales incluyeron esa

    cancin y recibi el aplauso efusivo del pblico. El disco marc claro, el fin del exilio y la posibilidad

    de reinsercin de la cantante en el circuito artstico local. "La tempranera" alcanz as una amplia

    difusin en los aos 80, que quiz haya sido mayor que la realizada por Eduardo Fal dos dcadas

    antes.

    L

    a versin de Mercedes Sosa muestra un fragmento inicial nuevo, distinto de la propuesta original

    de Guastavino: una guitarra, rasgueando el ritmo de zamba, acompaa una meloda realizada por

    una trompa. La utilizacin de este instrumento, adems de una orquesta de cuerdas con arpa, brinda

    el ropaje de un arreglo que podra denominarse clsico. El bombo en cambio, aporta el necesario

    sabor criollo, marcando con su presencia el rasgo popular de la partitura. La importancia de las

    melodas secundarias (valga la paradoja terminolgica) revela una propuesta musical elaborada, que

    intenta diferenciarse de los viejos estndares o clichs del boom de los 60. La meloda del comienzo,

    deudora como se dijo de "En una zamba", se modifica elegantemente en la primera, tercera y cuarta

    estrofas.

    P

    ara terminar, vaya una ltima mediacin que subraya la eficacia simblica, la popularidad

    alcanzada por la obra. Se trata de la cita-homenaje que se realiza de ella en la zamba A Monteros,

    dedicada a la localidad tucumana y su ingenio. Perteneciente a Pedro Favini y El Chango Nieto, su

    Portada de "La Tempranera", ilustrada por Benicio

    Nez. Coleccin Cancin Estampa. Editorial Lagos.

  • 1 8

    texto resulta prueba cabal de la particular manera en que fue arraigando la asociacin de ese lugar

    con una visin idealizada de la mujer joven, tierna, dulce, como la del primer amor que describe Len

    Benars. En el estilo enftico, casi gritado, caracterstico de la expresin del coautor e intrprete, el

    Chango Nieto dice:

    EPLOGO

    E

    l derrotero que realizamos por algunas de las principales canciones de raz folclrica de

    Guastavino muestra la confluencia de elementos que han cimentado la permanencia de algunas

    de ellas en el repertorio. Por un lado, qued expuesta la significativa influencia que tiene siempre la

    figura del intrprete en la legitimacin de una obra musical. Al mismo tiempo, las maniobras

    consagratorias para lograr la aceptacin de un repertorio, quedaron creo, expuestas en este breve

    recorrido. En el caso de "La tempranera", se alcanz al pblico afecto a las peas folclricas, amante

    de las reuniones sociales, de las guitarreadas en las que se entonaban canciones en forma grupal, y

    asiduo concurrente a los festivales nacionales. Esta primera forma de recepcin, que implica una

    actitud activa pues conlleva la reproduccin de la obra a travs de la externacin grupal, deriv de la

    escucha de los conjuntos vocales y estilos vigentes en los aos 60. Le sigui en cambio, luego del

    perodo de sombras, una recepcin ms bien pasiva y basada en la escucha, a travs de las versiones

    ms delicadas de los 80. La de Mercedes Sosa, atravesada por elementos musicales que se instalan en

    un estilo ms bien internacional, y por su timbre vocal personalsimo, realiz la tarea de aglutinar e

    identificar a la ya dispersa comunidad interpretativa de la Nueva Cancin Argentina.

    M

    arcada por gobiernos dictatoriales, movimientos de vanguardia y gestos rebeldes, la dcada

    de 1 960 en Argentina parece haber permitido una lograda convergencia entre la msica de raz

    folclrica, la bsqueda de una identidad cultural argentina y un arte popular. Guastavino produjo

    entonces una msica nacionalista nueva, justo en la interseccin entre los mbitos culto y popular.

    Manifest as su sentido de pertenencia a la cultura argentina y encontr, desde su actitud siempre

    reservada, un eficaz modo de participacin. La aparicin de algunos elementos que remiten a las

    convenciones musicales de la tradicin acadmica en conjuncin con las marcas estilsticas aportadas

    por los intrpretes instal a Guastavino como una figura respetada, dentro de un tipo de folclore (y

    todo esto, dicho entre muchas comillas) que podra decirse, fue un folclore culto.

    M

    uchas gracias por vuestra paciencia.

    BIBLIOGRAFA CITADA

    A ella que el poeta la vio tempranera

    tarareando duendes de vinos pateros,

    y dej en tu cielo la rosa galana

    por eso te nombra mi canto, Monteros.

    BECKER, Howard. Losmundosdel arte.Sociologa del trabajo artstico. Bernal,Universidad Nacional de Quilmes, 2008.

    FUENZALIDA, Fernando. Vida, personalidad yobra de Carlos Guastavino,Msica eInvestigacin, N 2. Buenos Aires, Inst itutoNacional de Musicologa Carlos Vega, 1998,pp. 21-77.

    LIMA QUINTANA, Hamlet . Los referentes. Una

    historia de amistad. Buenos Aires, TorresAgero, 1994.

    ROMERO, Luis Alberto. Breve historiacontempornea de la Argentina. Segunda

    edicin. Buenos Aires, Fondo de CulturaEconmica, 2001.

  • 1 9

    "Msicos en Congreso", en

    su ltima edicin

    L

    a tercera edicin de Msicos

    en Congreso se desarroll

    en la ciudad de Santa Fe entre los

    das mircoles 5 y viernes 7 de

    octubre de 201 1 en el Instituto

    Superior de Msica de la Facultad

    de Humanidades y Ciencias de la

    Universidad Nacional del Litoral.

    Qu es hoy ensear y

    aprender msica? se

    constituy en el interrogante

    central del encuentro. Las

    ponencias, conferencias y clases

    magistrales permitieron

    reflexionar en torno a las

    relaciones que la msica traba

    con las reas de Salud,

    Educacin, Artes, Sociedad,

    Conocimiento, Actuales

    tecnologas de produccin y

    difusin, y Creacin.

    L

    a conferencia inaugural,

    Reflexin sobre culturas y

    educacin musical, estuvo a

    cargo del Doctor Daniel Morales

    de la Universidad Federal de

    Santa Mara, Brasil, que fue

    presentado por el Director del

    ISM, Prof. Hugo Druetta.

    L

    os trabajos expuestos se

    distribuyeron en seis mesas a

    lo largo de las tres jornadas que

    dur el Congreso. Para cerrar la

    segunda jornada, se llevo a cabo

    un espectculo multimedial a

    cargo del New Made Ensamble

    integrado por Rosella Spinosa y

    Alessandro Calcagnile de Italia,

    presentando en este caso la obra

    Energy for life para piano y

    video.

    E

    n el transcurso del ltimo da,

    tuvo lugar la conferencia de

    la profesora Mara del Carmen

    Aguilar, como invitada especial

    del congreso, quien realiz una

    relectura de sus trabajos

    pedaggicos orientados a la

    educacin musical a travs de la

    percepcin y el anlisis.

    A

    dems, se cont con la

    participacin de otros cuatro

    invitados especiales que

    brindaron sendas conferencias

    virtuales: Dra. Mara Amparo

    Porta Navarro (Espaa), Dr. Juan

    Pablo Gonzlez (Chile) , Lic.

    Liliana Gonzlez Moreno (Cuba) y

    Dr. Rubn Lpez Cano (Espaa).

    E

    n el marco del Congreso,

    gracias al espacio cedido por

    la comisin organizadora y a las

    gestiones realizadas por el Prof.

    Fabin Pnnola, la Asociacin

    Argentina de Musicologa

    (A.A.M.) pudo desarrollar, en las

    dos ltimas jornadas, los

    Coloquios de Msica Acadmica

    previstos bajo las temticas

    Perspectivas socio-culturales en

    estudios recientes sobre msica

    acadmica de (y en) Argentina y

    de Msicas Populares.

    Aproximaciones tericas,

    metodolgicas y analticas en la

    musicologa Argentina.

    D

    entro del coloquio de

    Msica Acadmica, el da

    jueves 6 se expuso el primer

    trabajo a cargo del Lic. Jos

    Ignacio Weber, interpelado por

    Leandro Donozo, titulado

    Discursos crtico-musicales de la

    inmigracin italiana en la Buenos

    Aires de entre siglo. Algunas

    discusiones tericas y

    problemas. El autor tom las

    publicaciones de la revista El

    Mundo del Arte, las crticas de los

    peridicos La Nacin, La Prensa y

    La Patria degli Italiani entre

    otras, para ejemplificar las

    valoraciones musicales, las

    normativas sobre el gusto y las

    expectativas sobre la msica a

    fines del siglo XIX y principios del

    XX. Este conjunto de diarios y

    semanarios tena un rol

    preponderante dentro de las

    publicaciones periodsticas de la

    poca. Su anlisis dej entrever

    las interacciones existentes

    entre la cultura local de Buenos

    Aires y la de origen italiano.

    Como parte del debate que

    tuvo lugar finalizada la

    exposicin, se realizaron

    algunas observaciones con

    respecto al sustento terico

    de los trabajos elaborados a

    partir de las fuentes.

    A

    continuacin, la Lic.

    Romina Dezillio

    present su ponencia

    Historizar la experiencia.

    Hacia una historia de la

    creacin musical de las

    mujeres en Buenos Aires

    (1 930-1 955). Fundamentos,

    metodologa y avances de

    una investigacin. La

    moderadora fue la Mg.

    Graciela Musri. La exposicin se

    centr en las mujeres

    compositoras y su produccin

    musical en Buenos Aires entre

    1 930 y 1 955. A partir de este eje

    temtico, la expositora

    argument sobre cmo las

    articulaciones entre la

    epistemologa feminista y los

    antecedentes en la musicologa

    norteamericana y europea

    favorecen la comprensin, el

    anlisis y la historizacin del

    objeto de estudio. La

    interpelacin de la Lic. Silvia

    Lobato permiti plantear una

    relacin de ida y vuelta entre

    epistemologa y feminismo por

    un lado, y musicologa y

    feminismo por el otro, en el

    marco de entender una

    musicologia feminista

    fundamentalmente como un

    aporte a la crtica del canon.

    E

    ste primer coloquio cerr con

    la exposicin de la Dra Silvina

    Luz Mansilla, La vidalita de

    Alberto Williams como caso

    paradigmtico de construccin

    cannica en el llamado

    nacionalismo musical argentino.

    Fue interpelada por el Mag.

    Hernn G. Vzquez y moderado

    el debate por la Lic. Vera

    Wolkowicz. Se tom como objeto

    de estudio esa vidalita

    compuesta en aos cercanos al

    RESEAS

  • 20

    Centenario de la Revolucin de

    Mayo. Partiendo de su

    consideracin, la expositora

    propuso reflexionar acerca de

    cmo algunas piezas,

    mayormente breves e inspiradas

    en ritmos y giros meldicos del

    folclore argentino, alcanzaron

    una mayor circulacin, con

    respecto al resto de la

    produccin sonora. Con el fin de

    comprender los procesos de

    legitimacin en torno de la obra,

    la autora revis la participacin

    de la institucin escolar, los

    medios masivos de comunicacin

    y la crtica especializada en la

    canonizacin de la misma. En la

    posterior interpelacin, se

    observ el papel de la radio

    dentro del proceso de

    canonizacin de sa y otras

    obras, y el rol que tuvieron los

    textos escolares. A continuacin,

    se se generaron en el debate

    preguntas como: Por qu hay

    obras que quedan fuera del

    canon? Cmo se construye el

    canon? La expositora sostuvo

    que son necesarias las

    reflexiones en torno a las

    condiciones de existencia de la

    msica acadmica argentina y a

    su interseccin con cuestiones

    inherentes a procesos histricos

    sociales, culturales y polticos.

    E

    l coloquio de Msicas

    Populares se desarroll

    durante la jornada del viernes 7

    con la presentacin de dos

    trabajos, moderados por el Lic.

    Federico Sammartino, quien

    adems es el creador, junto con

    el Dr. Hctor Rubio, de los

    coloquios, que a la fecha suma

    varias ediciones realizadas.

    E

    n primera instancia, el Mg.

    Damin Rodriguez Kees,

    expuso su trabajo Y dnde est

    el piloto? La vanguardia en la

    cancin popular argentina

    comenzando el siglo XXI . Los

    conceptos centrales tratados

    fueron los de cancin y campo,

    tomando las teoras de Pierre

    Bourdieu, y el principio del

    lenguaje musical inmanente. Al

    tratar el tema de la vanguardia

    en la cancin popular argentina,

    se parti de la teora de la

    vanguardia de Peter Brger.

    Tomando esta teora como

    marco, se habl de las categoras

    de intensidad e internacionalidad

    tratando de explicar porqu

    estas categoras no funcionan

    aplicadas al estudio de las

    canciones latinoamericanas.

    Luego se caracteriz y trat de

    definir la msica popular de

    vanguardia. La interpelacin, a

    cargo del Prof. Claudio Daz, gir

    en torno a varias problemticas.

    En primer lugar, la necesidad de

    definir un alcance del concepto

    vanguardia para la cancin

    latinoamericana. En segundo

    lugar, se discurri sobre el riesgo

    de que los aspectos descriptivos,

    en este caso de la vanguardia

    latinoamericana, terminen

    funcionando a manera de

    prescripciones, pudiendo darse el

    caso de que estas descripciones

    operen como tablas, segn las

    cuales la cancin vanguardista

    latinoamericana se organiza,

    dejando de lado aquellas

    canciones que no cumplan con

    las caractersticas prescriptivas.

    Como ltimo punto, se trat la

    cuestin de la integracin arte y

    vida de Brger, sealando las

    altas probabilidades que tiene

    este intento de caer en el efecto

    contrario, la reproduccin de

    ciertas diferencias de clases. El

    debate gir en torno a la

    influencia de la industria cultural,

    en la definicin, imposicin y

    cambios de estilos.

    E

    n segundo lugar, el Prof.

    Lucio Carnicer present

    Arco iris y Sudamrica, o el

    regreso a la aurora. Noventa y

    nueve minutos fundacionales en

    el rock hecho en Argentina. La

    investigacin se llev a cabo por

    tres vas: a travs del repaso de

    las reseas periodsticas de la

    poca; del anlisis de la

    recepcin del disco por parte del

    pblico y luego, a manera de

    contextualizacin, se reflexion

    sobre lo que significaba

    Latinoamrica en ese momento.

    A partir de all, el autor posicion

    al disco en un lugar privilegiado

    dentro de la historia de rock,

    otorgndole la categora de hito

    para lo que luego se conoci

    como rock nacional, ya que en

    sus pretensiones y en sus hechos

    buscaba fusionar el rock y el

    folclore. El anlisis estrictamente

    musical tambin estuvo

    presente. All el nfasis se puso

    sobre todo en la idea de

    gradaciones en el lenguaje

    musical, aplicada a aspectos

    como el timbre, las dinmicas y la

    forma. Una de las problemas,

    que se desprendieron de la

    interpelacin que estuvo a cargo

    de Lisa Di Cione, fue la ausencia

    de trabajos de investigacin

    respecto al grupo Arco Iris.

    Relacionado casi de manera

    exclusiva a la biografa de uno de

    sus integrantes, Gustavo

    Santaolalla, el grupo slo es

    mencionado dentro del

    anecdotario hippie del actual

    productor musical. Se nombra a

    Arco Iris, mas no se lo estudia.

    Relacionada con esto, el Prof.

    Claudio Daz remarc la ausencia

    de bibliografa especializada

    respecto a las bandas de la

    poca. Las observaciones sobre

    el trabajo presentado giraron en

    torno a la supuesta originalidad

    de la propuesta del grupo sobre

    la idea del ser nacional. Se aludi

    a que en otros grupos y en discos

    anteriores ya haban aparecido,

    por ejemplo, en diversas peras

    rock, el uso de instrumentos

    relacionados con el folclore.

    C

    ulmin as la segunda

    jornada de los Coloquios

    conjuntamente con el Congreso,

    que le sirvi de marco. Una vez

    ms, dndole continuidad a una

    propuesta iniciada en 2007, el

  • 21

    Instituto Superior de Msica del

    Litoral volvi a reunir con xito a

    los ms importantes

    especialistas en el mbito de la

    educacin musical de nuestro

    pas, a destacados intrpretes,

    musiclogos y a invitados

    internacionales de renombre que

    se dieron cita para debatir en

    esta 3era. edicin de Msicos en

    Congreso 201 1 .

    Mara Fernanda Escalante

    Jorge Omar Gaiazzi

    Lucas Javier Rojos

    Fernndez Calvo, Diana y

    Nilda Vineis (Eds.) Actas de

    laOctava Semanade la

    Msica ylaMusicologa.

    Jornadas Interdisciplinarias

    de Investigacin. La

    investigacinmusicala

    partirdeCarlosVega. CD

    Rom. Buenos Aires, EDUCA,

    201 1 , 1 1 5 pp. ISBN 978-987-

    620-1 91 -9.

    E

    ntre el 2 y el 4 de noviembre

    de 201 1 se realiz en la Sala

    Alberto Ginastera de la

    Facultad de Artes y Ciencias

    Musicales de la Universidad

    Catlica Argentina, la Octava

    Semana de la Msica y la

    Musicologa. Evento que es de

    esperar merezca una resea

    especfica, dado el inters que

    despert la dedicacin

    mayoritaria de las sesiones

    especiales, conferencias y mesas

    redondas a la figura de Carlos

    Vega, cont en esta ocasin con

    la co-organizacin del Instituto

    Nacional de Musicologa Carlos

    Vega que depende de la

    Secretara de Cultura de la

    Presidencia de la Nacin, y del

    Centro de Estudios Folklricos

    Augusto Ral Cortazar de la

    Universidad Catlica Argentina.

    P

    ropongo aqu realizar una

    resea sobre las Actas de la

    Octava Semana, editadas por

    Diana Fernndez Calvo y Nilda

    Vineis. Con el patrocinio del

    FONCyT, la entidad estatal que

    suele financiar este tipo de

    reuniones cientficas, las Actas se

    publicaron en formato

    electrnico en ocasin del mismo

    encuentro.

    C

    omo es la poltica del

    Instituto de Investigacin

    Musicolgica Carlos Vega en

    los ltimos aos, las actas que se

    entregan en ese formato renen

    aquellos trabajos presentados a

    la convocatoria abierta, para la

    consideracin de un Comit de

    Lectura que los evala. Se

    reserva, generalmente, para la

    revista del mismo instituto, la

    publicacin a posteriori de las

    conferencias de invitados

    especiales y de algunas sesiones

    con disertantes especficamente

    convocados. En esta ocasin el

    Comit de Lectura estuvo

    integrado por Enrique Cmara de

    Landa, Ftima Graciela Musri y

    Nilda Vineis.

    E

    n la presente convocatoria,

    se propusieron tres ejes

    temticos posibles para estas

    participaciones. El primero se

    centr en torno a la obra de

    Carlos Vega, motivo del

    congreso; el segundo consider

    los temas libres, y el tercero

    apunt a discusiones de ndole

    terica acerca de cuestiones

    epistemolgicas e

    interdisciplinarias. Se especific

    la modalidad de intervencin

    posible, que incluy tres tipos de

    escritos: informe de

    investigacin, ensayo y relato de

    experiencia. Cada postulante

    deba decidir a cul de las tres

    categoras adscriba su

    proposicin.

    L

    os trabajos presentados

    correspondieron en un 90 %

    al eje N 2, que fue el de los

    temas libres. De los diez

    escritos publicados, solo uno se

    relaciona con Carlos Vega,

    mientras que el resto se

    encuadra en diferentes

    perspectivas y temticas. Ningn

    trabajo surgi en torno a la

    tercera posibilidad de la

    convocatoria, que era la de las

    discusiones tericas o

    propuestas interdisciplinarias. En

    cuanto a las variantes de las

    comunicaciones, ocho fueron

    informes de investigacin, uno,

    ensayo, y el dcimo, relato de

    experiencia.

    S

    obre la edicin, deben

    sealarse algunos desaciertos

    y faltas de consistencia. Entre

    otros: la ausencia de algunos

    datos y de una unidad de criterio,

    en el sistema de citaciones y

    referencias bibliogrficas, muy

    notable en algn caso (Snchez,

    p. 20-21 ) ; la carencia de resumen,

    abstract y palabras clave en uno

    de los trabajos (Campos, p. 59); la

    ubicacin de uno de los informes

    de investigacin en la categora

    ensayo (Dezillio, p. 70), lo cual

    comporta un inconveniente nada

    menor para la comprensin del

    texto, como se ver ms

    adelante; finalmente, la falta de

    una introduccin o prlogo que

    explicara las pautas de la

    convocatoria por las cuales son

    esos los diez trabajos contenidos

    en esta edicin.

    E

    n El carnavalito jujeo:

    anlisis y transcripcin

    musical de los ejemplos

    documentados por Carlos Vega

    en la Puna y Quebrada de

    Humuahuaca, Nancy Snchez

    informa sobre una investigacin

    que actualmente tiene radicada

    en el Instituto Nacional de

    Musicologa. La autora parte del

    modelo de anlisis explicado por

    Vega en su Fraseologa, que

    considera adecuado para la

    comprensin de los fragmentos

    musicales en estudio. Centrado

    su aporte en la observacin

    minuciosa de dos ejemplos

    grabados, recopilados por el

    musiclogo, propone, en busca

    de herramientas analticas

    apropiadas, la combinacin del

    modelo de Vega con el llamado

    anlisis paradigmtico de

    Nicholas Ruwet. Por tratarse de

  • 22

    un informe de avance, la

    investigadora no ahonda en

    algunos otros aspectos que

    podran contemplarse al analizar

    y transcribir esas msicas, pero

    deja esbozada la importancia de

    una comprensin del contexto en

    el que se produjeron los

    fenmenos estudiados, lo cual

    podra ser visto, segn su visin,

    desde un anlisis semitico.

    U

    na considerable amplitud

    temporal y de enfoques

    metodolgicos puede observarse

    al contemplar los nueve trabajos

    que corresponden a temas libres

    y, en varios de ellos, una cierta

    precariedad o estado todava

    incipiente de las investigaciones.

    Puestos en perspectiva

    diacrnica, se sealan dos

    investigaciones dedicadas al

    periodo colonial, dos a msicas

    del siglo XIX, dos a la primera

    mitad del siglo XX y tres, a

    segunda mitad del siglo XX o

    comienzos del XXI . En los

    enfoques, hubo dos trabajos

    dedicados a edicin crtica de

    msica, dos correspondientes al

    mundo de la lutheria y la

    organologa, tres que podran

    circunscribirse a anlisis

    puramente musicales o

    inmanentes y dos ms, cuyos

    enfoques compendian diferentes

    aproximaciones metodolgicas

    en superposicin.

    E

    n Edicin crtica de la pera

    Pampa de Arturo Berutti,

    Nstor Agero ofrece un informe

    que resulta continuidad de uno

    anterior, presentado en la

    Sptima Semana por Graciela

    Musri y Alicia Ambi y referido al

    mismo tema. El autor comenta el

    estado actual del trabajo grupal

    que se realiza en la Universidad

    Nacional de San Juan, en torno a

    la pera ms emblemtica del

    compositor sanjuanino. Ahonda

    en la observacin de detalles

    caligrficos de los diferentes

    manuscritos en estudio, en

    explicaciones sobre el estado

    fragmentario que tienen los

    papeles de msica y en la

    fundada necesidad de tomar

    decisiones a la hora de editar y

    reconstruir la partitura, en

    funcin de algn posible uso de

    la misma, para futuras

    representaciones o

    interpretaciones fragmentarias

    de la pera.

    D

    ifcil resulta referirse al otro

    trabajo relacionado con

    edicin musical, que firma quien

    suscribe, en coautora con Vera

    Wolkowicz. Referido a obras de

    Carlos Guastavino (1 91 2-2000)

    que por diversos motivos

    quedaron inditas, el trabajo

    informa sobre la realizacin de

    un estudio preliminar que

    acompaar la edicin de un

    grupo de partituras del

    compositor santafesino.

    Proyectada su publicacin para

    201 2, a raz de cumplirse el

    Centenario del natalicio de

    Guastavino, el informe da cuenta

    de ciertos detalles de inters que

    se han encontrado en el

    transcurso de la investigacin, y

    comenta, desde la presentacin

    de algunos ejemplos puntuales,

    la necesidad imprescindible de

    asumir el hecho de abordar una

    edicin crtica.

    D

    esde su experiencia en el

    campo de la lutheria, el

    relato de Jos Verdi acerca de las

    caractersticas que renen las

    guitarras de la primera mitad del

    siglo XIX resulta atractivo, dentro

    de un campo que supone un alto

    grado de tecnicismo. Con

    terminologa especfica y

    referencias a la historia de la

    construccin de esos

    instrumentos en diferentes

    pases, Verdi pasa revista a las

    diferentes partes que los

    componen y cmo se realizaron

    en distintas pocas y lugares,

    dentro de lo que se considera la

    etapa de la guitarra romntica.

    Lo realiza eso s, sin dar cuenta

    de las fuentes que emplea,

    deduciendo solo al final el lector,

    que su relato se basa

    mayormente en observaciones

    empricas. Norberto Broggini y

    Norberto Godoy, por su parte,

    dedican su atencin a los dos

    rganos coloniales de la catedral

    de Cuzco y su historia, teniendo

    en cuenta las diferentes

    intervenciones, restauraciones y

    modificaciones que los

    instrumentos sufrieron desde

    mediados del siglo XVI I . Con gran

    detalle en la descripcin de los

    registros, proceden a comparar

    los dos rganos, denominados

    del lado de la Epstola y del

    lado del Evangelio, por su

    ubicacin fsica dentro de la

    catedral.

    C

    arlos Campos, un joven

    investigador de la

    Universidad Nacional de Rosario,

    presenta un informe sobre su

    trabajo referido a una danza

    cortesana del siglo XVI I I : la

    Francesa. Pieza para teclado

    conservada en Chiquitos, el autor

    propone su procedencia

    espaola, ms all de que la

    danza sera de origen ingls. Con

    un pormenorizado cuadro de

    partituras, que ejemplifica

    concordancias inglesas, francesas

    y espaolas para tecla y un

    entrecruce que repara en

    manuscritos, versiones de

    diferentes pocas y

    denominaciones que adopt,

    aporta a la tesis mayor que

    sugiere la existencia de un

    repertorio comn entre la

    Pennsula y la Amrica Hispana.

    E

    mbrionario y en parte, algo

    impreciso, resulta el informe

    de Mara Claudia Albini, Cecilia

    Beatriz Caruso y Edgardo

    Cianciaroso, referido a los

    aportes que la investigacin

    musicolgica habra realizado a la

    creacin de un cancionero

    escolar argentino en la primera

    mitad del siglo XX. Aunque la

    formulacin del tema en el ttulo

    contiene todas estas variables, el

    texto que presentan no refiere a

    posibles transferencias de

    trabajos musicolgicos al campo

  • 23

    del cancionero escolar argentino.

    Segn expresan los autores en el

    resumen, el objetivo es

    establecer el lugar que ha

    ocupado el repertorio folklrico

    escolar en el sistema educativo

    argentino de los primeros

    cincuenta aos del siglo XX en

    relacin a la construccin de la

    identidad nacional. Sin

    embargo, no llegan a desarrollar

    este objetivo a lo largo de las

    pginas. El informe, es evidente,

    constituye apenas un primer

    avance sobre un tema de gran

    amplitud que est todava por

    ser investigado, en el que se pasa

    revista con cierto desorden

    cronolgico a argumentos

    generales ya conocidos, como

    aquellos que muestran la

    importancia de los rituales

    escolares para la perpetuacin

    de conductas y actitudes de

    respeto hacia los llamados

    smbolos patrios, o el carcter

    prescriptivo que tuvo en

    Argentina hacia mediados del

    siglo XX, el uso de libros de

    textos en la enseanza bsica. El

    tema es, seguramente, atractivo,

    pero da la impresin en los

    antecedentes, de que se

    desconoce una parte importante

    de los estudios no tan

    recientes ya realizados en el

    rea (Aharonin, 2000; Speroni,

    2002; Murray, 2008; entre otros)

    y cierta bibliografa bsica sobre

    historia de la msica argentina

    (Plesch, 1 996; Kuss, 1 998; por

    citar solo dos). Se apela, en

    cambio, a investigaciones que

    proceden del campo de la

    historia cultural argentina, de la

    historia de la educacin general,

    y a estudios desde la historia de

    la literatura, referidos a los libros

    de lectura.

    L

    a serie de piezas

    denominadas Sincronismos,

    compuesta por el compositor

    argentino Mario Davidovsky,

    constituye el objeto de estudio

    de Manuel Ogara, un joven

    graduado de la Universidad

    Nacional de Quilmes. El autor se

    focaliza en cinco de las doce

    piezas, para detectar, por un

    lado, las estrategias formales

    empleadas y, por el otro, analizar

    los vnculos que se establecen

    entre las partes instrumentales y

    las electrnicas. La herramienta

    analtica a la que recurre el

    mtodo propuesto por el

    compositor e investigador

    estadounidense Mike Frengel

    resulta operativa para su

    propsito. Las conclusiones a las

    que arriba estn claramente

    expresadas y se correlacionan

    con el objetivo inicial.

    D

    esde Chile, Paloma Martin

    Vidal estudia el tango

    instrumental en la orquesta de

    Osvaldo Pugliese,

    considerndolo en su rol doble

    de compositor-intrprete. Con

    nfasis en el anlisis de aspectos

    puramente musicales, la autora

    propone que ese repertorio

    constituye un metalenguaje de

    expresin en el tango, que obra

    como ejemplo de sincretismo e

    identidad. Su redaccin resulta

    por momentos, ambigua, y si

    bien analiza un grupo de obras

    desde varias dimensiones

    dinmica, polifnica y

    timbrstica, segn su

    terminologa las conclusiones a

    las que arriba finalmente, no van

    ms all de apreciaciones

    generales, instaladas a esta

    altura casi en una suerte de

    sentido comn sobre el tema.

    R

    omina Dezillio plantea el

    estado de avance de su

    investigacin doctoral dedicada a

    la creacin musical femenina en

    Buenos Aires entre 1 930 y 1 955,

    que realiza en el marco del

    programa de posgrado de la

    Facultad de Filosofa y Letras de

    la Universidad de Buenos Aires.

    Su escrito permite tomar nota

    sobre cmo fue dilucidando las

    fuentes para su estudio y cmo

    fue decidiendo cules de ellas

    seran primarias, y cules,

    fuentes secundarias. Se intuye

    una base fctica slida que le

    permitir entrecruzar conexiones

    entre las personas y esclarecer

    redes institucionales de las que

    hasta ahora nada se ha dicho. El

    tema resulta del mayor inters

    para una historia de la msica

    que contemple aspectos hasta

    ahora prcticamente no tenidos

    en cuenta en estas latitudes,

    dentro de las perspectivas

    tericas y metodolgicas

    vigentes. Sorprende que esta

    presentacin, cuyo desarrollo y

    contenido se atienen casi

    estrictamente a lo aconsejado en

    la convocatoria para los informes

    de investigacin, haya sido

    caracterizada, tanto en el ndice

    como en las pginas donde est

    incluida, como un ensayo.

    Efectivamente, la autora utiliza,

    adems de la retrica y estilo del

    informe acadmico, los aspectos

    indicados en la convocatoria

    (objetivos, hiptesis,

    metodologa, avances y

    hallazgos). Es cierto que adems,

    ajustndose al espacio

    estipulado, logra traer a colacin

    aspectos de gran provecho para

    su investigacin y que ello se

    obtiene gracias a una narracin

    atractiva que no decae, y a una

    escritura que, sin perder rigor y

    precisin tcnica, combina con un

    estilo podra decirse casi

    literario. Pero el carcter

    secuencial de su explicacin no

    permite imaginar que su escrito

    no sea otra cosa que un informe.

    S

    intetizando, las Actas que se

    comentan muestran

    resultados mayormente iniciales

    o parciales, de investigaciones

    que estn en curso. Algunas de

    ellas, prometen resultados en el

    mediano plazo que podran ser

    para avance y mayor produccin

    de conocimiento dentro de la

    musicologa regional. Es de

    esperar que eso se logre.

    Mientras tanto, resulta valorable

    tener a disposicin mediante

    esta entrega, la informacin

    sobre sus alcances, perspectivas

  • 24

    y personas que participan.

    Silvina Luz Mansilla

    Castieira de Dios, Jos

    Luis (dir.). Lamsica en elDi

    Tella. Resonancias de la

    modernidad. Festival

    InternacionalenHomenaje

    alCentro Latinoamericano

    deAltos EstudiosMusicales

    (CLAEM) en su 50

    aniversario. Buenos Aires,

    Secretara de Cultura de la

    Presidencia de la Nacin,

    Coleccin Nuestra Cultura,

    201 1 .

    L

    a Secretara de Cultura ha

    hecho entrega gratuita de

    esta interesante y oportuna

    publicacin en ocasin de

    conmemorarse el 50 aniversario

    de la aparicin del Centro

    Latinoamericano de Altos

    Estudios Musicales (CLAEM).

    Para ello se organiz un Festival

    Internacional entre el 1 7 y el 24

    de junio de este ao, al que se

    invit la casi totalidad de

    compositores becados que

    pudieron localizarse, y que

    tomaron los cursos bienales del

    Centro.

    S

    e trata de un volumen de

    gran porte de 1 60 pginas,

    con textos de compositores y

    valiosa informacin

    documentada acerca del Centro

    Latinoamericano de Altos

    Estudios Musicales (CLAEM), del

    Instituto Di Tella. Este aporte

    viene a ampliar el conocimiento

    de anteriores publicaciones

    sobre el tema, como las de John

    King,1 Corin Aharonin,2

    Hernn Gabriel Vzquez3 y

    Mara Laura Novoa.4

    E

    ntre los crditos de

    produccin se menciona a

    Eduardo Kusnir como Director

    del Festival, a Gerardo Gandini

    como programador invitado, as

    como a directores musicales,

    artistas varios e investigadores

    encargados de diferentes tareas.

    E

    n el manejo del libro se

    extraa un ndice general

    dado el importante volumen de

    informacin que contiene. Est

    organizado en cuatro partes: la

    primera contiene ocho artculos

    de los responsables de la

    realizacin, de musiclogos y de

    un crtico; la segunda da lugar a

    diez escritos breves de ex

    becarios del CLAEM; la tercera

    presenta un muy nutrido

    apndice documental y la cuarta

    acerca informacin del Festival

    Internacional realizado en

    conmemoracin del CLAEM. A

    continuacin, introducir algunas

    de las ideas expresadas en las

    distintas partes que me parecen

    destacables por diferentes

    causas, ya sea por su peso

    ideolgico, histrico o esttico.

    J

    orge Coscia, en calidad de

    Secretario de Cultura de la

    Nacin y desde la militancia

    ideolgica, caracteriza el espacio

    creativo del Di Tella como el

    quinto momento de una

    modernidad de cuo extranjero,

    opuesta a la tradicin y a una

    Argentina oculta que se

    juzgaba pobre, provinciana y

    de mal gusto. Pero,

    manifiesta que la crtica a la

    sociedad burguesa de la

    poca fue atravesada por la

    mitologa de la revolucin

    cubana, la libertad frente a

    la alienacin de la sociedad

    de consumo. Segn el autor

    esta situacin habra

    generado polmica entre

    identidad y modernidad,

    hasta resolver la tensin en

    una sntesis apropiadora de

    lo importado que hizo

    emerger lo nuestro como

    una alternativa identitaria a

    la mera tradicin. De esta

    manera, el autor pretende

    legitimar los principios de

    soberana y libertad creativa que

    justificaran el homenaje

    realizado.

    E

    l Director Nacional de Artes

    dependiente de la misma

    Secretara y director de la

    publicacin, el msico Jos Luis

    Castieira de Dios, a su vez

    interpreta la accin pedaggica y

    artstica de Alberto Ginastera y

    del CLAEM en un ms amplio

    panorama de ideas artsticas y

    procesos polticos

    internacionales. Pone en valor

    los aportes de artistas y

    pensadores latinoamericanos y

    europeos, tanto como la

    propuesta del CLAEM de carcter

    crtico, superador e integral que

    propendi a la renovacin de la

    educacin artstica en

    Latinoamrica. Hace un balance

    del estado rele