amor mío

3
AMOR MIO Hace ya un tiempo que te siento amor mío. Por tus manos suavemente perturbadoras, por tus silencios cuando la vida ya se llega hasta la esquina de mi cuadra para pegarse la vuelta con sus bendiciones. Si no te tuviese a mi lado en estos momentos... Si no te tuviese quién sabe, a lo mejor podría estar ocupada en otra cosa que pensarte, o estar contando los minutos para ver a alguien más que no quiere verme. Quizás estaría mirando una película y viendo correr el tiempo desde la ventana que no se abre, espiando por el vidrio sin sentir el aire frío del invierno renovándome el rostro. Pero estás, tu cuerpo, tu alma están. Tus palabras cuando las necesito, tu hombro para abrigarme si me siento mal, tus brazos para atarme a tu pecho y dejarme desahogar en ellos toda mi bronca, toda mi impotencia ante las situaciones que no puedo cambiar. Yo no quiero cambiar lo bueno. Yo no quiero cambiar el ser tuya hoy y siempre, aunque tus labios me recuerdan siempre que no sos perfecto, que no podés darme todo lo que quisieras, que no podes darme más que lo que me das. ¿No crees que nuestro amor no merece explicaciones? No quiero explicaciones, no quiero que me cuentes lo que no podés hacer por mí, sino lo que soy para vos, sino lo feliz que podés hacerme cuando tu cuerpo roza el mío, cuando tus ojos me miran y me llenan de dicha, cuando respiro tu aire y me devoro tu aroma acariciando tu rostro con el mío. Si no te tuviese hoy no habría tenido fuerzas para llegar a las doce de la noche y sentarme a escribir todas estas cosas. Pero estás acá, sentado al lado mío. Tu alma me visita por las noches y se queda contemplándome, admirándome. A veces se ríe con las cosas que le cuento y me promete transmitírtelas, pero al final no lo hace. Otras veces se acuesta conmigo y me abraza bien fuerte, susurrándome cosas que no alcanzo a interpretar en su lenguaje, pero que me gustan. Sé que esta magia de estar juntos a escondidas puede terminarse en cualquier momento, y me enloquece saberlo. Sé que aunque tu espíritu es libre, no tus circunstancias, y no me permito sentir al respecto. Sólo una cosa, algo que voy a decir por única vez y nunca confesaré de nuevo, algo que negaré a muerte si vos o cualquiera me lo preguntan: me hubiera gustado estar en su lugar, compartir todo el tiempo

Upload: marita-santini

Post on 03-Aug-2015

140 views

Category:

Education


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Amor mío

AMOR MIO

Hace ya un tiempo que te siento amor mío. Por tus manos suavemente perturbadoras, por tus silencios cuando la vida ya se llega hasta la esquina de mi cuadra para pegarse la vuelta con sus bendiciones. Si no te tuviese a mi lado en estos momentos... Si no te tuviese quién sabe, a lo mejor podría estar ocupada en otra cosa que pensarte, o estar contando los minutos para ver a alguien más que no quiere verme. Quizás estaría mirando una película y viendo correr el tiempo desde la ventana que no se abre, espiando por el vidrio sin sentir el aire frío del invierno renovándome el rostro. Pero estás, tu cuerpo, tu alma están. Tus palabras cuando las necesito, tu hombro para abrigarme si me siento mal, tus brazos para atarme a tu pecho y dejarme desahogar en ellos toda mi bronca, toda mi impotencia ante las situaciones que no puedo cambiar. Yo no quiero cambiar lo bueno. Yo no quiero cambiar el ser tuya hoy y siempre, aunque tus labios me recuerdan siempre que no sos perfecto, que no podés darme todo lo que quisieras, que no podes darme más que lo que me das. ¿No crees que nuestro amor no merece explicaciones? No quiero explicaciones, no quiero que me cuentes lo que no podés hacer por mí, sino lo que soy para vos, sino lo feliz que podés hacerme cuando tu cuerpo roza el mío, cuando tus ojos me miran y me llenan de dicha, cuando respiro tu aire y me devoro tu aroma acariciando tu rostro con el mío. Si no te tuviese hoy no habría tenido fuerzas para llegar a las doce de la noche y sentarme a escribir todas estas cosas. Pero estás acá, sentado al lado mío. Tu alma me visita por las noches y se queda contemplándome, admirándome. A veces se ríe con las cosas que le cuento y me promete transmitírtelas, pero al final no lo hace. Otras veces se acuestaconmigo y me abraza bien fuerte, susurrándome cosas que no alcanzo a interpretar en su lenguaje, pero que me gustan. Sé que esta magia de estar juntos a escondidas puede terminarse en cualquier momento, y me enloquece saberlo. Sé que aunque tu espíritu es libre, no tus circunstancias, y no me permito sentir al respecto. Sólo una cosa, algo que voy a decir por única vez y nunca confesaré de nuevo, algo que negaré a muerte si vos o cualquiera me lo preguntan: me hubiera gustado estar en su lugar, compartir todo el tiempo que ella compartió con vos, ser la madre de tu hijo, la mujer amante y fiel que te espera por las noches desvelada rogando a Dios vuelvas bien a casa, la mujer que provoca día a día tus sonrisas y tus broncas, tu alma gemela, tu compañera eterna. Sé que si te lo digo vas a volver con lo mismo de siempre, con lo que no podés darme, con lo que no te pido. Te amo, con todo el ser de adentro, con toda mi extravagancia, con toda mi alma, con todos mis defectos y con todas mis sonrisas, con las cualidades que te atraparon de mí, y con todas las promesas fallidas que te hice. Te amo con el corazón. Si pudieras entenderlo. Si pudieras interpretarlo. Es un amor tan puro que es capaz de enfrentar toda inseguridad y salir ileso. Porque el amor puro nunca lastima, porque el amor puro siempre está protegido. Porque es amor, y porque es puro. Porque el amor puro es tan grande que traspasa los límites de lo físico y temporal, para mezclarse en lo etéreo, en esa conexión psíquica que de golpe se nos hizo tan cotidiana, saber lo que pensás, ver lo que sentís, sentirte si estás bien o mal aunque estés lejos, adivinar tus ganas de estar conmigo cuando no nos vemos, tomar el teléfono entre mis manos justo en el momento en que suena. Pero por favor no me interpretes mal, no necesito que sientas lo mismo, no pretendo que sientas tan fuerte. Me basta con tenerte unas horas cuando podés escaparte del trabajo para venir a casa, me basta con los besos que nos damos peligrosamente en el lugar de trabajo, me

Page 2: Amor mío

alcanza que me digas cosas lindas a veces, que te enojes si me ves fumando, con sentir que te intereso de la forma que te intereso. Me bastó un te amo perdido que escuché una noche de tus labios, aunque no significara lo mismo que significan todos mis te amo. Me basta con que estás, que es lo más importante del mundo.

MARIA DEL CARMEN SANTINI31 – 07 - 2007