conflicto estado iglesia
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CONFLICTO ESTADO – IGLESIAINTRODUCCIÓN
Después de los liberales que lograron llegar al poder, de todos los enfrentamientos
sucedidos,de la iniciación de la independencia, en la cual estos grupos llevarán a cabo la
perdida del territorio nacional frente a los Estados Unidos, creían que si llevaban a cabo la
creación y empleo de métodos, para el crecimiento económico y la estabilidad política, la
existencia de Mexico como un país estaba en peligro
Como respuesta a la crisis en esta época, propusieron reemplazar y cambiar
el orden actual, por una estructura que para ellos era moderna y más
eficaz.Comenzaron su nuevo orden con un movimiento que se le ha denominado como
“Reforma Liberal que pasó por varias etapas que se determinó por la resistencia de
dicha reforma.
Reforma Liberal Gómez Farías, considerando que para el progreso del país era
necesario que el gobierno estuviese fuera de la influencia del clero y
de los elementos conservadores, dictó las leyes que habían de
transformar las condiciones sociales y políticas del país.Por tal razón
se considera a Gómez Farías como el patriarca del liberalismo y el
precursor de la Reforma, que consumó años más tarde Benito Juárez.
INICIACIÓN DE LA REFORMA El grupo reformista estaba formado por la pequeña burguesía, que trataba de
desplazar a los españoles en los asuntos económicos, y por los nuevos políticos que
ambicionaban los puestos públicos, al frente de los cuales se hallaban distinguidos
intelectuales, como el doctor José María Luis Mora y Lorenzo de Zavala. Con el apoyo
de Gómez Farías, y con un programa liberal avanzado, durante el año 1833 y
principios del 34 se fueron expidiendo varias leyes, destinadas a destruir las
instituciones y los privilegios de las clases que significaban un obstáculo para la
marcha progresista del país.
Porfirio Díaz (1876-1911), a diferencia del periodo de
la república, no aplicó con rigor Leyes de Reforma y
pronto llegó a un modo de convivir con la iglesia, el
porfiriato representaba, para todos los revolucionarios
del periodo de 1910 hasta en los años que se
disminuyó la lucha, la interrupción de la tradición
liberal con la que contaba la iglesia. Para la iglesia
tampoco fue fácil la separación de ambas
dependencias y de la publicidad que esta había
dependido mucho del poder de la política a su favor,
después de que estas organizaciones llevarán a cabo
acciones juntas ante los problemas del siglo XVIII por
los problemas derivados del pensamiento ilustrado, así
como la reeducación religiosa, así como el caso de
México que fue sacrificada buena parte de la riqueza
por intereses nacionales.
La iglesia católica ha tenido un papel sumamente
importante en la guerra revolucionaria, tuvo muchos
medios para actuar en los principales sucesos de la
guerra civil, no solo por el enorme ejército de
frailes, sacerdotes, arzobispos, monjes y obispos que
rebasaba los doce mil en toda la República y el poder
de convencimiento que tenía ante el pueblo sino la
existencia de un ejército propagandista de la fe
católica distribuido en puntos estratégicos del
territorio mexicano, ejemplo de estos se encuentra el
periódico El Correo de Chihuahua dirigido por el
limitante católico Silvestre Terrazas.
ANTECEDENTES: PRIMEROS
ENFRENTAMIENTOS
El Correo de Chihuahua se convirtió en un foro de discusión y crítica de
todo tipo hacia el gobierno, lo que provocó el inmediato
encarcelamiento de Terrazas pero aún así apoyó el proyecto de Madero.
Aunque ese apoyo no duró mucho, pues después de la renuncia de Díaz
y la llegada de Madero a la presidencia en agosto de 1911 se constituyó
el Partido Nacional Católico patrocinado por la iglesia teniendo como
objetivos principales la búsqueda de su fuero, su bienestar económico y
social al igual que obtener un tipo de respeto por todos los gobernantes
hacia los derechos de Dios, dejando todas las decisiones en manos del
partido y el poder de designar a sus candidatos.
Los católicos hablaban de una “Ley divina” que
prohibía y castigaba toda rebelión contra las
autoridades designadas pero añadieron “no siempre
lo que es lícito es prudente o conveniente” lo que
suele contradecirse pues ellos solo usaban la religión
como medio para conseguir lo que deseaban.
Con la aplicación de los artículos 3°, 27° y 130°de
la Constitución de 1917 los problemas entre estado-
iglesia y el descontento de la misma se agudizaron,
lo que dio lugar a la Guerra Cristera.
CAUSAS DE LA GUERRA
El Estado choca con la iglesia, en una pelea que será por la
independencia de cada una de estas, así como también, se confrontaran
por el manejo de las masas de gente, los reformas sociales que se
expresan en el artículo 27 y 123 de la constitución, que se pondrían en
práctica en el Estado, a las cuales el clero interpretó como el control del
estado en las masa publicas, así como su debilitamiento.
Todos los católicos sociales y demócratas reclutaban a su
favor, escogen entre los jóvenes de clase media, campesinos, obreros y
al que nacía del sindicalismo industrial. Todo el agudizamiento de
problemas sociales y políticos que acelera la creación de todas estas
organizaciones, fue a finales del porfiriato.
La religión planeaba solucionar los problemas de la patria que pasaban
por unos momentos graves, querían ejercer sus derechos políticos como
ciudadanos, por eso creían necesario colocarse en el terreno en donde
todo debería ser legal.
la nueva Constitución fue más lejos de lo que podía permitirse la iglesia, se
prohibió el culto público, que se llevará a cabo fuera de las dependencias
eclesiásticas, así como la propuesta de que el Estado se metería en la política
religiosa, decidiendo número de iglesias y sacerdotes que había, se le negó el
derecho del voto al clero, se le prohibió tocar asuntos o temas de asuntos
públicos, se mencionó la educación primaria como laica, las corporaciones
religiosas y los cultos se les impedía establecer o dirigir escuelas primarias.
En tanto conflicto librando a lo ancho de una gran extensión geográfica, por lo tanto esta guerra afectó a una variedad de grupos sociales como consecuencia del creciente enfrentamiento entre la Iglesia y el naciente Estado revolucionario en México.
La Constitución de 1917 retomó las ideas anticlericales de los liberales del siglo XIX. En 1926 se reglamentó el artículo 130 y se restringe la actuación de los católicos en la vida pública.
Los obispos, con el respaldo del papa, expresaron su desacuerdo con la Ley Calles, que suspendía el culto público.
La rebelión armada en la entidad estuvo encabezada, entre otros líderes, por José Velasco, que el 1ro de Noviembre de 1926 se levantó en Calvillo. En este movimiento participaron por lo menos dos sacerdotes, algunas religiosas que escondían a los rebeldes algunos hacendados y, sobre todo, grupos de clase media y pueblo que manifestaba su oposición al gobierno. En general en la parte oeste del estado había cristeros, aunque incursionaron en casi toda la entidad y en otros lugares de Zacatecas y Jalisco. Su principal baluarte era la región de Calvillo y Sierra Fría.
GUERRA CRISTERA
En mayo de 1929 Maximino Ávila Camacho fue
recibido en Aguascalientes con un gran
banquete y baile en la hacienda de
Peñuelas, propiedad de Miguel Dosamantes Rul.
Al terminar la lucha los templos fueron
devueltos y el culto reanudado. El nuevo obispo
Jose de Jesus Lopez y Gonzalez, designó a un
grupo de sacerdotes para que recibieran los
edificios, pero pronto volvieron a encontrarse
dificultades con el gobierno.
El clero y varios grupos católicos protestaron
pacíficamente por el nuevo cierre de los
templos y por “la educación sexual y
atea”, mientras que los cristeros
encabezados por José Velasco y Maria
Ramirez volvían a levantarse en armas en
1932, a pesar de que la jerarquía eclesiástica
prohibió a el uso de las armas.
Al llegar Cárdenas a la presidencia el discurso
y las medidas anticlericales no cambiaron. En
Aguascalientes se clausuró el seminario y a
finales de 1935 solo estaban autorizados para
ejercer en todo el estado seis sacerdotes. A
principios de 1935 la mayoría de los templos
se cerró y se hicieron algunas expropiaciones.
Nuevamente la Iglesia protestó y reforzó sus actividades clandestinas. Las
ceremonias religiosas siguieron haciéndose burlando la vigilancia de policías e
inspectores, los seminaristas continuaron recibiendo clases a escondidas y en
algunos lugares la gente se armó para protestar por el cierre de su templo.
Los católicos organizados tuvieron una importante participación en estos
años, sobre todo a través de la Acción Católica Mexicana, que protegía
sacerdotes perseguidos, conseguía casas para celebrar ceremonias
religiosas, fundaba escuela católicas en la clandestinidad, catequizaba a
jóvenes y niños, e impulsaba a grupos de obreros y obreras católicos, con el
propósito de competir con el sindicalismo oficial.
En el campo la situación era más compleja y más difícil, pues el reparto de tierras había
dividido a los católicos. Algunos campesinos que se beneficiaron con la reforma agraria se
opusieron a sacerdotes que amenazaban con excomulgar a todo aquel que aceptara las
tierras de que daba el gobierno.
En cambio, otros campesinos, fieles a sus tradiciones y a los mandatos clericales, reprobaron
el tipo de reparto que estaba impulsando el Estado, tal como sucedió en Calvillo.
Los cristeros de Aguascalientes no se oponían al reparto agrario, sino a la forma y el uso
político que se estaba haciendo del reparto de los campesinos. Sin embargo, la lucha tendió
a decrecer paulatinamente hasta extinguirse. En agosto de 1935 José Velasco y Plácido Nieto
fueron asesinados en plena centro de la ciudad y para 1936 prácticamente el movimiento
cristero había sido eliminado en la entidad.
Para resistir al gobierno, en 1937 muchos habitantes del estado se incorporaron al
sinarquismo. La resistencia de los católicos y la tolerancia de los gobiernos de Aguascalientes
permitieron que las medidas anticlericales no se llevarán a la práctica. En 1938, la misma
política del gobierno federal favoreció esta tendencia hacia la moderación.
CONCECUENCIAS
Se Limitó el numero de sacerdotes en algunos estados, y se exigió que estos se registraran ante las autoridades.
Castigo de pena de 1-5 años a los sacerdotes que criticaran las leyes o al gobierno
Se creó la Asociación Católica de la Juventud Mexicana (A.C.J.M)
Creada durante el gobierno de Obregón, esta buscaba el apoyo de los diferentes grupos sociales y de los sectores católicos extranjeros.
Los obispos llegaron a un arreglo con el gobierno en el sentido de reanudar los cultos, calmar a los insurrectos y a cambio el gobierno dejaría de inmiscuirse en los asuntos internos de la Iglesia a la que no se le reconocía de todas formas personalidadajurídica alguna y tampoco se permitió (al menos oficialmente) la existencia de escuelas confesionales.
La guerra cristera trajo como consecuencia la muerte de más personas que durante
la Revolución Mexicana y una profunda división entre la población.
Los líderes formales del catolicismo mexicano, especialmente sus obispos, fueron
obligados a desarrollar estrategias autónomas de organización y financiamiento de
sus actividades.
Este enfrentamiento contribuyó a la conformación de movimiento social y partido
político de distinta orientación ideológica. El más importante de todos fue, durante
la década de los treinta, el sinarquismo, como un movimiento social de base
católica y campesina
Los maestros rurales no participaron en dicho
conflicto, muchos maestros no se retiraron de sus
escuelas y comunidades, a estos les cortaron las
orejas conociéndose a si como “maestros
desorejados”, en los peores casos, los profesores
fueron torturados y asesinados por los cristeros.
Dando un total de 300 maestros asesinados
aproximadamente entre los años de 1935-1939.
Es hasta 1988 cuando el presidente Carlos Salinas
de Gortari reanuda la relación con el Vaticano y se
reforma el artículo 130 de la constitución lo que
marca el inicio de una nueva relación iglesia-estado.
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