cuando se hubieron burlado de él, le quitaron la púrpura, le pusieron sus ropas y le sacan fuera...

Post on 24-Jan-2016

220 Views

Category:

Documents

0 Downloads

Preview:

Click to see full reader

TRANSCRIPT

Cuando se hubieron burlado de él, le quitaron la púrpura, le pusieron sus ropas y le sacan fuera para crucificarle.

Y él cargando con su cruz, salió hacia el lugar llamado Calvario, que en hebreo se llama Gólgota.

El camino hacia el Calvario: Simón de Cirene Mt 27,31-32; Mc 15,20-22; Lc 23,26; Jn 19,17

Cuando le llevaban obligaron a uno que pasaba, a Simón de Cirene, que volvía del campo, el padre de Alejandro y de Rufo, y le cargaron

la cruz para que la llevará detrás de Jesús.

Lo seguían muchos del pueblo y un buen número de mujeres, que se lamentaban por él. Pero Jesús, les dijo que no lloren por él sino más bien

por ellas y por sus hijos porque si así tratan a él que era leña verde ¿cómo trataran a los demás?

Llanto de las mujeres Lc 23,27-31

Le conducen al lugar del Gólgota, que quiere decir: Calvario.Le daban vino con hiel, pero él no lo tomó y le crucificaron.

Crucifixión de Jesús Mt 27,33-34; Mc 15,23-25; Lc 23,33; Jn 19,18

Lo colocaron junto a dos malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda. Y se cumplió la Escritura que dice:

«Y con los malhechores fue contado».

Crucifixión de los dos ladrones Mt 27,38; Mc 15,27-28; Lc 23,32

Jn,19,19 Pilato redactó una inscripción que decía: "Jesús el Nazareno, rey de los judíos",

y la hizo poner sobre la cruz.

20 Muchos judíos leyeron esta inscripción, porque el lugar donde Jesús fue crucificado quedaba cerca de la ciudad y la inscripción estaba en hebreo, latín y

griego.

21 Los sumos sacerdotes de los judíos dijeron a Pilato: «No escribas: «"El rey de los judíos" sino: Este ha dicho: "Yo soy el rey de los judíos"». 22 Pilato respondió:

«Lo escrito, escrito está».

Inscripción sobre la cruz Mt 27,37; Mc 15,26; Lc 23,38; Jn 19,19-22

Jesús decía: «Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen.»

Primera palabra: "Padre, perdónalos..."Jn 19,23-34

Una vez que le crucificaron, se repartieron sus vestidos, echando a suertes.

Y se quedaron sentados allí para custodiarle

Sorteo de las vestiduras Mt 27,35-36; Mc 15,24; Lc 23,34; Jn 19,23-24

Y los que pasaban por allí le insultaban. Igualmente los sumos sacerdotes se burlaban entre ellos

junto con los escribas.

Injurias a Jesús crucificado Mt 27,39-44; Mc 15,29-32; Lc 23,35-37

39 Uno de los crucificados lo insultaba, diciendo: «¿No eres tú el Mesías? Sálvate a ti mismo y a nosotros». 40 Pero el otro lo increpaba: «¿No tienes temor de Dios, tú que sufres la misma pena que él?

El buen ladrón Lc 23,39-43

42 Y decía: «Jesús, acuérdate de mí cuando vengas a establecer tu Reino».

43 El le respondió: «Yo te aseguro que hoy estarás conmigo en el Paraíso».

Segunda palabra: "Hoy estarás conmigo en el paraíso..."Lc 23,39-43

Jesús, viendo a su madre y junto a Juan le dijo: «Mujer, ahí tienes a tu hijo.»

Luego dice al discípulo: «Ahí tienes a tu madre.» Y desde aquella hora el discípulo la acogió en su casa.

Tercera palabra: "Mujer, ese es tu hijo..."Jn 19,25-27

Era ya cerca de la hora sexta cuando, al eclipsarse el sol, hubo oscuridad sobre toda la tierra hasta la hora nona.

Oscuridad sobre toda la Tierra Mt 27,45; Mc 15,33; Lc 23,44

"A la hora nona gritó Jesús con fuerte voz: «Eloí, Eloí, ¿lema sabactaní?», - que quiere decir –

«¡Dios mío, Dios mío! ¿por qué me has abandonado?»

Cuarta palabra: "¿Por qúe me has abandonado...?" Mt 27,46-47; Mc 15,34-35

Después de esto, sabiendo Jesús que ya todo estaba cumplido, para que se cumpliera la Escritura, dice: «Tengo sed.»

Le acercaron una esponja empapada en vinagre.

Quinta palabra: "Tengo sed..."Mt 27,48-49; Mc 15,36; Jn 19,28-29

Cuando tomó Jesús el vinagre, dijo: «Todo está cumplido.»

Sexta palabra: "Consumado"Jn 19,30

Jesús, dando un fuerte grito, dijo: «Padre, en tus manos pongo mi espíritu» y, dicho esto, expiró.

Séptima palabra: "Padre, en tus manos..."Mt 27,50 Mc 15,37 Lc 23,46 Jn 19,30

Fenómenos después de la muerte Mt 27,51-54 Mc 15,38-39 Lc 23,45.47-48

Y el velo del Santuario se rasgó en dos, de arriba abajo.

Al ver el centurión, que estaba frente a él, que había expirado de esa manera, dijo:

«Verdaderamente este hombre era Hijo de Dios.»

Había también unas mujeres mirando desde lejos, entre ellas, María Magdalena,

María la madre de Santiago el menor y de Joset, y Salomé,que le seguían y le servían cuando estaba en Galilea, y otras muchas que habían subido con él a Jerusalén.

Las mujeres y los parientes Mt 27,55-56; Mc 15,40-41; Lc 23,49

Los judíos pidieron a Pilato que hiciera quebrar las piernas para que no quedaran en la cruz durante el sábado de Pascua. Los soldados cuando

llegaron a Jesús, al ver que ya estaba muerto, no le quebró pero le atravesó el costado con

la lanza, y en seguida brotó sangre y agua.

La herida del costado Jn 19,31-37

Descendimiento y sepulturaMt 27, 57-61; ;c 15, 42-47; Lc 23, 50-55; Jn 19, 38-42

Después de esto, José de Arimatea, que era discípulo de Jesús –pero secretamente,

por temor a los judíos– pidió autorización a Pilato para retirar el cuerpo de Jesús.

Pilato se la concedió, y él fue a retirarlo.

Fue también Nicodemo, el mismo que anteriormente había ido a verlo de noche,

y trajo una mezcla de mirra y áloe, que pesaba unos treinta kilos.

Tomaron el cuerpo de Jesús y lo envolvieron en vendas con los aromas, conforme a la costumbre judía de sepultar.

Sepultura de Jesús Mt 27,57-61; Mc 15,42-47; Lc 23,50-56; Jn 19,38-42

En el lugar donde lo crucificaron había una huerta y en ella, una tumba nueva, en la que todavía nadie había sido sepultado.

62 A la mañana siguiente, es decir, después del día de la Preparación, los sumos sacerdotes y los fariseos se reunieron y se presentaron ante

Pilato, 63 diciéndole: «Señor, nosotros nos hemos acordado de que ese impostor,

cuando aún vivía, dijo: «A los tres días resucitaré».

La guardia en el sepulcro Mt 27,62-66

65 Pilato les respondió: «Ahí tienen la guardia, vayan y aseguren la vigilancia como lo crean conveniente». 66 Ellos fueron y aseguraron la

vigilancia del sepulcro, sellando la piedra y dejando allí la guardia.

Señor Jesús, guárdanos en la herida de tu costado abierto por amor a los hombres, aún por los que te entregaron y crucificaron.

Enséñame a amar como tú desde la misericordia y el perdón

para obtener tu perdón y misericordia

cuando llegue mi hora.

Amén

Oración

Los archivos del mes puedes descargarlos en:http://siembraconmigo.blogspot.com/

Si deseas recibir archivos sobre Educación Católica para Niñosenvía un correo sin asunto y sin texto a:

semillitas-de-siembra+subscribe@googlegroups.com

Servicio Gratuito con Fines Educativos

top related