curso vi lectura 1. transicion agroecológica
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Desde el punto de vista legal y comercial, la duracin del perodo de transicin para que una parcela
dada sea considerada en produccin ecolgica se establece de forma arbitraria, considerndose en
general entre uno y tres aos, en funcin sobre todo del manejo anterior de la finca. La razn
principal es la existencia de sustancias qumicas residuales, asociadas a tcnicas convencionales de
produccin, que pueden estar presentes en los alimentos de cosechas posteriores a la suspensin de
su empleo. Por tanto, se trata de garantizar al consumidor la completa ausencia de residuos de
productos qumicos de sntesis en los alimentos.
Sin embargo, desde el punto de vista ecolgico el proceso de conversin es definido como el plazo
de tiempo durante el cual el ecosistema del suelo se ajusta a un nuevo balance en sus componentes
biticos y abiticos (Culik, 1983). Se considera el suelo por estar menos expuesto a la influencia de
las prcticas de fincas colindantes que el agua y el aire y por su mayor capacidad de tamponamiento.
La duracin del perodo de transicin es, desde este punto de vista, notablemente mayor, pues, como
demuestra Maire et al. (1990), hay parmetros biolgico edficos, como el ATP, que no quedan
estabilizados hasta veinte aos despus de iniciarse la transicin hacia agricultura ecolgica.
Evidentemente, el manejo anterior de la finca, las condiciones agroclimticas, la estrategia de
conversin, etc. van a modificar este plazo.
ESTIMULOS Y BARRERAS PARA INICIAR LA TRANSICION
Las barreras para iniciar el proceso de transicin son, segn distintos autores, las siguientes
(MacRae et al., 1990; Boisdon et al., 1997; Alonso Mielgo et al., 1998)):
1. Carencia de informacin sobre la existencia de este modo alternativo de produccin, y su
propuesta tcnica. As, en las comarcas andaluzas de Antequera y Estepa, el 53% de los
agricultores encuestados no haban odo nunca hablar de Agricultura Ecolgica, y del 47%
restante, la gran mayora (el 89%) posee un concepto errneo, de abandono o no echar nada, lo
cual les lleva a pensar que es inviable. (Alonso Mielgo et al., 1998). Evidentemente modificar
este estado de cosas es previo a cualquier otra consideracin. Por ello, son necesarias acciones
encaminadas a la difusin general y a la formacin terica y prctica de los agricultores.
2. La inexistencia de gabinetes de asesoramiento tcnico pblicos o privados.
3. Escasez de referencias tcnicas adaptadas localmente, lo que es reflejo de la escasa
investigacin existente en el marco de este enfoque.
4. Problemas tcnicos concretos que consideran de difcil solucin dentro de la propuesta
agroecolgica, por ser considerados muy graves o por encontrar que sus recursos se hallan ya
muy degradados. As, en la comarca de Antequera buena parte de los agricultores entrevistados
rechazan la posibilidad de reconvertir sus fincas debido a la gravedad de los daos efectuados por
el gusano de alambre, larvas de coleptero de la familia Elateridae, que causan importantes
daos bajo tierra en cultivos de huerta, especialmente en patata, lo que les lleva de forma
sistemtica a tratar con plaguicidas de alta y media toxicidad, como el lindano (Guzmn Cadado,
1998).
5. Dificultades derivadas del manejo de un mayor nmero de cultivos, tanto a nivel de
produccin, como de almacenamiento, procesado y venta.
6. El agricultor enfrenta el perodo de transicin en soledad, sin agricultores vecinos con los
que compartir el proceso.
7. Dificultades en la comercializacin con la denominacin de calidad de producto ecolgico y,
por consiguiente, en el acceso al precio-premio que habitualmente conlleva, desestimulan a losagricultores con similar orientacin productiva. El sector ganadero ha sufrido especialmente estas
restricciones debido a la severa reglamentacin sanitaria que exige instalaciones muy costosas
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para realizar la manipulacin y/o envasado de los productos ganaderos, fundamentalmente leche
y carne, y la dificultad de encarar estas inversiones dada la dispersin geogrfica de los
productores. Ello ha dificultado la centralizacin de los procesos de acopio, transformacin y/o
envasado y posterior distribucin de la carne, la leche y sus derivados, de procedencia ecolgica.
Por ello, se han visto obligados a vender sus productos en el mercado convencional (en el caso de
la carne incluso con un precio inferior al establecido en este mercado, al no responder a las
caractersticas que exige) o a encarar la transformacin a pequea escala, en el caso de la
produccin lechera. As, Stolze (1997) cita que el 94% de la leche ecolgica producida en el rea
oriental de Alemania durante 1994 era vendida a lecheras al precio convencional, siendo causa
importante de la situacin desfavorable en que se encontraban los predios implicados.
8. Falta de suministradores de insumos orgnicos y/o alto coste de los mismos. De nuevo la
ganadera ecolgica ha sufrido en mayor grado este problema, pues a pesar de que la carga
ganadera suele estar muy ajustada a la produccin de alimentos de la finca, hay ocasiones, por
motivos climatolgicos u otros, en que puede no bastar para mantener el rebao. En estos
momentos ha sido patente la dificultad de encontrar alimentos de procedencia ecolgica a precios
razonables, que les permitan adaptarse a los requerimientos legales para mantener su aval de
produccin ecolgica.
9. Problemas de liquidez econmica durante este perodo en el que es necesario realizar ciertas
inversiones (p.e. en infraestructura ecolgica: setos, etc, maquinaria especfica como
distribuidores de estircol, etc.).
10. Necesidad de realizar inversiones adicionales en su predio en sentido inverso al que se
vieron obligados a realizar en las dcadas anteriores. Esto es especialmente cierto para fincas
muy especializadas, tanto agrcolas como ganaderas. As, los sistemas intensivos de ganadera
deben adaptar sus costosas instalaciones a un manejo ms extensivo, que permita desarrollar a los
animales todos los aspectos de su comportamiento innato; y las fincas agrcolas dedicadas al
monocultivo, ven como la maquinaria e instalaciones especializadas les son insuficientes.
Razones que esgrimen los agricultores para iniciar la conversin agroecolgica de sus predios
Los motivos que impulsan a los agricultores a iniciar la conversin hacia agricultura ecolgica
son de ndole variada, pudiendo agruparse en aquellos de carcter medioambiental, econmico y
social. Entre los primeros cabe destacar la toma de conciencia de los problemas ambientales
provocados por el uso de plaguicidas y fertilizantes qumicos, apareciendo el suelo como el
principal recurso a cuidar; el temor ante el deterioro de la salud humana y la bsqueda de una
mayor calidad de vida tanto para ellos, como para los animales. Entre las razones de tipo
econmico se encuentran el disminuir los costes, captar el precio-premio, acceder a subvenciones
especficas, maximizar el beneficio econmico y generar ms empleo. Por ltimo, dentro de las
razones sociales se encuentran la bsqueda de una mayor autonoma respecto a las
multinacionales que proveen de semillas y plaguicidas y el deseo de una distribucin msequitativa de los recursos entre los pases industrializados y el tercer mundo.
Segn MacRae et al. (1990) si al inicio prim como motor del cambio tecnolgico hacia una
agricultura ecolgica la salud humana y de la naturaleza, en los ltimos aos cada vez son ms
los agricultores que realizan la transformacin por consideraciones meramente econmicas.
ESTRATEGIAS DE TRANSICION
La Agroecologa plantea tres principios bsicos de manejo de los recursos naturales para evitar su
deterioro que son los siguientes: 1. Principio de diversidad. Supone que cada elemento incorporado
al agroecosistema optimiza varias funciones destinadas a frenar procesos de degradacin de los
diferentes recursos naturales implicados, y que cada funcin est cubierta por diversos elementos,generndose relaciones complejas de naturaleza sinrgica. As, por ejemplo, para frenar el proceso
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de degradacin del suelo conocido como erosin, se pueden incorporar diversos elementos al
agroecosistema, ya sean de tipo fsico, como las terrazas; biolgico, como los cultivos en franjas
o las barreras de rboles y arbustos dispuestos en curvas de nivel; qumico, como es la adicin
de materia orgnica al suelo. Todos ellos son elementos que cubren la funcin de evitar la erosin
del suelo. A la vez, cada elemento mencionado tiene otras funciones que contribuyen a frenar
otros procesos degenerativos: las terrazas aumentan la infiltracin de agua, las barreras de rboles
pueden ser fuente de enemigos naturales de las plagas de los cultivos, elevadores de nutrientes
hacia la superficie, etc. Segn Gliessman (1997) la diversidad en un ecosistema presenta diferentes
dimensiones (Tabla 1), pudiendo enriquecerse el agroecosistema en una o varias de ellas. Dentro de
este principio tiene un papel estelar la biodiversidad, pues es un componente o elemento bsico del
agroecosistema que permiten desarrollar mltiples funciones, y subsidiar el funcionamiento del
agroecosistema al proveer de servicios ecolgicos tales como el reciclaje de nutrientes y el control
biolgico de plagas. Desde este punto de vista la Agroecologa explota las complementaridades y
sinergismos que surgen al combinar cultivos, rboles y animales en diferentes arreglos espaciales y
temporales (Altieri, 1995: 158-159).
Tabla 1. Dimensiones de la diversidad ecolgica en un ecosistema (Gliessmann, 1997).
Dimensin Descripcin
Especies Nmero de diferentes especies del sistema
Gentica Grado de variabilidad de la informacin gentica del sistema (dentro de cada especiey entre diferentes especies)
Vertical Nmero de diferentes capas horizontales o niveles en el sistema
Horizontal Patrones de distribucin espacial de organismos en el sistema
Estructural Nmero de localizaciones (nichos, roles trficos) en la organizacin del sistema
Funcional Complejidad de la interaccin, flujo de energa, y ciclo de materia entre loscomponentes del sistema
Temporal Grado de heterogeneidad de los cambios cclicos (diario, estacional,...) en el sistema
2. Principio de reciclaje de materia y energa. La Agroecologa propone el uso de energaslimpias y renovables y el reacomodo de los materiales deteriorados en el proceso productivo al
interior del agroecosistema, a travs de su incorporacin a los ciclos biolgicos. Por tanto, no sondescargados a la biosfera en forma de residuos como ocurre en la agricultura industrializada.
3. Principio de control biolgico natural. Surge como consecuencia de los dos anteriores, al serfavorecidos los mecanismos de regulacin existentes de control de plagas y enfermedades en la
naturaleza, a travs de tres mecanismos fundamentales: 1. La intervencin indirecta del hombre
construyendo una infraestructura ecolgica basada en el manejo de la biodiversidad (Altieri,
1992); 2. Una alta actividad biolgica del suelo ligada tanto a la biodiversidad, como al reciclaje,
lo que permite el desarrollo de suelos con capacidad supresiva de plagas y enfermedades (Baker
et al., 1974; Lumsden et al., 1990); 3. La mayor resistencia de las plantas al ataque de plagas y
enfermedades, motivada fundamentalmente por una alimentacin equilibrada, obtenida a travs del
reciclaje de materia orgnica y del abandono de los plaguicidas (Chaboussou, 1987).
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Dado que buena parte de los predios de los pases industrializados y de aquellas reas del Tercer
Mundo donde la Revolucin Verde tuvo mayor implantacin practican una agricultura muy
especializada, de monocultivo, con gran dependencia de insumos de alto coste energtico, no
producidos localmente, la transicin hacia un manejo agroecolgico implica fuertes cambios.
Segn Altieri (1995) este proceso de conversin de agricultura industrializada a agricultura
ecolgica debe constar de cuatro fases para ser menos traumtico (Fig. 1). Este modelo implica la
introduccin paulatina de biodiversidad a la par que supone inicialmente la eliminacin y
racionalizacin del uso de agroqumicos, su posterior sustitucin por otros insumos ms blandos o
naturales, tales como insecticidas botnicos, lucha biolgica, etc.; y por ltimo, la total
eliminacin de los mismos. Aunque se trata de un esquema racional, por diversas causas es, a
menudo, relegado. Por una parte, en numerosas ocasiones los agroqumicos son abandonados de
forma brusca, ante la exigencia de las certificadoras de no utilizarlos para comenzar a recibir la
denominacin de en reconversin, lo que supone acortar el perodo de tiempo sin obtener un
sobreprecio en funcin de la mayor calidad de sus productos. Por otra parte, en ocasiones el
proceso de conversin se detiene en la fase de sustitucin de insumos, sin llegar a materializarse el
rediseo del sistema, ni completarse el aumento de diversidad. Esto est motivado frecuentemente
por razones de orden econmico. El incremento de cultivos dentro de la alternativa, o el paso delmonocultivo a la implantacin de policultivos choca con el desconocimiento del manejo que
requieren y el riesgo consiguiente, con la necesidad de hacer modificaciones en la maquinaria o las
instalaciones, o con la disminucin de la superficie dedicada a los cultivos ms rentables. La
introduccin de la ganadera en fincas agrcolas es a menudo desestimada tanto por las inversiones
que conlleva, como por el aumento de la dedicacin que exigira. La implantacin de setos con
especies leosas rodeando las explotaciones y/o las distintas parcelas supone una importante
inversin en un momento de cierta incertidumbre, cuando son necesarios, otros desembolsos. Por
ello, es importante que las polticas pblicas consideren, si quieren favorecer la implantacin de un
modelo agrcola menos perjudicial desde el punto de vista ambiental, el apoyo financiero durante
el perodo de transicin y, fundamentalmente, el establecimiento de ciertas prcticas, como la
creacin de setos, cubiertas vegetales, etc. que permitan completar la transicin agroecolgica.
CONSECUENCIAS A NIVEL PREDIAL DE LA CONVERSIN A AGRICULTURAECOLOGICA
Consecuencias agronmicas
1. Incremento en el nmero de especies cultivadas por el establecimiento de rotaciones ms
largas, implantacin de policultivos, cultivos de cobertura, etc. Esta introduccin de cultivos es
en muchos casos paulatina ante el reto que supone para el agricultor especializado el manejo de
nuevos cultivos.
2. Aumento de las malezas en la biomasa total y modificacin del complejo de malezas existente.
El incremento de malezas perennes tales como Cirsium arvense, Sonchus arvensis o Rumex sp.est considerado como uno de los principales problemas que aparecen durante la transicin a
agricultura ecolgica en zonas templadas, posiblemente asociado a la eliminacin del arado de
vertedera y a su dispersin por las labores superficiales (Patriquin et al., 1986; Weller et al.,
1997; Fragstein, 1997 y David, 1997). En sistemas hortcolas de regado del rea mediterrnea,
Daz del Caizo (1996) documenta que las especies de malezas ms agresivas tras tres aos de
transicin a agricultura ecolgica pertenecen al gnero Amaranthus en verano; muy competitiva
por tener el mecanismo fotosinttico C4. Lanini et al. (1994) muestran mediante un ensayo de
cuatro aos comparativo de manejo convencional, de bajos insumos y ecolgico en California un
incremento de Echinochloa crus-galli y Portulaca oleracea en el sistema ecolgico y de bajos
insumos, mientras que con manejo convencional prevalecieron Convolvulus arvensis, Solanum
sp. y Sonchus oleraceus, debido a su tolerancia a los herbicidas utilizados. El manejo no qumico
de las malezas en los sistemas ecolgicos es para muchos investigadores y agricultores uno de los
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principales elementos a investigar y mejorar durante la transicin (Temple et al., 1994, Guzmn
Casado, 1998)
3. Disminucin de las enfermedades y plagas en la produccin vegetal. Como expusimos
anteriormente, el abandono del uso de fitosanitarios, la introduccin de biodiversidad y el uso de
fertilizantes orgnicos contribuyen a una disminucin de la incidencia de enfermedades y plagas
insectiles. No obstante, cuando aparece algn problema, la lucha biolgica, el uso de trampas y/o
el empleo de sustancias de origen vegetal (ej. piretrinas naturales provenientes de
Chrysanthemum cinerariaefolium como insecticida, infusin de ajo ( Allium sativum) como
insecticida, bactericida, fungicida y repelente, etc.) suelen ser suficientes para lograr el control de
los daos hasta niveles aceptables.
4. Modificaciones en el suelo. Durante el proceso de conversin estn descritos los siguientes
cambios en cuanto a parmetros fsicos, qumicos y biolgicos en el suelo:
4.1. Modificacin del pH. Al final del perodo de conversin a agricultura ecolgica ha sido
documentado formalmente en la literatura un incremento del pH del suelo, as como de los
cationes Ca++ y Mg++ intercambiables. Las observaciones han sido realizadas en fincas quepartan de suelo cidos (Pfeiffer, 1948, Patriquin et al., 1986, Labrador Moreno, 1993,
Andrews et al., 1990) o neutros (Scow et al., 1994) lo cual les permite mejorar la capacidad
de uso. Sin embargo, otros autores no encontraron diferencias significativas o hubo una
tendencia a la baja, aunque partan igualmente de suelos cidos (Maire et al., 1990), neutros
(Weller et al., 1997) o bsicos (Guzmn Casado et al., ).
4.2. Disminucin de la salinidad. Maire et al. (1990) comparando los parmetros fsico-
qumicos y biolgicos de suelos agrcolas en sesenta fincas con manejo ecolgico durante
diez ms aos, con fincas convencionales observa que los niveles de elementos solubles en
la disolucin del suelo son mucho ms bajos en las primeras. Ello se traduce en unos niveles
de salinidad menores, denotando la manifiesta influencia de la desaparicin de la fertilizacin
mineral. No obstante, en zonas ridas la escasa calidad del agua de riego, el mal drenaje, lastcnicas de ahorro de agua empleadas en los regados y la escasez de lluvias que no permiten
lavar el perfil del suelo, confieren un alto riesgo de salinizacin del suelo, que no se ve
contrarrestado por este abandono del uso de fertilizantes qumicos, como lo demuestra la
experiencia de transicin realizada en la finca El Romeral al final de este captulo.
4.3. Fenmenos de fitotoxicidad. Patriquin et al. (1986) achacan a problemas de
fitotoxicidad los malos resultados obtenidos durante el proceso de conversin a agricultura
ecolgica de cultivos como el centeno y el maz debido a la descomposicin de los restos
de las leguminosas que les precedan (habas y trbol, respectivamente). La sntomas de
fitotoxicidad incluyen la inhibicin de la germinacin, atrofiamientos, marchitez y muerte
de las plantas. Los efectos estn causados en algunos casos por constituyentes originales de
residuos de plantas, pero ms comnmente parece que se debe a la acumulacin temporalde cidos orgnicos, como el actico, resultantes del metabolismo microbiano de
polisacridos en las fases ms tempranas de la descomposicin bajo condiciones de
inundacin o en microzonas anaerbicas. La aireacin de suelo, que permite mejorar el
drenaje y aumentar la temperatura; as como la adicin de estircol, que activa la
descomposicin de los residuos por los microorganismos alivian este problema.
4.4. Mejora de las propiedades fsicas del suelo.
4.5. Incremento y modificacin de la vida del suelo. La transicin de agricultura
industrializada a ecolgica estimula la poblacin y actividad de los organismos que habitan
en el suelo, a la vez que promueve un cambio en su composicin, como ya se sealaba en
el captulo dedicado al suelo. As, Sivapalan et al. (1993) en el experimento realizado endos fincas, una de ellas en transicin a agricultura ecolgica y la otra con manejo
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primavera. Sin embargo, en numerosas ocasiones aparece deficiencia de N durante todo o
parte del ciclo de los cultivos ecolgicos durante la transicin. Es necesario una mayor
investigacin para relacionar la fertilidad con los parmetros biolgicos, para entender la
dinmica de nutrientes en el suelo en estos sistemas y poder desarrollar nuevos mtodos
para asesorar la fertilizacin orgnica (Scow et al., 1994; Alvrez et al., 1997).
Varias experiencias de transicin recogen como resultado el aumento en la disponibilidad
de fsforo. Ello es debido a la adicin de materia orgnica y, a veces, de roca fosfrica, a la
rotacin de cultivos con distintas necesidades y al uso de abonos verdes especialmente
efectivos en la extraccin de este elemento. El experimento sobre rotaciones con distinta
intensidad de manejo realizado por la Universidad de Nebraska muestra que tras tres aos
la cantidad de P disponible en el suelo con manejo ecolgico ya era significativamente
superior a cualquier otro tratamiento. Tras once aos la diferencia era abismal: 96 ppm el
tratamiento ecolgico frente a 22 ppm el tratamiento convencional ms favorable
(Andrews et al., 1990). Tambin Altieri et al. (1995b) muestran el notable incremento de P
disponible en suelos marginales de las Islas Chilo (Chile) tras 4 aos de transicin (de 3 a
17 ppm), nivel que la rotacin establecida de cultivos y pastos es capaz de mantener.
5. Disminucin de la carga ganadera. El manejo agroecolgico del ganado trata de ajustar el
nmero de animales a la capacidad de la finca para producir alimentos. Esto significa,
habitualmente, la necesidad de reducir la carga ganadera y, a veces, la introduccin de especies o
razas con diferentes hbitos alimenticios para aprovechar al mximo todos los recursos.
Paralelamente, tiene como consecuencia la disminucin del consumo de concentrados por el
ganado y el aumento del pastoreo, lo que conlleva una disminucin importante de los costes de
alimentacin como se aprecia en la Figura 2 que recoge la experiencia de una finca francesa de
ovino con 55 ha. manejada en produccin ecolgica (Bouilhol et al., 1997).
6. Aumento en la superficie dedicada a la alimentacin del ganado. Se incrementa debido a la
pequea o nula importacin de alimentos desde el exterior y a la menor productividad de los
pastizales en esta etapa. As, Weller et al. (1997) seala que la produccin de pasto cay, comomedia de once fincas en Gran Bretaa, un 15% durante el primer ao de transicin, llegando al
93% de los valores de pre-conversin al tercer ao.
7. Cambios en la composicin de la pradera. Generalmente, hay un aumento del contenido de
leguminosas por el abandono del fertilizante qumico nitrogenado. Weller et al. (1997) seala, en
el estudio mencionado, un incremento en el contenido de trbol en el pasto del 14,9% al 33,7%
tras tres aos de transicin.
8. Sustitucin de las razas superproductoras por aquellas ms rsticas, con mayor adaptacin a
las condiciones locales y resistencia a las enfermedades. Esto, unido a la mejor calidad de vida
que se ofrece al ganado en estos sistemas, contribuye a que los animales presenten una mejor
situacin sanitaria.
9. Disminucin inicial de rendimientos que se recuperan al final de este perodo (efecto
transicin). Existen hoy abundantes datos sobre el comportamiento del rendimiento de diversos
cultivos durante el perodo de transicin. Parte de ellos provienen de ensayos de investigacin
con repeticiones usando como testigo el manejo convencional. Otros datos han sido recogidos por
los investigadores de las experiencias de conversin de fincas manejadas por los agricultores.
Generalmente, se acepta que durante el perodo de transicin hay una cada del rendimiento
motivada por el abandono del uso de los insumos qumicos, y la lenta recuperacin del
agroecosistema, hasta alcanzar un nuevo equilibrio en los ciclos biolgicos que va acompaado
de una elevacin de los rendimientos. Como demuestra Dabbert (1994) el tiempo bajo manejo
ecolgico es uno de los muchos factores que explican la diferencia de rendimientos entre fincas
ecolgicas. Sin embargo, como muestra la Tabla 2, la situacin de partida del agroecosistema, las
exigencias del cultivo y la idoneidad del nuevo manejo son determinantes en el comportamiento
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de este parmetro durante la transicin. En la experiencia de Andrews et al. (1990) se observa
que la produccin ecolgica de maz necesita varios aos para recuperarse, mientras que los
rendimientos de la avena, un cultivo ms rstico, son iguales o superiores a los convencionales
desde el inicio. En el caso de la manzana los rendimientos ecolgicos son de nuevo superiores o
iguales a los convencionales durante los primeros tres aos de transicin. Las excelentes
condiciones microclimticas, que impiden el desarrollo de ciertas plagas y enfermedades
contribuyen a ello (Swezey et al., 1994). Por ltimo, en la experiencia desarrollada por Meco et
al. (1998) se pone de manifiesto la importancia del precedente cultural en el rendimiento, siendo
ms favorable el precedente del girasol que da lugar a producciones por hectrea iguales o
mayores a las obtenidas en monocultivo de cebada con herbicida y fertilizante. No obstante, dado
que el contenido en agua de los alimentos convencionales suele ser superior al de los alimentos
obtenidos de forma ecolgica diversos autores prefieren calcular el rendimiento en unidades
referidas a materia seca o energa, para establecer comparaciones reales.
Tabla 2. Rendimientos (Tm/ha) de diferentes cultivos durante la etapa de transicin a agricultura
ecolgica y con manejo convencional.Elaboracin propia.
Swezey et al.,1994
Andrews et al,.1992
Andrews et al,.1992
Andrews et al.,1992
Meco et al.,1998
Manzano Maz Soja Avena Cebada
Rdto.ecol.
Rdto.conv.
Rdto.ecol.
Rdto.conv.
Rdtoecol.
Rdtoconv.
Rdtoecol.
Rdtoconv.
Rdto.ecol.
Rdto.ecol.
Rdto.conv
Ao 1 54,6* 41,3 2,7 3,45 0,87 0,94 1,90 1,94 0,48 0,331 0,199
Ao 2 36,3 33,4 0,88 2,07* 2,35 2,96 0,82 0,82 3,135 3,092 2,831
Ao 3 45,2* 35,6 8,34 8,78 1,61 2,02* 0,22 0,29 0,856* 0,25 0,148
Ao 4 1,69 2,45* 1,61 1,75 2,69* 2,22 2,917 2,684 2,417
Ao 5 4,83 4,52 2,69 2,76 - - 1,849 1,589 1,399
Ao 6 6,09 7,53* 3,29 3,49 1,58 1,58
Ao 7 5,83 6,65* 2,82 3,29* 2,54 2,29
Ao 8 2,89 3,26 1,68 2,82* 1,90 2,22
Ao 9 3,95 3,89 1,08 1,41 2,40 2,44
Ao 10 7,34 7,03 2,62 2,62 3,73* 3,19
Ao 11 6,4 7,15 2,89 3,02 4,05* 3,62
Ao 12 5,58 5,52 2,49 2,62 2,97 2,72
Las cifras acompaadas con el smbolo * son mayores significativamente que aquellas a las que se compara. La
cebada rota con girasol. La cebada es rotada con veza para forraje.
Consecuencias econmicas.
En trminos generales se puede concluir que durante el proceso de conversin a agricultura
ecolgica, desde la agricultura industrializada, se produce:
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1. Disminucin de los costes variables. Cuando la estrategia de transicin ha conllevado un
aumento de la diversidad y del reciclaje, se produce una cada de los costes variables debido al
mayor aprovechamiento de los recursos prediales y al menor uso de insumos externos,
fundamentalmente plaguicidas y fertilizantes (Tabla 3). Aunque esto es as en trminos generales,
puede ocurrir lo contrario si bsicamente la conversin ha consistido en una sustitucin de
insumos, ya que el precio de los productos orgnicos permitidos por las certificadoras suele ser
mayor al de los insumos qumicos convencionales.
2. Incremento de la mano de obra empleada. La conversin a agricultura ecolgica requiere
dedicar ms horas al manejo de la finca, lo que se traduce en un aumento del coste debido al
empleo de mano de obra. Al final de la transicin, una vez ajustado el nuevo modelo, puede
haber una disminucin del trabajo necesario, pero suele mantenerse por encima del nivel de
empleo generado con el manejo convencional en un 10-25% (Padel et al., 1994).
3. Aumento de los costes fijos. Este incremento es debido fundamentalmente al mayor empleo de
mano de obra, al coste de certificacin y a la depreciacin relacionada con la inversiones
realizadas durante la transicin (Padel et al., 1994).
4. Incremento de los precios obtenidos por el agricultor. Durante el plazo legal de conversin
predial (de uno a tres aos) los agricultores no pueden vender sus productos con aval de garanta
ecolgico. No obstante, dado que en muchas ocasiones la demanda excede a la oferta, el aval
intermedio de reconversin es suficiente para obtener muy buenos precios en los mercados
especficos de estos productos, sobre todo si se trata de cultivos que, como la fresa, son asociados
por el consumidor a un uso intensivo de productos qumicos de sntesis. En la Tabla 3 se observa
que el sobreprecio de este producto alcanza el 150% del establecido para el producto
convencional durante el primer ao de transicin.
5. Posible descenso de los ingresos debido a la cada del rendimiento comercial al inicio de la
conversin. Gliessman et al., (1990) en un ensayo en California muestra que el fruto de fresa
comercializable para el mercado en fresco fue del 61% en parcelas en el primer ao de transicinrespecto a las convencionales. Los menores costes de la produccin ecolgica (93,3% del coste
de la produccin convencional) no bastan para compensar las prdidas de ingresos debidas a la
menor produccin obtenida (Tabla 3). Para paliar esta posible cada de ingresos durante el
perodo de transicin, los pases de la Unin Europea cuentan, desde 199...., con la posibilidad de
establecer ayudas a los agricultores que deseen la transformacin de sus predios (........).
6. Incremento del margen neto al concluir la etapa de transicin. La recuperacin del
rendimiento, el aumento del precio recibido y la cada de los costes variables da lugar a un
incremento de los mrgenes obtenidos por el agricultor. No obstante, como se aprecia en la Tabla
3 esta situacin es muy variable, no slo por cultivo sino tambin por el tamao de finca (Zanoli
et al., 1998) y el nivel de intensificacin (Baars et al, 1997).
7. Realizacin de inversiones. Como veamos en el epgrafe anterior, la diversificacin y el
cambio de tcnicas de manejo suele aparejar la necesidad de dedicar capital a la compra o alquiler
de maquinaria e instalaciones, fundamentalmente. Cuando el cambio de modelo productivo va
acompaado de un mayor procesamiento de los alimentos dentro de la finca, como est
ocurriendo en numerosas ocasiones, esta necesidad de invertir aumenta.
Tabla 3. Resultados econmicos comparativos de diversas experiencias de produccin ecolgica
versus produccin convencional. Elaboracin propia.
(Ecolgico/Convencional)100
Sweezey et al.(1994) #
Zanoli etal. (1997)
Haniotakis(1997)
Baars et al.,(1997)
Gliessman etal. (1990)
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Manzana Cultivosanuales
Olivar Vacuno deleche
Fresa
Precio/Unidad de producto 100 133,3 121,1 150
Ingresos brutos/Unidad de rea 132 170 92 92,8
Costes variables/Unidad de rea 62 99,5
Coste de trabajo/Unidad de rea 109,5 120 105-110 115,3
Costes fijos/Unidad de rea 174 126
Coste total/Unidad de rea 113 120,5 116 93,3
Margen bruto/Unidad de rea 115 133,3
Margen neto/Unidad de rea 235 1424 84 115,5 91
Entre los autores puede haber variacin respecto al mtodo de clculo de las diferentes partidas. # Datos procedentes de
ensayo en California. Resultados de 28 predios de la regin central italiana. Los datos se refieren a Grecia. Datos
referidos a predios holandeses. Datos procedentes de ensayo en California. Primer ao de transicin sin acceso a
sobreprecio. primer ao de transicin con acceso a sobreprecio.Datos establecidos por Kg de leche producido.
PLANIFICACION Y EVALUACION DEL PROCESO DE TRANSICIONAGROECOLOGICA
La planificacin implica conocer exactamente la situacin de partida de la finca y del entorno
para establecer los cambios pertinentes en el manejo de los recursos, en la estrategia productiva y
de mercado, previendo los posibles problemas, y adelantando soluciones. Supone definir una
situacin objetivo y temporalizar su consecucin, a la vez que disponer de mecanismos deretroalimentacin que permitan modificar el plan, si ello es necesario. En la planificacin deben
quedar involucrados los gestores del predio, lo que puede facilitarse mediante el uso de
metodologas que promuevan su participacin, tales como la Investigacin Accin Participativa o
el Diseo Participativo de Tecnologas (ver Cap.....). Los pasos a seguir durante la fase de
planificacin podran ser los siguientes:
1. Captacin de informacin sobre agricultura ecolgica en general, y sobre el proceso deconversin en particular.
Esta bsqueda es conveniente realizarla a dos niveles. Por un lado, las publicaciones cientficas
especializadas en agricultura ecolgica aportan informacin sobre numerosas experiencias de
investigacin en procesos de transicin en muy diferentes condiciones ecolgicas ysocioeconmicas que arrojan luz sobre las posibles barreras, cuellos de botella, consecuencias
positivas y negativas que son, en ocasiones, sorpresivamente coincidentes. En el otro extremo,
pero ms necesario, si cabe, conviene conocer de cerca experiencias ya realizadas localmente, a
travs de visitas a fincas e industrias de productos ecolgicos, mediante entrevistas a tcnicos
competentes en el tema, organismos de control, asistencia a jornadas, etc.. Tambin se pueden
realizar experiencias previas en parcelas pequeas, pero como seala Lampkin (1990) esta
estrategia presenta los inconvenientes de que muchos de los procesos biolgicos que son
necesarios para el funcionamiento del sistema agroecolgico pueden fallar a tan pequea escala;
no permite ajustar las tcnicas de manejo y el uso de la maquinaria; y, adems, observar los
efectos lleva varios aos de dedicacin, lo que acaba siendo desestimulador para el agricultor.
2. Anlisis de la situacin inicial de la finca.
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Para alcanzar este objetivo se pueden utilizar las siguientes herramientas:
2.a. Inventario de la finca. Dado que la agroecologa pretende maximizar el uso de los
recursos internos, minimizando la entrada de insumos desde el exterior, conocer cuales son
los recursos naturales y humanos disponibles en el predio es muy til. La importancia de la
participacin del agricultor en esta tarea es obvia. El Cuadro 1 recoge los componentes
clave que, segn MacRae et al. (1990), debe contener este inventario predial. Algunos de
ellos como los residuos txicos acumulados en el suelo son difciles de evaluar de forma
directa, pues su deteccin es cara y no siempre fcil, ya que pueden permanecer en un
grado intermedio de degradacin; sin embargo, puede ser sustituido por el historial de
tratamientos efectuados por el agricultor. Como indicadores de la actividad biolgica del
suelo puede emplearse la actividad enzimtica o respiratoria de los microorganismos, en
cuyo caso hay que acudir al laboratorio, o lo que es ms barato, al uso de trampas pasivas
de artrpodos de suelo o a la estimacin de la poblacin de lombrices a travs de mtodos
sencillos como el de Raw (1959). En fincas en la que la ganadera no se halla inicialmente
integrada, el inventario de las fuentes de materia orgnica potencialmente utilizables
(abonos verdes, estircol, residuos de cultivos, etc.) es bsica.
El cambio de agricultura industrializada a agricultura ecolgica supone una modificacin
importante en las condiciones de crecimiento de los cultivos y del ganado, para las que
pueden estar ms adaptadas las variedades locales y razas ms rsticas. La disponibilidad
de stas, sus caractersticas productivas y la aceptacin por el mercado al que van a ir
dirigidas deben ser evaluadas previamente. El historial de cultivo y del ganado de la finca,
as como de las plagas (insectos, malezas, etc.) y enfermedades ms habituales es bsico a
la hora de establecer una nueva rotacin y el plan de manejo de los cultivos y del rebao.
El manejo en las fincas ecolgicas requiere optimizar el tratamiento del estircol para
evitar la prdida de nutrientes y disminuir posibles impactos negativos (quema de
plntulas, aporte de semillas viables de malezas, presencia de organismos causantes de
enfermedades, contaminacin de acuferos) que puede acarrear si se encuentra malcompostado. Esto unido a la necesidad de realizar una eficaz distribucin en el campo
puede llevar aparejada la necesidad de inversiones fundamentalmente en maquinaria, si no
est presente en el predio. Otro tipo de maquinaria (desbrozadoras, picadoras de residuos
de poda, etc.) puede ser necesaria en determinados casos.
Cuadro 1. Componentes clave de un inventario predial (MacRae et al., 1990, modificado).
Geo e hidroestructura
Tipos de suelo
Materia orgnica del suelo
Estado de fertilidad (CIC, balance de cationes, problemas de microelementos, etc.)
Disponibilidad de agua y calidad de la misma
Propiedades fsicas
Vida del suelo
Residuos txicos
Fuentes de materia orgnica y calidad de la misma
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Bioestructura
Historial de cultivo
Semillas empleadas y posibilidad de acceder a otras ms adaptadas a la produccin
ecolgica
Historial de malas hierbas
Bosques, arbustos y cortavientos
Plagas insectiles o no, y vida salvaje
Historial del ganado y sus enfermedades
Factores climticos
Temperatura
Radiacin solar
Precipitacin
Evaporacin
Caractersticas microclimticas
Tecnoestructura
Maquinaria
Alojamiento
Posibilidad de envasado y/o procesamiento
Disponibilidad de prstamos y alquileres
Socioestructura
Agricultor/a y familia
Trabajadores fijos o eventuales
Mercados empleados
2.b. Anlisis de sistemas agrarios. La identificacin de los diferentes componentes del
sistema predial, y la cuantificacin y el anlisis de los flujos entre componentes, y entre
stos y el entorno (entradas y salidas de materia -nutrientes, agua, etc.-, capital y energa -
trabajo, combustible, etc.-) pueden ayudar inicialmente a identificar las prdidas e
ineficiencias del sistema agrcola que deben ser reducidas durante la conversin predial. La
realizacin en aos sucesivos del mismo ejercicio da una idea clara de si se est lograndouna mayor integracin de la produccin (Fig. 3).
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2.c. Diagnstico clnico ecosistmico. La metodologa de diagnstico clnico para el
desarrollo de ecosistemas prediales (Gast et al., 1987) aprovecha las nuevas tecnologas
de informacin del territorio para detectar las unidades geogrficas de similares
caractersticas, con el fin de realizar propuestas de manejo adecuadas. Es til sobre todo si
se trata de fincas de mediana o gran dimensin y/o con una cierta complejidad
biogeoestructural. Permite profundizar en algunos aspectos recogidos en el inventario; y,
sobretodo, visualizar en el espacio la estructura del predio, ya sea, biofsica o tecnolgica.
Dado que esta metodologa se presenta de forma extensa en un captulo aparte
(Captulo....) no ser desarrollada ms ampliamente aqu. No obstante, cabe decir que
consta de dos fases, la primera de las cuales facilita el anlisis de la situacin inicial de la
finca, y consta de los siguientes pasos:
Fase 1: Examen
Incluye: 1. Visita preliminar a la finca. 2. Anlisis de la finca mediante el uso de fotos
areas de la mayor resolucin posible en base a cuatro niveles de estudio: biogeoestructura
(fundamentalmente aspectos edficos y de cobertura vegetal), tecnoestructura (cercas,
lneas elctricas, etc.), hidroestructura (pozos, redes de acequias, manantiales, etc.) yunidades de manejo (reas de pastizal, cultivos perennes, herbceos, etc.). 3. Trabajo de
campo para elaborar una base de datos sobre la finca. 4. Digitalizacin de la finca y
elaboracin de los mapas temticos: cobertura de suelos, pendiente, pedregosidad, etc. 5.
Reuniones con los agricultores para integrar su punto de vista sobre la finca.
3. Definicin de la situacin objetivo y la estrategia a seguir.
La segunda fase o fase de diagnosis de la metodologa de diagnstico clnico pretende el diseode una finca modelo o finca objetivo, que corrija las enfermedades ecosistmicas de la
situacin de partida (ver Captulo ). En esta tarea es imprescindible la participacin del
agricultor, que ser en ltimo trmino quien lleve a cabo la empresa.
Una vez definida la situacin objetivo, habr que elaborar la estrategia para alcanzarla,
planificndola en el tiempo y en el espacio. Ello incluye:
3.a. Plan de mejora del suelo
3.b. Diseo de la rotacin y alternativa de cultivos
3.c. Ajuste carga ganadera a la capacidad de producir alimentos para el ganado de la finca
3.d. Creacin de infraestructura ecolgica: setos arbreos o arbustivos, reas de
vegetacin silvestre, etc.
3.e. Creacin de infraestructura vial, instalaciones, etc. necesarias para el nuevo plan de
manejo.
3.f. Otras.
4. Valoracin de los insumos o servicios externos que es necesario incorporar. Tales comosemillas de nuevos cultivos o variedades, nuevas especies o razas ganaderas, estircol u otras
fuentes de materia orgnica, maquinaria y edificaciones, alimento para el ganado, productos fito
o zoosanitarios permitidos por la legislacin vigente en Agricultura Ecolgica, capital, trabajo,
tcnicos expertos, veterinarios especialistas en medicinas alternativas, mercados convencionales
y especializados, etc. La situacin inicial de especializacin va a determinar la importancia deeste captulo.
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5. Inventario del entorno. Al igual que se hizo al comienzo con el predio, conviene ahora haceruna relacin detallada de lo que nos ofrece el entorno de aquello que necesitamos.
Desgraciadamente muchos agricultores ecolgicos constatan la dificultad de encontrar en las
proximidades a su finca aquellos insumos o servicios externos que pueden necesitar durante la
transicin. Por ello, a veces el inventario ha de hacerse a escala regional o nacional.
Dentro de este apartado hemos de considerar la elaboracin de un listado previo de las personas e
instituciones relacionadas con la Agricultura Ecolgica. Ello puede agilizar la captacin de
informacin y la resolucin de problemas que vayan surgiendo durante el proceso de transicin.
6. Plan de comercializacin. La transicin a Agricultura Ecolgica nos obliga a menudo a hacermodificaciones en la estrategia de comercializacin, sobre todo si pretendemos que nuestros
productos sean reconocidos por el consumidor como ecolgicos. Ello bsicamente ha implicado
(ver Cap. ):
6.a. Diversificar y generar el propio mercado, habitualmente a nivel local, comarcal o
regional.
6.b. Acudir al mercado de exportacin
6.c. Procesar y/o envasar los productos cosechados
El plan de comercializacin a menudo origina modificaciones en los apartados anteriores. Dado
que se dedica un captulo especfico a la comercializacin no se insistir aqu en este tema.
7. Plan financiero.
8. Evaluacin del proceso de transicin. Consiste en la valoracin del proceso de transicin atravs de indicadores, cuya medicin nos d informacin sobre las tendencias, logros y
dificultades que van surgiendo durante este perodo. La eleccin de estos indicadores debehacerse en base a nuestras posibilidades (tiempo y medios humanos y materiales
fundamentalmente), buscando aquellos relacionados con la recuperacin del agroecosistema
respecto a los procesos de degradacin ms significativos en el predio. El Cuadro 2 recoge, sin
nimo de ser exhaustivo, posibles indicadores que pueden emplearse.
Cuadro 2. Indicadores para la evaluacin del proceso de transicin agroecolgico a nivel predial.
Ecolgicos
Eficiencia energtica
Relacin de entradas y salidas de los nutrientes principales
Indices de biodiversidad
Biomasa producida
Agronmicos
Rendimiento
Calidad del producto obtenido
Evolucin de la poblacin de determinadas plagas y/o insectos auxiliares
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1.1. Comprender las circunstancias particulares de cada participante, su estrategia productiva
y de comercializacin.
1.2. Realizar un pequeo inventario de los recursos del predio y del entorno y evaluar la
situacin inicial de la finca en base a la Metodologa Clnica de Diseo Predial.
1.3. Discutir la estrategia de transicin con cada participante.
2 Fase: Investigacion-accin participativa. Este perodo supuso la ejecucin del plan previsto,la evaluacin del mismo y la generacin de informacin in situ que permitiera la modificacin del
manejo en el caso de que esto fuera necesario. Esta 2 fase comprendi:
2.1. Estudio de determinados procesos que tienen lugar durante el perodo de transicin a
nivel de finca, en dos de los componentes del agroecosistema: ecolgico y econmico.
2.2. Bsqueda de soluciones a problemas concretos surgidos, que podran limitar el
proceso de transicin.
El caso de la SCA El Romeral
Para ejemplificar la planificacin y la evaluacin del proceso de transicin nos vamos a centrar
en la Finca Peuelas, gestionada por la Sociedad Cooperativa Andaluza El Romeral en la
comarca de Antequera (Mlaga). El Romeral est compuesto por diez familias jornaleras del
Sindicato de Obreros del Campo (SOC) que recibieron concesin para el cultivo de la finca
Peuelas (110 has) durante un perodo de diez aos.
1 Fase: De Observacin Participante (1er ao). Lo ms destacable del inventario aparecerecogido en la Tabla 4, en la que se menciona adems el origen de la informacin obtenida.
Tabla 4. Resumen del inventario la finca Peuelas gestionada por la cooperativa El Romeral.
Estructura predial Origen de la informacin
Geo e hidroestructura
Textura arcillosa o franco arcillo-arenosa, segn parcela Anlisis de laboratorio
Nivel aceptable de materia orgnica (entre 2-2,95%) Anlisis de laboratorio
pH alto (entre 8 y 8,39) Anlisis de laboratorio
Porcentajes de caliza activa y carbonatos muy altos Anlisis de laboratorio
Suelos no salinos C.E.1/5(mmhos/cm) (entre 0,2 y 0,46) Anlisis de laboratorio
Agua de riego abundante procedente de acufero Entrevista a los cooperativistas
Problemas de drenaje Entrevista a los cooperativistas, observacin
propia
Bioestructura
Escasa infraestructura ecolgica Observacin propia
Nula integracin ganadera Observacin propia
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Olivar, esprrago y cultivos herbceos extensivos y
hortcolas
Entrevistas a los cooperativistas
Semillas procedentes de casas comerciales Entrevistas a los cooperativistas
Plagas insectiles: gusano de alambre Entrevistas con los cooperativistas, otros
agricultores de la zona y agentes de extensin
agraria.
Infestacin de malezas media, con predominio de
especies anuales (Ej:Amaranthus sp., Chenopodium sp.)
Entrevista a los cooperativistas, observacin
propia
Tecnoestructura
Ausencia de esparcidor de estircol Entrevista a los cooperativistas, observacinpropia
Escasez de maquinaria para el control de malezas Entrevista a los cooperativistas, observacin
propia
Posibilidad de manipulacin de los productos en la finca Entrevista a los cooperativistas, observacinpropia
Buena infraestructura de riego localizado Entrevista a los cooperativistas, observacin
propia
Socioestructura
Integran la cooperativa diez familias Entrevistas a los cooperativistas
Presencia de mano de obra agrcola desempleada en lazona
Entrevistas a los cooperativistas, analisis de datossecundarios
Exista relacin previa con la Asociacin de
consumidores y productores ecolgicos La Ortiga de
Sevilla.
Entrevistas a los cooperativistas
Paralelamente se fue realizando el Diagnstico clnico ecosistmico, cuyos resultados aparecen en
las Figuras 4 a 7.
Una vez obtenida la informacin, y discutida con los socios designados por la cooperativaprocedimos de forma conjunta a definir el plan de transicin. Se decidi comenzar el proceso en
otoo de 1993 con una parcela (la n 5 del mapa de Unidades de manejo-Fig. 7) de 4 ha dedicada
hasta ese momento al cultivo de especies anuales, tanto cultivos herbceos extensivos, como
hortcolas. Como estrategia de transicin productiva se lleg al acuerdo de iniciar el proceso
mediante un abono verde invernal de veza-avena, para seguir con una rotacin de cultivos herbceos
hortcolas y extensivos que fuera con el tiempo complejizndose, a medida que ellos aprendieran el
manejo de los nuevos cultivos incorporados a la rotacin. As mismo, se pens en iniciar la
reconstruccin de un seto arbreo de especies frutales (separacin con la parcela vecina) y forestales
(borde del camino inferior) para incrementar la biodiversidad. Para la obtencin de la materia
orgnica necesaria para la fertilizacin se decidi acudir a los ganaderos de la zona de forma
prioritaria, aunque se acept incluir a ttulo de experiencia piloto 300 gallinas ponedoras, manejadas
en parque y segn los requisitos exigidos por la normativa de Agricultura ecolgica. En cuanto a lamaquinaria, se decidi la adquisicin de un remolque estercolador de segunda mano. Por ltimo,
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dada la evidente imposibilidad de la Asociacin de consumidores y productores de productos
ecolgicos La Ortiga para absorber el producto de 4 ha de huerta, se decidi desde un comienzo ir
abriendo nuevos puntos de venta, priorizando el mercado interior frente a la exportacin. Para ello,
puesto que este mercado interno era prcticamente inexistente, trabajamos ampliando los puntos de
venta directa (en finca y en el mercado de abastos del pueblo), en la creacin de nuevas asociaciones
de consumidores en las ciudades cercanas y en la bsqueda de tiendas especializadas (de diettica
principalmente) con inters en la venta de estos productos.
2 Fase: Investigacion-accin participativa (Ao 1, 2 y 3).
Const de las dos etapas siguientes:
1. Evaluacin del proceso de transicin a travs del seguimiento de indicadores seleccionados
previamente.
La duracin de esta fase fue la misma que la del Proyecto (3 aos).
Dada la reciente reconversin a campesinos con tierra de los socios de la cooperativa, carecan
inicialmente de experiencia productiva y comercializadora. Por ello, en la seleccin de los procesos
a profundizar durante el perodo de transicin intervinieron aparte de los miembros de la
cooperativa, los agentes de extensin agraria comarcales y agricultores expertos reconocidos
por su buen hacer en agricultura convencional. Todos ellos fueron entrevistados para conocer la
problemtica agraria de la zona: productiva, econmica y social. En segundo lugar, se acudi la
revisin bibliogrfica de otras experiencias de transicin recogidas en la literatura, y cuyos
resultados se hallan expuestos con anterioridad. En base a toda la informacin obtenida, y
teniendo en cuenta las limitaciones presupuestarias, se seleccionaron aquellos aspectos que
podan ser relevantes para el fracaso o el xito de esta experiencia, y se definieron los parmetros a
evaluar durante los tres aos de investigacin. Fueron las siguientes:
a) Componente ecolgico
a.1. Respecto al suelo. El objetivo era evaluar indicadores sencillos que pudieran facilitar
informacin sobre el estado del suelo a lo largo de los tres aos de proyecto. Se eligieron
los siguientes:
a.1.1. Parmetros qumicos: pH, fsforo y potasio asimilable, materia orgnica, CIC,
Ca++, Mg++, K+ y Na+ intercambiables y salinidad.
a.1.2. Parmetros biolgicos: Artrpodos: clase insecta (familias: Carabidae,
Staphylionidae, Formicidae, Tenebrionidae y Elateridae) y araas.
Como resultados de este seguimiento hay que destacar una ligera bajada del pH en dos de lostres tipos de suelo en que se poda dividir la parcela y un ligero aumento de la materia
orgnica y del P y K asimilable. Sin embargo, la salinidad subi de forma preocupante debido
a la escasez de lluvia durante esos aos, el mal drenaje, la presencia de una capa fretica muy
alta y el abuso del riego.
En cuanto a los parmetros biolgicos es de resaltar el aumento en los campos de cultivo en
conversin de la poblacin de Staphylinidae, Tenebrionidae, Formidae y Crustacea, y
fundamentalmente de Arhanida y Carabidae, que son importantes depredadores. Sin
embargo, no hubo un cambio significativo en la poblacin de Elateridae. En los setos, los
niveles de Arhanida, Carabidae, Anthicidae, Tenebrionidae, Formidae y Crustacea fueron
mayores que en el interior de la parcela de cultivo en transicin. Adems, la poblacin de
Arhanida y Crustacea, y en menor medida la de Carabidae se increment durante el
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perodo de transicin en los setos, no as la de Elatridos que permaneci sin variacin
significativa.
a.2. Respecto a la parte area.
a.2.1. Estudio de la evolucin del complejo de malezas. El objetivo era ir generando
informacin que en caso necesario nos permitiese proponer modificaciones en el manejo
del agroecosistema. Se utilizaron como indicadores la infestacin global de malas hierbas
en cada cultivo, el ndice de abundancia, el grado de cobertura y el estado fenolgico de
las especies ms importantes de malezas en funcin de la fecha de siembra; y grado de
cobertura y estado fenolgico de los cultivos (Saavedra,). Este seguimiento alert sobre la
infestacin progresiva de malezas de la parcela en transicin.
b) Componente econmico
b.1. Estudio de costes-beneficio de la produccin agrcola ecolgica durante el perodo de
transicin. El objetivo fue identificar aquellas partidas que la encarecan y que podan
comprometer la viabilidad econmica de la produccin ecolgica, con el fin de buscar
estrategias alternativas tanto de produccin como de comercializacin. Ver resultados de este
estudio en el Captulo.... .
2. Bsqueda de soluciones a problemas concretos surgidos, que podran limitar el proceso de
transicin.
En esta segunda etapa de la fase 2 de la metodologa expuesta anteriormente, se hizo el intento de
superar situaciones que eran vistas como problemticas por los cooperativistas, cuya gravedad
quedaba confirmada por la evolucin de los indicadores. Se consideraba que estas dificultades
podan comprometer la viabilidad del proyecto de transicin. Estas fueron por un lado productivas
(excesiva invasin de malezas y alto coste para su control; dificultad de incluir determinados
cultivos de inters econmico en la rotacin debido a la induccin de clorosis frrica por el altocontenido en carbonato y caliza activa -caso de la fresa- y por los daos de Agriotes -caso de la
patata-). Por otro lado existan dificultades derivadas del escaso desarrollo del mercado ecolgico
interior y de la falta de formacin inicial de los cooperativistas. En esta etapa se llevaron a cabo
estudios o ensayos especficos, y acciones directas encaminadas a la resolucin de los problemas
concretos. Paralelamente se fueron tomando decisiones relativas al diseo de la rotacin,
adquisicin de maquinaria, etc.
2.a. A travs de estudios o ensayos especficos.
2.a..1. Componente ecolgico
2.a.1.1. Propuesta de manejo de la flora arvense en tres cultivos hortcolas: col ycalabacn en base al perodo crtico de competencia y el estado fenolgico de las
malezas. (Ver Captulo...)
2.a.1.2. Valoracin de la eficacia de tres correctores de clorosis frrica en dos
variedades de fresas cultivadas acorde con los principios de la Agricultura Ecolgica
(Guzmn et al., 1998)
2.a.1.3. Valoracin de cuatro rotaciones, sin repeticin, en la comarca de Antequera en
funcin de los daos realizados en patata (Solanum tuberosum L.) por el gusano de
alambre (Agriotes sp)
2.a.2. Componente econmico
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2.a.2.1. Estudio de mercado para productos ecolgicos: estudio del segmento de
demanda de los centros permanentes de consumo en la provincia de Mlaga. (Ver
Cap.....)
2.b. A travs de la accin.
2.b.1. Componente econmico
2.b.1.1. Generacin de Asociaciones de consumidores y productores de productos
ecolgicos. Se organizaron charlas y debates en los que participaron diversos
movimientos sociales urbanos que se consideraron a priori con mayor potencial para
poner en marcha dichas asociaciones. Las personas inicialmente interesadas se
articularon jurdicamente bajo la figura de Asociacin sin nimo de lucro (Ver
Cap.....)
2.b.2. Componente social
2.b.2.1 Creacin de espacios de debate y de bsqueda de informacin que permitieran
ir profundizando en las causas de la crisis agrcola actual, tanto ecolgica, como social
o econmica, desde una perspectiva histrica, y que supusieran avanzar en la
propuesta de soluciones y actuaciones factibles que puedan ser motor de desarrollo
endgeno. Esto se hizo a travs del mantenimiento de reuniones peridicas con otras
cooperativas de jornaleros dedicadas a la produccin en Agricultura Ecolgica o en
transicin hacia ella.
2.b.2.2. Organizacin de monogrficos especficos y cursos de formacin sobre
tcnicas de manejo de los recursos en Agricultura Ecolgica en el que participaron
los cooperativistas.
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