estar ahí

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Machote digital para proyecto de publicación

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Estar ahí

quincemilcubos.sesentatomos.treintalibros.tresbibliotecas.tresmeses.eneformas.eneimágenes.unalínea.

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“Silencio en la biblioteca”

Las palabras retumban hondo en la memoria de todos nosotros, quienes hemos pasado por las bibliotecas. Un acuerdo común, una convención universal. Desde Colombia hasta India, desde Londres hasta Canberra, en todas las bibliotecas se exige silencio. Y todas ellas se asemejan, un sincretismo inusitado entre culturas y personas tan diversas. Es la biblioteca misma aquella que se ha forjado como una entidad particular. Como preguntar “¿Dónde se encuentra la Odisea de Homero?” No en ninguna de las copias que abundan en las bibliotecas, no en la mente de aquellos que la han leído, ni siquiera en las fuentes históricas a partir de las cuales se ha reconstruido. El texto existe independiente de sus soportes, en el aire, en los hombres, en la cultura. De esa manera existe la biblioteca, independiente de los edificios que la representan, que la guardan. Cada biblioteca particular es una reinterpretación de ese texto original, de esa idea. Y nosotros entramos en ellas, las habitamos como herederos de un espíritu antiguo, de un pacto tácito entre los hombres y sus ideas.

Al ingresar a una biblioteca, instantáneamente la reconocemos como tal y adecuamos nuestro ser a ese espacio. El orden, el si-lencio, las largas filas de libros, los demás lectores. Nuestra actitud se amolda, nuestro estar se condiciona. Estamos en la biblioteca como caminando entre estatuas antiquísimas de dioses y héroes. Como entre altas columnas de marfil pulido, encogidos por el peso de su majestuosidad. Incluso en una biblioteca pequeña, nos sentimos abrumados por los silenciosos y acusantes libros. Nos dicen que nunca podremos leer todo lo que está escrito en ellos, y

aun más, pocos de nosotros seremos capaces de ir a codearnos con aquellos que admiramos tanto. Los libros esperan en los estantes, retándonos a abrirlos, a enfrentarnos a ellos, a navegar sus vio-lentos mares y naufragar entre rocas afiladas, entre palabras e im-ágenes. Siempre se entrará a una biblioteca lleno de esperanzas e inevitablemente se saldrá lleno de frustración. No fue posible hojearlo todo, explorarlo todo, siempre se quedará algo para leer luego, cuando haya más tiempo, cuando lo vuelva a encontrar, cu-ando termine los demás que también pienso leer.

Libros por un lado, libros por el otro. Unos en cajas, otros en estantes. Palabras, formas. Cubos, historias. De haber ocurrido en otro espacio, el proyecto no hubiera suscitado esas compara-ciones. Pero sucedió en bibliotecas, y lo que ocurrió fue mágico. Libros y cubos se encontraron y empezaron a danzar, a entrela-zarse y a conversar entre sí. Duró solamente un mes, pero al estar allí, conviviendo con el proyecto, pareció mucho más. Se sinti-eron como tres meses, pero a la vez acabo demasiado pronto. Y al darme cuenta que después de la última biblioteca ya nunca más tendría cubos, ni podría armarlos ni ponerlos entre los estantes, la tristeza solo era comparable con la posibilidad de nunca más tener libros para leer. Tal fue la fuerza del proyecto, que se impuso lentamente, que se construyo paso a paso. Tal es la fuerza de la belleza, en el arte y en los libros.

Alejandro Vesga

Dibujar

El proyecto es una finísima red que teje, estructura y dibuja un entorno vacío.Estar ahí es un dibujo que sueña que es un dibujo que sueña, y hace visibles los momentos que duermen en todos los libros de es-tas bibliotecas, allí se cruzan todas las coordenadas, pues el dibujo habita todas las cosas invisibles. Como las atmósferas de Turner cuando han apago las luces. Llenando un vacío que la palabra es-crita vuelve un agudo sentido del silencio y la palabra ausente en un dibujo habitable, que va del recinto al mapa. Allí sucede que el final es el comienzo.

Estar Ahí es también estar allá: en el arte mismo. Del mapa a la poética de los lugares. Luis Fernando Peláez

El estar de los libros

Biblioteca Pública PilotoSep 29 - Oct 22 / 2011

El estar de los otros

El estar de los otros

El estar de los otros

El estar de los otros

Hora de cierre

Biblioteca Casa del EncuentroMuseo de AntioquiaNov 22 - Dic 20 / 2011

El estar de los otros

La imágen del otro

Parque Biblioteca BelénFeb 16 - Mar 15 / 2012

El estar de los otros

Dibujos anónimos

Acción escultorica, 20 min.

“Vivir es pasar de un espacio a otro haciendo lo posible para no golpearse.”Georges Perec

Ommolesti abor serro dolut exerepero commo eatio invelit et quia quaes re, vita que magnis dis et, quos et excerum voluptatur apis minctatur, velia quidis reperspero ea quaepudis vel ipsuntia atibus, quiaeca boreiur audaest, corestem volupta turepro om-mosam sita dus volupiet utem quibuscima cum harciusam, vo-lorio nemporro quist, imolupt ionserum quid ulpa quam, niet

aut officime solupidi consedi gnihite prem comnim non nonse-qu aepudae volum sunto et untio quasitiis acea aut que estis num idunt quis si voloren daecatq uistium dolorionet quibus quasim nimporem que errovit que quis nonsedisit estiumq uianda quo consed quiam es aspiet voloriore plaut maio. Ro estenimus eic-totatum di tectian ditint facient int.

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