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MA R I O EL G U E / CL AU D I A AL E JA N D RA CH I A RA D Í A
Formas Asociativas parala Agricultura Familiar
ELEMENTOS PARA EL ANÁLISIS FUNCIONAL Y
NORMATIVO DE LAS DISTINTAS FORMAS JURÍDICAS
Formas Asociativas parala Agricultura Familiar
Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos
M i n i s t e r i o d e E c o n om í a y P r o d u c c i ó n
PRESIDENCIA DE LA NAC I Ó N
Mario César Elgue es Contador Público Nacional (1977) y
Técnico en Cooperativas (U.N.L.P. ) .
Fue Presidente del Instituto Provincial de Acción Cooperativa
( I PAC), Ministerio de la Producción de la Provincia de Buenos Aires
= Coordinador Ejecutivo de los Consorcios Interm u n i c i p a l e s ,
Ministerio de la Producción y el Empleo = D i r e c t o r de la carrera de
post-grado de Asociativismo y Cooperación Empresaria en la
Universidad Nacional del Centro = Coordinador Académico en
Economía Social del curso de post-grado “Desarrollo Local y
Economía Social”, FLACSO = Director del Instituto Nacional de
Asociativismo y Economía Social (INAES), Ministerio de Desarrollo
Social.
Coautor del libro Crecimiento económico con desarrollo social,
Ediciones Intercoop Ltda., 1997, y compilador del libro
Globalización, desarrollo local y redes asociativas, Ediciones
C o rr e g i d o r, 1999, y de numerosas publicaciones especializadas.
Claudia Alejandra Chiaradía es Contadora Pública de la
Universidad de Buenos Aires (1984).
Profesora de posgrado y adjunta de la Universidad de Belgrano,
Facultad de Ciencias Agrarias - Legislación Rural e Impositiva =
Profesora a cargo de la Escuela de Educación Continuada del
C . P.C.E.C.A.B.A. en cursos impositivos en la actividad agropecuaria
= Miembro Activo de la Asociación Argentina de Estudios Fiscales
= Consultora privada en temas impositivos, laborales y de audito-
ria en empresas agropecuarias. Especialista en fideicomisos agrope-
c u arios = Coordinadora de cursos organizados por Errepar -
División Capacitación sobre aspectos impositivos del sector =
Vicepresidente de la Comisión de Actuación Profesional en
Empresas Agropecuarias del Consejo Profesional de Ciencias
Económicas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Autora de numerosos artículos, notas en revistas y medios perio-
dísticos especializados relacionados con temas impositivos de la
actividad. Panelista en diversas jornadas Agropecuaria. Coautora del
libro La actividad agropecuaria, sus aspectos impositivos, comer-
ciales y laborales, Editorial La Ley, 2004. Colaboradora del libro
Ganancias y Bienes Personales 2004, Errepar, 2005.
Formas Asociativas parala Agricultura Familiar
ELEMENTOS PARA EL ANÁLISIS FUNCIONAL Y
NORMATIVO DE LAS DISTINTAS FORMAS JURÍDICAS
©2006 - PRODERNEA - PRODERNOA / Avenida Paseo Colón 982, 3º piso,
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Impreso en Argentina
Hecho el depósito que marca la ley 11.723.
ISBN-10: 987-9471-37-7
ISBN-13: 978-987-9471-37-1
AUTORES
Primera parte:
Mario Elgue
Segunda parte:
Claudia Alejandra Chiaradía
Edición:
León Goldstein,
Bifronte Ediciones
Diseño y armado:
Guillermo Falciani
Foto de Tapa:
Martín Gómez Álzaga
FICHABIBLIOGRÁFICA:
AUTORIDADES NACIONALES
Presidente de la Nación
Dr. Néstor Carlos Kirchner
Ministra de Economía y Producción
Dra. Felisa Miceli
Secretario de Agricultura, Ganadería,
Pesca y Alimentos
Ing. Agr. Miguel Santiago Campos
Coordinador Ejecutivo del PROSAP
Lic. Jorge Neme
Coordinadora Técnica de
PRODERNEA - PRODERNOA
Lic. Susana Márquez
Formas Asociativas para la Agricultura Familiar: Elementos para el análisis funcional y
normativo de las distintas formas jurídicas - 1a ed. - Buenos Aires: Prodernea/Prodernoa, 2007.
92 p.; 20 x 23 cm.
Fecha de catalogación: 18/12/2006
Formas Asociativas parala Agricultura Familiar
ELEMENTOS PARA EL ANÁLISIS FUNCIONAL Y
NORMATIVO DE LAS DISTINTAS FORMAS JURÍDICAS
Í N D I C E
PRESENTACIÓN . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
Primera parte
ASOCIATIVISMO PARA PEQUEÑOS PRODUCTORES
Informe Organizacional, Legal, Administrativo y Tributario . . . . . . . . . . . . . . 9
1. INTRODUCCIÓN . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 10
2. VENTAJAS Y DESVENTAJAS DEL ASOCIATIVISMO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11
3. SABERES CONVENCIONALES Y SABERES POPULARES . . . . . . . . . . . . . . 13
4. LAS TECNOLOGÍAS ORGANIZACIONALES ASOCIATIVAS . . . . . . . . . . . . . 14
5. LAS DIVERSAS FORMAS ASOCIATIVAS Y SOCIEDADES . . . . . . . . . . . . . . 15
6. CUA NT I F I C ACIÓN DE LA CONSISTENCIA ORGA N I Z AC I O N A L ,
DE LA PARTICIPACIÓN DE LOS ASOCIADOS Y DE LA INSERCIÓN
EFECTIVA EN LA COMUNIDAD . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 19
7. ALGUNAS REFLEXIONES . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 20
Referencias bibliográficas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21
4 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Segunda parte
ASOCIATIVISMO AGROPECUARIO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 23
1. INTRODUCCIÓN . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 24
2. FORMAS ASOCIATIVAS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 26
3. DE LA CONSTITUCIÓN SOCIETARIA EN GENERAL . . . . . . . . . . . . . . . . . 27
4. TIPOS DE ASOCIATIVISMO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 29
5. CONCLUSIONES . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 69
ANEXO I . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 73
Categorías previsionales de trabajadores autónomos . . . . . . . . . . . . . . . 73
Tabla IV del Decreto 433/1994 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 75
Aportes mensuales de los trabajadores autónomos activos . . . . . . . . . . . 76
ANEXO II . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 78
Régimen simplificado para pequeños contribuyentes - Monotributo . . . . 78
Notas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 8 4
Direcciones útiles . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 87
Referencias bibliográficas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 89
5Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
PRESENTACIÓN
En el marco del diseño de la estrategia de
trabajo orientada al afianzamiento y consolida-
ción de las agrupaciones de pequeños pro-
ductores, los programas PRODERNEA y PRO-
DERNOA acordaron la elaboración de un
Manual de asesoramiento para contribuir a la
f o rmación, desarrollo y fortalecimiento de
organizaciones.
El presente Manual está dirigido a los
técnicos y profesionales que trabajan en el ám-
bito del desarrollo rural y a los agentes pro-
ductivos rurales y sus nucleamientos.
La estructura elegida para el M a n u a l c o n-
sidera dos partes básicas: la primera está desti-
nada a conceptualizar la temática del asociati-
vismo en pequeños productores, y la segunda
contiene información general sobre distintos
tipos de sociedades, agrupamientos o contra-
tos, que en nuestro país pueden adoptar los
productores agropecuarios, marcando sus ca-
racterísticas distintivas, sus formas legales y de
control, algunos aspectos contables, sus efec-
tos impositivos y previsionales y un resumen
de las ventajas o desventajas de su imple-
mentación, teniendo en cuenta los recursos y
capacidades disponibles de los pequeños pro-
ductores y sus organizaciones en las áreas de
ejecución de los programas PRODERNEA y
PRODERNOA.
PRODERNEA y PRODERNOA agradecen
a los autores por su contribución a la línea de
trabajo emprendido por ambos programas.
En este caso al doctor Mario César Elgue y a la
contadora Claudia Alejandra Chiaradía, hace-
dores de la primera y segunda parte del
M a n u a l, respectivamente.
7Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
PRIMERA PARTE
AS O C I ATIVISMO PA RA PEQUEÑOS PRODUCTORES
Informe Organizacional, Legal, Administrativo y Tributario
Por el Doctor Mario César Elgue
Consultor PRODERNEA / PRODERNOA
Para su perdurabilidad, las experiencias
de asociativismo productivo necesitan avanzar
en esquemas organizacionales y operacionales
que posibiliten su continuidad, más allá de
algún programa público que los impulse con
créditos y asistencia de técnicos y profesiona-
les. Más aun, con una mirada superadora de
aquellos planes que sólo se proponen dar res-
puestas a las “fallas de mercado” o a la inexis-
tencia de mercados en la construcción de nue-
vos actores productivos autogestionarios es
recomendable una armadura estatutaria y/o
reglamentaria que “ordene” las actividades. Y
ello no resulta sólo de las ventajas que son
parte de las formalidades jurídicas que los
habilitan para ser sujetos de derecho y de cré-
dito, reduciendo los costos de transacción. La
práctica de los valores y principios del esfuer-
zo propio y la ayuda mutua generan indispen-
sables “affectio societatis” y ámbitos de con-
fianza que le dan más sustentabilidad.
De otra manera, se daría una especie de
“ficción asociativa” en la cual el armado de la
mayoría de estos agrupamientos comienza y
termina con la obtención del crédito o subsi-
dio.
1. INTRODUCCIÓN
10 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
11Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
El asociativismo productivo no es una
panacea. Es una construcción compleja en la
cual hay que armonizar a grupos humanos
cuyos objetivos inmediatos son muchas veces
de supervivencia, siendo parte de la amplia
franja de la economía que se sitúa en la “infor-
malidad” y en los mercados alternativos “cara
a cara”, con cierta “racionalidad” microem-
prendedora que no puede dejar de lado los
equilibrios financieros, la adecuada combina-
ción de los factores de la producción compro-
metidos y algunos ratios de economicidad y/o
rentabilidad.
En este mundo global, aun los microem-
prendedores deben contemplar algunos pará-
metros de “eficiencia” socioeconómica (cier-
tos resultados obtenidos en función de los
recursos disponibles) y de “eficacia”, entendi-
da como aquellos logros alcanzados sobre la
base de los objetivos preestablecidos.
El asociativismo productivo posibilita
salir del aislamiento y el individualismo y
potenciar, al mismo tiempo, los recursos téc-
nicos, económicos y humanos, a través de la
sinergia del grupo. La escala asociativa permi-
te el acceso a infraestructura, maquinarias y
equipos y la optimización de las condiciones
de negociación frente a acopiadores e inter-
mediarios, así como también lograr bonifica-
ciones en la compra de insumos y un acceso
más fluido a la asistencia financiera.
Deben contrarrestarse los inconvenien-
tes o “desventajas” que se argumentan para
resistir los entendimientos asociativos de los
productores:
= Prejuicios hacia la asociación por ante-
riores intentos frustrados o fracasados.
= Falta de capacitación y “gimnasia” para
el trabajo en equipo y la gestión asociada.
= Los temores a la exposición ante las
personas, el no querer compartir sus fortale-
zas y debilidades.
= Evitar controlar y ser controlado por los
demás.
= Inquietud y dudas ante lo desconocido.
Los territorios con mayor atractivo y
mejor desempeño gestionan procesos de
innovación organizacional y tecnológica, agre-
gando valor a sus recursos naturales y gene-
rando encadenamientos productivos que
movilizan nuevas inversiones. En cambio,
aquellos lugares con mayor desarticulación
y, como consecuencia, con escaso dinamismo
innovador y organizacional presentan menor
interés, requiriendo una mayor acción de polí-
ticas públicas eficaces y de esfuerzos de orga-
nización y cambio institucional.
La experiencia del llamado sistema agro-
pecuario, agroalimentario y agroindustrial
ha permitido un avance cualitativo, desde el
individualismo a la acción grupal, desde situa-
ciones de subsistencia a la inclusión en los
mercados formales. Esta incorporación de tec-
nologías asociativas, integradas a las tecnolo-
gías productivistas, es muy relevante para dis-
minuir las brechas tecnológicas que resultan
discriminatorias con relación a sectores socia-
les desfavorecidos y a regiones de menor gra-
do de desarrollo.
2. VENTAJAS Y DESVENTAJAS DEL ASOCIATIVISMO
Si nos referimos al caso de la miel, por
ejemplo, es de aceptación generalizada que la
calidad productiva tiene mucho que ver con la
trazabilidad, con la rastreabilidad de la miel
para exportación; con la identificación de los
tambores por zonas o con la aprobación de los
envases para la miel a granel. No menos im-
portantes son las exigencias del Código Ali-
mentario, con relación a la identidad y a la cali-
dad de los productos, a la definición de ori-
gen, así como también a los contaminantes y a
los cuidados propios de la higiene. Se suma lo
atinente a los aspectos edilicios e higiénico-
sanitarios de la habilitación de establecimien-
tos así como también la clasificación de las
salas de extracción.
La tendencia del consumo se orienta a la
obtención de productos inocuos, considerán-
dose sustancias prohibidas los nitrofuranos y
el cloranfenicol, entre otras. Se trata, enton-
ces, de cumplir con los requisitos de inocui-
dad y calidad, desde la etapa de producción
hasta el envasado final, para resguardar la
identidad y calidad de los productos de la col-
mena. Estas “buenas prácticas” apícolas deben
ir de la mano de las “buenas prácticas” de
manufactura, en el procesamiento y en los
productos.
Lograr una mejor cooperación entre
estas tecnologías productivas y la calidad orga-
nizacional del asociativismo es un aspecto
clave para revalidar el protagonismo de los
territorios organizados e ingresar a un esca-
lón superior en la competitividad social de los
niveles regionales y nacionales.
Las tecnologías organizacionales supo-
nen evaluar los indicadores agro-económico-
productivos, la escala adecuada y mayores
encadenamientos entre la producción y los
consumidores, junto con indicadores de com-
portamientos asociativos, índices relaciona-
dos con el empleo y la ocupación, cuestiones
intergeneracionales y de género. En suma,
la caracterización, análisis e interpretación es-
tructural de los sujetos sociales pasibles de ser
considerados población objetivo del desarr o l l o
ru r a l .
Los pequeños productores son a veces
“homogeneizados” con el exclusivo encuadra-
miento de la faz técnico-productiva. Se obvia
así su capacidad para expresarse como sujetos
sociales y políticos. El hecho de que sean un
tipo particular de productores (mayoritaria-
mente familiares) constituye un problema de
base para algunos técnicos y funcionarios.
Dicha dificultad suele “solucionarse” definien-
do a priori a esos pequeños productores
como portadores de universos culturales tra-
dicionales y conservacionistas. Se suele asu-
mir, con cierto fatalismo, que trabajar con
estos productores presenta obstáculos adicio -
nales.
Aquí se consideró que –ante una inter-
vención técnica o institucional– se debe carac-
terizar a los pequeños productores como
inmersos en un entramado interdependiente
de aspectos socioculturales y económico-pro-
ductivos, en un ámbito en el que no pueden
escindirse las tareas vinculadas con la subsis-
tencia de los trabajos productivos, con acceso
a los mercados. En otras palabras, los empren-
dedores del ámbito rural suelen reproducir
relaciones económicas, sociales y simbólicas
de manera simultánea.
12 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
13Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Es muy frecuente cierta desvalorización
de los puntos de vista de los productores, exa-
gerar las dificultares para la adopción de nue-
vas tecnologías, reduciendo la lectura a que
dichos productores quieren vivir aferrados al
pasado y a prácticas inapropiadas.
Y aunque no hay que caer en el error
inverso, en la sobrevaloración de estos “sabe-
res campesinos”, es prudente reconocer que
estos productores tienen su propia “racionali-
dad”, basada sobre la experiencia y sobre las
transmisiones orales de sus antepasados.
El productor (especialmente el pequeño
de NOA/NEA) se juega el futuro alimentario
propio y el de su familia. Más que maximizar la
rentabilidad o los excedentes, pretende garan-
tizar la seguridad en la reproducción de su
familia. Él no prioriza el “gusto por el riesgo”,
típico de un empresariado más consolidado y
sin necesidades básicas insatisfechas, sino que
sus riesgos son “más calculados”, ya que su
estrecho margen oscila entre un mayor ingre-
so y el hambre.
Los saberes campesinos no tienen la
rigurosidad, sobre todo expositiva, de los
cientistas y académicos, pero, a su manera,
también construyen conocimiento en su cha-
cra, utilizando métodos que incluyen la obser-
vación, el análisis y la toma de decisiones.
El conocimiento que el productor ha aprendi-
do en su “experiencia de campo” tiene para él
un alto grado de validez, ya que es lo que le
ha permitido mantener su cultura y evolu-
ción con el transcurso del tiempo. Es por ello
que todo conocimiento adquirido en su vida
productiva sólo es abandonado si colisiona
con una realidad que se lo demuestre tajante-
mente.
3. SABERES CONVENCIONALES Y SABERES POPULARES
14 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Lo que se denomina “tecnología organi-
zacional asociativa” aparece generalmente, en
primera instancia, como una mera introduc-
ción genérica a las ventajas de la escala, sin
transferir a los productores (comenzando por
una capacitación puertas adentro de técnicos
y funcionarios) las particularidades del trabajo
en equipo, la toma de decisiones democráti-
cas, los consensos, los valores y principios y las
lógicas de funcionamiento de las diversas for-
mas asociativas de interés común. Se adviert e
una extendida incomprensión en torno del
carácter indivisible de las tecnologías al serv i-
cio de los productores, de la calidad producti-
vista y de la calidad asociativa.
Las formas asociativas permiten disper-
sar el riesgo del capital invertido, disminuir la
incidencia de ese capital y el peso de las car-
gas impositivas. También posibilitan incursio-
nar en áreas jamás pensadas por el productor
en forma aislada, o mejorar su inserción en
otros tramos de la cadena agroalimentaria.
Estas experiencias no necesitan caer inevita-
blemente bajo estructuras formales conoci-
das.
En su evolución, los emprendimientos
pasan por estados precarios de organización y,
de acuerdo con el tipo de actividad, se van
generando nuevas necesidades en cuanto al
instrumento jurídico a adoptar, considerando
los costos de constitución, funcionamiento,
previsionales e impositivos que generan los
mismos.
Los emprendimientos asociativos impli-
can la formación de un grupo y, puesto que el
alcance de los objetivos es en función de algu-
na tarea específica, se los llama generalmente
“grupos operativos”. Un grupo no se constitu-
ye solamente con la voluntad de agrupamien-
to, también es necesario considerar la estruc-
tura interna del mismo, compuesta por los
vínculos y personalidades de sus integrantes y,
fundamentalmente, que se articule con una
actividad socioeconómica puesta en común,
que garantice más continuidad y mayores
resultados que la operatoria individual.
No se debe pensar que la tarea actúa
mágicamente, es preciso generar las condicio-
nes para que se hagan explícitos los objetivos.
Por este motivo, y en las primeras instancias
de organización del grupo, se requiere del
papel de animadores-orientadores que ten-
drán que facilitar este fenómeno. Cada grupo
encontrará su forma de operar después de
varias reuniones y, en muchos casos, se mate-
rializará a través de reglamentos de funciona-
miento interno. Esta es una etapa importante
a causa de que los integrantes del grupo se
desinhiben y acuerdan con la modalidad elegi-
da. No existen recetas únicas de operatoria, se
presentan tantas modalidades como grupos
consolidados.
4. LAS TECNOLOGÍAS ORGANIZACIONALES ASOCIATIVAS
15Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Es preciso mencionar aquí los aspectos
centrales de las diversas alternativas asociativas
a las que pueden recurrir los pequeños pro-
ductores, desde las más “informales” a las más
f o rm a l e s .
FORMAS ASOCIATIVAS INFORMALES
Entre las informales, se encuentran los
Consorcios de Productores, a través de los
cuales se organizan mayoritariamente los nue-
vos grupos asociativos del PRODERNEA / PRO-
DERNOA que, en rigor, constituyen una Socie-
dad de Hecho, con la ventaja de su rapidez
para darle forma pero con muy pocas posibili-
dades de sentar las bases de un asociativismo
que tenga alguna continuidad y/o consistencia
organizacional.
Esto cabe, al mismo tiempo, para toda
Sociedad de Hecho, aunque no se la denomi-
ne “consorcio”. En estas “Sociedades de He-
cho” no es un tema menor dejar en claro que,
ante inconvenientes con terceros acreedores,
quedan comprometidos los patrimonios per-
sonales de sus miembros.
FORMAS ASOCIATIVAS FORMALES
Entre las formas asociativas sin fines de
lucro (que no significa que no busquen un
resultado económico positivo sino que éste
no es el objetivo del emprendimiento; que el
propósito de estos pequeños productores
asociados es generar una retribución por el
trabajo y/o la producción de sus miembros y
no obtener un “lucro” del capital aportado
que, por otra parte, suele ser exiguo) se
encuentran las Fundaciones, las Asociaciones
Civiles, las Cooperativas y las Mutuales, a las
que se agregan “Sociedades de Fomento” y
“Cooperadoras” que, en la mayoría de los
casos –pese a su denominación–, constituyen
Asociaciones Civiles.
Las Mutuales son similares a las Coope-
rativas, y la intervención ante irregularidades
debe surgir desde el ámbito judicial. No son
lucrativas y, en general, tienen por objetivo
brindar ayuda mutua frente a riesgos eventua-
les, desde apoyos económicos, servicios de
salud, deportes, recreación y turismo, actuan-
do por cuenta de sus asociados. Se diferen-
cian de las Cooperativas en que no distribuyen
excedentes.
En lo referente a las Asociaciones Civiles
y Fundaciones, ambas se plantean dar satis-
facción a las necesidades sociales, culturales,
artísticas, científicas y deportivas de sus aso-
ciados y/o beneficiarios. Las Agrupaciones de
Colaboración Empresaria (A.C.E.), que están
incluidas en la Ley de Sociedades Comer-
ciales, no constituyen una forma societaria
ni son sujetos de derecho. Las Agru p a -
ciones como tales no persiguen fines de lucro,
pero sí mejorar las producciones y servicios
de sus miembros; no pueden vender ni pres-
tar servicios al mercado como agrupación sino
a través de cada integrante. Tienen por finali-
dad mutualista ayudar a sus miembros –em-
5. LAS DIVERSAS FORMAS ASOCIATIVAS Y SOCIEDADES
presas o formas asociativas– para desarrollar
determinadas fases de la actividad empresarial
de cada uno: compartir equipamientos, aseso-
rarse asociadamente o adquirir insumos en
f o rma conjunta. Tienen un fondo común p o r
lo que se constituyen en un avance sobre las
Sociedades de Hecho, ya que cualquier acree-
dor debe ir primero contra dicho fondo y lue-
go, subsidiariamente, sobre los bienes perso-
nales de los integrantes de la Agrupación.
A modo de conclusión, cabría expresar
que no se puede establecer a priori cuál es la
forma más apropiada para organizar a los
pequeños productores. En cada caso, según el
tipo de producción, la fase de la producción
que se procura asociar y/o la idiosincrasia del
grupo humano en cuestión, se deberá escoger
aquel agrupamiento que mejor se adapte.
Las formas asociativas de interés común
sin fines de lucro (fundamentalmente las Aso-
ciaciones y las Fundaciones) aparecen como
más propicias para efectuar tareas de promo-
ción, asistencia, capacitación y tutorías, siendo
las C o o p e r a t i v a s las más adecuadas para
afrontar la producción y la comercialización
en los mercados formales, ya que las Asocia-
c i o n e s no pueden operar comercialmente
para el mercado.
En este sentido, en algunas situaciones,
cuando se esté en condiciones de optar por la
formalización, se deberá evaluar si no es ade-
cuado combinar Sociedades Comerciales
(que pueden estar integradas por Asocia-
ciones, personas y Cooperativas) o, a la inver-
sa, Cooperativas que tengan como asociados
a Asociaciones e incluso a Sociedades Comer-
ciales como las Sociedades de Responsabili-
dad Limitada (S.R.L.) y las Sociedades Anóni-
mas (S.A.).
5. 1. ALGUNAS CUESTIONES REFERIDAS
A LOS ASPECTOS IMPOSITIVOS
DE LAS FORMAS ASOCIATIVAS*
A continuación indicaremos brevemente
algunas consideraciones sobre los aspectos
impositivos y previsionales, que resultan de
gran importancia a la hora de definir la confor-
mación de una u otra forma asociativa.
Considerando las diferencias impositivas
entre las Sociedades de Hecho con actividad
de servicios, las Cooperativas de Trabajo, las
Cooperativas de Provisión de Pequeños Pro-
ductores y los llamados “proyectos producti-
vos” de hasta tres socios (incorporados por el
denominado Registro de Efectores del Minis-
terio de Desarrollo Social), se puede señalar
lo siguiente:
La Sociedad de Hecho puede ser mono-
tributista cuando nos acotemos a un máximo
de tres socios y una facturación anual de hasta
72.000 pesos. Deberán inscribirse como míni-
mo en categoría D (actualmente de 194
pesos) y sumarle a esta cuota un adicional del
20 por ciento más por cada socio. La situación
ante el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y
ante el Impuesto a las Ganancias establece
que ambos están cubiertos, en estos casos,
por la cuota del Monotributo. La situación pre-
visional de cada socio indica que cada uno de
ellos debe pagar el componente previsional y
16 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
* Los valores referidos son del año 2006 y sujetos a modificaciones de la normativa vigente.
17Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
la Obra Social, en total 59,44 pesos, corres-
pondiendo 35 pesos al componente previ-
sional y 24 pesos al seguro de salud (Obra
Social).
En lo que respecta a las Cooperativas de
Trabajo (que puede ser una Cooperativa de
Trabajo Agropecuario), en lo atinente al Mo-
notributo actúan como agentes de retención
del Monotributo de sus asociados. Al inscribir-
se ante la AFIP, la Cooperativa debe pedir la
adhesión de cada asociado al Monotributo.
Con referencia al IVA, estas Cooperativas de
Trabajo son responsables inscriptas y pagan
mensualmente la diferencia entre débitos y
créditos fiscales, debiendo presentar la decla-
ración jurada mensual por internet. Estas
Cooperativas se encuentran exentas del Im-
puesto a las Ganancias y, en lo que hace al
a p o rte previsional, cada asociado de la Coope-
rativa de Trabajo debe pagar la cuota completa
del Monotributo correspondiente a sus ingre-
sos anuales. En caso de poseer ingresos meno-
res que los 12.000 pesos sólo pagarán los 59,44
pesos del componente previsional.
Aunque es probable la ventaja de la carga
impositiva comparativa en favor de las Coo-
perativas de Trabajo con relación a las Socie-
dades de Hecho monotributistas, es preciso
estimar el monto del IVA y las posibilidades de
la Cooperativa de recargarlo en su facturación,
manteniendo su competitividad. En cambio, si
la Sociedad de Hecho no puede incorporarse
en el Monotributo y tributa en el régimen
general, la Cooperativa tiene menos carga im-
positiva (fundamentalmente por exención en
Ganancias).
Por otro lado, las Cooperativas de Comer-
cialización y Provisión de Productores tam-
bién están exentas del Impuesto a las Ganan-
cias y son responsables inscriptas en el Im-
puesto al Valor Agregado (IVA). Sus emplea-
dos (si los tienen) se hallan en relación de
dependencia con la Cooperativa como en cual-
quier otra empresa o sociedad comercial con-
v e n c i o n a l .
Las Fundaciones y las Asociaciones Civi-
les (particularmente estas últimas, que suelen
agrupar a pequeños productores de las eco-
nomías regionales) están exentas del IVA en
todas las actividades que realicen dentro del
marco del objeto social. También están exen-
tas del Impuesto a las Ganancias pero deben
inscribirse en el mismo y solicitar la exención.
La AFIP, en caso de aprobar la exención, la
otorga provisoriamente y, luego, por un perío-
do determinado, informándolo en su página
de internet. Deben presentar la declaración
jurada informativa anual del Impuesto a las
Ganancias. Están obligadas a cumplir con un
régimen informativo y notificar de las dona-
ciones. Ambas presentaciones son anuales y
por internet. Deben llevar libros rubricados y
confeccionar balances. En el Impuesto sobre
los Ingresos Brutos, deben inscribirse y pedir
la exención. Se les otorga por un período y se
publica en internet.
5.1.1. REGISTRO DE EFECTORES
DE DESARROLLO LOCAL Y ECONOMÍA
SOCIAL
La Ley 25.865 y el Decreto 802/04 del
Régimen Simplificado para Pequeños Contri-
buyentes, en el ámbito del Ministerio de
Desarrollo Social, plantea que podrán inscri-
birse en el denominado Registro de Efectores
las personas físicas, los asociados a Coope-
18 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
rativas de Trabajo (aunque no los asociados a
Cooperativas de Productores, lo cual debería
reconsiderarse) y los proyectos productivos
de hasta tres integrantes, siempre con una
única actividad beneficiada. En los tres casos,
las personas, individualmente consideradas,
deberán encuadrarse en condiciones de “vul-
nerabilidad social”, acreditado por un Informe
técnico-social y que no excedan un ingreso
anual individual de 12.000 pesos por la activi-
dad que realicen.
Las Cooperativas de Trabajo aquí consi-
deradas deberán realizar en forma simultánea
con sus asociados el trámite de la incorpora-
ción de los mismos al mencionado Registro
y al Monotributo. Aprobada la adhesión, reves-
tirán el carácter de pequeño contribuyente
eventual social o monotributista social, según
c o rr e s p o n d a .
En el Monotributo Social, por 24 meses
los beneficiarios sólo deberán abonar el 50
por ciento de la Obra Social. Les corresponde
una cobertura de Obra Social que elegirán al
inscribirse y no podrán cambiarla por el térmi-
no de un año. En el Monotributo Eventual
Social, por 24 meses, no pagarán aporte algu-
no pero no poseen ninguna prestación de
Obra Social.
En los llamados proyectos productivos o
de servicios (en rigor, una Sociedad de Hecho
promocionada) se debe tratar de hasta tres
integrantes, personas físicas, con facturación
anual individual de hasta 12.000 pesos. Deben
pagar por 24 meses sólo el 50 por ciento de la
Obra Social. También deben estar inscriptos
en el Registro de Efectores y conservar el tope
de ingreso anuales y una sola actividad benefi-
ciada.
También el pequeño productor agrope-
cuario individual puede estar inscripto en
este Registro de Efectores. En ese caso, duran-
te 24 meses, sólo abonará el 50 por ciento de
la Obra Social. Transcurrido ese lapso, y siem-
pre que sus ingresos no superen los 12.000
pesos anuales debe inscribirse en la categoría
F –actividad primaria–, quedando exceptuado
del componente impositivo del aporte men-
sual.
Una forma de evaluar la solidez de las
organizaciones de productores (básicamente
Asociaciones y Cooperativas), en los aspectos
relacionados con lo socio-organizativo y la
organización y su vínculo con la comunidad,
es mediante la utilización de í n d i c e s q u e
hacen a su consistencia organizacional, la veri-
ficación de la participación de los asociados
en sus asambleas y en sus actividades produc-
tivas, a su compromiso con la comunidad, con
mecanismos de incubación y tutoría (por
ejemplo, a través de Corredores Productivos
como los conformados por la Federación de
Cooperativas de Corrientes) y por actividades
de educación y capacitación interna y externa.
Todos estos items se pueden “medir” a través
de un balance social o de responsabilidad
social asociativa, de dos columnas (una de
las cuales refleja la inversión, en términos
absolutos y, la otra, mediante porcentajes),
haciendo un seguimiento año por año, eva-
luando así su crecimiento o decrecimiento.
Por otro lado, se hace necesario generar meca-
nismos de evaluación, que consideren el de-
senvolvimiento de las organizaciones desde el
punto de vista de su funcionamiento y ges-
tión, con el propósito de mejorar el resultado
económico.
A modo de propuesta, y tal como existen
organismos de contralor específico para las
Cooperativas, Asociaciones y Sociedades Co-
merciales, un programa como el PRODERNEA/
PRODERNOA podría apuntar al seguimiento,
mediante un “balance socio-organizacional”,
como el antes expuesto, y sobre cuya confec-
ción se ha trabajado ya en un informe a n t e r i o r.
Esto no significa que, paralelamente, no sea
atinado solicitar a las organizaciones la res-
puesta a un formulario con datos básicos y
mínimos de los aspectos legales y administrati-
vos, que incluya algunos parámetros de viabili-
dad financiera y de sustentabilidad comercial.
19Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
6. CUA NT I F I C ACIÓN DE LA CONSISTENCIA ORGA N I Z AC I O N A L ,
DE LA PARTICIPACIÓN DE LOS ASOCIADOS
Y DE LA INSERCIÓN EFECTIVA EN LA COMUNIDAD
20 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Los emprendimientos asociativos se pre-
sentan como una alternativa de acción grupal
que permite, especialmente a los pequeños y
medianos productores, alcanzar diferentes nive-
les de tecnología y mejorar el poder de negocia-
ción en los mercados. En este marco, el asociati-
vismo es considerado dentro de las llamadas tec-
nologías de organización. Como tal, implica la
sistematización de ideas conjuntas, bajo la forma
de proyectos. En general, surgen como respues-
tas creativas de productores y funcionarios a las
dificultades que enfrentan las MIPyMEs agrope-
cuarias y, en algunos casos, como medio para
obtener ventajas comparativas y competitivas.
Las posibilidades de esquemas asociativos
son ilimitadas y así lo demuestran la gran canti-
dad y variedad de estos emprendimientos,
desde Consorcios de Productores y Sociedades
de Hecho a las diversas formas asociativas de
interés común. Entre estas últimas, las Coopera-
tivas aparecen con la ventaja diferencial de valo-
res y principios que, adecuadamente trasladados
a la práctica, conforman una alternativa capaz de
promover el desarrollo local y la democracia par-
ticipativa. En este sentido, es preciso integrar los
“saberes campesinos”, fundados en la experien-
cia y en la transmisión oral, a los saberes técni-
cos y profesionales, haciendo a un lado prejui-
cios de origen académico que encasillan a los
pequeños productores familiares como resisten-
tes a todo tipo de cambio.
El desarrollo humano sostenible apela a
modelos alternativos de gestión para resolver las
inequidades y los peligros de alteraciones am-
bientales, generados por proyectos concentra-
dos de sesgo economicista.
De acuerdo con lo expuesto, se propone:
= Incorporar una visión integradora de las
tecnologías productivistas y las tecnologías aso-
ciativas.
= Realizar encuentros regionales de exposi-
ción y talleres interactivos en los cuales partici-
pen funcionarios, promotores y técnicos, que se
extiendan luego a productores beneficiados con
asistencias y financiamiento.
Buenos Aires, abril de 2006
7. ALGUNAS REFLEXIONES
21Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Alburquerque, Francisco y otros: Estudios de casos de desarrollo económico local
en América Latina, BID, Washington, Estados Unidos, 2002.
Boisier, Sergio: El desarrollo territorial a partir de la construcción de capital
sinergético, ILPES, Chile, 1998.
PNUD: Estrategias de apoyo a las micro, pequeñas y medianas empresas, Ed.
Eudeba, Buenos Aires, 2001.
INTA: Plan Estratégico Institucional, 2005 - 2015, mimeo., Buenos Aires, 2004.
Kremenchutzky, Silvia: Evaluación del Programa Desarrollo Rural del Noroeste
Argentino, Informe final (Chaco y Misiones), mimeo., Crisol Proyectos Sociales, 2005.
M a rtínez, Gerardo: Entre la desazón y la esperanza. Experiencias y propuestas
para el desarrollo local en el noreste arg e n t i n o, Ed. Cámara de Diputados, Chaco, 2002.
Scalise, Jorge y otros: Estudio para la determinación del ingreso de los productos
agropecuarios en la Provincia de Catamarca, mimeo., 2003.
Scalise, Jorge y otros: Organizaciones de la Comunidad de la Provincia de
Catamarca, mimeo., 2003.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
SEGUNDA PARTE
ASOCIATIVISMO AGROPECUARIO
Por la Contadora Pública Nacional Claudia A. Chiaradía
Consultora PRODERNEA / PRODERNOA
La actividad agropecuaria presenta carac-
terísticas totalmente distintas de las de otros
sectores de la economía nacional, las cuales
no siempre están vinculadas en forma directa
con la actividad económica pero determinan
en muchos casos su resultado.
Entre éstas podemos mencionar los efec-
tos climáticos, el crecimiento vegetativo, la
duración del ciclo productivo, los valores de
los commodities, todos los cuales de manera
alternada o en conjunto forman parte de esta
actividad; esto, sumado a los cambios vertigi-
nosos dados en ella, vinculados con factores
externos, internos o del propio desarrollo
regional, genera la necesidad del productor
de adecuar las formalidades de su operatoria
para no quedar relegado de todo el proceso
económico.
Con el fin de mejorar y adecuar estos
cambios, los productores y los demás intervi-
nientes en la cadena productiva tienden a aso-
ciarse, pero ya no mediante el tradicional con-
venio de palabras: buscan generar nuevos
marcos de responsabilidades y obligaciones,
los que, a medida que el negocio se desarro-
lla, van generando diversos efectos comercia-
les, impositivos, de gestión, etc.; por ello, la
forma tradicional de asociarse ya no se cubre
teniendo como única modalidad los acuerdos
de palabra; estos agrupamientos van a tomar
distintos rumbos dependiendo principalmen-
te de la estructura de los agentes económicos
que intervienen en las distintas etapas de la
producción y comercialización.
Como pauta importante para definir la
necesidad de asociarse, se deben conocer los
problemas que afrontan los productores agro-
pecuarios titulares de pequeños fondos de
explotación. El aumento de la complejidad en
la documentación de las operaciones, el pro-
greso de la tecnología productiva, la mejora
en la calidad y cantidad demandada de los
productos, por un lado, así como el incremen-
to de costos de producción y de intermedia-
ción, y la pérdida de poder negociador indivi-
dual, obligan a estos productores a afrontarlos
en forma mancomunada. Para lograr buenos
resultados, y, de acuerdo con pautas claras y
legales en este mercado creciente, se necesi-
tan incrementar las inversiones y el financia-
miento, lo que obliga a buscar nuevos cami-
nos a riesgo de quedar fuera del mercado.
Asociarse permite generar una suma de
las fortalezas de sus miembros y superar sus
debilidades, por medio de la combinación de
sus actividades o funciones individuales tales
como producción, comercialización, logística,
tecnología o financiamiento.
Para que una asociación pueda justificar-
se, debe realizarse un análisis comparativo de
la capacidad productiva que tendrá la nueva
unidad de negocio frente a la suma de las apti-
tudes competitivas que poseen los producto-
res en forma individual. Resumiendo: deberá
lograrse que la nueva unidad sea mayor que la
suma de sus integrantes. La obtención de uni-
dades con mayor capacidad productiva o
comercial se consigue a través de acuerdos
24 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
1. INTRODUCCIÓN
25Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
que potencien las idoneidades individuales y
permitan un aprovechamiento más eficiente
de sus recursos.
El objetivo, entonces, del presente infor-
me es brindar información en general sobre
los distintos tipos de sociedades, agru p a m i e n-
tos o contratos que en nuestro país pueden
adoptar los productores agropecuarios, mar-
cando sus características distintivas, sus form a s
legales y de control, algunos aspectos conta-
bles, sus efectos impositivos y previsionales y
un resumen de las ventajas o desventajas de su
implementación, teniendo siempre en cuenta
las características del plan del PRODERNEA, la
región en que se aplica y el nivel operativo de
los posibles beneficiarios de este plan.
26 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Nuestro país está definido mundialmen-
te como una economía agroproductora y
a g r o e x p o rtadora. No obstante, vemos que
nuestra legislación de fondo no ha receptado
con la rapidez que los tiempos imponen los
cambios constantes que se van produciendo
en la forma de concretar negocios agropecua-
rios. Aun hoy encontramos vigente la antiquí-
sima Ley 13.246/48 de arrendamiento rural y
aparcería, que ha tenido en el año 1980 una
última modificación legislando respecto de los
contratos accidentales.
Y recién en 1999, se sancionaron las
Leyes 25.169 y 25.113 de Contrato Asociativo
de Explotación Tambera y de Contratos de
Maquila, respectivamente, cuando dichas acti-
vidades se llevaban adelante desde hacía mu-
cho tiempo sin tener un marco regulatorio.
Nuestra legislación prevé diversas alter-
nativas para llevar adelante un negocio, ya sea
mediante la decisión de constituirse en forma
unipersonal o asociada, tomando la forma de
sociedad de personas, sociedad de capital o
mixtas1.
Sociedad de personas: es aquella socie-
dad donde la relación entre los socios es muy
estrecha y requiere un afecto especial entre
ellos, a causa de las responsabilidades que van
a adquirir en forma individual respecto de los
compromisos societarios. Se prioriza el cono-
cimiento personal, la amistad, la afinidad
entre las partes, antes que la solvencia patri-
monial. En esta categoría encontramos las So-
ciedades Colectivas; en Comandita Simple; de
Capital e Industria; Accidentales y en Parti-
cipación; en Comandita por Acciones en la
parte del socio comanditado, y las Sociedades
de Hecho.
Sociedades de capital: son aquellas en
que la calidad entre los accionistas no es teni-
da en cuenta, sino lo que prevalece es su sol-
vencia patrimonial, tal es el caso de la So-
ciedad Anónima.
Sociedades mixtas: en este tipo pode-
mos encuadrar a las Sociedades de Respon-
sabilidad Limitada, donde el afecto societario
y la solvencia van de la mano, aunque algunos
tratadistas las ubican dentro de las sociedades
de personas.
2. FORMAS ASOCIATIVAS
27Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Según pautas generales emitidas por los
distintos organismos de contralor societario2,
cada jurisdicción provincial y la Ciudad Autó-
noma de Buenos Aires dictan su propia nor-
mativa sobre regulación y control de las socie-
dades, desde su inscripción original hasta su
posterior información anual, así como tam-
bién hasta en la forma y presentación de sus
Estados Contables; Memoria Anual; Notas;
procedimientos sobre rúbrica de libros; pre-
sentación y formalidades de contratos; tasas
de funcionamiento y constitución, y régimen
sancionatorio por incumplimiento.
En general, en el momento de la adop-
ción de un tipo societario previsto en la Ley
19.550 de Sociedades Comerciales, o siendo
Sociedad Civil, de acuerdo con el Código Civil,
los requisitos –con algunas variantes según la
jurisdicción– son muy similares, debiendo
siempre adaptarse a las normas que cada juris-
dicción determine.
Por ello en general podemos establecer
una lista de procedimientos que normalmen-
te son comunes entre las distintas jurisdiccio-
nes dependiendo del momento en que se
encuentre la decisión asociativa:
Momento de la constitución
societaria
= Se debe definir entre los socios el tipo
societario, el objeto social, el capital social ini-
cial del cual en algunos casos se deberá contar
con el 25 por ciento en efectivo en el momen-
to de suscripción del contrato, el domicilio
legal –el cual determinará la jurisdicción de
control legal societario–, y demás aspectos
formales de la futura sociedad, ejemplo, cierre
de sus Estados Contables.
= Se debe ubicar el asesoramiento profe-
sional de confianza, tanto legal como conta-
ble, a efectos de redactar el contrato tipo a
suscribir.
Momento de la inscripción
o registro societario
= Se solicitará ante la Inspección General
de Justicia (IGJ) o Dirección Provincial de
Personas Jurídicas (DPPJ) o Registro Público
de Comercio (RPC) la reserva de nombre o
denominación social de acuerdo con la juris-
dicción que se trate.
= Se tendrá que designar una escribanía o
escritorio notarial, donde se suscribirán y cer-
tificarán los documentos, y obtener un dicta-
men profesional de contador público o aboga-
do sobre el contenido, naturaleza y personali-
dad de los integrantes que lo suscriben –en
algunas jurisdicciones a este dictamen espe-
cial se lo denomina “dictamen de precalifica-
ción”, o “dictamen precalificado”–, que acom-
pañará al contrato suscripto y deberá estar
certificado por el consejo o colegio profesio-
nal respectivo, donde el profesional se encuen-
tre matriculado.
3. DE LA CONSTITUCIÓN SOCIETARIA EN GENERAL
28 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
= Se deberá dar inicio al trámite de ins-
cripción ante el organismo de contralor inter-
viniente, y, por lo general, se requiere presen-
tar ante éste el contrato suscripto y certificado
por escribano o notario público, el dictamen
precalificado certificado por el consejo res-
pectivo, formulario o sellado de intervención
de inicio de trámite, publicación de edictos en
el Boletín Oficial de la jurisdicción, acreditar
los depósitos de ley, adquirir los libros societa-
rios obligatorios (Diario, Inventario, Actas),
rubricar libros y, dependiendo de la jurisdic-
ción interviniente, pagar la tasa de constitu-
ción de sociedad.
Es importante saber que toda Sociedad
cobra vida desde el momento de su constitu-
ción, generando obligaciones y relaciones
entre los socios que la integren.
En tanto que los pasos previamente des-
criptos no se hayan cumplido ante el organis-
mo de contralor y el contrato constitutivo no
se encuentre inscripto, éste no puede ser opo-
nible frente a terceros, lo cual provoca que,
cualquiera que sea el tipo societario adoptado,
si no está debidamente inscripto, los socios
son considerados responsables en forma soli-
daria e ilimitadamente entre sí.
29Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
La siguiente es una nómina de los contra-
tos, sociedades, asociaciones y/o alianzas es-
tratégicas a los que el pequeño productor
puede acceder. Existen otras formas o modali-
dades, pero en el presente informe nos referi-
remos específicamente a:
4.1. Contratos Agropecuarios
Asociativos
4.2. Sociedades de Hecho
4.3. Sociedades Comerciales regulares
(S.R.L./S.A.)
4.4. Uniones Transitorias de Empresas
(U.T.E.)
4.5. Asociaciones de Colaboración
Empresaria (A.C.E.)
4.6. Cooperativas
4.7. Contratos de Fideicomisos no
Financieros
4.8. Sociedades Civiles
4.9. Consorcios de Cooperación
Ley 26.005/05
4.1. CONTRATOS AGROPECUARIOS
ASOCIATIVOS
Es muy amplia la clasificación de los
Contratos Agropecuarios utilizados en la
actualidad, algunos se encuentran regulados
en el Código Civil, otros en la Ley 13.246 ya
mencionada, de arrendamientos y aparcerías,
y otros no poseen regulación alguna.
Como característica principal los Contra-
tos Agropecuarios pueden clasificarse como:
- Asociativos
- De cambio
Los primeros tienen un fin de lucro en
función de la inversión del capital y del riesgo.
En los de cambio, el dueño del predio no
toma el riesgo propio de la actividad; por
ejemplo, en el contrato de arrendamiento se
cede el uso y goce del predio y el dueño del
campo recibe una suma de dinero.
En los contratos asociativos, el resultado
dependerá de la actividad que se realice, y
muchas veces existen cláusulas que surgen de
los usos y costumbres propias de la actividad.
Ambas partes asumen el riesgo, y participan
tanto en las utilidades como en las pérdidas.
Podemos clasificar a los contratos asocia-
tivos en:
= Contratos asociativos regulados por la
Ley 13.246/48
- Aparcería Agrícola
- Aparcería Pecuaria
= Contratos asociativos no regulados por
la Ley 13.246/48
- Capitalización de hacienda
- Contrato asociativo accidental
- Contrato de pastoreo
- Contrato de pastaje
- Contrato de locación de obra rural,
entre otros
4. TIPOS DE ASOCIATIVISMO
30 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
= Contratos regulados por leyes especia -
les
- Contrato Asociativo de Explotación
Tambera
- Maquila
Desarrollaremos a continuación, los con-
tratos que pueden celebrarse dadas las carac-
terísticas de los productores y de acuerdo con
lo mencionado en la Introducción.
4.1.1. CONTRATOS ASOCIATIVOS
ACCIDENTALES
4.1.1.1. Objetivo
Estos contratos se caracterizan por ser de
un plazo breve y con un fin determinado. Nor-
malmente los pools agropecuarios recurren a
esta modalidad.
La Ley Nº 13.246/48 de arrendamientos
rurales y aparcerías, en su Artículo 39 inciso a)
determina que serán contratos accidentales:
“Los contratos en los que se convenga,
por su carácter accidental, la realización
de hasta dos (2) cosechas como máxi-
mo, ya sea a razón de una (1) por año o
dentro de un mismo año agrícola, cuan-
do fuera posible realizarla sobre la
misma superficie, en cuyo caso el con-
trato no podrá exceder el plazo necesa-
rio para levantar la cosecha del último
c u l t i v o ” .
Es decir que son contratos de tipo acci-
dental que se diferencian de las aparcerías
legisladas en el Artículo 21 de la Ley 13.246
sólo en el plazo de duración, ya que estos últi-
mos contratos se celebran como mínimo por
tres años, pero en esencia son también de tipo
asociativo.
4.1.1.2. Formas de constitución
El contrato se debe celebrar por escrito y
es conveniente que se homologue como acci-
dental ante el juez de la jurisdicción respec-
tiva.
Si el contrato accidental está homologa-
do, es título suficiente para desocupar el fun-
do al vencimiento del contrato, siendo este
aspecto muy importante a tener en cuenta.
En estos contratos, una parte se obliga a
ceder el uso y goce de un predio rural, estipu-
lándose los aportes que realizarán los compo-
nentes; también los campos pueden ser arren-
dados.
Generalmente a la finalización de la cose-
cha se reparten los frutos.
En caso de reiteración del contrato entre
las mismas partes o sobre el mismo campo,
caeríamos en la figura de aparcería agrícola
regulada por la ley 13.246/48 o en un arrenda-
miento si el pago se pactó en dinero.
4.1.1.3. Aspectos impositivos
y previsionales
Cada partícipe podrá inscribirse en el IVA
y en Ganancias y podrán ser tanto personas
físicas como jurídicas.
Si son personas físicas, constituyen ex-
plotaciones unipersonales, correspondiendo
el pago de jubilación de autónomos, de acuer-
31Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
do con la tabla incorporada como Anexo I al
presente informe.
En estos casos, la variable determinante
del costo del pago de autónomos estará dada
por la cantidad de trabajadores que contrate la
explotación unipersonal; en el anexo citado se
muestra el detalle.
Si alguna de las partes interv i n i e n t e s
opta por la figura de monotributista, remiti-
mos a la lectura del Anexo II del presente in-
forme.
Impuesto al Valor Agregado
Puesto que en estos contratos existe ries-
go empresario y participación en las decisio-
nes, cada parte mantiene su individualidad y
no se crea una entidad distinta de las personas
que lo integran3.
Cada uno de los socios accidentales inter-
vinientes adquiere los insumos a su nombre,
generándose los créditos fiscales respectivos.
La distribución de los frutos al levantar la
cosecha se encuentra fuera del ámbito del gra-
vamen, puesto que el aparcero no vende ni da
en pago al aparcero dador el porcentaje con-
certado, sólo es un reparto de frutos que deri-
va de esa colaboración.
El hecho imponible en el IVA nace para
cada uno en el momento que deciden vender
los frutos, generándose entonces el débito fis-
cal para cada partícipe, quienes descontarán
los créditos fiscales que hayan venido acumu-
lando hasta ese momento.
También debemos considerar que según
sea el producto cosechado, a los efectos de
acceder al llamado reintegro sistemático, pre-
visto en la RG AFIP 1.394/02, es decir reten-
ción del 8 por ciento con una devolución del
7 por ciento para granos no destinados a la
siembra y legumbres secas, deberá inscribirse
en el Registro Fiscal de Operadores de Granos
(RFO); en caso contrario, el adquirente le
retendrá el total del IVA (10,5 por ciento) con
el consiguiente perjuicio financiero, puesto
que en ese supuesto no procederá la mencio-
nada devolución.
Para el caso del arroz, como la alícuota
del Impuesto al Valor Agregado es del 21 por
ciento, la retención por el régimen de la
1.394/02 es del 18 por ciento con una devolu-
ción sistemática del 9 por ciento sólo en el
caso en que el productor se encuentre inscrip-
to en el RFO, si no la retención será del 21 por
ciento sin devolución.
Impuesto a las Ganancias
Cada uno de los socios accidentales
incorporará en su declaración jurada el resul-
tado de estos contratos como renta de la ter-
cera categoría4, de modo que si son personas
físicas o sucesiones indivisas determinarán el
tributo a alícuotas progresivas y si son socieda-
des a la alícuota del 35 por ciento.
Cuando se vendan los frutos, cada part e
será sujeto pasible de la retención del Impues-
to a las Ganancias prevista en la RG AFIP
2.118/2006 para el caso de granos no destina-
dos a la siembra y legumbres secas, la cual pre-
vé una retención del 2 por ciento por encima
de un mínimo no sujeto a retención de 12.000
pesos por cada pago sin considerar el IVA ,
entre otros conceptos, sólo en el caso en que el
productor esté inscripto en el Registro Fiscal de
Operadores, instituido por la RG 1.394/02.
En caso contrario, la retención será del 8
por ciento sin mínimo, lo cual resulta ser una
penalidad para el productor no inscripto en el
Registro Fiscal de Operadores de Granos
(RFO); si el productor no está inscripto en
el Impuesto a las Ganancias la retención será
del 28 por ciento sin aplicación de mínimo
a l g u n o .
Impuestos patrimoniales
En definitiva estos contratos accidentales
por cosecha que estamos analizando son del
tipo de los asociativos y cada una de las partes
se convierten en coproductores.
Si los socios accidentales son personas
físicas o sucesiones indivisas constituirán ex-
plotaciones unipersonales y, por lo tanto, no
corresponde el régimen de responsable susti-
tuto5.
En estos casos los partícipes tributarán el
Impuesto sobre los Bienes Personales, consi-
derando en forma individual el activo menos
el pasivo al 31 de diciembre.
En cambio, si alguna de las partes es una
sociedad regular o Sociedad de Hecho de obje-
to comercial, tributará junto con sus otros bie-
nes, neto de las deudas, el Impuesto sobre los
Bienes Personales como responsable susti-
t u t o .
En el Impuesto a la Ganancia Mínima
Presunta cada integrante tributará con los bie-
nes que ha aportado según el contrato, apli-
cando las normas de valuación que surgen de
la norma de GMP, y si el activo es superior a
200.000 pesos será contribuyente del grava-
men, siendo la alícuota aplicable del 1 por
ciento sobre la base imponible.
A su vez, el Impuesto a las Ganancias de-
t e rminado para el ejercicio fiscal por el cual se
liquida el Impuesto a la Ganancia Mínima
Presunta se computará a cuenta de este último.
4.1.1.4. Ventajas y desventajas
Como lo indicáramos en Pool de siem-
bra, efectos legales e impositivos 6 existen ven-
tajas y desventajas:
Ventajas
= No constituyen sociedades, cada parte
mantiene su individualidad.
= No se crea una entidad distinta de las
personas que lo integran.
= Se celebra por una cosecha o a lo sumo
dos.
= En el IVA, el hecho imponible nace para
cada uno de los partícipes en el momento que
decidan vender los frutos y no cuando se
reparten los mismos.
= En el Impuesto a las Ganancias, cada
p a rtícipe, si fuera persona física, tributará
sobre el resultado final del negocio a alícuotas
progresivas y no proporcionales.
= En el Impuesto a la Ganancia Mínima
Presunta, en el caso de ser los socios personas
físicas el pago a cuenta del Impuesto a las
Ganancias será del 35 por ciento de la utilidad
impositiva, aunque en forma individual los
partícipes hayan tributado a alícuotas progre-
sivas.
= En el Impuesto sobre los Bienes Per-
sonales, si el socio accidental es una persona
física o socio de una Sociedad de Hecho agro-
32 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
33Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
pecuaria pura, tendrá derecho al mínimo no
imponible de 102.300 pesos.
Desventajas
= Cada partícipe será considerado copro-
ductor y por lo tanto deberá inscribirse en el
Registro Fiscal de Operadores de Granos.
= Si se continúa con la actividad en el
mismo predio dejará de ser un contrato acci-
dental y se aplicarán las disposiciones de la a-
parcería agrícola regulada por la Ley 13.246/ 48.
4.1.2. AGRUPAMIENTO PARA ADQUISICIONES
ESPECIALES (ANEXO IV RG 1.415/03 AFIP)
4.1.2.1. Objetivo
Se podrán agrupar los productores agro-
pecuarios bajo esta modalidad sin tener nece-
sariamente un vínculo societario especial, la
única vinculación entre ellos se determinará
por la facturación por separado de la compra
de un bien de uso.
Debe tratarse de compra de bienes mue-
bles para ser afectadas como bien de uso, por
un conjunto de usuarios.
En la mencionada Resolución se dispone
que el vendedor facturará el bien en forma
proporcional a cada integrante del conjunto.
A tal fin podrá optar por:
a) Confeccionar facturas globales dirigi-
das a varios compradores que revistan el
mismo carácter frente al Impuesto al Va l o r
Agregado (responsables inscriptos, exentos,
etc.) o al Régimen Simplificado (Monotributo).
En estos casos deberá consignarse la
totalidad de los datos de cada uno de ellos y la
parte indivisa que le corresponde en el precio
neto y, de resultar procedente, en el IVA.
b) Emitir tantas facturas como compra-
dores existan.
4.1.2.2. Formas de constitución
Principalmente se da en los casos de
adquisición, entre varios productores, de
maquinaria agrícola cuyo costo es importante,
previendo el uso compartido entre todos en
el establecimiento de cada uno, como tam-
bién los turnos, manejo y mantenimiento.
No se requiere necesariamente un con-
trato. Aunque se recomienda redactarlo, a los
efectos de otorgar un marco adecuado para
reglamentar los aspectos formales acordados,
en especial respecto de los temas laborales.
Este contrato podrá contener textos refe-
ridos a condiciones de compra, part i c i p a c i o-
nes en pesos y en porcentajes, formas de pago,
pautas sobre mantenimiento y gastos, forma o
aspectos a determinar en el momento de deci-
dir la venta del equipo adquirido, etcétera.
Se trata en realidad de un condominio,
que estaría regulado por el Artículo 2.673 y
siguientes del Código Civil.
4.1.2.3. Aspectos impositivos
y previsionales
Cada productor, entonces, recibirá la fac-
tura por la parte que le corresponde en el bien
de uso adquirido.
Si fuera un contribuyente inscripto en
IVA tendrá derecho al cómputo del crédito fis-
cal correspondiente.
En el momento de la venta del bien cada
parte facturará su porcentaje y en el caso de
que sea inscripto en IVA deberá abonar el
débito fiscal correspondiente
En el Impuesto a las Ganancias computa-
rán las amortizaciones correspondientes en la
parte proporcional.
4.1.2.4. Ventajas y desventajas
Ventajas
= Se comparte la inversión en los bienes
adquiridos.
= Promueve la tecnificación entre produc-
tores.
= No son sociedades.
Desventajas
= Contingencias de tipo laboral para todos
los condóminos.
= Cada condómino puede enajenar su
parte indivisa y sus acreedores pueden hacer-
la embargar y vender antes de hacer la división
entre las partes.
4.2. SOCIEDADES DE HECHO
4.2.1. OBJETIVO
Se trata de un grupo de tipo informal.
Bajo este tipo de figuras habitualmente se aso-
cian los productores agropecuarios, teniendo
en cuenta lo comentado en el ítem 2 sobre
sociedades de personas; es aquí donde el afec-
to e interés personal supera la situación patri-
monial del emprendimiento, ya que al no
estar reguladas por normas, la responsabilidad
es directa solidaria e ilimitada entre los socios
integrantes.
Normalmente vemos este tipo de socie-
dad en empresas familiares o en las que existe
una gran afinidad por amistad, lo cual hace
factible que este tipo social funcione adecua-
damente.
No necesita la formalidad de un contrato
para su existencia, como tampoco inscripción
en registro de contralor societario7; no obs-
tante, y atendiendo a la clase y expectativas
del negocio agropecuario, se recomienda que
exista un contrato escrito suscripto por las
partes, el cual sólo generará obligaciones en-
tre los socios de acuerdo con el grado de for-
malidad que éste posea (es decir si está certi-
ficado por escribano o no); sin embargo, el
mismo no puede ser oponible ante terceros
a efectos de aliviar la responsabilidad de los
socios.
Para la redacción del contrato se puede
tomar cualquier modelo tipo de contrato
social (pero esto es sólo al efecto de dotar de
alguna personalidad al convenio entre las par-
tes de una Sociedad de Hecho). Creemos que
el que más se asemeja o adecua en las obliga-
ciones y responsabilidades puede ser el de
una S.R.L., ya que la misma también es consi-
derada en doctrina una sociedad de personas
o mixta.
Es una Sociedad sin personería jurídica,
lo que indica un compromiso social importan-
te, debiendo los partícipes buscar la manera
34 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
de resguardar sus bienes propios de cualquier
efecto no deseado.
Las partes que se unen para realizar un
emprendimiento pueden aportar bienes o
dinero, se cuantifican estos aportes estable-
ciéndose el porcentaje de participación de
cada socio, su aporte individual y en algunos
casos el detalle de aporte de bienes.
4.2.2. FORMAS DE CONSTITUCIÓN
Y FUNCIONAMIENTO
Estas sociedades están regidas por la Ley
19.550. Según Nissen8 “son sociedades de he-
cho las que carecen de instrumentación y en
las cuales los socios han prestado su consenti-
miento verbal, a los fines de realizar una acti-
vidad económica determinada, dispuestos a
repartirse las utilidades y soportar las pérdi-
das. En cambio, en las sociedades irr e g u l a r e s
sus integrantes han suscripto el contrato
social, que se encuentra ajustado al Art í c u l o
11 de la Ley 19.550, con todos los elementos
y requisitos por él dispuestos, pero sin
embargo, adolece de vicios de forma, por la
omisión de la registración prevista en el
A rtículo 7 de la citada ley...”.
La existencia de una Sociedad de Hecho
puede acreditarse por cualquier medio de
p rueba, y se reconoce su existencia en la realiza-
ción de una actividad económica determ i n a d a .
- Tiene una personalidad jurídica precaria
o limitada.
- Sólo puede estar integrada por perso-
nas físicas.
- El gerenciamiento lo lleva a cabo algún
integrante de la sociedad.
- Los socios tienen responsabilidad direc-
ta y responden con el capital invertido en la
Sociedad y con el patrimonio individual en
forma directa ilimitada y solidaria.
- No se encuentran reguladas por la Ley
Nº 19.550.
- Pueden utilizar nombre de fantasía.
- No está inscripta o regularizada en el
organismo correspondiente.
- Puede ser representada por cualquiera
de los socios, quien obliga con sus actos a
nombre de la Sociedad a todos sus integrantes.
4.2.3. ASPECTOS IMPOSITIVOS
Y PREVISIONALES
La Sociedad tiene su CUIT individual, dis-
tinto del de sus integrantes; en el momento
de la inscripción ante AFIP, se deberá presen-
tar el CUIT de cada uno de sus integrantes a
causa de que por la forma de presentación y
liquidación de sus tributos la Sociedad debe
asignar sus resultados a cada uno.
Impuesto al Valor Agregado
La compra de insumos, las prestaciones
de servicios, los gastos generales, la venta de
productos agropecuarios son hechos grava-
dos en el IVA, y será la Sociedad de Hecho
sujeto pasible de retención según el producto
primario que venda.
Con respecto a los socios y su relación
con los actos de la Sociedad, se considera que
estos no son sujetos alcanzados por el IVA, por
la distribución de las utilidades que reciben
provenientes de la Sociedad de Hecho.
35Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Impuesto a las Ganancias
No son contribuyentes del Impuesto a
las Ganancias, por lo tanto no requieren ins-
cripción fiscal en dicho tributo.
Su período fiscal coincide en general con
el año calendario. Con respecto a éste, si se tra-
tare de una Sociedad de Hecho que posee ins-
cripción en el Registro Público de Comercio y
lleva libros rubricados, su ejercicio fiscal coinci-
dirá con el que se establezca como ejercicio
comercial, pudiendo éste no coincidir con el
año calendario.
La AFIP-DGI determina que la utilidad
impositiva obtenida, en el período fiscal de
que se trate, sea declarada y presentada junto
con la declaración jurada del socio con mayor
p a rticipación y, en caso de part i c i p a c i o n e s
iguales, por el del CUIT más bajo9.
En esta declaración se asignará la men-
cionada utilidad a cada participante de acuer-
do con el porcentaje previamente establecido,
pudiendo distribuir también las retenciones y
percepciones que por este impuesto la Socie-
dad haya sufrido durante el mencionado pe-
ríodo fiscal, de acuerdo también con el mismo
porcentaje.
Se distribuirá entre los socios la utilidad
como renta de la tercera categoría, es decir
que cada socio tributará el impuesto a alícuo-
tas progresivas que van del 9 al 35 por ciento.
Impuestos patrimoniales
Si la Sociedad de Hecho es de objeto
civil, en nuestro caso agropecuaria pura, y no
realiza ninguna tarea distinta –como puede
ser el caso de labores como contratista rural–,
entonces no es sujeto del gravamen a las par-
ticipaciones societarias.
Por lo tanto, cada uno de los socios tribu-
tará Impuesto sobre los Bienes Personales, de-
biendo incorporar en sus declaraciones jura-
das la participación en las mencionadas Socie-
dades de Hecho (activo menos pasivo imposi-
tivo).
Pero si una Sociedad de Hecho agrope-
cuaria presta, además, servicios a terceros co-
mo contratista rural o laboreo, deja de encua-
drarse como de objeto civil y se la considera
comercial; por lo tanto, en el caso planteado
debe tributar el Impuesto sobre los Bie-
nes Personales como responsable sustituto,
aplicando la alícuota del 0,50 por ciento sobre
el activo menos el pasivo impositivo de la
Sociedad.
Previsionales y Monotributo
Cada socio integrante es contribuyente
de autónomos en la categoría que correspon-
da según lo explicado en el ítem 4.1.1.3. (ante-
último párrafo).
También aquellas integradas por hasta
tres socios pueden optar por el Monotributo.
En el Anexo II puede consultarse un resumen
de este Régimen Simplificado.
4.2.4. VENTAJAS Y DESVENTAJAS
Ventajas
= La que consideramos más importante es
la falta de requisitos legales e instrumentales
para su constitución.
36 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
= Por tratarse de un grupo informal, no re-
quiere tener una contabilidad registrada en
libros legales10, a excepción de aquellos que se
establezcan como obligatorios para registros
fiscales (RG AFIP-DGI 1.415/03); no obstante,
se recomienda la implementación de algún me-
canismo de rendición de cuentas periódico o
bien establecer un sistema contable de infor-
mación.
= El procedimiento de rendición de cuen-
tas posiblemente tenga una razón de ventaja
en la medida que el “affectio societatis” no sea
un punto oponible entre los socios, ya que
todos son conscientes responsables de la falta
de entidad jurídica que caracteriza a las Socie-
dades de Hecho.
= Desde el punto de vista del Impuesto a
las Ganancias las Sociedades de Hecho no son
contribuyentes y cada socio tributará a la alí-
cuota progresiva que le corresponda como
renta de la tercera categoría.
Desventajas
= Los socios tienen responsabilidad direc-
ta y responden con el capital invertido en la
Sociedad y con el patrimonio individual en
forma ilimitada y solidaria.
= El retiro o fallecimiento de algún socio
implica que la Sociedad desaparece ya que
tiene individualidad propia por los socios ori-
ginantes, por lo tanto no es posible modificar
su estructura societaria; impositivamente se
debe dar de baja la Sociedad y por consiguien-
te tributar IVA y Ganancias por los bienes que
posee el ente, es decir que su participación no
es transmisible.
= No se pueden adquirir ciertos bienes
registrables (por ejemplo, campos), ya que
se debería constituir un condominio propie-
tario.
= La principal dificultad de esta figura
desde el punto de vista fiscal está dada por
la incidencia impositiva del retiro de algún
socio.
En el Dictamen Nº 53/97 (DAL)11, se con-
sulta si el retiro de un socio de una Sociedad
de Hecho y su reemplazo por otro trae apa-
reada la disolución de la Sociedad y la forma-
ción de una nueva, con el correspondiente
cambio de CUIT.
El fisco en esta instancia indicó que el
retiro de un socio de una Sociedad de Hecho
conduce a la liquidación y disolución de la
misma.
También en el Dictamen 60/03 (DA L )1 2
–16/10/2003– se consultó qué sucede cuando
fallece uno de los dos socios. En este caso el
fisco respondió que en el momento de ocu-
rrir el fallecimiento debió darse de baja el
CUIT y proceder a solicitar uno nuevo para
la Sociedad de Hecho que se había constitui-
d o .
Por lo que cada vez que se produce un
retiro de un socio en una Sociedad de Hecho
los efectos impositivos son:
= En el IVA la adjudicación de los bienes a
los socios implica un concepto asimilable a
venta impositiva debiendo tributarse el
impuesto por la transferencia de los bienes
(Artículo 2, Ley de IVA).
= En el Impuesto a las Ganancias, según el
A rtículo 71 del DR, la adjudicación de bienes
por disolución se considerará realizada al pre-
cio de plaza.
37Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
4.3. SOCIEDADES COMERCIALES
REGULARES
4.3.1. SOCIEDAD DE RESPONSABILIDAD
LIMITADA
4.3.1.1. Objetivo
Este tipo societario es de categoría mixta,
donde la sociedad de personas se relaciona
también por patrimonio; son las llamadas
sociedades de cuotas, no es una sociedad por
acciones, ya que sus partícipes se relacionan
en función del capital aportado o integración,
dividido en cuotas partes. Representan el tipo
societario legal utilizado por las empresas me-
dianas y pequeñas agropecuarias.
Sus socios son responsables limitada-
mente al capital que suscriben, resguardando
sus bienes personales de las contingencias de
los negocios de la Sociedad.
Sus cuotas pueden transmitirse libremen-
te, entre socios o terceros que se incorporarán
como tales, existiendo algunos casos en que
los socios constituyentes incorporan cláusulas
especiales a efectos de limitar el ingreso de
socios cuando desean resguardar algún nego-
cio de familia.
El gerente es quien representa y adminis-
tra la Sociedad. Puede ser socio o no. Si se
extralimita de sus funciones, responde por sus
actos solidaria e ilimitadamente, y en general
tiene las mismas incompatibilidades que un
director de S.A.
La capacidad de respuesta patrimonial de
la Sociedad frente a terceros estará marcada
por el valor de su patrimonio neto, ya que este
es el límite de responsabilidad asumida por
los socios.
4.3.1.2. Formas de constitución
Se encuentran dentro del grupo de so-
ciedades formales, por lo tanto necesitan un
contrato de acuerdo con los requisitos esta-
blecidos en la Ley de Sociedades Comercia-
les y el organismo de contralor jurisdiccional
que corr e s p o n d a .
El contrato podrá realizarse por instru-
mento privado o por escritura pública. Una
vez que esté inscripto en el organismo de con-
tralor respectivo producirá efectos sobre ter-
ceros.
Las cuotas de los socios son transmisi-
bles, por lo que no puede prohibirse su trans-
misibilidad, pero sí limitarse, incorporando
cláusulas que lo establezcan en el contrato, tal
como se comenta en 4.3.1.1.
La cantidad de socios no puede exceder
los cincuenta13. En caso de fallecimiento de un
socio, los herederos menores de edad pueden
formar parte de este tipo societario, al igual
que el cónyuge del fallecido, o bien quien re-
sulte beneficiario de las cuotas partes como
derechohabiente sucesorio del fallecido o
bien quien las hubiere recibido como legado o
donación excepto que existan cláusulas espe-
ciales en el contrato original que lo impidan14.
La denominación social debe ir acompa-
ñada por los términos “Sociedad Responsa-
bilidad Limitada” o la sigla S.R.L.
En cuanto al registro de sus actos, por
tratarse de una sociedad regular necesita
libros obligatorios de Comercio15, con más un
libro de actas de reuniones de socios, donde
se tomará nota de las deliberaciones de éstos
y debiendo cumplirse los requisitos de cual-
quier anotación legal, sirviendo éstos de
medios de prueba.
38 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Su contrato social puede ser modificado,
pero por tratarse de una sociedad de perso-
nas, ante la posibilidad de incorporación de
un nuevo socio, el contrato social debe ser
modificado generando otro que incorpore la
figura del nuevo socio manteniendo o modifi-
cando las cláusulas del anterior.
4.3.1.3. Aspectos impositivos
y previsionales
Impuesto al Valor Agregado
La compra de insumos, las prestaciones
de servicios, los gastos generales, la venta de
productos agropecuarios son hechos grava-
dos en el IVA, y será la Sociedad el sujeto pasi-
ble de retención según el producto primario
que venda.
Con respecto a los socios gerentes, las
prestaciones inherentes al cargo están exentas
del IVA para los socios gerentes, siempre que
se acredite la efectiva prestación de servicios y
exista una razonable relación entre el honora-
rio y la tarea desempeñada.
Impuesto a las Ganancias
La Ley de Impuesto a las Ganancias asi-
mila las ganancias obtenidas por esta Sociedad
a las de las sociedades de capital (Sociedades
Anónimas), por lo tanto tributan el impuesto a
la alícuota del 35 por ciento sobre la ganancia
impositiva.
Este tema es de absoluta discusión y la
asimilación se debe al simple hecho recauda-
torio, ya que estamos en presencia de una
sociedad de personas (véase la Ley de
Sociedades Comerciales) por lo que corres-
pondería que la utilidad fuera distribuida de
acuerdo con lo establecido en el contrato
social.
Su período fiscal coincidirá con el cierre
de su ejercicio económico.
Impuestos patrimoniales
Las S.R.L. son contribuyentes del Im-
puesto sobre los Bienes Personales como res-
ponsable sustituto, aplicando la alícuota del
0,50 por ciento sobre el patrimonio neto
societario con más o menos los aportes o reti-
ros producidos desde el cierre del ejercicio
hasta el 31 de diciembre de cada año.
Como resultado del párrafo anterior los
socios tendrán exenta su participación en el
Impuesto sobre los Bienes Personales.
Aspectos previsionales
Las personas que cumplen funciones de
“socio gerente” deberán realizar aportes jubi-
latorios en la categoría “D” de autónomos
(véase Anexo I), al igual que un director de
S.A. Si además de ser socios cumplen funcio-
nes en relación de dependencia en la
Sociedad que administran, no quedan obliga-
dos al pago de cargas sociales por los salarios
que perciban, excepto el aporte correspon-
diente a la ART debiendo abonar solamente
autónomos en estos casos.
Los demás socios que no revistan el
carácter de socios gerentes no están obligados
al aporte de autónomos.
39Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
4.3.1.4. Ventajas y desventajas
Ventajas
= Limita su responsabilidad al valor patri-
monial de sus cuotas partes.
= No hay mínimos establecidos en el apor-
te inicial de capital, excepto en la I.G.J. de la
C.A.B.A. que por la Resolución 7/05 establece
una serie de requisitos sobre la relación que
debe existir entre el tipo de sociedad que se
constituye y el capital social determinado.
= Son sociedades que tienen bajo nivel de
control por parte de los organismos societa-
rios durante su vida.
= Permite limitar la transmisibilidad de la
cuota social, como también la integración de
nuevos socios.
= Se protege el patrimonio personal de los
socios ante un mal funcionamiento de la So-
ciedad.
Desventajas
= No hay desventajas desde el punto de v i s -
ta impositivo al momento de elegir este tipo so-
cietario, ya que se encuentra asimilado a una S.A.
= Si comparamos en el Impuesto a las
Ganancias a estas sociedades con las de he-
cho, en este último caso se tributa a alícuotas
progresivas en cabeza de cada uno de los inte-
grantes.
= Quienes contraten o lleven adelante
negocios en conjunto o sean proveedores o
clientes de la S.R.L. deben saber que la respon-
sabilidad de este tipo societario se limita a res-
ponder por sus obligaciones con el capital
a p o rtado y, en todo caso, a su patrimonio neto.
= Posee un máximo legal referido a la can-
tidad de socios que pueden integrar la socie-
d a d .
4.3.2. SOCIEDAD ANÓNIMA
4.3.2.1. Objetivo
Doctrinariamente se entiende que la Ley
de Sociedades al regular a las S.A. lo hizo
desde el punto de vista de anular la identidad
del socio, en un sentido contrario al del resto
de las sociedades, tomando la figura del accio-
nista inversor como principal actor en la vida
de la S.A., el cual aporta capital a cambio de
recibir acciones “al portador” representativas
de ese capital; de allí el carácter de “anónima”,
sin identificación externa de sus integrantes.
Pero con el tiempo esta característica se
fue disipando, y con las modificaciones intro-
ducidas a la Ley de Sociedades y las incorpora-
das en las normativas fiscales las acciones per-
dieron el carácter de “al portador” pasando a
ser únicamente “acciones nominativas no en-
dosables”, con lo cual se podría interpretar
que hoy en día estamos frente a una sociedad
de capital nominado y no frente a una Socie-
dad Anónima.
Muchos autores sostienen que el legisla-
dor al redactar la Ley de Sociedades Comercia-
les pensó en este tipo societario apuntando a
las grandes empresas o a grandes masas de
capital volcados en actividades económicas.
Pero la realidad de nuestro país determi-
nó que este tipo societario, atento a la flexibi-
lidad natural que ofrece el marco legal, pueda
ser utilizado aun en sociedades pequeñas y
medianas, ya sea en sociedades de familia o de
40 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
pocas personas, y vemos hoy que muchas S.A.
se componen de dos accionistas que, además,
son director titular y suplente de la misma.
En estas sociedades predomina el factor
patrimonial como la única garantía de los acree-
dores; no obstante esto, aparece como rele-
vante la figura del Directorio, el cual tendrá
que ser elegido por los accionistas en forma
periódica y de acuerdo con su estatuto, pasan-
do a ser los directores titulares responsables
solidaria e ilimitadamente con su patrimonio
personal por los actos realizados con la S o -
ciedad. Por lo tanto, si los accionistas son per-
sonas distintas de los directores titulares, éstos
no tendrán responsabilidad personal alguna,
excepto con el patrimonio neto societario re-
presentado por su tenencia accionaria1 6.
Atendiendo a las características del apor-
te de su capital, las S.A. pueden ser constitui-
das como:
- Abiertas: son las que hacen oferta públi-
ca de sus acciones en los mercados de valores.
- Cerradas: son las que no ofrecen sus
acciones en el mercado de valores.
En la actividad agropecuaria, este tipo
societario es muy común, tanto en las socie-
dades de mucha antigüedad en el mercado,
como en las que se regularizan pasando de
Sociedades de Hecho a ser sociedades regula-
res. Esto es así por la característica de poseer
entidad jurídica propia, tener individualidad
fiscal, permitir ser administradas por poder, o
por un Directorio ajeno a los accionistas fun-
dadores, y, fundamentalmente, por ser suje-
tos de derecho y responder por sus obligacio-
nes con su patrimonio neto, más la obligación
personal del Directorio.
4.3.2.2. Formas de constitución
Las S.A. se constituyen por instru m e n t o
público ante escribano o notario público, quien
da testimonio de la escritura en un estatuto
s o c i e t a r i o .
La formalización de un estatuto de S.A.
se puede dar de dos maneras:
- Por acto único: o simultáneo, en el que
sus fundadores realizan la suscripción del ca-
pital en el momento de la constitución.
- Por suscripción pública: se da en la cons-
titución de sociedades abiertas al público. En
éstas se necesita una entidad financiera que
i n t e rviene en el momento de la suscripción de
las acciones. Los promotores son los encarga-
dos de gestionar y tramitar la suscripción hasta
la constitución de la misma.
El capital es representado por acciones
nominativas no endosables o escriturales. Los
accionistas limitan su responsabilidad a la inte-
gración de las acciones suscriptas.
Los aportes de capital se pueden realizar
en efectivo (25 por ciento se aporta al mo-
mento de la suscripción y el resto dentro de
los dos años siguientes) o en especie (se de-
berá integrar el 100 por ciento al momento de
la formalización del estatuto) 17.
La transmisión de las acciones es libre y
cada transferencia debe ser notificada a la So-
ciedad y al organismo de contralor a los efectos
de ser registrada en el Registro de Acciones.
La denominación social debe ir acompa-
ñada por la sigla S.A. o por los términos “So-
ciedad Anónima”.
La administración en las S.A. está a cargo
de directores, los cuales pueden ser accionis-
41Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
tas o no, y son designados por la asamblea por
un plazo de tres años o por el plazo que esta-
blezca el estatuto, pudiendo ser reelectos.
La representación social está a cargo del
presidente del Directorio, y tanto éste como
el resto de los directores titulares son respon-
sables solidaria e ilimitadamente hacia accio-
nistas, terceros y la sociedad en general por el
mal desempeño en sus funciones. Esta res-
ponsabilidad cesa cuando es aprobada su ges-
tión en la asamblea y son reemplazados den-
tro de los términos legales.
Los accionistas pueden decidir sobre la
existencia de un control societario basado en
una sindicatura, personal (síndico) o colegia-
da (consejo de vigilancia), en manos de profe-
sionales abogados o contadores públicos, los
cuales emitirán un informe como relatores de
las actividades del Directorio ante los accionis-
tas, cumpliendo siempre lo determinado en la
Ley de Sociedades.
La elección de una sindicatura es optati-
va para aquellas sociedades consideradas
cerradas que no coticen en la Bolsa, o bien se
trate de una Sociedad que no supere los lími-
tes establecidos por el Artículo 299 de la Ley
de Sociedades Comerciales.
En el caso de las sociedades abiertas la
sindicatura es obligatoria.
Atendiendo a las partes de interés que
i n t e rvienen, estas sociedades necesitan un sis-
tema contable, uno administrativo, auditorías,
presentación de Estados Contables ante los dis-
tintos organismos de contralor; en algunos se
abona una tasa anual de funcionamiento, re-
quieren presentación de asambleas de accionis-
tas y de reuniones del Directorio. Estas disposi-
ciones varían según sea el organismo actuante
en la jurisdicción original de la Sociedad.
4.3.2.3. Aspectos impositivos
y previsionales
Impuesto al Valor Agregado
Son sujetos de derecho a todos los efec-
tos impositivos, y pueden ser sancionadas fis-
calmente en forma directa como sujeto perso-
na jurídica. Tanto la compraventa de insumos,
las prestaciones de servicios, gastos generales,
como la venta de bienes y servicios son he-
chos gravados en el IVA, y serán sujetos pasi-
bles de retención y percepción según el pro-
ducto primario que se comercialice.
Con respecto a los accionistas y directo-
res titulares o suplentes, su relación con los
actos alcanzados por este impuesto en la So-
ciedad es totalmente ajena, y se considera que
todos los directores son sujetos exentos en
el IVA por los ingresos percibidos en su activi-
dad dentro de la Sociedad, tal como lo comen-
táramos en el caso de los socios gerentes de
las S.R.L.
Impuesto a las Ganancias
Tributan el impuesto a la alícuota del 35
por ciento sobre la ganancia impositiva1 8 g e n e-
rada en el período fiscal. Su período fiscal coin-
cidirá con el cierre de su ejercicio económico.
Impuestos patrimoniales
Las SA son contribuyentes del Impuesto
sobre los Bienes Personales como responsable
sustituto, aplicando la alícuota del 0,50 por
ciento sobre el patrimonio neto societario con
42 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
más menos aportes o retiros al 31 de diciem-
bre de cada año. Los accionistas tendrán exen-
ta su participación en la misma en el Impuesto
sobre los Bienes Personales.
Aspectos previsionales
Las personas que cumplen funciones de
“directores titulares” deberán realizar aportes
jubilatorios en la categoría “D” de autónomos
(véase Anexo I). Si el director titular cumple
funciones en relación de dependencia de la
Sociedad que administra, son válidas las consi-
deraciones hechas para el caso de las S.R.L.
Los directores suplentes no tienen carga
previsional de autónomos.
4.3.2.4. Ventajas y desventajas
Ventajas
= El accionista limita su responsabilidad a
su participación accionaria.
= Este tipo societario tiene una muy bue-
na imagen empresarial, atento a los deberes
formales que debe cumplir.
= No tiene límite en la cantidad de accio-
nistas que la pueden integrar y sus acciones
pueden ser transferidas libremente.
Desventajas
= Normalmente está sujeta al pago de una
tasa anual al organismo de contralor y tiene
control directo de éstos, dependiendo de la
jurisdicción donde se encuentre inscripta.
= Los directores titulares deberán suscri-
bir compromisos de buen cumplimiento de
sus funciones mediante seguros de caución o
depósitos reales de dinero o bienes en favor
de la Sociedad (ejemplo, en C.A.B.A.).
= Impositivamente este tipo societario tri-
buta el Impuesto a las Ganancias a la tasa máxi-
ma sobre su utilidad impositiva (35 por ciento).
= Es sujeto de control por parte de los
organismo de contralor con mayor énfasis que
el resto de las sociedades.
= Poseen una estructura administrativa y
contable compleja.
4.4. UNIONES TRANSITORIAS
DE EMPRESAS (U.T.E.)
4.4.1. OBJETIVO
Son un tipo de contrato de colaboración
empresaria cuyo marco legal está dado en los
A rtículos 377 a 383 de la Sección II de la Ley Nº
19.550 de Sociedades Comerciales; posee fin
de lucro, brinda seguridad jurídica a los pro-
ductores en el momento del reparto de los re-
sultados, se trata de agrupaciones cuyo carác-
ter transitorio se encuentra determinado por
el tiempo que demande el objetivo a cumplir.
Si bien están reguladas por la Ley de
Sociedades Comerciales, no podemos decir
que se trata de una sociedad, ya que carece de
capacidad para actuar por sí misma, y no es
sujeto de derecho19, actúa mediante la admi-
nistración de uno de sus intervinientes quien
debe rendir cuentas del seguimiento del obje-
tivo y del control de los aportes.
Sólo pueden actuar a través de la represen-
tación de alguno o algunos de sus miembros.
43Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
En sí se trata de una alianza o comple-
mentación de negocios entre empresas, sean
éstas nacionales o internacionales, a efectos
de aprovechar la capacidad de cada integrante
en el emprendimiento en conjunto que se rea-
liza y que será su fin último.
Las partes se unen para poder realizar
mejores negocios conjuntamente y lograr una
organización común, que coordine las activi-
dades de las empresas que la conforman para
poder así cumplir con el objetivo del contrato.
Estas alianzas estratégicas tienen como
finalidad el desarrollo de una obra, servicio o
suministro, mediante una organización común.
Se utilizan en la actividad agropecuaria,
por ejemplo, para la instalación de un sistema
de riego (obra), para prestación de serv i c i o s
agropecuarios, para exportar productos (sumi-
n i s t r o ) .
Esta forma asociativa actúa hacia afuera,
es decir, comercializan o prestan servicios a ter-
ceros, pudiendo hacerlo con sus integrantes.
4.4.2. FORMAS DE CONSTITUCIÓN
El contrato debe realizarse por instru-
mento privado o por escritura pública. Éste
produce efectos respecto de terceros una vez
inscripto en el Registro Público de Comercio
y/o Inspección General de Justicia.
Excepto alguna cláusula especial contrac-
tual, estas asociaciones no tienen responsabi-
lidad solidaria entre sus miembros por los
actos que ejecute ni por las obligaciones que
contraiga la U.T.E.20. Cada miembro responde-
rá exclusivamente por los bienes y el capital
destinados al negocio contractual que se trate.
La Ley de Sociedades obliga a definir su
objetivo en el contrato constitutivo (no puede
tener objeto indefinido) y a nombrar un admi-
nistrador. La denominación se forma con el
nombre o razón social de alguno o algunos o
todos sus miembros seguidos de la sigla U.T.E.
Su plazo de duración estará en relación
con el objetivo para el cual se crean, no te-
niendo plazo legal mínimo ni máximo.
Las decisiones se tomarán siempre por
unanimidad, salvo algún pacto en contrario, y
normalmente no se trata el tema de mayorías,
por lo que las causales del retiro, separación o
exclusión de alguno de sus miembros deberán
ser consideradas en el contrato.
Estos contratos también deben prever la
forma que tendrá la rendición de cuentas
entre los participantes.
Los mismos no tienen ni capital ni resul-
tados propios. El fondo común operativo per -
tenece a cada participante. Y en el caso de los
resultados generados por las U.T.E., se atribu-
yen a cada miembro.
Salvo pacto en contrario no se presume
solidaridad de los miembros por las operacio-
nes y actos desarrollados o ejecutados ni por
obligaciones contraídas por la U.T.E.
Cada integrante responde por su parte en
la operación o bien en el acto de que se trate.
Por último, la quiebra o el fallecimiento
de cualquier participante no producen la ex-
tinción del contrato, el cual continuará con los
restantes miembros.
En materia contable, la junta de gobiern o
de la Federación Argentina de Consejos Profe-
sionales de Ciencias Económicas (F. A . C . P. C . E . )
emitió la Resolución Técnica Nº 142 1 sobre in-
f o rmación contable de participaciones en
negocios conjuntos, y de sus considerandos se
desprende la aplicabilidad de la citada norm a
44 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
en este tipo de asociaciones y en aquellas que
surgen de la Ley de Sociedades como Agru -
paciones de Colaboración, y también en con-
tratos innominados, a tener en cuenta al mo-
mento de incorporar los efectos de estos con-
tratos en la contabilidad de los part i c i p a n t e s .
El antecedente inmediato de esta Reso-
lución Técnica Nº 14 es la Norma Internacio-
nal de Contabilidad (NIC) Nº 31 del Comité
I n t e rnacional de Normas Contables2 2 ( I . A . S . C . ) .
Como característica esta norma define a
un negocio conjunto como un contrato que
no otorga personalidad jurídica, en virtud del
cual dos o más partes desarrollan una activi-
dad económica con fin de lucro o sin él.
Como pauta de valuación de la part i c i p a-
ción, a tener en cuenta en la elaboración de los
estados contables de los participantes, se reco-
mienda la utilización del método de consolida-
ción proporcional, por el cual la inform a c i ó n
relativa al negocio conjunto se sumará línea por
línea a las partidas similares de los estados con-
tables del partícipe, o bien se presenta como
p a rtida separada dentro de cada ru b r o .
Asimismo se establece que deberán pre-
pararse estados contables del negocio conjun-
to, con el fin de mostrar el patrimonio en con-
dominio de los participantes y sus resultados,
para que cada uno pueda utilizarlos como base
para reflejar sus efectos en sus propios estados.
4.4.3. ASPECTOS IMPOSITIVOS
Y PREVISIONALES
Impuesto al Valor Agregado
Los negocios de la U.T.E., sean de obra,
prestación de servicios o suministros, son
actos gravados en el IVA; esto obliga a que nin-
guno de sus miembros pueda hacer propios
los créditos o saldos en favor que se generen
por este tributo, ya que el sujeto del impuesto
es la U.T.E.
Impuesto a las Ganancias
La U.T.E. no es sujeto del Impuesto a las
Ganancias; los resultados obtenidos por los
negocios en común se distribuyen entre sus
miembros, quienes los incorporan como
materia imponible en sus declaraciones jura-
das, y cada partícipe tributa por la ganancia
generada por su negocio individual más el que
le corresponde según su participación esta-
blecida en el contrato de la U.T.E.
Impuestos patrimoniales
En el Impuesto sobre los Bienes Perso-
nales, las participaciones en las U.T.E. de-
berán valuarse teniendo en cuenta la parte
proindivisa que cada partícipe posea en los
activos destinados a dichos fines, valuados de
acuerdo con las disposiciones de la Ley del
Impuesto a la Ganancia Mínima Presunta.
Aspectos previsionales
Es de destacar que estas asociaciones no
generan obligaciones previsionales para sus
integrantes, excepto las que correspondan en
el caso de contratación de personal para las
tareas a desarrollar por la U.T.E.; normalmen-
te esos contratos son llevados a cabo por algu-
45Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
no de sus integrantes y aportados a las tareas
comunes.
Y con respecto a la obligación de los
intervinientes ante su situación en el régimen
de autónomos, la suscripción del contrato no
altera su calidad o categoría de aportante a los
regímenes previsionales.
No obstante, y de acuerdo con lo comen-
tado, se considera apropiado establecer que
si bien una U.T.E. no transmite responsabili-
dad solidaria por sus negocios, a continuación
se reproducen los fundamentos de un fallo
reciente de la Cámara Nacional del Trabajo,
referido a un despido de un trabajador contra-
tado por una empresa, que suscribió un con-
trato de U.T.E. y, una vez finalizado su objeti-
vo, procedió a despedir a todo el personal y el
trabajador referido probó que realizaba tareas
para la U.T.E.
Fallo Verone Daniel, c/Cinarsa S.A. y otros
–CNTRAB– 26/7/05, se estableció que “En
cuanto a la responsabilidad de las empre-
sas participantes en la unión transitoria
cabe subrayar que no se impone la solida-
ridad de las primeras por los actos, opera-
ciones y obligaciones de la organización
frente a terceros (Art. 381; en sentido aná-
logo, SD Nº 79.433 del 20.8.99 “Rudzikas,
Juan Carlos c/ Expreso Victoria S.A. y otro”,
SD Nº 85.605 del 23.2.2004). Sin embargo
este principio general debe dejarse de lado
cuando, como en el caso, está demostrado
que el trabajador formó parte de los
medios personales de la Unión Transitoria
de Empresas y los servicios que prestaba
estaban encaminados a la concreción del
objeto que determinó ese contrato de cola-
boración empresaria, aun cuando una sola
de las sociedades apareciera formalmente
como empleadora”. “De la prueba testimo-
nial surge que el actor fue empleado de la
U.T.E. ya que únicamente prestó servicios
para ella y lo cierto es que cuando se can-
celó el contrato con el gobierno de la ciu-
dad despidieron a todo el personal, inclu-
so el reclamante. En definitiva y por lo que
antecede, concluyo que ambas sociedades
demandadas actuaron como sujeto em-
pleador en los términos de los Arts. 5 y 26
de la L.C.T.23 y, por consiguiente, propicio
extender la condena a Inconas S.A.” “Con-
sidero que en atención a las particularida-
des del caso ambas sociedades demanda-
das deben afrontar la condena en forma
solidaria, no obstante que la Ley 22.903 dis-
pone que no existe solidaridad entre las
sociedades que integran la U.T.E (Art. 381
Ley 19.550). Valoro al respecto que en rela-
ción con el actor, como señalara, ambas
sociedades actuaron como empleadores y,
por consiguiente, resulta inoponible al
actor el contrato de colaboración empresa-
ria que celebraron.”
4.4.4. VENTAJAS Y DESVENTAJAS
Ventajas
= No requiere capital social para su consti-
tución.
= No es sujeto del Impuesto a las Ganan-
cias, no tributa el ente sino cada una de las
partes en forma individual y de acuerdo con
su situación fiscal.
= Cada participante mantiene su capaci-
dad jurídica sin integrar una nueva sociedad.
46 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
= Solamente se destina parte de sus bie-
nes a formar la U.T.E.
= Excepto alguna cláusula especial con-
tractual, la agrupación no tiene responsabili-
dad solidaria entre sus miembros por los actos
que ejecute ni por las obligaciones que con-
traiga la U.T.E.
= Cada miembro responde por el capital
aportado al negocio contractual que se trate.
= La quiebra de cualquiera de los partici-
pantes o la muerte de algún empresario no
implica la extinción del contrato.
Desventajas
= Son transitorias.
= La Ley de Sociedades no menciona a las
personas físicas como integrantes sino a los
empresarios individuales.
= No poseen capacidad para actuar por sí
mismas, pueden hacerlo únicamente a través
de la representación de un administrador.
= En materia laboral un fallo declaró inopo-
nible el contrato por causa de un despido.
= Requieren una estructura organizativa
c o mpleja, la elección de un administrador y
una rendición clara de cuentas de resultados y
de patrimonio.
4.5. ASOCIACIONES DE
COLABORACIÓN EMPRESARIA (A.C.E.)
4.5.1. OBJETIVO
Son otro tipo de contrato de colabora-
ción empresaria cuyo marco legal está dado
en los Artículos 367 a 376 de la Sección I de la
Ley Nº 19.550 de Sociedades Comerciales. No
poseen fin de lucro.
Este tipo de agrupaciones, como su
nombre lo indica, se basan sobre los princi-
pios de colaboración, cooperación, asociativis-
mo; pero es importante dejar en claro lo que
menciona el Artículo 367 de la Ley de Socie-
dades:
“…establecer una organización común con
la finalidad de facilitar o desarrollar deter-
minadas fases de la actividad empresarial
de sus miembros o de perfeccionar o in-
crementar el resultado de tales actividades.
No constituyen sociedades ni son sujetos
de derecho”.
A esto último debemos sumarle que tam-
poco persiguen fines de lucro, no pueden
tener esta finalidad según el primer párrafo
del Artículo 368 de la Ley 19.550 y sus modifi-
catorias; es decir, entonces, que las ventajas
económicas que genere su actividad deben
recaer directamente en el patrimonio de las
empresas agrupadas o consorciadas.
Son acuerdos interempresariales, que
buscan otorgar mayor seguridad jurídica a los
negocios e instrumentan la cooperación entre
empresarios individuales los cuales mantie-
nen total independencia en sus operaciones.
Las A.C.E. no se proyectan al mercado,
sino que lo que se busca es que sus asociados
tengan mejores condiciones competitivas
determinadas por el fin común establecido.
Nacen de un contrato que establece una
organización común para desarrollar una acti-
vidad y en general no son sujetos de derecho.
En particular y en materia del pequeño
47Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
productor agropecuario, estas asociaciones o
agrupamientos tienen un objetivo preciso:
dadas las limitaciones estructurales de las
pequeñas organizaciones para la incorpora-
ción de tecnología, su utilización es común en
el momento de incorporar maquinaria agríco-
la, con la idea de la utilización en forma indivi-
dual de la maquinaria adquirida, prestando
servicios únicamente a los asociados.
También se utilizan para crear sistemas
de comercialización entre productores simila-
res, optimizando los costos para beneficio de
todos.
En materia contable es válida la conside-
ración formulada en 4.4.2.
4.5.2. FORMAS DE CONSTITUCIÓN
La Asociación tiene carácter formal, y se
puede constituir tanto por instrumento públi -
co como privado; tendrá efecto respecto de
terceros una vez que haya sido inscripta en el
Registro Público de Comercio. Aun con la for-
malidad contractual, esta Asociación no es suje-
to de derechos ni tampoco se la considera so-
ciedad entre sus partícipes, su funcionamiento
dependerá de la tarea encargada a su represen-
tante legal elegido entre los part í c i p e s .
Los participantes, de acuerdo con lo indi-
cado en el Artículo 373 de la mencionada Ley
de Sociedades Comerciales, tendrán respon-
sabilidad solidaria e ilimitada por los negocios
en común llevados adelante por su represen-
tante, el cual es absoluto responsable frente a
todos los participantes, pudiendo éstos quere-
llarlo judicialmente por los incumplimientos o
desvíos realizados en nombre de la A.C.E.
En su constitución no se determina la
existencia de un capital, se establece la crea-
ción de un fondo llamado comúnmente
“fondo operativo común”, cuya finalidad es la
de atender los gastos de puesta en marcha del
negocio en común y que luego se realimenta-
rá con el flujo de fondos de la operatoria para
la cual se creó el agrupamiento.
Tienen objeto y plazo determinados en
el contrato, en el que también se debe indicar
la participación de cada uno de los integran-
tes, quién es el designado como representan-
te legal y una mención a cómo se realizará la
rendición de cuentas de los negocios.
Las ventajas económicas obtenidas por la
A.C.E. deben recaer en el patrimonio de las
empresas agrupadas.
Los integrantes son solidaria e ilimitada-
mente responsables respecto de las obligacio-
nes contraídas por todos los participantes
frente a terceros, previa demanda al fondo
operativo.
Los administradores actúan por cuenta y
orden de los asociados y en nombre de la A.C.E.
El “fondo común operativo” pertenece a
cada miembro y es indiviso mientras tenga
vigencia el contrato.
Los bienes registrables se inscriben
dejando constancia que pertenecen a perso-
nas físicas o jurídicas que integran la A.C.E.
Los bienes pueden adquirirse a través de
un condominio, facturado a nombre de la
A.C.E. o individualmente aportando el uso.
De existir beneficios, producto de una
eficiente administración y logro de objetivos,
éstos deben recaer en cada uno de los asocia-
dos porque, como ya dijimos, estos acuerdos
no poseen fin de lucro, lo que no implica que
no se obtengan utilidades en forma accesoria
a la actividad principal.
48 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
La disolución se produce por decisión de
las partes, por cumplimiento del plazo o del
objeto social, por el fallecimiento de alguno
de ellos, por el retiro de algún asociado, aun-
que por unanimidad se puede decidir la conti-
nuación con los restantes asociados.
4.5.3. ASPECTOS IMPOSITIVOS
Y PREVISIONALES
Impuesto al Valor Agregado
Los negocios de una A.C.E. no tienen fin
de lucro; no obstante, si los mencionados
negocios son de obra o de prestación de ser-
vicios, son actos gravados en el IVA, y a su vez
–al igual que en las U.T.E.– ninguno de sus
miembros podría hacer propios los créditos o
saldos en favor que se generen por este tribu-
to, ya que el sujeto del impuesto es la A.C.E.
Impuesto a las Ganancias
La A.C.E. no es sujeto del Impuesto a las
Ganancias; si llegaran a producirse resultados
obtenidos por los negocios en común, éstos
se distribuirán entre sus miembros, quienes
los incorporarán como materia imponible en
sus declaraciones juradas, y cada partícipe tri-
butará por la ganancia generada por su nego-
cio individual más el que le corr e s p o n d e
según su participación establecida en el con-
trato de A.C.E.
Son sujetos pasibles de retención en el
Impuesto a las Ganancias los miembros de las
A.C.E. tanto en lo previsto por la RG 830
(AFIP) como en la RG 2.118 (AFIP).
Impuestos patrimoniales
Las participaciones en A.C.E. deberán ser
valuadas por cada asociado sobre la base de la
parte proindivisa que cada uno posea en los
activos, valuados de acuerdo con las disposi-
ciones del Impuesto a la Ganancia Mínima
Presunta.
Aspectos previsionales
Estos contratos pueden ser empleadores
de personal; de hecho la Ley de Contrato de
Trabajo, en su Artículo 26, considera emplea-
dores a las personas físicas, o al conjunto de
ellas, o jurídicas tengan o no personalidad jurí-
dica propia. En los aspectos previsionales son
válidas las consideraciones ya incorporadas en
este informe referido a las U.T.E.
4.5.4. VENTAJAS Y DESVENTAJAS
Ventajas
= No requiere capital social para su consti-
tución.
= No es sujeto del Impuesto a las Ga-
nancias, si hubiere resultados no tributa la
Asociación sino cada uno de los socios en for-
ma individual y de acuerdo con su situación
fiscal.
= Cada participante mantiene su capaci-
dad jurídica sin integrar una nueva sociedad.
= Pueden estar integradas por sociedades,
Cooperativas o empresarios individuales.
= Solamente se destina parte de sus bie-
nes a formar la A.C.E.
49Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
= Es un mecanismo muy utilizado para
dotar de capacidad operativa a pequeños pro-
ductores.
= La quiebra de cualquiera de los partici-
pantes o la muerte de algún empresario no
implica la extinción del contrato.
Desventajas
= Son contratos transitorios, su duración
no puede exceder el límite legal de 10 (diez)
años.
= No poseen fin de lucro y sus actividades
por lo general no se proyectan en el mercado.
= La Ley de Sociedades no menciona a las
personas físicas como integrantes sino a los
empresarios individuales.
= Por otra parte la responsabilidad de los
socios es ilimitada y solidaria respecto de ter-
ceros, después que el tercero haya interpela-
do infructuosamente al administrador.
= No poseen capacidad para actuar por sí
mismas, pueden hacerlo únicamente a través
de la representación de un administrador.
4.6. COOPERATIVAS
4.6.1. OBJETIVOS
La Ley de Entidades Cooperativas Nº
20.337 y supletoriamente la Ley Nº 19.550 de
Sociedades Comerciales otorgan el marco jurí-
dico a este tipo de agrupamiento, que queda
controlado bajo las normas del Instituto
Nacional de Asociativismo y Economía Social
(I.N.A.E.S.).
Son asociaciones cuyo fundamento está
dado en la prestación de servicios por medio
del esfuerzo propio y de la ayuda mutua.
Como característica, la asociación coope-
rativa no persigue fin de lucro, pero esto no es
exigible a sus asociados, por lo tanto éstos
podrán recibir los excedentes repartibles, dis-
tribuidos en función de la cantidad de benefi-
cio recibido por parte de la asociación.
Según la Alianza Cooperativa Intern a c i o -
nal: “Una Cooperativa es una asociación autó-
noma de personas que se han unido voluntaria-
mente para hacer frente a sus necesidades y
aspiraciones económicas, sociales y culturales
comunes por medio de una empresa de propie-
dad conjunta y democráticamente controlada”.
De acuerdo con el objetivo para el que
fueron creadas, se pueden identificar a las
Cooperativas Agropecuarias como aquellas
organizadas por productores agropecuarios
para abaratar sus costos y tener mejor inser-
ción en el mercado; así compran insumos,
comparten la asistencia técnica y profesional,
comercializan la producción en conjunto, au-
mentando el volumen y mejorando el precio,
inician procesos de transformación de la pro-
ducción primaria, etcétera.
Como una salida a la situación de crisis
económica vivida en nuestro país, han apare-
cido numerosas Cooperativas de Trabajo que
agrupan a trabajadores que ponen en común
su fuerza laboral para llevar adelante una em-
presa de producción, tanto de bienes como
de servicios, y esta figura asociativa también se
ha extendido en el sector rural.
Al momento de la constitución de Coope-
rativas de Productores se debe considerar fun-
damentalmente la dimensión del negocio, el
número de asociados y el nivel de actividad de
los mismos.
50 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Si dimensionamos la asociación de ma-
nera que el número de socios sea pequeño,
solamente se dispondrá de un volumen chico
o bajo de comercialización que definitivamen-
te no justificará la organización. En cambio, si
la cantidad de socios es muy grande, habrá
una ventaja importante al manejar volúmenes
altos de producción, pero el problema se dará
en la complejidad en la toma de decisiones al
momento de fijar las políticas de mercado y la
escasa o nula afinidad que pudiera existir en-
tre los participantes, siendo este tema uno de
los principales al momento de medir los fraca-
sos en el cooperativismo en la Argentina.
Según lo establece la Ley 20.337, las Coo-
perativas deben reunir las siguientes caracte-
rísticas:
1) Tener capital variable y duración ilimi-
tada.
2) No establecer límite estatutario al nú-
mero de asociados ni al capital.
3) Conceder un solo voto a cada asocia-
do, cualquiera sea el número de sus cuotas
sociales, y no otorgar ventaja ni privilegio
alguno a los iniciadores, fundadores y conseje-
ros, ni preferencia a parte alguna del capital.
4) Reconocer un interés limitado a las
cuotas sociales, si el estatuto autoriza aplicar
excedentes a alguna retribución al capital.
5) Contar con un número mínimo de
diez asociados, salvo las excepciones que ex-
presamente admitiera la autoridad de aplica-
ción y lo previsto para las Cooperativas de gra-
do superior24.
6) Distribuir los excedentes en propor-
ción al uso de los servicios sociales, de confor-
midad con las disposiciones de esta Ley.
7) No tener como fin principal ni acceso-
rio la propaganda de ideas políticas, religiosas,
de nacionalidad, región o raza, ni imponer
condiciones de admisión vinculadas con ellas.
8) Fomentar la educación cooperativa.
9) Prever la integración cooperativa.
10) Prestar servicios a sus asociados y a
no asociados en las condiciones que para este
último caso establezca la autoridad de aplica-
ción y con sujeción a lo dispuesto en el último
párrafo del Artículo 4225.
11) Limitar la responsabilidad de los aso-
ciados al monto de las cuotas sociales suscrip-
tas.
12) Establecer la irr e p a rtibilidad de las
r e s e rvas sociales y el destino desinteresado del
sobrante patrimonial en casos de liquidación.
4.6.2. FORMAS DE CONSTITUCIÓN
Y FUNCIONAMIENTO
4.6.2.1. Constitución
Se requiere, en primer lugar, contar con
un grupo humano impuesto del “espíritu”
cooperativo. A su vez esa comunidad debe te-
ner necesidades parecidas que puedan solu-
cionarse en conjunto.
Se identifican como Cooperativas de Pri-
mer Grado aquellas conformadas por personas.
Cuando las Cooperativas se unen forman
una entidad de Segundo Grado que recibe el
nombre de Federación, mientras que la reu-
nión de Federaciones se denomina Confe-
deración.
Para constituir una Cooperativa de Pri-
mer Grado se deben hacer reuniones prepara-
torias y una o más reuniones informativas.
Luego se hará la Asamblea Constitutiva, la que
51Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
representa el acto fundacional de una Coo-
perativa en donde todos los asociados funda-
dores deciden cuestiones como (Artículo 7° -
Ley 20.337):
= Elección de una mesa directiva para la
Asamblea.
= Informe de los iniciadores.
= Proyecto de Estatuto26.
= Suscripción e integración de cuotas so-
ciales.
= Designación de consejeros.
= Designación de síndico.
Para la constitución de Cooperativas se
debe remitir al INAES:
= Nota de presentación (según Res. ex-
INAC 974/93)
= Acta Constitutiva y Estatuto (según Res.
ex-INAC 974/93)
= Acta Nº 1 del Consejo de Administración
en la que se resuelve la distribución de cargos
(según Res. ex-INAC 974/93)
= Boleta de depósito27 (adjuntar el original
de la boleta de depósito, del 5 por ciento del
capital suscripto, expedida por cualquier ban-
co oficial o cooperativo) (según Res. ex-INAC
974/93)
= Constancia de asistencia a curso previo
de información y capacitación de los asocia-
dos fundadores (establecido por Res. INAES
2.037/03)
= Constancia de comunicación al INAES y/u
Órgano Local Competente2 8 de realización de la
Asamblea Constitutiva, con 15 días de anticipa-
ción (establecido por Res. INAES 2.037/03)
El organismo de contralor –INAES– ejer-
cerá todas las funciones de control correspon-
dientes al funcionamiento legal de una asocia-
ción cooperativa, trabajando y controlando en
el nivel provincial a través de los Órganos
Locales Competentes, que en general tendrán
las siguientes funciones:
= de autorización para el funcionamiento
de las Cooperativas y posterior contralor de su
marcha.
= fiscalizará a las Cooperativas a través de
los convenios que suscriba con las respectivas
provincias.
= asesorará gratuitamente a las Coope-
rativas en los aspectos técnicos que hacen a
las materias jurídicas, económicas, financieras
y contables.
= apoyará económica y financieramente a
las Cooperativas, por la vía de préstamos de
fomento o subsidio.
= promoverá el perfeccionamiento de la
legislación cooperativa.
= realizará estudios e investigaciones de
carácter jurídico, económico, contable, etc.,
organizando cursos, conferencias y publica-
ciones.
= dictará los reglamentos pertinentes para
la mejor aplicación de la ley.
= establecerá un servicio estadístico y de
información para y sobre el cooperativismo.
4.6.2.2. Funcionamiento
interno
a ASAMBLEA (Capítulo VI - Ley 20.337)
La Asamblea es el órgano superior y
soberano de la Cooperativa, a través de la cual
los asociados expresan su voluntad. En ella
52 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
todos los asociados participan en un pie de
igualdad con un voto por persona.
Existen dos tipos de Asambleas:
1) Ordinarias: Se realizan una vez al año
dentro de los cuatro meses siguientes a la
fecha de cierre del ejercicio.
Se consideran en éstas los siguientes
temas:
= El ejercicio anual de la entidad.
= Distribución de excedentes.
= Elección de consejeros titulares y su-
plentes y síndicos si coinciden con el término
de sus mandatos.
= Otros asuntos incluidos en el orden del
día.
2) Extraordinarias: Tendrán lugar toda
vez que lo disponga el Consejo de Adminis-
tración, el síndico o el 10 por ciento como
mínimo del total de los asociados.
Se considerará en éstas:
= Los asuntos que por su índole no pue-
den ser tratados en la Asamblea Ordinaria.
a CONSEJO DE ADMINISTRACIÓN
Es el órgano elegido por la Asamblea
para administrar y dirigir las operaciones so-
ciales y realizar todas las funciones que no
están reservadas para la Asamblea.
Los consejeros deben ser asociados y no
menos de tres (Artículo 63 - Ley 20.337).
El Consejo se constituye con un presi-
dente, quien adquiere el carácter de represen-
tante legal de la Cooperativa; un secretario,
que trabaja en colaboración con el presidente
y refrenda con su firma los documentos socia-
les, y un tesorero, que es el custodio de los
fondos y bienes de la entidad. También el esta-
tuto puede disponer la creación de los cargos
de suplentes y la institución de un Comité
Ejecutivo o Mesa Directiva. Esta última debe
estar constituida por consejeros e integra el
Consejo asumiendo la función de ejecutar lo
resuelto por el mismo. Además, en caso de
urgencia puede adoptar decisiones, pero
dando cuenta al Consejo de las mismas. Es
conveniente que el estatuto establezca clara-
mente las atribuciones de la Mesa Direc-
tiva y su funcionamiento.
a SINDICATURA
La fiscalización privada está a cargo de
uno o más síndicos elegidos por la Asamblea
entre los asociados (Artículo 76 - Ley 20.337).
La Sindicatura podrá ser:
1. Unipersonal = Síndico
2. Colegiada = Comisión Fiscalizadora
(la cantidad de miembros siempre deberá ser
impar).
a AUDITORÍA EXTERNA
De acuerdo con el Artículo 81 de la Ley
20.337 las Cooperativas deben contar desde
su constitución y hasta que finalice su liquida-
ción con un servicio de Auditoría Externa a
cargo de un Contador Público Nacional ins-
cripto en la matrícula respectiva. Este servicio
puede ser prestado por:
53Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
= la Cooperativa de grado superior.
= el síndico, siempre que revista la calidad
profesional indicada.
= el Órgano Local Competente a solicitud
de la Cooperativa y cuando la situación econó-
mica de ésta lo justifique.
a CAPITAL DE LA
COOPERATIVA
El capital de una Cooperativa se forma
reuniendo los aportes de los asociados y está
dividido en partes de igual valor que se deno-
minan “cuotas sociales”.
La responsabilidad de los asociados es
limitada, es decir que ellos responden por las
obligaciones de la Cooperativa hasta el monto
de las cuotas que se han comprometido apor-
tar.
Anualmente la Cooperativa abona a los
asociados, si se encuentra previsto en el esta-
tuto, un limitado interés por sus cuotas socia-
les. Si un asociado decide retirarse de la Coo-
perativa, puede recuperar el dinero que invir-
tió en ella.
a EXCEDENTES REPARTIBLES
Se consideran excedentes repart i b l e s
sólo aquellos que provengan de la diferencia
entre el costo y el precio del servicio prestado
a los asociados.
Los mismos se distribuirán de la siguien-
te manera:
1. El cinco por ciento se destinará a reser-
va legal;
2. El cinco por ciento se asignará al fondo
de acción asistencial y laboral o para estímulo
del personal;
3. El cinco por ciento al fondo de educa-
ción y capacitación cooperativas;
4. Una suma indeterminada para pagar
un interés a las cuotas sociales si lo autoriza el
estatuto, el cual no puede exceder en más de
un punto al que cobra el Banco de la Nación
Argentina en sus operaciones de descuento;
5. El resto para su distribución entre los
asociados en concepto de retorno, en pro-
porción a las operaciones que cada asociado
haya realizado durante el ejercicio con su Coo-
perativa.
a LIBROS
Además de los libros establecidos en el
Artículo 44 del Código de Comercio –Diario
General e Inventarios y Balances– las Coope-
rativas llevan los siguientes libros:
= Registro de Asociados
= Actas de Asamblea
= Actas de Reunión del Consejo de
Administración
= Informes de Auditoría
= Informes del Síndico
4.6.3. ASPECTOS CONTABLES,
IMPOSITIVOS Y PREVISIONALES
Las Cooperativas, como toda entidad
regularmente constituida y sujeta a la fiscaliza-
ción pública, deben llevar registros contables
en libros habilitados a tal efecto. Asimismo
54 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
deberán confeccionar un juego de estados con-
tables anuales, dictaminados, de acuerdo con
las normas contables vigentes en cada jurisdic-
ción.
Impuesto a las Ganancias
El Artículo 20º inciso d) de la Ley del
Impuesto dispone la exención de: “Las utilida-
des de las sociedades cooperativas de cual-
quier naturaleza y las que bajo cualquier deno-
minación (retorno, interés accionario, etc.),
distribuyen las cooperativas de consumo en-
tre sus socios”.
Aquellas a las que se acuerde la exención
no estarán sujetas a retenciones del gravamen,
pero sí deberán actuar en carácter de agentes
de retención cuando las operaciones que rea-
licen se encuentren alcanzadas por las normas
que al efecto ha establecido la AFIP.
La doctrina ampliamente sostiene que
ésta es una deficiente técnica legislativa, por-
que las Cooperativas son entidades que no
obtienen ganancias y por lo tanto no pueden
encontrarse exentas cuando se configura una
situación de no sujeción al gravamen.
La exención de que gozan las Coope-
rativas no se extiende a las utilidades que los
socios perciben como retornos, interés accio-
nario, etcétera, con excepción de las Coope-
rativas de Consumo.
La solicitud de exención ante la AFIP la
deben gestionar cumpliendo con el procedi-
miento que establece la Resolución AFIP 1.815
/2005. Una vez que la presentación sea formal-
mente admitida podrán obtener un certifica-
do de empadronamiento en trámite; acordada
la exención se publicarán en la página web de
la AFIP los datos de la entidad beneficiada que
ha sido registrada.
Mientras que el empadronamiento se
encuentre en trámite no deberá ingresar el
Impuesto a las Ganancias y no será pasible de
retenciones y/o percepciones.
Las Cooperativas empadronadas deberán
presentar declaración jurada del Impuesto a
las Ganancias y un informe para fines fiscales.
Impuestos patrimoniales
= Impuesto a la Ganancia Mínima
P r e s u n t a
La Ley del gravamen establece que los
bienes pertenecientes a entidades reconoci-
das como exentas por la AFIP, en virtud de lo
dispuesto por los incisos d), e), f), g) y m) del
Artículo 20 de la Ley de Impuesto a las Ganan-
cias, están exentas del impuesto.
Las Cooperativas están exentas del Im-
puesto a las Ganancias por el inciso d) del
Artículo 20, en consecuencia quedan exentas
del Impuesto a la Ganancia Mínima Presunta.
= Fondo para la Educación
y Promoción Cooperativa
Este impuesto lo establece la Ley 23.427.
Es una contribución especial sobre los capita-
les de las Cooperativas inscriptas.
La base imponible surge de la diferencia
entre activo y pasivo al fin de cada ejercicio
anual valuados de acuerdo con las normas
previstas, sobre la que se aplica una tasa del 2
por ciento.
55Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
= Impuesto sobre
los Bienes Personales
La ley establece que están exentas las
cuotas sociales de las Cooperativas para los
asociados.
= Impuestos sobre las Transacciones -
Impuesto al Valor Agregado
No se les otorga a las Cooperativas un
tratamiento diferencial respecto del resto de
los sujetos alcanzados, excepto en lo referido
a la eximición del impuesto en los intereses
abonados a sus socios por las Cooperativas
legalmente constituidas y los servicios perso-
nales prestados por sus socios a las Coope-
rativas de Trabajo.
Cada Cooperativa puede elegir las con-
diciones de contratación que considere más
conveniente para la consecución de su activi-
d a d .
Por ejemplo, en su relación con asocia-
dos y/o terceros pueden cumplir la operatoria
de mandato-consignación, o bien actuar direc-
tamente entre las partes como una compra y
venta.
En ambos casos se debe observar lo dis-
puesto en la Resolución Conjunta SAGPyA /
DGI 456 /1.593/03 en lo referido a las opera-
ciones primarias de depósito y/o compraventa
de granos.
En el caso en que se actúe por mandato
o consignación, si bien resulta cuestionado
por la doctrina la asimilación a “transacción”
que se efectúa del “acto cooperativo” cuando
los asociados entregan productos a la Coo-
perativa, en la práctica y de acuerdo con lo dis-
puesto en la normativa vigente, se debe factu-
rar por un lado la entrega que realiza el pro-
ductor (al que se le netean la comisión y gas-
tos de la operación) y por el otro la venta que
la Cooperativa realiza de la producción, gene-
rándose en cada una de ellas el IVA correspon-
diente.
= Impuesto a los Créditos
y Débitos Bancarios
Este impuesto comúnmente conocido
como Impuesto al Cheque se encuentra in-
cluido en la Ley 25.413 y reglamentado por el
Decreto 380/01.
Las Cooperativas están gravadas por el
Impuesto a la Alícuota General29, pero es im-
portante destacar que muchas de ellas, por su
actividad agropecuaria de comisionistas de
granos y consignatarios de ganado, debida-
mente registrados y únicamente por las opera-
ciones inherentes a esa actividad, se encuen-
tran alcanzadas por una alícuota diferencial30.
Aquellas alcanzadas por la alícuota ge-
neral podrán computar como crédito en la
Contribución Especial sobre el Capital de las
Cooperativas el 34 por ciento de los importes
que le hayan sido liquidados y percibidos por
la entidad financiera.
Aspectos previsionales
Se encuentran obligados a inscribirse
como trabajadores autónomos los miembros
del Consejo de Administración que perciban
retribución por sus funciones. En el caso de
no percibirlas la adhesión es voluntaria.
56 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
4.6.4. VENTAJAS Y DESVENTAJAS
Ventajas
= Se puede, en conjunto, encarar una acti-
vidad que sería difícil llevar adelante indivi-
dualmente.
= Al estar integrada por numerosos miem-
bros se materializan las ventajas de escala,
adquiriendo insumos a menores costos y colo-
cando la producción a precios más justos.
= Se puede acceder a ayuda crediticia en
mejores condiciones.
= Goza de exenciones impositivas, siem-
pre que la AFIP otorgue la exención subjetiva.
= Promueve el progreso y bienestar de sus
asociados.
= Se puede ofrecer al mercado una mejor
variedad de productos que cualquier produc-
tor individual.
= Facilita la integración vertical.
Desventajas
= Complejo procedimiento de constitu-
ción y administración que la hace desaconse-
jable cuando el número de productores que la
puedan conformar es bajo.
= Requiere de sus asociados estar identifi -
cados con el “espíritu cooperativo”.
= Hay desconfianza como consecuencia de
malos antecedentes por manejos inadecuados.
= Se pueden producir conflictos de intere-
ses entre directivos y asociados.
= Problemas derivados de la situación
en que los productores que la integran pueden
cumplir funciones de asociados, proveedores,
prestadores de servicios, administradores.
4.7. CONTRATOS DE FIDEICOMISOS
NO FINANCIEROS (F.N.F.)
La figura de un Contrato de Fi d e i c o m i s o
se caracteriza por el concepto de “fiducia” que
consiste en la entrega de un bien o de un dere-
cho, a otra persona “en confianza”, o, sin for-
malizar una venta, y, con ciertas y determ i n a-
das instrucciones, quien recibe el bien deberá
cumplir el mandato otorgado y al final del con-
trato repartirá los beneficios o los bienes reci-
bidos o lo que los bienes recibidos hayan gene-
rado entre los originantes o los terceros esta-
blecidos en el contrato.
Esta figura, que como dijimos no es
nueva, se proyecta a través de la normativa im-
puesta por la Ley Nº 24.441, partiendo del
reconocimiento de la figura de “dominio fidu-
ciario” contenida en el derecho romano y ela-
borada en el Artículo 2.662 del Código Civil
argentino.
Nace por una necesidad de financiamien-
to de la vivienda y construcción, organizada por
el Banco Hipotecario Nacional, pero que ac-
tualmente sirve y se aplica con distintos mati-
ces en toda la economía formal de nuestro país.
Tenemos, entre otros, fideicomisos agrí-
colas; pecuarios; de cría; de construcción; de
barrios cerrados; de administración de fondos
públicos; de administración de Sociedades
Civiles deportivas; de countries y clubes de
campo; sobre bienes de profesionales con
riesgo; sobre bienes registrables personales;
de garantía; sobre bienes destinados a heren-
cia, y muchos más.
A esta altura, entonces, vale preguntarse,
¿por qué se produjo la extensión masiva de la
figura a las más diversas actividades empresa-
r i a l e s ?
57Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Porque, de hecho, tanto la Ley 24.441
como la institución de la “fiducia” ofrecen la
garantía de salvaguarda de los bienes entrega-
dos en fideicomiso, sin otro requisito que
nombrar un “fiduciario” o administrador y un
“beneficiario”, quien será en definitiva quien
se quede con el bien entregado en fideicomi-
so o con sus frutos, dependiendo del con-
trato.
4.7.1. OBJETIVOS
La Ley 24.441 determina que... “hay fidei-
comiso cuando una persona llamada fiducian-
te transmite la propiedad fiduciaria de bienes
d e t e rminados a otra llamada fiduciario, que se
obliga a ejercer la propiedad fiduciaria en
beneficio de quien sea designado en el contra-
to y a transmitirla al cumplimiento de un plazo
a condición al fiduciante, al beneficiario o al
fideicomisario”.
Por otra parte el Artículo 2.662 del C.C.A.3 1
dice que... “Dominio fiduciario es aquel que se
adquiere en un fideicomiso singular, subordi-
nado a durar solamente hasta el cumplimien-
to de una condición resolutiva, o hasta el ven-
cimiento de un plazo resolutivo, para el efec-
to de restituir la cosa a un tercero”.
De esta forma queda claro que los tres
actores del contrato tienen una participación
específica en el fideicomiso.
Por ejemplo, un productor agropecuario
persona física (fiduciante) entrega en propie-
dad fiduciaria el campo de su propiedad a otra
persona física o jurídica (fiduciario), para que
éste lo explote durante un determinado plazo,
y decide que los beneficios obtenidos por
dicha explotación sean entregados a su hijo
(beneficiario) y que al término del contrato el
campo sea restituido al productor.
En este ejemplo, por haber suscripto un
Contrato de Fideicomiso, las partes que inter-
vienen tendrán distintos efectos patrimoniales
e impositivos. El fiduciante, titular del campo,
deja de tener la posesión patrimonial del mis-
mo; por lo tanto, bajan los valores de sus bie-
nes, “entrega en fiducia”, es decir transmite la
propiedad en confianza, confianza de que se
cumplan los objetivos del contrato, que los
beneficios vayan a su hijo, y que el campo le
sea restituido; por ello no vende, no escritura
la propiedad, sólo la entrega para ser explota-
da; por consiguiente, al no tener la propiedad
real del bien, éste no podría ser embargado
por causas ajenas al fideicomiso, como tampo-
co sería patrimonio común en caso de quiebra
del productor fiduciante.
El fiduciario, que podrá ser una persona
física o jurídica al efecto, que administrará y
tendrá que cumplir las condiciones que im-
ponga el contrato, que podrá ser removido
por decisión del fiduciante, debe administrar
el bien recibido como un patrimonio de terce-
ros, es decir no integrará el bien recibido en
fiducia, nunca, a su patrimonio individual, y
deberá llevar registro separado de esa explota-
ción respecto de su propia actividad. Por lo
tanto, recibir un bien en “fiducia” no produce
efectos patrimoniales en el fiduciario.
El beneficiario de los resultados de la
explotación incorporará éstos a sus ganancias
generales y tributará si corresponde el im-
puesto correspondiente.
Al finalizar el contrato, quien sea designa-
do “beneficiario” recibirá el bien entregado en
las condiciones pactadas en el contrato en su
carácter de fideicomisario, pudiendo ser la
58 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
misma persona fiduciante sin ningún otro
efecto patrimonial que la simple restitución
de dicho bien.
Bajo esta modalidad podríamos aplicar
esta interesante figura a la conformación de
agrupamientos agropecuarios de pequeños
productores, ya que se lograría aislar en un
patrimonio totalmente distinto e indepen-
diente los activos entregados en “fiducia” por
un tiempo determinado.
Por otra parte, se podría conocer muy de
cerca y controlar el destino de los fondos.
Reduciríamos en forma significativa los ries-
gos comerciales, lo cual genera en forma más
o menos inmediata una disminución de las
tasas de financiamiento.
Aclaramos que el fiduciante (productor
agropecuario) no tiene necesariamente que
entregar en fiducia el campo, sería recomenda-
ble que ceda como aporte el derecho al uso del
p r e d i o .
Se obtendría (sin la necesidad de consti-
tuir una sociedad regular o de hecho) limitar
la responsabilidad de los participantes.
Podemos clasificar a los fideicomisos en:
= Fideicomisos No Financieros
o comunes (F.N.F.)
= Fideicomisos Financieros:
- Fideicomisos con Oferta Pública
(F.O.P.)
- Fideicomisos sin Oferta Pública
En los F.N.F., la figura es la redactada en
los ejemplos y no necesita la intervención de
los organismos de control, siendo esta la
opción que entendemos recomendada para
los pequeños productores.
En cambio, en los Fideicomisos Financie-
ros necesariamente el fiduciario o administra-
dor debe ser una entidad financiera o una en-
tidad reconocida e inscripta ante la Comisión
Nacional de Valores, ya que las participaciones
se deberán medir en cuotas partes, y los fidu-
ciantes pueden suscribir participaciones a
cambio de títulos representativos de deuda.
Este tipo de fideicomisos requiere una com-
plejidad organizativa y administrativa mucho
mayor y puede exceder el interés o la capaci-
dad de administración de un pequeño pro-
ductor.
4.7.2. FORMAS DE CONSTITUCIÓN
DE UN F.N.F.
Por lo desarrollado en el ítem 4.7.1. y por
sus características particulares nos referire-
mos en este caso a la figura que consideramos
posible de instrumentar en el caso de PRO-
DERNEA, basando el estudio en los Fidei-
comisos No Financieros (F.N.F).
Cuando hacemos referencia a la figura de
F.N.F. debemos aclarar que esta forma de or-
ganización puede tener determinadas impli-
cancias impositivas cuando el fiduciario es una
persona igual o distinta del beneficiario.
Se trata de un contrato regulado por la
Ley 24.441, donde es necesario un instrumen-
to contractual que faculte y ordene a las partes
por las obligaciones que cada una acepta asu-
mir, provocando una relación de responsabili-
dad entre los intervinientes.
El contrato puede ser alcanzado por el
Impuesto de Sellos, dependiendo de la juris-
dicción de celebración y si tuviere determina-
da alguna onerosidad.
59Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
El contrato debe tener un plazo definido,
el cual no podrá exceder de los 30 (treinta)
años contados a partir de su suscripción, y no
debe inscribirse en ningún organismo de con-
tralor, sea I.G.J. o D.P.P.J.
Para el caso de fideicomisos forestales y
de acuerdo con la actividad, el plazo podrá
extenderse a más de treinta años.
El fiduciante deberá entregar los bienes
en propiedad fiduciaria.
El fiduciario deberá recibir los bienes
fideicomitidos para con ellos proceder a reali-
zar las tareas, encargos u operaciones deter-
minadas en el contrato, pudiendo recibir una
retribución por ello. Deberá dejarse aclarado
la retribución del fiduciante por su tarea y
cargo de administrador del F.N.F., y además un
mismo fiduciario podrá serlo de varios Fidei-
comisos No Financieros.
Se deberá nombrar un beneficiario del
resultado de la administración del F. N . F. ,
quien podrá ser el mismo fiduciante.
Por último, debe establecerse quién será
el fideicomisario o persona que recibirá los
bienes fideicomitidos una vez cumplido el
plazo o condición resolutoria del F.N.F., que
podrá ser el mismo fiduciante o bien la perso-
na que éste determine.
4.7.3. ASPECTOS IMPOSITIVOS
Y PREVISIONALES
Considerando que los Fideicomisos No
Financieros son fondos operativos que rea-
lizan operaciones comerciales, deben obte-
ner su CUIT ante la AFIP corr e s p o n d i e n t e ,
inscribiéndose como administrador el fidu-
c i a r i o .
Impuesto al Valor Agregado
Los Fideicomisos No Financieros en la
actividad agropecuaria son sujetos pasivos en
el IVA por las operaciones que resulten alcan-
zadas.
Impuesto a las Ganancias
Este impuesto produce efectos depen-
diendo de la categoría que alcance el fiducian-
te (quien entrega los bienes fideicomitidos al
fiduciario) en la constitución de un F.N.F.
Debemos distinguir a los fiduciantes de
la siguiente forma:
- Si el fiduciante y el beneficiario coinci-
den en la misma persona, y este no es benefi-
ciario del exterior, entonces:
Los resultados obtenidos se distribuyen
entre los fiduciantes beneficiarios como renta
de la tercera categoría, los que tributarán a alí-
cuotas progresivas, excepto en el caso de fidu-
ciantes beneficiarios constituidos como socie-
dades, quienes tributarán por dicha distribu-
ción a la alícuota del 35 por ciento. Según el
A rtículo 70.4 del DR del Impuesto a las Ganan-
cias, el fiduciario le asignará al fiduciante bene-
ficiario, en la proporción correspondiente, los
resultados obtenidos en el respectivo año fiscal.
- Si el fiduciante coincide con el benefi-
ciario y este es del exterior o el fiduciante es
distinto del beneficiario, entonces:
En estos casos, deberá tributar el órgano
Fiduciario en representación del fideicomiso,
como administrador de patrimonio ajeno, el
Impuesto a las Ganancias a la alícuota del 35
60 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
por ciento sobre el resultado de la explota-
ción, en la proporción correspondiente a ese
sujeto del exterior, o bien en el caso que el
fiduciante sea distinto del beneficiario.
En los casos mencionados en el párrafo
anterior los resultados que genere el fideico-
miso se asimilan a los dividendos y es aplica-
ble el impuesto de igualación.
Se presentan en la práctica situaciones
mixtas, que por lo mencionado precedente-
mente tendrán tratamientos distintos según la
condición del fiduciante.
Situación del fiduciante
Como expresáramos, cuando el fiducian-
te coincida con el beneficiario y este sea del
país, la ganancia del fideicomiso de adminis-
tración se distribuirá entre los mismos como
si fuera una Sociedad de Hecho; en el caso
que fueran personas físicas tributarán a alícuo-
tas progresivas, en caso contrario a alícuotas
proporcionales (35 por ciento).
En el supuesto que el fiduciante no tuvie-
ra otra actividad gravada por el impuesto, y si
la ganancia distribuida por el fideicomiso
superara la ganancia mínima no imponible y
las cargas de familia, pues entonces deberá
inscribirse en Ganancias y abonar dicho im-
puesto a alícuotas progresivas por tratarse en
el caso planteado de personas físicas.
El fideicomiso es sujeto pasible de reten-
ción de las resoluciones que regulan las reten-
ciones del Impuesto a las Ganancias (RG 830 y
2.118/2006); al fin de cada período dichas
retenciones se distribuirán entre los fiducian-
tes / beneficiarios como se realiza en el caso
de una Sociedad de Hecho.
Debemos destacar que el fiduciante /
beneficiario perfectamente puede revestir la
categoría de monotributista por otras activida-
des que posea.
Impuestos patrimoniales
= Impuesto a la Ganancia
Mínima Presunta
Cualquiera que sea el beneficiario, los
Fideicomisos No Financieros constituidos en
el país son sujetos pasivos del impuesto.
Les son aplicables las disposiciones sobre
pago a cuenta, es decir que, en estos casos,
como estos sujetos no lo son del Impuesto a
las Ganancias, en el cómputo como pago a
cuenta previsto en la Ley del Impuesto a la
Ganancia Mínima Presunta, se aplicará la tasa
del 35 por ciento sobre la utilidad impositiva a
distribuir a los partícipes.
= Impuesto sobre
los Bienes Personales
Los fideicomisos no tributan este im-
puesto ni el gravamen a las participaciones
societarias.
Aspectos previsionales
Tanto los fiduciantes como los beneficia-
rios en el caso de F.N.F. no están obligados
al pago de autónomos. Los fiduciarios, si son
personas físicas, pueden incorporarse en
forma voluntaria al régimen de autónomos.
61Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
4.7.4. VENTAJAS Y DESVENTAJAS
Ventajas
= Posee legislación regulatoria.
= Es un instrumento que permite la adhe-
sión de manera flexible y adaptable de cual-
quier cantidad de suscriptores y de diversas
a c t i v i d a d e s .
= Los bienes fideicomitidos son patrimo-
nio separado del fiduciante y del fiduciario.
= Los bienes fideicomitidos no son alcan-
zados por la Ley de Quiebras por cuestiones
personales tanto del fiduciario como del fidu-
ciante.
= Tiene una administración aceptada y
reconocida por los participantes.
= Permite diseñar estructuras jurídicas
precisas según sea su objeto.
= Bajo costo de instrumentación.
= Pe rmite alcanzar el 100 por ciento de la
financiación necesaria en cualquier proyecto.
Desde el punto de vista previsional e
impositivo, en el caso de Fideicomisos No Fi-
nancieros.
= Los fiduciantes no pagan jubilación
autónomos.
= Distribuye la utilidad obtenida de acuer-
do con el criterio de una Sociedad de He-
cho.
= En tanto se trate de personas físicas del
país y el fiduciante coincida con el beneficia-
rio, en el Impuesto a las Ganancias tributan a
alícuotas progresivas.
= Las retenciones del Impuesto a las
Ganancias que se le realicen al fideicomiso
(F.N.F.) se distribuyen entre los fiduciantes /
beneficiarios.
Desventajas
= En la actualidad la figura merecería aún
algunas definiciones impositivas claras, tanto
en el IVA como en el Impuesto a las Ganan-
cias, en cuanto a la transmisión de los bienes.
= No permite solucionar los problemas de
la confianza en terceros administradores.
= Si no se establece al inicio de acuerdo
con la actividad un buen encuadre impositivo,
con el transcurso del contrato suelen produ-
cirse interpretaciones no siempre claras.
= Es una herramienta que necesita de un
buen y claro asesoramiento previo a su consti-
tución.
4.8. SOCIEDAD CIVIL
4.8.1. OBJETIVOS
Esta figura asociativa está definida en el
A rtículo 1.648 del Código Civil, que establece
que “habrá sociedad cuando dos o más perso-
nas se hubiesen mutuamente obligado, que
cada una con una prestación, con el fin de ob-
tener alguna utilidad apreciable en dinero, q u e
dividirán entre sí, del empleo que hicieran de
lo que cada uno hubiere aportado”. Es aplica-
ble a aquellas actividades consideradas civiles,
por lo cual puede utilizarse para la asociación
de productores agropecuarios puros3 2.
Características de las Sociedades Civiles
1) Se trata de sujetos de derecho, con
personalidad jurídica distinta de la de sus inte-
grantes.
62 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
2) Pueden establecerse por tiempo inde-
terminado.
3) La responsabilidad de los socios, si
bien es ilimitada, no es solidaria sino manco-
munada33 (a diferencia de las Sociedades de
Hecho, en las que los socios responden ilimi-
tada y solidariamente).
4) Son en principio admisibles todo tipo
de aportes.
5) La administración de la Sociedad se
gobierna por las reglas del mandato. (El poder
de administrar corresponde a todos los so-
cios, salvo que ellos hubieran nombrado uno
o más mandatarios, socios o terceros.)
6) La fiscalización de la administración
está a cargo de todos los socios.
7) El Código Civil no regula sobre cuál es
el órgano de gobierno. Como principio gene-
ral las decisiones sobre modificación del con-
trato deberán ser unánimes, mientras que el
resto podrán ser adoptadas por mayoría abso-
luta de socios, los que se reunirán en la forma
que establezca el contrato.
4.8.2. FORMAS DE CONSTITUCIÓN
Si bien el Artículo 1.662 del Código Civil
dispone la libertad de formas para la constitu-
ción de la Sociedad Civil34, el Artículo 1.184 in-
ciso 335 establece la escritura pública como un
requisito indispensable. Esta contradicción se
supera considerando a la Sociedad Civil como
regular cuando está constituida por escritura
pública e irregular o de hecho en caso contra-
rio. Asimismo, se considerará “de hecho”
cuando carezca de toda instrumentación, e
irregular cuando su contrato sea celebrado
por escrito, pero no por escritura pública.
La constitución de la Sociedad mediante
instrumento público resulta de suma impor-
tancia porque su carácter regular permitirá a
sus integrantes la plena invocación frente a los
terceros, la Sociedad y los restantes socios.
= No requieren publicación de edictos ni
inscribirse en registro alguno.
= No requieren contabilidad regular, ni
están sometidas a control de constitución y de
funcionamiento.
= Su contrato constitutivo resulta ser plu-
rilateral, oneroso, consensual, conmutativo y
de organización.
En el mismo se consignará:
Capital social: Se encuentra constituido
exclusivamente por los aportes de los socios
que consisten en obligaciones de dar.
Aportes de los socios: Pueden consistir
en obligaciones de dar o de hacer. Los bienes
aportados por los socios se entienden transfe-
ridos en propiedad a la Sociedad, salvo que se
haya estipulado en el contrato que los socios
los transfieren en uso o goce36.
Objeto social: El objeto de la Sociedad
debe ser lícito, posible y estar expresamente
determinado en el contrato.
Participación de los socios en las ga-
nancias y en las pérdidas: Debe estar deter-
minada en el contrato, de lo contrario rigen
las pautas previstas por los Artículos 1.779 a
1.787 del Código Civil.
La distribución de las ganancias es básica-
mente lo que distingue a este tipo de entes de
las Asociaciones Civiles y las Fundaciones.
63Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
4.8.3. ASPECTOS IMPOSITIVOS
Y PREVISIONALES
A los efectos impositivos, las Sociedades
Civiles se asimilan a las Sociedades de Hecho,
por lo cual corresponde remitirse al ítem
4.2.4. precedente.
Con respecto al régimen de jubilación
autónomos, los administradores, sean socios
o no, se encuentran obligados a contribuir
con dicho pago.
Todos los socios administran la Sociedad,
y la administración se reputa ejercida por cada
uno de ellos, aunque si nombraran a uno o
más mandatarios son ellos quienes deben
ejercerla.
4.8.4. VENTAJAS Y DESVENTAJAS
Ventajas
= Los socios tienen responsabilidad
mancomunada.
= No requieren publicación de edictos
ni inscribirse en registro alguno.
= No requiere contabilidad regular, ni
están sometidas a control de constitución y de
funcionamiento.
Desventaja
= Si además de dedicarse a la actividad
agropecuaria pura la Sociedad Civil comien-
za el emprendimiento de alguna actividad
compleja (transformación / prestación de ser-
vicios) pasa a ser considerada como sociedad
c o m e r c i a l .
4.9. CONSORCIOS DE COOPERACIÓN
4.9.1. OBJETIVOS
Siguiendo la creciente tendencia, en el
nivel mundial, de las empresas a asociarse en
forma transitoria para el desarrollo de nego-
cios específicos, sin que dicha asociación
implique la pérdida de individualidad por
parte de cada uno de sus participantes, en
contraposición a las tradicionales fusiones y/o
compras de paquetes accionarios de control
de sociedades anónimas, el Congreso ha san-
cionado la Ley Nº 26.005, por la cual se esta-
bleció el marco legal que regula los “Con-
sorcios de Cooperación” en nuestro derecho
positivo.
Sancionada el 16 de diciembre del 2004 y
promulgada el 10 de enero del 2005, la men-
cionada legislación todavía a la fecha no fue
reglamentada por el Poder Ejecutivo.
Esta norma es complementaria y deter-
mina lo establecido en el Artículo 19 de la Ley
Nº 24.467/95 referida al marco regulatorio de
la pequeña y mediana empresa.
Debemos señalar que, en forma previa a
la sanción de la referida Ley, otras formas jurí -
dicas de organización para el desarrollo de
negocios ya habían sido contempladas por
nuestra legislación de sociedades comerciales:
mediante la sanción de la Ley Nº 22.903 se
incorpora como “contratos de colaboración
empresaria”, a “las agrupaciones de colabora-
ción” (Artículos 367 a 376 de la LSC) y las
“Uniones Transitorias de Empresas” (“U.T.E.”)
(Artículos 377 a 383 de la LSC), respectiva-
mente, a las que ya nos hemos referido37.
Podemos establecer, entonces, que los
Consorcios de Cooperación se otorgan como
64 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
una forma jurídica alternativa para el desarro-
llo de negocios corporativos.
La nueva figura no sólo permite el de-
s a rrollo del objeto definido al momento de
constituirse, sino que facilita su expansión
e x t e rna (para compras, ventas, export a c i o n e s ,
etc.) atento a las necesidades futuras que se
vayan presentando.
Entre los ejemplos de agrupaciones de
colaboración más conocidas podemos distin-
guir a los mencionados “pools de compras”,
donde los empresarios logran obtener rebajas
en los precios de las adquisiciones de bienes,
insumos y demás, efectuadas en común.
A partir de la vigencia de la Ley, podemos
destacar algunos ejemplos constituidos, como
por ejemplo el Consorcio de Cooperación
Apícola de Las Heras, organizado por la Muni-
cipalidad de Las Heras, en la Provincia de
Mendoza en abril del 200538, donde se traza
como objetivo de política municipal de de-
sarrollo la garantía de la autogestión exitosa
de emprendimientos, incentivando la incor-
poración de estrategias asociativas.
En el informe generado por este munici-
pio, se destaca que este Consorcio de peque-
ños productores apícolas se reúne con el
apoyo de las autoridades municipales, con el
fin de reducir costos operativos y productivos,
mejorar la calidad del producto adecuado al
protocolo de buenas prácticas del manejo apí-
cola, y considera que la falta de reglamenta-
ción funciona hoy como un freno respecto de
la adecuación de los efectos impositivos, ya
que si bien la figura del monotributo social39
ayuda a su desarrollo, éste no soluciona la
cuestión de fondo generada por el IVA, pues-
to que al no discriminarse el impuesto encare-
ce el precio del producto final. Se menciona,
asimismo, que es necesario adecuar o incor-
porar el tratamiento de esta figura en la Ley
del Impuesto al Valor Agregado.
También es de destacar que la construc-
ción del Primer Parque Industrial de la Made-
ra y el Mueble de América Latina, en un predio
de 33 hectáreas en la localidad de Hudson,
Provincia de Buenos Aires, a cargo del Con-
sorcio de Cooperación de Empresas de la
Madera Argentina (COCEMA), tiene prevista la
instalación de 31 plantas industriales con posi-
bilidad de emplear cerca de mil personas40.
Estos nucleamientos se venían organi-
zando en general bajo la forma de Agrupacio-
nes de Colaboración Empresaria (A.C.E.), ya
q u e la figura de los Consorcios de Coope-
ración surgieron con la sanción de la Ley Nº
26.005, no obstaculizando por ello las ventajas
económicas que pueden lograrse con la utili-
zación de esta nueva alternativa y, en cierta
medida, es tal como ya se menciona en este
trabajo: los agrupamientos avanzan con paso
más firme y rápido que la legislación.
4.9.2. FORMAS DE CONSTITUCIÓN
Las personas físicas o jurídicas domicilia-
das o constituidas en nuestro país podrán
conformar Consorcios de Cooperación esta-
bleciendo una organización común con la fi-
nalidad de facilitar, desarrollar, incrementar o
concretar operaciones relacionadas con la
actividad económica de sus miembros con el
fin de mejorar o acrecentar sus resultados.
Al respecto, dicha definición incorpora
diferencias sustanciales con las anteriormente
referenciadas “agrupaciones de colaboración”
y las Uniones Transitorias de Empresas, toda
65Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
vez que los Consorcios de Cooperación admi-
ten el desarrollo de operaciones en forma
genérica, mientras que las U.T.E. permiten
realizar –de manera exclusiva– una obra, sumi-
nistro o servicio concreto, y, por otra parte, el
Consorcio también se distingue de las
A g rupaciones de Colaboración (A.C.E.), ya
que estas últimas no pueden perseguir fines
de lucro.
Los Consorcios de Cooperación tienen
naturaleza exclusivamente contractual. En
consecuencia, no son sujetos de derecho ni
tienen personalidad jurídica.
El contrato constitutivo del Consorcio
debe otorgarse por instrumento público o pri-
vado (en este último caso con firma certifica-
da de sus participantes) e inscribirse junta-
mente con la designación de sus representan-
tes en la Inspección General de Justicia (enti-
dad societaria de contralor en el ámbito de la
Ciudad de Buenos Aires) o por ante la autori-
dad de contralor en el ámbito de la provincia
en donde dicho contrato se registre.
La falta de registro del contrato del Con-
sorcio de Cooperación tendrá los efectos de
calificarlo como una “Sociedad de Hecho”, en
v i rtud de la cual sus participantes serán respon-
sables en f o rma solidaria por las obligaciones
generadas por el Consorcio, sin poder invocar
el beneficio de excusión sobre los bienes del
mismo.
El párrafo anterior indica un tema que
ante la falta de reglamentación puede produ-
cir efectos no deseados. Es decir, si el Con-
sorcio se inscribe ante el organismo de contra-
lor, adquieren todos los efectos legales y no
tienen personalidad jurídica; pero si se consti-
tuyen como Consorcio pero no proceden a
inscribirlo como tal, esa personalidad existe y
es sujeto de derechos como Sociedad de
Hecho. Creemos entonces que se hace nece-
saria la reglamentación de la figura de manera
inmediata.
Los contratos de formación del Consor-
cio de Cooperación deberán contener las
siguientes cláusulas e información:
Individualización de sus partes; objeto
del contrato; plazo de duración; su denomina-
ción integrada con la leyenda “Consorcio de
Cooperación”; constitución de domicilio es-
pecial; la determinación de la forma de consti-
tución del monto del fondo común operativo;
participación en las inversiones y resultados
respecto de cada parte integrante del Con-
sorcio; participación en la que responderán
cada uno de los miembros del Consorcio por
las obligaciones asumidas por este último ante
terceros; mecanismos para la adopción de de-
cisiones; determinación del número de repre-
sentantes del Consorcio; mayorías necesarias
para la modificación del contrato constitutivo;
mayorías requeridas para el tratamiento de
separación y admisión de participantes; san-
ciones por incumplimiento; causales de revo-
cación o extinción del contrato y formas de
liquidación del Consorcio, y reglas sobre la
confección y aprobación de los estados conta-
bles del Consorcio.
En el supuesto de que el contrato de
constitución del Consorcio no incluya expre-
samente la proporción en que cada uno de
sus participantes se hará responsable por las
obligaciones asumidas por el Consorcio ante
terceros, se presumirá la solidaridad entre sus
miembros respecto de las mismas.
Finalmente Corresponde señalar que, co-
mo principio general, la disolución, liquida-
ción, concurso preventivo y/o quiebra, o falle-
66 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
67Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
cimiento de cualquiera de los participantes del
Consorcio no tendrá efectos sobre sus inte-
grantes restantes, siguiendo estos últimos con
la actividad del Consorcio salvo que la misma
resulte imposible fáctica o jurídicamente.
Entendemos que la implementación de
este nuevo esquema contractual de asociación
entre empresas y/o empresarios individuales
podría ser considerado como una estructura
legal alternativa para el desarrollo de nego-
cios, sin que dicha alianza implique la pérdida
de la individualidad de sus participantes.
4.9.3. ASPECTOS IMPOSITIVOS
Y PREVISIONALES
A la fecha de redacción del presente
informe y de acuerdo con lo mencionado en
el ítem 4.9.1., primer párrafo, esta norma no
se encuentra reglamentada aún; por lo tanto,
tampoco existen normas claras y conceptos
determinantes referidos a los efectos fiscales.
Pero, en opinión de alguna doctrina41, se con-
sidera que no hace falta reglamentar esta
norma ya que sólo establece una forma de
contrato en particular; por ello, las opiniones
al respecto se vuelcan en consideración de las
relaciones jurídicas que se desprenden del
análisis del cuerpo legal.
Por otra parte, también se entiende que
deberían tener el mismo tratamiento que las
U.T.E. y las A.C.E.; sin embargo, las normas
vigentes en materia de IVA para el caso de las
exportaciones podrían desalentar su confor-
mación, ya que en general se debe adelantar el
IVA en las mercaderías que se aporten al
Consorcio, puesto que se considera al Con-
sorcio una figura distinta de sus miembros;
pero es de esperar que este tema sea cubierto
con la reglamentación que dicte el Poder
Ejecutivo42.
Impuesto al Valor Agregado
Estos Consorcios tienen un estatuto y
una reglamentación para funcionar; por ello, y
en razón de las relaciones que pueden esta-
blecer, deben tener CUIT propio, y pueden
gestionar ventajas operativas tanto en lo fiscal
como en lo financiero; además, se encuentra
en estudio la promoción de algunas ventajas
para las exportaciones.
Fundamentalmente se constituyen con
un “fondo operativo” común, el que permane-
cerá indiviso por todo el término de duración
del contrato, lo que implica, en el caso de
adquisiciones de bienes, que éstas se harán
para los partícipes del consorcio con afecta-
ción al fondo común, y el IVA caerá, por lo
tanto, en cabeza de cada adquirente y así el
contrato no será sujeto tributario, no obstante
que de producirse alguna venta por medio del
Consorcio, ésta quedará alcanzada por el tri-
buto.
Impuesto a las Ganancias
En principio, y al no tratarse de una per-
sona física o jurídica como tampoco sujeto de
derechos, sino de un simple contrato de coo-
peración, no se encontraría alcanzado por
este impuesto.
No obstante, entendemos que sus resul-
tados deben distribuirse entre sus part e s
intervinientes, debiendo cada socio integrar
los resultados propios de su actividad con más
los del contrato suscripto siempre dentro de
la tercera categoría de este impuesto.
Impuestos patrimoniales
Todavía no se encuentra incorporado a
las normas. Sin embargo, creemos que debe-
ría seguirse el mismo criterio que las U.T.E. y
A.C.E.
Aspectos previsionales
En el ámbito laboral todos los integran-
tes del Consorcio de Cooperación responden
de manera solidaria por las obligaciones emer-
gentes de la resolución intempestiva de algún
contrato laboral ligado a la ejecución de las
tareas del Consorcio. Se entiende que la tute-
la del contrato laboral está siempre dirigida en
favor del trabajador.
No obstante, en caso de que se preten-
diera limitar la responsabilidad laboral emana-
da de los contratos que liguen al Consorcio, se
podrán incorporar al contrato cláusulas espe-
ciales referidas a este tema.
4.9.4. VENTAJAS Y DESVENTAJAS
Ventajas
= Brinda seguridad jurídica a sus partici-
pantes en atención a la existencia de la legisla-
ción.
= Facilita el acceso a compras e importa-
ciones de cantidades significativas de bienes.
= No se encuentra alcanzado por el
Impuesto a las Ganancias.
= No posee plazo determinado.
Desventajas
= A la fecha no se encuentra reglamentada
la Ley 26.005 que crea la figura.
= No tiene tratamiento dentro de la Ley de
IVA como figura asociativa.
68 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
69Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
En el presente trabajo, y tal como fuera
señalado en su Introducción, se ha pretendi-
do brindar información en general sobre los
distintos tipos de sociedades, agrupamientos
o contratos, que en nuestro país pueden
adoptar los productores agropecuarios, mar-
cando sus características distintivas, sus aspec-
tos legales y de control, algunos aspectos con-
tables, sus efectos impositivos y previsionales
y un resumen de las ventajas o desventajas de
su implementación, teniendo siempre en
cuenta las características del plan de PRODER-
NEA, su zona de aplicación y el nivel operativo
de los posibles beneficiarios de este plan.
En numerosos trabajos de sociología
rural se destaca como una característica pre-
dominantemente negativa del productor agro-
pecuario su actitud individualista. Entre otras
cuestiones que influyen en su forma de ser, el
desconocimiento de los aspectos legales,
impositivos, previsionales y de administración
de las distintas formas asociativas, como de las
ventajas que con ellas pueden obtenerse,
apuntalan esa manera de actuar y no hacen
más que alejarlo de la decisión de iniciar expe-
riencias en ese sentido.
Ahora bien, aquellos que sobrepasan esa
primera barrera que se presenta por descono-
cimiento de las alternativas asociativas y sus
implicancias, se encuentran con un nuevo
escollo que es enfrentarse al mundo de las
decisiones compartidas.
En general, el productor se siente cómo-
do produciendo, y en esta actividad, en la que
naturalmente pone sus mayores esfuerzos,
obtiene los mejores resultados, pero a la hora
de analizar los logros de su explotación, es
decir la relación que existe entre los costos de
producción y los precios que obtiene por sus
productos, seguramente advierte que si pudie-
ra acceder a menores precios en los insumos,
a poder utilizar mejor tecnología o a incremen-
tar la comercialización de sus productos, por
citar sólo algunas causas, conseguiría un mayor
ingreso para su familia.
Estas situaciones son las que llevan a los
productores agropecuarios a intentar iniciar
sus experiencias asociativas.
En algunos casos la motivación inicial es
tener un mejor acceso a asistencia técnica o
crediticia. Es así que crean “asociaciones sin
fines de lucro” que les facilitan conseguir esos
objetivos. Ahora bien, estos emprendimientos
encuentran un límite en cuanto sus integran-
tes pretenden canalizar a través de ellos la
venta de sus producciones.
Ello es así porque estas asociaciones tra-
bajan para el bien común, no persiguiendo
una ganancia comercial o económica. Esta
característica les permite solicitar exenciones
impositivas, y, si bien pueden vender bienes o
servicios, el producido de la venta no puede
distribuirse, directa o indirectamente, entre
sus socios, debiendo destinarse a conseguir
los fines para las que fueron constituidas43.
PRODERNEA y PRODERNOA están brindando
asistencia a este tipo de entidades, encontrán-
dose entre ellas la Asociación de Productores
de Maíces Andinos y la Asociación de Plan-
tadores de Ananá de Colonia Aurora. Ambas
5. CONCLUSIONES
70 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
organizaciones se encuentran en la necesidad
de encontrar una figura jurídica que les permi-
ta continuar con el desarrollo de sus activida-
des productivas e ingresar a nuevos mercados.
También están aquellos que reconocen
las ventajas que obtendrían de actuar en con-
junto pero, por el desconocimiento de las dis-
tintas alternativas disponibles o por haber
tenido malas experiencias (en muchos casos
producto de ese desconocimiento), demoran
la decisión en ese sentido.
Además se encuentran los productores
que, interesados en asociarse, están motiva-
dos en conocer las ventajas y desventajas de
las distintas figuras asociativas, para que ese
conocimiento les permita realizar la elección
correcta.
Asimismo, están todas aquellas institu-
ciones y organismos que de una u otra mane-
ra interactúan con los pequeños productores,
ya sea desde el Estado nacional, provincial o
en el nivel municipal, desde las distintas fede-
raciones de productores, desde los diferentes
programas de desarrollo rural y social, institu-
tos de investigación, etcétera.
Todos ellos pueden encontrar en este
trabajo una guía que les permita introducirse
en el conocimiento de las posibles formas aso-
ciativas que se encuentran vigentes en nues-
tro país.
Se trata de una guía porque acerca a los
interesados información relevante para orien-
tar sus decisiones y no pretende dar respues-
ta concreta a sus dudas particulares.
Ello es así porque la “mejor manera de
asociarse” surgirá del análisis que en especial
se realice de los numerosos factores que influ-
yen en la toma de la decisión correcta, y ese
análisis debe efectuarse de manera individual
conociendo cada una de las características de
los diferentes proyectos.
En ese sentido los interesados deberán
tener en claro cuestiones referidas a:
= El negocio:
- Actividad a la que se dedicarán.
- Duración prevista (se tratará de
operaciones aisladas, actividades
transitorias o permanentes).
- Cual será su dimensión (proyectos
productivos, microemprendimientos,
PyMEs).
- Cómo se financiará.
= Los integrantes:
- Cuántos serán.
- Cuál es la relación entre ellos
(son familiares, amigos, vecinos,
desconocidos).
- Qué responsabilidad están
dispuestos a asumir (limitada,
ilimitada).
- De qué manera participarán en el
manejo del negocio (integralmente,
como socio mayoritario o
minoritario, como administrador).
= Cómo piensan gobernarse:
- De manera unipersonal.
- Por mayorías.
- Por unanimidad.
= Cómo piensan administrarse:
- De manera individual.
- A través de todos los socios.
- A través de algunos socios.
- Por medio de profesionales.
71Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
= Qué costos están dispuestos a asumir:
- De constitución.
- De funcionamiento.
El conocimiento de estas cuestiones les
permitirá elegir la estructura jurídica más ade-
cuada para el cumplimiento de los objetivos
que se han propuesto.
Como regla general, las figuras asociati-
vas más simples serán recomendables en
aquellos emprendimientos que se encuentren
en las primeras etapas de desarrollo, pero sin
olvidar como criterio general que “a mayor
simplicidad de la figura jurídica le correspon-
de mayor grado de responsabilidad para los
socios”.
Un párrafo aparte merecen aquellos
pequeños productores que se hallan en el
estrato más bajo de ingresos, en muchos casos
en niveles de subsistencia. Seguramente ellos
pueden encontrar en la asociación con otros
la posibilidad cierta de acceder a una mejor
situación económica, pero en general, por su
propia escasez de recursos (económicos, de
conocimiento de las normas) y por la insufi-
ciencia de normativas específicas que los con-
tengan o falta de difusión de las mismas, se
encuentran marginados de la economía for-
mal.
En muchos casos estos productores se
reúnen informalmente o, como se señaló pre-
cedentemente, constituyen asociaciones sin
fines de lucro donde desarrollan actividades
sociales, comunitarias o cualquier otra que
tienda al bien común, y, a la hora de vender los
pequeños excedentes de las producciones no
consumidas en la comunidad, solucionan su
marginalidad “formalizando” a alguno de sus
integrantes con el fin de colocar sus produc-
tos en el mercado formal.
Si bien con la reforma del Monotributo
que tuvo lugar en 2004 se produjo un avance
importante al introducir la figura del Mono-
tributo Social44, hasta la fecha las ventajas que
ella otorga no han llegado de manera significa-
tiva a los productores minifundistas.
Finalmente, y más allá de la importancia
que pueda tener el presente trabajo en la difu-
sión de estos temas y considerando el grado
de complejidad que representa su análisis, se
entiende que sería recomendable profundizar
la asistencia a los pequeños productores en
las etapas de definición y puesta en marcha de
su experiencia asociativa, poniendo para ello a
su disposición un servicio de asesoramiento
que les permita despejar todas sus dudas en
materia legal, impositiva, previsional y de
administración.
ANEXOS DE LA SEGUNDA PARTE
ANEXO I
- CATEGORÍAS PREVISIONALES DE TRABAJADORES AUTÓNOMOS
- TABLA IV DEL DECRETO 433/1994
- APORTES MENSUALES DE LOS TRABAJADORES AUTÓNOMOS ACTIVOS
ANEXO II
- RÉGIMEN SIMPLIFICADO PA RA PEQUEÑOS
CONTRIBUYENTES - MONOTRIBUTO
73Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
ANEXO I 45
CATEGORÍAS PREVISIONALES DE TRABAJADORES AUTÓNOMOS
DETALLE DE LA ACTIVIDAD
Dirección, administración o conducción de cualquier empresa, organización,
establecimiento o explotación con fines de lucro o sociedad comercial o civil,
aunque esas actividades no tengan retribución, utilidad o ingreso alguno
-Componentes de sociedades comerciales, civiles, regulares e irregulares (1)
C AT E G O R Í AS
A B B' C C' D D' E E' F G G' H I J
- Titulares de empresas unipersonales o componentes de
Sociedades de Hecho, en ambos casos, que ocupen personal(2)
- Hasta 10 trabajadores inclusive
- De 11 a 20 trabajadores
- Más de 20 trabajadores
- De 1 a 3 trabajadores ocupados
- De 4 a 6 trabajadores ocupados
- De 7 a 10 trabajadores ocupados
- Más de 10 trabajadores ocupados
Cualquier actividad lucrativa no comprendida en las tablas
- Trabajadores que ejerzan actividades
en forma individual o con la participación
de familiares no dependientes
=
=
=
=
=
=
=
=
74 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
(1) A los efectos de determinar la categoría de revista, el trabajador autónomo deberá considerar la suma
del personal ocupado por la totalidad de las sociedades en las que ejerza su función (Decreto 433, Anexo I, Tabla
I, punto 2.1).
(2) Los socios de Sociedades de Hecho se encuadran en la categoría que les corresponda, considerando a
tal fin como cantidad de trabajadores ocupados la que resulte de dividir la totalidad de dependientes de la
Sociedad por el número de socios. Si de dicha operación aritmética surgieran decimales, éstos serán desprecia-
dos, salvo cuando el resultado sea inferior a 1, en cuyo caso se considerará 1 trabajador ocupado.
(3) Por Ley 24.828 y Resolución (SAFJP) 399/97, a partir del período agosto de 1997, inclusive, las amas de
casa podrán optar por ingresar al SIJP una alícuota diferencial del 11 por ciento con destino a cuentas individua-
les del régimen de capitalización calculada sobre la renta imponible mensual de la categoría más baja, pudiendo
optar por una categoría superior.
(4) Conforme con lo establecido por el Decreto 493/00, Artículos 1º y 2º, las personas comprendidas en el
Artículo 3º, inciso b), Ley 24.241, que decidan incorporarse voluntariamente, y las ya incorporadas voluntariamen-
te al SIJP, lo harán en la categoría mínima de aportes, pudiendo optar por cualquier otra categoría superior.
DETALLE DE LA ACTIVIDAD
Afiliaciones voluntarias. Personas comprendidas
C AT E G O R Í AS
A B B' C C' D D' E E' F G G' H I J
- Amas de casa (3)
- Miembros de consejos de administración de
cooperativas que no perciben retribución alguna (4)
- Socios no gerentes de S.R.L.(4)
- Sindicatos de cualquier sociedad y fiduciarios (4)
- Toda persona física menor de 55 años aunque no
realizare actividad lucrativa alguna o se encontrare
comprendida en otro régimen jubilatorio sin perjuicio
de la afiliación que corresponda a dicho régimen
- Los socios de sociedades de cualquier tipo, menores de
55 años, que no se encuentren incluidos obligatoriamente
en los incisos a) o b) del Artículo 2º de la Ley 24.241
=
=
=
=
=
=
75Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Se encuentran comprendidos en esta
categoría los Titulares que ejerzan individual-
mente la actividad, los que deben inscribirse
en la CATEGORÍA A de Trabajadores Autóno-
mos.
De acuerdo a los valores vigentes, los ins-
criptos en la “Categoría A”46 deben pagar men-
sualmente $ 99,84. Sin embargo la RG DGI
3.935 dispuso un procedimiento alternativo
de pago para aquellos inscriptos en dicha ca-
tegoría y que realicen actividades agropecua-
rias y/o forestales, mediante el cual quienes
adhieran al mismo optan por que los compra-
dores de sus productos les practiquen una
retención del 1,5 % calculado sobre el impor-
te bruto facturado. Estos pequeños producto-
res deberán, al final de cada año calendario,
comparar los montos que les han sido reteni-
dos con los que deberían haber ingresado
considerando los 12 pagos mensuales. Cuan-
do la cantidad de meses cancelados sea infe-
rior a aquellos por los cuales debió tributar
durante el ejercicio, el contribuyente podrá:
1. Abonar los aportes correspondientes a
los meses faltantes o su fracción. En este caso,
el ingreso deberá efectuarse hasta el día 15 de
enero, inclusive, del ejercicio siguiente, no
devengando intereses hasta dicha fecha.
2. No abonar la diferencia, en cuyo caso
no serán considerados, a ninguno de los efec-
tos establecidos por la Ley N° 24.241 en mate-
ria de prestaciones, los períodos sobre los que
no se ingresen íntegramente los aportes.
TABLA IV DEL DECRETO 433/1994
Actividades dirigidas a satisfacer necesidades directas de quien las reclama,
cumplidas sin capital o con capital mínimo
76 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
CONCEPTO
Renta imponible
Aporte personal
Jubilación(3)
I.N.S.S.J.P. (PAMI)
Total aportes
APORTES MENSUALES DE LOS TRABAJADORES AUTÓNOMOS ACTIVOS (1)
%CATEGORÍAS(2)
A B B '
(1) Corresponde a los aportes mensuales de los trabajadores autónomos.
(2) Categorización: Categorías previsionales.
(3) Se lleva a cabo esta apertura a los fines de poder liquidar accesorios en los casos que correspondan.
El aporte personal del trabajador autónomo se encuentra constituido por un 16 % que deberá considerarse
contribución, a los fines de liquidar intereses (Código 358) para el F. 801 C, y 11 % o 14 % (para tareas diferenciales)
como aporte (Código 308).
CONCEPTO
Renta imponible
Aporte personal
Jubilación (3)
I.N.S.S.J.P. (PAMI)
Total aportes
%CATEGORÍAS(2)
E ' F G
16
11/14
5
32/35
16
11/14
5
32/35
312,00
49,92
34,32
15,60
99,84
383,00
61,28
42,13
19,15
122,56
383,00
61,28
53,62
19,15
134,05
1.279,00
204,64
179,06
63,95
447,65
1.789,00
286,24
196,79
89,45
572,48
2.557,00
409,12
281,27
127,85
818,24
77Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
C C ' D D ' E
G ' H I J -
512,00
81,92
56,32
25,60
163,84
512,00
81,92
71,68
25,60
179,20
766,00
122,56
84,26
38,30
245,12
766,00
122,56
107,24
38,30
268,10
1.279,00
204,64
140,69
63,95
409,28
2.557,00
409,12
357,98
127,85
894,95
3.837,00
613,92
422,07
191,85
1.227,84
4.800,00
768,00
528,00
240,00
1.536,00
4.800,00
768,00
528,00
240,00
1.536,00
78 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
El régimen, establecido por la Ley 25.865,
consiste básicamente en un impuesto único
de cuota fija mensual (impuesto integrado)
que reemplaza en un solo pago al Impuesto a
las Ganancias y al Valor Agregado al que se adi-
cionan las cotizaciones de Seguridad Social y
Obra Social (cotizaciones previsionales).
Pueden adherir al Monotributo los “Pe-
queños Contribuyentes”, entendiéndose por
tales a las personas físicas que realicen ventas
de cosas muebles, obras, locaciones y/o pres-
taciones de servicios, incluida la actividad pri-
maria, y aquellas que integran Cooperativas de
Trabajo, y sus sucesiones indivisas, que entre
otros parámetros facturen hasta $ 72.000
anuales en el caso de prestaciones de servicios
y hasta $ 144.000 anuales para el resto de las
actividades (venta de bienes). Asimismo se
encuentran comprendidas las Sociedades de
Hecho y comerciales irregulares en la medida
que tengan hasta un máximo de tres socios. La
condición de pequeño contribuyente no es
incompatible con el desempeño de activida-
des en relación de dependencia, como tampo-
co con la percepción de prestaciones en con-
cepto de jubilación, pensión o retiro corres-
pondiente a alguno de los regímenes naciona-
les o provinciales.
Se han establecido cinco categorías para
aquellos que realizan actividades de presta-
ción de servicios y ocho categorías para los
que realizan otras actividades.
A continuación se incluyen sendos cua-
dros con las respectivas categorías, debiéndo-
se tener presente que la actividad primaria y la
prestación de servicios sin local fijo se catego -
rizarán exclusivamente por el nivel de ingre-
sos brutos.
ANEXO II
RÉGIMEN SIMPLIFICADO PA RA PEQUEÑOS
CONTRIBUYENTES - MONOTRIBUTO
PARA LOCACIONES Y/O PRESTACIONES DE SERVICIOS
A
B
C
D
E
CategoríaIngresos brutos
Superficieafectada
Energía eléctricaconsumida anualmente
Impuestointegrado
Cotizacionesprevisionales
Total aingresar
Hasta $ 12.000
Hasta $ 24.000
Hasta $ 36.000
Hasta $ 48.000
Hasta $ 72.000
Hasta 20 m2
Hasta 30 m2
Hasta 45 m2
Hasta 60 m2
Hasta 85 m2
Hasta 2.000 kw
Hasta 3.300 kw
Hasta 5.000 kw
Hasta 6.700 kw
Hasta 10.000 kw
$ 33
$ 39
$ 75
$ 128
$ 210
$ 59,44
$ 59,44
$ 59,44
$ 59,44
$ 59,44
$ 92,44
$ 98,44
$ 134,44
$ 187,44
$ 269,44
79Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
El aporte a Seguridad Social ($ 59,44)
está compuesto por:
= $ 24,44 con destino al Sistema Nacional
de Seguro de Salud .
= $ 35 con destino al Régimen Previsional
Público del Sistema Integrado de Jubi-
laciones y Pensiones.
Para incorporar al Régimen Nacional de
Seguro de Salud (Obra Social) a integrantes
del grupo familiar primario se debe realizar un
aporte adicional de 22,22 pesos, por cada uno.
Los productores agropecuarios deben,
cuatrimestralmente, calcular los ingresos acu-
mulados y cuando los mismos superen o sean
inferiores a los límites de la categoría en la que
se encuentra el monotributista, deberán reca-
tegorizarse.
Si no se registra ningún cambio, la cate-
goría seguirá siendo la misma y, por lo tanto,
no deberá hacerse ningún trámite.
PARA EL RESTO DE ACTIVIDADES COMERCIALES/INDUSTRIALES
F
G
H
I
J
K
L
M
Categoría Ingresos brutos
Superficieafectada
Energía eléctricaconsumida anualmente
Impuestointegrado
Cotizacionesprevisionales
Total aingresar
Hasta $ 12.000
Hasta $ 24.000
Hasta $ 36.000
Hasta $ 48.000
Hasta $ 72.000
Hasta $ 96.000
Hasta $ 120.000
Hasta $ 144.000
Hasta 20 m2
Hasta 30 m2
Hasta 45 m2
Hasta 60 m2
Hasta 85 m2
Hasta 110 m2
Hasta 150 m2
Hasta 200 m2
Hasta 2.000 kw
Hasta 3.300 kw
Hasta 5.000 kw
Hasta 6.700 kw
Hasta 10.000 kw
Hasta 13.000 kw
Hasta 16.500 kw
Hasta 20.000 kw
$ 33
$ 39
$ 75
$ 118
$ 194
$ 310
$ 405
$ 505
$ 59,44
$ 59,44
$ 59,44
$ 59,44
$ 59,44
$ 59,44
$ 59,44
$ 59,44
$ 92,44
$ 98,44
$ 134,44
$ 177,44
$ 253,44
$ 369,44
$ 464,44
$ 564,44
80 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Ventajas de estar
a d h e r i d o
= Las ventas de los monotributistas no
generan obligaciones tributarias en IVA, y sus
ingresos tampoco lo hacen en el Impuesto a
las Ganancias.
= No sufren retenciones ni percepciones
de IVA e Impuesto a las Ganancias.
= No presentan declaraciones juradas
para la determinación de los impuestos men-
c i o n a d o s .
= No necesitan llevar registros conta-
b l e s .
= Sus aportes autónomos son menores
que los del régimen general.
= Tienen acceso a Obra Social con un
a p o rte reducido.
= Los pequeños contribuyentes que rea-
licen actividades primarias y queden encua-
drados en la categoría F (hasta $ 12.000 de
ingreso bruto anual) sólo deben pagar las
cotizaciones previsionales ($ 59,44 mensua-
l e s ) .
D e s v e n t a j a s
= El IVA pagado en la compra de insu-
mos es un costo.
= Los pagos deben efectuarse mensual-
mente independientemente de haber o no
generado ingresos (ver alternativa de contri-
buyente eventual).
= Si el monotributista efectúa sus ventas
preferentemente a contribuyentes inscriptos
en IVA puede verse afectado por la limitación
que se les impone a éstos para computar tales
o p e r a c i o n e s .
S O C I E DADES DE HECHO
E IRREGULARES
Al Monotributo pueden adherir las Socie-
dades de Hecho y comerciales irr e g u l a r e s ,
integradas con un máximo de tres socios, las
que deben inscribirse a partir de la Categoría
D o J, en adelante, según el tipo de actividad
d e s a rr o l l a d a .
La Sociedad Agropecuaria que adhiera
tendrá a su cargo el pago del impuesto inte-
grado.
A tal efecto, el monto a ingresar será el
de la categoría que le corresponda, según el
tipo de actividad y el monto de sus ingresos
b rutos anuales, con más un incremento del
20 por ciento por cada uno de los socios inte-
grantes de la sociedad4 7.
Los socios de las sociedades adheridas al
Monotributo deberán ingresar individualmen-
te las cotizaciones previsionales fijas ($ 59,44
mensuales).
PEQUEÑO CONTRIBUYENTE
E V E N T UA L
La eventualidad u ocasionalidad se en-
tienden referidas al ejercicio de la actividad y
no a la obtención de los ingresos.
En lo que respecta a las explotaciones
agropecuarias, se consideran pequeños con-
tribuyentes eventuales aquellos cuya activi-
dad, por la característica, modo de prestación
u oportunidad, se desarrolle en forma even-
tual u ocasional y que hayan obtenido en el
año calendario inmediato anterior ingresos
b rutos inferiores o iguales a $ 12.000 y que
a d e m á s :
81Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
= No perciban ingresos de ninguna natu-
raleza provenientes de la explotación de
empresas, sociedades o cualquier otra activi-
dad organizada como tal, incluso Asociacio-
nes Civiles y/o Fu n d a c i o n e s .
= Que no realicen importaciones de
cosas muebles y/o de serv i c i o s .
De tratarse de la elaboración y comercia-
lización de artesanías, cuyo ingreso bru t o
anual no exceda de $ 12.000, reviste la calidad
de eventual siempre que la comercialización
se realice en lugares públicos habilitados por
la autoridad competente.
Los pagos que deben efectuar los contri-
buyentes eventuales se destinan al Régimen
Previsional y consisten en pagos a cuenta cua-
trimestrales en los que ingresarán el equiva-
lente al 5 por ciento de los importes factura-
dos en ese período. Anualmente deben com-
parar los importes ingresados con los que les
hubiera correspondido realizar, es decir $ 420
($ 35 x 12 meses), y deberán ingresar la dife-
rencia, en caso de comprobarse un faltante, u
obtendrán un crédito a su favor, en caso de
haber realizado pagos en exceso.
Esta es la principal ventaja, porque el
procedimiento de pago establecido les per-
mite a estos contribuyentes diferir el ingreso
de los aportes a un momento posterior al de
obtener sus ingresos por las ventas de sus
bienes o serv i c i o s .
Sin embargo debe destacarse como una
situación desventajosa que estos contribu-
yentes no acceden a los beneficios de la Obra
S o c i a l .
Cuando el pequeño contribuyente even-
tual sea un sujeto inscripto en el Registro
Nacional de Efectores de Desarrollo Social y
Economía Local4 8, estará exento de ingresar el
pago a cuenta al que se hace referencia prece-
dentemente, por el término de 24 meses con-
tados a partir de su inscripción en el mencio-
nado Registro, considerándose ese período
como aportado a los fines jubilatorios.
SÍ N T E S I S D E L O S PAS O S
A S E G U I R PA RA I N S C R I B I R S E
E N E L MO N O T R I B U T O
Para ser monotributista se debe poseer
CUIT (Clave Única de Identificación Tr i b u -
taria) y Clave Fi s c a l .
El trámite de solicitud de CUIT se realiza
en la dependencia AFIP/DGI corr e s p o n d i e n t e
a la ubicación del domicilio4 9. Las Sociedades
habilitadas para realizar la gestión deben pre-
sentar la constancia de inscripción de los
s o c i o s .
En el caso de Personas Físicas se debe
presentar el Fo rmulario 183/F mientras que
de tratarse de Sociedades corr e s p o n d e r á
completar el Fo rmulario 183/J.
La solicitud de Clave Fiscal se puede
obtener en las dependencias de AFIP.
Una vez que se posee CUIT y Clave
Fiscal, se puede adherir al Monotributo. La
adhesión se realiza por medio de Intern e t ,
ingresando a la página w w w. a f i p . g o v. a r en
la opción T R Á M I T E S C O N C LAV E F I SC A L - opción
Usuarios con clave fiscal habilitada - opción
Adhesión Monotributo.
El sistema emitirá una credencial (F152 -
Personas Físicas, F153 - Personas Jurídicas) la
que deberá presentarse en las entidades auto-
rizadas para poder realizar el pago correspon-
diente.
82 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
MONOTRIBUTO SOCIAL
La Ley 25.865 introdujo en el Régimen
de Monotributo la figura de M O N O T R I B U T O
SO C I A L.
Uno de los objetivos de su creación fue
el de permitir la incorporación a la economía
f o rmal de todos aquellos que, realizando una
actividad económica genuina, enmarcada en
el Desarrollo Local y la Economía Social y res-
pondiendo al perfil productivo de su región,
se encontraban excluidos por el costo y com-
plejidad que ello implicaba.
Ahora bien, para controlar el acceso y
conseguir que los beneficios que se otorgan
lleguen a quienes verdaderamente los necesi-
tan, se implementó la incorporación de los
potenciales beneficiarios con la interv e n c i ó n
del Ministerio de Desarrollo Social, a través
del Registro Nacional de Efectores.
Con este régimen especial se busca faci-
litar al Efector Social5 0 en condiciones de ins-
cribirse en el Registro el desarrollo de su acti-
vidad económica y el incremento de sus in-
gresos, a partir de la posibilidad de facturar y
de ese modo incorporar nuevos compradores
o clientes.
En definitiva pueden solicitar su inscrip-
ción en el referido Registro:
= PE R S O N AS F Í S I C AS:
Sean o no beneficiarias de planes socia-
les, que estén realizando una actividad
económica genuina y sustentable, en-
marcada en el Desarrollo Local y la
Economía Social.
Sus ingresos brutos no podrán superar
los $ 12.000 anuales.
= LO S P R OY E C T O S P R O D U C T I VO S
O AS O C I AT I VO S D E B I E N E S O S E RV I C I O S:
Incluidos en algún plan social, que ten-
gan una única actividad económica y con-
f o rmen grupos de trabajo de hasta tres
personas. Los ingresos brutos de estos
emprendimientos no podrán superar los
$ 12.000 anuales por integrante. Cada
uno de los miembros del proyecto tam-
bién deberá inscribirse en forma indivi-
dual en el Registro Nacional de Efectores.
= LAS CO O P E RAT I VAS D E TRA B A J O:
Previamente todos sus asociados deben
haberse inscripto en el Registro de
Efectores en forma individual. Cada aso-
ciado no podrá superar los $ 12.000 de
retiros anuales. Las Cooperativas de
Trabajo deberán estar inscriptas y matri-
culadas ante el INAES.
Quienes sean inscriptos en el Registro
adherirán automáticamente al M O N O T R I B U T O
SO C I A L por el término de 24 meses. La norm a-
tiva que regula este régimen se encuentra
contenida en la Ley 25.865, reglamentada por
el Decreto 806/2004 y las normas específi-
cas dictadas por AFIP y el Ministerio de De-
s a rrollo Social.
Los inscriptos se encontrarán obligados
a realizar un pago mensual de $ 12,22 (equi-
valente al 50 por ciento del componente
social del Monotributo).
Para hacer efectiva la adhesión, los inte-
resados deben inscribirse en el Registro
Nacional de Efectores dependiente del Minis-
terio de Desarrollo Social.
83Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Dicho Registro se encuentra centralizado
en las oficinas con sede en Capital Federal51 y
si bien funcionarios del Registro han realiza-
do visitas a numerosas localidades del interior
del país, aún no se encuentra disponible una
inscripción accesible para todos aquellos que
reúnan las condiciones y quieran hacerlo.
Aquellos que además reúnan las caracte-
rísticas de contribuyentes eventuales no
deberán realizar ningún pago durante los 24
meses, no accediendo por lo tanto a la cober-
tura de Obra Social.
Ve n t a j a s
Este régimen especial contiene una serie
de ventajas en relación con el Monotributo
general, las que se encontrarán vigentes du-
rante el período de permanencia en el mis-
mo, el que no podrá exceder de 24 meses:
= Vender su producción form a l m e n t e
emitiendo facturas.
= Abonar únicamente el 50 por ciento del
componente social del Monotributo ($ 12,22
m e n s u a l e s ) .
= Acceder a cobertura médica (Obra So-
cial) con idénticas prestaciones a las que reci-
ben el resto de los monotributistas5 2.
= Los categorizados como contribuyen-
tes eventuales no ingresarán ningún aport e
pero no acceden a la cobertura médica.
= Se permite computar el tiempo que
p e rmanezcan en el Régimen como período
a p o rtado a los fines jubilatorios, aunque los
inscriptos no realizan aportes con este desti-
n o .
D e s v e n t a j a s
= Compleja inscripción en el Registro de
Efectores motivada porque el mismo se en-
cuentra centralizado en la Capital Fe d e r a l .
= Falta de previsión respecto de la situa-
ción impositiva / previsional de aquellos ins-
criptos que al término del plazo de 24 meses
no se encuentren en condiciones económicas
de acceder a los regímenes generales.
Buenos Aires,
septiembre de 2006
84 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Notas
1. “Encuadre Jurídico de Empresas”. José L. Sirena y Marcelo Zangaro. Revista de Doctrina Societaria y
Concursal. Tomo XV. pág. 1.188. Editorial Errepar, noviembre de 2003.
2. Inspección General de Justicia o Direcciones Provinciales de Personas Jurídicas.
3. Según lo ha manifestado el fisco en el Dictamen (DAT) 81/92 23/7/92. Boletín DGI 469, pág. 52.
4. Se denomina así en el Impuesto a las Ganancias a las rentas de las empresas.
5. El régimen de responsable sustituto, llamado gravamen a las acciones y participaciones societarias, será
liquidado por las sociedades regidas por la Ley 19.550 y la alícuota a aplicar es del 0,50 por ciento sobre el valor
determinado de acuerdo con las normas del Artículo 22 de la Ley de Bienes Personales, no siendo de aplica-
ción mínimo exento alguno.
6, Claudia Chiaradía, Pool de siembra, efectos legales e impositivos. Práctica Profesional, Tributaria, Laboral
y de la Seguridad Social , Editorial La Ley, agosto 2005, Nº 4.
7. Inspección General de Justicia o Direcciones Provinciales de Personas Jurídicas.
8, Nissen, Ricardo. Sociedades irregulares y de hecho. Editorial De Palma, 1995.
9. Decreto Reglamentario Nº 1.344 de la Ley Nº 20.628 de Impuesto a las Ganancias. Artículo 70.
10. Código de Comercio de la República Argentina. Capítulo III, Artículos 43 y 44. Libro Diario e Inventario y
Balances.
11. Boletín AFIP. DGI, febrero, 1998.
12. Revista Impuestos, 2004-10, 37.
13. Ley de Sociedades Comerciales Nº 19.550 (modificada por la Ley Nº 22.903), Artículo 146.
14. Ley de Sociedades Comerciales Nº 19.550 (modificada por la Ley Nº 22.903), Artículos 152 y sig.
15. Código de Comercio de la República Argentina. Capítulo III, Artículos 43 y 44. Libro Diario e Inventario y
Balances.
16. Ley de Sociedades Comerciales Nº 19.550 (modificada por la Ley Nº 22.903), Artículos 58, 59, 268, 274 y
concordantes.
17. Ley de Sociedades Comerciales Nº 19.550 (modificada por la Ley Nº 22.903), Sección V, Capítulo 2º,
Artículos 186 y sig.
18. La ganancia impositiva se diferencia de la ganancia contable de la empresa porque para determinar esta
última se deben respetar las normativas que, entre otras cuestiones, la Ley del Impuesto a las Ganancias dis-
pone en materia de valuación de bienes y deducciones admitidas.
19. En el Fallo IBM-Banelco, la Corte Suprema de Justicia de la Nación reconoció en el año 2003 que la U.T.E.
formada por estas empresas eran sujetos de derecho y por lo tanto podrían computarse determinados crédi-
tos impositivos.
85Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
20. Ley de Sociedades Comerciales Nº 19.550 (modificada por la Ley Nº 22.903), Artículo 381.
21. Resoluciones Técnicas de la 6 a la 22. Texto unificado. Pág. 89. Supervisado por Carlos Fila. Errepar, 2006.
22. Normas Internacionales de Contabilidad (I.A.S.C.) (I.A.S.B.). F.A.C.P.C.E., 2001.
23. Ley de Contrato de Trabajo.
24. Excepción para Cooperativas de Provisión de Servicios Rurales y de Trabajo en las que se admite un míni-
mo de seis asociados (Resoluciones 302 y 324 - ex INAC).
25. Los excedentes que deriven de la prestación de servicios a no asociados autorizada por esta Ley se desti-
narán a una cuenta especial de reserva (ultimo párrafo del Artículo 42).
26. El Estatuto debe contener, sin perjuicio de otras disposiciones (Artículo 8, Ley 20.337): 1°) La denomina-
ción y el domicilio. 2°) La designación precisa del objeto social. 3º) El valor de las cuotas sociales y el dere-
cho de ingreso si lo hubiera, expresado en moneda argentina. 4º) La organización de la administración y la
fiscalización y el régimen de las asambleas. 5°) Las reglas para distribuir los excedentes y soportar las pérdi-
das. 6°) Las condiciones de ingreso, retiro y exclusión de los asociados. 7°) Las cláusulas necesarias para esta-
blecer los derechos y obligaciones de los asociados. 8°) Las cláusulas atinentes a la disolución y liquidación.
27. Según lo establece el Artículo 9 de la Ley 20.337 se debe acompañar la constancia del depósito en un banco
oficial o cooperativo de la vigésima parte del capital suscripto.
28. Véase al final del Documento detalle de los Órganos Locales Competentes de cada provincia.
29. La alícuota general del impuesto será del seis por mil (6 ‰) para los créditos y del seis por mil (6 ‰) para
los débitos.
30. Setenta y cinco centésimos por mil (0,75 ‰) para los débitos y setenta y cinco centésimos por mil
(0,75 ‰) para los créditos.
31. Código Civil de la República Argentina . Título VII, Artículo 2.662. Zavalía Editor, febrero de 1981.
32. El Artículo 452 del Código de Comercio establece que las ventas que hacen los labradores y hacendados
de los frutos de sus cosechas y ganados no se consideran mercantiles.
33. Los socios concurren a partes iguales a responder frente a otro u otros de la totalidad de la obligación asu-
mida o impuesta, o sea, sin tener que responder de las cuotas de los demás (esta característica puede quedar
desfigurada por lo establecido en el Artículo 1.751 del CC, conforme al cual los socios responden por las par-
tes de los socios insolventes).
34. Artículo 1.662: El contrato de sociedad puede ser hecho verbalmente o por escrito, por instrumento públi-
co, o por instrumento privado, o por correspondencia.
35. Artículo 1.184: Deben ser hechos en escritura pública... 3° Los contratos de Sociedad Civil, sus prórrogas
y modificaciones.
36. Artículo 1.703 del Código Civil.
37. “Consorcios de Cooperación y Contratos de Colaboración Empresaria”, Carlos E. Lose y Carlos A. Ojeda.
Revista de Doctrina Societaria y Concursal. Tomo XVII, pág. 765. Editorial Errepar, junio de 2005.
86 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
38. Municipalidad de Las Heras, Provincia de Mendoza, informe de consorcios. Abril de 2005.
39. Véase más adelante la descripción de Monotributo Social.
40. La Nación.com Arquitectura. 30 de agosto de 2006. Edición impresa.
41. “Los consorcios de Cooperación”, Raúl Aníbal Echeverri (presidente de la Federación Interamericana de
Abogados). Diario Judicial.com. 12 de septiembre de 2006.
42. Infobae Profesional.com. “El IVA podría desalentar la conformación de los consorcios de cooperación”,
Estudio Negri y Teijeiro. 24 de enero de 2005.
43. Las Asociaciones Civiles se encuentran constituidas por un conjunto de personas físicas (socios) que con
la debida autorización del Estado (IGJ o Dirección Provincial de Personas Jurídicas) se unen para realizar acti-
vidades que tienden al bien común. Tienen tres órganos internos: La comisión o junta directiva, la asamblea
de socios y la junta fiscalizadora o comisión revisora de cuentas.
44. Véase en Anexo II descripción del Monotributo Social.
45. Agenda Laboral Errepar.
46. Entre las actividades incluidas se encuentran: acopiadores y cosechadores, agricultores, alambradores rura-
les, apicultores, arboricultores, arrieros y/o reseros, avicultores, canasteros y/o mimbreros, curtidores, esqui-
ladores, floricultores, fruticultores, granjeros criadores de animales domésticos, pescadores, piscicultores,
quinteros, horticultores, chacareros, tabacaleros, tamberos, viticultores, otros.
47. Para el caso de una Sociedad con un ingreso bruto anual de $ 70.000 constituida por 3 socios, que se dedi-
que a la venta de bienes, deberá inscribirse en la categoría J e ingresar en concepto de impuesto integrado
mensual $ 310,40 (194 + 60 %).
48. Véase más adelante la descripción del Monotributo Social.
49. Véase al final del Documento detalle de las Dependencias AFIP/DGI ubicadas en las Provincias de Chaco,
Formosa, Corrientes y Misiones.
50. Aquella persona que está realizando una única actividad productiva y ve dificultada su inserción en la eco-
nomía por estar en una situación de vulnerabilidad social (la noción de vulnerabilidad social identifica a gru-
pos sociales, hogares e individuos, que por su menor disponibilidad de activos materiales __ingresos, vivienda__
y no materiales __protección social: salud, educación y seguridad social__, quedan expuestos a sufrir alteracio-
nes bruscas y significativas en sus niveles de vida, especialmente ante cambios en la situación laboral de sus
miembros activos).
51. El Registro tiene su sede en la calle 25 de Mayo 606, CP (1002), Capital Federal, teléfonos (011) 4316-
4942/44/46/49, E-mail: registroefectores@desarrollosocial.gov.ar
52. Todo el grupo familiar (esposa/o e hijos) puede acceder a la cobertura médica, mediante el pago de un adi-
cional equivalente a $ 11,11 por cada adherente.
87Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
ADMINISTRACIÓN FEDERAL DE INGRESOS PÚBLICOS
(www.afip.gov.ar)
REGIONAL POSADAS: Córdoba 2167, Posadas, Misiones - Tel.: (03752) 42-0706 / 43-9542
AGENCIA POSADAS: Bolívar 2151, Posadas, Misiones - Tel.: (03752) 42-2783
DISTRITO EL DORADO: Av. San Martín 1521, El Dorado, Misiones - Tel.: (03751) 42-2078
DISTRITO CURUZÚ CUATIÁ: Gral. Ramírez 741, Curuzú Cuatiá, Corrientes - Tel.: (03774) 42-3484
DI S T R I T O PA SO D E L O S LI B R E S: Brasil 1201, Paso de los Libres, Corrientes - Tel.: (03772) 42-5469
REGIONAL RESISTENCIA: French 506, Resistencia, Chaco - Tel.: (03722) 42-4304
AGENCIA RESISTENCIA: French 506, Resistencia, Chaco - Tel.: (03722) 42-5280
AGENCIA FORMOSA: Brandsen 459/65, Formosa - Tel.: (03717) 42-2349
AGENCIA CORRIENTES: Av. Italia 385, Corrientes - Tel.: (03783) 43-7287 / 88
DISTRITO ROQUE SÁENZ PEÑA: Rivadavia 663, Roque Sáenz Peña, Chaco - Tel.: (03732) 42-1200
DISTRITO CLORINDA: Av. San Martín 1101, Clorinda, Formosa - Tel.: (03718) 42-1944
DISTRITO GOYA: Colón 899, Goya, Corrientes - Tel.: (03777) 42-1768 / 1469
INAES - INSTITUTO NACIONAL DE ASOCIATIVISMO Y ECONOMÍA SOCIAL
Avenida Belgrano 1656, Ciudad de Buenos Aires, CP: C1093AAR
Tel.: (54) (011) 4383-4444 y líneas rotativas, http://www.inaes.gov.ar
ÓRGANOS LOCALES COMPETENTES DEL INAES
Provincia de Formosa
Dirección de Cooperativas y Mutualidades: Belgrano 505 (esquina Pringles), Formosa.
Tel.: (03717) 43-0293, e-mail: dcm@formosa.gov.ar
Provincia del Chaco
Dirección de Cooperativas y Mutuales: Marcelo T. de Alvear 145, Piso 7º, Resistencia.
Tel.: (03722) 44-8081 / 44-8023, e-mail: minprod.dircoop@ecomchaco.com.ar
Dirección de Personas Jurídicas (Depto. Mutuales y Fundaciones):
Córdoba 115, Resistencia - Tel.: (03722) 42-2332
Provincia de Corrientes
Dirección General de Cooperativas: Perú 1186, Corrientes.
Tel.: (03783) 47-6034, e-mail: dircoopctes@espacio.com.ar
Dirección de Programación y Acción Social: 9 de Julio 1536, 2º Piso, Of. 8, Corrientes.
Tel.: (03783) 43-3944, e-mail: programacionsocial_ctes@hotmail.com
DIRECCIONES ÚTILES
88 Formas Asociativas para la Agricultura Familiar
Provincia de Misiones
Secretaría de Estado de Acción Cooperativa y Mutual: Av. Mitre 2180, Posadas.
Tel.: (03752) 44-7502 / 03 / 44-7199
Dirección General de Acción Cooperativa y Mutual: Av. Mitre 2180, Posadas.
Tel.: (03752) 33-7235 / 44-7239
Dirección de Acción Mutual: Av. Mitre 2180, Posadas.
Tel.: (03752) 44-7502, e-mail: sucei_comext@misiones.gov.ar
CONSEJOS PROFESIONALES DE CIENCIAS ECONÓMICAS
Consejo Profesional de Ciencias Económicas del Chaco: Pellegrini 212,
Resistencia. Tel.: (03722) 42-0345 / 42-9803, e-mail: cpcechaco@arnet.org.ar
Consejo Profesional de Ciencias Económicas de Corrientes: Pellegrini 1150,
Corrientes. Tel.: (03783) 42-2884 / 42-9826, e-mail: informes@cpcecorrientes.org.ar
Sitio web: www.cpcecorrientes.com.ar
Consejo Profesional de Ciencias Económicas de Misiones: Bolívar 2344, Posadas.
Tel.: (03752) 42-5358 / 43-5405, e-mail: cpcemnes@arnet.com.ar
Consejo Profesional de Ciencias Económicas de Formosa: Paraguay 433, Formosa.
Tel.: (03717) 42-9888, e-mail: cpce_fsa@arnet.com.ar, Sitio web: www.cpcef.org.ar
DIRECCIONES DE RENTAS PROVINCIALES
Provincia de Formosa: Dirección General de Rentas: Ayacucho 810, Formosa.
Tel.: (03717) 43-6366, Sitio web: www.dgrformosa.gov.ar
Provincia de Corrientes: Dirección General de Rentas: 25 de Mayo 902, Corrientes.
Tel.: (03783) 47-6542 / 6526. Para consultas desde Corrientes (Capital e interior)
0-800-555-7376, Sitio web: www.corrientes.gov.ar/rentas.htm
e-mail: dgrdireccion@corrientes.gov.ar
Provincia de Misiones: Dirección General de Rentas: San Martín 1754, Posadas.
Tel.: (03752) 44-7573 / 4 / 5, Sitio web: www.dgrmisiones.gov.ar
e-mail: sehyf_dgr@misiones.gov.ar
Provincia del Chaco: Dirección General de Rentas: Av. 25 de Mayo 899, Resistencia.
Tel.: (03722) 42-5816 / 42-8575, Sitio web: www.chaco.gov.ar/rentas/DGR/index.htm
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Impreso en la Argentina en Enero de 2007 en Casano Gráfica.
Tirada de esta edición: 2.000 ejemplares.
FIDA / PRODERNEA - PRODERNOA / FLACSO
O T RAS PU B L I C AC I O N E S
EL SECTOR ARTESANÍAS EN LAS
PROVINCIAS DEL NOROESTE ARGENTINO
Catamarca, Jujuy, Salta y Tucumán
EL SECTOR ARTESANÍAS EN LAS
PROVINCIAS DEL NORESTE ARGENTINO
Chaco, Corrientes, Formosa y Misiones
EDUCACIÓN, DESARROLLO
RURAL Y JUVENTUD
El presente manual de asesoramiento está dirigido a los
técnicos y profesionales que trabajan en el ámbito del de-
s a rrollo rural y a los agentes productivos rurales y sus
organizaciones.
La estructura elegida para el manual considera dos par-
tes básicas: la primera destinada a conceptualizar la temá-
tica del asociativismo en pequeños productores, y la se-
gunda contiene información general sobre distintos tipos
de sociedades, agrupamientos o contratos, que en nues-
tro país pueden adoptar los productores agropecuarios,
marcando sus características distintivas, sus formas legales
y de control, algunos aspectos contables, sus efectos im-
positivos y previsionales y un resumen de las ventajas o
desventajas de su implementación, teniendo en cuenta los
recursos y capacidades disponibles de los pequeños pro-
ductores y sus organizaciones en las áreas de ejecución de
los programas PRODERNEA y PRODERNOA.
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