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REELECCIÓN
LEGISLATIVA.
ISRAEL CHAPARRO MEDINA
1
REELECCIÓN LEGISLATIVA.
Índice de contenido
Introducción ..................................................................................................................................... 2
Marco histórico ............................................................................................................................... 4
Reformas en materia de reelección legislativa ..................................................... 4
Reelección de legisladores: discusión vigente ..................................................... 7
Posibilidades reales de una reforma en provecho de la reelección legislativa ..... 9
Elementos en contra de la reelección legislativa en México .......................................... 12
Elementos a favor de la reelección legislativa en México ............................................... 17
Reelección legislativa limitada ........................................................................... 20
Fragilidad institucional de los congresos locales ............................................................... 21
La reelección legislativa como herramienta de cambio en la política nacional ........ 23
Consideraciones constitucionales ...................................................................... 24
Propuestas para una reelección legislativa en México .................................................... 25
Ventajas ............................................................................................................. 26
Conclusiones ................................................................................................................................. 28
Fuentes consultadas ................................................................................................................... 30
2
Introducción
En México, hablar de la reelección de legisladores en períodos no continuos
ha sido una constante de debate, la reelección legislativa consecutiva es un tema
nuevo en el sistema político mexicano, su importancia se explica por la expectativa
de su próxima aplicación. La aprobación de la reelección consecutiva de los
legisladores se logró gracias a los argumentos a favor que constituyeron el eje del
debate, entre los que se pueden destacar, el acercamiento entre los representantes
y representados y la consecuentemente mejora de la función representativa de los
congresos; y la construcción de carreras parlamentarias con la consecuente
profesionalización y especialización de los representantes en técnica legislativa.
Estaba prohibida la reelección legislativa inmediata desde el año de 1933. Esta
medida fue promovida después de que un sistema autoritario centralizara todo el
poder en un grupo de personas.
En 2016, cuatro eran los países latinoamericanos que prohibían la reelección
consecutiva, estos son México, Guatemala, Colombia y Paraguay. México, al ser
una democracia con pluralidad partidista, el sistema político permite que se realicen
elecciones para representantes del Poder Legislativo por medio de la mayoría
relativa, la representación proporcional y los distritos uninominales y plurinominales.
A lo largo del presente texto nos percataremos de la relevancia de estas
particularidades que presenta nuestro sistema electoral y de qué manera han
incidido en las transformaciones políticas que se han ido generando en las últimas
décadas en nuestro país, a partir de las necesidades que han surgido a lo largo de
la historia política mexicana.
Por este motivo, es preciso hacer un breve recuento de los antecedentes más
importantes que ha tenido la iniciativa retomar la llamada reelección legislativa, la
cual pretende prolongar los periodos de trabajo de los funcionarios que laboran en
el Congreso de la Unión y que, de ser así, conllevarían enormes transformaciones
y consecuencias políticas que si bien no es posible prever en su totalidad, sí es
3
posible analizar con base en indicadores, teorías y experiencias que se han
observado en otros sistemas políticos similares al nuestro.
Asimismo, una vez que se hayan tomado en cuenta estas experiencias, así como
los factores que podrían facilitar o dificultar el ejercicio de este mecanismo electoral
que se encuentra aún en entredicho, será posible realizar un análisis más
exhaustivo de las ventajas o desventajas que esto podría representar para nuestro
país, así como las medidas necesarias para que, en caso de que esto sea posible,
llevarlo a cabo de la mejor forma, siempre en provecho de la ciudadanía.
De este modo, el presente texto tiene la pretensión de dilucidar algunas de estas
posibilidades y analizar de manera breve, pero concisa, algunos de los elementos
fundamentales que podrían ser un aliciente para impulsar reformas electorales que
logren aumentar la eficiencia de los agentes políticos, convirtiéndose éstos en
elementos de mejora hacia las condiciones ciudadanas, pero sin dejar de lado los
riesgos que esto puede conllevar, dado las condiciones específicas de nuestro país.
Con base en esto, a continuación se detallarán algunas de las reflexiones más
significativas en torno a los temas electorales y la reelección legislativa, así como la
opinión experta de especialistas en el tema que nos arrojan luz sobre esta cuestión
con el fin de sustentar cualquiera de las posturas que se tomen al respecto, tanto
las que se encuentran en contra de la reelección inmediata de los legisladores,
como aquellas que se encuentran a favor, pues no hay suficiente comparación con
otros países o no existe teoría suficiente que pretenda delimitar y conocer los
alcances de una reforma de tal envergadura que tiene la capacidad de transformar
de manera significativa las condiciones políticas y electorales del sistema
democrático mexicano.
4
Marco histórico
Desde mediados del siglo XX se ha discutido ampliamente la posibilidad de aprobar
la reelección de legisladores, ha sido discutida de sobremanera, especialmente
después de la creación y la reforma de la Constitución que nos rige actualmente.
Los Partidos, que han sido históricamente relevantes en la construcción de nuestro
sistema político, han hecho propuestas de ley sobre la reelección legislativa, sin
embargo, los intentos de establecer un mecanismo de reelección han sido
frustrados.
Reformas en materia de reelección legislativa
A partir de la reforma electoral efectuada entre 1933 y 1964, fue posible que el
Partido Nacional Revolucionario (PNR), antecesor del Partido Revolucionario
Institucional (PRI), lograra ciertos avances electorales que le permitieron, a su vez,
la centralización del poder en un solo partido. Esto se denota claramente en la
prohibición de la reelección de legisladores, ya no podían repetir su participación
política mediante la participación directa en las entidades del país, sino que tendrían
que pasar necesariamente por la elección a través del partido, lo que facilitó la unión
del PNR, al tiempo que disolvía los partidos locales y regionales que se sustentaban
en éste.
Cabe destacar que la propuesta realizada en 1964 de establecer una reelección
legislativa fue llevada a cabo por el Partido Popular Socialista, la cual la presentó el
30 de diciembre del año en comento.1
1 Cortez Salinas, Josafat. La propuesta de la reelección inmediata de legisladores en la
reforma del Estado de 2010. Boletín Mexicano de Derecho Comparado. Instituto de
Investigaciones Jurídicas, UNAM, 2011, p. 1325. [Fecha de consulta: 20 de mayo de 2017].
Disponible en línea: http://www.scielo.org.mx/scielo.php?pid=S0041-86332011000300010&script=sci_arttext
5
Otra de las ventajas que obtuvo el PNR al prohibir la reelección legislativa fue la
cohesión y unificación de un sistema de partidos que anteriormente se encontraban
concentrado en cacicazgos, por lo que a partir de ese momento el PNR alcanzó su
hegemonía partidista.
La estrategia de unificación del partido, así como la consecuente intención de
aceptar y promover la militancia aparentemente abierta en el partido, evitó la
conformación de asociaciones políticas importantes que fueran contrarias al PNR,
por lo que el partido se consolidó de manera hegemónica frente a las demás
agrupaciones políticas.
En este sentido, este partido logró tener la capacidad de asimilar movimientos
políticos relevantes que se desarrollaban en ese periodo de tiempo, tal es el caso
de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), a la cual el PNR ofreció
cargos públicos a sus integrantes, evitando a su vez la creación de una segunda
fuerza política contraria.2
No obstante, a partir del segundo proceso de reformas electorales en México, el
cual se llevó a cabo en 1964, fue posible el crecimiento de fracciones políticas de
oposición, por lo que se comenzó a diversificar el panorama político de nuestro país,
aunque solamente en algunas regiones de México, pues a nivel local siempre fue
dificultoso aspirar a curules de mayoría relativa en distritos uninominales, empero,
a nivel federal aumentó significativamente la organización partidista.
Por otra parte, el especialista Jesús Tovar Mendoza ha expresado que las diversas
ampliaciones del sistema de representación proporcional en 1971, 1977 y 1986
lograron extender significativamente las fracciones parlamentarias de la oposición
hasta tal punto que el partido de gobierno perdió su tradicional mayoría
2 Tovar Mendoza, Jesús. Condicionantes políticos que impiden la reelección de legisladores en México. Revista de Ciencias
Sociales Convergencia, número 52, enero – abril 2010, p. 189. [Fecha de consulta: 05 de mayo de 2017]. Disponible en línea:
http://www.scielo.org.mx/scielo.php?pid=S1405-14352010000100008&script=sci_arttext&tlng=en
6
parlamentaria en 19983 y que, posteriormente, con el advenimiento de la
democracia y de la alternancia del poder a principios del presente siglo, ya no se
trataría más de un partido hegemónico, sino más propiamente de un sistema de
multipartidismo moderado.”4
Por su parte, es claro que si bien el monopartidismo en México y el presidencialismo
fueron algunas de las causas por las que se logró consolidar la hegemonía del PNR,
actualmente existen otras causas que han permitido la prevalencia de estas
condiciones a partir de finales del siglo pasado.
Para entender de mejor manera los precedentes de la prohibición actual a la
reelección legislativa en México es necesario revisar de manera breve el recorrido
histórico que ésta ha tenido, pues resulta notable el hecho de que a lo largo de la
historia política de nuestro sistema democrático, han existido algunos intentos por
permitir la reelección legislativa, aunque esto no haya desembocado precisamente
el éxito de dicha iniciativa.
De esta forma, es preciso anotar que uno de estos intentos fue aquél realizado en
1964, cuando se llevó a cabo una iniciativa de ley que promovía la permisividad de
la reelección. En ese caso, la Cámara de Diputados aprobó la moción, sin embargo,
la Cámara de Senadores no aceptó la propuesta, inclusive cuando uno de los
argumentos principales del deseo por promover esta iniciativa fue que así habría
una mayor profesionalización de los legisladores, al tiempo que se fortalecería el
Poder Legislativo.
En esa ocasión la Cámara de Senadores rechazó la propuesta y, de acuerdo con el
sociólogo Gabriel Careaga, uno de los principales motivos para ello fue que al
cambiar los lineamientos para la selección de candidatos, existía la posibilidad de
eliminar la prohibición de la reelección presidencial, cuestión que evidentemente no
3 Ibíd., p. 190.
4 Ídem.
7
le convenía al Partido Revolucionario Institucional (PRI), el cual ostentó desde ese
momento la hegemonía política del país.
Reelección de legisladores: discusión vigente
Ahora bien, en el año 2005 ocurrió nuevamente la posibilidad de que se aprobara la
reelección legislativa, propuesta por el Poder Ejecutivo, en ese entonces el
presidente Vicente Fox. En esa ocasión, una vez que la iniciativa fue aprobada por
la Cámara Baja, o también llamada, la Cámara de Diputados. En cambio, en la
Cámara de Senadores, inicialmente la propuesta era apoyada por la mayoría de
senadores, sin embargo, la fracción de senadores del PRI se opuso a ésta y logró
hacer que otras fracciones de partidos opositores también rechazaran dicha
propuesta, por lo que tuvo que se desechada, por un voto de diferencia en contra –
que en su caso fue de 51 votos en contra de 50 votos a favor de la misma-.5
De la misma forma, existieron también nuevos intentos de aprobar dicha iniciativa
en 2001, 2003 y 2004, por parte de legisladores de los tres principales partidos
políticos de México, a saber, Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido
Acción Nacional (PAN) y Partido de la Revolución Democrática (PRD). Sin embargo,
debido a causas de falta de coordinación y cabildeo político, dicha iniciativa no fue
fructífera.
También hubo otra oportunidad de establecer un cambio favorable para la
reelección legislativa en 2007. Ésta se dio a través de una reforma de Estado para
la cual se creó la Comisión Ejecutiva de Negociación y Construcción de Acuerdos
del Congreso de la Unión, la cual tuvo una vigencia de un año, por lo que en 2008
caducó su periodo de trabajo.
5 Ibíd., p. 191.
8
En esta ocasión, los diversos partidos participantes alcanzaron sus propuestas de
ley al cabo de dos meses, respecto a la reelección de legisladores a nivel estatal y
federal. Otro de los aspectos importantes que logró el trabajo en conjunto de la
Comisión Ejecutiva de Negociación y Construcción de Acuerdos del Congreso de la
Unión fue la sustitución de Consejeros del Instituto Federal Electoral (IFE), así como
la prohibición de la contratación de espacios para publicidad política o partidista, por
parte de militantes o ciudadanos en general.
A partir de ese momento, uno de los logros más relevantes fue la delimitación y
regulación de los medios empleados para la promoción de campañas políticas, y su
acotación a periodos de campaña específicos, así como diversas modificaciones
constitucionales en torno a temas electorales; sin embargo, el tema de la reelección
legislativa no tuvo efecto en esta reforma.
En este sentido, y a partir de las elecciones legislativas del año 2009, la cual fue
favorable para el PRI, la configuración de la Cámara de Diputados fue crucial para
la modificación o permanencia de legislaciones que versan en torno a la reelección
legislativa; pues es claro que la participación de este partido hegemónico ha sido
fundamental en la no aprobación de dicha iniciativa, pues al no convenir a sus
intereses, al tiempo que mantiene la mayoría relativa de escaños en las Cámaras,
resulta evidentemente complicada la reelección de legisladores.
En ese mismo año, específicamente el 15 de diciembre6, a través de una propuesta
de ley emitida por el expresidente Felipe Calderón Hinojosa, se envió un paquete
de iniciativas al Congreso de la Unión para fortalecer los vínculos entre la
ciudadanía y el sistema político, con el fin de consolidar las instituciones. De este
modo, a través del mecanismo de reelección, se pretendió fortalecer al Poder
Legislativo.
6 Cortez Salinas, Josafat. Óp. Cit., p. 1330.
9
Esta iniciativa proponía permitir la reelección de legisladores federales, limitándola
a doce años y permitiendo, a su vez, la reelección de legisladores locales, de
ayuntamiento y jefes delegacionales, dejando a la libre elección esta decisión, por
parte de las legislaturas locales.
De acuerdo con Josafat Cortez Salinas, algunos de los argumentos emitidos por el
expresidente Felipe Calderón, en contra de la prohibición actual de la reelección
legislativa son los siguientes:
1. Elevados costos en las elecciones legislativas en cada uno de los periodos
electorales, lo que se podría evitar mediante la reelección de los funcionarios.
2. La prohibición significa una importante limitación a la expansión de
experiencias y conocimientos de los legisladores que, a partir de esta
prohibición, no les es posible adquirir la experticia necesaria para los temas
relativos al Congreso y, genera a su vez una falta de conocimientos por parte
de los legisladores recién electos que no conocen aún las necesidades de
sus representados.
3. Esta prohibición también genera una de las consecuencias más importantes:
el conocimiento del ejercicio del poder, por parte de los legisladores; en este
sentido, en el momento en que los legisladores abandonan su cargo, éstos
ya no pueden ser evaluados por los ciudadanos, caso contrario si éstos
pudieran permanecer en el cargo durante un periodo más largo y, de este
modo, estarían expuestos al escrutinio constante de la ciudadanía, en favor
de la rendición de cuentas.
Posibilidades reales de una reforma en provecho de la reelección legislativa
De este modo, a pesar de que esta propuesta emitida por Felipe Calderón ha estado
siempre presente en el Partido Acción Nacional (PAN), en el año 2010 el Partido
10
Revolucionario Institucional (PRI) también participó en la iniciativa de esta ley, el 23
de febrero de ese año7, en la que buscó reestructurar al Poder Legislativo, bajo los
siguientes motivos:
1. Teniendo en cuenta que el Poder Legislativo es el punto central de una
democracia, como la que rige al Estado mexicano, el PRI destacó la
necesidad de fortalecerlo, así como sus vínculos con el Ejecutivo y con la
ciudadanía en general, a través de la extensión de su periodo de trabajo.
2. Apelando a que el Poder Legislativo debe mantenerse fuerte y que los
legisladores deben cumplir sus funciones de la mejor manera posible, el
Partido Revolucionario Institucional planteó la necesidad de extender el
periodo de legislación –a través de la reelección legislativa- con el objetivo
de fomentar la experticia de los funcionarios en sus temas correspondientes,
así como de incentivarlos por medio de la posibilidad de su reelección, para
que así cumplan de forma cabal sus funciones que en un principio, son
obligatorias.
De esta manera, la iniciativa plantea la posibilidad de reelección de legisladores,
poniendo ciertos límites, tales como un límite de nueve años de ejercicio para los
diputados, y de doce años de ejercicio para los senadores; esto al tiempo que se
libera el límite para la reelección de legisladores a niveles locales y municipales.
De acuerdo con el Revolucionario Institucional, esta iniciativa podría tener las
siguientes ventajas políticas:
Profesionalización de la política.
Efectividad del sufragio democrático.
Fomento de la relación de confianza entre el votante y su representante.
Aporte a la institucionalización de los partidos políticos.
Revalorización del Parlamento en el sistema político.
7 Ibíd., p. 1331.
11
Aumento de la responsabilidad política.
Sin embargo, actualmente existe una posibilidad relativamente más clara de que la
reelección legislativa pueda ser posible en los próximos años o, por lo menos
discutida por las principales fuerzas políticas, pues el senador Manlio Fabio
Beltrones, uno de los principales dirigentes del PRI, y de los personajes más
representativos de dicho partido, ha propuesto una reforma de ley que toca el tema
de la reelección consecutiva de los legisladores. De este modo, bajo la influencia de
Beltrones ha resurgido la posibilidad de esta iniciativa pero, a su vez, a
consecuencia del triunfo del PAN en las elecciones del 2000, ha aumentado la
influencia política de los gobernadores de los diversos estados de la República, por
lo que aumenta de igual manera la alternancia política.
Al respecto, el especialista en el tema, Jesús Tovar Mendoza, afirma que
Más allá del liderazgo que tiene este senador, no sólo en la Cámara sino
también al interior de su partido, vale mencionar que el reciente triunfo del PRI
en las últimas elecciones legislativas representan un avance de las posiciones
de los sectores priístas de las entidades federales en desmedro de la otrora
poderosa dirección nacional. En efecto, luego de la pérdida del Poder Ejecutivo
en 2000, la alternancia y el desuso de las reglas informales que otorgaban gran
discrecionalidad al presidente de la República, devino en el acrecentamiento de
la influencia de los gobernadores de los estados.8
Es importante señalar que, de acuerdo con la Revista de Ciencias Sociales de la
Universidad Autónoma del Estado de México, Convergencia, de los 21 gobiernos
con mayoría legislativa, 16 de ellos le pertenecen al PRI, por lo que este partido ha
adquirido una influencia muy importante debido a que se ha formado un bloque de
gobernadores priístas que han alcanzado una hegemonía electoral de los estados
de la República.
8 Tovar Mendoza, Jesús. Óp. Cit., p. 193.
12
En este sentido, y en vista de que actualmente el PRI sí considera importante para
sus intereses la reforma política en torno al tema de la reelección legislativa, este
grupo de gobernadores han formado un eje que puede ser decisivo en las próximas
discusiones al respecto. Así, eliminando la prohibición de la reelección legislativa,
el partido podría dar paso a la continuidad de iniciativas estatales y locales,
permitiendo al mismo tiempo a centralización del partido y la concentración de un
poder ahora ya no discontinuo.
Elementos en contra de la reelección legislativa en México
Como hemos podido observar a lo largo del presente texto, el debate en torno a la
reelección o no reelección legislativa ha tenido una historia por demás exhaustiva
y activa en los últimos años, por lo que resulta clara la necesidad de entablar
debates en la actualidad para discernir de mejor manera sobre la relevancia de esta
iniciativa, así como los efectos que esto podría conllevar.
En este sentido, en el presente apartado se detallarán de manera breve algunos de
los puntos en contra de la reelección legislativa que se han vertido a lo largo de los
debates antes mencionados y desarrollados en los últimos años.
Algunos autores afirman que los argumentos en contra de la reelección legislativa
se dividen principalmente en dos grandes campos: por causas ideológicas y por
razones de desventajas políticas. El primero de los motivos, aquél de carácter
ideológico, se remite en muchas ocasiones a los enunciados de la Revolución
mexicana, asumiendo que ésta postulaba leyes y argumentos en favor de la no
reelección; empero, especialistas en el tema aseguran que éstos no eran
postulados precisamente de la Revolución, por lo que este argumento se ha
encontrado siempre en un álgido debate.
Otro de los puntos en contra de la reelección es aquél que enuncia la facilidad de
que se posibilite una reelección presidencial -y por tanto, una dictadura- si se
13
comienza con la aprobación en las Cámaras de una reelección legislativa. Sin
embargo, ante esto se ha respondido que podría establecerse la reelección de
legisladores, respetando el hecho de que no exista la misma reelección a nivel
presidencial para que ello no afecte el sistema democrático mexicano.
Por otra parte, respecto a los motivos de desventajas políticas que se han
manifestado en torno a la posibilidad de aprobar la reelección legislativa en nuestro
país, destaca el deseo de evitar que mediante este mecanismo surjan relaciones
clientelares entre partidos y sus electores, lo que obstaculizaría el trabajo en el
Congreso y se enfocaría en intereses específicos de los partidos. A ello se ha
respondido que, en efecto, las relaciones clientelares se desarrollan en mayor
medida en el interior del partido, por tanto, al haber una hegemonía de un partido
único como el que existe actualmente, estas relaciones ya se han dado al interior
de las filas partidistas.
De este modo se ha argumentado que, al contrario de lo que se piensa, las
relaciones clientelares existentes podrían fortalecer el trabajo legislativo de aquellos
congresistas que puedan tener mayor experiencia y prevalencia en sus cargos,
pues de acuerdo con especialistas en el tema, es más riesgoso que lleguen nuevos
congresistas cada periodo electoral debido a que es más fácil que éstos –con base
en su inexperiencia y en su deseo de obtener mayores ventajas políticas- puedan
establecer relaciones clientelares más cortas, pero más agresivas, teniendo en
cuenta el breve lapso de su cargo púbico.
Evidentemente, un argumento en contra de la reelección es, precisamente, aquél
que señala la posibilidad de que el legislador que se reelige cuente con una
trayectoria más desgastada que un legislador que llega al cargo por vez primera,
por lo que uno de los riesgos es que mediante este mecanismo sea más difícil la
transparencia y el trabajo claro de los servidores más antiguos en el cargo, por lo
que un legislador que es elegido recientemente podría exigir mayores cuentas a los
legisladores anteriores y, a través de ello, fortalecer su posición y credibilidad en el
Congreso.
14
Por último, es menester no perder de vista que pese a las ventajas que podrían
enunciarse en este trabajo o en otros de mayor alcance o especificidad en torno a
las ventajas de la posibilidad de reelección legislativa en México, nuestro país
cuenta con una historia política amplia y un cúmulo de experiencias que nos dejan
ver algunas de las posibilidades que podrían devenir de una iniciativa de esta
magnitud, sin ser necesario precisamente llevarlo a cabo para, posteriormente,
percatarnos de las consecuencias –tanto positivas como negativas-.
Ante ello, y con base en algunas experiencias negativas que se han vislumbrado
en México, una de las desventajas que señalan aquellos que están en contra de
esta medida es la posibilidad latente de que a través de este sistema de reelección
los legisladores reelectos puedan favorecer únicamente a las localidades que les
brindan su apoyo y, de este modo, velar por sus propios intereses personales,
anteponiéndolos a los intereses de las mayorías, pues una vez arraigados y
apoyados en ciertas localidades con las que desarrollen algunas relaciones
clientelares, se perdería de vista el objetivo de la representación general y, por
tanto, de la transparencia de un ejercicio legislativo.
Por este motivo, Jesús Tovar Mendoza declara que
Resulta menos perjudicial la posibilidad de una diversidad de patronazgos
clientelares locales o regionales a pocos patronazgos enquistados en las
cúpulas partidarias, como es el caso actual… [Debido a que] la renovación de
las dirigencias partidarias y de los cuadros legislativos debe basarse más en
una dinámica electoral, de tal modo que se vinculen los intereses de los partidos
con los intereses generales de la sociedad. Es decir, que la competencia por
los cargos al interior de los partidos considere las preferencias de los votantes,
ya sea haciéndolos participar directamente en las elecciones internas de
candidatos (primarias), o por que las cúpulas partidarias tiendan a seleccionar
candidatos con mayor ‘arrastre’ electoral.9
9 Ibíd., p. 199.
15
Así, se evidencia la preferencia de algunos especialistas en temas electorales por
la no reelección legislativa, apostando más a una rotación más generalizada y
dinámica que pueda posibilitar un trabajo legislativo más transparente y
disciplinado, así como el fortalecimiento del Congreso a través de la constante
reincorporación de nuevos elementos legislativos que eviten el arraigo de
costumbre que desfavorezcan los intereses de las mayorías.
Asimismo, es importante tener en cuenta otro de los riesgos que representa la
posibilidad de una reelección legislativa, a saber que, de acuerdo con Jáimes
Delgado, podría existir un conflicto de intereses distritales y partidistas, así como
una eventual pérdida de la disciplina parlamentaria.
En el supuesto de que existiera la reelección inmediata de legisladores, éstos
podrían establecer vínculos más sólidos con su electorado, es decir, en caso de
que éstos decidieran inclinarse a actuar en favor de sus votantes -los que
claramente se encuentran muchas veces opuestos a los intereses de los partidos
políticos-, el partido político perdería influencia en las decisiones del legislador, el
cual, si se empeñara en defender los intereses de su localidad, muchas veces no
sólo pondría en tela de juicio su <<lealtad>> hacia el partido y perdería
probablemente la posibilidad de continuar su carrera política en el mismo, sino que,
al mismo tiempo existiría una falta de disciplina parlamentaria, es decir, habría una
discordancia entre los acuerdos interpartidistas logrados de manera institucional, y
aquellos que llegara a tener el funcionario con sus votantes.
Por este motivo, se ha comparado la posibilidad de este tipo de medidas con
experiencias ya existentes en países como Estados Unidos, por lo que se ha
afirmado que el monopolio de las postulaciones de candidatos a cargos de elección
popular que tienen los partidos, es el candado principal que contribuye a lograr esa
unidad y disciplina partidista. Para ilustrar los efectos de la reelección inmediata
legislativa en el Congreso, se ha utilizado mucho el ejemplo de los Estados Unidos,
sin embargo habría que aclarar que en México el sistema de partidos difiere mucho
del de los Estados Unidos; en ese país, los partidos políticos no son vistos como
actores importantes dentro del ámbito legislativo, principalmente porque ellos no
16
controlan el acceso a las boletas electorales debido a la institucionalización del
sistema de elecciones primarias, que si bien existen en México éstas no son
obligatorias, sino que dependen de la decisión de las dirigencias nacionales de los
partidos.10
Al respecto, Jaimes Delgado también apela al papel de los roles políticos que
desempeñan los partidos, así como a las consecuencias económicas y sociales que
se generan cada tres años, en periodo de elecciones:
Además, el rol de los partidos en las campañas electorales tanto en términos
financieros como logísticos, es mucho menor con respecto a los partidos
mexicanos; ya que mientras en los Estados Unidos, al menos en lo que respecta
al financiamiento de las campañas electorales los partidos políticos se han visto
desplazados por importantes grupos de intereses económicos y políticos.11
Por último, diversos pensadores han coincidido en el infortunio que representa
haber tenido un gobierno hegemónico por más de 70 años, el cual representó un
periodo de estancamiento constitucional y político que provocó la fragilidad y poca
institucionalización que actualmente podemos vislumbrar en nuestro sistema
político vigente. De este modo, y aunado a la poca continuidad del trabajo realizado
en el Congreso debido a la imposibilidad de la reelección legislativa, empero, se
han llevado a cabo una serie de debates que han defendido este mecanismo sin
argumentos tan efectivos como para resultar convincentes del todo.
10 Jaimes Delgado, David Alberto. ¿Cómo fortalecer el Poder Legislativo Federal en México?: el caso de la reelección
inmediata de los miembros del Congreso. Revista Mexicana de Derecho Constitucional, núm. 25, julio-diciembre, 2011.
Instituto de Investigaciones Jurídicas, UNAM, p. 90. [Fecha de consulta: 15 de mayo de 2017]. Disponible en:
http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1405-91932011000200003
11 Ídem.
17
Elementos a favor de la reelección legislativa en México
Como se mencionó anteriormente, uno de los puntos a favor de la reelección
legislativa en nuestro país ha sido el argumento de la profesionalización y
especialización de los legisladores en nuestro país, a partir de una mayor duración
de sus periodos de trabajo como entes políticos. En este sentido, se ha planteado
que una mayor permanencia en sus cargos públicos facilitaría un mayor
conocimiento de los asuntos parlamentarios por parte de los funcionarios en
comento, así como una mayor calidad en la legislación.
A partir de ello, se ha desarrollado que un diputado o senador que haya sido
reelecto podrá tener conocimientos más profundos del ámbito político, así como las
negociaciones y la facilidad en el desarrollo de actividades de cabildeo en favor de
su partido y, por consiguiente, de la ciudadanía que éste representa.
Asimismo, una mayor duración en los periodos de trabajo de los legisladores podría
permitir la creación de cuerpos o comisiones permanentes especializadas que
posibilitaran una información más experta y confiable con relación a los temas que
a éstos les competan. De este modo, las iniciativas de ley propuestas por estos
grupos o comisiones podrían tener mayor profundidad y sería más viable no sólo
su aprobación, sino también su aplicación y su mantenimiento y vigencia.
Uno de los argumentos que se han puesto en boga debido a su remota posibilidad
de aplicación para algunas opiniones, y debido a su evidente polémica, ha sido el
argumento de que, si los legisladores pudieran reelegirse, éstos desarrollarían un
mejor vínculo con sus votantes, lo que les permitiría no sólo dar continuidad a su
trabajo legislativo, sino también rendir cuentas de mejor manera a sus electores,
con base en la demostración y evidencia de su trabajo realizado. Este argumento,
no obstante, ha resultado controversial debido a sus altas posibilidades de
deformación o tergiversación debido al factor de corrupción que ha prevalecido
como un ente expectante y latente en los grupos políticos de nuestro país.
Sin embargo, lo anterior resulta de especial relevancia, puesto que
18
En la composición de los congresos en México, ya sea a nivel estatal o federal,
los diputados rara vez regresan a sus distritos, y no lo hacen porque el legislador
depende exclusivamente de su partido para aparecer en las listas electorales,
y por lo tanto su vinculación con un mismo electorado regularmente no excede
más de una sola vez: en el momento de la votación […] En la teoría política,
este problema se puede observar desde el binomio principal-agente, que
expresa una relación de un mandante y un mandatario en términos electorales:
los ciudadanos y los congresistas, respectivamente), mediante la cual los
primeros delegan un poder a sus representantes, a cambio del cual éstos se
comprometen a rendirle cuentas a sus electores.12
Por ello, es fundamental enfatizar que a partir de este supuesto surgen dos grandes
problemáticas que es preciso analizar con mayor detenimiento:
1. El primer problema es que el agente, es decir, el mandatario, tiene incentivos
para no cumplir los mandatos del principal (mandante), por lo que el primero
puede actuar en favor de sus intereses personales, aprovechando la
ausencia del Congreso y de la falta de información de este último.
2. Otro problema común que se presenta en estos casos es que cuando el
periodo del legislador concluye, éste puede fácilmente no reconocer a sus
mandantes o electores, lo que imposibilita que estos últimos exijan cuentas
de lo laborado y el legislador se refugia en su principal acogedor político, a
saber, el partido al cual pertenece, pues es quien tiene la facultad de
premiarlo o castigarlo, con base en su carrera política.
Otra de las ventajas de la reelección de legisladores es claramente la posibilidad
de formación o fortalecimiento de élites políticas que no existan antes de la
reelección legislativa. En este sentido, es posible pensar que a través de la
conformación de estas élites es posible que se fortalezca el Poder Ejecutivo y
especialmente los partidos políticos, que serán los patrocinadores electorales de
12 Tovar Mendoza, Jesús. Óp. Cit., p. 195.
19
los entes políticos participantes que, a fin de cuentas, pasan a ser un mero
instrumento político y electoral que sirven específicamente a los fines de los
partidos políticos.
Un argumento que es muy utilizado en la defensa de la moción en torno a una
reelección legislativa es la continuidad de los trabajos, así como de los acuerdos y
negociaciones que se puedan efectuar entre distintas fuerzas políticas –entiéndase
partidos políticos- y que permitirían, a su vez, una mayor consolidación de acuerdos
que no se romperían o cambiarían cada cambio de periodo electoral, sino que por
el contrario, por medio de la reelección podrían afianzarse mayores vínculos
interpartidistas que puedan posibilitar de mejor manera los intereses de los
electores, así como favorecer la rendición de cuentas.
A su vez, otro de los elementos argumentativos más importantes es la reputación
que tendrían que cuidar las élites legislativas en el caso de que se pudieran reelegir,
es decir, teniendo en cuenta que éstas podrían ejercer el poder durante un tiempo
más prolongado, sería necesario que rindieran cuentas de manera satisfactoria y
que su trabajo mantuviera su posición ante los electores, con el fin de que puedan
ser elegidos una vez más en las próximas elecciones.
En este sentido, también se ha puesto de manifiesto la conveniencia de mantener
el poder con el fin de mantener también las discusiones en torno a decisiones
legislativas y propuestas de ley que en su momento no sean aprobadas, pues en
estos casos, y con la posibilidad de la reelección legislativa, los legisladores podrían
volver a discutir las iniciativas de ley no aprobadas y revisarlas nuevamente con la
posibilidad de ser aprobadas, como no sucede actualmente en nuestro sistema
legislativo.
20
Reelección legislativa limitada
Finalmente, teniendo en cuenta algunos de los elementos en contra, así como a
favor de la reelección legislativa, ha surgido también el debate en torno a una
alternativa que podría significar un cierto equilibrio entre las dos posibilidades, es
decir, mediante la aprobación de la reelección de legisladores, pero protegida por
algunas medidas diseñadas especialmente para los partidos políticos con el fin de
que éstos blinden el ejercicio legislativo, no obstante las modificaciones de ley que
se realicen en favor de un mecanismo relector.
Esta posibilidad se inclina a favor de una limitación a la reelección de distritos
uninominales mediante la modificación de las reglas en el recuento de votos y de
asignación de escaños, con la finalidad de adoptar un sistema de representación
proporcional personalizada, es decir, la totalidad de escaños de cada partido se
podría asignar con base en los votos a las listas, a través de un mecanismo de
representación proporcional.
Otro de los especialistas que han escrito a favor de la reelección partidista en
México es el Doctor David Alberto Jaimes Delgado, quien ha expresado que
Si queremos un Congreso más fuerte y activo, tendremos que reconocer que la
prohibición de reelegir a los diputados y senadores conspira contra el desarrollo
y maduración de nuestro Congreso; ya que bajo la sensibilidad, conocimientos
y experiencia del legislador es donde se encuentran las bases del buen legislar,
por ello, el pueblo quien eligió a sus representantes es quien debe juzgar si el
legislador cumplió cabalmente con su responsabilidad y si así fuere, entonces
el sufragio encontrará los mecanismos de expresión del mandato de la voluntad
de sus electores.13
De este modo, Jaimes Delgado también expresa la necesidad actual de la
política mexicana de recurrir a esta medida, pues de acuerdo con él, sólo
mediante la reelección es posible que los ciudadanos exijan la correspondiente
13 Jaimes Delgado, David Alberto. Óp. Cit., p.71.
21
labor a sus legisladores, es decir que mediante la prolongación de sus
ejercicios legislativos, éstos podrían responder a las necesidades de la
ciudadanía, en vez de obedecer a las necesidades e intereses de su partido,
intereses que cambiarán cada periodo electoral e interrumpirá la continuidad
de las reformas o iniciativas planteadas o discutidas que se hayan vertido
anteriormente, a favor de alguna localidad o de un grupo de ciudadanos que
hayan sido representados previamente a la llegada de las nuevas
administraciones legislativas.
Fragilidad institucional de los congresos locales
Teniendo en cuenta que la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos no permite la reelección inmediata de senadores y diputados, es
preciso constar que esta característica incide de manera notable en las
características de los congresos locales de nuestro país.
Esta prohibición repercute directamente en los gobiernos locales de las
entidades de la federación y resta experiencia -de igual manera que lo hace a
nivel federal- a los legisladores de los congresos locales y fomenta la inhibición
de las carreras políticas de los aspirantes a los cargos.
Por ello, uno de los principales investigadores en el tema, Moisés Pérez Vega,
en un análisis que realizó acerca de este fenómeno y sus afectaciones a nivel
local, sostiene que en 23 gobiernos locales estudiados se puede observar que
el
84.6% de los diputados locales no contaban con experiencia legislativa; sólo 7.8
tenía experiencia como diputado local; 4.8 como legislador federal y 2.6 en
ambos espacios […]es decir, un aplastante 85% de los diputados locales no
tiene experiencia legislativa, ya sea local o federal. En cuanto a la información
sobre la experiencia legislativa de los diputados federales, durante el periodo
22
1934-1997, en promedio, solamente 14% de los diputados contaban con
experiencia previa como diputados federales.14
Con base en estas cifras se evidencia que sólo un grupo reducido de políticos se
traslada de una cámara a otra, aunque es preciso enfatizar que la mayoría de éstos
lo hace de manera ascendente, es decir, de diputados locales a federales. Por este
motivo, si los legisladores no logran ascender en esta escala, regularmente se
dedican a buscar alternativas políticas fuera de ese ámbito, pues el 100 por ciento
de la rotación de cargos le impiden generar una carrera política en torno a sus
anteriores funciones.
Respecto a la carrera política de legislador, Moisés Pérez Vega apunta que con la
posibilidad de la reelección legislativa únicamente se abre la posibilidad de
desarrollar dicha carrera, más no la asegura, pues éstas dependen también de
otros factores que también influyen en el marco electoral y partidista, tales como
las normas de financiamiento de campañas, los procesos de nombramiento de
candidatos, entre otros.
Este último punto es fundamental en la comprensión y asimilación de la posibilidad
de llevar a cabo una reelección legislativa, pues esta aprobación tiene que ir
necesariamente acompañada de una modificación de la ley electoral respecto al
financiamiento de las campañas políticas, pues si se llegara a aprobar el
mecanismo de reelección sin modificar la ley electoral se generaría una reforma
que fortalecería principalmente a los partidos políticos pero que incentivaría en
14 Pérez Vega, Moisés. La debilidad institucional de los congresos locales. Límites de la
democratización mexicana y de la transformación de las relaciones Ejecutivo-Legislativo.
Andamios, Volumen 5, número 10, abril 2009, p. 260. [Fecha de consulta: 22 de mayo de
2017]. Disponible en: http://www.scielo.org.mx/scielo.php?pid=S1870-
00632009000100011&script=sci_arttext&tlng=pt
23
menor medida a los legisladores para responder a intereses distintos a los partidos
que los están postulando.
Ante ello, la alternativa de vincular el control del financiamiento de partidos en
periodo de campañas políticas podría resultar bastante útil en el progreso hacia la
apertura de reelecciones de legisladores, evitando algunos de los riesgos antes
mencionados.
La reelección legislativa como herramienta de cambio en la
política nacional
Diversos autores han reflexionado en torno a la posibilidad de concebir una
reelección de tipo legislativa como agente de transformación en la política actual de
nuestro país, en este sentido, se han vertido diversidad de opiniones y escrito
multitud de textos académicos e informativos que previenen de los riesgos relativos
a la adopción o a la no adopción de dicho mecanismo institucional, no obstante,
diversas experiencias internacionales, e incluso experiencias nacionales previas, en
las que se ha intentado llevar a cabo esta reforma nos indican cuán alejada de la
realidad se encuentra muchas veces la teoría electoral a la que pretendemos
regirnos.
En este sentido, el Doctor en derecho, Armando Soto Flores, hace referencia a la
teoría de la democracia electoral que se ha desarrollado ampliamente en los
estudios políticos realizados en Estados Unidos. Ante ello, el especialista expresa
que dicha teoría argumenta que las elecciones realizadas en dicho país ofrece a los
ciudadanos la oportunidad de influir en el comportamiento de los legisladores a
través de su voto o castigo del mismo, en caso de que éstos no cumplan con su
deber como funcionarios y servidores de sus electores, lo que muchas veces ofrece
una alternativa viable que incluye la participación ciudadana y el correcto ejercicio
del poder.
24
Sin embargo, en el caso de México, el especialista afirma que existen ciertos vacíos
de poder y errores de diseño institucional que dificultan esta labor. Por ello, se
enfatiza que a causa de los vicios institucionales resulta imposible la sanción de los
legisladores que han incumplido sus labores. Este es uno de los motivos por los
cuales la prohibición de la reelección legislativa impide el seguimiento del trabajo
legislativo de los servidores públicos, pues al interrumpir su periodo de ejercicio,
éstos suelen refugiarse en el poder y protección que les brinda su partido, así como
en el apoyo económico y legal que éstos les brindan.
Ahora bien, para un mejor análisis de la reelección legislativa en nuestro país, Soto
Flores argumenta la necesidad de discernir entre las responsabilidades y
características de los legisladores electos por mayoría relativa y aquellos que son
electos por representación proporcional.
Consideraciones constitucionales
De este modo, y con base en el conocimiento de que el artículo 52 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos establece que la Cámara de Diputados
deberá estar integrada por 300 diputados electos por mayoría relativa mediante
distritos electorales uninominales, al tiempo que los 200 diputados restantes son
electos mediante la representación proporcional, se presentan las siguientes
particularidades:
1. Mediante el sistema de mayoría relativa, los nombres de los candidatos
electorales aparecen en las boletas electorales, por lo que el electorado
conoce al candidato por el cual está votando.
2. Sin embargo, en el sistema de representación proporcional, al estar
caracterizado por un sistema de porcentaje de votos que recibe el partido,
los ciudadanos no son capaces de conocer a qué personaje específico
impacta su voto, por lo que estos legisladores no se ven en la necesidad de
25
rendir cuentas ante los ciudadanos y tienen mayores ventajas por parte de
sus partidos políticos, frente a la ciudadanía.
Propuestas para una reelección legislativa en México
A partir de lo anteriormente expuesto, no han faltado los académicos y entes
políticos que han intentado proponer alternativas a la tan controversial reelección
legislativa en nuestro país; por ello, una de las propuestas más relevantes al
respecto enuncia la posibilidad de que diputados y senadores del Congreso de la
Unión puedan ser reelectos de manera inmediata, pero sólo aplicándose a aquellos
legisladores que sean electos mediante el sistema de mayoría relativa.
Así, como forma de proteger los intereses del Estado, pero principalmente de los
ciudadanos, se plantea la necesidad de que, en caso de que se les conceda dicha
posibilidad, y una vez que concluya su cargo, éstos no podrán postularse a cargos
de elección popular en el Congreso de la Unión o en congresos de entidades
federativas hasta no haber transcurrido un lapso de tres años para el caso de los
diputados reelectos, y de seis años para los senadores.15
15 Soto Flores, Armando. Reflexiones en torno a la reelección de los senadores y diputados
del Congreso de la Unión como consecuencia de la reforma política. Compromiso del
Congreso de la Unión 2012-2018. Revista Mexicana de Derecho Constitucional, número
31, julio-diciembre 2014. Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, p. 280. [Fecha
de consulta: 06 de abril de 2017]. Disponible en:
http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1405-91932014000200011
26
Ventajas
Teniendo en cuenta las consideraciones anteriores, podemos vislumbrar algunas
de las ventajas de la propuesta de una reelección legislativa moderada, las cuales
podrían brindar una alternativa a los argumentos en contra con los que cuenta la
iniciativa, así como brindar beneficios y posibilidades reales de aplicación de esta
propuesta de ley, algunas de ellas son:
1. Con la aprobación de esta propuesta sería posible la rotación constante de
entes políticos que posibiliten la ocupación de cargos públicos por parte de
las nuevas generaciones, y su participación en puestos de elección popular.
2. A través de la extensión del ejercicio legislativo, por medio de la reelección,
sería posible que los servidores públicos adquirieran una mayor
profesionalización en sus labores legislativas.
3. Mayor gobernabilidad del Poder Ejecutivo, así como la creación de acuerdos
con los otros Poderes.
4. Mayor comunicación entre grupos políticos y populares, es decir, vinculación
entre diputados, senadores y electorado, a través de una mayor
comunicación y conocimiento mutuos.
5. Mayor compromiso del legislador hacia los ciudadanos y la posibilidad de
estos últimos de exigir una rendición de cuentas por parte de los legisladores.
6. Fortalecimiento del sistema federal mexicano a través de la desaparición de
32 senadores y 100 diputados de representación popular, dejando en sus
cargos únicamente a los diputados y senadores que se reelijan bajo el
esquema de mayoría relativa.
27
Bajo este esquema, es posible que nos percatemos de la complejidad que implica
la aprobación de una iniciativa de tales dimensiones, así como de la necesidad de
generar alternativas para su aplicación, pues en caso de que ésta pueda llegar a
ser posible, será necesario implementar medidas que eviten los principales vicios
políticos que pueden generarse a partir de ello, amén de generar las posibilidades
de un cambio político que pueda dar la pauta a un mejoramiento de las condiciones
electorales de nuestro país, pero sin dejar de cuidar los intereses de la ciudadanía.
28
Conclusiones
Uno de los beneficios de analizar ambas partes de una propuesta, es saber, los
argumentos a favor o en contra, es el mayor conocimiento de los aciertos o errores
que los argumentos que versan en torno al tema actual puedan contener; por ello,
una vez analizados los elementos de la reelección legislativa, así como sus
posibilidades y sus limitantes ante la política electoral de nuestro país, podemos
conocer de mejor manera las ventajas o desventajas que esta decisión puede
implicar para el sistema democrático en México.
Ante ello, surge la necesidad de contextualizar el debate y ponderar los beneficios
o perjuicios de la reelección legislativa en México, teniendo en cuenta las nuevas
necesidades y configuración de las clases políticas en nuestro país.
Para ello es preciso que el lector no se base sólo en el supuesto teórico, sino en
las posibilidades o consecuencias que se podrían generar, con base en las
condiciones y particularidades del sistema político mexicano y sus experiencias en
algunos estados de la República o en aquellas ocasiones en las que se ha intentado
realizar, así como de ejemplos internacionales que podrían arrojar luz sobre el
Poder Legislativo en México, a partir de la experiencia política de otros sistemas
democráticos en el mundo, sin perder de vista las peculiaridades de nuestro país y
el contexto nacional.
Una de las causas por las que se ha dificultado la aprobación de la reelección
legislativa por las Cámaras es que mediante este mecanismo se fortalecería la
participación del Poder Legislativo en las decisiones políticas del país y, debido a
que nuestro sistema democrático mexicano es principalmente presidencialista, éste
mantiene el predominio sobre los otros dos poderes, por lo que ha buscado
mantener dicha hegemonía frente al Parlamento y al Poder Judicial, adjudicándose
la mayor parte del poder político y de decisión en las cuestiones más relevantes de
la política nacional.
29
Sin embargo, debido a que en las últimas décadas el PRI –que ha constituido la
mayor parte del tiempo el partido hegemónico de México- ha alcanzado también su
mayoría en el Congreso, la propuesta de reelección legislativa ha recobrado fuerza
en vista de que no representaría precisamente un peligro o amenaza para el
Ejecutivo, ya que al pertenecer las distintas élites políticas del Congreso al mismo
partido que preside el gobierno, supondría una mayor consolidación del PRI y,
consecuentemente, de la clase política perteneciente o afín a dicho partido.
Finalmente, conviene precisar que ante la realidad política y las condiciones
existentes en nuestro país, tales como la hegemonía de un partido político, sumado
al poder de decisión de los otros dos partidos dominantes, y el surgimiento
constante de partidos políticos satélites que potencian las capacidades y recursos
políticos de estos tres grandes partidos, es necesario analizar el papel que juega
cada uno de los partidos, así como aquellos de relativo nuevo surgimiento que,
pese a fungir como contrapeso a algunos de los grupos políticos con más poder en
el país, son parte de un complejo sistema electoral que cada día se transforma con
el afán de conservar su legitimidad política y de aumentar sus posibilidades de
participación en la <<cosa pública>> que nos concierne a todos.
Por ello, es menester que los interesados en el tema político – electoral no pierdan
la inquietud del análisis conceptual y práctico de iniciativas tan relevantes como la
que ahora versa en este texto, pero también es preciso tener en cuenta que no sólo
aquellos interesados en el estudio de estos temas requieren del amplio
conocimiento de estas cuestiones, sino principalmente la ciudadanía en general
que, en su debido momento, deberán evaluar el desempeño de los legisladores que
los representan y, en caso de ser necesario, exigir el correcto cumplimento de sus
funciones, en provecho de las necesidades de las mayorías.
30
Fuentes consultadas
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legisladores en la reforma del Estado de 2010. Boletín Mexicano de Derecho
Comparado. Instituto de Investigaciones Jurídicas, UNAM, 2011. [Fecha de
consulta: 20 de mayo de 2017]. Disponible en línea:
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4. Pérez Vega, Moisés. La debilidad institucional de los congresos locales.
Límites de la democratización mexicana y de la transformación de las
relaciones Ejecutivo-Legislativo. Andamios, Volumen 5, número 10, abril
2009, p. 260. [Fecha de consulta: 22 de mayo de 2017]. Disponible en:
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00632009000100011&script=sci_arttext&tlng=pt
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5. Soto Flores, Armando. Reflexiones en torno a la reelección de los senadores
y diputados del Congreso de la Unión como consecuencia de la reforma
política. Compromiso del Congreso de la Unión 2012-2018. Revista
Mexicana de Derecho Constitucional, número 31, julio-diciembre 2014.
Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, p. 280. [Fecha de
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http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1405-
91932014000200011
6. Tovar Mendoza, Jesús. Condicionantes políticos que impiden la reelección
de legisladores en México. Revista de Ciencias Sociales Convergencia,
número 52, enero – abril 2010. [Fecha de consulta: 05 de mayo de 2017].
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