renacer (saga cielo, tierra e infierno part. 4)
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Capítulo 1
Después del diluvio
Después de nuestro regreso a la ciudad, todo estaba revuelto para mi, aun no
terminaba de caer en la realidad, me sentía sumergida en un sueño, como si estuviera
flotando. Las sensaciones que ahora tenía eran totalmente nuevas, todo era intenso,
mis emociones se triplicaban en rigor. Tenía cientos de cosas en que pensar ahora: mi
familia, Simón, Zach, Adam, mi propia vida; y todo esto tenía que empezarlo a
solucionar rápidamente antes que todo se me acumulara.
La pérdida de Bea nos había dejado una tristeza muy grande a todos; habíamos
planeado decir que Bea se había devuelto a Nueva York con su familia. Cual familia?
Pues le inventamos una. Era impresionante ver que perdimos a dos seres que
irradiaban la casa de risas, primero Simón y luego Bea, ambos gozaban de excelente
humor, un humor que yo alguna vez tuve, todo estaba recargado de nuevo en mi
ambiente, cargado de una esencia triste y letal. Este iba a ser mi destino? Porque ahora
era una cazadora de humanos y hasta animales, era un monstruo.
Tenía miles de cosas en que pensar, lo peor o lo mejor del caso es que tenia
ahora una eternidad por delante para poder planear, pensar o ejecutar cosas, pero mi
mayor problema ahora era aprender a sobrellevar esta inmortalidad.
Entre tanto enredo mental, me detuve en Zac; salí de mi habitación después de
3 días de cautiverio voluntario, al abrir la puerta de mi habitación la luz del sol
cayendo que se colaba por una de las ventanas de las escaleras quemo mis pupilas,
cerré los ojos y baje corriendo las escaleras, en realidad ya estaba empezando a sentir
algo de sed, llevaba casi dos días sin "comer" y en realidad era por rebeldía, al llegar
abajo, Adam estaba saliendo de la cocina
-Como te sientes?_ el verlo siempre me iba a causar una sensación de fatiga,
sentía que todo se me movía a mi alrededor, el me ponía nerviosa, y creo que ahora
eso había empeorado
-Si lo estoy, solo tengo un poco de hambre_ me guio hacia la cocina, abrió un
refrigerador que era nuevo a raíz de mi "nueva vida" y saco una bolsa de sangre, por lo
que pude leer era tipo ORH-, me sirvió su contenido en un vaso de cristal y puso el
vaso en frente de mi, todo esto sin pronunciar palabra alguna
-Hay que cambiar el refrigerador de lugar, hay que ponerlo en el sótano, es más
seguro abajo
-Adam tengo una inquietud_ se acerco a mi mostrando interés en lo que le iba a
contar_ cuales son las consecuencias de haberle dado de mi sangre a Zach?
-Nuestra sangre tiene muchas propiedades que si los humanos las descubrieran,
nos utilizarían como ratas de laboratorio, entre ellas es que puede curar cualquier
herida y enfermedad de forma milagrosa. Cuestión que no tenemos permitido; al
entrar sangre de vampiro al sistema de un humano, este queda condenado, ya que al
morir, así sea de forma natural, este puede sufrir una metamorfosis. Eso sin contar que
puede exponernos, cuando tienes sangre de vampiro en tu sistema, puede alterarte
algún sentido, cuestión que básicamente es anormal para cualquiera. Lo que nos
preocupa es que pueda rasgar la pared que le pusimos, porque de ser así nos veríamos
en un aprieto de nuevo con los cazadores
-Que quieres decir con rasgar la pared?
-Cuando hacemos la hipnosis para "borrar" recuerdos o que alguien haga lo
que queremos, no es que borramos recuerdos porque es naturalmente imposible.
Nuestro cerebro funciona como el disco duro de una computadora, cuando formateas
discos, se pierde parcialmente la información de él, hay como una caja negra que
almacena absolutamente todo lo que ves, lo que sientes con cualquiera de tus sentidos,
nosotros lo que hacemos es depositar todo lo que queremos en esa caja negra y
ponemos una especie de pared para que no se vea que es lo que hay dentro, sin
embargo nosotros tenemos la potestad de quitar esa pared, o si ese alguien consigue
algo que lo conecte con algunas de las cosas que está guardada en esa caja, el individuo
puede empezar a recordar, que es lo que decimos rasgar la pared
Poco a poco empecé a comprender muchas cosas, y todo lo que me decía
Adam tenía sentido a pesar de ser algo sobre natural
-Quiere decir que Zach puede recordar si encuentra algo que lo vincule con sus
recuerdos?
-No te preocupes, te estás preocupando demasiado por algo que nosotros como
vampiros manejamos a la perfección.
Mi mente no dejaba de trabajar, tenia millones de cosas en que pensar, llegaba
un momento que me dolía la cabeza, y un tema muy importante para mi aparte de lo
de Zach era mi familia, debía planear como iba a hacer para desaparecer de sus vidas,
ahora me esperaba una vida gitana, de hecho ya no nos quedaba mucho tiempo en
Sioux Falls, ya los demás llevaban poco mas de 6 años en la ciudad. Algo me tenía que
inventar, lo más factible era un accidente, pero me mortificaba la idea de que mis
padres perdieran un hijo mas y técnicamente ya era así, yo ya estaba muerta, solo
existía por ser un demonio, si, técnicamente era un demonio, solo que la clasificación
de los vampiros en el reino infernal no es tan relevante como la de los demonios que
poseen personas, nosotros ya tenemos un cuerpo propio, somos criaturas de la noche,
de la oscuridad
Capitulo 2
Tratando de resolver mi existencia
Cada día que pasaba, me iba acostumbrando a esto de ser vampiro, de hecho
les complacía que no tuvieran que aislarme en su totalidad de la población; ya habían
pasado casi dos meses, tenía un suplente en el high school, la excusa era que me había
enfermado con bronquitis aguda, incluso tuvieron que decir que estaba fuera de la
ciudad para evitar las visitas. Varias veces a la semana recibía llamadas de Verona o
Andrew para saber de mi salud, la verdad extrañaba a muerte a Simón
-Ya esta semana regreso, ya estoy volviendo a la normalidad, continuo algo
delicada, pero ya puedo andar_ dije Verona, ya preparada para salir a la luz publica
-Avisa cuando llegues a casa para visitarte
-Tenlo por seguro..._ colgamos la llamada, tocaron la puerta de mi habitación
- Estás segura que ya puedes enfrentarte a los humanos?_ era Vanessa quien me
traía mi respectiva dosis de sangre diaria
-Por lo visto no se puede tener privacidad..._ dije fingiendo mal humor, pero lo
rompí cuando vi la cara de Vanessa y sonreímos_ creo que ya es hora que Adriana
regrese a casa_ dije sonriendo débilmente.
Adriana se había tenido que mudar a la casa de Sam y Adam por su propia
seguridad, decidieron dejarme a mí en la casa porque estaba más cerca de todos y de
todo, sobre todo de los humanos, y sentirlos a diario me haría acostumbrarme a su
aroma, a dominar mis sentidos súper desarrollados
-Sabes Alex? tú tienes lo que muchos de nosotros no tuvimos cuando nos
transformamos_ deje de beber del vaso y fruncí el ceño
-Que cosa?
-Carácter, has podido superar tus instintos rápidamente, te ves relajada
-Supongo que eso se lo debo a ustedes, creo que ustedes no contaron con
alguien que los guiara, créeme que si hubiera estado sola en esto, hubiera enloquecido.
Pasaron un par de días, abrí los ojos suavemente, ya podía dormir tranquila,
mis sentidos se habían acoplado, mi habitación estaba a oscuras, las cortinas estaban
cerradas impidiendo que pasara la luz del sol, me levante y abrí de un solo golpe las
cortinas, la luz débil del sol toco mi piel dándome calor de forma agradable. Abrí la
ventana dejando entrar la brisa matutina, era fría, pero no causaba desagrado, inhale
profundamente y los olores se mezclaron entre bosque, pancakes, café, sangre...
sangre, me detuve en el, sentí como mis ojos empezaban a quemar, cerré los ojos
respire lentamente concentrándome en los otros aromas, obviando la sangre, obviando
que la deseaba, y poco a poco mis ojos dejaron de arder, pero el olor a sangre persistía.
De pronto percibí un olor a cítrico, un perfume, que se ligaba con sangre, un humano
estaba en mi casa . Sonreí automáticamente, y salí corriendo al piso de abajo, llegue a
la mitad de las escaleras y la vi, estaba con Sam, Adam y la señora Julia
-Por fin estas aquí!_ salí corriendo hacia ella y la abracé, pero sentí que me iba a
desmayar apenas nuestros cuerpos entraron en contacto, Adam me atajó, miré su
cuello y traía el collar
-Alex, estas bien?_ se preocupó Adriana, todos me observaban
-Que sientes con ella cerca?_ me pregunto la señora Julia
-Siento su olor, su corazón latiendo fuerte, pero creo que ya descifre hace un
momento como despegar el olor con el deseo
-Bueno supongo que es buena señal que no manifiestes físicamente tu sed
-Julia, dime que me puedo quitar el collar_ dijo Adriana algo desesperada
-Estás segura?
-Yo confió en ella..._ dijo sonriéndome. llevó sus manos a parte posterior de su
cuello en busca del cerradero del collar, lo zafó lentamente dejándolo caer al suelo, me
sonrió y abrió sus brazos, corrí hacia ella y la abracé fuerte_ ya estás bien...
-Llamas a esto estar bien?_ dije con una sonrisa falsa, mostrándole lo que era
ahora
-Sabes perfectamente que podrías estar peor_ nos fuimos a la cocina, todo
estaba en perfecto orden
-Alex tenemos que hablar_ dijo Sam con seriedad
-Que sucede?_ odiaba cada vez que alguien me decía que teníamos que hablar,
eso siempre traía consigo algo desagradable
-Ya nos tenemos que mudar, lo hemos prolongado por todo lo que ha pasado,
pero no podemos permanecer aquí, van a empezar a sospechar_ yo sabía que algún día
no muy lejano llegaría esa noticia
-En cuanto tiempo nos tenemos que ir?
-Vamos a esperar un mes para que todos terminemos de arreglar nuestras cosas
-A donde nos iremos?
-San Francisco_ dijo la señora Julia
-No sé si estés de acuerdo, pero viviremos en dos casas, una la familia Adams y
otra casa nosotros 4_ dijo Adriana
-Nosotros? te vienes también?
-Nunca voy a dejar de estar con ustedes, eres mi hermana, no te voy a dejar sola
-Y que va a pasar con mamá y papá?
-Con respecto a eso... tienes que morir_ dijo la señora Julia
-Tan pronto?
-Así tiene que ser...
-Si quieres puedes viajar a ver a tu familia antes
-No quiero hacerlo_ dije rápidamente y prácticamente sin pesarlo
-Alex no quieres ver a mamá y a papá antes? no los volverás a ver_ pregunto
Adriana algo espantada
-Es prolongar el dolor, sabes que odio las despedidas, y no quiero que esta sea
una.
Pasaron los días , fui al high school a retomar mis clases y a la vez a
despedirme de los alumnos, cerré mi expediente irregular de la universidad, mis padres
continuaban llamando una vez por semana, les contamos que nos íbamos a mudar a
San Francisco, que habíamos conseguido unos empleos allá y nos habían aceptado la
transferencia de universidad. durante todos esos días estuve evitando a los Morris, no
me quería despedir de nadie, cada vez que veía una llamada entrante de Verona, no la
contestaba, cuando llamaba a casa, les pedía que me negaran.
Una tarde de vuelta a casa, ya a menos de una semana de irnos, me estacione
en el garaje, apague el motor de mi auto, bajé la caja que tenía en el asiento copiloto,
tome mi chaqueta y abrí la puerta de la cocina, fue cuando percibí el olor a sangre
humana, y no era Adriana, fruncí el ceño tratando de identificar el olor, caminé hacia
la sala, fue cuando vi a Verona con Simón a su lado en una andadera en el suelo,
Adam los acompañaba
-Alex..._ dijo sonriendo
-Verona?_ forcé una sonrisa, dejé la caja en la mesa que estaba junto a las
escaleras_ que hacen aquí?_ fui directo hacia Simón y lo cargué_ Hola bonito!!!
-Estábamos preocupados por ti
-Yo las dejo..._ dijo Adam levantándose y dándome un beso en la cabeza
-Gracias por las frutas Adam_ le dijo Verona, Adam solo sonrió
-Te debo una disculpa, pero no he estado muy desocupada que digamos, olvidé
por completo avisarles que había regresado
-Pierde cuidado. Que se mudan?
-Sí, nos vamos en dos días_ Simón no dejaba de moverse, era típico en los
bebes de esa edad, sus latidos acelerados me atormentaban, lo tuve que soltar en su
andadera
-Los vamos a extrañar mucho. Sabes Alex, eres la única amiga que tengo aquí
en Sioux Falls, Andrew y yo queríamos que fueras la madrina de Simón_ voltee hacia
ella violentamente
-Madrina de Simón? hubiera sido un placer, de verdad, tú no tienes idea de
cuánto quiero a Simón, pero es una responsabilidad que no puedo tomar, lo siento
mucho_ sentía una mezcla de sentimientos dentro de mí, quería llorar… en serio
quería llorar
-Es una pena, y como se cuanto quieres a Simón por eso pensamos en ti
-No sé si vuelva a Sioux Falls, ya mi ciclo lo cumplí aquí, tal vez vuelva a
visitarlos, ojala vuelva a ver a Simón_ pasamos varios minutos charlando de lo que
"nos pasó" en el lapso de tiempo que no nos vimos
-Bueno Alex, ya es tarde, Andrew ya debe estar por regresar a casa_ se levantó
y tomó a Simón
-Los acompaño_ me miró por unos segundos y Simón empezó a sonreír
estirando sus brazos hacia mí, Verona me lo entregó, estaba inmenso, abrí la puerta y
los acompañé hacia la camioneta de Verona, ella montó la andadera de Simón en la
maleta
-Bueno amiga, te deseo mucha suerte, te vamos a extrañar_ nos sonreímos y
nos abrazamos, sosteniendo a Simón en mis brazos, ella abrió la puerta de la
camioneta y se montó dejándome en la intimidad con Simón
-Bueno pequeño Simón, es hora de decir adiós otra vez..._ lo abracé y deje
escapar varias lagrimas, me sentía profundamente triste, todos los cambios que se me
avecinaban no eran buenos, o por lo menos yo no los veía así. Simón no dejaba de
observarme una vez lo despegue de mi pecho, sus ojos azules eran tan exactos. Le
sonreí, tratando de darme ánimos a mí misma, abrí la puerta trasera de la camioneta y
lo coloque en su silla para bebes, le abroche el cinturón y empezó a llorar estirando sus
brazos hacia mí, no pude evitar llorar con el_ adiós mi Simón, cuida a mamá_ cerré la
puerta de la camioneta, Verona encendió el motor, se despidió con la mano, imite su
gesto mientras se alejaba a velocidad media.
Capitulo 3
Una mudanza
Durante los siguientes dos días, recogimos nuestras cosas en la casa al igual que
los Adams y los Vangarret, el domingo partiríamos a San Francisco, para ser sincera,
siempre me había llamado la atención esa ciudad, sobre todo por el Big Bang, Oxford
y esas cosas. Era un cambio brusco, San Francisco es alejado, estaba segura que me iba
a gustar, pero también estaba segura de que iba a extrañar Sioux Falls, no solo Sioux
Falls sino muchas otras cosas de mi antigua "vida".
Tener que despedirme nuevamente de Simon de forma definitiva era tortuoso
para mí, sentía un dolor en el pecho bastante aturdidor, era algo mucho más que algo
físico.
Ya habíamos trazado el plan que íbamos a ejecutar para fingir mi muerte, esto
sería la primera noche en San Francisco, lavaríamos algunos cerebros para respaldar
mi muerte, sin morir realmente, mi funeral seria en San Francisco, haríamos todo
rápido, Adriana se iría una semana a Caracas para consolar a mama y papa y luego se
regresaría a continuar su vida nueva.
-Estas lista Alex?_ me pregunto Adriana desde la puerta de mi habitación
mientras terminaba de colocar una sábana blanca sobre la cama
-Si lo estoy, es hora de irnos_ le sonreí, le pase el brazo izquierdo por encima de
sus hombros y salimos abrazadas de mi habitación. Bajamos las escaleras y la puerta
estaba abierta, todo estaba cubierto por sabanas, la imagen era exacta a cuando
llegamos por primera vez a esta casa. Los demás nos estaban esperando afuera para
irnos, eran alrededor de las 9.30 a.m., tomé las llaves que estaban encima de una mesa
de madera, Adriana y yo salimos de la casa, Sam y Adam estaban ayudando a Vanessa
a montar una caja en la maleta de su camioneta. El día anterior habíamos llevado
nuestros autos a una agencia para ponerlos a la venta, compraríamos unos nuevos
apenas llegáramos a San Francisco, solo nos habíamos quedado con la camioneta del
señor Douglas, nosotros nos iríamos en taxi hasta el aeropuerto. Sentía una especie de
vacío en el estomago, podría jurar que hasta las manos me sudaban; ya era el
momento de marcharme de Sioux Falls, algo que estuvo latente desde el momento que
falleció Andrés.
Llegamos al aeropuerto más rápido de lo que tenía en mente, debía ser porque
no estaba concentrada en la vía. Apenas llegue al aeropuerto las voces, los latidos, el
sonido de las ruedas de las maletas al andar, cualquier cantidad de ruido me empezó a
atormentar; inhale y exhalé lentamente, profundo, cerrando los ojos logrando
canalizar todo lo que pasaba a mi alrededor con éxito, pero eso no quería decir que
dejaba de percibir los sonidos y olores, lo único que hacia al “canalizarlos” era evitar
que me torturaran.
Bajamos nuestras cosas, fuimos directo a registrarnos y entregar nuestro
equipaje para abordar el avión, la verdad llegamos un poco tarde. Al estar en el avión,
ya con la nave andando lista para despegar, mientras las ruedas aun estaban en la
superficie, veía la pista del aeropuerto, y unas gotas de agua empezaron a chocar
contra el vidrio y a deslizarse por la velocidad. Cuando el avión dejo la superficie sentí
como si estuviera en una montaña rusa, multiplicado por 10, creo que Adam se dio
cuenta de mi reacción porque tomó mi mano en seguida y le dio un beso suave
-Tranquila…_ dijo casi en un susurro. Eso provoco una sensación peor la
verdad, pero de alguna manera me sentía más segura al lado de él.
La verdad estaba “muerta” técnicamente, pero del cansancio, diría que el viaje
me dejo secuelas en el cuerpo que no quisiera ni contar porque son bastante
incomodas, fue un viaje largo.
San Francisco, heme aquí, este iba a ser mi nueva ciudad para formar una vida,
lo peor de toda la situación es que el proceso apenas empezaba, primero llegar a mi
nueva casa, mi nuevo trabajo, mi nueva universidad, seguir adaptándome a esto de ser
vampiro, y para colmo de todo, la noche del día siguiente ya tenía que estar muerta
para mi familia y amigos.
El camino hacia la casa eran 30 minutos según el conductor del taxi, viviríamos
cerca del Golden Gate, en la Av. El Camino del mar, bastante latino la verdad, eso era
algo que me agradaba mucho; el sol ya empezaba a caer, todo era tan genial a simple
vista, que hasta una sonrisa se me escapo. Llegamos a nuestra calle, era una zona de
lujo, Adriana se mostraba más expectante que los demás, incluso que yo. El taxi se
detuvo en frente de una casa color pastel de doble piso con tejas rojas con un garaje
bastante generoso
- Esta es la dirección_ nos dijo el conductor. Nos bajamos del taxi, Vanessa me
miró mostrándose muy contenta al ver la casa.
- Esta será nuestra casa, la de ustedes es la de al lado_ dijo la señora Julia. Voltee
la cabeza hacia mi lado izquierdo, era una fachada de madera, camine hacia ella, tenía
una puerta grande de cristal, era de dos pisos, se identificaba con el 890, tenía dos
garajes por lo que veía, antes de que pudiera pedirlo Adam estaba detrás de mi
- Qué te parece “nuestra” nueva casa?_ yo sé por qué resaltaba “nuestra” con
tanto ahínco, desde ese día en adelante viviríamos juntos
- Se ve… bien_ tomo mis hombros apretándolos suavemente, tomo mi mano
derecha con fuerza halándome hacia la entrada de la casa, metió su mano derecha en
el bolsillo de su chaqueta y sacó las llaves mostrándomelas un poco entusiasmado.
Soltó mi mano para abrir la puerta de la casa, la abrió y me dejo pasar de primera, esa
imagen me recordó a cuando llegamos a Sioux Falls, Andrés hizo el mismo gesto, casi
idéntico diría yo, eso me causo un poco de incomodidad.
Al entrar en la casa, sentí un escalofrío, que no sabría exactamente si definirlo
como bueno o malo. Las paredes eran color pastel, era bastante lujosa la verdad. La
escalera la tenía a mi lado izquierdo, continué entrando con algo de timidez
-Que te parece la casa?_ me pregunto Adriana a mis espaldas
-Está muy bonita_ dije con total desgano
-Alex, que ocurre?_ me preguntó con el ceño fruncido
-Todo y a la vez nada…_ hice una pausa_ vamos a subir a elegir las
habitaciones_ sonreí abiertamente, Adriana me correspondió, empezó a subir las
escaleras corriendo, pero le pase por un lado casi tumbándola al suelo con mi
velocidad de vampiro, y escogí la habitación que estaba al final del pasillo, era la
habitación principal. Me detuve en la entrada de esa habitación y me recosté de la
puerta esperando que Adriana llegara, pero hizo trampa, Sam la arrastró prácticamente
-Hey! Es trampa, soy la única humana en esta casa ahora, no se vale utilizar sus
habilidades
-De algo me tienen que servir_ dije mostrando una sonrisa de victoria
Abrí la puerta de mi nueva habitación, era color verde manzana pastel con
detalles en madera clara, la cama era inmensa, tamaño queen, igualmente de madera,
tenía un edredón beige, a mi lado izquierdo antes de llegar a la cama tenía el baño y el
closet, en frente de la cama un espejo grande con el marco en madera y debajo un
mueble de madera clara y vidrio con un televisión pantalla plana, ya ni sabia calcular
de cuantas pulgadas seria. Al final de la habitación tenía una ventana a media pared
con un mueble incorporado, con cojines exageradamente blancos, detrás de mi cama
tenía un par de ventadas de los lados que ocupaban todo el alto de la pared y había un
poster encuadrado de una mariposa encima de la cabecera de la cama, miraba todo
con impresión
-De donde salió tanto dinero para comprar esta casa y todas estas cosas?_ le
pregunté a Adriana que estaba a mi lado, su expresión creo que era peor que la mía
-Recuerda que nosotros tenemos más de un siglo viviendo en este mundo y
generando mucho dinero anualmente_ respondió Sam que estaba detrás de mi junto
con Adam, ambos nos miraban sonriendo discretamente, bueno… ni tan discretamente
Capitulo 4
Muerta por segunda vez
Durante las próximas horas estuvimos ideando la mejor manera de decirles a
mis padres y hacerle saber a mis seres queridos que había fallecido, así dejarían de
buscarme, en ese grupo de seres queridos entraban los Morris, llámese Simón y
familia, ya Verona había llamado para saber como habíamos llegado a San Francisco,
y sabía que iba a seguir en contacto, porque de cierta manera Verona y yo habíamos
establecido una buena relación, entonces para evitar que me buscara o incluso le diera
por verme en algunos años y me viera exactamente igual físicamente a como estaba la
última vez que me vio.
Pasaron dos días, y esa mañana Adriana decidió llamar por teléfono a nuestra
casa en Venezuela, yo no sabía si llorar, si gritar, la verdad tenía un nudo en la
garganta y una sensación de inquietud muy desagradable
-Papá…?_ dijo Adriana un poco dudosa, Sam le hacía señas para que se
relajara un poco_ Es Adriana…_ hizo una pausa, me imagino que papá la estaba
saludando_ Ay papá pasó una desgracia…….Alex tuvo un accidente anoche…._
pasaron como 2 segundos y Adriana se llevó la mano a la boca dejando libres unas
cuantas lágrimas_ chocó contra un camión, estalló en llamas en seguida…_ la
desesperación se estaba apoderando de mi_ murió por las quemaduras, fue en casi a
media noche….no lo sé papá, no lo sé…._ Adriana me dedicó una mirada, ya estaba
hiperventilando, yo sudaba, las manos las tenia inquietas al igual que mis pies_
mañana será el velatorio, la sepultaremos pasado mañana, dando tiempo que lleguen
ustedes……no papá, no da tiempo de trasladarla hasta allá, su cuerpo quedó casi
calcinado, muy deteriorado…._ Sam se colocó a su lado tomándole la mano que tenia
libre dándole apoyo_ por favor tranquiliza a mamá, sé que es duro…. Los espero
mañana, avisen cuando salgan de casa y la hora de su vuelo….está bien papá, yo estoy
aquí con Sam, Adam, Vanessa y su familia, Adam se ha hecho cargo de todo…. Está
bien papá, adiós_ colgó la llamada
-Qué pasó? Que dijo?_ pregunté inquieta
-No tengo idea de cómo están, pero solo de imaginar que pudieras morir de
verdad, me duele mucho Alex, no imagino cómo se deben sentir
-Yo ya estoy muerta Adriana_ me levanté del mueble y salí de la casa,
necesitaba aire fresco, sentía que me fallaba la respiración, que se supone que iba a
hacer ahora sin mi familia? En realidad no era del todo mentira que había muerto, era
cierto, solo que era un cadáver andante, una muerta con vida, algo bastante
contradictorio.
El señor Douglas tuvo que conseguir un cadáver, con más o menos mis
características básicas, solo para montar el teatro porque no se iba a dejar el ataúd
abierto porque se supone que estaba desfigurada por las quemadas; ya habíamos
pagado la funeraria.
Eran las 4.36 p.m. del día siguiente, me miraba en el espejo, mientras me
recogía el cabello, tocaron la puerta de mi habitación, abrieron en seguida, era Vanessa
-Estás lista? Ya Adam fue a recoger a tus papás al aeropuerto_ La verdad en lo
que llevaba de día no había pronunciado palabra alguna, ni siquiera había salido de mi
habitación. Tomé el bolso que estaba sobre mi cama, adentro tenía unas mudas de
ropa y artículos personales, esas dos noches las pasaría en la casa de Vanessa, ya que
mis padres se hospedarían en mi casa
-Vamos…._ bajamos las escaleras a paso acelerado, fui directo a la casa de
Vanessa, Sam estaba con Adriana en la parte de afuera del a casa.
Yo me quedé en la casa de Vanessa mientras ellos iban a mi funeral en la
capilla La Misión. La verdad estuve muy inquieta durante esas horas de soledad.
Llegaron a eso de las 7.30 p.m., los escuché desde la habitación de huéspedes, salí de la
habitación sin casi hacer ruido y fui hasta el pie de la escalera, agudice mi olfato y mi
oído a ver si venia algún humano además de Adriana, pero no, todo parecía indicar
que solo venían vampiros, bajé y al primero que me encontré fue al señor Douglas,
traía la cara inexpresiva hasta que me vio, fue entonces cuando me sonrió
-Hola bella…
-Hola…_sonreí débilmente, en eso entro Vanessa y la señora Julia_ están allí?_
les pregunté
-Si…_ sus expresiones era como si no supieran que decirme_ si te sirve de algo,
fue muy bonito_ Vanessa hizo una pausa corta_ por cierto Andrew llamó confirmando
que vendrían mañana temprano_ no quería más personas en mi funeral. Solo hice
silencio
-Voy a estar arriba…_ dije mientras subía las escaleras, entré a la habitación de
huéspedes y tomé el teléfono marcando el numero de Adam, con el iba a ser más
sencillo hablar
-Aló…?_ respondió con su típica voz grave, pero con algo de pereza
-Adam soy yo, puedes hablar?
-Como pasaste la tarde?_ recuperó la energía de su voz
-Como crees…? Como están ellos?
-Tu madre está dormida, tu papá tuvo que darle un calmante, no han parado de
llorar, inclusive él. Adriana y Katherine han estado al pendiente. Mañana vienen
compañeros de la universidad, Andrew con Verona y Simon y parte de tu familia
Termine de hablar con Adam y me quedé inmóvil por unos segundos mirando
hacia la nada prácticamente, cuando volví en si me asomé discretamente por la
ventana que daba hacia mi casa, pero no vi movimiento, las luces estaban apagadas
<<toc, toc>> voltee enseguida, estaban abriendo la puerta
-Alex….?
-Qué pasa Vanessa?
-Nada, solo quería ver que estuvieras bien
-No quiero sonar patética, pero… se puede estar bien en esta situación?
-Si lo sé. Estas segura que quieres ir mañana? Aun me parece riesgoso
-Lo haré discretamente, no te preocupes
-Descansa, mañana será un día largo
-Igual…_ dije mientras me acostaba en la cama y ella salía de la habitación
Amaneció y yo ya estaba despierta, encendí el televisor esperando que al menos
fueran las 7.00 a.m., puse las noticias y todo en el mundo estaba normal, huracanes en
el sur del país, noticias políticas, protestas en otros países por pagos retrasados, en
fin… la catástrofe mundial iba caminando a paso lento pero seguro, eso era algo que al
parecer no tenia freno.
Se hicieron las 6.45 a.m. y me levanté a darme una ducha, deje correr el agua
por mi cuerpo totalmente fría, quería estar activa para todo lo que venía en el día.
Duré aproximadamente 20 minutos en el baño. Salí envuelta en una toalla y me puse
los jeans negros desgastados que puse sobre la cama más una franelilla blanca, fui al
espejo me peine, me observe unos segundos pero no quise maquillarme, después de
todo iba a un funeral, me puse por ultimo una sudadera negra con capucha y salí de la
habitación directo al piso inferior
-Buenos días Alex_ me dijo la señora Julia en el pasillo, estaba igualmente
vestida de negro, me sonreía amablemente
-Buenos días Señora Julia_ me tomo por los hombros mientras bajábamos las
escaleras
-Alex ya creo que es tiempo que dejes de decirme SEÑORA, solo dime Julia,
eres la mejor amiga de mi hija, vamos a pasar toda una eternidad juntas, eso te da
derecho a ser menos informales con nuestro trato. Relájate un poco más con Douglas y
conmigo_ en cierta parte era cierto aquello que me decía, de alguna forma ellos eran la
representación de mis padres mientras viví en Sioux Falls, y me imagino que ahora lo
serán con más motivos.
Desayunamos todos en silencio, al terminar sonó mi celular, era Adam
-Como amaneces?
-Bien… mis padres como están?
-Tu madre amaneció mejor, no ha comido mucho, ha comido obligada
prácticamente, tú sabes a lo que me refiero con “obligada”…
-Ummmm ya…
-Ustedes ya están listos?
-Sí, creo que solo esperamos por ustedes, yo ya me voy, mi taxi debe estar por
llegar
-Verona llamó que llegaba en menos de una hora
-Bien… hablamos luego, pero favor no pierdas de vista y de cuidado a mis
padres
-No tienes que pedirlo y lo sabes…_ colgué.
Sonó una corneta de auto dos veces en el exterior de la casa, debía ser el taxi
-Ya me tengo que ir_ anuncie, tome unos lentes de sol y una gorra negra que
había dejado encima de la mesa
-Nos estamos comunicando por celular_ me dijo el señor Douglas antes de
salir. Me coloqué la gorra y los lentes saliendo de la casa y me monté en el taxi
-Por favor al Cementerio Nacional de Golden Gate_ el chofer condujo a
velocidad media, demoramos alrededor de 15 minutos, la entrada era imponente, al
entrar pregunte al portero donde quedaba ubicado el sector donde seria sepultada, nos
adentramos en el inmenso cementerio, la vista se me perdía entre tantas lapidas. Le
pagué al taxista y me fui hacia una especie de monumento arquitectónico, me senté
pegada de la pared en el césped, con la gorra, los lentes de sol y la capucha de la
chaqueta puestos, tal vez estar así llamaba más la atención, mi tumba estaba a unos
cuantos metros de distancia, lo suficientemente alejada de la gente que me podría
reconocer.
Pasaron los minutos hasta que se hicieron las 9.30 a.m. cuando empezaron a
llegar mis seres queridos, al primero en ver fue a Sam, seguido de Adriana, Adam, mis
padres y Katherine, extrañamente Eduardo no estaba con ella, bueno eso pensé porque
venía más atrás. La gente se fue aglomerando alrededor de mi tumba, vi compañeros
de la universidad en Sioux Falls, dos tíos maternos y una paterna. Voltee hacia un lado
y vi llegar a Verona, Andrew quien traía a Simon en un coche. Gracias a mi vista
intensificada podía ver todo y a todos con nitidez, escuchar todo con nitidez.
Todos tenían caras largas, mi mamá tenía los ojos hinchados, mi papá estaba
como ido. En pocos minutos llegó el sacerdote, mi ataúd estaba encima de la lapida
esperando ser sepultado. Abrieron unos cuantos paraguas negros, el sacerdote
comenzó la misa típica de los funerales, mis padres lloraban desconsoladamente,
Verona dejaba libres unas cuantas lágrimas al igual que Katherine y Eduardo. Sam
abrazaba a Adriana, pero estaban inexpresivos al igual que los Adams, sentí que todo
se me quebraba por dentro, empecé a llorar, no podía ver a mis padres así, quería
correr hacia ellos y decirles que estaba aquí. Fue entonces cuando sentí la mano de
alguien sobre mi hombro, voltee algo asustada, era Adam, y me abrazó, lo apreté
contra mi llorando al ver esa nefasta escena, luego de un rato bajaron mi ataúd, y los
trabajadores del cementerio empezaron a echar tierra sobre él. Mi mamá quería
lanzarse sobre el ataúd, pero mi papá la tomó impidiéndoselo, sentía que iba a
explotar, mi llanto se intensificó aun más, no resistí más y salí corriendo
-Alex, espera….!_ oí a lo lejos a Adam
Capitulo 5
20 años después
Quería correr sin detenerme en horas a ver a donde me llevaban mis pies.
Mientras corría a velocidad normal de un mortal, las lagrimas no dejaban de salir, se
me resbalaban una detrás de la otra por las mejillas, para mí la situación era al revés,
mi familia había muerto, y si, en cierta forma así era, de igual forma si yo era la muerta
o ellos, no los podría ver a ellos nunca más ni ellos a mí, nos perdimos unos a los otros
y eso era infinitamente triste. Lo único que quería era desaparecer, chasquear los dedos
y desaparecer mágicamente, no quería a nadie cerca de mí en ese instante, quería
soledad absoluta. Me detuve y paré el primer taxi que vi
-A El Camino Del Mar por favor, lo más rápido que pueda…_ el chofer
condujo a una velocidad promedio de 120km/h en la autopista, y 80km/h en las
avenidas, ya que era lo permitido.
Llegué a mi casa y le pedí al taxista que me esperara, subí corriendo a mi
habitación, saqué un bolso viajero grande que tenía en el closet y metí la mayor
cantidad de ropa que podía, y una maleta pequeña. Alisté todo rápido antes que
alguien llegara y me detuviera; tomé un papel y un lápiz de la gaveta de mi peinadora
Me fui a alguna parte del mundo, estoy bien, por favor no vayan tras de mí,
necesito estar SOLA. Yo los llamo para avisarles como estoy.
Alex
Bajé las escaleras apurada, deje la nota encima de la mesa de madera que estaba
en la entrada y salí de mi casa, montándome nuevamente en el taxi, pidiéndole que me
llevara al aeropuerto. A donde me iba? Buena pregunta, pero era algo que decidiría en
el camino. Que si estaba segura de lo que hacía? Eso la verdad no lo tenía claro, era
solo un impulso que a lo mejor con el tiempo me arrepienta. Llegamos en 20 minutos
aproximadamente, al ver las grandes puertas del aeropuerto, me quedé en blanco por
un instante, caminé en línea recta, me detuve en cuanto vi el panel de aerolíneas, cerré
los ojos inmediatamente, abrí los ojos y conté el tercer puesto, era AIR EUROPA, al
parecer mi destino próximo seria un país europeo. Me acerqué a la chica que estaba en
el front desk
-Buenos días, será que tienes disponible para el primer vuelo?
-A donde señorita? España?_ con una voz suave y refinada típica de secretaria
de oficina
-Ehmmm si, España_ que irónico, precisamente a España. Compré el boleto del
primer vuelo que salía en menos de 2 horas. Llegué al aeropuerto de Barajas en
Madrid, me sentía extremadamente extraña, estaba seria, representaba muy bien mi
papel como vampiro. Al salir del aeropuerto, tomé un taxi en la avenida La
Hispanidad
-Señorita a donde se dirige?_ el chofer me preguntó con el típico acento español.
Me quedé en blanco por unos instantes_ Señorita?_ brinqué
-Me puede llevar a Albacete?
-Desde luego que si… serían 2 horas y media de viaje_ Era tiempo suficiente para
pensar que iba a hacer cuando llegara a Albacete. Por qué Albacete? No lo sé, digamos
que activé mi GPS mental y fue una de las ciudades más cercanas a Madrid que
encontré.
Tuve que apagar mi celular porque apenas estuve en el aeropuerto de San
Francisco, no dejaba de sonar con llamadas de Adam y Adriana. Al entrar a Albacete
le pedí al conductor que se detuviera en un lugar para comprar el periódico, fui a los
clasificados y había una mujer de 30 años en busca de roommate, en un apartamento
en la calle Ibañez Ibero. Llegamos al edificio y llamé al intercomunicador, bajó la
chica de 30 años, de complexión gruesa, pero de rasgos delicados, blanca como la
nieve, cabello castaño claro, con rulos
-Sois Alexandra?_ preguntó con una media sonrisa, afirmé con la cabeza
totalmente seria. Me invitó a subir era el primer piso_ Os puedes contar de donde sois?
-Venezuela, pero ahora vengo de Estados Unidos, estuve viviendo allá
-Oh! Una chica internacional, eh…?_ sonrió mostrando simpatía, esperando
que yo al menos sonriera, pero no lo hice, eso creo que la incomodó_ Por qué os
viniste de Estados Unidos?_ no quería preguntas de ninguna clase, la miré fijamente a
los ojos sin pestañear
-No quiero más preguntas, seré tu nueva roommate, no debes decirle mi
nombre a nadie, mucho menos si te lo preguntan, solo dirás que soy reservada y pago
al día_ ella se quedó inmóvil mirándome y asintió enseguida apenas terminé de decirle
todo aquello
-Bienvenida entonces!_ sonrió abiertamente. Se levantó y me señaló una puerta
blanca a inicio de pasillo_ Esa será tu habitación, podéis utilizar todo lo que está en la
casa, aquí tenéis tus llaves, me podéis pagar en dólares hasta que consigáis empleo y
me podáis pagar en euros, vale?_ asentí sin ni siquiera mirarla.
Entré a mi nueva habitación, era gris pálido con detalles en blanco, era pequeña
la verdad, y ahí entendí que los europeos eran muy simplones, por lo menos en lo que
a decoración se refería.
Conseguí empleo en una preparatoria, igualmente dando clases de geografía,
duré 1 mes y medio sin ser detectada por Adam, Sam, Adriana o los Adams, me
hallaron. Adam fue en mi búsqueda, me negué a regresar. Mi humor había cambiado
en un 70%, ya no socializaba con nadie, más que para responder preguntas en clase, o
para comprar algo en el supermercado, la verdad ya con 2 días dictando clases los
alumnos me había catalogado de “gruñona”, la sonrisa se me había esfumado, cazaba
interdiario, me tocaba asaltar los centros médicos de toda Albacete, mi sed se
incrementaba. Todos se mudaron a Albacete, pero me negué a vivir con ellos, no
quería nadie cerca de mí, nadie con quien estuviera mezclada sentimentalmente.
A los 8 años nos mudamos a Buenos Aires, duramos allí 6 años, Vanessa
escogió el siguiente destino que fue Vancouver. Casi todos los días tenía problemas con
Adriana o Vanessa, mis sentimientos se habían bloqueado, algo dentro de mí se había
apagado. Al año de estar en Vancouver, mi madre murió de un ACB, Adriana tuvo
que viajar a Venezuela; me había puesto más violenta, la muerte de mi madre había
agregado una gota más al vaso que continuaba rebosándose.
5 años después…
Llegué de cazar a media noche, venia con la ropa llena de sangre, había
conseguido un venado en las montañas, ya no tenía piedad de matar animales si quiera
-Alex quiero charlar contigo…_ dijo Adriana con plena seriedad, ya mi
hermana estaba maltratada por el tiempo, ya tenía 42 años, lo increíble era verla aun
con Sam que tenia la misma apariencia desde el día que lo conocí, su amor no había
disminuido ni un poco
-Adriana de una vez te advierto que no quiero nada de dramas
-Puedes solamente escuchar?!_ me le quedé observando_ ya han pasado 20
malditos años desde que falleciste, 5 desde mi mamá también lo hizo y 22 desde
Andrés y Simon. Tanto tú como yo hemos perdido en esto Alex, pero tú decidiste
rendirte, fíjate en lo que te has convertido…
-Esto no es voluntario, esto lo decidieron por mi
-No me refiero al vampirismo, si no mira a los Adams, tu tomaste el camino
más fácil, apagaste tus emociones, no socializas, nadie te quiere además de
nosotros…_hizo una pausa para tomar aire_ lo que quiero decir con todo esto, es que
no puedes seguir así, tienes que volver a ser la Alex de siempre, “vive” así estés
técnicamente muerta, vuelve a sonreír, a sentir, Adam no hace más que velar por ti
-Yo no le he pedido que lo haga
-A eso me refiero, no estás dejando que nadie se te acerqué, te tenemos
prácticamente obligada con nosotros. Solo quería decirte que queremos regresar a San
Francisco. Como es mi turno de elegir, yo quiero vivir en San Francisco, tú decides si
te quedas sola aquí en Vancouver o en cualquier parte del mundo, porque así estés con
nosotros físicamente, vas a estar sola porque tu así lo decidiste._ se apartó de mi vista
dejándome sola.
Subí a mi habitación, apenas abrí la puerta vi un niño sentado en mi cama
dando la espalda hasta la puerta, eso me puso en alerta
-Quien eres…?_ pregunté con autoridad pero no respondió_ Te pregunté quién
eres niño? Que haces en mi habitación?_ se levantó y giró su cuerpo lentamente, mi
corazón dio un vuelco a ver de quien se trataba
-Hola Alex…_ dijo inexpresivo
-Chris? Que haces aquí?
-Solo vine a charlar contigo…
-Déjame adivinar… Adriana te lo pidió?
-Tengo desde el momento que morí observándote Alex, a pesar que no seas de
mi incumbencia. No sabes cuánto lamento lo que te ha sucedido
-No más que yo…
-Por qué tomaste este rumbo?
-Quieres que te sea sincera?
-Por favor…
-Todo es más sencillo así, no sufres, porque simplemente no sientes_ se acercó
un poco
-Y pensaste en que sentían los demás? Solo pensaste en tus sentimientos. Tu
nunca fuiste así…_ abrí la boca para decir algo_ y no me importa que seas vampiro
ahora, sabes que eso no influye del todo en tu personalidad actual, solo te da
herramientas para ser un monstruo, y créeme que estás muy cerca de serlo. Piensa bien
lo que estás haciendo, si no las cosas se van a complicar para ti de otro modo… solo
piensa…
-Pero…_ desapareció con un aleteo moviendo mi cabello por la brisa que
provocó
Capitulo 6
A través del tiempo
Siempre pensé que regresar a San Francisco, significaría un riesgo.
Teóricamente nadie nos conoció en el tiempo que vivimos allí, ellos que fueron los que
duraron más tiempo, aseguran que nunca socializaron con algún vecino o alguna
persona que significara amenaza. Las casas anteriores en El Camino del mar, no las
vendieron como pensé, creo que desde el momento que partieron a Albacete ellos se
fueron con la idea de volver, y según Adriana, ya era el momento de hacerlo. Ya
llevaba con esta, 5 mudanzas sin contar cuando me vine de Venezuela, pero digamos
que esa fue voluntaria y 100% planificada, no porque estuviera huyendo de algo o
alguien, aunque básicamente no estábamos huyendo de nadie, sino como decía el
señor Douglas “Conociendo nuevos destinos”, vulgarmente estábamos siendo como
gitanos, todo por mantener nuestra identidad vampírica oculta.
La conversación con Adriana, pero sobre todo la que tuve con Chris días
anteriores, me había dejado muy pensativa, la verdad me costaba concentrarme en el
algo. Haber “apagado mis emociones” no era algo plenamente voluntario, suena como
si tuviéramos un suiche que subimos o bajamos a nuestros antojo, pero era algo más
complejo y extraño de explicar. En efecto si se siente, lo que cambia es que no dejas
que esos sentimientos influyan en ti. No era capaz de sentir alegría, ira, tristeza, la
nostalgia apenas rozaba mi corazón; creo que eso era posible gracias a que carecías de
alma, ya no era tuya, aun puebla tu cuerpo pero no te pertenece, supongo que eso lo
hace más fácil de manejar.
Todos eran básicamente felices, menos yo, o eso parecía; la familia Adams
continuaba con su estilo de vida de hace siglos, Adriana y Sam eran una familia
peculiar, un chico de 26 años, con una mujer de 40 y tantos, era un poco bizarro la
verdad, por eso nunca dijimos que ellos sostuvieran una relación sentimental, solo que
Adriana era hermanastra de la señora Julia. Adam y Sam sobrinos políticos del señor
Douglas, y yo era sobrina de Adriana…. Si bastante compleja la explicación.
Pisar de nuevo San Francisco, era una sensación extraña, todo estaba exacto a
la ultima vez, sentía un vacio en el estomago, una inquietud. Al llegar a la puerta de
nuestra casa, la miré unos segundos. El camión de la mudanza llegó al día siguiente,
ocupamos 2 días en arreglar la casa por completo, la señora Julia había mandado a
pintar la casa de otro color en el interior, ahora las paredes eran color salmón claro con
detalles en blanco, la sala era blanca, con muebles salmón, todo estaba perfectamente
contrastado, era como estar en una nueva casa, eso me agradaba. Ocupamos nuestras
habitaciones anteriores, solo que Adriana y Sam ocupaban una sola habitación.
Al pasar una semana, ya todos estaban ubicados en sus nuevos empleos, el
señor Douglas se había convertido en el nuevo director de High School Abraham
Lincoln, haciéndome a mi jefa de planificación y subdirectora, algo bastante grande
para una simple chica de 24 años. Mis estudios los culmine en Buenos Aires, pero
debido a nuestra existencia extraordinaria, teníamos que alterar documentos cada vez
que nos mudábamos, todos 100% legales, solo cambiaban fechas y algunos números,
teníamos aliados en el Departamento de Justicia del gobierno estadounidense, para
cuando nos tocaba cambiar nuestros documentos de identidad, inmigración y todo el
asunto. Sam se había convertido en psiquiatra, Adam continuo con su taller para
autos, esta vez compro uno más grande, el no soportaba ser el subordinado de nadie.
Adriana era Abogada ya hace varios años atrás, era de las buenas y recias, había
conseguido empleo en el ayuntamiento como abogada del estado de California. Es
impresionante todo lo que se puede lograr en 1 semana; Sam aun estaba estudiando
donde podía montar su consultorio.
Desde hacía varios años atrás, había tenido la necesidad de hacer ejercicios a
diario, era una forma de liberar adrenalina, de drenar la desesperación que a veces se
me acumulaba, de dejar salir mi frustración, me encantaba correr, pero me gustaba
más cazar era instinto.
Luego de llegar de mi primer día de trabajo, me eché una ducha larga y tibia,
salí a mi habitación y miré al exterior, el sonido de una ola chocando contra una roca
llamó mi atención, abrí mi closet, me puse un pantalón deportivo negro, unos tenis
blancos, una franelilla blanca con una chaqueta deportiva negra con detalles en gris,
tomé mi celular y salí de mi habitación directo a la calle echándome a andar en sentido
oeste, vi hacia los lados, no había nadie y me eché a correr a velocidad sobrenatural
hasta llegar al centro de la ciudad, caminé por Hayes street y doblé enseguida a
Gough street, mientras observaba las típicas casas de San Francisco, pegadas una al
lado de la otra. Caminé y caminé hasta que llegue la Market street, ya las calles
empezaban a desolarse, consulté mi reloj y ya iban a ser las 10.40 p.m., me detuve en
una esquina a esperar que el semáforo cambiara, cruce la calle, doblando a la
izquierda, caminé varios pasos cuando vi a un par de sujetos delante de mí con actitud
un poco sospechosa
-…fíjate en la ropa que trae…
-Tú lo intimidas mientras yo le quito lo que traiga encima. Si se pone bruto, ya
tu sabes lo que tienes que hacer…_ hablaban de alguien que iba adelante
-Es solo un niño! Que me puede hacer? Morderme…?_ al parecer se dieron
cuenta de mi presencia porque voltearon, pero yo me escondí detrás de un carro
rápidamente, continuaron su paso tras el niño, era de unos 12 años, llevaba unos jeans
anchos y una chaqueta verde oliva, con una mochila en su espalda, iba entretenido con
un PSP y unos audífonos, por lo que pude ver. Me fui detrás de ellos discretamente. El
niño se detuvo en una parada de autobús y en seguida lo abordaron los sujetos
-Déjenlo en paz…_ dije serenamente. Los tipos se sobresaltaron y voltearon
hacia mí y se rieron algo nerviosos, caminé hacia ellos y uno me sacó un arma
apuntándome, el otro tomó al niño de mala manera por la chaqueta, también
apuntándolo con el arma, continué caminando hacia ellos
-Quédate en donde estas o disparamos_ me dijo uno de ellos, el niño estaba
asustado, tenía los ojos llenos de lágrimas, temblaba, podía escuchar el latido intenso
de los corazones de ellos tres
-Dije que lo dejaran en paz, si no quieren tener problemas conmigo_ ambos se
rieron a carcajadas
-Una flaca débil, extranjera, totalmente indefensa. Eres policía?
-Desgraciadamente para ustedes no_ volví a caminar hacia ellos con paso firme,
el que estaba solo me disparó en la pierna y otro en el pecho, la verdad dolió, pero era
como un pellizco para mí, me detuve a ver la herida
-Ouch…_ dije con falsedad y sonreí, continué caminando, los dos hombres,
incluyendo al niño me miraron con desconcierto. Tomé al hombre que tenia de
primero que era el libre y lo golpee fuertemente y le quité el arma
-Si te acercas, mato al niño
-Si matas al niño, tú y tu compañero mueren_ corrí hacia él y lo aparté del niño,
llevándolo al lado del otro, ambos luchaban por liberarse de mis manos. Mis colmillos
empezaron a sobresalir, sentía las venas brotarse y mi sangre comenzaba a arder al
igual que mi garganta, estaba dispuesta a acabar con ellos
-ALEX!_ era la voz de Adam. Fruncí el ceño, solté a los hombres, estaban
temblando de miedo, Adam tomó a uno, yo tuve que agarrar a el otro para que no
huyera_ Vuelve a tu maldita casa, con tu compañero, olviden que esto paso, y no
vuelvan a hacerle daño a nadie!_ dijo Adam viendo a los ojos a el hombre que
sujetaba, este asintió
-…vete a casa, olvida esto, si vuelves a tan siquiera a pensar en hacerle daño a
alguien, no correrás con tanta suerte. Largo!_ le dije al otro haciendo el mismo
procedimiento. Ambos se fueron de inmediato, volteamos y el niño estaba parado
donde lo dejé inmóvil, temblando, pero con algo de asombro en su rostro_ Tu niño,
que diablos haces fuera de tu casa a esta hora?_ le dije de mal humor
-Son vampiros?_ dijo con una mezcla de fascinación y miedo
-Te hice una pregunta…_ dije obstinada
-Digamos que me escapé de casa por unas horas, mi tía no se ha dado cuenta
-Cómo te llamas?_ le dijo Adam
-Dylan_ le respondió, el niño continuaba sin moverse. Adam se acercó a él
-Bien Dylan…_ lo tomó por los hombros
-No! Por favor no, no me hagan nada. Siempre supe que ustedes existían. No
me hipnoticen, o me hagan olvidar, yo guardaré su secreto, por favor_ fruncí el ceño
ante aquello, Adam volteo a verme, tenía la misma expresión
-No somos nada, asumamos que somos superhéroes, tienes que volver a tu casa
niño, nada de escapadas, eso no está bien
-Está bien, está bien. Pero por favor confírmenme lo que son
-Si somos vampiros, y bebemos sangre humana, no hagas que nos alimentemos
de ti_ fui hacia el niño, quite a Adam y tomé al niño por los hombros_ Te vamos a
llevar a casa, vas decir que te escapaste, vas a asumir tu castigo, y nunca más vas a
volver a hacer algo que preocupe a tu familia, te vas a portar bien, vas a olvidar que
viste vampiros reales. Entendido?_ el niño asintió_ Bien, hecho…_ le dije Adam,
mirándolo con algo de obstinación, su expresión no era muy amable tampoco.
Fuimos hasta la calle Girard a una casa azul claro, con detalles en blanco, hasta
allí nos había guiado Dylan, bajó Adam con el niño del taxi, yo no quería bajarme,
tocaron la puerta, en seguida abrió una mujer de unos 30 y algo, se notó que regañó al
niño, entró algo triste
-Qué pasó con Dylan, Annie?_ oí una voz masculina, que me fue muy familiar,
provenía del interior de la casa, me dio curiosidad, y me bajé del auto, me paré al lado
de Adam inmediatamente
-Muchas gracias por traerlo de vuelta, fue muy cortés de su parte, señor…?
-Adam, Adam Vangarret. La verdad fue ella quien lo encontró_ me señaló,
sonreí con desgano
-Annie, que sucede?_ vino un chico trotando a la puerta que estaba abierta a
medias. Al darme cuenta de quién era, casi hace que me desmaye, de hecho me
tambalee, Adam me tuvo que atajar en el aire
-Alex? Te sientes bien…?_ me abrió exageradamente los ojos, el también se dio
cuenta de quién era
-Señorita… Le sucede algo?_ se acercó a mí el muchacho, pero voltee la cara de
inmediato
-No! Estoy bien…_ salí corriendo por la calle. Adam fue tras de mí en seguida
-ALEX ESPERA!_ continué trotando, las lágrimas empezaban a correr por mis
mejillas. Adam me alcanzó, me tomó por el brazo y me detuvo
-Es él Adam, es él…_ dije llorando desesperadamente, no sabía si de rabia,
tristeza o alegría
-Sí, yo también me di cuenta…_ dijo con algo de tristeza mientras me abrazaba
firmemente
-Cómo es posible que pueda verlo, después de tantas cosas, tanto tiempo? Está
exacto, no lo puedo creer…
-Hasta donde veo, él es el único que puede volver hacer de ti, el ser maravilloso
que solías ser, tenía tiempo sin sentirte cerca. Tengo que aceptar que Simon es el único
que te puede devolver tu humanidad
Capitulo 7
Hace 2 años atrás
(Por Simon)
Al salir de la universidad en la tarde, me tocaba recoger a Dylan en su clase de
karate, eran poco mas de las 5.30pm, la tarde esta fría, el cielo nublado, de alguna
forma siempre me gusto el clima así, siempre y cuando estuviera en casa, claro. Llegué
a la escuela de karate que me quedaba a unas 6 cuadras de la universidad, Dylan ya me
estaba esperando en la entrada
-Hola niño ninja..._ dije alborotándole el cabello
-Hola nerd..._ sonrío.
Dylan era un niño de 9 años, buena onda bastante activo, el y yo compartíamos
una afición enfermiza por los juegos de video, jugábamos cada noche una vez que
terminaba sus deberes de la escuela, mamá siempre iba a la sala a media noche a
mandarnos a dormir, papá en ocasiones se unía a nosotros, los fines de semana
hacíamos unos micro torneos de Mario Kart. mi familia era lo máximo.
Al llegar a casa vi varios vecinos aglomerados en la acera del frente de mi casa
cuestión que me parecía extraña, me estacione, me bajé de mi Jeep y tomé mis cosas
de la parte de atrás
-Simon...!_ me llamó uno de mis vecinos
-Hola Howard, que hay?
-Oye, hace unos minutos escuchamos unos gritos en tu casa, hemos estado al
pendiente pero no ha pasado nada más_ fruncí el ceño y vi a Dylan que aún estaba del
otro lado de la camioneta, no dude ni un segundo y salí corriendo a la casa, abrí la
puerta de golpe
-Mamá...? MAMÁ? PAPÁ?_ nadie respondió, Dylan entró corriendo
-Oye por qué corres?
-Ve si encuentras a mamá en alguna parte de la casa, voy al sótano a ver
-Pero que pasa?
-Sólo búscala.._ afirmó con la cabeza y corrió buscando a nuestros padres yo
bajé al sótano
-SIMON!!!! SIMON!!!_ escuché a Dylan desesperado, salí corriendo siguiendo
su voz, estaba en la cocina apenas llegué a la entrada de la cocina, todo estaba revuelto
vi a un lado y vi a papá tirado en el suelo cubierto de sangre, Dylan lo veía, caminé
hacia él y vi a mamá detrás del mesón, estaba igual que mi papá la toqué a ver si le
encontraba pulso y al parecer estaban sin vida, no sabía qué hacer me quede
congelado, vi a Dylan y estaba en shock
-Dylan, ve y llama al 911_ no movió ni un musculo, lo tomé por los hombros_
DYLAN, DYLAN! HEY! necesito que reacciones recuerda lo que te he enseñado
sobre las emergencias esta es una de ellas, mamá y papá nos necesitan_ me vió con los
ojos abiertos como platos, los tenia llenos de lágrimas, afirmó violentamente con la
cabeza y salió corriendo al exterior de la cocina; me senté en el suelo viendo ambos
cuerpos, me llevé las manos en la cabeza, no sabía qué hacer, ambos tenían heridas
profundas en el cuello, la puerta trasera estaba abierta, al parecer había sido un animal
lo que atacó a mis padres, pero era extraño que no rompiera ventanas, sino que entró y
salió civilizadamente por la puerta.
Al cabo de pocos minutos llego la policía y los paramédicos, a Dylan y a mí nos
desalojaron de la casa mientras hacían el levantamiento de los cuerpos, los declararon
muertos por ataque de animal salvaje un lobo posiblemente. Dylan estaba destrozado,
yo no hallaba como lidiar con el dolor que la muerte de nuestros padres me producía,
la pregunta era que iba a hacer ahora? yo no podía hacerme cargo de Dylan, ni de la
casa, tendría que dejar de estudiar y sin embargo no me daría a basto, solo tenía 19
años.
Parte de la familia vino al funeral, decidí irnos con la tía Annie, era la hermana
menor de mi padre, era la opción más atractiva, vivía en San Francisco, con su recién
esposo James, tenía 32 años de edad, siempre fue nuestra tía favorita, era divertida,
sería más sencillo acoplarnos a su forma de vida.
Las cosas se complicaron después de la muerte de nuestros padres, me refiero a
Dylan se volvió rebelde, su nivel académico disminuyó, Annie iba semanalmente a la
escuela por citaciones, incluso ya había pasado por dos psicólogos, pero no había
logrado nada con él, yo continué mis estudios en astronomía en la Universidad de
California, por eso Dylan me decía nerd, desde pequeño mostré mucho interés en ser
astronauta, era un sueño de niño trabajar en la NASA.
Una noche mientras veía la repetición de un partido del Super Bowl entre los
Vikins vs. Cowboys, llamaron a la puerta a eso de las 10.45pm
-Yo voy!_ gritó Annie desde la cocina y salió trotando hacia la puerta, pasaron
unos pocos minutos y sentí a alguien que subió corriendo las escaleras, me asomé y era
Dylan
- Qué pasó con Dylan, Annie?_ le pregunté pero no obtuve respuesta, fui hacia
la entrada, Annie hablaba con un hombre alto corpulento y una muchacha estaba
detrás de él_ Annie, que sucede?_ la chica pareció ver un fantasma se desvaneció el
hombre que estaba con ella la atajó me apresuré hacia ella_ Señorita… Le sucede algo?
-No! Estoy bien…_ salió corriendo de forma extraña, el muchacho salió detrás
de ella
-Por favor disculpen. Alex espera!_ dijo el hombre mientras corría.
Capítulo 8
Frente a frente
Llegamos a casa, estaba perturbada, la imagen de Simon no se borraba de mi
mente, no dejaba de preguntarme qué hacía en San Francisco y quien era la mujer de
esa casa, que edad tendría? 20, 21? era algún especie de milagro que después de tanto
él estuviera vivo y yo existiendo para verlo de nuevo.
Adam abrió la puerta de la casa dejándome entrar, Adriana venia de la sala con
una escoba con Vanessa, se pararon a vernos llegar a mí y a Adam
-Que hacían fuera tan tarde?_ pregunto Adriana
-Salvando el mundo..._ respondió Adam. ambas fruncieron el ceño y se vieron
-Alex que sucedió?_ pregunto Vanessa algo temerosa
-Yo...
-Nada solo volvió a ver a Simon_ me interrumpió Adam. Adriana y Vanessa
abrieron los ojos exageradamente
-Como que volvió a ver a Simon? como? donde?_ pregunto Adriana preocupada
-Al parecer vive aquí en San Francisco..._ dije aun impresionada
-Yo creo que es tiempo de contarle lo que paso..._ dijo Adam con algo de
pesimismo en su expresión, fruncí el ceño de inmediato
-Que información es esa? que me han estado ocultando?
-Verona y Andrew fueron asesinados hace 2 años_ me llevé la mano derecha a
la boca
-Por qué no me dijeron nada de esto?
-Alex, llevas siendo el ser más agresivo y obstinado durante 20 años, dudo
mucho que una noticia como esta ayudara a tu progreso emocional_ dijo Adriana_ yo
les pedí que no te contaran nada, pero al parecer siempre logras enterarte de todo, no
contaba con que volvieras a ver a Simon
-Saben de sobra que odio que me oculten cosas porque de alguna forma siempre
me entero. Como que asesinan a Verona y Andrew y yo no me entero? entonces que
pasa con Simon? que quede a la buena de Dios entonces....?_ sentía llamear mi ojos,
estaba alterada, algunas lagrimas brotaban
-No hemos podido averiguar quiénes fueron todo parece indicar que fueron
vampiros, la pregunta es por qué ellos? o simplemente se trata de que ese día tuvieron
mala suerte. Solo sabemos que Simon vive ahora con una tía, hermana de su padre,
pero no sabíamos que estuvieran aquí
-Ahora que se supone que deba hacer con la presencia de Simon aquí? me tengo
que ir de la ciudad? saben de sobra que ahora no voy a querer separarme ni un segundo
de él, no sin saber que está bien
-Lo está Alex, al parecer su único problema es su hermanito_ dijo Adam
-Hermanito? ese niño es su hermanito?
-Un segundo? conocieron al hermano menor de Simon también?_ pregunto
Vanessa confundida
-Todo parece indicar que si es su hermano, todo encaja_ los mire con decepción
negando con la cabeza y subí a mi habitación tirando la puerta aparatosamente, me fui
a la ventana que daba hacia el mar y me senté en la orilla de la ventana con las piernas
hacia afuera, miré la luna que estaba entera, exageradamente grande
-Pareces perturbada..._ brinqué la de la impresión
-Gabriel!_ lo abracé
-Al parecer recuperaste algo que se te perdió hace un tiempo
-Todo este tiempo me estuviste observando?
-Siempre lo he hecho Alex
-Por que dejaron que me pasara todo esto?
-Aunque parezca mala excusa, hay cosas que no controlamos, y tú te nos fuiste
de nuestras manos, sin embargo sabes que puedes escoger un mejor camino
-Por qué nunca vinieron por mi? por qué no me mataron?
-A pesar de tu furia, nunca fuiste una amenaza real, cuantos humanos mataste
en estos 20 años? 5, 10?_ hizo una pausa_ los delincuentes actuales matan el doble en
un mes
-Pero no lo entiendo, soy un vampiro, saben que no poseo alma, no por
completo, cosa que pone mis sentimientos en riesgo, se intensifican o se pierden. Que
hubiera pasado si los pierdo?
-Creo que ni el mismo Lucifer hubiera podido con eso, hay muchos vampiros
en el mundo igual a ti, en vida fueron humanos excepcionales, tal como el caso de los
Adams, y fíjate en el bien que le hacen al mundo cada vez que pueden, no dañan a
nadie, solo así los dejamos existir, porque sabemos que contamos con ellos. Y aunque
parezca sucio este encuentro que tuviste con Simon estaba planificado ya, sabíamos
que era la forma de regresarte
-Pero por qué Verona y Andrew?
-Eso es algo que no sabemos, pero digamos que no controlamos a la muerte y
mucho menos a los vampiros
-No tienen idea de quienes fueron?
-No, en absoluto..._ hizo una pausa_ Alex vivir una vida es muy complejo, pero
vivir en una eternidad es mucho peor debes estar preparada para muchas cosas, perder
seres que amas, lo importante es que sigues aquí y puedes hacer algo bueno con tu
existencia, siempre piensa en ello_ paso su brazo derecho por encima de mis hombros
y me aproximó a su pecho_ confío en ti..._ beso mi cabeza y desapareció alborotando
mi cabello con un gran sacudón y sonido de aleteo, típico de ángeles
Al día siguiente todo parecía renovado para mí, me sentía en paz de alguna
manera, me levante, tome una ducha corta fui a trabajar al high school, muchos
estaban asombrados con mi nueva actitud, de alguna manera estaba volviendo a ser
yo, la vieja Alex, la conversación con Gabriel me había ayudado mucho, a media tarde
al salir del trabajo decidí ir a trotar un poco al Kezar Park, necesitaba drenar y drenar.
Corrí varios minutos, el cielo se tornaba oscuro y en cuestión de segundos comenzó a
llover
-Este clima...._ dije en tono muy bajo
Continué trotando bajo la lluvia, de todas formas no podía enfermarme, era lo
genial de ser vampiro, la gente se esfumo como insectos ante la presencia de
insecticida; decidí ir a mi nuevo auto, una Eco Sport negra y nueva, Adam insistió en
que tuviera algo nuevo, abrí la maleta para sacar una toalla del bolso, de un momento
a otro un jeep vinotinto venia hacia mí de espalda, no me dio tiempo de esquivarla me
dio, la camioneta se abolló, pero al parecer había alguien dentro, si veía que su
camioneta estaba chocada y conmigo en pie, iba a ser muy sospechoso así que me tiré
al suelo de inmediato fingiendo algo de dolor
-Señorita! está bien?_ voltee mi cuerpo a ver de quien se trataba la lluvia
continuaba cayendo, abrí la boca al ver quien era_ tu...? estás bien?_ quede muda_ hey!
-Ah? que? ehhh sí, estoy bien... solo fue un golpe_ me ayudó a levantar
-Segura? mil disculpas, mi jeep se descontroló algo pasa con los frenos_ una vez
en pie no dejaba de verlo y sonreír, incluso las lagrimas empezaron a brotar de mis
ojos, pensé que no se notaria por la lluvia_ te duele algo? por qué lloras?
-No! no... Solo es lluvia, mira agua de lluvia_ dije mostrándole el agua obvia
que caía del cielo, me sentí bastante tonta
-Déjame llevarte al hospital, tu pierna no se ve.....bien_ evidentemente el
morado de mi pierna había desaparecido_ no entiendo, juraría que vi tu pierna morada
-Tal vez te confundiste...
-Déjame llevarte igual... bueno si tuviera donde..._ dijo lamentándose viendo su
jeep
-No es necesario, estoy bien, déjame a mi llevarte a casa, creo que recuerdo el
camino...
-Pero no puedo dejar el jeep así...?
-Vamos, yo te ayudo a estacionarlo_ rió_ qué? tengo más fuerza de la que
aparento, créeme...
-Solo temo por tus huesos
-Teme por otra cosa
-Ok, ok, ok, ponte al volante, yo empujo
-Tu ponte al volante, yo empujo_ volvió a reír, Dios! como extrañé su sonrisa,
entre cerré los ojos con suspicacia
-Bien! tu empujas...
Capítulo 9
Conociéndonos una vez más
Simon se montó en su Jeep, yo me coloqué en la parte trasera
-Lista?
-Creo que si... VOY!_ le grité.
Empecé a empujar simulando algo de esfuerzo
-Oye si quieres yo empujo
-Solo direcciona el auto Simon!
Volví a empujar simulando esfuerzo hasta decidí mover la camioneta, la lluvia
hacia todo un poco más difícil; solo empujé un poco, logró estacionar el Jeep no muy
lejos de donde estábamos. Se bajó, yendo directamente hacia mí, me tocó actuar como
si estuviera exhausta, pero creo que exageré un poco
-Oye, al parecer comes algo muy bueno, será espinaca?_ ambos reímos
tontamente
-Muy malo tu chiste
-Si, verdad?_ hizo una pausa y me miró_ bueno tengo que llamar a la grúa y
esperar que me vengan a buscar
-Te ofrezco algo mejor_ sonreí pícaramente
-A ver... suena bien...
-Ven, te llevo a casa, mañana vienes por ella
-No! seria ya mucho: te atropelle, me ayudaste a empujar mi camioneta y aun
así quieres llevarme a casa
-Así soy... buena persona en todo momento..._ sonreí abriendo los brazos como
si estuviera haciendo un comercial_ además que está lloviendo a cantaros, eso va a
retrasar la grúa, déjalo para mañana
-Ok, ok, bien, pero al menos déjame conducir
-No te lo discuto!_ le di las llaves de mi camioneta nueva, el fue a su auto
mientras yo me montaba en el asiento del copiloto, estaba empapada. Simon se montó
en la camioneta
-Ten, no quiero que te resfríes_ me entregó una chaqueta inmensa y gruesa,
sonreí ante aquel gesto
-Y tú?
-Yo estoy bien así...._ nos miramos a los ojos por unos momentos_ Oye, creo
que no empezamos bien, me llamo Simon, aunque creo que eso ya lo sabías, cuestión
que no me explico
-Ehhmmm..._ busque excusas creíbles en mi cabeza_ Dylan, fue Dylan quien
me dijo sobre ti, bueno asumí que eras tu
-Creíste bien... por cierto gracias por llevarlo a casa
-Por nada..._ hicimos otro silencio mientras nos veíamos
-Aun no se tu nombre
-Oh!_ reí tímidamente_ Alex... Alexandra Torres, pero puedes llamarme Alex,
así me dicen todos
-Alex... ummm bastante peculiar, pero me agrada_ sonrió y encendió la
camioneta, salimos del estacionamiento del parque_ y que me cuentas sobre ti Alex?
-Sobre mi? hay tanto y a la vez nada que contar
-Ummmm, un corazón atormentado por lo que veo_ sonreí con desgano
-Te puedo contar que soy venezolana, vivo con mi tía Adriana y unos primos
extra lejanos, mis vecinos son unos tíos y una prima, mis padres murieron, al menos
mi mama, de mi padre no he sabido nada en años...._ bajé la cabeza ante aquel
recuerdo_... y bueno! soy sub directora del High school Abraham Lincoln
-De verdad? Dylan estudia allí. Como puedes ser sub directora de algo siendo
tan joven?
-Que edad crees que tengo?
-20...?
-24 la verdad, pero gracias por el cumplido. Soy graduada en Geografía. Qué
me dices de ti?
-Una vida complicada, mis padres murieron hace 2 años, vivíamos en Sioux
Falls, vivo con una tía y su esposo, soy estudiante de astronomía en la Universidad de
California, y creo que eso es todo...
-Gracias por los detalles Simon_ mire hacia el exterior por el parabrisas
haciendo una pausa_ y me imagino que hay una chica en tu vida...
-Una chica? te refieres a una novia, no?_ me miro con algo de seriedad y luego
estallo en risas_ No, no, no hace ya varios años que no tengo novia, nunca fui bueno
para eso de las chicas
-De verdad?
-Es tan difícil de creer?
-Bastante, no quiero sonar como una mujer "atacona", pero tienes porte_ creo
que al decirle eso se sonrojo
-Bueno, bueno ya..._ sonreímos y en cuestión de 2 minutos llegamos a su casa,
esos minutos viajamos en silencio total, ya había cesado la lluvia_ quieres pasar y
cenas con nosotros?
-Creo que no estoy en las fachas correctas Simon, dejémoslo para otro día
mejor_ me miró como examinándome un momento_ que miras?
-Tú no me respondiste
-Que cosa?
-Hay algún chico?
-Nunca lo preguntaste, y no, no lo hay, digamos que la vida no ha sido buena
conmigo en ese aspecto, y en otros aspectos tampoco, pero en fin
-Bueno entonces que sea una cita...
-Que cita? de que rayos me estás hablando?
-La cena...
-Que cena Simon?
-A la que no quieres entrar hoy, ya que lo vamos a dejar para otro día, que sea
una cita entonces_ no sabía que decir, me sentía como una tonta
-Bien, puede ser mañana, vivo en El Camino del mar
-Perfecto, paso por ti a las 6pm_ sonreímos abiertamente, me monté en la
camioneta de nuevo, encendí el motor
-Saludos a Dylan
-Gracias y disculpa por lo de hoy
-A la orden y pierde cuidado con el incidente_ sonreí despidiéndome con la
mano derecha mientras la izquierda sostenía el volante y me fui a casa
Capítulo 10
Situaciones extremas, medidas
extremas
Durante el camino sonreí inconscientemente, sentía que estaba volviendo a la
vida, esos minutos de confusión entre Simon y yo fueron algo grandioso
-Hola! llegué..._ dije anunciándome al abrir la puerta del garaje
-Hola querida sobrina_ bajo las escaleras Adriana_ a que se debe el buen
humor? estas empapada...
-Digamos que la lluvia me agarró de sorpresa_ dije sonriendo subiendo ambos
hombros tratando de simular que no tenía importancia, fui hacia la cocina, abrí el
refrigerador y saqué una bolsa de sangre
-Oye Alex, no tengo idea por que tan buen humor, pero desde que llegamos de
nuevo a San Francisco, eres diferente, casi la misma de antes, y no sabes lo feliz que
me hace..._ me sonrió mientras bebía sangre fría de un vaso de cristal, sonreí
abiertamente y Adriana se fue en carcajadas
-Qué?_ me hizo señas en la boca, fue cuando me di cuenta que tenia los dientes
rojos al verme en el reflejo de una olla
El día siguiente me fui temprano al trabajo, todos los estudiantes me miraban al
pasar pero a ninguno saludé ni ellos a mí, solo los miré con una media sonrisa, siempre
me atormentaron sus latidos en mi cabeza, al abrir la puerta de mi oficina alguien me
llamó
-Profesora Torres!_ voltee a ver de quien se trataba y era una maestra
-Dígame Profesora Walker
-Buenos días señorita, solo vengo a traerle al estudiante Morris_ miré detrás de
ella y era Dylan
-Dylan?
-Tu otra vez?_ dijo con expresión fastidiada
-Más respeto Morris!_ dijo la profesora que era de unos 30 años ejerciendo algo
de autoridad
-Déjelo Profesora, yo me encargo de aquí en adelante, vuelva a clases con sus
muchachos_ afirmó con la cabeza y se fue por el pasillo lleno de casilleros_ tu, entra_
dije señalando a Dylan
-No pensé que fueras precisamente tú la sub directora
-Ya ves que pequeño es el mundo Dylan
-Con razón te odian_ fruncí el ceño exageradamente
-Me odian?_ dije sentándome en mi escritorio_ bueno, no me extraña..._ dije
dejando los ojos en blanco_ Cuéntame por qué la Prof. Walker te trajo hasta acá?
-El director Adams no está?
-Asumo que no, prefieres resolverlo con él?
-Confío mas en él, al menos no me delata en mi casa
-Y creo que ese es el problema
-Oh! wow señorita Torres! cuestiona al director?_ me dijo de forma acusadora y
sarcástica
-No lo cuestiono, solo que yo tengo mi forma de hacer las cosas y cualquiera se
puede equivocar con sus métodos. O que planeas? acusarme con el director?_ tomé el
teléfono negro que estaba sobre mi escritorio y marque el numero del señor Douglas
-Aló?
-Un momento TIO Douglas...._ dije resaltando la frase_ Aquí está, puedes
decirle lo que quieras de mi al director, pero por favor resalta lo que tú hiciste primero,
así lo mío no se verá tan malo_ su expresión se tornó nerviosa_ Ummm... lo supuse_
me llevé la bocina a la oreja_ Disculpa tío, solo fue una falsa alarma
-Alex que sucede?
-Nada importante, dramas de estudiantes, luego te pongo al tanto_ colgué la
llamada_ volviendo a ti niño_ me puse de pie frente a él_ jamás vuelvas a amenazarme
en tu vida_ me miraba de mal humor_ ahora dime qué hiciste?
-Llevo tres tareas de historia que no entrego
-Ummm y se puede saber por qué?_ me senté en la silla que estaba al lado de el
-Porque no he querido hacerla, que planea hacer?_ dijo de forma desafiante
-Oye Dylan basta! tienes idea del daño que le haces a tu familia con tu actitud?
-Que sabe usted de mi familia?
-No lo sé, dímelo tu... por qué eres tan rebelde?
-Ya sé en qué consiste esto, quiere ser amable conmigo
-Yo ya sé en qué consiste esto Dylan, en que tú te haces la víctima y los demás
sufren el doble entonces...
-Usted no tiene idea de lo que es mi vida ahora
-Créeme que si, te entiendo a la perfección; oye, perdiste a tus padres, yo perdí a
mi hermano y a mi madre y no sabes cómo los extraño, e hice lo mismo que tú estás
haciendo ahora, no sabes cuánto daño les hice a mis amigos y la familia que está
conmigo, lo peor de todo es que ellos van a estar siempre con nosotros a pesar de las
patadas que les demos, pero no es justo
-Como sabe que mis padres murieron?
-Ser sub directora trae beneficios, tengo acceso a sus expedientes, y el tuyo dice
que vas muy mal, vas a repetir el año Dylan
-Ya no importa...
-Si importa... no planeas cambiar de actitud, cierto?_ negó con la cabeza_ eres
bastante testarudo, pues no me queda más remedio_ estaba viendo a través de la
ventana_ Dylan..._ no volteo_ Dylan!_ volteo a verme_ vas a volver a ser el mismo de
antes, cuando vivían tus padres, los vas a extrañar pero eso no afectara tu vida, serás el
mejor estudiante de tu sección, llegarás hoy a casa abrazando a tu hermano y a tus
tíos, pidiéndoles disculpas por cómo te has comportado y serás buen chico de hoy en
adelante, bien?_ afirmó con la cabeza, la hipnosis era algo sencillo la verdad_ ahora
vete a clases y ponte al día_ se levantó de la silla, tomó sus cosas y abrió la puerta de
mi oficina
-Señorita Torres...
-Si Dylan?
-No sé por qué dicen que es una bruja, usted es genial_ fruncí el ceño con
diversión y sonreí
-Wow! gracias... supongo...
Me senté en mi silla sonriendo, sabía que hipnotizar era algo extremo, pero en
este caso era algo necesario, era algo que le debía a Simon, y el niño necesitaba vivir
sin tormentos, también se lo debía a sus padres, era lo correcto
Capítulo 11
Una comida nada más
Pase el resto del día trabajando sin mayores novedades, de hecho Simon y
Dylan ocuparon mis pensamientos en resto del día. A eso de las 4.30pm tome mis
cosas y me marché a casa, tenía una sonrisa estúpida dibujada en la cara, digamos que
tenía mucho tiempo sin sentirme bien conmigo y con el mundo, creo que finalmente
había encontrado paz entre tanta desgracia.
Llegué a casa, no había nadie, supongo que todos estaban trabajando, aun era
temprano, aunque ya faltaba poco para que llegaran. Subí directo a mi habitación,
tomé una ducha fría, necesitaba despertarme, activarme; salí envuelta en la toalla
blanca hacia el inmenso closet donde estaban mis cosas, lo abrí y habían cientos de
alternativas, me medí casi toda la ropa pero aun así no conseguía algo para ponerme,
de hecho tenía muchos años sin colocarme un vestido, siempre vestía igual, busque
más al fondo, saqué una falda de organza beige muy pálido con flores muy pequeñas
rosadas y verdes, saque una franelilla verde oliva, un cinturón de cuero ancho y una
chaqueta del mismo color del cinturón y las sandalias. Me vi en el espejo y parecía
otra, sonreí al verme así vestida <<toc, toc...>> sonó la puerta y la abrieron
-Adam....?_ al verme quedo como en una especie de shock
-Wow! Alex...
-Que sucede? me queda mal? cambio la camisa verdad?
-No, no, no, es solo que tenía mucho sin verte así..._ creo que si hubiera podido
me hubiera sonrojado, de forma nerviosa puse mi cabello detrás de mi oreja derecha y
me senté a maquillarme
-No seas exagerado Adam. Tan mal me vi durante estos años?_ se acercó a mi
-No es lo mal que pudiste haberte visto, es solo que todos te preferimos así
-Es cierto..._ sonreí tímidamente mirándolo a través del espejo, peine mi pollina
y me levanté_ listo! como me veo?_ le dije llena de alegría. Me tomó por la mano
derecha poniéndola en su pecho, acercándose a mí, siempre era impresionante apreciar
lo gigante que era Adam
-Que tengo que hacer para que vuelvas a mi?_ hizo una pausa_ aquí dentro
había un corazón muerto que había dejado de latir por algo mucho más allá de que sea
un vampiro, tú hiciste que volviera a latir, que volviera a vivir_ y yo apuesto que si
tuviera el mío latiendo, estuviera a mil por hora a punto de explotar
-Adam...
-No digas nada, yo sé por todo lo que has tenido que pasar, y todo este nuevo
cambio en ti me da esperanzas que vuelvas a quererme como antes_ tenía sus ojos
clavados en los míos, era como si me estuviera hipnotizando, cosa que era absurda,
tenía sus manos en mi cuello sujetándome, estaba muy nerviosa, sonó el timbre
-Lo siento, me tengo que ir_ me libré de él, tomé mi bolsa de la cama y bajé las
escaleras, abrí la puerta principal
-Ho...la...!_ dijo haciendo una pausa entre silabas
-Hola Simon..._ sonreí
-Eres Alex? la misma chica que atropellé ayer? La mojada, maquillaje corrido?_
sonrió abiertamente
-La misma, solo que no estoy mojada y con otra ropa
-Y vaya que te queda fabulosa esta ropa_ dijo como si me estuviera mostrando a
alguien más, sonriendo abiertamente
-Ahh... Con que con él es que vas a salir, no?_ Adam fantasmalmente estaba
detrás de mí, Simon borró su sonrisa
-Tu eres quien llevó a Dylan a casa, no? mucho gusto, Simon..._ estiró su mano
derecha hacia Adam, él se la estrecho fingiendo simpatía
-Mucho gusto, Adam Vangarret. Así que van de salida?
-Si, espero que no te importe....
-Bah! que le va a estar importando... vámonos Simon
-No, en absoluto, no me importa, cuídala mucho
-Eso haré, descuida
Ese debió ser uno de los momentos más incómodos de mi vida, caminé hacia el
Jeep de Simon toda temblorosa, los acontecimientos de los últimos 15 minutos habían
sido bastante consternantes.
-Bien y a donde vamos?_ le pregunté para salirme del tema de Adam
-Vamos a Fishersman Wharf_ alcé ambas cejas, esa zona de San Francisco era
bastante popular y concurrida, comer no era un problema para mi_ que te gustaría
comer?
-Allí no solo hay restaurantes de comida de mar?
-Si, pero prefieres aves o carnes, conozco un restaurante allí mismo
-Ok, perfecto!_ sonreí al confirmarme eso, el problema ahora era como hacía
para comerme un animal crudo
Llegamos al estacionamiento de Fisherman Wharf, había bastante gente por
todos lados, el atractivo de ese lugar, al menos en el día era ver a los leones marinos
descansando en el muelle, la verdad nunca había ido a ese lugar
-Habías venido antes?_ preguntó una vez ya fuera de su Jeep, tratando de
buscarme conversación
-Ehm, no, primera vez, no tengo mucho tiempo aquí en San Francisco
-Es cierto... vamos?_ afirmé con la cabeza y sonriendo tímidamente,
caminamos hacia el interior de la zona, todo era de madera, muy pintoresco, llegamos
a lo que parecía una plaza, en el centro había un monumento a un gran cangrejo, la
verdad me hizo gracia, hasta que llegamos a la entrada de Hard Rock Cafe
-Aquí era tu gran lugar secreto?_ reímos al mismo tiempo
-Oye! no no soy culpable de que no te gusten los mariscos ni moluscos
-Yo cuando dije eso?
-Me lo diste a entender... eso es suficiente
-Bien Simon, muy bien_ entramos, había música puesta, era Bon Jovi lo que
sonaba, como era típico en ese restaurante, era rock lo que iba a escuchar el rato que
estuviera allí, nos sentamos y en seguida llegó un mesero entregándonos la carta con el
menú
-Bien Alex, que me cuentas de ti?_ saqué mi cabeza del menú y lo miré, al
encontrarse nuestras miradas me dio algo de vergüenza
-Creo ya te lo dije todo ayer
-Vamos! no puede ser... tu vida debe ser más que eso
-Lo era, pero actualmente solo estoy dedicada a ser sub directora, hacer
ejercicios y ya
-Oye, hablando de eso, que fue lo que hablaste hoy con Dylan, llegó todo raro a
casa hoy, pidiendo disculpas por todo lo que había pasado en estos dos años, dijo que
había hablado contigo
-Solo hablé con él, no creo haberle dicho algo que tu o tus tíos no le hayan
dicho antes, solo se lo hice ver de una forma diferente, hasta que entendió que no
estaba bien lo que hacía_ me miraba con atención y algo de perspicacia en la mirada,
en eso llegó el mesero
-Ya decidieron que comer?
-Si!_ dijimos los dos al mismo tiempo, el mesero me vio a mi primero
-Bueno a mi me trae un lomito lo más crudo que pueda, con un toque de sangre
si puede_ eso lo dije en voz muy baja_ de beber me trae una cerveza light_ Simon me
miraba extraño, como impresionado
-Yo solo quiero una hamburguesa....
-...doble carne con extra de queso..._ dijimos él y yo al mismo tiempo y al
parecer no fue prudente hacerlo
-Con una cerveza igual que ella, pero no light, tráigame una Pilsen por favor
-Postres?_ preguntó el mesero
-No! para nada... dudo que quepa algo mas después de la carne_ sonreí
amablemente, y el mesero se fue con nuestra orden anotada, la verdad el chico me
miró casi todo el rato, pero no era algo que me incomodara
-Como sabias que pediría doble carne y extra de queso?
-Creo que ayer me comentaste que te gustaba la hamburguesa así..._ fue la
primera excusa que me vino a la mente
-Si? no recuerdo haber hablado de comida ayer...
-De algún modo lo supe, no?
-Tienes razón, si no te lo dije yo, quien más?_ reímos, yo lo hice con falsedad,
ya habían varias ocasiones en las que casi me agarra_ y a ti te gusta la carne cruda?
-Si, a todo el mundo le parece asqueroso, pero me gusta la carne casi cruda
-Cerveza, eh?_ dijo con una sonrisa picara
-Siento no ser esa chica delicada que pide vino blanco, mucho hago con
vestirme así de nuevo
-No te lo critico, solo me pareció rudo, ninguna chica se muestra así en la
primera cita_ abrí mis ojos como platos
-Cita?
-Oh! lo siento, no quise decir eso, esto es solo una salida de amigos, discul..._
tome su mano izquierda que estaba sobre la mesa
-Simon, tranquilo, me agrada que sea una cita, si no, no me hubiera arreglado
así_ su corazón se aceleró y su sangre le subió a la cabeza, eso produjo que apartara mi
mano rápidamente de la suya, sentía sus latidos con mucha claridad, y eso me estaba
torturando, tragué grueso y sonreí forzadamente
-Y Adam, quien es?
-Alguien que ha cuidado de mí desde hace muchos años, ya olvide cuantos
exactamente
-Por lo visto no le gusto mucho que salieras conmigo
-Eso tiene que manejarlo él
-Pero tuvieron algo?
-Hace mucho tiempo, ya eso no importa
-Yo lo entiendo, y aun importa para él, se le nota, no lo culpo
-Yo tampoco lo hago, pero él sabe mi posición, digamos que los últimos
tiempos no han sido fáciles
-Para nosotros tampoco, pero que te sucedió a ti?
-Murió mi hermano hace varios años, murió un amigo que amaba, y mi madre
hace poco menos que él, recién me enteré que murieron unos amigos muy queridos, y
ante la muerte de tanta gente que quiero mi actitud fue más o menos como la de
Dylan, pero siendo grandes digamos que el daño que se ocasiona es mucho peor
-Ummm, te entiendo y lo lamento por todas tus perdidas
-Ya de eso, hace mucho, y la vida me está regresando un poco de esa felicidad
que me faltaba, estuve amargada muchos años, creo que estoy volviendo a ser yo, la
vieja Alex
-Entonces creo que llegué en buen momento
-No pudo ser más perfecto Simon..._ llegó el mesero con nuestra orden, al ver y
oler mi plato de carne me dio "sed", creo que no tomé ese ítem en consideración,
empecé a respirar profundamente
-Que tengan buen apetito..._ dijo mirándome, me guiñó el ojo al irse, fruncí el
ceño, Simon lo notó, pero me estaba sintiendo peor, sentí que mis ojos llameaban,
cerré los ojos inmediatamente
-Alex te sientes bien?_ preguntó muy preocupado
-Si! sí, estoy bien, ya vuelvo..._ me levanté y fui corriendo al baño de damas,
entré y había una rubia delgada maquillándose frente al espejo, abrí el grifo y toqué el
agua, me miré en el espejo, tenía los ojos rojos, venas de alrededor de mis ojos
brotadas, mis colmillos empezaban a salir, la muchacha me miró con miedo, la tomé
por el brazo con fuerza y la puse de frente a mi encontrando nuestras miradas, iba a
gritar_ No grites!_ era como si le hubiese ahogado el grito, estaba temblando, esa
escena me daban muchas ganas de beber su sangre, era la típica escena de cazador y
presa_ vas a salir calmada, como si no me hubieras visto, no has visto mis colmillos y
no has visto nada sobrenatural acá ni en ningún lado, vas a dejar de llorar y temblar y
vas a salir como si aquí no paso nada, ok?_ afirmó con la cabeza, se limpio las
lagrimas, tomó su bolsa con mucha calma y salió del baño, cerré la puerta con seguro,
agarré agua y me la eché en la cara un par de veces y mi expresión volvió a ser igual,
respiré profundamente, abrí la puerta y salí como si nada
-Oye, estas bien?_ se levantó con pose preocupada al verme acercar a la mesa de
nuevo
-Si, solo me cayó una pestaña en el ojo, nada de gravedad. Comemos?_ sonreí
abiertamente, creo que de forma exagerada
-Está bien, comamos..._ comí si ningún problema, aunque el olor a sangre me
estaba volviendo loca, tuve que luchar con muchas ganas para controlarme, el resto del
rato la pasamos bromeando, Simon era el ser que siempre extrañé, el era quien faltaba
en mi vida, a pesar de perder a Andres y mi madre, Simon era un complemento en mi
vida, eso lo tenía que admitir.
Terminamos de comer y nos fuimos directo a mi casa, sentía como si me
hubiera tragado completa la carne, sumamente pesada me sentía, prefería los sabores
naturales, sin salsas ni nada ahora que era vampiro, eso no ayudaba a mi nuevo
metabolismo; nos fuimos cantando en su Jeep, Simon era tan divertido, había olvidado
cuando fue la última vez que había sonreído tanto. Llegamos a mi casa, justo al
momento de bajarme
-Un momento! no te bajes aun..._ se bajó del Jeep y corrió a mi puerta, la abrió
y me tendió la mano derecha_ señorita...?_ sonreí abiertamente
-Estás loco....
-Para nada... oye siempre estas así de fría? debes estarte muriendo de frio
-No! no para nada, estoy bien_ quedamos uno en frente del otro a poca
distancia_ Gracias...._ dije con mi mirada perdida en la suya
-Gracias a ti por acompañarme_ me tomo ambas manos y les dio un beso,
sonreí ante aquello_ quedamos para otro día?
-Claro que sí!_ le guiñe el ojo sonriendo tímidamente, tomé su mejilla con mi
mano derecha_ es hora de que entre, ya es un poco tarde, gracias de nuevo_ si, le hui
al beso, ya se_ hablamos luego_ me fui hacia la puerta, abrí, me despedí con la mano,
el hizo lo mismo con una sonrisa, cerré la puerta y me recosté de ella sonriendo.
Capítulo 12
No puedo elegir
Me sentía como en una nube, era feliz de una manera muy extraña. La casa
estaba a oscuras, fui hasta la cocina a buscar un vaso con agua, había una nota en la
nevera pegada
Fuimos a comer fuera y al cine, regresamos tarde, no nos esperen
Adriana
Sonreí y negué con la cabeza, Adriana y Sam habían encontrado la felicidad, a
su manera, pero la habían conseguido, tomé un vaso con agua, y subí las escaleras,
dejé todo oscuro como estaba, entré a mi habitación, solo entraba la luz de la luna
llena por la ventana, me quité la chaqueta
-Que haces aquí?_ pregunté viendo hacia la ventana, Adam estaba detrás de mi
-Sólo esperaba a que llegaras
-Me estas vigilando?_ dije volteándome hacia él
-Para nada. Como te fue?
-Bien... comimos solamente
-Comieron?
-Carne cruda
-Ah claro!_ hicimos un silencio, fue bastante incomodo, todo estaba oscuro
prácticamente, tomó mi rostro con su mano derecha, encontrando nuestras miradas_
tu mirada a pesar de haber cambiado por tu vampirismo, vuelve a ser la de antes, esa
mirada tierna...
-Adam..._ traté de interrumpirlo
-Te puedes callar un momento Alexandra?_ me silenció por completo_ estoy
tratando de decirte que te amo, te amé desde el momento que te conocí y aun lo sigo
haciendo la misma intensidad, nunca voy a dejar de insistir, nunca_ sentía que estaba a
punto de sufrir una crisis emocional, las lagrimas las tenía en puerta, lo que hice fue
abrazarlo, había olvidado lo alto que era, recostar mi cabeza de su pecho y sentir sus
brazos a mi alrededor siempre fue una de las mejores sensaciones del mundo.
Me separé de él, sentía que me iba a desmayar, me limpié las lagrimas que
habían salido, tratando que Adam no se diera cuenta, volvió a tomar mi mejilla, lo vi y
sonreí con desgano, dejando salir una lagrima, su mirada siempre me hechizó, era tan
particular; de un momento a otro nuestros labios se encontraron, fue un beso lento,
empecé con timidez, había olvidado el sabor de sus labios; rodeé su cuello con mis
brazos, el beso al pasar los segundos se ponía más intenso, nuestra respiración se
aceleraba, desató mi cinturón mientras continuábamos besándonos y lo dejó caer al
suelo, desabotoné su camisa, descubriendo su pecho definido, me cargó, amarrándolo
con mis piernas por su cintura, puso sus manos en mis caderas para sostenerme, besó
mi cuello y me llevó a la cama, continuamos desvistiéndonos, sentía una llama muy
fuerte dentro de mí, hacía mucho tiempo que no sentía algo así, lo mas cumbre es que
era por él mismo, sentir su piel con la mía, sus besos, todo era tan perfecto.
Salió el primer rayito de sol, abrí los ojos y estaba acostada en su pecho, sus
brazos me rodeaban
-Buenos días...._ me dijo apenas abrió los ojos, sonreí hipócritamente_ qué
pasa?_ me senté en la cama
-Adam, no quiero que mal interpretes esto...
-Alex, no te quiero presionar, tu sola vas a volver a mí, esto que paso entre
nosotros solo confirma que aun sientes algo por mí, y quiero que te quede bien claro
que no voy a dejar que ni el mismo Simon resucitado me aparte de ti, siempre voy a
dar todo por ti, no estoy dentro de ti, pero juraría que lo que sientes por él, es un cariño
muy grande, que comprometiste por su amor por ti, pero creo que eso sonaría
demasiado egocéntrico de mi parte_ sonaba y se veía decepcionado al decir aquello, se
levantó de la cama vistiéndose
-Adam, espera...
-Déjalo... ya es un nuevo día, y supongo que tienes que ir a trabajar, ya es un
poco tarde, yo también tengo cosas que hacer_ salió de mi habitación dándome un
beso en la cabeza, quedé congelada, no sabía qué hacer.
Me levanté y tomé una ducha tibia, la verdad hacia frio, las lluvias habían
puesto las cosas extra frescas en San Francisco. Al cerrar los ojos para meterme bajo la
caída de agua, visualicé aquella oportunidad que estuve con Simon en Tampa, así que
los abrí de golpe, era muy confuso y era totalmente inconcebible sentir algo así por dos
personas, pero ninguno de los dos sentimientos se parecían tampoco, desde el inicio de
este conflicto siempre supe lo que tenía que hacer, y era simple, elegir, lo que no era
simple era precisamente eso, elegir.
Capítulo 13
Huyendo de un sentimiento
Pasaron los días poco a poco, lentos, fríos, húmedos, me era incomodo ver a
Adam en casa cada día, cada vez que lo sentía, que lo oía, que lo olía, que lo veía, me
recordaba esa noche, él trataba de evitarme. Por otro lado tenia cientos de llamadas
perdidas de Simon, mensajes sin contestar, todos queriendo saber de mi, invitándome
a salir de nuevo, cuanto había pasado ya? una, dos semanas? ya perdí la noción del
tiempo totalmente.
Por qué me ocultaba de Simon? nunca se confirmó que estuviera enamorada de
Simon, por el contrario siempre admití y sentí amar a Adam, mis sentimientos por
Simon eran confusos, una mezcla de cariño, con amor, ternura, agradecimiento y
posiblemente hasta lastima, Simon era mi ángel guardián, me conocía mejor que
nadie, siempre estuvo conmigo desde que nací, conocía mis pensamientos mas ocultos,
hasta mis deseos, la verdad ahora que lo detallaba, me daba algo de vergüenza,
supongo que eso ya no debía importar, ahora no gozaba de ángel guardián debido a mi
situación inmortal demoniaca. Los sentimentalismos no eran algo propio desde que
dejé de ser mortal, me sentía vacía, en efecto todo es más sencillo así, pero quedaban
esos sentimientos bonitos por varias personas, eso era lo que me hacia sobrevivir y no
soltar mi lado humano.
Una tarde terminé mi trabajo con unos reportes para el ministerio de educación
en el high school que tenía pendientes y me fui tarde a casa, ya el sol estaba
terminando de ocultarse, San Francisco era un lugar maravilloso, perfecto para formar
una vida, tenía mucho tiempo sin saber de problemas con otros vampiros, ni ángeles y
mucho menos no nos tropezamos más con cazadores, vivíamos en paz, había
aprendido a vivir así.
Llegue a casa pasadas las 6pm, abrí la puerta del garaje con el control remoto,
entré apague el motor, fue cuando percibí un olor muy particular, sonreí con desgano,
salí de la camioneta y cerré la puerta
-Simon, puedes salir, ya sé que estás allí_ no demoro en salir detrás de la pared
que dividía mi casa con la de Vanessa
-Como sabias que estaba allí?
-Soy más perceptiva de lo que crees?_ sonreímos_ vamos a la playa_
caminamos hasta la China Beach Park, que estaba a unos pocos pasos de casa
-Por qué no contestas mis llamadas, mis mensajes? pensé que te había pasado
algo, discúlpame, fue un atrevido en venir, es solo que pensé que....
-Simon! para...._ hizo silencio haciendo un gesto de vergüenza muy divertido,
sonreí ante aquello_ Discúlpame tu a mí, digamos que las cosas se me han acumulado
en estos últimos días, blah blah blah, excusas, solo discúlpame_ me miraba frunciendo
el ceño, al finalizar mi monologo, sonrió mientras me miraba con esos ojos azules
tiernos de borrego que me mataban
-Estás loca...._ sonreímos abiertamente
-Dylan cómo está? llevo días sin verlo_ dije tratando de entablar conversación
-Milagrosamente volvió a ser el de siempre, no se a que ángel o a que santo
agradecerle ese favor, todo ha sido más sencillo así_ hizo una pausa y miro al
horizonte
-Que pasa?_ pregunte algo preocupada
-Es solo que nada ha sido sencillo desde que ellos murieron, no tienes idea de
cuánto me hacen falta y sé que a Dylan también_ sus ojos se llenaron de lagrimas en
un momento, no pude evitar abrazarlo
-Ya, ya... tranquilo, aquí estoy para lo que necesites_ sentía su corazón latir con
mucha intensidad, inhale y exhale profundamente distrayendo mi atención. Me
desapartó y tomó mis dos manos
-Eres especial Alex..._ esa frase hizo que algo dentro de mi estomago saltara
-Tu también lo eres_ sonreí tímidamente, le evité la mirada, sentía que iba salir
volando_ me tengo que ir..._ le di un beso en la mejilla, levantándome en puntillas
para poder alcanzarlo, me fui alejando de el trotando
-Cuando nos volvemos a ver?_ me grito mientras me alejaba
-Llámame y fijamos un día_ me despedí con la mano derecha y me fui trotando
a casa, al llegar al poste que estaba justo al frente de mi casa, me detuve sosteniéndome
de él y sonreí al pensar en Simon
Capítulo 14
San Valentín
Pasaron un par de días más, llegue al trabajo y todo estaba decorado con
corazones, cupidos, globos rojos y blancos, hasta el autobus escolar estaba incluido en
esta cursileria de día, ya había olvidado que era 14 de febrero, nunca celebre este día,
nunca me gustó y los últimos años de mi vida, perdón corrijo, de mi existencia, fueron
totalmente vacios, mientras caminaba por los pasillos veía muestras de amor y de
cariño entre los estudiantes, algunos me saludaban y me deseaban Feliz Día de San
Valentín, muchos como con miedo de tan si quiera verme. Llegué a mi oficina, abrí la
puerta con algo de dificultad por los papeles y libros que traía en la mano, al abrir la
puerta me conseguí con un arreglo de rosas encima de escritorio, discreto pero a su vez
escandaloso por los colores de sus pétalos, al verlo todo lo que traía encima cayó al
suelo mientras mi mandíbula se desprendió por la impresión <<Adam...>> puse los
ojos en blanco sonriendo con picardía, no me molesté en recoger lo que tiré al suelo,
fui directo a las flores, busqué la tarjeta
Pasé toda la noche pensando si enviarte o no estas flores, ¿exageré?
supongo que esta fecha nos pone idiotas a todos, espero que me
perdones por ello. Espero también que no tengas planes para esta
noche, te espero en la playa a las 6
Simon
Abrí una sonrisa enorme al ver su nombre en la tarjeta, a pesar de haber
reencarnado, Simon era exacto a como era antes de morir, a pesar de no simpatizar
por esa fecha en general, me producía mucha gracia lo que Simon se atrevió a hacer.
Sera que con su nueva existencia todo quedaba tan intacto como sus sentimientos
hacia mí? evidentemente no era pura casualidad o puro cariño de amigo que me
enviara un arreglo tan elaborado de rosas y rojas en un día como hoy.
El día fue como cualquier día, solo con la variante un "poco insignificante" de
los malditos detalles de amor por todos lados, al abrir mis cuentas en internet tenia
cientos de mensajes de felicitación, postales con corazones, los "gringos" eran
realmente dedicados con esta fecha, inclusive varios chicos me hicieron tarjetas de San
Valentín, me las fueron entregando a medida que iba pasando por los salones en mi
inspección diaria acostumbrada.
Terminó mi día de trabajo justo a las 5pm, recogí mi arreglo floral, mi bolsa y
me fui al estacionamiento, había más tráfico de lo normal la verdad, me llevo 40
minutos llegar a casa. Al llegar abrí la puerta con algo de dificultad, el arreglo pesaba
de forma considerable, encima de uno de los muebles de madera de la entrada estaba
un arreglo más extravagante que el mío sin duda, con rosas rojas y blancas y algunos
corazones, sonreí al compararlos << Y Simon piensa que exageró.... ja!>> era evidente
que ese era el regalo de mi cuñado para mi hermana. Dejé mi modesto arreglo en otro
mueble, quité un adorno de cristal para poner mis flores
-Flores en un día como hoy Alexandra?_ escuché la voz de Adriana detrás de
mí, sonreía sarcásticamente
-Así es..._ dije subiendo los hombros, ella fue directo a ver la tarjeta del arreglo
-Ummmm... con que Simon, eh?_ sacudió la tarjeta_ Ay Alex, vuelves a estar
en problemas hermanita..._ hizo una pausa_ Suerte con eso..._ sonreí negando con la
cabeza_ ten mucho cuidado Alex, es en serio_ se me borró la sonrisa de inmediato.
Subí las escaleras, en eso vino Adam a mi mente <<Donde estará?>> toqué la
puerta de su habitación pero no respondió nadie, la abrí y en efecto no estaba. Seguí al
final del pasillo directo a la puerta de mi habitación, entré mientras me quitaba mi
chaqueta, la tiré sobre la cama, miré a través de la ventana el sol ya ocultándose, sentí
mi teléfono vibrar, cando vi el mensaje era Simon
La arena ya toca mis pies ;-)
Sonreí, me puse mi chaqueta de nuevo y salí trotando de la casa, al llegar a la
entrada de la playa, me di cuenta que estaba del lado oeste, lo vi de lejos, la playa
estaba llena de unas cuantas parejas, supongo que Simon buscaba algo de privacidad,
por eso se fue tan lejos. Caminé con algo de dificultad, siempre odie caminar en la
arena por esa razón, Simon tenía una pequeña fogata
-Ya la arena tocó mis pies...._ sonreímos, me senté a su lado
-Gracias por venir..._ dijo algo nervioso, era algo bastante tierno la verdad
-No tienes nada que agradecer_ miramos hacia el agua, ya el sol se había
ocultado, la luna estaba puesta y el cielo completamente despejado_ Oye gracias por
las flores, y no exageraste, es solo que..._ hice silencio
-Qué?_ pregunto nervioso
-Nada... olvida eso... solamente gracias_ sonreímos
-Sabias que podemos ver planetas desde aquí sin telescopio?_ me dijo mirando
al cielo, lo observé y me acosté mirando el cielo junto con el_ fíjate en esa estrella
rojiza_ dijo señalando con el dedo, ese es Marte
-Cada vez que veo el cielo tan detenidamente siento que me mareo, siento que
me pierdo en la atmosfera y llego al espacio, es una vieja sensación
-A todos nos pasa, eso no te hace especial
-Hey!_ le di un golpe en el brazo mientras sonreía
-Lo que te hace especial es que brillas y eres tan hermosa como la Osa Mayor,
justo allí_ señaló una estrella muy brillante, eso me dio mucha vergüenza. Me puse de
pie repentinamente_ que sucede?
-Creo que ya debo irme..._ me encaminé pero me detuvo tomándome por el
brazo
-Alex espera..._ voltee lentamente, tenía los ojos llenos de lagrimas,
reteniéndolas con todas mis fuerzas desviándole la mirada_ ya sé que está pasando_
dijo sonriendo un poco, tomó mi mejilla para fijar nuestras miradas_ Oye Alex, se que
va a sonar ridículo pero...
-No Simon, por favor no...
-No qué? supongo que ya lo sabes. Hay algo en ti que me da confianza, que me
da la sensación que te conozco de toda la vida, que te conozco como nadie, que
siempre nos hemos tenido, llámame loco, pero así es_ mis lagrimas empezaron a salir_
por qué lloras? solo te estoy tratando de decir que me estoy enamorando de ti, es algo
que no sé cómo explicar, sé que es rápido, pero es así. Solo quiero estar contigo..._ y
sin darme cuenta me besó, pero solo fue un par de segundos y lo alejé de mi
bruscamente
-No! Simon no por favor... otra vez no...._ salí corriendo hacia la casa llorando
Abrí la puerta de la casa y la cerré con desesperación, afortunadamente no
había nadie en ese momento por esa área de la casa; respiré profundamente tratando
de controlar mi llanto y fui a la cocina a tomar algo de sangre, ese estado anímico me
daba ansiedad. Me serví en un vaso de cristal un cuarto de bolsa de sangre ORH- y
me senté. Ya casi al terminar mi trago Adam entró
-Bonitas flores..._ dijo de forma despectiva y sarcástica
-Ahora no Adam por favor
-Alex no quiero seguir peleando. No tengo nada en contra de Simon, solo el
hecho de haberte apartado de mi, pero es quien también te trajo de vuelta...
-Adam no! Mal día, mal momento. Pueden dejar sus malditos sentimientos
fuera de mi alcance?
-Y tu puedes dejar de ser tan agresiva y testaruda?_ me cayó. Metió su mano
derecha en el bolsillo de sus jeans y puso una cajita de terciopelo negra en mi mano,
quedé petrificada, abrí la cajita poco a poco, en su interior había un anillo con un
cristal en el centro muy discreto, al parecer era un diamante. Me llevé la mano libre a
la boca mientras lo veía_ Alex, tengo muchos años amándote incondicionalmente,
han pasado millones de cosas entre los dos, no sé si sea el momento, pero siento que
es lo que quiero hacer, y sé que tú me amas, siempre lo has hecho y confío en ese
sentimiento_ hizo una pausa_ Antes cuando eras humana teníamos como problema tu
mortalidad para poder estar juntos para siempre, ya ese no es un problema_ sonrió con
desgano_ Por favor dime que aceptas casarte conmigo...._ tomé su mano izquierda y
puse la cajita con el anillo en ella
-Tienes razón, no es el mejor momento para esto Adam, lo siento..._ me
levanté y salí de la cocina rápidamente.
Capítulo 15
Casualidades
(Por Simon)
Decidí hacer algo cursi, la verdad no sabía exactamente que me sucedía con esa
mujer, era especial, dulce, sexy y "rara", eso era lo que más resaltaba en ella, ser rara.
Es gracioso porque cada vez que la imagino o la recuerdo, es como una de esas escenas
ridículas de series de tv donde le ponen un súper aura alrededor de la mujer, con su
hermosa sonrisa extra blanca, música celestial, el viento que agita su cabello, siempre
reía al recordar eso, que patético!
Me levanté a las 6am y me fui corriendo a la floristería, que ya a esas horas de
la mañana está llena de personas desesperadas haciendo sus pedidos de última hora
-Hey Channing!
-Hey Simon! necesitas flores, eh?
-Tu qué crees?_ Los padres de Channing eran los dueños de esa floristería, el
estudiaba conmigo en la universidad
-Y quien es la señorita?
-Es nueva por aquí la verdad. Quiero algo sencillo, rosas rojas
-Wow! pasión! que arda el mundo el día de hoy!_ ambos reímos. Le pagué el
arreglo, escribí la tarjeta y me fui a la universidad; mi plan era verla al atardecer en la
playa, confiaba que eso me ayudara.
Llegué a la playa a eso de las 5pm, puse una manta en la arena y armé una
pequeña fogata, la playa se estaba llenando de parejas, supongo que buscando lo
mismo que trataba yo, lograr un momento especial con esa persona. Le envié un
mensaje de texto para hacerle saber que la estaba esperando, estaba nervioso, me
sudaban las manos, pero ella no demoró en aparecer, me sentía ridículo
-Ya la arena tocó mis pies...._ sonreímos, se sentó a mi lado
-Gracias por venir..._ dije algo nervioso
-No tienes nada que agradecer_ miramos hacia el agua _ Oye gracias por las
flores, y no exageraste, es solo que..._ hizo silencio, se veía angustiada
-Qué?
-Nada... olvida eso... solamente gracias_ sonreímos
-Sabias que podemos ver planetas desde aquí sin telescopio?_ dije mirando al
cielo, tratando de buscar algo de qué hablar_ fíjate en esa estrella rojiza_ dije
señalando con el dedo_ ese es Marte
-Cada vez que veo el cielo tan detenidamente siento que me mareo, siento que
me pierdo en la atmosfera y llego al espacio, es una vieja sensación
-A todos nos pasa, eso no te hace especial
-Hey!_ me dio un golpe en el brazo mientras sonreía
-Lo que te hace especial es que brillas y eres tan hermosa como la Osa Mayor,
justo allí_ señalé una estrella muy brillante. Se levantó repentinamente_ que sucede?
-Creo que ya debo irme..._ la detuve tomándola por el brazo
-Alex espera..._ tenía los ojos llenos de lágrimas_ ya sé que está pasando_ dije
sonriendo un poco_ Oye Alex, sé que va a sonar ridículo pero...
-No Simon, por favor no...
-No qué? supongo que ya lo sabes. Hay algo en ti que me da confianza, que me
da la sensación que te conozco de toda la vida, que te conozco como nadie, que
siempre nos hemos tenido, llámame loco, pero así es_ sus lágrimas salieron_ por qué
lloras? solo te estoy tratando de decir que me estoy enamorando de ti, es algo que no
sé cómo explicar, sé que es rápido, pero es así. Solo quiero estar contigo..._ y sin más
ni más la besé, pero solo fue un par de segundos me alejó bruscamente
-No! Simon no por favor... otra vez no...._ salió corriendo llorando
Quedé congelado, solo pensando en <<Lo arruiné todo>> debí haber esperado
más tiempo, es muy pronto para decirle a alguien que te gusta o peor aún, que te estás
enamorado de ella, a fin de cuentas siempre era mejor la opción patética de tenerla
cerca aunque sea como amiga; las incomodidades que vendrán luego de este momento
eran insuperables.
Un par de días después, la situación no varió, no supe nada de Alex, tampoco
quería invadir su deseo de no querer saber de mí. Llegué a casa luego de ir a la
universidad a eso de las 2pm, entré a la casa y Dylan estaba dormido en el sofá con la
televisión encendida, fui hasta la cocina y me serví un vaso con jugo de naranja y
busqué a mi tía, fue entonces cuando escuché un ruido en el sótano, bajé y ella estaba
allí lavando
-Hooola! llegaste temprano...
-Sí, terminamos temprano hoy, el laboratorio de hoy no fue tan complicado
-Y no vas a salir a correr hoy?_ la ayudé con una cesta de sabanas que se veía
pesada
-No ando de humor, prefiero quedarme a hacer unas cosas aquí en casa
-Y no has pensado en la posibilidad de ver a Alex por esos lugares?
-Es posible
-Todo va a salir bien Simon, dale tiempo_ dijo sonriéndome, ella se parecía
mucho a mi padre, era una buena forma de verlo, a veces sentía que era él quien me
hablaba_ hazme un favor, sube esta caja al ático_ me entrego una caja con unos
papeles dentro. Subí al ático, prácticamente nunca había entrado al ático de esa casa,
era como todos los áticos, un completo desastre.
Llevé la caja al final del ático y la puse en el suelo, cuando vi una caja que
decía Verona y Andrew, fruncí el ceño pensando o tratando de adivinar que había
dentro de esa caja, fui hacia ella y la abrí, había una agenda, álbum de fotos y fotos
sueltas, empecé a hojear el álbum de fotos, habían fotos de mis padres en su
matrimonio, ese álbum ya lo había visto, pero era agradable verlo de nuevo, había
otro álbum de Dylan desde que era un bebé y otro aparte mío. Empecé a ver fotos
sueltas y habían fotos de viajes de mis padres y llegué a una foto donde salía mi mamá
una mujer de perfil riéndose conmigo en brazos, me detuve a verla, la mujer era
idéntica a Alex, no se podía distinguir bien por su risa y no estaba de cara completa,
pero ambas salían riendo a carcajadas conmigo en brazos lleno de helado; era
impresionante el parecido de esa mujer con Alex, ahora mi pregunta era <<Quien es
esa mujer?>> tomé la foto y deje la caja en el suelo, bajé en búsqueda de mi tía
-Oye, sabes quién es ella?_ mi tía tomó la foto en sus manos
-No tengo idea. De donde sacaste esa foto?
-Estaba arriba en una caja
-Por qué quieres saber quién es ella?
-Solo me da curiosidad saber quién es, me tiene en sus brazos y al parecer era
amiga de mamá, aunque nunca la vi, la recordaría
Capítulo 16
Posesiones
Siempre me quejé de estar enamorada de Adam, teniendo a Simon sintiendo el
mismo sentimiento hacia mí, era un problema simple, tan simple, tan humano, hasta
que nombras el hecho de que Adam es un vampiro y Simon fue mi ángel guardián,
murió y resucitó, y yo..... yo era.... una vampiro! también..., allí culminaba la
simplicidad. Además de mis problemas de existencia eterna, debía sumar a mi ya
acostumbrado problema de amores con Adam y Simon, que ahora se complicaba por
la propuesta de matrimonio de Adam, y la confesión de amor de Simon hacia mí, si no
los conociera tan bien, juraría que se ponían de acuerdo para sacarme de la cordura, lo
que esperaba era que esos fueran mis únicos problemas, o era preferible lidiar con
cazadores, demonios, ángeles, Dios, el Diablo, y cualquier cantidad de seres
sobrenaturales que se imaginen? pues creo que eso era mejor, por lo menos no tendría
esta maldita sensación, con ganas de llorar todo el tiempo la cual me hacía sentir
patética.
Pasé la noche en vela, sin poder sacarme imágenes de Simon y Adam,
recordando a mi mamá y papá; se hicieron las 4.30am y me levanté al baño, ya estaba
cansada de dar vueltas en la cama, me lavé la cara con agua fría y me miré en el
espejo, el aspecto de desvelo siendo vampiro era 100 mil veces peor, tenía unas ojeras
espantosas, incluso hasta me dio "sed". Bajé al sótano y saqué del refrigerador una
bolsa de sangre y me la tomé, necesitaba hacer algo! me sentía hiperactiva. Saqué las
aspiradora, coleto, escoba y plumero, me puse unos audífonos y me puse a limpiar,
puse música movida, siempre me gusto limpiar escuchando música, solía bailar
mientras lo hacía, era algo bastante embarazoso. Pasaron unos pocos minutos cuando
sentía que la aspiradora se apagó, voltee al sentir alguien detrás de mi
-Tienes idea de qué hora es?_ era Adriana, tenía el cable con el enchufe en la
mano, me sentí regañada_ son las 5 de la mañana, estás bien Alex?_ solté la aspiradora
y respiré profundo
-Discúlpame si te desperté
-Alex que te sucede? te conozco, andas buscando en que distraerte. Que te
atormenta?
-Son tantas cosas, siento que no puedo sobrellevar esto_ sentí que me quebraba
por dentro
-Alex, ya pasaste lo más difícil, que era la adaptación, fueron tiempos difíciles,
pero ya quedó en el pasado
-No es solo eso. Está pasando otra vez....
-Que es eso que está sucediendo de nuevo?
-Adam y Simon..._ Adriana sonrió, se parecía tanto a mamá, fue como verla en
frente de mí
-No seas tonta Alex, sólo estás confundida, no te acorrales; sólo relájate y deja
que el tiempo haga su trabajo, pero procura decidirlo rápido para que no lastimes a
ninguno de los dos y mucho menos a ti.
Pasaron un par de días, y al terminar mi trabajo en el high school a eso de las
5.00pm el clima se había tornado oscuro y era extraño porque estuvo soleado todo el
día, manejé hasta casa, hacia demasiada brisa, las nubes eran grises, tronaba, habían
relámpagos, el mar estaba agitado, la radio anunciaba una tormenta inesperada,
habían suspendido los vuelos y recomendaban no salir a nadie de casa. Llegué a casa,
estacioné la camioneta en frente, al salir del interior del auto apenas pude sostenerme
con semejante viento, el cabello me golpeó la cara desagradablemente, miré hacia casa
de Vanessa y fui hacia ella, entré llamando a Vanessa, tenía un presentimiento
-Raro este clima, no?_ me dijo mientras bajaba las escaleras
-Algo raro está pasando, esto no es normal
-Alex, estamos en Estados Unidos, planeta tierra, estos cambios climáticos ya
son algo cotidiano, solo espero que esto no sea grave
-Es en serio, algo está pasando, tengo una sensación extraña... no sé que es
pero...
-Alex..._ alguien apareció detrás de mí, acompañado del sonido de unas alas,
era una voz grave masculina, voltee rápidamente
-Miguel? que haces aquí? que sucede?_ ya me estaba poniendo más nerviosa
-Necesito de su ayuda_ en eso apareció Gabriel a su lado
-Que anda mal?_ preguntó Vanessa acercándose
-Se trata de una posesión_ dijo Gabriel totalmente inexpresivo
-Posesión? y no es eso algo "normal"?
-Las posesiones no son algo normal Alex, que se han vuelto consecutivas es
otro tema, pero esta vez no se trata de una posesión común, es Lucifer quien está
entrando a la tierra para entrar en su poseída, planea volver a engendrar a su hijo_ abrí
los ojos como platos
-Pero para que nos necesitan? Creo que ustedes tienen más poder sobre esto que
nosotros, que ya ni humanas somos_ dijo Vanessa
-Lucifer no viene solo, necesitamos llegar a él, necesitamos distracción, y
ustedes ya saben cómo es el trabajo con esto de exorcizar y tratar con demonios
-Exorcizar? Nunca hemos exorcizado a nadie_ dijo Vanessa casi histérica
-Tu si ayudaste a Simon en una oportunidad Alex_ me dijo Gabriel
-Yo nunca hice algo así, lo único que hicimos fue impedir que una chica se
convirtiera en vampiro
-El trabajo es muy parecido, técnicamente, y técnicamente ustedes son
demonios y tienen más conexión con ellos que nosotros. Es un rito algo tedioso
-Es prácticamente una niña y necesitamos salvarla
-Y los demás? Necesito llamar a Adam...
-Ya les avisamos, ellos están en camino, ahora debemos apurarnos, vamos a la
667 Seminary Drive_ salimos apurados, ellos desaparecieron, Vanessa y yo nos
montamos en mi camioneta y conduje a alta velocidad, asombrosamente no había
trafico, quizás por todas las advertencias que se dieron por los medios, el clima
continuaba revuelto, los truenos me ponían nerviosa.
Capítulo 17
Conociendo a la victima
No demoramos en llegar, el mar estaba revuelto, la casa a la que íbamos
quedaba justo al frente del océano, color crema con muchos ventanales, me estacioné
justo en frente de aquella casa, tenía varios hombres alrededor
-Son demonios..._ dijo Miguel_ vamos más adelante. Subimos unos metros más
y allí estaban el señor Douglas, la señora Julia, Adam y Sam
-Y como se supone que vamos a llegar? matando demonios y tocando la puerta
de la casa "Buenas tardes, somos vampiros y ellos son mis amigos arcángeles, venimos
a sacarle a Satán?"_ pregunté con algo de obstinación, sin saber cómo manejar la
situación
-Primero tenemos que deshacernos de los demonios que custodian la casa,
tratar luego con la familia del interior de la casa es mucho más sencillo, ustedes saben
de eso y nosotros también_ dijo Gabriel inexpresivamente
-Y cuál es el plan a seguir?_ pregunto Sam
-Gabriel y yo nos ocupamos de los demonios...
-Pero son demasiados para ustedes 2, son como 10, nosotros podemos
ayudarlos_ dijo Adam con su tono serio y autoritario acostumbrado
-No somos vampiros ni ángeles, somos ARCANGELES Adam, no se te vuelva
a ocurrir subestimarnos_ dijo Miguel con un poco de mal humor, esto me hizo un
poco de gracia, solo alcé ambas cejas en señal de simpatía ante aquella respuesta de
Miguel_ Una vez que nos despreocupemos de los demonios, tu Adam, Sam, Vanessa y
Douglas se quedarán fuera para vigilar que no vengan más demonios. Alexandra y
Julia vienen con nosotros dos_ hizo una pausa_ como ya deben saber, él va a hacer
cualquier cosa para confundir, hacerlos sentir culpables mientras estemos en frente de
él, necesito de toda su concentración, el ritual de exorcismo lo voy a hacer yo con la
ayuda de Gabriel y la de ustedes dos, el ritual es largo y tedioso, por tener mi rango en
lo celestial me da algo de ventaja en el ritual, así que no será varias veces sino una sola
vez, tienen que hacer todo lo que yo les diga, no me desobedecerán por nada del
mundo, está claro?_ dijo mirándome a los ojos, asentí con la cabeza como niña
regañada.
Miguel y Gabriel se fueron hacia la casa, todos nosotros nos fuimos detrás de
ellos, no demoraron en percatarse de nuestra presencia los demonios se abalanzaron
encima de nosotros pero Miguel y Gabriel los detuvieron con una destreza increíble,
parecía magia, era magia, como los tomaban y estos caían al suelo sin vida, así fueron
cayendo uno a uno con mucha fluidez
-Ya saben qué hacer..._ dijo Miguel viéndonos a todos, la señora Julia y yo
seguimos caminando detrás de él. Gabriel abrió la puerta de aquella casa con
arbitrariedad, no demoró en salir un hombre blanco de unos 40 años con lentes,
Gabriel lo tomó, puso su mano en la cabeza y este hombre cayó desmayado, salió un
muchacho y una señora asustados del interior de la casa a punto de gritar al ver aquella
escena, Gabriel y Miguel repitieron el mismo procedimiento, cuando un sacerdote se
asomó a las escaleras quedando petrificado ante aquello, Julia y yo tomamos los tres
cuerpos y los colocamos en los sofás para que descansaran
-Phillip, abre tu mente, no entres en pánico_ Dijo Gabriel dirigiéndose al
sacerdote
-Qué son ustedes? y como sabes mi nombre?_ sacó un crucifijo de plata de su
bolsillo y la puso de frente rezando un padre nuestro en latín, Gabriel en un abrir y
cerrar de ojos apareció en frente de él, la cara del sacerdote se puso blanca, podía
escuchar su corazón desde donde estaba. Gabriel tomó la mano que tenía el crucifijo y
los bajó con mucha calma
-No somos demonios, somos amigos_ la expresión de confusión del sacerdote
era indescriptible
-Quiénes son? no lo entiendo...
-Yo soy Gabriel, y él es mi hermano Miguel. Nos conoces muy bien, sólo que
nadie conoce nuestras caras
-Dices que son los arcángeles Gabriel y Miguel? que blasfemia es esta?_ dijo
mirando a Gabriel y a nosotros que estábamos en el piso de abajo, Miguel desapareció
y apareció al lado de Gabriel
-Dónde está tu fe Phillip?_ el hombre llevó ambas manos a su boca abriendo
exageradamente
-Oh por Dios!_ se hincó repentinamente haciendo una especie de reverencia a
los dos arcángeles
-Levántate Phillip, estamos aquí por lo de la posesión, dónde está la joven?
-Discúlpeme señor, pero que puede ser tan emergente para que ustedes en
persona estén aquí
-Satán es quien posee a esta niña y planea engendrar su hijo en ella_ el
sacerdote se persignó_ necesitamos de tu ayuda, ellas están aquí porque nos son de
gran utilidad y han servido al cielo_ Miguel y Gabriel subieron quedando el sacerdote
Phillip que era de unos 30 años de edad viéndonos a nosotras y a ellos, me dispuse a
subir detrás con Julia
-Y ustedes son ángeles?_ preguntó Phillip con algo de miedo y fascinación en su
rostro, broté mi vampirismo, salieron mis colmillos y mis ojos se encendieron
-Somos vampiros...._ le guiñé el ojos escondiendo una vez más mis rasgos
vampíricos, la señora Julia soltó una risita y dejamos atrás al sacerdote con una
confusión enorme, su expresión era mezclada, ahora mucho más con la información
que le había dado. Fuimos al final del pasillo en la última habitación a mano
izquierda, había una chica de unos 18 años, delgada, cabello castaño claro, ojos
oscuros, muy demacrada, atada a una cama, había un crucifijo grande de plata colgado
encima de su cabeza, Gabriel se acercó a ella
-Hola Grace, como te sientes?_ la chica miró a el padre Phillip preguntándose
quiénes éramos nosotros
-Mis señores, como es posible que trabajen con vampiros?_ preguntó el
sacerdote muy nervioso aun
-Es una historia muy larga Phillip, si tenemos tiempo, te la contaremos, hay que
empezar a trabajar_ Miguel le dijo esto sin ni siquiera dirigirle la vista y sin expresión
alguna
-Quienes son ustedes?_ preguntó la chica que Gabriel llamo Grace
-Somos amigos del padre Phillip, vinimos a ayudarte con "esto"_ Gabriel hizo
una pausa y se sentó al lado de la chica, tomándola por la mano izquierda_ Mi nombre
es Gabriel, él es mi hermano Miguel y ellas son nuestras amigas Alexandra y Julia
-Quiero que esto termine, quiero que salga de mí, estoy muy cansada
-Lo sé... cuéntame cómo han pasado las cosas?
-Todo empezó hace 10 días, tuve un sueño extraño, un hombre me dijo que
sería madre, que sería la madre del hijo del diablo, me desperté sintiéndome extraña,
me sentía flotando, entonces empecé a hacer cosas fuera de mi voluntad, jugando con
mi hermano casi lo decapito, me he hecho daño a mí misma y una voz en mi cabeza
dice que está dentro de mí, que es parte de mí, que le pertenezco, que el futuro del
mundo está en mis manos
Capítulo 18
Exorcismo
Toda esta situación me ponía nerviosa, me sentía sumergida dentro de la
película "El Exorcista" lo único que esperaba de todo corazón, era que Grace no botara
vomito verde
-Phillip ve por agua y sal_ dijo Miguel
-Mi señor ya hay agua bendita
-Lo sé, quiero bendecir mi propia agua, si me lo permites_ le dijo Miguel con un
poco de arrogancia. Phillip no demoro en llegar con un vasija de agua y un envase con
sal granulada. Miguel tomó ambos objetos poniendo el agua sobre la cama y
añadiendo un poco de sal diciendo palabras en latín, la chica comenzó a hiperventilar,
podía sentir su corazón latir con intensidad. Apartó la sal y con su dedo pulgar derecho
le hizo la cruz con el agua bendita en la frente, boca y pecho hablando netamente en
latín, la chica comenzó a retorcerse y a gritar, su voz empezó a cambiar a una especie
de voz masculina muy grave
-El crucifijo....?_ preguntó Gabriel al padre Phillip y este se lo cedió. Miguel
empezó haciendo una oración invocando a todos los santos intermediada por Gabriel,
pero en mitad de aquello la chica abrió sus ojos, los tenia negros, venas brotadas en su
rostro y cuello, un aspecto muy parecido al nuestro y comenzó a reírse ruidosamente
-Vaya, vaya...._ dijo la chica con la otra voz_ miren quienes vinieron a verme,
mis hermanos favoritos, muchos siglos sin vernos a la cara Miguel, veo que trajiste
refuerzos_ dijo mirándonos a Julia y a mí, tragué saliva con algo de dificultad, pero
apostaría que mi pose era desafiante y expresión seria
-Lucifer..._ dijo Miguel con seriedad pero algo de sarcasmo en tu tono
-Creo que pierdes tu tiempo querido hermano....
-Miguel continua_ dijo Gabriel advirtiendo a Miguel quien miraba a la chica
con rencor
-Ya inseminé a la chica, el niño va a ser muy guapo..._ dijo la chica con voz
mutante riéndose al final
-Sabes que podemos impedir que nazca, de igual forma tienes que salir de ella
-No puedes evitar el fin de la humanidad, ni tu ni.... Dios_ dijo la chica con
algo de obstinación
-Nunca voy a entender por qué tu odio contra ellos
-Ustedes saben que yo tenía razón, había que crearlos como nosotros, no con
esa estúpida teoría de superación y evolución para así poder llegar a ser como nosotros
-Tu ocasionaste las fallas, aun creemos que no nos equivocamos, muchos nos
tienen fe, son humanos excepcionales, con defectos, pero capaces de darse cuenta de
sus errores, otros son malos y desgraciados gracias a su desvío espiritual y gracias a tu
mano Lucifer
-Esa era la idea, hacerles ver que los humanos son corruptibles, y ha llegado la
hora de que gracias a un hijo mío y de su naturaleza, dejen de existir, que se continúen
matando entre sí_ hizo una pausa mientras me dedicó una mirada_ tus humanos me
han servido de provecho, si no, míralas a ellas, sobre todo a Alexandra_ Gabriel me
miró, vi al padre Phillip y estaba pálido, los latidos de su corazón y los de la chica me
iban a enloquecer_ humana ejemplar hasta que pasó a ser.... como decirlo...? mía
-Porque la obligaste!_ dijo Miguel alterándose y levantándose de la cama
-Yo no la obligué a asesinar personas ni a ser hostil y cruel, esa fue su propia
determinación
-Pero cambié y no precisamente gracias a ti..._ se me escaparon esas palabras.
En un abrir y cerrar de ojos la chica rompió las ataduras, partiendo un florero y
prácticamente voló hacia el padre Phillip cortándole la mano, el padre gritó quedando
sometido ante la chica poseída, me mostró su mano, el olor a sangre fresca y los latidos
del padre Phillip me estaban atormentando. Gabriel quien estaba más cerca saltó sobre
ellos, pero la chica logró zafarse incluso antes de que Gabriel la tomara y vino hacia mí
con las manos llenas de sangre y las paso por mis labios, el sabor a sangre me
derrumbó, Julia me atajó antes que cayera en el suelo, mis instintos vampíricos se
estaban empezando a encender, sentía la garganta arder, los ojos. Miguel la tomó
-Eres mía Alexandra, lo niegues o quieras ser la vampiro buena! y antes que
termines de existir vas a admitirlo
-Déjala en paz! Gabriel saca al padre Phillip y encárgate de él_ Gabriel le
obedeció incluso antes de que Miguel terminara, era algo automático. La chica
luchaba con Miguel por soltarse, Miguel la volteó para verla de frente y le impuso
como pudo el crucifijo que tenía en las manos, la chica gritó como si la torturaran, yo
continuaba arrodillada en el suelo, Julia me ayudó a limpiarme la sangre que había en
mi rostro
-Alex enfócate, respira y enfócate_ me dijo algo nerviosa por el ambiente y mi
situación
-Alexandra tu puedes con esto y más!_ me dijo Miguel. Logró dominar a la
chica y dificultosamente la volvió a amarrar continuando con el rito de exorcismo,
oramos salmos responsoriales, Miguel invocó al espíritu santo, la chica no paraba de
gritar y llorar, ordenándole al diablo salir de su cuerpo que por sacramento de
bautismo era propiedad del cielo y le sopló el rostro, la chica se desmayó y de alguna
manera Miguel la volvió a bautizar con ayuda de Julia mientras yo ayudaba con las
oraciones a distancia. Finalizó imponiéndole la cruz nuevamente y con agua bendita le
hizo de nuevo la señal de la cruz.
La chica quedó desmayada, reposando con tranquilidad, respiraba lentamente,
su corazón había cesado, su aspecto había mejorado. Yo continuaba nerviosa, aturdida
por todo lo que había pasado durante esas 4 horas que estuvimos allí
-Terminamos_ dijo Miguel levantándose de la cama mirándome con una
expresión confusa entre amabilidad y fiereza
Capítulo 19
Mi lucha contra el mundo
Salimos de la habitación dejando a la chica descansar, abajo estaba sentado en
una silla el padre Phillip con una venda cubriéndole la muñeca por el corte que le
había hecho la chica poseída en compañía de Gabriel, la familia de la chica continuaba
desmayada sobre el sofá
-Que vamos a hacer con la chica?_ le pregunto Gabriel a Miguel, yo me fui
hacia la ventana que estaba a un costado, el cielo se había despejado un poco, a lo lejos
logré ver a Sam, estaba levantando un cuerpo, busqué rápidamente a Adam, apenas lo
vi deje escapar una media sonrisa
-Ese niño no puede nacer..._ dijo Miguel con firmeza
-Cómo que "ese niño no puede nacer"?_ pregunté desviando mi atención de
Adam viendo con el ceño fruncido a Miguel
-Creo que sabes mejor que nadie a lo que me refiero Alexandra...
-Van a hacer que aborte?_ comencé a alterarme
-Se hará al amanecer
-Como que se hará al amanecer?! Miguel no se trata de una caja que vas a botar
al día siguiente porque está rota o no sirve, es un ser humano_ hice una pausa y me reí
irónicamente_ esto no tiene sentido, ustedes que tanto defienden la vida humana y
ahora se la van a quitar a un bebe, a algo que ni siquiera es un bebe aun.....
-Eso es algo que no está en discusión y tampoco te estamos pidiendo
permiso..._ me dio la espalda caminando hacia la entrada de la cocina
-Yo no elegí ser vampiro Miguel y tampoco quise que ustedes me dejaran sola,
pero lo cierto es que pasó, aun continuo sin entender por qué me sigues señalando o
culpando por eso, no creas que no me doy cuenta_ se detuvo en seco sin voltearse_ no
soy perfecta, he asesinado personas inocentes y no se siente para nada bien, tu estas
condenando a alguien que no decidió nacer siendo el hijo del Diablo, tu mejor que
nadie sabes que él puede elegir, puede ser influenciado para que sea bueno, sino mira
donde está Christian, no le den la espalda como me la dieron a mí...
-Prepárenla que mañana saldrá a primera hora de la mañana a un hospital..._
desapareció con su sonido habitual de aleteo, era como si hubiera ignorado por
completo todo aquello que le dije, Julia se acercó a mí y me tomó por los hombros
dándome ánimos, yo estaba furiosa y triste a la vez, no podía combatir contra un
arcángel
-Por qué tiene que ir a un hospital? por qué no lo hacen ustedes mismos?_ le
preguntó Julia a Gabriel
-Nosotros no lo creamos, nosotros no podemos matarlo, tiene que hacerse de la
forma convencional y humana_ me liberé de las manos de Julia de mala manera
-Lo siento, yo no voy a ser parte de esto..._ abrí la puerta y salí de la casa
dejándola abierta, le pasé por un lado a Vanessa a paso rápido humano
-Alex! que sucede? espera!_ troté hasta donde estaba mi camioneta, Adam trató
de alcanzarme
-Alex detente! que sucede?_ me sentía mal, desesperada, con ganas de llorar,
abrí rápidamente la puerta de la camioneta, Adam me tomó por el brazo_ Alex que te
sucede?_ le arrebaté mi brazo y me subí cerrando la puerta arrancando a toda
velocidad rechinando los cauchos del asfalto. Conduje con la sensación de que alguien
me seguía o que alguien me veía, me desvié hacia la playa que estaba detrás de mi
casa, China Beach Park, caminé por el boulevard, estaba prácticamente desierto, me
senté en uno de los muros viendo hasta el mar, dejando colgar mis piernas en el aire, la
brisa movía mi cabello, hacia frio, cuando sentí unas manos frías sobre mi piel, voltee,
era Adam_ Siempre buscas agua para pensar... eso aún no ha cambiado..._ se subió a
mi lado izquierdo, tomando mi mano, le sonreí débilmente demostrándole amabilidad
y agradeciéndole que estuviera allí conmigo.
-Tan mala he sido en estos últimos años?_ le pregunté luego de un rato de
silencio
-Aun continuas martirizándote por eso? siempre he pensado y te he dicho que
no importa quién fuiste, sino quien eres..._ lo miré a los ojos y lo abracé fuerte
mientras miré al cielo estrellado dejando salir una lagrima, Adam siempre fue mi
felicidad, desde el primer instante en que lo vi lo supe, esa felicidad se torció desde que
supe que era vampiro, pero entonces también estaba Simon, el que era en mi vida?, él
no era más ni menos que Adam, solo era algo diferente, eso diferente que mi vida
necesitó en su momento y tuvo, mi desahogo, mi vía de escape, pero yo nunca tuve
claro que sentía por él y ahora estaba haciendo justamente lo mismo que hice años
atrás, huir de él, no era lo correcto, pero era una medida preventiva mientras
encontraba que era lo correcto.
Capítulo 20
Tormentos
Esa noche me costó conciliar el sueño, mi mente divagaba en un montón de
cosas, básicamente en los últimos 20 años de mi existencia, ya que a esto no se le podía
llamar vida, yo a estas alturas debería tener 40 y tantos años y no haberme quedado
encerrada en los 24, un sueño para muchas mujeres, pero creo que fuera mejor si no
implicara el pequeño detalle de ser una especie depredadora que se alimenta de sangre.
Acercándose las 2 de la madrugada, mis ojos se cerraron buscando nuevamente
el sueño
<<....estaba en una cabaña, mis padres y hermanos me
acompañaban, yo estaba sentada en el porche de la cabaña que daba hacia
una especie de lago, veía a papá y a Andres haciendo barbacoa en la orilla,
mamá llevaba sonriente una bandeja con limonadas para ellos, Adriana
estaba en un costado con Sam con el capó abierto de su camioneta, voltee
hacia otro extremo y Adam estaba recostado de un pino inmenso lanzando
piedras al agua, volteo a verme y me sonrió, yo le respondí la sonris; todo
aquel escenario era típico de un sueño sin duda, llegó una motocicleta con un
hombre vestido de negro y un casco inmenso que le cubría la cara, apagó el
motor y se quitó el casco sacudiéndose la cabellera espesa, era Simon, Adam
volteó a ver de quien se trataba, y éste fue con paso firme con los puños
cerrados hacia él, por la distancia no alcancé a escuchar lo que Adam le dijo a
Simon, pero se veía que era algo fuerte porque la expresión de Simon se
endureció, me levanté ante sus acciones y grité sus nombres, Adam sacó un
puñal de no sé dónde y corrí hacia ellos, al parecer nadie más se daba cuenta
de lo que sucedía, era como si eso no estuviera pasando, me interpuse entre
Simon y Adam, con gran destreza le arrebaté el puñal a Adam, Simon se vino
encima de Adam sin poner cuidado que yo estaba en medio, me voltee hacia él
y sin querer clavé el puñal en el estómago de Simon, cayendo agonizando al
suelo, solté el puñal para acudir a ayudarlo, me sentía desesperada. Un
hombre apareció con una túnica negra, calvo, excesivamente blanco, ojos
grandes negros y apariencia tenebrosa
-Qué te recuerda esto?_ me dijo el hombre con voz grave
-Quién eres?
-Oh! Alex vamos... tu sabes quién soy..._ era Lucifer sin duda, esto de
alguna forma recreaba la escena donde maté a Simon mientras estaba poseída
en el bosque. Me levanté bruscamente y Simon despareció junto con Adam
mágicamente, le di la espalda a Lucifer viendo a mis padres riendo junto con
Andrés_ aquellos días en los que eras felices.... en los que vivías_ me dijo muy
cerca de mi espalda_ ya no te queda mucha familia, no?_ continué muda
viéndolos, tenía algo de nostalgia_ hasta cuando vas a estar con el plan de
"vampira buena" ? ser mala está en tus venas, yo te condené a ello..._ las
lágrimas empezaron a salir_ creo que voy a necesitar ciertas mañas_ hizo una
pausa_ mami y Andres ya no están, que tal si papá deja de existir también?
ya está algo cansado de la vida, sin sus dos hijos mayores, sin su esposa y su
hija menor viviendo lejos, que tal si se suicida?_ rió un par de segundos con la
típica maldad acostumbrada y voltee hacia él...>>
Abrí los ojos de golpe, estaba sudada y agitada, sonó el teléfono de la casa, ya el
sol se metía por la ventana, hacia algo de calor, me levanté al baño, me lavé la cara
con agua fría, escuché un ruido abajo, agudicé el oído y era Adriana llorando, bajé
inmediatamente, Sam la tenía sentada en la cocina buscándole un vaso con agua y
azúcar, Adam llegó detrás de mi
-Es papá, verdad?_ pregunté prácticamente segura
-Lo encontraron muerto en su cama... se tomó un frasco de pastillas, las que usaba
para la presión arterial al parecer..._ me dijo Sam, Adriana no podía hablar casi, cerré
los ojos inmediatamente, Adam me abrazó enseguida, comencé a llorar mientras él
me sujetaba.
Pasaron un par de días, Adriana se fue a Venezuela al funeral de papá sola ya que
ninguno de nosotros podía acompañarla por razones obvias, justo ese día iniciaba el
campeonato estatal entre high schools de básquet, llegué a la escuela y estaba repleta
de posters en apoyo al equipo, había exceso de rojo, eso me escandalizaba un poco,
pero estar sumergida entre el alboroto me ayudaba un poco a desconectarme de mi
realidad actual.
Dejé mis cosas en mi oficina y me dirigí al gimnasio, la mañana se había dado
libre para que los alumnos pudieran disfrutar del partido inaugural, caminé por el
pasillo junto al Señor Douglas que era el director del high school, habían padres,
profesores y alumnos por todos lados, muchos nos saludaban al pasar, me tocaba
sonreír obligadamente, hasta que vi a un hombre con la misma túnica negra, era el
mismo de mi sueño del día que murió papá, traté de hallarlo de nuevo entre la
multitud pero este desapareció, y al pasar mi mirada revisando si lo encontraba, di con
los tíos de Simon y él, los saludé a lo lejos con un gesto desganado. Entramos al
gimnasio y entre el bullicio el señor Douglas se paró en frente a la gradas con un
micrófono para dar su pequeño discurso de bienvenida y desearle suerte a nuestro
equipo escolar donde Dylan jugaba como atacante.
Acabó el partido, ganando 28-20 a nuestro favor, la multitud enloqueció en
cuanto se dio el pitazo final, varias personas se acercaron a felicitarme, entre ellos el
director del La Fayette de Kentucky, que era el colegio contrincante, me acerqué al
equipo de nuestra escuela a felicitarlos y sacudí el cabello de Dylan, estaba extasiado
de tanta alegría, yo sonreí al verlo tan feliz, me voltee para irme y Simon me
interceptó
-Alex..._ me frené en seco
-Hola Simon...
-Podemos hablar un momento por favor?_ asentí con la cabeza_ no sé si sea
apropiado pero quisiera que vinieras a cenar a casa esta noche, queremos hacerle una
comida a Dylan por el logro de hoy, es su primer partido aquí
-No lo creo Simon...
-Venga maestra Torres...!_ interrumpió Dylan, sonreí, los tíos de Dylan y Simon
se acercaron
-Sería un honor para nosotros que cenara con nosotros señorita Torres_ dijo la tía
-Está bien, allí estaré_ sonreí amablemente alejándome, Simon me miraba con
ganas de decirme algo más pero preferí alejarme rápidamente hasta llegar al señor
Douglas.
Capítulo 21
Secretos que algún día salen a la luz
En la tarde se reanudaron las clases, yo tuve algo de trabajo en la oficina, resolví
algunos problemas con dos estudiantes, cosas corrientes del trabajo diario, incluso
tuve que quedarme una hora más trabajando, ya el high school se había quedado
desierto, fui al baño a retocarme el maquillaje, me topé con un bedel que trapeaba el
piso del pasillo; de vuelta a mi oficina vi pasar a alguien
-Alex..._ escuché en un susurro, me detuve en seco en mitad del pasillo, voltee y el
bedel ya no estaba, sentí que volvieron a caminar delante de mí y voltee
inmediatamente
-Quien anda allí?_ pregunté angustiada, adopté pose de ataque poco a poco y mis
ojos ya comenzaban a llamear, voltee a todos lados buscando a ese alguien, cuando
me tomaron del antebrazo derecho, voltee exaltada
-Te asuste?_ era Simon, bajé la cara rápidamente respirando para esconder mis
ojos_ tus ojos... estás bien?_ no subí la mirada, lo que hacía era respirar
profundamente concentrándome, Simon me agitó_ Alex!_ subí el rostro
-Estoy bien..._ le arrebaté mi brazo_ solo estaba un poco mareada, esto es todo,
que haces aquí?
-Solo vine a asegurarme que fueras a cenar a mi casa_ caminé hacia mi oficina
-Estaba de salida para allá, déjame ir por mis cosas_ entré a mi oficina, vi a través
de la ventana un segundo, respiré hondo una vez más, tomé mi chaqueta, bolsa y salí
con Simon al estacionamiento, fuimos a su casa, yo iba detrás de él en mi camioneta,
nos estacionamos en frente de la entrada, me brindó una sonrisa amable para darme
confianza, siempre adoré ese aspecto en él, me abrió la puerta dándome paso; en ese
momento me cuestioné que hacia allí, pero no terminé de pensarlo cuando escuché la
voz de Dylan
-Maestra Torres!_ voltee hacia lo que era la sala de la casa, estaba sentado con su
tío James viendo Van Helsing
-Hola Dylan, buenas noches señor Galveston
-Buenas noches señorita Torres...
-Por favor dígame Alexandra o Alex como todos lo hacen, así me siento más
cómoda
-Como guste...._ me sonrió amablemente. Escuché ruido en la cocina, la tía de
Simon estaba cocinando, Simon me quitó las cosas de encima y las colocó sobre una
mesa de adorno
-La cena está servida!_ gritó de un momento a otro, Simon me guió hacia el
comedor
-Buenas noches señora Morris...
-Oh! buenas noches profesora Torres
-Bah! nada de formalismos, Alex es casi de la familia, así lo decreto, ella es
nuestra invitada, en este instante no es la sub directora del colegio de Dylan_
nuevamente Simon volvía a hacer de las suyas, sonreí agradeciéndole ese gesto.
En cuanto vi la mesa repleta de comida fue cuando entré en pánico, subí la mirada
y la tía de Simon había desaparecido, el señor James me invitó a sentarme, cuando
entró la señora Annie con una pequeña bandeja de carne
-Simon me dijo que le gusta comer carne poco cocida_ inmediatamente sonreí en
señal de alivio, mi garganta y mis ojos empezaban a llamear, pero gracias al cielo ya al
pasar de los años era capaz de controlar mis impulsos básicos. El primer trozo de
carne que tomé, le corría un hilo de sangre bastante tentador
-Es bastante atípico que una mujer coma carne en este punto_ dijo James
aperturando una conversación que para mi gusto era inapropiada
-La verdad no le tengo respuesta a eso, es una simple tendencia desde muy niña
-Apuesto que la maestra es tan feroz como una leona o como los vampiros_
Simon le dio un leve golpe por la nuca_ Hey!_ rieron, me hizo mucha gracia aquella
escena
-Alex es mejor que todo eso, estoy seguro, tío, Alex es algo extraña en eso te
apoyo_ me miró sonriendo de forma traviesa. Cenamos entre bromas, anécdotas falsas
y verdaderas de mi existencia y vida anterior, fue bastante entretenido, me hizo
despegar del hecho que mi padre había fallecido hacía pocos días atrás_ Con su
permiso, les robo a la invitada de esta noche_ Dijo Simon tomándome de la mano
izquierda, levantándome y llevándome trotando hasta las escaleras
-A donde me llevas?_ pregunté un tanto desconcertada
-Una pequeña sorpresa_ me haló todo el camino y llegamos a lo que parecía la
azotea de su casa_ Ya casi es hora..._ había un gran telescopio en el centro, se acercó a
él y miró hacia el cielo_ mira...!_ dijo con un brillo muy particular en los ojos, aun no
entendía de que se trataba, miré a través del telescopio y vi lo que parecía una lluvia de
estrellas
-Wow! es precioso...
-Es una lluvia de meteoritos_ me tomó de los hombros_ mira_ me sacó del
telescopio y me señaló el cielo totalmente despejado lleno de estrellas, pasaron ese
instante lo que parecían 3 estrellas fugaces, sonreí ante aquel fenómeno, duramos
varios segundos observando el cielo_ éstas se llaman Líridas, anualmente tenemos
varias lluvias de meteoritos, yo trato de verlas todas, es un espectáculo único_ no dije
absolutamente nada. Pasaron unos segundos más cuando me di cuenta que Simon me
observaba, voltee hacia él y lo tenía muy cerca
-Ehm... creo que ya es tarde, debo irme..._ di un paso y Simon me detuvo
-Alex, espera. Qué ocurre? por qué me huyes?_ me quedé en silencio un momento
-Es tarde Simon..._ lo dije con tal seriedad que casi me lo creo, estaba nerviosa,
caminé un par de pasos
-Dime que no sientes nada cuando me tienes cerca_ me tomó por la cintura
mientras yo le daba la espalda, los ojos comenzaron a llenarse de lágrimas esperando
por salir. Me volteó hacia el de forma un poco violenta, dejando nuestros pechos y
caras encontradas, estaba demasiado cerca, miles de cosas pasaban por mi mente en
ese instante al ver sus ojos azules, me estaba desenfocando, sentía los latidos
apresurados de su corazón en mi cabeza, era como escuchar un martillo eléctrico en
una construcción
-Simon, por favor..._ tomó mi mano derecha y la puso sobre el lado izquierdo de
su pecho
-Esto es lo que pasa cuando te tengo cerca_ no era para nada necesario que
pusiera mi mano sobre su pecho para saber a qué velocidad latía su corazón, me
estaba enloqueciendo el sonido de sus latidos de hecho_ quiero saber que sientes tu
Alex_ puso su mano derecha en mi lado izquierdo de mi pecho, arrugó el ceño en
señal de que no entendía por qué no sentía mi corazón, quité mi mano de su pecho y
me eché a correr hacia mi camioneta, la encendí y me marché lo más rápido que pude.
Capítulo 22
Las cosas que no tenían sentido, ahora
encajan, pero siguen sin tener sentido
(Por Simon)
-Esto es lo que pasa cuando te tengo cerca_ puse su mano en mi pecho para que
sintiera los latidos de mi corazón_ quiero saber que sientes tu Alex_ puse mi mano
sobre el lado izquierdo de su corazón, esperando desesperadamente que ella tuviera su
corazón eufórico al igual que el mío, pero para mi sorpresa no sentí ningún latido, de
buenas a primeras salió corriendo, fui detrás de ella pero iba muy rápido, se montó en
su camioneta y se marchó, yo quedé a mitad de calle mirando mientras se alejaba
-Que sucedió?_ salió mi tío preocupado
-No lo sé, estábamos en la azotea y sin dar razones salió corriendo_ puso su mano
sobre mi hombro dándome ánimos
-Así son las mujeres Simon... dale tiempo
-Si tan sólo supiera el por qué
-Te gusta mucho, cierto?
-Más de lo que yo mismo soy capaz de creer. Siento que la conozco desde siempre
-Vamos adentro, no hacemos nada aquí viendo hacia la nada esperando que
vuelva, mañana será un nuevo día y quizás te enteres del por qué huyó así_ entramos
a casa y subí directo a mi habitación, me paré en frente de la ventana, estúpidamente
teniendo la esperanza que Alex regresara, pero eso no pasó en absoluto.
Sin duda Alex era extraña, esa era la posible razón por la cual me sentía tan
atraído hacia ella, pero por qué siempre huía? era como si me tuviera miedo, será que
en realidad si sostenía una relación con el tal Adam y nunca ha sido capaz de
confirmármelo? todas esas dudas me estaban enloqueciendo, pero no planeaba dejar
pasar más tiempo, tenía que averiguar qué era lo que estaba sucediendo con Alex.
Al día siguiente me fui a la universidad temprano, estuve en física y ciencias de la
tierra totalmente desenfocado, no dejaba de pensar lo que había pasado con Alex,
entrené un poco y aun así no podía sacármela de la cabeza. A eso de las 6.30pm me
decidí irla a buscar a su casa, conduje con la música a gran volumen, me detuve en
frente de su casa y me quedé allí unos segundos, apagué el motor antes de llamar la
atención, me bajé del Jeep y toqué el timbre algo indeciso, abrió Adam
-Está Alex?
-No ha vuelto..._ me dijo totalmente serio, siempre tenía esa pose de gruñón
-Me permites esperarla?_ entré arbitrariamente quitándolo del medio
-Tendrás que venir en otro momento Simon
-Estoy seguro que ella está aquí_ me paré en las escaleras_ Alex por favor,
tenemos que hablar!
-Alex no está Simon..._ apareció en la parte superior de las escaleras la tía de Alex
-Oh! discúlpeme señora Torres, es solo que necesito hablar con ella, es
importante_ bajó las escaleras y se acercó a mí, era tan parecida a Alex, más bien
parecía su madre
-Yo le daré tu mensaje, pero no tenemos idea de a qué hora regresará, creo inútil
que la esperes, de Alexandra se puede esperar cualquier cosa
-Yo te lo dije... por qué simplemente no me creíste? eso te hubiera ahorrado esto
con la tía Adriana_ dijo el tal Adam como con una especie de fascinación en el rostro,
lo vi con ganas de desvanecerlo con mi mirada tan solo
-Una vez más disculpe los inconvenientes que le causé, por favor dígale a Alex
que necesito hablar con ella. Buenas noches..._ salí por la puerta que aún seguía
abierta y conduje a casa, abrí la puerta y había un chico alto fornido cabello azabache
de tez muy blanca parado en la sala
-Hasta que por fin llegas!_ dijo mi tía saliendo de la cocina_ este muchacho te ha
estado esperando. Vamos al cine, te esperamos?_ vi al chico con cierta curiosidad, mi
tío James bajó con Dylan
-No tía, vayan sin mi
-Está bien, quedas en tu casa..._ le dijo al chico que continuaba parado
observándonos, le brindó una sonrisa amable a mi tía, ella me dio un beso en la
mejilla y salieron de la casa
-Y tú quién eres?_ pregunté quitándome la chaqueta
-Mi nombre es Zachariah, pero puedes llamarme Zac
-El mío es Simon, pero supongo que eso la lo sabías, para que me buscas?
-Necesito que hablemos de Alex_ sentí un hueco en el estomago
-Qué tienes que ver con Alex? eres su novio, ex novio o algo que se le parezca?
porque si es así...
-Tranquilo... no tengo nada que ver con ella, aunque ella destruyó mi vida, de eso
vengo a hablarte_ fruncí el ceño_ te he estudiado por varios años y sé que estás
buscando a quien asesinó a tus padres
-Un momento, que tiene que ver Alex con todo esto?
-Aunque no lo creas, mucho...
-Alex ni siquiera vivía aquí cuando todo sucedió
-Nunca te has preguntado de donde Alex saca tanta fuerza física, por qué es tan
fría, por qué solo come carne casi cruda y que su corazón no late?_ recordé como
movió mi Jeep la vez que nos conocimos, como sus ojos se tornaron oscuros cuando
estábamos en Hard Rock Cafe y anoche cuando no sentí latir su corazón
-Quién eres? que logras con todo esto?
-La verdad nada, sólo un poco de justicia, me imagino que has sufrido por la
pérdida de tus padres al igual que tu hermano, que repentinamente cambió, no te
parece extraño eso
-Alex tuvo una charla con Dylan, por eso...._ me detuve en seco, era cierto, Dylan
llegó cambiado ese día del High School, ya no era el Dylan obstinado y sufrido por la
muerte de nuestros padres, había vuelto a ser el de siempre, un cambio bastante
radical en apenas un día, muy bueno para ser cierto_ Fuera de mi casa!_ ese chico no
me daba buena espina, su mirada era fría, algo de él me dio escalofrío, algo me decía
que su verdadera razón de estar allí no era "hacer justicia"
-Ok, ok está bien, yo me voy, pero piensa en lo que te dije, tu vida está llena de
cosas extrañas y te puedo decir que Alex y tú se conocen desde hace muchos años
atrás, pero muchos, estoy seguro de que si investigas, llegarás a la verdad
-Fuera!
-Sé que me necesitarás, voy a estar esperando, pero no confíes en ella_ salió de mi
casa, yo estaba híper ventilando, de qué se trataba todo esto? quién era ese Zac? de
dónde había salido? y cuáles eran sus intenciones en contar o inventar esas cosas? por
qué Alex tendría algo que ver con la muerte de mis padres?
Subí a mi habitación y me senté en la orilla de la cama, cuando vi un montón de
fotos alborotadas debajo de un pack de juegos de Play Station 3, las saqué y allí estaba
la foto que encontré hacía días atrás en una caja de mis padres en el depósito, la
primera era la foto donde salía la mujer muy parecida a Alex cargándome de bebé
junto a mamá <<....y si es ella? Nah! es ilógico... Vamos Simon! es imposible...>>.
Pasaron poco menos de tres horas cuando llegaron mis tíos y Dylan a casa, él tocó
la puerta de mi cuarto y le dejé entrar
-Todavía sigues despierto?_ vió encima de mi cama un cuaderno viejo que tenía a
mi lado donde había escrito: Piel fría, sin latidos del corazón, come carne cruda, foto
de bebé_ qué es esto? ahora resulta que te gustan los vampiros?
-Vampiros?_ fruncí el ceño, escuchar aquello me causó ruido
-Si vampiros, estas son características de vampiro, según veo, su temperatura es
baja, su corazón no late porque están muertos, lo que no coincide esto de la carne,
ellos solo beben sangre, aunque si la carne es cruda puede tener algo de sentido_ hizo
una pausa_ de donde sacaste esto? por qué lo copiaste?
-Dylan, los vampiros no envejecen verdad?_ pregunté mostrando interés
-No, quedan atrapados en la edad donde fueron transformados. No entiendo por
qué tu interés
-Déjame sólo Dylan por favor, tengo que dormir, mañana tengo un examen
temprano
-Simon pero...
-Dylan fuera...._ dije severamente, creo que de forma muy gruñona la verdad
Capítulo 23
No me lo creo
(Por Simon)
No pude dormir en toda la maldita noche, de dónde sacaba la estúpida idea ahora
que Alex era un vampiro? me estaba dejando influenciar demasiado por Dylan, me fui
temprano a la universidad, presenté el examen de laboratorio, teniendo la certeza que
no iba a salir muy bien, estaba totalmente desenfocado.
Antes de irme a entrenar pasé por mi casillero para dejar unos libros, un
compañero de equipo me detuvo
-Hey Cole!
-Hola Simon, vas de camino al gimnasio?
-Sí, sólo voy a dejar estos libros, no tengo estas clases hasta la semana que viene_
abrí mi casillero y puse los libros a un lado cuando vi un libro purpura de terciopelo
con letras doradas que decía "Recuerdos". Lo vi extrañado
-No sé si lo sabías, pero al parecer el señor Samuels se va a Washington..._ apenas
pude poner atención. Abrí el libro purpura y había una foto tamaño carta de Alex con
los que parecían sus padres, un chico ojos acaramelados muy parecido al que parecía
su padre y una chica más baja que ella, parecía su familia, era una fotografía algo
vieja, llevaba una etiqueta abajo que decía "Cumpleaños de papá"
-Discúlpame Cole, pero tengo algo que hacer antes, no sé si pueda ir al
entrenamiento
-Pero si ya estamos al final de la temporada....!_ cerré mi casillero y caminé rápido
hacia el estacionamiento, abrí la puerta de mi Jeep y puse el álbum sobre el asiento, lo
abrí nuevamente, en la segunda página había fotos de Alex con otras personas, hasta
que llegué a la cuarta página, éramos los dos, eran cuatro páginas enteras de nosotros
dos, pero eran fotos que jamás me había tomado, habían fotos en las cataratas de
Sioux Falls, en playas, en restaurantes, corazones recortados, estrellas <<....Dios mío
que es esto....?>> contemplé las fotos durante varios segundos, de que trataba esto?
como llegaron estas fotos a mi casillero? pero supongo que eso era lo más
insignificante, le ganaba el hecho de que Alex tuviera fotos conmigo, fotos que yo no
recordaba, pasé la página y habían otro par de páginas dedicadas a ella con Adam, eso
reforzaba mi teoría sobre ellos dos, incluso hay una foto de ellos besándose en una
especie de lago.
Me subí a mi Jeep y tiré el álbum a un lado, todo me daba vueltas, sentía entre ira,
confusión, desesperación, que era todo esto? encendí el motor y me eché a andar hasta
que alguien se me atravesó en medio, menos mal tuve tiempo de frenar
-Te volviste loco!? creo que te dejé claro que no quería volverte a ver...tú fuiste
quien puso ese álbum en mi casillero?_ me abalancé sobre el tal Zac, lo tomé de la
chaqueta o lo puse contra mi camioneta_ quién demonios eres? y por qué me haces
esto?
-Creo que ya sabes quién es Alex, pero aun así te falta información_ lo solté ya
mucha gente se había vuelto a nuestro alrededor
-Necesito encontrar a Alex, ella debe tener una explicación a esta tontería
-No! eres imbécil? tú crees que ella va a aceptar todo esto? por supuesto que no!_
miró alrededor_ mejor vamos a otro lado_ nos montamos en mi Jeep y salimos del
campus universitario, después de manejar varios kilómetros en silencio, me estacioné
-Dame tu teoría...
-Creo que para ti es un poco sospechosa la muerte de tus padres
-Y tu como sabes eso?
-Simplemente lo sé. Alex te conoce a ti y a tus padres antes de tu nacimiento, ella
siempre estuvo a su asecho, incluso tus padres pensaron en nombrarla tu madrina_
escuchaba aquello sin darle crédito_ ella planeó la muerte de tus padres, como sabes
ellos se alimentan de sangre humana
-Para, para! estamos hablando de que los vampiros existen y que Alex es una de
ellos? que locura es esta? además Alex no vivía ni cerca cuando todo esto sucedió
-Y no has pensado que te mintió?
-Y qué me dices de estas fotos de nosotros que no recuerdo?_ dije tomando el
álbum
-Posiblemente borró tu memoria como lo hizo conmigo, pero es algo que no
entiendo aun, hay algo más allá con esa situación entre ustedes
-Cómo es eso que borró mi memoria como la tuya? qué sentido tiene eso?
-A simple vista, ninguno_ hizo una pausa tratando de pensar_ hay que ser
inteligentes, ellos son muy astutos, tenemos que armarnos, ella no está sola, su
supuesta tía es su hermana menor, ella murió hace más de 20 años, sus supuestos
primos y vecinos también son vampiros_ era demasiada información para un
momento, en realidad era una información que no era apta para nadie
-A que te refieres con armarnos? a fin de cuentas quien eres tú?
-Soy cazador de estas cosas, pertenezco a la Orden de Leopoldo
-Y quién carajos es ese Leopoldo?
-En resumidas cuentas fue un hombre que combatió vampiros y seres
sobrenaturales hace siglos, se fundó una Orden en su nombre en secreto bajo la
protección del Vaticano
-El Vaticano sabe de esto?_ pregunté estupefacto
-Es un caso cerrado para ellos, hace años que se dejó de creer en esto y seguimos
solos en la Orden
-Dios mío! Vampiros, cazadores de vampiros... me siento sumergido dentro de
una estúpida película de esas que ve mi hermano. Y que se supone que debamos
hacer?
-Yo tengo lo esencial, pero hay que ir por más: estacas de madera, balas de
madera, agua bendita, crucifijos, ajo, sangre de hombres muertos
-Sangre de hombres muertos?
-Es un mito muy poco conocido, pero los debilita hasta morir
-Hey! un momento, estamos hablando de matar a Alex, a mi Alex...
-Es un vampiro Simon! mató a tus padres, o eso no significa nada para ti? ver a tu
hermano derrumbarse por eso, ayudar a criarlo, levantarte solo de ello, tus padres
confiaron en ella como tú ahora lo haces y mira como terminaron, no puedes ser débil!
-Y que planeas? aparecerte en su casa y matarlos a todos?
-Su casa tiene protección y la hermana también, ella aun es humana, no podemos
atacarlos en casa, pero podremos llegar a todos gracias a Alexandra, para eso te
necesito a ti
-No! yo no quiero participar en eso
-Se lo debes a tus padres y lo sabes!_ miré a través del parabrisas, estaba lleno de
mucha rabia e ira_ sólo actúa, haz que no sabes nada, haz que confíe en ti, es el de
siempre, yo te diré cuando es el momento_ asentí con la cabeza
Capítulo 24
Despedidas no planeadas
Conduje a casa estresada, nerviosa, claro! como no estar nerviosa si Simon estaba
enamorado de mí una vez más, peor aún, se había dado cuenta que mi corazón no
latía. Estacione de mala manera mi camioneta en frente de mi casa, abrí la puerta
principal y fui directo a un pequeño bar que teníamos en la sala, Vanessa entró detrás
de mí, busqué una botella de Bourbon, un vaso y me serví un trago
-Alex, que te sucede?_ tomé el primer trago sin decir palabra alguna_ Alex....?
-No sé qué hacer Vanessa..._ frunció el ceño
-A que te refieres exactamente con eso de que no sabes qué hacer?_ se acercó_
sírveme uno de esos
-Se está repitiendo lo mismo de hace 20 años, Simon y Adam
-Qué pasó con ellos?_ tomó de su trago
-Simon se enamoró de mí y una vez más yo no sé qué hacer con eso
-Pero eso no era lo que querías en el fondo? Por Dios Alex! tienes una
oportunidad que nadie tiene en esta vida. Antes de que Simon muriera te estabas
enamorando de él; murió y la vida los puso se frente de nuevo y con todo eso se
enamoró de ti nuevamente
-A ti se te olvida Adam?
-Adam? pensé que ya no sentías nada por el
-Nunca he dejado de amarlo, siempre ha sido él Vanessa_ bajé la mirada con
algunas lágrimas en los ojos, me tomé lo que quedaba en el vaso de cristal, Vanessa
había quedado con la boca entre abierta, parece que logré sorprenderla
-Oh Alex! pero por qué no estás con Adam entonces? él te ama, lo ha hecho desde
siempre, tienen toda la eternidad para estar juntos
-No es fácil Vanessa, a veces siento que no vale la pena recuperar algo que se
perdió hace demasiados años
-Bueno.... después de todo la eternidad no es tan larga como parece, nunca
sabemos cuándo puede ser nuestro último día, no dejes que se les escape la
oportunidad Alex, sea con Adam o con Simon_ me serví más Bourbon y bebí
enseguida, comencé a llorar, Vanessa me abrazó fuerte
-Gracias por estar aquí siempre, sabes que eres mi segunda hermana, siempre lo
he considerado así
-Lo sé..._ me sonrió amablemente y me volvió a abrazar
Era impresionante la cantidad de tiempo que había pasado y todo lo que había
pasado en esa cantidad de tiempo, nuevamente estaba en la encrucijada que no sabía
qué hacer, en la que no era capaz de decidir que era mejor para mí y para todos, lo que
me daba terror era que en ese proceso de tratar decidirme volviera a perder a Simon de
forma definitiva o incluso a Adam, que a pesar de todo siempre ha estado a mi lado, y
para colmo de males, Adam me había propuesto matrimonios días atrás.
Al día siguiente, al terminar el día de trabajo me fui a casa temprano, no me sentía
del todo bien, llegué a casa a eso de las 5.30pm, fui directo al refrigerador del sótano y
saqué una bolsa de sangre ORH - , mi favorita, subí a la cocina, saqué un vaso de
cristal y me serví la sangre, bebí de ella hasta que apareció Adriana detrás de mi
-Merendando?
-Sólo tenía algo de ansiedad..._ estaba vestida formal, como lucía la mayoría del
tiempo por su trabajo de fiscal en el ayuntamiento de la ciudad
-Que haces en casa tan temprano?
-No tenía ánimos de quedarme hasta tarde, lo que sea lo puedo resolver mañana
-Te pasa algo Alex?
-No! nada... solo que estoy cansada..._ le sonreí con desgano, tomé el vaso y salí
de la cocina hacia mi habitación. Tomé una ducha tibia y me puse ropa cómoda,
terminé de beber mi vaso de sangre mientras veía MTV. Me puse a revisar unos
documentos del high school en la cama con la laptop encendida en frente de mí, abrí
Word para redactar un informe y fui a la carpeta de Mis Imágenes cuando vi una
imagen de Adam y yo en el lago del bosque de Sioux Falls, si no recordaba mal, era
nuestra primera fotografía juntos, me quedé mirándola por unos segundos, solté los
papeles que tenía encima y fui directo a la habitación de Adam que quedaba al otro
lado del pasillo, me detuve en la puerta cerrada pensado si la tocaba o no
-Alex sé que estás en la puerta... pasa_ odiaba eso de ser vampiro, abrí la puerta
con timidez, estaba recostado sin camisa con la televisión encendida. Al verme sonrió
un poco, yo le respondí la sonrisa, entré y vi sobre su escritorio una foto de nosotros
dos en un porta retratos de madera, cerré la puerta y tomé el porta retrato_ Que te
pasa?
-Mucho y nada a la vez
-No te entiendo...
-Ha pasado tanto desde esto..._ le mostré la foto
-Eran buenos tiempos..._ sonrió de nuevo, adoraba su sonrisa, muy pocas veces la
mostraba, sus ojos brillaban; me senté en la parte de abajo de la inmensa cama
mirándolo
-Cómo puede ser posible que aún me ames?
-Es una prueba de fé, tú me devolviste la vida Alex, a pesar de estar muerto. Pero
por qué me preguntas eso?
-Es que han pasado tantos años y aun sigues aquí a pesar de rechazarte
-Porque sé que allí dentro todavía estoy yo_ señaló mi pecho_ lo único es que no
sé cómo hacer para que vuelvas a mi_ bajé la mirada en señal de vergüenza, tenía
muchas ganas de llorar_ Hey! no llores por favor, aquí siempre voy a estar para ti, así
no me quieras cerca_ lo abracé fuerte, quería besarlo hasta quedar sin conciencia.
Sonó el timbre, agudicé mi olfato
-Es Simon... por favor baja y dile que no estoy, bajo ningún motivo le digas que
estoy, dile que salí y no sabes a qué hora vuelvo por favor
-Pero que sucedió con él?
-Sólo hazlo por favor..._ asintió con la cabeza, acarició mi mejilla derecha, se
puso rápidamente una franela y salió de la habitación, yo fui detrás de Adam pero me
quedé parada arriba cerca de las escaleras
-Está Alex?_ preguntó Simon
-No ha vuelto..._ le respondió Adam
-Me permites esperarla
-Tendrás que venir en otro momento Simon
-Estoy seguro que ella está aquí_ sentí su voz más cerca_ Alex por favor, tenemos
que hablar!_ al oír aquello me dio un ataque de nervios, Adriana salió de su habitación
y me vio preguntándome que estaba sucediendo, yo abrí los ojos exageradamente
señalando hacia abajo <<Ayúdame!>> modulé sin provocar ningún sonido, y corrió a
las escaleras
-Alex no está Simon..._ apareció en la parte superior de las escaleras
-Oh! discúlpeme señora Torres, es solo que necesito hablar con ella, es
importante_ bajó las escaleras
-Yo le daré tu mensaje, pero no tenemos idea de a qué hora regresará, creo inútil
que la esperes, de Alexandra se puede esperar cualquier cosa_ puse los ojos en blanco
-Yo te lo dije... por qué simplemente no me creíste? eso te hubiera ahorrado esto
con la tía Adriana_ dijo el tal Adam a mi parecer un poco antipático para mi gusto
-Una vez más disculpe los inconvenientes que le causé, por favor dígale a Alex
que necesito hablar con ella. Buenas noches..._ escuché el motor de su Jeep alejarse,
cerraron la puerta.
Pasó una semana, las cosas para mi continuaban tensas nada más de pensar que
Simon podría aparecer por cualquier lado, pero para mi sorpresa no había dado
señales. A eso de las 3.00pm vi el reloj de la pared de mi oficina, tomé mis cosas y fui
directo a su universidad, pensé que a esa hora estaría entrenando, fui directo a las
canchas de futbol americano de la Universidad de California, quedaban pocos
estudiantes en el campus, hasta que di con él, estaba en efecto entrenando con el
equipo, aguardé allí parada por unos 15 minutos y me fui hacia el estacionamiento y
me recosté de su Jeep, en menos de media hora llegó
-Alex!_ se puso blanco como un papel, su corazón latía fuerte y rápido, debían ser
los nervios por verme allí
-Hola Simon....
-Que... que haces aquí?
-Vine buscándote, mi tía Adriana y Adam me dijeron que fuiste hace unos días
buscándome, es sólo que no he tenido...
-Alex... está bien
-Sé que tenemos cosas de que hablar
-Creo que esta vez te toca hablar a ti_ sacó las llaves de su Jeep y se le cayeron al
suelo, me agaché inmediatamente para recogérselas pero el hizo lo mismo y nuestras
manos hicieron contacto, su corazón se aceleró de nuevo
-Por qué estás tan nervioso?
-Nervioso yo? no para nada..._ lo vi con duda
-Simon... quiero disculparme por mis arranques, es que es un tanto extraño
manejar esta situación, yo..._ se colocó en frente de mi tomando mis manos
-Alex... ya tu sabes lo que siento por ti y voy a hacer lo que esté en mis manos
para ganarme tu corazón_ sonrió dejando brillar su mirada azul, estar con él me daba
paz, me inspiraba tranquilidad, pero me angustiaba de cierta forma que pudiera pasar
después.
Capítulo 25
El último baile
Pasaron los días hasta que entramos en Junio, ya el año escolar estaba
terminando, ya se estaba planeando el baile de fin de curso, al fin tendría vacaciones,
pero a decir no sabía si eso era conveniente, estaba planeando con los Adams y "mi
familia" irnos de vacaciones a Hawaii en agosto, el problema era Adriana que trataría
de coordinar sus vacaciones con el ministerio de justicia, siempre estaba copada de
trabajo, Sam y Adam no tenían problema porque tenían su propia empresa, el señor
Douglas era mi jefe y tomaba vacaciones al mismo tiempo que yo y Vanessa salía de
vacaciones de la universidad también. Las cosas con Simon habían mejorado, lo veía
una o dos veces por semana, la tensión era menor, pero continuaba viéndolo nervioso
cuando se me acercaba.
La mañana del domingo antes de irme a trotar por el vecindario para liberar
tensión me di una ducha fría para terminar de despertarme, me puse una licra negra
larga con un suéter del mismo color con capucha y unos tenis blancos <<toc, toc...>>
-Pase..._ dije mientras cerraba la puerta de mi closet, era Sam
-Hola Alex, buenos días
-Hey Sammy!
-Oye, será que tú tienes copia de nuestros pasaportes?
-Creo que sí, los debo tener aquí guardados_ fui hacia mi peinadora a una de las
gavetas de la parte de abajo, apenas la abrí fruncí el ceño, busqué con algo de angustia
-Alex que sucede? te cambió la expresión de la cara..._ Sam se acercó a mi
-Mi álbum...
-De pronto lo moviste de lugar o tu hermana lo tomó
-No... quiero decir recordaría si lo tomé, y para que Adriana querría mi álbum de
fotos?_ me quedé pensando, le busqué las copias que necesitaba a Sam
-Tranquila, piensa donde pudiste dejarlo, seguro lo encuentras en un rato
-Si... seguro..._ salió de la habitación y yo me quedé pensando sentada en el suelo,
donde podrá estar? tenia meses sin sacarlo de ese cajón, además que era lo
suficientemente llamativo como para no saber dónde está.
Salí a trotar aun con la duda y la inquietud de saber dónde estaba mi álbum de
fotos, ya el sol empezaba a calentar, se estaba acercando el verano, mucha gente salía
a pasear sus perros otros a hacer lo mismo que yo <<Donde esta ese álbum?>> yo era
maniática con ese tipo de situaciones, yo sabía dónde dejaba mis cosas, pero tal vez
Sam tenía razón y solo era una tontería, me detuve un momento para tomar un sorbo
de agua, cuando sentí que una serpiente se colaba entre mis pies, empecé a ver a todos
lados, yo sabía lo que eso significaba, una serpiente no salía de la nada y menos en un
vecindario como ese, había un vampiro cerca, pero había mucha gente a mi alrededor,
bajé la mirada hacia la serpiente, zafé mi pie de ella y le pisé firmemente la cabeza
hasta matarla y seguí trotando. Llegué a casa sudada, ahora tenía esa sensación de que
un vampiro me vigilaba y a eso le sumaba la rara desaparición de mi álbum de fotos.
Entré a la casa y Adam venia bajando las escaleras
-Como te fue en tu recorrido?
-Ehm... bien...
-Ummm... algo te paso
-Nada, solo es que ando algo cabreada porque no consigo mi álbum de fotos y
tengo la ligera impresión de que un vampiro me estuvo siguiendo hoy
-Nada Alex? eso es mucho, a ver cómo es eso que un vampiro te estuvo
siguiendo?_ fui a la cocina directo a la nevera por un poco de agua fría
-No estoy 100% segura, pero de vuelta me detuve un momento y se me enredó
una serpiente en el pie
-Ummmm... entiendo, eso si algo atípico, pero de quién se tratará? espero que no
sea nadie que venga a causar problemas.
Paso la semana y todo seguía "normal" con la única diferencia que no aparecía mi
álbum, Adam se había hecho cargo de investigar si en realidad había un vampiro
merodeándome. Llegó el viernes y ya todo estaba listo para el baile de fin de año,
habíamos decidido hacerlo de tres colores la decoración: rojo intenso, azul rey y
dorado, todo resplandecía, el comité organizativo había hecho un gran trabajo, habían
globos, telas, pancartas
-Vas a venir esta noche Alexandra?
-Usted sabe que si, y usted debería hacer lo mismo señor Douglas
-Por desgracia tengo que..._reímos
A mitad de tarde me tocó marcharme a casa para bañarme y ponerme mi ropa de
gala, para ese día había comprado un vestido negro con pequeños detalles en dorado y
ligeramente acampanado abajo, de nivel hasta un poco más arriba de las rodillas con
unos botines de tacón delgado y alto. Busqué la rizadora y arreglé mi cabello
dejándolo un poco al descuido, mi pareja de la noche seria el señor Douglas en vista
de que no debía llevar a más nadie. Tomé mi abrigo y bajé, el señor Douglas ya debía
estarme esperando, no podíamos llegar tarde, Adam estaba hablando con él en la sala,
apenas me vio las pupilas se le dilataron
-Estoy lista...
-Wow! mi cita está guapísima_ reímos todos, si hubiera podido ponerme colorada,
hubiera estallado, ya la situación era lo suficientemente extraña, pero yo quería al
señor Douglas como mi padre y él lo sabía a la perfección porque yo sentía que él me
amaba como su hija.
Salimos de casa directo al high school, se distinguía a distancia por los faroles de
la entrada, dejamos el auto en el estacionamiento, ya habían bastantes estudiantes,
cuando entré al gimnasio era una locura total, saludé con la mano a varios profesores
y alumnos, me sentía extraña entre tantos adolescentes que disfrutaban a sus anchas
de su fiesta. Al señor Douglas y a mí nos tocó subir al escenario para desearles buena
suerte a los graduandos y desear excelentes vacaciones de verano. Bajamos y continuó
la fiesta, fui hacia la mesa donde estaba el ponche y bebí un poco cuando alguien me
agarró por la cintura desde mi espalda
-Bailamos...?_ fruncí el ceño, sabía que era Simon
-Simon? que haces aquí?_ casi boto lo que tenía de ponche en la boca
-Vigilando al enano..._ dijo señalando con la quijada a Dylan quién bailaba con
una linda muchachita, me extendió su mano derecha sonriéndome, le devolví la
sonrisa y tomé su mano yendo hacia un extremo de la pista de baile, en eso el DJ
cambió la canción a una balada, Simon subió ambas cejas_ Como si lo hubiera
planeado_ sonreí un poco apenada_ te dije que te ves hermosa?
-Simon......!_ le dije a regaña dientes
-Te sienta bien avergonzarte un poco, relájate..._ me di un golpe leve en el
hombro, lo abracé mientras bailábamos, era agradable estar así con él, me sentía
cómoda y protegida_ oye! ven, te tengo una sorpresa..._ me despegó repentinamente
de sí y me tomó de la mano halándome hacia afuera
-Déjame avisarle a mi tío Dou...
-No! no, no, no es necesario_ estaba lo suficientemente misterioso, sonreía con
picardía, eso me ponía nerviosa pero me hacía gracia su gesto. Salimos del High
School hacia las canchas de futbol, me guió hacia lo que parecía un pequeño picnic en
un extremo del campo gramado
-Qué es esto Simon?_ pregunté un tanto asustada, me aterraba la idea de que esto
tuviera como propósito un final romántico
-No te asustes, sólo es un detalle. Te dije que haría lo posible para entrar a tu
corazón_ me hizo un gesto para que me sentara sobre la tela de cuadros que estaba
tendida en el suelo, me senté algo insegura mirando todo lo que había sobre la tela,
habían frutas y una botella de champagne sumergida en una hielera, él se sentó en
frente de mi_ Quieres algo de fruta? Manzana...?_ tomó una manzana roja y una
navaja, la cortó por la mitad y se cortó el dedo, inhalé el olor de su sangre, era éxtasis
pura para mí, sentí mi garganta arder al igual que mis venas, los ojos comenzaban a
doler <<oh no!>>_ es solo una cortada simple_ me miró extrañado_ Alex te sientes
bien? te cambió la cara
-Ehm si...._ voltee hacia otro lado_ si estoy bien_ comí un pedazo de manzana
para olvidarme de su sangre, continuaba mirándome mientras tenía su dedo en la
boca, era algo normal cuando nos cortábamos
-Te da fobia la sangre?
-Me atrapaste... _ sonreí nerviosamente. Tomó la botella de champagne y la
destapó, siempre me gustó oír el sonido que producía el corcho, me sirvió un poco en
una copa y una para él
-Por ti...
-Por los dos..._ chocamos ambas copas de cristal y bebimos, sentí que me
quemaba por dentro enseguida, que me asfixiaba
-Si...Simon.._ caí tendida en el suelo ya comenzaba a salir humo de mi boca,
Simon me miraba con odio, se vino hacia mí, sacó de su saco una jeringa con un
líquido rojo, lo clavó en mi nuca y perdí la noción de todo cayendo desmayada
Capítulo 26
Agonía
<<...caminé hacia la cafetería por un poco de Coca-Cola, abrí la botella y le metí el
pitillo, bebí un poco, me di media vuelta antes de echarme a caminar de vuelta a mi
carro, ya eran las 12.30 del mediodía, pero mi paso lo interrumpió un muchacho que
estaba parado detrás de mí pagando unas golosinas
-Oh! Disculpa_ ni siquiera levanté la vista para ver quién era
-No te preocupes…Oye! Espera_ me detuve en seco y voltee_ Eres Alexandra, verdad?
-Si no me han cambiado el nombre aun, eso es un si_ me reí tontamente igual que él_
y tú eres?
-Simon Mazzocca, estudiamos juntos, impresionante lo de Geografía no?, pareces un
mapa_ Simon, que nombre tan fuerte, no le encajaba de hecho, se veía tierno a simple
vista, era muy guapo, era un poco más alto que yo, rubio con piel bronceada y ojos azules
muy claros, parecía un Ken. Le sonreí y le estreché la mano
-Mucho gusto Simon, y gracias por lo de “impresionante”, simplemente me gusta
mucho el mundo, por decirlo de cierta forma
-Si se nota, se nota que no eres de por aquí, eres latina?
-Sí, tanto se nota?
-La verdad si_ me miraba de una forma tan dulce, era muy lindo
-Oye Simon, me tengo que ir, mi hermana debe estar esperándome, nos vemos
mañana, no?
-Claro!, hasta mañana entonces…>>
Abrí los ojos poco a poco, todo estaba borroso, al volver mi conciencia
volvieron mis sentidos a la vida, la piel me ardía un infierno, estaba atada del techo
por las manos, todo estaba oscuro, la luz del sol se colaba entre las grietas de la pared,
había alguien parado en una esquina, me quejé un poco tratando de zafarme de las
cuerdas, en eso la silueta que me observaba desde el rincón se movió, llevaba un rifle
en la mano
-Simon eres tú...?_ era su aroma, sin duda, aunque me costaba mucho
distinguirlo, mi vista, mi olfato y muchos de "mis poderes de vampiro" estaban
fallando, aun así el no respondió, miré hacia un lado y había un mueble de madera
que tenía frascos de sangre e inyectadoras, frascos con agua, ajo, al lado guidadas
cadenas, garras de hierro, trampa para animales y un crucifijo inmenso de plata, me
empecé a poner nerviosa, tiré una vez más de las cuerdas con el mismo resultado_
Simon, por favor libérame, me estás lastimando_ salió de la oscuridad hasta que la luz
de una de las grietas le iluminó parte de la cara, llevaba el rifle portado al hombro,
estaba irreconocible, serio, la mirada no era la misma que yo conocía <<...es un
cazador...>> al pensar esto me dio pánico, mis ojos se aguaron y abrí mi boca ante el
asombro
-Me temes?_ se atrevió a hablar
-Por qué haces esto?_ le pregunté con mucho miedo. Me apuntó con el rifle y
me dio un disparo en el lado derecho del pecho, era una bala de madera, el dolor era
espantoso, grité con todas mis fuerzas_ Simon! Simon...._ me volvió a disparar pero
esta vez en un costado del abdomen, volví a gritar del dolor, lloré ante la indescriptible
sensación
-Qué se siente Alex?_ lo miré pidiéndole piedad pero sin responderle, así que
volvió a dispararme
-YAAAAA....!!! Por favor.... basta...._ normalmente las heridas de un vampiro
sanan al instante depende de la gravedad o profundidad, todas las heridas provocadas
dolían con la misma intensidad que hacérselas a un humano, pero las balas de madera
eran en especial dolorosas, quemaban por dentro, además las cuerdas estaban
impregnadas de agua bendita con ajo. Simon bajó el rifle y lo recostó de una silla vieja
de madera que estaba a un lado sin quitarme la vista de encima, fue al mueble de
madera donde estaban todos los instrumentos de tortura, tomó una navaja, abrió el
frasco con agua y sumergió la punta de la navaja en el líquido, lo cerró y vino directo a
mí con la mirada llena de rabia y una "casi" sonrisa dibujada en el rostro, se paró en
frente de mi muy cerca, puso su rostro a la par del mío, separados por unos 2
centímetros, retiró parte de mi cabello mojado que estaba en mi cara con delicadeza y
ternura fingida, alzó el puñal cortando sutilmente mi bíceps derecho, grité nuevamente
ante semejante dolor. Se fue de nuevo al mueble de madera y dejó la navaja allí, fue al
rincón oscuro y trajo consigo un libro grande y robusto color púrpura <<mi álbum de
fotografías>>
-Te parece conocido esto?_ me enseñó la portada
-Qué haces con eso...?_ alcancé a pronunciar. Comenzó a hojearlo
-Digamos que lo que está dentro entre estas páginas captó mi interés..._ me
mostró una foto de nosotros en Tampa, cerré los ojos y vinieron a mi mente las
sonrisas de él y las mías durante ese viaje, se me escaparon unas lágrimas
-Simon....
-Cómo conociste a mis padres Alexandra? Todo era parte de un plan? Aunque
sigo sin comprender el por qué de estas fotografías y no creo que me hallas borrado la
memoria para que no recordara esto, o si?_ tragué con dificultad, como le explicaba
todo a Simon?
-Si te contara la verdad, no me la creerías...
-Hace menos de 3 meses creía que los vampiros no existían, cualquier cosa que
me digas ahora no la pondré en duda
-3 meses? como que 3 meses? eres cazador desde hace 3 meses?
-Digamos que sí, me propuse cazarte, y henos aquí...
-Pero como supiste de mí? hay más cazadores aquí en San Francisco, cierto?_
pensé en mi familia <<oh no!>>
-Yo soy quien hace las preguntas aquí...
-Pe... pero..._ tomó el rifle y volvió a apuntarme_ ESTA BIÉN! está bien yo te
respondo, pero no dispares de nuevo por favor_ haló la silla vieja de madera y se sentó
en frente de mi a pocos metros de distancia
-Y bien...
-Tus padres y yo éramos amigos, tu padre fue el profesor que me reemplazó en
la primaria de Sioux Falls, allí nos conocimos y él me presentó a tu madre, yo tenía
una conexión muy grande con ellos por ti, tu apenas eras un bebe recién nacido, ellos
quisieron hacerme tu madrina, pero me negué_ su mirada se había perdido, la había
quitado de mi hacía varias palabras atrás, volvió a verme pero con más ira
-Con que eran amigos, eh?_ su mirada estaba mezclada entre ira y dolor, tenía
los ojos llenos de lágrimas_ Y POR QUÉ LOS MATASTE ENTONCES?
-Yo no los mate!_ abrí mis ojos como platos_ de dónde sacaba tal cosa?
-Bah! claro que si lo hiciste, hay pruebas de lo que hiciste_ fruncí el ceño
-Y de donde se supone que salieron esas pruebas?
-Fueron atacados por un vampiro y todo apunta que fuiste tú
-Como mataría yo a tus padres si eran mis amigos? como iba a dejar a Dylan y
a ti sin padres, además que yo no estaba ni cerca para cuando aquello sucedió, tengo
testigos_ me detuve un momento_ quién te ha dicho todo esto Simon?
-Alguien que conocerás en su debido momento..._ hizo una pausa_ y que me
dices de las fotografías de nosotros juntos?
-Oh! eso me ayudara a darle sentido a mi versión..._ me detuve en seco antes
de contarle todo
-Que tienen que ver las fotografías? planeabas matarme a mí también? o
primero a mi hermano menor?
-Por favor siéntate, tal vez no estés preparado para lo que te voy a contar_ me
vio como si se estuviera haciendo mil preguntas en la cabeza
-Escucho...
-Tú y yo nos conocimos hace más de 22 años en la universidad de Sioux Falls,
de hecho tú me conocías desde que nací_ su expresión se intensificó y soltó una risa
-Tus mentiras no concuerdan Alexandra
-Por qué crees que yo tenía una conexión especial con tus padres?
-No lo sé, tal vez era la conexión que siente el cazador con su presa_ puse los
ojos en blanco, me moví un poco y sentí que me desgarraba por dentro, mi columna
sonó ruidosamente, me quejé del dolor, el agua bendita y el ajo me debilitaban cada
vez más
-Tú eras mi ángel guardián Simon, Miguel te volvió humano para que yo te
conociera y así me ayudaras a combatir al hijo del diablo, te enamoraste de mí y te
cortaron las alas, renunciaste a ser ángel por mí, todo esto paso mucho antes de
convertirme en vampiro_ me miraba expectante, entre confundido y sin querer
creerme ni una sola palabra
-Y como explicas que aun tenga 21 años? como explicas que tenga recuerdos de
mi niñez si por lo que me dices nunca la tuve? como explicas que tuve padres?
-Moriste.... _ hice una pausa y cerré mis ojos mientras unas lágrimas salían
recordando el momento que lo apuñalé, cuando tenía su cuerpo en mis brazos
muriendo. Lloré un poco más, lo miré a él, había adoptado otra posición_ mientras yo
estaba poseída por un demonio, yo te apuñalé en el estómago mientras tratabas de
exorcizarme, moriste en mis brazos_ le desvié la mirada, quería llorar intensamente
pero no podía
-Sigo sin entender...
-Miguel permitió que volvieras a nacer, ya habías sido fecundado, a los 9 meses
exactos de tu muerte volviste a nacer cerca de Sioux Falls y tus padres se mudaron
allá, tu padre me reemplazó en la primaria, nos hicimos amigos y te volví a ver, pero
hecho un bebé_ se me quebró la voz_ Verona te puso en mis brazos por primera vez y
vi tus ojos, esa mirada que siempre me brindó seguridad...
-Basta!_ las lágrimas también le estaban haciendo una mala jugada a Simon_
Es increíble todo lo que puedes inventar
-No son mentiras Simon, todo es verdad o por qué crees que me espanté al
verte el día que Adam y yo llevamos a Dylan a tu casa esa noche?
-No lo sé... tal vez recordaste lo que hiciste con mis padres
-Yo huí de Sioux Falls poco después de convertirme en vampiro, no me despedí
de tus padres, no era capaz de verte más me hacía daño recordar todo lo que una vez
pasó entre nosotros antes que murieras
-Mentiras y más mentiras! citas a MIGUEL... quién demonios es ese Miguel
que tan dices que hizo? el que me devolvió a la vida
-El arcángel Miguel...
-Quien?!_ rio ruidosamente
-Antes solíamos ser amigos, al igual que Gabriel, por supuesto antes de
convertirme en vampiro
-Alex basta... ya, ya... ya me estoy mareando con tanto cuento de fantasía
barato
-No te estoy mintiendo...
-Yo no voy a cometer el mismo error dos veces, no confiare en ti de nuevo
-NO TE ESTOY MINTIENDO!!!_ se levantó de la silla y fue al mueble de
madera, tomó el frasco con sangre, tomó una jeringa llenándola en su totalidad
-Sangre de alguien muerto... ustedes los vampiros tienen algunas debilidades
bastante interesantes... nunca pensé que Dylan tendría razón_ dijo mirando la
inyectadora, yo estaba entrando en pánico de nuevo, todo me ardía, las heridas de
bala eran como si tuvieran fuego por dentro y tenía algún hueso o costilla trasera rota,
al parecer ese era parte de los efectos de esa sangre, era algo que desconocía sobre los
vampiros, pero era una sensación diferente, me sentía muy débil. Simon se acercó a
mí, clavó la aguja de la inyectadora en mi muslo izquierdo, no pude impedirle que lo
hiciera, porque al igual que mis manos, mis piernas estaban atadas, sentí cada gota de
esa sangre recorrer mis venas quemándome cada vez más por dentro, podría jurar que
era la misma sensación que tenían las personas enfermas de cáncer cuando recibían el
tratamiento con quimioterapia. Me desmayé del dolor una vez más
Capítulo 27
De frente al pasado
<<...Me fui de nuevo hacia el lado derecho de la cama y me metí entre las
sábanas, me acurruqué y me acosté de nuevo sobre el pecho de Simon, era agradable la
verdad, cerré los ojos y no demoré en quedarme profundamente dormida.
-Muy buenos días señorita…._ escuché una voz lejana, abrí los ojos lentamente,
era Simon quién me traía comida en una bandeja
-Simon…?_ me estrujé los ojos el sol estaba radiante
-Buenos días Alex. Aquí está tu desayuno, aunque ya deberías almorzar más
bien. Dormiste como un bebé_ me dijo con una sonrisa amable y yo se la respondí
-Buenos días Simon. Gracias por el desayuno, no debiste… y quien dormía
como un bebé eras tú. Me levanté en la madrugada y ni cuenta te diste
-Si ya me di cuenta_ me senté en la cama, con la espalda recostada de la
cabecera, Simon me puso el desayuno en las piernas, era el típico desayuno americano
[…] Simon siempre sabía lo que a mí me gustaba, incluso tenía un vaso lleno hasta la
mitad con agua y una flor silvestre del jardín dentro
-Wow! Huele y se ve divino_ le dije saboreando mis labios de forma exagerada.
Se sentó a mi lado viéndome de frente
-Buen provecho_ empecé a comer y Simon me miraba fijamente, pero con
dulzura, eso me incomodaba un poco
-Que….?
-Nada… nada, solo pensaba
-Pensabas? No sabía que pudieras hacer eso. En que pensabas?
-Cosas sin importancia la verdad. Tonterías mías_ en ese momento recordé mi
borrachera de la noche anterior...>>
Abrí los ojos una vez más con dificultad, no tenía ni la más mínima idea de
cuánto tiempo llevaba cautiva, cada vez me sentía peor, no tenía casi fuerzas para
mantenerme en pie, sentía que dentro de poco el hombro derecho se me dislocaría,
estaba empapada en agua, ajo y sangre mía, miré hacia arriba y mis brazos lucían peor
desde la última vez que los vi, de repente se abrió la puerta de la cabaña de la
habitación donde estaba, me asusté, era Simon, llevaba otra ropa
-Cuanto tiempo llevo aquí?
-4 días ya casi 5... extrañas a tu familia?_ dijo con un tono amargado pero no
respondí, cerré los ojos quejándome muda de mi dolor corporal y emocional
-Simon quién te metió toda esta basura en la cabeza de que maté a tus padres?
-Qué casualidad que preguntas... justo vino a verte_ fruncí el ceño. La puerta se
volvió a abrir pero al ver de quien se trataba, casi se me sale el corazón por la boca,
éste apenas me vio sonrió
-Hola profesora Torres.... cuanto años...
-Zac...?_ era mi ex alumno de la preparatoria de Sioux Falls, exactamente
igual, con unos años más de cuando lo vi por última vez, pero inhumanamente posible
que estuviera tan bien conservado_ Eres un vam....
-Me alegra que usted y mi amigo Simon hayan tenido su tiempo para charlar
sobre los buenos recuerdos que comparten_ miré a Simon, estaba inexpresivo, recordé
entonces cuando lo volví a la vida con mi sangre de vampiro y le borré el hecho que
había matado a su padre y a los cazadores de vampiros de su clan por salvar a Adam y
a Bea, Adam y Vanessa me advirtieron de las consecuencias de haberle dado mi
sangre a un humano, lo miré a los ojos por varios segundos
-Simon fue él... Simon fue él quien mató a tus padres!_ Simon frunció el ceño
-Simon dejó de confiar en usted, pero yo fui quien le abrió los ojos, si no es por
mí, no se da cuenta que se estaba enamorando de la vampira que mató a sus padres
-Cuando falleciste?
-No estoy entendiendo nada...
-Él es vampiro también...
-Cómo lo sabes?
-No es difícil de distinguir, la última vez que lo vi fue hace 20 años y lucia
igual, tal vez 2 o 3 años más viviste como humano_ Simon nos miraba a ambos
-Le vas a creer a alguien que te ha mentido todo este tiempo?_ le dijo Zac con
tranquilidad
-Haz una prueba Simon, me imagino que no tendrás problema con ello Zac, de
todas formas Simon, el crucifijo te da algo de ventaja, ahora no está en plena potencia
porque el crucifijo lo debilita_ Simón miró el mueble donde estaban las cosas y a Zac_
no tienes nada que perder Simon, y supongo que tú tampoco Zac_ Simon me miró me
imagino que preguntándose qué hacer, se acercó al mueble de madera pero en un abrir
y cerrar de ojos Zac lo tomó por la espalda y lo lanzó al otro lado de la habitación,
Simon apenas se movió quejándose del dolor
-Déjalo en paz!_ halé de nuevo las cuerdas pero con más fuerza, mis ojos
comenzaron a llamear, sentía brotar las venas alrededor de mis ojos, el techo crujió
ante mi movimiento, Zac me miró con una leve sonrisa dibujada en el rostro y luego
miró a Simon
-Me fuiste de gran ayuda, pero supongo que ya cumpliste con tu trabajo_ sus
colmillos sobresalieron
-DEJALO EN PAZ!_ volví a gritar y halé una vez más con todas las fuerzas
que tenía, el techo crujió más fuerte, el hombro se me dislocó, aullé del dolor terrible
que esto me causó, una de las columnas de madera que sostenía la vieja cabaña se
partió dejándome caer arrodillada
-Está bien Simon, por ahora no te almorzaré...
-Como te convertiste?
-Yo creo que tus cálculos fallaron Alex, trataste de hacer algo heroico y mira en
lo que se transformó, creo que hubiera sido mejor que me dejaras morir junto con mi
padre y los míos, tú y tus amigos los mataron a todos y juré que todos pagarían por
ello
-No te atrevas a tocar a ninguno de ellos..._ alcancé a decir entre el dolor que
me embargaba
-Apenas termine contigo voy por ellos, no te preocupes... y como me convertí?_
hizo un pausa andando hacia un costado de la habitación_ supongo que algún día
debía morir por causas naturales y así fue, morí en un accidente en mi moto, me
arrollaron en la autopista, 2 días después resucité siendo esto..._ dijo con repugnancia_
siendo lo que mi padre me enseñó odiar, y todo gracias a ti. Apenas desperté recordé
todo lo que tu borraste, te investigué un poco y vi tu conexión con Simon y su familia,
me aseguré que Simon ni su hermanito estuvieran en casa para cazar a sus queridos
padres y así con el tiempo te culparan a ti, nunca planee que se encontraran tan
pronto, pero iba a hallar la manera que así fuera
-Fuiste tú...?_ voltee a ver a Simon, estaba poniéndose de pie
-Si fui yo, Bingo! aquí entre nos, tu madre sabia mejor..._ Simón se vino hacia
Zac, éste lo agarró por el cuello y lo levantó ahorcándolo
-Suéltalo Zac!_ Simon lanzaba patadas al aire, su cara y orejas estaban rojas_
Zac!!!_ lo soltó, Simon cayó al suelo tosiendo tratando de recuperar el aire. Zac tomó
la silla vieja que estaba hacia un lado, agarró por el pecho a Simon y lo sentó a la
fuerza, lo ató de pies a cabeza quedando prácticamente inmóvil
-Tú los mataste! ASESINO!_ Zac le dio una bofetada
-Eso somos niño... o no Alex?
-No le hagas daño por favor, si quieres mátame a mí pero no lo toques a él ni a
mi familia por favor, son lo único que me quedan, ellos no se merecen esto_ mientras
decía esto Zac fue al mueble donde estaban las cosas y sumergió el puñal en la sangre
de humano muerto, fue hacia mí y cortó mi muslo izquierdo, traté de no gritar, ya la
garganta me ardía, lloré con rabia y dolor, cada vez me debilitaba más, me sostenían
mis brazos atados nada más, hizo un par de cortadas no muy profundas en mi
antebrazo izquierdo y en mi cuello
-Déjala en paz mal nacido!_ gritó Simon desde su asiento
-Una cosa si te puedo prometer Alex y es que apenas acabe contigo y tu clan
me voy a matar, yo no puedo existir así definitivamente..._ miré a Simon mientras Zac
me decía aquello, tenía los ojos cerrados y algo decía para sus adentros. Zac fue de
nuevo al mueble a sumergir nuevamente el puñal en sangre cuando se escuchó el
aletear de unas alas y apareció Gabriel justo en la puerta, Zac volteó hacia él con
miedo, Simon me miró asintiendo con la cabeza, yo le sonreí con desgano, apenas
podía subir un poco la cabeza, vi a Gabriel y él me sonrió, abrió la puerta y entraron
Adam, Sam, Vanessa, el señor Douglas, la señora Julia y de ultima Adriana, antes de
que pudiera escapar, el señor Douglas y Sam tomaron a Zac
-ALEX!_ Adriana corrió hacia mí, Adam trató de ayudarla pero se quemó
apenas tocó las cuerdas, Adriana no podía sola, Vanessa terminó de liberar a Simon y
éste corrió hacia mí para ayudar a Adriana a liberarme, apenas liberaron mis brazos
sentí un dolor espantoso, me quejé demasiado, liberaron mis piernas y me tendieron
en el suelo.
Epílogo
Adiós
Adam cayó arrodillado a mi lado mientras Adriana me limpiaba las heridas y
trataba de quitar el agua bendita y el ajo de mi cuerpo para que Adam pudiera
sacarme de allí, miré hacia la puerta, Gabriel continuaba allí parado inmóvil, asintió
con la cabeza y sonrió amablemente, yo le respondí la sonrisa y asentí,
inmediatamente desapareció son su singular aleteo, en ese momento volví a escuchar
los gritos de Zac que pedían que lo dejaran ir, cuando escuché el quebrar de madera y
Zac gritando insistentemente que no lo mataran, de pronto dejé de oír su voz, voltee y
su el señor Douglas estaba dejando caer su cuerpo al piso sin vida, cerré los ojos con
dolor
-Adriana..._ continuó limpiándome_ Adriana!_ me miró con miedo, estaba
nerviosa, la miré y ella asintió, se apartó y Simon se acercó, él tomo mi mano derecha
-Alex perdóname, yo no tenía idea... me dejé engañar por él..._ empezó a llorar
-Creo que eso ya no importa Simon..._ le dijo Adam serio, él estaba al otro lado
de mi cuerpo muy cerca
-No tienes idea de cuánto sufrí tu perdida Simon, me ha costado años
recuperarme, me volví lo que soy por el dolor que tu muerte me produjo, yo hice que
te quitaran tus alas, siempre me amaste sin condiciones y nunca te correspondí_ tosí_
por seres como yo murieron tus padres, por mi culpa murieron Andrew y Verona, que
eran mis amigos
-No fue tu culpa... Aún sigo sin comprender muchas cosas, pero me queda
culpa que no fuiste la responsable de tu muerte. No tienes idea del infierno que pasé al
enterarme que eras esto y que habías matado a mis padres
-Zac los mató por venganza hacia mí, yo le hice esto a él..._ miré a mi
alrededor y Adriana estaba recostada de Sam llorando al igual que Vanessa de su
padre y su madre_ Señor Douglas, Señora Julia y tu Adam, por favor cuiden de Simon
y tu Sam de mi hermana, Vanessa es tu obligación ver por Adam y todos ustedes ver
por Vanessa
-Alex, no te despidas...
-Son muchos años sufriendo Adam, muchos años dañando personas que no lo
merecían, muchos años que quizás no debí vivir, ya es hora de morir
-No! no, no, no, no Alex, no digas eso, no estamos reencontrando de nuevo, la
vida nos dio esta oportunidad de nuevo, aquí me tienes...._ me dijo Simon entre
lágrimas, acaricié su rostro con las pocas fuerzas que me quedaban y le sonreí, siempre
vas a ser especial para mí y gracias por cuidar de mí el tiempo que lo hiciste..._ tomó
la mano con que lo acariciaba y la beso, voltee hacia Adam, estaba luchando con sus
lágrimas más que nunca
-No me mires así, te prohíbo que me dejes, no así Alex, no para siempre...
-Te amo Adam, siempre fue así y siempre lo será..._ tosí de nuevo produciendo
un dolor agonizante dentro de mí_ y si....
-Sí que..._ frunció el ceño
-Si me hubiera casado contigo..._ le sonreí, fue allí cuando dejó libre todas sus
lágrimas, sentí que poco a poco me desvanecía viendo al fondo de la casa una luz muy
brillante.
Bajaba las escaleras de la casa de Sioux Falls, estaba llena de gente, apenas las
personas se dieron cuenta que yo estaba allí me sonrieron, habían flores por todos
lados, abrí la puerta principal de la casa y vi a Miguel parado en la acera
-Miguel?
-Hola Alex....
-Qué haces aquí?
-Esperando que empiece la ceremonia_ fruncí el ceño y fue cuando me di
cuenta que tenía un vestido de novia puesto y como no notarlo si era inmenso y
hermoso
-Estoy soñando?
-No Alex..._ mostró la sonrisa que pocas veces dejaba ver_ estás cumpliendo un
sueño, estás dejando el dolor atrás, las desgracias, la tristeza, aquí todo es mejor
-Morí cierto?
-Yo lo llamaría que volviste a empezar una nueva vida..._ volvió a sonreír_
mira la casa, es hermosa no?_ voltee a ver la casa
-Creo que nunca la vi tan hermosa Miguel..._ se me escaparon algunas lágrimas
y sonreí_ gracias..._ él me sonrió y me abrazó_ tengo que ir al purgatorio no es cierto?
-Es tu decisión...
-Mi decisión? soy vampiro Miguel...
-Si pero eres una vampiro no ordinaria y Lucifer lo sabía, siempre estuviste
dispuesta a dar la vida por la gente que amas, ahora te pregunto: te arrepientes de todo
lo que hiciste?
-Si te refieres a matar inocentes... por supuesto que si
-Sabía que así sería..._ volvió a sonreír
-Por qué me dejaste sola Miguel?
-Digamos que perdí la fe en ti, pero Gabriel me hizo rectificar, el siempre creyó
en ti, yo soy de corazón duro _ hubo un pequeño silencio_ sabes que puedo volverte a
la vida...?
-Si?_ sonreí con desgano, miré la casa de nuevo_ no Miguel, ya viví suficiente,
ya dejé de ser humana hace mucho tiempo, es hora de seguir el curso_ me sonrió y
asintió con la cabeza
-Entonces creo que debemos seguir..._ me tomó por la espalda y me señaló
hacia la puerta de la casa, Adam me esperaba allí parado vestido de blanco,
sonriéndome, extendiéndome su mano derecha, no sabría cómo describir su aspecto,
solo puedo decir que era perfecto. Caminé hacia él lentamente sonriéndole, me
sostuve de su brazo derecho y entramos caminando a la casa, vi a mis padres sonreír a
un lado, a Andres, a Adriana, Vanessa, los señores Adams, y hasta Chris, Verona y
Andrew, llegamos al patio trasero, había un altar cerca de la entrada del bosque, allí
estaba Simon junto a Miguel y Gabriel, abracé a Gabriel y por último a Simon, me
separé de él y nos miramos por unos segundos, las lágrimas querían apoderarse de mí,
me sonrió y me acarició la mejilla, Adam acarició mis hombros dándome fuerzas, me
voltee hacia el altar donde estaba Miguel y me sonrió, miré a Adam y me besó
dulcemente en los labios, por primera vez en tantos años sentía paz plena y felicidad,
lo más raro del asunto era que jamás volvería a ser humana o vampira, sólo sería feliz.
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