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Stock de carbono del suelo, a escala local, en ocho sistemas de uso
agrícola del piedemonte llanero.
Maryory Rodríguez Atehortúa
Universidad Nacional de Colombia
Facultad de Ciencias Agropecuarias, Escuela de Posgrados
Doctorado en Ciencias Agrarias
Palmira, Colombia
2016
Stock de carbono del suelo, a escala local, en ocho sistemas de uso
agrícola del piedemonte llanero.
Maryory Rodríguez Atehortúa
Tesis de investigación presentada como requisito parcial para optar al título de:
Doctora en Ciencias Agrarias
Directora:
Ph.D.Yolanda Rubiano Sanabria
Línea de Investigación:
Manejo de Suelos y Aguas
Universidad Nacional de Colombia
Facultad de Ciencias Agropecuarias, Escuela de Posgrados
Doctorado en Ciencias Agrarias
Palmira, Colombia
2016
(Dedicatoria o lema)
A mis hijos Andrés David y Gabriela
A mis Padres Dora y José Arnulfo
A mi compañero y amigo Oscar
A mis hermanos Arnulfo, Edward y Mayeli
A mis sobrinos Leidy Marian, Sebastian,
Esteban, Juan David, Andrés Felipe,
Samuel y Briana Sofía
A mis amigos incondicionales Julia y Juan
Agradecimientos
A la Universidad Nacional de Colombia Sede Palmira, por la formación profesional en todos
los niveles.
Al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural por la financiación parcial de este trabajo.
A la Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá, CORPOICA y FUNDALLANURA por
la financiación del trabajo en el marco del proyecto “Línea base de indicadores de calidad
del suelo para monitorear los efectos del cambio climático sobre los sistemas de
producción agrícola en el piedemonte llanero”.
A la profesora Yolanda Rubiano Sanabria por la dirección de la tesis. A los investigadores
del Centro de Investigación La Libertad de Corpoica por la co-ejecución de las actividades
y su apoyo logístico y científico durante el trabajo de campo.
A los laboratorios de la Universidad Nacional de Colombia, Suelos de Bogotá y Fisiología
de Palmira; al laboratorio de suelos de Corpoica La Libertad al laboratorio de Calidad de
Nutrición de CIAT, por el procesamiento de las muestras
A los jurados Doctores Fernando Muñoz y Ngonidzashe Chirinda
A mi padre José Arnulfo Rodríguez N. por la colaboración en el muestreo y su apoyo
incondicional, a la Dra. Aracely Castro, a las Dras. Mariela Rivera y Mayesse da Silva y al
compañero Norbey Marín del Centro Internacional de Agricultura Tropical-CIAT, a Oscar
Enrique Gómez, a los estudiantes de Maestría de la sede Bogotá Camilo Peña, Melissa
Lis y Sebastián Gutiérrez, al estudiante de Ingeniería Ambiental de la sede Palmira Diego
Medina y a los profesores Enrique Darghan de la Facultad de Ciencias Agrarias de la sede
Bogotá, Juan Carlos Menjivar y Carlos Iván Cardozo de la Facultad de Ciencias
VIII Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Agropecuarias de la sede Palmira, Carmen Alicia Parrado de la sede de Bogotá y al Dr.
Jaime Bernal de Corpoica.
A todas y cada una de las personas que con su aprecio sincero, me apoyaron siempre.
Resumen y Abstract IX
Resumen
Conocer la dinámica del carbono en el suelo en diferentes sistemas de producción,
permite diagnosticar el efecto positivo o negativo de los diferentes usos de las tierras y
prácticas de manejo en relación al cambio climático, sugiriendo que los sistemas de
producción de tipo perenne y sin algún tipo de laboreo del suelo, favorece el incremento
de los stocks de carbono en profundidades mayores (a partir de 30 cm), en períodos de
tiempo de alrededor de 25 años. Contrario a lo que sucede con la rotación de cultivos
que posibilita la existencia de stock de carbono moderados, con tendencia constante y
durante períodos de tiempo superiores a 25 años, debido a la incorporación periódica de
biomasa al suelo. El uso de nuevas tecnologías como los NIR y de modelos de
simulación como CENTURY, facilita la evaluación de la magnitud de los impactos
mencionados y apoyan en la toma de decisiones y en la planificación de prácticas de
uso y manejo de los suelos. El objetivo de este estudio fue estimar el stock de carbono
del suelo, los sistemas de uso agrícola; transitorios, pasto mulato, pasto asociado a
arachis, cítrico asociado a arachis, caucho, palma, salpicón (plátano), y mango del
piedemonte llanero. Área representativa, C.I. Corpoica La Libertad (Meta, Colombia),
para posibilitar el monitoreo de los efectos de los cambios de uso de la tierra, al cambio
climático. Mediante el uso de calicatas, se recolectaron 256 muestras considerando las
profundidades 0-5, 5-10, 10-20, 20-30, 30-50, 50-75, 75-100 y 100-125. También se
obtuvieron los espectros mediante NIR de 92 muestras seleccionadas posteriormente y
se generaron modelos usando regresión por mínimos cuadrados parciales, de los cuales
se seleccionó el mejor, con RPD mayor de 2.0, R2 igual 0.9 y RMSE bajo. Además, se
simuló el stock de C con CENTURY en varios escenarios con los diferentes sistemas de
uso evaluados, con datos de clima y propiedades de suelo, mostrando adecuadamente
los efectos generados en el estado del C (captura/stock). Los análisis desarrollados
contribuyen al monitoreo y evaluación del desarrollo agrícola en relación a la adaptación
y mitigación del cambio climático.
Palabras clave: funciones de pedotranferencia, modelamiento de materia orgánica,
oxisoles.
X Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Abstract
To know the carbon dynamic in the soil in different productions systems, allow to predict
the positive or negative effect of the different land uses and management practices with
the climate change, suggesting that the perennials production systems and without soil
tillage, increases the carbon stock in the greater depths (from 30 cm) in periods around
25 years. Contrary to what happens with crop rotation that allows the existence of
moderate carbon stock, with constant tendency and for periods of time exceeding 25
years, due to the periodic incorporation ground biomass. The use of new technologies
like NIR and the simulation models like CENTURY, it facilitates the assessment of the
magnitude of these impacts and support in decision-making and planning practices of
use and management of soils. The objective of this study was to estimate the carbon
stock of soil, in agricultural systems; transitory, grass mulato, grass associated rachis,
citric associated arachis, rubber, palm, spatter (banana), and mango of piedmont plains.
Representative area, C.I. Corpoica La Libertad (Meta, Colombia), for to allow monitoring
of the effects of changes in land use and the climate change. Through the use of test pits,
256 samples were collected, in the depths 0-5, 5-10, 10-20, 20-30, 30-50, 50-75, 75-100
and 100-125. Spectra were also obtained by NIR subsequently selected 92 samples and
models were generated using partial least squares regression, of which the best was
selected, with RPD > 2.0, R2 = 0.9 and low RMSE. Further, the carbon stock were
simulated in several scenarios with de different evaluated use systems, with data of
climate and soil properties, showing adequately the effects generated in the state of
Carbon (flow/stock). Analyses made contribute to the monitoring and evaluation of
agricultural development in relation to adaptation and mitigation of climate change
Keywords: pedotransfer functions, modeling organic matter, oxisols
Contenido XI
Contenido
Pág.
Resumen ........................................................................................................................ IX
Lista de figuras ............................................................................................................ XIII
Lista de tablas ............................................................................................................. XVI
Introducción .................................................................................................................... 1
1. Marco conceptual ..................................................................................................... 5 1.1 La función del suelo en el ciclo biogeoquímico del carbono.................................. 6 1.2 Dinámica del carbono orgánico en los suelos .................................................. 7
1.2.1 Manejo del carbono en suelos de áreas tropicales .............................. 14 1.2.2 El carbono como indicador de calidad del suelo, en el contexto de cambio climático ................................................................................................ 15
1.3 Métodos de laboratorio para determinación de carbono del suelo ................... 18 1.3.1 Espectroscopia VIS-NIR-MIR (Visible-Infrarrojo cercano-Infrarrojo medio) 19
1.4 Modelación de la materia orgánica ................................................................ 22 1.4.1 Simulación de Materia Orgánica en el modelo CENTURY. ................. 25
2. Materiales y métodos ............................................................................................. 33 2.1 Área de estudio.............................................................................................. 33
2.1.1 Sistemas de producción estudiados .................................................... 35 2.2 Procedimientos .............................................................................................. 36 2.3 Procesamiento de datos ................................................................................ 41
2.3.1 Análisis descriptivo de los datos .......................................................... 41 2.3.2 Estimación de muestras atípicas en el procesamiento con NIR .......... 42 2.3.3 Características cualitativas de las curvas espectrales ......................... 43
2.4 Simulación de los datos de carbono .............................................................. 44
3. Resultados y Discusión ......................................................................................... 45 3.1 Stock de carbono en diferentes sistemas de uso agrícola del piedemonte. Área representativa, Corpoica La Libertad ............................................................... 45
3.1.1 % de CO en el tamaño de partícula del suelo de 2 mm ....................... 45 3.1.2 Stock de CT en el tamaño de partícula del suelo de 2 mm (fracción liviana) 46 3.1.3 Stock de CT en el tamaño de partícula del suelo < 0.25 mm (fracción pesada) 48 3.1.4 Stock de CT en el tamaño de partícula del suelo de 0.044 mm (fracción pesada fina) ...................................................................................................... 50
XII Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola
del piedemonte llanero
3.2 Simulación del Stock de Carbono del Suelo, en Sistemas de Producción del Piedemonte Llanero. ................................................................................................ 53
3.2.1 Carbono en partículas del suelo, de diferente tamaño. ............................ 56 3.3 Determinación de Stock de Carbono del Suelo, en Sistemas de Producción del Piedemonte Llanero a partir de NIR ................................................................... 65
4. Conclusiones y recomendaciones ....................................................................... 75
A. Anexo: Significado de acrónimos ......................................................................... 77
B. Anexo: Gráficas de registros de cuarenta años, de precipitación y temperatura, de La Libertad ............................................................................................................... 79
C. Anexo: Ejemplos de la información de los archivos generados para la simulación de escenarios en CENTURY ..................................................................... 85
D. Anexo: Coordenadas y % CT de los sitios muestreados. ................................. 109
E. Anexo: Descripción de los dos primeros horizontes de los perfiles de suelo 117
F. Anexo: Modelamiento del Stock de C del Suelo en la Terraza Alta de La Libertad........................................................................................................................ 121
Bibliografía .................................................................................................................. 125
Contenido XIII
Lista de figuras
Pág.
Figura 1-1. Compartimentos y flujos bioquímicos del carbono. ........................................ 7
Figura 1-2. Esquema simplificado de la transformación de la materia orgánica en el
suelo. ............................................................................................................................... 8
Figura 1-3. Tipos de humus según la condición o el régimen hídrico. .............................. 9
Figura 1-4. Modelo de la dinámica del carbono en el suelo con tiempos de residencia. .. 9
Figura 1-5. Materia orgánica en la matriz del suelo. ePOM: partículas externas de
materia orgánica; iPOM: partículas internas de materia orgánica. .................................. 11
Figura 1-6. Humus estabilizado por fuerzas débiles (interacciones hidrofóbicas y enlaces
de H) procesos de adsorción. Tomado de Macías y colaboradores (2010). ................... 12
Figura 1-7. Formación de microagregados del suelo (<250 µm) y estabilización de la
materia ........................................................................................................................... 14
Figura 1-8. Ilustración de reflectancia difusa. ................................................................. 20
Figura 1-9. Regiones del espectro electromagnético que han sido abordadas en el
estudio de propiedades del suelo. .................................................................................. 21
Figura 1-10. Respuesta espectral –absorbancia- de una muestra. ................................ 21
Figura 1-11. Relación entre los programas y estructuras de los archivos en el modelo
CENTURY ...................................................................................................................... 24
Figura 1-12. Reservorios y flujos de carbón en el modelo CENTURY. El diagrama
muestra los principales factores que controlan los flujos. ............................................... 27
Figura 1-13. Modelo de producción vegetal en CENTURY. ........................................... 28
Figura 1-14. Impacto de la temperatura del suelo sobre el crecimiento potencial de
diferentes comunidades de plantas C3 y C4. ................................................................. 29
Figura 1-15. Impacto de la temperatura del suelo sobre el crecimiento vegetal potencial
de diferentes cultivos ...................................................................................................... 29
Figura 1-16. Impacto de la disponibilidad de humedad, en el potencial de crecimiento de
las plantas. ..................................................................................................................... 30
Figura 2-1. Localización del área de estudio. ................................................................. 34
Figura 2-2. Distribución de los sistemas de producción seleccionados para este estudio
....................................................................................................................................... 36
Figura 2-3. Mapa de suelos de La Libertad, a escala 1:7500. ........................................ 37
Figura 2-4. Mapa de Geomorfología de La Libertad. ..................................................... 38
Figura 2-5. Muestreo en C.I. La Libertad ....................................................................... 39
Figura 2-6.Esquema de los procedimientos seguidos en la metodología. ...................... 40
Figura 2-7. Ejemplo de PCA (a) datos sin centrar (b) datos centrados .......................... 43
XIV Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola
del piedemonte llanero
Figura 3-1. % CO con relación a los diferentes sistemas de producción, la profundidad y
la densidad del suelo ...................................................................................................... 46
Figura 3-2. Stock de CT en partículas de 2 mm (fracción liviana), con relación a los
diferentes sistemas de producción, la profundidad y la densidad del suelo ..................... 47
Figura 3-3. Stock de CT en partículas de 2 mm, en profundidad .................................... 48
Figura 3-4. Stock de CT en partículas < 0.25 mm (fracción pesada), con relación a los
diferentes sistemas de producción, la profundidad y la densidad del suelo. .................... 49
Figura 3-5. Stock de CT en partículas < 0.25 mm, en profundidad ................................. 50
Figura 3-6. Stock de CT en partículas de 0.044 mm (fracción pesada fina), con relación a
los diferentes sistemas de producción, la profundidad y la densidad del suelo. .............. 51
Figura 3-7. Stock de CT en partículas de 0.044 mm, en profundidad ............................. 51
Figura 3-8. Stock de CT en partículas del suelo de 2 mm, < 0.25 mm y 0.044 mm con
diferentes sistemas de producción del piedemonte llanero (método analizador elemental).
....................................................................................................................................... 52
Figura 3-9. Stock de CT del Sistema Transitorio y los datos climáticos y de sitio del año
1973, simulado con CENTURY. ...................................................................................... 55
Figura 3-10. Stock de CT del Sistema Transitorio y los datos climáticos y de sitio del año
1973, incrementando la temperatura en 1 °C, simulado con CENTURY. ........................ 55
Figura 3-11. Unidades de suelo en la Terraza Alta de la Libertad .................................. 56
Figura 3-12. Simulación de stock de CO en las partículas de las fracciones liviana,
pesada y pesada fina del suelo, con el escenario sistema Pastos – Transitorio de 1973 a
2011 con CENTURY. ...................................................................................................... 57
Figura 3-13. Simulación de stock de C en las partículas de la fracción liviana del suelo,
en diferentes escenarios de uso, con CENTURY. ........................................................... 58
Figura 3-14. Simulación de stock de C en las partículas de la fracción pesada del suelo,
en diferentes escenarios de uso, con CENTURY ............................................................ 59
Figura 3-15. Simulación de stock de C en las partículas de la fracción pesada fina del
suelo, en diferentes escenarios de uso, con CENTURY ................................................. 59
Figura 3-16. Stock de C (Ton/ha) en partículas de 2 mm, < 0.25 mm y 0.044 mm en
diferentes sistemas de producción del piedemonte llanero, medidos en 2011. ............... 60
Figura 3-17. Prueba de estabilidad de datos simulados en CENTURY, para el sistema
Transitorio. ...................................................................................................................... 61
Figura 3-18. Prueba de estabilidad de datos simulados en CENTURY, para el sistema
Palma ............................................................................................................................. 61
Figura 3-19. Prueba de estabilidad de datos simulados en CENTURY, para el sistema
Caucho. .......................................................................................................................... 61
Figura 3-20. Prueba de estabilidad de datos simulados en CENTURY, para el sistema
Pasto mulato ................................................................................................................... 62
Figura 3-21. Simulación de stock de C en las partículas de las fracciones liviana en
diferentes escenarios de uso a futuro (año 2070), con CENTURY. ................................. 63
Figura 3-22. Simulación de stock de C en las partículas de la Fracción Pesada en
diferentes escenarios de uso a futuro (año 2070), con CENTURY. ................................. 64
Contenido XV
Figura 3-23. Simulación de stock de C en las partículas de la Fracción Pesada Fina en
diferentes escenarios de uso a futuro (año 2070), con CENTURY. ................................ 65
Figura 3-24. Curvas de absorbancia de los espectros de las muestras tomadas en
Corpoica La Libertad ...................................................................................................... 66
Figura 3-25. Relación entre los datos reales (metodologías tradicionales) y los estimados,
de calibración con NIR, procesados en WinISI ............................................................... 67
Figura 3-26. Relación entre los datos reales (metodologías tradicionales) y los
estimados, de validación con NIR, procesados en WinISI .............................................. 68
Figura 3-27. Prueba de estabilidad de datos obtenidos mediante NIR. .......................... 69
Figura 3-28. Comparación entre la distribución de los datos de carbono determinados
con analizador elemental vs. Los datos obtenidos mediante NIR ................................... 69
Figura 3-29. Comparación de la modelación del Carbono mediante la metodología NIR,
con los valores obtenidos en laboratorio con el sistema Caucho. ................................... 70
Figura 3-30. Comparación de la modelación del Carbono mediante la metodología NIR,
con los valores obtenidos en laboratorio con el sistema Cítricos + Arachis .................... 71
Figura 3-31. Comparación de la modelación del Carbono mediante la metodología NIR,
con los valores obtenidos en laboratorio con el sistema Mango ..................................... 71
Figura 3-32. Comparación de la modelación del Carbono mediante la metodología NIR,
con los valores obtenidos en laboratorio con el sistema Palma ...................................... 72
Figura 3-33. Comparación de la modelación del Carbono mediante la metodología NIR,
con los valores obtenidos en laboratorio con el sistema Pasto + Arachis ....................... 72
Figura 3-34. Comparación de la modelación del Carbono mediante la metodología NIR,
con los valores obtenidos en laboratorio con el sistema Pasto mulato ........................... 73
Contenido XVI
Lista de tablas
Pág.
Tabla 1-1. Estimación de la capacidad de los diferentes reservorios de C terrestre en Gt
C. ...................................................................................................................................... 6
Tabla 1-2 Rutas de descomposición de materiales orgánicos en el suelo en función del
potencial de reducción. ................................................................................................... 10
Tabla 1-3. Estimaciones de las reservas de carbón orgánico en el suelo. ...................... 17
Tabla 1-4. Reacciones químicas resultantes, a diferentes temperaturas en la pirólisis. .. 19
Tabla 1-5. Unidades de parámetros principals en CENTURY. Tomado de Metherell, A.K.
(1993). ............................................................................................................................ 24
Tabla 1-6. Archivos de parámetros que definen las condiciones para simulación con el
modelo CENTURY. ......................................................................................................... 25
Tabla 2-1. Sistemas de producción agrícola seleccionados para este estudio ................ 35
Tabla 3-1. Relación entre los porcentajes de CO mayores y menores de los sistemas
agrícolas. ........................................................................................................................ 45
Tabla 3-2. Relación entre las cantidades de stock de CT mayores y menores de los
sistemas agrícolas, en partículas del suelo de 2mm (fracción liviana). ............................ 47
Tabla 3-3. Relación entre las cantidades de stock de CT mayores y menores de los
sistemas agrícolas, en partículas del suelo de < 0.25 mm (fracción pesada). ................. 49
Tabla 3-4. Relación entre las cantidades de stock de CT mayores y menores de los
sistemas agrícolas, en partículas del suelo de 0.044 mm (fracción pesada fina). ............ 50
Tabla 3-5. Resultdos de la calibración del CENTURY, con un modelo de equilibrio para
7000 años en vegetación de sabana tropical. ................................................................. 53
Tabla 3-6. Resultdos de la calibración del CENTURY, con un modelo de equilibrio para
7000 años en vegetación de bosque tropical. ................................................................. 54
Tabla 3-7. Stock de CO observado en las unidades de suelos de la Terraza Alta de La
Libertad ........................................................................................................................... 54
Tabla 3-8. Resultados de estadísticos del análisis entre el stock de C simulado y el
observado, para el año 2011 ........................................................................................... 60
Tabla 3-9. Resultados del proceso de la calibración del modelo en WinIsis ................... 66
Tabla 3-10. Resultados del proceso de la validación del modelo en WinIsis ................... 67
Tabla 3-11. Estadísticos de la comparación entre la distribución de los datos de carbono
determinados con analizador elemental vs. Los datos obtenidos mediante NIR para cada
sistema de producción .................................................................................................... 70
Introducción
Las emisiones de CO2 debido a los cambios en la dinámica del ciclo del carbono se han
identificado como una de las principales causas de calentamiento global. Aunque éste gas
efecto invernadero (GEI) tiene un potencial de calentamiento global (PCG) menor que los
demás GEI, su mayor emisión hace que el efecto negativo en la atmósfera sea superior
(Reddy y Hodges, 2000; IPCC, 2007; Ferreira, 2008; FAO, 2014).
Acorde con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación
(FAO, 2001), la modificación de la dinámica natural de los gases atmosféricos ha generado
alteraciones climáticas en el planeta, por el denominado efecto invernadero, el cual está
asociado a la acumulación de CO2, entre otros gases. Se estima que cerca del 25% de las
emisiones de CO2 provienen de actividades agrícolas, tales como deforestación, laboreo
del suelo, quema de biomasa, entre otros, causados por la presión constante que el
hombre ejerce sobre el recurso tierra. En tanto, grandes cantidades de CH4 son producidas
por rumiantes domésticos, incendios forestales, cultivos bajo inundación como arroz,
drenaje artificial de humedales y acumulación de desechos.
Después del océano y las rocas, el suelo es el mayor sumidero de CO2. Atributos como
textura, agregación, distribución, tamaño y continuidad de poros, entre otros influyen de
manera importante en su emisión y almacenamiento (Lal, 1994), lo cual se refleja en el
contenido de carbono orgánico del suelo (COS). En relación con lo anterior, se establece
la función del suelo para el secuestro de carbono (SCS), que de acuerdo a lo determinado
en el protocolo de Kyoto (Stockmann, et. al., 2013), representa potencial para reducir sus
emisiones, contribuyendo a la mitigación del cambio climático.
De las 2000 millones de hectáreas de bosques tropicales existentes en el mundo, el 13%
de las ubicadas en América del Sur, el 19 % en África y el 27 % en Asia, han sido sometidas
a deforestación, como actividad inicial del cambio en el uso de la tierra, representado en
la conversión de coberturas naturales a cultivos o pasturas, y la tala de madera para leña
y para construcción, contribuyendo a las emisiones de C hacia la atmósfera en forma de
CO2 y CH4.
2 Introducción
En particular, en el piedemonte de los llanos colombianos, se presenta un proceso
continuo de deforestación e introducción de ganadería y agricultura con sistemas de
mecanización intensiva o sistemas de riego y drenaje, cuyos efectos en el corto plazo,
sobre la erosión podrían estar asociados a la fragilidad de estos ecosistemas (IGAC, 1999;
Etter, 2005), sin embargo, faltan indicios que dimensionen esta problemática. Además,
tampoco se conoce el efecto que el cambio en el uso de la tierra ha introducido en la
dinámica del COS.
El piedemonte, paisaje de interés de este estudio, cuenta con una extensión de 22.561
km2. Se encuentra en la base de la cordillera oriental a una altura entre 200 y 700 msnm,
formando franjas estrechas y paralelas en los departamentos de Arauca, Casanare y Meta
(IGAC, 1999). Los materiales parentales, arcillas y conglomerados resultan del efecto
denudativo de la cordillera Oriental, que a partir de un proceso de sedimentación, forman
relieves de colinas, lomas, abanicos y terrazas (IGAC, 1999). Las terrazas, se encuentran
en la base de los abanicos y las planicies aluviales, las cuales fueron originadas por dos
procesos tectonismo y descenso del nivel de erosión regional (IGAC, 1999; Instituto
Colombiano de Geología y Minería - INGEOMINAS, 2004).
En las posiciones de vega y terrazas, se sitúan los suelos de mayor fertilidad, aunque sus
características están asociadas a pH aproximados de 5.5, medianos contenidos de materia
orgánica, baja saturación de aluminio, baja disponibilidad de fósforo, así como también
mediana a baja disponibilidad de calcio, magnesio y potasio. Son suelos moderadamente
profundos, de color pardo oscuro, sobre pardo amarillento, de texturas medias a
moderadamente gruesas y de drenaje rápido (IGAC, 1999). El 90% de la fracción arena es
cuarzo, más del 50% de la fracción arcilla es caolinita con óxidos amorfos de hierro y
aluminio entre 5 y 15%. En estos suelos se presenta erosión superficial ligera por
escurrimiento difuso y erosión severa a moderada, debido a la pendiente fuerte de los
taludes (IGAC, 1999).
Lo anteriormente mencionado, hace que el piedemonte represente un área promisoria
para la implementación de diferentes sistemas de producción agrícola, sin embargo el
desconocimiento de la dinámica de las funciones ecosistemicas en este paisaje,
imposibilitan determinar cómo estas actividades puedan afectar la calidad de los suelos y
especialmente, la relación suelo-planta-atmósfera en el contexto de cambio climático. De
esta manera, es imperante la necesidad de evaluar y decidir las técnicas adecuadas para
Introducción 3
medir, predecir y representar los valores de stock de carbono en el suelo; de forma que
pueda utilizarse como indicador para monitorear los efectos que ejercen los sistemas de
producción agrícola (transitorios, pasto mulato, pasto asociado a arachis, cítrico asociado
a arachis, caucho, palma, salpicón (plátano y mango) sobre la dinámica del carbón y sus
aportes al cambio climático.
La MO representa un atributo esencial para mantener la capacidad productiva de los
suelos, por ejemplo el rendimiento de los cultivos ha sido correlacionado con contenidos
de MO, (Russel, 1961; Manlay et al., 2007), y es considerada como uno de los principales
indicadores de la calidad del suelo (Allison, 1973; Reeves, 1997; Díaz-Zorita et. al., 1999),
ya que influye sobre diferentes características físicas, químicas y biológicas
(Franzluebbers, 2002). El carbono es el principal componente de la materia orgánica (MO)
del suelo con contenidos medios de 58%, y puede ser efectivamente analizado en
laboratorio, descomponiendo la MO, mediante un proceso llamado Pirolisis (Cuevas,
2005).
Dentro de los diferentes métodos para determinar carbono y su stock en el suelo, se
encuentran las técnicas de walkley black (combustión húmeda), analizador elemental
(combustión seca), simulación mediante modelos como el CENTURY y predicciones
mediante Espectroscopia del infrarrojo Cercano (NIR por sus siglas en inglés). Todas
estas, son herramientas útiles y confiables, sin embargo, es necesario decidir cuál de
ellas es apropiada para los análisis de interés, según el tipo de suelo, el tipo de carbono
a analizar y el objetivo propuesto.
Las hipótesis planteadas para este estudio son las siguientes:
Es posible estimar los cambios temporales en el stock de carbono del suelo
mediante el uso de modelos dinámicos y sistemas de información geográfica (SIG)
El cambio en el stock de carbono del suelo puede estar influenciado por los tipos
de uso de la tierra
El stock de carbono orgánico del suelo puede ser usado como indicador de su
calidad para monitorear los efectos del cambio climático sobre sistemas agrícolas
del piedemonte llanero de Colombia
4 Introducción
Objetivo General
Determinar el stock de carbono del suelo, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero. Área representativa, C.I. Corpoica La Libertad (Meta, Colombia), para
posibilitar el monitoreo de los efectos de los cambios de uso de la tierra en el contexto del
cambio climático.
Objetivos específicos
Determinar la influencia de diferentes sistemas agrícolas (transitorios, pasto
mulato, pasto asociado a arachis, cítrico asociado a arachis, caucho, palma,
salpicón (plátano), y mango), en el stock de carbono en el suelo.
Estimar los cambios del stock de carbono en el suelo, mediante una simulación
con el modelo CENTURY treinta y ocho años antes de 2011 y cuarenta y un años
después del mismo año.
Comparar la modelación del stock de carbono mediante la metodología NIR, con
los valores obtenidos en laboratorio.
1. Marco conceptual
El suelo cumple un papel fundamental en el ciclo biogeoquímico del carbono (C), como
principal reservorio de carbono orgánico (CO) en los ecosistemas terrestres (Nair & Nair,
2014). Almacena aproximadamente 2.344 Gt de C de las cuales 1500 Gt se encuentran
en el primer metro de profundidad con cerca de 615 Gt en los primeros 20 cm (Jobbágy &
Jackson, 2000; Stockmann et al., 2013). Sin embargo, los cambios en la cobertura vegetal
y en el manejo del suelo alteran el sistema edáfico y ocasionan cambios en su dinámica
de almacenamiento (Schrumpf et al., 2011). Ya que disminuye la entrada de materiales
orgánicos vegetales, en el caso de remoción de la cobertura vegetal, o por la remoción del
suelo por el uso de maquinaria. Estas actividades contribuyen en la merma del carbono
orgánico del suelo, haciendo que éste actúe como fuente de CO2 a la atmósfera, lo cual
repercute en cambios en la temperatura terrestre (FAO, 2007; FAO, 2015), y en que sea
necesaria la aplicación de fertilizantes orgánicos e inorgánicos (Gómez et al., 1999; Calle
& Murgueito, 2012; Croft et al., 2012). Cuando se trata de sistemas de ganadería, se
producen cambios en la estructura del suelo debido al sobrepastoreo, generándose
también compactación, disminución en la estabilidad de los agregados del suelo, reducción
en la porosidad total del suelo y por ende, en la aireación y capacidad de infiltración. En
resumen las actividades sobre la cobertura y el manejo del suelo afectan la estabilidad de
los ecosistemas agrícolas, el almacenamiento y regulación del agua, la función de
sumidero de C y la capacidad productiva del suelo (Calle & Murgueito, 2012; Fromin, et.al.,
2012; Croft et al., 2012).
En suelos tropicales empleados para labores agropecuarias, la pérdida de COS puede
oscilar entre 20 y 80 Mg ha-1 año-1, como consecuencia del cambio de cobertura vegetal
por la implementación de prácticas agrícolas, deforestación o por cambios de uso de la
tierra (Céspedes et al., 2012).
6 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
1.1 La función del suelo en el ciclo biogeoquímico del
carbono
En la geosfera existen diferentes reservorios de carbono. La variación en la cantidad del C
total de la tierra se debe a las pequeñas ganancias o pérdidas que resultan del choque de
los meteoritos y al escape de moléculas de bajo peso molecular hacia el espacio. Aunque
la cantidad de C no cambia, la forma y el comportamiento geoquímico en que se encuentra,
puede variar. (Macías & Camps, 2010).
A pesar de que el C es esencial para el desarrollo de la vida en la tierra, se encuentra en
menor proporción en la corteza terrestre, con valores medios de 3%, menos que el oxígeno
(O) (47%), el silicio (Si) (28%) o el aluminio (Al) (18%) (Hamblin & Christiansen, 1998).
Los procesos físicos, químicos y biológicos que ocurren en el suelo, son fundamentales en
el ciclo global de C ya que intervienen en la dinámica del intercambio suelo-atmósfera a
través de la producción y mineralización de CO (Wiaux et al., 2014). Las variaciones en la
concentración total de CO durante dicho intercambio, se diferencian de manera importante
entre cada uno de los reservorios (Figura 1-1 y Tabla 1-1), encontrándose mayor cantidad
en el suelo 1.200 Gt, el cual tiene incremento anual aproximado de 0.1 Gt, y se liberan 0.4
Gt como gas a la atmósfera y 58 Gt mediante descomposición. Para el caso de la
vegetación, concentra cerca de 550 Gt con incremento anual cercano a 0.7 Gt, del cual se
emiten aproximadamente 1.6 Gt a la atmósfera debido al cambio en el uso de la tierra y 59
Gt por respiración.
Tabla 1-1. Estimación de la capacidad de los diferentes reservorios de C terrestre en Gt C.
Reservorio C inorgánico C orgánico C Total
Atmósfera 760 760
Biósfera 560 560
Edafosfera 1.700 1.500 3.200
Hidrosfera 38.000 1.000 39.000
Litosfera 48.000.000 17.000.000 65.000.000
Fuente: Tomado de Lal y colaboradores (2001)
Capítulo 1. Marco Conceptual 7
La dinámica de cambio en todas las concentraciones mencionadas, puede ser utilizada
para evaluar los efectos de los cambios en el uso de la tierra sobre la calidad del suelo a
largo plazo (Nair & Nair, 2014).
Figura 1-1. Compartimentos y flujos bioquímicos del carbono.
Fuente: Modificado de Houghton (2007).
1.2 Dinámica del carbono orgánico en los suelos
La dinámica del carbono en el suelo (Figuras 1-2) está relacionada con la evolución de la
MO y es condicionada por la vegetación (ingreso de residuos, composición de las plantas),
por el clima (temperatura y humedad) y las propiedades del suelo (textura, contenido y
mineralogía de la arcilla y acidez) (FAO, 2001). Además, el depósito de materia orgánica,
8 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
la mineralización de la misma y las condiciones climáticas bajo las cuales ocurren estos
procesos, son considerados fundamentales en la dinámica del C (Figuras 1-3 y 1-4), a
través del almacenamiento (secuestro de C) de material húmico protegido por las
partículas finas del suelo (arcilla) y el retorno del C inestable a la atmósfera (emisión de
CO2) (Kern & Johnson, 1993; FAO, 2002; Reicosky, 2002; Martínez et.al., 2008; Shan et.
al., 2014 y Lal, 2014).
Figura 1-2. Esquema simplificado de la transformación de la materia orgánica en el suelo.
Fuente: Losada, 2013
Las condiciones aeróbicas del suelo juegan un papel importante en la dinámica del C, ya
que allí, la mayor parte del carbono que entra es inestable y solo una pequeña fracción,
aproximadamente el 1% (55 Pg año-1) se acumula de forma permanente, como fracción
húmica (0.4 Pg año-1) (FAO, 2001). En contraste, condiciones anaeróbicas limitan la
degradación de la materia orgánica del suelo, favoreciendo el almacenamiento de carbono
(Shan et. al., 2014). Adicionalmente, la cantidad de oxigeno determina el intercambio de
CO2 desde el suelo a la atmósfera (Fassbender & Bornemisza, 1994).
Capítulo 1. Marco Conceptual 9
Figura 1-3. Tipos de humus según la condición o el régimen hídrico.
Fuente: Fassbender, (1994)
Figura 1-4. Modelo de la dinámica del carbono en el suelo con tiempos de residencia.
Fuente: FAO, 2001.
Fracción orgánica (menos estable)
Humus
(fracción más estable)
Humificación (Ácidos húmicos)
Humus bruto (Distrofia)
Moder (Oligotrofia)
Mull (Eutrotrofia)
Transformación puede durar Entre 10 – 20 años
Estado intermedio
Transformación rápida si la temperatura es alta y las condiciones edafológicas son optimas
10 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
El intercambio de CO2 entre el suelo y la atmósfera depende también de la textura del
suelo. Así, en suelos con textura fina, el CO2 se acumula con la profundidad, mientras que
en texturas gruesas, la concentración de este gas es menor (Fassbender & Bornemisza,
1994). En condiciones anaeróbicas, la concentración del CO2 aumenta y la de O2 se
reduce, mientras que en ambientes aeróbicos, el volumen de CO2 (producido) tiende a ser
igual al volumen de O2 (gastado), siendo asimilado del 20 al 40% de C presente en el
substrato del suelo (Tabla 1-2). La humedad también, juega un papel importante en este
hecho, ya que altos niveles de humedad interfieren en el movimiento del aire, reduciendo
así la tasa de transformación de la MO y el abastecimiento de oxígeno.
Tabla 1-2 Rutas de descomposición de materiales orgánicos en el suelo en función del potencial
de reducción.
Ruta/Condición Principales transformaciones y resultados
Respiración aeróbia (Reducción de O2 y Eh ≥ 300 mV
La descomposición genera gran cantidad de energía, CO2 y biomasa microbiana
Respiración anaerobia facultativa (Eh entre 100 y 300 mV, reducción de NO3
- ,y con Eh entre -100 y 100 mV se da la reducción de Fe y Mn)
La descomposición produce aminoácidos, carbohidratos y ácidos grasos de cadena larga, los cuales son usados para producción de biomasa. Produce NH4
+ que sufre nitrificación en la zona con Eh entre 100 y 300 mV y causan la reducción de desasimilación de NO3
- para NH4+, N2O y N2. En la zona
con Eh entre -100 y 100 mV, ocurre una reducción del Fe2O3 para Fe+2 y del MnO2 para Mn+2. Hay producción de CO2 en la reducción de los metales, que es inhibido en la presencia de O2
Respiración anaerobia (Eh=-200 a -100 mV ocurre la reducción del SO4
2- y ≤ -200 mV la formación del metano)
La descomposición produce las mismas sustancias, como en la respiración anaerobia facultativa, las cuales causan la reducción de SO4
2- o sufren fermentación ácida, produciendo ácidos grasos de cadena corta CO2 y H2 que puede ser oxidado en la zona aerobia, así como el H2S produciendo CO2 y SO4
2-. Si el CH4 alcanza la zona oxidada (Eh ≤ 300 mV), este es oxidado a CO2. El H2S producido se convierte en FeS en la presencia de Fe.
Fuente: Moreira & Siqueira (2002).
Capítulo 1. Marco Conceptual 11
El suelo tiene diferentes reservorios de C con variados tiempos medios de residencia (de
uno a pocos años), dependiendo de la composición bioquímica (ej. La lignina es más
estable que la celulosa, desde décadas a más de 1000 años -fracción estable-) y de la
composición o el tipo de uniones químicas (Breemen & Buurman, 2002; FAO, 2002; Macías
et al,. 2010). Acorde con la Figura 1-5, para la fracción de C estable hay una diferencia
entre la protección física, la química y la captura. La protección física es un encapsulado
de los fragmentos de la materia orgánica por las partículas de arcilla o por los macro o
microagregados del suelo (Puget et al., 1995 y; Balesdent et al., 2002); en tanto la
protección química hace referencia a las uniones especiales de la materia orgánica con
otros constituyentes del suelo (coloides o arcillas) relacionados específicamente a
compuestos orgánicos del suelo muy estables. Finalmente, la captura tal como se usa en
el Protocolo de Kyoto, no toma en consideración esas distinciones y es equivalente al
término almacenamiento de cualquier forma de carbono
Figura 1-5. Materia orgánica en la matriz del suelo. ePOM: partículas externas de materia
orgánica; iPOM: partículas internas de materia orgánica.
Fuente: FAO, 2002
Existen numerosos mecanismos por los cuales el COS se estabiliza en los suelos (Six et
al., 2002; Macías et al., 2010). Estos, generalmente son agrupados en: a) conservación
selectiva de compuestos recalcitrantes, b) falta de acceso para los organismos
descomponedores y c) interacciones entre la materia orgánica, los minerales y los iones
metálicos (Macías et. al., 2010).
12 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
La recalcitrancia y estabilización química del COS se debe a la propia composición química
de las moléculas orgánicas y a las interacciones entre los grupos funcionales de COS y de
los arcillo-minerales (Jenkinson & Rayner, 1977; Fisher et. al., 1998; Krull et al., 2003;
Tornquist, 2007; Castro & Vera, 2014; Lal, 2014). Macías y colaboradores (2010),
sostienen que en un único perfil del suelo, e incluso dentro de un mismo horizonte, pueden
producirse varios mecanismos de estabilización, como consecuencia, se encuentran en
ellos cadenas de formas de carbono orgánico de diferente labilidad y, en un continuo que
va desde fácilmente mineralizable a las formas recalcitrantes (Figura 1-6). Sin embargo, el
potencial de un suelo determinado para estabilizar la materia orgánica en el sitio y
horizonte específicos, generalmente está asociado a la relación entre el C activo y los
metales reactivos, favoreciendo así la floculación y la estabilización (Macías et al., 1988;
Macías & Camps, 2010).
Figura 1-6. Humus estabilizado por fuerzas débiles (interacciones hidrofóbicas y enlaces de H)
procesos de adsorción. Tomado de Macías y colaboradores (2010).
Capítulo 1. Marco Conceptual 13
Adicionalmente, acorde con Kögel-al Knabner y colaboradores (2008), en las superficies
funcionales de los minerales es posible tener diferentes tipos de unión con la materia
orgánica del suelo, como se describe a continuación.
1) En las superficies con un solo grupo coordinado OH (óxidos de Fe y Al, alófano,
imogolita). Este mecanismo es especialmente importante en los niveles de pH donde las
superficies están cargadas positivamente, como generalmente se presenta en Ferralsoles
y Nitisoles y cuando el grado de cristalinidad es baja, por ejemplo, Andosoles.
2) En las caras de los agregados que incluyen cargas de extensión siloxano
(vermiculita, esmectita). Este mecanismo es particularmente importante en vertisoles,
donde las arcillas montmorillonitas son abundantes.
3) Áreas sin cargas siloxano, como por ejemplo en arcillas caolinita, típicas de suelos
altamente degradados, tales como Acrisoles y Ferralsoles.
4) Además, (Duxbury et. al., 1989; Costa et. al., 2011), afirman que en Oxisoles, donde
existe una protección física y estructural coloidal las características texturales favorecen la
alta adsorción de compuestos orgánicos en la superficie, específicamente de las partículas
de arcilla (Trujillo, 2000; Zinn et al., 2007; Costa et al., 2011; dos Santos et al., 2014).
En oxisoles, el carbono de sustancias húmicas y el carbono orgánico asociados a los
minerales, pueden tener una mayor proporción del carbono orgánico total (COT), como lo
demostraron Santos y colaboradores (2014), en su estudio en los cerrados de Brasil. Esto
demuestra la fuerte interacción de la materia orgánica con los óxidos de Fe y Al y con la
caolinita. También, en oxisoles de Colombia Cortes y colaboradores (2007) encontraron
que la fracción humina-arcilla presenta mayor grado de humificación y que esta se
incrementa con la profundidad. Estos aspectos determinan que a mayor profundidad,
mayor tiempo de residencia (Breemen & Buurman, 2002; FAO, 2002; Cortés, et. al., 2007;
Macías et. al., 2010, Lal, 2014).
Éstos últimos tienen potencial para sostener pastos introducidos solos o en asocio con
cultivos, los cuales acumulan grandes cantidades de C a través de la profundidad del perfil
del suelo (Fisher et.al., 1998; Trujillo, 2000; Castro & Vera, 2014; Ortiz, 2015),
contradiciendo así la asunción de que los suelos tropicales tienen contenidos bajos de
materia orgánica, en especial los oxisoles (Sánchez, 1981). Según Jenny y colaboradores
14 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
(1948) la relación inversa entre el contenido de materia orgánica y la temperatura media
anual en suelos de los Estados Unidos expuesta por la misma autora en los años cuarenta
y cincuenta, fueron refutadas al incluir en sus estudios, suelos de Costa Rica y de
Colombia.
Acorde con Lal (2014), los oxisoles son muy estables debido a que los óxidos de hierro y
aluminio estabilizan los microagregados (Figura 1-7). A su vez, la proporción de
macroagregados en suelos con pastos fertilizados aumenta, al ser mayor la estabilidad de
los agregados, la cual es reforzada por los sistemas de raíces profundas y abundantes
(Trujillo, 2000).
Figura 1-7. Formación de microagregados del suelo (<250 µm) y estabilización de la materia
Fuente: Lal, 2014
1.2.1 Manejo del carbono en suelos de áreas tropicales Existen aproximadamente 3,4 billones de hectáreas de bosques en el mundo, de las cuales
2000 millones de hectáreas corresponden a bosques tropicales. De esta área
aproximadamente el 13% ubicada en América del Sur, el 19 % en África y el 27 % en Asia,
ha sido deforestada a causa del cambio del uso de la tierra; transformándose de coberturas
naturales a cultivos o pasturas, con actividades como tala de madera para leña y para
construcción, que contribuyen con emisiones de C hacia la atmósfera en forma de CO2 y
CH4 (FAO, 2002; Kanninen, 2003). En tanto, las tierras de pastoreo suman alrededor de
3000 millones de ha, y se estima que entre el 14 y 31 % del total están degradadas (FAO,
Capítulo 1. Marco Conceptual 15
2002). No obstante, se pronostica que cerca de 900 millones de hectáreas de terrenos
naturales corren el riesgo de degradarse para 2050, debido a la intensificación del uso de
los suelos que busca responder a la creciente demanda de alimentos (PNUMA, 2014). De
esta manera, puede esperarse que se encuentren cada vez menos cantidades de COS,
ya que la materia orgánica presente en él, será cada vez menor por causa de la
degradación.
El área de bosques en Colombia para el 2004, era aproximadamente 55 millones de
hectáreas, ocupando el séptimo lugar en el mundo. Sin embargo, hay evidencias que la
cobertura boscosa ha disminuido de manera importante a través de los años. En algunos
casos reemplazada por usos pecuarios, con alrededor de 10.000 ha/año de pérdidas de
bosque (IDEAM, 2008). Acorde con Etter (2010), el país estaba constituido originalmente
por un 80% de bosques, 18% de sabanas y otras formaciones abiertas y 2% de páramos.
Con cambios en el uso de la tierra, para conformar en el año en referencia el 52% de
bosques, 12.5% de sabanas y el 1.1% de páramos, y 34% en tierras agrícolas y ganaderas.
Datos más recientes muestran aumentos del 4,9 millones de hectáreas en usos agrícolas,
con el (60%) de cultivos permanentes, 33% de cultivos transitorios y 7% de forestales
(PNUD, 2011; Perfetti, 2013).
Se considera que las prácticas mencionadas promueven la degradación de las tierras, la
disminución de los rendimientos de los cultivos y, la disminución del stock de carbono en
los ecosistemas (Davidson et al., 2012; FAO, 2014; Grimaldi et al., 2014). A escala
regional, en la Amazonía se evidencia un proceso de transición hacia la degradación,
debido a las actividades de deforestación y quema, en prácticas agrícolas (Davidson et al.,
2012).
1.2.2 El carbono como indicador de calidad del suelo, en el
contexto de cambio climático La acumulación de COS es controlada por una serie de factores naturales y
antropogénicos entre los que sobresalen el clima, el uso de la tierra, la topografía, el
material parental y las propiedades intrínsecas del suelo (Poeplau & Don, 2013; Wang et
al., 2013). Por lo tanto comprender su relación con estos factores es primordial para
cuantificar los contenidos actuales de COS e identificar el papel potencial del suelo como
sumidero o fuente de C (Lantz, 2001; Lal, 2004) y su relación con concentración de CO2
en la atmósfera (Poeplau & Don, 2013).
16 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
El COS afecta positivamente las características físicas del suelo, favorece la agregación
de las partículas, permitiendo una adecuada distribución de poros y la consecuente
capacidad de retener agua y disponerla para las plantas o regular su tasa de infiltración,
contribuyendo así en la reducción de la escorrentía y la susceptibilidad de los
agroecosistemas a la sequía (Lal, 2012; Lal, 2014).
Según Salvo y colaboradores (2010), el COS es uno de los principales indicadores de
calidad del suelo, ya que sus tamaños de fracción son susceptibles al cambio (más
fraccionamiento), por diferentes usos e intensidades de manejo del suelo. Diversos autores
sostienen que la labranza convencional promueve la degradación química, física y
biológica de las propiedades del suelo, disminuyendo su calidad (Tornquist, 2007; Ernst et
al., 2009; Salvo et al., 2010; Khawmee et al., 2013). Tal es el caso en suelos con sistema
de rotación de cultivos-pastura en Colonia-Uruguay. Allí, se encontraron pérdidas de 80 kg
ha-1 año-1 de COS en el horizonte Ap, mientras que en suelos con sistemas de cultivo
continuo, las pérdidas de COS fueron de 540 kg ha-1 año-1 (Salvo et al., 2010). Sin
embargo, la estimación de stock de COS es variable aún en los sistemas de conservación,
debido a que en la dinámica del COS están involucrados además, aspectos como la
mineralogía, las condiciones climáticas, las entradas de residuos y de nitrógeno (Macías
et al., 2010; Salvo et al., 2010). Con la disminución de materia orgánica, se pierde COS, el
cual retorna a la atmósfera como C inestable, lo cual se conoce como emisiones de CO2
(Kern & Johnson, 1993; FAO, 2002; Reicosky, 2002; Martínez, et. al., 2008; Shan et. al.,
2014; Lal, 2014; Dorronsoro, 2014).
Según Lorenz & Lal, (2005), los cambios en el uso del suelo influyen de forma directa en
los procesos de mineralización, lixiviación y erosión, ocasionando pérdidas hasta de un
70% del COS. Contribuyendo de esta forma, con cerca del 20% de las emisiones globales
de CO2 (Panel Intergubernamental de Cambio Climático – IPCC, 2007). Aunque el CO2 con
un potencial de calentamiento global (PCG) menor que el CH4 y el N2O su dinámica dentro
del ciclo del carbono se ha identificado como una de las principales causas de los aportes
al calentamiento (Reddy & Hodges, 2000; FAO, 2007; IPCC, 2007; Ferreira, 2008). Este
fenómeno, puede derretir el “permafrost” (Lal, 2014) ocasionando la liberación de hasta
436 Pg C y 29 Pg N hacia la atmósfera, el agua y ecosistemas de latitudes altas para el
2100 (Harden et al., 2012). Además, puede provocar aumentos en la mineralización de la
materia orgánica, agotando el COS. Según Dorronsoro (2013), las pérdidas de COS más
Capítulo 1. Marco Conceptual 17
intensas se llevan a cabo en climas con temperatura y humedad altas como en el trópico,
ocurriendo lo contrario en climas con temperatura y humedad bajas. En contraste, en zonas
con temperaturas bajas y escasa humedad, la mineralización es mayor. La tabla 1-3
muestra los valores de reserva de COS en cada uno de los ecosistemas mencionados, en
relación con su capacidad de almacenamiento, siendo más notorio el caso de desierto y
semi desierto, cuya reserva de COS de 35 a 42 Ton C/ha es la menor de todas.
Tabla 1-3. Estimaciones de las reservas de carbón orgánico en el suelo.
Ecosistemas COS Área
(109 ha) COS
(Pg C) %C Ton C/ha
Bosque
Tropical
3 121-123 1.76 213-216
Templado
2-4 96-147 1.04 100-153
Boreal
6-9 247-344 1.37 338-471
Sabanas tropicales y pasturas
3 110-117 2.25 247-264
Templado
Pastizales y matorrales
3-6 141-236 1.25 176-295
Tundra
3 121-127 0,95 115-121
Desierto y semidesierto
1 35-42 4.55 159-191
Tierras cultivadas
2-3 80-103 1.60 128-165
Humedales
643 0.35 225
Tomado de Dorronsoro (2013)
El potencial de captura de C por el suelo se presenta como la opción remediadora del
exceso de emisiones globales de GEI, y se incrementa cuando se ejecutan prácticas
agrícolas de conservación, que propician la formación de complejos órgano-minerales y de
agregados estables. De esta forma, disminuyen las emisiones de GEI y los posibles efectos
del cambio climático (Townsend et al., 1995; Metz et al., 2007; Smith, 2012; Lal, 2014). Por
esta razón, en los últimos años, científicos y políticos han centrado su atención en el
estudio del potencial de captura de C del suelo y su comportamiento espacio-temporal, con
18 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
el fin de plantear el desarrollo de estrategias de adaptación, políticas de uso sostenible de
los recursos naturales y pago de servicios ambientales.
1.3 Métodos de laboratorio para determinación de carbono del suelo
Entre las técnicas analíticas existentes para la determinación del carbono, se encuentran
el método de combustión seca (Davies, 1974) y el método de Walkley-Black en el cual se
usa la combustión húmeda (La Manna et al., 2007; Burgos et al., 2012). El método de
pérdida por ignición o pirolisis, consiste en la determinación de la pérdida de peso de una
muestra de suelo, luego de exponerla a diferentes temperaturas. Dicho proceso se
desarrolla en ausencia de oxígeno, resultando en diferentes tipos de gases (gas de
síntesis), líquidos (alquitranes y aceites) char (residuo carbonoso). Las temperaturas
necesarias para llevar a cabo este proceso está entre 150 – 900 °C (Cuevas, 2005) (Tabla
1-4), sin embargo la temperatura específica para la determinación de C por ignición está
entre 430 y 600 °C, durante 24 horas (La Manna et al., 2007; Burgos et. al., 2012).
El método de Walkley-Black (combustión húmeda) se lleva a cabo mediante una oxidación
con dicromato de potasio en medio de ácido sulfúrico. El calor de la disolución del ácido
eleva la temperatura provocando la oxidación del CO. Posteriormente, el excedente de
dicromato se titula con una sal ferrosa, para la correspondiente cuantificación del CO (La
Manna et al., 2007; Burgos et al., 2012).
Adicionalmente, la técnica de analizadores elementales, es otro método útil para la
determinación de carbono total (CT) de forma directa y cuantitativa, sin causar problemas
de contaminación al incinerar completamente las muestras, produciendo gases como CO2,
H2O y N2, los cuales son cuantificados mediante cromatografía de gases (Álvarez, 1995;
Leco, 2009; Leco, 2015).
Capítulo 1. Marco Conceptual 19
Tabla 1-4. Reacciones químicas resultantes, a diferentes temperaturas en la pirólisis.
Temperatura (° C) Reacción química
100-120 Deshidratación
250 Desoxigenación y desculturización: disociación molecular de agua y dióxido de carbono, se libera sulfuro de hidrógeno
340 Rotura de enlaces en compuestos alifáticos: se libera metano y otros compuestos alifáticos ligeros
380 Fase de carbonización: Concentración de carbón en los residuos
400 Rotura de enlaces C-O y C-N
400-600 Descomposición de los materiales bituminosos: generación de aceites y alquitranes. Carbonización de baja temperatura
600 Craking de los materiales bituminosos: generación de hidrocarburos gaseosos de cadena corta e hidrocarburos aromáticos (derivados del benceno)
>600 Dimerización de las olefinas (etileno) a α-butileno; reacción de etileno a ciclohexano; generación de compuestos aromáticos volátiles
550-800 Producción de metano e hidrocarburos superiores
>800 Producción de gas de bajo poder calorífico
Fuente: Cuevas, 2005
1.3.1 Espectroscopia VIS-NIR-MIR (Visible-Infrarrojo cercano-
Infrarrojo medio)
La espectroscopia NIR (Infrarrojo cercano) hace referencia a un método de análisis
químico cuantitativo cuando se usa para predecir contenidos de constituyentes químicos y
cualitativo, cuando es usado para identificar una propiedad o producto de acuerdo a su
firma espectral (Davrieux, 2014; Camacho et. al., 2014; Soilmontana, 2015; De Oliveira,
2015). Esta técnica fue usada inicialmente en el análisis de productos agrícolas, en los
cuales se observó que unos granos de cereal mostraron mayor absorción de energía
electromagnética en la región NIR. A partir de esto, fue sugerida para ser utilizada en la
medición de proteínas en granos, aceite y humedad, ya que en las mediciones con NIR,
influye la forma y el tamaño físico de las partículas de la muestra. Como se observa en la
20 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Figura 1-8, la transmisión y reflectancia de la luz es afectada por el tamaño de la muestra
y la energía no reflejada no está directamente relacionada con la absorbancia (Stenberg
et al., 2010).
Figura 1-8. Ilustración de reflectancia difusa.
Fuente: Stenberg y colaboradores (2010).
La luz monocromática producida por un equipo NIR puede interactuar con la muestra de
diferentes formas, haciendo reflexión, refracción, absorción y difracción (Sapienza et al.,
2008). Para el caso de los suelos, la energía electromagnética es transmitida a sus
componentes, resultando en respuestas espectrales (reflectividad-absorbancia) de cada
uno de los atributos propios (químicos, físicos, mineralógicos y biológicos) del suelo que
tienen la capacidad de reflejar la energía en diferentes longitudes de onda (Figuras 1-9 y
1-10) del espectro electromagnético (Viscarra et al., 2006; Sapienza et al., 2008; Stenberg,
2010; Camacho, 2013; Camacho et. al., 2014; Duran, 2015; De Oliveira, 2015).
Capítulo 1. Marco Conceptual 21
Figura 1-9. Regiones del espectro electromagnético que han sido abordadas en el estudio de
propiedades del suelo.
Fuente: Camacho, 2013.
Figura 1-10. Respuesta espectral –absorbancia- de una muestra.
Fuente: Sapienza y colaboradores (2008)
El NIR se ha utilizado en la predicción precisa y con bajo esfuerzo analítico de las
concentraciones totales y la variación espacial de nitrógeno y de carbono, entre otros
elementos del suelo (Camacho et. al., 2014; Duran, 2015; Guerrero, 2015; Soilmontana,
2015). Esta técnica además, es más rápida, oportuna y menos costosa (Viscarra et al.,
2006; Camacho et. al., 2014; Soilmontana, 2015) y pueden obtenerse valores de CO del
22 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
suelo confiables. Viscarrra y colaboradores (2006) demostraron que existe buena
correlación entre CO y las bandas de rangos 410, 570 y 660 del VIS.
1.4 Modelación de la materia orgánica
Según FAO (2015), la contribución de gases efecto invernadero (GEI) antropogénicos,
provenientes de aportes de la agricultura, la silvicultura y el uso de la tierra es alrededor
de 20-30 % del total. Además, estos usos del suelo, también aportan en la deforestación y
la pérdida de grandes cantidades de carbono contenidos en las turberas.
Los cambios en el stock de carbono se presentan de manera diferente, según sea el tipo
de uso del suelo; por ejemplo, se espera que en suelos de bosque, la distribución de
carbono en profundidad sea menor que la de suelos con matorrales o con pasturas. Así,
el stock de C en los suelos de bosque es sensible al cambio de diferentes factores, entre
los que se encuentra el clima (Palosuo, 2008). Por lo anterior, definir el papel de los suelos
en el balance del carbono terrestre, en el contexto de calentamiento atmosférico, es una
de las aplicaciones de la ciencia del suelo más importantes en la actualidad (Palosuo,
2008; Kutsch y colaboradores, 2009), ya que el carbono almacenado en los suelos,
corresponde al mayor reservorio, adquiriendo de esta forma gran potencial para secuestrar
o liberar carbono a la atmósfera.
Los cambios en las reservas de carbono orgánico del suelo, son pequeñas, si se comparan
con el stock de carbono total en el suelo, haciendo difícil que pueda determinarse cualquier
cambio en las reservas de carbono por inventarios de datos repetidos (Kutsch y
colaboradores, 2009). Así, la disminución de las reservas de carbono del suelo debido a
diferentes formas de extracción se debe tomar en cuenta en el cálculo de los efectos netos
de su consumo de energía, lo cual requiere un método para evaluar la dinámica de
descomposición (Izurralde et al., 1996; FAO, 2004; Lopes, 2006; Palosuo, 2008; Rubio et
al., 2014).
Las mediciones basadas en flujo de carbono, también sirven para detectar los cambios en
el stock de carbono completo, pero la partición de los flujos en la vegetación y en los suelos
requieren medidas adicionales o modelamiento, aún más, al momento de extrapolar los
resultados de pocas mediciones (Baldocchi, 2003; Palosuo, 2008). Estas dificultades han
permitido el desarrollo de diferentes modelos dinámicos que permiten estimar el stock de
carbono y sus cambios (Palosuo, 2008), son modelos típicamente multi-reservorio, donde
Capítulo 1. Marco Conceptual 23
la actividad microbiana es expresada en las tasas de descomposición de los reservorios
del mismo modelo (McGill, 1996).
Estos modelos representan una herramienta útil que permite pronosticar el impacto positivo
o negativo de las prácticas de manejo en la dinámica del COS (Izurralde et al., 1996; FAO,
2004; Lopes, 2006; Rubio et al., 2014). Los autores Coleman & Jenkinson (1995), Izurralde
y colaboradores (1996); Powlson y colaboradores (1996); FAO (2004); reportan que de
evaluaciones realizadas a los modelos de simulación de materia orgánica RothC, Century,
CYY, DNDC, DAISY, NCSOIL, SOMM, ITE y Verberne, no presentaron diferencias
significativas con respecto a la precisión, sin embargo, a partir de una evaluación más
detallada hecha a los modelos Century, RothC, SÓCRATES, EPIC y DNDC, se estableció
que Century puede predecir a largo plazo tendencias razonablemente buenas, con más
opciones de manejo (Izurralde et. al., 1996; FAO, 2004). Palosuo (2008), sostiene que uno
de los mejores modelos para simular la dinámica de descomposición es el CENTURY, ya
que permite describir el carbono del suelo como un sistema multi-reservorio (Parton et.al.,
1987).
Según Metherell, et.al., (1993), CENTURY se ejecuta utilizando pasos de tiempo
mensuales y las principales variables de entrada del modelo incluyen (Tabla 1-5):
1) la temperatura media mensual y la temperatura máxima y mínima del aire,
2) la precipitación mensual,
3) el contenido de lignina de material vegetal,
4) el contenido de N, P, y S
5) la textura del suelo,
6) las entradas de N atmosférico y del suelo
7) los niveles iniciales de C, N, P y S en el suelo.
Las variables de entrada están disponibles para la mayoría de los ecosistemas naturales
y agrícolas o se pueden estimar a partir de la literatura existente. La mayoría de los
parámetros que controlan el flujo de C en el sistema se encuentran en el archivo fix.100.
Se puede optar por ejecutar el modelo considerando sólo la dinámica de C y N (NELEM =
1) o C, N y P (NELEM = 2) o C, N, P y S (NELEM = 3) (Metherell, et.al., 1993).
24 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Tabla 1-5. Unidades de parámetros principals en CENTURY. Tomado de Metherell, A.K. (1993).
Unidades de los parámetros principales en CENTURY
Paso del tiempo un mes (1/12 año o 0.083333 año)
Tiempo mínimo año
Materia orgánica del suelo gramos de C, N, P o S por m2
Material vegetal gramos de C, N, P o S por m2
Reservorios minerales gramos de N, P o S por m2
Temperatura grados centígrados
Precipitación Centímetros por mes
Fuente: Metherell, (1993).
El ambiente CENTURY, fue generado bajo lenguaje de programación FORTRAM. Para
introducir la información inicial al modelo, deben ser preparados 12 archivos que
contendrán todos los datos del sitio de interés, los cuales permiten la simulación de la MO
a partir de diferentes escenarios. Los archivos (Tabla 1-6) se denominan así; site.100,
crop.100, cult.100, fert.100, fire.100, fix.100, graz.100, harv.100, irri.100, omad.100,
tree.100, trem.100, y archivos con el histórico de uso y manejo (extensión sch), con la
programación de uso y manejo (extensión evt) y datos de precipitación y temperatura
(extensión wth). Además, cuenta con el módulo FILE100, es posible crear o modificar
cualquiera de los 12 archivos mencionados y el módulo EVENT100, con el cual se crean
los archivos con extensión sch y evt (Figura 1-11).
Figura 1-11. Relación entre los programas y estructuras de los archivos en el modelo CENTURY
Tomado de: Metherell, A.K. (1993)
Programación de cultivos
y eventos
Modelo de Materia
Orgánica del Suelo
Gráficos y listas
Administrador de archivos
Capítulo 1. Marco Conceptual 25
Tabla 1-6. Archivos de parámetros que definen las condiciones para simulación con el modelo
CENTURY.
No. Archivo Tipo de parámetro
1 crop.100 Parámetros para los tipos de producción agrícola
2 cult.100 Parámetros para una opción del tipo de prácticas culturales
3 fert.100 Parámetros para un esquema de fertilización
4 fire.100 Opciones para un esquema de uso del fuego en el cultivo
5 fix.100 Parámetros que durante la simulación permanecen fijos
6 graz.100 Parámetros para algún esquema de producción de gramíneas para pastoreo
7 harv.100 Esquema de cosecha en el cultivo
8 irri.100 Parámetros para el programa de riego en el cultivo
9 omad.100 Parámetros para el programa de aporte de materia orgánica al suelo
10 tree.100 Parámetros para el esquema de establecimiento de especies forestales
11 trem.100 Programa de aclareos, entresacas y cortas del arreglo productivo
12 lib1.100 Parámetros del sitio específico.
13 lib1.sch lib1.evt
Itinerario de acciones para la simulación. Mediante EVENT100, se especifican prácticas y tiempos de duración
14 lib1.wth Archivos opcionales con información histórica del clima del sitio, tomada de la estación meteorológica de La Libertad
Fuente: Rueda, J. (2011)
1.4.1 Simulación de Materia Orgánica en el modelo CENTURY. El modelo Century fue creado para simular la dinámica de nutrientes en pasturas de la
planicie central de Estados Unidos. Es uno de los más usados a nivel mundial para simular
la dinámica de la Materia Orgánica (MO). Según Lopes, (2006), mediante el Century es
posible simular la MO en ecosistemas con características diferentes, entre los que están;
pastos nativos, bosques, sabanas y cultivos agrícolas. Así, este modelo por ejemplo, fue
utilizado para evaluar la dinámica del COS en una microcuenca rural de Rio Grande do Sul
en Brasil, donde se cultiva tabaco desde los años 60; obteniendo resultados similares a las
mediciones de campo.
Acorde con FAO (2004), el modelo Century presenta una amplia accesibilidad, facilidad de
uso y complejidad, además de ser el más completo. Aunque, originalmente se desarrolló y
probó en condiciones de zona templada, es permanentemente actualizado de modo que
permite analizar una amplia gama de ecosistemas, incluyendo condiciones tropicales y
subtropicales. El modelo está bien documentado y existen abundantes publicaciones de
sus aplicaciones, como es el caso de FAO (2004) en Cuba y Méjico, Corbeels y
26 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
colaboradores (2006) en Brasil, Stolpe y colaboradores (2008) en Chile, y Tornquist y
colaboradores (2009) en Brasil. En Colombia, Rueda (2011), estimó la producción
biológica en bosques de los Andes colombianos para calificar la aptitud del modelo en la
predicción de la dinámica del carbono. Piñeiro (2006), mostró que el modelo además de la
capacidad para estimar las existencias de carbono, también puede evaluar hipótesis
relacionadas al comportamiento del C en diferentes escenarios de uso de la tierra como
pasturas, cultivos, bosques y sabanas y para evaluación e diferentes servicios
ambientales.
El modelo, como muestra la Figura 1-12, considera inicialmente, la información climática
del sitio de interés, como humedad, temperatura y nutrientes presentes en el suelo.
Además, considera la producción primaria neta (NPP) según el tipo de vegetación
presente, el c vivo, el c de material muerto relacionado con las actividades de labranza y
cosecha, el c estructural, metabólico y microbial en la superficie del suelo y en profundidad,
las emisiones de CO2, y tres fracciones de MO identificadas como c activo, c lento y c
pasivo, relacionadas con la textura del suelo (Parton et. al., 1987).
Para sistemas de pastizales / cultivos y forestales, el modelo CENTURY contempla
diferentes submodelos de producción de plantas, a un submodelo común de materia
orgánica del suelo. En tanto que, el modelo de sabana utiliza los subsistemas de pastizales
/ cultivos y forestales y permite que los dos subsistemas interactúen a través de efectos de
sombreado y de la competencia del nitrógeno. El submodelo de materia orgánica del suelo
simula el flujo de C, N, P y S a través de los residuos vegetales y los diferentes reservorios
inorgánicos y orgánicos en el suelo (Metherell, et.al., 1993).
Capítulo 1. Marco Conceptual 27
Figura 1-12. Reservorios y flujos de carbón en el modelo CENTURY. El diagrama muestra los
principales factores que controlan los flujos.
Acorde con la Figura 1-13, el modelo de producción vegetal contempla reservorios para
brotes, raíces vivas y material muerto. El potencial de producción máximo de cultivo, no
limitado por la temperatura, humedad o estrés por nutrientes, es determinado
principalmente por el nivel de radiación fotosintética activa, la tasa máxima de asimilación
neta de la fotosíntesis, la eficiencia de conversión de carbohidratos dentro de los
componentes de las plantas y la tasa de respiración de mantenimiento (Van Heemst,
1986). Así, el parámetro para la producción potencial máxima, contempla ambos
componentes, genético y ambiental (Metherell, et.al., 1993).
28 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Figura 1-13. Modelo de producción vegetal en CENTURY.
Tomado de: Metherell et. al, (1993)
Sin embargo, la distribución estacional de la producción en CENTURY, es controlada en
función de la respuesta de la temperatura, en lugar de la variación estacional de la
radiación fotosintética activa, de esta manera, el parámetro de producción potencial
máximo puede reflejar la producción vegetal sobre el suelo en condiciones óptimas de
verano. Este parámetro frecuentemente es usado para calibrar la producción de cultivos
predichos para diferentes ambientes, especies y variedades Metherell, et.al., (1993).
En CENTURY, la formulación del potencial de producción es basada en la producción
sobre el suelo, sin embargo, considera además, la distribución de raíces y ramas. El valor
usado se debe establecer de acuerdo a estimaciones de la producción potencial de
cultivos. En el caso de plantas C4, tienen mayor tasa potencial de crecimiento que las
plantas C3 debido a su mayor tasa de asimilación neta (van Heemst, 1986).
El crecimiento de la mayoría de las plantas muestra una curva de respuesta a la
temperatura del suelo de tipo sigmoidea, con un valor máximo de productividad relativa
Capítulo 1. Marco Conceptual 29
ubicado en la sima de la curva que corresponde con una temperatura óptima (Figura 1-
14). La tasa de crecimiento de las plantas dependerá de la respuesta a la temperatura,
combinada con la fotosíntesis y la respiración.
Figura 1-14. Impacto de la temperatura del suelo sobre el crecimiento potencial de diferentes
comunidades de plantas C3 y C4.
Tomado de: Metherell et. al., (1993)
Especies de la zona templada, presentan la menor tasa de productividad, entre los 0 ° y 5
°C de temperatura límite inferior del suelo. Desarrollan incrementos hasta un máximo de
productividad a temperaturas entre 20° y 25°, y luego decrece, a temperaturas de límite
superior entre 30° y 35°C. Para las especies tropicales, el óptimo de productividad
corresponde a una temperatura de 10°C (Figura 1-15). En CENTURY, la curva de
temperatura para cada cultivo es parametrizada mediante la función de densidad
generalizada de Poisson.
Figura 1-15. Impacto de la temperatura del suelo sobre el crecimiento vegetal potencial de
diferentes cultivos
Tomado de: Metherell et. al, (1993)
Temperatura del suelo (°C)
Temperatura del suelo (°C)
30 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Por otro lado, las condiciones de humedad reducen el crecimiento cuando se da la
siguiente situación:
𝐸𝑙 𝑎𝑔𝑢𝑎 𝑒𝑛 𝑒𝑙 𝑠𝑢𝑒𝑙𝑜 𝑒𝑛 𝑙𝑎 𝑧𝑜𝑛𝑎 𝑑𝑒 𝑟𝑎í𝑐𝑒𝑠+𝑃𝑟𝑒𝑐𝑖𝑝𝑖𝑡𝑎𝑐𝑖ó𝑛+𝑅𝑖𝑒𝑔𝑜
𝐸𝑙 𝑝𝑜𝑡𝑒𝑛𝑐𝑖𝑎𝑙 𝑑𝑒 𝐸𝑣𝑎𝑝𝑜𝑟𝑎𝑐𝑖ó𝑛 < 0.8
Acorde a la Figura 1-16, la pendiente de la relación lineal es dependiente de la capacidad
de retención de agua disponible en el suelo, la cual varía con la textura del suelo.
Figura 1-16. Impacto de la disponibilidad de humedad, en el potencial de crecimiento de las
plantas.
Tomado de: Metherell et. al., (1993)
Otro factor incluido en la estructura del modelo (Long, 1991), es el efecto de los cambios
de CO2 atmosférico, para poder predecir los efectos sobre la producción de cultivos. Los
efectos indirectos sobre la materia orgánica del suelo, procedentes de efectos sobre los
procesos de la planta, deben tenerse en cuenta en las simulaciones deben ser
considerados. La respuesta de la materia seca vegetal a las crecientes tasas de CO2 se
puede aproximar con una función de respuesta logarítmica (Gifford, 1979; Goudriaan,
1992):
Capítulo 1. Marco Conceptual 31
Donde:
NPPE y NPP0; corresponden a la producción primaria neta en ambientes enriquecidos y
control de CO2, respectivamente.
ß; es un parámetro empírico que oscila entre 0 y aproximadamente 0,7.
Acock, (1990) y Sinclair (1992), sostienen que la respuesta al incremento de CO2 se
presenta como efectos en:
La disponibilidad de C, mediante la estimulación de la fotosíntesis y la reducción de
la foto respiración. A este respecto, hay diferencias entre las plantas C4 y C3, ya
que las C4 tienen mayores tasas de fotosíntesis que las plantas C3. Sin embargo,
plantas como el maíz (C4) responde a niveles de 400 µmol CO2 / mol, mientras que
el trigo (C3), a niveles de 800 µmol CO2 / mol.
La disminución de la conductancia estomática (Rogers et.al., 1983; Morrison &
Gifford, 1984), que reduce la tasa de transpiración por unidad de área. La
transpiración reducida hace que la temperatura de la hoja aumente, lo que puede
aumentar la fotosíntesis (Acock, 1990). El incremento en la fotosíntesis y la
disminución en la transpiración, favorecen el incremento en la eficiencia de uso del
agua por la planta (Metherell, et. al., 1993).
El mayor efecto se manifiesta en la disminución en la concentración de N en las
plantas C3 (Schmitt & Edwards, 1981; Hocking & Meyer, 1991). Hocking & Meyer
(1991), encontraron que la concentración de N en la planta para un rendimiento
máximo de 90%, disminuye cuando los niveles de CO2 son elevados.
El aumento del crecimiento de las raíces, que afecta los niveles de MO del suelo.
La mayoría de los estudios que incluyen concentraciones elevadas de CO2 en
cereales, en el que se ha medido el crecimiento de la raíz, mostraron poco efecto
en la relación raíz – brote (Cure & Acock, 1986)
2. Materiales y métodos
2.1 Área de estudio
El área de estudio hace parte del denominado paisaje de piedemonte, cuya extensión es
de 22.561 km2. Éste se encuentra en la base de la cordillera Oriental entre 200 y 700
msnm, formando franjas estrechas y paralelas en los departamentos de Arauca, Casanare
y Meta (IGAC, 1999). Ocupando una extensión de 228.121 km2 de la Orinoquía
colombiana.
Los materiales parentales constitutivos del piedemonte (arcillas y conglomerados), son el
resultado del efecto denudativo de la cordillera Oriental (Pleistoceno), formando planos
inclinados con pendientes de 1 al 12%, con drenaje de patrón distributario a subparalelo y
disección ligera a moderada. En este paisaje se han se presenta relieve de colinas y lomas,
abanicos y terrazas. Estos dos últimos correspondientes al paisaje más conocido como
piedemonte depositacional, formado por abanicos coalescentes, recientes y subrecientes
de forma triangular, inclinados, con pendientes de 1 a 7%. Algunos han sido basculados,
recortados y reactivados por tectonismo; modelados por diferentes cauces fluviales que
descienden de la cordillera (IGAC, 1999). Las terrazas, se encuentran en la base de los
abanicos y las planicies aluviales y fueron originadas por tectonismo y unos casos y en
otros, por descenso del nivel de erosión regional (IGAC, 1999; Instituto Colombiano de
Geología y Minería - INGEOMINAS, 2004).
En las posiciones de vega y terrazas, se sitúan los suelos de mayor fertilidad, a pesar de
poseer pH alrededor de 5.5, medianos contenidos de materia orgánica, baja saturación de
aluminio, baja disponibilidad de fósforo y mediana a baja disponibilidad de calcio, magnesio
y potasio. Físicamente son suelos moderadamente profundos, de color pardo oscuro sobre
pardo amarillento, de texturas medias a moderadamente gruesas y de drenaje rápido
(IGAC, 1999).
34 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
El 90 % de la fracción arena es cuarzo y más del 50 %de la fracción arcilla es Caolinita con
óxidos amorfos de hierro y aluminio entre 5 - 15%. En estos suelos se presenta erosión
superficial ligera por escurrimiento difuso y erosión severa a moderada, debido a la
pendiente fuerte de los taludes (IGAC, 1999).
Como se observa en la Figura 2-1, el Centro de Investigación Corpoica, La Libertad (área
representativa del piedemonte llanero, franja paralela a la cordillera Ooriental), está
ubicado en las coordenadas 4º 03’ 150” Longitud oeste y 73º 28’ 45” Latitud norte y, 4º 07’
2” Longitud oeste y 73º 26’ 14” Latitud norte, en el municipio de Villavicencio – Meta, a 500
m.s.n.m. En la terraza alta (Te) de La Libertad, se encuentran suelos sin plintita endurecida,
bien drenados y de texturas medias a finas.
Cuenta con una superficie de 1352 ha, de las cuales, 201 ha corresponden a la terraza
alta. La mayor parte de su terreno es plano. Según Koppen (1968), la clasificación
climática, es cálido húmedo de sabana o tropical lluvioso de sabana. Se caracteriza por
presentar valores anuales promedio de precipitación de 2000 a 4000 mm y temperaturas
mayores a 24 °C, con mayor precipitación en los meses de abril, mayo y junio. Las menores
precipitaciones se dan entre los meses de noviembre a febrero (Anexo B). En el área hay
marcada influencia de los vientos Alisios, cuya dirección predominante es este – noroeste
(IGAC, 1973).
Figura 2-1. Localización del área de estudio.
Capítulo 2. Materiales y Métodos 35
2.1.1 Sistemas de producción estudiados
La Tabla 2-1 presenta un resumen de los sistemas de producción estudiados y sus
principales características de manejo y su distribución se presenta en la Figura 2-2.
Tabla 2-1. Sistemas de producción agrícola seleccionados para este estudio
Sistema de producción Manejo
Actual Anterior
Palma de aceite (Elaeis guineensis) 18 años
-Brachiaria decumbens degradada (1973 a 1990). -Frijol caupí (1991 a 1992)
-Preparación: 1 pase de rastra (15-20 cm) -Enmienda: Cal dolomita -Siembra en triángulo, 9 m distancia entre plantas. Densidad, 143 plantas/ha. -Fertilización:Urea y DAP. Después del primer año, fertilización con nitrax, roca fosfórica, KCl, kieserita y bórax Productividad promedio: 18 ton/ha
Transitorios: sorgo dulce (Sorgum vulgare), maíz (Zea mays) y soya (Glycine max)
-Pasto nativo hasta 1989 -Brachiaria decumbens (1990 – 1996)
-Preparación: Dos pases de rastra e incorporación del material vegetal removido al suelo. -Enmienda: Incorporación de 2000 kg/ha de cal dolomita con rastra. Soya (2 años): fertilizado con SFT (46% P2O5), KCl (60% K2O) y elementos menores (B, Cu y Zn), con dosis de 50 kg/ha de P2O5, 60 kg/ha de K2O y 10 kg/ha de borozinco Rotación con maíz, millo y sorgo dulce: fertilizaciones con N, P, K, B, Cu y ZN, y, correcciones de la acidez del suelo cada 3 a 4 años, con la aplicación de entre 1000 a 2000 kg/ha de cal dolomita
Caucho (Hevea brasiliensis) en 1999
Brachiaria decumbens degradada (1973 – 1998)
Preparación: Un pase de rastra y enmienda de cal dolomita (1.5 ton/ha) con cincel fijo Siembre en surcos dobles a cada 13 metros. Densidad 560 árboles por ha. Fertilización: Solución nutritiva de nitrógeno, fósforo, potasio, calcio, magnesio, azufre, zinc, cobre y boro, tres veces al año
Pasto mulato -Brachiaria decumbens degradada. - transitorios de arroz, soya, maíz y frijol caupí hasta 2007.
Preparación: Un pase de vertedera. Siembra: Al voleo e incorporación con pase de rastra
Cítrico naranja valencia (Citrus sinensis (L) Osbeck) en 1996
-Sabana nativa -Brachiaria decumbens (1973-1995) - Yuca, Arroz y Soya
-Preparación y enmienda: Un pase de rastra e incorporación de cal dolomita (3 ton/ha) y escorias thomas (1.5 ton/ha). Luego, yeso agrícola (1 ton/ha) -Fertilización: nitrógeno, fosforo y potasio en una relación de 3:1:3., además de boro, zinc, cobre y materia orgánica
Pasto en asocio con Arachis pintoi
Salpicón Misceláneo de cultivos de plátano, marañón, frutales
Mango 30 años de permanencia
36 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Figura 2-2. Distribución de los sistemas de producción seleccionados para este estudio
Como se ha mencionado, son ocho los sistemas de producción agrícola los de interés
para este estudio, sin embargo, no se hizo la simulación con el modelo CENTURY del C
en los sistemas mango, y cítricos en asocio con arachis, debido a que no se encontró
información correspondiente a estos sistemas, que pudiera ser relacionada en el modelo
de manera confiable
2.2 Procedimientos
Se partió de realizar una revisión del estudio Detallado de Suelos, escala 1:7500 (IGAC,
1973); el mapa de unidades geomorfológicas, a partir del cual se delimitaron los niveles de
Terrazas (Alta, Media y Baja); el mapa suelos (Figuras 2-3 y 2-4); los análisis de laboratorio
(Carbono). Considerando la necesidad de homogenizar el muestreo para la determinación
de carbono, se seleccionó la posición de terraza, la terraza alta, en el paisaje estudiado.
En campo, se confirmó la georreferenciación de los puntos seleccionados. Seguidamente
se hizo el muestreo, utilizando cilindros de 5 cm de largo, para obtener muestras sin
disturbar. También se tomaron muestras disturbadas para determinar la textura del suelo.
Capítulo 2. Materiales y Métodos 37
Figura 2-3. Mapa de suelos de La Libertad, a escala 1:7500.
Fuente: IGAC, 2004.
38 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Figura 2-4. Mapa de Geomorfología de La Libertad.
Fuente: IGAC, 2004
Capítulo 2. Materiales y Métodos 39
Todas las muestras se tomaron en calicatas (cuatro por lote como repeticiones), a las
profundidades: 0-5 cm, 5-10 cm, 10-20 cm, 20-30 cm, 30-50 cm, 50-75 cm, 75-100 cm y
100-125 cm o hasta donde era posible encontrar suelo (sección del suelo). En algunos
casos, solo fue posible tener muestras hasta los 75 cm. Entre los instrumentos para el
trabajo en campo, se utilizaron: palas, cilindros de volumen conocido, bolsas plásticas
(Figura 2-5).
Figura 2-5. Muestreo en C.I. La Libertad
En el laboratorio se utilizaron: tamices de número 10 (2.0 mm), 60 (< 0.25 mm) y 325 (0.044
mm), para seguir el procedimiento mostrado en la Figura 2-6; recipientes plásticos, horno,
balanza, macerador mortero, un analizador elemental (TruSpec CN Carbon Nitrogen
Determinator, LECO co., St. Joseph, Mi, USA) y un equipo NIR (FOSS NIR Systems 6500
Benchtop).
Se aplicó el método de fraccionamiento físico, recomendado por el Laboratorio de
Biogeoquímica del Instituto de Estudios Científicos y Tecnológicos, en la Universidad
Nacional Experimental Simón Bolívar, Venezuela1, el cual consiste en separar las
1http://www.escet.urjc.es/biodiversos/espa/investigacion/intercambio/doc/protocolos/Metodos_fraccionamiento_fisico.pdf
40 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
partículas de suelo por tamaño y/o densidad, evitando cambios químicos de la materia
orgánica del suelo, de forma menos destructiva y más selectiva (Hernández, 2010; Plaza
et al., 2014). En este caso se utilizó como medio de separación el agua, cuya densidad es
1g/cm3. En la Figura 2-6 se presenta el esquema metodológico
Figura 2-6.Esquema de los procedimientos seguidos en la metodología.
Luego de preparar las muestras, se determinó CT mediante el Analizador elemental y el
NIR, para posteriormente simular el stock de C con el modelo CENTURY, en diferentes
épocas (1973 a 2011 y 2011-2070). Se determinó además, la densidad aparente y la
textura del suelo, acorde a las metodologías de IGAC, (2006).
Pesar 250 g de suelo seco al aire
Tamizar a 2 mm
No. 10
Mezclar el suelo tamizado + agua
Reposo hasta sedimentación del suelo
Material + agua depositados
en recipiente de 500 ml.
Tamizar a 2 mm No. 10 Material resultante (FL)
Tamiz 0.25 mm No. 60
Material resultante (FP)
Tamiz 0.044 mm No. 325
Material resultante (FPF) Material + agua depositados en
recipiente de 500 ml.
Secado de muestras sedimentadas en estufa, a 60°
Pesado y macerado de muestras
-Determinación de C con Analizador Elemental -Determinación con NIR -Simulación con CENTURY
Capítulo 2. Materiales y Métodos 41
2.3 Procesamiento de datos
El stock de carbono se determinó mediante la fórmula propuesta por Rosenzweig & Hillel,
2000; Jantalia et al., 2007 y Moreno, 2008.
COS = a ρ C d
Donde
COS: masa de carbono orgánico en una masa de suelo de 1 cm de profundidad (Ton/ha)
a: área (en ha o en m2)
ρ: promedio de densidad aparente a una profundidad especifica (g/m3 )
C: concentración de carbono en el suelo (g C/kg suelo)
d: profundidad de la capa de suelo en m.
2.3.1 Análisis descriptivo de los datos
Los valores de stock de carbono obtenidos con el analizador elemental, se analizaron
estadísticamente mediante ANOVA para determinar la existencia de diferencias y su
significancia, al comparar sistemas de producción, profundidades y densidades aparentes.
Para el caso de la simulación con CENTURY, se aplicaron las fórmulas para validar la
confiabilidad de los datos simulados y determinar el porcentaje de precisión del modelo,
de la siguiente manera.
Coeficiente de correlación 𝑟 = 𝜕𝑥𝑦
𝜕𝑥𝜕𝑦
Acorde con Camacho (2015), es un índice resultante de dividir la covarianza entre el
producto de las deviaciones de dos variables, relacionadas linealmente. Los valores de r
varían entre -1 (correlación negativa) y +1 (correlación positiva).
Coeficiente de determinación R2 = 𝜎2𝑥𝑦
𝜎2 𝜎𝑋
2𝑦
Este coeficiente permite evaluar el nivel de ajuste de un modelo a los datos analizados,
una vez se mide la capacidad de predicción del modelo que ha sido ajustado. El R2 se
42 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
obtiene de dividir la variabilidad explicada por la regresión, entre la variabilidad total
(Mendoza, et.al., 2002).
Porcentaje de Error Medio (BIAS)
El BIAS (MPE por siglas en inglés) determina la tendencia de un modelo a sobre estimar
o subestimar los valores de una variable, es decir, mide el error
sistemático del modelo, mediante la diferencia entre el promedio
de mediciones observadas y un valor dado. El sesgo (BIAS),
puedes ser positivo o negativo (Gálvez, 2013).
Raíz del Error Medio Cuadrado
Corresponde a la raíz del promedio de los cuadrados del error de cada grupo de datos.
Este error puede utilizarse también, para comparar y
determinar la precisión de diferentes métodos de pronóstico,
utilizando las unidades de los datos originales (Gálvez,
2013).
2.3.2 Estimación de muestras atípicas en el procesamiento con NIR
Luego de obtener las curvas espectrales (absorbancia) de las muestras, se utilizó el
software WinISI para su procesamiento, en el cual se aplica un análisis de componentes
principales. En nuestro caso, se analizó el comportamiento de los datos a partir de los tres
primeros componentes. Las muestras atípicas, se determinaron mediante la distancia
(H>3) de Mahalanobis, con el fin de garantizar mayor confiabilidad del modelo a obtener
(De Maesschalck et.al., 2000; Camacho, 2013; Davrieux, 2014; Soilmontana, 2015). Se
aplica mediante la ecuación:
𝑑𝑖𝑗 = √(𝑥𝑖 − �̅�)𝑇𝐶−1((𝑥𝑖 − �̅�)
Capítulo 2. Materiales y Métodos 43
Donde;
xi: Vector que representa las calificaciones de los primeros componentes principales de
las respuestas espectrales
�̅�: Media de las calificaciones
𝐶−1: Inversa de la matriz de covarianza de las calificaciones para el conjunto de las muestras
2.3.3 Características cualitativas de las curvas espectrales
Las curvas espectrales de los suelos contienen información resultante de combinaciones
y superposiciones de respuestas espectrales de sus contenidos, lo que hace que la
información del suelo sea poco explícita. Por este motivo, surgen clasificaciones de
curvas espectrales de acuerdo al tipo de suelo (Stoner & Baumgardner, 1981) y, es
necesario analizar la intensidad de reflectancia y los picos característicos a lo largo de
todo el espectro (Viscarra, et.al., 2006a).
Obtención del modelo
Para elaborar el modelo, se contó con un total de 98 muestras, con las cuales se generó y
se calibró el modelo, obteniendo 92 muestras adecuadas para obtener el modelo final. Las
curvas espectrales fueron sometidos a un tratamiento matemático que consiste en pre-
procesarlas con la segunda derivada y los métodos de corrección de dispersión SNV
(Estándar Normal Variation) y “Detrend”, con el objeto de corregir la tendencia de los datos,
conforme lo especificado por Viscarra, et.al., 2006; Stenberg, et.al., 2010; Camacho, et.al.,
2014; Soilmontana, 2015), antes de la aplicación del análisis de componentes principales
(PCA), acorde la Figura 2-7.
Figura 2-7. Ejemplo de PCA (a) datos sin centrar (b) datos centrados
Tomado de: Castillo, 2007
44 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Luego, se aplicaron regresiones por mínimos cuadrados parciales (PLSR) entre los datos
espectrales y los valores de referencia que de acuerdo con Camacho, (2013) consisten en:
Determinación de enlaces de los vectores de ponderación
Calculo de los coeficientes de regresión
Calculo del factor de corrección
Estimación del atributo o propiedad
Además, se determinaron los errores (información sobre incertidumbre) del modelo por
medio del método de re-muestreo, a partir de la validación cruzada.
2.4 Simulación de los datos de carbono
Para la simulación del carbono, se utilizó la versión 4.0 del Century, cuya manipulación se
hace por medio de una interface con el programa Access y un editor de texto. La calibración
se hizo mediante la aplicación interactivo del modelo de equilibrio para 7000 años, con los
valores de producción neta de biomasa correspondientes a vegetación de sabanas
tropicales (PRDX = 800 g/m2 mes) (Parton et.al., 1993), y con los datos de clima y de suelo
propios del sitio de estudio. El stock de carbono resultante, es aproximado al stock medido
y reportado en el estudio de suelos de La Libertad (IGAC, 1973). Las variables respuesta
usadas en este análisis fueron; cantidad de C en la fracción lábil (som1ci(2,1), cantidad de
C en la fracción lenta de la materia orgánica som2ci(1) y cantidad de C en la fracción pasiva
de la materia orgánica som3ci(1).
Se propusieron escenarios considerando condiciones históricas (38 años antes) de clima,
uso y propiedades del suelo y a futuro, 60 años después de 2011. Los datos de los archivos
correspondientes se encuentran registrados en el Anexo C.
3. Resultados y Discusión
3.1 Stock de carbono en diferentes sistemas de uso agrícola del piedemonte. Área representativa, Corpoica La Libertad
3.1.1 % de CO en el tamaño de partícula del suelo de 2 mm
Se presentaron diferencias significativas entre los sistemas de producción (P<0.01) y
diferencias altamente significativas entre las profundidades (P<0.001) (Figura 3-1). Según
la prueba de Tukey, el mayor stock se encontró con el sistema mango y el menor con los
sistemas Pasto + Arachis, Pasto mulato y Salpicón (Tabla 3-1)
Tabla 3-1. Relación entre los porcentajes de CO mayores y menores de los sistemas agrícolas.
La gran cantidad de material vegetal muerto en la superficie del suelo, y la presencia de
raíces vivas y muertas a través del perfil del suelo del sistema mango, indican un constante
ciclaje y transformación de la materia orgánica. Teniendo en cuenta el tiempo de
establecimiento de cada uno de los sistemas; el de mango es el sistema con mayor edad (>
30 años), tiempo en el cual el CO ha podido alcanzar cierta estabilidad en profundidad,
encontrándose localizado y protegido entre los macroagregados del suelo. Es decir, es
posible que se encuentren fragmentos de raíces, de partículas externas de materia orgánica
(ePOM) y de partículas internas de materia orgánica (iPOM), encapsulados por las partículas
de arcilla o por los macro o microagregados del suelo según lo expuesto por Puget et al.,
Mango 14% > Cítricos + Arachis, Palma, Caucho y Transitorios
Mango y Palma 29% > Pasto + Arachis, Pasto Mulato y salpicón
Cítricos + Arachis, Palma, Caucho y Transitorios
17% > Pasto + Arachis, Pasto Mulato y Salpicón
46 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
1995; Balesdent et al., 2002; FAO, 2002; Martínez et. al., 2008; Macías et. al., 2010; Piccolo,
2012 y Rodríguez, 2014. Las condiciones del sistema palma son similares a los del mango,
en cuanto a la abundancia de raíces a través del perfil del suelo y al tiempo de
establecimiento (18 años), mayor que el de los otros sistemas.
Figura 3-1. % CO con relación a los diferentes sistemas de producción, la profundidad y la
densidad del suelo
3.1.2 Stock de CT en el tamaño de partícula del suelo de 2 mm (fracción liviana)
Para este caso, se presentaron diferencias significativas entre los sistemas de producción,
las densidades y las profundidades (P<0.01) (Figuras 3-2 y 3-3). La prueba de Tukey arroja
como resultado, que el mayor stock de CT corresponde a los sistemas Pasto + Arachis y
Mangot, contrario a los sistemas Caucho, Transitorio, Salpicón y Pasto mulato (Tabla 3-2)
Profundidad x densidad
Capítulo 3. Resultados y discusión 47
Tabla 3-2. Relación entre las cantidades de stock de CT mayores y menores de los sistemas
agrícolas, en partículas del suelo de 2mm (fracción liviana).
Figura 3-2. Stock de CT en partículas de 2 mm (fracción liviana), con relación a los diferentes sistemas de producción, la profundidad y la densidad del suelo
Pasto + Arachis y Mango 9% > Cítricos + Arachis y Palma
Pasto + Arachis y Mango 23% > Caucho, Transitorios, Salpicón y Pasto Mulato
Cítricos + Arachis y Palma 15% > Caucho, Transitorios, Salpicón y Pasto Mulato.
48 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Figura 3-3. Stock de CT en partículas de 2 mm, en profundidad
Mango Pasto + Arach Citric + Arach Palma Salpicon Caucho Transitorio Pasto mulato
a ab ab ab ab ab ab bc
Promedios con la misma letra son estadísticamente iguales
De manera similar al sistema mango, a través de los perfiles con Pasto en asocio con
Arachis, la presencia de raíces vivas y muertas era abundante, lo que incide en la
presencia de mayor cantidad de restos vegetales, de fracción húmica en proceso de
mineralización y también proceso de humificación (Fassbender y Bornemisza, 1994).
3.1.3 Stock de CT en el tamaño de partícula del suelo < 0.25 mm (fracción pesada)
Se presentaron diferencias altamente significativas (P< 0.001) entre los sistemas de
producción y, diferencias significativas (P<0.01) entre las densidades y las profundidades
(Figuras 3-4 y 3-5). Siendo el mayor stock de CT encontrado en los sistemas Pasto +
Arachis y Mango y, el menor, encontrado en los sistemas Transitorio y Pasto mulato, según
la prueba de Tukey (Tabla 3-3).
0 10 20 30 40 50 60 70
0-5
10
20
30
50
75
100
125
C Total en la Fracción Liviana Ton/ha
Pro
fun
did
ad
cm
Transitorio
Salpicon
Palma
Pasto mulato
Pasto + Arach
Citric + Arach
Mango
Caucho
Capítulo 3. Resultados y discusión 49
Tabla 3-3. Relación entre las cantidades de stock de CT mayores y menores de los sistemas
agrícolas, en partículas del suelo de < 0.25 mm (fracción pesada).
Figura 3-4. Stock de CT en partículas < 0.25 mm (fracción pesada), con relación a los diferentes
sistemas de producción, la profundidad y la densidad del suelo.
Pasto + Arachis y Mango 18% > Cítricos + Arachis y Salpicón
Pasto + Arachis y Mango 14% > Palma y Caucho,
Pasto + Arachis y Mango 22% > Transitorio y Pasto Mulato.
50 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Figura 3-5. Stock de CT en partículas < 0.25 mm, en profundidad
Pasto + Arach Mango Palma Citric + Arach Salpicon Caucho Transitorio Pasto mulato
a ab ab ab ab ab b b
Promedios con la misma letra son estadísticamente iguales
3.1.4 Stock de CT en el tamaño de partícula del suelo de 0.044 mm (fracción pesada fina)
Existen diferencias significativas entre los sistemas de producción (P<0,01), diferencias
altamente significativas entre las profundidades y las densidades aparentes del suelo
(P<0,001) (Figuras 3-6 y 3-7). El mayor stock de CT se encontró en el sistema Pasto +
Arachis y el menor, en los sistemas Transitorio y Pasto mulato (Tabla 3-4).
Tabla 3-4. Relación entre las cantidades de stock de CT mayores y menores de los sistemas
agrícolas, en partículas del suelo de 0.044 mm (fracción pesada fina).
Pasto + Arachis 10% > Salpicón, Palma y Caucho
Pasto + Arachis 17% > Cítricos + Arachis y Mango
Pasto + Arachis 24% > Transitorio y Pasto Mulato
Salpicón, Palma y Caucho 8% > Cítricos +Arachis y Mango
Salpicón, Palma y Caucho 16% > Transitorios y Pasto Mulato
0.00 10.00 20.00 30.00 40.00 50.00 60.00 70.00
0-5
5-10
10-20
20-30
30-50
50-75
75-100
100-125
Stock de C Total en la Fracción Pesada Ton/ha
Pro
fun
did
ad
cm
Transitorio
Caucho
Salpicon
Palma
Pasto mulato
Pasto + Arach
Citric + Arach
Mango
Capítulo 3. Resultados y discusión 51
Figura 3-6. Stock de CT en partículas de 0.044 mm (fracción pesada fina), con relación a los
diferentes sistemas de producción, la profundidad y la densidad del suelo.
Figura 3-7. Stock de CT en partículas de 0.044 mm, en profundidad
0.00 20.00 40.00 60.00 80.00
0-5
5-10
10-20
20-30
30-50
50-75
75-100
100-125
Stock de C Total en la Fracción Pesada Fina Ton/ha
Pro
fun
did
ad
cm
Transitorio
Caucho
Salpicon
Palma
Pasto Tmulato
Pasto + Arach
Citric + Arach
Mango
Pasto + Arach
Salpicon Palma Caucho Citric + Arach Mango Transitorio Pasto Tmulato
a ab abc abc bc bc bc d
Promedios con la misma letra son estadísticamente iguales
52 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Las propiedades del suelo para todos los sistemas agrícolas son similares; la clase textural
es Franco Arcillo Arenosa, el pH se encuentra en un rango entre 4,2 – 4,8. La Capacidad
de Intercambio Catiónico del suelo (CIC) está entre 8,0 – 11,0 cmol(+)/Kg; considerando
que los valores característicos en las arcillas caolinitas están entre 1 – 10 cmol(+)/Kg, se
infiere que la contribución de materia orgánica al suelo es poca, lo que influye
negativamente en la densidad aparente del suelo, cuyos valores están alrededor de 1,65
g/cm3. De igual forma, la presencia de óxidos de Fe y de Al, sumado a los valores de pH
bajos, contribuyen también a que la CIC sea baja.
En relación a los tipos de sistemas de producción, influyen en la cantidad de stock de
carbono del suelo y determinan la constitución del humus (Montoya et. Al., 2013). Además,
varía a través de la profundidad del perfil de suelo, en este caso, los mayores valores de
stock de CT en las FL y FP, se encontraron entre los 30 – 100 cm del perfil, en la FPF,
entre los 30 – 75 cm, resultados que coinciden con los estudios de Fisher y colaboradores
(1998); Trujillo, (2000); Montoya y colaboradores (2013); Castro y Vera, (2014) y Ortiz,
(2015). Con respecto al tamaño de partículas, los valores más altos de stock de CT se
obtuvieron en las partículas de 0.044 mm (Figura 3-8).
Figura 3-8. Stock de CT en partículas del suelo de 2 mm, < 0.25 mm y 0.044 mm con diferentes
sistemas de producción del piedemonte llanero (método analizador elemental).
0
50
100
150
200
250
300
350
FL (2 mm) FP (< 0.25 mm) FPF (0.044mm)
% C
arb
on
o T
ota
l
Transitorio
Caucho
Salpicón
Palma
Pasto Mulato
Pasto + Arach
Citric + Arach
Mango
Capítulo 3. Resultados y discusión 53
3.2 Simulación del Stock de Carbono del Suelo, en Sistemas de Producción del Piedemonte Llanero.
Antes de simular en Century los diferentes escenarios propuestos, se hicieron pruebas de
calibración del modelo, encontrando que los parámetros densidad aparente, contenido de
arcilla, precipitación y temperatura influyen en los valores de carbono del suelo.
El tipo de vegetación (con respecto a la máxima producción de biomasa neta al mes –
PRDX) condiciona también las cantidades de carbono presentes en cada una de las
fracciones de la MO del suelo. En las Tablas 3-5 y 3-6 se registran los valores de stock de
carbono simulados con un modelo de equilibrio para 7000 años, en vegetación tropical,
considerando los datos de clima y suelo de La Libertad.
Tabla 3-5. Resultdos de la calibración del CENTURY, con un modelo de equilibrio para 7000 años
en vegetación de sabana tropical.
El stock de CT = 110.80407 Ton/ha del año 7000 simulado en vegetación de sabana, es
aproximado al stock medido y resgistrado en el estudio de suelos de 1973 (Tabla 3-7), de
120.27 Ton/ha en pastos (IGAC, 1973). En adición, el estock de CT = 136.4393 Ton/ha
del año 7000 simulado en vegetación de bosque se aproxima al stock de 141.25 Ton/ha,
también medido y registrado en IGAC (1973).
ID Año C Marcado ( Ton/ha)
C MO activa ( Ton/ha)
C MO lenta ( Ton/ha)
C MO pasiva ( Ton/ha)
Total ( Ton/ha)
568737 2 10.52002 10.06456 5.85843 2.44253 28.88554
568738 3 16.7843 15.4814 11.72728 2.08797 46.08095
. . . . . . .
. . . . . . .
575733 6998 38.41429 36.71121 35.21107 0.4093 110.74587
575734 6999 38.42412 36.72089 35.22077 0.40944 110.77522
575735 7000 38.43378 36.73041 35.2303 0.40958 110.80407
CV 6.9% 7.2% 7.8% 16.3% 7.3%
54 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Tabla 3-6. Resultados de la calibración del CENTURY, con un modelo de equilibrio para 7000
años en vegetación de bosque tropical.
ID Año C Marcado ( Ton/ha)
C MO activa ( Ton/ha)
C MO lenta ( Ton/ha)
C MO pasiva ( Ton/ha)
Total
631810 2 10.52002 10.47664 6.25351 2.48894 29.73911
631811 3 17.64774 16.69126 12.65045 2.22224 49.21169
. . . . . . .
. . . . . . .
638806 6998 47.20071 45.2156 43.51462 0.49197 136.4229
638807 6999 47.20351 45.21831 43.51731 0.49205 136.43118
638808 7000 47.20627 45.22097 43.51997 0.49212 136.43933
CV 6.0% 6.2% 6.5% 13.6% 6.2%
Tabla 3-7. Stock de CO observado en las unidades de suelos de la Terraza Alta de La Libertad
Sistema
Unidad de suelo
Stock C (Ton C/ ha)
Pastos-Ganadería, forrajes, yuca,
transitorios
LB
141.25
Fuente: IGAC (1973)
En cuanto a la temperatura, el aumento de 1 °C en los datos de temperatura de 1973,
generó disminuciones en el stock de C medidos en 1973 de; 34% en la FL, 33% en la FP
y 2% en la FPF (Figuras 3-9 y 3-10); esto es acorde con aseveraciones de Dorronsoro, C.,
2013, acerca de las disminuciones del stock de carbono en el suelo por causa de los
incrementos de temperatura.
Capítulo 3. Resultados y discusión 55
Figura 3-9. Stock de CT del Sistema Transitorio y los datos climáticos y de sitio del año 1973, simulado con CENTURY.
Figura 3-10. Stock de CT del Sistema Transitorio y los datos climáticos y de sitio del año 1973,
incrementando la temperatura en 1 °C, simulado con CENTURY.
0
2000
4000
6000
8000
10000
120001
97
3
19
75
19
77
19
79
19
81
19
83
19
85
19
87
19
89
19
91
19
93
19
95
19
97
19
99
20
01
20
03
20
05
20
07
20
09
20
11
Sto
ck C
T (g
/m2 ) FL
FP
FPF
Temp°C
0
2000
4000
6000
8000
10000
12000
19
73
19
75
19
77
19
79
19
81
19
83
19
85
19
87
19
89
19
91
19
93
19
95
19
97
19
99
20
01
20
03
20
05
20
07
20
09
20
11
Sto
ck C
T (g
/m2 )
FL
FP
FPF
Temp °C
56 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
3.2.1 Carbono en partículas del suelo, de diferente tamaño.
Del estudio semi-detallado de suelos del CI La Libertad (IGAC, 1973), se extrajeron los
datos para calcular los valores de stock de CO en Ton/ha para ese año. En la Figura 3-11
puede observarse la distribución de las unidades de suelo del estudio y, la Figura 3-12
muestra los resultados de la simulación de stock de carbono en las diferentes partículas
del suelo propuestas para análisis en este trabajo, con los sistemas de producción Pastos
entre los años 1973-1995 y Transitorio entre los años 1996-2011.
Figura 3-11. Unidades de suelo en la Terraza Alta de la Libertad
El promedio de stock de CO medido (año 1973) en la terraza alta, considerando solo el
escenario de uso Pastos-Transitorio fue de 130.8 Ton/ha y el promedio obtenido de la
simulación fue de 123.6 Ton/ha, siendo este último, 21% menos del stock promedio real
Capítulo 3. Resultados y discusión 57
(inicial). Por otro lado, los resultados de la simulación muestran un comportamiento
esperado del carbono en relación a los diferentes tamaños de partículas del suelo y a los
sistemas de producción. Así, con el sistema pasto que presentaba indicios de
compactación en el suelo, se nota disminución abrupta del stock de CO en las FP y FL,
mientras que con el sistema de cultivos transitorios se nota incremento de stock al inicio
del cultivo, con tendencia a estabilizarse después de dos años en la FP, y en la FL se
notan variaciones de la captura de CO coincidente con el inicio y término de las diferentes
actividades realizadas en el cultivo. Referente a la FPF, el stock de CO se mantiene
estable con los dos sistemas de producción, de esta forma, se evidencia las diferencias
en los estados (flujo/stock) del CO en el suelo (Lopes, 2006; Aguirre, 2011; Stockmann,
et.al., 2013; Eyzaguirre, 2013). Todo lo anterior corrobora la afirmación de buena
precisión del CENTURY, en la modelación de la materia orgánica, expuesta por Puget y
colaboradores (1995), Balesdent y colaboradores (2002), FAO (2002), Martínez y
colaboradores (2008), Piccolo, (2012) y Rodríguez, (2014).
Figura 3-12. Simulación de stock de CO en las partículas de las fracciones liviana, pesada y
pesada fina del suelo, con el escenario sistema Pastos – Transitorio de 1973 a 2011 con CENTURY.
1.00
10.00
100.00
1000.00
10000.00
100000.00
19
73
19
75
19
77
19
79
19
81
19
83
19
85
19
87
19
89
19
91
19
93
19
95
19
97
19
99
20
01
20
03
20
05
20
07
20
09
20
11
C g
/m 2
Años
Carbono en las Fracciones Liviana, Pesada y Pesada Fina. Sistemas Pastos (1973-1995), Transitórios (1996-2011)
FL
FP
FPF
58 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
3.2.1.1 Simulación de stock de carbono con las condiciones de sitio de 1973 y
los escenarios de uso hasta 2011.
La siguiente simulación se hizo con los mismos datos de carbono inicial y de sitio, del año
1973, pero con los diferentes escenarios de uso del año 2011 detallados a continuación:
1- Transitorio-Frijol-Palma de aceite (1973-1990,1991-1992, 1993-2011)
2- Pasto nativo-Brachiaria decumbens-Transitorio (1973-1989, 1990-1996, 1997-2011)
3- Brachiaria decumbens-Caucho (1973-1998, 1999-2011)
4- Brachiaria decumbens-Transitorio-Pasto mulato (1973-1995, 1996-2006, 2007-2011)
5- Pasto naivo - Brachiaria decumbens – Transitorio - Salpicon (1973-1989, 1990-1996,
1997-2007, 2008-2011)
6- Pasto nativo - Pasto+Arachis (1973-2007, 2008-2011)
7- Brachiaria decumbens-Transitorio-Citrico+Arachis (1973-1995, 1996-2007, 2008-
2011)
Los resultados obtenidos en simulación, comparados con los datos medidos en 2011
(Figura 3-16 y Anexo F), son semejantes en algunos sistemas de producción. Así, en la
FL, los sistemas Palma, Caucho y Cítrico + Arachis presentan altos stock de C, contrario
a los otros sistemas (Figura 3-13).
Figura 3-13. Simulación de stock de C en las partículas de la fracción liviana del suelo, en
diferentes escenarios de uso, con CENTURY.
1
10
100
1000
10000
100000
19
73
19
75
19
77
19
79
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81
19
83
19
85
19
87
19
89
19
91
19
93
19
95
19
97
19
99
20
01
20
03
20
05
20
07
20
09
20
11
C g
/m2
Carbon en la Fracción Liviana
Palma Transitorio Caucho
Pasto Mulato Salpicon Pasto Arachis
Capítulo 3. Resultados y discusión 59
De igual manera, son similares los resultados en la FP, con valores altos en palma,
caucho, cítrico + arachis y mango (Figura 3-14). Para la FPF, resultan valores altos de
todos los sistemas, sobresaliendo el de palma (Figura 3-15).
Figura 3-14. Simulación de stock de C en las partículas de la fracción pesada del suelo, en
diferentes escenarios de uso, con CENTURY
Figura 3-15. Simulación de stock de C en las partículas de la fracción pesada fina del suelo, en
diferentes escenarios de uso, con CENTURY
1
10
100
1000
10000
100000
19
73
19
75
19
77
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19
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19
93
19
95
19
97
19
99
20
01
20
03
20
05
20
07
20
09
20
11
C g
/m 2
Carbon en la Fracción Pesada
Palma Transitorio Caucho
Pasto Mulato Salpicon Pasto Arachis
0
2000
4000
6000
8000
10000
12000
19
73
19
75
19
77
19
79
19
81
19
83
19
85
19
87
19
89
19
91
19
93
19
95
19
97
19
99
20
01
20
03
20
05
20
07
20
09
20
11
C g
/m 2
C en la Fracción Pesada Fina
Palma Transitorio CauchoPasto Mulato Salpicon Pasto Arachis
60 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Figura 3-16. Stock de C (Ton/ha) en partículas de 2 mm, < 0.25 mm y 0.044 mm en diferentes
sistemas de producción del piedemonte llanero, medidos en 2011.
En la Tabla 3-8, se registran los resultados de los análisis estadísticos. Nótese que los
coeficientes r indican una correlación fuerte positiva entre los datos reales y los datos
simulados; el coeficiente de correlación R2 muestra la posibilidad de que los resultados
del modelo sean replicados. En cuanto a la estabilidad de los datos, no presentan
tendencia a aumentar o disminuir, distribuyéndose entre los límites de control (Figuras 3-
17, 3-18, 3-19 y 3-20), indicando que los datos predichos son confiables. Los porcentajes
de error (%E), estimados a partir de los valores de sesgo no son significativos, ya que
son menores a 10%, (Vázquez, 2005).
Tabla 3-8. Resultados de estadísticos del análisis entre el stock de C simulado y el observado,
para el año 2011
Sistema r R2 %E RSME Ton/ha
Transitorios 0.889 0.792 3.1 31.08
Caucho 0.897 0.805 4.1 41.56
Palma 0.896 0.802 3.1 28.37
Pasto Mulato 0.908 0.825 4.0 48.11
0
50
100
150
200
250
300
350
Sto
ck d
e C
T T
on
/ha
FL (2 mm)
FP (< 0.25 mm)
FPF (0.044mm)
Capítulo 3. Resultados y discusión 61
Figura 3-17. Prueba de estabilidad de datos simulados en CENTURY, para el sistema
Transitorio.
Figura 3-18. Prueba de estabilidad de datos simulados en CENTURY, para el sistema Palma
Figura 3-19. Prueba de estabilidad de datos simulados en CENTURY, para el sistema Caucho.
-50
0
50
100
150
200
1973 2009 2010 2011
I-MR Stock C (Ton/ha) -Transitorio
media LCI LCM LCS
0.00
50.00
100.00
150.00
1973 2009 2010 2011
Stock C medido vs. simulado con CENTURY-Transitorio
medido simulado
-100
0
100
200
1973 2009 2010 2011
I_MR Stock C (Ton/ha) - Palma
media LCI LCM LCS
0
200
400
1973 2009 2010 2011
Stock C medido vs. simulado con CENTURY-Palma
medido simulado
0
50
100
150
1973 2009 2010 2011
Stock C medido vs. simulado con CENTURY-Caucho
medido simulao
-50
0
50
100
150
1973 2009 2010 2011
I-MR Stock C (Ton/ha) -Caucho
media LCI LCM LCS
62 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Figura 3-20. Prueba de estabilidad de datos simulados en CENTURY, para el sistema Pasto
mulato
3.2.1.2 Datos de stock de carbono con las condiciones de sitio y escenarios de uso
del año 2011, simulados a futuro hasta el año 2070.
Asumiendo que no habrá cambio de los sistemas de producción durante los sesenta años
siguientes a 2011, con las condiciones de sitio correspondientes al mismo año, se simuló
el stock de C en Century. Los resultados se presentan a continuación:
Luego de estas simulaciones los datos de la Figura 3-21 muestran una disminución
importante (99%) del stock de C inicial en la fracción liviana del suelo, en los dos años
siguientes (año 2013) al inicio de la simulación en todos los sistemas de producción. En
general, el stock de carbono final es muy bajo, coincidiendo con lo que puede esperarse
que ocurra con el pasar de los años, que se presenten pérdidas en el stock de C debido a
erosión del suelo o a mineralización de la materia orgánica, situación que puede ser
simulada con CENTURY de manera satisfactoria, coincidiendo así con los resultados
obtenidos por Díaz, (1994); Baethgen, y colaboradores (1994); Cerri, y colaboradores,
(2004); Lopes, (2006); Tornquist, (2007); Tornquist, y colaboradores (2009).
-100
-50
0
50
100
150
200
1973 2009 2010 2011
I-MR Stock C (Ton/ha) - Pasto Mulato
media LCI LCM LCS
0.00
50.00
100.00
150.00
1973 2009 2010 2011
Stock C medido vs. simulado con CENTURY-Pasto mulato
medido simulado
Capítulo 3. Resultados y discusión 63
Figura 3-21. Simulación de stock de C en las partículas de las fracciones liviana en diferentes
escenarios de uso a futuro (año 2070), con CENTURY.
Contrario a la anterior, la Figura 3-22 muestra para la fracción pesada del suelo, aumentos
en el stock de carbono en los dos primeros años con todos los sistemas de producción,
sobresaliendo palma y caucho, para los cuales disminuye abruptamente en los siguientes
veintiocho años (hasta 2041), desde donde tiende a estabilizarse con valores muy bajos
(96% y 95% del stock inicial respectivamente), hasta el final de la simulación. El sistema
con el cual se espera mantener stock de C altos según la simulación es el salpicón seguido
del transitorio (38% y 17% del stock inicial), de manera similar a los resultados de Díaz,
(1994), luego de simular cambios en el largo plazo en el carbono y nitrógeno del suelo
bajo rotación de cultivos con pasturas de leguminosas y, de Baethgen y
colaboradores (1994) en su modelación de la evolución del contenido de materia
orgánica del suelo en seis sistemas de rotaciones en el sw de Uruguay. La Figura
3-23, correspondiente al stock de C en la fracción pesada fina muestra un comportamiento
más estable (Kern & Johnson, 1993; Puget et al., 1995; Balesdent et al., 2002; FAO, 2002;
Reicosky, 2002; Martínez, 2008; Shan et.al., 2014), los sistema salpicón y transitorio
mantienen el 93% y 88% respectivamente del stock del C inicial, seguidos por el sistema
caucho con 85%, y por último, por los sistemas palma con 83% y pasto mulato con 82%.
1
10
100
1000
10000
2011 2021 2031 2041 2051 2061 2071
C g
/m2
C en la Fracción Liviana
Palma Transitorio Caucho Pmulato Salpicon
64 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Figura 3-22. Simulación de stock de C en las partículas de la Fracción Pesada en diferentes
escenarios de uso a futuro (año 2070), con CENTURY.
Los resultados de este estudio, sugieren que los sistemas de producción de tipo perenne
y sin algún tipo de laboreo del suelo, favorecen el incremento del stock de carbono en
profundidad. Sin embargo, las simulaciones realizadas con el modelo Century, sugieren la
necesidad de incorporación material de pos cosecha, (como el caso del sistema
transitorios), o mulch (capa de material orgánico), de forma que se favorezca las entradas
de biomasa al suelo y por ende, el aumento del stock de C en el tiempo. Lo anterior
concuerda con las afirmaciones hechas por Bationo y colaboradores (2005); Ernst & Siri-
Prieto (2009); Salvo y colaboradores (2010).
Se encuentra en la literatura, que las pasturas contribuyen a incrementar el stock de C, sin
embargo, según lo encontrado en este estudio, las pasturas (degradadas) por si solas
arrojan cantidades de stock de C bajos, contrario a lo que sucede con pasturas bien
manejadas y/o en asocio con leguminosas (ej: forrajeras y cultivos –ejm. Maíz, frijol-),
(Bationo et.al., 2005).
0
2000
4000
6000
8000
10000
12000
14000
2011 2021 2031 2041 2051 2061 2071
C g
/m2
C en la Fracción Pesada
Palma Transitorio Caucho Pmulato Salpicon
Capítulo 3. Resultados y discusión 65
Figura 3-23. Simulación de stock de C en las partículas de la Fracción Pesada Fina en
diferentes escenarios de uso a futuro (año 2070), con CENTURY.
3.3 Determinación de Stock de Carbono del Suelo, en Sistemas de Producción del Piedemonte Llanero a partir de NIR
La Figura 3-24 muestra las curvas de absorbancia de los espectros de las muestras
tomadas en el Corpoica La Libertad, los cuales son similares entre si y muestran los valores
más altos en la región donde la predicción de CO es evidente-picos de longitud de onda
410 nm, 570 nm y 660 nm- (Viscarra, R. et.al., 2006). Debido a que resultan varios
espectros de la misma muestra, se inicia el análisis de la información con la aplicación del
método de componentes principales correspondientes a combinaciones lineales de las
longitudes de onda originales, para seleccionar una menor cantidad de espectros que
aporten la mayor cantidad de información posible.
0
2000
4000
6000
8000
10000
12000
14000
16000
2011 2021 2031 2041 2051 2061 2071
C g
/m2
C en la Fracción Pesada Fina
Palma Transitorio Caucho Pmulato Salpicon
66 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Figura 3-24. Curvas de absorbancia de los espectros de las muestras tomadas en Corpoica La
Libertad
Después, se aplicó el análisis de validación cruzada, para obtener el mejor modelo
apropiado para la determinación de valores de C más aproximados. Así, en la calibración
se obtuvieron los resultados que se registran en la Tabla 3-9 y fue seleccionado el modelo
del ítem 7 como el más adecuado.
Tabla 3-9. Resultados del proceso de la calibración del modelo en WinIsis
Factor Error Calibración
R2 Error Validación
1-VR
1 0.877 0.210 1.001 0.041
2 0.810 0.327 1.017 0.010
3 0.683 0.520 1.027 -0.010
4 0.527 0.715 1.016 0.013
5 0.476 0.768 1.010 0.023
6 0.430 0.810 0.978 0.085
7 0.313 0.899 0.945 0.146
Capítulo 3. Resultados y discusión 67
En la validación se obtuvieron los resultados que se registran en la Tabla 3-10, de los
cuales se escogió el modelo del ítem 6 como el más apropiado para la determinación de
los valores de carbono.
Tabla 3-10. Resultados del proceso de la validación del modelo en WinIsis
Factor Error Calibración
R2 Error Validación
1-VR
1 0.067 0.16 0.074 -0.025
2 0.061 0.304 0.075 -0.058
3 0.053 0.487 0.078 -0.140
4 0.045 0.620 0.078 -0.124
5 0.038 0.738 0.076 -0.089
6 0.033 0.802 0.070 0.080
Luego de analizar los datos se encontró, que el uso de los diferentes software utilizados
generaron modelos muy diferentes, aun cuando se utilizaron similares tratamientos
matemáticos en los datos como: SNV y suavizado, filtrado de las longitudes de onda y,
diferenciación con la segunda derivada.
En WinISI, luego de probar varios modelos, se obtuvo el de mejor ajuste para determinar
los datos de C, cuyos estadísticos se presentan en las Figuras 3-25 y 3-26:
Figura 3-25. Relación entre los datos reales (metodologías tradicionales) y los estimados,
de calibración con NIR, procesados en WinISI
y = 0.9072x + 0.1743R² = 0.9075
-0.50
0.00
0.50
1.00
1.50
2.00
2.50
3.00
3.50
4.00
4.50
0.00 0.50 1.00 1.50 2.00 2.50 3.00 3.50 4.00 4.50
C o
bse
rvad
o (
%)
C predicho (%)
Valores de C observados vs. predichos
68 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Figura 3-26. Relación entre los datos reales (metodologías tradicionales) y los estimados, de
validación con NIR, procesados en WinISI
Los estadísticos resultantes indican que la calidad de ajuste del modelo obtenido es
moderadamente favorable (Guerrero. et.al., 2008; Sapienza. et.al., 2008; Gherardi, 2010;
Stenberg. et.al., 2010; Camacho et.al., 2014), al presentar valores altos de coeficiente de
determinación R2 = 0,9 y de RPD = 3,15, junto con valores bajos de RSME =0,3 en la
calibración, y R2 = 0,90 y de RPD = 2,94, junto con valores bajos de RSME = 0,3 en la
validación.
La Figura 3-27 muestra la estabilidad de los datos obtenidos, los cuales no presentan
tendencia a aumentar o disminuir, distribuyéndose entre los límites de control y
representando una confiabilidad moderada de los datos, lo cual puede observarse también
en la Figura 3-28, donde se registra la distribución de los datos medidos con analizador
elemental, en comparación con los datos obtenidos mediante NIR. En este caso, aunque
se observan que los datos son diferentes, su tendencia de distribución es similar.
y = 0.8852x + 0.198R² = 0.9139
0.00
0.50
1.00
1.50
2.00
2.50
3.00
3.50
4.00
0.00 0.50 1.00 1.50 2.00 2.50 3.00 3.50 4.00 4.50
C o
bse
rvad
o (
%)
C predicho (%)
Valores de C observados vs. predichos
Capítulo 3. Resultados y discusión 69
Figura 3-27. Prueba de estabilidad de datos obtenidos mediante NIR.
Figura 3-28. Comparación entre la distribución de los datos de carbono determinados con
analizador elemental vs. Los datos obtenidos mediante NIR
El procedimiento anterior se desarrolló también, para los diferentes sistemas;
encontrando resultados contrastantes así:
-2
-1
0
1
2
3
4
5
1 4 7 10 13 16 19 22 25 28 31 34 37 40 43 46 49 52 55 58 61 64 67 70 73 76 79 82 85 88
Val
ore
s in
div
idu
ales
I-MR de CT (%) con NIR
Carbono LCI LCM LCS
0.0
2.0
4.0
6.0
8.0
1 4 7 10 13 16 19 22 25 28 31 34 37 40 43 46 49 52 55 58 61 64
% d
e C
Distribución de % C determinados con analizador elemental vs. los determinados con NIR
Analizador elemental NIR
70 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Los mejores modelos obtenidos para los sistemas caucho, mango y palma (Figuras 3-29,
3-31 y 3-32), mediante NIR muestran una tendencia similar a los datos determinados en
el laboratorio, con R2 de 0.8, 0.9 y 0.7 respectivamente (Tabla 3-11).
Para los sistemas cítricos + arachis, pasto + arachis y pasto mulato (Figuras (3-30, 3-33 y
3-34), los modelos resultantes no se consideran adecuados, ya que tienen valores de R2
iguales a 0.6, 0.5 y 0.4, respectivamente.
En general, las tendencias de todos los modelos son similares y aceptables, y pueden
ser mejorados teniendo en cuenta la calidad de los datos de laboratorio de referencia, el
tamaño de partícula del suelo utilizado, la humedad del aire al momento del escaneo
(Groenewald & Köster, 2006).
Tabla 3-11. Estadísticos de la comparación entre la distribución de los datos de carbono
determinados con analizador elemental vs. Los datos obtenidos mediante NIR para cada sistema
de producción
SISTEMA DIFERENCIACIÓN R2 RMSE RPD
Caucho 1ª derivada 0.8 0.3 2.37
Cítricos + Arachis 1ª derivada 0.6 0.6 1.57
Mango 1ª derivada 0.9 0.1 5.8
Palma 1ª derivada 0.7 0.4 1.8
Pasto + Arachis 1ª derivada 0.5 0.5 1.37
Pasto Mulato 1ª derivada 0.4 0.4 1.25
Figura 3-29. Comparación de la modelación del Carbono mediante la metodología NIR, con los
valores obtenidos en laboratorio con el sistema Caucho.
y = 0.8658x + 0.1985R² = 0.8196
0
1
2
3
4
0 1 2 3 4
C o
bse
rvad
o
C predicho
Valores de C observados vs. predichos en Caucho
0
5
10
1 3 5 7 9 11131517192123252729313335
Distribución de % C determinados con analizador elemental vs. los determinados
con NIR en Caucho
Analizador elemental NIR
Capítulo 3. Resultados y discusión 71
Figura 3-30. Comparación de la modelación del Carbono mediante la metodología NIR, con los
valores obtenidos en laboratorio con el sistema Cítricos + Arachis
Figura 3-31. Comparación de la modelación del Carbono mediante la metodología NIR, con los
valores obtenidos en laboratorio con el sistema Mango
y = 0.7542x + 0.4597R² = 0.6095
-2
0
2
4
0 2 4 6C o
bse
rvad
o
C predicho
Valores de C observados vs. predichos en Cítricos + Arachis
0
5
10
1 3 5 7 9 11 13 15 17 19
Distribución de % C determinados con analizador elemental vs. los determinados
con NIR en Citrico + Arachis
Analizador elemental NIR
y = 0.9824x + 0.0252R² = 0.9664
0
1
2
3
4
0 1 2 3 4
C o
bse
rvad
o
C predicho
Valores de C observados vs. predichos en Mango
0
5
10
1 2 3 4 5 6 7 8
Distribución de % C determinados con analizador elemental vs. los determinados
con NIR en mango
Analizador elemental NIR
72 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del
piedemonte llanero
Figura 3-32. Comparación de la modelación del Carbono mediante la metodología NIR, con los
valores obtenidos en laboratorio con el sistema Palma
Figura 3-33. Comparación de la modelación del Carbono mediante la metodología NIR, con los
valores obtenidos en laboratorio con el sistema Pasto + Arachis
y = 0.8405x + 0.2169R² = 0.7011
0.0
1.0
2.0
3.0
4.0
0 1 2 3 4
C o
bse
rvad
o
C predicho
Valores de C observados vs. predichos en Palma
0
5
10
1 3 5 7 9 111315171921232527293133
Distribución de % C determinados con analizador elemental vs. los determinados
con NIR en Palma
Analizador elemental NIR
y = 0.6437x + 0.4334R² = 0.5059
0
0.5
1
1.5
2
2.5
3
0 1 2 3
C o
bse
rvad
o
C predicho
Valores de C observados vs. predichos en Pasto + Arachis
0
2
4
6
1 3 5 7 9 11 13 15 17 19 21 23
Distribución de % C determinados con analizador elemental vs. los determinados
con NIR en Pasto + Arachis
Analizador elemental NIR
Capítulo 3. Resultados y discusión 73
Figura 3-34. Comparación de la modelación del Carbono mediante la metodología NIR, con los
valores obtenidos en laboratorio con el sistema Pasto mulato
y = 0.497x + 0.5307R² = 0.3774
0
0.5
1
1.5
2
2.5
0 1 2 3
C o
bse
rvad
o
C predicho
Valores de C observados vs. predichos en Pasto mulato
0
2
4
6
1 3 5 7 9 11 13 15 17 19 21 23 25 27 29
Distribución de % C determinados con analizador elemental vs. los determinados
con NIR en Pasto + Mulato
Analizador elemental NIR
4. Conclusiones y recomendaciones
El stock de carbono en el suelo es influenciado por los sistemas de producción
agrícola, ya que la composición química de los materiales vegetales difieren entre
sí, haciendo que la cantidad y calidad de la materia orgánica incorporada al suelo
varíe. Además de los sistemas, influyen también el tipo de arcilla presente, el pH
del suelo y los tipos de microorgánicos presentes en el suelo.
El stock de carbono en el suelo cambia de manera importante a través del tiempo,
según sea el sistema de producción utilizado. Mediante la simulación con el modelo
CENTURY, pudo determinarse una disminución del 51% del stock de carbono
inicial (con sistemas pastos y transitorios) en el área estudiada, entre los años 1973
– 2011. Century permitió simular el stock de carbono desde 2011 – 2070 y afirmar
que la disminución del stock de carbono es permanente en el tiempo, mientras no
se contribuya al ingreso de materia orgánica al suelo.
La modelación de los datos de carbono, mediante la técnica NIR, comparada con
los datos obtenidos con metodologías tradicionales, se presenta como una opción
apropiada para la determinación no solo de carbono, sino también de otros
constituyentes y variables del suelo, siempre que se tengan en cuenta aspectos
como tamaño y cantidad de las muestras, humedad de la muestra y del ambiente,
y la preparación de la muestra, además de la composición química del material
vegetal en uso.
A. Anexo: Significado de acrónimos
Acrónimo
C Carbono
CO Carbono orgánico
CT Carbono Total
C.I. Centro de Investigación
FL Fracción Liviana
FP Fracción Pesada
FPF Fracción Pesada Fina
FAO Food and Agriculture Organization of the United Nations
IPCC Intergovernmental Panel on Climate Change
M.O. Materia Orgánica
r Coeficiente de correlación
R2 Coeficiente de determinación
MPE Porcentaje de error medio (BIAS)
RMSE Raíz de error medio cuadrado
som1ci(2,1) Cantidad de carbono en la fracción lábil
som2ci(1) Cantidad de carbono de la fracción lenta de la M.O.
som3ci(1) Cantidad de carbono de la fracción pasiva de la M.O.
B. Anexo: Gráficas de registros de cuarenta años, de precipitación y temperatura, de La Libertad
80 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del piedemonte llanero
ENERO FEBRERO MARZO ABRIL MAYO JUNIO JULIO AGOSTO SEPTIEMBRE OCTUBRE NOVIEMBRE DICIEMBRE
1973 0.19 0.00 1.89 9.15 11.06 9.18 13.81 9.32 7.81 11.53 4.44 1.16
1974 0.10 3.03 1.10 5.12 20.00 12.58 9.52 8.09 10.68 2.99 3.59 0.33
1975 0.15 0.71 6.61 8.30 12.58 9.41 11.10 11.49 7.58 8.69 7.78 3.95
1976 0.10 0.26 3.42 10.21 12.56 11.57 10.65 8.51 6.03 6.59 4.75 3.45
1977 0.00 1.53 3.65 4.70 10.61 10.65 9.06 8.73 12.79 10.37 5.29 0.82
1978 1.27 1.07 11.40 17.10 12.88 12.13 12.61 8.98 10.79 14.51 5.66 3.35
1979 0.32 0.01 10.95 12.52 9.56 11.86 7.45 10.35 9.30 19.06 10.30 3.31
1980 0.59 0.01 4.14 8.69 7.97 20.85 11.76 8.00 6.89 8.61 4.28 1.35
1981 0.09 4.78 3.17 13.93 24.00 6.91 5.28 6.95 5.70 11.92 7.09 5.44
1982 0.10 0.64 3.95 17.29 15.94 5.74 10.50 9.89 6.38 13.85 10.54 3.20
0.00
5.00
10.00
15.00
20.00
25.00
30.00
Pre
cip
itac
ión
mm
Distribución de precipitación entre los años 1973 - 1982
Anexo B. Gráficas de registros de cuarenta años, de precipitación y temperatura, de La Libertad 81
ENERO FEBRERO MARZO ABRIL MAYO JUNIO JULIO AGOSTO SEPTIEMBRE OCTUBRE NOVIEMBRE DICIEMBRE
1983 0.73 3.54 2.57 18.05 13.29 14.31 7.89 8.55 11.86 15.11 8.36 7.98
1984 4.62 7.91 5.30 11.48 11.55 19.59 9.35 11.56 12.45 10.59 6.55 0.88
1985 0.00 0.21 1.95 8.25 13.17 11.66 4.13 9.44 18.25 9.05 6.75 1.23
1986 0.45 4.23 2.50 11.29 11.18 16.75 11.60 8.95 10.54 13.92 9.09 1.78
1987 0.74 1.98 9.84 14.30 8.53 9.20 14.29 10.10 9.60 11.27 8.03 1.30
1988 0.05 0.97 0.83 9.58 14.70 10.85 8.03 10.81 6.08 6.84 6.21 2.98
1989 0.94 2.34 3.85 6.26 17.08 9.03 7.79 9.93 8.17 10.96 6.14 1.78
1990 1.05 3.65 6.98 13.55 14.96 15.01 11.15 7.15 6.70 3.83 7.00 3.37
1991 0.00 1.07 2.74 9.76 18.34 13.36 6.74 6.81 6.47 11.00 9.20 0.03
1992 0.97 0.00 1.69 12.27 9.78 11.97 7.92 3.08 11.04 2.63 7.12 4.85
0.00
5.00
10.00
15.00
20.00
25.00
Pre
cip
itac
ión
mm
Distribución de precipitación entre los años 1983 - 1992
82 Stock de carbono del suelo a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del piedemonte llanero
ENERO FEBRERO MARZO ABRIL MAYO JUNIO JULIO AGOSTO SEPTIEMBRE OCTUBRE NOVIEMBRE DICIEMBRE
1993 4.33 1.50 4.70 10.45 11.64 7.14 14.23 7.94 11.05 6.73 6.50 0.40
1994 0.09 1.50 10.77 14.40 12.17 7.81 11.79 12.98 12.26 11.38 11.84 0.93
1995 3.74 0.01 5.39 8.69 12.14 13.16 9.33 8.93 9.16 7.83 4.88 5.53
1996 0.10 3.59 3.62 12.50 20.04 13.31 9.80 9.03 4.16 12.86 7.00 3.96
1997 0.15 3.20 2.72 9.53 13.49 8.90 7.10 7.86 16.33 6.99 2.20 0.13
1998 0.32 5.22 8.27 15.86 11.66 13.21 10.01 5.67 5.20 6.85 5.80 0.28
1999 1.35 6.55 6.29 23.30 18.42 20.65 9.27 8.22 9.52 8.55 11.38 6.49
2000 1.26 2.30 4.32 10.75 18.52 10.70 10.07 7.14 4.29 11.34 4.99 2.42
2001 0.01 0.69 5.27 6.58 15.14 10.72 11.99 9.92 9.49 11.61 9.40 7.45
2002 0.04 0.74 10.53 12.28 24.92 13.21 8.19 8.37 6.72 8.75 3.46 2.06
0.00
5.00
10.00
15.00
20.00
25.00
30.00
Pre
cip
itac
ión
mm
Distribución de precipitación entre los años 1993 - 2002
Anexo B. Gráficas de registros de cuarenta años, de precipitación y temperatura, de La Libertad 83
ENERO FEBRERO MARZO ABRIL MAYO JUNIO JULIO AGOSTO SEPTIEMBRE OCTUBRE NOVIEMBRE DICIEMBRE
2003 0.00 1.29 6.60 3.10 10.10 10.27 5.90 7.20 15.10 10.70 6.50 2.20
2004 1.31 6.89 5.73 11.08 14.40 20.55 11.84 5.49 10.94 10.41 9.95 6.24
2005 0.13 7.18 3.96 10.78 13.45 13.29 9.20 8.04 5.96 11.68 7.28 0.01
2006 8.57 0.11 10.69 11.52 16.86 15.23 8.24 6.05 10.01 17.94 18.69 0.94
2007 0.27 0.43 4.83 11.23 14.81 15.17 6.78 6.09 11.75 8.65 2.45 1.36
2008 0.14 0.55 0.38 10.23 16.71 13.86 12.97 7.18 10.56 7.88 13.41 2.78
2009 1.26 2.30 4.32 10.75 18.52 10.70 10.07 7.14 4.29 11.34 4.99 2.42
2010 0.01 0.69 5.27 6.58 15.14 10.72 11.99 9.92 9.49 11.61 9.40 7.45
2011 0.04 0.74 10.53 12.28 24.92 13.21 8.19 8.37 6.72 8.75 3.46 2.06
2013 0.00 0.93 7.67 12.54 16.21 10.33 11.88 10.64 7.84 7.07 14.90 2.21
0.00
5.00
10.00
15.00
20.00
25.00
30.00
Pre
cip
itac
ión
mm
Distribución de precipitación entre los años 2003 - 2013
Anexo C. Ejemplos de la información de los archivos generados para la
simulación de escenarios en CENTURY
85
C. Anexo: Ejemplos de la información de los archivos generados para la simulación de escenarios en CENTURY
Archivo crop (Ejemplo de las características de los cultivos a incluir en el modelo)
GS Brachiaria Decumbens 300.0 'PRDX(1)' 30 'PPDF(1)' 45.0 'PPDF(2)' 1.0 'PPDF(3)' 3.0 'PPDF(4)' 1.0 'BIOFLG' 60.0 'BIOK5' 1.0 'PLTMRF' 100.0 'FULCAN' 0.0 'FRTC(1)' GP eq 0.0 'FRTC(2)' 0.0 'FRTC(3)' 400.0 'BIOMAX' 20.0 'PRAMN(1,1)' 390 'PRAMN(2,1)' 30.0 'PRAMN(1,2)' 390.0 'PRAMN(2,2)' 30.0 'PRAMX(1,1)' 440.0 'PRAMX(2,1)' 80.0 'PRAMX(1,2)' 440.0 'PRAMX(2,2)' 60.0 'PRBMN(1,1)' 390.0 'PRBMN(2,1)' 0.0 'PRBMN(1,2)' 0.0 'PRBMN(2,2)' 80.0 'PRBMX(1,1)'
420.0 'PRBMX(2,1)' 0.0 'PRBMX(1,2)' 0.0 'PRBMX(2,2)' 0.02 'FLIGNI(1,1)' 0.012 'FLIGNI(2,1)' 0.26 'FLIGNI(1,2)' -0.0015 'FLIGNI(2,2)' 0.00 'HIMAX' 0.0 'HIWSF' 0.0 'HIMON(1)' 0.0 'HIMON(2)' 0.5 'EFRGRN(1)' 0.5 'EFRGRN(2)' 0.04 'VLOSSP' 0.2 'FSDETH(1)' 0.95 'FSDETH(2)' 0.2 'FSDETH(3)' 150.0 'FSDETH(4)' 0.15 'FALLRT' 0.07 'RDR' 0.00 'RTSEN'
Anexo C. Ejemplos de la información de los archivos generados para la simulación
de escenarios en CENTURY
85
Archivo site (Ejemplo de las características del sitio a incluir en los diferentes
escenarios
*** Parametro Climaticos 0.19 PRECIP(1) 0.00 PRECIP(2) 1.89 PRECIP(3) 9.15 PRECIP(4) 11.06 PRECIP(5) 9.18 PRECIP(6) 13.81 PRECIP(7) 9.32 PRECIP(8) 7.81 PRECIP(9) 11.53 PRECIP(10) 4.44 PRECIP(11) 1.16 PRECIP(12) 2.34 PRCSTD(1) 2.73 PRCSTD(2) 2.95 PRCSTD(3) 2.75 PRCSTD(4) 3.97 PRCSTD(5) 2.78 PRCSTD(6) 2.12 PRCSTD(7) 1.59 PRCSTD(8) 3.87 PRCSTD(9) 2.94 PRCSTD(10) 4.55 PRCSTD(11) 2.34 PRCSTD(12) 0.00000 'PRCSKW(1)' 0.0000 'PRCSKW(2)' 0.0000 'PRCSKW(3)' 0.0000 'PRCSKW(4)' 0.0000 'PRCSKW(5)' 0.0000 'PRCSKW(6)' 0.0000 'PRCSKW(7)' 0.0000 'PRCSKW(8)' 0.0000 'PRCSKW(9)' 0.0000 'PRCSKW(10)' 1.1200 'PRCSKW(11)' 0.0000 'PRCSKW(12)' 21.8 TMN2M(1) 22.3 TMN2M(2) 22.4 TMN2M(3) 22.1 TMN2M(4) 21.7 TMN2M(5) 21.2 TMN2M(6) 21.0 TMN2M(7)
21.0 TMN2M(8) 21.3 TMN2M(9) 21.5 TMN2M(10) 21.8 TMN2M(11) 21.7 TMN2M(12) 32.2 TMX2M(1) 32.8 TMX2M(2) 32.1 TMX2M(3) 30.5 TMX2M(4) 29.7 TMX2M(5) 28.7 TMX2M(6) 28.7 TMX2M(7) 29.6 TMX2M(8) 30.2 TMX2M(9) 30.5 TMX2M(10) 30.6 TMX2M(11) 31.0 TMX2M(12) *** Site and control parameters 0 IVAUTO 1.0 NELEM 4.17 SITLAT -73.49 SITLNG 54.63 SAND 19.13 SILT 26.25 CLAY 1.3 BULKD 8.0 NLAYER 8.0 NLAYPG 1.0 DRAIN 4.5 PH *** External nutrient input parameters 0.21 EPNFA(1) 0.0028 EPNFA(2) -0.92 EPNFS(1) 0.028 EPNFS(2) 0.0 SATMOS(1) 0.0 SATMOS(2) 0.0 SIRRI *** Organic matter initial values 5768.52 SOM1CI(1,1) 0.00000 SOM1CI(1,2) 0.00000 SOM1CI(2,1) 0.00000 SOM1CI(2,2) 8460.49 SOM2CI(1)
86 Stock de carbono del suelo, a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del piedemonte llanero. Área representativa, C.I. Corpoica La Libertad (Meta, Colombia)
0.00000 SOM2CI(2) 10191.05 SOM3CI(1) 0.00000 SOM3CI(2) 10.0 RCES1(1,1) 50.0 RCES1(1,2) 50.0 RCES1(1,3) 10.0 RCES1(2,1) 50.0 RCES1(2,2) 50.0 RCES1(2,3) 17.0 RCES2(1) 117.0 RCES2(2) 117.0 RCES2(3) 7.0 RCES3(1) 62.0 RCES3(2) 62.0 RCES3(3) 100.0 CLITTR(1,1) 0.0 CLITTR(1,2) 100.0 CLITTR(2,1) 0.0 CLITTR(2,2) 0.0 RCELIT(1,1) 0.0 RCELIT(1,2) 0.0 RCELIT(1,3) 66.0 RCELIT(2,1) 0.0 RCELIT(2,2) 0.0 RCELIT(2,3) 0.0 AGLCIS(1) 0.0 AGLCIS(2) 0.0 AGLIVE(1) 0.0 AGLIVE(2) 0.0 AGLIVE(3) 0.0 BGLCIS(1) 0.0 BGLCIS(2) 4900 BGLIVE(1) 210 BGLIVE(2) 210 BGLIVE(3) 50.0 STDCIS(1) 0.0 STDCIS(2) 0.8 STDEDE(1) 0.2 STDEDE(2) 0.2 STDEDE(3) *** Forest organic matter initial parameters 0.0 RLVCIS(1) 0.0 RLVCIS(2) 0.0 RLEAVE(1) 0.0 RLEAVE(2) 0.0 RLEAVE(3) 0.0 FBRCIS(1) 0.0 FBRCIS(2) 0.0 FBRCHE(1) 0.0 FBRCHE(2) 0.0 FBRCHE(3) 0.0 RLWCIS(1)
0.0 RLWCIS(2) 0.0 RLWODE(1) 0.0 RLWODE(2) 0.0 RLWODE(3) 0.0 FRTCIS(1) 0.0 FRTCIS(2) 0.0 FROOTE(1) 0.0 FROOTE(2) 0.0 FROOTE(3) 0.0 CRTCIS(1) 0.0 CRTCIS(2) 0.0 CROOTE(1) 0.0 CROOTE(2) 0.0 CROOTE(3) 0.0 WD1CIS(1) 0.0 WD1CIS(2) 0.0 WD2CIS(1) 0.0 WD2CIS(2) 0.0 WD3CIS(1) 0.0 WD3CIS(2) 0.3 W1LIG 0.3 W2LIG 0.3 W3LIG *** Mineral initial parameters 0.0 MINERL(1,1) 0.0 MINERL(2,1) 0.0 MINERL(3,1) 0.0 MINERL(4,1) 0.0 MINERL(5,1) 0.0 MINERL(6,1) 0.0 MINERL(7,1) 0.0 MINERL(8,1) 0.0 MINERL(9,1) 0.0 MINERL(10,1) 0.0 MINERL(1,2) 0.0 MINERL(2,2) 0.0 MINERL(3,2) 0.0 MINERL(4,2) 0.0 MINERL(5,2) 0.0 MINERL(6,2) 0.0 MINERL(7,2) 0.0 MINERL(8,2) 0.0 MINERL(9,2) 0.0 MINERL(10,2) 0.0 MINERL(1,3) 0.0 MINERL(2,3) 0.0 MINERL(3,3) 0.0 MINERL(4,3) 0.0 MINERL(5,3) 0.0 MINERL(6,3) 0.0 MINERL(7,3) 0.0 MINERL(8,3)
Anexo C. Ejemplos de la información de los archivos generados para la simulación
de escenarios en CENTURY
87
Archivo con extensión .sch o .evt (Ejemplo programación de los eventos de cada
escenario)
1 Starting year 2011 Last year LIBA.100 Site file name 0 Labeling type -1 Labeling year -1.00 Microcosm -1 CO2 Systems 1 Initial system TKNZ2 Initial crop Initial tree 1 1 FRST 1 2 CROP TKNZ2 1 12 LAST Year Month Option 1 Block # BRACHIARIA DECUMBENS 1988 Last year 5 Repeats # years
1973 Output starting year 12 Output month 1 Output interval M Weather choice 1 1 FRST 1 2 CROP TKNZ2 1 12 LAST 2 1 FRST 2 2 CROP TKNZ2 2 12 LAST 3 1 FRST 3 2 CROP
TKNZ2 3 12 LAST 4 1 FRST 4 2 CROP TKNZ2 4 12 LAST 5 1 FRST 5 2 CROP TKNZ2 5 12 LAST -999 -999 X 2 Block # REMOCION BRACHIARIA DECUMBENS 1990 Last year 1 Repeats # years 1989 Output starting year 12 Output month 1 Output interval F Weather choice LIB.wth 1 1 FRST 1 2 CROP TKNZ2 1 12 TREM FIRE 1 12 TLST
-999 -999 X
Archivo con extensión .wth (registro de varios años de precipitación y temperatura media mensual)
Variable Año Enero Febrero Marzo Abril Mayo Junio Julio Agosto Septiembre Octubre Noviembre Diciembre
prec 1973 0.19 0.00 1.89 9.15 11.06 9.18 13.81 9.32 7.81 11.53 4.44 1.16
tmin 1973 21.8 22.3 22.4 22.1 21.7 21.2 21 21 21.3 21.5 21.8 21.7
tmax 1973 32.2 32.8 32.1 30.5 29.7 28.7 28.7 29.6 30.2 30.5 30.6 31
prec 1974 0.10 3.03 1.10 5.12 20.00 12.58 9.52 8.09 10.68 2.99 3.59 0.33
tmin 1974 21.8 22.3 22.4 22.1 21.7 21.2 21 21 21.3 21.5 21.8 21.7
tmax 1974 32.2 32.8 32.1 30.5 29.7 28.7 28.7 29.6 30.2 30.5 30.6 31
prec 1975 0.15 0.71 6.61 8.30 12.58 9.41 11.10 11.49 7.58 8.69 7.78 3.95
tmin 1975 21.8 22.3 22.4 22.1 21.7 21.2 21 21 21.3 21.5 21.8 21.7
tmax 1975 32.2 32.8 32.1 30.5 29.7 28.7 28.7 29.6 30.2 30.5 30.6 31
prec 1976 0.10 0.26 3.42 10.21 12.56 11.57 10.65 8.51 6.03 6.59 4.75 3.45
tmin 1976 21.8 22.3 22.4 22.1 21.7 21.2 21 21 21.3 21.5 21.8 21.7
tmax 1976 32.2 32.8 32.1 30.5 29.7 28.7 28.7 29.6 30.2 30.5 30.6 31
prec 1977 0.00 1.53 3.65 4.70 10.61 10.65 9.06 8.73 12.79 10.37 5.29 0.82
tmin 1977 21.8 22.3 22.4 22.1 21.7 21.2 21 21 21.3 21.5 21.8 21.7
tmax 1977 32.2 32.8 32.1 30.5 29.7 28.7 28.7 29.6 30.2 30.5 30.6 31
prec 1978 1.27 1.07 11.40 17.10 12.88 12.13 12.61 8.98 10.79 14.51 5.66 3.35
tmin 1978 21.8 22.3 22.4 22.1 21.7 21.2 21 21 21.3 21.5 21.8 21.7
tmax 1978 32.2 32.8 32.1 30.5 29.7 28.7 28.7 29.6 30.2 30.5 30.6 31
prec 1979 0.32 0.01 10.95 12.52 9.56 11.86 7.45 10.35 9.30 19.06 10.30 3.31
tmin 1979 21.52 23.23 22.84 22.23 -99.99 21.88 99.99 -99.99 -99.99 -99.99 21.35 22.35
tmax 1979 31.68 33.32 30.77 30.38 -99.99 30.71 30 30.75 30.16 31.38 33.65 34.41
prec 1980 0.59 0.01 4.14 8.69 7.97 20.85 11.76 8.00 6.89 8.61 4.28 1.35
tmin 1980 21.1 22.9 22.2 25 -9.99 20.5 19.9 19.4 20.8 20.3 20 21.2
tmax 1980 33.5 37.2 33.4 33.06 -9.99 28.3 28.8 29.2 32.1 28.4 29.7 30
prec 1981 0.09 4.78 3.17 13.93 24.00 6.91 5.28 6.95 5.70 11.92 7.09 5.44
tmin 1981 21.9 20.7 22.2 22.4 21.9 21.7 21.9 22.5 23.85 22.8 22.58 22.6
tmax 1981 31.2 31.9 32.5 31.4 30.3 29.1 29.3 30.5 31.65 31.7 31.12 32.9
prec 1982 0.10 0.64 3.95 17.29 15.94 5.74 10.50 9.89 6.38 13.85 10.54 3.20
tmin 1982 24.07 23.3 23.4 23 22.7 21.7 21.6 21.8 21.8 22.4 22.3 22.2
tmax 1982 35.06 33.2 33.4 31.2 30.4 28.8 29.4 30.2 31.4 31 30.7 31.9
prec 1983 0.73 3.54 2.57 18.05 13.29 14.31 7.89 8.55 11.86 15.11 8.36 7.98
tmin 1983 22.3 21.83 22.31 22.04 21.58 21.69 21.29 21.11 21.61 21.7 22.18 22.57
tmax 1983 31.3 30.71 31.83 30.5 -9.99 -9.99 -9.99 -9.99 -9.99 31 31.24 30.97
106 Stock de carbono del suelo, a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del piedemonte llanero. Área representativa, C.I. Corpoica La Libertad (Meta, Colombia)
Variable Año Enero Febrero Marzo Abril Mayo Junio Julio Agosto Septiembre Octubre Noviembre Diciembre
prec 1984 4.62 7.91 5.30 11.48 11.55 19.59 9.35 11.56 12.45 10.59 6.55 0.88
tmin 1984 22.3 21.83 22.31 22.04 21.58 21.69 21.29 21.11 21.61 21.7 22.18 22.57
tmax 1984 31.3 30.71 31.83 30.5 -9.99 -9.99 -9.99 -9.99 -9.99 31 31.24 30.97
prec 1985 0.00 0.21 1.95 8.25 13.17 11.66 4.13 9.44 18.25 9.05 6.75 1.23
tmin 1985 22.3 21.83 22.31 22.04 21.58 21.69 21.29 21.11 21.61 21.7 22.18 22.57
tmax 1985 31.3 30.71 31.83 30.5 -9.99 -9.99 -9.99 -9.99 -9.99 31 31.24 30.97
prec 1986 0.45 4.23 2.50 11.29 11.18 16.75 11.60 8.95 10.54 13.92 9.09 1.78
tmin 1986 22.3 21.83 22.31 22.04 21.58 21.69 21.29 21.11 21.61 21.7 22.18 22.57
tmax 1986 31.3 30.71 31.83 30.5 -9.99 -9.99 -9.99 -9.99 -9.99 31 31.24 30.97
prec 1987 0.74 1.98 9.84 14.30 8.53 9.20 14.29 10.10 9.60 11.27 8.03 1.30
tmin 1987 21.52 23.23 22.84 22.23 -99.99 21.88 99.99 -99.99 -99.99 -99.99 21.35 22.35
tmax 1987 31.68 33.32 30.77 30.38 -99.99 30.71 30 30.75 30.16 31.38 33.65 34.41
prec 1988 0.05 0.97 0.83 9.58 14.70 10.85 8.03 10.81 6.08 6.84 6.21 2.98
tmin 1988 21.1 22.9 22.2 25 -9.99 20.5 19.9 19.4 20.8 20.3 20 21.2
tmax 1988 33.5 37.2 33.4 33.06 -9.99 28.3 28.8 29.2 32.1 28.4 29.7 30
prec 1989 0.94 2.34 3.85 6.26 17.08 9.03 7.79 9.93 8.17 10.96 6.14 1.78
tmin 1989 21.9 20.7 22.2 22.4 21.9 21.7 21.9 22.5 23.85 22.8 22.58 22.6
tmax 1989 31.2 31.9 32.5 31.4 30.3 29.1 29.3 30.5 31.65 31.7 31.12 32.9
prec 1990 1.05 3.65 6.98 13.55 14.96 15.01 11.15 7.15 6.70 3.83 7.00 3.37
tmin 1990 24.07 23.3 23.4 23 22.7 21.7 21.6 21.8 21.8 22.4 22.3 22.2
tmax 1990 35.06 33.2 33.4 31.2 30.4 28.8 29.4 30.2 31.4 31 30.7 31.9
prec 1991 0.00 1.07 2.74 9.76 18.34 13.36 6.74 6.81 6.47 11.00 9.20 0.03
tmin 1991 21.1 22.9 22.2 25 -9.99 20.5 19.9 19.4 20.8 20.3 20 21.2
tmax 1991 33.5 37.2 33.4 33.06 -9.99 28.3 28.8 29.2 32.1 28.4 29.7 30
prec 1992 0.97 0.00 1.69 12.27 9.78 11.97 7.92 3.08 11.04 2.63 7.12 4.85
tmin 1992 21.9 20.7 22.2 22.4 21.9 21.7 21.9 22.5 23.85 22.8 22.58 22.6
tmax 1992 31.2 31.9 32.5 31.4 30.3 29.1 29.3 30.5 31.65 31.7 31.12 32.9
prec 1993 4.33 1.50 4.70 10.45 11.64 7.14 14.23 7.94 11.05 6.73 6.50 0.40
tmin 1993 24.07 23.3 23.4 23 22.7 21.7 21.6 21.8 21.8 22.4 22.3 22.2
tmax 1993 35.06 33.2 33.4 31.2 30.4 28.8 29.4 30.2 31.4 31 30.7 31.9
prec 1994 0.09 1.50 10.77 14.40 12.17 7.81 11.79 12.98 12.26 11.38 11.84 0.93
tmin 1994 21.1 22.9 22.2 25 -9.99 20.5 19.9 19.4 20.8 20.3 20 21.2
tmax 1994 33.5 37.2 33.4 33.06 -9.99 28.3 28.8 29.2 32.1 28.4 29.7 30
Anexo C. Ejemplos de la información de los archivos generados para la simulación
de escenarios en CENTURY
107
Variable Año Enero Febrero Marzo Abril Mayo Junio Julio Agosto Septiembre Octubre Noviembre Diciembre
prec 1995 3.74 0.01 5.39 8.69 12.14 13.16 9.33 8.93 9.16 7.83 4.88 5.53
tmin 1995 21.52 23.23 22.84 22.23 -99.99 21.88 99.99 -99.99 -99.99 -99.99 21.35 22.35
tmax 1995 31.68 33.32 30.77 30.38 -99.99 30.71 30 30.75 30.16 31.38 33.65 34.41
prec 1996 0.10 3.59 3.62 12.50 20.04 13.31 9.80 9.03 4.16 12.86 7.00 3.96
tmin 1996 21.1 22.9 22.2 25 -9.99 20.5 19.9 19.4 20.8 20.3 20 21.2
tmax 1996 33.5 37.2 33.4 33.06 -9.99 28.3 28.8 29.2 32.1 28.4 29.7 30
prec 1997 0.15 3.20 2.72 9.53 13.49 8.90 7.10 7.86 16.33 6.99 2.20 0.13
tmin 1997 21.9 20.7 22.2 22.4 21.9 21.7 21.9 22.5 23.85 22.8 22.58 22.6
tmax 1997 31.2 31.9 32.5 31.4 30.3 29.1 29.3 30.5 31.65 31.7 31.12 32.9
prec 1998 0.32 5.22 8.27 15.86 11.66 13.21 10.01 5.67 5.20 6.85 5.80 0.28
tmin 1998 24.07 23.3 23.4 23 22.7 21.7 21.6 21.8 21.8 22.4 22.3 22.2
tmax 1998 35.06 33.2 33.4 31.2 30.4 28.8 29.4 30.2 31.4 31 30.7 31.9
prec 1999 1.35 6.55 6.29 23.30 18.42 20.65 9.27 8.22 9.52 8.55 11.38 6.49
tmin 1999 22.3 21.83 22.31 22.04 21.58 21.69 21.29 21.11 21.61 21.7 22.18 22.57
tmax 1999 31.3 30.71 31.83 30.5 -9.99 -9.99 -9.99 -9.99 -9.99 31 31.24 30.97
prec 2000 1.26 2.30 4.32 10.75 18.52 10.70 10.07 7.14 4.29 11.34 4.99 2.42
tmin 2000 22.15 22.23 22.38 22.19 21.63 21.83 21.3 0.23 0.14 0.37 22.26 0.08
tmax 2000 31.61 32.06 32.41 29.37 29.54 29.45 29.26 29.81 30.19 30.99 31.03 30.68
prec 2001 0.01 0.69 5.27 6.58 15.14 10.72 11.99 9.92 9.49 11.61 9.40 7.45
tmin 2001 21.05 22.41 22.61 21.77 21.96 20.92 21.55 21.26 21.29 22.02 22.33 22.64
tmax 2001 32.58 33.37 32.63 30.79 29.83 28.64 29.2 29.74 30.71 31.3 31.78 30.58
prec 2002 0.04 0.74 10.53 12.28 24.92 13.21 8.19 8.37 6.72 8.75 3.46 2.06
tmin 2002 21.89 22.3 22.12 21.97 22.05 20.83 21.63 21.41 21.42 21.85 22.03 22.01
tmax 2002 32.01 34.35 32.95 30.28 29.46 28.81 29.16 30.2 30.82 30.57 30.87 31.49
prec 2003 0.00 1.29 6.60 3.10 10.10 10.27 5.90 7.20 15.10 10.70 6.50 2.20
tmin 2003 23.29 23.65 23.15 22.37 21.7 21.59 21.51 21.78 21.54 22.39 22.28 22.57
tmax 2003 33.86 34.29 32.45 29.99 29.48 29.32 28.9 30.11 30.03 30.91 30.89 31.01
prec 2004 1.31 6.89 5.73 11.08 14.40 20.55 11.84 5.49 10.94 10.41 9.95 6.24
tmin 2004 22.61 22.6 22.68 22.23 21.92 21.24 21.99 21.61 21.46 21.94 21.45 22.49
tmax 2004 32.41 33.63 31.54 30.75 29.44 28.85 29.11 30.93 30.99 30.97 31.01 31.14
prec 2005 0.13 7.18 3.96 10.78 13.45 13.29 9.2 8.04 5.96 11.68 7.28 0.01
tmin 2005 22.16 22.92 23.3 21.83 22.55 21.94 21.3 21.7 21.75 21.37 21.95 21.93
tmax 2005 32.55 32.11 33.03 30.03 30.48 29.87 29.26 29.93 31.01 31.26 30.65 31.78
prec 2006 8.57 0.11 10.69 11.52 16.86 15.23 8.24 6.05 10.01 17.94 18.69 0.94
tmin 2006 22.18 22.41 22.4 22.35 21.73 21.57 21.13 21.64 21.66 22.26 21.86 22.88
108 Stock de carbono del suelo, a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del piedemonte llanero. Área representativa, C.I. Corpoica La Libertad (Meta, Colombia)
tmax 2006 31.63 32.14 30.64 30.8 28.92 29.25 29.05 30.12 30.77 30.82 30.79 31.6
prec 2007 0.27 0.43 4.83 11.23 14.81 15.17 6.78 6.09 11.75 8.65 2.45 1.36
tmin 2007 22.92 22.1 22.53 22.5 21.1 21.76 21.49 20.59 20.51 21.84 21.75 21.37
Variable Año Enero Febrero Marzo Abril Mayo Junio Julio Agosto Septiembre Octubre Noviembre Diciembre
tmax 2007 33.66 35.24 33.17 31.46 29.77 28.21 30 29.7 30.37 30.89 31.38 31.08
prec 2008 0.14 0.55 0.38 10.23 16.71 13.86 12.97 7.18 10.56 7.88 13.41 2.78
tmin 2008 21.25 23.28 23.01 22.22 21.74 21.82 19.23 21.1 21.21 21.9 22.14 22.43
tmax 2008 32.46 34.41 33.67 31.85 29.52 28.59 29.05 30.6 31.04 30.99 30.81 31.24
prec 2009 1.26 2.3 4.32 10.75 18.52 10.7 10.07 7.14 4.29 11.34 4.99 2.42
tmin 2009 22.15 22.23 22.38 22.19 21.63 21.83 21.3 0.23 0.14 0.37 22.26 0.08
tmax 2009 31.61 32.06 32.41 29.37 29.54 29.45 29.26 29.81 30.19 30.99 31.03 30.68
prec 2010 0.01 0.69 5.27 6.58 15.14 10.72 11.99 9.92 9.49 11.61 9.4 7.45
tmin 2010 21.05 22.41 22.61 21.77 21.96 20.92 21.55 21.26 21.29 22.02 22.33 22.64
tmax 2010 32.58 33.37 32.63 30.79 29.83 28.64 29.2 29.74 30.71 31.3 31.78 30.58
prec 2011 0.04 0.74 10.53 12.28 24.92 13.21 8.19 8.37 6.72 8.75 3.46 2.06
tmin 2011 21.89 22.3 22.12 21.97 22.05 20.83 21.63 21.41 21.42 21.85 22.03 22.01
tmax 2011 32.01 34.35 32.95 30.28 29.46 28.81 29.16 30.2 30.82 30.57 30.87 31.49
D. Anexo: Coordenadas y % CT de los sitios muestreados.
Muestreo en Abril de 2011 FL (2 mm) FP (<0.25 mm) FPF (0.044 mm)
Latitud Longitud No. Sistema Calicata Profundidad % CT % CT % CT
4.05742 73.46790 1 transitorio 1 0 a 5 1.36 1.5 3.47
4.05742 73.46790 2 transitorio 1 5 a 10 0.49 1.46 3.42
4.05742 73.46790 3 transitorio 1 10 a 20 1.65 1.04 2.54
4.05742 73.46790 4 transitorio 1 20 a 30 1.29 1.01 2.14
4.05742 73.46790 5 transitorio 1 30 a 50 0.91 0.772 1.56
4.05742 73.46790 6 transitorio 1 50 a 75 0.61 0.62 1.17
4.05742 73.46790 7 transitorio 1 75 a 100 0.53 0.511 0.91
4.05742 73.46790 8 transitorio 1 100 a 125 0.42 0.425 0.73
4.06647 73.44457 9 transitorio 2 0 a 5 1.84 1.47 3.00
4.06647 73.44457 10 transitorio 2 5 a 10 1.71 1.21 2.82
4.06647 73.44457 11 transitorio 2 10 a 20 1.42 1.37 2.39
4.06647 73.44457 12 transitorio 2 20 a 30 1.17 1.07 1.92
4.06647 73.44457 13 transitorio 2 30 a 50 0.82 0.752 1.33
4.06647 73.44457 14 transitorio 2 50 a 75 0.62 0.558 1.01
4.06647 73.44457 15 transitorio 2 75 a 100 0.51 0.521 0.94
4.06647 73.44457 16 transitorio 2 100 a 125 1.92 0.488 0.89
4.06582 73.44543 17 transitorio 3 0 a 5 1.86 1.45 3.34
4.06582 73.44543 18 transitorio 3 5 a 10 1.58 1.29 2.93
4.06582 73.44543 19 transitorio 3 10 a 20 1.37 1.2 2.42
4.06582 73.44543 20 transitorio 3 20 a 30 1.04 0.957 1.83
4.06582 73.44543 21 transitorio 3 30 a 50 0.93 0.853 1.62
4.06582 73.44543 22 transitorio 3 50 a 75 0.61 0.597 1.09
4.06582 73.44543 23 transitorio 3 75 a 100 0.47 0.499 0.85
4.06582 73.44543 24 transitorio 3 100 a 125 0.34 0.405 0.69
4.06573 73.44655 25 transitorio 4 0 a 5 1.95 1.62 3.34
4.06573 73.44655 26 transitorio 4 5 a 10 1.95 1.8 3.40
110 Stock de carbono del suelo, a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del piedemonte llanero. Área representativa, C.I. Corpoica La Libertad (Meta, Colombia)
…Continuación Anexo D.
Muestreo en Abril de 2011 FL (2 mm) FP (<0.25 mm) FPF (0.044 mm)
Latitud Longitud No. Sistema Calicata Profundidad % CT % CT % CT
4.06573 73.44655 27 transitorio 4 10 a 20 1.81 1.66 2.94
4.06573 73.44655 28 transitorio 4 20 a 30 1.65 1.49 2.63
4.06573 73.44655 29 transitorio 4 30 a 50 1.16 1.04 1.84
4.06573 73.44655 30 transitorio 4 50 a 75 0.72 0.669 1.19
4.06573 73.44655 31 transitorio 4 75 a 100 0.50 0.476 0.88
4.06573 73.44655 32 transitorio 4 100 a 125 0.42 0.392 0.70
33 caucho 5 0 a 5 1.28 1.74 3.37
34 caucho 5 5 a 10 1.15 1.59 3.00
35 caucho 5 10 a 20 1.11 1.55 2.88
36 caucho 5 20 a 30 1.05 1.55 2.63
37 caucho 5 30 a 50 0.83 1.19 2.11
38 caucho 5 50 a 75 0.60 0.877 1.54
39 caucho 5 75 a 100 0.42 0.626 1.04
40 caucho 5 100 a 125 0.36 0.537 0.91
4.06480 73.44903 41 caucho 6 0 a 5 1.32 1.77 3.52
4.06480 73.44903 42 caucho 6 5 a 10 1.10 1.28 3.10
4.06480 73.44903 43 caucho 6 10 a 20 1.15 1.43 3.17
4.06480 73.44903 44 caucho 6 20 a 30 1.13 1.55 2.96
4.06480 73.44903 45 caucho 6 30 a 50 0.80 1.09 2.12
4.06480 73.44903 46 caucho 6 50 a 75 0.48 0.667 1.27
4.06480 73.44903 47 caucho 6 75 a 100 0.36 0.493 0.94
4.06480 73.44903 48 caucho 6 100 a 125 0.30 0.427 0.78
4.06447 73.44933 49 caucho 7 0 a 5 1.29 1.78 3.38
4.06447 73.44933 50 caucho 7 5 a 10 1.18 1.66 3.06
4.06447 73.44933 51 caucho 7 10 a 20 1.00 1.43 2.55
4.06447 73.44933 52 caucho 7 20 a 30 0.81 1.14 2.09
4.06447 73.44933 53 caucho 7 30 a 50 0.53 0.758 1.37
4.06447 73.44933 54 caucho 7 50 a 75 0.38 0.556 0.98
4.06447 73.44933 55 caucho 7 75 a 100 0.32 0.417 0.88
4.06447 73.44933 56 caucho 7 100 a 125 0.30 0.465 0.73
4.06393 73.44898 57 caucho 8 0 a 5 1.21 1.44 3.40
4.06393 73.44898 58 caucho 8 5 a 10 1.07 1.31 2.96
4.06393 73.44898 59 caucho 8 10 a 20 0.94 1.2 2.55
4.06393 73.44898 60 caucho 8 20 a 30 0.91 1.17 2.48
4.06393 73.44898 61 caucho 8 30 a 50 0.62 0.874 1.60
4.06393 73.44898 62 caucho 8 50 a 75 0.47 0.679 1.21
4.06393 73.44898 63 caucho 8 75 a 100 0.35 0.503 0.91
4.06028 73.46155 65 salpìcon 9 0 a 5 1.65 1.38 3.53
4.06028 73.46155 66 salpìcon 9 5 a 10 1.69 1.42 3.24
Anexo D. Coordenadas y % CT de los sitios muestreados. 111
… Continuación Anexo D.
Muestreo en Abril de 2011 FL (2 mm) FP (<0.25 mm) FPF (0.044 mm)
Latitud Longitud No. Sistema Calicata Profundidad % CT % CT % CT
4.06028 -73.46155 67 salpìcon 9 10 a 20 1.44 1.28 2.52
4.06028 -73.46155 68 salpìcon 9 20 a 30 1.30 1.21 2.28
4.06028 -73.46155 69 salpìcon 9 30 a 50 0.90 0.828 1.57
4.06028 -73.46155 70 salpìcon 9 50 a 75 0.66 0.607 1.14
4.06028 -73.46155 71 salpìcon 9 75 a 100 0.47 0.554 0.99
4.06025 -73.46170 73 salpìcon 10 0 a 5 1.77 1.35 3.16
4.06025 -73.46170 74 salpìcon 10 5 a 10 1.81 1.48 3.19
4.06025 -73.46170 75 salpìcon 10 10 a 20 1.73 1.54 2.99
4.06025 -73.46170 76 salpìcon 10 20 a 30 1.46 1.41 2.62
4.06025 -73.46170 77 salpìcon 10 30 a 50 1.04 0.974 1.72
4.06022 -73.46258 101 palma 13 30 a 50 0.84 0.819 1.45
4.06022 -73.46258 102 palma 13 50 a 75 0.69 0.657 1.21
4.05947 -73.46262 105 palma 14 0 a 5 3.05 2.48 4.09
4.05947 -73.46262 106 palma 14 5 a 10 1.98 1.87 3.47
4.05947 -73.46262 107 palma 14 10 a 20 1.82 1.75 3.20
4.05947 -73.46262 108 palma 14 20 a 30 1.46 1.52 2.21
4.05947 -73.46262 109 palma 14 30 a 50 1.15 1.13 1.98
4.05947 -73.46262 110 palma 14 50 a 75 0.87 0.881 1.50
4.05947 -73.46262 111 palma 14 75 a 100 0.50 0.57 0.90
4.05947 -73.46262 112 palma 14 100 a 125 0.39 0.462 0.74
4.05882 -73.46250 113 palma 15 0 a 5 1.68 1.86 3.43
4.05882 -73.46250 114 palma 15 5 a 10 1.92 1.91 3.03
4.05882 -73.46250 115 palma 15 10 a 20 1.45 1.7 2.87
4.05882 -73.46250 116 palma 15 20 a 30 1.74 1.37 2.48
4.05882 -73.46250 117 palma 15 30 a 50 1.08 1.05 1.76
4.05882 -73.46250 118 palma 15 50 a 75 0.70 0.667 1.12
4.05882 -73.46250 119 palma 15 75 a 100 0.52 0.541 0.91
4.05882 -73.46250 120 palma 15 100 a 125 0.64 0.587 1.00
4.05822 -73.46212 121 palma 16 0 a 5 2.46 2.25 3.57
4.05822 -73.46212 122 palma 16 5 a 10 2.03 2.07 3.21
4.05822 -73.46212 123 palma 16 10 a 20 2.04 1.77 3.04
4.05822 -73.46212 124 palma 16 20 a 30 1.63 1.52 2.55
4.05822 -73.46212 125 palma 16 30 a 50 1.20 1.13 1.83
4.05822 -73.46212 126 palma 16 50 a 75 0.87 0.773 1.30
4.05822 -73.46212 127 palma 16 75 a 100 0.55 0.539 0.88
4.05822 -73.46212 128 palma 16 100 a 125 0.502 0.82
112 Stock de carbono del suelo, a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del piedemonte llanero. Área representativa, C.I. Corpoica La Libertad (Meta, Colombia)
… Continuación de Anexo D.
Muestreo en Abril de 2011 FL (2 mm) FP (<0.25 mm) FPF (0.044 mm)
Latitud Longitud No. Sistema Calicata Profundidad % CT % CT % CT
4.05732 -73.47383 129 p.mulato 17 0 a 5 2.12 1.8 3.44
4.05732 -73.47383 130 p.mulato 17 5 a 10 1.89 1.7 2.99
4.05732 -73.47383 131 p.mulato 17 10 a 20 1.65 1.51 2.48
4.05732 -73.47383 132 p.mulato 17 20 a 30 1.27 1.13 1.94
4.05732 -73.47383 133 p.mulato 17 30 a 50 0.93 0.914 1.46
4.05732 -73.47383 134 p.mulato 17 50 a 75 0.64 0.659 1.10
4.05732 -73.47383 135 p.mulato 17 75 a 100 0.50 0.483 0.78
4.05790 -73.47400 137 p.mulato 18 0 a 5 1.92 1.76 2.84
4.05790 -73.47400 138 p.mulato 18 5 a 10 1.62 1.5 2.17
4.05790 -73.47400 139 p.mulato 18 10 a 20 1.29 1.16 1.95
4.05790 -73.47400 140 p.mulato 18 20 a 30 0.96 0.947 1.53
4.05790 -73.47400 141 p.mulato 18 30 a 50 0.73 0.701 1.04
4.05790 -73.47400 142 p.mulato 18 50 a 75 0.55 0.573 0.91
4.05790 73.47400 143 p.mulato 18 75 a 100 0.47 0.444 0.75
4.05790 73.47400 144 p.mulato 18 100 a 125 0.42 0.439 0.73
4.05800 73.47330 145 p.mulato 19 0 a 5 2.42 2.32 3.44
4.05800 73.47330 146 p.mulato 19 5 a 10 1.75 1.59 2.78
4.05800 73.47330 147 p.mulato 19 10 a 20 1.30 1.18 1.97
4.05800 73.47330 148 p.mulato 19 20 a 30 1.04 1.01 1.57
4.05800 73.47330 149 p.mulato 19 30 a 50 0.68 0.714 1.14
4.05800 73.47330 150 p.mulato 19 50 a 75 0.49 0.508 0.82
4.05800 73.47330 151 p.mulato 19 75 a 100 0.43 0.469 0.77
4.05800 73.47330 152 p.mulato 19 100 a 125 0.45 0.463 0.79
4.05732 73.47312 153 p.mulato 20 0 a 5 2.39 2.11 3.49
4.05732 73.47312 154 p.mulato 20 5 a 10 1.90 1.76 3.20
4.05732 73.47312 155 p.mulato 20 10 a 20 1.56 1.47 2.51
4.05732 73.47312 156 p.mulato 20 20 a 30 1.16 1.16 1.87
4.05732 73.47312 157 p.mulato 20 30 a 50 0.83 0.858 1.38
4.05732 73.47312 158 p.mulato 20 50 a 75 0.61 0.625 0.96
4.05732 73.47312 159 p.mulato 20 75 a 100 0.49 0.553 0.92
4.05732 73.47312 160 p.mulato 20 100 a 125 0.40 0.46 0.76
4.05742 73.46993 161 p.+arachis 21 0 a 5 2.82 2.55 4.95
4.05742 73.46993 162 p.+arachis 21 5 a 10 1.85 1.78 3.56
4.05742 73.46993 163 p.+arachis 21 10 a 20 1.34 2.67
4.05742 73.46993 164 p.+arachis 21 20 a 30 1.10 1.02 1.82
4.05742 73.46993 165 p.+arachis 21 30 a 50 0.79 0.792 1.62
4.05742 73.46993 166 p.+arachis 21 50 a 75 0.819 1.59
4.05662 73.46982 169 p.+arachis 22 0 a 5 2.66 2.82 4.50
4.05662 73.46982 170 p.+arachis 22 5 a 10 2.27 2.07 3.81
Anexo D. Coordenadas y % CT de los sitios muestreados. 113
… Continuación Anexo D.
Muestreo en Abril de 2011 FL (2 mm) FP (<0.25 mm) FPF (0.044 mm)
Latitud Longitud No. Sistema Calicata Profundidad % CT % CT % CT
4.05662 73.46982 171 p.+arachis 22 10 a 20 2.06 1.9 3.37
4.05662 73.46982 172 p.+arachis 22 20 a 30 1.94 1.69 3.10
4.05662 73.46982 173 p.+arachis 22 30 a 50 1.16 1.04 1.90
4.05662 73.46982 174 p.+arachis 22 50 a 75 0.74 0.697 2.37
4.05668 73.47045 177 p.+arachis 23 0 a 5 2.33 2.13 3.87
4.05668 73.47045 178 p.+arachis 23 5 a 10 1.93 1.71 3.16
4.05668 73.47045 179 p.+arachis 23 10 a 20 1.89 1.78 3.10
4.05668 73.47045 180 p.+arachis 23 20 a 30 0.49 1.6 2.70
4.05668 73.47045 181 p.+arachis 23 30 a 50 1.23 1.2 2.02
4.05668 73.47045 182 p.+arachis 23 50 a 75 0.76 0.754 1.30
4.05668 73.47045 183 p.+arachis 23 75 a 100 0.63 0.629 1.04
4.05668 73.47045 184 p.+arachis 23 100 a 125 0.48 0.474 0.82
4.05667 73.46935 185 p.+arachis 24 0 a 5 2.81 2.7 4.35
4.05667 73.46935 186 p.+arachis 24 5 a 10 2.01 1.85 3.10
4.05667 73.46935 187 p.+arachis 24 10 a 20 1.84 1.7 2.91
4.05667 73.46935 188 p.+arachis 24 20 a 30 1.48 1.34 2.37
4.05667 73.46935 189 p.+arachis 24 30 a 50 1.04 1.04 1.71
4.05667 73.46935 190 p.+arachis 24 50 a 75 0.64 0.599 1.04
4.05667 73.46935 191 p.+arachis 24 75 a 100 1.69 0.492 0.82
4.05667 73.46935 192 p.+arachis 24 100 a 125 0.38 0.428 0.71
4.06082 73.45743 193 citri.+arach. 25 0 a 5 1.96 1.8 2.92
4.06082 73.45743 194 citri.+arach. 25 5 a 10 1.79 1.61 2.58
4.06082 73.45743 195 citri.+arach. 25 10 a 20 1.49 1.45 2.16
4.06082 73.45743 196 citri.+arach. 25 20 a 30 1.22 1.19 1.81
4.06082 73.45743 197 citri.+arach. 25 30 a 50 2.32 1.07 1.52
4.06082 73.45743 198 citri.+arach. 25 50 a 75 0.77 0.813 1.07
4.06082 73.45743 199 citri.+arach. 25 75 a 100 0.67 0.695 0.93
4.06082 73.45743 200 citri.+arach. 25 100 a 125 0.67 0.702 1.02
4.06068 73.45947 201 citri.+arach. 26 0 a 5 1.86 1.74 3.05
4.06068 73.45947 202 citri.+arach. 26 5 a 10 1.95 1.74 2.93
4.06068 73.45947 203 citri.+arach. 26 10 a 20 1.72 1.6 2.63
4.06068 73.45947 204 citri.+arach. 26 20 a 30 1.55 1.56 2.44
4.06068 73.45947 205 citri.+arach. 26 30 a 50 1.13 1.18 1.77
4.06068 73.45947 206 citri.+arach. 26 50 a 75 1.05 0.892 1.38
4.06068 73.45947 207 citri.+arach. 26 75 a 100 0.57 0.555 0.94
4.06043 73.45947 209 citri.+arach. 27 0 a 5 2.47 2.37 4.06
114 Stock de carbono del suelo, a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del piedemonte llanero. Área representativa, C.I. Corpoica La Libertad (Meta, Colombia)
… Continuación Anexo D
Muestreo en Abril de 2011 FL (2 mm) FP (<0.25 mm) FPF (0.044 mm)
Latitud Longitud No. Sistema Calicata Profundidad % CT % CT % CT
4.06043 73.45947 210 citri.+arach. 27 5 a 10 1.83 1.74 3.24
4.06043 73.45947 211 citri.+arach. 27 10 a 20 1.78 1.57 2.85
4.06043 73.45947 212 citri.+arach. 27 20 a 30 1.37 1.26 2.26
4.06043 73.45947 213 citri.+arach. 27 30 a 50 0.99 0.981 1.65
4.06043 73.45947 214 citri.+arach. 27 50 a 75 0.69 0.703 1.13
4.06028 73.46008 217 citri.+arach. 28 0 a 5 2.58 2.35 3.93
4.06028 73.46008 218 citri.+arach. 28 5 a 10 2.22 1.95 3.60
4.06028 73.46008 219 citri.+arach. 28 10 a 20 2.11 1.91 3.17
4.06028 73.46008 220 citri.+arach. 28 20 a 30 3.90 1.53 2.65
4.06028 73.46008 221 citri.+arach. 28 30 a 50 0.93 0.993 1.58
4.06028 73.46008 222 citri.+arach. 28 50 a 75 0.78 0.833 1.27
4.06028 73.46008 223 citri.+arach. 28 75 a 100 0.58 0.596 0.98
4.05705 73.46727 225 mangos 29 0 a 5 2.54 2.53 3.93
4.05705 73.46727 226 mangos 29 5 a 10 2.27 2.13 3.45
4.05705 73.46727 227 mangos 29 10 a 20 1.95 1.79 2.95
4.05705 73.46727 228 mangos 29 20 a 30 1.58 1.43 2.13
4.05705 73.46727 229 mangos 29 30 a 50 1.14 1.04 1.69
4.05705 73.46727 230 mangos 29 50 a 75 1.10 0.749 1.17
4.05705 73.46727 231 mangos 29 75 a 100 0.76 0.62 1.04
4.05705 73.46727 232 mangos 29 100 a 125 0.57 0.521 0.83
4.05740 73.46723 233 mangos 30 0 a 5 2.82 2.68 3.58
4.05740 73.46723 234 mangos 30 5 a 10 2.09 1.99 3.26
4.05740 3.46723 235 mangos 30 10 a 20 1.99 1.84 2.86
4.05740 73.46723 236 mangos 30 20 a 30 1.89 1.51
4.05740 73.46723 237 mangos 30 30 a 50 1.39 1.26 1.86
4.05740 73.46723 238 mangos 30 50 a 75 1.03 0.866 1.35
4.05740 73.46723 239 mangos 30 75 a 100 0.82 0.684 1.09
4.05740 73.46723 240 mangos 30 100 a 125 0.72 0.524 0.85
4.05747 73.46668 241 mangos 31 0 a 5 2.43 2.23 3.27
4.05747 73.46668 242 mangos 31 5 a 10 2.08 1.81 2.81
4.05747 73.46668 243 mangos 31 10 a 20 1.79 1.58 2.51
4.05747 73.46668 244 mangos 31 20 a 30 1.63 1.5 2.01
4.05747 73.46668 245 mangos 31 30 a 50 1.30 1.3 1.84
4.05747 73.46668 246 mangos 31 50 a 75 0.78 0.833 1.21
4.05747 73.46668 247 mangos 31 75 a 100 0.69 0.625 0.98
4.05747 73.46668 248 mangos 31 100 a 125 0.63 0.564 0.83
4.05705 73.46647 249 mangos 32 0 a 5 2.33 2.14 3.20
4.05705 73.46647 250 mangos 32 5 a 10 2.02 1.85 2.81
4.06028 73.46008 224 citri.+arach. 28 100 a 125 0.52 0.527 0.84
Anexo D. Coordenadas y % CT de los sitios muestreados. 115
… Continuación Anexo D.
Muestreo en Abril de 2011 FL (2 mm) FP (<0.25 mm) FPF (0.044 mm)
Latitud Longitud No. Sistema Calicata Profundidad % CT % CT % CT
4.05705 73.46647 251 mangos 32 10 a 20 1.63 1.61 2.28
4.05705 73.46647 252 mangos 32 20 a 30 1.51 1.45 2.07
4.05705 73.46647 253 mangos 32 30 a 50 1.09 1.01 1.51
4.05705 73.46647 254 mangos 32 50 a 75 0.78 0.727 1.17
4.05705 73.46647 255 mangos 32 75 a 100 0.66 0.568 0.97
4.05705 73.46647 256 mangos 32 100 a 125 0.61 0.563 0.92
E. Anexo: Descripción de los dos primeros horizontes de los perfiles de suelo
(González J., 2014).
Suelo_Serie Textura Drenaje Pendiente Relieve Uso
Libertad
franco arcillo arenoso
Bien drenado
0-3 %
Plano
Transitorios
Horizonte 1
Profundidad entre 0 – 45; Color 7,5 YR; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa
Horizonte 2
Profundidad entre 45 – 75; Color 7,5 YR; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa
Libertad franco arcilloso arenoso
Bien drenado
0-3%
Plano
Caucho
Horizonte 1
Profundidad entre 0 – 50; Color 5 YR 2/3; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Horizonte 2
Profundidad entre 50 – 75; Color 7,5 YR; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Libertad franco arcilloso arenoso
Bien drenado
0-3%
Plátano - Frutales
Horizonte 1
Profundidad entre 0 – 33; Color 5 YR 3/3; Estructura bloques subangulares de grado; débil y clase media a fina Consistencia friable, pegajosa, plástica
Horizonte 2
Profundidad entre 33 – 58; Color 5 YR 4/4; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
118 Stock de carbono del suelo, a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del piedemonte llanero. Área representativa, C.I. Corpoica La Libertad (Meta, Colombia)
Libertad franco arcilloso arenoso
Bien drenado
0-3%
Plano
Palma (18 años)
Horizonte 1
Profundidad entre 0 – 35; Color 7,5 YR 2/3; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Horizonte 2
Profundidad entre 35 – 56; Color 7,5 YR 4/6; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Suelo_Serie Textura Drenaje Pendiente Relieve Uso
Chipre franco
Moderadamente bien drenado
1-3-7 %
Ligeramente ondulado
Pasto Mulato
Horizonte 1
Profundidad entre 0 – 30; Color 7,5 YR 3/3; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Horizonte 2
Profundidad entre 30 – 64; Color 7,5 YR 4/6; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Chipre franco y franco arcilloso
Moderadamente bien drenado
3-7 %
Ligeramente plano
Pasto Bachiaria + Arachis
Horizonte 1
Profundidad entre 0 – 34; Color 7,5 YR; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Horizonte 2
Profundidad entre 34 – 72; Color 7,5 YR 4/6; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Libertad franco arcilloso arenoso
Bien drenado
0-3%
Plano
Cítricos
Horizonte 1 Profundidad entre 0 – 30; Color 7,5 YR 3/4; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Horizonte 2
Profundidad entre 30 – 50; Color 7,5 YR 4/6; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Libertad franco arcilloso arenoso
Bien drenado
0-3% Plano Mango
Horizonte 1
Profundidad entre 0 – 32; Color 7,5 YR 2/3; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Anexo E. Descripción de los dos primeros horizontes de los perfiles de suelo 119
Cítricos + Arachis
Horizonte 2
Profundidad entre 32 – 64; Color 7,5 YR 4/6; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Tolima franco Moderadamente bien drenado
0-3%
ligeramente plano
Forestal
Suelo_Serie Textura Drenaje Pendiente Relieve Uso
Horizonte 1
Profundidad entre 0 – 25; Color 7,5 YR 4/4; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Horizonte 2
Profundidad entre 25 – 40; Color 7,5 YR 4/6 Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina Consistencia friable, pegajosa, plástica
Libertad franco arcilloso arenoso
Bien drenado 0-3%
Plano
Marañon
Horizonte 1
Profundidad entre 0 – 24; Color 7,5 YR 3/3; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
Horizonte 2
Profundidad entre 24 – 53; Color 7,5 YR 4/4; Estructura bloques subangulares de grado débil y clase media a fina; Consistencia friable, pegajosa, plástica
120 Stock de carbono del suelo, a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del piedemonte llanero. Área representativa, C.I. Corpoica La Libertad (Meta, Colombia)
Palma Transitorios
Salpicón
F. Anexo: Modelamiento del Stock de C del Suelo en la Terraza Alta de La Libertad
122 Stock de carbono del suelo, a escala local, en ocho sistemas de uso agrícola del piedemonte llanero. Área representativa, C.I. Corpoica La Libertad (Meta, Colombia)
Anexo F. Modelamiento del Stock de C del Suelo en la Terraza Alta de La
Libertad
123
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