aparato reproductor femenino

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Cirugía veterinar ia I APARATO REPRODUCTOR FEMENINO CONSIDERACIONES ANATOMICAS El aparato reproductor femenino comprende a los ovarios, oviducto, útero, vagina, vulva y glándula mamarías. Los ovarios se localizan dentro de un saco peritoneal de paredes delgadas, la bolsa ovárica, casi en caudal del polo de cada riñón. El tubo uterino u oviducto corre a través de la pared de la bolsa ovárica. El ovario derecho se ubica algo más cranealmente que el izquierdo. El ovario derecho está en dorsal del duodeno descendente y el izquierdo en dorsal del colon descendente y en lateral del bazo. La retracción medial del mesoduodeno o mesocolon expone al ovario de cada lado. Cada ovario está unido por el ligamento propio al cuerno uterino y mediante el ligamento suspensorio a la fascia transversa en medial de las últimas (una o dos) costillas. El pedículo ovárico (mesovario) incluye al ligamento suspensorio con su arteria y vena, arteria y vena ováricas y cantidades variables de grasa y tejido conectivo. Los pedículos ováricos caninos contienen más grasa que en los felinos, dificultando mucho más la visualización de la vasculatura. Los vasos 2

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Cirugía veterinaria I

APARATO REPRODUCTOR FEMENINO

CONSIDERACIONES ANATOMICAS

El aparato reproductor femenino comprende a los ovarios, oviducto, útero, vagina,

vulva y glándula mamarías. Los ovarios se localizan dentro de un saco peritoneal

de paredes delgadas, la bolsa ovárica, casi en caudal del polo de cada riñón. El

tubo uterino u oviducto corre a través de la pared de la bolsa ovárica. El ovario

derecho se ubica algo más cranealmente que el izquierdo. El ovario derecho está

en dorsal del duodeno descendente y el izquierdo en dorsal del colon descendente

y en lateral del bazo. La retracción medial del mesoduodeno o mesocolon expone

al ovario de cada lado.

Cada ovario está unido por el ligamento propio al cuerno uterino y mediante el

ligamento suspensorio a la fascia transversa en medial de las últimas (una o dos)

costillas. El pedículo ovárico (mesovario) incluye al ligamento suspensorio con su

arteria y vena, arteria y vena ováricas y cantidades variables de grasa y tejido

conectivo. Los pedículos ováricos caninos contienen más grasa que en los felinos,

dificultando mucho más la visualización de la vasculatura. Los vasos ováricos

siguen una ruta tortuosa dentro del pedículo. Las arterias ováricas se originan a

partir de la aorta. La vena ovárica izquierda drena dentro de la vena renal

izquierda; la vena derecha hace lo propio dentro de la vena cava caudal. El

ligamento suspensorio es una banda tisular blanquecina resistente que diverge a

medida que transcurre desde el ovario hasta la unión con las dos última costillas.

El ligamento ancho (mesometrio) es el pliegue peritoneal que suspende al útero.

El ligamento redondo recorre el extremo libre del ligamento ancho desde el ovario

a través del canal inguinal con el proceso vaginal.

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Cirugía veterinaria I

El útero posee un cuerpo corto y cuernos estrechos largos. La irrigación

sanguínea del útero proviene de las arterias y venas uterinas. El cuello uterino es

la parte caudal contraída del útero y es más espeso que

el cuerpo uterino y la vagina. Está orientado casi en posición vertical, con la

abertura uterina dorsal. La vagina es larga y se conecta con el vestíbulo vaginal en

la entrada uretral. El clítoris es ancho, plano, vascular, infiltrado con grava y se

ubica sobre el piso del vestíbulo cerca de la vulva. La fosa clitoridea es una

depresión sobre el piso del vestíbulo que en ocasiones se confunde con el orificio

uretral. La vulva es la abertura externa del sistema genital. Los labios vulvares son

gruesos y forman comisuras puntiagudas. Los músculos constructores de la vulva

y el vestíbulo rodean a la vulva y el vestíbulo.

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Cirugía veterinaria I

FIG. 1. Aparato reproductor femenino

1. OVARIOHISTERECTOMIA

La ovariohisterectomía es la extracción quirúrgica de los ovarios y útero.

A. INDICACIONES

La indicación más común para la ovariohisterectomía es la esterilización (prevenir

el estro y camadas no deseadas). La producción de estrógenos endógenos

participa en la etiología de los tumores mamarios espontáneos.

La ovariohisterectomía antes del primer estro ofrece un factor protector definitivo,

reduciendo la incidencia de neoplasia mamaria hasta el 0,5 %. El factor de riesgo

es del 8 % cuando la ovariohisterectomía es retardada hasta después del primer

estro y después de dos o más ciclos estrales, el riesgo incrementan hasta el 26 %.

La ovariohisterectomía es el tratamiento de elección para la mayor parte de las

enfermedades ováricas y uterinas.

a. Enfermedades ováricas

Neoplasia; en general 10-15% son malignos (adenocarcinomas). Las

metástasis pueden ser mediante implantación de células en el

peritoneo, hígado, ganglios linfáticos. La neoplasia puede ocurrir

incluso en el tejido uterino que se deja tras la ovariohisterectomía. Los

teratomas ocurren raramente en los ovarios caninos.

Cistoadenomas (pueden ser bastante grandes hasta 10cm. de

diámetro).

Tumores de células de la granulosa: tumor ovárico más frecuente

(produce estrógenos) son frecuentes los cambios de comportamiento.

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Cirugía veterinaria I

Enfermedad metastática –los más frecuentes son de tumores

mamarios

Trauma

b. Enfermedades uterinas

Trauma abdominal, rotura, compromiso vascular.

Neoplasia – poco frecuente, la mayoría con origen en músculo liso

leiomioma (benigno) en perras, normalmente sin signos clínicos; en la

gata son más frecuentes los adenocarcinomas (malignos)

Subinvolución de puntos placentarios: sangrado persistente > de 4 a 6

semanas post-parto en la perra joven tras 1er o 2º parto suele regresar

de forma espontánea sin tratamiento médico o quirúrgico; la

ovariohisterectomía es curativa

Prolapso de útero

Torsión de útero

Situación del útero dentro de una hernia inguinal

Infección bacteriana aguda (metritis), cualquier edad de perra, debida

a retención de placentas, distocia, aborto.

Piometra – suelen ser perras de edad avanzada – estro normalmente

más de 4 a 6 semanas antes de la presentación)

B. TECNICA QUIRUGICA

Rasurar y hacer la preparación quirúrgica del abdomen ventral desde el xifoides

hasta el pubis. Identificar el ombligo y dividir visualmente el abdomen caudal en

tercios. En las perras, efectuar la incisión casi en caudal del ombligo en el tercio

craneal del abdomen caudal. Las incisiones más en caudal dificultan la

exteriorización de los ovarios caninos. En las perras de tórax profundo o en

aquellas con útero agrandado, extender la incisión hacia craneal o caudal para

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Cirugía veterinaria I

permitir la exteriorización visceral sin tracción excesiva. En las gatas, el cuero del

útero está más en caudal y es de exteriorización difícil; en consecuencia, hacer la

incisión en el tercio medio del abdomen caudal. Hacer una incisión de 4 a 8 cm a

través del tegumento y tejidos subcutáneos para exponer la línea alba.

Tomar la línea alba o vaina del recto ventral, levantarla y hacer una incisopunción

dentro de la cavidad abdominal. Extender la línea de incisión hacia craneal y

caudal con tijera Mayo. Elevar la pared abdominal izquierda asgando la línea o

vaina del recto externo con pinza de disección. Deslizar el gancho de ovariectomía

(por ej, Covault, Snook), con el gancho contra la pared abdominal, 2 a 3 cm en

caudal del riñón. Girar el gancho hacia medial para atrapar el cuerno uterino, liga-

mento ancho o ligamento redondo y elevarlo con suavidad desde el abdomen.

Confirmar anatómicamente la identificación del cuerpo uterino siguiendo ya sea la

bifurcación uterina o el ovario. Con tracción caudal y medial sobre el cuerpo

uterino, identificar el ligamento suspensorio mediante palpación como una banda

fibrosa tensa en el borde proximal del pedículo ovárico. Estirar o romper el

ligamento suspensorio cerca del riñón, sin desgarrar los vasos ováricos, para

facilitar la exteriorización del ovario. Emplear el índice para aplicar tracción

caudolateral sobre el ligamento suspensorio mientras se mantiene la tracción

caudomedial sobre el cuerno uterino.

Efectuar un orificio en el ligamento ancho en caudal del pedículo ovárico. Colocar

una o dos pinzas de Rochester Carmalt a través del pedículo ovárico en proximal

(profundo) del ovario y una a través del ligamento propio del ovario. El clamp

proximal (profundo) sirve como guía para la ligadura, el medio mantiene al

pedículo para ligadura y el distal impide el retroflujo de la sangre después de la

transección. Cuando se emplean dos clamps, el colocado sobre el pedículo

ovárico sirve como sostén y guía para /o ligadura. Colocar una ligadura en ocho en

proximal (por debajo) del clamp del pedículo ovárico. Seleccionar un material de

sutura absorbible para las ligaduras (2-0 o 3-0 de catgut crómico, pohdioxanono,

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Cirugía veterinaria I

poligluconato, poligalactina-910). Comenzar dirigiendo el extremo romo de la aguja

a través de la mitad del pedículo, curvar alrededor de un lado del pedículo, luego

redirigir la aguja a través del orificio original desde la misma dirección y girar la

ligadura alrededor de la otra mitad del pedículo. Ajustar la ligadura. Extraer un

clamp o aflojarlo mientras se ajusta la ligadura para facilitar la compresión del

pedículo. Colocar una segunda ligadura circunferencial en proximal (por debajo)

de la primera para controlar la hemorragia, que puede ocurrir por lo punción de un

vaso cuando la aguja se pasa a través del pedículo. Colocar una hemostática

mosquito sobre el ligamento suspensorio cerca del ovario. Transectar el pedículo

ovárico entre la Carmalt y el ovario. Abrir la bolsa ovárica y examinar el ovario

para asegurar que se lo ha extraído por completo. Extraer la Carmolt desde el

pedículo ovárico y observar por hemorragia. Remplazar la Carmalt y religar el

pedículo si se aprecia sangrado.

Seguir el cuerno uterino hasta el cuerpo del útero. Asgar el otro cuerno uterino y

seguir hasta el ovario opuesto. Colocar los clamps y ligaduras como se describiera

con anterioridad. Efectuar una ventana en el ligamento ancho adyacente al cuerpo

del útero y arteria y vena uterinas. Colocar uno Carmalt a través del ligamento

ancho a cada lado y transectar. Aplicar una liga dura alrededor del ligamento

ancho si la paciente está en estro, gestante o el ligamento ancho está densamente

infiltrado con vasos o grasa.

Aplicar tracción craneal sobre el útero y ligar el cuerpo uterino en craneal del

cuello. Colocar una sutura en ocho a través del cuerpo empleando el punto de lo

aguja y rodeando los vasos uterinos a cada lado. Colocar una ligadura

circunferencial alrededor del cuello uterino. Colocar una Carmalt o través del

cuerpo uterino en craneal de las ligaduras. Asgar la pared uterina con fórceps o

hemostática mosquito en craneal de las ligaduras. Transectar el cuerpo uterino y

observar por hemorragia. Religar si hay hemorragia Algunos cirujanos colocan una

a tres Carmalt a través del cuerpo uterino antes de la ligadura. En las gatas, los

clamps pueden cortar más que aplastar a un útero friable o congestivo causando

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Cirugía veterinaria I

transección antes de la colocación de las ligaduras. Recolocar el muñón uterino

dentro del abdomen antes de liberar las hemostáticas o fórceps. Cerrar la pared

abdominal en tres capas (fascia/línea alba, tejido subcutáneo y tegumento).

FIG. 2

(A) Para la ovariohisterectomía, elevar la pared abdominal con pinza de disección

y deslizar el gancho de ovariotomía contra aquella, unos 2-3 cm en caudal del

riñón. (B) Exteriorizar el cuerno uterino con el gancho e identificar al ligamento

suspensorio en el borde craneal del pedículo ovárico (C) Estirar o desgarrar el

ligamento suspensorio paro permitir la exteriorización del ovario utilizando el índice

para aplicar tracción caudolateral sobre el ligamento suspensorio mientras se

mantiene la tracción caudomedial sobre el cuerno uterino. (D) Colocar dos pinzas

de Carmalt a través del pedículo ovárico en proximal del ovario y una a través del

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Cirugía veterinaria I

ligamento propio (o colocar tres fórceps en proximal del ovario). Extraer el clamp

más proximal y colocar una ligadura en ocho en este sitio.

FIG. 3

(E) Dirigir el extremo romo de la aguja a través del medio del pedículo (1 a 2),

curvar la sutura alrededor de un lado del pedículo (3 a 4), luego redirigir la aguja a

través del orificio original desde la misma dirección (5 a 6) y curvar la ligadura

alrededor de la otra mitad del pedículo (7 a 8). Asegurar con firmeza la ligadura (7

y 8). (F) Colocar una ligadura circunferencial en proximal de la primera ligadura,

luego colocar uno hemostática sobre el ligamento suspensorio cerca del ovario.

Transectar el pedículo ovárico en distal del clamp a través del pedículo ovárico.

(G) Separar el ligamento ancho desde el cuerno uterino Clampear y ligar el

ligamento ancho (línea a rayas) si parece vascular. H, Para ligar el útero, colocar

una sutura en ocho a través del cuerpo uterino cerca de su cuello. Colocar una

segunda ligadura circunferencial más cercana al cuello uterino. Colocar una pinza

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Cirugía veterinaria I

de Carmalt en distal de las ligaduras y transectar entre el fórceps y las ligaduras.

Inspeccionar el muñón uterino por hemorragia (emplear una hemostática mosquito

unida a la pared uterina para evitarla retracción del útero dentro del abdomen).

C. COMPLICACIONES Y SECUELAS

a.Hemorragias

La hemorragia durante la ovariohisterectomía puede derivar del desgarro del

complejo arteriovenoso ovárico mientras se rasga el ligamento suspensorio.

Esta complicación puede evitarse rasgando el ligamento con cautela,

también puede estar causada por el desgarro de los vasos grandes en el

ligamento ancho, por el daño de los vasos uterinos por excesiva tracción

sobre el cuerpo del útero o liberación accidental de una pinza antes de

colocar las ligaduras. Los vasos grandes en el ligamento ancho deben ligarse

en forma individual y deben evitarse las tracciones exageradas sobre el

cuerpo uterino alargando la incisión abdominal. Las suturas mal colocadas

pueden llevar a la hemorragia intra o posoperatoria.Los pedículos ováricos y

muñón uterino deben tener ligaduras dobles y evaluarse por sangrado antes.

b. Piómetra del muñón uterino

La piómetra del muñón uterino puede ocurrir si no se elimina todo el cuerpo o

una parte de los cuernos durante la ovariohisterectomía y la paciente tiene

elevados niveles de progesterona en sangre. La fuente de la progesterona

puede ser endógena, desde el tejido ovárico residual, o exógena, por

compuestos progestacionales empleados para el tratamiento de la dermatitis.

La piómetra del muñón puede prevenirse mediante la escisión completa de

los cuernos y cuerpo uterinos.

c. Estro recurrente (síndrome de remanente ovárico).

Tras la ovariohisterectomía se origina por el tejido ovárico residual. Se

presentan aumento de tamaño de la vulva, sangrado durante el proestro (si

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Cirugía veterinaria I

queda tejido uterino residual), y cambios de comportamiento al igual que en

las hembras intactas durante el celo.

Las concentraciones séricas de progesterona son mas altas de lo que

pudiera ser esperable en animales ovariectomizados. Se debe explorar al

animal cuando está mostrando signos de celo para mejorar la identificación

de tejido residual. Normalmente se localiza fácilmente el tejido ovárico

retenido siguiendo los vasos ováricos ingurgitados en el lado afectado. Es

más frecuente que se elimine de forma incompleta el ovario derecho que el

izquierdo. Como el ovario derecho está situado algo más craneal en la

cavidad abdominal es posible que no se exponga tan bien durante la OHE lo

que puede llevar a su extirpación incompleta. Si no se identifica el tejido

ovárico retenido, se deben aislar los uréteres y eliminar todo el tejido del

pedículo ovárico.

d. Incontinencia urinaria

La incontinencia urinaria después de la ovariohisterectomía puede estar

causada por el bajo nivel de estrógenos sistémicos, adhesiones o

granulomas del muñón uterino que interfieren con la función esfinteriana de

la vejiga urinaria o fistulización vaginoureteral por la ligadura común de la

vagina y uréter.

La incontinencia urinaria sensible a los estrógenos ocurre en perras añosas

castradas a edades tempranas y es una secuela poco común y mal

comprendida de la ovariohisterectomía. El comienzo de la incontinencia

sensible a los estrógenos

e. Aumento de peso

El aumento del peso corporal es la secuela a largo plazo más común que se

registró en un estudio, con una representación del 26,2 % de las perras

sometidas a la ovariohisterectomía facultativa.

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Cirugía veterinaria I

Un reducido nivel de estradiol sistèmico después de la ovariohisterectomía

puede conducir a un excesivo depósito de grasa y aumento del peso.

2. OVARIECTOMIA

La ovariectomía implica la remoción quirúrgica de uno o ambos ovarios.

A. INDICACIONES Y EFECTOS

Al remover ambos ovarios se elimina la fabricación de hormonas (estrógenos,

progesterona, inhibina, activina y folistatina), así como a los gametos femeninos

por parte de los ovarios. Esto resulta en una esterilidad reproductiva, así como a la

eliminación de los estros, lo cual evita enfermedades heredables. Previene,

asimismo, la neoplasia ovárica, la hiperplasia vaginal, el prolapso vaginal, la

hiperplasia endometrial quística y la piometra, y disminuye el riesgo de cáncer

mamario en perras, si se practica antes de los 2.5 años de edad. La ovariectomía

lateral puede ser un tratamiento práctico para la hiperplasia mamaria felina. Y la

ovariectomía puede aumentar la supervivencia de las perras que son tratadas de

cáncer mamario.

Aunque la ovariectomía bilateral elimina de manera natural a la hiperplasia

endometrial quística y la piometra, permanece la posibilidad de neoplasias

uterinas. El riesgo parece ser bajo aún en perras enteras y los tumores uterinos

reportados han sido en su mayor parte benignos. La ovariectomía unilateral está

indicada para la neoplasia o enfermedad ováricas unilaterales (quistes,

infecciones) cuando se desea conservar la fertilidad.

B. CONTRAINDICACIONES

La ovariectomía aplicada en un animal gestante terminará la gestación. En perras,

las gestaciones menores de 30 días resultan en resorción, mientras que las

gestaciones a largo plazo resultan en aborto con descarga de material fetal o aún

en mortinatos. 

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Cirugía veterinaria I

De manera similar, la ovariectomía se halla contraindicada cuando el útero se

encuentra enfermo (por ejemplo, piometra, quistes, neoplasia, hiperplasia,

hidrometra, mucometra, torsión, prolapso y ruptura). De nuevo es necesaria la

ovariohisterectomía en estos casos. La remoción de los ovarios en perras

menores de tres meses de edad se relaciona con mayor riesgo de incontinencia

urinaria. La ovariectomía practicada durante el estro en una perra aumenta el

riesgo de hemorragia perioperatoria. La ovariectomía llevada a cabo durante el

diestro (metaestro) en perras con antecedentes previos de seudogestación clínica

puede ocasionar un incremento súbito de prolactina e inducir pseudogestación

clínica.

C. TECNICA QUIRURGICA

Fase 1. Abordaje cavidad abdominal: con el animal en posición decúbito lateral

izquierdo, se realizó una incisión en la piel al lado derecho de 1 cm a 5 cm caudal

a la última costilla y por debajo de las apófisis transversas lumbares, con una

longitud de 1 cm a 4 cm siguiendo una dirección dorsoventral.

A continuación, el tejido subcutáneo se incidió mediante disección roma con tijera

de metzembaun al igual que los distintos planos musculares y el peritoneo. Estos

últimos consideran el músculo oblicuo externo, el oblicuo interno y el transverso

abdominal, separados de acuerdo a la dirección de sus fibras, mediante

separación digital, al igual que el peritoneo; teniendo así acceso a la cavidad

abdominal.

Fase 2. Ubicación y extracción del ovario derecho: se ubicó el ovario derecho o

izquierdo, se rompe el ligamento suspensorio del ovario, se toma el pedículo

ovárico con una pinza hemostática; se colocó otra pinza hemostática en la porción

de cuerno uterino inmediatamente adyacente al ovario, se procede a extirpar el

ovario ubicado entre las dos pinzas; se realizó angiotripsia del pedículo ovárico

(promedio entre 10 y 12 vueltas); por último, se suturó mediante un patrón de

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Cirugía veterinaria I

transfixión la porción de cuerno uterino libre, utilizando material de sutura

polifilamento absorbible (Poligalactina 910) de un calibre adecuado.

Fase 3. Ubicación y extracción ovario izquierdo: de igual forma se procedió con el

ovario izquierdo, llegando a él, guiado por el cuerpo y cuerno uterino

correspondiente.

Fase 4. Una vez terminada la extirpación de los ovarios, se suturaron las capas

musculares y tejido subcutáneo en un solo plano; y piel por separado.

3. PARTOS DISTOCICOS

A. CESÁREA

El objetivo de la cesárea (histerotomía) es extraer todos los fetos del útero grávido

con la mayor celeridad posible. Las indicaciones primarias para la cesárea son la

distocia (fetos gigantes, mal colocados o mal desarrollados, canal pélvico

reducido, inercia uterina) o putrefacción fetal. Las cesáreas facultativas se

programan a menudo en las razas braquicefálicas y otros animales con

antecedentes de distocia o aquellos con mal unión de fracturas pélvicas. La

cesárea es más corriente en las perras pequeñas y razas braquicefálicas. Los

animales con distocia muchas veces tienen anormalidades hidroelectrolíticas que

deben corregirse antes de la intervención quirúrgica. Aunque por lo usual es un

problema posparto, la eclampsia preparto ocasiona hipocalcemia. Deben

administrarse antibióticos profilácticos (por ej., cefazolina, 20 mg/kg, EV) si se

sospecha en muerte fetal o infección uterina. Anestesiar estos animales con

cautela; la depresión fetal y reducción de la viabilidad son directamente

proporcionales al grado de depresión materna.

La ovariohisterectomía (OHE) puede realizarse con seguridad junto con la cesárea

si la paciente recibe fluidoterapia adecuada. La cesárea puede realizarse como se

describe y ser seguida por la OHE, o se procede con una resección en bloque. La

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Cirugía veterinaria I

ovariohisterectomía en bloque se realiza antes de la histerotomía (incisión uterina)

y extracción de los neonatos. La sobrevida neonata para la resección en bloque es

similar que para otras técnicas de manejo de las distocias. Los cambios en la

presión sanguínea y hematócrito son mínimos luego de la ovariohisterectomía en

bloque y el comportamiento materno y lactación son normales luego de la OHE. La

remoción en bloque del útero grávido puede ser facultativa o necesaria debido a

muerte fetal o integridad/sanidad uterina cuestionable. Las ventajas de la

ovariohisterectomía en bloque del útero grávido incluyen tiempo anestésico

mínimo, escasas posibilidades de contaminación abdominal y control poblacional

evitando una segunda intervención. La desventaja de esta técnica es que se

requiere un segundo equipo de personas para reanimar a los neonatos.

a. Cesárea sin ovariohisterectomía.

Rasurar y realizar una preparación abdominal preliminar antes de la

inducción anestésica para reducir el tiempo desde la inducción hasta el

alumbramiento. Preoxigenar a la perra/gata si es posible antes de la

inducción. Anestesiar a la paciente empleando un protocolo general o

regional que sea conveniente y reduzca la depresión neonatal. Colocar a

la paciente en decúbito dorsal. Aplicar un lavado aséptico final al abdomen

ventral. Efectuar una incisión en la lineo media ventral desde casi craneal

del ombligo hasta cerca del pubis. Elevar la vaina del recto externo antes

de hacer la incisopunción a través de la línea alba paro evitar la laceración

inadvertida del útero. Exteriorizar los cuernos uterinos grávidos

levantándolos más que traccionándolos hado afuera del abdomen porque

los vasos uterinos se avulsionan con facilidad y la pared del útero puede

desgarrarse. Aislar el útero del resto del abdomen con paños de tercer

campo. Levantar e incidir el cuerpo uterino para evitar lacerar al neonato.

Extender la incisión con tijera de Metzenbaum. La incisión debe tener el

largo suficiente para prevenir el desgarro durante la extracción del feto.

Vaciar cada cuerno exprimiendo con delicadeza en craneal de cada feto

para movilizarlo hacia la incisión, entonces se lo toma y extrae con

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Cirugía veterinaria I

suavidad desde el útero. Romper el saco omniótico y clampear el cordón

umbilical a medida que se presenta cada neonato. Evitar la contaminación

del abdomen y campo quirúrgico con los líquidos amnióticos. Pasar en

forma aséptico cada neonato o un asistente. A término la placenta a

menudo es expulsada con el neonato; sin embargo, si no se ha separado

la placenta, traccionarla con suavidad desde el endometrio. No separar en

forma enérgico la placenta desde la pared uterina o puede ocurrir uno

hemorragia copiosa. Palpar el canal pélvico y extraer cualquier feto desde

esta localización.

La contracción uterina por lo usual comienza cuando se extraen los fetos.

Administrar oxitocina o maleato de ergonovina si no se presentan las

contracciones. Administrar oxitocina y comprimir las paredes uterinas si la

hemorragia endometrial es profusa. Lavar el útero externo para eliminar

los detritos. Cerrar la incisión uterina con material de sutura absorbible 3-0

o 4-0 empleando un patrón aposicional continuo simple en monocapa, o

cierre aposicional en doble capa (mucosa y submucosa seguidas por la

muscular y serosa) o cierre aposicional seguido por una segunda capa

invaginante (Cushing o Lembert). Lavar el campo operatorio y remplazar

los paños de campo, torundas, instrumentos y guantes. Inspeccionar por

avulsión de vasos uterinos y controlar la hemorragia, lavar el abdomen si

se produjo contaminación o derrame de los contenidos uterinos. Cubrir la

incisión uterina con omento. Afrontar la pared abdominal en tres capas

(fascia del recto, tejido subcutáneo y piel). Emplear un cierre cutáneo

subcuticular o intradèrmico para evitar cabos de sutura que puedan irritar

a los neonatos. Lavar todos los antisépticos, sangre y detritos desde el

abdomen ventral y mamas.

b. Resección en bloque.

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Cirugía veterinaria I

Realizar la ovariohisterectomía en bloque del útero grávido primero con la

exteriorización y aislamiento de los pedículos ováricos y separación del

ligamento ancho del útero hasta el punto del cuello uterino. Manipular los

fetos en la vagina o cuello dentro del cuerpo uterino. Luego colocar clamps

dobles o triples en los pedículos ováricos y útero casi en craneal del cuello

uterino. Transectar con rapidez entre los clamps y remover los ovarios y

útero Pasar el útero a un equipo de asistentes para abrirlo y reanimar a los

neonatos. El tiempo desde el clampeado del útero hasta la extracción de

los neonatos debe ser de 30 a 60 segundos. Hacer ligaduras dobles de los

pedículos ováricos y uterino. Inspeccionar por hemorragias y hacer la

síntesis del abdomen.

c. Atención neonatal.

Sostener al neonato con firmeza y columpiarlo con suavidad hacia abajo

para ayudar a eliminar el líquido desde las vías aéreas superiores. Aspirar

con delicadeza las ventanas nasales y nasofaringe. Frotar y secar con

energía cada neonato para estimular el impulso respiratorio. Si es

necesario, antagonizar los opioides (colocar una gota de naloxona debajo

de la lengua) y administrar doxapram (colocar una gota debajo de la

lengua) para estimular la respiración. Ligar, transectar y desinfectar el

cordón umbilical. Inspeccionar cada neonato por anomalías congénitas o

del desarrollo (paladar hendido, deformación de miembro, hernia, ano

imperforado). Colocar los neonatos en un ambiente cálido (32°C) hasta

que su madre sea capaz de atenderlos. Permitir la lactación tan pronto

como sea factible para asegurar la ingesta del calostro. Observar de cerca

a la madre y su comportamiento con los neonatos durante las primeras

horas; algunas madres rechazarán o matarán a sus neonatos. Dar el alta

de la madre y neonatos tan pronto como sea posible para reducir el estrés

y la exposición o patógenos potenciales.

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Cirugía veterinaria I

4. EPISIOTOMIA

La episiotomía es la incisión del orificio vulvar para facilitar el acceso al vestíbulo y

la vagina. Está indicada para la exploración quirúrgica de la vagina, escisión de

masas vaginales, reparación de laceraciones, modificación de defectos o

estrecheces congénitas, exposición de la papila uretral y para permitir la

extracción fetal manual.

Con la paciente en posición perineal, colocar un clamp atraumático (Doyen} con

una rama en la vagina a cada lado de la línea media perineal. Efectuar uno

incisión cutánea en la línea media a través de la comisura dorsal de los labios

vulvares casi en distal del músculo esfinteriano anal externo con bisturí. Continuar

la incisión a través del músculo y pared vaginal con tijera de Mayo. Controlar la

hemorragia con hemostáticas, electrocoagulación y ligaduras. Colocar dos o tres

puntos directores en U horizontal de espesor completo a través de la piel y

mucosa vaginal o cada lado de la incisión para facilitar la retracción y hemostasia.

Luego, quitar los clamps de Doyen y colocar un separador autoestático (por ej.,

Gelpi) para mejorar la exposición, si es necesario. Evaluar la vagina y vestíbulo y

realizar los procedimientos necesarios. Cerrar la incisión de la episiotomía en tres

capas. Precolocar un punto interrumpido para realinear y reafrontar la comisura

vulvar dorsal. Primero, afrontar la mucosa vaginal con puntos interrumpidos o

continuos simples (por ej., polidíoxanona o poligluconato 3-0 o 4-0), ajustando los

nudos en el lumen. Luego, afrontar los músculos y tejidos subcutáneos en un

patrón continuo. Por último, afrontar la piel con puntos aposicionales interrumpidos

(por ej., nailon o polipropileno 3-0 o d-0). Colocar un collar isabelino o dispositivo

similar después de la intervención para prevenir el autotraumatismo. Para reducir

la inflamación y el edema, aplicar compresas frías inmediatamente después de la

operación y compresas calientes al día siguiente.

18

Cirugía veterinaria I

FIG. 4.

(A) Para la episiotomía, colocar fórceps atraumáticos sobre cada lado del sitio

de incisión planeado. (B) Hacer una incisión de espesor completo desde la

comisura vulvar dorsal hasta cerca del músculo esfinteriano anal externo.

Explorar la vagina y el vestíbulo. Afrontar la mucosa vaginal con un patrón de

sutura continua simple. (C) Afrontar el músculo, subcutáneo y tejido conectivo

19

Cirugía veterinaria I

con una segunda capa de puntos y la piel con una tercera capa de suturas

aposicionales.

5. NEOPLASIAS

A. NEOPLASIAS UTERINAS

a. Definiciones

El leiomioma y el leiomiosarcoma son los tumores benignos y malignos del

músculo liso, respectivamente, que pueden residir en el útero. Los

adenocarcinomas uterinos son neoplasias malignas de las glándulas del

útero.

b. Consideraciones generales y fisiopatología clínicamente relevante

La neoplasia uterina es rara en caninos y felinos; la mayor parte de los

tumores son hallazgos incidentales en la necropsia. Pueden desarrollarse

en el remanente del cuerpo uterino luego de la ovariohisterectomía (OHE).

La patología concurrente puede abarcar quistes ováricos, hiperplasia

endometrial quística y piómetra, sugiriendo una influencia hormonal común.

La mayoría de los tumores uterinos son leiomiomas originados a partir del

miometrio. Son benignos y en general no invasores y de crecimiento lento.

Pueden protruir dentro del lumen uterino sobre un pedúnculo o provocan

una comba externa de la pared.

Los tumores malignos más prevalentes de las perras y gatas son los

leiomiosarcomas y adenocarcinomas endometriales, respectivamente. Los

leiomiosarcomas no se diferencian fácilmente a simple vista de los

leiomiomas. Son tumores invasores que por lo usual tardan en hacer

metástasis. Los adenocarcinomas provocan engrosamientos y nódulos en

el endometrio. El tumor puede ser sólido o quístico, sésil, pedunculado o

polipoide y puede obliterar el lumen uterino. Se ha comunicado al

adenocarcinoma multicéntrico. La enfermedad metastásica por lo regular

20

Cirugía veterinaria I

está presente en el momento del diagnóstico y puede asentar en el cerebro,

ojos, ovarios, glándulas adrenales, glándulas tiroideas, pulmones, hígado,

riñones, vejiga urinaria, intestinos, páncreas, pericardio, miocardio,

diafragma y/o ganglios linfáticos regionales.

c. Diagnostico

Presentación clínica

- Reseña. No se observaron predilecciones raciales. La mayoría de las

afectadas son de edades medias o avanzadas.

- Anamnesis. La mayoría de las neoplasias uterinas son asintomáticas a

menos que sean voluminosas y compriman al conducto gastrointestinal

o vías urinarias. Los animales pueden tener antecedentes de ciclos est

rales anormales y/o secreciones vaginales mucoides o hemorrágicas

como resultado de la irritación y erosión vascular del tumor. Los tu-

mores uterinos pueden obstruir el cuello y ocasionar piómetra, por ello

las manifestaciones iniciales pueden incluir secreción vaginal purulenta,

pirexia, anorexia, vómito, polidipsia y/o poliuria. El crecimiento tumoral

puede comprimir al colon, vejiga urinaria o uretra con el resultante

tenesmo u obstrucción. Otras alteraciones pueden comprender

distensión abdominal, disuria, hematuria, disnea y/o pérdida de la

conciencia.

- Hallazgos del examen físico

El examen físico a menudo es normal aunque pueden palparse masas

voluminosas. Puede haber secreción vaginal hemorrágica. Algunas

masas uterinas son palpables durante el examen rectal. Pueden

palparse los ganglios linfáticos sublumbares asimétricos agrandados si

la neoplasia ha hecho metástasis. El examen vaginal digital por lo usual

es normal. Los animales con piómetra pueden tener depresión, fiebre,

dolor a la palpación abdominal y secreción vaginal purulenta.

21

Cirugía veterinaria I

- Radiología/Ultrasonografía/Endoscopia

La radiología y ultrasonografia pueden mostrar una masa en la región

uterina. La ecogenicidad de las masas uterinas es variable. Las

biopsias bajo guía ultrasonográfica pueden rendir información referida al

tipo tumoral. Las placas radiográficas abdominales deben ser evaluadas

por indicios de afección linfoglandular o metástasis viscerales y los

estudios torácicos deben ser solicitados por enfermedad metastásica.

La vaginoscopia puede revelar secreciones anormales.

- Hallazgos de laboratorio

Los resultados hematológicos y del perfil bioquímico sérico son

inespecíficos. La paciente puede estar anémica si existe secreción

hemorrágica crónica o síndrome paraneoplásico. Las células

neoplásicas rara vez se identifican en la citología vaginal. El diagnóstico

definitivo requiere histopatología.

d. Diagnostico diferencial

Los diagnósticos diferenciales para las masas uterinas comprenden

cuerpos extraños intestinales, lesiones tumorales o fúngicas, masas

urinarias o agrandamiento de ganglios linfáticos secundario a neoplasia o

procesos inflamatorios. Los diagnósticos diferenciales para las secreciones

vaginales incluyen estro, parto, aborto, loquios normales, vaginitis, metritis,

piómetra, subinvolución de sitios placentarios, mucómetra, torsión uterina o

traumatismos.

e. Manejo médico

Se desconoce la eficacia de la quimioterapia o terapia radiante para las

masas uterinas.

22

Cirugía veterinaria I

f. Tratamiento quirurgico

La ovariohisterectomía es el tratamiento de elección para las neoplasias

uterinas.

Las pacientes son colocadas en decúbito dorsal para una celiotomía en la

línea media ventral. Todo el abdomen ventral y el tórax caudal deben ser

rasurados y preparados para la cirugía aséptica.

Técnica quirúrgica

Realizar una celiotomía en la línea media ventral. Explorar el abdomen por

evidencias de enfermedad metastásica o otras anormalidades. Tomar

biopsia o hacer lo exéresis de las estructuras anormales. Realizar una

ovariohisterectomía. Cultivar el útero si hay sospecha de metritis o

piómetra.

PATOLOGIA QUIRURGICA DEL APARATO GENITAL MASCULINO

ANATOMIA QUIRURGICA

Los principales componentes del sistema genital masculino son los testículos,

pene y próstata. La glándula prostática circunda por completo al cuello de la vejiga

urinaria dondecomienza la uretra. En los perros menores de 4 años de edad, la

próstata por lo usual se localiza en la cavidad pélvica en el margen del pubis. La

próstata comienza a agrandarse en la pubertad, adquiriendo una posición

intrabdominal. En la maduressu tamaño es muy variable. La próstata está

encapullada por tejido fibromuscular y es bilobulada con un surco mediodorsal

prominente. El surco dorsal continúa dentro del parénquima prostático como

tabique mediano. Las superficies ventrolaterales de la próstata están cubiertas por

23

Cirugía veterinaria I

un cojinete graso. El parénquima es lobulado con glándulas tubuloalveolares que

se vacían a través de conductos diminutos (12 a 20) dentro de la uretra prostàtica.

El conducto deferente ingresa en la superficie cráneodorsal de la próstata y corre

hacia caudoventral para penetrar en la uretra en el coliculo seminal. La irrigación

sanguínea y la inervación (nervios pélvicos e hipogastrio) se localizan en los

pedículos laterales (reflejo peritoneali ingresando a la próstata en las posiciones

horarias 10 y 2 cuando se aprecian en el plano transverso. Las arterias prostáticas

se originan a partir de la arteria urogenital (rama de la arteria iliaca interna) y

emiten ramas al conducto deferente, uretra, vejiga urinaria, uréteres y recto. Los

nervios hipogastrio (simpático) y pélvico (parasimpàtico) siguen la vasculatura y

son esenciales para la micción y continencia. Él nervio pudendo emite ramas a lo

largo de la superficie ventral de la uretra con extensión hacia el cuello de la vejiga

urinaria. El nervio pudendo inerva al músculo esquelético del esfínter uretral

externo. Los ganglios linfáticos iliaco, drenan la próstata. En los gatos, las

glándulas bulbouretrales se encuentran en caudal de la próstata en el arco

isquiático.

El pene tiene raíz cuerpo y glande. La raíz de pene está formada por los pilares

derecho e izquierdo, que se originan a partir de la tuberosidad isquiática. Cada

pilar está compuesto por el cuerpo cavernoso del pene circundado por la túnica

albugínea. Los dos cuerpos se extienden a cada lado,separados por un tabique

mediano, en todo el recorrido del cuerpo peneano hasta el hueso en el glande. El

extremo distal del pene o glande está cubierto por el prepucio, una mucosa

revestida por un pliegue cutáneo. El extremo distal del pene canino se dirige hacia

craneal y se localiza en ventral de la pared abdominal. El extremo distal del pene

felino se dirige hacia caudal y ventral en el perineo. El glande del pene felino está

cubierto por espinas cornificadas dirigidas hacia caudal que son más prominentes

en los machos enteros. El hueso del pene felino es muy diminuto, mientras que en

el canino es un hueso rugoso, acanalado y largo. La uretra transcurre por el surco

ventral del hueso del pene. El cuerpo esponjoso circunda a la uretra. El músculo

24

Cirugía veterinaria I

isquiocavernoso se origina a partir de la tuberosidad isquiática y se inserta sobre

el pilar. El músculo retractor del pene se origina a partir de la superficie ventral del

sacro o en las primeras dos vértebras coccígeas y se extiende hacia distal sobre la

superficie ventral del pene insertándose a nivel del glande. Los músculos retractor

y esfínter anal externo comparten fibras musculares. El músculo bulboesponjoso

hace protuberancia entre los músculos isquiocavernosos en ventral del esfínter

anal externo.

El Terrier escocés en general tiene una próstata más grande que otras

razas de tamaños similares.

La cirugía peneana a menudo se asocia con hemorragia significativa debido

a la naturaleza vascular del tejido cavernoso.

El escroto se localiza entre la región inguinal y el ano. En los perros, la piel

escrotal es delgada y con pelaje ralo. El escroto felino es más dorsal y con pelaje

más denso que el canino. El escroto es un saco membranoso con un tabique

medio que aloja a los testículos, epidídimos y cordones espermáticos distales. Los

testículos, epidídimos, conductos deferentes y vasos y nervios asociados están

cubiertos por la túnica vaginal visceral y parietal y la fascia espermática. Los

testículos son relativamente pequeños y ovoides. El epidídimo es grande,

contorneado y unido a la zona lateral del testículo. La cabeza del epidídimo se

comunica con el testículo y la extremidad caudal o cola se continúa con el

conducto deferente. La cola se une al testículo mediante el ligamento propio del

testículo. El ligamento de la cola del epidídimo une el epidídimo a la túnica vaginal

y fascia espermática. El conducto deferente se curva alrededor del uréter a

medida que va desde el anillo inguinal, ingresa a la próstata dorsal y finaliza en la

uretra prostática. El uréter está en dorsal del conducto deferente. El cordón

espermático comienza en el anillo inguinal donde se encuentran la arteria

testicular, venas testiculares (plexo pampiniforme), vasos linfáticos, plexo nervioso

autónomo testicular, conducto deferente y su arteria y vena, músculo liso y capa

visceral de la túnica vaginal. El músculo cremáster viaja a lo largo de la

25

Cirugía veterinaria I

superficieexterna de la túnica parietal. El cremáster es una extensión plana,

delgada, del músculo oblicuo abdominal interno.

Los epidídimos pueden palparse a menudo en los perros con epididimitis.

PROSTATA

PROSTATECTOMÍA

Total. La prostatectomía total se indica para los pacientes con tumores que no han

hecho metástasis; rara vez se realiza para traumatismos graves o enfermedad

prostática crónica que no ha respondido a otras medidas terapéuticas. El

procedimiento se realiza en contadas ocasiones porque es habitual la

incontinencia urinaria asociada. Exponer la próstata a través de una celiotomía en

la línea medio ventral caudal y osteotomía púbica. Colocar un catéter uretral.

Retraer la vejiga urinaria hacia craneal con puntos directores. Disecar los

pedículos laterales y grasa periprostático en forma directa desde la cápsula sin

lesionar el plexo dorsal de vasos y nervios. El control hemostático se efectúo con

ligaduras o electrocoagulación, ligar y dividir los vasos prostáticos y conducto

deferente tan cerca de la próstata como sea posible. Disecar la próstata desde la

vejiga urinaria y uretra extropélvica. Transectar la uretra sobre ambos extremos

tan cerco de la próstata como sea posible. Evitar el trígono y cuello de la vejiga

urinaria. Extraer lo próstata. Avanzar el catéter uretral dentro de la vejiga urinaria.

Aproximar los extremos uretrales con puntos interrumpidos simples utilizando

materialde sutura absorbible sintético 4-0 a 6-0 (polidioxanona, poligluconato)

sobre aguja de punta ahusada atraumàtica. Colocar los dos primeros puntos en

las posiciones horarias de las 12 y 6, dejando los extremos largos para colaborar

en la rotación de la uretra durante la sutura. Colocar primero la sutura dorsal.

Espaciar los puntos aproximadamente 2 mm y a 1,5-2 mm desde el borde. Colocar

un tubo de cistostomia o sonda de Foley transuretral para desviar la orina durante

5 a 7 días. Tomar biopsia de un ganglio linfático ilíaco o sublumbar paro evaluar

por enfermedad metastásica. Remplazar los instrumentos y guantes conta-

minados. Lavar el campo operatorio y abdomen. Colocar omento alrededor de la

anastomosis. Alambrar el segmento pùbico en el lugar. Realizar la síntesis de la

26

Cirugía veterinaria I

pared abdominal en tres capas. Colocar un collar isabelino o dispositivo similar

después de la cirugía para evitar el desplazamiento del catéter y traumatismo del

sitio quirúrgico.

A, Para realizar la prostatectomia total, separar la fascia, vasos y nervios desde la próstata mediante disección directa contra lá cápsula. B, Luego disecar los bordes craneal y caudal de la

próstata desde la uretra y transectar a ésta lo más cercano posible o la próstata. C, Hacer un stent uretral con un catéter y afrontar los extremos con suturas de aproximación.

Subtotal. La prostatectomía subtotal está indicada en los pacientes estables para

la abscedación o quistes recurrentes que no responden a los procedimientos de

avenamiento. Debe colocarse un catéter urinario para colaborar con la

identificación uretral. La próstata se aborda y expone como para la prostatectomía

total. Remitir el tejido escindido para la evaluación histopatológica.

Subtotal con capsulectomía. Aislar y ligar o cauterizar todos los vasos que

ingresan en la cápsula prostática. Escindir la próstata dentro de los 5 mm de la

uretra utilizando tijera, unidad de electrocirugía o láser. Colocar un tubo de

cistostomia sí se desea extraer el catéter uretral. Valorar la hemostasia y lavar el

sitio quirúrgico. Rodear la uretra prostática con omento o grasa prostática. Hacer

la síntesis abdominal de rutina.

27

Cirugía veterinaria I

Subtotal intracapsular. Incidir el tabique mediano ventral con electroescalpelo.

Continuar la incisión a través del parénquima dentro de la uretra ventral. Con

electroescalpelo, resecar todo el parénquima excepto una cubierta de 3 mm unida

a la cápsula. Resecar toda la uretra excepto una tira dorsal de 3 a 5 mm. Lavar la

cubierta prostática y cerrar la cápsula sobre un catéter uretral colocado en la

vejiga urinaria. Emplear un patrón de aproximación para la primera capo y otro in-

vaginante para la segunda capa de síntesis (por ejm. polidioxanona o

poligluconato 3-0 o 4-0). Mantener el catéter durante 10 días. Como alternativa,

emplear un aspirador quirúrgico ultrasónico paro remover el parénquima y

preservar lo uretra

La prostatectomía subtotal puede realizarse utilizando, A, una técnica de capsulectomía o B, un método intracapsular.

NEOPLASIA PROSTATICA

Los tumores prostáticos pueden originarse a partir del tejido epitelial (carcinomas),

tejido del músculo liso (leiomiosarcoma) o estructuras vasculares

(hemangiosarcoma).

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Cirugía veterinaria I

CONSIDERACIONES GENERALES Y FISIOPATOLOGIA

Si bien la neoplasia prostàtica es la patología más común de la próstata en los

machos caninos castrados, todavía es poco corriente en los perros y rara en los

gatos.. La mayoría de los tumores prostáticos son adenocarcinomas. Los

carcinomas prostáticos son localmente invasores y hacen metástasis temprana a

los ganglios linfáticos regionales (ilíacos, pélvicos y sublumbares), pulmón y

esqueleto. Con frecuencia invaden al hueso, vejiga urinaria, colon y tejidos

circundantes por extensión directa. Otros sitios metastásicos comprenden hígado,

bazo, riñón, corazón y glándulas adrenales.

El compromiso esquelético puede ocasionar dolor o fracturas patológicas. La

osteopatía hipertrófica ha sido vinculada en ocasiones con los tumores prostáticos.

El agrandamiento prostático ocasiona compresión y obstrucción parcial del colon,

recto y a veces uretra. El edema blando de los miembros pélvicos puede ser

secundario a la invasión linfática del tumor. La mayoría de los tumores interesan al

trígono y uretra y han hecho metástasis para el momento del diagnóstico. El

comportamiento de los tumores prostáticos felinos es desconocido.

DIAGNOSTICO

Presentación clínica

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Cirugía veterinaria I

Reseña. La neoplasia prostática ocurre en machos enteros y castrados.

Los perros de razas medianas a grandes están sobrerrepresentados, pero

no hay predisposición evidente. La edad de presentación promedio es de 8

a 10 años.

Anamnesis. Los signos pueden incluir, claudicación o debilidad del tren

posterior, tenesmo, disquecia, retención o incontinencia urinaria,

estranguria, disuria, poliuria, polidipsia, hematuria, edema de miembros

pélvicos y dolor abdominal, pélvico o lumbar. La neoplasia prostática puede

ocasionar emaciación y debilidad marcadas. La enfermedad metastásica

puede inducir otras alteraciones (por ejm. disnea).

Hallazgos del examen físico

El animal puede estar debilitado. La infiltración linfoglandular y obstrucción

linfática pueden causar edema de miembros pélvicos. La próstata puede

ser de tamaño normal, pero a menudo tiene agrandamiento asimétrico. El

dolor, firmeza, fijación e irregularidad nodular son característicos de la

neoplasia prostática. El agrandamiento de los ganglios linfáticos

sublumbares puede ser detectado durante el examen rectal. La palpación

esquelética en ocasiones induce dolor secundario a las metástasis óseas.

Radiología/Ultrasonografía

Las placas radiográficas del tórax deben evaluarse por metástasis. Los

estudios radiológicos del abdomen y pelvis deben evaluarse por el tamaño

y la mineralización prostáticas, agrandamiento de ganglios linfáticos,

desplazamiento colònico y lesiones vertebrales o pélvicas osteolíticas o

proliferativas. La uretrocistografía retrógrada puede determinar el tamaño

uretral y lisura de mucosa, simetría prostática y reflujo uretroprostático. La

mayoría de los tumores prostáticos interesan la uretra y el trigono. La

ultrasonografía define la masa prostática como quística o sólida. También

evalúa los ganglios linfáticos abdominales. La mayoría de los

adenocarcinomas prostáticos son hiperecoicos. La aspiración y biopsia

30

Cirugía veterinaria I

prostáticas son facilitadas por la guía ultrasonográfica. Los barridos óseos

nucleares pueden localizar sitios de enfermedad metastásica.

Hallazgos de laboratorio

La hematología, perfil de bioquímica sérica, análisis de orina, urocultivo y

electrocardiografía se emplean para valorar la condición del enfermo. Los

resultados son inespecíficos para la neoplasia prostática, aunque pueden

identificarse síndromes paraneoplásicos y problemas concurrentes. Pueden

detectarse anemia, hematuria y/o piuria.

La aspiración con aguja fina de la neoplasia prostática puede rendir una

muestra moderadamente celular con células epiteliales anormales. Los

lavados prostáticos son menos confiables en la recolección de células

neoplásicas. La biopsia es necesaria para el diagnóstico definitivo.

DIAGNOSTICO DIFERENCIAL

Los diagnósticos diferenciales comprenden hiperplasia, abscesos y quistes

prostáticos, quistes periprostáticos, prostatitis, masas rectales o tumores pélvicos.

MANEJO MEDICO

La eficacia de la quimioterapia y terapia radiante no ha sido comunicada para los

tumores prostáticos. Se sugirieron el ketoconazol y los agonistas de la hormona

liberadora de hormona luteinizante. El ketoconazol inhibe la síntesis de

testosterona testicular y adrenal. Los agonistas de la hormona liberadora de

hormona luteinizante finalmente reducen la liberación de FSH, LH y testosterona.

TRATAMIENTO QUIRURGICO

El tratamiento rara vez es satisfactorio. Los protocolos terapéuticos que combinan

cirugía, quimioterapia y terapia radiante están siendo investigados, pero su

eficacia se desconoce en la actualidad.

31

Cirugía veterinaria I

Manejo preoperatorio

Hacer la tricotomía y preparación aséptica del abdomen ventral, perineo

ventral y medial de los muslos.

Posición del paciente

El paciente es colocado en decúbito dorsal para una celiotomia en la línea

media. Todo el abdomen ventral y el área inguinal deben ser rasurados y

preparados para la cirugía aséptica.

TECNICA QUIRURGICA

La castración puede retardar temporalmente el crecimiento tumoral. La

prostatectomía puede ser curativa si el tumor se reconoce en una fase temprana.

Lamentablemente, la mayoría de los tumores están avanzados cuando son

diagnosticados, haciendo imposible la preservación de la inervación trigonal. Tales

perros a menudo son mascotas inaceptables después de la prostatectomía debido

a la incontinencia urinaria.

ATENCION Y VALORACION POSOPERATORIA

Los analgésicos y soluciones parenterales deben administrarse según necesidad.

La vejiga urinaria debe ser descomprimida y la orina desviada durante 4 o 5 días

con una sonda urinaria o tubo de cistostomia después de la prostatectomía. Los

pacientes deben ser supervisados por derrame urinario, incontinencia y/o proce-

sos infecciosos. Se recomienda la revaluación a intervalos frecuentes por

recurrencia local y enfermedad metastásica.

PRONOSTICO

El pronóstico es malo debido a la enfermedad metastásica, recurrencia y escasa

calidad de vida asociada con la incontinencia urinaria. La terapia hormonal no ha

sido de utilidad en los caninos. La mayoría de los perros sin tratar son sacrificados

dentro de 1 a 3 meses debido a las manifestaciones clínicas progresivas.

32

Cirugía veterinaria I

TESTICULOS

ORQUIECTOMÍA

La castración reduce la sobrepoblación al inhibir la fertilidad masculina y

disminuye la agresividad de los machos, el vagabundeo y el comportamiento

miccional indeseable. Ayuda a prevenir las enfermedades relacionadas con los

andrógenos incluyendo patologías prostáticas, adenomas perianales y hernias

perineales. Otras indicaciones para la castración abarcan las anormalidades

congénitas, alteraciones testiculares o epididimales, neoplasias escrotales,

traumatismos o abscesos, herniorrafia inguinoescrotal, uretrostomía escrotal,

control de la epilepsia y de anormalidades endocrinológicas.

Para la castración puede emplearse el acceso preescrotal o perineal. El abordaje

preescrotal es más común y con menores dificultades.

Castración preescrotal abierta.

Colocar al paciente en decúbito dorsal. Verificar la presencia de ambos testículos

en el escroto. Rasurar y preparar en forma aséptica el abdomen caudal y medial

de muslos. Evitar la irritación escrotal con la rasuradora o los antisépticos. Colocar

los paños de campo. Aplicar presión sobre el escroto para avanzar un testículo lo

más lejos posible dentro de! área preescrotal. Incidir la piel y tejidos subcutáneos a

lo largo del rafe mediano sobre el testículo desplazado. Continuar la incisión a

través de la fascia espermática para exteriorizar al testículo. Incidir la túnica vagi-

nal parietal sobre el testículo. No incidir la túnica albugínea, lo cual expondría al

parénquima testículos Colocar una hemostática a través de la túnica vaginal

donde se une con el epidídimo. Separar digitalmente el ligamento de la cola del

epidídimo desde la túnica mientras se aplica tracción con la hemostática sobre la

túnica. Exteriorizar adicionalmente el testículo mediante la aplicación de tracción

33

Cirugía veterinaria I

caudal y hacia afuera. Identificar las estructuras del cordón espermático. Ligar en

forma individual los cordones vasculares y conducto deferente, luego incluirlos en

una ligadura que los encierre. Muchos cirujanos ligan el conducto deferente y ple-

xo pampiniforme juntos. Para las ligaduras utilizar material de sutura absorbible 2-

0 o 3-0 (por ejm. catgut crómico, poligalactina 910, polidioxanona o poligluconato).

Como alternativa, emplear grapas hemostáticas. Colocar una hemostática a través

del cordón cerca del testículo. Asgar el conducto deferente con pinza de disección

por encima de la ligadura y transectar el conducto deferente y cordón vascular

entre la hemostática y las ligaduras. Inspeccionar el cordón por hemorragia y

recolocarlo dentro de la túnica. Circundar el músculo cremáster y túnica con una

ligadura. Avanzar el segundo testículo hacia la incisión, incidir la cobertura fascial

y efectuar la orquiectomía. Afrontar la fascia densa incidida sobre ambos lodos del

pene con puntos interrumpidos o continuos. Hacer la síntesis de los tejidos

subcutáneos con un patrón continuo. Afrontar el tegumento con patrón de sutura

intradérmica, subcuticular o interrumpida simple.

El riesgo de deslizamiento o aflojamiento de las ligaduras puede ser mucho

mayor con las técnicas cerradas que con las abiertas; sin embargo, la

remoción de las túnicas puede reducir la tumefacción posoperatoria.

Castración preescrotal cerrada

La castración "cerrada'’ se realiza en forma similar a la "abierta" excepto que no se

incide la túnica vaginal parietal. Exteriorizar al máximo el cordón espermático

reflejando la grasa y fascia desde la túnica parietal con una torunda. Aplicar

tracción sobre el testículo mientras se desgarran las inserciones fibrosas entre la

túnica del cordón espermático y escroto. Colocar ligaduras en masa (por ejm. de

material de sutura absorbible 2-0 o 3-0) alrededor del cordón espermático y

túnicas. Pasar la aguja a través del músculo cremáster si se desea una ligadura de

transfijación. También pueden utilizarse grapas hemostáticas.

34

Cirugía veterinaria I

A, Paro realizar unacastración canina obierta. avanzar un testiculo hacia el área preescrotal aplicando presión sobre el escroto. Efectuar una incisión sobro aI testículo. B, Incidir si fascia espermática y túnica vaginal parietal C, Colocar una Hemostática a través de la túnica donde se une con elepididimo y separar digitalmente el ligamento de la cola del epididimo desde la túnica.D, ligar el conducto deferente y cordón vascular en formo individual y luego rodearlos con una ligadura circunferencial proximal. Aplicar una pinza de Cormaltt en distal de las ligaduras y transectar entre el fórceps y las ligaduras.

Castración perineal.

La castración perineal se realiza utilizando las mismas técnicas que para la

castración preescrotal abierta. Es más difícil desplazar los testículos hacia una

incisión caudal que a otra preescrotal. Debe utilizarse una técnica "abierta". Hacer

una incisión en la piel y el tejido subcutáneo de la línea media en dorsal del

escroto a nivel perineal por debajo del ano. Avanzar un testículo hacia la incisión y

seccionar la fascia y túnica espermáticas. Exteriorizar el testículo y ligar el cordón

espermático como se describiera para la castración preescrotal abierta.

35

Cirugía veterinaria I

CASTRACIÓN FELINA

Arrancar el pelo escrotal más que rasurarlo. En los gatitos menores de 16 - 20

semanas de edad puede ser difícil el arrancamiento del pelo escrotal. Emplear

rasuradora para la extracción cuidadosa. Colocar al gato en decúbito dorsal o

lateral con los miembros posteriores llevados hacia craneal. Movilizar un testículo

A, Para lo castración felina, arrancar el pelo desde el escroto y prepararlo para la cirugía aséptica B, Efectuar incisiones cutáneas de craneal a caudal sobre cada testículo. C, Incidir y separar la túnica parietal desde el testículo, luego transectar el conducto deferente cerca del testículo. D,

Ajustar dos a tres nudos cuadrados con el conducto deferente y los vasos espermáticos.

En el escroto mediante la aplicación de presión con el pulgar e índice en la base

del escroto. Efectuar una incisión de 1 cm sobre cada testículo en el extremo del

escroto desde craneal hacia caudal. Incidir la túnica vaginal parietal sobre el

testículo. Separar digitalmente las inserciones del ligamento de la cola del

epidídimo a la túnica vaginal. Hacer ligadura doble del cordón espermático con

material de sutura absorbible (por ejm. catgut crómico 3-0) o hemoclips o extraer

el conducto deferente desde el testículo y atarlo con los vasos. Como alternativo,

emplear un nudo en ocho. Transectar el cordón, inspeccionar por hemorragia y

recolocarlo dentro de la túnica Escindir el segundo testículo en forma similar.

36

Cirugía veterinaria I

Resecar cualquier masa de tejido que protruyo desde el escroto. Dejar que la

incisión escrotal cicatrice por segunda intención.

Para ligar el conducto deferente con los vasos, separarlo del testículo. Empleando

el resto del cordón espermático (vasos testiculares y testículo) como una hebra y

el conducto deferente como otro, atar dos o tres nudos cuadrados (cinco a seis

torceduras. Seccionar los vasos con el testículo y conducto deferente unidos en

distal del nudo. Inspeccionar por hemorragia

Para un nudo en ocho o "sobrehilado", el cordón espermático se ata a sí mismo

con la ayuda de una hemostática mosquito curva. Colocar la hemostática sobre la

parte superior del cordón. Dar una vuelta al extremo distal (testículo) del cordón

sobre la hemostática. Dirigir la hemostática envuelta a ventral del cordón mientras

se sostiene el testículo con lo mano opuesta. Abrir los extremos de la hemostática

y tomar el extremo distal del cordón. Transectar el cordón espermático cerca del

testículo y manipular el extremo seccionado a través de la lazada alrededor de la

hemostática. Ajustar el nudo, resecar el exceso de cordón, inspeccionar por

sangrado y recolocar el cordón dentro de la túnica antes de liberarlo.

Una técnica de sobrehilado puede utilizarse para la castración felina A, Colocar una hemostática curva sobre la parte superior del cordón y envolver el cordón espermático sobre la misma. Dirigir la

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Cirugía veterinaria I

punto de la hemostática B, dorsalmente y luego C, hacia ventral alrededor del cordón opuesto al testículo. D, Luego, tomar el cordón cerca del testículo. E, Transectar el testículo y llevar el extremo

del cordón a través de la envoltura. F, Ajustar digitalmente el nudo. Nota' ajustando el nudo más cerca del escroto que lo mostrado se deja menos "cabo".

NEOPLASIA TESTICULAR Y ESCROTAL

Las células de Sertoli son células elongadas de sostén de los túbulos seminíferos

que nutren a las espermátides. Las células de Leydig son células tisulares

intersticiales, consideradas responsables por la secreción interna de testosterona.

CONSIDERACIONES GENERALES Y FISIOPATOLOGIA

Los tumores escrotales con mayor frecuencia son neoplasias de células cebadas o

melanomas (MTC). Las células cebadas ("mastocitos") son células normales del

sistema inmunología) e importantes en las respuestas inflamatorias al traumatismo

tisular. Los gránulos citoplasmáticos en las células cebadas contienen heparina,

histamina, factor activante plaquetario y factor quimiotáctico eosinofilico. El

número y tipo de los gránulos en los MCT dependen del grado de la diferenciación

tumoral. Los MCT bien diferenciados contienen más heparina mientras que los

tumores indiferenciados tienen más histamina. La etiología de los MCT es

desconocida, aunque las áreas con inflamación crónica fueron destacadas por

incrementar el riesgo de desarrollo neoplásico. En los perros, el 50% de los MCT

son malignos, de manera especial aquellos en las regiones prepucial, inguinal y

perineal. Los ganglios linfáticos regionales, bazo, hígado y médula ósea son sitios

metastásicos habituales. Los tumores de células cebadas carecen de apariencia

distintiva. Pueden ser elevados, glabros, ulcerados, eritematosos, bien definidos

y/o engrosamientos cutáneos difusos. La manipulación de los MCT puede

ocasionar la desgranulación, eritema y formación de ronchas. Las ulceraciones

gastroduodenales se presentan en el 80% de los perros con MCT debido a la li-

beración de histamina (Howard y col., 1969). Las ulceraciones pueden ocasionar

anorexia, vómito, diarrea y/o melena. La liberación de heparina y enzima proteo-

lítica puede prolongar la coagulación y retardar la cicatrización lesional después de

la resección. Los melanomas se originan a partir de los melanocitos y

melanoblastos, células de origen neuroectodérmico. Las masas pueden ser

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Cirugía veterinaria I

pardas a negras o en ocasiones despigmentadas. Los melanomas son más

prevalentes en caninos que en felinos. Los tumores originados en la piel tienden a

ser benigno. La recurrencia local y las metástasis a distancia son comunes en los

melanomas malignos. Las metástasis por lo usual se presentan primero en los

ganglios linfáticos y luego en los pulmones.

Las neoplasias Testiculares más comunes son los tumores de células de Sertoli,

tumores de células intersticiales (Leydig) y seminomas; se presentan con igual

frecuencia. Otros tipos de neoplasias testiculares son raros. Muchos perros

gerontes tienen tumores múltiples en uno o ambos testículos, los tumores que

interesan a los testículos escrotales por lo usual son benignos, mientras que

aquellos en los testículos criptórquidos pueden ser malignos. Las metástasis son

de evolución lenta, pero en ocasiones se las detecta en los ganglios linfáticos

lumbares, inguinales profundos e ilíacos externos. Las metástasis viscerales son

raras. Los tumores testiculares interfieren con la función del testículo mediante la

invasión o compresión de los túbulos seminíferos o la elaboración de estrógeno o

testosterona en exceso. La hiperproducción de testosterona por un tumor de

células intersticiales puede contribuir a los adenomas perianales, hernia perineal

hiperplasia prostática benigna. Los tumores de células de Sertoli que producen

exceso de estrógeno pueden ocasionar metaplasia escamosa de la próstata,

feminización y/o mielotoxicidad.

Los tumores de células de Sertoli se originan a partir de las células

sustentaculares. Las células de Sertoli normales y neoplásicas producen

hormonas estrogénicas. Los tumores de células de Sertoli por lo usual son

solitarios, pero pueden ser masas múltiples y bilaterales. Son neoplasias más

comunes en los testículos criptórquidos que en los escrotales. Los tumores son

discretos con crecimiento expansivo, que comprime y destruye al tejido testicular

circundante. Los tumores voluminosos pueden ocasionar la distensión o destruc-

ción de la túnica y el crecimiento puede extenderse a lo largo del cordón

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Cirugía veterinaria I

espermático. Son firmes, multilobulados, blancos grisáceos con áreas de necrosis,

hemorragias o quistes

Los perros con tumores de células de Sertoli con frecuencia exhiben signos de

hiperestrogenismo de manera especial aquellos con masas grandes. Los signos

regresan con la castración y exéresis tumoral. La persistencia o recurrencia de la

sintomatología sugiere metástasis que elaborar, estrógenos. Los tumores de

células de Sertoli tienen un potencial de metástasis más elevado que otras neo-

plasias testiculares.

Los tumores de células intersticiales (Leydig) se presentan en los testículos

escrotales como masas múltiples o solitarias y con frecuencia coexisten con los de

células de Sertoli. En su mayor parte son tumores benignos, blandos, en-

capsulados y rara vez superan los 1 a 2 cm de diámetro. Los tumores de células

intersticiales pueden motivar agrandamiento testicular, pero son de palpación

esquiva. Las superficies al corte son discretas, redondas, de color canela a ama-

rillo anaranjado con focos de hemorragia o espacios químicos. Los perros con

tumores de células intersticiales pueden ser infértiles. Estas neoplasias elaboran

andrógenos o contribuyen al desequilibrio de las hormonas androgénicas. La

hernia perineal, adenomas e hiperplasia periciales y la patología prostética fueron

asociadas con los tumores de células intersticiales.

Los seminomas se originan a partir de las células germinales testiculares y se

presentan comúnmente en los testículos criptórquidos y escrotales. Por lo usual

son solitarios, pero pueden ser múltiples, bilaterales y coexistir con otros tipos

neoplásicos. Los seminomas pueden ser grandes remplazando a la mayor parte

del tejido testicular. Son más blandos que los tumores de células de Sertoli con

una superficie al corte brillante, gris rosada a canela, multilobulada y sin

encapsular. Rara vez se presentan manifestaciones de feminización. Pocas veces

hacen metástasis

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Cirugía veterinaria I

DIAGNOSTICO

Presentación clínica

Reseña. Los tumores escrotales y testiculares son más prevalentes en

caninos que en felinos. Por lo usual se presentan en perros mayores de 10

años; sin embargo, los tumores en los animales criptórquidos pueden ser

más tempranos. El criptorquidismo predispone al desarrollo de los tumores

de células de Sertoli y seminomas. Los perros criptórquidos tienen 13,6

veces más riesgo de experimentar tumores testiculares que los ejemplares

normales (Hayes, Pin dergrass, 1976). No se ha identificado una

predisposición racial para el desarrollo de los tumores testiculares. Los pe-

rros predispuestos a los MCT influyen Bulldog inglés, Bull terrier inglés,

Boxer y Terrier de Boston.

Anamnesis. los animales afectados asintomáticos pueden ser presentados

para evaluación de una masa que se ha observado o palpado en las áreas

escrotal o inguinal o por anormalidades endocrinas (por ej., cambios en el

manto piloso. infertilidad, letargia, feminización, tumores perianales o

enfermedad prostática).

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Cirugía veterinaria I

Hallazgos del examen físico: La piel escrotal debe ser examinada por

inflamación, nódulos, masas y ulceración. El tegumento escrotal debe ser

de espesor uniforme. Ambos testículos deben ser evaluados por simetría,

firmeza, irregularidad, adherencias escrotales y sensibilidad. Los tumores

testiculares intraparenquimatosos diminutos o profundos no son detestables

a la palpación, pero el testículo puede ser firme y duro. Si el animal es

criptórquido. El área inguinal debe ser revisada por testículos retenidos y el

abdomen por una masa. Los ganglios linfáticos sublumbares agrandados y

la próstata pueden detectarse mediante examen rectal. El abdomen debe

ser palpado por esplenomegalia, hepatomegalia, agrandamiento de

ganglios linfáticos y signos de enfermedad metastásica (en los MCT). Los

tumores de células de Sertoli y seminomas pueden ocasionar feminización

Radiología/Ultrasonografía: Los testículos intraabdominales pueden

observarse en las placas radiográficas como masas abdominales caudales

si tienen como mínimo el doble del diámetro del intestino delgado. Los

estudios radiológicos también ayudan a identificar el agrandamiento de

los ganglios linfáticos y organomegalia intraabdominales. El ultrasonido

delinea la neoplasia escrotal y testicular, abscesos, isquemia, torsión

testicular y hernia escrotal. Los tumores testiculares tienen

ecogenicidad variable.

Hallazgos de laboratorio: El análisis completo de laboratorio (hemograma

completo, bioquímica sérica, análisis de orina) está indicado en los

animales con tumores escrotales o testiculares. La anemiaregenerativa,

leucopenia y trombocitopenia pueden asociarse con hiperestrogenismo y

mielotoxicosis. La citología de aspirados con aguja fina de lesiones

escrotales y testiculares ayuda a identificar células neoplásicas, elementos

fungidos, espermatozoides anormales, bacterias, inflamación. La aspiración

con aguja fina del testículo rara vez se realiza, pero puede ayudar a

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Cirugía veterinaria I

diferenciar entre neoplasias, abscesos o granuloma. La citología de la

mucosa prepucial puede mostrar cornificación secundaria a la producción

de estrógenos por un tumor de células de Sertoli. La citología de aspirados

con aguja fina por lo usual es diagnóstica en los MCT. Los animales con

MCT deben ser chequeados por células cebadas circulantes, eosinofilia y

basofilia mediante el hemograma completo v extendidos de la capa

(logística. La anemia microcitica-hipocrómica sugiere hemorragia gas-

trointestinal. Más de 10 células cebadas por 1000 células nucleadas en la

médula ósea sonanormales. La histopatologíatumoral es necesaria para

graduar la neoplasia y determinar el pronóstico. La citología de los

melanomas por lo usual muestra células redondas a fusiformes, que con

frecuencia contienen gránulos pardos a negros.

Las infecciones por Brucellacanis pueden ser diagnosticadas mediante una

prueba de inmunodifusión en gel de agar. La evaluación seminal para

determinar la fertilidad rara vez se realiza cuando se reconoce una

neoplasia. Los niveles séricos de testosterona en ocasiones están elevados

en los tumores de células intersticiales. A veces los tumores de células de

Sertoli y seminomas incrementan las concentraciones séricas de estradiol.

DIAGNOSTICO DIFERENCIAL

Otros diagnósticos diferenciales para las masas testiculares incluyen granuloma

espermático, fibrosis, hematoma, espermatocele, varicocele, orquitis y epididimitis.

Otras posibilidades para la enfermedad escrotal comprenden dermatitis,

autotraumatismo, quemaduras químicas y laceraciones. La infección por Brucella

canis,debería ser considerada en los animales presentados con dermatitis

escrotal, orquitis, insuficiencia reproductiva, epididimitis o atrofia testicular.

MANEJO MEDICO

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Cirugía veterinaria I

Los tumores de células cebadas pueden responder a la quimioterapia o terapia

radiante, cuya eficacia para otros tumores escrotales o testiculares se desconoce.

TRATAMIENTO QUIRURGICO

La escisión tumoral brinda las mejores posibilidades de obtener un pronóstico

bueno. Para la neoplasia testicular se aconseja la extracción de ambos testículos.

Si el propietario insiste en preservar el potencial reproductivo, puede realizarse la

castración unilateral del testículo neoplásico. Los testículos deben remitirse para el

examen histopatológico. La ablación escrotal ycastración se recomiendan para

tratar los tumores escrotales y testiculares con adherencias escrotales. Incluso los

MCT discretos se extienden dentro del tejido circundante; en consecuencia, se

recomiendan 3 cm de márgenes sobre todos los lados.

Manejo preoperatorio

Pocos pacientes con tumores testiculares se encuentran debilitados

excepto aquellos con mielosupresión, torsión testicular o enfermedades

concurrentes. Los animales anémicos y trombocitopénicos pueden

necesitar transfusiones sanguíneas y antibióticos para prevenir las

infecciones. Antes de la cirugía debe administrarse un antihistamínico (por

ejm., difenhidramina[Benadryl], 0,5 mg/kg, EV, lenta) en los pacientes con

MCT, para reducir los efectos de la liberación de histamina tumoral. Se lo

puede administrar por ruta EV inmediatamente antes de la intervención,

pero en forma muy lenta para evitar la hipotensión. Como alternativa, se lo

puede administrar por ruta 1H 30 minutos antes de la inducción anestésica.

Un antagonista H2 (ranitidina, cimetidina o famotidina) o un inhibidor de la

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Cirugía veterinaria I

bomba de protones (omeprazol) reducen la secreción de ácido gástrico y la

incidencia y magnitud de las ulceraciones gastrointestinales. El sucralfalto

puede administrarse para las úlceras existentes, 1 hora después de la

administración de otras medicaciones bucales porque puede interferir con

su absorción.

Posición del paciente

Colocar al paciente en decúbito dorsal para una castración preescrotal o

laparotomía exploratoria. Todo el abdomen ventral debe ser rasurado y

preparado para la laparotomía exploratoria.

ATENCION Y VALORACION POSOPERATORIAS

Los analgésicos y atención de sostén deben administrarse según se requieran.

Los pacientes con MCT deben continuar recibiendo un antagonista H2, inhibidor

de la bomba de protones y/o protector si ocurre la ulceración gastrointestinal. La

terapia adyuvante para los tumores malignos puede demostrar beneficios. Los

pacientes con tumores malignos deben ser revaluados cada 3 a 4 meses por

recurrencia o enfermedad metastásica. Las complicaciones asociadas con los

síndromes paraneoplásicos y metástasis se pueden evidenciar o persistir luego dé

la castración.

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Cirugía veterinaria I

PRONOSTICO

La cirugía es curativa para la mayoría de los tumores testiculares. El pronóstico

para los tumores de células intersticiales, tumores de células de Sertoli sin

metástasis o mielotoxicidad y seminomas sin signos de hiperestrogenismo es

excelente. La mielotoxicidad puede ser fatal a pesar de la terapia apropiada, pero

suele mejorar dentro de las 2 a 3 semanas de la extracción de la neoplasia. Debe

instituirse la quimioterapia si los tumores de células de Sertoli o seminomas han

hecho metástasis. Los MCT de grado bajo tienen menos posibilidades de recurrir o

hacer metástasis. Los MCT inoperables o con resección incompleta pueden

responder a la terapia radiante o quimioterapia. Se desconoce la eficacia de las

modalidades terapéuticas no quirúrgicas para otros tumores.

PENE

NEOPLASIAS

Las neoplasias por lo común se encuentran sobre la piel del prepucio. Las

neoplasias del pene y mucosa de revestimiento prepucial incluyen los tumores

venéreos transmisibles (TVT), carcinoma de células escamosas,

hemangiosarcoma y papilomas. Los tumores venéreos transmisibles son

neoplasias contagiosas que se diseminan mediante contacto sexual o lamido. Son

masas verruciformes, friables y sangran con facilidad.

DIAGNOSTICO

Presentación clínica

Reseña. El traumatismo y los tumores son más comunes en los machos

enteros. Los animales jóvenes comúnmente experimentan traumatismos y

los gerontes son más proclives a padecer neoplasias.

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Cirugía veterinaria I

Anamnesis. Los signos de la enfermedad peneana o prepucial

comprenden secreción serosanguinolenta, hemorrágica o purulenta,

incapacidad o falta de deseos para copular y/o dolor. Algunos animales son

presentados con fimosis o parafimosis. La uretra puede estar obstruida o

lacerada con la resultante disuria, anuria o extravasación de orina. Muchos

perros son asintomáticos.

Hallazgos del examen físico

En el examen físico puede detectarse una lesión o masa anormal. El

prepucio puede aparecer tumefacto, inflamado, nodular, lacerado,

isquémico y/o necrótico. Las anormalidades que interesan la piel prepucial

por lo usual son evidentes; las lesiones de la mucosa prepucial pueden

detectarse sólo mediante palpación. Puede ser imposible la exteriorización

del pene para examen si existe una masa dentro del prepucio o sobre el

pene. En otros casos, la parafimosis está presente porque la lesión

ocasiona inflamación, edema y congestión; o una masa impide la retracción

del pene. El desvío peneano puede ser secundario a fracturas traumáticas

del hueso del pene. La palpación rectal puede demostrar agrandamiento de

los ganglios linfáticos.

Radiología/Ultrasonografía

Las placas radiográficas del abdomen y tórax están indicadas para

estadificar los tumores. Las radiografías simples pueden revelar fracturas

del hueso peneano. El uretrograma ayuda a valorar la afección uretral en el

trauma o tumores péncanos.

Hallazgos de laboratorio

Los resultados clínico patológicos son inespecíficos para el traumatismo o

neoplasia peneana. La citología de las secreciones prepuciales puede

demostrar neutrófilos tóxicos, exceso de bacterias, hongos o material

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Cirugía veterinaria I

extraño, pero estos hallazgos deben interpretarse con cautela porque se

encuentran en pacientes normales. La citología de las masas prepuciales o

peneanas puede ayudar a identificar el tipo tumoral. Los tumores venéreos

transmisibles poseen células redondas grandes con numerosas figuras

mitóticas.

DIAGNOSTICO DIFERENCIAL

Los hematomas, abscesos, granulomas e infecciones fúngicas pueden ocasionar

lesiones similares.

MANEJO MEDICO

Algunas lesiones curan en forma espontánea. Debería dejarse que los hematomas

peneanos resuelvan en forma espontánea, a menos que ocasionen parafimosis

persistente. Los tumores venéreos transmisibles se tratan con vincristina, 0,5

mg/m’ F.V, o 0,025 mg/kg hasta 1 mg EV, semanalmente durante 3 a 6 semanas.

TRATAMIENTO QUIRURGICO

Los tumores venéreos transmisibles responden bien a la quimioterapia o terapia

radiante; sin embargo, es mejor resecar otras neoplasias. La amputación peneana

parcial o completa es necesaria para las lesiones muy traumatizadas, necróticas o

neoplásicas. Los hematomas que causan parafimosis persistente pueden ser

expuestos y evacuados con cirugía; sin embargo, pueden recurrir. Las fracturas

del hueso peneano con mínimo desplazamiento no requieren cirugía. Las fracturas

desplazadas pueden ser reparadas con un catéter uretral permanente de

polipropileno que empareje al hueso y suturado a la punta de la uretra. Las

fracturas más conminutas pueden ser estabilizadas con placas pequeñas o puede

amputarse el pene.

Manejo preoperatorio

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Cirugía veterinaria I

El prepucio y pene debe ser lavado con soluciones antisépticas diluidas. Los

antibióticos deben implementarse si los tejidos peneanos o prepuciales están muy

lesionados o necróticos.

Posición del paciente

Colocar al paciente en decúbito dorsal. El abdomen ventral, perineo ventral y

medial de los muslos deben rasurarse y prepararse para la cirugía aséptica.

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Cirugía veterinaria I

CONCLUSIONES

- Las mas frecuentes cirugías en animales de compañía (perro, gato) en

aparato genital son las esterilizaciones en ambos sexos, para evitar

principalmente las camadas no deseadas y disminuir la población tanto

felina como canina. Pero no se descarta en ocasiones se presenten

neoplasias o partos distócicos, que deben ir al quirófano y llegar a un

tratamiento efectivo, evitando así el sufrimiento o en algunas veces

muertes.

- Las técnicas utilizadas con frecuencia en estas intervenciones

quirúrgicas son la ovariohisterectomía, ovariectomia, cesáreas o

castración. Siempre teniendo en cuenta las medias de asepsia

correspondiente tanto del paciente, veterinario y quirófano para evitar

problemas no deseados, todo con asepsia evitaremos complicaciones.

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