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Si el obrero se ha consagrado plenamente a Dios y es diligente en la oración para obtener fuerza y sabiduría
celestiales, la gracia de Cristo le enseñará, él vencerá sus defectos y llegará a ser cada vez más inteligente en las
cosas de Dios. Pero nadie debe basarse en esto para ser indolente, malgastar el tiempo y las oportunidades, y
descuidar la preparación que es esencial para llegar a ser eficiente. Al Señor no le agradan
los que, teniendo ocasión de adquirir conocimientos, dejan de aprovechar las oportunidades que tienen...
Sobre todos los otros habitantes de la tierra, el hombre cuya mente ha sido educada por la Palabra de Dios sentirá que
debe dedicarse con mayor diligencia a la lectura de la Biblia, y a un estudio concienzudo de las ciencias; porque su
esperanza y su vocación son mayores que las de cualquier otro. Cuanto
más íntimamente esté relacionado un hombre con la Fuente de todo
conocimiento y sabiduría, tanto más podrá ser ayudado intelectual y espiritualmente.
El conocimiento de Dios es la educación esencial, y todo verdadero obrero
estudiará constantemente para obtener este conocimiento
(Consejos para los maestros, 497).
Cita en bloque
Cita dentro del mismo
texto
Nota aclaratoria
CAPÍTULO 3
CUESTIONES DE FORMATO: SEGUNDA PARTE
El “pie de página”
De acuerdo al Manual de estilo Turabian, las fuentes de las referencias o citas
incluidas en una investigación, así como las notas aclaratorias, deberán aparecer al pie de
la hoja en la que éstas se utilicen:
Pie de página, 1
19
Área de pies de página
Cada vez que insertes una nota al pie (tal como se explica en la ilustración de
abajo), ésta aparecerá numerada automáticamente. Sin embargo, serás tú quien debe
decidir si iniciarás con el número “1” cada nueva página, o mantendrás una numeración
continua a lo largo de todo un capítulo, pero no más que eso.
Asimismo, al iniciar una nota al pie, deberás dejar una “sangría”, tal como al
inicio de un nuevo párrafo. Para lograr esto, presionar la tecla “Tab” (arriba y a la
izquierda de tu tablero) será lo más rápido.
La forma de insertar un pie de página es la siguiente:
Pie de página, 2
Será así en todos los casos, a excepción de las referencias bíblicas, las cuales irán
inmediatamente después del texto citado, abreviadas y entre paréntesis:
Referencias y más referencias
Los elementos básicos que conforman una referencia son: autor/editor, título(s),
lugar de edición (no de impresión), editorial, año y página(s). La primera referencia de un
libro o revista se escribe completa:
20
Tab
Referencias bíblicas
1Elena G. White, La educación (Miami, Florida: Publicaciones interamericanas, 1972), 16.
2Gerhard Klingbeil, "Escatología en el Pentateuco”, Davar-Logos 37 (Otoño 1998): 2. (el “37” es el número de volumen, tal como se cataloga en este tipo de revistas).
Dada la variedad y la complejidad que algunas referencias requieren en el estilo
Turabian, lo más recomendable es que jamás pierdas de vista los siguientes ejemplos. Si
les prestas la debida atención, te aseguro que tu maestro y tu calificación resultarán muy
beneficiados.
Referencias siguientes de las mismas fuentes:
3Ibíd. (Cuando la referencia es exactamente la misma que la citada anteriormente).
3Ibíd., 5. (Cuando la referencia es de la misma fuente, pero de otra página).
4White, 19. (Se usa así para abreviar cualquier otra referencia previa del mismo autor, pero no inmediata, siempre y cuando sólo exista un autor con ese apellido en la
investigación).
4White, Patriarcas y profetas, 19. (En una referencia posterior de un autor ya citado, se deberá especificar el título de la obra, si en
la investigación se están utilizando dos o más obras del mismo autor).
Más ejemplos:
(Para Pie de página) 1Ángel Manuel Rodríguez, Las profecías del tiempo del fin (Silver Spring,
Maryland: Review and Herald, 1989), 46.
(Para Bibliografía)Rodríguez, Ángel Manuel. Las profecías del tiempo del fin. Silver Spring, Maryland:
Review and Herald, 1989.
(Pie de página de más de 1 autor)2Mary Anderson, Richard House, Henry Smith, The Holy Book (London: Oxford
Press, 1983), 42. (En caso de que sean más de 3 autores, puede escribirse sólo el primero, agregando tras él la expresión: “y otros”; sin embargo, en la bibliografía sí deberán
aparecer cada uno de los autores, aunque sólo el primero empezará por el apellido):
(Bibliografía)Anderson, Mary, Richard House, Henry Smith. The Holy Book. London: Oxford Press,
1983.
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(Pie de página para un libro de autor corporativo)2Departamento de educación de la División sudamericana, El sendero maravilloso
(Buenos Aires, Argentina: Asociación casa editora sudamericana, 1967), 55.
(Bibliografía)Departamento de educación de la División sudamericana. El sendero maravilloso.
Buenos Aires, Argentina: Asociación casa editora sudamericana, 1967.
(Pie de página para citar una fuente secundaria)3Elena G. White, Reflejemos a Jesús, 44, citado en Morris Venden, Salvación por
la fe y la voluntad (Coral Gables, Florida: Publicaciones interamericanas), 122.
(Pie de página de un capítulo con autor específico, en un libro con varios tomos y editor)5Richard M. Davidson, “The Interpretation of the Bible”, Handbook of Seventh
day Adventist Theology, 3 vols., ed. Raoul Dederen (Mountain View, California: Pacific Press, 1994), 1:12. (El “1” se refiere al número de tomo y el “12” a la página).
(Bibliografía)Davidson, Richard M. “The Interpretation of the Bible”. Handbook of Seventh day
Adventist Theology, ed. Raoul Dederen, 1:10-28. Mountain View, California: Pacific Press, 1994.
(Pie de página para un comentario, cuando es de un solo autor, pero pertenece a una serie de varios autores)7Edward D. Burton, A Critical and Exegetical Commentary on the Epistle to the
Galatians, International Critical Commentary (Grand Rapids Michigan: Eerdmans, 1981), 65.
(Bibliografía)Burton, Edward D. A Critical and Exegetical Commentary on the Epistle to the
Galatians. International Critical Commentary. Grand Rapids Michigan: Eerdmans, 1981.
(Pie de página para un artículo o palabra contenida en un comentario, diccionario o enciclopedia, y cuyo autor se especifica)
9George E. Wright, “Exegesis of the Book of Deuteronomy”, Interpreter’s Bible (New York: Abingdon Press, 1954), 2:332.
(Bibliografía)Wright, G. E. “Exegesis of the Book of Deuteronomy”. Interpreter’s Bible. New York:
Abingdon Press, 1954. 2:331-340.
(O bien)9George E. Wright, “Sábado”, Diccionario teológico de la Biblia, ed. Walter A.
Elwell (New York: Abingdon Press, 1954), 332.
(Bibliografía)Wright, G. E. “Sábado”. Diccionario teológico de la Biblia. Ed. Walter A. Elwell. New
York: Abingdon Press, 1954. 332-334.
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(Pie de página para una cita de un comentario, pero cuyo autor no se especifica, tal como en el caso del Comentario bíblico adventista)
10Francis D. Nichol, ed., Comentario bíblico adventista (CBA) (Boise Idaho: Pacific Press, 1983), 4:54.
(Bibliografía)Nichol, Francis D., ed. Comentario bíblico adventista, vol. 4. Boise Idaho: Pacific Press,
1983.
(Pie de página para un artículo del Diccionario bíblico adventista (DBA) 12Diccionario bíblico adventista, ed. 1979, ver “Ángel”.
(Bibliografía)Horn, Siegfried H., ed. Diccionario bíblico adventista. Washington, DC: Review and
Herald, 1979. Ver “Ángel”. (Esto en el caso de que este artículo haya sido el único citado en la investigación, pero si se citaron otros, se concluye con el
año).
(Pie para citar una concordancia)4William S. Sloan, Concordancia de las sagradas escrituras (Miami: Editorial
Vida, 1988), ver “Fe”.
(Bibliografía)Sloan, William S. Concordancia de las sagradas escrituras. Miami: Editorial Vida,
1988. Ver “Fe”.
(Pie para citar una revista especializada o Journal)8Arthur J. Ferch, “The Two Aeons and the Messiah”, Andrews University
Seminary Studies 15 (1977): 135.
(Bibliografía)Ferch, Arthur J. “The Two Aeons and the Messiah”. Andrews University Seminary
Studies 15 (1977): 135-151.
(Pie para otras revistas)9Lawrence T. Geraty, “The Excavations at Biblical Heshbon”, Ministerio
adventista, Febrero 1975, 20.
(Bibliografía)Geraty, Lawrence T. “The Excavations at Biblical Heshbon”. Ministerio adventitsta,
Febrero 1975, 20-23.
(El Pie para una entrevista inicia con el nombre del que concedió dicha entrevista al “autor” de la investigación)
2Eloy Wade, entrevista concedida al autor en la Faculta de Teología de la Universidad de Montemorelos, Nuevo León, el 15 de septiembre de 1999.
(Bibliografía)
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Wade, Eloy. Entrevista concedida al autor en la Faculta de Teología de la Universidad de Montemorelos, Nuevo León, el 15 de septiembre de 1999.
(Pie para citar el material original de un curso o materia impartida/recibida)
Lael Caesar, programa de curso para Teología del Antiguo Testamento, Facultad de Teología, Montemorelos, Nuevo León, 2000, 1.
(Bibliografía)Caesar, Lael. Programa del curso Teología del Antiguo Testamento. Facultad de
Teología, Montemorelos, Nuevo León, 2000.
(Pie para citar las notas tomadas en un curso o materia recibida) Apuntes de clase, Pentateuco, Escuela de Teología, Navojoa, Sonora, abril de
2007.
(Bibliografía)Apuntes de clase. Pentateuco. Escuela de Teología, Navojoa, Sonora, abril de 2007.
(Pie para citar una disertación doctoral)3Gerhard Pfandl, “The Time of the End in the Book of Daniel” (Disertación
Doctoral, Andrews University, 1992), 437.
(Bibliografía)Pfandl, Gerhard. “The Time of the End in the Book of Daniel”. Disertación Doctoral,
Andrews University, 1992.
(Pie de página para un documento obtenido en Internet)2Tevni Grajales, Introducción a la estadística descriptiva, recuperado el 5 de
septiembre del 2005, de http://www.aulafacil.com/CursoEstadistica/CursoEstadistica. htm.
(Bibliografía)Grajales, Tevni. Introducción a la estadística descriptiva. Recuperado el 5 de septiembre
del 2005, de http://www.aulafacil.com/CursoEstadistica/Curso estadistica.htm.
Centrando un título
La forma de centrar un título o cualquier otra palabra es muy sencilla. Sin
embargo, un error común al centrar es hacerlo a partir de la “sangría” (espacio que se
deja al iniciar un nuevo párrafo), lo que lamentablemente terminará por descuadrar el
resto del texto.
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Sangría
Centrar, 1
Centrar, 2
A fin de evitar esto, ubica primero la palabra a centrar hasta el inicio del renglón,
es decir, hasta el extremo izquierdo, y no a la altura de la sangría. Haciendo esto, tendrás
la seguridad de un auténtico centrado:
Centrar, 3
Autorecuperación: “1 minuto”
Una de las más grandes tragedias que se experimenta, al redactar una
investigación, es la pérdida o daño parcial de la misma. Afortunadamente, el programa
Word posee un mecanismo capaz de grabar tu documento automática y continuamente
de manera que, si se va la luz o necesitas reiniciar la computadora por cualquier otra
causa, no perderás todo lo que habías escrito hasta el momento de dicho accidente.
De igual forma, lo mejor es hacer no uno, sino varios “respaldos” de tu trabajo.
De ser posible, grábalo en dos máquinas diferentes, además de hacerlo en tu memoria
USB. Haciendo esto, el perder o sufrir el daño de uno de estos documentos no
representará la penosa tarea de iniciar todo el trabajo de nuevo, algo que seguramente
nadie desea experimentar.
Finalmente, recuerda que un trabajo que no fue revisado antes de su impresión
generalmente exhibirá diversos errores o inexactitudes. Por el contrario, revisar a
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conciencia lo que has escrito, además de evitarte contratiempos, también beneficiará tu
presupuesto para impresiones. El siguiente capítulo ampliará estos aspectos.
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