[chinrev] - yokozawa takafumi no baai extra 01

12
Hiyo había estado haciendo un gran escándalo antes frente a la televisión, veía la reproducción del video que mostraba la celebración del día de campo que se grabó con una cámara que Kirishima había tomado prestada. “¡Ah, mira, mira! ¡Ahí estás, Oniichan!“Si, Si, lo veo…” Yokozawa hizo una mueca y miró hacia el lado para poder verse en la pantalla, frente a la línea de partida. Observándose de esa forma, era fácil ver que era una década más joven que la mayoría de los otros padres que estaban frente a él. Y el hecho aun más vergonzoso era la actitud poco habitual de estar así de entusiasmado como había estado en ese momento. “¡Oniichan~! ¡Da lo mejor~! “¿A qué te refieres con ’da lo mejor’? ¡Ya sabes cómo será!” “¡Oh vamos, no es malo animarte! Ah— ¿Estás sonrojado, Oniichan?” “No” Por supuesto él no lo estaba, solo no podía soportarlo. La razón por la que Yokozawa había participado en la carrera de obstáculos para padres era porque Kirishima tenía trabajo por lo que no podía salir a último minuto. Aunque Hiyori se había quejado un poco luego de que su padre le dijo que no podría participar con ella en las actividades del día de campo, ella estaba muy contenta luego de saber que Yokozawa iría en su lugar. Una vez que él se ofreció a participar, Yokozawa había jurado que no se avergonzaría, y así, cuando no lo vieran Kirishima o Hiyori, había dado vueltas en la mañana haciendo ejercicio para preparar sus músculos para ese día. Al final, Kirishima terminó de almorzar con su autor al momento de hacer el programa de la tarde, pero él difícilmente podría correr al estar con vestido con traje y zapatos de vestir, por lo que Yokozawa no tuvo más opción que participar. Al sonar la pistola, Yokozawa comenzó a correr, pasando los obstáculos uno a uno, convirtiéndose fácilmente en el primero en llegar a la pequeña mesa repleta de tarjetas boca abajo. Sin dudar cogió la tarjeta más cercana a su piey dio una reflexiva mirada en una dirección determinada. Inmediatamente después recobró sus sentidos y se dirigió a la

Upload: lhena-lizarbe

Post on 20-Oct-2015

50 views

Category:

Documents


3 download

TRANSCRIPT

Hiyo había estado haciendo un gran escándalo antes frente a la televisión, veía la

reproducción del video que mostraba la celebración del día de campo que se grabó con una

cámara que Kirishima había tomado prestada.

“¡Ah, mira, mira! ¡Ahí estás, Oniichan!”

“Si, Si, lo veo…”

Yokozawa hizo una mueca y miró hacia el lado para poder verse en la pantalla, frente a la línea

de partida. Observándose de esa forma, era fácil ver que era una década más joven que la

mayoría de los otros padres que estaban frente a él.

Y el hecho aun más vergonzoso era la actitud poco habitual de estar así de entusiasmado como

había estado en ese momento.

“¡Oniichan~! ¡Da lo mejor~!

“¿A qué te refieres con ’da lo mejor’? ¡Ya sabes cómo será!”

“¡Oh vamos, no es malo animarte! Ah— ¿Estás sonrojado, Oniichan?”

“No”

Por supuesto él no lo estaba, solo no podía soportarlo. La razón por la que Yokozawa había

participado en la carrera de obstáculos para padres era porque Kirishima tenía trabajo por lo

que no podía salir a último minuto. Aunque Hiyori se había quejado un poco luego de que su

padre le dijo que no podría participar con ella en las actividades del día de campo, ella estaba

muy contenta luego de saber que Yokozawa iría en su lugar.

Una vez que él se ofreció a participar, Yokozawa había jurado que no se avergonzaría, y así,

cuando no lo vieran Kirishima o Hiyori, había dado vueltas en la mañana haciendo ejercicio

para preparar sus músculos para ese día.

Al final, Kirishima terminó de almorzar con su autor al momento de hacer el programa de la

tarde, pero él difícilmente podría correr al estar con vestido con traje y zapatos de vestir, por

lo que Yokozawa no tuvo más opción que participar.

Al sonar la pistola, Yokozawa comenzó a correr, pasando los obstáculos uno a uno,

convirtiéndose fácilmente en el primero en llegar a la pequeña mesa repleta de tarjetas boca

abajo. Sin dudar cogió la tarjeta más cercana a su pie— y dio una reflexiva mirada en una

dirección determinada. Inmediatamente después recobró sus sentidos y se dirigió a la

dirección puesta, corriendo nuevamente.

“¡Kyaaaaa~! ¡Oniichan, eres genial!”

Yokozawa ahora corría hacía donde estaba Hiyori sentada con los otros estudiantes de 5to

grado, inclinándose, Levantó a Hiyori de donde ella estaba sentada en primera fila y se

dirigieron hacia donde los profesores actuaban como jueces, corriendo con todas sus fuerzas.

Luego de colocar la tarjeta como prueba de que había completado la misión se dirigieron a la

meta, dejando a todos los demás participantes atrás al cruzar la línea de meta. Hiyori, cuyos

ojos se habían abierto mucho, ante la sorpresa de que Yokozawa la había levantado, estaba

sonriente, encantada de que Yokozawa hubiera logrado el primer lugar.

“¡Eres realmente increíble, Oniichan! ¡Pero de verdad me diste un susto cuando me

levantaste!”

“¡No tenía alternativa, solo tenía que sostenerte y correr!”

“¡Hehe, Sip! ¡Todos mis amigos están celosos, también! ¡Dijeron que parecía una princesa!”

Yokozawa se relajó un momento al ver que su imagen desaparecía de la pantalla, sin embargo,

Kirishima lo interrumpió con una pregunta que no lo divertía en ese momento.

“¡Eso me recuerda— ¿Qué era lo que estaba escrito en la tarjeta?”

“…Eso es un secreto.”

“¿Qué? Que importa— ¡Cuéntame!— Hiyo, ¿Qué decía?”

“¡No puedo decírtelo, Papá!~ ¡Es un pequeño secreto entre Oniichan y yo! ¡Y, tengo planes

con Yuki-chan mañana, así que me iré a la cama! ¡Buenas noches~!”

“¿Qué demonios— ¡Dime! ¿Por qué están jugando de esa forma?”

“Ya oíste a Hiyori, es un secreto. No puedo decírtelo.”

Yokozawa mostraba una expresión serena y confiada, pero por dentro se quebraba en sudor

frio, todo ello por los nervios.

La tarjeta tenía “La persona más importante” escrito en ella.

Yokozawa creyó que había sido escrita con la intención de que el padre que la recogiera, fuera

y se llevara a su hijo, pero en el momento en que Yokozawa leyó aquellas palabras, sin pensar,

buscó a Kirishima entre la multitud.

“Cuando recogiste la tarjeta, sin embargo— ¿No me miraste por un segundo?”

“N-No. Yo estaba buscando a Hiyo.”

“Bueno, no la encontrarías en los asientos de los padres.”

“¡Ya lo sé! Solo me equivoqué nada más.”

No Había ninguna maldita forma de que dejara que Kirishima supiera que la primera persona

en la cual Yokozawa había pensando cuando leyó ‘La persona más importante’ fuera él. Al

dudar de Yokozawa, Kirishima no aflojó en su investigación ni un poco.

“Tal vez, ¿No querías que yo supiera lo que estaba escrito en esa tarjeta?”

“No es eso— ¡Te estoy diciendo que no era nada! No lo cambies como quieras. ¡Ah, Hiyori,

¿No es casi la hora de que te vayas a la cama? No creas que porque es fin de semana puedes

quedarte despierta pasada tu hora de dormir. Ve a cepillar tus dientes.”

“ ¡Lo estoy haciendo! Sora-chan~ ¡Vamos a la cama!”

Al escuchar su nombre, Sorata levantó su cabeza desde donde estaba acurrucado en el sofá, y

luego salto de él siguiendo a Hiyori hasta su habitación. Ambos se habían vuelto muy unidos,

comportándose como si hubieran sido amigos durante mucho tiempo.

Al ver que la pareja se iban juntos, Yokozawa mostro una suave sonrisa en su rostro, Kirishima

dijo con una leve voz.

“Intentabas evadirme en este momento, ¿no? Pero debo decir que esta vacilación tuya es

muy sospechosa…”

Yokozawa se estremeció por como Kirishima dio en el clavo.

“¿Por qué demonios estás tan obsesionado con esa estúpida tarjeta de todas formas? Es una

broma del día de campo de una escuela primaria—“

“Porque mis sensores están disparados en este momento.”

“¿Eh? ¿Qué se supone que significa eso? No puedo entenderlo en lo absoluto.”

Yokozawa se alejó de Kirishima, moviéndose como si fuera sostener la lata de cerveza vacía,

pero inmediatamente encontró sus brazos sujetos en su espalda.

“Intentabas huir, ¿no?”

“¡Yo-no lo estaba! ¡Solo intentaba tomar mi cerveza, eso es todo…!”

“Confiesa.”

“No, de ninguna manera.”

“Si tu no lo— me temo que tendré que besarte.”

“¿Qué clase de amenaza es es—“

Retorciéndose de asombro por lo mucho que sonaban como un par coqueteando ahora,

Yokozawa rápidamente encontró sus labios juntos igual como lo había dicho Kirishima. Su

respiración fue detenida por el beso de sus labios, que estaban prácticamente siendo

abusados.

“¿Qué estás haciendo?”

“Supuse que no confesarías que querías ser besado.”

“¡No saques tus propias conclusiones de esa forma!”

“¿No te gusta?”

“Eso no es algo que debas hacer en la puerta.”

Era una cosa si lo hacían en la habitación de Kirishima, pero éste era el living donde

compartían sus cenas y jugaban con Hiyori. Él no quería agregar otra cosa además de una

normal y cotidiana atmosfera con ese lugar.

“Ah~ está bien. Hiyori se duerme rápido.”

“No está bien. Es importante distinguir en este tipo de situaciones. Tal vez eso estaría bien—

pero no sabes cuando algo puede salir mal en el futuro.”

“Eres muy testarudo cuando se trata de cosas como esta, aunque tengo que decir que amo

eso acerca de ti.”

“…………”

En el momento en que se preguntaba si debía alejarse de aquellos labios que nuevamente se

habían acercado, la voz de Hiyori estaba a la deriva.

“¡Papá!”

“…….?”

Yokozawa se alejó de Kirishima al igual que sus labios estuvieron a punto de frotarse.

Afortunadamente, ellos estaban cerca de sentarse en el piso en ese momento siendo salvados

por la vista del sofá, por lo que no había forma de que Hiyori los hubiera visto.

En claro contraste con Yokozawa, quien intentaba controlar su corazón que parecía como si

estuviera a punto de saltar por su garganta, Kirishima mostraba una expresión genial e

imperturbable.

“¿Qué pasa?”

Moviéndose inquieta, Hiyori se acercó a Kirishima, quien poco a poco se situaba nuevamente

en el sofá.

“ummm… ¿crees…que puedas conseguir una imagen de Yuki-chan del video que

tomamos…?”

“Claro— ella solo debe llamarnos mañana y decirme donde tomar la imagen. Te enseñaré

como usar el software de la cámara…”

“¡yay! ¡Gracias, Papá! Le enviaré un mensaje y le diré, entonces! ¡Buenas noches a ambos!”

Sus preocupaciones se esfumaron, y Hiyori les dedicó una sonrisa y regresó a su habitación.

Yokozawa liberó un suspiro que estaba conteniendo por la interrupción y sintió una corriente

de tensión en su cuerpo. Se sentía como si acabara de perder unos buenos diez años de su vida

los últimos cinco minutos.

“¡Menos mal, eso estuvo cerca~”

Yokozawa observó a Kirishima quien a pesar de sus palabras no parecía preocupado en lo más

minimo.

“No vengas con esa mierda. Es por eso que te he dicho que no podemos hacer este tipo cosas

aquí.”

Se quejó en voz baja para asegurarse de que Hiyori no pudiera escucharlos.

Ante esto, Kirishima se agachó para que su rostro quedara cerca de Yokozawa, ofreciendo casi

en un susurro.

“Sin embargo estabas respondiendo completamente.”

“¡Quien estaba…”

Pero su visión se nubló cuando reconoció a si mismo que aquella acusación no era del todo

infundada. Si realmente no lo hubiera deseado, fácilmente podría haber prestado mayor

resistencia.

“…¿y? ¿Continuamos donde lo dejamos?”

“Al demonio.”

Yokozawa replicó con un tono agudo, e hizo caso omiso a la mano de Kirishima que estaba

colocada sobre su hombro.

“Muy bien, esto concluye la reunión para decidir las impresiones de este mes. Muchas

Gracias, y espero verlos a todos el próximo mes.”

Como Yokozawa llevó a su fin la reunión, todos los miembros presentes se levantaron de sus

asientos para salir. La reunión se terminó yendo con relativa fluidez, terminando con pocas

dificultades o problemas.

Echando una mirada a su reloj, Yokozawa observó que había terminado muy temprano. Con

esto, el podía tener la seguridad de tener una oportunidad para hablar, y miró a Kirishima,

quien estaba sentado diagonalmente a través de él.

“…!”

Pero aunque por lo general, Kirishima sería el único que encontraría sus ojos y observaría a

Yokozawa hasta que se sintiera incómodo y girara, está vez el primero en desviar su mirada fue

Kirishima, añadiendo un insulto saliendo de la sala de reuniones con una amarga e

incomprensible expresión.

“…Mierda, escapó…”

“¿Ha dicho algo?”

Yokozawa masculló, y Henmi quien estaba sentado a su lado giró su rostro perplejo hacia él.

“Solo…hablaba conmigo mismo. ¿Puedes encargarte del resto?”

“Bueno, si, pero ¿Va a alguna parte?”

“Si, lo siento, toma estos documentos y regresa sin mi,”

Con esa vaga excusa, se levantó y comenzó a perseguir a Kirishima.

“¿Qué demonios es su problema…?”

Kirishima había estado actuando de una forma extraña durante toda la mañana. Él había

tomado cada oportunidad que tenía para observar a Yokozawa, pero no había hecho ningún

movimiento para acercarse y molestarlo. Yokozawa tenía la esperanza de que, cuando la

reunión terminara, por fin pudiera tener la oportunidad para hablar, pero el hombre, una vez

más lo esquivó.

Arrastrando sus pies por el pasillo pasando a varios compañeros de trabajo, finalmente

alcanzó a Kirishima, quien estaba de pie delante del ascensor.

“¡Oye!”

Kirishima se volteó al escuchar su voz, pero su sonrisa habitual no estaba en ningún lado.

“¿Hmm? ¿Qué es esto?”

Fue completamente inquietante.

“Necesitamos hablar.”

“Entonces, ¿Puede esperar? Tengo planes en este momento.”

Yokozawa sintió como una punzada de irritación se levantaba dentro de él por la manera en

que Kirishima observó a propósito su reloj.

“La reunión terminó temprano, seguro tienes al menos unos diez minutos libres.”

“Acabo de recordar algo que tenía que hacer, así que—“

“Dame un respiro— Llegar hasta aquí.”

Antes de que alguien intentara detenerlos, empujó a Kirishima dentro de la sala de reuniones

más cercana. Cerró la puerta tras ellos, y se colocó ante Kirishima de forma en que no pudiera

escapar.

“¿Qué demonios estás siendo agresivo para todo?

“¡Esa es mi línea! Me has estado evitando durante toda la mañana, ¿Hice algo?”

Eso es lo que lo había estado preocupando, verdaderamente. Sabía que él debía admitir que

tenía una forma brusca de hablar y que fácilmente podría lastimar a alguien sin darse cuenta.

No era imposible que él hubiera dicho algo hiriente sin pensarlo.

“Yo-No, No…no es eso…”

A medida que Yokozawa lo observaba, la cara de Kirishima se fundía en la misma incómoda

expresión que tenía anteriormente, y desvió la mirada.

Yokozawa había aprendido que cuando Kirishima se sentía acorralado, siempre tendía desviar

su mirada hacia arriba y hacia el lado, esto significaba que estaba ocultando algo. Al confirmar

eso, insistió en su caso.

“Entonces, ¿Qué es?”

“Solo—No es nada por lo que tengas que preocuparte, ¿está bien? De hecho, diría que es mi

propio problema…”

“¿Por qué demonios me tienes que evitar porque algo está mal contigo?”

“No puedo explicarlo…realmente en estos momentos.”

La cautelosa manera de Kirishima para poner excusas comenzó a desgastarse en Yokozawa. Si

hubiera hecho algo malo, hubiera preferido que lo dijera y ya.

¿No eres regularmente un genio para objetar tonterías?”

“Oye—No lo llames tonterías. Llámalo… hacer mi caso, enfáticamente. Y de todas formas,

realmente no es nada. Pero saldré y diré esto de antemano, No lo hice a propósito. Solo…

pasó al verlo, esto es todo.”

Continuó danzando alrededor de la conversación, ofreciendo nada más que excusas.

Finalmente, la irritación de Yokozawa no pudo más, y alzó la voz.

“¡Si tienes algo que decir, solo escúpelo!”

“¡Lo siento! ¡No es como si hubiera querido verlo!”

Kirishima repentinamente apretó las palmas de sus manos frente a su cara, en un gesto

claramente de disculpa. Pero, solo se disculpó aclarando en nada la razón.

“…Aun no entiendo de que te estás disculpando.”

“…Es esa maldita tarjeta, del día de campo.”

Finalmente murmuró, pero no reveló más.

“¿Tarjeta de…?”

“Ya sabes, cuando corriste esa carrera por mí.”

“¿De qué carrera estás… ¡Ah!”

Ahora finalmente entendió sobre que se estaba disculpando. En el día de campo de Hiyori,

Yokozawa había corrido en lugar de Kirishima como su apoderado. Al parecer Kirishima había

visto de alguna forma lo que estaba escrito en la tarjeta que recogió Yokozawa en la carrera.

Ellos se habían negado a decirle a Kirishima lo que estaba escrito en la tarjeta, manteniéndolo

como un secreto entre Yokozawa y Hiyori, pero…

“Cuando fui a colocar la ropa doblada de Hiyori a su habitación, se cayó de la estantería por

accidente. Solo después de recogerla me di cuenta que era la tarjeta.”

Él probablemente estaba balbuceando como un criminal al confesar un crimen del cual ni

siquiera había sido acusado porque se sentía culpable.

“¡Quiero decir— pensaba seriamente que solo diría ‘familia’ o algo así! Jamás…hubiera

esperado que eso estuviera escrito en ella…”

“……”

El hecho de que estaba siendo tan implícito en su forma de hablar, quería decir que había

descubierto que significaba que había sido la primera persona a quien Yokozawa miró al ver la

palabra en la tarjeta: “La persona más importante”. Pensando en ello, incluso ahora, su

irreflexiva acción había sido verdaderamente vergonzosa.

Yokozawa abrió su boca para decir algo antes de que Kirishima pudiera burlarse de él, pero

cuando alzó su mirada, se dio cuenta de que Kirishima estaba sonrojado. En un esfuerzo por

quitar esa incómoda atmósfera, paso su mano por su cabello.

“Mierda, ¿Por qué te estás sonrojando?”

“No, es solo que…no puedo…verte a la cara en este momento.”

“¿Eh?”

“¡No puedo evitarlo! Jamás habría imaginado que podrías pensar algo como eso, es todo…”

“¿Qué estas…”

Al ver a Kirishima todo preocupado por el asunto, terminó haciendo que la propia cara de

Yokozawa lentamente se calentara. Parecía sentirse extrañamente avergonzado por sus

acciones que habían hecho que Kirishima fuera incapaz de mirar a Yokozawa.

Bajo circunstancias normales, este habría sido el punto en que Yokozawa le respondía con un

veloz rechazo. ‘¿Qué mierda estás soltando eso no te viene para nada?’, pero quizás la

vergüenza de Kirishima era contagiosa, pues se vio incapaz de formular palabras en ese

momento.

En una pérdida por decir algo, la pareja se quedó mirando sus pies, en mutuo silencio y el

único que rompió aquella incómoda atmósfera entre ellos resultó ser un intruso con muy poco

tacto.

“¡Oh, ahí estás, Yokozawa-san!”

“He-Henmi…”

Al parecer Henmi no había notado la extraña atmósfera que impregnaba la sala de reuniones y

continúo balbuceando.

“¡Lo he estado buscando por todos lados! Quería preguntarle sobre el…¿Eh? ¿Qué están

haciendo aquí? Sus caras están ruborizadas. El termostato no está roto, ¿verdad?”

“No es nada. ¡Vamos, Henmi!”

“¿Eh? ¡Wa- Espera! ¡Fui el único que vino a buscarte!”

Esta vez fue el turno de Yokozawa para darse la vuelta y correr,, y rápidamente salió de la sala

de reuniones.

Su acelerado corazón era poco probable que se calmara pronto.