concepto de enfermedad

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313 ISSN 1025 - 5583 Vol. 63, Nº 4 - 2002 Págs. 313 - 321 Anales de la Facultad de Medicina Universidad Nacional Mayor de San Marcos Copyright © 2002 Correspondencia: Dr. Adolfo Peña Salazar Choquehuanca 208 Lima 32, Perú E-mail: [email protected] El concepto general de enfermedad. Revisión, crítica y propuesta Segunda parte: Carencias y defectos en los intentos por lograr una definición general de enfermedad ADOLFO PEÑA, OFELIA PACO Departamento Médico de la Asociación Cristiana de Jóvenes, YMCA. RESUMEN Esta segunda entrega está dedicada a señalar y esclarecer algunas omisiones que, a nuestra opinión, exhiben las diversas propuestas de definición de enfermedad. Nuestra crítica espera revirar el interés hacia el uso de diversos conceptos, teorías y metateorías que bien pueden contribuir a la mejor ejecución de un modelo teórico de la enfermedad. El análisis de los conceptos, el uso de la teoría general de sistemas, de la modelización matemática y del materia- lismo emergentista, mostrarán que alcanzar un concepto general de enfermedad no es posible sólo acudiendo a la parcela de la investigación empírica (científica). Palabras claves: Enfermedad; modelos teórico; teoría de sistemas. LACKS AND DEFECTS IN THE INTENTS TO ACHIEVE A GENERAL DEFINITION OF DISEASE SUMMARY This second delivery is dedicated to point out and clarify some omissions that to our opinion the diverse proposals of disease concept exhibit. This critic hopes to orientate the interest toward the use of diverse concepts, theories, and metatheories that may contribute to the best execution of a theoretical model of disease. The analysis of the concepts, the utilization of the general theory of systems, mathematical models, and emergentism theory will demonstrate that to reach a general concept of disease is not possible only by going to the parcel of empiric investigation. Key words: Disease; models, theoretical; systems theory. Introducción Casi siempre en nuestras escuelas de medici- na se nos enseña que la enfermedad no posee existencia real, sino tan sólo abstracta; “no exis- ten enfermedades sino enfermos”, suele escu- charse. En algunos textos de lengua inglesa ( 1 ) se remarca esta diferencia, al asignar significa- do dispar a las palabras disease e illness. La primera, se dice, designa el conjunto de abs- tracciones, sin existencia física; por ejemplo, la tuberculosis descrita en los textos de patolo- gía. La segunda illness , caracteriza el padeci- miento, la experiencia personal de aflicción, es decir, el proceso real. Esa distinción ontológica-semántica continúa motivando nuestra forma de entender y “acep- tar” la enfermedad. En la revisión que precedió ( 2 ), hemos visto que la discusión de cómo defi- nir enfermedad continúa alrededor de la dicoto- mía naturalista-valorativa. Empero, pocos de los artículos publicados en prestigiosas revistas in- ternacionales abordan el problema previo de

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Reflexión sobre el concepto de enfermedad

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  • Anales de la Facultad de Medicina Vol. 63, N 4 - 2002

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    ISSN 1025 - 5583Vol. 63, N 4 - 2002

    Pgs. 313 - 321

    Anales de la Facultad de MedicinaUniversidad Nacional Mayor de San MarcosCopyright 2002

    Correspondencia:Dr. Adolfo Pea SalazarChoquehuanca 208Lima 32, PerE-mail: [email protected]

    El concepto general de enfermedad. Revisin, crtica y propuestaSegunda parte: Carencias y defectos en los intentos por lograr

    una definicin general de enfermedad

    ADOLFO PEA, OFELIA PACODepartamento Mdico de la Asociacin Cristiana de Jvenes, YMCA.

    RESUMENEsta segunda entrega est dedicada a sealar y esclarecer algunas omisiones que, a nuestraopinin, exhiben las diversas propuestas de definicin de enfermedad. Nuestra crtica esperarevirar el inters hacia el uso de diversos conceptos, teoras y metateoras que bien puedencontribuir a la mejor ejecucin de un modelo terico de la enfermedad. El anlisis de losconceptos, el uso de la teora general de sistemas, de la modelizacin matemtica y del materia-lismo emergentista, mostrarn que alcanzar un concepto general de enfermedad no es posibleslo acudiendo a la parcela de la investigacin emprica (cientfica).

    Palabras claves: Enfermedad; modelos terico; teora de sistemas.

    LACKS AND DEFECTS IN THE INTENTS TO ACHIEVE A GENERAL DEFINITIONOF DISEASESUMMARYThis second delivery is dedicated to point out and clarify some omissions that to our opinion thediverse proposals of disease concept exhibit. This critic hopes to orientate the interest towardthe use of diverse concepts, theories, and metatheories that may contribute to the best executionof a theoretical model of disease. The analysis of the concepts, the utilization of the generaltheory of systems, mathematical models, and emergentism theory will demonstrate that to reacha general concept of disease is not possible only by going to the parcel of empiric investigation.

    Key words: Disease; models, theoretical; systems theory.

    Introduccin

    Casi siempre en nuestras escuelas de medici-na se nos ensea que la enfermedad no poseeexistencia real, sino tan slo abstracta; no exis-ten enfermedades sino enfermos, suele escu-charse. En algunos textos de lengua inglesa (1)se remarca esta diferencia, al asignar significa-do dispar a las palabras disease e illness. La

    primera, se dice, designa el conjunto de abs-tracciones, sin existencia fsica; por ejemplo,la tuberculosis descrita en los textos de patolo-ga. La segunda illness, caracteriza el padeci-miento, la experiencia personal de afliccin, esdecir, el proceso real.

    Esa distincin ontolgica-semntica continamotivando nuestra forma de entender y acep-tar la enfermedad. En la revisin que precedi(2), hemos visto que la discusin de cmo defi-nir enfermedad contina alrededor de la dicoto-ma naturalista-valorativa. Empero, pocos de losartculos publicados en prestigiosas revistas in-ternacionales abordan el problema previo de

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    deslindar y caracterizar la naturaleza ontolgicade los objetos conceptuales. Denunciando talomisin, iniciamos esta segunda entrega, dedi-cada a sealar y esclarecer algunos erroresque, a nuestra opinin, han sido perpetrados enlos diversos artculos especializados...

    La falta de un correcto entendimientode los objetos conceptuales

    Qu es un concepto? Es un ente propio?Slo un signo o una descripcin arbitraria?Aquella discusin ha sido central a travs delos tiempos, su influencia sobre las ciencias noha sido marginal ni mucho menos inocua. Tan-to de forma directa como indirecta las ideasacerca de la naturaleza de los objetos concep-tuales han contribuido en el acierto o en el fra-caso. En el caso de la definicin general de en-fermedad, pareciese que su contribucin no hasido muy reflexiva sino implcita, hasta casiinconsciente; aqu intentaremos revelarnos frentea dicho silencio.

    Cul es la naturaleza de los conceptos?

    Desde Platn, los ms grandes pensadoreshan afrontado esta interrogante. As, para elplatonismo, los objetos conceptuales son seresideales que existen de por s, independientementedel mundo fsico; ms tarde Descartes todavaotorgaba aquella jerarqua, gracias a su famosocogito, ergo sum (pienso, luego existo).

    Una respuesta diferente estuvo a cargo de losempiristas ingleses Locke y Hume (3). Para ellos,los objetos conceptuales son objetos mentales yexisten al igual que las dems ideas, o sea, comosensaciones o imgenes; la experiencia senso-rial los impone y los crea.

    Kant plantea que los pensamientos puedenocurrir slo como producto de la interaccinentre la mente y la realidad externa de la expe-riencia. Hegel fue un paso ms all y reconocique el mundo externo puede influenciar las ca-tegoras y dems rtulos que usamos, pero no

    puede crearlas sobre nuestra mente cual tablarasa (Hume), ni tampoco ser su consecuencia(Descartes).

    Ludwing Wittgenstein, el influyente filsofodel Crculo de Viena, propone que los concep-tos no son slo ideas fijas o absolutas, sinodef inibles a travs de reglas lgicas yreferenciales. Un concepto -ya sea abstracto,como la verdad o mundano como la enferme-dad- emerge como materia de semejanza fami-liar; por ejemplo, la malaria sera ms pa-recido a enfermedad que el alcoholismo (3).Wittgenstein propone que los conceptos son de-rivados de aquellas semejanzas familiares, node un conjunto de atributos fijos.

    Actualmente, segn Mario Bunge (pp. 50-61)(4), los objetos conceptuales no deben entender-se ni como entes, como lo cree el platonismo, nitampoco como procesos cerebrales (pensamien-tos, percepciones, experiencias), como lo creeel empirismo; sino como objetos que poseen unanaturaleza nica e irreductible [existencia con-ceptual]. Su presencia es de alguna forma con-vencional o fingida, dado que concurren bajo undeterminado contexto. Empero, si se refieren ahechos concretos y reales, como en las cienciasfcticas, no podrn ser arbitrarios. Debemos deaceptar entonces, dos tipos de existencia: la real(de carne y hueso) y la conceptual (creada a par-tir de una mente inteligente). Los objetos de laprimera simplemente existen, y puesto que lohacen independientemente de los humanos, sonsusceptibles de poseer propiedades fsicas, esta-dos y formas. El humano, gracias a sus sentidos,podr percibirlas, para luego intentar conocer-las, explicarlas y representarlas, pero, al hacer-lo, no podr ni deber asignarles propiedades queno le correspondan. Ambas clases de objetosposeen propiedades no intercambiables, por ejem-plo, los conceptuales, a pesar que representen alos concretos, no podrn sentir, envejecer, en-fermar o cambiar de estado; as como los objetosconcretos, no podrn ser ni malos ni buenos, nitiles ni intiles, ni verdaderos ni falsos; por ellopodemos conocerlos tal y como son, sin atadurassubjetivas o relativistas.

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    Cmo se estructuran los objetosconceptuales en las ciencias?

    En las ciencias, los objetos conceptuales (lla-mados ms propiamente constructos) pueden seragrupados en conceptos, que constituyen las uni-dades irreductibles. Proposiciones, losconstructos que satisfacen algn clculoproposicional, y adems consiguen ser evalua-dos en lo que respecta a su grado de verdad, lashiptesis y los enunciados, son ejemplos. Y lasteoras, sistemas cerrados e interdependientes deproposiciones, las cuales pretenden dar explica-cin a un segmento de la realidad y utilizan elmtodo cientfico en ese intento (pp. 51-52) (4).

    El conocimiento de la estructura terica delas ciencias nos ayuda a dilucidar lo siguiente:

    - Las proposiciones deben distinguirse enenunciados universales, particulares y singula-res (pp. 60-62) (5). Un enunciado universal es elque se refiere a todos los elementos de una clasedeterminada. Uno particular, el que lo hace aalgunos de los elementos de ella. Singular el quehace mencin de un elemento dado, un indivi-duo. Las leyes naturales se las considera enun-ciados estrictamente universales, por ejemplo.

    Esta distincin se encuentra en estrecha co-nexin con la existencia de conceptos universa-les e individuales. Por ejemplo, la enfermedadlinfoma de Hodking o el sndrome de DiGeorge,son conceptos o nombres universales; el pacienteJuan Prez o Ricardo DiGeorge, son conceptosindividuales.

    Aunque aparentemente sencilla, la aclaracinanterior conlleva a implicancias importantes.Todas las aplicaciones de la ciencia se apoyanen inferencias que, partiendo de hiptesis cien-tficas (universales), llegan a casos singulares.La prctica mdica no puede escapar a ello. Porejemplo, si el paciente Ricardo DiGeorge acu-de al hospital por presentar tumoracionesaxilares, fiebre y prurito, es justificable de serdiagnosticado de linfoma, ya que se confa enlas generalizaciones semiolgicas propuestas yharto contrastadas.

    - Por otra parte, los modelos tericos (conjun-to de proposiciones interdependientes que repre-sentan operacionalmente un aspecto de la reali-dad y que se encuentran engarzadas en las teorascientficas) constituyen el sinnmero de modelosutilizados en medicina. Por ejemplo, el modelode mosaico fluido (6), segn el cual todas las c-lulas humanas estn delimitadas por una bicapalipdica y proteica, con propiedades comunes ygenerales, como la fluidez y el libre movimientolateral de sus protenas. El modelo de regulacingentica en procariotas, llamado opern (7), elmodelo de doble hlice, de cido base, hormona,neurotrasmisor, etc. Entonces por qu no justifi-car una definicin general de enfermedad?

    - Las proposiciones deben ser diferenciadasen observacionales y no observacionales (pp. 57-74) (5) (pp. 210) (8). Las primeras otorgan infor-macin sobre el momento y lugar en el que serealiza una observacin. Las proposiciones noobservacionales son aquellas cuyos trminos sonexclusivamente constructos hipotticos, las hi-ptesis acerca de las cuatro fuerzas subatmicas,por ejemplo.

    - Las teoras cientf icas son sistemasaxiomticos de proposiciones [hiptesis y enun-ciados] que se caracterizan por su ordenamientolgico, de tal forma que a partir de la postulacinde verdad de un nmero mnimo de hiptesis, sededuce la verdad de las dems (pp. 53-56) (8).Los enunciados cuya verdad se postula se les lla-ma axiomas y aquellos cuya verdad se deduce atravs de una cadena de implicancias se les de-nomina teoremas. Parte de la contrastacin deuna teora es lgica [asegurada por sus propieda-des de coherencia o unicidad conceptual, simpli-cidad y consistencia externa (pp.146-150) (9)].Otra es emprica, al ser necesario establecer quelas proposiciones deducidas como teoremas co-rresponden al comportamiento efectivo de los he-chos. As, si corresponden, se dice que la teoraes, adems de lgicamente correcta, emprica-mente verdadera [gracias a sus propiedades deinterpretabilidad emprica, representatividad,capacidad predictiva, escrutabilidad y especial-mente refutabilidad (pp. 150-161) (9)].

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    Las teoras se ponen a prueba gracias a sushiptesis de menor grado de generalidad(observacionales), y stas a travs del uso delos conceptos individuales. As, si estas obser-vaciones no se prueban, la teora -sus proposi-ciones no observacionales- no queda contrasta-da y en ltima instancia no puede afirmarse suvalor de verdad.

    Por qu estudiar todo aquello? Porque lasciencias no son cmulos de datos, sino bsica-mente sistemas tericos, siendo su contenido losobjetos conceptuales y su referente los objetosmateriales; esta distincin es vital a fin de nocrear confusiones iniciales, causantes de tesispoco vlidas. Para el caso que nos interesa, alconocer mejor estos temas, podramos obtenerlas siguientes recompensas:

    - PRIMERO.- Cualquier definicin de enfer-medad ser un constructo, dado que es produc-to de la mente (cerebro) de algn humano o demuchos.

    - SEGUNDO.- Tal constructo no puede sersolamente un concepto, ya que si pretende serla explicacin de un aspecto de la realidad(como lo es el estado patolgico), debe nutrir-se de proposiciones que pongan a prueba sugrado de verdad.

    - TERCERO.- No solamente ser una pro-posicin, puesto que la complejidad del enfer-mar no puede ser explicada a travs de una solaproposicin o hiptesis observacional, sino demuchas.

    - CUARTO.- Una definicin general de en-fermedad debe nutrirse de muchas proposicionestanto observacionales (las de menor grado degeneralidad) como no observacionales (las demayor grado de generalidad.) La interdependen-cia sistmica de ambas garantizar la coherenciay exactitud del constructo, que en ltima instan-cia se convertir en un modelo terico, que ade-ms deber ser cientfico si no quiere perderse losmiles de datos de informacin que ya existen.

    - QUINTO.- Debemos aspirar a elaborar unadefinicin general de enfermedad que sea:

    a. Una representacin conceptual, simbli-ca y aproximada del estado de un sistemabiolgico complejo.

    b. Un modelo terico que refiera slo unoscuantos aspectos clave comunes y ge-nerales a todos los estados enfermos, y noslo refiera los detalles individuales delsistema.

    c. Que sea convencional pero no arbitrario.

    d. Que no sea ambiguo y solamente litera-rio, que recurra a trminos tericos defi-nidos (como los de estado y propiedad) yque recurra a la modelizacin matemticay lgica para ser ms exacto.

    e. Que no pretenda ser una fotografa ins-tantnea, ni una representacin grfica opictrica del enfermar, puesto que estarconstruida de proposiciones y no degrficos, ni de esquemas.

    f. Que sea entendible y coherente con lasleyes biolgicas generales harto conoci-das y contrastadas.

    - SEXTO.- La mayora de autores, como DeVitto (10), Rudnick (11), Fulford (12), Calguilhem(13), Scadding (14), Lenoox (15), y Temple (16),comenten un error ontolgico al atribuir una pro-piedad no fsica como el valor, a estados fsicosy materiales, como son los estados de salud yenfermedad. Al referirse sobre la imposibilidadde determinar qu es enfermedad sin usar crite-rios valorativos-normativos, y al referirse (citotextualmente) In essence, the concepts of healthand disease have both evaluative and value-neu-tral components that are individually necessarybut only jointly sufficient for determining justwhat is illness (pp. 540) (10). [En esencia, losconceptos de salud y enfermedad, ambos po-seen componentes valorativos y valor-neutralque son individualmente necesarios, pero queslo unidos determinan suficientemente qu esenfermedad], estos especialistas elaboran ob-jetos ontolgicamente malformados, invalidandoas sus propuestas de definicin.

    Por poco creble que parezca, la literaturaen prestigiosas revistas est plagada de errores

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    como ese. Lennox (15), por ejemplo, como revi-sramos en el artculo anterior (2), no slo pro-pone que la salud y la enfermedad sean concep-tos cargados de valor, sino que va ms lejos;propone que tales valores son objetivos (esdecir, reales, no conceptuales.)

    Mdicos peruanos tampoco han podido esca-par a ese error; por ejemplo, el Dr. GonzlesDiego (17) comenta nada menos que en un sim-posio de filosofa de la medicina: Me inclino apensar que la salud es una dimensin, la saludindividual es la belleza de la existencia y la ex-periencia. Un equilibrio entre el ambiente, laconciencia, el espritu, nuestras endorfinas,nuestra imagen propia: Por eso tengo la con-viccin que la salud individual es una metfo-ra [no puede haber mejor ejemplo de deslizontolgico!]

    - SPTIMO.- No es admisible la posicin deHesslow(18), quien afirma la imposibilidad deun concepto general de enfermedad.

    - OCTAVO.- Las diversas tesis publicadas nollegan a constituir ni teoras, ni modelos tericos,a lo ms son opiniones, quizs doctrinas o mar-cos tericos. Aunque constituidas por muchasproposiciones y oraciones con un referente co-mn: la enfermedad. Sus proposiciones no hansido claramente especificadas ni organizadas enun sistema hipottico-deductivo interdependiente;sus interpretaciones no son ni semnticas niepistemolgicas, sino slo literarias.

    La falta de una caracterizacin precisade la nocin estado

    Otro gran defecto en los ensayos dedicados adefinir enfermedad, es su ambigedad. As, nin-guno de ellos, desde Bernard en 1860 hastaTemple en el 2001, ha dedicado una caracteri-zacin precisa del concepto estado; en el mejorde los casos se remiten a utilizar aquella pala-bra, pero no la definen con rigor. Por ejemplo,Boorse (19), quien ha escrito todo un libro acer-ca del tema, no establece qu son esos esta-dos al que hace referencia:La enfermedad es

    un tipo de estado interno en el cual existe unimpedimento del funcionamiento normal, es de-cir, una reduccin de una o ms habilidadesfuncionales por debajo de lo tpicamente eficien-te o en limitacin sobre la habilidad funcionalcausado por agentes ambientales.

    Mientras que ya muchas teoras cientficasutilizan la matemtica de conjuntos para expli-car y entender qu es estado, en medicina (almenos en lo que respecta a definir enfermedad)se hace caso omiso del uso de las VARIABLESDE ESTADO, de las representaciones de losESPACIOS DE ESTADO y de las FUNCIONESMATEMTICAS. El problema, pues, de mu-chas de las definiciones propuestas es que, aun-que pueden ser consideradas como correctasslo lo sern entre comillas, debido a que depen-den de conceptos no elucidados previamente.

    La falta de utilizacin de la teora generalde sistemas en la definicin de enfermedad

    La teora general de sistemas, desde que sefund con Bertalanffy hace cincuenta aos (20-21), ha recibido gran reconocimiento en diferen-tes disciplinas, tanto cientficas como tecnol-gicas. Concebida como una teora de alto gradode generalidad, de corte lgico-matemtico, pro-pone que la realidad se estudie como un sistemade conexiones cualitativamente determinado, endonde cada elemento se analice como parte deun todo y a la vez como un subsistema en smismo (20-21).

    Gracias a su planteamiento, los frutos poste-riores a su uso han sido harto producidos, conpublicaciones en revistas cientficas que cubrenreas desde fsica, qumica y biologa, hastasociologa, economa y educacin. Actualmen-te, la Society for General Systems Research (So-ciedad para la investigacin general de siste-mas) es una de las sociedades cientficas msrelevantes (22).

    A pesar de su enorme difusin y aunque para-djicamente su fundador, Bertalanffy, fue un bi-logo contiguo a la medicina, la teora general

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    de sistemas parece ser completamente ignorada.En ningn artculo publicado en los ltimos veinteaos se encuentra siquiera un titulo dedicado aintentar hacer uso de dicha teora a fin de elabo-rar una definicin de enfermedad. As pues,conceptos como sistema, elementos de un siste-ma, estructura de un sistema, ESTADOS, PRO-CESOS y PROPIEDADES, son inexplorados. Heaqu una razn del por qu los filsofos de lamedicina no pueden dar explicacin del concep-to estado y, en consecuencia, no pueden dar ex-plicacin de lo que es enfermedad.

    Las definiciones actuales de enfermedadno hacen uso del materialismo emergentista

    compatible con la estructura en nivelesde la realidad

    La hiptesis de emergencia permite ex-plicar el por qu no se puede elucidar ciertaspropiedades de los sistemas complejos nica-mente a travs del completo y detallado estudiode sus partes. El materialismo emergentista seest convirtiendo en los ltimos aos en un en-foque influyente (23-24), sobretodo, en psicologay neurociencia, ya que entre otras cosas estlogrando crear el armazn intelectual sobreel cual la investigacin cientfica pueda dar cuen-ta de conceptos tan difciles como los de mente,vida y organismo (25).

    Los orgenes del concepto de emergenciapueden remontarse, segn Sawyer (23), hasta elsiglo pasado, cuando el filsofo George HenryLewes (1877) en una crtica que haca a la teo-ra de la causacin de Hume, hall necesariodistinguir entre dos tipos de efectos: resultantesy emergentes. Aunque cada efecto es el resul-tante de sus componentes, el producto de susfactores no siempre puede trazar los pasos delproceso, as como en el producto el modo deoperacin de cada factor. En este ltimo caso,yo propongo llamar al efecto un emergente. Elloemerge por la agencia combinada, pero en unaforma que no muestra los agentes en accin(23).Posteriormente, en los aos 20s, esta idea fuecompartida por ms filsofos, sobretodo por

    filsofos de la biologa, entre ellos LloydMorgan, quien postul la emergencia de los ni-veles organizacionales. Ya a mediados del sigloXX, el concepto de emergencia toma un nuevoempuje, integrndose parcialmente en la teo-ra general de sistemas, y mediante ella a dife-rentes disciplinas.

    Actualmente, la hiptesis de emergencia con-siste bsicamente en sostener que todos los ob-jetos y sistemas poseen propiedades (caracte-rsticas) que pueden ser RESULTANTES (HE-REDITARIAS) si son derivadas ntegramente apartir de sus partes (de forma sumatoria) oEMERGENTES (COLECTIVAS) si slo loposee el sistema, pero no las partes (23-25).

    Es de sealar que la emergencia se debe en-tender como hecho real y concreto y no slocomo un mero arreglo o estrategia cognitiva,ya que toda emergencia depende no slo deideas, sino de las cosas reales que la contie-nen (pp. 42-46) (25). Es decir, el emergentismoracional afirma tanto la emergencia ntica, comosu reductibilidad gnoseolgica o explicabilidad.

    A fin de mostrar la utilidad de dicho enfo-que, veamos el ejemplo ms conocido (26): Elagua, como sabemos, puede encontrarsemacroscpicamente en diferentes estados fsi-cos (slido, lquido y gaseoso); empero, susmolculas que la constituyen no poseen talespropiedades; as, una molcula aislada de H

    2O

    no es ni fluida ni gaseosa ni glida. Es-tos estados se explican por la interaccinelectrosttica a travs de los enlaces de hidr-geno -la interaccin electromagntica entre to-mos de hidrgeno y pares de electrones com-partidos de otros tomos- entre las molculasde agua, enlaces que pueden tomar diferenteangulacin, dependiendo de la temperatura delmedio: agudo para el estado lquido y recto parael slido(27). Es entonces a partir de la organi-zacin particular e interdependiente de los ele-mentos (molculas de H

    2O) que se permite la

    emergencia de una propiedad pertenecientesolamente al agua como sistema. Podemos con-cluir luego, que tal propiedad lquida o slida,no se encuentra en la molcula H

    2O ni en los

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    enlaces de hidrgeno, tampoco en los tomos,sino en el sistema que se crea al unirse miles omillones de molculas. La fluidez del agua esentonces una propiedad emergente, se explicapor sus componentes (tomos de H y de O,molculas de H

    2O y enlaces electromagnticos),

    pero no es compartida por ninguno de ellos, sinoque pertenece a un sistema de un nivel jerrqui-co superior: el agua.

    La biologa, y por ende la medicina, est pla-gada de ejemplos como el que acabamos de ver.Propiedades como la sexualidad, la mente, larespiracin, visin, audicin, digestin, estruc-tura proteica, contraccin muscular, y la con-ducta son emergentes. No pueden evitar serlo,a fin y al cabo, el mundo es sistmico, y nosimple.

    Finalmente postulamos que lo que nos inte-resa en este ensayo: LA ENFERMEDAD tam-bin es de carcter EMERGENTE.

    La ausencia de un concepto claro ysistmico de organismo

    No podemos definir enfermedad como un es-tado, s ino esclarecemos qu es es tado.Adicionalmente, este ultimo concepto es depen-diente de su referente objetivo, ya que debe serel estado de algo, de una cosa u objeto con-creto (en nuestro caso, el ser humano.) Enton-ces, una definicin al menos aproximada de or-ganismo ha de imponerse. Lamentablemente aquencontramos otra ausencia en las diversaspublicaciones.

    Aqu, algunos conceptos y postulados virtual-mente ignorados (20-21):

    a) Sistema.- Objeto complejo compuesto detems interdependientes.

    b) Elementos.- Los componentes de cada sistema.

    c) Propiedades.- Los atributos o caractersticasde cada objeto, subsistema o sistema. Puedenser resultantes, si son compartidas por todoslos elementos, o emergentes si son nicos.

    d) Estructura.- Las relaciones que ligan a loselementos de un sistema como un todo; pue-de ser simple o compleja, dependiendo delnmero y tipo de interrelaciones entre laspartes. Los sistemas complejos tendrn dife-rentes niveles jerrquicos en su estructura.

    e) Estados y procesos.- El estado de un sistemaqueda definido por las propiedades que suselementos muestran en un determinado tiem-po. El valor de sus variables de estado locaracterizan. Los cambios de un estado a otro,son los procesos o el proceso del sistema.

    f) Ambiente.- Es el medio (porcin de la reali-dad o del universo) con el cual un determi-nado sistema interacta, ya sea introducien-do (input) o eliminando (output) informacin,objetos o cualquier otra cosa.

    Cinco postulados adicionales (28):

    i) Todas las cosas, sean concretas o abstractas,son sistemas o componentes actuales, o po-tenciales de un sistema.

    ii) Los sistemas poseen caractersticas sistmicas(emergentes) que son ausentes en sus com-ponentes.

    iii)Todos los problemas deben ser abordadosde forma sistmica, ms que de manera sec-torial.

    iv)Todas las ideas deben ser agrupadas y orga-nizadas en sistemas (teoras).

    v) Las pruebas de cualquier cosa, ya sea idea oartefacto, asume la validez de los otros pos-tulados, los cuales son tomados comolineamientos.

    Tomando estos conceptos y postulados, sepuede definir organismo viviente como aquelquimiosistema semiabierto y autocontrolado quetoma del medio ambiente la materia y la ener-ga que intervienen en sus reacciones, que sin-tetiza todos sus dems componentes y que sereproduce, muta y evoluciona. Difieren de loinanimado, aunque se enrazan en ste y emergende l en un proceso histrico. Son vivientes,porque poseen propiedades biolgicas (repro-

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    duccin, mutacin, evolucin, etc.) que slo lespertenece a ellos como biosistemas...

    Y como todo biosistema, algunos de sus es-tados sern saludables y otros sern ENFER-MOS....

    La falta de la modelizacin matemtica

    Despus de obtener decenas de artculos atravs de Medline, utilizando las palabras clavede bsqueda: disease definition, illness, theoryof disease, y health; slo encontramos a un au-tor, Sadegh-Zadeh (29) , que ut i l ice lamodelizacin matemtica para esclarecer sumodelo de enfermedad. Esto muestra que enmedicina a diferencia de otras tecnologas- losinvestigadores biomdicos slo reservan la mate-mtica para la investigacin emprica (ya seabsica o clnica), pero no acuden a ella paraesclarecer sus ideas y conceptos centrales.

    Utilizar la matemtica no responde a un merojuego mental, responde esencialmente, a gene-ralizar y operacionalizar mejor conceptos y pro-posiciones no individuales, posibilitando crearun esqueleto formal el cual pueda rellenarsecon cualquier contenido emprico (pp. 170,171)(4). La matematizacin del concepto general deenfermedad incrementara la exactitud y, porlo tanto, la claridad de las ideas. En contraste,los actuales conceptos literarios muy ricos eninferencias laboriosas y a menudo inseguras,no pueden especificar bien sus premisas fun-damentales.

    Un modelo matemtico se puede ordenar me-jor, y en particular, se puede axiomatizar, otor-gando precisin y poder deductivo. Tal ordena-miento lgico facilita su contrastacin emprica yaumenta su verificabilidad, sin la necesidad deacudir a la ideologa o a la doctrina (pp. 171) (4).

    Parece que algunas de las respuestas no pro-vienen necesariamente de los investigadoresbiomdicos. Es un filsofo, Mario Bunge (pp.239-241) (4), quien ha adelantado en llenaralgunos de los vacos de las publicaciones

    biomdicas mundiales, el uso de la modelizacinmatemtica y del enfoque sistmico para defi-nir enfermedad ha sido sealado por l (30).

    Conclusin

    A pesar del desarrollo cientfico, el concep-to de enfermedad todava conlleva dificultades,quiz la falta de inters o de iniciativa hacia elestudio de otras disciplinas ha contribuido a estalimitacin. Se hace necesario integrar lasmetateoras ms productivas con el anlisis fi-losfico ms crtico. Dado su alto nivel de abs-traccin, la elaboracin de un modelo tericode enfermedad no plantea tarea sencilla, peroesta tarea ser aun ms difcil si no perdemos elmiedo a la introduccin de hiptesis que con-tengan factores no observables, y si no lucha-mos por la organizacin lgica de los postula-dos. De no conseguir una estructura lgicaaxiomtica ser ms difcil reconocer los com-ponentes esenciales que nos permitan la mejorcrtica y revisin.

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