ContactoInformativo nº 17 - verano 2010 / www.aon.cl

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Alianza con Manchester United:

UNA NUEVA DIMENSIÓN PARA LA MARCA AON

Efectos del cambio climático en seguros de responsabilidad civil

Sustentabilidad: La nueva llave en la gestión del riesgo

El problema de la escasez de soluciones “verdes”

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LA ERA DEL RIESGO AMBIENTAL

Cobertura Especial

2 Contacto• Aon

“Contacto” es una revista cuatrimestral dirigida a los clientes de Aon Chile y al sector asegurador nacional. Director Responsable: Carlos Bello. Comité Editorial: Francisco Recabarren, Nicolás Vallejo, Carla Orejas, Matías Sánchez y Jaime Sánchez. Editor General: Matías Sánchez. Periodista: Alfonso Mena. Diseño y diagramación: María José Vildósola. Fotografías: Yanira Tala, Image Group. Producción: Sánchez y Barceló, Periodismo y Comunicaciones Limitada. Dirección: Del Inca 4446, oficina 201, Las Condes. Fono: 756 39 00. Fax: 756 39 39. E-mail: msanchez@sanchezybarcelo.cl. Impresión: Worldcolor.

El cambio climático es un desafío que asusta por su complejidad, ta-maño y consecuencias. Lo que más preocupa es la certeza de que el daño ambiental generado ha sido tan grave que pasarán décadas an-tes de que se revierta el fenómeno del calentamiento global.

Más allá de las medidas que los go-biernos y las grandes corporacio-nes deben adoptar para reducir las emisiones de carbono, las empresas chilenas hoy se enfrentan a la nece-sidad de reaccionar a las consecuen-cias que el cambio climático está generando tanto en los sistemas productivos como en los hábitos de compra de los consumidores.

Se trata de un desafío que no se puede posponer, considerando que en la reciente cumbre de Copenha-

gue nuestro país se comprometió a reducir sus emisiones de CO2 en 20% en diez años, en circunstancias que en los últimos 25 años aumentó dichas emisiones en 170%. Además, nuestro reciente ingreso a la OCDE supone cumplir una serie de están-dares ambientales de primer orden.

Como participantes del sector ase-gurador, vemos con preocupación que, por un lado, haya empresas chilenas que aún no asimilen este fenómeno como un factor de riesgo que es necesario gestionar. Y, por otro, que las soluciones de seguros que existen estén todavía lejos de satisfacer las necesidades vincula-das al riesgo ambiental.

Esta edición refleja el interés que existe en Aon por este asunto, a través de diversos reportajes en los

cuales buscamos compartir infor-mación y las tendencias que están produciéndose a nivel global. Esto queremos verlo coronado con la realización en mayo próximo de un seminario focalizado en el tema, el cual contará con la participación de especialistas de Aon a nivel global que explicarán a nuestros clientes las implicancias y retos que surgen a propósito de la relevancia del tema ambiental en la agenda pública.

Sabemos que la mayoría de nues-tros clientes llevan varios años de trabajo destinados a asegurar la sustentabilidad de sus negocios. Lo que pretendemos es aportar con nuestra experiencia y liderazgo glo-bal para ayudar a que el cuidado del medio ambiente sea asumido como una práctica indispensable para una efectiva gestión del riesgo.

LA URGENCIA DE LA SUSTENTABILIDAD

Queremos ayudar a que el cuidado del

medio ambiente sea asumido como una

práctica indispensable para una efectiva

gestión del riesgo.

Carlos BelloGerente General Aon Chile

sumario

editorial

Experiencia .......... 3Gestión de Aon en siniestro de Hotel CostAustralis

Actualidad ......... 4Alianza con Manches-ter United potenciará la marca Aon

Inbox .......... 13Datos sobre el sector asegurador

Sustentabilidad .......... 6Cambio climático influiría en responsa-bilidad civil

Sustentabilidad .......... 8Relevancia de la gestión de riesgo ambiental

Sustentabilidad ........ 10Escasez de oferta de seguros “verdes”

Sustentabilidad .........12“Reducir el CO2 dejó de ser opción”, afirma Edmundo Claro

Research .......... 14Más países en crisis, según nuevo Mapa de Riesgo Político de Aon

Planeta Aon .......... 16Premian a Aon como mejor broker de seguros global

nº 17verano 2010

3 Contacto• Aon

Alfredo Nodleman, Gerente General de Australis Patagonia, afirma que la gestión de Aon fue fundamental para superar con rapidez el incendio que afectó al Hotel CostAustralis de Puerto Natales

Una mañana difícil de olvidar se vivió el 3 de diciembre de 2008 en Puerto Natales. Humo y llamas surgían desde los pisos superiores del hotel CostAustralis, ícono del auge turístico en esa ciudad magallánica. Fue un duro golpe, pues los daños y las millonarias pérdidas obli-garon al cierre del recinto durante 9 meses.

Lo peor fue que apenas tres meses antes el hotel había inaugurado una ampliación para recibir más turistas. Alfredo Nodleman, Geren-te General de los hoteles Australis Patagonia., cuenta que “habíamos crecido de 74 a 110 ha-bitaciones y a las pocas semanas de haber ter-minado la ampliación nos percatamos que ésta tenía sueltas algunas planchas del techo”.

Ante esto, “la constructora a cargo comenzó a hacer las reparaciones pertinentes. Por un des-cuido se inflamó un material, que derivó en un incendio en el entretecho. Éste se expandió y quemó el cuarto piso por completo. Los pisos inferiores también fueron dañados por el agua y el trabajo de los bomberos”.

A pesar de que el hotel estaba con un 80 por ciento de ocupación, en el momento del sinies-tro no había más de 20 huéspedes en el edificio.

“Nunca dejamos de sentir el apoyo de Aon”

“Como es costumbre, la mayoría salió muy tem-prano para iniciar sus paseos y expediciones por la zona. Eso facilitó la tarea de nuestra brigada de evacuación. Afortunadamente, no hubo ninguna desgracia personal”.

Tras la extinción del fuego hubo que hacerse cargo de otro gran desafío: “El hotel quedó inutilizable y debimos cerrarlo. Como estába-mos con una alta ocupación, tuvimos que bus-carle una solución a todos nuestros clientes”.

De inmediato se implementó un plan de emer-gencia para responder a las necesidades de los huéspedes, quienes habían perdido sus pertenencias y requerían de otro lugar donde pernoctar. “Nos preocupamos de reubicar a quienes se estaban hospedando y a buscar al-ternativas de alojamiento a los pasajeros que iban a llegar en los días posteriores”.

GESTIÓN DE AON ACELERÓ RECONSTRUCCIÓN DEL HOTEL

Según Alfredo Nodleman, “la gente de Aon se hizo presente en forma inmediata para resol-ver el problema que teníamos. Fue una ayuda fundamental, pues en esta área hay muchas variables y elementos que nosotros descono-cíamos, como todo lo relacionado con iniciar los trámites para poder cobrar los seguros de acuerdo a lo que estaba previsto”.

experiencia

Las pérdidas por el inmueble fueron avaluadas en 70 mil Unidades de Fomento, mientras que el contenido en 20 mil. “Aon coordinó cada ac-ción relacionada con el seguro, tomó el contac-to con las aseguradoras y ayudó para que todo fuese muy rápido. Gracias a la acción coordina-da de todos los estamentos involucrados, ya en la primera semana de enero de 2009 pudimos iniciar la reconstrucción, que duró hasta sep-tiembre”.

Nodleman afirma tener “la mejor impresión del trabajo realizado por Aon. Su excelente equipo de profesionales estuvo presente du-rante todo el proceso, desde el inicio hasta el fin. Nunca dejamos de sentir el apoyo de Aon. Eso es algo vital en este tipo de situaciones que, por su complejidad, requiere el apoyo de expertos”.

En su opinión, en estos casos es fundamental contar con la asesoría de un experto como Aon: “Nosotros somos hoteleros y nos dedicamos a esa industria. Si bien podemos llegar a enten-der y a conocer mucho de lo que nos sucedió, no somos expertos en seguros y requerimos la asesoría de alguien que sí lo sea y que nos vaya diciendo cómo hacer las cosas para que estas se desarrollen de manera fluida y con el máximo de beneficio para todos los involucra-dos. Sin duda, Aon fue un aliado estratégico de máxima calidad”.

4 Contacto• Aon

El 27 de mayo de 2009, el mundo futbolístico estaba expectante. Los equipos que juegan el fútbol más vistoso del mundo, Manchester United y Barcelona, dirimían en Roma al campeón europeo. En la mis-ma capital romana, pocas horas antes de que Lionel Messi y los catalanes se quedaran con la Champions League, los directivos del club inglés cerraban un acuerdo que establecía que, entre 2010 y 2014, su camiseta tendrá un nuevo auspiciador: Aon.

“¿Qué es Aon? ¿A qué se dedica?” Miles de ciber- nautas ingresaron al sitio corporativo de Aon apenas se difundió quién será el nuevo sponsor del Man-chester United. Su ignorancia no era por casualidad. Como el principal corredor de seguros y reaseguros del mundo, con presencia en más de 120 países, Aon ha privilegiado el posicionamiento de su marca

dentro del ámbito de las grandes corporaciones, lo cual incidió en que no hubiera necesidad por darse a conocer a nivel masivo.

También influyó que, desde su fundación en 1922, esta firma cambió sucesivamente su nombre por consecuencia de más de 400 adquisiciones y fusio-nes. Recién en 1987 adoptó su nombre definitivo, proveniente de una voz celta que significa “único” o “unidad”, concepto que representa la integración de múltiples culturas y conocimientos alrededor del mundo.

En las últimas décadas, Aon se posicionó como una empresa global, con más de 37 mil colaboradores y un abanico de servicios adicionales al corretaje de seguros, como gestión de riesgos, reaseguros y con-

LA UNIÓN HACEEn agosto de 2010 la marca Aon saldrá de la esfera financiera y ampliará su alcance de manera exponencial, de la mano del club más popular del planeta: Manchester United. Una serie de valores compartidos entre estos líderes mundiales facilitó esta alianza que se extenderá por cuatro años.

LA MARCA

actualidad

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sultoría en capital humano. Pero a este liderazgo le faltaba el respaldo de una marca global, reconocida más allá de los públicos especializados. Una tarea titánica cuando se trata de marketear un intangible en todo el mundo.

LA CAJA MISTERIOSA

Un inesperado paquete enviado por correo fue la llave para cubrir esa necesidad. Dos altos ejecutivos de Aon en el Reino Unido recibieron una gran caja que contenía una camiseta de fútbol con un estam-pado del logo de Aon a lo ancho del pecho junto al escudo del Manchester United. Era la invitación a participar en la licitación de un nuevo auspiciador para su tenida, en la que sólo participarían unos po-cos elegidos.

Tal como planteaba Phil Clement, director de mar-keting de Aon, “esta oportunidad tenía el potencial de tener más impacto que veinte programas de marketing juntos”. Así lo han comprobado otras compañías del ámbito financiero, que tras auspiciar a un club de primer nivel internacional consiguieron situarse en las listas de las más respetadas del mun-do. Con su nombre estampado en el uniforme de los Diablos Rojos, ahora Aon tiene la opción de que su liderazgo sea reconocido de manera global.

BENEFICIOS ROJOS

Junto con ayudar al posiciona-miento de su marca a nivel global, la alianza con Manchester United permitirá a Aon reforzar su pre-sencia en áreas de negocios como la gestión del riesgo y la consul-toría en recursos humanos, sobre todo en mercados emergentes donde la marca de los Diablos Ro-jos es fuerte y existen importantes oportunidades de crecimiento, en particular en el mercado asiático.

Esta alianza también será beneficiosa para Manchester United, pues podrá ampliar su presencia en Estados Unidos, de la mano de una compañía de prestigio en ese país.

UNIDOS TAMBIÉN POR VALORES

La alianza de Aon con Manches-ter United no sólo supone el en-cuentro entre dos gigantes en sus respectivas actividades. Por so-bre todo, como destacó el CEO de Aon, Greg Case, “nuestros colegas del Man-U comparten muchos de nuestros valores, incluyendo el deseo por triunfar y la excelencia. Así como ellos dejan todo en la cancha, nosotros hacemos todo lo posible para que nuestros clien-tes se vean beneficiados”.

EN CHILE YA SE PREPARA EL AMBIENTE Aon Chile también participará en las actividades que a nivel global se realizarán durante 2010 para dar la bienvenida al Manchester United. “Queremos que un hito de esta envergadura sea compartido con todos nuestros clientes, pues gra-cias a su confianza estamos ocu-pando una posición de liderazgo en el país. Estamos planificando distintas acciones para que ellos se hagan parte de la alegría que sentimos por esta alianza”, explica Carla Orejas, Encargada de Mar-keting Aon Chile.

1.870 millones de dólares de valor, el mayor en el mundo del fútbol.

333 millones de seguidores.

88 millones ven sus partidos en promedio.

1.150 millones de hogares tienen acceso a sus partidos por TV.

6,6 millones de poleras oficiales vendidas al año.

1º mundial en corretaje de seguros y de reaseguros.

3º mundial en consultoría de recursos humanos.

37.000 empleados.

500 oficinas en 120 países.

10.300 millones de dólares de valor bursátil.

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¿QUÉ HACEMOS CON EL CAMBIO CLIMÁTICO?El calentamiento global no sólo implicará más daños a la propiedad por catástrofes climáticas. La presión por exigir compensaciones a quienes emiten más CO2 generará litigios que perseguirán la responsabilidad de las empresas y sus ejecutivos.

“La pérdida irreversible de activos ecológicos por culpa del cambio climático podría causar que los centros de ski en Colorado demanden a las genera-doras eléctricas por la falta de nieve o que los nati-vos de Alaska culpen a la industria automotriz por el derretimiento del hielo”.

Estos son casos hipotéticos planteados por un infor-me de Aon en 2007 para ilustrar las consecuencias del cambio climático desde el punto de vista del sector asegurador. Podría parecer una exageración, pero en menos de un año uno de esos ejemplos ya se había materializado.

En 2008, 400 esquimales de Kivalina, un pequeño poblado en una septentrional isla de Alaska, interpu-

sieron en una corte de California una demanda civil por daños contra una veintena de compañías petro-leras y energéticas, los mayores emisores de gases de efecto invernadero (GEI) en Estados Unidos. A ellas culpaban por el derretimiento de los hielos del Ártico y la consecuente erosión de su isla, cuya su-perficie había disminuido a la mitad, lo que había dañado caminos y construcciones y los presionaba a trasladarse antes de que sus casas caigan al mar.

Aunque la demanda fue recién rechazada en pri-mera instancia, en paralelo se conocieron dos resoluciones judiciales en sentido contrario. Una aceptó la solicitud de agricultores de Mississippi para enjuiciar a compañías petroleras y carboní-feras por los daños del huracán Katrina, dada la

sustentabilidad

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relación entre la severidad de este evento y el aumento de los GEI. La otra permitirá que va-rios estados enfrenten a la empresa American Electric Power por las molestias causadas por sus generadoras alimentadas con carbón.

Si bien los pleitos de este tipo aún son escasos, estos antecedentes están comenzando a inquie-tar a las empresas y aseguradoras norteameri-canas. Presumen que, en la medida que los efectos del cambio climático se hagan incontra-rrestables, aumentará la búsqueda de respon-sables que se hagan cargo de los perjuicios. Así, al igual como ocurrió con las tabacaleras o los asbestos, estiman que tarde o temprano surgirá un juicio emblemático que sentará un prece-dente sobre la responsabilidad de las empresas y gobiernos por sus emisiones de GEI.

El panorama se complicó tras los pobres resul-tados de la Cumbre del Clima en Copenhague. En parte, los países desarrollados se negaron a financiar los billonarios planes propuestos para mitigar el calentamiento global, porque implí-citamente significaba reconocer una responsa-bilidad concreta en el cambio climático, lo cual tendría inmediatas consecuencias judiciales. Un motivo más para que continúe la presión de ONGs y grupos ciudadanos, como los esqui-males de Kivalina, hasta al menos conseguir que alguien comience a pagar la cuenta.

En tanto, en diciembre pasado la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de EE.UU. dictami-nó que los GEI arriesgan la salud pública y que deben controlarse, dando fin a una polémica de años. Junto con permitir a la EPA regular estas emisiones a nivel industrial y automotor, la resolución refuerza el argumento de que los GEI entran en las exclusiones por contamina-ción contenidas en varias pólizas de seguros.

EL QUE CONTAMINA, PAGA

La eventual persecución de las responsabilida-des de gobiernos y empresas en el calentamien-to global es una nueva fuente de preocupación para las aseguradoras, que ya tienen suficientes dolores de cabeza con las proyecciones de pér-didas que se hacen por el aumento de la canti-dad e intensidad de las catástrofes climáticas. Además, en el sector se estima que el aumento sostenido de las temperaturas podría afectar al segmento de seguros de vida si éste se traduce en una mayor tasa de mortalidad.

Según el Insurance Information Institute de Es-tados Unidos, con el cambio climático “no sólo aumentarán las pérdidas de bienes de todo tipo, sino que podrían abultarse las pérdidas de responsabilidad comercial si los accionistas y los consumidores persiguen la responsabili-

dad de los negocios por los cambios en el me-dio ambiente”.

Un informe de Munich Re sintetiza la velocidad de este cambio: “Hace dos años el tema de las compensaciones no estaba presente en las ne-gociaciones multilaterales. Ahora todos quieren que los contaminadores paguen. El próximo paso tal vez sea perseguir las responsabilidades”.

La firma Climate Change Risk Management, li-gada a la Universidad de Oxford, sostiene que el calentamiento global obligará a los gobiernos a imponer severos costos regulatorios en todos los negocios que son sospechosos de contribuir al problema. Además, las compañías se expo-nen a ser demandadas si no toman en serio este problema: “Las empresas que se demoren en actuar pueden ser acusadas de causar altos costos por retrasarse en la reducción de emi-siones, por dañar la reputación de la compañía y por no cumplir con la obligación de entregar información relevante para los inversionistas”.

MEDIDAS DE ADAPTACIÓN

Estas señales ya han sido advertidas por las em-presas, para las cuales el cambio climático tam-bién implica riesgos como eventuales cambios en el comportamiento del consumidor, insegu-

El nivel del mar aumentaría en medio metro en los próximos 40 años por el derretimiento de hielos. Sólo en las 100 principales ciudades costeras del mundo las pérdidas podrían as-cender hasta 28 billones de dólares.

En caso que se cumplan los peores escena-rios, hacia finales de este siglo la selva ama-zónica habrá perdido más del 70% de su ex-tensión, principalmente por la sequía en sus cuencas. Además de sus efectos en la biodi-versidad, se estiman pérdidas por más de US$ 9 billones.

Según las universidades de Harvard, Berke-ley, Nueva York y Stanford, el calentamiento global influirá en un aumento de los conflic-tos armados en el África subsahariana. Esto, tras advertir que en los años calurosos de las décadas pasadas aumentó en 50% el número de conflictos, principalmente por la desespe-ración de la población por el efecto del clima sobre sus cosechas agrícolas.

Por la inundación de las costas y las pérdidas agrícolas, durante las próximas cuatro décadas se produciría la mayor migración en la historia humana: más 150 millones de personas.

EJEMPLOS DE LO QUE HA OCURRIDO… ... Y DE LO QUE PODRÍA OCURRIR

Las temperaturas globales han aumentado al menos 0,7 grados centígrados, lo que ha incidido en el derretimiento de los hielos del Ártico.

La actual concentración de CO2 en la atmós-fera alcanza a 387 partes por millón, muy por encima de la media histórica, situada entre 189 y 280 ppm. Se afirma que las condiciones se harían insostenibles si llega a 500 ppm.

El 86 por ciento de todas las catástrofes na-turales ocurridas entre 1980 y 2008 fueron causados por eventos climáticos como ven-davales, granizos, tormentas severas, inun-daciones y temperaturas extremas.

Los desastres relacionados con el clima cau-saron 600 mil muertos entre 1990 y 2008. Las pérdidas económicas sumaron más de 1.400 billones de euros (a valor de 2008).

Según Munich Re, en los años ‘80 no se re-gistraban más de 15 catástrofes al año que causaran pérdidas de más de 500 millones de dólares o más de 500 muertos. En la actuali-dad, se contabilizan unos 35 eventos de ese tipo al año.

ridades en el abastecimiento energético o impac-tos en la reputación corporativa, entre otros.

Según una encuesta de Lloyd’s entre los máxi-mos ejecutivos de Reino Unido, un 26% de ellos cree que en los próximos cuatro años habrá una gran ola de demandas por responsabilidad. Juicios que no sólo perseguirían los efectos di-rectos de un emisor de GEI; también quedarían bajo escrutinio las medidas que se adopten para adaptar un negocio a los impactos del cambio climático, las prácticas de gobierno corporativo, las decisiones de sus ejecutivos y la información que difunda la compañía entre sus clientes y ac-cionistas, entre otros.

La formación de este panorama ha obligado a que las aseguradoras estén incluyendo el ca-lentamiento global entre las exclusiones de las pólizas de clientes que operan en industrias que tienen alta incidencia en la generación de GEI, tendencia que iría en aumento en la medida que proliferen los juicios. Considerando que este tipo de grandes compañías se están que-dando sin cobertura, las aseguradoras están fo-mentando entre ellas la adopción de medidas que ayuden a que sus operaciones dejen de ser dañinas, por ejemplo a través de programas de seguros que premian la reducción de emisiones o proyectos de eficiencia energética.

8 Contacto• Aon

MÁS SUSTENTABLE,MENOS RIESGO

La sustentabilidad no sólo se ha convertido en un factor determinante en el valor de las compañías, sino también en una efectiva estrategia para detectar y gestionar una serie de riesgos emergentes que demandan un mejor desempeño en materia ambiental y social.

Una sola prueba de la importancia que está adqui-riendo la sustentabilidad en los negocios: En julio último, Walmart anunció la elaboración de un ín-dice de sustentabilidad, destinado a informar a sus clientes si el producto que escogen en una góndola es seguro para la salud, así como su impacto am-biental durante toda la cadena de valor, la energía consumida para su elaboración y su contribución al cambio climático, entre otros. Para conseguirlo, está encuestando a sus 100 mil proveedores en todo el mundo acerca de sus propias políticas de sustentabilidad.

Si bien en el hemisferio norte existen índices simi-lares, a los que se puede acceder por Internet, se

da por hecho que carteles de este tipo en los su-permercados tendrán efecto inmediato en los con-sumidores, pues fomentarán la comparación entre marcas e inhibirán la compra de los productos mal ranqueados. Por extensión, en la medida que estas y otras prácticas se masifiquen, debiera ocurrir lo mismo con los inversionistas, quienes para exponer-se menos al riesgo preferirán compañías que son ca-paces de identificar y mejorar el impacto ambiental y social de sus productos.

“Sin duda, la presión de los consumidores es lo que más ha influido en el cambio de prioridades de las compañías”, afirma Peter Breitstone, CEO de Aon Environmental Services Group. “Esto se debe a que

sustentabilidad

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La sustentabilidad no sólo se ha convertido en un factor determinante en el valor de las compañías, sino también en una efectiva estrategia para detectar y gestionar una serie de riesgos emergentes que demandan un mejor desempeño en materia ambiental y social.

la percepción de los consumidores ha cambiado por completo por efecto de la globalización y la difusión en los medios de temas como el calentamiento glo-bal, los cambios climáticos y la explotación de los recursos naturales”.

Por esto, en su opinión las empresas tienen que considerar que “los consumidores a nivel global no están sólo pidiendo un detalle completo del conte-nido o componentes del producto, sino que ahora muestran interés en saber dónde, cómo y a qué cos-to fue producido”.

La sustentabilidad ha surgido, entonces, como una condición esencial en todo proyecto productivo, tal

como se puede percibir en los cambios que durante la última década han habido en la gestión corporati-va. Lo que aún está poco explorado es la utilización de la sustentabilidad como una herramienta que permite optimizar la gestión del riesgo en una com-pañía, pues un mejoramiento en ese ámbito con-lleva resolver asuntos que escapan del campo que normalmente abarca la gestión de riesgos.

Según Breitstone, en la actualidad predominan las empresas cuya capitalización de mercado ha dejado de depender de sus activos tangibles, sino que se debe principalmente a intangibles como la imagen de marca, la reputación, la innovación o la produc-tividad, entre otros. Se trata de factores difíciles de proteger y, además, muy susceptibles a la presión de los stakeholders. “Esto es un desafío para los risk managers, pues deben expandir su área de análisis y controlar riesgos que antes no eran de su responsabi-lidad y que no están del todo asegurados”, enfatiza.

TAREA COMPLEJA

La implementación de una estrategia de gestión de riesgo basada en la sustentabilidad implica muchas veces desarrollar fórmulas alternativas. Lo complejo es hacerse cargo de identificar los asuntos relevan-tes y, al mismo tiempo, establecer prioridades en el despliegue de recursos muchas veces escasos.

Esta tarea es aún más difícil si se considera que los temas vinculados a la sustentabilidad son influen-ciados por tendencias de largo plazo (demografía, clima o innovación, entre otros), las que se contra-ponen con las inmediatas necesidades productivas y financieras de la organización. Además, hay que considerar la opinión de cada uno de los stakehol-ders, lo cual termina por complicar cualquier deci-sión.

A juicio de Breitstone, el primer paso a seguir es comprender la naturaleza de los riesgos a gestionar, siendo recomendable dividirlos entre los que son imprevistos y aquellos que corresponden a tenden-cias de largo plazo. Los primeros tienden a conver-tirse en crisis que dañan la reputación corporativa, razón por la que es crucial una preparación basada en las comunicaciones. En el caso de los segundos, implica la ejecución de planes que los prevengan, controlen o mitigen, junto con el análisis de las op-ciones de seguros disponibles.

“Mucha gente cree que los seguros no juegan un rol importante en la mitigación de los riesgos sustenta-bles emergentes”, explica Breitstone. “En realidad, tenemos clientes que están accediendo satisfacto-riamente al mercado asegurador, pero con una dife-rencia: Ellos han identificado el impacto de los ries-gos y utilizan el seguro como una vía para una mejor vinculación entre sus responsabilidades sociales y ambientales, así como para proteger sus pérdidas inmediatas”.

Aon Chile organiza seminario ambiental

Dada la trascendencia que está adquiriendo la sustentabilidad en las operaciones empresaria-les, resulta importante contar con una visión experta para ana-lizar el tema desde la perspecti-va de la gestión de los riesgos y el mercado asegurador. Ese es el propósito detrás del seminario especializado que Aon Chile rea-lizará para sus clientes el próxi-mo 5 de mayo en el Hotel W.

“Más allá de la importancia del tema, para nuestros clientes será de suma utilidad apreciar qué están haciendo las empre-sas norteamericanas y europeas para gestionar y transferir sus riesgos en un tema que se ca-racteriza por su oferta limitada de soluciones de seguros”, ex-plica Francisco Recabarren, Ge-rente Comercial Aon Chile.

El seminario contará con expo-siciones de especialistas de Aon como Peter Breitstone, CEO de Aon Environmental Services Group, considerada una de las voces más autorizadas sobre el tema en la industria de se-guros global; y Simon Johnson, director de la misma unidad en el Reino Unido, quien acumula más de 30 años de experiencia en el tema.

La visión de estos expertos esta-rá centrada en la identificación de los riesgos ambientales que deben gestionar las distintas industrias nacionales, desde la minería y la energía hasta la forestal, salmonera y agroin-dustrial, entre otros. Asimismo, expondrán las fórmulas que se han ideado a nivel internacional para reducir la exposición a di-chos riesgos.

Estas ponencias serán comple-mentadas por expertos chilenos en el tema ambiental.

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SEGUROS “VERDES”:POCO PARA ELEGIR

La relevancia del tema medioambiental no ha podido ser asumida en propiedad por el sector asegurador. La dificultad para establecer con precisión los potenciales daños y las responsabilidades ha impedido el desarrollo de productos específicos, lo que limita las opciones disponibles para transferir el riesgo.

planetasustentabilidad

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Las empresas argentinas saben cuán difícil es con-seguir un seguro ambiental, aunque estén obligadas a contratarlo. Si bien desde 2002 la legislación am-biental trasandina exige para cada actividad riesgo-sa con el ecosistema la contratación de un seguro que garantice la recomposición de los daños, duran-te más de seis años fue letra muerta.

No había oferta, porque ninguna aseguradora que-ría arriesgarse ante un marco legal que no fijaba lí-mites a la responsabilidad del asegurado. Recién a fines de 2008 apareció la primera póliza, pero con un bajo monto máximo de indemnización y sin el respaldo de un reaseguro, con lo que quedaban afuera todas las grandes y medianas empresas.

En Chile también es poco lo que hay, pues no existe una póliza diseñada específicamente para cubrir la responsabilidad por daño ambiental. Esto, a pesar de que la Ley General de Medio Ambiente esta-blece la posibilidad de permitir provisoriamente el inicio de un proyecto productivo que haya presen-tado su Estudio de Impacto Ambiental junto con un seguro que cubra el riesgo por daño al medio ambiente.

Así, el principal resguardo a la mano en nuestro país son las pólizas de responsabilidad civil, si bien la extensión de su cobertura se puede ver limitada por diversas exclusiones y cláusulas que limitan su alcance para cubrir el daño ambiental.

En gran parte del resto del mundo el panorama es igual de restringido. A pesar de que en toda indus-tria existe el riesgo de provocar un daño ambiental, las posibilidades de cobertura son limitadas porque el sector asegurador tiene escasas herramientas para valorizar esa amenaza.

COMPLEJIDAD E INCERTIDUMBRE

Los riesgos y siniestros ambientales son muy com-plejos de analizar. Para empezar, el daño puede ser súbito o crónico. Si ocurre esto último, el obstáculo es poder determinar si se produjo o no dentro del tiempo de cobertura. También hay que establecer si fue provocado por una sola empresa o por varias. E incluso puede ocurrir que el daño fuera causado por una mezcla de emisiones que, por separado, ini-cialmente eran inocuas.

Por otra parte, como los daños ambientales tienen efecto colectivo, es complejo determinar cuáles afectados tienen derecho a resarcimiento. Otra complicación es calcular los daños en función de los ámbitos afectados, pues por ejemplo la conta-minación de un lago no sólo genera un efecto eco-nómico (pérdida de valor de los terrenos aledaños o paralización de actividades de industrias vincula-das), sino también afecta aspectos más intangibles como el ecosistema, la cultura de una comunidad y la recreación.

Incluso en Estados Unidos, el país con mayor expe-riencia en el tema, las posibilidades son restringidas. Su sistema está basado en un fondo para la com-pensación de daños, el Super Fund, que es finan-ciado principalmente con impuestos a las industrias. Además, las empresas pueden contratar pólizas di-rectamente a compañías aseguradoras, con el fin de respaldar la cobertura, existiendo la posibilidad de que resguarde al asegurado de demandas por la contaminación histórica preexistente.

Este súper fondo posibilita al gobierno contar con fondos frescos para actuar de inmediato apenas se produzca un daño ambiental, incluso si no se puede identificar al responsable, el cual posterior-mente debe hacerse cargo de pagar por los efec-tos del siniestro. El punto que lo ha puesto en el tapete es el hecho de que la responsabilidad no sólo abarca al daño mismo que cause una compa-ñía, sino también al pasivo ambiental que gene-re. Esto ha sido fuente de amplios gastos para las aseguradoras y puso en riesgo la continuidad de este fondo.

OPCIONES EN DESARROLLO

En la Unión Europea, en cambio, la flamante legis-lación sobre seguros ambientales no es tan amplia. La norma no responsabiliza a las empresas por sus pasivos ambientales ni es procedente para daños causados por una contaminación “difusa”, como la polución atmosférica, pues considera que no es po-sible de abordar técnicamente. Tampoco contempla incluir la contaminación preexistente.

Mientras se espera que durante 2010 los países miembros de la UE discutan sobre la obligatorie-dad de este instrumento, el procedimiento más común en esa región ha sido la formación de pools integrados por compañías de seguros y rease-guros, que suscriben conjuntamente los riesgos ambientales, permitiendo que las primas resulten más accesibles.

En el marco de la Cumbre del Clima de Copenhague, el Banco Mundial dio a conocer la implementación de un seguro de riesgo compartido para catástro-fes en el Caribe. Similar al Super Fund, permitirá a los países de la región acceder inmediatamente a recursos líquidos si son azotados por un huracán o un terremoto. Así, los 18 países que comparten el riesgo se ahorran alrededor de un 40% respecto al pago de primas individuales.

Cualquiera sea el sistema, lo concreto es que aún no han sido suficientemente desarrollados para realizar un estudio que defina cuál es el más re-comendable. Por eso, aunque las materias am-bientales seguirán aumentando su relevancia en la sociedad, el sector asegurador parece condenado a seguir estando algunos pasos más atrás de esa necesidad.

MODELOS QUE GERMINAN

A pesar de las limitaciones, el sec-tor asegurador estadounidense ha aumentado la cantidad de productos y servicios vincula-dos al medio ambiente. Según el Insurance Information Institu-te de ese país, ya existen más de 600 productos que, si bien en su mayoría no abarcan a empresas, pueden ser interesantes ejemplos a seguir.

Una aseguradora creó un se-guro para emergencias huma-nitarias, adquirido por el Pro-grama Mundial de Alimentos (World Food Programme). Éste hace un seguimiento de los pa-trones de lluvias y paga recla-mos antes de que los eventos de sequía ocurran.

En California se ha masificado el seguro automotor basado en el pago por consumo (Pay As You Drive). Mediante un sensor GPS, la aseguradora premia a quien maneja menos de lo establecido en el contrato o que el promedio de conductores.

Para quienes desean asegurar su vivienda, existen ofertas en que se descuenta el monto de la prima mensual para los inmue-bles que cumplen con la exigente certificación LEED, que promueve la eficiencia y la autogeneración energética.

Algunos seguros premian la transformación de un edificio antiguo, por ejemplo, permitien-do el reemplazo de los materiales y equipos por similares que sean “verdes” y eficientes en lo ener-gético.

12 Contacto• Aon

Para apreciar los efectos del calentamiento glo-bal en Chile basta con acercarse al mundo del vino. Si hace dos décadas era impensable plan-tar viñedos al sur del valle del Maule, hoy se han masificado en la zona del Biobío y se están adentrando en la Araucanía e incluso más al sur. En tanto, en algunos valles tradicionales están sufriendo por las altas temperaturas veraniegas, las que obligan a cosechar antes de tiempo a costa de la calidad.

El panorama a futuro apunta a significativas transformaciones. Según el “Estudio de la varia-bilidad climática en Chile para el siglo XXI”, reali-zado en 2006 por el Departamento de Geofísica de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, a fines de esta centu-ria se producirían incrementos en la pluviome-tría en el altiplano y en el Norte Chico, mientras que en los valles de la zona central se prevé una caída de 40%. En las zonas sur y austral se estima una baja similar en los meses veraniegos. Esto incidirá en una significativa disminución de los recursos hídricos, los que resultan vitales para la producción silvoagropecuaria e hidroeléctrica.

En la realidad actual, si bien Chile cuenta con una institucionalidad ambiental y ha suscrito compromisos internacionales, existen deficien-cias a la hora de abordar el cambio climático. Eso es lo que preocupa al ingeniero Edmundo Claro, Director del Centro de Energía y Desarrollo Sus-tentable de la Universidad Diego Portales, quien afirma que “es evidente que están aumentando los requerimientos de los mercados internacio-nales sobre la intensidad carbonífera de los pro-ductos y servicios. Por eso, Chile no debe que-darse rezagado de una exigencia cada vez más presente en los mercados”.

-¿Por qué la huella de carbono puede ser tan relevante para las empresas chilenas?

-Si bien Chile no es un emisor relevante de gases

de efecto invernadero, la huella de carbono de nuestras exportaciones se ve aumentada por el hecho de que somos un país que está distante de los mercados, lo que implica largos trayectos por concepto de transporte. Lo mismo le pasa a Nueva Zelanda y Australia, que están haciendo esfuerzos para reducir el factor huella de carbo-no en sus envíos.

-¿En qué pie están las empresas chilenas?

-Es indudable que, al menos en el discurso, las compañías nacionales están preocupadas por el tema medioambiental. Y mi impresión es que las empresas más importantes están tomando en serio el tema. Lo concreto es que el cambio climático y la reducción del CO2 dejó de ser una opción. Una empresa puede actuar antes o des-pués, bien o mal, por querer ser líder o hacerlo sólo por cumplir, pero ya no puede eludir este factor. No les queda otra que abordar y gestionar el cambio climático.

AHORA ES VOLUNTARIO, PERO…

Según Edmundo Claro, las exigencias de los mer-cados están forzando a las empresas nacionales a considerar medidas para reducir las emisiones de CO2. Como Chile es un país pequeño, cuyo desempeño económico es sustancialmente de-pendiente de las exportaciones, los productores no pueden permanecer ajenos a la demanda por mayor sustentabilidad que se está imponiendo en el hemisferio norte.

-¿Los mercados se están haciendo más exigen-tes respecto a la huella de carbono?

-La tendencia apunta a esa dirección. En general, hoy las exigencias de este tipo se dan principal-mente a nivel de retail y de manera voluntaria por parte de un comprador, como es el caso de Walmart (ver página 8). Sin embargo, se espera que a futuro pase a ser una exigencia, por ley,

para entrar a ciertos mercados. Por ejemplo, en algunos discursos Nicolás Sarkozy ha planteado la posibilidad de restringir el ingreso a Francia de productos que sean altos emisores de carbono.

-¿De qué manera están reaccionando las em-presas chilenas?

-Las grandes empresas tienen muy presente el tema y han dado varios pasos. Han dejado de ver el cuidado ambiental como un costo y tratan de alinear sus objetivos económicos y ambientales. Si se adelantan a la tendencia, van a estar en me-jor pie cuando sea obligatorio el cumplimiento de emisiones de gases de efecto invernadero. Más difícil va a ser para las empresas medianas y pequeñas que quieran exportar sus productos, pues no van a tener los recursos para asumir ese desafío por sí solas. Van a necesitar del apoyo gubernamental

-Cómo incidirá el cambio climático en el sector seguros?

-Es evidente que el cambio en las variables cli-máticas trae nuevos riesgos, no necesariamente peores. El mayor desafío es el aumento del ries-go climatológico, el cual puede ser cubierto por seguros. Lo más interesante es que a través de los seguros se puede ayudar a reducir las emi-siones de carbono. Por ejemplo, en Norteaméri-ca existen pólizas que permiten reducir la prima a pagar si la cantidad de kilómetros recorridos resulta menor a la prevista. Es evidente que el cambio climático es una amenaza de pérdidas para las aseguradoras, razón por la que están interesadas en que sus clientes contaminen me-nos mediante fórmulas que ayuden a reducir su exposición.

“REDUCIR EL CO2 DEJÓ DE SER UNA OPCIÓN”El ingeniero Edmundo Claro, experto ambiental, advierte que las empresas chilenas deberán acostumbrarse a cumplir con normas de emisión de carbono para ingresar a los mercados internacionales.

sustentabilidad

13 Contacto• Aon

800 millones de dólares sumarían las primas pa-gadas por operadores de satélites espaciales en 2009, según International Space Brokers, unidad especializa-da de Aon.

Adjuntar datos

52.000 millones de dólares habrían sumado las pérdidas globales por catástrofes naturales duran-te 2009, según Swiss Re, un quinto menos que el año anterior.

3% de las pérdidas potenciales de un desastre natural en los países en desarrollo están cubiertas por seguros, comparado con el 45% que ostentan los paí-ses desarrollados, según el Banco Mundial.

2.642 millones de dólares deberían pagar las aseguradoras chilenas si se repite el terremoto de 1985, según la Asociación de Aseguradores.

“LA úNICA VENTAJA DE JUGAR CON FUEGO ES QUE UNO APRENDE A NO QUEMARSE”. Oscar Wilde

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Asunto: Cálculos apocalípticos

MODELO PARA UNA HECATOMBE

La película “2012” revivió los temores colectivos sobre el fin del mundo. Incluso la Nasa debió apaciguar la histeria generada por la cinta de ciencia ficción. No obstante, en el mundo real hay modelos de riesgo que se ponen en el caso de verdaderos cataclismos, aunque sin basarse en el calendario maya sino en catástrofes que ya han ocurrido.

Por ejemplo, ¿qué pasaría si un asteroide explota sobre Nueva York? Sólo hay que remon-tarse un siglo para hacerse una idea. En 1908, en Tunguska, Siberia Central, un meteorito de unos 80 metros de diámetro estalló al ingresar a la atmósfera. La explosión liberó entre 10 a 15 megatones de energía, unas mil veces más potente que la bomba atómica de Hi-roshima. Arrasó con un área de dos mil km2 y se apreciaron daños a más de 400 km a la redonda.

Según analistas de la empresa Risk Management Solutions, si ocurriera lo mismo en Man-hattan sería como el apocalipsis: más de 3 millones de muertos, casi 4 millones de heridos y daños económicos que superarían los 2 billones de dólares, de los cuales sólo la mitad estarían asegurados. Es decir, sería 25 veces más oneroso para las aseguradoras que los US$ 40.000 millones pagados por el huracán Katrina.

PELEADOS CON SAN ISIDRO

Definitivamente, hay lugares más seguros que otros respecto a las inclemencias del clima. De eso pueden dar fe los habitantes de Ban-gladesh, Myanmar y Honduras, que fueron los países más afectados por eventos climá-ticos extremos entre 1990 y 2008. Así lo es-tableció el Índice Global de Riesgo Climático, elaborado por Germanwatch, que consideró factores como las muertes y pérdidas causa-das por tormentas, inundaciones u otras crisis climáticas.

Según el informe, en el período se contabili-zaron más de 11 mil eventos de ese tipo, que causaron más de 600 mil víctimas fatales y pér-didas por más de US$ 1,7 billones (a dólares de 2008).

Chile ocupa el lugar 87 en el índice, con una tasa de 0,11 muertes al año por cada 100 mil habitantes y pérdidas anuales por US$ 107 mi-llones, que equivalen al 0,08% del PIB.

Asunto: Países más dañados por el clima

ESTRELLAS CON ALERTA DE VIRUS

Brad Pitt ya no es tan cotizado como antes. Al menos para los cibercriminales que usan su nombre para diseminar vi-rus y aplicaciones malicio-sas en los computadores de los fans que bajan sus imágenes, videos o wall-papers. Según McAfee, el actor dejó de ser la celebridad más peli-grosa en la red y cayó al undécimo lugar. Su trono es ahora ocu-pado por Jessica Biel (en la foto), cono-cida por su rol en El Ilusionista: el 20 por ciento de las búsquedas con su nombre van a parar a sitios que contienen virus, phishing, spyware, adware y spam. Ella es secundada por la cantante Beyoncé y la actriz Jennifer Aniston. Incluso consultar por Barack Obama puede ser peligroso, pues ocupa el lugar 34 en la lista.

Asunto: Celebridades y cibercrimen

Ser bloguero puede ser ries-goso. Así pensó Katie Allison Granju, habitante de Tenne- ssee, la primera persona en contratar una póliza de res-ponsabilidad civil en caso de ser demandada por sus opinio-nes en su blog sobre materni-dad.

“Un periódico no podría pu-blicarse sin un seguro de responsabilidad civil, así que uno debería tomar las mismas precauciones con los blogs”, dijo Granju, quien adquirió la póliza para proteger sus aho-rros y su casa de eventuales perjuicios producidos desde su teclado.

A causa de la proliferación de las redes sociales, entre 2006 y 2008 aumentaron en 70 por cien-to los pleitos civiles en EE.UU. por contenidos de Internet. Y si bien desde 1994 la justicia sólo ha exigido indemnizaciones en 17 casos, en promedio los acu-sados han debido cancelar US$ 2,5 millones por cada uno.

LA NOVEDAD:

SEGURO PARA LOS BLOGS CATÁSTROFES: PÉRDIDAS GLOBALES DE ASEGURADORAS

US$ Miles de Millones

Fenómenos climáticos Sismos o Tsunami Acción humana

* Estimación

2009 22*

2008 52,2

2007 30,3

2006 18,6

2005 118

2004 54,9

2003 22,8

2002 17,9

2001 44,3

2000 15,9

1999 44,7

0 50 100 150

inbox

Sony Pictures Entertainment

14 Contacto• Aon

research

El Mapa de Riesgo Político 2010 de Aon evidencia un empeoramiento a nivel global, debido a que la crisis financiera dejó secuelas en varios gobiernos. Además, por primera vez se midió la exposición a la escasez de agua y alimentos, la cual afecta a varios países desarrollados.

AUNQUE LA CRISIS SE RETIRA,EL MUNDO SIGUE INESTABLE

Chile forma parte de un grupo selec-to. Junto con los países de Europa occidental, Estados Unidos, Canadá, Australia, Nueva Zelanda y Japón, fi-gura nuevamente entre las naciones más estables según el Mapa de Ries-go Político 2010 de Aon. Es decir, no sufre hechos de violencia, huelgas, intervenciones gubernamentales o regulaciones que signifiquen una amenaza para las inversiones.

Distinta es la situación de países del vecindario, como Argentina, Vene-zuela, Honduras, El Salvador y Puer-to Rico, que figuran entre las 18 na-ciones que empeoraron su nivel de riesgo político. Además, la república gobernada por Hugo Chávez ahora Los países en rojo son los más inestables, según la versión 2010 del Mapa de Riesgo Político de Aon.

15 Contacto• Aon

Hay procesos de largo plazo que requieren de un estímulo para acelerar su propagación. Es el caso de la gestión del riesgo em-presarial (Enterprise Risk Management, ERM), el cual gracias a la crisis financiera internacional ha podido consolidarse en la mayoría de las grandes empresas del mundo.

Así lo reveló una encuesta sobre ERM que Aon realizó entre profesionales del área en las principales organizaciones del mundo, con el objetivo de apreciar el nivel de presencia y éxito de este sistema en las organizaciones, así como la forma en que ha sido usado para aprovechar oportunidades y crear valor.

El instrumento permitió detectar que “nunca había sido tan alta la conciencia sobre la necesidad de gestionar y transferir el riesgo”. Esto se reflejó en un mayor grado de avance de las compañías consultadas en la implementación de sus progra-mas de ERM: El 55% dijo que éstos se encontraban “Definidos” u “Operativos”, veinte puntos por encima del anterior estudio, realizado en 2007. Las que se declararon en estado “Avanzado” se duplicaron hasta un 7 por ciento. Al contrario, descendió fuertemente las que afirmaron que sus planes se encontraban en una etapa “Inicial - Débil” o “Básica”.

Los encuestados indicaron que los principales estímulos para invertir en ERM eran mejorar la conducción y transparencia de sus empresas, mediante la adopción de las mejores prácticas, así como perfeccionar el desempeño y la toma de decisiones.

Tras analizar las respuestas, Aon advirtió que las empresas que han implementado programas de ERM de manera exitosa muestran una serie de características comunes:

Alto compromiso del directorio con el ERM. Presencia de un ejecutivo de riesgo en la primera línea eje-

cutiva. Cultura que promueve un total compromiso con el ERM en

toda la organización. Involucramiento de stakeholders en el programa. Transparencia en la comunicación de los riesgos. Integración de la información de riesgo operacional y finan-

ciera dentro de la toma de decisiones.

Uso de métodos con-tables para analizar y demostrar el aporte del ERM en la generación de valor.

Uso de datos internos y externos para identifi-car riesgos emergentes.

Una evolución desde concentrarse en eludir o mitigar los riesgos hacia una gestión que anali-za el riesgo para crear valor.

CRECEN RAÍCES DEL

ERM

Ver reporte completo:

http://insight.aon.com/?elqPURLPage=4889

AUNQUE LA CRISIS SE RETIRA,EL MUNDO SIGUE INESTABLE

tiene el dudoso honor de aparecer en la lista de estados con más alto riesgo político del mundo, junto con Afganistán, Corea del Norte, Irán, Irak, República Democrática del Congo, Somalia, Zimbabwe, Yemen y Sudán.

Por el contrario, Colombia y Sudáfri-ca aparecen entre los 9 países que redujeron su índice de riesgo en re-lación con 2009.

Según Miles Johnstone, director de Aon Crisis Management, “tal como el año anterior, percibimos que el remezón de la crisis financiera glo-bal se sigue manifestando a través de los crecientes niveles de inestabi-lidad política. La crisis pasó de ser un problema económico a un problema político”. Eso fue lo que nítidamente ocurrió en Ghana, Ucrania, Yemen y Letonia, cuyas economías alcan-zaron tal grado de confusión que se

generaron graves levantamientos populares.

“En la medida que se sigan sintien-do las consecuencias de la crisis, en 2010 habrá que mantener especial atención sobre factores como la morosidad de la deuda soberana, la fuga de divisas y la interferencia política, que pueden ser fuente de desestabilización”, afirma Johnstone

TEMOR A LA ESCASEZ DE AGUA Y ALIMENTOS

En sus 17 versiones, el Mapa de Ries-go Político de Aon también ha medi-do variables de riesgo como guerra, terrorismo, disturbios sociales y la vulnerabilidad de la cadena de su-ministro. La versión 2010 incorpora nuevos íconos, vinculados a la inse-guridad en la disponibilidad de agua y alimentos, aspectos ligados al cambio climático.

La incorporación de estos factores se debe a la constatación de que en las últimas dos décadas se ha frena-do la producción agrícola a pesar del sostenible aumento de la población global, lo que incidió en el alza de precios de los alimentos que se vivió hace un par de años y que, según la FAO, está volviendo a presentarse.

Además, la escasez de agua, el au-mento de las temperaturas, las catás-trofes naturales y la mayor demanda por biocombustibles podrían incidir en una menor producción de cacao, maíz, arroz, caña de azúcar y café, entre otros commodities agrícolas. Situación que podría afectar la esta-bilidad social de países productores que, por culpa de la crisis, se vean impedidos de compensar la menor producción con importaciones.

La lista de los 30 países con mayor vulnerabilidad ante la falta de ali-mentos y agua es encabezada por naciones africanas como Mauritania, Cabo Verde y Senegal. Lo curioso es que estados más desarrollados como Holanda, Bélgica, Portugal y Méxi-co también aparecen en éste. En el caso de los dos primeros, se debe a la posibilidad de que el aumento del nivel del mar produzca inundaciones que amenacen el abastecimiento de agua potable.

16 Contacto• Aon

Sin tener el glamour de los premios Oscar o de los Grammy, la industria aseguradora también tiene sus instancias de re-conocimiento anual. Y una de las más prestigiosas es la que realiza la influyente revista Business Insurance, la cual recoge la votación de sus lectores en diversas categorías.

En la versión 2009, la mayoría de los aplausos se los llevó Aon Corporation, que hizo honor a su liderazgo global como provee-dor de servicios de gestión de riesgo y consultoría en recursos humanos al acumular premios en cuatro de quince categorías.

En primer término, Aon Risk Services fue escogi-do como el mejor corredor de seguros retail por cuarto año consecutivo. Con ingresos por más de US$ 7.600 millones en 2008, esta unidad destacó en los úl-timos años por la implementación de su Global Risk Insight Platform (GRIP), solución online que entrega información relevante sobre patrones de riesgo y seguros según indus-tria, localización geográfica y condiciones específicas en cualquier punto del planeta.

Como mejor intermediario de reaseguros fue recono-cido Aon Benfield. Con ingresos anuales por más de US$ 1.500 millones, fue reconocido por su gran experiencia en el sector asegurador y una capacidad de acceso global a los mercados que triplica a su más cercano competidor.

También fueron premiados Aon Global Insurance, como el mejor gestionador de cautivas, y Aon Consulting, como el me-jor asesor de beneficios para empleados. Este último se ha posicionado como líder en asesorías, tales como planes de sa-lud, administración de beneficios, reestructuración de planes de pensiones y compensaciones a empleados.

PREMIOS A LA INNOVACIÓN

Además del reconocimiento de los lectores, al comenzar el año 2010 Aon también fue galardonado por parte de la revis-ta Business Insurance en la primera entrega de los Innovation Awards, que premia a proyectos que destacan por su origina-lidad, creatividad, contribución a la resolución de problemas y resultados.

El Global Risk Insight Platform (GRIP) fue la solución tecno-lógica por la que nuevamente se premió a Aon Risk Services. Además fue distinguida la herramienta FAConnect, de Aon Benfield, que posibilita que los reaseguradores coticen y sus-criban riesgos facultativos en menos de cinco minutos me-diante una avanzada interfaz computacional.

PRESENCIA EN LA AMPLIACIÓN DEL CANAL DE PANAMÁ

Una de las mayores obras de ingeniería de la próxima década será la ampliación del Canal de Panamá, que aumentará en 40% su capacidad de tránsito. La obra, que costará más de 3 mil millones de dólares, fue adjudicada a un consorcio liderado por la española Sacyr Vallehermoso y la italiana Impregilo. Precisamente, la compañía hispana nombró a Aon como su broker para la colocación y gestión del programa de seguros de las obras de diseño y construcción del tercer juego de esclusas, principal componente de las obras de ampliación del Canal.

REPORTE CLIMATOLÓGICO

Pérdidas económicas por US$ 58 mil millones, de las cuales sólo un tercio estaban asegura-das, causaron las catástrofes naturales en el mundo en 2009. Así lo establece el reporte sobre clima global y catástrofes, elaborado por Aon Benfield. El documento de 68 páginas analiza los prin-cipales eventos del año y el comportamiento del clima. Entre otros antecedentes, destaca que la temperatura global ha estado siempre por encima del promedio desde 1977. A la vez, pronostica para 2010 menos lluvia y más calor que lo normal por consecuencia de los fenómenos de El Niño y La Niña.

NUEVA ESTRATEGIA: AON BROKING

Al finalizar 2009, Aon anunció el lanzamiento de Aon Broking, una nueva estrategia de co-rretaje de seguros para sus clientes, diseñada para proporcionarles a nivel global la amplia gama de recursos de intermediación que pro-vee la compañía, lo cual les permite acceder a las mejores soluciones y mercados de segu-ros para cubrir sus necesidades.Para asegurar a los clientes el acceso a la me-jor combinación entre experiencia local y co-nocimiento global, esta nueva aproximación combina tres elementos claves:

Una red interconectada de centros de co-rretaje en los principales mercados de segu-ros.

Especialización global para servir las nece-sidades específicas de cada industria.

Acceso ilimitado a un completo abanico de soluciones de financiamiento de riesgos, in-cluyendo reaseguro cuando sea apropiado.

AON SE REFUERZA EN CONSTRUCCIÓN

En menos de una semana, Aon cerró a fines de 2009 dos importantes operaciones que forta-lecen su presencia en el sector construcción. Primero anunció la compra de Allied North America, la mayor corredora de seguros inde-pendiente especializada en seguros de garantía y construcción en Estados Unidos. Luego, infor-mó la adquisición de la corredora cautiva FCC Global Insurance Services, filial de la española Fomento de Construcciones y Contratas S.A. Gracias a esta transacción, Aon podrá fortale-cer su presencia en Europa, especialmente en construcción y servicios públicos.

Por cuarto año consecutivo, uno de los medios más influyentes

de la industria premió a Aon en cuatro

categorías, incluyendo el reconocimiento

“Mejor Corredor de Seguros” del año 2009.

AON BRILLA EN EL SECTOR ASEGURADOR

planeta •

Aon CenterUbicado en Chicago, es el tercer edificio más alto de EE.UU.