capitulo 1´
Ilustración original de Ardian Syaf para STEAMPUNK BATTLESTAR GALACTICA 1880 nº1 EEUU.
No esperábamos volver a verlos jamás, ni a él ni a sus caballeros cylónicos…
El archiduque Adama de la eternave Galáctica se opuso y exigió a Báltar que nos entregara a sus “hijos”.
Pero Báltar quería más. Como nos había salvado, se creía con derecho a gobernarnos.
Sin embargo, Báltar se marchó, llevándose consigo su ejército y su ordenador Babbage Lu-c-fer.
En cuestión de sectones, los oviones fueron derrotados. Las creaciones de Báltar habían finiquitado la guerra.
…esa arma fueron los cylónicos; unos caballeros mecánicos con corazón de tylio.
No acabó hasta que el genial profesor Báltar desarrollóla que iba a ser el arma definitiva que derrotaría a nuestros enemigos…
…y costó muchas vidas.
El conflicto con la raza oviona hizo mucho daño al imperio colonial, ya queduró muchos yahrens…
…hasta que destruyeron Cáprica.
¡Apolo! ¡Tenemos que hacer algo!
¡Fuego!
¡Destrócele las piernas! ¡Cuanto
más grandes son, más dura será
la caída!
¡Preparen los ganchos!
Starbuck ya no está con
nosotros, Apolo. Soy Zachary.
Lo siento, lo olvidé por un momento. Cambiemos de plan…
¿Has visto qué tamaño tienen
estos trastos? ¡Nece-sitamos un milagro!
Starbuck, tienes que…
Repito… Cáprica… no…
va a caer.
¿Ha oído eso, Apolo? ¡Ha dado la orden de que Cáprica debe sobrevivir a esto! ¿Así es como su
padre logra que usted siga con vida? ¿Ordenándole
que siga vivo?
Aunque ser el príncipe heredero
no me convierte en inmortal, sí me obliga a actuar
como tal.
No obstante, Starbuck también
actuaba así. Y mire cómo acabó.
Almirante Tigh, si es tan amable, ¿podría hacerme
el favor de ponerme en contacto con
nuestros hombres?
Creo que, ahora mismo, una arenga
leS vendría bien a las tropas.
¡Sí! ¡Otro más que cae ante el impe-rio! ¡Muerde
el polvo, hombre de hojalata! Les habla
el archiduque Adama de
la eternave Galáctica. Cáprica no va a caer.
A la… whrrr… orden.
Busquen la… whrrr… sala de control.
Al habla la eternave Atlantia. Entramos en combate
directo con el enemigo.
¡¡¡Aaiieeee!!!
A la… whrrr… orden.
Al habla Apolo… ¡están atacando las eternaves!
Da la sensación de que…
¡Santo Dios, les están lanzando
caballeros cylónicos!
¡Apolo, cuidado! Tiene uno encima…
Tranquilo, Zachary, puedo
verlo.
Tenemos fugas de solio… ¡han anulado los
dispositivos de seguridad! ¡Van
a provocar una fusión!
¡Adama! ¡Se han adueñado del mando de
la eternave! ¡Nos desvían de rumbo! ¡Vamos directos
a Cáprica!
¡Tigh! ¡Envíe este mensaje
a Cáprica! Deben evacuar…
Por los señores de Kóbol. Les han
transformado en una bomba.
¡Por el imperio colonial!
¡Almirante! ¡Los cylónicos
han entrado en la sección de ingenie-
ría! ¡No podemos detenerlos!
Solo se necesitó el núcleo de solio de una sola eternave para destruir Cáprica.
Los cylónicos de Báltarse sacrificaron para conseguir su objetivo.
Eso no le importó a su amo, puesto que siempre podía construir más.
…que han encontrado la nave
del príncipe heredero flotando en la
atmósfera.
¿Archiduque Adama? El
comandante de vuelo dice…
…no todos.
Y, aun así…
Solo sobrevivieron aquellos que no estaban en la super-ficie del planeta.
La duodécima colonia imperial ya no existía.
Pero Cáprica había sido destruida.
Como no hay cadáver, cabe la posibilidad de que Apolo haya
sobrevivido.
La única razón por la que han podido capturarlo es que el profesor Báltar
así lo quisiera.
Pero nadie entiende cómo piensa Báltar.
No se conformará
con destruir Cáprica, sino que desea un premio aún mayor.
Y mi hermano podría ser un trofeo muy
apetecible.
Te equivocas… yo sí. Durante las guerra contra los oviones, yo trabajé en los
diseños babbage con él y el conde Iblis.
Sé cómo piensa.
¡Lady Athena! ¡Pensábamos que
había muerto en Cáprica!
No tienes de qué preo-
cuparte… pues ha muerto.
Los cylónicos arrasaron
la Pegaso poco antes de destruir
la Atlantia.
Padre… ¿dónde está mi
hermano?
Estaba en la Pegaso, visitando a Lord Caín.
Lo lamento, Adama.
No hay ni rastro del cuerpo de Apolo, archiduque. Creemos que salió disparado
cuando el plexicristal se rompió.
He perdido a mi hijo, pero
Cáprica ha perdido mucho
más.
La lucha contra Báltar continuará. Tanto a
él como a sus abominaciones los borraremos del éter…
Te he dicho mil veces que no apruebo esa relación.
En el hangar de la eternave Galáctica.
Aquí ya nadie pronuncia el nombre de Starbuck. No desde
que desertó del imperio colonial.
Lo hemos perdido, Tigh.
No podrá ayudarnos.
¿Y si alguien fuera allí y le recordara que le debe la vida
a Apolo?
Pero ¿y si no estuviera perdido?
¿Y si le dijera que ha estado comerciando
en el mundo fronterizo de la Estrella
Naciente?
¿Boxey? Prepara mi burbunave.
Vamos a visitar a unos
canallas.
Entonces, yo diría que
podríamos tener alguna opor-
tunidad.
¡Ve a un lugar seguro antes de que ataquemos!
¡Esta conversación ha acabado!
¡Acabo de perder mi hogar! ¡Por tanto, tengo cosas mucho más importantes en
las que pensar!
Soy el archiduque de las doce
colonias imperiales…
Apolo ha muerto, Athena. Debemos
seguir con nuestras vidas. De todos modos, tarde o temprano, nos
REuniremos con él.
No… no pienso albergar LA espe-
ranza de que mi hijo haYA sobrevivido, pues sería negar
la realidad.
¡No me puedo creer QUE DIGAS ESO,
padre! ¡Apolo está vivo, lo sé! ¡No puedes
abandonarlo a su suerte!
¿Usted también cree que mi hermano ha muerto,
Tigh? ¿Me ayudará?
En todos los años que llevo comandando estas tropas, solo he conocido a un hombre
capaz de lograr algo así: el teniente de vuelo
Starbuck.
Da igual lo que los demás creamos,
lady Athena… La cuestión es saber quién sería capaz
de dar con él si siguiera vivo.