Esto es una leyenda, es decir, una historia contada como un cuento que ocurrió en los alrededores del Monasterio de Iranzu hace muchos años
Cerca del Monasterio había un camino de piedras que hace miles de años se llamaba calzada romana. Este camino lo utilizaban los romanos cuando no había carreteras para ir de viaje de un sitio a otro
En el Monasterio de Iranzu vivían unos monjes entre los que estaba nuestro protagonista: El Monje Dulanz. ¿Qué hacían en el Monasterio? Sobre todo rezar, trabajar y cultivar las tierras de los alrededores
Este monje un día que nevaba mucho y hacía frío decidió salir del monasterio y ponerse a andar por la calzada romana hacia el Norte. Fue por los Zampeaus, el valle de Donipetri... tendría que hacer algo muy importante para salir con este tiempo
Los monjes del monasterio se preocuparon porque pasaron muchos meses y no sabían nada del Monje Dulanz. Unos pensaban que habría llegado a un pueblo lejano y se habría quedado a vivir allí…
…otros que unos ladrones le habrían robado
Cuando pasó el invierno, llegó la primavera y cambió las nieves por campos verdes llenos de flores y margaritas
Un arriero que llevaba en un carro verduras y patatas, de repente descubrió al monje congelado de frío pero con una cara tranquila porque seguramente habría terminado la misión por la que se marchó
Así, ese sitio donde encontraron al monje se llama ahora Dulanz en honor a este personaje