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2NUTRICIÓN EN LA TERCERA EDAD Alicia Noemí Spaccesi
■ INTRODUCCIÓN
■ DEFINICIÓN
■ PROCESOS DEL ENVEJECIMIENTO Y FACTORES QUE AFECTAN EL ESTADO NUTRICIONAL DEL ANCIANO
■ MALNUTRICIÓN
Malnutrición por exceso
Malnutrición por déficit
■ VALORACIÓN Y EVALUACIÓN NUTRICIONAL
Valoración global subjetiva
Minievaluación nutricional
Evaluación integral (objetiva)
■ ABORDAJE NUTRICIONAL
Requerimientos nutricionales
Necesidades energéticas
Características del plan alimentario
Alimentación básica adaptada
Suplementos nutricionales
■ RESUMEN
■ INTRODUCCIÓN
Los adultos mayores son el grupo etario conmayor diversidad en cuanto a composición y fun-ciones fisiológicas con respecto a los otros grupos.
En la vejez se ponen finalmente de manifiesto los resul-tados de la herencia genética, el medioambiente, elestilo de vida, los hábitos y el sistema sanitario quecada uno debió afrontar en el transcurso de su vida.Numerosas incapacidades observadas en las personasmayores (hipertensión, osteoporosis, diabetes, patolo-gías cardíacas, artritis, artrosis, entre otros) se manifes-tarán en forma más tardía o temprana de acuerdo conestos factores.
En esta etapa ya no es posible hacer referencia ala prevención a largo plazo, pero sí a mantener omejorar el estado general y, por ende, el nutricionalque, junto con otras pautas (correcta atención sani-taria, ambiente), aumentarán la expectativa y la ca-lidad de vida del anciano.
Debido a la gran pluralidad de factores biológi-cos, cronológicos, sanitarios, sociales y económi-
cos, el concepto de edad, y a partir de ella de an-ciano o persona mayor, es todavía un tema pordebatir, pero obviamente “es la persona que ha teni-do la suerte de haber transitado por todas las etapasbiológicas y llegado al tramo final de este hermoso,enigmático pero difícil camino de la vida”.
Cronológicamente, la mayoría de los países de-sarrollados han aceptado la edad de 65 años comodefinición de “persona mayor”. Sin embargo, de-bido al aumento de la esperanza de vida y la hete-rogeneidad del envejecer, se distinguen tres gran-des grupos para clasificar a las personas mayores,como se muestra en el cuadro 2-1.1
■ DEFINICIÓN
¿Qué es el envejecimiento?
“Debe entenderse por envejecimiento las modificacionesmorfológicas, fisiológicas, bioquímicas y psicológicas con-secutivas a la acción del tiempo sobre los seres vivos.”
F. Bouliere
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“El envejecimiento se refiere a los cambios regularesque ocurren en el organismo maduro, genéticamenterepresentativos, que vive bajo condiciones ambientalesrepresentativas y que se presentan con el avance de laedad cronológica.”
Birren y Renner
“El envejecimiento es un proceso natural de todo serviviente, que conlleva pérdidas progresivas y unifor-mes de la salud y el vigor. Donde el paso del tiempo seva ver reflejado en los cambios morfológicos, fisiológi-cos, psíquicos y sociales que el ser humano debeenfrentar y saber aceptar, si ha tenido la gracia depoder llegar.”
Alicia Noemí Spaccesi
■ PROCESOS DEL ENVEJECIMIENTO Y FACTORES QUE AFECTAN EL ESTADO NUTRICIONAL DEL ANCIANO
Son muchas las características fisiológicas aso-ciadas con el proceso de envejecimiento; puededecirse, de un modo general, que varían entre losindividuos, así como en los distintos órganos y sis-temas del cuerpo, los cuales pueden envejecer adistintas velocidades. Pero todos estos cambios físi-cos, unidos también a las enfermedades (a medidaque pasan los años las posibilidades de enfermarse
son mayores), así como los factores sociales y psí-quicos que condicionan a veces hasta la capacidadde llevar a cabo un acto tan natural como “el co-mer”, hacen a estas personas más proclives a pade-cer desnutrición en esta etapa.2
Entre las alteraciones o modificaciones más co-munes que se encuentran a esta edad y que puedencomprometer el estado nutricional del anciano sedestacan:
• Talla: comienza a disminuir progresivamente apartir de los 60 años; se pierde cerca de 1 cm omás por década (por lordosis o cifosis y aplana-miento de las vértebras).
• Peso corporal: aumenta progresivamente, luegose estabiliza y, a partir de los 70 años, comienzaa descender.
• Aumento de la grasa visceral. • Descenso del compartimento muscular: debi-
do a la disminución de proteínas del músculo, lasensibilidad a la insulina y la actividad física. Lapérdida de la masa muscular se relaciona con eldeterioro de la capacidad funcional y menorautonomía. La sarcopenia, que conlleva pérdidade fuerza muscular, es frecuente.
• Disminución del metabolismo basal: conse-cuencia de una menor masa magra (masa mus-cular) y aumento concomitante del tejido adipo-so y conectivo fibroso. Disminuye entre un 10 y20% entre los 30 y los 75 años.
• Disminución de las capacidades funcionalesosteoarticulares: se destacan la osteoporosis yla gravedad del daño, que pueden conducir a lainmovilidad.La masa ósea disminuye por la desmineraliza-ción de los huesos, causada principalmente porlos cambios en el metabolismo óseo, las altera-ciones endocrinas y la absorción deficiente o laingesta inadecuada de calcio.
• Disminución del agua corporal total: se des-taca la del compartimento extracelular, conmenor capacidad de mantener el equilibrio hí-drico y mayor predisposición a la deshidrata-ción.
• Involución o reducción del tamaño de dife-rentes órganos.
• Disminución de la actividad física.• Pérdida parcial de capacidades sensoriales:
olfato, gusto, visión y audición.Fundamentalmente por atrofia de las papilas gus-tativas, la sensibilidad por el gusto salado o dul-ce cambia, lo que lleva al consumo de alimentosfuertemente sazonados o azucarados.3
• Deterioro de la estructura dentaria: la ausen-cia de dientes o las prótesis dentarias inadecua-das obligan a limitar la trituración, con lo que la
Fuente: Fhurman PM, et. al., Home Care for the Elderly. Invited Review. NutrClin Practice. April/May 2009;24(2).
Cuadro 2-1. Clasificación de las personas mayores
En esta población se observanpersonas independientes, quegozan de buena salud, por lo tantoel plan educacional debe estardirigido a la prevención de lasincapacidades futuras
En este rango etario se observainvalidez funcional y dependenciapara las tareas domésticas y detransporte, aumento de la morbi-mortalidad, por lo cual se requierela individualización y un ade-cuado tratamiento sanitario yterapéutico
La fragilidad y la incapacidad sonlos aspectos predominantes
Ancianos “jóvenes” omenores (65-74 años)
Ancianos propiamentedichos (75-84 años)
Ancianos mayores (más 85 años)
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digestión se vuelve más difícil y molesta. Estoinduce al anciano a ser más selectivo en la ali-mentación y, en algunos casos, a rechazarla porlas dificultades acompañantes.
• Modificaciones del sistema neuromuscular dela cavidad bucal: provoca una coordinaciónmuscular deficiente para deglutir.
• Homeostasis en disminución: incluida unacapacidad disminuida para diluir y concentrar laorina, así como para eliminar los residuos cata-bólicos. Existen evidencias sobre la disminuciónde la función renal producto del envejecimiento,unido a que en esta etapa es muy común padecerotras enfermedades que pueden afectar el riñón,como diabetes o hipertensión.
• Alteraciones de las funciones gastrointestina-les:– Disminución de las secreciones digestivas:
con la edad las diferentes glándulas implica-das en la digestión disminuyen su función(glándulas salivales, gástricas, pancreáticas eintestinales). La xerostomía o sequedad de laboca es un problema común en geriatría. La composición de la saliva se altera, se hacemás viscosa y espesa, lo que dificulta la lu-bricación, masticación, degustación e inges-tión.
– Disminución de los procesos motores desde elesófago hasta el intestino delgado (disfagia):las alteraciones motoras, como la amplitudcontráctil, ondas polifásicas en el cuerpo delesófago, relajación incompleta del esfínter ydilatación esofágica, tienen más relación conenfermedades concomitantes (diabetes, tras-tornos neurológicos o consumo de fármacos)que con el envejecimiento.3
Parecería que la prevalencia de reflujo gastro-esofágico se atribuye más al incremento delpeso y a la presencia de hernia hiatal.Es muy común una disminución en la res-puesta a la deglución de los líquidos.En general la disfagia puede deberse a altera-ciones de la deglución o a trastornos de la mo-tilidad esofágica, que son funcionales. Entreellos se observa:4
✓ Menor tono del esfínter esofágico superior.✓ Retraso de la relajación tras la deglución.✓ Incremento en la presión de las contraccio-
nes faríngeas.
– Cambios en la mucosa gástrica y en las glán-dulas digestivas: dan lugar a un descenso dela capacidad funcional digestiva. La menorflexibilidad del fondo gástrico motiva sacie-dad con menor cantidad de comida que en eladulto.
– Estreñimiento: es un grave problema que afec-ta al 50% de esta población y en el que inter-vienen varios factores: disminución de la mo-tilidad intestinal, probablemente debido a laatrofia de la musculatura propulsora y atenua-ción de la mucosidad intestinal (por la reduc-ción de las secreciones). A esto puede sumar-se el consumo insuficiente de fibra y la faltade ejercicio físico regular, y en algunos casos,la inmovilidad absoluta.
– Malabsorción de nutrientes: los más afectadosson el calcio y el hierro. Esto se debe, quizás, ala disminución de las secreciones gástricas; enel tubo digestivo se pierde acidez, lo que per-mite un mayor crecimiento de la flora bacteria-na, que secuestra minerales como el calcio, elhierro y la vitamina B12 y dificulta su absor-ción. También se comprobó que disminuye lamotilidad, la superficie intestinal útil para laabsorción y la capacidad de transportar nutrien-tes desde el intestino hacia los tejidos. Todoesto conlleva al riesgo de padecer anemia, a loque se suma el menor consumo de alimentosproteicos y ricos en hierro, común a esta edad.Se observan cambios en la flora bacterianaintestinal, hecho que influye en la absorciónde algunos nutrientes, así como una importan-te disminución de la barrera defensiva.
– Intolerancia a la lactosa por falta o disminu-ción de lactasa.
• Disminución de las capacidades funcionalesrespiratorias.
• Deterioro cerebral: con reducción del pesoencefálico total y del riego sanguíneo, lo cualrepercute en las propiedades intelectuales, comola memoria y el razonamiento abstracto.
• Desequilibrio metabólico general: con predo-minio del catabolismo frente al anabolismo, alalterarse la dotación hormonal y enzimática.De los cambios metabólicos, el más significativoes la intolerancia a la glucosa. En las personasque han sido diabéticas, esto se traduce en unaalteración en el metabolismo de los hidratos decarbono.2
Se ha comprobado que los niveles de glucemiaaumentan en ayuno 2 mg/dL cada 10 años a par-tir de los 40 y la glucemia posprandial, 8 a 15mg/dL también cada 10 años. Esta alteración seatribuye a una disminución en la producción deinsulina por parte del páncreas. Además, puedenestar implicados factores como los cambios die-téticos y la disminución de la actividad física,por lo que la alteración puede acabar en una dia-betes tipo 2.Las concentraciones plasmáticas de colesterol semodifican con la edad y el sexo: aumentan pro-
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gresivamente entre los 20 y los 50 años, despuésse estabilizan y a partir de los 70 años disminu-yen en forma paulatina.5
• Depresión del sistema inmunitario: se relacio-na con una mayor frecuencia de infecciones,patologías autoinmunes y desarrollo de cáncer.
• Factores sociales y psicológicos: aislamiento,depresión, pobreza.
• Alteraciones emocionales: son frecuentes y lascausas pueden estar relacionadas con:– Jubilaciones precarias con menor poder ad-
quisitivo.– Disminución de las responsabilidades familia-
res y laborales.– Soledad.– Pérdidas de seres queridos.– Presencia de enfermedades que alteran la cali-
dad de vida.– Negación a los cambios físicos producto de la
vejez.
Aunque se mantenga una cierta autonomía, lacapacidad funcional se deteriora, lo que dificultahacer las compras, preparar la comida, desplazarseo trasladarse de un lugar a otro, entre otras varian-tes. Por lo tanto, en estas condiciones los alimentosse compran en función del costo, la sencillez de lapreparación y el tiempo, y no de sus cualidades nu-tricionales. Todos estos factores llevan a la elabo-ración de regímenes monótonos y desequilibrados.
• Polifarmacia: muchos adultos reciben numero-sos medicamentos (cuadro 2-2) a diario (polifar-macia o cóctel medicamentoso).
Un alto porcentaje de las alteraciones y modifica-ciones observadas en esta etapa de la vida estáninvolucradas en los tres tiempos de la nutrición: ali-mentación, metabolismo y excreción (recuadro 2-1).
Por lo tanto, debe considerarse que éste es ungrupo vulnerable a padecer malnutrición.
■ MALNUTRICIÓN
Al hablar de malnutrición se debe pensar en lasdos posibilidades: por exceso o por déficit; si bienpredomina la segunda, no deja de ser menos impor-tante la primera. En ambas posibilidades se debetrabajar en la prevención para asegurar una mejorcalidad de vida.
Malnutrición por exceso: se observa especial-mente en los menos ancianos o en los que estánmás protegidos por la familia y en quienes las alte-raciones o enfermedades que poseen no deterioranel estado nutricional, salvo el que favorece el au-mento del peso.
Se estima que el peso comienza a aumentar a par-tir de los 40 a 50 años y decrece desde los 70 años.7
Con el envejecimiento declinan el requerimien-to basal, la actividad física y el consumo de ali-mentos, pero no en forma proporcional. Por lo ge-neral, este grupo de personas ingieren más de loque requieren, lo que ocasiona un incremento delcomportamiento graso total del organismo y de laadiposidad central, disminución de la masa corpo-ral, mayor predisposición a comorbilidades aso-ciadas con la obesidad y reducción de la actividadfísica.3
Es necesario tratar de mejorar este estado de mal-nutrición pero no por ello someterlos a regímenesrestrictivos. Se debe tener cuenta que:
Comer es muy importante para ellos y es uno de lospocos placeres de la vida que pueden gozar; a su vez,es un grupo vulnerable de padecer malnutrición futurapor déficit.
Malnutrición por déficit: por todo lo enunciadoal comienzo es una población expuesta a padecerdeficiencias nutricionales importantes, sobre todolos de edad más avanzada, que viven solos o enresidencias e instituciones geriátricas u hospitala-rias en los que no se controla el estado nutricional.Se estima que la prevalencia de malnutrición enesta población es de:
10 a 25% en los mayores de 65 años30 a 61% en los hospitalizados17 a 85% en los que viven en asilos8
El diagnóstico precoz y el tratamiento preventivopermitirán disminuir los porcentajes de desnutri-ción. En el ámbito hospitalario es importante tratarla enfermedad de base, pero no descuidar el estadonutricional. Así, se evita posteriormente actuar so-bre un cuadro de mayor complejidad. Recordemosla famosa frase:
“La desnutrición en los pueblos es signo de pobreza; enlos hospitales, de ignorancia”.
Arvid Wretlind
■ VALORACIÓN Y EVALUACIÓN NUTRICIONAL
En los adultos mayores, es muy importante enprimer lugar realizar una valoración del estadonutricional para conocer las características delgrupo y, a partir de los resultados, adecuar el planalimentario según las necesidades nutricionales ylas posibilidades alimentarias y evaluar si requie-
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Adaptado de Capo Palías M. Importancia de la nutrición en personas de edad avanzada- Editorial Novartis; 2002.
Cuadro 2-2. Farmacología y su efecto sobre la nutrición
Grupo farmacológico
Medicación cardiológica
Antihipertensivos
Polivitamínicos
Analgésicos
Hipnóticos y sedantes
Laxantes
Antiácidos
Hormonales
Neurolépticos (calman la excitación o hiperactividad neuromuscular)
Psicoactivos
Antipsicóticos
Antiinflamatorios e inmunosupresores
Antiparkinsonianos
Antidepresivos tricíclicos
Quimioterápicos
Medicamento tipo
Digoxina
Diuréticos
Vitamina K
Antiinflamatorios no esteroides
Diazepam
Aceites minerales
Ranitidina
Insulina
Clorpromazina
Litio
Tioridazina
Corticosteroides
Levodopa-carbidopa
Amitriptilina
Metotrexato
Efecto sobre la nutrición
Anorexia
Deshidratación, anorexia
Interacción con anticoagulantes
Anorexia
Disminución de la ingesta
Malabsorción de vitaminas liposolubles
Hipoclorhidria
Aumento del apetito
Aumento del apetito
Aumento del apetito
Cambio del apetito
Obesidad, intolerancia a la glucosa, pérdidade calcio en los huesos
Boca seca, estreñimiento
Boca seca, dificultad en la deglución
Dificultad en la deglución (náuseas, vómitos,úlceras bucales)
Recuadro 2-1. Tiempos de la nutrición
Alimentación: acto voluntario y consciente que comprende desde el momento en que se elije el alimentohasta que se absorbe por las vellosidades intestinales. Este acto es influenciado por la cultura, la situacióneconómica y social, el estado físico y mental. En las personas de la tercera edad pueden estar alteradosalgunos, disminuyendo su capacidad de selección, adquisición, combinación, preparación e ingestión de ali-mentos.6
Metabolismo: acto involuntario, que comienza a partir del momento en que se absorben los nutrientes hasta elmomento en que el organismo los utiliza como fuente de energía, para construir materiales constitutivos de lascélulas y para depositarlos en calidad de energía.En todo este proceso numerosas alteraciones funcionales y motoras o mecánicas del aparto digestivo que pade-ce el anciano pueden afectar y alterar la correcta utilización de los nutrientes.6
Excreción: comprende la eliminación al exterior de parte de lo utilizado y no utilizado por el cuerpo a travésdel tubo digestivo, los riñones, la piel y los pulmones. Algunas de estas funciones están frecuentemente alteradas. Por ejemplo, el estreñimiento, que en muchos casospuede volverse una obsesión que afecta incluso la ingestión y selección de alimentos.6
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ren suplementar su alimentación o recurrir al so-porte nutricional (fig. 2-1).
Valoración global subjetiva
Esta valoración fue validada en distintas situacionespatológicas con pacientes oncológicos; geriátricos; crí-ticos; portadores de HIV, IRC, hepatopatías o trasplanterenal, y es un buen predictor del tiempo de estadía hos-pitalaria.
La capacidad predictiva de la valoración globalsubjetiva sobre el riesgo nutricional es indepen-diente de los factores no nutricionales y de las co-morbilidades.
Minievaluación nutricional
La minievaluación nutricional (Mini-Nutritional Assess-ment, MNA) es mínimamente invasiva, económica yfácil de efectuar. Consta de 18 ítems con datos dietéti-cos y antropométricos, y una valoración subjetiva delestado de nutrición.
Su versión resumida (MNA-Short form), de seisítems, permite un análisis inicial; en caso de cons-tatar un estado nutricional inadecuado, se comple-ta con una valoración más profunda.
Hay estudios que respaldan el empleo de la MNAcomo método de valoración nutricional de elecciónen el anciano, ya que refleja las alteraciones gene-rales de la composición corporal, los cambios re-cientes de peso, las modificaciones en el patrón deingesta, el grado de autonomía y la autopercepcióndel estado de salud-enfermedad.9-10
Un estudio realizado con una muestra de 2.500personas de 65 y más años que viven en su domici-lio, encontró un 88,8% de ellas con un IMC de 23o más. Utilizando el MNA-SF, el 92,7% teníanbuen estado nutricional. Un 3,8% de los hombres yun 10,6% de las mujeres presentaban una situa-ción de riesgo de desnutrición. El número de per-sonas con buen estado nutricional disminuye con-forme avanza la edad.11
Sin embargo, cuando se empleó la MNA en per-sonas que viven en residencias con un relativo buenestado general de salud, y niveles variables de dis-capacidad o unidades de larga estancia, dondemuchos integrantes padecen enfermedades cróni-cas, altos niveles de discapacidad y frecuentes pro-blemas intercurrentes, se observó que la prevalenciade malnutrición fue del 21 ± 0,5% (rango 5 a 71) yel porcentaje de individuos con riesgo de malnutri-ción alcanzó el 51 ± 0,6%, con un rango de 27 a 70.Este rango amplio se debe a las características dife-rentes de los internados en distintos tipos de unida-des de cuidados crónicos. En estas unidades los por-centajes de desnutrición suelen superar el 50%.12
ALGORITMO DE ACTUACIÓN NUTRICIONAL
Valoración del estado nutricional
Vía oral posible Vía oral imposible
Consejos
ABA
Aparato digestivofuncionante
Aparato digestivono funcionante
Sí No
Seguimiento SUPLEMENTOS
Nutriciónenteral
Nutriciónparenteral
Seguimiento Seguimiento
ABA: Alimentación básica adaptada.
Optimizar dieta oral
Fig. 2-1. Algoritmo de actuación nutricional. Adaptada de Merce Capo Pallás. Importancia de la Nutrición en personas de edadavanzada. México: Novartis Consumer Health S.A., 2002.
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En un reciente estudio que evaluó el estado nu-tricional de 80 pacientes ancianos con fracturas decadera utilizando la MNA, se halló que 8,8% esta-ban desnutridos, 43,7% presentaban una situaciónde riesgo nutricional y 47,5% estaban bien nutri-dos. Según el IMC la prevalencia de la desnutri-ción fue del 5%. La ingesta de energía y micronu-trientes era baja y podría contribuir al desarrollode complicaciones tras la cirugía.13
Por lo tanto, se reafirma la importancia de la in-clusión de la MNA en los pacientes ancianos hos-pitalizados, para poder intervenir nutricionalmentey disminuir así el riesgo posquirúrgico.
Otros métodos que se pueden emplear se mues-tran en el cuadro 2-3.
Evaluación integral (objetiva)
• Evaluación clínica y funcional
Indicadores clínicos: la exploración física del an-ciano no difiere demasiado respecto de la del adul-to joven. Para una evaluación nutricional, interesasobremanera conocer el estado de la boca (encías,dientes, paladar blando, lengua, faringe, mucosas),además de la búsqueda de signos clínicos indicati-vos de algún tipo de deficiencia en la ingesta devitaminas, minerales, proteínas o en el aporte caló-rico.
Pruebas funcionales: se destacan la dinamome-tría (fuerza muscular de los miembros) y la espiro-metría (músculo respiratorio) y diversas pruebasinmunológicas. La dinamometría de la manopuede verse influenciada por factores no relaciona-dos con la fuerza muscular: estado de conciencia,colaboración del paciente, presencia de artritis yotras alteraciones neuromusculares.
• Anamnesis alimentaria
Las encuestas dietéticas proporcionan informa-ción sobre la ingesta de alimentos del anciano ogrupo de ancianos evaluado. Pueden ser métodostanto prospectivos como retrospectivos. Entre losprimeros se encuentra el registro alimentario y,entre los segundos, los más empleados son elrecordatorio de 24 horas y la frecuencia de con-sumo. Los estudios retrospectivos tienen comodesventaja que dependen de la memoria del entre-vistado, por lo cual deberá seleccionarse cuidado-samente el instrumento de evaluación más acordecon las características de la población.
En las personas que viven en residencias geriátri-cas, la detección y el manejo de la malnutricióncaloricoproteica es uno de los desafíos más impor-tantes que enfrentan los profesionales.
Los datos respecto del estado nutricional inclu-yen:
– Desnutrición resultante de la reducción de in-gesta de alimentos.
– Sobrepeso y obesidad, resultante del consumoexcesivo de alimentos.
– Deficiencias selectivas de nutrientes.– Desequilibrios debido a ingesta desproporcio-
nada.
Un aspecto para considerar es la selectividad enlos alimentos. En la práctica diaria se aprecia queel consumo de carnes disminuye, a pesar de adap-tarse al nivel masticatorio. Se observa un menoraporte proteico, punto que no se debe descuidar,principalmente teniendo en cuenta la disminuciónde la masa muscular propia de la edad.
• Evaluación bioquímica
Diversos parámetros bioquímicos se utilizan co-mo marcadores nutricionales. Entre ellos, los máshabituales son las concentraciones plasmáticas deproteínas viscerales, sintetizadas por el hígado,como medición indirecta de la masa proteica cor-poral; las proteínas somáticas como la creatininasérica para determinar la masa muscular, y elnúmero total de linfocitos para evaluar la capaci-dad de respuesta inmunitaria. Los valores de todosellos pueden estar alterados por diversas situacio-nes no nutricionales; es más, en el anciano puedeasociarse la sola presencia de sarcopenia. No obs-tante, su disminución se relaciona tanto con la pre-sencia de desnutrición como con el aumento de lamorbimortalidad. La disponibilidad de marcadoresde la inflamación (proteína C reactiva) permiteinterpretar con más cautela la mayoría de estos
Cuadro 2-3. Otros métodos para la valoración nutricional
Malnutrition UniversalScreening Tool (MUST)y Nutrition RiskScreening (NRS 2002)
Fuente: Carmuega E., Durán P y cols. Nutrición en la tercera edad. AbbottLaboratorios Argentina; 2001.
Diversos grupos de indicadorespueden combinarse para obtenerun diagnóstico más sensible yespecífico. Por ejemplo, el índi-ce de riesgo nutricional geriátri-co (IRNG) es una herramientaque combina parámetros antro-pométricos y bioquímicos.Evalúa riesgos, detecta disfun-ción muscular, e identifica a lospacientes que podrían benefi-ciarse con un soporte nutricio-nal y rehabilitación física.
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parámetros bioquímicos, que se alteran también porla agresión metabólica.
Los parámetros bioquímicos son similares a losdel adulto joven, excepto la velocidad de sedimen-tación eritrocitaria, la presión arterial, la glucemiaposprandial y el perfil de lípidos séricos. Son pa-cientes con alto riesgo de desnutrición los que pre-senten los siguientes parámetros:
Albúmina menor de 3,5 g/L (cuadro 2-4).
Es una proteína fácil de determinar, con una gran capa-cidad para predecir la mortalidad. Los valores bajos,pero dentro de un rango de normalidad, deben eva-luarse en profundidad, ya que sugieren un déficit delestado nutricional y se asocian con un aumento delriesgo de mortalidad. Es también un indicador pocosensible, modificado por el estado de hidratación, quese encuentra disminuido en los pacientes críticos y estáinfluenciado por factores no nutricionales (sepsis,shock y trauma).
Colesterol menor de 180 mg/dL (cuadro 2-5).
Los niveles elevados de colesterol constituyen un indica-dor de riesgo cardiovascular. En los enfermos cardiovas-culares es bastante frecuente encontrar valores de coles-terol total superiores a 200 mg/dL, colesterol HDL menorde 40 mg/dL y triglicéridos superiores a 150 mg/dL.
La hipocolesterolemia (< 160 mg/dL) es muy im-portante como factor de riesgo de mortalidad, en
particular la asociada con el cáncer. En presencia dedesnutrición, sugiere que se debe a causas inflama-torias (desgaste) más que a baja ingesta. Este índicepuede estar afectado por el uso de medicamentoscomo las estatinas. El colesterol total y el colesterolLDL disminuyen en los ancianos desnutridos.
Transferrina
Su principal función es transportar el hierro en el plas-ma. Su síntesis depende del aporte proteico y de la dis-ponibilidad de hierro del organismo.Su utilidad también se encuentra limitada porque sufrealteraciones por diferentes situaciones clínicas (cuadro2-6).14
Sus niveles aumentan en las siguientes situacio-nes: deficiencia de hierro, embarazo, hipoxia, pérdi-da crónica de sangre, estrógenos; mientras que dis-minuyen en: infecciones crónicas, sobredosis de hie-rro, enteropatías, síndrome nefrótico, quemaduras,administración de corticosteroides o testosterona.
Prealbúmina
Véase cuadro 2-7
Proteína transportadora de retinol (cuadro 2-8).
Otros marcadores bioquímicos que actúan comoindicadores en caso de desnutrición son:
Cuadro 2-4. Valores de la albúmina
Valor normal: 3,5 a 5 g/dL
Mayor de 3,5 g/dL: sin déficit
2,8-3,49 g/dL: déficit leve
2,1-2,79 g/dL: déficit moderado
Menor de 2,10 g/dL: déficit grave
Fuente: Carmuega E, Durán P y cols. Nutrición en la tercera edad. AbbottLaboratorios Argentina; 2001.
Cuadro 2-5. Colesterol sérico
Mayor de 180: sin déficit
140-179: déficit leve
100-139: déficit moderado
Menor de 100: déficit grave
Fuente: Carmuega E, Durán P y cols. Nutrición en la tercera edad. AbbottLaboratorios Argentina; 2001.
Cuadro 2-6. Transferrina
Valores normales: 250-180 mg/dL
Mayor de 180 mg/dL: sin déficit
180-150 mg/dL: déficit leve
149-100 mg/dL: déficit moderado
Menor de 100 mg/dL: déficit grave
Carmuega E, Durán P y cols. Nutrición en la tercera edad. Abbott LaboratoriosArgentina; 2001.
Cuadro 2-7. Prealbúmina
Valores normales: 18-28 mg/dL
Mayor de 18 mg/dL: sin déficit
18-15 mg/dL: déficit leve
14,9-10 mg/dL: déficit moderado
Menor de 10 mg/dL: déficit grave
Carmuega E, Durán P y cols. Nutrición en la tercera edad. Abbott LaboratoriosArgentina; 2001.
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Linfocitos totales: es estrecha la relación entreinmunidad y estado nutricional (cuadro 2-9).
Micronutrientes: los más analizados son calcio,hierro, cinc, vitamina D, selenio y vitaminas B6 yB12. Una disminución de los últimos tres indica unpotencial desarrollo de discapacidad. A su vez,87% de los ancianos institucionalizados o reclui-dos presentan déficit de esta vitamina. No obstan-te, es más frecuente hallar déficits subclínicos devitaminas hidrosolubles, no así de vitaminas lipo-solubles, ya que estas se almacenan en el hígado yel tejido adiposo.
• Mediciones y evaluaciones antropométricas
Las más utilizadas son el peso, la talla, el índicede masa corporal (IMC) y los pliegues cutáneos.Son económicas y fáciles de obtener por un eva-luador entrenado. Su uso es más complejo en losancianos con alteraciones anatómicas, frágiles,inmovilizados o con movilidad reducida.
Peso: una pérdida involuntaria mayor o igual al5% en un mes o superior al 10% en 6 meses es unimportante indicador de desnutrición.
De hecho, una pérdida de peso mayor del 4% en unperíodo de un año demostró ser un factor predictivo demortalidad a los 2 años, con una sensibilidad del 75%y una especificidad del 65%.
El porcentaje de desviación del peso habitual esun parámetro más significativo que el peso actualdel paciente, aunque los cambios en el estado dehidratación corporal, como edema o ascitis, puedenimpedir el correcto análisis e interpretación de losresultados.
En un estudio se demostró un aumento de lasupervivencia de aproximadamente el 10% en laspersonas que no habían perdido peso en compara-ción con las que habían perdido 5 kg o más.15
Talla: la población anciana cuenta con una granprevalencia de patologías invalidantes, las cualesincluyen deformidades esqueléticas que dificultanel movimiento.
Por lo tanto, puede recurrirse a fórmulas que permitenestimar la talla a partir de la altura tomada desde eltalón hasta la rodilla, con la pierna flexionada en unángulo de 90° o el transversal de los brazos: con losbrazos extendidos derechos en ángulo recto (de 90º) semide la distancia entre el dedo mayor de una manohasta el mayor de la otra.
La edad tiene poco efecto en esta medición, demodo que se correlaciona con la talla en la edadmadura.
Índice de masa corporal: este indicador tieneuna alta correlación con la adiposidad corporal.Los valores para la población anciana difieren delos utilizados en los adultos jóvenes (cuadro 2-10).
Cuadro 2-8. Proteína transportadora de retinol
Valores normales: 3-6 mg/dL
Mayor de 3 mg/dL: sin déficit
2,9 -2,7 mg/dL: déficit leve
2,6-2,4 mg/dL: déficit moderado
Manor de 2,3 mg/dL: déficit grave
Carmuega E, Durán P y cols. Nutrición en la tercera edad. Abbott LaboratoriosArgentina; 2001.
Cuadro 2-9. Linfocitos totales
Mayor de 1.800: sin déficit
1.799-1.200: déficit leve
1.199-800: déficit moderado
Menor de 800: déficit grave
Carmuega E, Durán P y cols. Nutrición en la tercera edad. Abbott LaboratoriosArgentina; 2001.
Cuadro 2-10. Índice de masa corporal en el anciano
Valoración nutricional
Desnutrición grave
Desnutrición moderada
Desnutrición leve
Peso insuficiente
Normal
Sobrepeso
Obesidad I
Obesidad II
Obesidad III
Obesidad IV (extrema)
Valor IMC
< 16
16-16,9
17-18,4
18,5-22
22-27
27-29,9
30-34,9
35-39,9
40-40,9
≥ 50
Fuente: Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Enteral (SENPE),Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG), Documentos de con-senso: Valoración Nutricional en el Anciano. Recomendaciones prácticas delos expertos en geriatría y nutrición; 2007.
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22 PARTE 1 • Nutrición normal
Un IMC < 22 kg/m2 se ha asociado con una mayor mor-talidad al año y un peor estado funcional en personasmayores que viven en la comunidad.
Pliegue tricipital: la medición de los plieguescutáneos se utiliza para la valoración del tejido adi-poso subcutáneo. El anciano sufre cambios en sucomposición corporal que hacen necesario utilizartablas específicas, ya que la relación entre la grasasubcutánea y la grasa corporal total no es constan-te y disminuye con la edad (cuadro 2-11).
Circunferencia del brazo: el perímetro bra-quial, junto con el pliegue tricipital, sirve para cal-cular la circunferencia muscular del brazo (CMB)(cuadro 2-12).
CMB (cm) = circunferencia del brazo (cm) – (π × pliegue tricipital [mm])
Una circunferencia braquial o pliegue tricipital pordebajo del percentil 10 señala a un paciente con altoriesgo de desnutrición.
Los principales indicadores de desnutrición o deutilidad para el pronóstico nutricional son:
• Pérdida de peso (significativa en el tiempo) < 5%en 1 mes, > 7,5% en 3 meses, > 10% en 6 meseso pérdida involuntaria de 4 a 5 kg en 6 meses.
• IMC < 22.• Albúmina sérica < 3,5 g/dL.• Alteraciones funcionales.• CMB: < percentil 10.• Pliegue tricipital < percentil 10.
■ ABORDAJE NUTRICIONAL
Requerimientos nutricionales
El tema de la nutrición en el anciano comenzó atener mayor repercusión en los últimos años por elaumento del promedio de vida. Sus necesidadesnutricionales están basadas en las del adulto joven,ya que establecer recomendaciones en este grupode población, en el cual hay importantes diferen-cias entre la edad cronológica y la edad biológica,es complicado por diversas razones:
• La heterogeneidad entre las personas en procesode envejecimiento.
• Los cambios fisiológicos asociados con el pro-ceso de envejecimiento (se envejece en ritmosdiferentes, incluso los órganos del mismo cuer-po en tiempos diferentes).
• Los cambios degenerativos relacionados con lapresencia de enfermedades crónicas.17
• La ausencia de estudios, especialmente longitu-dinales (40, 50, 60 años) que permitan acercar-nos con mayor precisión a los requerimientos enla vejez.
Cuadro 2-11. Percentiles del pliegue tricipital en la población anciana
25
9,5
9,5
9
9,5
8,5
18,5
16,5
16
14,5
13,25
50
11,5
12
11,5
12,5
10,75
21
19,5
19
18
16,25
10
8
7,5
7
8
6
16
14
14
12
10,5
5
7,5
7
6
7
5
14
11,5
13
10
10
Varones
65-69
70-74
75-79
80-84
≥ 85
Mujeres
65-69
70-74
75-79
80-84
≥ 85
75
14
14
14
14,5
13
23
23
22
21
18
90
17,25
16,5
17
17
16,5
25,5
26,5
23,5
23
23,5
95
18,5
19
20,5
18,5
18
26,5
26,5
25
24
24,4
Percentil
Fuente: Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Enteral (SENPE), Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG), Documentos de consenso:Valoración Nutricional en el Anciano. Recomendaciones prácticas de los expertos en geriatría y nutrición; 2007.
Grupo de edad
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Nutrición en la tercera edad 23
En realidad, el tratamiento nutricional debe estardirigido al individuo específicamente, no a la po-blación, porque va a depender de parámetros bioló-gicos y funcionales, actividad física, modificacio-nes inducidas por el propio proceso de envejeci-miento y presencia de patologías, si la hubiera.
Necesidades energéticas
Los requerimientos de energía pueden disminuir cercade un tercio entre los 30 y los 80 años, principalmentedebido a la reducción de la actividad física y la dismi-nución del metabolismo basal, como consecuencia deldescenso de la masa libre de grasa total.
Básicamente, la alimentación ideal para una per-sona anciana en buen estado de salud no difiere sig-nificativamente de la de un individuo joven. Pero lafrecuente presencia de diversas alteraciones meta-bólicas o funcionales hace necesario efectuar algu-nas adaptaciones en cuanto al tipo y la forma depreparación de los alimentos.
Las recomendaciones nutricionales tienen limita-ciones que dependen de factores como:
• La historia nutricional y el estado de nutriciónactual.
• La presencia de enfermedades crónicas (recua-dro 2-2).
• La funcionalidad del aparato digestivo.
• Los cambios fisiológicos asociados con el enve-jecimiento.
• El consumo de fármacos (que pueden interveniren la absorción y utilización de nutrientes o mo-dificar el apetito y el sabor).
Es importante considerar el riesgo de obesidad;sin embargo, se recomienda adecuar los requeri-mientos en este grupo de población (con elevadaprevalencia de desnutrición), ya que una ingestareducida tiene un efecto nocivo mayor que un exce-so moderado de peso.
Los mayores de 80 años no pueden regular ade-cuadamente la ingesta y sufren anorexia fisiológicadel anciano; se observa que, en forma inconsciente,comienzan a disminuir el consumo de alimentos.
En los pacientes institucionalizados, que suelenser muy añosos y tener un alto grado de dependen-
Cuadro 2-12. Percentiles del perímetro braquial en la población anciana
25
24,9
25,23
24,4
23,9
20,9
23,2
22,6
22,4
20,9
20,1
50
26,5
26,4
25,7
25,2
23,6
25,5
24,4
24,5
23,5
21,7
10
23,9
23,5
22,7
22,8
20,9
21,4
21,1
20,3
19
18,9
5
22,5
22,7
21,2
20,7
20,2
20,8
19,9
19,3
18,5
18,9
Varones
65-69
70-74
75-79
80-84
≥ 85
Mujeres
65-69
70-74
75-79
80-84
≥ 85
75
28,8
28,3
27,8
27
25,3
27,8
26,2
26,5
25,1
23,9
90
30,6
29,5
30
28,1
26,7
30,3
29
29,2
26,5
25,3
95
32
31
31
28,5
27
31,9
31
20
27,6
Percentil (cm)
Fuente: Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Enteral (SENPE), Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG), Documentos de consenso:Valoración Nutricional en el Anciano. Recomendaciones prácticas de los expertos en geriatría y nutrición; 2007.
Grupo de edad
Recuadro 2-2. Factores que pueden aumentarel gasto energético
– Ineficiencias neuromusculares con una actividadfísica aparentemente disminuida.
– Enfermedades crónicas obstructivas del pulmón.– Mal de Parkinson, en el cual los pacientes pier-
den peso a pesar del elevando consumo energé-tico.
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cia, se recomienda, para los bien nutridos, 30 cal/kg/día y para los debilitados, 35 cal/kg/día (cuadros2-13 y 2-14).
Los estudios prospectivos realizados en paísesdesarrollados y en vías desarrollo demostraronque los que comen más son los que viven más (ex-ceptuando los que llegan a ser obesos), cuando susdietas aportan preferentemente alimentos de ori-gen vegetal y pescados.18
Características del plan alimentario
Para establecer la alimentación de un anciano esimportante ser muy cauteloso con las restriccionesalimentarias (chocolates, dulces, embutidos, etc.).Es adecuado recordar que, en general, tienen mu-chas gratificaciones disminuidas (cuadro 2-15).
Por eso, en el momento de elaborar un plan ali-mentario, la alimentación debe ser (fig. 2-2):
• Variada, para evitar la monotonía.• Equilibrada y armónica, para cubrir todas las ne-
cesidades nutricionales.• Atractiva y agradable al gusto y el olfato, para
que estimule el apetito.• Alimentos completos, de fácil masticación y di-
gestión. • Abundante cantidad de líquidos (2 litros), repar-
tidos en varias tomas (agua, caldo, jugos de fru-tas, gelatinas, infusiones).
• Rica en fibra: cereales integrales, legumbres, fru-tas y hortalizas (según tolerancia).
• Aumentar el consumo de alimentos ricos en cal-cio (leche, yogur y queso, preferentemente des-cremados).
• Evitar el consumo de alimentos ricos en grasas ycolesterol (quesos cremosos, fiambres, embuti-dos, frituras, manteca, crema, productos de pa-nadería).
24 PARTE 1 • Nutrición normal
Cuadro 2-13. Cálculo del valor calórico según métodos y sexo
• Ecuación de FAO-OMS para personas mayores de 60 años
Hombres:13,5 × peso + 487 = metabolismo basal × factor segúnactividadFactor según actividad: ligera 1,4 – moderada 1,6 – pesada 1,9
Mujeres:10,5 × peso + 596 = metabolismo basal × factor segúnactividadFactor según actividad: ligera 1,4 – moderada 1,6 – pesada 1,8
• Método de Harris y BenedictGasto energético en reposo (GER)HombresVCT: 66 + [13,7 × PA (kg)] + [5 × talla (cm)] – [6,8 × edad (años)] + % por actividad
Mujeres:VCT: 655 + [9,6 × PA (kg)] + [1,7 × talla (cm)] – [4,7 × edad (años)] + % por actividad.
% por actividad en ambos sexos: sedentaria 30 – liviana50 – moderada 75 – pesada 100
ENERGÍA: 30 Kcal/KPT PROTEÍNAS: 1 g/KPT - 12 a 14% del VCT (50% AVB)LÍPIDOS: 30% VCT (10 a 15% AGM – 10% AGP – 10% AGS)GLÚCIDOS: 50-60% VCT Azúcares simples 15% VCT– Fibra 25 g (véase tolerancia)AGUA: 30-35 mL/KPT – 11/2 a 2 litros
Fuente: Adaptado de Fhurman PM, et. al., Home Care for the Elderly. InvitedReview. Nutrition in Clinical Practice. April/May 2009.
Cuadro 2-14. Ingesta diaria recomendada de nutrientespara pacientes geriátricos
a Recomendación para las personas > 50 años / mayores.b Recomendación para las personas mayores de 70 años / mayores.Fuente: Adaptado de Fhurman PM, et. al., Home Care for the Elderly. InvitedReview. Nutrition in Clinical Practice. April/May 2009.
Hombres
303,756305
30400161,71,31,29002,4901515
1201.200
111,80,930
7008
4202,34,7551,2
Mujeres
302,746215
30400141,51,11,17002,475151590
1.2008
1,80,920
7008
3201,84,7551,2
Nutrientes
Energía (Kcal/kg)Agua (L)b
Proteína (g)Fibra (g)a
Ácido pantoténico (mg)Biotina (µg)Folato (µg)Niacina (mg)Piridoxina (mg)a
Riboflavina (mg)Tiamina (mg)Vitamina A (µg)Vitamina B12 (µg)Vitamina C (mg)Vitamina D (µg)b
Vitamina E (mg)Vitamina K (µg)Calcio (mg)a
Cinc (mg)Cloruro (g)b
Cobre (mg)Cromo (µg)a
Fósforo (mg)Hierro (µg)a
Magnesio (mg)Manganeso (mg)Potasio (g)Selenio (µg)Sodio (g)b
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Nutrición en la tercera edad 25
• Reducir el consumo de sal y alimentos salados.• Disminuir el consumo de alcohol.• Evitar el exceso de azúcar.• Respetar la opinión del consumidor. Se debe evi-
tar restringir como norma un alimento. En algu-nos casos es más importante disminuir la canti-dad que suprimirlo.
• Pensar más en los sí, “sólo suprimir alimentoscuando es indispensable”.
• A la hora de planear una alimentación antes desuprimir hay que hacer un balance costo-benefi-cio. A veces resulta más positivo para el pacien-te disminuir y no suprimir por completo.
Recordemos: “Una buena dieta no nutre si la per-sona a quien va dirigida no la consume”.4
Si bien se precisan más estudios, la informaciónsugiere que cuando son necesarios, tanto la fortifi-cación de la dieta como los consejos dietéticos, esútil el uso de alimentación básica adaptada y lossuplementos orales.5
En los ancianos se ve que a mayor dificultad paranutrirse, se requiere mayor grado de especializa-ción y menor satisfacción personal (social y orga-noléptica) (fig. 2-3).
Alimentación básica adaptada
Es la alimentación que se adapta para lograr una ade-cuada nutrición, conservar el placer de comer y facilitar
Genua Goena MI. Nutrición y valoración del estado nutricional del anciano, 2001.
Cuadro 2-15. Gratificaciones en la tercera edad
No(quizá perdidas o disminuidas)
TrabajoIngresos económicosPoderMovilidadSexoSentidosExpectativasProyectos
Sí(quizás uno de los mayo-res placeres con los quecuentan)
“Alimentación”
2 porciones
3 a 4porciones
2 a 3porciones
6 a 7porciones
3 a 4porciones
1 a 2porciones
Moderación
ACTIVIDADFÍSICA
Fig. 2-2. Pirámide de la alimentación saludable del anciano. Adaptada de Russell RM y cols. Modified Food Guide Pyramid forPeople over Seventy Years of Age. J Nutr 1999;129:751:3. Véase también Apéndice de Láminas en color.
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26 PARTE 1 • Nutrición normal
la preparación del alimento. Así, se favorece la alimen-tación de los adultos mayores que no pueden alcanzarlas recomendaciones nutricionales, ya que se modificala alimentación en cuanto a texturas, formas de prepa-ración y aporte nutricional. Comprende los siguientesgrupos de productos:
• Alimentos de texturas modificadas de alto valornutricional.
• Modificadores de textura o productos con textu-ra modificada para hidratar en caso de disfagia:gelatinas y espesante.
La posibilidad de modificar y adaptar la consis-tencia a las necesidades del paciente permite:
– Prevenir la malnutrición y la deshidratación. – Disminuir el riesgo de neumonía por aspira-
ción.– Facilitar la administración de medicamentos.
• Enriquecedores de la dieta
Hidratos de carbono, proteínas, fibra y módulosvitamínico-minerales.
Estos módulos se añaden a diferentes preparacio-nes para completar el valor nutricional.5
Suplementos nutricionales
Si la ingesta del adulto mayor resulta insufi-ciente para cubrir las necesidades nutricionales, o
cuando se buscan determinados efectos terapéuti-cos con la alimentación o se precisa un aumentode los aportes nutricionales, se debe complemen-tar la alimentación a fin de lograr estos objetivos.Para ello se puede recurrir a los suplementos nutri-cionales.
Con los suplementos se puede lograr:
• Mejorar el estado nutricional.• Mejorar la respuesta inmunitaria.• Acelerar la cicatrización. • Disminuir el riesgo de úlceras por presión. • Reducir el riesgo de caídas. • Reducir la estadía hospitalaria. • Favorecer una mayor independencia para las ac-
tividades de la vida diaria. • Disminuir la mortalidad.
La elección del suplemento más adecuado debe-rá basarse en:
• Cantidad y tipo de nutrientes que ingiere el indi-viduo teniendo en cuenta el consumo real y susnecesidades nutricionales.
• Composición nutricional del suplemento.
Los suplementos nutricionales pueden tener ono formulación de dieta completa y se suelen tomarcomo complemento (o en paralelo) a la dieta oralhabitual.
Pueden clasificarse en:
• Suplementos con formulación de dieta com-pleta: diseñados para cubrir todos los requeri-mientos nutricionales diarios de una persona.
• Suplementos con formulación de dieta incom-pleta: constituidos por uno o varios nutrientes;no cubren todos los requerimientos diarios, porlo que no deben utilizarse como único aportenutritivo.
• Suplementos en los que predomina un deter-minado tipo de nutriente, fórmula completa ono (recuadro 2-3).
Para obtener un cumplimento óptimo por partedel paciente y mejorar su estado nutricional hayque controlar el consumo del suplemento prescritoy que no sustituya parte de la dieta habitual.
Por ello, es recomendable administrar los suple-mentos:
• Al despertarse por la mañana.• Entre las comidas (preferentemente 60 minutos
antes).
Alimentaciónbásica tradicional
Alimentaciónbásica adaptada (ABA)
Sumplementaciónoral
Nutriciónenteral
Nutriciónparenteral
Grado deespecialización
Dificultadde nutrirse
Satisfacciónsocial y
organoléptica
Tipos de alimentación
+
-
-
+
Fig. 2-3. Tipo de alimentación. Adaptada de Merce CapoPallás. Importancia de la nutrición en personas de edad avanzada.México: Novartis Consumer Health S.A., 2002.
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Nutrición en la tercera edad 27
• En pequeñas tomas (50 mL) a lo largo de día.• Antes de acostarse.
Ante la imposibilidad de aportar la alimentaciónpor vía natural (oral) se debe recurrir o proceder autilizar la vía enteral si hay funcionamiento intesti-nal y, en caso contrario, a la alimentación paren-teral.
En la alimentación enteral, ya sea por sondanasogástrica, si es a corto plazo, o por gastrosto-mía, en caso contrario, para establecer los requeri-mientos se procede igual a lo mencionado.
Para cubrir las necesidades nutricionales existenen el mercado diferentes fórmulas especiales adap-tadas a cada circunstancia (lista para administrar-las), que garantizan el aporte nutritivo necesario yla seguridad higiénica sanitaria. En caso de no po-der acceder a este tipo de alimentación se encuen-tran las moduladas o artesanales.
No se ha demostrado que la alimentación porgastrostomía endoscópica percutánea (GEP),en los pacientes con demencia avanzada, prolon-gue la supervivencia, mejore la nutrición, manten-ga la integridad de la piel, evite la aspiración omejore la calidad de vida. No hay ningún estudioaleatorizado que compare los beneficios de la GEPcon otro tipo de alimentación. Para llegar a unadecisión, es necesario evaluar la relación riesgo-beneficio, y tener en cuenta los puntos de vista
culturales y religiosos. La GEP debe considerarse,tal vez, una medida temporal en los ancianos des-nutridos que pueden beneficiarse con ella desde elpunto de vista de la calidad de vida y la funciónfísica.19
■ RESUMEN
• En esta población, en la cual predominan las pérdidas dediferentes categorías (sociales, físicas, emocionales), sedebe enfocar el tratamiento individualizado y brindaruna alimentación acorde con las necesidades nutriciona-les y las satisfacciones personales.
• El buen estado nutricional de las personas mayores,logrado con una alimentación agradable a su paladar,mejora la calidad de vida, promueve la salud, disminuyela evolución de la enfermedad y contribuye para queesta suerte de llegar al tramo final del camino de la vida,se transite con más dignidad.
• Desde tal perspectiva, identificar los condicionantes ali-mentarios y desarrollar estrategias para preservar elestado nutricional constituyen un paso importante en elobjetivo de mejorar la calidad de vida en esta etapa.
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16. Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Enteral (SENPE),Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG).
Recuadro 2-3. Suplementos nutricionales enlos que predomina: tipo de nutriente, fórmu-las completas o no
Suplementos proteicos: aportan cantidades eleva-das de proteínas de alto valor nutricional. Se puedeindicar cuando la ingesta proteica es inferior a lasrecomendaciones diarias de proteína. El pacienteevita o rechaza fundamentalmente el grupo de car-nes rojas, pescados o huevos o cuando la cifra dealbúmina es < 3,5 g/dL.
Suplementos energéticos: contienen un elevadoaporte calórico en un volumen reducido. Son ricosen hidratos de carbono y lípidos, pero también con-tienen proteínas, vitaminas y minerales, aunque enmenor proporción.
Suplementos proteicoenergéticos: aportan calorías,proteínas y, además, vitaminas y minerales.
Suplementos especiales: aportan determinados nu-trientes en situaciones agudas o crónicas específi-cas, como estrés metabólico, diabetes, estreñimien-to, HIV, insuficiencia renal.16
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28 PARTE 1 • Nutrición normal
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