ebook - stuart lichtman - bonus especial #9 - el proceso del compañero perfecto

8/6/2019 Ebook - Stuart Lichtman - Bonus Especial #9 - El Proceso del compaero Perfecto

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Bonus Especial #9

EL PROCESO DELCOMPAERO PERFECTO

CMO ENCONTRAR A SU COMPAERO SENTIMENTAL, SOCIO OCLIENTE PERFECTO

FCIL Y RPIDAMENTE

por

Stuart A. Lichtman

Traducido porAldo Lagrutta


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El Proceso del Compaero Perfecto

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Copyright 2002 y Copyright de la Traduccin Espaola 2007 por Stuart Lichtman.

TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS http:// www.muchodinerorapido.com

NOTA


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Los nombres Cybernetic Transposition Basic Achievement Three-Stepy CyberneticTransposition Super Achievement Three-Stepson propiedad de Stuart Lichtman y estn bajoproteccin y registro provisorio . En consecuencia, no pueden ser utilizados sin su autorizacinescrita.


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Introduccin

Im going to show you the most powerful process for finding the person you want that Ive everseen.

Est usted ya harto de tener relaciones que no funcionan?

Est cansado de trabajar con gente que sencillamente no es adecuada, que estn constantementedecepcionndole?

Suspira por su prncipe o princesa azul?

Le gustara tener un socio o empleado con el que conecte inmediatamente y que tenga todas las

habilidades que usted necesita?Le gustara tener todo esto en este momento?

Le gustara encontrar su pareja perfecta? O su socio perfecto? O su empleado perfecto?

Si es as, ha venido usted al sitio adecuado.

Como usted se dar cuenta al leer mi historia real donde cuento cmo utilic este proceso paraencontrar mi pareja perfecta, estamos hablando de algo que puede dar resultados increblementefuertes.

As que, comencemos.

Cmo funciona este proceso? Por qu funciona?

Se ha dado usted cuenta de que a veces conoce a gente que no haba visto nunca antes pero quele resulta familiar? La mayora de la gente s. Y desde luego a m me ha pasado muchas veces.Casi todas las personas con las que he tenido buenas relaciones personales y laborales meprovocaron esa sensacin la primera vez que las vi.

Mi teora (para la que no tengo absolutamente ninguna prueba concreta, pero s un montn de

pruebas anecdticas) es que stas son las personas con las que he tenido buenas relaciones envidas anteriores. Por supuesto que para aceptar mi teora tendr usted que aceptar la existencia devidas anteriores.

Afortunadamente, que las acepte usted o no, no tiene efecto alguno en la eficacia que tendr elproceso del Compaero Perfecto para usted. Las teoras son teoras. Los resultados sonresultados. Prefiero con mucho estos ltimos.


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En cualquier caso, mi teora es que dentro de cada uno de nosotros tenemos una imagen de lapersona perfecta que se supone que tenemos que encontrar en esta vida. Cuando vemos algn

aspecto de esa imagen interna de la persona perfecta reflejado en alguien que acabamos deconocer, inicialmente reaccionamos como si hubiramos conocido a la persona de nuestraimagen interna. Y, como somos humanos, inconscientemente generalizamos a partir de unacaracterstica que se ajusta a nuestra imagen interna para asumir que todos los dems aspectos deesa persona tambin se ajustan a ella.

Por supuesto que esto ocurre muy raras veces, pero casi siempre nos encontramos intentandocambiar a esa persona para que sea la persona perfecta de nuestra imagen interna, sobre todo enlas relaciones sentimentales.

Esto no jams funciona. Pero casi todo el mundo ha tenido la experiencia de intentar cambiar aalguien para que sea la persona que adecuada para ella, o de que una de sus parejas hayaintentado cambiarle a l/ella en la misma forma.

Bueno, partiendo de la idea de que mi teora es correcta, he desarrollado un proceso para utilizarlos reflejos que vemos en las personas que provocan reacciones positivas fuertes. El procesoutiliza esos reflejos para elaborar unaLista de Deseos que describa a la persona perfecta cuyoreflejo hemos visto. Una vez hecho esto, el proceso utiliza el resto del proceso de los Tres Pasosde la Transposicin Ciberntica para encontrar la persona real que representa nuestra imageninterna.

Funciona? Desde luego que s.

La primera prueba la hice conmigo mismo (como suele pasar) y funcion de maravilla. Hedescrito mi experiencia en la historia real que presento ms adelante en este libro electrnico.

Le funciona a otra gente? Definitivamente s.

De las muchas personas a las que he enseado este proceso y que lo han utilizado, el porcentajeque tuvo xito con este proceso fue el mismo que con todos los dems objetivos de los TresPasos de la Transposicin Ciberntica.

S, el proceso del Compaero Perfecto funciona, desde luego. Por ejemplo:

Carina era una abogada extremadamente inteligente y vidente, que era amiga de mipareja perfecta sa, a la que conocer usted ms adelante en este libro con la historiade mis aventuras con el proceso del Compaero Perfecto.

Al principio Carina tena un patrn inconsciente de comportamiento autodestuctivo. Leatraan los hombres guapos que vestan y bailaban bien, pero que se sentan tanintimidados por la inteligencia y las capacidades psquicas de Carina que terminabanpor volverse hostiles y ofesivos. Carina sufra terriblemente por esto.


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sa, que conoca el problema, me pidi que ayudara a Carina y le enseara el proceso

del Compaero Perfecto, cosa que hice. Aproximadamente una semana despus, Cariname llam, entusiasmada. Lo he encontrado, me dijo y nos invit a cenar paracontarnos sus experiencias.

Fue increble, nos dijo. Conozco a Anders desde hace aos pero nunca le habaprestado mucha atencin. Pensaba que era un buen amigo, pero como pareja? Nihablar.

Pero el da siguiente a establecer el objetivo del Compaero Perfecto me pidi quesaliera con l. Stuart, me acord de lo que habas dicho sobre que antes de decidir sialguien podra encajar, tena que ver cmo cumpla la lista de los elementos clave. Asque lo hice. Sorpresivamente, Anders tena unas notas altsimas en todos los aspectos delos que saba lo bastante para poder evaluarlo. As que lo llam y le dije que s.

Me llev a cenar. Fue mgico. Conoc cosas de l que jams hubiera imaginado. Esinteligente, gracioso, muy atento, creativo, muy carioso y baila fenomenal, puedescreer? Adems tiene grandes aspiraciones, y es un emprendedor. Va a poner su propiodespacho de abogados y ya me ha pedido que trabaje con l.

Bueno, a partir de entonces las cosas se pusieron mejor en su relacin. Pusieron eldespacho, y tuvo mucho xito. Se hicieron cada vez ms ntimos y al final se acabaroncasando (fuimos a la boda: ella estaba preciosa y l muy guapo). Lo ltimo que s deellos es que tenan dos hijos maravillosos y una casa fantstica que haban construido

ellos mismos, y seguan estando muy enamorados.

Slo funciona para encontrar una pareja romntica?

No, en lo absoluto. Funciona para todo tipo de compaeros, socios y empleados perfectos. Porejemplo:

Mnica era coordinadora de un equipo y acaba de conseguir un ascenso adirectora de un grupo de treinta personas dedicado al desarrollo tcnico y desoftware en una gran empresa de telecomunicaciones sueca, Ericsson. Le haban

pedido que multiplicara el tamao de su departamento por dos, aunque estabanatravesando un periodo crtico en el que faltaba personal cualificado.

As que el primer objetivo de Mnica con las tcnicas de la TransposicinCiberntica se centr en encontrar un segundo que (entre otras cosas) estuvieraperfectamente cmodo conmigo y yo con l y que tuviera un estilo y visininterna similar a los mos y tanto don de gentesque una semana despus deempezar, consiga inmediatamente una alza en la moral del departamento. (Las


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citas vienen directamente de la traduccin del sueco que hizo Mnica de susobjetivos.) Utiliz el proceso del Compaero Perfecto para elaborar su Lista de

Deseos y establecer el objetivo, al que dio un plazo de cuatro semanas.

Con los retrasos burocrticos de Ericsson, hicieron falta tres semanas para ponerel anuncio. Sin embargo, la persona perfecta apareci el ltimo da de lacuarta semana. Empez a trabajar al lunes siguiente y super todos los aspectosdel Objetivo. (Tenga en cuenta que en Suecia normalmente pasan dos o tresmeses desde que se contrata a nuevo directivo hasta que ste empieza a trabajar.)Mnica sigui utilizando la tcnica del Compaero Perfecto para encontrarrpidamente y con gran xito las dems personas claves y en poco tiempoconsigui que su departamento tuviera el tamao que le haban requerido.

Por cierto, yo he utilizado el proceso del Compaero Perfecto para contratar a mi equipo paraeste proyecto de libros electrnicos. Muy rpidamente, consegu reunir un equipo increblementecreativo, eficaz, motivado y leal.

Cmo funciona el proceso del Compaero Perfecto?

Funciona exactamente igual que los Tres Pasos de la Transposicin Ciberntica, con variasdiferencias importantes que se describen ms abajo:

1. Primero, identifique todas las personas que haya conocido en cualquier contexto y quecumplan los siguientes criterios:

Tienen al menos una caracterstica que le gustara ver en su compaero perfecto.

Esa caracterstica o esas caractersticas crearon una atraccin extremadamente fuertehacia esa persona, incluso si el resto de sus caractersticas no le atrajeron o incluso lerepelieron.

Obviamente, en el caso de relaciones no sentimentales, no me estoy refiriendo a unaatraccin sentimental. Por ejemplo, en el caso de las relaciones laborales, me refiero alas caractersticas que hacen que quiera usted trabajar y, quizs, relacionarse con esapersona.

Si ha visto un personaje en una pelcula que tuviera caractersticas que son las que ustedbusca, incluya ese ejemplo.

Haga una lista de todas estas personas y la(s) caracterstica(s) que le atraiga(n) confuerza. No se traicione a s mismo. Cuando ya haya hecho la lista, lala y concntrese ensu Punto de Anclaje Interior, pidiendo a su inconsciente que le d ms ejemplos quedebieran estar en la lista, y que le diga si alguno de los que estn en la lista no es


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adecuado, y que lo haga de la forma que sea para su mximo beneficio y el de todos losinvolucrados.

2. Con el formulario de lasMetahistorias, cree unaLista de deseos basada en la primera.

Limite lasMetahistorias a una sola caracterstica atractiva. Si esa caracterstica estpresente en ms de una persona de la lista, elija la persona por cuya caractersticasienta usted la mayor atraccin.

Si una sola persona presenta ms de una caracterstica atractiva, intente encontrarrecuerdos que representen cada una de las caractersticas por separado. Si no losencuentra, puede usted utilizar el mismo recuerdo para todas las caractersticas.

El ttulo de lasMetahistorias deber ser la caracterstica atractiva en la que se estusted centrando. El recuerdo asociado deber ser de la persona que haya usted elegidopresentando esa caracterstica.

Si ese recuerdo no es un 10 verdaderoen el contexto del Compaero Perfecto queest usted buscando, cree una alternativa que sea un 10 verdadero. Puede que muchasveces tenga usted un recuerdo en un contexto completamente diferente. Por ejemplo,si est usted buscando su pareja perfecta, puede que quiera incluir una caractersticaprocedente de un compaero de trabajo, hermano, familiar o hijo. Cuando elabore susalternativas, ponga simplemente la caracterstica en un contexto adecuado utilizandoel enfoque que he descrito en el ejercicio de visualizacin que empieza en la pgina82 de Cmo obtener mucho dinero para cualquier cosa que usted desee -Rpidamente!

3. Con el formulario Proceso de objetivos, integre los elementos de suLista de Deseos enun objetivo que tenga el formato adecuado. Tenga especial cuidado de cooperar con suinconsciente cuando establezca el plazo. No intente utilizar un plazo ms corto que el quehaya sugerido su inconsciente.

Su objetivo deber centrarse explcitamente en encontrar su compaero perfecto en unplazo de tiempo definido. Por ejemplo:

En un plazo de 6 semanas a partir del 20 de agosto de 1981, habr encontrado y

establecido una relacin estrecha con una mujer que tenga las siguientescaractersticas: Tendr una cintura pequea, pelo oscuro y largo, una figuraagradable y no medir ms de 1,65 m. Tendr unos ojos preciosos y cariosos,una sonrisa fantstica y ser muy entusiasta. Ser extremadamente lista einteligente, ambiciosa y con don de gentes, poeta y conectar conmigoinmediatamente y yo con ella... (en este ejemplo no he incluido muchas de lascaractersticas atractivas que aparecan en el objetivo real). Esto ocurrir deforma que sea para mi mximo beneficio, para ella y para todos los implicados.


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4. Si, cuando haya usted creado y dado prioridad a su objetivo inconsciente con el Proceso

de Blancos Inconscientes, tiene usted dudas o surgen otros bloqueos, utilice primero elProceso de Aclaracin Avanzado para dirigir esa energa de forma creativa hacia laconsecucin de su objetivo. Si el sentimiento de bloqueo permanece (y ponga muchocuidado en comprobarlos todos),Reenmarque sus Memorias para resolverloscompletamente.

Los bloqueos que pueden surgir durante el proceso del Compaero Perfecto pueden sermuy sutiles, muy familiares. As que cuando los est buscando, utilice su punto dereferencia 10 Verdadero para determinar si lo que experimenta cuando se centra en suImagen Final de xito y despus de haber terminado el proceso de Viajando en el Tiempocontiene algn bloqueo. Si es as, haga el proceso de dos pasos descrito en el prrafoanterior.

5. Asegrese de que completa el proceso de priorizacin de su objetivo inconsciente,incluido el hecho de escribir la Afirmacin 25 veces, o ms si su inconsciente le dice quelo haga. No tiene porqu escribir todas las repeticiones de una sentada. Pregntele a suinconsciente si puede repartir el trabajo y, si es as, en cunto tiempo. Cuando hagapreguntas a su inconsciente, utilice el mismo proceso con el que estableci el plazo detiempo para su objetivo.

6. Practique asegurndose de que sigue las instrucciones del Captulo once de CmoObtener Mucho Dinero Para Cualquier Cosa que Usted Desee - Rpidamente! Seaespecialmente meticuloso en la bsqueda de bloqueos cuando apunte sus avances en

alcanzar cada uno de los elementos claves.

Eso es todo. Y, por supuesto, cada vez que conozca a alguien que pudiera ser su CompaeroPerfecto, comprelo con su lista de elementos clave, un resumen que le sugiero que lleve siemprecon usted. De hecho, cuando establezco un objetivo de Compaero Perfecto siempre llevo variascopias de los elementos clave y cuando conozco a un posible candidato, uso una copia para ponersu nombre (y cualquier otra informacin relevante que me ayude a ponerme en contacto con l siquiero) y las puntuaciones que obtiene en cada elemento clave.

Cmo invent el Proceso del Compaero Perfecto y mi primera experiencia

prctica con l.Era el 19 de agosto de 1981 y una luz intensa llenaba cada rincn de mi saln, como si se hubierasalido de sus lmites fsicos, acariciando los grandes cuadros con su calidez dorada y ahogando elsonido del trfico y los comercios de Union Street. Yo estaba sentado sin moverme, oliendo elocano y viendo como la niebla se iba comiendo silenciosamente el puente Golden Gate.Pronto, invadira las calles y pasara sin ruido por mis ventanas del sexto piso con pies de tigre,o se dice pies de gato? (Qu poeta dijo esto? Linda lo sabra.) Pronto, la ciudad estara


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amortajada en el misterio fro y nublado de las viejas pelculas de Bogart. Y me traera los mudosolores y sonidos de la ciudad junto con los recuerdos de Linda. Aunque ya haban pasado seis

meses, segua echndola de menos, y senta que la soledad me rodeaba igual que la niebla.

Linda era una guapsima pelirroja poeta, joven y muy sexy, que estaba buscando su caminocuando la traje a San Francisco. Tres meses despus de empezar nuestra relacin, dej su trabajoen el Congreso de los EE.UU., en Washington DC y se puso a trabajar en la empresa de capitalde riesgo de Silicon Valley de un amigo mo que entenda los asuntos del corazn. Eso mefacilit mucho las cosas.

Estuvimos viviendo juntos a tiempo parcial por tres aos. Era a tiempo completo mientras yoestaba en San Francisco pero mis viajes constantes por todos los Estados Unidos y Europa paralas empresas que diriga reducan el tiempo que pasbamos viviendo juntos a 10 das al mes.

Una da Linda se fue de compras y nunca regres. Me llam esa noche para decirme que se habaido a la pennsula de Palo Alto a vivir con Buzz. Buzz? Me dej por Buzz? Romp conamargura un par de cosas suyas y despus empaque el resto y se las envi. Finalmente comprendque su partida reflejaba el dolor que me haba estado ocultando todos los aos que habamosestado juntos.

Ella siempre haba sabido de Suzanne y, despus, de Pat. Yo siempre le haba sido honesto - porlo menos eso era lo que me deca a m mismo - pero entonces comprend que las relacionestetradricas son malas para todos. As llamo yo a una situacin en la que yo estoy arriba y las tresforman un tringulo debajo. O al menos haba credo que estaba arriba, pero ahora me estabadando cuenta del coste que tiene utilizar as a la gente, comprarlos con cario, afecto y dinero.

S, s, muchsimo dinero. En aquel entonces era fcil comprar a las mujeres con dinero. Bastabacon llevarlas a St. Laurent, gastarse unos cinco mil dlares en ellas y quedaban enganchadas.

Yo no haba decidido que iba a tener tres relaciones profundas, una en San Francisco, otra enWashington DC y la tercera en Londres. Pero como divida mi tiempo entre tres casas en esostres lugares, adems de Silicon Valley, Europa occidental, de Francia a Alemania, con estanciasen Maine, Nueva York, Chicago y Anchorage dirigiendo tres empresas, me quedaba un montnde tiempo vaco que intentaba llenar con gente cariosa. Y la gente cariosa que conoca erancasi siempre mujeres.

Pero el verdadero motivo era que cada una de mis tres parejas a tiempo parcial slo tena unaparte de lo que yo estaba buscando. De esta forma, me deca, no tena que intentar cambiar aninguna en alguien que no era.

Usted ya sabe que Linda era guapa, sexy, potica y creativa. Tambin dependa demasiado de my me adoraba. Suzanne era dulce y fuerte, una chica muy inteligente y ligeramente de pueblode la zona sudoeste de Virginia, cariosa, aficionada al desarrollo personal y mi gua en temasespirituales. Tambin era muy hbil para dirigir mi empresa consultora en Washington. Pat eratipo relaciones pblicas, con mucho don de gentes, y llevaba de maravilla la imagen pblica de


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una gran firma de modas en Londres. Era diseadora comercial, decoradora de interiores, maduray ambiciosa, y estaba a punto de dejar la seguridad de su trabajo y su precioso apartamento de

Hampstead para realizar su viejo sueo de irse a vivir y trabajar en el sur de Francia, aunque nohablaba una palabra de Francs. Una mujer valiente. Yo le haba ayudado a desarrollar el valorpara irse.

Ahora me doy cuenta de que era fcil identificar qu cosas me haban atrado de cada una deellas, y tambin de mi ex-esposa y mis dems relaciones. Me gustaba recordar todas esascaractersticas atractivas. As que me qued ah sentado, tomando el sol de la tarde, pensando enla riqueza de todas esas personas fantsticas que me haban dado tanto.

Y de pronto, me di cuenta. Salt del sof, entusiasmado. Claro! Cmo haba tardado tanto enver algo tan obvio? Estas personas eran piezas de un espejo roto que reflejaba algo para m. Lonico que tena que hacer era volver a montar el espejo. Y despus podra encontrar a miprincesa encantada. O por lo menos a mi pareja perfecta.

Como llevaba 15 aos estudiando el cerebro y la mente humana, y llevando este conocimiento ala prctica con formaciones y dispositivos de inteligencia artificial, saba que slo somos capacesde ver, or y sentir versiones de lo que ya est almacenado en nuestros enormes bancos dememoria. As me di cuenta de que lo que me haba atrado de cada relaciones era slo una facetade un modelo inconsciente preexistente de LA persona que haba estado buscando.

Tena su lgica. Por supuesto! Por eso al principio haba intentado cambiar a mis parejas. Sentaintuitivamente que fallaba algo, pero que se podra arreglar si cambiaran esto o lo otro. Algunaslo intentaron sin conseguirlo y otras me mandaron al infierno. sas eran las listas, las que se

agarraban a su integridad pasara lo que pasara. En ese momento decid seguir su consejo, almenos en parte. Hara un viaje, pero no al infierno, sino a encontrar a mi pareja perfecta, sinimportar en que parte del mundo estuviera.

Ya era experto en crear y hacer cosas aparentemente imposibles. Todava no haba llegado alpunto en el que poda ensear fcilmente a la gente cmo hacerlo, pero intuitivamente el procesoestaba claro. Crear una experiencia imaginaria muy potente, clara y coherente desde muchasperspectivas diferentes, rodearla de energa y despus abrir el camino cambiando cosas en mimente inconsciente.

Empec a acordarme de cosas. Aquella vez en 1969, justo despus de mi quiebra, cuandonecesitaba 2,5 millones de dlares para empezar un negocio y los consegu por telfono,hablando con alguien que no saba nada sobre m cuando empezamos a hablar. La carta, de unasola pgina, que le haba enviado a Margaret Thatcher pidindole un contrato que me dio dossemanas ms tarde, sin siquiera conocerme. Los clientes que haban aparecido a ofrecerme uncuarto o medio milln de dlares para dirigir sus empresas a tiempo parcial.

Empezaron a llegarme recuerdos felices de xitos ya olvidados y qued completamente segurode que poda encontrar a mi pareja perfecta centrndome en el modelo preexistente de ella que


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est oculto en mi inconsciente y utilizando mis tcnicas normales de xito para encontrar aalguien que se ajustara a ese modelo.

Bueno, qu toca ahora, pensar o hacer?, me pregunt. Decid por hacer. As que revismentalmente cada una de mis relaciones pasadas para encontrar qu era lo que me haba atradotanto en cada persona. En las dos horas siguientes, revis amoros, trabajo, amigos y familiares,as como actrices y personajes de pelculas, televisin y libros que me haban atrado. Reflejos,son todos reflejos, me deca mientras tomaba apuntes.

Cuando termin, tena una lista de 52 caractersticas diferentes, desde cintura estrecha, ojoscariosos, sexy y sensual, atenta y ligeramente extica, hasta potica, espiritual, muy inteligente,ambiciosa y capaz de ensear cosas nuevas, pasando por alguien cuyo corazn, mente y cuerpoquisieran estar conmigo y que me provocara los mismos sentimientos. Al lado de cadacaracterstica, haba escrito un nombre y unas pocas palabras para acordarme del correspondienterecuerdo.

Estaba cansado y feliz al mismo tiempo. Me levant, me estir y me di cuenta de que era denoche, as que encend algunas luces y anduve por el comedor, de paredes marrones y techonegro, con el candelabro de cristal de roca que mi amigo el decorador gay me haba hecho.Escuch las sirenas de niebla, esas preciosas y enormes bestias que mugen en la noche. Pasrozando a Chloe, mi palmera de 2,5 metros y le dije Hola, mi amor imitando a Bogart y entren el frescor verde, blanco, cromo y azul cobalto de la cocina. Me di cuenta de que tena hambre,as que abr el refrigerador. En la bandeja de abajo haba botellas de vino blanco y champaa, yel resto estaba lleno del olor del increble meln si-no-le-gusta-puede-devolvrnoslo deJurgensen, la tienda de Union Street.

Meln, dijo mi estmago. Agarr un gran cuchillo de carnicero y le cort la cabeza de un sologolpe. Salieron zumos fragantes y semillas. Limpiarlos fue como levantar nieve dulce de colormeln con una pala. Y el primer mordisco. Dulce, de textura firme pero madura, y fro. Hoy nadade vino, pens. Tengo que trabajar en algo importante. As que puse las dos mitades del meln enun plato rabe azul y blanco, y volv al saln, listo para reconstruir el espejo que me llevara a mipareja perfecta.

Es curioso como me acuerdo de todo lo de aquella noche con tanta claridad. Y qu fcil fuejuntar las piezas. Slo tuve que acordarme de los recuerdos en los que aparecan las 52caractersticas, utilizar la fuerza de la retrospectiva para pasar de realidad a perfeccin y anclar elresultado en mi corazn.

Anclar. S, es una palabra tcnica. Pero slo es una forma de poner una banderita roja en algoque est enterrado en el inconsciente para que no se pierda en el sistema de almacenamiento. Sise hace suficientemente bien, la mente inconsciente se queda concentrada en l. Y eso es lo quehice, utilizando un truco que he descrito en otra parte, el Punto de Anclaje Interior. (Y que ustedya conoce.) Pero ahora quiero terminar mi historia.


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Lo siguiente fue tener una pequea conversacin conmigo mismo. Hola, le dije a mi corazn.Acabo de anclar 52 caractersticas de mi mujer perfecta. Estoy seguro de que ya sabes a quin

me refiero y que tienes un modelo de ella mucho mejor que el mo. As que, por favor, utiliza eseconocimiento para juntar las piezas y darme una experiencia imaginaria de estar con ella. Yo tedir si estamos de acuerdo o no. Y, por favor, hazlo de forma que sea para mi mximo beneficioy el de todos los involucrados.

Y, por supuesto, en seguida tuve una experiencia increblemente realista de cmo sera estar conmi pareja perfecta. No la vea, pero estaba a mi lado. Yo la tocaba, ella me tocaba y todo eramaravilloso. Haba unas pocas cosas que no estaban bien del todo, pero cambiar un sueo es fcilsi se est despierto, y eso hice. Ya no poda imaginarme nada mejor. As que ancl el resultadoen mi corazn y le ped a mi inconsciente que me llevara hasta esta pareja perfecta de la formaque fuera para mi mximo beneficio y el de todos los involucrados.

Mir el reloj y me sorprendi ver que ya pasaban de la una de la maana. Me di cuenta de queestaba agotado as que deje el plato en la cocina y me tir en la cama.

A la maana siguiente me haba olvidado de todo. Me levant fresco, antes de ducharme mirpor las ventanas, a las que nunca puse cortinas, para admirar la belleza matutina de SanFrancisco y salir a trabajar a la empresa de Sohio, en un brumoso Silicon Valley.

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Una semana ms tarde, estaba en mi oficina. Me haba tomado un pequeo cubculo interiorporque quera dar protagonismo al equipo de genios primas donnas que el inventor-

emprendedor y yo habamos reunido para convertir una tecnologa imposible en un gran xito.Tenamos la tpica coleccin de ingenieros carsimos de Silicon Valley que nos traan loscazadores de talentos todas las semanas, y mucha otra gente original. Uno era un experto ensemiconductores de qumica hmeda que haba llevado un peridico clandestino contra ladireccin cuando estaba en IBM. Haba un super-macho filipino que tena a todos los otrossujetndose las partes de miedo con las historias que contaba sobre los ritos de iniciacin de sutribu. Pero sus resultados eran espectaculares.

Nuestro inventor residente se pasaba las noches ensendome cmo encontrar cables elctricosocultos mientras discutamos sobre espiritualidad y parapsicologa. Y su esposa, nuestra madreprotectora, que tena el rcord de tiempo de aqu a San Francisco en hora punta, era un factorimportante a la hora de mantener bajo control, al menos parcial, a nuestros genios residentes. EraIndia Americana y cuando deca Muvanse! el trfico se abra como el Mar Rojo. No esbroma! Es cierto, cada vez que su marido y yo nos bamos de viaje de negocios, al volver noshaca la lista de todas las chicas bellas que haba mirado. Espeluznante! Bueno, la verdad, medeca yo, es que todo Silicon Valley era espeluznante.

Era tarde y, como siempre, estaba haciendo un resumen del da. Despus tena que planificar miviaje mensual a las empresas europeas interesadas en nuestras licencias. De pronto, le di un


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golpe a la mesa. Cmo poda haberme olvidado de la empresa sueca, Ericsson? Estabandeseando darnos unos cuantos millones de dlares para co-desarrollar nuestra tecnologa.

Rpidamente les envi un telex creativo (s, era antes del correo electrnico) y establec un planinconsciente rpido, y volv a mis fechas de viaje. Un par de das despus, en el momentooportuno, me pidieron que fuera a visitarlos.

Lo nico que saba de Suecia era lo que Suzanne me haba dicho despus de volver, con los ojosbrillantes, dos semanas despus de lo previsto cuando fue a dirigir uno de nuestros proyectos deinvestigacin all. Me encanta, me dijo. Las mujeres son quienes eligen y los hombres loselegidos. Nos remos. Bueno, con eso no tena bastante. A quin poda llamar? Ah, claro, aAnnie en Londres.

Conoc a Annie en un curso de Insight. Eso es un invento del sur de California que te ayuda aaprender a quererte a ti mismo de forma no egosta. En el primero de los cinco das tuvimos queelegir un compaero. Como no conoca a nadie, confi en mi intuicin y eleg bien. Annie vivacon un directivo de British Steel, dato que mi marketing yo archiv para el futuro. Lo msimportante es que era genial conectando a gente, la mejor que he conocido nunca. Sera perfectapara encontrarme gente en Suecia que me dieran informacin.

La encontr en el primer intento. Sss, me dijo. Estaba Jan, un ex-alumno de Insight quevivan en Suecia y diriga la Federacin de Marketing. Me prometi que llamara a Jan. A lamaana siguiente, us su informacin y llam yo mismo a Jan. Hablamos alrededor de 20minutos, tiempo en el cual yo le promet hacerle un favor y l se ofreci a ser mi anfitrin enSuecia.

Mi agente de viajes era un ex-piloto de cazas checo que haba robado un avin de combate y sehaba escapado a Occidente. (No creo que haya nadie normal en Silicon Valley.) Era alegre eimplacablemente eficaz. Sin problemas, me dijo cuando le expliqu mis planes de viaje.Despus se puso a alardear sobre su ltimo xito, mientras me registraba en el ConcordeWashington-Pars para el siguiente mircoles. Como era una de las personas que volaba conmayor frecuencia en el Concorde con Air France, conoca a muchos de la tripulacin y estabaimpaciente por pasar mis tres horas comiendo su comida de dos estrellas entre Washington yPars.

Volv al trabajo. Me fui al final del pasillo a ver que tal le iba a Gib, nuestro inventor residente,con mi programa para reducir el tiempo que tardaba en inventar cosas de 3 meses a 3 das. No leiba nada mal. Estbamos en 2 semanas. Dentro de poco, se ri, podremos inventar a demanda.Me alegr de ver que haba comprendido el ejercicio y, olvidndome completamente de Suecia,de mi pareja perfecta y del Concorde, empezamos a comparar nuestras ltimas listas de cosasque haba que inventar.

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El silencio de la sala se poda tocar y yo miraba a los ojos de mi compaera. Haban pasado dossemanas y estaba en el quinto da de un intenso curso espiritual celebrado en un viejo monasterio

de Connecticut. Llevbamos cuatro das en silencio salvo, cuando nos preguntaban, una y otravez, la misma pregunta: Qu quieres?. As me haba introducido cada vez ms dentro de mmismo y estaba esperando la siguiente revelacin.

De pronto me pareci que la cara de mi compaera se disolva y se converta en una cara nueva.Me asust pero no perd la concentracin interna y respond a la pregunta. La nueva cara se hizoms ntida. Pronto dej de acordarme de la cara real de mi compaera. Slo vea la nueva. Eralinda, con ojos vivos y muy cariosos, y un gesto raro en la boca que era difcil de describir. Eraagradable. Entonces son la campana final y la escena se volvi a convertir en el rostro originalde mi compaera.

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La reunin con Ericsson fue agradable pero extraamente improductiva. Se pasaron la mayorparte del tiempo ensendome cmo iban a formar su nueva empresa hija, aqu la llamaramosfilial, dirigida a la informtica, con partes de Ericsson, Alfaskop (una emprendedora empresasueca de pantallas de vdeo de gran xito) y una parte de Saab, el fabricante de autombiles yaviones. No va a funcionar, pens profticamente y les suger que me contrataran paraayudarles a integrar esas tres culturas, radicalmente diferentes. Rechazaron tanto esa oferta comola licencia y me encontr preguntndome porqu me haba molestado en venir a Suecia.

Bueno, pens, por lo menos voy a tener una experiencia nueva maana. Jan, mi nuevo amigosueco que diriga la Federacin de Marketing, me haba invitado a su conferencia anual, que

consista en una comida con el Rey de Suecia y despus un cctel. La comida con el Rey noestaba mal. Nunca haba conocido a un Rey. Pero el cctel? Cmo, despus de haberconseguido evitar estas reuniones mortales durante aos, haba aceptado ir a uno en Suecia?Qu estaba haciendo? Bueno, ya era tarde para cambiar las cosas as que intentara pasarla tanbien como me fuera posible.

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Oh, no, me dije cuando el taxista volvi a subir al auto, dejando que una corriente fra atacara elnidito caliente, ligeramente ahumado y dulce que me haba hecho en el asiento de atrs. Este noes el Hotel Star que busca, me dijo. Por qu no me dijo que quera ir al que est en el Msse?Pero si se lo dije, le contest. No replic pero ahora bamos a llegar por lo menos 20 minutostarde a la comida. Qu hace uno cuando llega tarde a comer con el Rey? A lo mejor ni se dacuenta. Seguramente estar en el otro extremo de la mesa.

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Que quiere entrar ah?, me pregunt el director del hotel con una expresin ligeramenteincrdula. Pero si ya ha llegado el Rey. Una razn ms para entrar, pens y le dije: S, por eso


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quiero entrar. As que abri la puerta de mala gana y ah entr yo, a un mar de carassorprendidas. Jan se levant de un salto y me llev a un asiento que estaba casi enfrente del Rey,

que me mir y bostez. Pareca cansado y casi exactamente como el tonto de mi primo Jerry. Esque nada iba a funcionar aqu?

Mi vecino disculp rpidamente el bostezo diciendo: Acaba de llegar de Chicago. Debe estarcansado. Y despus me sigui hablando en un tono tipo aqu-respetamos-las-reglas que ya meestaba acostumbrando a or cuando los suecos corregan a los americanos. Es de mala educacinentrar en una habitacin despus del Rey o la Reina. Es un gesto de respeto., dijo. Me sentincmodo. As que intent pensar que el que estaba al otro lado de la mesa era el primo Jerry yno el Rey, y me concentr, con demasiado inters, en mi plato.

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Noviembre en Estocolmo es muy oscuro. El sol sale a las 9 y se pone a las 3. Ya estabacompletamente oscuro a las 4 de la tarde, cuando los neumticos de invierno del taxi pisaron lascapas de nieve que acababan de caer, hacindolas crujir. Este palacio es muy viejo y bonito,dijo mi taxista por segunda vez en un ingls casi perfecto. Estaba aprendiendo que todos lossuecos educados parecan hablar ingls y no perdan oportunidad para hablarlo, sobre todo lostaxistas. Mir cmo la elegante tormenta nos rodeaba con un suave remolino. Luces azul-verdosas de mercurio pasaban rozando los copos o iluminndolos de lleno. El olor de la nievefresca, unos restos de humo de tabaco y la oscuridad daban un aire surrealista a la escena. Nosparamos bruscamente. Al parecer demasiado bruscamente para la nieve. Se encuentra all, dijoel taxista, satisfecho. Son ciento cuarenta kronor, dijo, aadiendo la propina sin preguntarme.Seguramente pensaba que los americanos eran demasiado ignorantes para acordarse de que a los

que no haba que dejar propina era a los camareros, no a los taxistas.

All era una sombra oscura en medio de la noche, a la que se llegaba por un camino cubierto denieve. Ya tena los pies mojados y fros por la nieve. Por qu no haba pensado en traerme unasbotas? Paso demasiado tiempo en California, pens, y casi nunca nieva en Londres. Slo lanoche del viernes antes de Navidad, record con tristeza.

Fui crujiendo por el camino hasta llegar a una oscura puerta doble y llam con una aldabagigantesca. No hubo respuesta. Esper. Al final abr la puerta y hubo un cambio mgico. Depronto todo eran luces intensas y clidas, mezcla de olores de comida y perfume, muchsimagente y colores preciosos en el interior. As son los suecos, pens. Oscuros por fuera peroclidos, entusiastas y cariosos una vez superada esa capa superficial.

Dentro haba muchsima gente, ms tarde supe que aproximadamente mil. Se me pasaron un parde clichs por la cabeza y pens en como sardinas en lata en respuesta al olor del pescado. Unmayordomo vestido de negro me llev hasta Jan, que presida la fiesta con ms aire monrquicoque el Rey Jerry. Hola, Stuart, me dijo en su ingls musical cuidadoso y con mucho acentosueco. Lo siento, slo te puedo dedicar unos minutos. Pero estoy seguro que te sientes muycmodo en los ccteles.


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Despus me mir a los ojos, inspir con fuerza y ruido, puntuando la conversacin con el punto

de exclamacin verbal sueco, y dijo: Sabes, si quieres tener negocios aqu vas a tener queaprender sueco.

Pero no sabe que los americanos somos inmunes a los idiomas?, pens pero me sorprend ami mismo diciendo: Slo si encuentro a mi pareja perfecta en Suecia.

Pareja perfecta? De dnde sali eso? No haba pensado en ella desde Silicon Valley. l no mehizo caso, se ri con una risa falsa de las de los ccteles y se fue. Me qued solo. Dudando, megir hacia las tres primeras salas llenas a rebosar de gente. Bueno, creo que era gente. Lo nicoque vea eran espaldas.

Me fui abriendo camino, buscando alguna cara, alguien con quien hablar, pero slo habaespaldas. Ochocientas, mil espaldas, o quizs ms. Mil cinco, si incluimos este grupo de espaldasvestidas de amarillo. Fellini no tena nada que ver con esto. Todo el mundo estaba gritando paraque le oyeran y haba tanto ruido que tenan que gritar ms, voces mojadas con alcohol. Empeca sentirme un poco desesperado. Pero las cosas se puseiron peor. Empec a tocar suavementealgunas espaldas, a ver si consegua que alguna se girara. Intent separarlas para entrar en ungrupito pero estaban pegadas. Al poco rato empec a dar codazos a las espaldas pero no mehacan caso. As que segu andando, quejndome del Mar Negro que se iba abriendo ante m.

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Esta es la tercera sala, pens. Cuando llegue al final, dar la vuelta y saldr de aqu lo ms

rpido que pueda. La pared del fondo slo estaba a aproximadamente 15 metros y me sentperdido por no haber encontrado absolutamente a nadie con quien hablar, ni siquiera una cara enla masa de gente. De pronto, las espaldas se separaron para revelar un crculo de 3 metros dedimetro, totalmente vaco salvo por una sola mujer que estaba en el centro. Llevaba un extraovestido negro con un leopardo por encima del hombro. Ms adelante me di cuenta de que erafalso. Tena los brazos cruzados y me estaba mirando con una expresin tipo por-qu-has-tardado-tanto.

Bueno, una cara es una cara, sobre todo una que parece haberme visto y que por algn motivome resulta algo familiar. As que me dirig a ella. Prob con: Habla usted ingls? Me mirdurante un largusimo segundo y despus sonri: S. Hasta ahora, bien. Le gustara beberalgo?, me o decir y ella volvi a decir s sonriendo. Vino blanco? fue mi siguiente obra deliteratura, y me pregunt qu genio estara escribiendo este fantstico guin. Lo tomamosjuntos?, contest y me tom del brazo. Su forma de tocarme era extraamente familiar. Eracomo si mi cuerpo la recordara. A lo mejor me ha elegido, me dije, acordndome de lo quehaba dicho Jan, que en Suecia las mujeres elegan y los hombres eran los elegidos. Record queSuzanne haba dicho lo mismo.


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Nos sentamos, con las copas en la mano, uno frente al otro en un par de sillas de comedor quehabamos agarrado detrs del bar. Nuestras miradas se unan de una forma extraamente familiar

y nuestras mentes reflejaban los pensamientos del otro. Hola. Por qu has tardado tanto?, oque me deca por dentro. Llevo esperando cuatro vidas y cuatro das. Me alegro de volver averte, seas quien seas, me dijo mientras su boca hablada de su trabajo de consultora legal.Hola t tambin, pens. Dnde nos conocimos? Te conozco y quin eres?

De pronto algo dentro de m se solt y me di cuenta de que sta era LA cara. La del cursoespiritual de Connecticut. Era exactamente la misma cara. Empec a acordarme de cosas. Nocosas especficas, sino esos recuerdos evasivos que te recuerdan a algo pero no llevan apuntadoel sitio ni el momento. Nuestras bocas siguieron cantando palabras sobre nuestras vidas externasmientras nuestro vnculo interno se afianzaba. Senta que mi corazn estaba abierto y clido.Tena la impresin que se me haba abierto la parte superior de la cabeza y que me entraba ysala energa. Y entre nuestros ojos pasaban megavatios de energa.

La gente que haba a nuestro alrededor se fue callando. Seguan moviendo la boca, sonriendo ycambiando copas vacas por copas llenas, pero no haba ms sonido que nuestras voces, lasexternas y las internas. El ao pasado termin mis estudios de derecho y marketing, me dijo.Es extraordinario, le dije. Debes ser muy inteligente y decidida. Hizo una pausa y despusdijo suavemente: Se supone que los suecos no debemos hablar demasiado bien de nosotrosmismos. Eres la primera persona a la que le digo esto. Saqu la mxima puntuacin en derecho yla mxima puntuacin en marketing, di las clases de derecho de uno de mis profesores cuandotuvo que irse durante tres meses, me han elegido como la mejor jueza joven de Suecia y acabo determinar la reforma de un apartamento de ocho habitaciones en Sveavgen. Ambiciosa, pens,muy ambiciosa y muy cariosa. Me di cuenta de que estaba comparndola, a sa, con mi lista.

Se llamaba as, A con un crculo encima, ,S, A. Le o decir que la A con un crculo encimase pronuncia Oooh-Ah, con el Ah muy corto, casi imperceptible para m pero muy divertidopara ella cuando intent pronunciarlo.

En seguida confirm que era poeta, radiaba energa espiritual y tena una cintura minscula yunos ojos muy cariosos. Repas la lista de mi pareja perfecta en la cabeza. Todo dieces, medije, feliz, disfrutando la experiencia de haberla encontrado.

Y entonces o: Mi marido y yo reformamos el apartamento nosotros mismos. Marido, pens.Yo no haba pedido un marido. Eso no encajaba. No poda ser ella. Yo no sala con mujerescasadas. Me sent confundido y le suger que nos tomramos otra copa.

En el bar nos pusimos uno contra el otro, yo con la mano en el hueco de su espalda sintiendo unaonda de energa intensamente clida que pasaba entre nosotros. El barman nos dio las bebidas yse inclin a mi lado. Usted es americano, dijo. Lo mir y vi que estaba muy perturbado y algoborracho. Los rusos mataron a mi mejor amigo cuando haca maniobras con la marina en elnorte. Tienes que hacer algo. Los americanos tienen que ayudarnos. Lo mir y pens: Suecialimita con Rusia por el norte?


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Automticamente, dej de tocar a sa y le agarr por el hombro. Estaba temblando de miedo.

Le mir a los ojos de la forma que haba aprendido despus de una experiencia que haba tenido13 aos antes y que me haba llevado a las puertas de la muerte, y entrev su pnico interno. Esresponsabilidad ma ayudarle, pens. Siempre es mi responsabilidad, as que lo mejor ser queme ponga ya. Me encontr concentrndome en l con la intensidad exclusiva que utilizo en lassituaciones de urgencia. Me sent como fundindome con l y perd conciencia del tiempo y desa.

Un minuto despus pens: Ya est bien, y me gir hacia sa. Pero ya no estaba. Recorrrpidamente el Palacio buscndola. Ya no quedaba mucha gente y me di cuenta de que habanpasado seis horas, una vida, desde que conoc a sa. Me gustaba pensar en su nombre, pero sehaba ido. Abr la puerta de la calle pero slo encontr negrura y copos blancos bailando en la luzque se derramaba en el camino.

Bueno, pens con tristeza. No estaba hecha para m. Probablemente esto es lo mejor quepodra haber pasado, me ment, resignado. Fui arriba, como me haba dicho un camarero, para ira la oficina de Jan. Jan estaba all con su novia, que estaba casada con otro. Es normal enSuecia, me dijo ms tarde. No est contigo? Quien? Tu nueva novia sueca, porsupuesto, se ri. Se ha ido, le dije, sintiendo una gran tristeza en mi corazn y cayndome confuerza en un silln que ola a cuero y aceite.

Entonces entr, ya sobrio, el barman, que quizs nunca haba estado borracho. Ella est abajo yte est buscando. Tienes que bajar, me dijo, agarrndome por el brazo. Lo segu rpidamentepor las escaleras espirales con sus recargados relieves y all estaba, sa, con aire de estar

incmoda, aunque sus ojos sonrean: Hola otra vez.

La tom del brazo. No dejes que se vuelva a escapar, me dijo una voz por dentro. Y me contque haba decidido irse porque la situacin pareca demasiado complicada, con eso de su maridoy que nunca haba tenido una aventura extramatrimonial pero que ahora mismo estaba preparadapara ir a cualquier sitio conmigo. Mi cuerpo y mi corazn dijeron: S!.

Y sigui: Cuando saliste a la puerta no me viste porque haba bajado la calle para buscar untaxi. Pero no vino ninguno. Tendra que haber llamado pero slo quera irme porque la atraccinera demasiado fuerte. De pronto fue como si la mano de un gigante me empujara otra vez haciala casa. Sent que mis pies se arrastraban por la nieve y me fui yendo hacia atrs. No estabaandando, pero me estaba moviendo. Cuando llegu a la puerta, se abri y el barman borrachosali, me agarr y me meti dentro mientras gritaba que el americano me estaba buscando.

Nos dimos un extrao abrazo, con los brazos en la cintura del otro y le suger que cenramos alda siguiente. Nmero de telfono? No se acordaba, se le enredaba en la mente, as que apuntsu nombre y direccin y me dijo que me vera en el Grand Hotel, donde yo estaba. A las seis,me record. Me mir a los ojos y desapareci por la puerta, hacia el taxi que haba conseguido elbarman.


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Estuve muy ocupado todo el da siguiente y no pens en sa hasta que volv al hotel, hacia lascuatro. Entonces me invadi la mente. Dios mo, Cul era su aspecto? No me acordaba.

Cmo me he metido en esto? Es un gran error. Bueno, no tena forma prctica de ponerme encontacto con ella. No saba dnde trabajaba as que me resign a tragarme las consecuencias demi error. Le ped al recepcionista que me recomendara un restaurante, pero no en el hotel. Losrestaurantes de los hoteles suelen lograr una combinacin mstica de precios altos y platosmediocres. Me sugiri el Bodega de la pera, Opera Kellaren en sueco, probablemente elrestaurante ms famoso de Estocolmo y definitivamente el que tena la mejor bodega. Mepareci bien. Por lo menos beber buen vino, me dije.

A las seis y cuarto me quit la chaqueta. Bueno, supongo que no viene, pens con una mezclade tristeza y alivio. Justo entonces son el telfono. Hay aqu una tal Seora ------, que quiereverlo, dijo la voz. Quin?, dijo mi narrador interno. Una tal sa ------. Dgale que voyenseguida, contest y me puse lentamente la chaqueta.

El ascensor se abri y examin la recepcin. sa no estaba. Por lo menos no haba nadie quereconociera. Entonces una mujer se gir y nuestros ojos recordaron. Mi corazn pas a laposicin felicidad y se me puso una gran sonrisa en la cara. Fui hacia ella y nos abrazamossuavemente. Vmonos de aqu en seguida, me dijo. Ya me he encontrado con cuatro de miscompaeros de clase. No me acordaba de tu cara, as que he estado mirando a los ojos de todoslos hombres que pasaban y creo que algunos han pensado que era una prostituta.

Salimos a la calle nevada, donde me puse el abrigo y la bufanda. Vamos andando alrestaurante o tomamos un taxi?, le pregunt, esperando que eligiera lo segundo. Tena los piesfros. Se ri y dijo: Un taxi? Pero si el restaurante est ah. Seal con el dedo un elegante

edificio antiguo con ventanas muy iluminadas que estaba slo a una manzana, frente al agua. Metom del brazo y me llev hasta all.

Entramos, dejamos los abrigos en el guardarropa y pasamos a una sala magnfica, grande, contechos altos y murales de finales del XIX en las paredes. Mis ojos se fijaron en una ninfapelirroja que me recordaba vividamente a Linda. La sala estaba llena, principalmente con gentede negocios que cenaban con otra gente de negocios. Los ricos relieves de madera, la pinturamural y los candelabros creaban una atmsfera mgica. El men fue magnfico y costoso. Perono me importaba el dinero, estaba en una de mis fases puedes-ganar-cuanto-quieras-as-que-porqu-no-gastarlo. Pedimos la comida. Y tambin buenos vinos. Era excelente pero mucha desu elegancia se perdi en nosotros. Habamos vuelto a nuestro mundo privado de corazones,ojos, mentes y recuerdos conectados. Pareca que estbamos radiando algo, porque todo elmundo que estaba a nuestro rededor sonrea tiernamente. Muy pronto pareci que la sala enteranos estaba mirando, o quizs miraba nuestra aura de amor aparentemente perfecto.

Pedimos soufflcon crema inglesa de postre y eleg mi vino preferido para postre, el elegante yextremadamente caro Chateau d'Yquem. El camarero se asegur de que sa vea el precio. Lollev bastante bien. El postre fue maravilloso, el vino estuvo a la altura de nuestro amor y la cenatermin. Le dimos al camarero el resto del Chateau d'Yquem.


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Supongo que eso le impresion bastante porque cuando volvimos al restaurante un ao despus,

ya casados, para celebrar el aniversario de nuestro encuentro mgico, se acordaba perfectamentede nosotros.

Resumen

No estoy diciendo que cuando encuentre usted a su pareja perfecta tendr una experiencia tanmgica como la ma, aunque es posible que s. Es agradable experimentar lo que podramosllamar milagros.

En todo caso, si sigue usted mis instrucciones y evita las trampas descritas en el Captulo once deCmo obtener mucho dinero para cualquier cosa que usted desee - rpidamente! tiene casi el

100% de probabilidad de encontrar a su pareja perfecta.Disfrute el viaje, y enveme un correo electrnico cuando encuentre al amor de su vida.

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