el caminar del espiritu con notas

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 EL CAMINAR DEL ESPÍRITU EL CAMINAR DEL PODER  El rol vital de orar en lenguas DA VE ROBERSO N  Descargar el libro en la página web: http://www.daveroberson.org/Media/ 795/El%20Caminar%20del %20Espiritu.pdf 

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el caminar del Espíritu con notas

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  • EL CAMINAR DEL

    ESPRITUEL CAMINAR DEL

    PODERE l r o l v i t a l d e o r a r e n l e n g u a s

    D A V E R O B E R S O N

    Descargar el libro en la pgina web:

    http://www.daveroberson.org/Media/795/El%20Caminar%20del%20Espiritu.pdf

  • El caminar del Espritu El caminar del poder El rol vital de orar en lenguas

    1999 por Dave Roberson Dave Roberson Ministries P.O. Box 725 Tulsa, OK 74101, USA.

    ISBN 13: 978-1-929339-18-1

    Todos los derechos reservados. Ninguna porcin de este libro podr ser reproducida, almacenada en algn sistema de recuperacin, o transmitida en cualquier forma o por cualquier medio mecnicos, fotocopias, grabacin u otro excepto por citas breves en revistas impresas, sin la previa autorizacin por escrito del autor.

    A menos que se indique lo contrario, el texto Bblico ha sido tomado de la versin Reina-Valera 1960 Copyright 1960 Sociedades Bblicas en Amrica Latina; 1960 Copyright renovado 1988 Sociedades Bblicas Unidas. Utilizado con permiso. Reina-Valera 1960 es una marca registrada de la American Bible Society, y puede ser usada solamente bajo licencia.

    Traducido al espaol por Erwin Masaru A.

    Editado por Maritza Pede y Cary Palmon

    Segunda revisin por Interpret 3e Spirit, Tulsa, OK.

    Diseo interior: Adrin Romano

    Impreso en los Estados Unidos de Amrica Printed in the United States of America

  • Contenido

    Introduccin 5

    1 El obrar interior del Espritu Santo 9

    2 Mi viaje personal hacia el conocimiento revelado 21

    3 Los dones espirituales y sus operaciones 43

    4 La diversidad de lenguas en el gobierno de Dios 59

    5 Las cuatro diversidades bsicas de lenguas 77

    6 La fuente de revelacin de Pablo 99

    7 Orar los misterios del plan de Dios 123

    8 El canal por el cual habla el Espritu Santo 145

    9 El proceso de edi4cacin 163

    10 Puri4cacin y morti4cacin 183

    11 Vencer los obstculos insuperables en oracin 215

  • 12 Puri4cado para mantenerse en la brecha 243

    13 La oracin y el ayuno: Poderes gemelos 263

    14 Cmo orar en lenguas con e4cacia 291

    15 La progresin divina hacia el amor gape 319

    Apndice 1 Impedimentos para recibir el bautismo en el Espritu Santo 347 2 Oracin de salvacin 357 3 Oracin para ser lleno del Espritu Santo 359

  • Introduccin

    Los ltimos aos han sido los ms maravillosos de mi vida. He estado en el ministerio por ms de veinticinco aos y he tenido muchos encuentros maravillosos con el Seor, pero realmente puedo decir que el conocimiento de la revelacin que Dios me ha impartido en stos ltimos aos, ha cambiado mi vida por completo, llevndome a un lugar en Dios que nunca antes imagin.

    Sin embargo, uno no puede construir muros donde no hay cimientos. No se puede construir un techo donde no hay paredes. Las verdades espirituales que Dios me mostr para la transforma-cin de vidas, no podran haber sido parte de mi vida si no tuvie-se dentro de m un fundamento slido de la Palabra, rengln tras rengln, lnea sobre lnea; a travs de muchas horas y aos de orar en lenguas mientras meditaba en las Escrituras.

    Ahora, ms que nunca, s que el orar en lenguas es el don de revelacin que me ayud a poner una base bblica en mi vida. Dios me estaba preparando para las imponentes verdades eternas

  • El caminar del Espritu El caminar del poder

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    que ahora est poniendo en mi espritu, en preparacin para los das que vendrn. Dios est usando la acumulacin de todos esos aos de orar en lenguas para abrir en m un mayor entendimien-to de las verdades en Cristo.

    La medida del poder de Dios en la vida de un creyente de-pende de cuanto sujeta est del Espritu Santo. Por consiguiente, desde el principio, el mensaje principal de este ministerio ha sido el orar en lenguas. Durante dcadas, el Seor ha impartido en mi espritu una riqueza de conocimiento revelado sobre este asunto. Paso a paso, me ha enseado cmo salir de una vida dominada por la carne a una nueva vida dominada por el Espritu Santo a travs del incomparable don de orar en lenguas.

    En 1997, el Seor habl enrgicamente a mi espritu, dicien-do: Este mensaje de lenguas ha alcanzado la madurez.

    Al principio, pens que Dios quiso decir que el mensaje haba alcanzado la madurez en m. Despus llegu a entender que l no estaba hablando acerca de m, en lo absoluto. Lo que esta-ba diciendo era que haba llegado el momento de compartir, en una medida ms amplia, este conocimiento que me haba dado durante aos con respecto a orar en lenguas. El mensaje haba alcanzado la madurez para el cuerpo de Cristo.

    El Seor me ha encomendado ensear a los creyentes a vivir una vida de poder caminando en el Espritu, siempre constru-yendo sobre la base de la Palabra y orando en lenguas como el Espritu Santo les dirija. Escribo este libro con el deseo de ser 4el al mandato divino.

    Durante muchos aos no solo he enseado las verdades que este libro contiene; sino que tambin las he seguido con todo mi corazn en mi vida personal con Dios. Creme lo que te digo: Cuando leas este libro y apliques diligentemente sus principios, llegar el da que al mirar tu vida digas con asombro y admira-cin: Ya no soy la misma persona. He aprendido a caminar en el Espritu, y mi vida ha cambiado completamente para siempre!

    Dave Roberson

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    "Porque en Mi Espritu est la profundidad de la sabidura

    Para que por Mi Espritu puedas t fructi"car, dice el Espritu de Gracia.

    Porque estas cosas estn ocultas en un misterio.

    Oh, he hecho que estos misterios estn a disposicin de aqullos que estn en la Iglesia de Mi gracia.

    Aprende a permanecer en Mi Presencia. Aprende a permanecer sobre tu rostro ante Mi. Y te abrir los tesoros escondidos en un campo.

    Y vers, dice el Espritu de Gracia, que incluso el diablo tendr que ceder el lugar.

    #

  • 1El obrar interior del Espr i tu Santo

    En la eternidad del tiempo pasado, se despleg un plan inmenso y complejo para la humanidad dentro de Dios. En Su gran sabidura, no omiti nada segn miraba a tra-vs de los siglos. Se revel generacin tras generacin, planeando cada detalle intrincado de cada vida que vivira sobre la faz de la tierra. El deseo de Dios era recuperar a todos los que fuera posible del campo de la rebelda de Satans, y juntar para s un pueblo que pudiera llamar Su familia.

    En algn momento en medio de esta sesin de plani4cacin divina, mucho antes que empezaran los eones del tiempo, Dios encontr t nombre! Luego formul un plan perfecto especial-mente para ti, diferente a cualquier otro plan de cualquier otra persona que haya nacido. Imagnate, Dios el Padre mir a travs del gran vaco del espacio y el tiempo y vio el momento oportu-no en que viviras sobre esta tierra. l decidi exactamente cmo ese espacio en el tiempo deba llenarse!

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    Nosotros debemos escoger Su planDios concibi un plan maravilloso para cada uno de nosotros. En Su plan, fuimos predestinados para ser Sus hijos e hijas en la cruz. Pero hay un posible obstculo que se levanta entre nosotros y los propsitos concebidos perfectamente por Dios: Nuestra volun-tad. Por medio de la libre voluntad que Dios nos ha dado, debe-mos escoger caminar en el plan que l ha marcado para nuestras vidas.

    Dios busca la manera de acercarse a cada uno de nosotros para presentarnos el plan que tiene para nuestras vidas. Comienza con el mensaje de la Cruz, la cual nos gua a aceptar a Jesucristo como Salvador y Seor. Si aceptamos a Jess, damos el primer paso en el plan que Dios predestin para nosotros desde antes de la fun-dacin del mundo. Pero si lo rechazamos, como muchos lo han hecho antes de nosotros, viviremos y moriremos sin dar nunca ese primer paso la salvacin la cual es el propsito divino para nuestra existencia.

    Una vez, cuando estaba ministrando en la India, miraba a la muchedumbre de miles y me maravillaba de que Dios tuviera un plan espec4co para cada individuo en esa inmensa multitud. La verdad es que Dios formul un plan perfecto para cada persona que ha nacido desde Adn. Solo espera que cada uno descubra ese plan y escoja caminar en l.

    Jess habl sobre Su plan de vida eterna para la humanidad en San Mateo 7:13, 14:

    Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdicin, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.

    Las palabras de Jess indican que la mayora de las personas ter-minan su vida con un viaje 4nal a una oscura eternidad sin l. Una persona puede vivir y morir e irse al in4erno sin conocer a

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    Jess o cumplir el plan de Dios para su vida. Sin embargo, eso no cambia el hecho de que Dios tuviera un plan perfecto de reden-cin y un propsito para esa persona; nunca se descubri.

    Pero, alabado sea Dios, porque t no tienes que ser uno de esos! Si has encontrado la Cruz y has hecho a Jess tu Salva-dor personal, nada puede detenerte a descubrir el resto del plan de Dios para tu vida. Todo lo que tienes que hacer es escoger obedecerlo.

    El Espritu Santo intercede por nosotrosAs que de alguna manera y en alguna parte, en el maravilloso y gran plan de Dios para Su creacin, surgi t nombre. Y Dios, en Su sabidura eterna y consejo, prepar un plan perfecto para tu vida.

    Luego el Espritu Santo hizo una cosa maravillosa. Oy atentamente cada detalle de tu vida, de cmo el Padre plane tu nacimiento, tu ministerio, tu prosperidad, y cada aspecto de tu redencin y de tu vida.

    De hecho, el Espritu Santo es aqul que ha sido puesto a cargo de administrar el plan de Dios para tu vida. Nadie puede representar ese plan mejor que l, porque estaba all y oy cuan-do Dios el Padre plane hasta el detalle ms diminuto.

    Y eso no es todo. Esta tercera Persona de la Deidad es igual en todos los sentidos con las otras dos Personas de la Deidad, al Gran Jehov y el poderoso Logos (Jess). Pero en el proceso de regeneracin como hijo de Dios, el Espritu Santo consinti tomar residencia dentro de tu espritu para ofrecerte Su ayuda. Y una de las razones principales por las que l vino es para inter-ceder por ti.

    Por qu envi Dios al Espritu Santo para vivir dentro de ti? Para poder cambiarte a la imagen de Su Hijo. Y para lograr esa meta, el Espritu Santo trajo Su propio lenguaje de oracin con-sigo, para interceder por todo lo que concierne a tu vida.

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    Por medio de ese lenguaje de oracin, se involucra directa-mente contigo en una relacin personal que es independiente de cualquier otra persona, incluyendo tu propia mente. Cuando el Espritu Santo intercede por ti, l toma el plan que oye del Padre y lo infunde en tu espritu. Y el lenguaje que utiliza para expresar ese plan, cuando Iuye a travs de ti, es el lenguaje sobrenatural de las lenguas.

    Cada vez que le permitas al Espritu Santo interceder a travs de ti, l usar ese lenguaje para interceder por tu llamado, que el plan de Dios se cumpla en ti, para edi4carte, y para llenarte con Su santo poder. Se pondr a tu disposicin en la medida que tu fe le permita a l activarse dentro de tu espritu. El completar la obra transformadora que Jess empez en ti y te guiar para que seas todo lo que Jess dijo que eres en l.

    Si deseas, puedes entrar en tu cuarto y orar en ese lenguaje sobrenatural por dos, cuatro, o incluso doce horas, y Dios el Es-pritu Santo crear cada palabra que salga de su boca. El orar o no orar es tu decisin. Pero cada vez que elijas orar, saldrs de ese tiempo de oracin ms edi4cado, segn el plan y propsito para tu vida, que si no lo hubieras hecho.

    El plan que Dios tiene para ti est con el Espritu, y el Espri-tu Santo est dentro de ti. El Espritu Santo conoce todo acerca del plan de redencin que Dios plani4c para ti desde antes que los fundamentos de la tierra fueran creados. Y cada vez que l mira tu corazn, lo hace con la intencin de interceder por ese plan el cumplimiento del plan de Dios en tu vida para que sea una realidad.

    La ley natural bajo sujecinHe estado lleno del Espritu Santo por mucho tiempo, y todava me maravillo de que la tercera Persona de la Deidad escogiera venir y establecer Su morada con nosotros! Pensar que, a nuestra invitacin, nos bautiza y supervisa el plan de Dios para nuestras vidas con ms gracia de lo que hubiramos podido esperar. Y el

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    lenguaje sobrenatural que l trae consigo para ayudarnos a en-contrar ese plan perfecto es quizs el fenmeno ms grande de todos.

    Cuanto ms entendamos acerca del plan de Dios, ms el Esp-ritu Santo (que es quien ejecuta la ley espiritual) podr traer bajo sujecin la ley natural en nuestras vidas. La ley natural gobierna las circunstancias que nos rodean, causando que las cosas vayan a favor o en contra de nosotros hacindonos ricos o pobres, enfermos o saludables, felices o tristes.

    Pero Dios dise la ley natural para que fuese subordinada a la ley espiritual. Y como el plan divino para nuestras vidas viene del mismo corazn de Dios, se ejecuta como una ley espiritual.

    Cualquiera sea la cantidad de tiempo que pasemos orando en el Espritu Santo, estaremos decretando los secretos divinos, o leyes espirituales. El Espritu Santo emplea esas leyes para hacer que las circunstancias las leyes naturales se pongan en lnea con el propsito y el plan de Dios para nuestra vida. Al orar de esta manera no pasar mucho tiempo para que las cosas que no pertenecen al plan de Dios comiencen a deshacerse.

    Una vez le pregunt al Seor: Por qu nos has entregado un lenguaje tan peculiar para usar en la oracin? Esto fue lo que respondi a mi espritu:

    Entre los hombres jams ha existido un lenguaje que comu-nique el vocabulario que exprese todo lo que Yo Soy dentro de ustedes a travs de Cristo Jess. Y como no hay un lenguaje con tal vocabulario, tuve que crear uno y prestrselos para que lo usen en la tierra. Se los prestar hasta que asciendan al Cielo; y entonces cesar.

    Entretanto, ustedes conocen en parte, y Yo lo conozco todo el plan entero de redencin para toda la eternidad. Cuando el diablo venga contra ustedes, no se preocupen por eso. Yo co-nozco sus debilidades e interceder por ustedes segn el plan del Padre, y aunque lo conozcan en parte, yo interceder por lo que ustedes necesitan.

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    El gran intercambio: Cambiando nuestro plan por el de DiosHay un intercambio sobrenatural que toma lugar cuando nosotros oramos en otras lenguas. Leamos lo que dice Romanos 8:27, 28:

    Mas el (Espritu Santo) que escudria los corazones sabe cul es la intencin del Espritu, porque conforme a la vo-luntad de Dios intercede por los santos.

    Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propsito son llamados.

    Qu signi4ca, el que escudria los corazones"? Signi4ca que el Espritu Santo continuamente observa tu corazn con la inten-cin de quitar todo lo que es contrario a la voluntad de Dios, Tu Padre, el Plani4cador. Luego, el Espritu Santo lo reemplaza por el plan que l oy para tu vida desde antes del principio de los tiempos, cuando Dios formul Su plan para ti. l intercede por el perfecto plan de Dios en tu espritu de tal manera que no sola-mente sabes a qu has sido llamado a hacer, sino cmo cumplir ese llamado en el perfecto tiempo, voluntad y en el poder de Dios.

    Dios intercambia tus planes naturales e ideas por los de l, a travs del medio sobrenatural de intercambio: las lenguas para tu edi"cacin personal. T puedes saber sin duda alguna que cuando te sometes a ese intercambio divino, de hecho, todas las cosas obrarn a tu favor, porque amas a Dios y has sido llamado segn Su propsito.

    l nos ayuda a encontrar nuestro llamadoSin embargo, no puedes descubrir el propsito que Dios te ha llamado a cumplir por solo leer Su Palabra. No obstante, en la Palabra puedes aprender todo lo referente a la herencia que le pertenece a cada creyente. Puedes aprender todo lo referente a la

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    salvacin, la sanidad, la prosperidad, la justi4cacin, el Cielo, la sangre, y los dones del ministerio. Pero no puedes obtener a travs de la Palabra el conocimiento de lo que Dios te ha llamado a cumplir como miembro individual del Cuerpo de Cristo.

    No hay ningn Libro de Roberson al que pueda yo recurrir para recibir instruccin personal. Tengo que descubrir mi llama-do divino por revelacin a travs de la obra interna y personal del Espritu Santo.

    Nadie conoce nuestro llamado mejor que el Espritu Santo. l estaba en la Presencia de Dios cuando nuestro llamado fue pla-neado por primera vez. Esta es la razn por la que nos dio Su len-guaje sobrenatural cuando vino a residir dentro nuestro. Somos demasiado ignorantes para saber cmo orar acerca de nuestro llamado. Por esto, Su gran depsito de sabidura y consejo reside dentro de nuestro espritu, esperando ser desatado simplemente a travs de hablar en lenguas.

    En Primera de Corintios 14:14 dice que cuando hablamos en lengua desconocida, nuestro espritu humano ora, y nuestro entendimiento queda sin fruto. As que, en esencia, el Espritu Santo crea ese lenguaje sobrenatural dentro de nuestro espri-tu humano. Luego toma lugar una transferencia de lenguaje y autoridad desde la Persona del Espritu Santo a nuestro espritu humano.

    Esta transferencia divina nos permite como miembros indi-viduales del Cuerpo de Cristo en esta tierra, orar en lenguas con la autoridad de Dios, sabiendo que los otros dos miembros de la Deidad contestarn nuestra oracin. Si la transferencia nunca to-mase lugar, el Espritu Santo estara orando, no nosotros. Pero con la transferencia, es literalmente nuestro espritu humano el que intercede cuando el Espritu Santo forma la oracin.

    La manera de Dios es la mejorNosotros posiblemente sepamos cmo reclamar nuestra herencia. Quizs seamos buenos para declarar: La sanidad es ma! La

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    provisin es ma! Pero cmo podemos liberar el tremendo po-der del Espritu Santo que reside en nosotros el poder que le-vant a Jess de los muertos por encima de los problemas que enfrentamos para que las bendiciones puedan manifestarse en nuestras vidas? Y ms importante an, cmo podemos descubrir nuestro llamado divino?

    Ser que somos tan sabios que podemos encontrar una mejor respuesta que Dios, siendo que l envi al Espritu Santo para venir a la tierra a interceder por nosotros?

    Como puedes ver, Dios no con4 nuestras vidas a los millares de ngeles que estn a Su servicio. A sus ojos, nosotros valemos mucho ms. l hizo lo mximo y nos con4 al Espritu Santo mismo, quien vino a establecer residencia en nosotros. As que, cmo podemos fallar cuando la tercera Persona de la Deidad crea la oracin y los otros dos miembros de la Deidad se aseguran que se cumpla? Yo llamara a esto un plan infalible!

    La sabidura de Dios contra las estrategias de SatansEl da que decidas encerrarte en tu cuarto de oracin para pasar un tiempo de calidad en oracin con el Seor se es el da que entrars en el aula del Cielo, aqu en la tierra, con el Espritu Santo como tu Maestro. Tu necesitas esa aula si has de cumplir con Su llamado divino.

    Recuerda que Dios nos dice que seamos sabios como serpien-tes y mansos como palomas (Mateo 10:16). Por qu dira Dios algo as? Porque Satans tiene un arsenal entero de armamento que slo puede ser combatido con la sabidura de Dios.

    Por ejemplo, supongamos que Satans se presenta en tu habi-tacin con cuernos y una cola y dice: Con permiso, buen cristia-no, voy a robar la Palabra de Dios de tu corazn. T lo miraras y diras: T no me vas a quitar la Palabra!

    Dice l: Por qu no?Porque t eres el diablo!

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    Qu fue lo que me revel como diablo?, preguntara.Tus cuernos y cola. (sa es la manera en que el diablo se viste

    en el tradicin cristiana).En ese momento el diablo dice: Nunca ms me vestir de esta

    manera. Ir a conseguir una piel de carnero y me la pondr por encima. Entonces saldr secretamente y de improviso te robar la Palabra que est dentro de ti. Ni siquiera sabrs quin lo est haciendo, porque usar la religin para seducirte. Usar las cir-cunstancias. Culpar a la economa. O culpar a tu marido o a tu esposa. Pero de una manera u otra, sacar la Palabra de Dios que esta dentro de ti, y ni siquiera sabrs quin lo est haciendo!

    Jess nos ense que Satans solo viene por tres razones: Ma-tar, robar y destruir (Juan 10:10). Y tambin debes saber que, el diablo lo sabe hacer muy bien! No hace nada ms que matar, ro-bar y destruir; stas han sido sus especialidades desde que perdi su luz y cay del Cielo (Isaas 14:12). Y si no lo entiendes correc-tamente si no lo tomas en serio l puede destruirte!

    Ahora puedes ver por qu debemos ser sabios como serpientes y mansos como palomas. Sin embargo, algunas personas dicen que ellos no necesitan la ayuda del Espritu Santo en oracin. Dejan Su lenguaje a un lado y se niegan a permitirle interceder segn la mente de Dios por sus vidas hora tras hora. En contra de quin creen que estn operando de un dbil espiritual?

    Satans no es un enemigo que debe tomarse livianamente. Es un ser inteligente, y llega con un propsito: para matar. No hace nada ms que eso; y no sabe nada ms que eso. Y si no te cuidas de sus estrategias con la sabidura de Dios, tendr xito destru-yendo todo lo bueno en tu vida.

    Sabiendo que esto es verdad, cmo puede un creyente con-siderar que el pasar dos o tres horas en oracin es un sacri4cio? Qu es lo que est diciendo realmente? Anoche hice un sacri-4cio personal grande. Dej que Dios orara por m durante tres horas!

    No, ese creyente no hizo un sacri4cio grande. l apenas dis-frut el privilegio invalorable de orar en el Espritu. El Espritu

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    Santo cre un lenguaje de oracin dentro de l que se uni a la mente de Cristo y a la sabidura in4nita del Dios Omnipotente por su vida!

    Entender como opera ese proceso sobrenatural est ms all de mi comprensin natural. Pero puedo garantizarte que usar lo que l me ha dado!

    El Padre Celestial me lo ha prometido, y puedo compartirlo contigo: Si continas 4elmente buscando conocer a Dios por Su Espritu Santo una parte importante de ese proceso es el orar en otras lenguas de aqu a cinco aos, no sers la misma per-sona. No recordars los aos lamentndote que todos los das fueron iguales, un mes tras otro, hasta que pasaron inadvertida-mente tres y an cuatro aos, sintindote acabado, vencido y sin cambios, igual a como estabas cuando comenzaste.

    No, si buscas a Dios por el Espritu, al 4nal de cinco aos, podrs mirar atrs y comprobar que has tenido un crecimiento espiritual! Que has cambiado para mejor. Tendrs un mayor co-nocimiento de Jess conforme te haya revelado el Espritu Santo, y estars en camino a cumplir tu llamado divino mientras este se va desarrollando frente a ti!

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    "As que entra y conceme por el Espritu,

    Y te llevar de gloria en gloria, alimentndote con una herencia que te har saber cmo satisfacer el hambre y el ardor dentro de ti

    por conocerme segn Mi poder.

    Yo te mostrar estas cosas, Pero debes entrar en Mi Presencia

    y permanecer all hasta que te haya alimentado con tu ministerio, dice el Espritu de Gracia.

    #

  • 2Mi via je personal hacia e l conocimiento revelado

    Yo no pude aprovechar el plan de Dios para mi vida hasta que fui un adulto. No hubo nadie en mi niez que pudiera ensearme cmo hacerlo.Los principiosMi madre fue lo que llamo una alcohlica de todos los das, que muri a sus tempranos cincuenta aos con una cirrosis al hgado.

    Mi padre fue hijo de un predicador, pero no lo supe hasta mucho despus que respond al llamado ministerial, siendo ya adulto. Y aunque l era hijo de un predicador, pas la mayor par-te de su vida entrando y saliendo de la crcel. Iba y vena cuando yo era pequeo. Cuando tuve la edad su4ciente para entender, mam me cont que 4nalmente lo ech, cuando yo tena casi dos aos, porque me pegaba mucho.

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    Mi viaje personal hacia el conocimiento revelado

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    Recuerdo que yo esconda un avin de juguete bajo mi cama. Mam me lo compr con los centavos que ahorraba de sus com-pras en el mercado. Cuando mi pap se acercaba, tena que es-conder el avioncito; eso s lo entenda. El siempre me amenazaba, dicindome cosas como, Voy a dispararte con una escopeta lle-na de sal! No recuerdo mucho de las palizas que recib durante mi niez. Y aunque tuve muchos otros padres temporales que entraban y se iban, tampoco los llegu a conocer muy bien.

    A veces los vecinos venan por m, por mi hermano y mis dos hermanas. Nos limpiaban la cara, nos suban al automvil y nos llevaban a la iglesia. Era obvio que estbamos desatendidos.

    Finalmente, uno de nuestros abuelos nos recogi. Durante mis aos en la escuela secundaria me hizo trabajar como una bes-tia de carga, y cuando hablo de trabajo, quiero decir trabajo en serio! Cuando ingres a la Marina de los Estados Unidos, estaba en buen estado fsico, y aunque en mi vida jams haba hecho gimnasia, ni abdominales, ni Iexiones de pecho, an as, gan el campeonato de pulseadas en mi barco! Tambin me pidieron que boxeara para la marina. Toda mi fuerza fsica y el entrenamiento que tuve fue por trabajar para mi abuelo como un animal duran-te los aos de mi adolescencia.

    Mi abuelo tena pensamiento de la vieja escuela de la durezas cuando se trataba de criar a los hijos. Nunca supe mucho sobre el amor de Dios ni tuve nada que fuera mo. Prcticamente, en cada oportunidad que tena mi abuelo me deca, Nunca llega-rs a nada, nunca! Sers un bueno para nada igual que tu padre Roberson.

    A los diecisis aos, un amigo mo (que tambin era hijo de un predicador) me convenci que fuera con l a una iglesia Pen-tecostal todos los 4nes de semana para conocer muchachas, y despus de la iglesia salamos a beber.

    Bueno, la predicacin del pastor no conmovi a mi amigo en absoluto, pero empez a tocarme a m. Una noche me sent tan culpable que fui a la casa del pastor despus de 4nalizado el servicio.

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    Mi viaje personal hacia el conocimiento revelado

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    Llam a su puerta y cuando abri, le dije: Creo que hay algo mal en m.Eso se llama conviccin, contest el pastor. Lo que

    necesitas hacer es aceptar a Jesucristo como tu Salvador personal. Me pidi que me arrodillara al lado de una silla, y me condujo en la oracin del pecador.

    Sal de la casa del pastor sintindome liviano y feliz, y la prxi-ma vez que sal con mis amigos, me negu a beber con ellos. Sin embargo, nadie de la iglesia hizo el seguimiento para que fuera lleno del Espritu Santo o para ayudarme a crecer en mi vida espiritual. De modo que mis buenas intenciones solo duraron apenas dos semanas, y luego regres a mi antiguo estilo de vida de parrandero.

    Abandon la escuela y me fui de mi casa a los diecisiete aos, para nunca regresar. Fue cuando ingres en la marina. Poco des-pus de terminar mi servicio en la marina, me volv a Dios en una Iglesia de la Santidad extrema. Fue all que conoc a mi futura esposa, Rosalie.

    Las personas de esta iglesia me dijeron que mi Padre Celes-tial estaba haciendo lo mismo que mi padre natural hizo por m castigndome por cometer errores. Estaban ensendome lega-lismo, pero yo no lo entenda. Pens dentro mo: Bueno, supongo que perd a un padre como ese y recog a otro igual!

    El predicador del aserraderoEl primer ao despus de entregarme al Seor, se me hizo difcil permanecer en la iglesia. Pero poco despus de casarme con Ro-salie, fui bautizado en el Espritu Santo, y nunca ms regres a mi vida mundana. Jams quise regresar.

    Despus de unos aos, nos mudamos a un pequeo pueblo en Oregn llamado La Pine, donde la nica congregacin era una pequea iglesia de Santidad ms estricta de la que habamos salido. No haba ninguna otra iglesia o reuniones cristianas en

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    Mi viaje personal hacia el conocimiento revelado

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    esa area. Consegu trabajo en el aserradero y empec predicando ah!

    Todos mis compaeros del aserradero vivan en pecado, pero Dios me fortaleci para permanecer en la fe. El in4erno se lanz con toda su fuerza para alejarme de Dios. Pero debido a la mano sustentadora del Seor, me mantuve en pie.

    De vez en cuando algn predicador haca reuniones de avi-vamiento cerca de nuestra rea. Cuando esto suceda, los siete hombres que trabajaban conmigo en el aserradero venan al avivamiento por lo mucho que les haba insistido buscando con-vencerlos para que estuvieran en la reunin.

    La visin que me impuls al ministerioA los treinta aos, aun viva con esa imagen que fue construida dentro de m durante mi juventud, que nunca llegara a nada. Y que no mereca nada sino el castigo.

    Cuando nac de nuevo, tena un gran hambre y sed por Dios. En mi corazn saba que fui llamado a predicar el Evangelio. Pero no poda ver como Dios me usara en la vida, o si de hecho era apto para ser usado. Era un muchacho de la iglesia de Santidad, perdido dentro del legalismo.

    Pero yo amaba a Dios con todo mi corazn, y l tuvo miseri-cordia de mi alma. Me dio una visin que me impuls al trabajo en el ministerio a tiempo completo. Y esto no fue algo que so por haber tenido una indigestin al comer demasiado tarde en la noche; esto era real.

    Nunca me olvidar de mi experiencia. Nos habamos muda-do algunas veces y estabamos viviendo en un pueblito llamado Oakridge, donde haba continuado trabajando en un aserradero local. Una maana muy temprano me despert en la Presencia de Dios. Abr los ojos, esperando ver mi habitacin como de costumbre. En vez de eso, vi un gran auditorio. Haban varios casos de silla de ruedas sobre la plataforma. Yo estaba ubicado a la izquierda, tres 4las atrs.

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    Despus que 4naliz la alabanza y adoracin, el pastor aso-ciado regres al plpito y dijo: Ahora el evangelista Mientras hablaba, me mir directamente a los ojos para que respondiera. Tena mi Biblia abierta de hecho, la tena abierta en Judas 20 y 21, el pasaje que luego dio inicio a nuestro ministerio!

    Pero vosotros, amados, edificndoos sobre vuestra santsi-ma fe, orando en el Espritu Santo,

    Conservaos en el amor de Dios, esperando la misericordia de nuestro Seor Jesucristo para vida eterna.

    Judas , .

    Pero cuando empec a ponerme de pie, el pastor asociado se vol-vi y apunt a la cortina del escenario. Y una mujer rubia sali a la plataforma. Era obvio que estaba llena del amor y la uncin de Dios el poder del Espritu Santo, Iuan de ella como miel. Se senta el poder de Dios en una forma muy tangible. Me recost en el respaldar de la silla con pura incredulidad, porque saba que esta deba de ser mi reunin.

    La mujer tom el micrfono y ministr la gracia de Dios be-llamente. Entonces el poder de Dios cay, y todas las personas salieron de sus sillas de ruedas. El altar se llen de personas que confesaban a Jess como Salvador. La reunin estaba llena del poder y la uncin.

    Cuando todo termin, el resto de la multitud desapareci; solo quedamos la mujer y yo en el auditorio. Entonces ella me mir y me dijo, Yo no s por qu Dios me ha dado este tipo de ministerio; algn hombre debe haber fallado.

    Sal temblando de la visin. Despert a mi esposa Rosalie y le cont todo lo que haba visto en la visin. Decid que no podra vivir ms de la manera que haba estado viviendo dividido en-tre mi llamado a predicar y mis profundos sentimientos de falta de mrito. Estaba siendo vencido desde adentro hacia fuera.

    Le dije a mi esposa, Tengo que responder el llamado al mi-nisterio, as me hunda, nade o me ahogue. Estars conmigo si

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    comemos garbanzos, dormimos bajo un rbol, o vestimos a los nios en sacos de arpillera?

    Rosalie respondi que s. As que juntos esa maana, nos de-cidimos que no importaba lo que sucediera, iramos en pos de Dios. Dos semanas despus, renunci a mi trabajo en el aserrade-ro para dedicarme por completo al ministerio.

    El lugar de oracinCuando dej mi trabajo en el aserradero, no supe qu hacer con mi tiempo. Entonces pens en la iglesia pequea que Rosalie y yo habamos empezado unos pocos meses atrs. (Aunque haba empezado yo con la iglesia, le haba pedido a un ministro de otro pueblo que viniese todas las semanas para predicar. En ese momento, todava no tena el valor para hacerlo).

    Dentro del antiguo bowling donde nos congregbamos, haba dividido recientemente un rea de ocho pies por ocho pies donde antes exista un puesto de concesin, y convert ese espacio en una pequea guardera. Decid que usara esa rea pequea como mi lugar de oracin. Imagin de algn modo que si oraba la misma cantidad de horas que normalmente trabajaba, Dios me pagara proveyendo nuestras necesidades.

    No tena la menor idea de cun duro sera llevar a cabo mi decisin de orar ocho horas diarias. Esa primera maana que entr al lugar de oracin, cerr la puerta, me puse de rodillas, y empec a orar. Oh, Dios, ahora que me he dedicado por com-pleto al ministerio. Oh, Dios, mantn nuestras despensas llenas. No permitas que nuestros nios pasen hambre. same, Dios, por favor same! (Pas mucho tiempo pidindole a Dios. Era apenas un muchacho, de la iglesia de la Santidad, que aun no haba aprendido nada acerca de la fe).

    Or por todo lo que poda pensar, or por los misioneros alre-dedor del mundo que conoca. E incluso pas tiempo maldicien-do a las cucarachas que estaban all, ordenndoles que murieran

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    en el nombre de Jess! Pero a pesar de mis esfuerzos, termin de orar por todas esas cosas en tan solo quince minutos.

    As que para sobrevivir las largas horas que tena por delante, ya que me haba comprometido a orar, opt por orar en lenguas. No empec a orar en lenguas porque saba que era algo bueno. La verdad es que ni siquiera saba si era bblico hacerlo. Algunas personas de la igleisa de la Santidad me haban dicho que no podra orar en lenguas cuando quisiera. Pero tambin haba es-cuchado por otros que era bueno usar las lenguas como lenguaje de oracin.

    No estaba seguro cul de las dos creencias era la correcta. Todo lo que saba era que tena que quedarme en ese lugar de oracin porque haba renunciado a mi trabajo. As que empec a orar en lenguas desde ese primer da con el propsito de pasar las horas all.

    Finalmente, a las diez en punto de la maana, son el silbato del aserradero. Era el momento de descanso y de tomar caf! Me di prisa para bajar a la cafetera, com unas donuts, y me apresur para regresar a mi lugar de oracin. En mi mente, tena que estar nuevamente en la posicin de oracin en quince minutos al mismo tiempo que los trabajadores del aserradero reanudaban sus labores.

    Segu orando en lenguas. Or por lo que pareca ser varias horas, pero ni siquiera haba llegado el medioda!

    Nuevamente el sonido del silbato del aserradero me trajo a la realidad del horario diario de mis amigos y a la decisin radical que haba tomado. Era la hora de almuerzo de los obreros en el aserradero, y la oscuridad del lugar de oracin pareca rodearme.

    Mis antiguos compaeros de trabajo se haban pasado las l-timas cuatro horas a la luz del sol, cortando y formando madera para enviarla por todo el mundo. Al sonido del silbato, todos sacaran sus almuerzos y se sentaran en los bancos, listos para comer, relajarse y contar chistes. Saba lo que aquellos hombres estaban haciendo, pero yo no estaba con ellos. Realmente crea en Dios? Realmente vera un resultado? Tena que creer.

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    Recuerdos de mi bsqueda por respuestasMi mente regres a esa reunin por la noche, en la iglesia Pente-costal, donde por primera vez o, con reserva y emocin, sobre la revelacin del bautismo del Espritu Santo y el don de hablar en lenguas que acompaaba la experiencia. Durante el camino a casa, Rosalie y yo discutimos lo que habamos odo mientras nuestros tres hijitos dorman acurrucados en al asiento de atrs de nuestro Volkswagen.

    Rosalie haba recibido el bautismo del Espritu Santo cuando era una adolescente. Empec a preguntarme si esta experiencia podra ser mi respuesta a la vida de frustracin y arrepentimiento constante por pecados que no pareceran desaparecer.

    Pareca que para muchos cristianos, la transformacin ocurra inmediatamente despus de que volvan a nacer. Era esa la ver-dad, y si lo era, por qu pareca tan difcil para m experimentar el cambio? Podra la intercesin del Espritu Santo a travs del orar en lenguas ser la respuesta que necesitaba para cruzar esa lnea invisible y convertirme en un verdadero vencedor?

    Despus de una penosa noche que haba resultado en un fra-caso espiritual y personal regres a mi hogar para reencontrarme con Rosal y mis hijos. La mirada de desilusin en la cara de Rosalie fue su4ciente para ahuyentar la inIuencia persistente de los tragos que haba compartido con unos amigos. Un sentido fuerte de conviccin se despert dentro de m. Estaba al borde de la desesperacin y la autocompasin.

    Rosalie acost a los nios en la cama mientras yo me sentaba en en la silla de la cocina, con la cabeza inclinada hacia abajo por la vergenza y remordimiento que senta. Silenciosamente, se acerc a m, y tom mis manos en las suyas, como para decir que ella estaba conmigo en esta batalla.

    Desde esa noche en adelante, Rosalie y yo empezamos a orar juntos ms seguido, y mi deseo de saber ms sobre el bautismo en el Espritu Santo continu aumentando. Hablbamos a menu-do sobre ese don. Estaba tan hambriento de conocer realmente

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    a Dios, y deseaba mucho obtener las respuestas a mis muchas preguntas.

    En ese momento ya conoca el pasaje de Hebreos 11:6:

    Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardo-nador de los que .*

    Podra ser que la oracin en el Espritu fuera parte de buscar diligentemente a Dios?

    Cuando me arrodillaba para orar en lenguas en el lugar de oracin, la respuesta a esa pregunta pareca cobrar mayor im-portancia. Regres al mundo de mis recuerdos, pensando, Qu estoy haciendo en este pequeo cuarto, cundo debera estar ponien-do mis ocho horas de trabajo en el aserradero local? Estaba loco, o haba empezado una verdadera aventura en las aguas profundas de Dios?

    Cumpliendo mi tiempo con DiosLas respuestas a estas preguntas permanecan en el futuro. Mien-tras tanto comenc mi primer da orando en el lugar de oracin cumpliendo mi tiempo con Dios. Mi mente se llen de pre-guntas, dudas y ansiedad cuando oraba en el Espritu. Podra un hombre profundizar ms en Dios a propsito solo porque l lo quisiera?

    Permteme decirte, que esas horas en el lugar de oracin fue-ron largas! Oraba en lenguas por lo que pareca como una hora y cuando miraba mi reloj deca, Oh, no, solo pasaron cinco minutos! As que volva a orar de nuevo.

    En los meses siguientes me presentaba en mi lugar de oracin de la misma manera como antes lo haba hecho en el aserradero. Cuando el silbato del aserradero sealaba el comienzo de cada da de trabajo, siempre estaba de rodillas listo para orar.

    *Nota del traductor: La versin de la Biblia en ingls King James traduce, DILIGENTEMENTE LE BUSCAN. Esta traduccin viene del hebreo original.

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    Cada da, las horas parecan interminables, pero yo persista. Memoric cada mancha de la alfombra y la pared. Y conoca aquel lugar de oracin tan bien que an hoy en da podra tomar un lpiz y papel y dibujarlo con todo detalle. Senta como si es-tuviera en una prisin.

    Desde mi aposento, poda oler la madera quemada mientras las sierras cortaban los rboles altos. Y poda imaginarme a mis amigos disfrutando de los almuerzo y bebiendo caf caliente.

    Un da estaba pasando por un momento difcil y me pregunt, por qu haba yo dejado mi trabajo para hacer esto? qu es lo que supuestamente lograba este lenguaje sobrenatural?

    Mi espritu humano se levant y declar la Palabra a mis emo-ciones vacilantes: Dios es galardonador de aqullos que diligen-temente le buscan (Hebreos 11:6). Entonces comenzaron a pasar por mi mente, en forma continua, una serie de imgenes de mis fracasos que parecan no tener 4n. Y me encontr ahogndome en las emociones que esos recuerdos trajeron. Oh Dios, clam,

    permite que esta palabra sea real para m! Y gradualmente la paz empez a calmar mi mente aIigida.

    Dios no me haba dicho que dejara mi trabajo y orara en el Espritu por ocho horas todos los das. Esta fue una decisin que yo haba tomado en un momento de desesperacin. Quera ms de Dios pero no estaba seguro de cmo encontrarlo.

    De mis lecturas bblicas, haba aprendido que el lenguaje de oracin me fue otorgado para mi edi4cacin, y que poda orar misterios, pero no comprenda lo que realmente signi4caban esas verdades. Sin embargo, me haba determinado que si el orar en lenguas me iba a edi4car hasta que mi mente pudiera recibir los misterios divinos, eso era lo que iba a hacer.

    Un descanso bienvenidoAs que continu orando en lo que parecan interminables horas y los das transcurran. Pasaron dos meses lentamente. Entonces una mujer, que haba conocido en un estudio bblico carismtico,

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    escuch hablar sobre lo que estaba haciendo. Un da vino a la iglesia y golpe en la puerta del cuarto de oracin.

    Hermano Roberson" llam. He escuchado que us-ted ha estado orando por muchas horas y das.

    S, seora. Yo quiero saber ella dijo, puede decirme si nota

    alguna diferencia?Usted se re4ere a la diferencia en mi caminar con Dios o

    qu?No, solo quiero saber si usted ha notado alguna

    diferenciaDe hecho, puedo, respond.Le molestara compartirlo?No, en absoluto respond. Mi lengua est cansada,

    mi garganta est seca, y mi barbilla est agotada.Nerviosamente me respondi: Disclpeme, ya tengo que irme. Y se fue el 4n de aquella conversacin! Pas otro mes. Llevaba encerrado tres meses en es cuarto

    orando y la misma mujer regres y golpe en la puerta.Hermano Roberson dijo, usted conoce a la iglesia

    que voy. S, seora, la conozco, contest. Usted sabe que ellos no creen en hablar en lenguas. S, lo s.Bueno, este 4n de semana mi iglesia tendr una reunin

    de laicos para dar testimonio donde los hermanos de varios esta-dos se renen para decir las cosas buenas que Dios ha hecho por ellos. Le gustara venir?

    Pens, Claro que me encantara ir! Y usara cualquier excusa para salir del lugar de oracin! Le dije a la mujer, nos veremos all!

    Corr a casa, me cambi de ropa, y de prisa fui a la casa donde las personas se haban reunido para el estudio bblico matutino. Llegu tarde a la reunin, as que no saba que la anciana que

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    estaba sentada a mi lado tena que caminar usando una muleta y que alguien la haba puesto en una esquina cercana. No tena ni idea que la mujer estaba coja.

    Me sent, esperando que el orador empezara su mensaje. Es-taba tan entusiasmado. Me haba encerrado en un aposento de oracin por tres meses. Y ahora no solo estaba con otras perso-nas, sino que iba a or un mensaje realmente vivo enseado por una persona realmente viva! Apenas poda esperar.

    Finalmente el hombre se puso de pie para hablar, sosteniendo un montn de notas. (Si sus notas hubieran sido un pergamino, podran rodarse hasta la parte de atrs de la casa!). No pas mu-cho tiempo que su mensaje dio un nuevo signi4cado a lo que es no estar lleno del Espritu Santo!

    En un lenguaje elaborado y rgido, con una voz montona, el hombre disert sobre Jess, el gran intermediario celestial, las aguas turbulentas de la humanidad, y el Dios Omnipotente. Sentado en mi silla, pens, En donde me haba metido? Esto era terrible! Prefera mejor regresar a mi lugar de oracin!

    Dios se presenta inesperadamenteMis pensamientos divagaban en la reunin, y no saba qu hacer. Para entretenerme, empec a agitar mi taza de caf para as poder mirar como el caf se ondulaba en crculos al borde de la taza.

    En medio de mi aburrimiento, mir a la anciana a mi lado. No tena idea de lo que iba a pasar. No senta ninguna uncin. No senta nada! Pero cuando la mir, de repente vi suspendido entre los dos lo que pareca una radiografa de la cavidad de la cadera de alguien. Tena una sustancia oscura alrededor de la ar-ticulacin, que se extenda de tres a cuatro pulgadas debajo de la pierna.

    Casi dej caer mi taza de asombro! Pestae, pero la radiogra-fa permaneca ante mis ojos. Mir alrededor para ver si alguien ms poda ver lo que yo estaba viendo. Y al parecer nadie perciba el hecho.

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    Mientras miraba la radiografa, empec a orar, Oh, Dios, oh, Dios Qu es esto? Quieres Seor que ore por esta mujer? Seor, qu quieres que haga? Pero Dios permaneca completamente en silencio.

    (Un tiempo despus, cuando compart este testimonio du-rante un servicio, el Seor habl en mi espritu, diciendo, Hijo, quieres saber por qu no te habl en ese momento Por qu te dej seguir perturbando el servicio? Porque si Yo no estaba oyendo la enseanza de ese hombre, por qu debera hacerte a ti escucharla? sa fue una revelacin en s misma!)

    Me acerqu a la anciana y le dije, Seora, usted tiene pro-blemas con su cadera! Se volte y con su mirada me estudi por un largo rato.

    De repente la palabra artritis salt a mi espritu. Y exclam, Es artritis en su cadera derecha!

    Me sigui estudiando por ms tiempo y respondi, Eso es lo que el doctor me dice, joven.

    Exclam, Gloria a Dios! Cmo dice? Pregunt.Quiero decir, Dios quiere sanarla, seora. Puedo orar por

    usted?La anciana segua estudindome. Recuerde que esta iglesia no

    crea en hablar en otras lenguas. As que para la mujer mi solici-tud signi4caba que en algn momento, en el transcurso del da, la recordara en mis oraciones.

    Pero eso no es lo que orar signi4caba para m. Yo era un pen-tecostal que saltaba bancos, brincaba de silla en silla, y alzaba mi voz con mucho entusiasmo! Crea que cuanto ms fuerte gritaba, mayor poder generaba!

    Finalmente, la anciana contest, S, puede orar por m.Tan pronto como lo dijo, brinqu de mi silla, me arrodill

    delante de ella, le agarr los dos tobillos, y los jal hacia m. (En-tretanto, el excelente orador con lengua de oro todava estaba

    orando!). Entonces mir los pies de la anciana y pens, Oh, no! Una pierna era seis pulgadas ms corta que la otra.

    USUARIOResaltado

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    Oh, no, esto es horrible! Pens. Nunca he visto el tipo de mila-gro que esta mujer necesita! Estaba demasiado asustado para mi-rar, as que cerr los ojos, y exclam, En el Nombre de Jess! Y empec a orar en voz alta, y de la forma ms intensa y santa que poda pensar.

    Unos testigos de la escena me dijeron ms tarde que a la pri-mera mencin del poderoso Nombre de Jess, la pierna ms cor-ta de la mujer hizo un chasquido y estall; entonces creci de repente hacia afuera hasta que qued pareja con la otra pierna!

    La mujer haba sido totalmente e instantneamente sanada! pero yo no lo saba. An tena los ojos cerrados, y todava esta-ba orando muy intensamente. Y en mi celo, casi tumb a la se-ora fuera de su silla y hacia el suelo, antes que los otros pudieran hacer que yo soltara sus tobillos!

    Pero Dios no necesit de mi ayuda. l hizo que esa pierna creciera sin que me diera cuenta! Cundo al 4n abr mis ojos y vi el milagro, estaba tan asombrado como todos los dems!

    En el momento en que empec a orar por la mujer, el hombre que estaba hablando asi a su ministro asociado y le susurr, ve y agarra al fulanito ese y detenlo! (Y realmente no lo culpo; yo estaba destruyendo su servicio con mi oracin en voz alta.)

    El asociado se dirigi hacia donde estaba el tumulto y, segn aqullos que presenciaron la escena, lleg justo en el momento preciso para ver el milagro. Estaba casi a punto de agarrarme cuando vio la pierna corta de la mujer que de repente creci seis pulgadas.

    As que en lugar de parar la conmocin, el hombre se qued mudo de asombro. Nunca haba visto un milagro, y ni siquiera hablaba en lenguas! En lo que respecta a lo sobrenatural, este hombre no crea en nada. As que cuando vio el milagro, se que-d mudo. Como hizo un impacto Dios en ese momento!

    Entonces el ilustre orador termin su mensaje con la pregunta, Cul es el suceso ms sobresaliente de eventos que posiblemente podran atribuirse al factor de Dios en su vida?. Mientras todos los dems estaban preguntndose lo que quera decir, el ministro

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    asociado contest la pregunta del hombre sealando a la anciana sanada y balbuceando, Aqu! La sanidad de esta anciana fue ciertamente el suceso ms sobresaliente de todos los eventos que l haba visto!

    Despus del servicio, el orador se acerc a la anciana e intent decirle, Seora, Dios no realiza milagros en estos tiempos.

    Pero la anciana contest, Quiere usted apostar, hijito? Quiere usted apostar? Agarr su muleta y empez a caminar alrededor de la habitacin. Mova la muleta de un lado a otro, usndola para mantener distancia de las personas mientras les mostraba lo bien que poda mover su cadera sanada.

    Despus de la reunin en la casa, toda la congregacin asisti a un banquete especial en la iglesia. Por alguna razn, no me invi-taron. (Me pregunto por qu!) Pero Dios no necesitaba que ellos me invitaran para que Sus propsitos se cumplan la anciana fue al banquete!

    Antes que los encargados pudieran hacer algo, la seora se levant y dio su testimonio en el banquete. Despus que termin, grit, Y lo que Dios hizo por m, l lo har por usted! El lugar estall de emocin.

    Luego, una mujer que asista al banquete busc a la anciana. Ella haba tenido un accidente automovilstico y ahora era inca-paz de agacharse. Piensa que Dios me sanar? pregunt.

    La anciana contest, Creo que l lo har. Llammos a ese hombre que or por m.

    A esa hora yo haba ido a casa, me haba cambiado de ropa, y estaba ocupado trabajando en el patio. El telfono son, era la anciana que haba recibido el milagro. Me explic la situacin de la otra mujer y pregunt si ellas podan pasar por mi casa para que yo orase por la mujer.

    Estaba a punto de decirle, Puede traerla y tambin puede traer a todos los que deseen recibir oracin! (Yo todava estaba sumergido en el Espritu Santo). Pero luego, el Espritu Santo habl a mi espritu claramente: Ve al auditorio principal de la

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    iglesia. As que le dije a la mujer, me reunir con usted y su amiga en la iglesia.

    De repente hubo un silencio en el otro extremo de la lnea. Despus de un rato, o a las dos mujeres que susurraban entre s. Entonces la anciana me dijo, Lo encontraremos al frente de la iglesia.

    Cuando llegu a la iglesia, las dos mujeres me salieron al en-cuentro e intentaron llevarme a un cuarto en el stano de la igle-sia, lejos de todos los dems. Pero yo les segu insistiendo en lo que el Espritu Santo estaba hablando a mi espritu: El auditorio principal, tenemos que ir al auditorio principal. Finalmente, las seoras desistieron y me llevaron al auditorio principal, donde la gente todava estaba de pie en pequeos crculos, conversando entre ellos.

    Me par mirndolos. No saba qu hacer. Solo estaba all porque estaba obedeciendo al Espritu Santo. Entonces el hom-bre que haba presenciado el milagro dijo, Creo que este hombre quiere decir algo.

    Pens, yo? Nunca antes haba predicado, y tuve miedo. To-dos me miraban de forma corts. Y tmidamente empec a dar testimonio sobre la anciana. De repente el Espritu Santo cay sobre m, y me sent absorto en la imponente y poderosa Presen-cia de Dios. El don de fe cay sobre m (aunque en ese momento, no lo entenda), y me escuch diciendo cosas que eran tan buenas que saba que no podan ser de m mismo; adems no era tan inteligente. Quera salir de mi cuerpo y tomar notas!

    Mientras el don de fe todava estaba obrando, vi a un joven y a medida que me acercaba a l, de repente vi el rea del su hombro totalmente transparente como una radiografa, y en el Espritu vi la articulacin del hombro y el problema que tena. El joven solamente poda levantar el brazo en forma limitada.

    Le dije al joven, Su hombro sanar!. Mientras ms me le acercaba, pareca ms horrorizado. Sus ojos se agrandaron, y se alejaba de m cuanto poda. Pero no lo ayud corr hacia l y

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    lo tom por la mueca. Le dije, En el Nombre de Jess! y estir de su brazo enderezndolo en el aire.

    El joven gritaba mientras levantaba su brazo me mir asombrado y pregunt, Por qu no me duele?

    Seguro que no te doli!, contest. El don de fe que estaba obrando en mi me llev a actuar conforme a la mente de Dios, y fue con la fe de Dios que el hombro de este joven qued com-pletamente sano.

    (Ms tarde esa noche, cuando el don de fe ya no estaba obran-do, me acost en la cama, pensando, Roberson, t eres tan tonto! Qu hubiese pasado si le hubieras roto el brazo a ese hombre? En ese entonces no saba que cuando el don de fe est obrando, una persona piensa como Dios lo hace, y puede llegar a hacer cosas que no tienen sentido en lo natural.)

    Entonces la mujer que no poda doblar la espalda corri ha-cia m. Esa misma fe sobrenatural todava estaba sobre m. Y le puse la mano en la parte de atrs del cuello y la dobl hacia abajo hasta que ella alcanzara los pies. Se san al instante con el poder de Dios.

    Los milagros continuaron. Finalmente los ancianos de la igle-sia vinieron y dijeron, Esto se acaba ya! Este hombre est con-virtiendo la reunin en un gran desorden, en algo salvaje, No lo vamos a permitir!

    Pero antes de que pudieran hacer algo, grit, Quin quiere lo que tengo? Inmediatamente todos los jvenes corrieron hacia m, y empec a orar por ellos. Todos empezaron a ser llenos del Espritu Santo, hablando en lenguas y cayendo bajo el poder de Dios. Los adultos no saban lo qu estaba pasando! Iban de uno al otro tomndoles el pulso a los jvenes y preguntndoles, Es-ts bien?. (La mayora de esos jvenes siguen sirviendo a Dios hoy; y algunos ya se han graduado de la Escuela Bblica.)

    La gente estaba hablando en lenguas en todo el auditorio, y los ancianos estaban desesperados. Mientras intentaban contro-lar la situacin, sal por una puerta trasera. Estaba tan sumergi-do en el Espritu, que apenas saba donde estaba. Casi no poda

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    caminar. Me tambaleaba en la acera hasta que encontr un poste de hierro que serva de soporte de la iglesia. Me apoy contra el poste y llor como un beb.

    Dios me haba usado! Debido a mi educacin, mi mente no poda comprender el hecho que el Dios del universo aquel que las personas de la iglesia de la santidad extrema me haban dicho que me castigara ocupara la misma habitacin que yo para obrar un milagro a travs de m. No puedo explicar lo que senta. Mira, yo conoca mis limitaciones; me conoca. Pensar que Dios estaba obrando conmigo y a travs mo para establecer Su Reino aqu en la Tierra era mucho ms de lo que poda entender.

    Por qu usara a alguien como yo? En todos los aos despus de haber vuelto a nacer, y ser lleno del Espritu Santo, saba que tena el llamado de Dios en mi vida. Y siempre haba tenido tanta hambre de conocerlo en Su poder. Pero nadie pudo decir-me cmo caminar en el poder de Dios, a propsito nadie! La gente poda solo darme vagas generalidades que no satisfacan ese hambre profundo.

    Descubrimiento de una ley espiritual por accidente!Entonces, cuando me apoy en el poste, de repente la profeca empez a Iuir, y recib el conocimiento revelado que mi corazn haba estado buscando desde el principio. No saba lo su4ciente para expresar lo que oa en mi espritu.

    El Espritu Santo me dijo, Hijo, esta uncin no vino de re-pente sobre ti; estaba predestinada para esta reunin desde antes de la fundacin del mundo. No vino slo sobre ti por causa de tu llamado evangelstico. Yo deseo que todos mis evangelistas mi-nistren en Mi poder.

    Esta uncin no vino sobre ti debido a tu llamado, tu cre-do, tu color o tu nacin. Vino sobre ti porque t has descubierto una ley espiritual: que es el orar en otras lenguas para tu edi"cacin

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    personal. Esa ley lleva consigo una rigurosa garanta para edi4car tu espritu en tu santsima fe de donde proviene la fe.

    Has encontrado algo que puedes utilizar, a propsito, para edi4carte a t mismo cuanto quieras, el tiempo que quieras, y las veces que quieras. A travs de la oracin en el Espritu Santo, puedes edi4carte a un nivel en tu espritu donde tus sentidos fsi-cos no podrn mantenerte en la derrota y no podrn convencerte contrariamente a la Palabra de Dios. Puedes entrar en un camino vibrante, lleno del Espritu y libre en el Espritu Santo.

    Despus de estar tan hambriento por el poder de Dios por tanto tiempo, haba descubierto accidentalmente una de las cla-ves ms importantes para crecer en una fe que pone al diablo bajo nuestros pies, y mueve montaas orando en lenguas para la edi4cacin personal. Y piensas que despus de encontrar seme-jante clave que abre los misterios divinos, alguien podra sacarme de mi lugar de oracin? De ninguna manera! Tena que descu-brir el divino plan para mi vida!

  • "Hay una operacin del Espritu

    del cual muy poco conoces. Pero mientras continas creciendo

    y caminando en Mi Espritu,

    Te mostrar las cosas que la Iglesia del primer tiempo vivi.

    Te mostrar las cosas que iniciaron tal operacin de Mi Espritu,

    que muchos vinieron de las ciudades y alrededores, y Mi poder manifestado era tan evidente

    que todos fueron sanados.

    Te mostrar el lugar santo en donde nacen los ministerios.

    Te mostrar los elementos que estn omitidos ahora, elementos que una vez los hombres vieron claramente,

    y en los que insistieron hasta que obtuvieron la plenitud del Espritu.

    Te mostrar las cosas de las cuales los hombres tienen hambre que solo pueden ser satisfechos

    por la comunin con l Seor.

    #

  • 3

    Los dones espir i tuales y sus operaciones

    Las escaleras parecan interminables mientras Rosalie y yo las subamos ms y ms. De prisa! Me segua diciendo a m mismo, quizs todos los asientos estn ocupados.Finalmente llegamos a la ltima seccin de asientos. Tan solo

    unos pasos ms y nos podramos sentar. Mientras yo buscaba dos asientos, un diluvio de gente pareca inundar los pasillos; rpida-mente cada asiento vaco se iba ocupando. Rosalie y yo seguimos subiendo hasta la ltima 4la, pero todos los asientos ya haban sido ocupados.

    En ese tiempo yo todava trabajaba como aserrador. La sema-na anterior, Rosalie y yo habamos odo que la famosa evangelista, Kathryn Kuhlman, estaba visitando nuestro estado. Y decidimos que era una oportunidad demasiado grande como para perderla. As que, en el da de la reunin, manejamos todo el camino a Portland desde nuestra casa en Gilchrist, Oregn (al pueblo que nos mudamos despus de vivir en La Pine). Pero ahora no poda-mos ni siquiera encontrar dos asientos! Despus de un desaliento

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    Los dones espirituales y sus operaciones

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    momentneo, vimos dos escalones en la cima y nos sentamos en el hormign fro por las prximas tres horas y media.

    Esto es lo que tengo para tiEl servicio fue ms all de lo que nuestros anhelantes ojos y odos pudieron haber anticipado. Yo estaba asombrado del nmero de milagros y las sanidades indiscutibles que ocurran ante nuestros ojos. Entonces la Srta. Kuhlman dio una splica apasionada para que la gente entregara su vida a Jess, y yo miraba asombrado la gran muchedumbre de gente que responda al llamado del Espritu Santo.

    Me encontraba sentado all en absoluto temor reverencial, cuando de repente o que alguien llamaba mi nombre. Yo me volv y le pregunt a Rosalie si ella me haba dicho algo. Ella con su cabeza dijo que no; no haba dicho una palabra.

    Volviendo de nuevo al escenario, continu mirando todo los msicos, la Srta. Kuhlman, las personas respondiendo al llamado del altar con gran atencin.

    David. Otra vez esa voz! Quin estara hablando en un mo-mento as? Impacientemente me di vuelta, y mir 4jamente a un hombre sentado detrs de m. l me devolvi la mirada de forma distrada. Su atencin estaba en la reunin, y no en mi.

    As que me volv a mirar a las muchas personas que pasaron al frente para aceptar a Jess como su Salvador. Oh, era emo-cionante! Yo estaba maravillado. Qu deba hacer o rendir para llegar a ese lugar en Dios que la Srta. Kuhlman haba alcanzado, donde las personas responden tan rpidamente al llamado del Espritu Santo a travs de uno?

    David, nuevamente o. Mi adrenalina estaba bombeando a un nivel tan alto por todo lo que estaba viendo y oyendo que me d vuelta y bruscamente le pregunt al mismo hombre que estaba sentado detrs de m, Qu quiere?. El hombre apenas me mir inexpresivamente por un momento. Entonces con el

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    mismo inters que l dara a una piedra en la playa, me respondi suavemente, yo no le dije nada.

    Entonces, quin lo hizo? Me pregunt, irritado. Y me di vuelta para mirar al escenario nuevamente. Entonces o la voz una vez ms solo que esta vez dijo: Esto es lo que tengo para ti. Mi mente corra mientras miraba atentamente los milagros ante m. Podra ser? Esto iba ms all de la creencia. Esto era la uncin y los dones espirituales en accin, tal como yo nunca haba visto en mi vida.

    No puede ser que haya odo la voz de Dios! Seguro que era el diablo intentando engaarme! Pero yo no me dejara engaar.

    Mientras Rosalie y yo regresbamos en el automvil a Gilchrist, el recuerdo de esa voz se repeta una y otra vez en mi mente.

    Mi mente se llen de pensamientos de duda y estos golpea-ban con fuerza en mis alteradas emociones. Era mi mente la que inventaba esta voz. Era eso! vanas imaginaciones. Oh, y cmo derrib esas imaginaciones mientras iba conduciendo de cami-no a casa esa noche.

    Sin embargo de algn modo, en lo ms profundo de mi ser, saba que era Dios. Yo haba odo Su voz audiblemente con mis propios odos, y Sus palabras haban tocado mi corazn.

    Oh, Dios, or, Tienes realmente un don para alguien como yo? Cmo se da un don espiritual? Puedo hacer algo para causar que suceda?

    El Seor oa el clamor de mi corazn. Ms tarde, recibira la primera de muchas respuestas a esas preguntas mientras me apoyaba contra ese poste de hierro, despus de perturbar la reunin en la iglesia. All el Seor me revel que yo haba descu-bierto una ley espiritual con respecto a las lenguas para la edi4-cacin personal.

    Inmediatamente empec a tomar ventaja de lo que aprend ese da. Y mientras continuaba orando en el Espritu y estudiando la Palabra, me vena ms revelacin. Pero mientras ms aprenda, ms me daba cuenta que el hablar en otras lenguas no era sola-mente una ley espiritual descubierta; sino tambin era una base

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    espiritual sobre la cual todo lo dems descansaba con respecto a los dones espirituales y su operacin.

    Entendiendo los dones espiritualesMiremos el lugar que ocupa la oracin en lenguas dentro del gobierno de Dios. Para hacer esto, tendremos que ir a Primera de Corintios captulo 12, donde Pablo describe la operacin del Es-pritu Santo con los dones, los ministerios y los llamados dentro de todo el Cuerpo de Cristo. l empieza diciendo en el verso 1:

    No quiero, hermanos, que ignoris acerca de los dones espirituales.

    Ahora, yo s esto acerca del Espritu Santo: l no inspirara a Pablo para hacer una declaracin como esa y luego dejarnos ig-norantes! En la discusin que sigue a esa declaracin, Pablo por el Espritu Santo proporciona toda la informacin necesaria para erradicar cualquier ignorancia espiritual, conceptos errneos, o error religioso que nosotros podamos tener acerca de la opera-cin de los dones espirituales.

    Personalmente, si hay algn asunto sobre el que no quiero ser ignorante, es sobre la operacin de los dones del Espritu. Pero, para ser franco, sta es una de las reas que ms carencia tiene esta generacin de creyentes. Nosotros, el pueblo de fe que creemos en el evangelio completo, a menudo nos enorgullecemos pensan-do saber mucho sobre los dones del Espritu. Es una pena que no nos hemos instrudo ms en saber cmo operar en los nueve dones!

    Satans, el gran engaador, con xito ha difundido confusin y divisin con respecto a este pasaje de la Escritura en Primera de Corintios 12 tanto as que denominaciones enteras se han dividido por las diferentes interpretaciones de la operacin de los dones espirituales, y por los ministerios que reconocen. As que, nos bene4ciara hacer un examen cuidadoso de lo que Pablo est enseando a la iglesia de Corinto en estos versculos.

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    En Primera de Corintios 12:46, Pablo dice esto:

    Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espritu es el mismo.

    Y hay diversidad de ministerios, pero el Seor es el mismo.

    Y hay diversidad de operaciones, pero Dios, que hace todas las cosas en todos, es el mismo.

    Qu est diciendo Pablo? De hecho, sabemos que los dones a los que se re4ere en el versculo 4 son los nueve dones del Espritu descritos en Primera de Corintios 12:810: 1) la palabra de sabidu-ra; 2) la palabra de ciencia; 3) el don de fe; 4) dones de sanidades; 5) el hacer milagros; 6) profeca; 7) discernimiento de espritus; 8) diversas (o diferentes) manifestaciones sobrenaturales de lenguas; y 9) interpretacin de lenguas.

    Pero qu signi4ca en el verso 5 cundo dice, Y hay diversi-dad de ministerios, pero el Seor es el mismo"? Para entender lo que Pablo est escribiendo en este versculo, tenemos que leer Efesios 4:8 y 11, donde dice esto:

    Por lo cual dice: Subiendo a lo alto (Jess), llev cautiva la cautividad, y dio dones a los hombres

    Y l mismo constituy a unos, apstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros.

    En otras palabras, hay diversidad de ministerios y funciones dentro del Cuerpo de Cristo, como apstol, profeta, evangelista, pastor y maestro. Pero es el mismo Seor Jesucristo que ascendi a lo alto y les dio esos dones y ministerios a los hombres.

    Entonces en Primera de Corintios 12:6, dice: Y hay diver-sidad de operaciones, pero Dios, que hace todas las cosas en todos, es el mismo. As que Pablo, simplemente est diciendo lo siguiente: El Espritu Santo es quien determina como operan los nueve dones y los ministerios. Jesucristo llama a cada persona

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    a una funcin o un ministerio. Y el Padre es quin proporciona el plan original.

    Los dones capacitan y dan poder a los ministeriosLos versos que ya hemos ledo en Efesios 4 enumeran los dones de los cinco ministerios, sobre los cuales hemos odo tanto. Los nueve dones del Espritu comisionan o habilitan y cali4can estos cinco ministerios. Como puedes ver, el propsito de Dios es que cada persona llamada a una de estas funciones ministeriales pre-dique la Palabra con seales (Marcos 16:20). Nunca fue la inten-cin de Dios que la predicacin de Su Palabra fuese sin poder.

    Los dones espirituales capacitan y dan poder a los ministerios de la misma forma que una planta elctrica suministra energa a diferentes electrodomsticos en una casa. Cada electrodomstico se disea para realizar una funcin diferente, y a la vez cada uno depende de la conexin de una misma planta elctrica.

    De manera similar, podramos 4gurar que un cable va al apstol, otro al profeta, y otro al pastor, pero cada funcin mi-nisterial depende de la conexin con l Espritu Santo. Cuando el poder de Dios se activa, tan ciertamente como una tostadora fun-ciona de una forma y una batidora funciona de otra, el Espritu Santo unge los diferentes ministerios con una mezcla particular de los nueve dones.

    Estas mezclas de los dones espirituales obrando en los cinco ministerios es lo que cali4ca a una persona para funcionar en un ministerio y determina cual de los ministerios ser.

    Las ocho operaciones de DiosPero el gobierno de Dios se extiende mucho ms all que solo la operacin de los dones del Espritu y los cinco ministerios. Estos nueve dones y cinco ministerios en realidad estn dentro de ocho operaciones completas de Dios, que se describen en Primera de

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    Corintios 12:28. Estas operaciones constituyen la estructura del gobierno de Dios e incluyen a cada persona en el Cuerpo de Cristo.

    Vosotros, pues, sois el cuerpo de Cristo, y miembros cada uno en particular.

    Y a unos puso Dios en la iglesia, primeramente , luego , lo tercero , luego los que hacen , despus los que , los que , los que , los que tienen .

    Corintios :, .

    Las ocho operaciones mencionadas en el verso 28 estn en orden divino. En esta lista, el gobierno de Dios empieza con la pode-rosa funcin del apstol, la primera operacin, seguida por el profeta y el maestro.

    Los evangelistas y pastores mencionados en Efesios 4:11, se reemplazan en Primera de Corintios 12 con milagros y dones de sanidad. Estos dones del Espritu son los primarios que facultan y cali4can el ministerio evangelstico y pastoral. (El nivel de en-trada a los cinco ministerios tambin est al nivel de obrar mila-gros y dones de sanidad, porque todos los ministerios apstol, profeta, evangelista, pastor y maestro deberan estar equipados con estos dos dones del Espritu.)

    Luego est la funcin de los que ayudan, que manejan los aspectos fsicos y materiales del ministerio. Uno de los llamados ms importantes en el ministerio es el de los que ayudan, el em-presario que simplemente da. Una persona llamada a cumplir esta funcin es alguien con los medios econmicos y la capacidad en su carcter y en su llamado de ser usado por Dios, para sem-brar grandes cantidades de dinero en el Reino de Dios y para ser administrado por el gobierno de la Iglesia.

    Los que ayudan son seguidos por los que gobiernan o admi-nistran, esto incluye la habilidad de organizar los dones que se necesitan en la Iglesia. Por ejemplo, una persona llamada a esta

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    funcin debe ser capaz de no solo poder organizar una gran re-unin de oracin para diez mil personas, sino que adems debe asegurarse que el creyente ms pequeo en el permetro exterior del evento, tenga todo lo que necesite para crecer en su caminar espiritual.

    Tanto los que ayudan como los que administran apoyan a aquellos que ministran la Palabra de Dios, haciendo mucho del trabajo necesario que los ministros no tienen tiempo para hacer, como manejar el aspecto administrativo, etc. Al 4nal de todas estas operaciones tenemos la operacin que respalda y sostiene fundamentalmente todo lo dems, la diversidad de lenguas.

    As que en estas ocho operaciones de Dios, nosotros encontra-mos que no solamente los cinco ministerios estn todos incluidos, sino que los nueve dones del Espritu estn tambin Iuyendo en todas las operaciones, desde el apstol en toda su magnitud hasta la octava operacin: la diversidad de lenguas.

    En dnde encajas t?No importa a lo que Dios te haya llamado hacer en la vida, tu llamado o descripcin de trabajo puede encontrarse envuelto dentro de una o ms de estas ocho operaciones de Dios. Y si has nacido de nuevo, eres llamado a cumplir una funcin por el po-der del Espritu Santo.

    Hermano Roberson, sabe a qu funcin yo he sido llamado a cumplir? Podras preguntarme. No, no lo s. La medida de fe ha sido puesta dentro de ti en forma de semilla (Romanos 12:3). Tu llamado est escondido dentro de esa semilla y es para que t lo descubras, y no yo.

    En Efesios 4:7 leemos, Pero a cada uno de nosotros fue dada la gracia conforme a la medida del don de Cristo. Una medida es parte de un entero. Este entero al que Pablo se re4ere aqu, es el Cuerpo de Cristo. El Cuerpo de Cristo tiene muchos miembros, cada uno con un llamado individual. As como el cuerpo fsico de una persona tiene muchos miembros con funciones diferentes,

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    como manos, ojos, orejas, una nariz, y una boca, Pablo dice que el Cuerpo de Cristo tambin incluye diferentes funciones que juntas constituyen un total.

    Para qu has sido apartado? Cul es tu gracia, tu medida, tu parte en la operacin entera del Cuerpo de Cristo? Cualquier cosa que sea, Dios te da gracia para ello. Esa es la razn por la que Pablo dijo lo siguiente:

    Digo, pues, , a cada cual que est entre vosotros, que no tenga ms alto concepto de s que el que debe tener, sino que piense de s con cordura, conforme a la medida de fe que Dios reparti a cada uno.

    Romanos :

    En esencia Pablo estaba diciendo, Yo voy a hablarles segn he sido apartado por Dios para el ministerio apostlico. Yo no era digno de ello. Yo no lo mereca. Dios no solamente me dio la gracia para el ministerio l me dio la fe para cumplirlo. Por lo tanto, no pienses que eres un canal superior de Dios solo porque has sido llamado a una funcin ministerial espec4ca.

    Algunos ministros tienen esta actitud, Yo soy un apostol po-deroso. Consgueme un Rolls Royce o algn famoso equipo de ftbol para exaltarme; pobrecita tu, ovejita sufrida. Yo tengo un llamado y un don para tu provecho, as que te ser mejor que me trates bien. Esta clase de actitud es la que Pablo nos advierte cuando dijo, Piense de s con cordura, conforme a la medida de fe que Dios reparti a cada uno", para su llamado y ministerio. De hecho, Dios no solamente le dio la gracia para recibir su lla-mado, sino tambin le dio la gracia para cumplirlo.

    DeterminadosdonesconrmanlosministeriosRecuerde, que los nueve dones del Espritu no solamente sumi-nistran el poder, tambin cali4can si estas ocho operaciones estn en manifestacin. Alguien puede decir, Yo soy apstol. Pero a

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    menos que cierta mezcla de los nueve dones del Espritu estn operando en su llamado, no hay un apostolado.

    O una persona puede decir, Bien, yo soy profeta. Pero a menos que la persona mani4este una mezcla particular de los nueve dones espirituales que con4rman y facultan el ministerio proftico, esa persona no es profeta.

    De hecho, en muchos lugares alrededor del mundo parece haber un movimiento dentro del Cuerpo de Cristo en el que mu-chas personas se creen profetas, pero en verdad no lo son. Otros piensan que son apstoles pero no lo son.

    stas personas se atribuyen e intentan a menudo operar en ciertos dones del Espritu para mostrarle a los dems que tienen el ministerio. Pero debido a que no han sido apartadas por el Espritu Santo para ese ministerio, operan principalmente con-forme a su naturaleza carnal. Esto es algo que he comprobado en un largo camino de observacin y experiencia ministerial de ms de veinticinco aos.

    As que, vemos que solamente puedes cali4car para una fun-cin ministerial si hay ciertos dones que estn operando en tu llamado. Pero qu sobre la octava operacin, la diversidad de lenguas?

    Bueno, es muy evidente que solo puedes cali4car y cumplir esta octava operacin si has sido bautizado en el Espritu Santo y hablas en lenguas!

    La diversidad de lenguas: una operacin fundamentalAhora que hemos visto en un sentido general las ocho operacio-nes de Dios en Primera de Corintios 12:28, enfoqumonos en esta octava y 4nal operacin, la diversidad de lenguas.

    Yo creo que la diversidad de lenguas est enumerada en l-timo lugar en la Escritura porque es la operacin fundamental. En la construccin de un edi4cio, un cimiento es la losa cons-truida para apoyar el edi4cio desde abajo. Si el cimiento es dbil, la estructura no resistir la prueba del tiempo ni soportara las

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    tormentas que den contra ella. De la misma manera, la diversi-dad de lenguas es la operacin en la cual reposan las otras siete operaciones.

    Por qu digo eso? Bien, piensa en esto muy cuidadosamen-te: Dnde est la lnea divisoria entre cristianos que creen en el poder de Dios y los dones del Espritu y aquellos que no los ha-cen? Yo puedo decirte exactamente dnde se encuentra. La lnea divisoria entre aquellos que disfrutan el poder de Dios y aquellos que no lo hacen est en la octava operacin de Dios, la diversidad de lenguas.

    Has notado alguna vez que las personas que no hablan en lenguas normalmente tampoco operan en los otros dones del Es-pritu? Por otro lado, las personas que hablan en lenguas son ms inclinadas a operar en los dones espirituales. Cuanto ms estu-dies la materia, se har ms obvio: El hablar en lenguas es la lnea divisoria. De hecho, dentro de muchas iglesias no reconocen las lenguas como manifestacin para este tiempo y poca, y hasta se ha dejado de predicar el mensaje de salvacin.

    La diversidad de lenguas no solo forma una lnea divisoria; de hecho es la puerta de entrada a la operacin de los dones es-pirituales que facultan a los ministerios y llamados en el Cuerpo de Cristo. Es el interruptor que necesitamos para activar la ope-racin a la que hemos sido llamados, del reino natural al poder sobrenatural de Dios.

    Por qu es eso? Porque el hablar en otras lenguas est dise-ado para equiparnos de adentro hacia afuera. Afecta la parte de nosotros en la que todo cambio permanente viene el espritu humano. As que, si una persona rechaza esta octava operacin, no tendr la fortaleza espiritual para cumplir cualquiera de las otras siete operaciones de Dios al menos no con la profundi-dad que Dios desea para ella.

    Por ejemplo, alguien puede ser llamado a una de las cinco funciones del ministerio; incluso puede ser un buen comunicador intelectual o disertante de la Palabra de Dios. Pero es a travs de la diversidad de lenguas que el poder del Espritu Santo habilita

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    la operacin a la que una persona ha sido llamada a cumplir. Y si la persona se niega a recibir el don de Dios de hablar en otras lenguas, se est negando a ser preparado espiritualmente para su ministerio.

    Como vers, cuando oras en lenguas, Dios te estar edi4can-do por dentro para que ests preparado para realizar la obra a la cual l te ha llamado. Y mientras lo hace, los dones empezarn a operar a travs de ti y estars equipado para cumplir tu llamado.

    Por ejemplo, si yo oro mucho en el Espritu Santo, Dios no me va a entrenar para ser ms habiloso en carpintera o para rea-lizar una ciruga de cerebro en alguien. Esas profesiones no son mi llamado. l va a equiparme con la gracia y los dones del Es-pritu que necesito para cumplir mi ministerio, que es predicar el Evangelio.

    Ese es el motivo de por qu el diablo tiene tanto miedo de esta octava operacin. A lo largo de la historia, es la operacin que ms tenazmente el diablo ha tratado siempre de desacreditar y quitar de la Iglesia.

    El enemigo no quiere que tu ores en lenguas. De hecho, mientras menos aprendas sobre esta operacin fundamental, me-jor ser para l. A l no le importa si tu juegas a ser un apstol, profeta, evangelista, o pastor con tal de que nunca cali4ques para estos ministerios a travs del poder y los dones del Espritu Santo.

    An ms, l disfruta cuando engaa a los hombres para cons-truir grandes organizaciones, de su propia creacin; separndo-los del llamado de Dios. Estos hombres se instalan a s mismos como lderes de estas organizaciones para poder transmitir dog-mas acerca de lo que Dios es o no es. Llenos de su propio enga-o y de orgullo en ellos mismos, hacen grandes proclamaciones, mandatos soberbios, tales como las lenguas no son para hoy o

    la sanidad no es para todos.El diablo es un muy buen estratega. Si l no puede quitar

    las lenguas de una parte de la Iglesia, entonces emplea una se-gunda estrategia: intentar causar que los creyentes entren en un

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    Los dones espirituales y sus operaciones

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    fanatismo sobre las lenguas para que las reuniones se conviertan en un caos, y estn tan fuera de orden que el pecador no querr tener mucho que ver con ellos. La estrategia de Satans es con-fundir el uso de lenguas de tal manera que la operacin pierda su efectividad y credibilidad en los ojos de aquellos que han sido engaados por su mal uso.

    Piensa en esto. Qu hay acerca de las lenguas que asustan al diablo tan fuertemente? Por qu ha trabajado tan arduamente para rodear este don con tanta confusin? El propio Pablo dedic un captulo entero, en Primera de Corintios 14, para arreglar el error y la confusin sobre este don dentro de la Iglesia del Nuevo Testamento. Ningn otro don u operacin tiene un captulo en-tero dedicado a explicar su uso apropiado.

    Yo puedo decirte la razn por el cual el diablo tiene tanto mie-do: Si algo va a edi4car dentro de nosotros mayor entendimiento de las cosas espirituales y satisfacer nuestra hambre por conocer a Jess en una relacin ntima, es esta operacin fundamental de diversidad de lenguas. Y como hemos visto, esta operacin es el medio sobrenatural que Dios nos ha provisto para equipar-nos espiritualmente para cualquiera de las otras operaciones que constituyen su gobierno. Por este motivo, Satans esta muy, muy preocupado con las personas que buscan a Dios incesablemente a travs del orar en lenguas.

    Ayuda divina para que encuentres tu lugarAnteriormente hice la pregunta, En dnde encajas t? Dnde encajas t en el plan de redencin establecido desde antes de la fundacin del mundo, escondido en misterio dentro del corazn de Dios? Eres llamado a ser apstol, profeta, maestro, evangelis-ta, o pastor? Eres llamado para administrar o hacer millones para 4nanciar el Evangelio?

    Como dije antes, cada creyente, incluso t, encajas en alguna parte dentro de las ocho operaciones de Dios que encontramos en Primera de Corintios 12:28. Pero, cmo sabrs dnde encajar?

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    Cmo te cuidars de ser engaado por el enemigo al intentar ocupar un lugar en el Cuerpo al que no has sido llamado o an no ests preparado?

    Esta es una de las razones por las que Dios nos dio la octava operacin fundamental, la diversidad de lenguas para ayudar-nos a descubrir Su plan perfecto para nuestras vidas. A travs del lenguaje de oracin sobrenatural que nos es dado y de que el Espritu Santo intercede a travs de nosotros, Dios imparte en nuestro espritu los misterios escondidos en l a lo largo de todas las edades Cristo en nosotros, la esperanza de gloria (Co-losenses 1:27). Gracias a Dios por la ayuda divina de encontrar nuestro lugar en Su gran plan!

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    "Cuando te llamo y te separo a travs de la ordenacin

    a una operacin que pongo dentro de ti, Mi poder te equipar para cumplir ese ministerio

    desde tu interior. Porque Yo he hecho que todas las cosas sean posibles

    para aquel que cree. Por consiguiente, no te acerques a Mi Presencia

    en tu propio entendimiento o tus ideales, credos, y doctrinas hechas por hombres.

    Porque Yo pongo dentro de ti una uncin que no miente.

    Esa uncin es la verdad y te ensear todas las cosas. Rndete a Mi Espritu para los propsitos de edi"cacin,

    Y yo te levantar. Te edi"car en cada operacin para la que te he separado,

    y Yo te capacitar por Mi poder.

    #

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    La d iversidad de lenguas en e l gobierno de Dios

    Ya hemos visto que la diversidad de lenguas es una operacin dada por Dios y puesta en el gobierno de Dios para servir un propsito crucial. Negarlo es negar el perfec-cionamiento del Cuerpo de Cristo.

    As que veremos en ms detalle sobre el papel de la diversidad de lenguas en el gobierno de Dios y la razn por la que Dios las seal como una de las operaciones. Yo quiero que entiendas lo que l ha puesto a nuestra disposicin a travs de este maravillo-so don de hablar en lenguas un don que Satans ha engaado a muchos para que crean que es obsoleto o que es insigni4cante.

    La naturaleza sin igual de la diversidad de lenguasHay solamente una operacin que podemos cumplir inmedia-tamente despus de que nacemos de nuevo: la octava operacin la diversidad de lenguas. En el momento que recibimos a Jess

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    La diversidad de lenguas en el gobierno de Dios

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    como Salvador, tambin podemos recibir el bautismo del Esp-ritu Santo y podemos empezar a hablar en otras lenguas, con lo cual empieza nuestra preparacin espiritual para cualquiera de todas las otras operaciones a las cuales podemos ser llamados.

    Una persona no puede convertirse en un apstol poderoso o profeta cinco minutos despus de que nace de nuevo, aunque a eso haya sido llamado. Primero debe ser cali4cado, entrenado, preparado, y madurado por el Espritu Santo antes que Dios lo separe para el ministerio al que ha sido llamado.

    Eso es verdad con cualquiera de las primeras siete operaciones mencionadas en Primera de Corintios 12:28. No todos hemos sido cali4cados para ensear la Palabra de Dios. Tu puedes de-ducir esto por la gente que se duerme mientras algunos minis-tros ensean! Una persona no puede entrar inmediatamente al ministerio con todas las manifestaciones de milagros o dones de sanidad.

    En cada una de las primeras siete operaciones, incluyendo a los que ayudan y los que administran, la persona debe primero ser 4el y permitir que el Espritu Santo lo equipe antes de que pueda cumplir la operacin a la cual ha sido llamado.

    Por otro lado, una persona puede pasar