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^^^í/í/^/////ai/////^^i^/í/%/^%^///O//////////////^/////////.,,/////^/%///^^^///%í^^ ^MADFiID NUMER,O 21-56 H NOVIEM'BRE

fl MHI1 COMO C^liIVO fORflBlfflOPor JAIME QUEIPO DE LLANO

Perito Agrícola.

1956

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EL .MAIZ COMO CULTIVO FORRAJERO

En muchos países ha adquiriclo gran imhortancia el cttl-tivo del maíz para forraje, incrementándose cacla año la su-l^erficie a él dedicada, debido principalmente al mayor con-sumo de alimentos de origen animal, consecuencia de la ele-vación del nivel de vida. Parece lógico que en España tam-bién se aumente la superficie destinada a esta modalidad decultivo, pues puede ayudar a resolver el problema de pastcs,l^iensos y forrajes que sufre nuestra cabaña.

Si se tiene en cuenta las grandes producciones de forra-je que el maíz ruede dar en regaclío y la faciliclad con queencaja en cualquier alternativa, e^igiendo además pocamano de obra, es indudable que es cultivo que tiene enormeinterés. Sin embargo, donde posiblemente su utilidad seantaycr es en secano, ya que, eligiendo la variedad adecuaday cultivándola apropiadamente, se puede obtener a bajo cos-te tal cantidad de forraje por hectárea, que perinite aumen-tar, o alimentar mejcr, el ^-anado de la e^plotación.

Cultivando el maíz forrajero en regadíc^ caben dos lw-sibilidades : Como primera ccsecha con sie^nbra temhranasobre un barbecho, o como segunda cosecha, sembrando s^-bre el rastroj^ de la de invier^^n (habas, l^atata temhrana.cebada, trigo, etc.). Para cual^luier caso elisten variedadcsque Permite tener libre la tierra con tiempo suíiciente >>ara1>reparar la sementera de otoñc.

Con un cultivo adecuado clel maíz hara f^^rraje, se ob-tiene en cantidad un alimento de hrimera calidad y que, un^vez ensilado, es uno de los de más fácil conservación. Ene^tas líneas se pretencle dar a los agricttltores que deseen^^robarlo unas orientaciones, con la seguricíacl de que todosencontrarán con el forraje de maíz la forma cle salvar ]osmomentos difíciles por los que, casi tcdos los años, pasa suganaclo.

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Culti^o de1 maíz como pl,anta forrajera.

I,as labores preparatorias para la sienibra deben hacer-se con esinero ; con^o las raíces de esta l^^lanta hrofttndizanbastante, responden bien a un btten barbech^ ^. Por lo mcuossc dará a éste una lab^r Pr^^funda en otoño, hara que 1^ueclareterler mejor el agua de lluvia, y después no ii^enos de doslaberes nlás superficiales, la ítltima hoco antes de la siem-hra.

Cuando cl niaíz ^-a en sc^unda cosecha, no queda hrác-ticai^lente tiempo 1^ara una 1^reparaci^m minuciosa de] terre-no y hay que hacer las labores ráhida^l^ente, dando ttn pasede vertedera para alzar y voltear el rastrojo, disponiendoset,ruidan^ientc el terreno para la siembra. Coino es impor-tante no retrasar estas lab^^res, han dc hacerse t^:das en elmenor tiempo posible.

Si el inaíz se ctiltiva en secano, deben e^tremarse las la-bores profundas y cuidzr n^ucho la hreparacibn de la tie-rra, evitando las pérdidas de hun^edad, pues en esta ^uoda-lidad de cultivo el é^ito lnlede del>ender de dichos cuidados.

SIEMBRA.

Cuando el n^aíz se va a cortar en verde para su consttn^^oinmediato por el ganado, es práctica habitual hacer siem-bras inuy espesas, muchas veces a voleo, einpleando roo-z5oy más 1<ilo^ranlos de semilla p^r hectárea. Fsto da lu^ara una ce^etaci^^n 1^obre, due, casi sieml^re, presenta síntoniasde carencia, con plantas que fácilmente se ahilan y no Pro-duceri mazorcas, obteniéndose así itil t^rraje de 1^oco ^^alormitriti^-^-. En cambio, si el ^11aíz se desarrolla n^^rmaln^^ente.esl^i^anclo y dando mazorc^s, aumenta extraordinariamentedicho ^-alor. -Cs, hor tantr,, mu_v rec^mendable hacer lassiembras n^ttcho más claras, con una clen^iclací li^er,inie^ltesul^erior a la q.tte se utiliza para ohtener una cosecha clc^rano (cle ;o a^^ kilo^-rai»^^s de ser»ilia l^^^r hectárea), c^mh c^ue, attn^^ue ésta sea alro n^en^^r, es de mttcha más calidadv, en t^^tal, da m^is uni^lades nutriti^-as por hectárea.

Una s^lución interniedia, c^uc al ^-un^^s a^^rirultores 1^rc-

fieren en regadíos de mucha calidad abonados intensamen-te, es sembrar el maíz a chorrillo, en líneas separadas ^0-80centímetros. De esta forma, tanibién es posible dar algunalabor entre líneas. Desdc luego, la cantidad de semilla pre-cisa es algo rnayor.

Todo lo dicho tiene aplicación en los regadíos de todaEspaña o en los secanos del Norte, pero en los se :anos deotras regiones nunca dc:berán emplearse más de r 5-3o kilo-gramos de semilla por hectárea, haciendo la siembra en lí-neas separadas, como mínimo, un metro y a golpes, cíentrode ellas, distantes 50-6o centímetros, echando en cada unocuatro o seis simientes. De esta forma, duran±e 1a vegeta-ción se pueden dar labores muy superficiales que conservanla humedad del suelo. Aun es mejor hacer la siembra amarco, con lo clue dichas labores pueden cruzarse.

En cuantc, a la época, conlo ya indicamos, en los secanosconviene sembrar pronto, pero siempre es necesario esperarque hayan pasado los fríos, pues las heladas tardías puedendañar a las plantas jó^^enes. ^demás con temperaturas bajasel grano tarda much^^ en germinar y puede ser atacado du-rante este tiempo por una seric de insectos y hong^^s danclolugar a malas nascencias.

En los regadíos puede esperarse a que las condicionessean las mejores v una ncrma para elegir el momento dela siembra es que la temperatura meclia sea superior a r 5°.pues entonces se obtienen nascencia^ rápidas y^-igorosas.

Cuando el maíz vava a utilizarse en ^^erde, sin ensilar,puede ser_ con^-eniente diti-idir el campo en l^^ecjueñas parce-las que se sembrarán escalonaclamente. De esta forma seamplía el período de la recolección y el ganado dispone deforraje recién cortado clurante más tiempo.

EL^CCTÓN Dl^ LA VARTI?DAD.

El ésito del cultivo depende, en gran parte, del aciertoen la elección de la variedad. Casi todas las del país clue seutilizan para prodttcir grano, pueden emplearse para obte-ner forraje, pero tanibién casi todas ellas dan produccicnes

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hequeñas ^• de l^oca caliclacl. En cambio, los maíces híbridosson, en ñeneral, mu^^ buenos forrajeros, observándose unadisminuci^^n de ui1 ^^^ a un 30 lx^r ioo en la cosecha cuandose resiembran. Atm dan mejor resultado alguncs híbridos.especialinente seleccionados hara ser utilizados como forra-_jeros.

I?n cacla re^-ión se cleberá ele;ir la variedacl, teniendoen cuenta su cliina y que la recolección debe hacerse antesde estar comhletamente madura la maz^^rca, por lo que sedebe emPle^ir un maíz de ciclo al^^ ^nás lar^o que el sem-brado usualmente para la cosecha de ^-rano.

En las zonas n^ás c^tliclas del N^^rte y en prin^era cose-cha, Ptteden utilizarse hasta maíces de ciclo largo, reservan-do los de cielo niedio o corto para los sitios más frescos osiembras tardías. Fn los regadí^^s del Centro de España,caben casi sien^Pre les ]naíces de ciclc^ lar^a ^> muy largo^ enlas siembras tempranas y los de cicl^^ medio en las se^-undascosechas. Ln los secanos de escasa l^recil^itación deben em-plearse, ccml^^ n^^ttiimo, los maíces cle cicl^^ semitardío, lle-^ando a usar los mu}^ precoces en las tierras de menos ca-lidad ^^ z^lnas men^^s Iluvicsas, cle manera clue tenga tiempoel maíz de formar la mazorca antes cle que se agoten lasreservas cle humedad del suelo. P^r esta misn^a razón, hayque pr^^curar en los secano^ hacer la siembra 1^^ más tem-l^rana l^^sible.

_^ro;y^>s.

Atu^que las cantidades de abono varían n^ttchc con lasdistintas tierras, culti^^o ^^receclente, ctc., una o^rientació^n^>uede ser :

Esterc^aar lo nlás intensamente cjue se l^ueda y, dentrode las f^^riuulas ustiales en cada finca, forzar bastante laseantidacles cle fertilizantes nitrogenad^s que se aporten. Unadosis n^eclia mínima es :

Antes cíe la siembra v Por hect^^rea :

:300-^}0o ki!r,gramos d^e superfosfato cálcico o escorias.i;o-zoo kiloñramos de cloruro o stilfaro potásico.

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200-30o I.-1o^ram^„ dc sulfato amónico, uitrato ainóuico ^áicico 0ciauaniida.

^e CObeT't21"^l V COtl70 ri]lriilll0:

2oa-3oo kilognamos dc cualquier nitrato repartidos en varias v^eces.

Para los secanos, excepte los del Norte, las cif ras ante-riores s^n e^cesivas, debiendo limitarse a 200-30o kilogra-mos de supertosfato O escorias y roo-15o kilo;-ramos de unabOno potásico antes de la siembra y reservar los nitroge-uades ^ara aportarlOS, en caso de primaveras lluviosas, decobertera ech^ndolos eil la proximidad de los ^olhes, perosin toc^rlos.

I,AL'ORIrS.

Durante la ve^etació^i se liini^arán a las superficialesl^recisas para n^antener el terreno limpio de inalas hierbasy evitar la form^ción de costra. Cuando por la altura dclmaíz ^^a no se ptteda entrar con los aPeros, se cempleme^nta-r^^n estas labores cOn escard^,s a mano.

En el secauo, se ^ueden dar labores co^.i medios mecáni-cos casi hasta el final del cultivo, ĉ^ue deberán ser tnuy nume-rosas y extremadan^ente Superficialcs, ya due su fin princi-l^al es romper la c0:5tra y e^itar evap<^raci^mes, Puecíen ha-cerse ^^ertectaniente cOn uii culti^^ador ^^, en su defecto, conun arado cOnnín.

R ^ r.cos.

En regadío debe seinbrarse con la tierra mu^ car^-aclacle humedad v, en cambi0, conviene retrasar el primer rie^;otOd^^^ lo posible, hara Obli^;-ar a que 1>rOfundicen las raíccs.Una vez dado éste, n0 se escatinlará el a^-ua, teniendo cui-dad0 de no pasar^e, L^nes un escesr, de ella ^^erjudica a laplanta, impidiendo la nOrmal respiraci^ín de las raíces.

RrcoLECCló^.

Es importante realizar la recolecci^^n en el moniento enquc el maíz es m^s rico en elei^ientos nutritivos.

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Cuandu el maíz se vaya a ensilar, deberá cortarse cuan-do lus granos de la mayoría de las mazorcas hayan hasad^ ^del estado lechoso y tengan una consistencia pastosa. En-tonces las hojas inferiores etnpiezan a amarillear ligera-mente y, cuando se emplea un maíz clentado, apro^imada-nie^Ite la tercera ^^arte de los gr^nos de cada inaz^^rca pre-sentau en stt sttperficie la iniciación del httndimiento que,m<is tarde, dará lu^ar a la clásica inclentadttra. Si el maíz^-a a eonsumirse en verde, se adelantará la recolccci^»i alg^^sobre lo anterior, haciéndolo cuando est^t coiliplctaniente ver-de, hties entonces es mas tierilo.

I?n las siembras en secano puede o^currir c^ue ven^a unaprimavera muy seca y no haya reservas suficientes de hu-med^d para que el inaíz ]legue a los estados ante^ citados.Entonces deben cortarse las plantas, incluso antes de la flc^-raci^^n, para evit^ir que mueran por sequía. Naturalmentcse c^btendr^í una menor cosecha y de rl^enos ^-alur, hor lo queen la ración del ganado habrá ^lue emPlear una may^r pro-porci^^n de aranos que suhlementen el déficit del maíz.

Fs iml^ortante qtte, una vez segado el maíz turrajero, seccrosuma o ensile rápidamente, pues ^i se deseca hierde ca-lidad y ^-alor como pienso.

Ensilado del maíz.

Cc^mo ^intes se ha indicado, el maíz es una de las hlan-tas ^jtte con m^s facilidad se ensilan, ^^ues inelusc l^uecle corl-ser^-arse en simples zanjas.

l,a primera opcracibn necesaria ^^ara e»silar es el tro-ceacl^^ del maíz en pedaz^^s de unos dcs o tres centímetros,hties con cste tamaño se tacilita ^• ^s más hertect^i la ter-mentaci^,n. Puede hacerse con cualduiera de los c^rtaforra-jes e^istentes en el mercado, eli^-iénd^^lo de acuerclc> cctl elrenclimiento due h<_lya de c^btetlerse por la stt^^erficie sembra-da ^^ teniendo en cuenta la co^iveniencia de irlo ensilando an^edicla qtte se corta y de h^cer la ol^eración ráhidamente.

C^m el inaíz bien troceado se va lleiiando e] sil^^, ctlidan-cío mucho dc ahisonarlo bien para evitar duedeti en su itlterior

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bolsas de aire, que pueden dar lugar a que se estropee algu-na parte de la masa ensilada. Si, por haberse cortado el maíztarde, esttrviese algo seco, es preciso ir añadiendo agua al

Fig, i.-Cortaforrajes de gran rendimiento para silos-torre.

ensilar, cttidando no hacerlo en exceso, por lo que sólo seañadir^i la que pueda absorber sin que gotee.

Es también frecuente añadir al silo algo de sal, quehace que el producto sea después más apetecible para el ga-nado, pero no es en absoluto una meclicía necesaria, puesaun sin la sal el forraje ensilado es de calidad y el ganadolo come bien. Tampoco es preciso añadir ninguno de lospreparados comerciales que, normalmente, se emplean paraensilar otras plantas, atmque tampoco hay inconveniente al-guno en echarlos.

Lleno el silo con el maíz bien prensado, y bien tapadastodas las juntas por las que pueda penetrar el aire, da co-mienzo una fermentación qtte dura, aproximadamente, das

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u tres senlanas, censervándose después el forraje en per-fecto estado durante largo tietnpo. Si hay alguna parte a laque Ilega el aire, se estropea, totnando otro color y un olordesagraclable por lo que el ganado no lo consume.

Las características de un maíz bien ensilado scn :"Croz^^s cle mazorca, tallos y hojas, n^^ superiores a dos

u tres centíuletr^s.Gran ^>roltorción de grano.Olor li^reramente ácido y agradable.Distribttcicín ttnifortne cle la htlmedad.Col^r n^, muy oscttro.Apetecible para el ganado.

VLNTAJAS DEi, SII.O DF_ DZAÍ7.

I.a) Ubtener grandes cantidades de forraje por tulidadele stil^erticic, con lo qtie se consigue un alimento barato.

^^.^^1 Ditiitoner, en cualc^ttier época del ,año, de nn forra-je fi-cscu ^^nc a^ntiene clementos mny imhr,rtantes ^^ara la,Ilin^cntaci^"m ^icl ganado.

3.^) Disminnir la> l^érclitlas qtte se ^^rcducen cou otrosl^roeecliiuic^ntos cle eonservacicín.

^}.^^) I^acilida^l c^m ^jtte el nlaíz se ensilrt _^^ se ^^btieneu

btten^^s restiltados, siencl^^ inínin^os los riesgos ^le que se e^-

rro^^ec^.

^.`^) C^^^»te reclucitl^^ de las c<mstrucciones ^^recisas haracnsilar c^l n^aí^.

^':1L(1R ALIBII^a'I'I('I(^ I)I^I. 1f:11'1. I?\SI1,.^I)O.

C^m^^^^u-^tdo c:l ^^alor alin^entici^; <lel maíz_ ensilad^^ con elclc ^^tr^^^s hrodttctr^s, <<ue^la hatentc: cl stt}-^^, sobrc t^xlo en com-paraci^ín c^^n l^s ^^iens^^s de ^-^^lun^en que c^nstitu^^en la nia-yor harte clc las raci^mes del ;;-ana^l^-.

Cien l:il^^gram^^s de maíz ensilaclo equi^-alen a:

zo kilo^;ramos de ceba^i,i.zz kilogramos rie avena.ty kilogramos ^ic maíz.

[q kilogramos de algarrobas o veza.

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i8 kilogramos de pulga de r.emolacha seca.io6 kilogramos de paja de leguminosas.

i6o kilogramos de paja de cereales.q^ kilogramos de heno d^e alfalfa o trébol.

ioo kilogramos de hicrba de prado.200 lcilogramos de remolacha semiazucarera.335 kilogramos de remolacha forrajera.

285 kilogramos de nabos forrajeros.

Naturalmente, estas equivalencias no quieren decir queel silo del maíz puede sustituir íntegramente a los produc-tos enumerados, pues para la formación de las raciones hayque tener en cuenta, además del valor nutritivo del producto,su composición y los principios nutritivos que aporte a laración.

Utilización del maíz forrajero.

Con los datos anteriores, el ganadero puede introducirel forraje de n^iaíz en las raciones, sustituyendo o comp^le-mentando otros alimentos. Hay que tener en cuenta que, alsuministrar por primera vez al ganado un farraje nuevo,es siempre canveniente hacerlo progresivamente, aumentan-do poco a poco la cantidad, para evitar cambios bruscos enla alimentación. Especialmente con forrajes ensilados, esimprescindible hacerlo así, pues en algunos casos su saborligeramente ácido, extraña al ganado.

Siendo el forraje de maíz un alimento de volumen es-caso en proteínas, hay que complementar las raciones conpiensos concentrados más ricos en principios nutritivos. Unabuena práctica es mezclarlo con una cuarta parte de su pesc^de heno, lo que facilita la rumia en el ganado vacuno. Esde notar que los animales alimentados con maíz forrajeronecesitan menos granc que los que lo están con cualquier otropienso voluminoso, dada la gran proporción de grancs demaíz que contiene.

Como orientación, se indican^ algunos tipos de raciones

para las distintas clases de g-anado, en las que interviene el

torraje.

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GANADO VACUNO.

hacr^no ^fc leche. - Una ración de sostienintiento paravacas lecheras, puede estar tormada po^r 25 kilogramos desil^> de maíz y cinco kilogratnos de heno por 500 l:ilo^ramosde l^eso vivo. Cuando el animal está en prodttcci6n, hay queañadir a lo anterior, y por cada 3'5 litros de leche l^rodttci-dos, ttn kilc de una mezcla de grano formada hor dos h^ar-tes de cebada y una de maíz.

Vaciiaio c^e tyabajo.-La ración, por 50o kilo^;ratnos de^xso vivo, pttede ser: 3o kilogramos de maíz ensilado, cua-tro kilogramos de cebada y paja de cereales a discreci^^n. Enlus animales en sostenimiento la cantidad de cebada puederedttcirse a ttn kilogramo diario.

Pactti^t^o de carne.-El silo de maíz está tnuy indicadopara el destete de los terneros. A los novillos en régimen de^>astos se les puede coml^lementar la alimentación dándolescinco kilogramos de forraje de maíz hor ioo kilo^-ra^raos de^>eso vivo. A las vacas de ^-ientre se les debe sutninistrarun^^s t 5 kilog^ramos por cabeza ^• día como complemento.

GANAI)() I.AN:1R.

Para reforzar la alimentaci^n del gatiado o^^in^^ cluran-te el inviern^, pttede d<trsele de ttno a cl^^s kilo^rait^os desil^^ de maíz_ al día, siendo com-eniente mezclarl^^ c^m unarttarta harte° cle heno, en ca^r> de di^^x^n^r del u^istttu.

^iA?^rADO l':^R:Ai,l.:AR l' MULAR.

I^.l silo scrá cle bttena ralidad y libre de mohos, a lu; ^^^te^^^n nitt}^ scn,ibles e^t<^s anin^alc;, prodttciéndoles tr<tst^^rno^^li^t;ti^^c^;. ^^^ sc sumini;trr^rá cotno ítnico hiens^^ dc ^^^>lu-mca^, ^ntdien^l^^ sustituir al ^^ue n^riu^llmente se utiliz.a conestc fin en ttn tercic^ ahr,,^iit^adan^enYe. 1+ n gencral, no sedarátt más dc ^^ch^^ l:ilogratu^„ por cabeza }- día.

Silos.

La descrihci^^n detallacla ^lc las diferentes clases clc silos_y stts características constrticti^-as se salen lx^r cou^^^letc, ^lel

propósito de estas líneas. Queremos, no obstante, insistir en^uc e1 silo es un,a construcción sencilla, que puecle resultarbarata y, muy rent^ible. Sirvan de ejemplo a 1^ anteriormcn-te dicho l^^s silos en zanja, a los que ya se ha hecho menci^^n.

Fig. 2.-Silo en zanja con paredes revestidas.

Yara construirlos, debe Practicarse una zanja en terreno per-meable o, en caso contrario, disponer una capa de arena ensu fondo. EI maíz, bien cortado, se j^rensa y cubre aIn unacapa de haja fin^l y tierra ahisonada. Este tip^> dc silo admitenittcl^os herfeccionamientos que, mejoran la calidad del ^^rII-^lucto, como son : re^^estir l,as paredes y£ondo, construirlc^^^n ladera corl £^^ndo inclinado y desagiie al exteri^r, prlltc-^erlos por w1a cttbierta rítstica, etc., pero en cual^^ttier cas^>;^^n siem^^re fáciles de hacer }' mtiy econbmicos.

C:R:IPICAS UfUlN.1 -:111CLLNDiS7, VALDES^ j - ^fAl)RII)