gobierno salvador jorge blanco
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*José Salvador Omar Jorge Blanco (5 de julio
de 1926 - 26 de diciembre de 2010) fue
un político, abogado y escritor dominicano.
Presidente de la República Dominicana en el
periodo 1982-1986, sucediendo a Jacobo
Majluta de su propio partido. Fue senador por
el Santo Domingo entre 1978-1982.
Comúnmente llamado Jorge Blanco.
*Considerado por muchos como uno de los
líderes políticos más prometedores en la
República Dominicana. Sin embargo, tras una
sesión de largos interrogatorios y una orden
de arresto por cargos de corrupción, Jorge
Blanco huyó a la embajada de Venezuela el
30 de abril de 1987, procurando asilo
político. Jorge Blanco ha sido el único
presidente dominicano sometido a la justicia.
*La Primera Semana
Al cumplirse la primera semana de
estar dirigiendo los destinos
nacionales, en el gobierno presidido
por Salvador se pueden destacar
algunos aspectos en el orden político,
económico y social. En su discurso de
toma de posesión, el ciudadano
Presidente volvió a reafirmar su
vocación de respeto a los Derechos
Humanos, las libertades públicas e
independencia del Poder Judicial. En
igual sentido, hizo firme su promesa
de que durante su gestión se
sancionará la corrupción, el peculado
y el tráfico de influencia.
*De los funcionarios designados algunos están por primera vez
desempeñando altos cargos en el Estado, y son reconocidos
como capaces y honestos. Hay otros que no ofrecen confianza al
pueblo desde el punto de vista de su honestidad en el manejo
de la cosa pública; se observa en el Gobierno de Concentración
Nacional, la presencia de hombres con un gran sentido de la
oportunidad o, como dice el pueblo, verdaderos oportunistas
que ayer estuvieron con el régimen de Balaguer, y hoy muy
tranquilamente se han incorporado al de Salvador.
*Salvador sometió al Congreso varios proyectos de leyes de contenido económico que, a nuestro entender, no favorecen a las grandes mayorías nacionales. Así, por ejemplo, el proyecto de congelación de salarios va en contra de los intereses de la clase obrera, que durante el régimen de Balaguer llevó el peso de una fuerte congelación de salarios, y en el gobierno de Guzmán Fernández, sufrió el peso de una terrible inflación. La contrapartida que se le impone a los patronos y sectores dominantes para compensar la congelación de salarios resulta ineficaz.
La congelación de los precios de los artículos de primera necesidad no guarda proporción con la congelación de los salarios. Para ser justo y equitativo hay que poner los salarios al nivel que tienen los artículos de primera necesidad hoy, partiendo de que la canasta familiar ha aumentado en más de un sesenta y cinco por ciento en algunos renglones, desde la fecha que se aumentó el salario mínimo a ciento veinticinco pesos oro (RD$125.00). El poder adquisitivo del peso dominicano no guarda proporción con la inflación galopante que hay en el país. La medida prohibiendo la importación de vehículos, algunos comestibles, bebidas, artefactos, electrodomésticos, etc., es saludable y positiva, pero se debe extender a otros artículos no indispensables y si considerados como de lujo.
*Los cambios militares y policiales han sido aceptados en su generalidad como positivos aunque se ha criticado el ascenso de algunos militares señalados como represivos. El pueblo está confiado en la gestión de Salvador hasta el punto de que las medidas económicas que creemos afectan a los sectores populares, cuando se las hemos analizado a algunas personas no comparten nuestro criterio. La buena imagen que proyecta Salvador, acompañada del limitado tiempo de su gestión, permite que el pueblo mantenga sus expectativas en el nuevo Gobierno, esperando que haga algo bueno en su provecho.
A pesar de su afinidad política con Jorge
Blanco, el mandato de Antonio Guzmán
(antes de Majluta) se caracterizó por
mantener una amarga disputa con
Blanco, quien desde el Senado llevó al
partido de ambos de la oposición al
poder.
En el momento de la elección de Jorge
Blanco, se esperaba que los altos precios
de los productos de primera necesidad y
la alta inflación que perjudicaba el país
en ese momento se aligeraran, ya que
Blanco iba a gobernar con una mayoría
de su partido (PRD) en ambas cámaras
(17 de 27 en el Senado y 62 de los 120
de cámara). Sin embargo, dos
acontecimientos ponen de relieve las
limitaciones de Jorge Blanco y sus
vicisitudes durante su mandato.
En abril de 1984, los fuertes aumentos de precios
ejecutados como parte de un programa de estabilización
económica aprobado por el Fondo Monetario
Internacional (FMI) dio lugar a disturbios masivos y decenas
de muertos. Esto manchó el historial de las
administraciones perredeístas en materia de derechos
civiles y humanos, una de las áreas en las que
el PRD había sido capaz de proyectar sus más agudas
diferencias con el anterior gobierno de Balaguer.
En noviembre de 1985, las primarias del partido quetenían por objeto poner de relieve el continuocompromiso del PRD con procedimientosdemocráticos internos para seleccionar sucandidato presidencial terminó sin resultadosdebido a un tiroteo en el Hotel Concorde, donde seestaban contando los votos. Jorge Blanco gobernóla República Dominicana durante un período dedramáticas dificultades económicas impuestas engran parte por el sistema internacional. Ese mismoaño, por primera vez desde la guerra civil de 1965,el país experimentó tasas de crecimiento negativas.
En su gobierno ocurrió el secuestro y posteriorasesinato del banquero Héctor Méndez y su chófer,así como de los hermanos Patricio y Estanislao de laCruz Gálvez.
Su periodo presidencial culminó el 16 de agosto de1986 dejando un clima hostil en la oposición.
Acusaciones de corrupción y posterior juicio político
Jorge Blanco, al salir de la presidencia dominicana, fue
acusado de desfalco por el gobierno de Joaquín Balaguer. La
denuncia consistía en compras de las Fuerzas Armadas a
unas empresas vinculadas a personas próximas a Jorge
Blanco por valor de 25 millones de pesos, vendiéndoles
bienes sobrevaluados a militares. El 7 de octubre de 1986 el
abogado dominicano Marino Vinicio Castillo puso una
denuncia contra Jorge Blanco y Manuel Antonio Cuervo
Gómez ex secretario de las Fuerzas Armadas, acusando a
ambos de malversación de fondos. El 23 de diciembre la
Procuraduría General Dominicana le prohibió a Jorge Blanco
salir al exterior.
El 30 de abril de 1987 fue arrestado y trasladado a la cárcel
preventiva del Ensanche La Fe. Una vez allí, Jorge Blanco pidió
asilo político a la embajada venezolana, pero el gobierno Jaime
Lusinchirechazó su solicitud. El 8 de mayo un espasmo
cardíaco llevó a su internamiento en una clínica de Santo
Domingo, permitiéndole salir a los Estados Unidos para recibir
tratamiento médico el 14 del mismo mes en el Emory University
Hospital de Atlanta, Georgia. Jorge Blanco agotó todos los
recursos como abogado para impedir el inminente juicio por 38
imputaciones penales que se le venía encima. Entre las
imputaciones estaban: estafa, robo, prevaricación, abuso de
confianza, entre otras.
El 16 de noviembre de 1988, un juicio de
diez días lo condenó a 20 años de prisión y a
una multa de 100 millones de pesos. Todo
esto en ausencia de Blanco, ya que se
encontraba en Atlanta recibiendo
tratamiento médico. El 30 del mismo mes,
Blanco llegó a Santo Domingo para apelar la
sentencia. Durante todo el año, Blanco libró
una batalla legal que culminó con la
anulación de la sentencia a finales de 1989.
El 8 de agosto de 1991 fue declarado
culpable nuevamente y condenado a
cumplir 20 años de prisión y a pagar una
multa de 73 millones de pesos. Jorge Blanco
renunció a sus abogados defensores tras
sospechar que la sentencia que se iba a
dictar contra él estaba "prefabricada", por
lo que asumió su propia defensa. Fue
arrestado, pero sólo permaneció dos meses
en prisión. Todo esto después de varios
meses en un juicio televisado.
En 2001 y después de 10 años de
apelación, Blanco consiguió la
anulación de la sentencia dictada por
la Corte de Apelación de Santo
Domingo. En septiembre, el
presidente Hipólito Mejía retiró las
acusaciones contra Jorge Blanco, lo
que se interpretó como una especie
de indulto. Blanco siempre negó las
acusaciones y afirmó que sus
pesadillas fueron resultado de la
persecución política de Joaquín
Balaguer.
Con todo esto más el descrédito del
gobierno y las luchas internas dentro
del PRD, el partido no pudo
mantener el poder más allá del año
1986, permitiendo así el retorno de
Balaguer en las elecciones de 1986.
*
Un día como hoy, en 1984, el pueblo
dominicano se lanzó a las calles en
todo el ámbito nacional, a protestar
contra las medidas del gobierno del
Partido Revolucionario Dominicano
(PRD), encabezado por Salvador
Jorge Blanco, las cuales fueron
reprimidas con tropas de las Fuerzas
Armadas y la Policía Nacional. Las
movilizaciones se extendieron por
tres días (23, 24 y 25 de abril) contra
las alzas en los precios de los
artículos de primera necesidad y
otras políticas impuestas, tras dicha
administración firmar un acuerdo con
el Fondo Monetario Internacional.
*La represión del gobierno perredeísta dejó un saldo de más de 150 personas muertas a manos de los cuerpos represivos, entre estas mujeres embarazadas, jóvenes, ancianos, que fueron fusilados muchos en sus casas, así como cientos de apresados, golpeados o heridos.
La represión ordenada por Jorge Blanco además de llenar de luto a muchos hogares dominicanos, dejó como consecuencia la militarización del país durante varios meses, por el temor de los gobernantes turno de que el pueblo se levantara nuevamente. También en ese período se limitaron las libertades públicas y el derecho a la protesta.
Producto de la rebelión popular, el pueblo tomó las calles, bloqueó caminos y vías, y paralizó todas las actividades por tres días. Las protestas fueron enfrentadas a “tiro limpio” con efectivos de los cuerpos castrenses, con las caras pintadas y la Policía, que disparaban a mansalva con armas de todos los calibres a ciudadanos y ciudadanas, tiros certeros a la cabeza o al pecho, porque el objetivo era sofocar la protesta, aunque tuvieran que asesinar a miles de personas.
*
*Bajo el lema “Gobierno de
Concertación Nacional”,
Salvador Jorge Blanco llegó a la
Presidencia de la República
Dominicana el 16 de agosto de
1982, tal vez sin haber calculado
que las circunstancias lo
llevarían a tomar medidas
económicas que posteriormente
provocaron que el pueblo que lo
llevó al poder se revelara contra
las decisiones que adoptó.
* A pesar de que durante su campaña electoral había enarbolado la bandera de la socialdemocracia, en el mismo discurso de la toma de posesión se vio obligado a anunciar un período de austeridad para hacer frente a la crisis económica y financiera que encontró al asumir el poder.
* Para el economista Guillermo Caram, la rigidez del Fondo Monetario Internacional le impidió a Jorge Blanco desarrollar un gobierno exitoso en materia económica, en tanto que para Arturo Martínez Moya el ex mandatario asumió el poder en condiciones muy precarias y eso lo limitó para ejercer un buen gobierno.
* El incremento del precio del petróleo, las dificultades para mantener los niveles de venta en los mercados mineros de la bauxita, ferroníquel, oro y plata, y, sobre todo, la crisis del sector del azúcar de caña y sus derivados, sumados a una deuda externa de 2,400 millones de dólares, fueron parte de las dificultades que encontró su gobierno y que lo obligaron a adoptar medidas que disgustaron a la población
* De entrada dispuso medidas intervencionistas, como la congelación de los salarios y los precios, y la prohibición de importar un amplio número de productos de consumo, con el objeto de ahorrar divisas y poder cumplir con las obligaciones de la deuda externa e interna.
* Como para obrar con el ejemplo, el entonces mandatario inició rebajándose su propio sueldo mensual de 5.000 a los 3.000 dólares, y los de todos los altos cargos del Ejecutivo que superaran los 375 dólares mediante la anulación de los aumentos salariales introducidos en la administración pública y organismos oficiales el mismo día de las elecciones; pero eso no fue suficiente para cubrir el pago de la deuda externa. La banca privada internacional se negaba a otorgar nuevos préstamos y a renegociar el pago de los intereses de los ya concedidos, por lo que el jefe de Estado optó por solicitar la asistencia crediticia del FMI, a sabiendas de que tendría que ajustarse a las disposiciones que el organismo le impusiera.
* Las negociaciones terminaron en enero de 1983 con un Acuerdo de Servicio Ampliado por el monto de 460 millones de dólares.