greuges presentados en las cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la...

27
GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI Remedios FERRERO MICÓ Universidad de Valencia Los greuges formaron parte del mecanismo de las Cortes; por tanto, su estu- dio está íntimamente ligado al funcionamiento de las mismas. En el siglo XVI se celebraron Cortes con Fernando II, en 1510; con Carlos I, que las reunió seis veces, en 1528, 1533, 1537, 1542, 1547 y 1552, y con su hijo Felipe II, que solo lo hará en dos ocasiones, en 1564 y 1585. La celebración de todas estas Cortes tuvieron como sede Monzón aunque se prorrogaron a la ciudad de Valencia «dins lo capitol de la Seu», habilitando al efecto al lugarteniente general don Fernando de Aragón, duque de Calabria, para el examen de los greuges y el cum- plimiento de la oferta. Una fuente importante para analizar los greuges son los procesos de Cortes. Se trata de registros documentales de las deliberaciones acaecidas en las sesio- nes parlamentarias, pero los procesos de las Cortes llevados a cabo en el siglo XVI presentan serios problemas puesto que se muestran incompletos o bien no se han conservado, con la excepción de 1510 1 . Con los greuges se pretendía pedir justicia al rey. En su origen fue una ins- titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios y garantías individuales. En el reino de Valencia 935 1 Los procesos de cortes de 1510 se encuentran en ACA, Cancilleria real, sig. 42, y ARV, Real can- cillería, regs. 514, 514 bis y 514 ter. Ivs Fvgit, 10-11, 2001-2002, pp. 935-961

Upload: others

Post on 12-Jun-2020

0 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANASQUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

Remedios FERRERO MICÓ

Universidad de Valencia

Los greuges formaron parte del mecanismo de las Cortes; por tanto, su estu-dio está íntimamente ligado al funcionamiento de las mismas. En el siglo XVI secelebraron Cortes con Fernando II, en 1510; con Carlos I, que las reunió seisveces, en 1528, 1533, 1537, 1542, 1547 y 1552, y con su hijo Felipe II, que sololo hará en dos ocasiones, en 1564 y 1585. La celebración de todas estas Cortestuvieron como sede Monzón aunque se prorrogaron a la ciudad de Valencia«dins lo capitol de la Seu», habilitando al efecto al lugarteniente general donFernando de Aragón, duque de Calabria, para el examen de los greuges y el cum-plimiento de la oferta.

Una fuente importante para analizar los greuges son los procesos de Cortes.Se trata de registros documentales de las deliberaciones acaecidas en las sesio-nes parlamentarias, pero los procesos de las Cortes llevados a cabo en el sigloXVI presentan serios problemas puesto que se muestran incompletos o bien nose han conservado, con la excepción de 15101.

Con los greuges se pretendía pedir justicia al rey. En su origen fue una ins-titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supusouna garantía de los privilegios y garantías individuales. En el reino de Valencia

935

1 Los procesos de cortes de 1510 se encuentran en ACA, Cancilleria real, sig. 42, y ARV, Real can-cillería, regs. 514, 514 bis y 514 ter.

Ivs Fvgit, 10-11, 2001-2002, pp. 935-961

Page 2: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

2 En la Edad Media se habla de greuges particulares y generales cuando lo plantean los tres bra-zos. Entre los particulares está el greuge de corte que es el que se presenta al rey por alguna injus-ticia hecha a alguien y el rey lo juzga, siempre que no haya interés de tercero. ARV, Real canci-lleria, reg. 514-1, f. 86. Proceso de Cortes de 1510.

3 En el Speculum, dedica la mayor parte de sus rúbricas a las situaciones o actos jurídicos quelesionan derechos y de cómo se resuelven en las Cortes. Estos agravios los estudia Belluga segúnsu naturaleza objetiva o el sujeto lesionado en sus derechos. Así, la rúbrica XI trata de los agra-vios que se interfieren en orden a la jurisdicción, la rúbrica XX de los agravios de los militares,la XXIII de los agravios de carácter fiscal, la XXVI los que afectan a ciudades y las rúbricas XLIIa XLVI de los actos que constituyen agravios reparables en Cortes y su tramitación. Precisa dichoautor que existiendo remedio ordinario no se puede pedir extraordinario, lo que quiere decir quepreviamente hay que intentar la solución del agravio o gravamen por la vía judicial, y solo cuan-do ésta es ineficaz se puede recurrir a las Cortes, Pere Belluga, Speculum Principum, rúbrs. 11 y42, n.1, París, 1530.

4 En el greuge de la vizcondesa de Chelva del año 1488 se dio un plazo de dos meses y en el greu-ge del noble don Joan Centelles sobre los molinos de Paterna, cuatro meses, Fori Regni Valen -tiae, «in extravaganti», ff. 61v. y 63.

5 Estas cuestiones pueden verse con más detalle en R. FERRERO MICÓ, «Greuges y contrafueros enel derecho valenciano», Dels Furs a l’Estatut. Actes del I Congres d’Administració Valenciana:de la Història a la Modernitat, Valencia, 1992, 285-292. «Agravios y contrafueros», Las CortesForales valencianas. Poder y representación, Valencia, 1994, 156-157. «Mecanismos de control

sirvió de fundamento al procedimiento especial incoado ante las Cortes y que seconoció con el nombre de juicio de greuges o agravios. Hasta que el rey nohubiera reparado los agravios cometidos por abuso de su autoridad o de sus ofi-ciales, no se entendía en negocio alguno. Sin embargo, de la observación de losagravios presentados se puede deducir que no siempre se plantean quejas contrala actuación del monarca o sus oficiales. Hay también defensa de privilegios per-sonales, petición de que se reglamenten cuestiones económicas o reclamación dedevoluciones de préstamos concedidos al monarca. Algunas de estas cuestioneshubieran podido resolverse por otra vía, pero se utiliza esta para presionar al rey.

Los agravios cuyo reparo se propone a las Cortes son de dos maneras: greu-ge simple y contrafuero2. Belluga dice que los agravios que pretenden los parti-culares solo se proponen en Cortes3. Los agravios eran examinados en las Cortesdonde una vez eran reconocidos como tales se formulaban en capítulos para sureparación. Los jueces de greuges determinaban las causas, mientras duraban lasCortes o dentro del término que las mismas señalaban. No hay una regla fija:unas veces se concede un término de dos meses, en otras ocasiones son cuatro ya lo largo del siglo XVI es frecuente que se de un plazo de seis meses4. Pero nose puede hablar del concepto de greuge de modo general para toda la época foral.La consolidación de la monarquía absoluta influirá decisivamente en la idea delagravio como garantía de derecho5.

936

REMEDIOS FERRERO MICÓ

Page 3: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

legal en el derecho valenciano», Homenaje al Profesor Alfonso García-Gallo, Editorial Complu -tense, S. A., 1996, t. II, v. 1, 105-120.

6 Los agravios presentados durante la celebración de las Cortes convocadas por Alfonso elMagnánimo en 1417-1418 se encuentran en R. FERRERO MICÓ, «Reivindicaciones estamentalesfrente al poder monárquico», XVI Congresso Internazionale di Storia della Corona d’Aragona,Celebracioni Alfonsine. Paparo Edizioni Napoli, Napoli, 2002, vol. I, 321-344.

7 La edición facsímil es de E. BELENGUER CEBRIÁ, Cortes del reinado de Fernando el Católico,Valencia, 1972.

8 Las cortes de 1510 han dejado abundante documentación. Existen copias del proceso en elA.C.A. y en el A.R.V., en este último archivo, Real Cancilleria, Procesos de cortes, reg. 514, 514bis y 514 ter.

9 Remito para su conocimiento a R. FERRERO MICÓ, «Los greuges en las Cortes valencianas de1510», El poder real en la Corona de Aragón (siglos XIV-XVI), Actas del XV Congreso deHistoria de la Corona de Aragón, Zaragoza, 1996, t. I, v. 2º, 191-205.

10 A.R.V., Real Cancilleria, reg. 514-I, ff. 69 v. a 92.

¿Qué greuges o agravios pueden y deben deducirse y admitirse en Cortes?En el presente trabajo voy a examinar los que se trataron en las diversas Cortescelebradas en el siglo XVI objeto del presente Congreso celebrado en Monzón6.

Cortes de 1510

El 20 de abril de 1510 Fernando el Católico convocó Cortes generales enMonzón para la Corona de Aragón. Valencia asistió y además de pedir la apro-bación de fueros y actos de corte, presentó diversos greuges para su reparación.La legislación aprobada está impresa7 pero no los agravios presentados que seencuentran en el proceso8. Se alegaron 53 greuges de los que tan solo 38 obtu-vieron resolución. A su vez, tres de ellos coinciden con otros tantos actos decorte, son peticiones del brazo real acerca de distintas devoluciones de présta-mos concedidos al monarca9.

En el día señalado, ante el vicecanciller y los provisores de greuges, sen-tados en el solio de la iglesia, los representantes de los brazos fueron alegando,durante varios días, los distintos agravios de manera muy concisa10. No siguenningún orden especial ni por temas ni por brazos. La agrupación que sigue la herealizado según mi criterio.

Greuges de carácter económico: Jaime Sanz alega que le corresponden mil sueldos de los ocho mil que Juan II

concedió a Pablo Rosell de los emolumentos de la bailía general. En la mismalínea, el magnífico Guillermo Çaera reclamó ocho mil sueldos de pensión anualque Juan II había consignado a su padre y confirmó el rey católico de las rentas

937

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

Page 4: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

938

REMEDIOS FERRERO MICÓ

de la bailía. El noble Luis de Pallars reclamó ciento cincuenta mil sueldos porciertos gastos realizados por mandato regio en el lugar de Requena y otros. Unosdías después, el noble Jaime de Pallars interpuso otro agravio para que se lepagaran tres mil sueldos prestados por su padre al rey para la recuperación delvizcondado y valle de Chelva. El síndico de la villa de Ontinyent presentó dosgreuges, uno por los tres mil sueldos prestados al rey para subvenir a las necesi-dades de la guerra de Granada y otro pidiendo el precio y las pensiones de loscensales gastados en la recuperación de la villa de Peñíscola. El síndico de laciudad de Valencia reclama cien mil sueldos que tomó prestados Juan II. Las ciu-dades y villas reales piden la restitución de todas las cantidades prestadas al reycatólico y de su mandato entregadas al magnífico Luis Ferrer, lugartenientegeneral y vicegobernador de Valencia. El noble Tomás de Proxita, como herede-ro de Pedro Mercader, presentó dos agravios, uno por cierta cantidad de dineroque le debe el rey y el otro por una casa con huerto.

La baronía de Arenós fue objeto de diversos agravios:Los acreedores de la baronía de Arenós, tanto en su conjunto como separa-

damente el militar Joan Olcina, reclamaron como acreedores de dicha baronía.Las ciudades y villas reales, excepto Valencia, presentaron gravamen en recla-mación de los gastos que sostuvieron con motivo de la rebelión de Jaime deAragón en dicha baronía. La noble doña Blanca de Cardona reclamó tambiéncomo acreedora.

El noble Bernardo Nicolás de Villarig pretendió ciertas salinas de su baroníade las que fue expoliado por el rey. El noble Joan de Centelles interpuso el gra-vamen alegando la restitución de la posesión de su molino en la villa de Paterna.El magnífico Luis Joffre pretendía impedir la ejecución de las pensiones de loscensales contra las universidades y aljamas de la sierra de Eslida y Vall de Uxó.El noble Pedro Maça de Liçana interpuso agravio para pedir el condado de Luna.El noble Jenaro Rabaça de Perellós reclamó la restitución de la posesión del valley castillo de Ceta, Travadel y de la villa de Gorga, de la que fue expoliado por elgobernador de Valencia. Los nobles Onofre de Cardona, Miquel Joan y FranciscoPenarroya, como síndicos de las carnicerías comunes de la ciudad de Valencia,piden en su greuge la revocación del privilegio real de constituir carniceríascomunes y el lugar solicitado en dicha ciudad. El noble Onofre de Cardona pre-sentó agravio porque contra los fueros de Valencia y contra su voluntad, fue con-denado a dotar a su hija Joana de Cardona, esposa del noble Luis Ladró.

El justicia y los jurados de Alzira pidieron la reparación del agravio que secausó en las Cortes de Orihuela que declararon que la alquería de Montortal, sitaen los términos de Alzira, era una antigua caballería.

El magnífico Luis Julia, en nombre propio y como marido de la noble doñaMaría Dixer, presentó greuge porque ejecutó a los obligados al pago de pensio-nes de censales de la Pobla de Sayón y fue impedido por los oficiales reales.

Page 5: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

939

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

Cuestiones de jurisdicción:El síndico de Castellón de la Plana alegó dos gruges, uno por el expolio

sufrido por dicha villa y el otro por la restitución de la jurisdicción del goberna-dor de la Plana. El síndico de Alzira adujo gravamen pretendiendo la jurisdic-ción del lugar de Benimuslem, constituido dentro de sus términos. El señor deAlginet, don Onofre Guerau, alega greuge por ciertas ejecuciones realizadas porel justicia de Valencia en dicho lugar. El noble Joan de Cardona sobre ciertoespolio hecho por el rey Juan II de la posesión de la jurisdicción suprema y meroimperio del lugar de Ondara. Los síndicos de las ciudades de Alicante y Orihuelapresentan agravio sobre la jurisdicción de sus bailías ya que dicen tener sufi-ciente jurisdicción y no ser subalternas de la bailía general. El síndico de la villade Alzira por la jurisdicción criminal que dice le pertenece de los lugares deAlberic y Alcocer. El baile de Alicante presentó su agravio por las franquezasque tienen los súbditos reales.

El síndico de Guardamar sobre elección de oficios en dicho lugar. El condede Cocentaina por haber sido expoliado del oficio de general gobernador por elrey Juan II. El obispo de Segorbe presentó agravio por no haber sido convocadoa las Cortes.

El brazo real puso gravamen sobre el contencioso entre los sarracenos deXátiva y el síndico de dicha ciudad. El síndico de Xátiva a su vez interpuso otrosobre las salinas de Estubeny. El vizconde de Chelva se quejó porque dos de sussalinas en Chelva y Domeño fueron destruidas y prohibidas. Alfonso de Cardonaalegó greuge por la posesión de la peyta del lugar de Alcodar. Los herederos deJoana de Cardona pretenden la posesión del valle de Gallinera y Ebo donada ala egregia Joana por el duque de Gandía.

Las cuestiones entre partes no pueden ser materia de agravio deducible enCortes. El síndico de la ciudad de Valencia había protestado por el gravamen inter-puesto por el brazo militar sobre el cumplimiento de una sentencia arbitral queantiguamente fue promulgada entre dicho brazo y la ciudad de Valencia. Los sín-dicos de Valencia alegaron que no se podía interponer greuge de cort sobre el cum-plimiento de una sentencia arbitral, puesto que dicho greuge es el que debe exa-minar el rey por alguna injusticia hecha a alguien, sin interés de un tercero y eneste asunto no intervino para nada el rey. El brazo militar se sentía perjudicado por-que se había encomendado a la ciudad de Valencia la custodia de los 5.000 suel-dos que se daban cada año al regente de la Cancillería para administrar justicia atodos los brazos y también por el modo en que se realizaban las elecciones de algu-nos oficios. Esta es una cuestión entre partes, alegaron los jurados, es decir, entrela ciudad y el brazo militar y no es asunto para tratar en la villa de Monzón, fuerade la ciudad de Valencia como reconocen los fueros y privilegios. Ellos habíanacudido a Monzón convocados por el rey para estar a su servicio y no para pleitarcon nadie suplicando no se admitiera la queja presentada por el brazo militar.

Page 6: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

Analizando los greuges alegados en esta sesión de Cortes se deduce que notodos son quejas contra la actuación del rey o sus oficiales. Prevalecen las cues-tiones de tipo económico y las reclamaciones de devoluciones de préstamos con-cedidos al monarca, utilizando esta vía, probablemente para ejercer más presiónante el rey.

Los agravios no son siempre aceptados. La comisión encargada de exami-nar los memoriales de greuges pueden rechazar los que contienen pretensionesextravagantes o aquellos cuya materia no les compete. Los agravios que serechazaron se desestimaron por no existir actas que probaran el gravamen, noestar suficientemente documentado, no tener constancia del mismo, no estar fun-damentado o no haber comparecido a su debido tiempo.

Se dieron respuestas satisfactorias en el caso de préstamos al rey cuyas can-tidades no habían sido devueltas, tanto en el caso de las villas reales que recla-maron los gastos que sostuvieron con motivo de la recuperación de la baronía deArenós y vizcondado de Chelva, como en el agravio de las villas reales quepidieron la restitución de las cantidades prestadas a Luis Ferrer, por mandatoregio, para la guerra de Granada.

Cortes de 1528 11

Carlos I alteró el orden de celebración de Cortes porque determinó que laestructura de las disposiciones fuera la inversa. La oferta económica precedió alos fueros y reparación de greuges. Esta novedad supuso el declive del peso polí-tico del reino, puesto que la presión que se podía ejercer sobre el monarca si secondicionaba la aprobación del servicio a la reparación de los agravios dismi-nuía si la oferta se concedía antes de la revisión.

La convocatoria realizada desde Madrid llevó al síndico de la ciudad deValencia a hacer notar al rey que había incurrido en contrafuero tanto por noencontrarse el monarca en el reino de Valencia como por el lugar señalado parala reunión en un lugar no perteneciente a dicho reino como era Monzón12.

940

REMEDIOS FERRERO MICÓ

11 La documentación sobre estas Cortes es escasa reduciéndose casi exclusivamente a los fueros.Sabemos que el jurado de la ciudad de Valencia, Miquel Jerónimo Berenguer fue tratador y exa-minador de greuges, Regina PINILLA PÉREZ DE TUDELA, «Aproximación a las Cortes Valencianasde 1528», Estudios en recuerdo de la profesora Sylvia Romeu Alfaro, Universitat de Vàlencia,1989, t. II, pp. 783-799.

12 A.C.A., Generalidad. Procesos de Cortes, 1010, f. 28, y Cancilleria Real. Procesos de Cortes, 43,f. 30.

Page 7: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

Las prisas del emperador determinaron que, de las 22 rúbricas con variosfueros pedidos por los tres brazos13, en Monzón solo se resolvieron los 19 capí-tulos de la rúbrica II referente al donativo de 100.000 libras ofrecidas al rey y10.000 más para los gastos de las Cortes. Destaca el capítulo XIII, que establecepor primera vez que la tercera parte de las 100.000 libras se dedicaría exclusi-vamente a satisfacer a los agraviados cuyos greuges fuesen apreciados por losbrazos14. Si la tercera parte no bastara se acuerda que puedan demandar el restoen las siguientes Cortes. La parte dedicada al pago de los agraviados debe espe-cificar claramente quién recibe el pago, la causa de la deuda, la cantidad satisfe-cha y, si quedara algo pendiente, la suma acreedora a que se tiene derecho.

En la rúbrica I, que trata de la habilitación del duque don Fernando deAragón y dada la anómala situación producida al haber empezado las Cortes conla oferta que se habría de haber votado al finalizar las mismas y después de vis-tos los greuges, consta la petición de los brazos al monarca que si alguno de losexaminadores fuera sospechoso en alguno de los agravios interpuestos y ademásfuera examinador, no interviniera en dicho examen, a lo que el monarca accedió.

Cortes de 1533

El 19 de junio de 1533 fueron abiertas en la iglesia mayor de Santa Maríaen Monzón Cortes generales. El 23 de julio los jurados valencianos encargan asus representantes en Cortes que expusieran los greuges y contrafueros cometi-dos por los oficiales reales. Las quejas se centran en la intromisión en la juris-dicción que no es de su competencia acusando a los alguaciles del gobernador yal baile. Los síndicos mantienne informados a los jurados de cuanto acontece enlas Cortes y éstos les recuerdan que deben insistir en que la elección de cargosdebe ajustarse a los fueros15.

Preferentemente, en estas Cortes se trataron de deslindar los términos de lasdiferentes jurisdicciones y el arreglo de diezmos y primicias. Los roces entre lasdistintas jurisdicciones eran frecuentes porque no estaban bien delimitadas susrespectivas competencias y una manera de burlarla era alegar que se pertenecíaa un estamento distinto al que instigaba la acción. Las jurisdicciones que máschocaron fueron la real y la eclesiástica.

941

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

13 Según el cuaderno impreso en 1539 por Francisco Díaz Romano.14 Cortes de 1528, cap. XIII de la oferta, f. IIIv. Carlos I acepta el que el tercio de la oferta se des-

tine a los agraviados sin más condiciones.15 Regina PINILLA PÉREZ DE TUDELA, «Correspondencia entre los distintos municipios del reino de

Valencia y sus representantes en las cortes de Monzón en 1528 y 1533», Jerónimo Zurita. Suépoca y su escuela, Zaragoza, Institución «Fernando el Católico», pp. 363-369.

Page 8: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

El brazo eclesiástico es el que más perjudicado se siente como se puedeapreciar a través de los capítulos presentados. Los fiscales reales, dicen, causanperjuicio a la jurisdicción eclesiástica y a la buena administración de la justiciaporque en los contenciosos de jurisdicción los detienen en prisiones secularespor cuestión de cobrarles gastos. El rey contestó a esta petición que si alguienalega privilegio clerical, los gastos hechos en el proceso del juez secular seanfijados por el juez eclesiástico según costumbre16.

La Iglesia se siente agraviada y la libertad eclesiástica perjudicada porquesin preceder declaración del juez eclesiástico, pretenden los jueces secularesentrar en la iglesia y detener a los delincuentes. El monarca contestó que seobservaran las disposiciones legales al respecto y se revocaran los abusos17. Lasautoridades seculares se veían imposibilitadas para actuar contra clérigos delin-cuentes debido a las inmunidades que gozaban y porque no contaban con la cola-boración de las autoridades eclesiásticas, que se mostraban remisas en sus actua-ciones18.

Los alguaciles del cardenal y arzobispo de Valencia y otras personas ecle-siásticas se sienten agraviados por las actuaciones de los oficiales reales. Elbrazo eclesiástico pidió que los greuges infringidos fueran revocados y repara-dos por el rey. El monarca contestó que se observaran las libertades e inmunida-des de la Iglesia bajo canónicas sanciones y que se revocaran los abusos19.

Los agravios denunciados hacen mención a que la jurisdicción eclesiásticase siente perjudicada por los oficiales reales porque éstos procedieron a desterrarpúblicamente con trompetas y atabales al oficial del cardenal arzobispo deValencia y a los canónigos de la iglesia, poniendo las armas reales en los bienesde aquéllos con gran perjuicio de la libertad eclesiástica y escándalo del pueblo.El rey, en su respuesta, mandó se observaran los fueros y la concordia de la reinadoña Leonor y el cardenal de Comenge, y que al carecer de información sobreeste asunto cuando la tuviera ya procedería de razón20. La concordia firmada

942

REMEDIOS FERRERO MICÓ

16 Furs, Capitols, provisions y actes de cort fets e publicats en la vila de Monço per la Magestat dedon Carlos Emperador dels Romans: E la serenissima senyora dona Johana sa mare: e del mateixdon Carlos Reys de Valencia. En les corts generals per aquells celebrades als Regnicols de la ditaciutat e regne de aquella en lo Any MCXXXIII, rúb. XVI, «Que essent declarat algu alegrarsedel privilegi clerical: les despeses fetes en lo proces del jutge secular: sien tachades per lo jutgeecclesiastich».

17 Rúb. XVIII, «De la immunitat de la Iglesia».18 Teresa CANET APARISI, La A udiencia valenciana en la época foral moderna, Valencia, 1986,

p. 140.19 Rúb. XXIII, «Capitols offerts e donats en la cort general per part del braç ecclesiastich ab les res-

postes e provisions fetes en la dita cort per la Magestat en lo fi de cascun capitol».20 Rúb. XXIIII, «De contencio de jurisdiccio ecclesiastica e secular».

Page 9: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

entre el brazo secular y el eclesiástico por la reina doña Leonor y el cardenal deComenge disponía que los delincuentes que se refugiaran en las iglesias por losdelitos cometidos, hasta que se supiera si gozaban o no de la inmunidad, debíanestar custodiados dentro de las iglesias por un oficial del brazo eclesiástico y otrodel secular. La cuestión de las competencias entre ambas jurisdicciones, espe-cialmente en materia penal, fue muy controvertida21.

El brazo eclesiástico pidió que los frutos y rentas decimales pudieran sersacados de los lugares donde se recaudan. El rey, en su respuesta, mandó cum-plir el privilegio de Jaime II del año 1318. Respecto a los señores de lugares exi-gió que no pudieran, por sí ni por persona interpuesta, arrendar los frutos ecle-siásticos; en este supuesto el rey ordenó se cumpliese lo dispuesto por la reinadoña María y lo acordado en Orihuela por el rey católico en 1488. También insis-ten en no pagar derecho alguno de los frutos decimales22.

Igual que en las Cortes anteriores un tercio de la oferta se destina a indem-nizar a los agraviados por el rey o sus oficiales que hubieran presentado greugesen las Cortes y fuesen apreciados dentro del término de seis meses por los jue-ces de greuges23. De esta tercera parte del donativo se sacarían como créditoslíquidos, los préstamos concedidos al rey para la guerra de las germanías y rebe-lión de los moros de la sierra de Espadán, a saber: 500 libras al capítulo de laIglesia de Valencia, 393 a varios eclesiásticos, 400 al mismo brazo, otras canti-dades a las municipalidades de Jijona, Penáguila, etc., y a varios particularescuyas deudas el monarca había declarado líquidas.

Las Cortes se prorrogaron a Valencia el 15 de febrero de 1534 por espaciode los seis meses en que los jueces de greuges debían resolverlos, quedando enMonzón tres representantes valencianos, uno por cada brazo, que no podríanautorizar alguno, sino solo disentir y contradecir lo que en la continuación de lasCortes a los catalanes, reunidas en Monzón, pudiera perjudicar al reino deValencia o a cualquiera de sus tres brazos.

Cortes de 1537

La toma de Túnez fue la causa probable de esta convocatoria a Cortes dadala necesidad de dinero que dicha conquista suponía.

943

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

21 La concordia fue ratificada por el papa Gregorio XI el 11 de junio de 1372. El texto de la concordiapuede verse en MATHEU y SANZ, Tractatus de Regimine Regni Valentiae, Lyon, 1704, VII, f. 187.

22 Rúbs. XXV, XXVI y XXVII.23 Cortes de 1533, ff. XVv. y XVI. El monarca acepta el tercio sin condiciones, cap. XXI de la

oferta.

Page 10: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

Después de la forzosa conversión de los mudéjares se dictaron varias prag-máticas impidiendo el cambio de domicilio de los mismos o su acercamiento ala costa para impedir que huyeran a África o que entraran en connivencia con losmusulmanes de Berbería. Los moriscos preferían el extrañamiento antes queabjurar de su fe y huían con sus mujeres y pertenencias. El emperador pretendíacon estas pragmáticas impedir que los nuevos convertidos deambulasen sin per-miso por el reino, pero se encontró con la oposición de los brazos, que alegaronque era contrario a los fueros del reino el que los moriscos no tuvieran libertad«de mudar se en altres lochs que no sien maritims» y pidieron la revocación dela pragmática en cuanto se oponía a esa libertad, aunque no se oponen a que seancastigados corporalmente según la calidad del delito. El emperador, en su res-puesta a la petición de los tres brazos, aceptó el cambio de la pena que se debíaimponer a los nuevos convertidos, de muerte o galeras, por la de cautividad, perono resolvió en ese punto preciso que afectaba a la libertad de movimientos24.

Respecto a los greuges presentados, aunque a primera vista parece que sereproduce lo acordado en las anteriores, hay alguna diferencia. La tercera parte delas cien mil libras del servicio se destinarán a satisfacer a los agraviados natura-les del reino y por las deudas de dicho reino que consten mediante privilegio uotras legítimas cautelas y también para pagar deudas declaradas líquidas en lasanteriores Cortes y todavía pendientes. Entre éstas se encuentran los gastos reali-zados con ocasión de las germanías, los 14.000 ducados que por la generalidad yciudad fueron prestados para la reducción de la sierra de Espadán, 1.000 librasconcedidas como merced a doña María Magdalena Claramont y de Tolzá y 2.300ducados prometidos para subvenir al rescate de las villas de Castellón y Villareal.

Los greuges se fallarían por los jueces provisores dentro de seis meses con-tados a partir que el duque don Fernando de Aragón, lugarteniente general delreino, volviera a Valencia. Los jueces y provisores de greuges juran que se reu-nirán una vez cada día en la cofradía de san Jaime para examinarlos y proveer,siempre que se encuentren entre ellos los nombrados por el rey de los tres bra-zos, los cuales tendrán poder bastante para declararlos no obstante la ausencia delos otros25. En las cortes de 1533 se exigía la mayoría de los presentes sin espe-cificar si eran de los nombrados por el rey o por los estamentos26.

944

REMEDIOS FERRERO MICÓ

24 Cortes de 1537, f. VIII: «Que la pena de mort, o galera imposada als novament convertits percontravenir a la pracmatica de la qual se fa mencio no puga esser commutada en pena pecunia-ria ni redimida ab diners».

25 Furs e actes de cort fets e atorgats per lo invictissimo señor don Carlos, Emperador y Rey nostreSeñor als regnicoles de la ciutat y regne de Valencia, en les corts per aquells celebrades, en la vilade Monço, als regnes de Arago, Valencia y principat de Catalunya. En lo any de la nativitat denostre Señor Deu MCXXXVII, f. XX.

26 Furs..., 1533, rúb. IIII, cap. XI, «La offerta feta a sa Magestat per los tres brassos».

Page 11: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

La novedad radica en que los agraviados tienen que ser naturales del reinoy las deudas también. La oferta sigue aceptándose con excepciones.

Cortes de 1542

Como era habitual con Carlos I, los greuges alegados en Cortes se remi-tieron a la ciudad de Valencia para que allí se determinasen por los provisores yjueces de greuges que asimismo juzgarían los presentados en dicha ciudad den-tro de los seis meses siguientes a los quince días de la llegada de don Fernandode Aragón. Para ello se reunirían tres días a la semana en la cofradía de san Jaimelos oficiales nombrados como jueces por parte del rey y de los brazos pudiendosentenciar los presentes. Con la obtención de la sentencia el rey o sus oficialesestaban obligados a dar letres executories. Si en los seis meses el interesado nohabía obtenido satisfacción a su agravio, quedaba a salvo su derecho para pre-sentarlo en las siguientes Cortes27.

Esta vez no se asigna la tercera parte del servicio, sino tan solo 20.333libras, 6 sueldos y 8 dineros para satisfacer a los agraviados del reino y por deu-das del reino declaradas líquidas por el emperador. Entre éstas se encuentran lospréstamos aún no devueltos con ocasión de las germanías y la sierra deEspadán28. Las 13.000 libras restantes, pertenecientes a los agraviados, se con-cedieron atendiendo las urgentes necesidades que había pero siempre que nofuera causa de perjuicio para los tres brazos ni para los particulares.

A muchas ciudades y villas reales acreedoras se les asignó su cobro de latercera parte del servicio de Cortes, pero el tesorero real consignaba la deuda alos clavarios de los otros brazos y no al clavario del brazo real por lo que nopodían ser pagadas las deudas causando gran daño y perjuicio. El brazo realsuplicó que las consignaciones que se hicieran a las ciudades y villas reales porlas cantidades que debían cobrar se hicieran contra el clavario del brazo real yque fueran los primeros ante otros acreedores. En este agravio la contestacióndel monarca fue dar su «plau» sin más condiciones29.

El problema de las deudas reconocidas y consignadas al tercio del serviciode los agraviados sigue sin solucionarse. Los examinadores de greuges de las

945

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

27 Furs e actes de cort fets e atorgats per lo invictissimo señor don Carlos, Emperador y Rey nostreSeñor als regnicoles de la ciutat y regne de Valencia, en les corts per aquells celebrades, en la vilade Monço, als regnes de Arago, Valencia y principat de Catalunya. En lo any de la nativitat denostre Señor Deu MCCDXXXXII, f. XXIIv.

28 Furs..., de 1542, f. XXIII.29 Furs..., de 1542, f. XVI.

Page 12: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

Cortes de 1533 proveyeron que se pagasen todos los gastos hechos por las ciu-dades y villas reales con ocasión de las germanías según certificado del maestroracional, pero la villa de Castellón no obtuvo la certificación hasta mucho tiem-po después por las objeciones que le planteó dicho maestro racional. El brazoreal pide en estas Cortes que se reconozca el agravio y se le paguen las 744libras. La respuesta es la de siempre: que el duque don Fernando cuando esté enValencia lo estudie y provea30.

Tres dineros añadidos al impuesto sobre «murs y valls» a causa de loslevantamientos de los moros de la sierra de Espadán es causa de otro agravio delbrazo eclesiástico. En las anteriores Cortes los tres brazos habían presentado uncapítulo manifestando que con ocasión del levantamiento de Espadán se impu-sieron tres dineros sobre el derecho de «murs y valls» por un periodo de tres añoscon el consentimiento y licencia del cardenal Salviatis, y que habiendo transcu-rrido los tres años en exceso, concretamente quince años, los eclesiásticos nopueden ser obligados a pagar dicho impuesto. En su respuesta, el monarca pro-veyó que encargaría al lugarteniente general que oídas las partes hiciera justicia.Como no lo hizo, el brazo eclesiástico pide al monarca en las presentes Cortesque mande a su lugarteniente general que una vez en la ciudad de Valencia ydentro de los seis meses resuelva, que suprima el derecho de los tres dineros porlo menos a los eclesiásticos, de lo contrario que se prorrogue tres meses y que seles indemnice con cargo a la consignación de las 11.000 libras destinadas a losagraviados y si no bastara, del tercio del servicio. El monarca dio su consenti-miento: «Ques guarde lo observat en les provisions causa recognoscendi»31.

El emperador, en la aceptación de la oferta, hace constar su consentimiento ala misma excepto en la asignación de la tercera parte del servicio para los agra-viados que acepta solo por esta vez, para que no cause perjuicio en el futuro32. Lamisma excepción se repetirá en las Cortes de 154733, 155234, 156435 y 158536.

946

REMEDIOS FERRERO MICÓ

30 La villa de Castellón ayudó al monarca en tiempos de la germanía mandando a la villa deMorvedre 94 hombres durante un mes a los que pagó 313 libras y 2 sueldos y durante otro mesmantuvo 58 hombres que le costaron 203 libras. También envió a Xátiva 57 hombres durante unmes y seis días que le costaron 227 libras y 3 sueldos. Furs... de 1542, «Comissió al loctinentgeneral que conega si lo sou pagat per la vila de Castelló a certs soldats en temps de la germaniadeu esser admes per liquit», f. XVIv.

31 Furs... de 1542, f. XIII.32 Furs... de 1542, f. XXIIII.33 Furs, Capitols, provisions, e actes de cort fets per lo Serenissimo Don Phelip Princep, e primo-

genit de la Cesarea Real Majestat del Emperador y Rey nostre Senyor, e Governador general delsregnes de la corona de Arago. En les corts generals per aquell celebrades als regnicols de la ciu-tat y regne de Valencia, en la vila de Monço, en lo any MDXXXXVII, f. XXIIII.

34 Furs, Capitols, provisions, e actes de cort fets per lo Serenissimo Don Phelip Princep, e primo-genit de la Cesarea Real Majestat del Emperador y Rey nostre Senyor, e Governador general dels

Page 13: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

regnes de la corona de Arago. En les corts generals per aquell celebrades als regnicols de la ciu-tat y regne de Valencia, en la vila de Monço, en lo any MDII, f. XVIIv.

35 Furs, Capitols, provisions, e actes de cort fets per lo S. C. R. M. Del Rey don Phelip nostre sen-yor ara gloriosament regnant: en les corts generals per aquell celebrades als regnicols de la ciu-tat y regne de Valencia, en la vila de Monço, en lo any MDLXIIII, f. XXIXv.

36 Furs, Capitols, provisions, e actes de cort fets per lo S. C. R. M. Del Rey don Phelip nostre se -nyor ara gloriosament regnant: en les corts generals per aquell celebrades als regnicols de la ciu-tat y regne de Valencia, en la vila de Monço, en lo any MDLXXXV , f. 41.

37 AMV, Lletres misives, g3 49, ff. 101 y ss.38 AMV, Lletres misives, g3 49, f. 27.

Se va observando un progresivo absolutismo. La pugna entre el poder realy el del reino se va a manifestar a raíz del juramento del príncipe Felipe. Losjurados de la ciudad de Valencia consideraron que el deseo del emperador, quepuso todo su empeño en que en el transcurso de la celebración de Cortes se jura-se a don Felipe como príncipe, constituía un contrafuero. Mandaron instruccio-nes a los síndicos que les representaban en Monzón para que se informaran delas intenciones de los brazos de los otros reinos autorizándolos solo a adherirseal juramento en las mismas condiciones que hicieran Aragón y Cataluña. Fue talla presión del emperador que finalmente aceptaron a pesar de ser contrario a losprivilegios y fueros del reino de Valencia37.

Un asunto que causó gran revuelo fue la disposición que prohibía a los nue-vos convertidos cambiar de domicilio. Los inquisidores de la ciudad y reino deValencia publicaron el 4 de junio de 1540 un cartel o mandato en la catedral envirtud del cual, y so pena de excomunión mayor, se prohibía a cualquier perso-na, hombre o mujer, de los moros nuevamente convertidos, vecinos y habitantesde la ciudad y reino de Valencia, salir del reino ni moverse de un sitio a otro consus bienes, mujeres e hijos sin licencia y mandato del inquisidor. Los encubri-dores incurrirían en la misma pena y en la de azotes. Los tres estamentos se opu-sieron a la medida por estimar que dicha disposición suponía un contrafuero.Con el fin de protestar resolvieron enviar una embajada a la corte comisionandoal efecto al canónigo Miedes para que fuera a ver al emperador y le transmitie-ra el malestar que había causado a los jurados y estamentos el cartel38 de laInquisición y le pidiera la revocación del mandato promulgado por el SantoOficio por ser muy perjudicial para los señores de vasallos y por ir en contra delos privilegios otorgados por los reyes anteriores.

Los estamentos escriben también al inquisidor general haciéndole saber suoposición a la medida dando a entender que la prohibición de cambiar de domi-cilio prevista en el cartel obedecía a la ignorancia del derecho valenciano porparte de los inquisidores:

947

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

Page 14: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

«Del qual cartell e mandato e coses en aquell provehides e manades per vos-tres reverents paternitats los elets y sindichs dels tres staments de la dita ciu-tat y regne de Valencia stan molts admirats com sien coses noves en dita ciu-tat e regne. Maiormente per que los dits elets y sindichs tenen per molt cert eindubitat que si los dits reverents inquisidors haguessen tengut o tinguessennoticia dels furs del dit regne no ho hagueren axi provehit. Ab los quals furses dispost e ordenat que qualsevol vasalls moros de la dita ciutat e regne deValencia...puixen mudar sos domicilis en altre qualsevol loch del dit regnepuixque aquellsans de mudar los dits sos domicilis compten e hajen comptatab sos senyors els haien pagat lo quels deven. Et etiam ab los mateixos furses despost e ordenat que a cascun senyor de vasalls moros e novament con-vertits puixa admetre e rebre en vasall a qualsevol que vendra a avasallarse alaquells e voldra ferse vasall de aquells puix que li conste haien ja comptat ablos senyors de qui eren vasalls los haien pagat lo que per aquells los eradegut»

En la misma carta alegan que lo dispuesto en los fueros no es contrario a lafe39 e insisten en que si los inquisidores hubieran conocido los fueros no hubie-sen mandado publicar el susodicho cartel40. Los fueros permitían a los vasallosmoros de la ciudad y reino de Valencia cambiarse de domicilio siempre que con-taran con la autorización de su señor y hubieran pagado sus deudas. Los mismosfueros admiten que los señores de vasallos nuevamente convertidos puedanadmitir a nuevos cristianos siempre que previamente éstos hubieran liquidadosus deudas a sus anteriores señores.

Los intereses de la nobleza favorables a los moriscos reflejados en lasCortes de 1528, 1533 y 1542 y los del Santo Oficio proclives a ejercer su fun-ción represiva hacia los nuevos convertidos chocarán41. Sin embargo, el monar-

948

REMEDIOS FERRERO MICÓ

39 La Inquisición tenía competencia sobre todos los estamentos y frecuentemente era utilizada porla monarquía para controlar el reino. En Valencia no se aceptó de buen agrado sobre todo porquelos inquisidores eran extranjeros y atentaba al derecho foral. Fernando el Católico se enfrentó alos estamentos valencianos que pretendieron presentar un greuge si persistía en su actitud lo quellevó al monarca a amenazar con excomunión. El monarca reaccionó firmemente diciendo que sihacía falta dejaba la guerra de Granada e irá a Valencia a comprobar quién era de su parecer yquién no. Les recordó que los fueros no debían alegarse para encubrir una herejía y que la inqui-sición se había aprobado en las cortes de Tarazona de 1484. Triunfó el parecer del monarca con-siguiendo que desapareciera el greuge inquisitorial de las reivindicaciones parlamentarias. ARV,Real Cancilleria, Procesos de Cortes, reg. 513, f. 199.

40 AMV, Lletres misives, g3 49, ff. 35 y 36. La presencia de comisarios y alguaciles inquisitorialesextranjeros no solo era antiforal sino que tenía el agravante del desconocimiento de la realidaddel reino y por supuesto de sus leyes.

41 En Valencia las competencias de la Inquisición habían aumentado con motivo de los bautismosforzosos a los mudéjares.

Page 15: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

ca estaba interesado en «que los nuevos convertidos de moros de ese Reino seanbien instruidos y vivan como catolicos cristianos»42 por eso colaboraba con laInquisición. Realmente las disposiciones sobre el movimiento de los moriscosprovienen del inquisidor general y del virrey. El 18 de agosto de 1539 el virreyhabía promulgado una pragmática impidiendo el cambio de domicilio a losmoriscos. Se trataba de evitar que los nuevos convertidos trasladasen sus domi-cilios a la costa. Una nueva pragmática publicada dos años más tarde imponíapenas más graves que conllevaban pena de muerte prohibiendo asimismo cual-quier auxilio a los moriscos que tratasen de llegar a África.

Cortes de 1547

Los nuevos convertidos siguen siendo objeto de la promulgación de diver-sas pragmáticas consideradas contrafuero por el brazo militar que no pierde oca-sión de protestarlas. Rechaza la aprobada el 25 de septiembre de 1545 que regu-laba el lugar de residencia de los moriscos y también los pregones que atentan ala jurisdicción de los barones que tienen mero y mixto imperio considerándoloun ataque a la libertad del estamento43.

Los conflictos de jurisdicción y la administración de justicia siguen sinresolverse. Las quejas se dirigen contra los alguaciles del real consejo por entraren las tierras del noble don Guillem Belvís lesionando la jurisdicción que le per-tenecía en su baronía44. Los derechos fundamentales y las garantías constitucio-nales fueron vulnerados en la persona del noble don Vicent de Castellví que lle-vaba preso más de doce días por orden del virrey sin presentarse ningún cargocontra él45. El brazo militar consideró que era contrafuero por ir contra lo dis-puesto en el fuero 19 de criminibus que solo prevé dos días, y el fuero Que si

949

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

42 El rey escribió a los jurados de Valencia el 16 de enero de 1534 comunicándoles que el cardenaldon Alonso Manrique, inquisidor general, había comisionado al franciscano fray Antonio deCalcena y al abad de Arvas don Antonio Ramirez, capellán real, para ir a visitar y dar orden quelos nuevos convertidos estén bien instruidos y vivan como católicos y les manda que sin contra-dicción alguna les favorezcan en dicha tarea. AMV, Cartes Reals, h3 4, f. 27. Previamente, laSanta Sede se había lamentado de la apostasía de los moriscos valencianos y de su falta de ins-trucción de ahí el interés en mandar predicadores. Labor difícil porque los moriscos esquivabanla instrucción y seguían con sus prácticas.

43 El 8 de agosto de 1550 se publicó un pregón que limitaba la jurisdicción de los barones y fue pro-testado casi al instante, ARV, Real Cancilleria, reg. 523, f. 158.

44 ARV, Real Cancilleria, reg. 523, f. 100.45 ARV, Real Cancilleria, reg. 523, f. 50.

Page 16: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

alcun singular del braç Militar sera pres per crim que haja a esser denunciat dinsdeu dies, e que lo denunciant se haja obligar a pena de y talio 46 que dispone quesi alguien del brazo militar fuera hecho preso por un delito debe ser denunciadodentro de los diez días posteriores a su detención, de lo contrario debe quedarlibre47.

Consecuencia del greuge presentado en las anteriores Cortes es el capítuloque presenta el brazo eclesiástico sobre la imposición de nuevos impuestos de laciudad de Valencia y que conciernen a las personas eclesiásticas. Se quejan deque los jurados, racional y síndico de la ciudad de Valencia obligan a contribuira los eclesiásticos sin haber convocado a su brazo. Pide que dichas exaccionesse declaren nulas y sin ningún valor. El príncipe otorgó su consentimiento ale-gando que sin el concurso del brazo eclesiástico no se impusieran nuevos dere-chos en perjuicio de los eclesiásticos48.

Por lo que respecta a los agraviados, siguen sin cobrar, por lo que vuelvena insistir que su deuda se contabilice entre las 20.333 libras, 6 sueldos, 8 dine-ros otorgados. Los brazos, agradecidos por la celeridad en la celebración de lasCortes, ofrecen las 13.000 libras restantes del tercio del servicio destinado a losagraviados pero sugieren que sirva para comprar alguna joya o cosa señaladaque recuerde el evento49.

Cortes de 1552

Presididas por el príncipe heredero muestran el avance del absolutismo. Lasrespuestas son dilatorias y las sentencias simplemente no se cumplen.

Las deudas que habían sido declaradas líquidas y todavía estaban pendien-tes se incluyen en la parte del servicio destinado a los agraviados y que como enlas anteriores Cortes asciende a 20.333 libras, 6 sueldos, 8 dineros. Como talesfiguran los préstamos realizados con ocasión de las germanías y de la sierra deEspadán y subvenciones de particulares de las villas de Castellón y Villareal, asícomo gracias y mercedes del monarca en grandes cantidades50. A pesar de tantadeuda no satisfecha, los brazos ofrecen las 13.000 libras restantes del tercio del

950

REMEDIOS FERRERO MICÓ

46 Fori Regni Valentiae, Joannes Rex Navarre locumtenes Alfonsi Regis III. Anno MCCCXXXVIII.Actus curie, «In extravaganti», f. 58v.

47 La medida se amplió a los otros dos brazos por decisión real.48 Furs..., de 1547, cap. IIII del brazo eclesiástico, f. XII49 Furs..., de 1547, f. XXIIIv.50 Furs..., de 1552, f. XVIv.

Page 17: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

servicio transfiriendo al príncipe los derechos que los agraviados tenían sobredicha cantidad51.

El reparto del tercio del servicio comenzaba con un bando dirigido a los agra-viados en el que se especificaba la cantidad que correspondía a cada reparto y seconcedía un plazo de 20 días para que los perjudicados presentasen la documenta-ción pertinente que justificase su derecho al cobro. Esta documentación era exa-minada y los que no tenían certificación que acreditara su condición de acreedorpodían acudir al tesorero autorizado para que les reconociera su condición.

Después de los seis meses, durante los cuales se revisaban las quejas denun-ciadas, se hacía público el mandato general autorizando el reparto del donativo.El virrey ordenaba al tesorero general que pagara las cantidades fijadas según elorden establecido por una comisión integrada por un canónigo de Valencia,representante del brazo eclesiástico; un caballero por el brazo militar y el síndi-co de la ciudad de Valencia por el brazo real. En dicho bando se especificaba lasciudades, las personas particulares y organismos a los que se había reconocidoel derecho a cobrar y la cantidad pendiente para abonar en el siguiente reparto.Era misión del virrey intervenir en el reparto de la reparación de agravios, perodelegaba su función en el regente de la cancillería.

Las permanentes necesidades económicas de la realeza, unidas a aconteci-mientos extraordinarios como las germanías o los levantamientos moriscos de lasierra de Espadán, habían obligado al monarca a pedir préstamos a ciudades y per-sonas particulares que al no ser devueltos pasaban a la condición de agraviados y ladevolución se efectuaba por medio de composiciones o con el servicio de Cortes.

Se admitió ahora una prórroga del plazo de seis meses para algunos casosconcretos de agravios presentados por la ciudad de Valencia. Se trata de una peti-ción del brazo real acerca de la igualdad de la exacción del real de la sal en elreino de Valencia y otro con motivo del nuevo impuesto de Sicilia.

El brazo real alegó que en las Cortes de 1547 las ciudades y villas realesproclamaron el gran daño y desigualdad que suponía el impuesto del general dela sal de un real por casa. Para solucionar el greuge el monarca había propuestoque se nombrase una comisión integrada por 24 personas y los diputados, conintervención del lugarteniente general, cesando su mandato en las presentesCortes sin que hubieran sentenciado. Piden ahora que desaparezca la desigual-dad en la exacción del real de la sal perteneciente al general aunque para ello setenga que aumentar la exacción. El príncipe resuelve que se nombren personascon poder bastante para solucionar la queja y autoriza la prórroga de las Cortesa la ciudad de Valencia52.

951

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

51 Furs... de 1552, cap. XVIII, f. XVIv.52 Furs... de 1552, f. XIII, cap. I.

Page 18: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

Otro agravio presentado por el brazo real hace alusión a la jurisdicción cri-minal sobre Benicarló y Vinaros que secuestró el portavoz del general goberna-dor del reino de Valencia mientras se resolvía el litigio sostenido entre la villa dePeñíscola y la orden de Montesa. Pide que se le conceda al lugarteniente degobernador deça el rio Uxó mientras dure la litispendencia, a lo que accedió elpríncipe53.

Los jueces y provisores de greuges se reunían en la cofradía de san Jaimetres días a la semana para examinar y declarar los agravios. Para que los acuer-dos fueran válidos tenía que estar presente necesariamente uno de los oficialesreales nombrados por el príncipe además de los de los tres brazos54.

El greuge interpuesto por la ciudad de Valencia a causa del nuevo impues-to de Sicilia tarda mucho en resolverse y por eso piden se prorroguen los seismeses asignados para resolver el agravio tanto tiempo como dure la dilación enresolver55. El príncipe respondió que durante la celebración de Cortes se tendríaen cuenta el contrato y si concluidas no se hubiera resuelto se encargaría el asun-to al duque don Fernando.

La cuestión del nuevo impuesto de Sicilia ya se suscitó en las Cortes ante-riores de 154756 cuando los tres brazos señalaron que por diversos fueros juradospor los reyes predecesores y reiterados por Fernando el católico y el mismoemperador, la ciudad de Valencia estaba exenta de los nuevos impuestos querecaían sobre la exportación de trigo en la isla de Sicilia. A pesar de dichos fue-ros, el maestro Portola y otros oficiales de la isla exigían el pago del impuesto ala ciudad de Valencia. Hay sentencia de los provisores y jueces de greuges dondese reconoce el agravio y obliga a que se le devuelva a la ciudad lo que pagó inde-bidamente por el nuevo impuesto. Como consecuencia de ello el rey consignódicha deuda en la tercera parte del servicio. Los tres brazos, además de pedir queno se exija el impuesto a la ciudad, y dado que la deuda es tan clara, suplicanque se les reintegre de la parte del servicio del año 1542 y siguientes57.

952

REMEDIOS FERRERO MICÓ

53 Furs... 1552, f. XIII, cap. II.54 Furs... de 1552, cap. XIIII de la oferta, f. XVI.55 Furs... de 1552, cap. XV de la oferta, f. XVI.56 Furs... de 1547, cap. XIII.57 La ciudad de Valencia figuraba como agraviada por el impuesto sobre el trigo importado de

Sicilia y se le abonaron cantidades en los años 1540, 1541 y 1542, pero una vez realizado elreparto de las Cortes de 1552 aún se le adeudaban 14.650 libras. ACA, reg. 4296, f. 126. Del estu-dio del tercio del servicio de las Cortes de 1542, 1547 y 1552 se deduce que la deuda contraídapor el monarca con las ciudades, organismos y personas particulares del reino de Valencia erasuperior en algunos casos al total del servicio. M.ª Dolores SALVADOR LIZONDO, «Reparació delsgreuges a les corts de 1542, 1547 i 1552», Afers, 5/6, 1987, p. 192.

Page 19: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

Fernando el Católico en las Cortes de 1510 había ordenado que los privile-gios concedidos por los reyes don Martín y su mujer doña María que insertabaotro privilegio de don Federico rey de Sicilia concedidos a la ciudad de Valenciase observaran. En ellos se permitía que libremente se pudiera sacar de la islatrigo y cebada pagando solamente tres tarines por salma de trigo y un tarín diezgranos por salma de cebada58. En 1533 los tres brazos insisten en que se reco-nozca este derecho y se dé licencia a la ciudad de Valencia para sacar trigo ycebada en estas condiciones59. En 1537 le recuerdan al monarca que a pesar deestar confirmados los fueros y privilegios que tratan este asunto el virrey y elmaestro Portola en 1536 habían exigido injustamente, con mucha fuerza y vio-lencia, vejando con prisión a los procuradores y factores que trataban de avitua-llar a la ciudad de Valencia obligándoles a pagar el nuevo impuesto por importede 5.030 ducados. El emperador, en su respuesta, mandó observar los fueros yse comprometió a despachar las ejecutorias que convinieran. En cuanto a los5.030 ducados dijo que se informaría y lo tendría en cuenta para otra ocasión60.

Cortes de 1564

La convocatoria realizada el 18 de junio de 1563 tuvo que prorrogarsevarias veces y todas fueron protestadas por los estamentos valencianos. El rei-nado de Felipe II va a destacar por su enérgica política llevada a cabo por mediode sus virreyes. El bandolerismo aristocrático va a ser uno de los grandes pro-blemas que llevaría a la reorganización de la Audiencia pedida por los brazos yaceptada por el monarca.

La administración de justicia ocupará buena parte del contenido de estasCortes. La delimitación de la jurisdicción eclesiástica y secular que evite inje-rencias y permita la libertad de los jueces eclesiásticos es un tema que volvemosa ver. El clero continúa con la defensa de sus derechos jurisdiccionales exigien-do la inmunidad de las iglesias que debían respetar los oficiales reales61.

953

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

58 Furs, e Actes de Cort fets per lo Senyor Rey don Ferrando en la vila de Monço, en lo any Milcincents y deu, Rúbrica II «De la treta del forment de Sicilia», f. II.

59 Furs, capitols, provisions e actes de cort fets en lo any MDXXXIII, Rúbrica I, «De la treta delforment de Sicilia», f. II.

60 Furs e actes de cort fets e atorgats per lo invictissimo señor don Carlos, Emperador y Rey nostreseñor, als regnicoles de la ciutat y regne de Valencia, en les corts per aquell celebrades, en la vila deMonço, als regnes de Arago, Valencia, y principat de Catalunya. En lo any de la nativitat de nostreSeñor Deu MDXXXVII, «Sobre los nous imposits de la ylla de Sicilia», f. VIIIv.

61 Furs, Capitols, Provisions, e actes de cort, fets y atorgats per la S.C.R. M. del Rey don Phelip nos-tre Senyor ara gloriosament regnant: en les Corts generals per aquell celebrades als regnicols de

Page 20: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

El avituallamiento de la ciudad y reino fue la causa que llevó a los brazosa pedir la revocación de las pragmáticas que lo impedían. De una manera gene-ral, sin especificar cuáles eran, los tres brazos piden que todas las pragmáticas ybandos publicados hasta la fecha que por cualquier vía impidiesen el adecuadoavituallamiento de la ciudad y reino fuesen revocadas y que en adelante no sevolvieran a aprobar semejantes normas. La respuesta del monarca estuvo a tonocon la imprecisión de la demanda: enterado de las pragmáticas y bandos pro -veerá lo que convenga62.

Los tres brazos son un poco más explícitos cuando suplican que el rey revo-que y anule los bandos, pragmáticas y provisiones aprobadas desde el año 52,fecha de las últimas Cortes, hasta la actualidad y que vulneraran los fueros, pri-vilegios, usos y buenas costumbres en cuanto perjudiciales a los mencionadosfueros. Acusan directamente al lugarteniente y capitán general y a algunos otrosoficiales reales de haber publicado disposiciones derogando los fueros y privile-gios de la ciudad y reino. El monarca contesta que cuando esté informado man-dará revocar lo hecho contra los fueros63.

La delincuencia de todo tipo que asolaba el reino de Valencia y que se impu-taba a moriscos, bandoleros y vagabundos, indujo a los virreyes a adoptar medi-das para su control. Se sirvieron de pragmáticas que en la mayoría de los casosno respetaban el derecho foral. Es significativo que los brazos se opongan a todointento de atajar los desórdenes. Se dictaron varias provisiones endureciendo laspenas para los que acogiesen y protegiesen a desterrados y condenados. Tiempoles faltó a los estamentos para pedir su derogación por ser contrario a los fueros.Los tres brazos, basándose en que las penas establecidas y ordenadas por fuerosy privilegios no pueden ser aumentadas, suplicaron al monarca en las Cortes quedecretara la nulidad de las pragmáticas que impusieron mayores penas que lasestablecidas por fueros. El monarca mandó observar los fueros y que se evitasenlos abusos64.

Desde mediados de siglo, los virreyes venían promulgando pragmáticasque afectaban a los moriscos, como la prohibición de cambiar de domicilio o eldesarme general de los cristianos nuevos que contó con la oposición de los esta-mentos. Felipe II había decretado el 2 de enero de 1563 el desarme como con-secuencia de la actitud de los moriscos causantes de los desórdenes, pero losestamentos decidieron enviar una embajada al rey para que ordenara restituir

954

REMEDIOS FERRERO MICÓ

la ciutat y regne de Valencia, en la vila de Monço, en lo any MDLXIIII, cap. XIII, f. IIv. «Quesguarden los furs que parlen de la inmunitat de la sglesia».

62 Furs... de 1564, cap. CXIII, f. XVII.63 Furs... de 1564, cap. LXXXIII, f. XII «De la revocació de les pragmatiques fetes contra fur».64 Furs... de 1564, cap. LVIII, f. VIII.

Page 21: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

las armas confiscadas y revocara la pragmática, por lo menos hasta las próxi-mas Cortes65.

El progresivo distanciamiento del monarca y el fortalecimiento del virreyllevaron a los estamentos a pedir que se reglamentara la organización de emba-jadas al rey. Éstos querían resolver directamente los problemas políticos con elmonarca y el hecho de que las Cortes se convocaran con poca asiduidad lo difi-cultaba. Desde 1542 se venía insistiendo en la necesidad de institucionalizar lasembajadas como forma de llevar las protestas al rey por los contrafueros come-tidos66, pero será ahora cuando los brazos consigan que se apruebe la reglamen-tación de las embajadas a la corte para protestar por los agravios. El fuero apro-bado determinaba que los emisarios se nombrarían acordadamente por los dipu-tados y los electos de los estamentos teniendo cada uno de ellos una voz, nopudiendo haber más de seis personas por estamento. El rey dio su conformidadcon la condición de que no se le enviasen embajadas, excepto en casos inexcu-sables, y con el menor gasto posible67. Las embajadas se convirtieron en la únicavía de conexión entre el rey y los estamentos fuera de la convocatoria de Cortesaunque con poco éxito por la actitud hostil de los virreyes.

El nuevo impuesto de Sicilia sigue sin solucionarse. Se recuerda que ya sepresentó greuge en las cortes de 1552 y en las presentes por parte de la ciudad deValencia. Vuelven a insistir que los seis meses asignados para la resolución de losgreuges se prorroguen tanto tiempo como dure la dilación en contestar y dosmeses más, y que el procurador patrimonial no pida la dilación sino tan solo den-tro de los dos primeros meses de los seis que hay asignados para la decisión delos greuges68.

La tercera parte de las 100.000 libras del servicio, que suman 33.333 libras,6 sueldos, 8 dineros, piden se destinen para satisfacer a los agraviados naturalesdel reino y por deudas del reino que el monarca haya declarado líquidas69.Mediante acto de corte se consideran tales los albaranes del escribano de racióny las deudas de las consignaciones hechas por el rey sobre la tesorería general,

955

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

65 Emilia SALVADOR ESTEBAN, Cortes valencianas del reinado de Felipe II, Valencia, 1973, p. XXIX.66 M.ª D. SALVADOR LIZONDO, «La observancia de los fueros en la época de Felipe II», Dels Furs a

l’Estatut. Actes del I Congres d’Administració Valenciana: de la Història a la Modernitat,Valencia, 1992.

67 Furs... de 1564, «Del orde ques deu tenir en la deliberatio de les embaxades, y de la execucio deaquelles», cap. XCIIII, f. XIIIv.

68 Furs... de 1564, f. XXVIII.69 El monarca acepta la oferta con la reducción del tercio para los agraviados y dice que solo por

esta vez.

Page 22: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

que constan mediante privilegio u otras legítimas cautelas y el resto de las deu-das declaradas líquidas en las Cortes anteriores todavía pendientes. Las deudasde la sierra de Espadán y las germanías continúan sin saldarse. En las Cortes de1604 todavía se reclamarán. La fábrica de murs y valls había prestado 11.000ducados para Espadán y el brazo eclesiástico aportó 393 libras. El capítulo de laSeu prestó 500 libras para combatir la germanía.

El lugarteniente general junto con una persona de cada brazo elegida por lasCortes, reunidos en la ciudad de Valencia, proceden a repartir el tercio entre losacreedores. Como caso aparte se planteó el de la ciudad de Valencia que habíaresultado perjudicada en las Cortes de 1552 por valor de 4.456 libras 2 sueldos3 dineros de las 26.087 libras 2 sueldos 3 dineros que se le debían y piden se con-signen contra cualquier clavario70.

El que no se paguen las deudas reconocidas supone que éstas cada vez seanmayores ya que para prestar al rey normalmente se han tenido que emitir censa-les y mientras no se amorticen se tienen que pagar las pensiones. No es de extra-ñar que los tres brazos exijan al monarca que, habida cuenta que los clavarios delservicio de las Cortes tenían la propiedad de los censales cargados sobre murs yvalls para la guerra de Espadán y aún están pagando pensiones, amortice los cen-sales. El monarca contestó con un lacónico «Plau a sa Magestat»71.

Cortes de 1585

En las cortes de 1585 es manifiesto el descontento de los valencianos conla política del virrey. El conde de Benavente (1567-1570) había perseguido lasdiversas manifestaciones de bandidaje. Trató de evitar el contacto de los moris-cos con sus correligionarios del norte de África. El clima de violencia, las ten-siones entre cristianos viejos y nuevos, el armamento general del país llevó alfracaso las distintas políticas de los virreyes que promulgaron drásticas pragmá-ticas para pacificar el país pero que chocarían con la legislación foral. La políti-ca represiva se encontró con la resistencia del reino que limitaba el poder del rey.Como señaló Sebastián García, al plantearse la disyuntiva entre represión eficaz-contrafueros, Felipe II y sus virreyes optaron por no respetar los fueros y privi-legios en aras de una mayor efectividad72. A partir de 1580 se incrementó la difu-sión de las armas de fuego con cerrojo de pedernal. El conde de Aytona (1581-

956

REMEDIOS FERRERO MICÓ

70 Furs... de 1564, f. XXVIIv.71 Furs... de 1564, cap. CII, f. XV.72 Sebastián GARCÍA MARTÍNEZ, Valencia bajo Carlos II, Ayuntamiento de Villena, 1991, p. 41.

Page 23: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

1594) llevó a cabo una política durísima coronada por el éxito pero claramenteantiforal. Intentó la pacificación a cambio de violar, en muchas ocasiones, lalegislación foral. De momento consiguió controlar el bandolerismo pero en elsiguiente virreinato resurgió con renovada violencia. Publicó tres decretos el 24de julio de 1581 con tal fin, en el primero reprimía el vagabundeo, en el segun-do prohibía las armas de fuego y ballestas menores de tres palmos, poseer espa-das con la punta cuadrada y encubrir a bandoleros73, y en el tercero disponía lapersecución de los que lucharan en Valencia, impidió la circulación de emboza-dos, expulsó a vagabundos y desocupados, prohibió que los moriscos viajaran allitoral y la posesión de armas blancas cortas74.

Los reiterados contrafueros, coincidiendo con el auge de las bandosidades,demostraron la ineficacia de la represión judicial. La opinión de los distintosvirreyes era que la represión del bandolerismo solo sería eficaz mediante castigosrigurosos sin importarles las garantías de los fueros y privilegios del reino. Anteel asesinato del almirante de Aragón don Cristóbal Folch de Cardona por unosjinetes entre los que se encontraban don Pedro de Castellví y Jerónimo deMonsoriu, caballero de Montesa, el virrey ordenó seguir las investigaciones hastael final no impidiendo que el procurador fiscal presentase el 31 de enero de 1584una súplica ante la Audiencia para que fueran atormentados todos los implicadosen el asesinato incluyendo a los mencionados caballeros a pesar del contrafueroque ello suponía75. La reacción de los brazos no se hizo esperar y en las Cortespidieron que los procuradores fiscales no pudieran, en juicio ni fuera de él, pedirtormento de persona militar o que gozara del privilegio militar y que los procu-radores fiscales y jueces que lo admitieran fueran privados de su oficio76.

La monarquía pensaba que el bandolerismo era posible por la existencia dela legislación propia del reino de Valencia que imposibilitaba la aplicación demedidas eficaces para atajarlo77. Los tres brazos no desaprovechaban la ocasión

957

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

73 Real Crida y Edicte sobre la delació de les armes y altres coses, BMV, Pragmáticas, sig. Churat,105-1634, n.º 7.

74 Real Crida y Edicte sobre les coses concernents a la pacificació de la present ciutat y quietut delspoblats en aquella: persecució dels delinquents y prohibició de cert genero de armes BMV,Pragmáticas, sig. Churat, 105-1634, n.º 8.

75 S. CARRERES ZACARÉS, Llibre de Memories, II, p. 955.76 Furs, Capitols, Provisions, e actes de cort, fets y atorgats per la S.C.R. M. del Rey don Phelip nos-

tre Senyor ara gloriosament regnant: en les Corts generals per aquell celebrades als regnicols dela ciutat y regne de Valencia, en la vila de Monço, en lo any MDLXXXV , cap. LXXXVI, f. 13v.

77 Acerca del delito de bandidaje, R. FERRERO MICÓ, «Bandolerismo en Valencia a finales del sigloXVI», El bandolero y su imagen en el Siglo de Oro, Universidad Autónoma de Madrid, 1989,pp. 79-92.

Page 24: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

para pedir la revocación de las actuaciones del virrey denunciando contrafuero.Felipe II, que había consentido los contrafueros pensando en la eficacia de lasmedidas represoras, tenía que aceptar en las Cortes su revocación. Naturalmenteno lo hacía de buen grado, y cuando le piden los tres brazos que no publique nin-guna pragmática sin previo examen por los síndicos de los estamentos que en elplazo de diez días tendrían que examinarla para comprobar que se ajustaba alderecho foral, no accedió. Respondió que en toda ocasión ha tenido en cuenta,por el amor que tiene a las gentes de este reino, que las pragmáticas se hacen porel bien de aquéllos y especialmente ha tenido cuidado que no repugnasen a losfueros y privilegios y manda que así se haga en el futuro78.

En cuanto a las embajadas, se quejan los estamentos de las dificultades quetienen para acudir al monarca por los impedimentos que pone el lugartenientegeneral alegando que no son justas ni necesarias. Solicitan que el virrey no inter-fiera en la organización de las embajadas y que en todo lo que se tenga que pro-veer por los estamentos y los diputados tengan voz los síndicos de la generali-dad y del brazo militar y no el asesor ni el escribano de la Diputación para queel número de unos y otros sea igual y piden cobrar a razón de cuatro ducados dedieta por día y cuatrocientos de ayuda de costa. El rey deja claro quién tiene elpoder en este tira y afloja, rebaja la ayuda de costa a doscientos ducados, pero loque es más importante, ordena que antes de iniciarse la embajada se acuda alvirrey a exponer los agravios y si en diez días no los repara se podrá mandar laembajada79.

Felipe II encomendó al conde de Aytona una política represiva ante la extra-ordinaria difusión de armas de fuego con cerrojo de pedernal y la explosión delbandidaje morisco. Una medida importante tomada por Aytona en 1584 fue lapragmática que prohibía la posesión de escopetas de pedernal bajo pena demuerte. Obligó, además, a los señores a sufragar los gastos de la persecución delos bandoleros a pesar del flagrante contrafuero. El virrey mandó que todos losque tuvieran lugares en el reino, dentro de tres días, pusieran en poder de uno delos escribanos ciertas cantidades para extirpación de bandoleros y vagabundos,bajo conminación de embargar sus bienes. Los estamentos consultaron con susabogados y llegaron a la conclusión que estas acciones nunca se habían practi-cado en el reino de Valencia y eran contrarias a los fueros. Acudieron al capitángeneral y de palabra y por escrito suplicaron anulara el mandato y tramitaron alrepresentante del rey lo que pretendían. Pero el capitán general, sin esperar res-

958

REMEDIOS FERRERO MICÓ

78 Furs... de 1585, cap. CLXXVI, f. 24, «Que les pragmatiques se facen per lo be del regne y norepugnants a furs y privilegis de aquell».

79 Furs... de 1585, «Que les embaxades pera sa Magestat se puguen fer servada la forma en loinfrascrit capitol contenguda», cap. LVIII, f. Iv.

Page 25: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

puesta del monarca como era obligado, pasó a ejecutar los mandatos embargan-do y vendiendo las prendas sin ninguna solemnidad, con la celeridad propia delas deudas privilegiadas, y a continuación envió por todo el reino a compañíasde soldados a recaudar la nueva imposición haciendo pecheros a los que siem-pre han gozado de libertad y la han empleado en servir a la Corona. Los tres bra-zos adujeron estos argumentos en las Cortes de 1585 y exigieron al monarca quelos mandatos hechos por el lugarteniente y capitán general a los señores de luga-res de pagar ciertas cantidades fueran revocados. Alegaron que la persecución yextirpación de los delincuentes y malhechores no pertenecía a los estamentos nia los particulares y piden la anulación de los mandamientos. El rey aceptó laqueja, mandó revocarlos ordenando que en el futuro no se hicieran y que se guar-daran los fueros y privilegios del reino. En cuanto a lo que ya se había pagadoordenó fuera restituido sobre las consignaciones de la parte del servicio delbrazo militar80.

La política del virrey es contestada frecuentemente por los estamentos quequieren frenar los avances del autoritarismo monárquico. De una manera testi-monial se pide la revocación de todas las pragmáticas contrarias a los fueros, pri-vilegios, usos y buenas costumbres, viene a ser como una cláusula de estilo dadoel nulo caso que hacía el rey. Formalmente éste se compromete a la defensa delos fueros, pero en la práctica no duda en dar pragmáticas contrarias a los mis-mos; aunque luego consienta en su revocación, el efecto deseado ya se habíacumplido.

En las Cortes de 1564 los brazos se quejaron porque desde el año 1552tanto el lugarteniente y capitán general como diversos oficiales reales habíanpublicado crides, pragmatiques, e provisions en derogacio dels furs, privilegis,usos y bons costums de dita ciutat y regne, tan perjudiciales a los fueros que nopodían aplicarse. El monarca contestó que se informaría y revocaría las disposi-ciones contra los fueros81. En las de 1585 los brazos dan un paso más y piden quese tengan por revocadas las pragmáticas contrarias a los fueros, privilegios, usosy buenas costumbres del reino y que no tengan fuerza de ley. El monarca con-sintió solo respecto de las pragmáticas contrarias a fuero82. ¿Significó esta res-

959

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

80 Furs... de 1585, cap. I, f. I. «Que los mandatos fets per lo Lloctinent general als senyors de llochsdel present Regne de pagar certes quantitats, pera la prosecucio dels bandolers y malfatans, sienrevocats, y que en lo sdevenidor se guarden los Furs y privilegis de aquest Regne, sens que lopassat se puga traure en consequencia. Y que les quantitats pagades per raho de dits mandatos,sien restituhides, ab consigancio sobre la part del servey tocant al bras Militar».

81 Furs... de 1564, «De la revocacio de les pragmatiques fetes contra fur», cap. LXXXIII, f. XII.82 Furs... de 1585, «Que les pragmatiques que contravenen a furs, sien hagudes per revocades»,

cap. XCII, f. 14.

Page 26: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

puesta que el rey iba a ser más escrupuloso con las normas forales? Posiblementela situación política no lo permitía. Felipe II tuvo que utilizar medidas expediti-vas para asegurar el orden público y reprimir el bandolerismo. Prueba de ello fuela Real Pragmatica y Edicte, feta per la Magestat del Rey nostre Senyor, sobre laexpulsio, y persecucio dels bandolers, lladres, saltejadors de camins, y altresmalfatans, y delinquents que van divagant per lo present Regne, ab arme prohi-bides, inquietant, y perturbant lo commerci, y tracte dels habitans, y trastejantsen aquell, de 28 de mayo de 1586, publicada en Valencia el 7 de junio por elconde de Aytona que dio origen a un conflicto entre el virrey y los síndicos delos estamentos83. Los síndicos de los tres brazos se dirigieron al virrey para mani-festarle que la pragmática ordenaba a los barones y señores residir en sus luga-res y según los fueros los pobladores de Valencia tenían libertad de residir libre-mente donde quisieran. El virrey, tras deliberar con sus consejeros, no admitió lademanda. Los síndicos insistieron en que la pragmática aumentaba las penasimpuestas en los fueros, los concejos eran castigados a pesar de no haber delin-quido, se quitaba a los barones la jurisdicción en sus territorios y eran castiga-dos si no entregaban a los homicidas. Aytona proveyó negativamente: «guarde-se la regia pragmatica no obstante la supradicha exposicion, que de derecho nosubsisten, no siendo oportunos ni el caso ni el tiempo».

La puesta en práctica de la misma supuso el destierro a Ibiza y Menorca demuchos vecinos ante lo cual los electos de los tres estamentos decidieron enviarembajada al rey nombrando al efecto al noble don José Pellicer, para que acom-pañado de micer Frances de Tarrega, doctor en ambos derechos, solicitase laderogación de la pragmática. Los argumentos que alegó Pellicer hacían referen-cia a que los fueros no podían ser cambiados sin el consentimiento de las cortes84.Expuso además las violaciones cometidas en contra del derecho foral: En los pro-cesos se había inquerido de oficio en casos que no eran fiscales. No podían serdesterrados sin tiempo suficiente para defenderse. No tenían valor las sentenciaspor haber sido dictadas antes de comenzar el proceso. No se había dado tiemponi lugar a las personas desterradas para proclamar la nulidad de las sentencias,ni recurrir las sentencias, por cuanto inmediatamente de publicadas fueron con-ducidos a la mar para embarcar. El resultado fue que «está proveído lo que con-venía».

960

REMEDIOS FERRERO MICÓ

83 Hay un expediente en el AHN, Consejos, Escribanía de Aragón, leg. 21.954, n.º 36, «Processuspetitionum don Josephi Pellicer syndici trium stamentorum regni Valentiae», que recoge la emba-jada enviada a Felipe II en 1586 para protestar la pragmática. MARTÍNEZ BARA, «Missatgeriaenviada a Felipe II en 1586 por el Reino Valenciano», VIII Congreso de Historia de la Corona deAragón, III, vol. 2, Valencia, 1973, pp. 197-214.

84 ARV, Real, Liber Curiae, n.º 1.342.

Page 27: Greuges presentados en las Cortes valencianas que se celebraron … · titución que tanto en la Corona de Aragón como en la Castilla medieval supuso una garantía de los privilegios

Volvieron a insistir pormenorizando los contrafueros en que incurría la dis-posición regia: se mandaba a los barones remitir a los oficiales reales a los delin-cuentes a pesar de los privilegios jurisdiccionales concedidos a aquellos en vir-tud de contratos paccionados. Nadie podía ser condenado por indicios ni pre-sunciones, ni castigar mujer por marido, o hijo por padre, ni imponer penas a losmunicipios a causa de delitos cometidos por particulares. Privar a los barones delconocimiento de homicidios era reducirlos a una condición inferior. Como con-clusión señalaron que el reino estaba libre de ladrones y otros delincuentes. Lacontestación no cambió, «estaba proveído lo conveniente».

Felipe II justificó su actitud en carta enviada al virrey, en donde se des-prende la intención del monarca respecto al cumplimiento de la legislación foral:

«... les direis que, por los excesos de los grandes, enormes y atroces delitosque se hacían, si no se proveyera de pronto remedio, el daño creciera de mane-ra que fuera irreparable, y así fue menester usar del remedio que se ha tenidopara que se extirpase tanto mal, como se ha visto por experiencia, que, guardán-dose lo ordenado por la pragmática, ha cesado y se continuará el sosiego quehasta aquí ha traído, y se espera que durará para adelante, y que, atendiendo abien de ese reino y al efecto que de la dicha pragmática se ve, tendrán cuenta losoficiales a quien tocare guardarla puntualmente, sin que, fuera de los casos enque se habla y la causa por que se ha hecho, haya de recibir nadie perjuicio, yque deben satisfacerse mucho que por el beneficio que de dicha pragmática yconfinaciones ha resultado, gozan en esta ciudad y reino mucha paz, tranquili-dad y seguridad en vidas y haciendas...»85.

961

GREUGES PRESENTADOS EN LAS CORTES VALENCIANAS QUE SE CELEBRARON EN EL SIGLO XVI

85 ARV, Real, Liber Curiae, n.º 1.343, ff. 192v. a 193v.