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Público – Privado, relación que cambia

Durante mucho tiempo, la configuración de los medios llevó a que la participación de los usuarios se diera sobre todo en el espacio de lo privado

Las plataformas de publicación en Internet permiten a muchos usuarios dar a conocer esas opiniones en el espacio de lo público, pero con las marcas de lo privado.

Nos estamos acostumbrando a acceder a las novedades sobre lo público y sobre lo privado (lo relacionado a nuestra vida personal) desde la misma interfaz o timeline.

Público – Privado, relación que cambia

Alguna vez, antes de la aparición de los medios, conocer los hechos relevantes del espacio público implica tener una interacción directa con los demás.

El crecimiento de los medios sociales permite recuperar ese marco diálogico, pero con nuevas reglas y en nuevos soportes. Temas como la percepción de anonimato y aplicación de reglas de moderación son propios del nuevo entorno.

Los usuarios como editores: blogs

Los blogs trajeron una serie de novedades. Una de ellas es que una cierta cantidad de personas lograron construir una audiencia por fuera de los medios tradicionales.

La configuración original de los blogs estaba pensada para proponer otras formas de leer las agendas de los medios.

usuarios como editores: Redes sociales

Las redes sociales y de información también le dan a los usuarios la posibilidad de editar una serie de noticias de su interés.

Hoy es posible acceder a muchas noticias relevantes sobre lo público a partir de de los enlaces compartidos por parte de nuestros contactos en las redes sociales y de información.

Muchas de esas formas de edición pueden ser aprovechadas con nuevas herramientas en dispositivos portátiles.

La red como archivo personal

Lo que publicamos en la Red es el archivo con el que otros nos podrán leer en algunos años.

El uso del archivo, o todos somos celebridades en potencia.

El derecho al olvido como forma de preservar las libertades de las personas. O la posibilidad de que cada vez prestemos menos atención al archivo.

La red y el archivo de terceros

No todo lo que publicamos en Internet es nuestra responsabilidad: también quienes nos conocen tienen parte de ese archivo.

Al publicar sobre nosotros, otros pueden afectar nuestra privacidad, o dar a conocer temas que, en el contexto de nuestra vida actual, pueden ser molestos.

Usar el archivo contra los demás implica recordar que el mismo procedimiento puede ser usado por otros en contra nuestra.

La red y el tiempo personal

La velocidad de circulación de las novedades en Internet supera por mucho nuestra capacidad de absorber información. Como plantea Jaron Lanier, la libertad de circulación de información en Internet parece estar más pensada para máquinas que para personas.

La red nos enfrenta a una abundancia inabarcable de datos y contenidos que, además, no parecen contribuir a nuestra mejor información sobre el entorno.

Pensar implica tomar distancia y tomarse el tiempo para comprender los hechos y fenómenos. Más aún hoy, en el que podemos intervenir en el debate público en los medios sociales.

Conclusiones

Internet y los medios sociales recuperan lo diálogico, pero bajo nuevas reglas.

Nuestros contactos pueden operar como editores.

Lo que publicamos hoy es el archivo con el que nos leerán mañana

Pero no podemos procesar tanta información, justo cuando comenzamos a participar en los medios sociales y nuestra opinión podría tener más peso.

Gracias por su atención