la aceptaciÓn y renuncia de la herencia

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Page 1: LA ACEPTACIÓN Y RENUNCIA DE LA HERENCIA

UNIVERSIDAD DE LOS ANDES

FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS

ESCUELA DE DERECHO

DERECHO CIVIL IV (SUCESIONES)

LA ACEPTACIÓN Y RENUNCIA DE LA HERENCIA

Realizado por:

Sonia Moreno

CI: 5.540.833

Mérida, Febrero 2011

Page 2: LA ACEPTACIÓN Y RENUNCIA DE LA HERENCIA

1. TERMINO LEGAL PARA EL EJERCICIO DE LA ACEPTACIÓN O

RENUNCIA DE LA HERENCIA.

La Aceptación de la Herencia es el acto mediante el cual la persona llamada

manifiesta su intención voluntaria de ser heredero. El artículo 1011 del código

civil señala que: “La facultad de aceptar una herencia no se prescribe sino

con el transcurso de diez años”, admitiendo asimismo que una herencia

puede quedar, durante ese lapso, sin titular. La prescripción comienza a correr

desde el mimo día de la apertura de la sucesión y corre igual para todos los

llamados por delación a suceder.

Sin embargo, como el estado de incertidumbre durante esos diez años que se

le concede al heredero, puede perjudicar a los demás herederos y a los

acreedores, la ley concede a los interesados una acción especial para que se

pronuncie en uno u otro sentido, dentro del término señalado por el Juez el cual

no puede exceder de seis meses (art, 1019 CC). Vencido este lapso sin

haberse pronunciado, se tendrá por repudiada la herencia.

La Renuncia de la Herencia es la cesación o pérdida de manera voluntaria de

la cualidad de heredero. La renuncia siempre tiene que ser expresa, nunca

puede ser tácita.

Termino para renunciar a la herencia

Primer Caso: Cuando el heredero no está en posesión de los bienes de la

herencia, tendrá diez (10) años contados a partir del momento de la apertura

de la sucesión, pasado ese tiempo, la renuncia es estéril.

Segundo Caso: El heredero se encuentra en posesión de los bienes de la

herencia, la renuncia debe hacerla dentro de los tres (3) meses siguientes a la

apertura de la sucesión, debiendo elegir si acepta pura y simple o a beneficio

de inventario. En este último caso cumplido el procedimiento renunciará o no.

Tercer Caso: Se establece una presunción legal de repudiación de la herencia.

Artículo 1.019 CC.- Todo el que tenga acción contra la herencia, o derecho de

suceder a falta del llamado actualmente, tiene derecho de pedir al Tribunal que

compela al heredero, sea ab-intestato o testamentario, a que declare si acepta

o repudia la herencia El Juez, procediendo sumariamente, fijará un plazo para

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esta declaración, el cual no excederá de seis meses. Vencido este plazo sin

haberla hecho, se tendrá por repudiada la herencia.

2. FORMAS DE ACEPTACION DE LA HERENCIA

Normas para la aceptación de la herencia: Art. 996° C.C. "La herencia puede

aceptarse pura y simplemente o a beneficio de inventario"

2. 1 Aceptación Pura y Simple de la Herencia Se requiere, que el sucesor

manifieste de manera inequívoca, que acepta la herencia que se le defiere y

que lleve a cabo su aceptación sin sujetarla a las formalidades establecidas por

el legislador para el beneficio de inventario. El heredero que acepta la herencia

de esa manera se denomina heredero puro y simple. La aceptación pura y

simple de la herencia puede ser: Expresa, Tácita y Presunta.

Aceptación expresa: Es un acto solemne que consiste en que el sucesor toma

el titulo o la cualidad de heredero del de cuyus en un documento público o

privado. No basta, que en dicho documento su otorgante exprese que ha sido

instituido heredero del de cuyus o que ha sido llamado a la herencia de éste,

sino que es necesario que el sucesor tome en él el título o la cualidad de

heredero de dicho causante o manifieste que acepta o ha aceptado la herencia.

Aceptación tácita: Es cuando el llamado ejecuta un acto que suponga

necesariamente la voluntad de aceptar la herencia y que sólo tendría derecho a

llevar a cabo como heredero del causante. Dicho acto debe ser de tal

naturaleza que no dé lugar a duda alguna respecto de que su autor aceptó la

herencia que le había sido deferida.

Aceptación presunta: Existen ciertos casos en los cuales el legislador

presume que el sucesor ha aceptado la herencia pura y simplemente. Son los

siguientes: -La sustracción u ocultación de bienes de la herencia, por parte

del llamado a ella, -La omisión dolosa de bienes en el inventario solemne de

la herencia, acarrea que el sucesor se tenga como heredero puro y simple. -No

efectúe el inventario judicial solemne de la herencia, dentro de los tres

meses siguientes a la fecha de la apertura de la sucesión o del momento

cuando tuvo conocimiento de que se le había deferido la herencia.-Otro caso

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sería cuando la persona llamada a la herencia que se encuentra en posesión

real de los bienes de la misma, termina oportunamente su inventario

judicial pero luego deja transcurrir cuarenta días sin repudiarla o sin

aceptarla a beneficio de inventario.-Por último, se presume que hay

aceptación pura y simple de la herencia, cuando se extingue el beneficio de

inventario, bajo el cual el sucesor ha aceptado la herencia.

2.2 La Aceptación de la Herencia a Beneficio de Inventario

Facultad que puede ser invocada por todos los herederos. Medio concedido por

la Ley para evitar la confusión de los patrimonios del causante y del heredero;

lo cual permitirá al heredero conocer la cuantía de la herencia y le da la

alternativa de renunciar a la herencia o aceptar las consecuencias de una

herencia pasiva.

El beneficio de inventario favorece al heredero, puesto que sólo a él beneficia

mantener ambos patrimonios separados, evitando así el riesgo de pagar con

sus propios bienes a los acreedores del difunto.

3. NULIDAD DE LA ACEPTACIÓN DE LA HERENCIA

El acto de la aceptación de la herencia puede ser absoluta o relativamente

nulo. Hay nulidad absoluta, cuando en su realización el sucesor ha infringido

alguna norma de orden público, y hay nulidad relativa, cuando la norma violada

está destinada a la protección del mismo aceptante.

Puede ser interpuesta tanto por el mismo aceptante, como por cualquier otro

interesado; en cambio que la nulidad relativa sólo puede ser interpuesta por el

propio aceptante o por su representante legal, por los acreedores y por los

herederos de dicho aceptante. Tanto la acción de nulidad absoluta como la de

nulidad relativa de la aceptación, prescriben en el término de diez años,

contados desde la fecha del acto.

Son causas de nulidad absoluta de la aceptación las siguientes:

1. La que tiene por objeto una herencia aún no abierta.

2. La llevada a cabo después de prescrito el derecho de aceptar.

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3. La que implica pacto sobre sucesión futura

4. La que se efectúa sin las solemnidades requeridas.

5. La hecha de manera que no sea absoluta, indivisible, pura y simple y total; y

6. La efectuada directamente por el entredicho civil por causa criminal y no por

el tutor en representación de aquel.

Son causas de nulidad relativa de la aceptación las siguientes:

1. La realizada por la persona incapaz, sin la representación o asistencia que

exige la ley.

2. La efectuada pura y simplemente por las personas que están obligadas a

aceptar bajo beneficio de inventario; y

3. La que está afectada por algún vicio de la voluntad del aceptante.

OBJETO DE LA SEPARACIÓN DEL PATRIMONIO

La separación del patrimonio es un dispositivo que permite mantener

separados los patrimonios del heredero y del causante, a objeto de evitar la

concurrencia de los acreedores personales del heredero y del causante y  los

legatarios sobre el caudal hereditario. La separación opera a favor del acreedor

y legatarios del causante. Del ejercicio de esta figura resultan dos grupos

patrimoniales:

1)       El hereditario, destinado a satisfacer a los acreedores del causante que

hayan realizado la solicitud y subsidiariamente a los acreedores patrimoniales

del heredero.

2)       El patrimonio privado del heredero que será destinado preferentemente

al pago de sus acreedores personales y subsidiariamente al pago de los

acreedores del causante, salvo que, el heredero haya aceptado la herencia a

beneficio de inventario

CESACIÓN DE LA SEPARACIÓN DE PATRIMONIOS

El derecho de preferencia que otorga al acreedor de la herencia la

separación de los patrimonios del de cuyus y del heredero, puede cesar por

las siguientes causas:

1. Caducidad del derecho: El acreedor del de cuyus y el legatario tiene un

plazo perentorio de cuatro meses, contados desde la fecha de la apertura de la

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sucesión, para pedir la separación de patrimonios; es necesario para ello que

se cumplan todas las formalidades exigidas por la ley. Si vence dicho término

sin que el heredero haya formulado el pedimento o sin que haya formado el

inventario judicial de los bienes de la herencia, no hay separación de

patrimonios.

2. Renuncia del derecho: En virtud de que la separación de patrimonios no

es materia de orden público, el acreedor del de cuyus o el legatario pueden

renunciar al mismo, tanto antes como después de haberlo ejercido. Dicha

renuncia puede ser expresa o tácita.

3. El artículo 1058 señala que: “El heredero puede impedir o hacer

cesar la separación, pagando a los acreedores y a los legatarios, o dando

caución suficiente para el pago de aquéllos cuyo derecho estuviese pendiente

de alguna condición o de algún plazo, o fuere controvertido”. Es conveniente

señalar que cuando dicha norma hace referencia a derechos

condicionales, se limita sólo a los sometidos a condición suspensiva y no a los

afectados por condición resolutoria.

4. Pérdida de la cualidad de acreedor del de cuyus o del legatario: Sería el

caso de que por sentencia judicial, por convenimiento o por cualquier otra

causa distinta del pago, resulte que el pretendido separatista no era en realidad

acreedor del causante o legatario de éste.

5. Enajenación de bienes muebles de la herencia La enajenación de

cualesquiera bienes muebles de la herencia, automáticamente hace cesar

el derecho de preferencia que correspondía al acreedor o legatario, para

hacerse pagar con ellos su crédito o su legado. Dicha causal sólo se refiere a

los bienes muebles que hayan sido objeto de enajenación; por tanto, dicha

separación subsiste en relación de con los demás bienes muebles y en relación

con todos los inmuebles de la herencia que hayan sido debidamente separados

por el acreedor o legatario.

6. Pérdida de los bienes separados: En el supuesto de que llegue a

perderse cualquier bien mueble o inmueble de la herencia, es lógico que cese

también el derecho de preferencia del separatista respecto de los demás

bienes de la herencia que hayan sido objeto de la separación.

7. Confusión de bienes muebles de la herencia con bienes inmuebles del

heredero:

Page 7: LA ACEPTACIÓN Y RENUNCIA DE LA HERENCIA

LISTA DE REFERENCIAS

Referencias Bibliográficas

Código Civil. Congreso de la República de Venezuela. Gaceta No. 2.990

Extraordinaria del 26 de julio de 1982

García Yajaira. (2011). La Aceptación y Renuncia de la Herencia Facultad de

Ciencias Jurídicas y Políticas. Material de Derecho Civil IV, Tema 4 Sesiones 6 y 7.

Referencias Electrónicas

La Herencia. [En línea]. Consulta realizada el día 2 de Febrero de 2011. Disponible en: http://www.usmderechoanz.net76.net/1_197_Tema-2.html

La separación de los patrimonios del de cujus y del heredero. [En línea]. Consulta realizada el día 3 de Febrero de 2011. Disponible en: http://www.usmderechoanz.net76.net/1_199_Tema-4.html