la celestina- obra de teatro

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La celestina Personajes: Melibea: Diana Moreno Calisto: David Ortega Celestina: Daniela Ríos Sempronio: Diego Torres Pármeno: Marcela Amado Narrador: Julieth Marroquín 1. Calisto encuentra a Melibea y esta lo rechaza Narrador: Calisto estaba de viaje en un lugar no muy lejano de su hogar, e iba a conseguir naranjas para llevar de vuelta de su viaje, pero los pastizales estaban muy altos y no se podía ver nada de lejos, ni siquiera de cerca se podía ver mucho y sin querer Calisto tropieza con una joven. Calisto: Lo siento, no te vi, pero… pero que tonto fui al no fijarme en esta hermosura. Melibea: (Enlaza sus dedos en el cabello y juguetea con el) y… ¿tú qué haces por acá?, se nota que no eres de por aquí. Calisto: Venía a recoger unas naranjas, pero me encegueció tu belleza. Y ¿Cómo te llamas? Melibea: Melibea ¿y tú? Calisto: Yo no me llamo Melibea, me llamo Calisto (breve risa), mucho gusto. Narrador: Calisto estira su mano, sin embargo Melibea lo ignora y queda seria. Melibea: Lo veré después si el destino quiere. Narrador: Melibea emprende camino hacia su casa, y Calisto queda estupefacto. Calisto: (suspira, Adiós querida dama… nos veremos pronto. Narrador: Calisto se fue a su casa olvidando lo que iba a hacer en el pastizal. 2. Calisto pide ayuda a sus criados y estos le aconsejan los servicios de Celestina. Narrador: Encontrándose Calisto en su comedor, no dejaba de pensar en la bella joven llamada Melibea, y uno de sus criados acercándose para servir la cena, le pregunta: Sempronio: ¿Qué le sucede amo?, lo noto muy pensativo y si siquiera a tocado su comida.

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Entertainment & Humor


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La celestina Personajes:

Melibea: Diana Moreno

Calisto: David Ortega

Celestina: Daniela Ríos

Sempronio: Diego Torres

Pármeno: Marcela Amado

Narrador: Julieth Marroquín

1. Calisto encuentra a Melibea y esta lo rechaza

Narrador: Calisto estaba de viaje en un lugar no muy lejano de su hogar, e iba a conseguir

naranjas para llevar de vuelta de su viaje, pero los pastizales estaban muy altos y no se

podía ver nada de lejos, ni siquiera de cerca se podía ver mucho y sin querer Calisto

tropieza con una joven.

Calisto: Lo siento, no te vi, pero… pero que tonto fui al no fijarme en esta hermosura.

Melibea: (Enlaza sus dedos en el cabello y juguetea con el) y… ¿tú qué haces por acá?, se

nota que no eres de por aquí.

Calisto: Venía a recoger unas naranjas, pero me encegueció tu belleza. Y ¿Cómo te

llamas?

Melibea: Melibea ¿y tú?

Calisto: Yo no me llamo Melibea, me llamo Calisto (breve risa), mucho gusto.

Narrador: Calisto estira su mano, sin embargo Melibea lo ignora y queda seria.

Melibea: Lo veré después si el destino quiere.

Narrador: Melibea emprende camino hacia su casa, y Calisto queda estupefacto.

Calisto: (suspira, Adiós querida dama… nos veremos pronto.

Narrador: Calisto se fue a su casa olvidando lo que iba a hacer en el pastizal.

2. Calisto pide ayuda a sus criados y estos le aconsejan los servicios de Celestina.

Narrador: Encontrándose Calisto en su comedor, no dejaba de pensar en la bella joven

llamada Melibea, y uno de sus criados acercándose para servir la cena, le pregunta:

Sempronio: ¿Qué le sucede amo?, lo noto muy pensativo y si siquiera a tocado su comida.

Calisto: Una bella joven que conocí hoy ha robado mi corazón, y no me corresponde.

Melibea: (Al otro lado del escenario agita el llavero de corazón)

Pármeno: Sempronio, háblale sobre esa mujer que conoce de amores y siempre los

soluciona, seguramente pueda ayudar a nuestro amo.

Sempronio: Oh Si!, Celestina, estoy seguro de que lo podrá ayudar.

Pármeno: Sí, llevémosle allá para que hable con aquella mujer.

Calisto: Sí puede ayudarme confiaré en ustedes, iremos mañana a primera hora.

3. Calisto se entrevista con celestina y la contrata.

Narrador: Estando ya Calisto en el lugar de trabajo de Celestina, acompañado de sus

criados comienza a contarle con detalle lo sucedido a Celestina.

Calisto: Esa mujer me tiene loco, no la puedo sacar de mi cabeza, sin embargo, todo lo que

demuestra es más señal de odio que de amor.

Celestina: Conozco la naturaleza del hombre, como ser y como espíritu, así mismo

conozco todas tus debilidades y dificultades en el amor, por eso te ayudaré para que

logres conseguir tu sueño, por eso me comprometo a que todos esos desvíos,

menosprecios y desdenes se transformaran en besos, caricias y amor puro.

Calisto: si así es, te lo agradecería infinitamente toda mi vida, ya que es mi única

esperanza en este momento de mi vida.

Celestina: Claro, no te arrepentirás, pero no sueñes tanto todo tiene un valor en esta vida

(se frota los dedos simulando tener plata en sus manos).

Narrador: Calisto saca de su bolsillo una hermosa y brillante cadena de plata para darle a

Celestina en cambio de su trabajo, y mientras tanto Sempronio y Pármeno se quedan

observando con gran admiración esa majestuosa pieza hasta que fue guardada en el

bolsillo de la vieja Celestina.

Calisto: Gracias a usted señora por haberme ayudado en estas difíciles circunstancias, y

gracias a ustedes muchacho por haberla puesto en mi camino como una salvación a mí

destino.

4. Celestina habla con Melibea para que le haga caso a Calisto.

Narrador: Celestina va en busca de Melibea, en el mismo campo en donde ella se conoció

con Calisto, pero a pesar de que ya sabe que es ella, simula que no la conoce.

Celestina: Tenga muy buenos días, disculpe el atrevimiento, pero tengo mucha sed, me

podría dar algo de beber.

Melibea: Por su puesto señora, la invito a pasar a mi humilde morada y a tomar asiento

mientras le traigo un vaso de agua.

Narrador: Celestina observa todo a su alrededor para comprender como es la joven mujer

hasta que ella llega con el vaso de agua y comienzan una entretenedora conversación.

Celestina: y conozcámonos un poco querida muchacha, vamos despacio, por ejemplo a ti

¿cómo te va en las cosas del amor?

Melibea: Pues hay ay vamos, poco a poco avanzando, ayer vi a un joven muchacho,

creo… creo que su nombre era Calisto, me llamó un poco la atención, pero aun así lo

rechacé.

Celestina: Calisto… ¡Calisto!, creo que conocemos a la misma persona, es un joven alto,

algo cachetón pero una gran persona. ¿Cómo pudiste rechazarlo?

Melibea: me pareció algo burlón y grotesco, además de que no es el Brad Pitt del futuro.

Celestina: ¿Acaso te caíste de la cama cuando pequeña, o fue te golpearon muy duro tus

padres?, no te das cuenta de que el mejor hombre que ha existido, en esta tierra es ese

muchacho, es el más apuesto del lugar, no tiene comparación con ninguno, es tan

especial que puede llenar tu corazón sin uso de amor verdadero.

Melibea: será que te creo……

Celestina: Como no vas a confiar en esta vieja llena de experiencias de amor.

Melibea: Bueno, al parecer tienes bastante experiencia, y a pesar de que eres una

desconocida para mí, te voy a hacer caso, quizá este sea el amor que yo estaba esperando,

¿podrías decirme dónde queda la casa de ese tal Calisto?

Celestina. Por supuesto porque no lo haría.

Narrador: Ambas mujeres la joven y la vieja alistan sus chécheres y emprenden el camino

hacia la casa de Calisto.

5. Los criados matan a Celestina por robarla.

Narrador: se encontraban los dos criados de Calisto trabajando, y hablaron:

Pármeno: Recuerdas la hermosa cadena que el joven amo le dio a esa vieja.

Sempronio: Sí, yo sé que tú la observaste detalladamente al igual que yo y pensaste

exactamente lo mismo.

Pármeno y Sempronio: ¡Debemos quitársela!

Pármeno: ¿Cómo podríamos robarla?

Sempronio: emprendamos camino, y lo pensaremos mientras tanto.

Pármeno: Pero debemos ir armados porque no sabemos lo que pueda hacer ella llevemos

una cuerda y miremos que hacemos con ella...

Narrador: yendo hacia el lugar de trabajo de Celestina, encuentran una piedra lo

suficientemente grande para noquear a una persona. Cuando llegaron, Celestina abrió la

puerta, y los criados la agarraron y la amarraron con la cuerda a una silla, estaban muy

nerviosos porque nunca habían hecho algo parecido, y cuando Celestina se negó a

entregarles la cadena, en un ataque de nervios Pármeno tira la piedra directo a su cabeza,

y le rompe el cráneo dejándola inmediatamente muerta. Poco tiempo después unos

policías irrumpieron en el lugar, los apresaron y los llevaron de inmediato a la guillotina

para definir su destino acorde al crimen que habían cometido, ellos se declararon

culpables y el verdugo no tuvo más remedio que degollarlos.

6. Calisto y Melibea están juntos, Calisto muere y Melibea se suicida.

Narrador: los dos jóvenes se encontraban juntos, felices, y comiendo perdices, hasta que

escucharon que al parecer los perseguían, Calisto tratando de proteger a su novia bajó

demasiado rápido las escaleras y calló y bajó rodando, en el último escalón, calló mal y se

desnuco. Melibea al ver que su tan preciado amor, había terminado así tan rápido,

enloqueció, subió a la cocina y comió y tomó todo lo que encontró para intoxicarse y así

morir, pero por si esto no le salía bien, subió al último piso de la torre en la que se

encontraba , declaró su fuerte amor por Calisto y se tiró.

7. Reflexión.

Narrador: El amor a veces es bueno, y a veces enfermizo, hay que saberlo manejar para

no caer en el precipicio de la desesperación.