La Construccin de Viviendas en la URSSAlexandr Andreiv Editorial de la Agencia de Prensa Nvosti, 1981

1. El problema de la vivienda: soluciones soviticas.

Tengo delante de m una carta de Albert Jerbert, estudiante de Dijon, Francia. Despus de haber ledo el texto de la nueva Constitucin sovitica y los comentarios de la APN, sobre sus distintos artculos, nos escribi lo siguiente: "Me parece que ustedes han alcanzado un progreso realmente significativo y, por esa razn, no comprendo para qu incluir en la Constitucin cosas tan elementales para cualquier pas civilizado. El derecho a la vivienda, por ejemplo. Qu me da? Si tengo dinero, puedo alquilar un apartamento adecuado o construirme una casa sin ese artculo en la Constitucin; pero, si no lo tengo, este derecho no me sirve para nada...".

En efecto, cuando la vivienda es objeto de compraventa, el derecho de los ciudadanos a tenerla no es ms que una ficcin, y, por lo visto, todo se torna precisamente as como escribe A. Jerbert. Pero sucede que en la URSS el Estado facilita, a sus ciudadanos, apartamentos gratis. Y no los reciben quienes ms dinero tienen, sino aquellos que los necesitan de verdad.

Por encima de todo lo dems, esto significa tambin lo siguiente: viviendo en un apartamento bueno y que corresponde al estndar moderno, uno no puede recibir otro ni pagando el precio ms fabuloso; tampoco puede ingresar en una cooperativa de construccin de viviendas ni construir una casa particular (salvo que sea una casa de campo y no residencia fija).

Algn millonario dir que es una injusticia: Qu es esto? Tener dinero y no poder comprar ni construir casa? Pero a nosotros esto nos parece muy normal. Lo anormal es lo que pasa en cualquier pas capitalista, donde unos viven en palacetes y otros en cuchitriles.

En los ltimos veinte aos los soviticos han recibido 50 millones de apartamentos. Desde

1956, cuando en el pas se construyeron 2 millones 200 mil apartamentos nuevos, se puede decir que lo que se construye cada ao equivale a una ciudad como Mosc o Pars.

Izda.: Mosc est lleno de zonas verdes. Dcha.: cada ao surgen en la URSS ciudades nuevas. las disean y planean centenares de especialistas. ste es un taller del Instituto Central de Investigaciones Cientficas y Proyectos (tipo y experimentales) de viviendas, con sede en Mosc.

Pero las nuevas construcciones, incluso las ms extensas, no significan de por s una solucin cardinal del problema de la vivienda. En los pases ms desarrollados de Occidente, corresponden per capita no menos y en algunos lugares hasta ms viviendas que en la URSS, pero tener un apartamento confortable y moderno es ah un sueo irrealizable para muchas personas. La gente no tiene donde vivir, aunque muchos inmuebles permanecen vacos por ser imposible alquilarlos o comprarlos. Los soviticos de edad avanzada conocen bien esa situacin: en Rusia, antes de la revolucin, un rico se alojaba con su familia en un palacete de 40 habitaciones y los obreros de su fbrica, disponan de menas metros de superficie habitable que aquellos que los esperaban en el cementerio.

Es por eso que la Constitucin de la URSS contempla el desarrolla del fondo inmobiliario y la distribucin equitativa de la vivienda, as como el precio mdico del alquiler (el cual, a propsito sea dicho, no ha subido en el pas desde 1928). Sin ninguno de estos tres factores el derecho a la vivienda se pondra en entredicho, por dejar de ser accesible, bajo las mismas condiciones, a cada familia.

La nueva Constitucin no modifica el sistema, que se ha gestado en el pas, para resolver el problema de la. vivienda. No hace falta suprimir lo que se justifica por completo y lo que ha permitido a la Unin Sovitica llevar a la prctica, antes que cualquier pas capitalista, la consigna de "un apartamento confortable a cada familia".

Tres de cada cuatro apartamentos se construyen en la URSS a cuenta del Estado; uno, a cargo de los koljoses y de personas particulares con la asistencia de un crdito estatal y ciertas facilidades para amortizarlo. Como ni la primera ni la segunda forma aportan beneficios al Estado, y el estndar de la vivienda se ha elevado cuatro veces en los ltimos tres lustros, el fisco tiene que destinar cada vez ms recursos para la solucin del problema de la vivienda. En el presupuesto de 1981, las asignaciones a la construccin de viviendas suman 18.500

millones de rublos. Adems, cada ao el Estado invierte 7 mil millones de rublos en el mantenimiento del fondo inmobiliario (el pago del alquiler que aportan los inquilinos cubre slo un tercio de los gastos necesarios).

Izda.: maqueta de un barrio a construirse en la ciudad de Jabrovsk, Extremo Oriente sovitico. Dcha.: proyecto de una casa de 16 pisos, elaborado para las zonas ssmicas. Elevando la sismorresistencia, no se debe menoscabar el valor arquitectnico de las edificaciones, estiman los arquitectos soviticos.

Obtendremos una suma igual a 25,7 mil millones, que supera en una vez y media las asignaciones para la defensa.

El derecho a la vivienda se fundamenta en el artculo 44 de la Constitucin de la URSS, el cual se complementa de modo sustancial con el artculo 55 que trata de la inviolabilidad del domicilio: "Nadie podr penetrar en el (domicilio) ajeno sin fundamento legal contra la voluntad de sus moradores". Artculos anlogos contienen tambin las constituciones de los Estados capitalistas. Pero no impiden a los propietarios de casas echar a la calle a los inquilinos que no pueden pagarles el alquiler que aumenta sin cesar. En la URSS no se desaloja a falta de pago. Ni siquiera el que da en arriendo su casa particular o apartamento tiene derecho a desalojar al inquilino sin que lo autorice un tribunal. Por infringir esta regla, se abre un proceso judicial.

Ahora bien, estas garantas del derecho a la vivienda no significan que cada familia tenga ya un apartamento que satisfaga por completo sus necesidades. El Estado sovitico no puede todava drselo a todos. Cmo as? pensar el lector comparando el ritmo de la construccin de viviendas con el del crecimiento demogrfico. Realmente, ahora en la URSS se construyen cada cinco aos tres veces ms viviendas de las existentes en todas las ciudades de Rusia, antes de la revolucin de 1917. El fondo inmobiliario aumenta con mayor rapidez que el nmero de la poblacin. No obstante...

Hay que recordar que el nivel del que se parti fue tremendamente bajo. En 1913 ao en que la economa prerrevolucionaria alcanz su mximo ascenso ms del 50 por ciento de las familias obreras de Petersburgo se cobijaban en casas de vecindad, donde no disponan siquiera de una habitacin por cada una. Los tejedores de Ivnovo, los mineros de Donbs, los petroleros de Bak vivan en chozas, stanos, cuevas.

Durante la guerra civil y la intervencin extranjera (1918-1920) fue destruida una quinta parte de las viviendas del pas. Empezar a construir en masa era econmicamente imposible. Como primera fase, se hizo una redistribucin del fondo inmobiliario existente. Por un decreto especial, con fecha del 20 de agosto de 1918, fueron expropiadas y entregadas a los Soviets urbanos las casas de los grandes propietarios, a las cuales se mudaron obreros que haban vivido en stanos y suburbios. Tambin tuvieron que estrecharse los dueos de palacetes y de apartamentos de lujo. Solamente en Mosc y Petrogrado (antiguo Petersburgo y desde 1924, Leningrado) ms de un milln de ciudadanos se trasladaron a las viviendas confortables, en que haba residido holgadamente la burguesa. En vista de que el problema de la vivienda era muy agudo, el Consejo de Comisarios del Pueblo (gobierno) acord tambin limitar la superficie habitable a sus integrantes (que fuese no ms de una pieza por cada miembro de la familia).

En el perodo de la reconstruccin de la economa nacional y durante los primeros dos quinquenios y medio (1929-1940), el fondo inmobiliario urbano aument en casi el 150 por ciento. En la prctica esto significaba que por cada familia haba ya una habitacin. Pero la guerra de 1941-1945, que dej sin techo a 25 millones de ciudadanos soviticos, volvi a agravar el problema de la vivienda...

Puedo citar mis propias viviendas. Durante la primera dcada posblica mis padres y yo nos alojbamos en una habitacin de 17 metros cuadrados, en una casa situada en el centro de Mosc. Adems de nosotros, en el mismo apartamento destinado, en realidad, a una sola familia, vivan cuatro ms. De 44 compaeros mos de la escuela, 42 tenan condiciones similares.

Ahora que han pasado tan slo 25 aos la situacin es completamente distinta. Un apartamento confortable por familia es lo normal. Los que no lo tienen an, lo demandan, elevan quejas al respecto y no aceptan cualquier solucin que se les proponga para mejorar sus condiciones de vivienda. Pero no se ha alcanzado todava el nivel que aspiramos a tener. Queremos vivir mejor y as Ser. Para calificar la situacin actual, tratemos de darnos cuenta de si es poco saber que el Estado hace todo lo posible por mejorar las condiciones de vivienda de sus ciudadanos; que los apartamentos jams sern objeto de comercializacin; que los alquileres no subirn y que si uno tiene que esperar que se le entregu un apartamento nuevo, es porque hay conciudadanos que lo necesitan antes.

El Estado sovitico jams asume compromisos ilusorios, y siempre cumple los que asume. Ah

est la esencia del artculo de la Constitucin que proclama el derecho a la vivienda.

2. Sobre la baSe de la industrializacin

Es difcil imaginarse cunto tiempo habra tenido que esperar la gente para recibir buenas viviendas nuevas, si el pas no hubiese creado una potente base tcnica para la construccin de stas y empresas especializadas capaces de utilizarla con eficacia.

La produccin industrial de edificios slo es eficiente si stos se arman con elementos prefabricados estndar.

La edificacin de montaje integral (los elementos se producen en fbricas, yen las obras slo se ensamblan) se ha hecho preponderante en la construccin de viviendas. Casi la mitad de las construcciones municipales y cooperativas se realizan por este mtodo.

Izda.: Mosc; ensamblamiento de una vivienda con elementos estndar. Dcha: Gras de construccin se ven por doquier en las ciudades soviticas. Resulta prctico y econmico montar viviendas de bloques, cada uno de los cuales es ya una habitacin.

No hace falta abundar en detalles para explicarlo. Basta con echar un vistazo a dos obras vecinas: una casa de ladrillos y otra de elementos prefabricados. Cuando en la primera los albailes ponen ladrillos en el primer piso, en la segunda se acopla ya el ltimo bloque del duodcimo. Los especialistas han calculado que el trabajo empleado en la segunda obra, si se compara con la primera, equivale a la mitad. Es evidente, que en una fbrica, con instalaciones tecnolgicas especiales, se obtienen elementos estandarizados tanto por sus dimensiones como por su calidad. Sus caractersticas se conocen de antemano. Los constructores slo ensamblan los elementos prefabricados, sin ocuparse de preparar los materiales.

La edificacin de montaje integral (a base de paneles, grandes bloques, etc.) es actualmente la tendencia ms eficaz y de mayores perspectivas. Pero esto no significa que hayamos renunciado al empleo de ladrillos y otros materiales de pequeas dimensiones. Se trata de algo diferente: de mejorar continuamente las estructuras de los edificios de ladrillo y de utilizar nuevos materiales a la vez. As, los clculos demuestran que la construccin de los muros exteriores de ladrillos con tres capas, empleando como termoaislantes materiales polimricos y porosos, disminuye en un 25 por ciento el gasto de ladrillos y es en un 15 por ciento menos trabajosa.

Tambin sigue emplendose la madera. La prefabricacin de casas de este material, tradicional en la construccin desde tiempos remotos, se desarrolla a buen ritmo. Claro que en las ciudades predomina la construccin con grandes paneles.

Actualmente en la URSS hay ms de 400 empresas que fabrican grandes paneles para la construccin de viviendas. Preparan materiales para ms de 51 millones de metros cuadrados de superficie habitable al ao.

Otra cifra sugestiva. Hoy en da, una brigada vanguardista, de una de las empresas mencionadas, construye al ao por encima de 50.000 metros cuadrados de vivienda (o sea, ms de 1000 apartamentos). De ejemplo puede servirnos la brigada que dirige V. Kpelev, Hroe del Trabajo Socialista. Es de la empresa de casas prefabricadas N 1 de Mosc. Con un rendimiento de trabajo parecido, 900 brigadas como sta varias decenas de miles de hombres, nada ms construiran en un ao una ciudad para tres millones de habitantes.

Se sobrentiende que aseguran tan elevados resultados no slo los bienes de equipo, sino tambin una organizacin ejemplar del trabajo. Por lo tanto, la difusin y transmisin de la experiencia adquirida, se considera en la URSS, una tarea de suma importancia: permite elevar la eficacia y mejorar la calidad de la edificacin.

Izda.: Volgogrado (nuevo nombre de Stalingrado), 36 aos despus de ser destruida en la II Guerra Mundial. Dcha.: dem.

Los arquitectos mostraban al principio cierta resistencia sobre la industrializacin de la construccin. Algunos de ellos afirmaban que impedira crear conjuntos arquitectnicos de buena calidad esttica. En efecto, as sucedi en los primeros aos de construccin prefabricada. Pero luego se demostr, en la prctica, que la industrializacin slo cambia los mtodos, materiales y formas de la edificacin, sin limitar en absoluto la inventiva del arquitecto, quien, disponiendo de una amplia gama de elementos estndar, puede crear casas, conjuntos enteros conjugando la esttica y el confort. Se hizo evidente que la monotona y mediocridad arquitectnicas hay barrios que parecen gemelos, incluso en ciudades diferentes no era resultado inevitable de la construccin industrializada y de los proyectos estndar, sino de la mala utilizacin de las posibilidades, subyacentes en lo uno y lo otro.

Construccin de viviendas (millones de metros cuadrados) 1929-32 1933-37 1938-41 1946-50 1951-55 56,9 67,3 81,7 1956-60 1961-65 1966-70

conforme

a

los

planes

quinquenales

474,1 490,6 518,5 544,8 530

200,9 1971-75 240,5 1976-80

Todo depende de cmo se aborde la solucin del problema. Veamos lo que hicieron los arquitectos y trabajadores de la construccin en la ciudad de Vilnius, capital de la Repblica Socialista Sovitica de Lituania. En el barrio residencial de Lazdynai, levantado por mtodos industriales y proyectos estndar, se aprecia una compleja estructura arquitectnica perfectamente pensada. Cuenta con excelentes medios de transporte, facilidades para peatones, toda clase de servicios y reas verdes. Es una impresionante composicin tridimensional. Las viviendas construidas con grandes paneles se ubican "transversalmente al relieve", cosa imperdonable segn los partidarios del economismo primitivo. Los autores de Lazdynai reelaboraron un proyecto estndar y utilizaron, ms de la cuenta, elementos prefabricados. Desde luego, esto complic las obras y encareci su costo. Se ha justificado todo ello? Efectivamente! Lazdynai es un ejemplo de gran capacidad profesional y, a la vez, una victoria sobre la rutina, el formalismo y la simplificacin en la arquitectura.

Minsk, capital de la RSS de Bielorrusia, tambin resurgi de las ruinas dejadas por la guerra.

Los arquitectos y constructores de Lazdynai recibieron el Premio Lenin. Es decir, se trata no slo del reconocimiento social del fruto de su trabajo, sino tambin de la aprobacin de los mtodos por los que se logr. Pensamos que en el proceso de la construccin hay que considerar tres elementos esenciales: el cliente, el arquitecto y el constructor. Pero vemos que las relaciones entre ellos no se basan, a fuerza, en los siguientes principios: el cliente desea economizar, el constructor busca la sencillez tecnolgica y el arquitecto de. compaginar lo uno con lo otro. Ahora los clientes en la URSS so organismos estatales, cooperativas de construccin de vivienda empresas industriales y koljoses exigen que la obra que encargan adems de econmica, tenga valor esttico. En resumidas cuentas en la sociedad socialista los tres elementos mencionadosel cliente el constructor y el arquitecto estn interesados en lo mismo construir bien, con variedad y comodidad para la gente y, cumplido todos estos requisitos, con los gastos mnimos.

3. Quin y cmo construye

Durante los ltimos diez aos, en la Unin Sovitica unos 120 millones de personas recibieron nuevos apartamentos o mejoraron sus condiciones de vivienda. Anualmente, como promedio, 10-11 millones de personas se mudan a nuevos apartamentos. Slo en el Dcimo Quinquenio (1976-1980) el Estado asign para la construccin de viviendas el doble que en 1956-1960. Sin embargo, los ritmos de la construccin se han retrasado un poco. Por qu?

La causa principal es de carcter econmico. Si en 1965 un metro cuadrado de vivienda costaba al Estado, como promedio, 119 rublos, actualmente cuesta casi 170 rublos. El encarecimiento de la construccin es producto de que se eleva su calidad. Los nuevos apartamentos son ms confortables que, en comparacin, los que se construan hace 15 aos, su superficie es ms amplia en unos 8 metros cuadrados, aumentando el rea de salas, cocinas, pasillos. En general, mayores que a mediados de los aos 60.

Biriulovo, uno de los ms nuevos distritos de Mosc.

Las regiones que estn siendo asimiladas --en primer trmino Siberia-- necesitan asignaciones complementarias para construir viviendas. All cualquier nueva construccin cuesta al Estado casi dos veces ms que en la parte europea del pas. Adems, a la par con las viviendas, se tiene que erigir la infraestructura cultural y de servicios.

El elevado costo limita las posibilidades constructoras estatales. Sin embargo, no hay fundamento para pensar que los ritmos de la construccin de viviendas seguirn disminuyendo. En el Undcimo Quinquenio (1981-1985) se conservar el nivel alcanzado (53040 millones de metros cuadrados) pero se mejorar notablemente la calidad de los nuevos apartamentos.

Por cuanto la construccin de viviendas en la URSS, segn hemos dicho, se realiza por cuenta del presupuesto nacional, bajo la supervisin de los rganos locales del Poder los Soviets de Diputados Populares y por encargo de las empresas estatales; por esa razn, la mayor parte de la poblacin recibe apartamentos gratis.

Los Soviets de Diputados Populares facilitan vivienda a todo ciudadano, a toda familia que la necesite. Las empresas distribuyen viviendas nicamente entre sus trabajadores. Las asignaciones para este fin y el control sobre su utilizacin, se acuerdan cada ao en el convenio colectivo que cada empresa concierta con sus trabajadores. Mientras ms beneficios obtiene una empresa, ms viviendas manda a construir. Los sindicatos tienen instituidas comisiones especiales que se ocupan de resolver el problema de la vivienda.

Nueva escuela construida en Mosc segn un proyecto tipo.

Tambin puede "construirse" un apartamento todo el que lo desee. Para ello tiene que pagar

una cantidad determinada a una cooperativa formada de construccin de viviendas, que se encarga de la obra con la ayuda de un crdito que recibe del Estado.

Existen en el pas 24 mil cooperativas de viviendas. Reciben un fuerte respaldo del Estado. En los planes estatales se contemplan asignaciones para este fin.

Debemos agregar que si el promedio de la superficie habitable que se asigna del fondo inmobiliario estatal, a los ciudadanos, es de 11,5 a 13 metros cuadrados por persona, en las cooperativas de construccin de viviendas esta norma es mayor, naturalmente. Adems, los socios de una cooperativa pueden elegir ellos mismos el proyecto por el cual se construir su casa, determinar el grado de confort en sta, decidir cul ha de ser el acabado interior, etc.

Los terrenos para la edificacin se conceden gratis, puesto que en la URSS la tierra es propiedad del Estado y no puede ser objeto de compraventa. Las casas se construyen por proyectos diseados en instituciones estatales. Estos proyectos se aprueban por los rganos del poder local y deben cubrir los requisitos del plan rector del desarrollo de cualquier ciudad o poblado. De esta manera, se evita la edificacin catica y el aprovechamiento irracional de los terrenos.

l costo presupuestario de las casas cooperativas se determina por los mismos precios y normas vigentes en el pas, para las casas de vivienda que se construyen por cuenta del presupuesto nacional. Loa socios de las cooperativas de viviendas abonan del 30 al 40 por ciento del costo del apartamento (en Mosc, el 40 por ciento). El resto se cubre con el crdito que facilita el Banco Nacional, por un plazo de 10 a 20 aos, con un inters del 0,5 por ciento anual. Los jubilados, invlidos de guerra y familiares de militares fallecidos reciben facilidades adicionales y no pagan inters por el crdito.

Izda: Grandes Almacenes recin construidos en Chelibinsk, emporio industrial de los Urales. Dcha.: Nueva policlnica en Kishiniov, capital de la RSS de Moldavia.

En el pas tambin se lleva a cabo la construccin de viviendas individuales. Las casas propias las levantan los habitantes de los poblados de tipo urbano y ciudades con una poblacin hasta

de cien mil personas. Sin embargo, la edificacin particular, principalmente, se realiza en las zonas rurales. Al mismo tiempo, en el campo se construyen muchas viviendas por cuenta del presupuesto estatal y de los koljoses. Esto se hace siguiendo un vasto programa elaborado para transformar los poblados rurales. En otras palabras, se reconstruyen viejas aldeas, desaparecen caseros y aldehuelas, y se crean poblados de nuevo tipo con un nivel de servicios comunales y pblicos, muy parecido al urbano. Los que desean tener casa propia, pueden construirla, de una o dos plantas, conforme a un catlogo de proyectos estndar.

La cuota que hay que pagar de entrada por una nueva casa equivale al 30 por ciento de su costo. El Banco Nacional de la URSS concede, a los que construyen casas particulares, un crdito (con una tasa de inters del 0,5 por ciento anual) para amortizarse en un plazo de 10 a 20 aos.

Los koljoses tambin hacen prstamos, con frecuencia sin intereses, a sus trabajadores. Abundan asimismo los casos en que los koljoses entregan gratis casas nuevas, o abonan parte de su costo, a sus mejores y ms antiguos miembros. Los propietarios de casas particulares pagan por los servicios comunales de acuerdo a las tarifas generales.

4. El apartamento y el presupuesto familiar

Los rganos locales del Poder --los Soviets de Diputados Populares (rurales y urbanos) con la participacin de los Sindicatos y de otras organizaciones sociales, distribuyen la vivienda construida por el Estado.

Ms del 90 por ciento de las familias reciben apartamentos independientes (en los aos 50 este ndice era del 30 por ciento). Se ha logrado que el 80 por ciento de las familias urbanas, que viven en casas estatales y cooperativas, tengan ya apartamentos independientes y confortables.

Las viviendas construidas por cuenta del Estado se distribuyen bajo control pblico. Este principio, en funcin desde haca mucho, en 1977 qued formulado en la nueva Constitucin sovitica y garantiza a los ciudadanos la igualdad en la distribucin de las viviendas.

Izda.: el confort est, naturalmente, no slo en la vivienda. los arquitectos soviticos procuran embellecer

todo alrededor. Esto es una gasolinera con diseo futurista en Sochi. Dcha: la circulacin en aumento implica elevar la seguridad del trfico. en esta grfica: un helicptero de la Inspeccin Automovilstica del Estado patrulla la Carretera circular de Mosc.

En la distribucin de la vivienda los Soviets parten del grado de necesidad de los ciudadanos. El tamao del apartamento que recibe una familia depende del nmero de sus componentes. Corresponde hoy a cada habitante urbano, como promedio, 13 metros cuadrados de superficie habitable.

Ya se dijo que los alquileres permanecen estables desde 1928. Ahora bien, junto con los servicios comunales (electricidad, gas, calefaccin, agua caliente y fra) el monto del alquiler no pasa del 3 por ciento de los ingresos mensuales de la familia. Amortiza tan slo un tercio de los gastos que el Estado realiza para mantener las viviendas. El resto proviene de los fondos sociales de consumo.

Los fondos sociales de consumo son sumas que en el presupuesto nacional se destinan al consumo, para pagar los bienes materiales y culturales que la poblacin recibe gratis y para hacerle prstamos, por encima de los ingresos que obtiene por el trabajo. Se invierten en la construccin de viviendas, la educacin y la asistencia mdica (que son gratuitas), en mantener los jardines de la infancia, casas cuna, escuelas internado, casas de ancianos, sanatorios, casas de descanso y viviendas pertenecientes al Estado, as como en pagar las becas, pensiones, en retribuir las vacaciones, etc.

Cuando una familia recibe del Estado un apartamento nuevo, no paga nada de entrada.

Cada inquilino tiene un talonario de recibos, en el cual se indica cunto y por qu concepto debe pagar mensualmente. El alquiler se paga en las Cajas de Ahorros, en las cuales cada uno puede hacerlo con dinero o transfiriendo la suma adecuada de su cuenta corriente.

Existen determinadas normas por las cuales los inquilinos pagan el alquiler de su apartamento. En el pas y al mes, la tarifa bsica de los alquileres es de 13,2 kopeks por metro cuadrado de superficie habitable. La superficie de los recintos auxiliares cocina, recibidor, pasillos, cuarto de bao, etc. est exenta del pago. En las viviendas modernas con todo confort (cuarto de bao, vertedero de basura, calefaccin central, etc.), la tasa mxima del alquiler no pasa de 16,5 kopeks por metro cuadrado.

Izda.: por este puente pasa, sobre el Dniper, el metro de Kiev. Dcha: Nueva vivienda en la zona norte de Mosc.

La poltica sovitica de la vivienda tiene otra particularidad ms. Al determinarse la tasa del alquiler, se toman en consideracin los ingresos de los inquilinos: salarios, pensiones, subsidios y estipendios.

Repetimos que los alquileres que pagan los soviticos no amortizan en su totalidad, ni siquiera un tercio, los desembolsos que hace el Estado para mantener y reparar el fondo inmobiliario. En Mosc, por ejemplo, los Soviets distritales reciben del presupuesto nacional, unos 130 millones de rublos para realizar reparaciones bsicas, y otros 21 millones de rublos para la calefaccin. Los gastos en mantener las tuberas de agua potable, el alcantarillado y la red de electricidad, se cubren con descuentos de los beneficios que obtienen empresas industriales y comerciales.

El Estado establece los conceptos y tarifas de los servicios comunales (calefaccin, agua fra y caliente, desage, electricidad, gas). Algunos ni siquiera se cobran a la poblacin. Por ejemplo, la limpieza de los portales, pasillos y escaleras, patios y calles, o el uso del ascensor.

Las tarifas del abastecimiento de agua fra y caliente y del servicio de desage, de consumo y utilizacin ilimitados, son estables. Por ejemplo, en un apartamento de tres habitaciones, en Mosc, el agua y desage cuestan poco ms de un rublo al mes (unos 1,5 dlares norteamericanos).

Los ltimos aos en Mosc, en vista del crecimiento demogrfico y la ampliacin del territorio de la ciudad, en los marcos del nuevo Plan Rector, se han invertido fuertes sumas en la construccin de nuevos embalses, sistemas hidrulicos y otras pblicas. El consumo de agua por habitante ascendi a 260 litros diarios (de contarse el agua para necesidades industriales seran 650 litros). Pero las tarifas de consumo no han aumentado.

Los inquilinos pagan por la calefaccin un 40 por ciento del alquiler. En todas las ciudades soviticas se realizan obras para mejorar el sistema de calefaccin, pero esto no repercute en las tarifas respectivas.

Los inquilinos tienen un talonario para pagar la electricidad y el gas, adems del de recibos de alquiler y de otros servicios comunales, y hacen ellos mismos sus cuentas de acuerdo con las normas establecidas. Por la electricidad, lo que marque un contador, a razn de 4 kopeks por kilovatio-hora; por el gas, a razn de 16 kopeks mensuales por persona, sin limitaciones de consumo. Hace tiempo, en los apartamentos haba contadores de gas, pero luego se renunci a ellos. A diferencia de la electricidad, en el consumo domstico de gas no se registran grandes oscilaciones. Por lo tanto, se consider intil instalar esos aparatos.

Es increble lo que paga por ejemplo una familia de 4 personas que vive en un apartamento, cuya superficie habitable es de 45 metros cuadrados, de una casa moderna: con ascensor, calefaccin central, cuarto de bao, agua caliente y fra, desage, gas, etc. El total es de 15 rublos 58 kopeks al mes. Desglosando: 5 rublos 94 kopeks, el alquiler; cerca de 5 rublos, la calefaccin, el agua fra y caliente; unos 4 rublos, la electricidad (dicha familia tiene refrigerador, televisor, receptor de radio y otros aparatos elctricos); 64 kopeks, el gas.

Izda.: Palacio de los Deportes en la ciudad de Zaporozhie, Ucrania. Dcha.: Cine "Oktiabr" en Minsk, capital de Bielorrusia.

5. Rpido, bueno y barato: cmo comprenderlo?

Que estos tres principios deberan regir la construccin; era aceptado, desde hace mucho, por la gente. Pero no siempre se aplicaban y menos al mismo tiempo. Veamos que suceda, hasta 1917, en la ciudad de Nizhni Nvgorod, actualmente Gorki. Los palacetes construidos uno tras otro, en una elevada ladera sobre el Volga, hace ms de un siglo, embellecen el paisaje hasta nuestros das. Al verlos se comprende que quienes los mandaron construir, derrochaban el dinero. En efecto, los mercaderes de Nizhni Nvgorod eran de los ms ricos en Rusia. Cuando construan para ellos, de los tres principios mencionados, prevaleca el segundo. Pero cuando lo hacan para los pobres: barracas y espantosas casas de vecindad, entregaban de hogar. Era rpido y barato. La calidad no importaba. Esta observacin no pretende ser original. Bien conocido es el hecho de que, en la Rusia zarista, siempre se construyeron adems de los suntuosos palacios, mansiones e iglesias casas malas y baratas, que no podan complacer a sus moradores ni a cualquier observador ajeno. Este era el fondo de viviendas que tuvimos que barrer de la faz de la tierra para reemplazarlo con otro nuevo.

Leningrado. Obelisco erigido en honor a los defensores de la ciudad, que frenaron a las hordas hitlerianas.

En vsperas de la segunda guerra mundial, el fondo inmobiliario urbano constitua en la Unin Sovitica 421 millones de metros cuadrados. Ms de la mitad se haba construido despus de la Revolucin de Octubre de 1917. Es decir, en slo 23 aos, incluidos los de la guerra civil y de la intervencin extranjera (1918-1920), se hizo ms que en muchos siglos. Hubo en aquel perodo tanto bsquedas innovadoras de arquitectos, como hallazgos interesantes, pero en general el ritmo de la edificacin era moderado, por las reducidas posibilidades econmicas y tcnicas de que dispona el Estado. Aunque la construccin de viviendas se realiz en proporciones inusitadas, en la historia del pas, no fue posible abastecer de apartamentos confortables a la poblacin urbana que, debido a la industrializacin, creca con rapidez. En aquellas circunstancias sera un fracaso lanzar la consigna de "un apartamento confortable, a cada familia". En la prctica, significara que unos disfrutaran del confort moderno y otros habran de cobijarse, durante largos aos, en casas destartaladas. Por eso, el Estado sovitico eligi otro camino: alojar en casas nuevas, en un mismo apartamento, a dos o tres familias. Fue una medida provisional, pero necesaria, que disminuy, hasta cierto punto, la crisis de la vivienda.

Durante la guerra contra la Alemania nazi (1941-1945), quedaron sin viviendas 25 millones de soviticos: las incendiaron y destruyeron los invasores. Muchos centenares de miles de ciudadanos, junto con las fbricas evacuadas de las zonas prximas al frente, se trasladaron a la regin del Volga, a los Urales, a Siberia y al Extremo Oriente. Era vigente darles vivienda. Las autoridades locales y los constructores disponan a veces slo de semanas o das contados: tenan que alojar a los evacuados antes del invierno. En vista de ello, nadie se pona a pensar en la esttica o en bsquedas arquitectnicas. Se construa contra el tiempo. As, por ensima vez, circunstancias concretas obligaban al Estado sovitico a postergar la solucin cardinal del problema de la vivienda, con tal de satisfacer las necesidades inmediatas de la poblacin.

La guerra termin hace tres dcadas y media. Ahora los arquitectos y las entidades estatales, responsables de la edificacin, enfrentan la necesidad de enfocar integralmente el desarrollo de las ciudades y poblados.

Izda.: Zelenograd, ciudad satlite de Mosc. Uno de sus nuevos microdistritos. Dcha.: Jardn de infancia "Malets" en el sovjs de Bielorrusia (regin de Brest)

No hace mucho convers con Alexi Bujtirov, presidente del Comit Ejecutivo del Soviet, de la ciudad de Omsk (Siberia). Me parece de inters para el rector, conocer el contenido de aquella entrevista.

Qu significa enfocar integralmente el desarrollo de la ciudad, en el caso de Omsk? En cualquier caso el desarrollo de una ciudad es multifactico: crece la industria y, porlo tanto, aumenta la poblacin y con ella, la ,necesidad de viviendas, de servicios, comunicaciones y otras muchas cosas. Cuando hablamos de la solucin integral del problema, tenemos en cuenta sus diversos aspectos tomados en su conjunto y, adems, en vinculacin orgnica. Buscamos la variante ptima para satisfacer los intereses de la poblacin que crece con rapidez y para cubrir, a la vez, las necesidades de la economa del pas, de la regin y de la ciudad, hacindolo con vistas al presente y al futuro. En todo ello, nos basamos en nuestras posibilidades y nuestros recursos existentes.

Estas son verdades obvias. Pero es muy difcil aplicarlas en la prctica, analizandocientficamente todos los factores en su concatenacin. El ejemplo de Omsk es en este sentido muy elocuente. Imagnese una ciudad con ms de un milln de habitantes, uno de los emporios industriales y culturales ms importantes no slo de Siberia, sino del pas, una ciudad que se fund hace dos siglos y medio, y que lleva en su semblanza el sello de las ms diversas pocas.

Qu se requiere para el desarrollo integral en la concepcin moderna de estevocablo de una ciudad como Omsk? Suficientes medios y recursos, as como la posibilidad de evadirse, aunque no sea ms que temporalmente, de los problemas actuales, siempre "candentes", para poder pensar en serio en perspectivas ms o menos lejanas. En el pasado nos era imposible hacerlo.

En los primeros quinquenios (1928-1940) y, sobre todo, durante la segunda guerramundial y despus de sta, la nacin construa en Omsk, igual que en otras ciudades, grandes plantas industriales. Dnde alojar a los miles de constructores y, luego, a los obreros de las fbricas? Las temperaturas del invierno suelen llegar, en Omsk, a 50 grados bajo cero. Las viviendas se necesitaban al instante, no se poda demorar en construirlas uno o dos aos, ni pensar en meses. Ante esos imperativos, todo lo dems pasaba a segundo plano. Es la razn por la cual gran parte de las viviendas de aquel difcil perodo, no nos pueden satisfacer hoy en da.

Al incrementarse el potencial econmico del Estado, el cuadro fue cambiando, y desdemediados de los aos 60, en Omsk se edifica de otra manera. Lo que se construye ahora, no slo cubre las necesidades perentorias, sino servir a largo plazo. Hace algunos aos

aprobamos el Plan Rector de desarrollo de nuestra ciudad, en vigor hasta fines del presente siglo. Una vez cumplido, veremos a Omsk como la ciudad que deseamos: an ms hermosa y urbanizada, con anchas avenidas que permitan el trfico rpido, con aire puro y una belleza arquitectnica incomparable, cmoda para la vida y el trabajo, y que satisfaga las ms elevadas exigencias en la cultura y los servicios.

Dir algunas palabras sobre las obras a realizar; el fondo inmobiliario urbanoaumentar en un 50 por ciento y ser plenamente confortable, se construirn 300 mil apartamentos. La mitad de los edificios residenciales que se construyen tendrn 9, 12, 16 o ms pisos. Se abrirn nuevas avenidas para transporte rpido y se modernizarn las viejas; casi se triplicar el nmero de establecimientos de servicios pblicos; las reas verdes ascendern a 24 metros cuadrados por habitante.

Qu opina usted del estado de cosas en la hacienda municipal? Esto es relativo. En comparacin con el pasado, incluso un pasado reciente, la situacinha mejorado mucho en todo sentido. Tampoco van mal las cosas, si comparamos a Omsk con otras grandes ciudades, soviticas o extranjeras. Por ejemplo, el 90 por ciento de nuestros apartamentos tienen calefaccin central y gas.

Unos 12 mil apartamentos confortables, en altos edificios se distribuyen cada ao entrelos habitantes de Omsk. Esto significa, que en un quinquenio recibe apartamento nuevo una de cada cinco familias. Podramos presumir de estos resultados, pero consideramos que eso no es suficiente y que tenemos an mucho por hacer; tanto en lo que se refiere a la vivienda, como al desarrollo del transporte y de los servicios que han de ampliarse y mejorar. Por ejemplo, en Omsk hay ahora cerca de 700 cafeteras, restaurantes, comedores y otros establecimientos de alimentacin pblica. Debe de haber ms.

La entrevista citada se refiere a una ciudad siberiana, que como tal tiene muchos problemas especficos.

Estadio central "Lenin", Mosc.

A escala de un pas tan grande como es la Unin Sovitica, en cuyo territorio hay las ms variadas zonas climtico-naturales, las peculiaridades locales son esenciales.

Trasladmonos ahora de Siberia hacia el Oeste, a orillas del ro Kama, afluente principal del Volga.

Cuando se trata de la industrializacin de nuevos territorios en la URSS, suelen aludir a Siberia, al Extremo Oriente, o a la parte norte. Pero uno de los ejemplos ms importantes est a una hora y media de vuelo de Mosc, en el curso bajo del Kama. All, en la Repblica Autnoma de Tartaria, en las inmediaciones de importantes ncleos industriales, existi hasta hace no mucho algo as como un "vaco industrial", con una superficie de 2.500 kilmetros cuadrados.

Ahora en un territorio semejante a un tringulo, cuyos vrtices son las ciudades Nberezhnie Cheln, Nizhnekamsk y Zansk, se construyeron ms de 40 complejos industriales. Se trata de la mayor concentracin de produccin en la URSS. Adems, las empresas son tan grand9s como el KAMAZ, conjunto de fbricas de camiones de gran capacidad de carga, construido en Nberezhnie Cheln. Henry Ford, "rey automovilstico" de los EE. UU., al visitar esta planta, dijo que ni su pas ni Europa Occidental hubieran sido capaces de realizar algo parecido.

Son comparables al KAMAZ sus vecinos: las industrias petroqumicas y de neumticos de Nizhnekamsk, la hidroelctrica (recin construida en el Kama), la termoelctrica de Zansk, etc.

Donde ahora se encuentra la ciudad de Nizhnekamsk (150 mil habitantes), en diciembre de 1960, en medio de la estepa nevada, metieron la primera cua y en abril del ao siguiente colocaron los cimientos de la primera casa...

Es preciso imaginar aquel panorama. En el mapa, el lugar, donde haban de realizarse las obras, pareca insignificante pero, visto de cerca, representaba una estepa extensa, un bosque srdido, barrancos, caminos llenos de intransitable barro. Incluso uno se resista a creer que no estaba en el fin del mundo, sino en el mismo centro del pas.

La primera escuela empez a funcionar, cuando la ciudad an no exista. La primera vivienda de varios pisos se construy despus. As lo decidieron los propios ciudadanos. Cuando todo se crea a partir de cero y las entidades de construccin no pueden llevar a cabo simultneamente todos los trabajos, es necesario darle prioridad a lo ms importante: Una casa de vivienda confortable o una escuela? La gente se conform con vivir hasta muy entrado el otoo en vagoncitos (vivienda tpica de los primeros constructores de aquel perodo) con tal de que sus hijos fuesen a tiempo a la escuela.

"Desde luego, los ms difciles fueron los primeros pasos relata Farit Bagautdnov, ex presidente del Comit Ejecutivo del Soviet urbano de Nizhnekamsk, hoy ministro del Comercio de la RSSA de Tartaria. Poco a poco las cosas fueron desenvolvindose de manera favorable. De las aldeas adyacentes y de otros lugares, ms lejanos, llegaban nuevos contingentes de constructores. Rusos, trtaros, bashkiros, tadzhikos... Treinta nacionalidades en total. Pero Nizhnekamsk no se convirti en una nueva Babilonia: todos sus habitantes se comprendan perfectamente y no perciban barreras nacionales de ninguna clase. Maquinaria y materiales de construccin llegaban de distintas regiones del pas. Las obras fueron desplegndose, lo cual implicaba problemas cada vez complicados.

"El ms apremiante fue el de vivienda. Necesitaban viviendas cuantos llegaban. Pues, antes de hacerse constructores, todos los que llegaban a Nizhnekamsk se hacan ciudadanos de esta futura ciudad.

"Por eso tuvimos que decidir cmo construir. No exigiendo mucho de la calidad, pero ms rpido, o de una calidad mejor, pero ms lento. No es un problema fcil ni nuevo.

"Naturalmente, la situacin no era la misma que a raz de la segunda guerra mundial. A las obras de Nizhnekamsk acudan hombres que tenan viviendas en los lugares de donde procedan. La primera conclusin era evidente: regular conforme a nuestras posibilidades el nmero de los que llegaban para garantizarles vivienda segura. Pero es ms fcil decirlo que hacerlo. No todos llegaban habindose contratado previamente ni siquiera habiendo averiguado los detalles. Muchos lo hacan nada ms enterados de que se trataba de unas obras grandiosas, y acudan a ellas, seguros de poder obtener el trabajo y la vivienda.

"Rechazamos la idea de construir viviendas provisionales, a manera de barracas y que ms tarde se podran derrumbar. Construimos slo lo que podra servir mucho tiempo. Pero en un principio, utilizamos como albergues las viviendas comunes: en los apartamentos de una pieza alojbamos a una familia, o a dos o tres trabajadores solteros; en los de dos piezas, el nmero doble, etc. Claro est que tambin construimos albergues confortables segn los proyectos tipo especiales. Ello nos permita contrarrestar, con una rapidez relativa, la escasez de viviendas y alojar sin mayor dificultad a cuantos llegaban. Con el tiempo los inquilinos de los albergues improvisados se mudaban a los edificios construidos con este fin, y los apartamentos que dejaban eran utilizados en forma adecuada.

"La realidad confirm que nuestra solucin fue acertada. Hoy da en la semblanza arquitectnica de nuestra ciudad hay edificios de distintas generaciones. Claro est, las casas y barrios ms recientes se ven mejor y son ms confortables. Es inevitable y no ha podido ser de otra manera. Pero los viejos edificios no afean el panorama y no tuvimos que demoler ninguno de ellos."

Los nuevos barrios moscovitas se aproximan a la Carretera Circular, de 109 kilmetros de longitud.

En la URSS los Soviets urbanos son, bsicamente, los propietarios del territorio que tienen bajo su jurisdiccin, y ninguna resolucin, que concierne a los intereses de la ciudad y de los ciudadanos, puede adoptarse sin que ellos lo autoricen.

Sin la autorizacin del Soviet, no se puede construir en la ciudad ni un solo edificio, y los apartamentos nuevos se distribuyen entre los ciudadanos por las listas que se aprueban en el Comit Ejecutivo del mismo.

Para que las cosas vayan normalmente, es preciso coordinar permanentemente lo que hacen las empresas poseedoras de recursos para la construccin de viviendas, puesto que de otra manera no surgira un conjunto arquitectnico armonioso, sino un conglomerado de elementos sueltos que slo formalmente podra llamarse ciudad.

En Nizhnekamsk lo comprendieron muy pronto. El Plan Rector de esta ciudad, trazado por arquitectos moscovitas (hasta el ao 1990), es un asunto que preocupa no slo de palabra, sino de hecho a cuantos viven y trabajan en la misma.

En una ciudad nueva, donde no hay todava poblacin local nacida en ella, donde todos los trabajadores han llegado de otros lugares, el problema de la migracin de cuadros es especialmente agudo. Hacer que los trabajadores echen races en el sitio nuevo siempre es ms difcil que retener al originario del lugar. En este caso no ayuda el apego al terruo ni la fuerza de costumbre. La solucin es una sola: crearle a la gente condiciones de trabajo y de vida, que superen las que haba tenido anteriormente. Esto quiere decir que una ciudad nueva,

como Nizhnekamsk, por ejemplo, debe desarrollarse en el plano social con mayor rapidez que los ncleos industriales y culturales ya formados.

En los ltimos diez aos se construyeron en Nizhnekamsk 26 mil apartamentos. El volumen actual de las obras cuatro mil apartamentos por ao supera cinco veces el del ao 1967: calculado proporcionalmente al nmero de habitantes, cuadruplica el nivel medio registrado en el pas. Con este fin, se invierten cada ao 50 millones de rublos: 400 rublos por habitante de la ciudad, comprendidos los nios recin nacidos, o 1.600 rublos (ms de 2.000 dlares) por una familia de cuatro personas.

La justa distribucin de los apartamentos, est a cargo de un departamento especial del Comit Ejecutivo del Soviet urbano, el cual registra a todos los que necesitan vivienda y, junto con los sindicatos y otras organizaciones sociales de las empresas e instituciones, establece el turno. Slo los tcnicos contratados, por invitacin personal para trabajar en la ciudad, reciben apartamentos sin esperar turno. Estos apartamentos son de un fondo especial, de reserva. Los que llegan por iniciativa propia se alojan en un albergue confortable y se registran en el Comit Ejecutivo del Soviet urbano. Se les dan apartamentos a medida que se construyen nuevos edificios.

Desde luego, a veces ocurre que a algunos la espera les parece muy larga. Entonces elevan quejas al Comit Ejecutivo, donde stas se estudian cuidadosamente, y, por lo general, los ciudadanos reciben respuestas que les satisfacen, comprendiendo que todo se hace con justicia y que ellos tienen los mismos derechos que los dems. Llegar su turno, y recibirn apartamento nuevo. En cierto sentido, quienes esperan incluso salen ganando: el estandard de vivienda se mejora continuamente, y el apartamento que se construir maana ser, sin duda, mejor que el construido hoy.

6. Variedad inevitable

En el transcurso de mis numerosos viajes por la Unin Sovitica he observado algunos cuadros como los siguientes:

Turkmenia, repblica federada situada en el Sur del Asia Central. Unos bulldozers allanan el terreno para levantar un poblado a orillas del Canal de Kara-Kum, de 1.000 kilmetros de longitud, que lleva sus aguas a los arenales de uno de los desiertos ms grandes del mundo. Las mquinas deben pararse muy a menudo, por empezar a hervir en ellas el lquido refrigerador. El aire se calienta hasta 50 grados centgrados y la arena, hasta 70.

Yakutia, repblica autnoma localizada en Siberia Oriental. Las piezas metlicas de las mquinas se vuelven frgiles como vidrio, a la temperatura de 60 grados bajo cero. En este lugar se encuentra la zona ms fra del Hemisferio Boreal. Es el reino de los enigmticos y tierras de congelacin perpetua, que han de tenerse en cuenta si se quiere que cualquier edificacin se mantenga largo tiempo.

Izda.: en uno de los numerosos parques moscovitas. Dcha.: en la regin oeste de Mosc se construy hace poco el canal para las regatas de la Olimpiada-80.

En cierta ocasin llegu a Dushanb, capital de la RSS de Tadzhikia. Estando en la sala de recepcin del hotel, se escuch un fuerte ruido, se balance la lmpara sobre mi cabeza, y el suelo empez a moverse. No tuve tiempo ni de asustarme cuando ya haba pasado todo. La joven administradora dijo con serenidad: "Fue un temblor". Para ella son lo ms natural los temblores de tierra, bastante frecuentes all.

En la URSS hay muchas zonas de actividad ssmica: casi todo el Asia Central, algunas regiones del Cucaso y Ucrania Occidental, parte del trayecto del ferrocarril que se tiende entre el Baikal y el Amur, el Extremo Oriente sovitico...

A Norilsk, ciudad situada en las regiones hiperbreas, es necesario protegerla de las fras y fuertes ventiscas; a Nebit-Dag, la ciudad de los petroleros turkmenos, de los trridos y arenosos vientos del desierto. En unos lugares las casas deben conservar bien el calor; en otros, mantener el fresco. En el centro del pas no es ningn problema caminar algo por la calle o esperar a la intemperie un autobs o un tranva. Pero en Norilsk es un problema: durante las fuertes heladas slo se puede ir, a una panadera o a una lavandera, por una galera cubierta; en las horas punta los autobuses deben circular, y circulan, sin interrupcin uno tras uno.

En Vladivostok, en la costa del Ocano Pacfico, soplan vientos tan fuertes que, las gotas de lluvia que arrastran, "atraviesan" literalmente los vidrios de las ventanas de las casas comunes. Mientras que en Transcaucasia, los arquitectos y constructores tienen que pensar en cmo asegurar la libre circulacin del aire en los apartamentos, sin lo cual es difcil respirar en las temporadas de calor y humedad.

Como se puede concluir, las condiciones naturales de la URSS son muy variadas.

Izda.: Tbilisi, capital de la RSS de Georgia. Un distrito nuevo. Dcha.: Tashkent, capital de la RSS de Uzbekia. Vista parcial del nuevo centro de esta ciudad, reconstruida por completo despus del fuerte terremoto

No menos lo son las tradiciones nacionales y la composicin numrica y profesional de las familias. En Uzbekistn abundan las familias que tienen de 8 a 10 hijos, mientras que en Estonia, por ejemplo, prefieren tener pocos hijos. En Trascarpatia, regin de Ucrania, las ventanas de las casas rurales dan a la calle; en Turkmenia, al patio interior. En Moldavia, hay en cada casa una sala especial que no se puede comparar a un recibidor corriente....

Todo ello no puede dejar de considerarse en las construcciones que se llevan a cabo. Por eso actualmente en la URSS se emplean decenas de series de proyectos estandard de viviendas.

La diversidad, originada por las condiciones del clima y de la naturaleza, as como por las peculiaridades nacionales, es un aspecto de la cuestin. Otro es el rpido aumento general de las demandas concernientes a las dimensiones y la calidad de la vivienda, al planeamiento y la esttica del apartamento, de la casa, el microdistrito y la ciudad.

Pero dondequiera que viva el ciudadano en la zona central de Rusia o en el Artico, en el desierto o en las montaas , el Partido Comunista y el Estad hacen todo lo posible para crearle las mejores condiciones de trabajo, vida, estudio y descanso. Hacerlo as exige gastos y esfuerzos. Pero esta lnea se sigue invariablemente.

El Norte del pas. Las regiones de hielos perpetuos. No se trata de pequeos "islotes" que se podran hacer a un lado sin grandes dificultades, sino de casi la mitad del territorio de la URSS. En esta superficie cabran el resto de pases de Europa. En el Norte se construyen plantas industriales y viviendas, ferrocarriles y carreteras, cines y dems obras necesarias para la vida y el trabajo normal de la gente. Esto sale muy caro y es tcnicamente complicado.

Las tierras de congelacin perpetua encierran toda una serie de enigmas peligrosos. Unas veces se mantiene inmvil, otras de sbito hincha la tierra, o empuja a la superficie pantanosa enormes cantos rodados, o de pronto comienza a inundarse todo en pleno invierno, amenazando a la gente y a los animales. Incluso muy lejos del litoral del Ocano Glacial Artico, all por donde se tiende el nuevo ferrocarril Baikal-Amur, hay sectores donde las capas de hielo tienen seis metros de espesor. Pueden resistir cargas muy pesadas, si no se altera la capa de musgos que estabiliza la temperatura. Ahora bien, cmo construir sin afectar los musgos? En unos casos no se puede tocar los musgos del subsuelo helado, en otros hay que arrancarlos. Pero con las manos desnudas no se puede: se requieren potentes mquinas y mucha habilidad.

Izda.: Lazdynai, nuevo distrito de Vilnius, capital de la RSS de Lituania. Sus autores recibieron el premio Lenin. Dcha.: Cafetera "Metlitsa", en la avenida Kalinin, centro de Mosc.

Pero en el Norte, los constructores tienen que luchar no slo contra el subsuelo helado. Aqu son tan fuertes las heladas que no cualquiera ni cualquier mquina las resisten. A temperaturas de 20-35 grados centgrados bajo cero, el rendimiento de la mayor parte de la maquinaria utilizada por los constructores disminuye a la mitad; a temperaturas an ms bajas, que son frecuentes en el Artico, estas mquinas se paran.

En el Norte salen ms caros tanto los trabajos de construccin y montaje, como el tendido de carreteras y ferrocarriles, etc. Adems de ser una de las zonas del planeta ms vulnerables en el aspecto ecolgico.

No puede dejarse de tomar en cuenta cada uno de estos aspectos y todos ellos en su conjunto.

Vladmir Andrev, administrador de "Arktikstroi", del Ministerio del Transporte Martimo de la URSS, nos dijo:

Debemos empezar por constituir poderosas bases y maquinaria especial, vlida para trabajar en las condiciones del Norte; por elaborar mtodos avanzados de construccin; por fabricar estructuras estndar, etc. Todo ello exige buscar nuevas soluciones y experimentarlas en la prctica.

Muchas innovaciones tcnicas ya se aplican en la produccin. Ha comenzado la construccin de casas de viviendas, a base de grandes paneles con estructuras protectoras de tres capas, de hormign armado y plstico como material termoaislante. Incluso en comparacin con los bloques de hormign de keramzita, que hasta ahora se consideraban insuperables, dichas estructuras tienen la mitad de peso y espesor. Ello permite economizar materiales, elevar el grado de elaboracin industrial de las piezas y aligerar notablemente los trabajos de montaje.

En Anadir, la capital de la Comarca Autnoma de los Chukchis, y en el poblado Cherski, Norte de Yakutia, se han construido las primeras casas de cuatro pisos, a base de paneles de aluminio, con estructuras murales y vigas transversales. Se utiliza algodn mineral como material termoaislante. En comparacin con los bloques de hormign armado, los paneles de aluminio son mucho ms ligeros y resistentes a los vientos, y conservan bien el calor.

Se ha comenzado la construccin de edificios, a base de un nuevo material denominado estiroporohormign (hormign con relleno de grnulos de poliestireno fermentado). Los bloques de este material tienen buenas caractersticas trmicas y son muy prcticos: se fabrican en instalaciones de moldes.

En el Norte se construye durante todo el ao. Ello ha sido posible gracias a la mxima industrializacin de las obras. La mayor parte de las piezas se prefabrican en locales cubiertos y luego se montan en las obras. Para hacer los cimientos del edificio se requiere bastante menos trabajo. Antes se ahondaba en el subsuelo helado por medio de explosiones. Ahora se emplean mquinas perforadoras que colocan pilotes a 9-10 metros de profundidad.

La tendencia general, para la construccin en el Norte, es el montaje de estructuras prefabricadas en regiones vecinas. Los clculos han demostrado que el transporte por va area de estructuras de construccin para el montaje, desde la base en Bratsk a Yakutia

Occidental, se justifica econmicamente.

En las zonas rticas no slo construye la URSS, tambin lo hacen los EE.UU., Canad y los pases del Norte de Europa. La colaboracin en este terreno, como demuestran los primeros pasos dados, ofrece buenas perspectivas.

Unas palabras acerca de las zonas de peligrosidad ssmica.

Todos recuerdan bien el terremoto de Ashjabad en 1948, una de las mayores catstrofes ssmicas del siglo XX. La fuerza del sismo alcanz nueve grados y en algunos lugares de la ciudad hasta ms. Los trgicos acontecimientos de 1948, llevaron a desarrollar con ms intensidad la sismologa y la edificacin sismorresistente.

Muchos edificios de viviendas, pblicos, y plantas industriales fueron destruidos por el terremoto.

La reconstruccin de la capital de la RSS de Turkmenia, mejor dicho, la creacin de hecho de una ciudad nueva en una zona de elevada actividad ssmica, exigi garantas para los edificios que se construan y plena seguridad para la poblacin. Problemas similares esperaban solucin tambin en otras zonas de peligrosidad ssmica. Como primer paso, se fund en Turkmenia el Instituto de Investigaciones Cientficas de Construccin Sismorresistente, el cual ha hecho mucho en los 25 aos que viene funcionando, tanto en el aspecto terico como tambin prctico. Los estrechos contactos del Instituto con las oficinas de diseo y de construccin reportan resultados muy efectivos.

Izda.: estos recin casados --Ludmila y Andri Popov (ella estudiante, l ingeniero)-- acaban de recibir un apartamento nuevo. Dcha.: en el parque moscovita de Soklniki.

En los ltimos aos, se presta especial atencin a la obtencin de estructuras ligeras de hormign sismorresistentes, fabricadas a base de materiales locales. La cuestin radica en que

hay una dependencia directa, entre la carga ssmica que surge durante los terremotos y el peso de los edificios. Cuanto menor es el peso de la obra, tanto menor es la carga, y, por consiguiente, si se mantienen las propiedades fsicas fundamentales de la obra tanto mayor es la fiabilidad del edificio en los temblores de tierra, o sea, su resistencia a los sismos. Entre las ventajas que ofrecen las estructuras ligeras de hormign, est el ahorro de metal y cemento, disminucin de los gastos en el transporte, etc.

Se ha conseguido obtener dos nuevos tipos de materiales para estructuras sismorresistentes: rellenos porosos ligeros con utilizacin de arenas del desierto. Ya estn funcionando plantas que producen estos materiales porosos de relleno, los cuales se utilizan ampliamente en la construccin, tanto en las ciudades como en el campo, por ejemplo, en la zona del Canal de Kara-Kum.

En Turkmenia, se construyen diversos tipos de casas de viviendas, en los cuales se emplean estructuras de armazn para montaje integral, con paneles cobertizos de hormign ligero hechos de argilita fermentada. Se utiliz tambin hormign ligero hecho a base de rellenos porosos, en un edificio experimental de nueve pisos con encofrado deslizante. Las casas de este tipo fueron sometidas a diferentes pruebas, mediante potentes mquinas de vibracin, simuladoras de terremotos de distinta fuerza. Resistieron bien una carga que supera muchas veces todo lo que tendran que soportar en caso de terremoto.

La utilizacin de estructuras industriales es, en las zonas de actividad ssmica, la direccin fundamental de la edificacin.

7. La arquitectura y la economa

Al proyectarse y construirse edificios pblicos, as como viviendas, surge siempre el problema de la interrelacin arquitectura economa. Qu es la economa para la arquitectura? Un bien que incita a buscar soluciones armnicas o una jaula que estrecha la inventiva del arquitecto? O lo uno y lo otro al mismo tiempo?

Los criterios al respecto cambiaron repetidas veces. Hubo un tiempo en que se consideraba que "todo lo bello est justificado econmicamente"; despus, que "todo lo racional es bello por s mismo". Ya en la antigedad se deca que "el arquitecto no supo construir bello y lo hizo caro".

"La sencillez es fruto de la economa sealaba el famoso Le Corbusier . Concedo mucha importancia a la ltima palabra, puesto que encierra un profundo sentido. El gran arte es sencillo. Las grandes obras son sencillas... Y si la fuente de la sencillez es una gran complejidad y tiene un significado intrnseco, todo va bien. Pero si la sencillez es fruto de la pobreza de ideas, de nada servirn adornos de ningn gnero, no se lograr nada ni habr progreso alguno".

Cmo debe ser el patio? En este caso, la naturaleza ha quedado casi intacta.

Ivn Zholtovski, eminente arquitecto sovitico, se expresaba con mayor determinacin an:

"A propsito de las llamadas caractersticas tcnico-econmicas del edificio. Es muy fcil ponerse a fantasear, haciendo caso omiso de ellas. Es una ocupacin irresponsable e intil. La eficacia del proyectista consiste precisamente en que logra resultados estticos ptimos partiendo slo de recursos efectivos y condiciones concretas".

La arquitectura sovitica rechaza ambos extremos el menoscabar las tareas artsticoideolgicas o el economismo primitivo y opta con firmeza por armonizar los dos principios.

Otros dos conceptos de patio. Izda.: vemos construido para los nios una villa de fantasa. Dcha.: una plazoleta de juegos.

La revolucin cientfico-tcnica permite que todo proyecto, incluso el ms fantstico, sea factible desde el punto de vista tcnico. Pero a la sociedad socialista le interesa mucho los gastos que tal proyecto ocasione, y el grado en que stos se justifiquen por la funcin y el

valor artstico-ideolgico de la obra.

La tarea fundamental de la arquitectura crear el ambiente ideal para la vida de los hombres no puede cumplirse, sino en el marco de determinadas posibilidades econmicas. No se trata de lo ptimo en abstracto, sino de lo ptimo y lo viable a la vez

8. La ciudad de hoy y de maana

Hace unos veinte aos, los visitantes extranjeros se fijaban en el escaso confort de nuestros apartamentos, barriadas y ciudades. En efecto, era bastante inferior al de las zonas donde en los pases capitalistas desarrollados residen las familias acomodadas. Incluso en grandes ciudades no haba en todas las viviendas tuberas de agua, la mayora de los apartamentos carecan de cuarto de bao, las casas se calentaban con lea o carbn y el abastecimiento centralizado de gas y agua caliente, era cosa rara. El telfono particular se consideraba casi como un lujo.

Hoy da la situacin es muy distinta. Es una norma elemental, lo que en aquel entonces era una rareza. Es muy posible que en este cambio no haya nada asombroso, ya que, para nuestra poca vertiginosa, 20 aos son bastantes. Pero lo interesante es que la Unin Sovitica ha logrado hacer en este sentido mucho ms que los pases con otro rgimen social, y tiene ndices medios ms elevados que ellos.

Izda.: Sovjs "Manech", de Bielorrusia. Los diputados del Soviet rural (rgano local del poder) estudian los proyectos de urbanizacin de su poblado. Dcha.: estas casas para dos familias se construyen en el campo, en la RSS de Bielorrusia.

Los apartamentos, las casas, que se construyen ahora han de servir a la gente por largo tiempo (un siglo al menos). En vista del imponente progreso social, econmico y cultural del pas socialista, no es difcil suponer que las exigencias para con la vivienda cambien con

rapidez. Un apartamento que entra en servicio hoy, debe responder a las demandas de hoy, de maana y de muchos das ms. Cmo lograrlo?

El criterio que nos gua es el siguiente: un apartamento confortable para cada familia, con un nmero de habitaciones equivalente al de los componentes de sta ms una complementaria. De 20 a 25 metros cuadrados por persona. El pas debe alcanzar esta meta, despus de 1985.

Los especialistas soviticos coinciden en que esta norma puede satisfacer las necesidades racionales del individuo, para una perspectiva bastante larga, y asegurar condiciones necesarias para el desarrollo armnico del individuo.

Ahora bien, En qu se diferencia un apartamento de tres habitaciones de una casa moscovita, construida en nuestros das, de sus predecesores?

Lo explica Ya. Dijter, Candidato a Doctor en Arquitectura: En primer lugar, es mejor su planificacin, tiene ms confort. Todas las habitaciones estn ahora separadas. Hay ms armarios empotrados; cada habitacin tiene terraza o balcn cmodos; es mejor el acabado. Los nuevos dispositivos calefactores son ms eficientes; en las cocinas de los edificios multifamiliares hay estufas elctricas, en vez de las de gas.

Dcha.: en el poblado "Slskaya nov", regin de Mosc, las cocinas tienen estufas de gas, agua fra y caliente. Centro e izda.: La construccin de viviendas rurales no acepta patrones establecidos. la diversidad de las condiciones naturales, climticas y tradiciones nacionales impone sus requisitos. En estas dos fotos se ven casas rurales de Estonia.

Actualmente en Mosc se construyen diez tipos de apartamentos (de 1 a 5 habitaciones). Claro est, no slo la composicin numrica de una familia determina qu clase de apartamento necesita.

Los especialistas consideran que existen unos sesenta tipos de familia que difieren por la edad, la instruccin y profesin de sus integrantes, por los vnculos que los unen, etc. Todos estos

factores que, adems, cambian con el devenir del tiempo, llevan a que las demandas de vivienda sean distintas, incluso en las familias de una misma composicin numrica. Estos problemas los estudia un sector del Instituto Central de Investigacin Cientfica de Proyeccin Experimental de la Vivienda.

Esta misma entidad tambin analiza la influencia del progreso cientfico-tcnico en la vivienda. No se trata nicamente del desarrollo tcnico de la propia construccin, sino tambin de los cambios en la ubicacin geogrfica de la industria y centros cientficos, as como de la distancia entre el domicilio de la gente y los lugares donde trabaja.

Adquiere cada vez mayor importancia la interrelacin de la vivienda y el medio ambiente: clima, grado en que est asimilado el territorio concreto, etc. Aqu se entrelazan el confort, bajo distintas condiciones, y la proteccin de la naturaleza.

Para finalizar, hablemos de las perspectivas, puesto que la posibilidad de utilizar largamente los apartamentos de alta calidad, no significa. que se estanque la proyeccin de la vivienda. Continuar mejorando''el planeamiento del interior del apartamento y de la casa; aumentar la higiene y el nmero de aparatos domsticos, conforme a las necesidades crecientes...

Casas rurales de Letonia (Izda.), y de la Federacin Rusa, regin de Brianski (Dcha.)

Se presta mucha atencin al empleo del gas, que es un combustible bueno y barato. Cada ao el gas se instala en 3 4 millones de apartamentos, o sea a un ritmo que casi duplica el de la construccin de viviendas.

Esto es fcil de comprender. Adems de las viviendas nuevas, se dotan de gas y de las dems comodidades, las casas construidas cuando no haba bastante gas natural e incluso se consideraban insuficientes sus reservas exploradas. Pero con el tiempo han cambiado muchas cosas, y ahora el pas dispone de este combustible en cantidad suficiente.

Por ejemplo, en el balance de combustible de Mosc, la parte alcuota de gas ha ascendido al 70 por ciento. El empleo de gas permite mejorar el medio ambiente. Mosc, ciudad con una gran produccin industrial y donde durante el invierno la calefaccin funciona en todas las viviendas y todos los edificios pblicos (para mantener la temperatura media de 22 grados C sobre cero), desconoce la neblina de la contaminacin, formada por los residuos del carbn quemado. Naturalmente, esto no slo se debe a las caractersticas del combustible que se usa, sino tambin a la calefaccin centralizada, gracias a lo cual la gente no tiene que encender calentadores o chimeneas. Adems, cuentan mucho las reas verdes en abundancia y a buena planificacin de las barriadas que garantizan la circulacin normal de aire; as como el control estricto sobre los escapes de desechos industriales a la atmsfera.

Nmero de apartamentos con gas (miles) 1960 1965 1975 1980 3.332 10.434 41.662 55.300

La pureza del aire en cada ciudad es una de las preocupaciones fundamentales del Soviet respectivo. En Mosc, por ejemplo, todos los das por la maana, por la tarde y por la noche el Observatorio Hidrometeorolgico Central, comprueba el estado de la atmsfera. Esta institucin tiene diez puestos fijos y otros seis. ambulantes (instalados en camionetas). Los trabajadores de cada puesto analizan, varias veces al da, el aire en diferentes zonas de la ciudad: en barrios residenciales, en distritos industriales, en las avenidas de mucho trfico. Se hace un anlisis qumico de los elementos que caracterizan la contaminacin de la atmsfera; se determina la concentracin de gas sulfuroso, de holln, de xidos de nitrgeno, carbono y de polvo. Estos datos se envan al Soviet urbano.

He aqu algunos resultados de estas observaciones: los ltimos aos, en la atmsfera de Mosc, ha disminuido la cantidad de polvo y se ha rebajado tres veces la concentracin de gas sulfuroso. Los automviles siguen siendo el principal contaminante del medio ambiente. Para contrarrestarlo se toman las medidas ms enrgicas. Hay en circulacin ya varios miles de automviles sin depsito de gasolina; utilizan como combustible gas licuado. Se ha establecido un rgido control sobre el estado tcnico de los automviles (se sabe que un motor en mal estado aumenta en 10 15 veces las sustancias nocivas de los gases de escape). Se crean autopistas especiales que encauzan el trfico fuera de las barriadas residenciales.

Pero tambin el gas produce residuos al quemarse. Por eso, los ltimos aos en la URSS, se utiliza cada vez ms la electricidad para el uso domstico. En Mosc y otras ciudades; sobre todo en Siberia, donde es muy barata la energa que generan potentes centrales hidroelctricas, las cocinas elctricas reemplazan a las de gas. En Mosc, por ejemplo, las cocinas elctricas se instalan en todas las casas nuevas de diez y ms pisos. Sus ventajas son numerosas: no hay necesidad de construir costosos sistemas de conduccin de gas, el transporte de electricidad es mucho ms sencillo, el tendido de las lneas interiores de electricidad puede realizarse por mtodos industriales, el control sobre las cocinas elctricas es automtico, etc.

Todo esto se hace planificadamente, sin apresuramientos innecesarios, despus de unos preparativos minuciosos y cuidndose siempre de no ocasionar trastornos al consumidor.

Aumentar las reas verdes en cada ciudad es otra preocupacin de los Soviets urbanos, y casi todos tienen elaborados planes rectores al respecto. A cada moscovita corresponden ahora unos 20 metros cuadrados de reas verdes.

Pero el Soviet capitalino considera que es insuficiente. En primer trmino, y por razones histricas en Mosc, como en otras ciudades antiguas, las zonas verdes no estn distribuidas equitativamente: los parques ms grandes se encuentran en los distritos extremos, mientras que en el centro los rboles son mucho ms escasos. En segundo trmino, la ciudad crece, surgen nuevas barriadas residenciales y hay que decidir dnde debern situarse nuevos jardines, bulevares, parques.

Mosc est dividida, en el Plan Rector de Desarrollo Urbano, en ocho zonas: una central y siete perifricas. Deslindan estas zonas rboles que comenzarn en la franja de bosques y parques, que protege la ciudad en su circunvalacin, y tendern hacia el centro confluyendo de los correspondientes distritos con parques, bulevares y jardines. Por esta especie de caminos verdes, el aire limpio de los bosques y campos de los alrededores llegar al interior de la ciudad. Adems, cada zona de planeamiento tendr amplias reas verdes y dos o tres parques infantiles.

Para finales del presente siglo, las reas verdes de Mosc aumentarn en un 50 por ciento. En cualquier distrito de la ciudad, la distancia mxima hasta el parque ms prximo no pasar de 1,5 kilmetros.

La plantacin de rboles es un elemento imprescindible en los planes rectores de desarrollo urbano de la URSS.

En muchas ciudades tiene ritmos especialmente altos. As, en Omsk (Siberia), donde en otros tiempos los rboles eran muy escasos y prcticamente no haba flores, ahora son comunes grandes zonas de arbolado y arbustos.

Insistimos, los programas de plantacin de reas verdes forman parte de los planes integrales de urbanizacin.

Para construir viviendas, en Mosc no se eliminan reas verdes. Izda.: Parque Central de Cultura y Recreacin "Gorki". Dcha.: en Kishiniov, lo mismo que en otras ciudades soviticas, funciona un servicio de proteccin del medio ambiente.

Algunos extranjeros, cuando ven, un sbado o domingo, a obreros, estudiantes y amas de casa ocupados en la urbanizacin de patios y parques, sacan la conclusin apresurada de que en la Unin Sovitica se trata de una iniciativa desde abajo, y que el Estado esquiva la solucin de este importante asunto. Pero no es as. Cierto es que la participacin voluntaria de millones de ciudadanos acelera mucho el cumplimiento de los programas en cuestin. Pero los programas de por s son estatales, los trazan entidades estatales especiales y son ellas que se ocupan de su realizacin cotidiana, disponiendo para ello de recursos y maquinaria necesarios. Los ciudadanos les ayudan, pero no las reemplazan. Esta colaboracin tiene una explicacin sencilla: todos los habitantes de la ciudad estn interesados en la plantacin de reas verdes. Y por experiencia saben que su participacin permitir alcanzar resultados prcticos ms rpido.

9. La nueva semblanza de la aldea sovitica

La construccin de viviendas en las zonas rurales es fundamental en todo programa de

desarrollo econmico, trtese de los poblados que se levantan a lo largo del ferrocarril BaikalAmur o en la baha Wrangel (Extremo Oriente sovitico), o del desarrollo integral de la agricultura en la Zona de tierras no negras de Rusia. Hablemos un poco de este ltimo programa.

Es una zona densamente poblada que comprende 29 regiones y repblicas autnomas de la Federacin Rusa. De sus 59 millones de habitantes, 15 son poblacin rural. El programa abarca hasta 1990.

Izda.: ciudad de Navol, recin construida en un desierto del Asia Central. Una piscina.

En qu est el quid del asunto? Casi la mitad de la poblacin rural de dicha zona vive ahora en aldeas que no tienen ms de 200 habitantes. Esa dispersin es uno de los principales obstculos para el progreso cientfico-tcnico en la agricultura, y para el mejoramiento de las condiciones de vida y culturales de los campesinos.

Para 1990 el nmero total de los poblados rurales de la zona disminuir en casi cinco veces. Se ampliarn ms de 29 mil poblados "con perspectivas" (grandes, compactos, situados en lugares desarrollados o por desarrollarse).

Izda.: la nueva ciudad siberiana de Sayansk se levanta en plena taiga. Dcha.: Amursk, del Extremo Oriente, la naturaleza y la ciudad.

El Estado, cuando tom dicha decisin, tuvo en cuenta tanto la perspectiva general del desarrollo socio-econmico de la zona, como la red de poblados ya existente. Se conservarn las aldeas situadas cerca del ferrocarril o la carretera, vitales en el aspecto econmico, con acceso ininterrumpido a los centros de servicios y cuyo nmero de habitantes no disminuye.

Sern modernizadas, en lo cual invertirn recursos tanto el Estado como los koljoses. Asimismo, se conservarn aldeas de valor histrico, arquitectnico y etnogrfico. Estn elaborados los proyectos de acuerdo con las perspectivas de la organizacin y especializacin racionales de la produccin. Los tiene cada uno de los 641 distritos administrativos de la zona. De la edificacin se ocuparn entidades estatales e interkoljosianas. Se fundarn nuevas empresas de casas prefabricadas.

Dmitri Baslov, presidente del Comit Estatal para la Construccin, adjunto al Consejo de Ministros de la Federacin Rusa, dijo sobre el particular:

Como es lgico, se presta mucha atencin los problemas socio-sicolgicos que implica el traslado de la poblacin. Los campesinos, sobre todo los de edad avanzada, estn muy arraigados al terruo. Los grandes cambios alteran mucho el modo de vida, al que estn acostumbrados, y obligan a adaptarse al nuevo ambiente. Investigaciones sociolgicas, sobre la materia, ayudan a conocer las demandas de los campesinos para con el nuevo lugar de residencia. Los resultados de las mismas, se consideran al mximo en la proyeccin y edificacin.

No hace mucho se realiz en Mosc una exposicin de proyectos de viviendas y de edificios de uso cultural y comunal, diseados especialmente para las aldeas de la zona a que nos referimos. Se exhibieron proyectos y maquetas de nuevas casas campesinas. Al objeto de verificarlas en la prctica, se construyen poblados experimentales modelo, uno o dos en cada regin o repblica autnoma de la zona.

Izda.: Bak, capital de la RSS de Azerbaijn. Hace treinta aos en esta ciudad casi no haba zonas verdes. Dcha.: un recinto de Jabrovsk, emporio industrial y cultural del Extremo Oriente sovitico.

Los campesinos que trasladan a un poblado ampliado reciben apartamentos del Estado, en casas construidas de paneles prefabricados y que por su confort, aspecto exterior y dems elementos no se diferencian de las urbanas.

El planeamiento de los nuevos poblados incluye un centro pblico: edificios administrativos,

Casa de Cultura, hotel, escuela, jardines de la infancia, casa-cuna, establecimiento de asistencia mdica, comercios y otros servicios. Alrededor de dicho centro, se sitan barriadas de casas de vivienda construidas en armona con las condiciones- naturales y las tradiciones del lugar. Por eso, los poblados no sern parecidos ni montonos.

Las viviendas tampoco sern de un mismo tipo. Adems de diversas variantes, que ofrece el Estado, los campesinos por su cuenta podrn construir casas particulares o cooperativas.

Para la construccin individual en el campo, el Estado concede un prstamo, a amortizarse en 15 aos (con una tasa de inters del 0,5 por ciento anual), y cubre de su presupuesto el 35 por ciento del costo de las obras.

Grandes koljoses tambin dan prstamos a sus miembros, en condiciones que establecen ellos mismos. Por ejemplo, en la Federacin Rusa algunos koljoses lo hacen por un plazo de hasta 25 aos.

Los que desean construir en cooperativa, pagan la cuota de ingreso que equivale al 30 por ciento del costo de la casa o el apartamento. El resto lo aportan el Banco Nacional (o el de la Construccin) de la URSS o los koljoses que tambin pueden facilitar a la cooperativa un crdito, por lo general, sin intereses y a amortizar en un plazo de hasta 20 aos.

Cada familia que se traslada a un poblado nuevo puede recibir una parcela anexa a su vivienda, de hasta 800 metros cuadrados, o una parcela de rea mayor, pero fuera del poblado.

Construyen los poblados rurales entidades estatales o interkoljosianas. Adems, goza de popularidad el mtodo de edificacin particular, con brigadas especiales que forma para ello el sovjs o koljs de que se trate. As se hace, por ejemplo, en el sovjs Lenin de la RSS de Letonia.

All construyen casas de uno a cinco pisos. Todas tienen gas, calefaccin central, agua caliente y telfono. En el poblado funciona un nuevo comedor pblico, un supermercado, un jardn de la infancia y un centro de servicios. Se han edificado, como experimento, casas de 4 5 habitaciones destinadas a una familia.

Izda.: Sosnovi Bor, una nueva ciudad en la regin de Leningrado. Los arquitectos y constructores procuraron que hiciera honor a su nombre, que quiere decir "Pinar". Dcha.: una tercera parte del territorio de Mosc son reas verdes.

En el campo se construyen ahora, con ms frecuencia, casas de dos plantas. Hacen bastante compactos los poblados y su construccin es econmica. Tienen apartamentos a dos niveles con salida independiente a las parcelas anexas a la vivienda, por lo cual conservan rasgos fundamentales del modo tradicional de vida rural.

Es lgico que los que desean construir casas particulares o en cooperativa no puedan fantasear sin lmites; deben centrarse en los requisitos bsicos del plan rector de edificacin de cada poblado.

El lector no debe pensar que todos los problemas relacionados con la reestructuracin del campo sovitico ya se han solucionado de la mejor manera y por completo. Ni siquiera sobre el papel. Lo confirma, por ejemplo, una conferencia convocada hace poco por el Ministerio de Agricultura de la URSS y el Comit Central del Sindicato de Trabajadores de la Agricultura conjuntamente con la redaccin de la revista "Slskaya nov", cuyo tema fue: la modernizacin arquitectnica de la aldea.

En esa conferencia se plantearon, en forma certera, varias cuestiones de ndole econmica y social.

Por ejemplo, cmo determinar si una aldea tiene o no perspectivas de desarrollo? Hemos hablado de los criterios bsicos al respecto, pero la vida rebasa cualquier esquema, por muy bien pensado y detallado que sea. Cometer errores en estos casos sera imperdonable. Pues una vez clasificados en poblados con perspectiva y no perspectiva de desarrollo en estos ltimos cesa la construccin de viviendas, de centros culturales y servicios, concentrndose todos los esfuerzos en los primeros. Cuando se trata de alguna aldehuela, de la cual la mayora de habitantes se ha trasladado ya a poblados ms grandes, no hay ningn problema. Pero, si se ha incluido, sin suficientes fundamentos econmicos una aldea donde vive y vivir gente en las que carecen de perspectiva? Un nuevo poblado no puede construirse en dos das, pero las condiciones de vida en el viejo se congelan artificialmente por todo un perodo, hasta que se construya uno nuevo o hasta que se enmiende el error cometido.

En la conferencia nadie discuti la idea de que sin la reduccin del nmero de poblados existentes, agrandando los que se escojan, es imposible resolver los problemas econmicos y sociales de la agricultura. Los debates fueron en otro plano: cmo cristalizar esto racionalmente, de la mejor manera.

He aqu lo que se sac en conclusin.

No se puede permitir la liquidacin en masa de los poblados con apresuramientos. Esto traera pocas ventajas y muchas prdidas. Es evidente, que pueden calificarse de carentes de perspectiva, slo aquellos poblados que desaparezcan durante un lustro.

Es necesario formar muchos especialistas en planeamiento distrital. Los agrimensores y arquitectos no pueden prescindir de stos, puesto que la migracin de poblaciones completas es un problema socio-econmico, que exige conocimientos especiales y una slida base cientfica.

Hay que mejorar tambin la estadstica de la poblacin rural y evitar que los mismos poblados figuren, en los censos, como autnomos y a la vez formando parte de otros ms grandes.

El establecimiento rural es parte de un problema general, y hay que concordarlo con el urbano.

No es conveniente imponer al campo un modelo urbano. El confort urbano s, pero sin alejar al campesino de la naturaleza y la tierra.

Por ejemplo, los diseadores ofrecieron al koljs "Mayak", de Moldavia, un magnfico proyecto para un poblado de 13 mil habitantes, de casas de 4 5 pisos. Pero ningn koljosiano manifest el deseo de vivir en ellas, por lo cual el proyecto fue rechazado. Casos anlogos ocurrieron en otras zonas del pas.

En la conferencia se analizaron tambin cuestiones meramente econmicas: cmo disminuir el costo y elevar el ritmo de edificacin en el campo, qu sistema de vas de comunicacin es el indicado, etc. La edificacin experimental se torna a veces demasiado cara para realizarse en serie. Pero la solucin no consiste en renunciar al programa de modernizacin del campo ni en recortarlo, sino en mejorar y abaratar los proyectos, en elevar la eficiencia enfocando de modo

integral todos los problemas relacionados.

La concepcin de "enfoque integral", se encuentra con frecuencia en este folleto y en otros escritos que tratan unos u otros aspectos de la vida sovitica. No es de extraar, puesto que en cualquier cuestin socio-econmica estn concatenados e interrelacionados numerosos elementos. Todo enfoque simplificado, omisin o subestimacin de unos u otros factores, puede traer consecuencias lamentables, independientemente de lo atractivo que sea la misma idea. No es casual que de la modernizacin del campo sovitico, se ocupan economistas y arquitectos, socilogos y estadsticos, ingenieros y agrimensores, especialistas en planificacin y agronoma. Y, naturalmente, los campesinos.

Probablemente, el contenido de este folleto asombre a los lectores que estn acostumbrados a ver la realidad sovitica con ojos, de corresponsales en Mosc, de algunos diarios de Occidente. Pero la cuestin radica en que un mismo hecho puede ser visto de distinta manera.

As un hombre de 40 aos de edad parece muy viejo si lo comparamos a un colegial y casi jovenzuelo si a un jubilado. Mientras que l mismo no se cree ni viejo ni joven. El hecho es uno, que este hombre tiene cuarenta aos, pero todo es cuestin de enfoque.

Del mismo modo puede verse cualquier asunto. Y, claro est, el problema de la vivienda en la URSS. Todo depende con qu se compare y del ngulo de mira.

Si uno posee un palacete o un apartamento de lujo, amortizado ya el crdito, y considera que es un estndar de vivienda existente en el pas donde reside, la situacin de un moscovita le parecer lamentable. Trece metros por persona? No todas las familias poseen apartamentos independientes? Cmo vive la gente?

Pero no todos pueden razonar as, ni siquiera en los pases ms desarrollados. Unos simplemente no tienen donde vivir, a otros les resulta difcil amortizar el crdito, a unos terceros el dueo de casa les volvi a subir el alquiler. Ellos se preguntarn otras cosas. As que existe un pas donde millones de apartamentos distribuyen gratis entre los ciudadanos? Tan slo nueve dlares por alquilar un apartamento moderno? Las viviendas, no se dan a los ms ricos, sino a los ms necesitados?

Otra cosa es si nos sentimos satisfechos con el nivel alcanzado.

Claro que no. Queremos vivir mejor y as ser. En el XI Quinquenio (1981-1985) entrarn en uso otros 10-11 millones de apartamentos. Esas cantidades no se construyen en ningn otro pas del mundo. El ritmo de construccin de viviendas no va a disminuir. Pronto llegar el da en que cada familia sovitica disponga de la vivienda que satisfaga todas las necesidades racionales del hombre.