liderazgo y socialización en enfermería

Universidad Nacional de Entre Ríos

Facultad de Ciencias de la Salud

Perspectivas y Tendencias de la Enfermería

“Liderazgo y Socialización en Enfermería”

Docente de cátedra:Lic. Del Real, Estela

Jefa de Trabajos Prácticos:Lic. López, Cristina

Alumnos:Enf. García, CynthiaEnf. López, Sergio

C. del Uruguay – Entre RíosCiclo Lectivo 2012

LIDERAZGO Y SOCIALIZACIÓN EN ENFERMERÍA Año 2012

Índice

Introducción al liderazgo en enfermería.........................................................................Pág. 3

Acerca de las teorías sobre liderazgo..............................................................................Pág. 4

De lo que implica el liderazgo.........................................................................................Pág. 5

Enfermería y liderazgo....................................................................................................Pág. 6

La socialización como motor de cambio..........................................................................Pág. 8

Consideraciones finales................................................................................................Pág. 10

Bibliografía ..................................................................................................................Pág. 11

Universidad Nacional de Entre Ríos – Facultad de Ciencias de la Salud. Perspectivas y Tendencias de Enfermería

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Introducción al liderazgo en enfermería

Los seres humanos somos sujetos en el cual coexisten dos dimensiones

una biológica y una social. Esta última característica, la de ser sujetos sociales

nos ha llevado desde nuestros inicios a agruparnos con otros sujetos. Y es a

partir de la convivencia en donde se producen relaciones humanas. La

característica particular de este tipo de relaciones es ver cómo y de qué

manera se producen; es decir, en todo momento se dan relaciones de

influencia, un sujeto influenciando a otro y produciendo un efecto muchas

veces buscado. Queremos aclarar porqué usamos el término sujeto y no

individuos. El primero nos remite a pensar en una persona con determinadas

características e historia particular que conforma un grupo mayor de personas,

en esta conformación nada de lo que un sujeto haga o deje de hacer tiene

significado para los demás; mientras que el término individuo representa para

nosotros a una persona sola sin capacidad de inclusión y participación grupal

Presumimos entonces, que en esta unión entre sujetos, existe la figura

de un líder. Es prescindible antes de continuar con el análisis establecer

algunas definiciones acerca del tema.

La Real Academia Española define al líder como “Persona a la que un

grupo sigue, reconociéndola como jefe u orientadora.”1 Esta es una definición

acertada, ya que como dijimos en párrafos anteriores, a partir de las relaciones

humanas entre sujetos que conforman un grupo, la figura del líder es

necesaria. Sin embargo la definición queda muy acotada para nuestros

propósitos y entendimiento del tema. Porque pensar en un líder, implica no solo

reconocerlo como jefe u orientador, hay que hacerlo de manera más abstracta

para poder ver qué cualidades aptitudinales y actitudinales presenta ese líder

para que el resto lo reconozca como tal.

Es evidente que en todo tipo de organización, y más aún en aquellos

lugares en dónde tenga la capacidad de gerencia, el líder debe conocer cuáles

son los motivos del resto del grupo y saber conducirlos en pos de una meta u

objetivo común.

Acerca de las teorías sobre liderazgo

1 http://buscon.rae.es/draeI/SrvltGUIBusUsual?LEMA=l%C3%ADder


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Los estudiosos del comportamiento humano han clasificado las diversas

maneras de liderar en tres grandes categorías; “1) teorías de los rasgos de

personalidad, 2) teorías personales y del comportamiento, y 3) teorías

situacionales. Donnelly, Gibson e Ivancevich sostienen que es posible integrar

hasta cierto punto las teorías de los rasgos de personalidad, las teorías

personales y del comportamiento, para producir el enfoque situacional”2.

En cierto grado existe un leve desacuerdo entre los autores que postulan

con las teorías de los rasgos personales en relación a los aspectos a analizar

de las personas, es decir si solo la personalidad, la inteligencia o ambas. Sin

embargo amén de ello, concuerdan en que si una persona tiene confianza en sí

misma, si es emancipada e ingeniosa será capaz de triunfar en la vida. Por otro

lado, los autores basan sus estudios en los patrones de comportamiento, es

decir lo que el líder hace al momento de desempeñar sus tareas. McMurry

(1958) por su parte se refiere al líder autocrático benévolo capaz de separar

sus sentimientos de los intereses del grupo o la organización, con el objetivo de

dirigir al resto, obviamente sin que ello impida la comunicación entre los

integrantes.

Con respecto a las teorías que fusionan la personalidad y el

comportamiento. Se ha realizado un estudio un tanto interesante en la

Universidad Estatal de Ohio (EEUU), el mismo analizó dos dimensiones de los

líderes en función en diversas organizaciones. Las evaluaciones incluían a sus

subalternos. Luego de un exhaustivo análisis, pudieron aclarar dos aspectos,

por una parte describir las características del comportamiento de los líderes en

cuanto a lo que ellos pensaban cómo debían comportarse en su función y

luego la evaluación hecha a los subalternos en cuanto a lo que pensaban sobre

el comportamiento de sus superiores. El estudio les permitió calificar a los

líderes de acuerdo a las puntuaciones. Aquellos que más puntos favorables

obtenían, denotaban un tipo de líder en el que se puede confiar, que respeta y

tiene en cuenta los sentimientos de sus subalternos, trabajando en conjunto

con los mismos, indicando que las funciones desde ambas partes se

encuentran estructuradas de tal manera lo que permite que el líder alcance las

2 Marcelino Auccasi Rojas, en Liderazgo en Enfermería, disponible en http://europeanleadership.com/wp-content/uploads/2011/01/Liderazgo-en-Enfermeria.pfd, Consultado el 05-06-2012. Pág. 5.


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http://europeanleadership.com/wp-content/uploads/2011/01/Liderazgo-en-Enfermeria.pfd


metas propuestas. Mientras que aquellos con menor puntuación denotaban un

tipo de líder más impersonal al momento de tratar con sus subalternos.

Por último, las teorías focalizadas en lo situacional. Estas hacen hincapié

básicamente en tres aspectos fundamentales, el líder, el grupo y la situación.

Estableciendo cómo y de que manera se “interrelacionan” ambos tres. El

componente que se desarrolla es la influencia ejercidas por las situaciones

dadas que afectan al líder. Consideran al líder como aquél capaz de adecuar

su personalidad a las situaciones que el grupo plantee buscando la manera

correcta de hacer frente a las circunstancias.

Hasta aquí hemos tratado de figurar de manera general cuales son las

características de las teorías del liderazgo. A continuación veremos cuales son

los componentes fundamentales del mismo

De lo que implica el liderazgo

Sea cual fuere la teoría en la que base sus prácticas, los líderes

comparten ciertos atributos que son análogas en todas ellas. Ser líder o liderar

implica poseer una

Visión; es decir, una idea acerca del futuro que le permite a su vez, ver

las posibles oportunidades. Esta resulta en lo que en gestión se denomina

misión, los objetivos. Implica tener la capacidad de poder observar mas allá de

lo que se tiene en frente en pos de beneficio del grupo. A su vez, se necesita

un poder de Influencia; capaz de intervenir en el otro, produciendo un

determinado impacto en los pensamientos de los demás sujetos y también en

sus comportamientos, lo que permite en última instancia una contribución para

la creación de, por ejemplo, nuevas políticas. El líder necesita de motivación

para demostrar que está comprometido con la causa para poder logar la misión

que se propone, y a su vez debe poder propiciar de la misma motivación y

energía a los de su grupo. Esta motivación lleva al compromiso por parte de los

demás integrantes. Otras de las características es la de poder generar un

espacio de confianza hacia el grupo, haciendo claros los objetivos propuestos,

e incluso haciéndolos participe de ellos. Debe tener confianza en aquellos que

lo siguen y por supuesto de las actividades que realizan.


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Liderar implica también la competencia política, esto quiere decir,

poder entender y aceptar todas las posturas de los integrantes del grupo,

observando las repercusiones de los acontecimientos del medio externo

optando por las estrategias más oportunas ante las mismas. Por último, es

necesario que este presente la revisión y cambio, ya que solo a través de ello,

el grupo no tiende a desaparecer o disolverse. Es necesaria la conversión de

los problemas que vallan surgiendo en oportunidades para el cambio y continuo

crecimiento tanto del líder como el grupo en si.

Enfermería y Liderazgo

Hemos tratado de realizar un análisis respecto a las bases conceptuales

de lo que es el liderazgo. Pero a medida que lo hacemos, también nos surgen

una serie de preguntas a las cuales debemos darles respuestas. Pero ello solo

es posible, solo si podemos mirar desde retrospectiva y de manera crítica cómo

se encuentra hoy nuestra profesión, sobre todo en nuestro ámbito de trabajo.

No podemos hacer una generalización, dado que para ello es necesario

conocer de manera directa la situación de colegas en los diferentes puntos de

nuestra región.

Pues bien liderar en enfermería implica no solo basarse en una teoría en

particular o poseer las características definitorias. Es necesario poder hacer

uso de nuestras capacidades cognoscitivas para pensar nuestra profesión de

manera tal de poder llevar a la praxis dichos conceptos, es decir, volverlos

operativos ya que solo a través de nuestros actos seremos reconocidos. Esto

que decimos deviene de la observación directa tanto de nuestras prácticas

como la de colegas. En un sentido general, muchas veces lo que decimos, no

coincide con lo que realizamos. La sociedad ve una profesión ciertamente

dividida, sea por cuestiones personales, de formación e incluso por políticas de

salud externas de nosotros mismos.

Si bien existen organismos que nos representan y nuclean como la FAE,

AEUERA y otros. Seguimos siendo ante la sociedad, aquellos sujetos que solo

realizan medicación o higiene a los paciente. La pregunta es debido a qué.


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Existe la posibilidad entonces de asegurar que la figura de líderes o bien no

existe o aún no ha alcanzado el estatus correspondiente.

Creemos que muchas son las causas que a priori, se encuentran

operando tanto a nivel subconsciente como consciente, las que podrían estar

propiciando semejante contexto. La falta de reconocimiento por los superiores

en cargo, por la sociedad; la poca motivación, remuneraciones que no se

encuentran acordes al trabajo y un sinfín de situaciones que podríamos

numerar. Conforman un aglomerado que conlleva a la no participación en los

diferentes escenarios que nuestra profesión nos ofrece. Sin embargo,

consideramos que el motor de cambio comienza en uno. A través de lo que se

ha denominado liderazgo personal. Es decir, aquel proceso que todos podemos

aprender y más aún desarrollar. Para ello debemos preguntarnos cuál es el

significado de nuestras vidas y poder determinar por qué razón estamos en

donde estamos, en definitiva “El hombre no solamente necesita descubrir algún

propósito para vivir; necesita expresarlo. Si no lo hace o no puede encontrar

propósitos, significados o importancia a lo que hace en la vida, la voluntad de

tener significación se vuelve vaga y nebulosa, y algunas veces se pierde por

completo. Esto podría no ser importante para mucha gente si no están

conscientes de un hecho esencial”3. Esta es la clave en nuestra profesión, para

poder conseguir o ser líderes, el cambio debe venir desde nuestra esencia

interior. Solo con propósitos bien definidos, que podamos afianzar a través de

la labor diaria, dando cuenta de nuestros conocimientos podremos

enaltecernos como los profesionales que somos. Es una labor diaria y hasta

podríamos decir un trabajo de hormiga, en la cual cada una con una

determinada función, colabora con el objetivo de mantener la colonia a través

de las generaciones.

El liderazgo en enfermería se observa de diversas maneras, una es a

través de la gestión de los servicios. En la cual la figura más representativa es

a través de los jefes y supervisores. Y luego de haber analizado los conceptos

acerca de la implicancia del liderazgo, podemos afirmar que más que líderes,

contamos con sujetos provistos de un poder que en ocasiones se figura en

acciones de premio castigo. Parafraseando a Martín Fierro “Los hermanos

3 Ob. Cit. – Pág. 15


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sean unidos, porque esa es la ley primera. Tengan unión verdadera en

cualquier tiempo que sea. Porque si entre ellos se pelean los devoran los de

afuera”, esto es lo que ha venido sucediendo en los últimos tiempo. La falta de

unión y de criterios, ha llevado a que la profesión enfermera vaya perdiendo

espacios. La concentración del “poder” solo en algunas personas no es

favorable. Para dar cuenta de esto que acabamos de decir, vamos a citar a un

estudiante de segundo año de enfermería que también observa lo mismo “No

es para cualquiera la profesión, es mas siendo ya jóvenes, considero que el

poder esta conformado por diferentes individuos, no puede ser manejado por

uno solo. Cada uno tenemos nuestro poder propio, pero lo obtenemos de

nuestro al rededor y uno debe saber como manejarlo, pero solo nunca

podemos y por eso siempre necesitamos la ayuda de aquella persona que

tenemos o al lado”4. Ya desde la formación de profesionales, es necesario ir

fomentando este tipo de actitudes que muchas veces se pierden en el camino.

Mostrar una visión austera hasta casi utópica a los estudiantes no suma a la

profesión, debe ser necesario dar cuenta de nuestra realidad a fin de poder

cambiarla una vez recibidos o desde la misma etapa universitaria.

La socialización como motor de cambio

Habíamos referido al comienzo de este trabajo que los sujetos somos

seres sociables. Entonces podemos decir que a través de este proceso de

socialización es en donde se ponen en juego las capacidades de

reconocimiento con los pares. En una primera instancia se da una socialización

primaria en el seno familiar, donde se adquieren los primeros conocimientos;

luego en la socialización secundaria, es cuando se adquiere el conocimiento

específico de "roles" los que están directamente relacionados con el trabajo.

Gracias a este último proceso, los sujetos llegan a ser lo que los demás

consideran. Esto depende en gran medida del status del cuerpo de

conocimiento de que se trate dentro del universo (simbólico de hecho) en

conjunto con los otros. Es necesario aclarar que la realidad subjetiva de la

sociedad juega un papel muy importante durante el proceso de socialización,

4 E. Orrac – Estudiante de 2º Año, Carrera Licenciatura en Enfermería – FCS-UNER, AÑO 2012.


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puesto que de la relación dicotómica entre el sujeto y la sociedad, resulta la

identidad. Si esta racionalización la llevamos al campo de la enfermería.

Podemos alegar que solo se puede adquirir la identidad profesional, no solo por

el título, si no también cuando los demás vean en mi señales de identidad con

respecto a la profesión. En otras palabras se necesita de la aprobación del

grupo para lograr alcanzar dicha identidad. Por ello “Todas las identidades,

que pueden ser tanto colectivas como individuales, necesitan de un

reconocimiento social para que existan pública y socialmente.”5

En la actualidad, las representaciones sociales acerca de nuestra

profesión se ven sosegadas por ideas reduccionistas y populares sin una

justificación en cuanto a nuestros conocimientos, identidad, e inclusive el rol

que desempeñamos dentro del sistema y equipo de salud. Es cierto que

nuestra historia jugó un papel importante en la conciencia genera de las

personas, de cómo fuimos convirtiéndonos en una profesión autónoma. Han

pasado muchos años y sin embargo no hemos podido alcanzar el lugar que

nuestra profesión se merece en la sociedad y en su imaginario, es por ello

que la socialización va muy ligada a lo que implica el liderazgo tratado en

párrafos anteriores.

Este proceso no solo se da una vez obtenido el título y ya inmerso en la

vida laboral. Es necesario que sea desarrollado, como hemos dicho con

anterioridad, en el seno de la educación formal dentro de la universidad. Esto

evita en parte los conflictos de valores entre la formación como profesionales y

el ambiente de trabajo, con respecto al manejo de habilidades técnicas, la

integración social, que justamente confiere el hospital, la indignación moral de

los alumnos cuando contrastan con la realidad y por supuesto la falta de

capacidad de resolución científica de los problemas que surgen a futuro.

En este sentido podemos decir que a través de la creación de lazos

vinculares, desde temprano. Entre el equipo docente, alumnos y profesionales

que ya se encuentran trabajando. Se podría llegar a lograr cumplir dos

cuestiones fundamentales. Por una parte, afianzarnos a través de la

socialización, lo que llevaría en una segunda instancia a la adquisición de

líderes que tanto hacen falta.

5 Ma. Luisa Rodríguez Camero y otros, “La construcción mediática de la Enfermería”, disponible en http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S1132-12962008000200009&script=sci_arttext, consultado el 05-06-2012.


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http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S1132-12962008000200009&script=sci_arttext


Muy importante también es, repetimos, lograr consolidar nuestra

identidad profesional, hacer claros y visibles nuestros roles dentro del equipo

de salud, y mostrarle a la sociedad, el papel importante que jugamos, como

uno de los pilares mas fuertes de la salud.

Consideraciones Finales

Con mucho esfuerzo hemos tratado de incurrir en una problemática que

nos concierne a todos como enfermeros. Desde el estudiante en su primer año,

hasta aquellos colegas que ocupan cargos públicos. Es de suma importancia

recordar que el liderazgo en Enfermería debe fomentar la realización de las

tareas y cuidados de enfermería tratando de minimizar los riesgos y obstáculos

ante metas previstos en los planes de cuidados, y de igual manera ayudarnos y

evaluarnos con respecto a qué hacemos, cómo lo hacemos, qué decimos,

dónde debemos trabajar con mas fuerzas y tratar de ver las necesidades reales

y potenciales al que nos exponemos en nuestro desempeño profesional y la

búsqueda de alternativas de solución gremiales, institucionales para generar

trabajos mas productivos dentro del contexto en el cual nos desenvolvemos y

no estar ajenos a la globalización creciente que el nuevo mundo nos presenta.

Al igual que en código de ética del CIE al cual adeherimos es necesario

“Fijar normas para la práctica, investigación, formación y gestión de enfermería.

Sensibilizar a los que aprenden sobre la importancia de las asociaciones

profesionales de enfermería, propiciando un espacio digno de enseñanza y

aprendizaje. Ejercer influencia para conseguir condiciones de trabajo, sociales

y económicas equitativas para la enfermería. Elaborar declaraciones de

posición, directrices sobre problemas del lugar de trabajo.”6

Bibliografía

http://buscon.rae.es/draeI/SrvltGUIBusUsual?LEMA=l%C3%ADder

6 Código de Ética del CIE.


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http://buscon.rae.es/draeI/SrvltGUIBusUsual?LEMA=l%C3%ADder


Marcelino Auccasi Rojas, en Liderazgo en Enfermería, disponible en

http://europeanleadership.com/wp-content/uploads/2011/01/Liderazgo-

en-Enfermeria.pfd

Ma. Luisa Rodríguez Camero y otros, “La construcción mediática de la

Enfermería”, disponible en http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S1132-

12962008000200009&script=sci_arttext

Código de Ética del CIE.


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liderazgo y socialización en enfermería

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