LOS HEVES EsERIREN

TEMAS DEL CAMPO

¿Sufre desgaste el suelo?Es indudable que el suelo, en muchos casos,

«no se gasta»; más bien, «se dilapida»,si el agricultor no tiene en cuenta la acciónde ciertos agentes atmosféricos y ejerce sobreél una inadecuada explotación, sin aportarningún reintegro que le conserve, le repare ole mejore.

Un sencillo razonamiento nos aclara un tan-to la cantidad de arios que la Naturaleza em-pleó para formar los suelos cultivables queposeemos en la actualidad.

La constante acción de los distintos facto-res atmosféricos sobre las rocas, las distintastransformaciones geológicas por que atravesóel globo terráqueo y las reacciones de los ele-mentos químicos sobre el mismo, han ido a lolargo del tiempo formando los diversos tiposde suelos que caracterizan la geología actualde nuestro planeta.

No podemos permitirnos que semejante obrade formación del suelo cultivable, en virtudde la cual es posible la vida y la habitabili-dad del mundo, pueda verse comprometidapor la falta de aplicación de una serie demedidas capaces de luchar contra los elemen-tos generadores de la erosión que fatalmentearruina nuestros suelos. Bien merece, pues, lapena analizar la erosión y ver las posiblesmaneras de combatirla.

Erosión, desde el punto de vista de con-. servación del suelo de que es objeto este es-

tudio, es la depresión, desgaste o merma queen la superficie de un cuerpo produce el rocede otro.

Según los efectos causados en el suelo, pue-de ser profunda o laminar. Es profunda cuan-do los darlos quedan grabados en el terrenoen forma de zanjas o cárcavas, y laminarcuando el ataque tiene como consecuencia lapérdida de la capa cultivable del suelo contodos o parte de sus componentes arcilla, li-mos, materia orgánica, etc.

La cantidad de tiempo que tarda en pro-ducirse es la que determina si la erosión hade calificarse de normal o acelerada. Por tan-

to, es normal cuando las devastaciones sonproducidas durante un largo período de tiem-po, y acelerada cuando éstas se producen deuna forma rápida y ostensible.

Los agentes que principalmente producenla erosión son las lluvias y aguas corrientesemanadas de ellas o de otras procedencias, yel viento. Cuando es producida por las llu-vias influye de manera decisiva la menor omayor pendiente del terreno, la velocidad depenetración del agua según la constituciónmecánica del suelo, la protección proporcio-nada por la capa vegetal que en más o me-nos densidad cubra el terreno, etc. El vientotiene importancia solamente en aquellas re-giones donde no hay vegetación suficiente paracubrir el suelo. Esta erosión eólica es carac-terística en tierras áridas y en riberas are-nosas de mares, lagos y ríos, originando du-nas a lo largo de cualquier obstáculo quedetenga la marcha de las partículas de arenay valioso suelo superficial desplazados por elviento, sin perjuicio de transportar masas deestos elementos a gran distancia.

Para complementar este estudio enumera-mos algunos de los factores que favorecen laerosión:

a) Terrenos en pendientes.b) Excesivo laboreo.c) Laboreo siguiendo la máxima pendiente.d) Pastoreo excesivo.e) Tala masiva de árboles.f) Falta de cubiertas vegetales.g) Falta de cubiertas absorbentes (residuos

vegetales, etc.).h) Falta de materia orgánica (estercola-

duras).i) Riadas y avenidas de agua.j) Zonas de lluvias intensas que dan gran

proporción de escurrimiento.k) Falta de encauzamiento de corrientes de

agua.La erosión se puede combatir con unas u

otras medidas, según su clase o según la cla-sificación de los suelos donde se produce, apun-

17

SERVICIO DE EXTENSION AGRÍCOLA

tando a continuación las distintas formas delucha.

Cultivo por surcos de nivel, que como de-fine su título no es otra cosa que el asurcadosiguiendo las curvas de nivel, esto es, en di-rección opuesta a la máxima pendiente. Estemétodo se adapta a terrenos con ligeras pen-dientes.

Cultivo en fajas, pudiendo ser éstas hori-zontales, transversales, de contención o con-tra la erosión eólica.

Construcción de terrazas que puedan inter-ceptar el escurrimiento de las aguas superioresantes de que adquieran excesivo poder erosivoo volumen superior a la capacidad del canalde que consta la propia terraza. Ayudan asi-mismo a conservar la humedad del suelo, yes aconsejable su construcción en terrenos conrespetables pendientes, donde no serían aptoslos surcos a nivel. Las terrazas deberán serde absorción o de desagüe, según la intensi-dad pluviométrica de una zona y la pendientedel suelo que se piense defender.

Abancalados, de los que nada decimos porser de todos conocidos, significando únicamen-te que se prestan en mayores pendientes quelas terrazas.

Plantación de árboles o barreras vegetalesde contención siguiendo las curvas de nivel.

Establecimiento de prados que proporcionenuna tupida cubierta vegetal al suelo.

Incorporación y mantenimiento de materiaorgánica que facilite la penetración del agua.

Protección del suelo con residuos vegetales.Pastoreo y tala racional de montes y la-

deras.Prevención y corrección de cárcavas, inter-

ceptándolas o desviándolas convenientemente.Cuidando evitar las depresiones que se ori-

ginan en los taludes de caminos, veredas, etc.Desviación y esparcimiento del agua arroya-

da, oponiéndole pequeños obstáculos o zanjas.Para la solución de los distintos problemas

técnico-económicos que se suscitan en torno ala erosión, el Estado creó el Servicio de Con-servación de Suelos, así como importantes ayu-das en las que se comprenden subvenciones,anticipos, equipos de trabajo, etc.

Igualmente, el Estado creó el Servicio deExtensión Agrícola, que te facilitará, agricul-tor, cualquier información y ayuda en tornoa evitar la pérdida de los valiosos suelos quela Naturaleza te proporcionó y que tú no de-bes dejar escapar de las manos, para bien detu economía y del país.

JosÉ GARCIA QUINTIANDel Servicio de Extensión Agrícola.

18