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¿Puede ser el paso de la informalidad a la formalidad un motor de la economía?
José Luis Beato GonzálezCOPARMEX Ciudad de México
Los datos…
La economía informal representa entre el 25 y 30% del Producto Interno Bruto del país.
De cada 100 pesos generados por la economía, 75 pesos lo generan el 40% de ocupados formales, mientras que 25 pesos los generan el 60% de ocupados en informalidad
A nivel nacional, alrededor de 14 millones de habitantes trabaja en la “economía subterránea”, como también se le conoce.
El Distrito Federal contribuye con 8.57% del total, siendo así, el mayor generador de informalidad en el país.
De los productos y servicios en la capital del país, seis los vende el comercio informal y sólo cuatro el formal
La informalidad y su complejidad social
La informalidad demanda servicios de seguridad pública,
tránsito, iluminación, electricidad, transporte público y desgaste del
espacio público, mismos que no se retribuyen bajo ningún esquema de
pago de impuestos
El comercio informal es aprobado por 54% de los
habitantes de la Ciudad de México, quienes consideran que fomenta el empleo, combate la
pobreza y abarata los productos (Parametría)
En contraparte, 40% de los capitalinos asegura que esta
actividad trae consigo la ilegalidad, insalubridad y el
caos.
95% de las personas considera que hay mucho comercio
ambulante en el DF, 66% opina lo mismo sobre su delegación y 31% en su colonia; pero menos de la
mitad quieren que los retiren.
La informalidad y su complejidad social
Las cifras nos indican:
Que estamos en deuda con un sector de capitalinos que está desprovisto de servicios y seguridad social
Que podríamos aprovechar de diversas maneras, sus aportaciones al espectro de contribuciones para beneficio de todos
Que estamos, como sectores productivos, desaprovechando opciones de innovación, de nuevos productos y servicios, que la informalidad está ya aprovechando.
Nos ha faltado aportar propuestas reales, simples y políticamente viables, para enfrentar y detener este fenómeno que afecta la competitividad de la Ciudad de México de manera sistemática.
No debemos confundirnos…
La informalidad debe ser abatida a través de entender en
su justa dimensión sus condiciones y favoreciendo
mecanismos que propicien su incorporación a la formalidad.
Quienes están en la economía informal no son criminales. Es gente trabajadora y demandante
de derechos y obligaciones.
La economía ilegal, aquella que se fortalece de productos
provenientes de la piratería o robados, debe ser atacada de manera frontal en todos sus
canales de distribución a través de las instancias judiciales con las que el Gobierno Federal y de la
Ciudad, cuenta.
Quienes están en la economía informal, merecen un reordenamiento legal con un verdadero sentido de crecimiento y desarrollo económico.
¿Qué proponemos?
1. Censo de la informalidad en la #CDMx, para:
• Conocer con exactitud su alcance real. • Generar un sistema de "cuadrantes” (similar al
operado por áreas de seguridad pública) para establecer semáforos que nos indiquen en dónde avanza con mayor celeridad la informalidad.
• Identificar incentivos más eficaces.
2. Impuesto único para seguridad social
• Sencillo de tributar (cuota única con respecto a sus percepciones).
• Para acceso a la atención en las instituciones de seguridad social del Estado (similar al Seguro Voluntario que hoy ofrece el IMSS).
• Con capacidad de acceso a créditos.
• Incentivo de bajo costo y con gran capacidad de contribución general.
3. Que las Delegaciones tomen responsabilidad en la solución
Ya que las Delegaciones Políticas en el DF han fomentado la proliferación de la informalidad a cambio de beneficios económicos y políticos, deben ser los primeros en propiciar modelos de inclusión, capacitación, identificación de vocaciones bajo una lógica metropolitana y procesos productivos locales para innovar y dar valor agregado, permitiendo detonar la economía local, con la guía y estructura de la SEDECO.