miguel-a. “la vela en el vaticano”. vaya por delante que, aún sintiéndome católico,...

7
Miguel-A. La vela en El Vaticano”

Upload: mariangela-orihuela

Post on 23-Jan-2016

214 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Miguel-A. “La vela en El Vaticano”. Vaya por delante que, aún sintiéndome católico, utilizaría un preservativo cuando me hiciera falta. En torno al tema,

Miguel-A.

“La vela en El Vaticano”

Page 2: Miguel-A. “La vela en El Vaticano”. Vaya por delante que, aún sintiéndome católico, utilizaría un preservativo cuando me hiciera falta. En torno al tema,

Vaya por delante que, aún sintiéndome católico, utilizaría un preservativo cuando me hiciera falta. En torno al tema, hay un falso debate sacado a la luz para denostar a la iglesia católica, por parte de quienes ni saben lo que es la iglesia, ni les importa un rábano cuanto diga.

Es muy cierto que los jerarcas católicos andan desfasados en ésta y en otras materias. Pero no es menos cierto que hablan de ideales adecuándolos a su doctrina. En definitiva, hablan de un ideal… que, aun siendo católico puedes seguir, o no seguir.

La viñeta es humor. Lo incluyo aquí sin más intención que la humorística.

Page 3: Miguel-A. “La vela en El Vaticano”. Vaya por delante que, aún sintiéndome católico, utilizaría un preservativo cuando me hiciera falta. En torno al tema,

¡Hola, Padre Fulgencio! ¿Se acuerda usted de mí?

Usted nos casó a mi esposo y a mí hace cinco

años.

¡Ah, sí! El último mes que estuve de sacerdote en la parroquia de Santa Catalina. Perdóname hija, ya no recuerdo tu nombre. Pero,

dime, hija, ¿cómo te va en el matrimonio?.

Page 4: Miguel-A. “La vela en El Vaticano”. Vaya por delante que, aún sintiéndome católico, utilizaría un preservativo cuando me hiciera falta. En torno al tema,

Me llamo Araceli. Nuestro matrimonio va un poco

decepcionante. Pepe y yo nos llevamos bien, pero aun no hemos conseguido tener

hijos. ¡Y eso se echa mucho de menos en una pareja joven,

como nosotros!.

¡Ah, sí! ¡Araceli… García! Siento lo de tu matrimonio. Sí, la falta de

hijos se siente, de casados. Veré lo que puedo hacer. El próximo mes, voy al Vaticano. Ya le pondré una

vela a un santo famoso que hay allí, y le pediré fertilidad para vosotros.

Page 5: Miguel-A. “La vela en El Vaticano”. Vaya por delante que, aún sintiéndome católico, utilizaría un preservativo cuando me hiciera falta. En torno al tema,

Y pasaron las horas… los días… y los años…

Casi siete años después, los protagonistas de esta historia volvieron a encontrarse. En esta ocasión, al contrario que la vez anterior, fue el Padre Fulgencio quien se dirigió a Doña Araceli.

Page 6: Miguel-A. “La vela en El Vaticano”. Vaya por delante que, aún sintiéndome católico, utilizaría un preservativo cuando me hiciera falta. En torno al tema,

¡Hola, Señora Araceli! ¿Cómo está usted? ¿Ya tienen

hijos en el matrimonio?.

¡Sí, hijos, sí! Primero, vino el mayor… luego, los mellizos… después, la niña…

más tarde, las gemelas… a continuación, el pequeño… y ahora estoy embarazada con trillizos… Y, para colmo, mi esposo

no puede ayudarme, porque se ha marchado a Italia…

Page 7: Miguel-A. “La vela en El Vaticano”. Vaya por delante que, aún sintiéndome católico, utilizaría un preservativo cuando me hiciera falta. En torno al tema,

¡Ay, Italia…! ¡Bellísima, Italia…! Roma, ciudad eterna… el

Vaticano… la capilla Sixtina… los frescos de Miguel Ángel. ¡Una

preciosidad…! Pero dígame, usted, ¿qué hace su esposo en Italia?.

¡¡¡Ha ido a ver si puede apagar la puta

vela!!!.