oración a santa greta

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5/21/2018 OracinaSantaGreta-slidepdf.com http://slidepdf.com/reader/full/oracion-a-santa-greta 1/2 (Hospital, sala de espera. Hombre de edad media espera a ser pasado a cirugía, suda, nervioso, prende la grabadora que trae en la mano) Allá el suero, acá el silencio que gotea y la camilla con mi cuerpo, en el centro expuesto, casi palpitando: mi sexo, rosado, descarnado. Babeo cada pensamiento y la sala se va dilatando, las baldosas expanden, todas amorfas, casi son una boca con millares de dientes que se burla de la condición de un tal Felipe Rosas Toro, eso dice la tablilla preliminar a mis pies, supongo que será el nombre del próximo cadáver, igual ya iba muerto. ¿Y sí hoy me llamo Greta? ¡Como deseo esto! (Tiembla saliendo de la ilusión, pausa, sonríe)¡Santa Greta de las vaginas deseadas y jamás concedidas!(Pausa)Me molesta la gente, siempre suponen jugar a la ruleta con los nombres, todo es fortuito, alegórico, ruin, casi nadie nombra a otro con convicción, es más ¿por qué mierdas uno no escoge el nombre?. Sé que mi madre me parió pero ¿qué iba saber ella de lo que soy yo?. Mi nombre, mi casa, mi obituario. G-R-E-T-A, (se saborea) Lo repito tantas veces que se mengua, parecido a cuando se ora, se aplasta, se convierte en imperceptible como si hubiese estado ahí siempre. (Pausa la grabadora, tose, reanuda la grabación)Aún no amanece y siendo honesta no quiero mirar el reloj, es agradable la sensación de no saber a qué horas se muere, me hace sentir como sí no se planease nada y llegara súbita, milagrosamente (Ríe) No voy a sangrar más de esta noche, nadie lo supo, nadie lo sabe, sí, lo sabrán, lloverá y todos seremos inocentes, libres de escupir al mundo, de cultivar de nuevo la inocencia, de dejar de taladrar pregones y culpas en las frentes de infantes vejados… cuando soy él sigo pesado, arrastrando los pies, gritando desde las fauces del estomago, me hago pequeño y le suplico al Cristo de la pared, lo juró le supliqué pero el sólo tenía la cabeza gacha y miraba a otro lado, me rechazó, no me salvó, le asqueé. La catequesis sólo es otro torneo de caza. Nunca me confesé porque para él no fue pecado. Muérdome la lengua, anacrónica manera de huir. Seré bastante piadosa, la autoflagelación lleva a la redención. Otros empiezan por los tacones, las hormonas, es mejor arrancar el problema de raíz, “quiero unos labios finos, dignos de ser besados”, le diré al médico antes de perder la conciencia. ¡Ábranse las bocas que morderé, quién no me sujete perderá el tiempo!. (Pausa) ¿Cuánto más tengo que esperar? ¿Nadie entiende la apabullante necesidad de mutar? Continúa el frenesí de camillas, danzan por doquier, no las veo pero las escucho y sé que otros me tomaron ya ventaja, que ya migraron al sur de la existencia, ¿cuánto más tengo que esperar? ¡Nace ya fulminante hembra! Germina histérica y brutal, devora las rosas, el toro y por supuesto a Felipe, que no quede experiencia humana más que tus inglés reparadas… (Llaman a Felipe para conducirlo a cirugía)(Pausa) Amén. (Apaga la grabadora, suspira, se santigua y sale). Lucía Orozco.

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(Hospital, sala de espera. Hombre de edad media espera a ser pasado a ciruga, suda, nervioso, prende la grabadora que trae en la mano)All el suero, ac el silencio que gotea y la camilla con mi cuerpo, en el centro expuesto, casi palpitando: mi sexo, rosado, descarnado. Babeo cada pensamiento y la sala se va dilatando, las baldosas expanden, todas amorfas, casi son una boca con millares de dientes que se burla de la condicin de un tal Felipe Rosas Toro, eso dice la tablilla preliminar a mis pies, supongo que ser el nombre del prximo cadver, igual ya iba muerto. Y s hoy me llamo Greta? Como deseo esto! (Tiembla saliendo de la ilusin, pausa, sonre)Santa Greta de las vaginas deseadas y jams concedidas!(Pausa)Me molesta la gente, siempre suponen jugar a la ruleta con los nombres, todo es fortuito, alegrico, ruin, casi nadie nombra a otro con conviccin, es ms por qu mierdas uno no escoge el nombre?. S que mi madre me pari pero qu iba saber ella de lo que soy yo?. Mi nombre, mi casa, mi obituario. G-R-E-T-A, (se saborea) Lo repito tantas veces que se mengua, parecido a cuando se ora, se aplasta, se convierte en imperceptible como si hubiese estado ah siempre. (Pausa la grabadora, tose, reanuda la grabacin)An no amanece y siendo honesta no quiero mirar el reloj, es agradable la sensacin de no saber a qu horas se muere, me hace sentir como s no se planease nada y llegara sbita, milagrosamente (Re) No voy a sangrar ms de esta noche, nadie lo supo, nadie lo sabe, s, lo sabrn, llover y todos seremos inocentes, libres de escupir al mundo, de cultivar de nuevo la inocencia, de dejar de taladrar pregones y culpas en las frentes de infantes vejados cuando soy l sigo pesado, arrastrando los pies, gritando desde las fauces del estomago, me hago pequeo y le suplico al Cristo de la pared, lo jur le supliqu pero el slo tena la cabeza gacha y miraba a otro lado, me rechaz, no me salv, le asque. La catequesis slo es otro torneo de caza. Nunca me confes porque para l no fue pecado. Murdome la lengua, anacrnica manera de huir. Ser bastante piadosa, la autoflagelacin lleva a la redencin. Otros empiezan por los tacones, las hormonas, es mejor arrancar el problema de raz, quiero unos labios finos, dignos de ser besados, le dir al mdico antes de perder la conciencia. branse las bocas que morder, quin no me sujete perder el tiempo!. (Pausa) Cunto ms tengo que esperar? Nadie entiende la apabullante necesidad de mutar? Contina el frenes de camillas, danzan por doquier, no las veo pero las escucho y s que otros me tomaron ya ventaja, que ya migraron al sur de la existencia, cunto ms tengo que esperar? Nace ya fulminante hembra! Germina histrica y brutal, devora las rosas, el toro y por supuesto a Felipe, que no quede experiencia humana ms que tus ingls reparadas (Llaman a Felipe para conducirlo a ciruga)(Pausa) Amn. (Apaga la grabadora, suspira, se santigua y sale).Luca Orozco.