p14 estudio panorámico de la biblia: 2 crónicas
TRANSCRIPT
2
C
R
Ó
N
I
C
A
ESTUDIO PANORÁMICO DE LA BIBLIA
Un estudio de los 39 libros del
Antiguo Testamento y 27 libros del
Nuevo Testamento en 66 semanas
2 CRÓNICAS
LOS LIBROS DEL A.T.
Génesis
Éxodo
Levítico
Números
Deuteronomio
Josué
Jueces
Rut
1 Samuel
2 Samuel
1 Reyes
2 Reyes
1 Crónicas
2 Crónicas
2. Los Libros Históricos: 12 libros
3. Los Poéticos: 5 libros
EL A.T. SE DIVIDE EN:
1. El Pentateuco: 5 libros
4. Los Profetas Mayores: 5 libros
5. Los Profetas Menores: 12 libros
1. Tiempo de Afianzamiento (3 libros)
Josué, Jueces, Rut
LOS LIBROS HISTÓRICOS
2. Tiempo de Los Reyes (6 libros)
1 y 2 de Samuel, Reyes y Crónicas
3. Tiempo después del Exilio (3 libros)
Esdras, Nehemías, Ester
Cita Célebre“Reyes da la historia de la nación desde
el punto de vista del trono, mientras que
Crónicas lo hace desde el punto de
vista del altar. En Reyes el centro de la
narrativa es el palacio, en Crónicas lo
es el templo. Reyes nos da la historia
política de la nación, Crónicas nos da la
historia religiosa de ella”
J. Vernon McGee
NOMBRE DEL LIBRO
Hebreo: Divre Ha Yamim Bet –
“Acontecimientos de los días B”
Versión LXX: Paraleipomenon –‘Las cosas omitidas’ …de los reyes de Judá’
El nombre de 'Crónicas' fue sugerido
por Jerónimo, al traducir la Biblia al latín,
para representar adecuadamente la
designación hebrea del libro.
AUTOR: La tradición hebrea dice que
Esdras escribió 1 y 2 de Crónicas, pues
tienen el mismo estilo que el libro de
Esdras.
PROPÓSITO: Escribir la historia del pueblo
de Dios a la luz del tiempo posterior al exilio
babilónico. Se enfoca solamente en Judá.
ESTILO: Narrativo histórico
FECHA: Alrededor del 400 al 300 a.C.
EL LIBRO DE 2 CRÓNICAS
DIVISIONES DEL LIBRO DE 2
CRÓNICAS
“Hicieron lo recto delante de los
ojos del Señor su Dios”
“Hicieron lo malo ante los ojos
del Señor su Dios”
“Hizo lo malo ante los ojos del
Señor su Dios, más que todos
los que reinaron antes de él”
Todos los reyes del norte fueron malos. En el reino
del sur hubo reyes malos, muy malos y buenos
SUCESIÓN DE REYES
X
Y
Z
REYES EN 2 CRÓNICAS
Roboam
Abías
Asa
Josafat
Joram
Ocozías
Atalía
Joás
Amasías
Uzías
Jotam
Acaz
CautiverioAsirio
722 a.C.
Ezequías
Manasés
Amón
Josías
Joacaz
Joacim
Joaquín
Sedequías
Cautiverio 586 a.C.
Salomón
CONTENIDO DE 2 CRÓNICAS
1-9 Reinado de Salomón
21-28 Reinados de Joram a Acaz
17-20 Reinado de Josafat
10-16 Reinado de Roboam a Asa
29-32 Reinado de Ezequías
33-35 Reinados de Manases a Josías
36 Reinado de Joacaz hasta laCautividad en Babilonia
PARTE 1
Capítulos 1-9
El Reinado de Salomón
Salomón Edifica y Dedica el Templo
Pacto de Dios con Salomón
Fama y Riqueza de Salomón
No habrá otro rey
en la historia que se le compare
Dios se aparece a Salomón en
sueños, ofreciéndole cualquier
cosa que pida. Él pudo pedir
riquezas o poder, pero pidió sa-
biduría. Dios se la concedió jun-
to con el poder y las riquezas
que no pidió.
(1) Sabiduría y Riquezas de Salomón
No hubo otro rey tan rico como él. El único rey que
supera a Salomón es el Señor Jesús, de quien
Salomón es una figura y tipo, a quien realmente
apuntaba.
Salomón entendió la magni-tud de la tarea que tenía.
David preparó toda la mate-ria prima, los obreros y los planos para la construcción del templo.
(2-7) Construcción del Templo
Sabía que los cielos no pueden contenerlo y mu-cho menos un templo hecho por manos humanas.
Se describe la gloria y la magnificencia del
templo en todos sus detalles. El cronista intenta
recrear como era el templo para que sus oyentes
que vol-vieron del exilio babilónico pudieran
visualizarlo.
El arca fue traída, la gloria de Dios llenó el lugar, tanto que los sacerdotes no pudieron estar de pie para ministrar.
Todo el oro y el mobiliario no significaban nada si la pre-sencia de Dios no estaba allí
(2-7) Construcción del Templo
Salomón dedicó el templo con una oración y re-cordó las misericordias de Dios hacia su pueblo, cuando este se volvía arrepentido hacia Él.
“Señor y Dios, ¡no rechaces a tu ungido! ¡Acuér-date de tu gran misericordia para con David, tu siervo!” (2 Cr 6:42).
¡Dios no va a romper su palabra! Sí Él pro-metió perdonarnos a través de Jesús, así lo hará.
La única razón por la que Dios nos perdona, es porque puso nuestros pecados sobre Jesús y una vez que murió por nosotros, su sacrificio fue suficiente para pagar nuestra deuda.
(2-7) Construcción del Templo
Dios contestó la oración de Salomón, con la promesa de escuchar a su pueblo y perdonarlo si venía a Él arrepentido.
“Si mi pueblo, sobre el cual se invoca mi nombre, se humilla y ora, y busca mi rostro, y se aparta de sus malos caminos, yo lo escu-charé desde los cielos, per-donaré sus pecados y sanaré su tierra”.
(2 Crónicas 7:14)
La reina de Sabá escucho de su sa-biduría y del esplendor de su reino.
El templo fue el principal logro del reinado de Salomón. Además el cronista enumera las ciudades que edificó, batallas que ganó, fiestas que guardó, y como su fama se extendió por doquier.
(8-9) Riqueza y Fama de Salomón
La reina le dijo: “No podía creer lo que me conta-ban, hasta que vine y lo vi con mis propios ojos. Y lo cierto es que ni siquiera me habían dicho la mitad de tu gran sabiduría. ¡Tu fama excede a todo lo que yo había oído!” (2 Cr 9:6).
PARTE 2
Atalía Usurpa el Trono de Judá
Capítulos 10-23
La División del Reino con Roboam
Los Primeros Reyes Malos
Los Reyes Buenos: Asa y Josafat
Jeroboam lideró una rebelión y el rei-no fue dividido permanente en dos.
Roboam hijo de Salomón fue arro-gante, al seguir el mal consejo de sus jóvenes amigos, en lugar del sabio consejo de ancianos de Salomón.
(10-16) De Roboam a Asa
Roboam trató de hacer lo correcto si-guiendo las instrucciones del Señor respecto a recibir a los levitas que dejaron la falsa religión instituida por Jeroboam.
Roboam hizo lo malo delante de Dios y lo siguió su hijo Abías quien le ganó una batalla a Israel.
Cuando los etíopes salieron contra Judá con un gran ejército, Asa clamó a Dios y Él le dio a Judá la victoria.
Asa derribó los ídolos de madera sa-grados, y llamó al pueblo a darle el culto apropiado a Dios.
(10-16) De Roboam a Asa
Asa confió verdaderamente en el Señor cuando fue advertido a mantener la confianza en Dios.
“El Señor estará con ustedes, si ustedes están con él. Si lo buscan, lo hallarán; pero si lo dejan, también él los de-jará. Israel pasó mucho tiempo sin un Dios verdadero, sin sacerdote que los instruyera, y sin ley; pero cuando en su angustia se volvieron al Señor, Dios de Israel, lo buscaron, y lo hallaron” (2 Cr 15:2b-4)
En el año 36 de su reinado, Israel fue a la guerra contra Judá, pero en lugar de clamar otra vez a Dios, Asa hizo un tratado con los asirios. Judá ganó la batalla física, pero Asa perdió su batalla espiritual.
Asa comenzó bien, pero con el tiempo se alejó de Dios.
(10-16) De Roboam a Asa
“Los ojos del Señor están contemplando toda la tierra, para mostrar su poder a favor de los que mantienen hacia él un corazón perfecto. Pero en este caso tú has actuado como un necio. Por eso, de ahora en adelante te verás envuelto en más guerras”(2 Cr 16:9)
El cronista muestra que Josafat fue un buen rey, y su fama se extendió por toda la región (2 Cr 17:10-11).
Aunque Asa derribó los lugares altos, estos se reconstruyeron de nuevo y Jo-safat tomó medidas para derribarlas de nuevo.
(17-20) El Reinado de Josafat
Su gran error fue su alianza con el malvado Acab.
Josafat mantuvo su confianza en Dios, orando al Señor y creyendo que Dios sería fiel a sus pro-mesas y así lo fue. Eventualmente los lugares al-tos se reconstruyeron de nuevo, y una vez más hubo necesidad de derribarlos, pero sería des-pués del rey Josafat.
Joram abandonó completamente al Señor. Era tan malo que cuando murió, la gente ni siquiera lo lloró.
Joram a diferencia de su padre y abuelo, no confiaba en el Señor y siguió los caminos de los reyes de Israel, es decir, fue un apóstata.
(21-23) Reyes y Reina Malvados
Ocozías su hijo toma el poder y es asesinado por Jehú quien exterminaría a la casa de Acab.
Atalía, esposa de Joram, y madre de Ocozías u-surpa el trono y asesina a todos sus nietos, ex-cepto uno, pues pertenecía a la familia de Acab y quiso destruir al linaje de David.
PARTE 3
Cuatro Reyes Buenos: Joás, Amasías, Azarías y Jotam
Capítulos 24-36
El Reinado de Ezequías
Los Últimos Reyes y el Cautiverio Babilónico
A la muerte del sacerdote Joiada se volvió un apóstata e incluso asesino a Zacarías, hijo de Joiada, por que lo llamó al orden.
Joás fue un reformador, reconstru-yó el templo, y restableció el culto en Judá. Hizo lo recto hasta que murió el sacerdote Joiada.
(24-28) 4 Reyes Buenos y 1 Malo
Amasías, también comenzó bien, pero su corazón no fue leal a Dios. Fue un buen político y militar, pero no evitó la vuelta de los dioses falsos y un profeta de Dios tuvo que denunciarlo.
Jotam, cogobernó con su padre Uzías y fue un buen rey en su propio derecho. Aunque el pueblo que el lideró siguió pecando contra Dios, él hizo lo recto delante de los ojos de Dios.
Dios bendijo a Uzías (Azarías) y lo prosperó. Asumió el rol de sacerdote y ofreció incienso en el templo. Dios lo golpeó con lepra y quedó leproso por el resto de su vida.
(24-28) 4 Reyes Buenos y 1 Malo
Acaz, aunque fue un gobernador eficaz, era un apóstata y pagano en el verdadero sentido de la palabra, fue un rey malo para Judá.
Ezequías se enfrentó al rey de Asiria y Dios lo guardó.
Durante la caída de Israel, reinaba Ezequías en Judá. Hizo reformas importantes
(29-32) El Reinado de Ezequías
“Así lo hizo Ezequías en todo Judá, y llevó a cabo lo bueno, lo recto y lo verdadero delante del Señor su Dios. En todo lo que emprendió para el servicio del templo de Dios, buscó a su Dios, y lo hizo de todo corazón y de acuerdo con la ley y los mandamientos, y fue prosperado” (2 Cr 31:20-21)
Fue en esos 15 años de gracia donde engendró a Manasés.
Ezequías enferma de muerte y le pide a Dios no morir. Dios le concede 15 años más de vida.
(29-32) El Reinado de Ezequías
Ezequías recibió la visita de emisarios del rey de Babilonia preguntando por su salud. El rey le mostró toda la riqueza y la gloria de Judá. Con esta información años más tarde invadie-ron Jerusalén. 29 años gobernó Ezequías en Judá, lo sucedió en el trono su hijo Manasés de 13 años.
Al final de sus días Manasés
se arrepintió. Después de una
derrota ante los asirios, se hu-
milló delante Dios.
Manasés reinó 55 años. Pro-
vocó la ira de Dios por medio
del sacrificio humano y todo
tipo de culto pagano.
(33) El Reinado Perverso de Manasés
“En su angustia oró al Señor su Dios, y se humilló en la
presencia de Dios. Dios oyó su oración y permitió que
volviera a Jerusalén y recuperara su reino. Así Manasés
reconoció que el Señor era Dios.” (2 Cr 33:12-13)
En su tiempo redescubrie-ron el libro de la Ley y Jo-sías rasgó sus vestiduras.
Josías fue el último refor-mador en Judá. Él buscó al Señor, derribó los ídolos, y reparó el templo.
(34-35) Las Reformas de Josías
Este hallazgo desencadenó las reformas y vol-vió a celebrar la Pascua y otras fiestas.
Debido al arrepentimiento de Josías Dios re-trazó el cautiverio de Judá en Babilonia.
El templo y los palacios fueron quemados; el muro
de Jerusalén fue derribado. Toda la ciudad quedó
en ruinas durante 70 años (2 Cr 36:21).
La narración rápidamente
pasa por los reinados de
Joacaz, Joacim, Joaquín
y Sedequías, quienes se
rebelaron contra Dios y
por eso trajo a los babilo-
nios para destruirlos.
(36) La Caída de Jerusalén
Finalmente, Dios levantó después a Ciro el Persa
quién restauró a los judíos en su tierra.
“Así dice Ciro, rey de los persas: El Señor, el Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra, y me ha ordenado edificarle un tem-plo en Jerusalén, que está en Judá. Si hay entre ustedes alguien que sea de su pueblo, que el Señor su Dios lo acompañe, y vuelva a Jerusalén”. (2 Crónicas 36:23)
Sin embargo, esto no es el final. El libro de Cróni-cas puede haber terminado, pero la Biblia conti-núa, el pueblo de Dios soportó y la fidelidad de Dios se dio a conocer.
La historia de Adán hasta el cautiverio babilónico es deprimente: todo ha quedado destruido.
Dios cumplió su promesa: restauró a su pueblo en la tierra, restauró sus corazones para adorar, y les daría al último rey: Jesucristo.
Conclusión
Jesús es el cumplimiento de todas esas prome-sas hechas a David.
Sí aun no lo conoces, ven y recíbelo.