patricia fuentes, salvar la nacion (reseña)

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Patricia Fuentes, Salvar La Nacion (Reseña)

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  • Este documento est disponible para su consulta y descarga en Memoria Acadmica, el repositorio institucional de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educacin de la Universidad Nacional de La Plata, que procura la reunin, el registro, la difusin y la preservacin de la produccin cientfico-acadmica dita e indita de los miembros de su comunidad acadmica. Para ms informacin, visite el sitio www.memoria.fahce.unlp.edu.ar

    Esta iniciativa est a cargo de BIBHUMA, la Biblioteca de la Facultad, que lleva adelante las tareas de gestin y coordinacin para la concre-cin de los objetivos planteados. Para ms informacin, visite el sitiowww.bibhuma.fahce.unlp.edu.ar

    LicenciamientoEsta obra est bajo una licencia Atribucin-No comercial-Sin obras derivadas 2.5 Argentina de Creative Commons.

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    Para ver la licencia completa en cdigo legal, visite http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.5/ar/legalcode.

    O enve una carta a Creative Commons, 559 Nathan Abbott Way, Stanford, California 94305, USA.

    2006-2007, no. 32-33, pp. 182-186.

    Sessa, Leandro

    Resea

    Trabajos y Comunicaciones (2a poca)

    Cita sugeridaSessa, L. (2007) [Resea sobre] Patricia Funes, Salvar la Nacin.Intelectuales, cultura y poltica en los aos veinte latinoamericanos, Buenos Aires, Prometeo, 2006, 442 pginas [En lnea]. Trabajos y Comunicaciones, (32-33). Disponible en: http://www.fuentesmemoria.fahce.unlp.edu.ar/art_revistas/pr.3340/pr.3340.pdf

    Patricia Funes, Salvar la Nacin.Intelectuales, cultura y poltica en los aos veinte latinoamericanos, Buenos Aires, Prometeo, 2006, 442 pginas

    www.memoria.fahce.unlp.edu.arwww.memoria.fahce.unlp.edu.arwww.bibhuma.fahce.unlp.edu.arhttp://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.5/ar/http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.5/ar/legalcode

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    Reseas bibliogrficas

    (5) Garca Mac Gaw, C. Roma: La crisis del siglo III y el Modo de Produccin Tributario", en: Anales de Historia Antigua, Medieval y Moderna, N 35-36, Universidad de Buenos Aires, Buenos Aires, 2004.

    Patricia Funes, Salvar la Nacin.Intelectuales, cultura y poltica en los aos veinte latinoamericanos, Buenos Aires, Prometeo, 2006, 442 pginas

    Leandro SessaFAHCE

    UNLP

    Sin duda alguna lo que se hundi era el sistema mundial liberal y la sociedad burguesa decimonnica como norma a la que, por as decirlo, aspiraba cual-

    quier tipo de civilizacin Eric Hobsbawm.

    No es que tengamos brjula propia, es que hemos perdido la ajena. Pedro Henriquez Urea.

    Era Sarmiento la encarnacin de Quetzalcoatl? Esta asociacin propuesta por el mexicano Jos Vasconcelos slo puede entenderse en el contexto de las parti-cularidades que presenta el pensamiento de los intelectuales latinoamericanos en los aos veinte, dcada en la que la cuestin de la Nacin result ser un tpico recurrente, instalado en el centro de la reflexin. En ese momento histrico se sita el libro de Patricia Funes, Salvar la Nacin. Intelectuales, cultura y poltica en los aos veinte latinoamericanos. Este libro no pretende realizar una mera resea de ciertas obras, ni se pretende tampoco dar cuenta de la totalidad de la produccin desarrollada en torno del tema. Lejos de intentar rastrear una esencia oculta tras las diferentes visiones cursadas acerca de la cuestin nacional, el trabajo de Funes est ordenado a partir de algunos ejes que permiten tanto contrastar como encontrar relevantes puntos en comn en las ideas de los numerosos intelectuales latinoamericanos que se plantearon la pregunta acerca de lo nacional en los inicios del siglo pasado. Como antecedente inmediato de la indagacin que realiza la autora,

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    Reseas bibliogrficas

    se encuentra el estallido de la Primera Guerra Mundial, que produjo una crisis profunda y fundamental en las entonces inconmovibles certezas decimonnicas sobre el poder transformador de la Razn y acerca de la inevitabilidad del progreso que prometa el modelo civilizatorio de la sociedad europea. En este contexto, el problema de la Nacin adquiri una mayor intensidad, al situarse alrededor de las preguntas sobre la identidad, que parecan necesarias para orientarse ante la prdida de la brjula, sealada por Henriquez Urea. As, en los aos veinte, la mayora de los intelectuales latinoamericanos propusieron redefinir las fronteras de las naciones, apelando a representaciones planteadas en el campo de la cultura: no se trataba de discutir problemas lim-trofes pendientes, sino de reflexionar acerca de qu era la nacin y a quines inclua. De esta manera se dejaban a un lado los criterios liberales herederos de la ilustracin, que conceban a la nacin como una unin voluntaria de individuos libres, vinculada a la construccin del Estado y la ciudadana A lo largo de su libro, Funes ofrece algunos argumentos que cruzan en forma transversal las ideas acerca de la Nacin, y que permiten identificar rasgos comunes del pensamiento de los aos veinte, a pesar de las particulari-dades de intelectuales con ideas tan diversas como Leopoldo Lugones o Jos Carlos Maritegui.(1) En primer lugar, todos los pensadores analizados comparten un sentimiento de incertidumbre, generado por la prdida de la referencia de las ideas eurocntricas. Las influencias son ahora eclcticas y van desde Spengler y Einstein a Rolland o Lenin. Aunque tambin europeos, estos pensadores tienen en comn una mirada que vislumbra la decadencia de su propia civilizacin y la posibilidad de concebir la creacin de lo nuevo desde sus mrgenes. Para los intelectuales latinoamericanos, se abra -as- un horizonte de mayor confianza en la originalidad de sus ideas, que les permita observar con cierto optimismo la hora de la joven Amrica. Existe, adicionalmente, en las personalidades que rastrea Funes, una nueva aproximacin sobre el lugar que ocupa el intelectual en la sociedad. Es, por ejemplo, a partir del movimiento reformista, cuando la figura del intelectual comienza a ser concebida como la de un trabajador que deba asumir un mayor compromiso, vinculado a la prctica social. De all que Vasconcelos viera en Sarmiento (en tanto intelectual y poltico), un modelo y un referente de ese programa. La asociacin con Qutzalcoatl, emblema de la tradicin azteca que simbolizaba la ciencia y la virtud, ilumina otro rasgo comn establecido por los intelectuales latinoamericanos de los aos veinte. Se trata de la continua bsqueda orientada a pensar, discutir y redefinir la Nacin, apelando en muchos casos a referencias del pasado de una manera ms intensa y desafiante, capaz de inter-pelar, en trminos de identidades culturales, a sectores de la sociedad que hasta

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    ese momento haban quedado excluidos de la construccin nacional, realizada bajo el predominio de las oligarquas. Segn Funes, el problema de la Nacin gira en torno a dos ejes: cambiar el orden u ordenar el cambio. Esto queda bien ejemplificado en los casos peruano y mexicano, que junto al argentino, son los observatorios elegidos por la autora para abordar la reflexin de los intelectuales latinoamericanos acerca de la Nacin. En el caso de Per, la reflexin surge en un contexto en el cual la necesidad pareciera ser la de cambiar el orden. De all que, a partir de una relacin ms intensa con el pasado, se desarrollara una corriente indigenista, interesada en reafirmar la cultura de las sierras peruanas (vinculada a la tradicin de los Incas) e imponerla como la matriz de la verdadera nacionalidad, en contraste con las formas expresadas por el predominio costeo. En el contexto peruano asoman las figuras de Jos Carlos Maritegui y Vctor Ral Haya de la Torre, ambos intelectuales influidos por el movimiento reformista universitario y perseguidos por el rgimen encabezado por Augusto Legua. En los mencionados intelectuales, el indigenismo ser abordado sin el contenido racial que conservaba la visin de otros pensadores, como Luis Val-crcel. Para Maritegui, el problema del indio era econmico y social, y por lo tanto no poda resolverse sin una modificacin de la estructura de la propiedad de la tierra. Consideraba que en sociedades como la peruana, el problema de la raza y la clase se hallaban unidos, y que la cuestin indgena era la que permita articular el problema pendiente de la construccin nacional y la revolucin orientada al socialismo. Por su parte Haya de la Torre tambin recuperaba en su pensamiento el problema de los indgenas, en el que se expresaba para l- la exclusin de la mayora de la poblacin en el orden oligrquico predominante. El APRA, liderado precisamente por Haya de la Torre, surgi entonces como el intento de conformar un frente interclasista atento a sumar a los indgenas a una lucha que encabezaran las burguesas nacionales contra los poderes aliados de las oligarquas y los imperios. Contrariamente a lo que ocurra en Per, en el Mxico de la Revolucin el problema era ordenar el cambio que haba generado el alzamiento maderista de 1910. All, el problema del indio sera abordado desde una perspectiva ms integracionista y mestizfila, que pona el acento en la educacin como herramienta de consolidacin de la identidad nacional. Por ltimo, en Argentina el problema nacional estaba atravesado por la expansin de la ciudadana, dada a partir de la ampliacin de la participacin electoral; y por la llamada cuestin social, que identificaba en los inmigrantes la causa de la agitacin de las primeras protestas de obreros organizados. Cabe recordar, frente a estas percepciones, la recuperacin que algunos pensadores nacionalistas como Ricardo Rojas haran de la figura del gaucho, contraponindola

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    al cosmopolitismo de la ciudad. De cualquier manera, en los tres casos analizados pervive la idea de que la nacin debe ser salvada de las amenazas de disolucin. Esto poda plan-tearse por medio de la advertencia de las debilidades de la democracia, como lo haca Lugones, o mediante un intento de despertar un sentimiento adormecido que buscara una espiritualidad unificadora, como lo planteaba Vctor Andrs Belande en Per, al tomar como referencia la religin catlica. Otra forma de lograr la unidad, la planteaba el mexicano Manuel Gamio, quien abogaba por redescubrir y conocer la cultura indgena e incorporarla a una cultura nacional ms homognea. Frente a estas opciones, Jos Vasconcelos sealaba la necesidad de crear, a travs de la educacin, nuevas referencias simblicas y culturales que lograran la nacionalizacin de la sociedad mexicana. En el fondo de estos planteos se encuentran como indica Funes- la crisis del liberalismo y la necesidad de encontrar nuevos lazos de unidad: A veces la nacin se define a partir de la inversin absoluta de los significados previos: lo indio sobre lo blanco, las mayoras sobre los pocos, la fuerza sobre la razn. Hay una impronta neo romntica de reemplazo a la racionalidad positivista, un campo ms cercano a la sensibilidad que a la normatividad. Algo de religin, mito o alegora se cuela en la definicin de lo nacional, incluso en aquellos que muy secularizadamente- proponen el socialismo y la revolucin, o estn transitando esta ltima [] En los aos veinte hay un ostensible deslizamiento de lo individual a lo colectivo y del Estado al territorio de la sociedad y la cultura.(2) El repaso de las particularidades del pensamiento de los intelectuales latinoamericanos en los aos veinte permite a la autora abordar, quizs como hiptesis, ciertos nudos y ejes de la reflexin que posteriormente sern centrales en las experiencias populistas de los aos treinta y cuarenta, y fundamentalmente en los debates ideolgicos de los aos sesenta. Un ejemplo es la aparicin en los aos veinte de la categora pueblo asociada en forma complementaria a la nacin. Este anlisis se desarrolla puntualmente al abordar experiencias como el APRA (que derivar en la fundacin de un partido poltico de masas en Per: el Partido Aprista Peruano PAP-, en 1931). La autora encuentra en este intento original de crear un partido de alcance continental, algunos de los rasgos caractersticos del pensamiento de los veinte. En esa experiencia estn presentes las ideas de democracia funcional, el uso de una simbologa que apelaba a las tradiciones populares como referencias identitarias de pertenencia poltica, o la figura paternalista construida en torno del liderazgo de Haya de la Torre. Estos rasgos que luego sern caractersticos de las experiencias popu-listas encuentran, para Funes, sus antecedentes en el contexto del eclecticismo ideolgico de los aos veinte. Por otro lado, algunos de los debates y ejes discursivos desarrollados en

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    los aos veinte, sern retomados en los sesenta. Un ejemplo claro de este resca-te, es el tema del antiimperialismo. Aquella divisin planteada originariamente por Rod entre una Amrica Latina espiritual y unos Estados Unidos materia-listas, se transformar con el correr del siglo- en una denuncia al avance de los intereses econmicos de Norteamrica en el continente y se configurar como uno de los elementos fundamentales en la construccin terica de intelectuales como Maritegui y Haya de la Torre. Las discusiones entre estos dos referentes peruanos de los aos veinte acerca del carcter que deba asumir la revolucin, puede pensarse como un antecedente de futuras disputas en los aos siguientes en torno de la llamada Teora de la Dependencia. Mientras que el lder del APRA explicaba que el imperialismo era la primera forma del capitalismo en Latinoamrica, invirtiendo los postulados de Lenin, y por lo tanto impulsaba un Frente nico de Trabajadores Manuales e Intelectuales que enfrentara y mediara el poder del imperialismo, el autor de los Siete ensayos cuestionaba la existencia de un nacionalismo revolucionario en las burguesas criollas, y planteaba que slo a travs de una revolucin socialista poda quebrarse el predominio de los poderes extranjeros. Ms all de estas cuestiones, la amenaza del imperialismo adquiri entre los intelectuales el carcter de una sombra frente a la cual poda pensarse en los elementos que definan una identidad propia. Son ilustrativas de este aspecto las discusiones sobre el nombre de la regin (Indoamrica, Hispa-noamrica, Latinoamrica, Panamrica, etc.). Esta misma preocupacin por recortar una identidad regional, en la que se planteaban como trminos contrapuestos autonoma o dependencia, u originalidad frente a imitacin, es la que se presenta al analizar las reflexiones sobre la lengua y las disputas por establecer una tradicin literaria que reflejara los elementos centrales que definan a cada una de las naciones. En esas coordenadas de debate, la autora descubre las tensiones derivadas de las disputas por la creacin de una tradicin fundante de la nacionalidad. Qu era entonces- la Nacin para los intelectuales latinoamericanos de los aos veinte? Intil sera pretender encontrar en el complejo anlisis de Funes- una respuesta cerrada y unvoca a esta pregunta. En todo caso, queda claro a travs de la lectura del libro aqu reseado, que: Tradicionalistas o vanguardistas, socialistas o comunitaristas, organicistas o clasistas, los intelectuales latinoamericanos reflexionaron sobre las formas de la nacin como un principio crucial para cambiar el orden , o por el contrario- para ordenar el cambio. Para todos la nacin habita en algn punto equidistante en la encrucijada formada por los conceptos de crisis, modernidad, tradicin y revolucin.(3) Las discusiones que durante los aos veinte se derramaron desde el terreno de la disputa ideolgica, fertilizaron un campo que ms vinculado a la poltica- florecera en los aos siguientes. La marca de origen de la reflexin sobre

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    Reseas bibliogrficas

    la nacin permite encontrar y definir sus significados, pero tambin impone una interpretacin. Esta pretensin arraigar, segn Funes, en una cultura poltica excluyente, tensionada en el enfrentamiento de sectores que se atribuirn la representacin de la Nacin, como forma de legitimidad poltica.

    Notas

    (1) Esta bsqueda en comn, a pesar de las diferencias, queda notable-mente expresada por Maritegui en una carta cursada a Samuel Glusberg, en la que seala: En Lugones he admirado siempre al artista, al pensador que se expresa sin equvoco y sin oportunismo. Ideolgicamente, estamos en campos adversos. Me aflige que l refuerce con su nombre y con su accin a los conservadores. Aunque siempre es una ventaja encontrarse con adversarios de su estatura. Carta de Maritegui a Glusberg, del 30 de Abril de 1927, citada en Maritegui, Jos Carlos, Signos y obras, Lima, Amauta, 1985, pgina interna de contratapa. (2) Funes, Patricia, Salvar la Nacin, pp. 134-5. (3) Funes, Patricia, Salvar la Nacin, p. 409.

    Sandra Mc Gee Deutsch, Las Derechas. La extrema derecha en la Argentina, el Brasil y Chile 1890-1939, Buenos Aires, UNQ, 2005, 527 pginas.

    Christian Casco FAHCE

    UNLP

    En su libro, Sandra Mc Gee Deutsch analiza la conformacin de los grupos derechistas de la Argentina, el Brasil y Chile en el periodo que transcurre entre 1890 a 1939. Para dicha autora, el influjo de la derecha vari de una nacin a otra, por lo que uno de los objetivos de su estudio es explicar esa decisiva discre-pancia. Para ello, Mc Gee tratar de definir previamente- qu es la derecha, de manera de entender consistentemente- la evolucin de dicho movimiento en Amrica Latina. En el esquema propuesto, la derecha se consolida en reaccin a las