Platón (427 a.c.-347 a.c.):

1-Contexto Histórico:

Platón nació y vivió en Grecia, que los mismos griegos llamaban Hélade. No era exactamente un país unido, sino más bien era un conjunto de ciudades-estado llamadas polis, unidas únicamente por hablar el mismo idioma y por tener la misma religión. Cabe notar que Platón era oriundo de Atenas.

Hacia el siglo V a.c., una gran potencia de la época amenazaba a Grecia. Era el Imperio Persa, quien en su afán de expansionismo, pretendía conquistar la Hélade y anexarla a su vasto Imperio. Sin embargo, los griegos se unieron para oponer resistencia a la invasión. Fueron conocidas como las guerras médicas, que fueron dos. En la primera guerra médica, el emperador persa Darío fue derrotado en la batalla de Maratón, y en la segunda guerra médica el emperador Jerjes vence a los espartanos en la batalla de las Termópilas, pero es frenado y derrotado definitivamente en la batalla de Salamina por los ejércitos de Atenas. Como consecuencia de esta guerra, comenzó una época de esplendor y hegemonía de Atenas sobre las demás polis de la Hélade, en el que más tarde sería conocido como el Siglo de oro ateniense o Siglo de Pericles. Aquí destaca el sistema político que se utilizó en la polis, muy innovador para su tiempo, llamado Democracia, que significa “gobierno del pueblo”, y donde los cargos administrativos son elegida por una asamblea de varones (recordemos que en Grecia las mujeres no tenían derechos) por votación. Este tipo de gobierno y la expansión de la influencia ateniense, la puso en conflicto con otra polis también en expansión, Esparta, que derivaría en el conflicto llamado Guerra del Peloponeso, donde Atenas saldría derrotada. Esto supuso el fin del esplendor de ateniense y la instauración de la tiranía en sustitución de la democracia. Luego en la restauración de la democracia, ocurre la condena de muerte a Sócrates, maestro de Platón. Luego de del fin de la hegemonía espartana, seguiría la tebana, hasta la aparición de un conquistador del norte.

2-Contexto sociocultural:

En aquella época existían grandes diferencias sociales, con una estructura jerarquizada, donde había aristocracia, hombres libres, el pueblo y los esclavos. Estos últimos, eran la principal mano de obra en una economía basada en el comercio y la agricultura. Fue una época de innumerables manifestaciones artísticas y culturales, llevadas a cabo por notables ciudadanos que desarrollan artes como la escultura (en la que destaca Fidias, con la estatua de atenea en el Partenón que también diseño), y el teatro, con los géneros de la tragedia (autores como esquilo y Sófocles, con la inmortal obra “Edipo Rey”) y la comedia (autores como Aristófanes, quien en su obra “las nubes” caricaturiza a Sócrates). También en este período existe una gran pluralidad de creencia, al asimilarse dioses de otras culturas, como Osiris, y cultos órficos.

3-Contexto Filosófico:

En el siglo VI a.c. es cuando se comienza a hacer lo que llamamos “filosofía”. Esta nueva disciplina comienza a partir del cuestionamiento de hombres que comienzan a utilizar la razón

para poder explicar el origen de las cosas, el principio de la naturaleza. Los principales centros de la filosofía presocrática fueron las colonias griegas de Asia menor y la Magna Grecia (Italia). Este principio que buscaban le llaman “Arjé”, que es un elemento que compone a todas las cosas. De aquí se destacan filósofos como Tales, Pitágoras, Anaximandro, etc. Los filósofos presocráticos que más influirían en Platón, cuyos principios le ayudarían a elaborar su “teoría de las ideas”, son Heráclito (el Devenir) y Parménides (principio estático, inmutable).

A partir de la segunda mitad del siglo V a.c., la filosofía da un giro del principio cosmológico, a un enfoque antropológico, una mirada a la búsqueda de la esencia del ser humano. En este plano entran los sofistas, que eran sabios griegos que utilizaban la retórica como herramienta principal para difundir sus ideas y educar a sus pupilos. Eran partidarios del relativismo y el pluralismo. Protágoras es un sofista que afirma que “el hombre es la medida de todas las cosas”, como una prueba de esta postura. Su fin es el éxito, utilizando la retórica como un medio para llegar a él. También entra en escena uno de los filósofos más influyente de todos los tiempos, Sócrates, quien fuera maestro de Platón (quien recibe mucha influencia de este). Sócrates defiende el areté (virtud) de la justicia. Utiliza el método del dialogo para poder llegar al conocimiento, para llegar a la verdad. Luego de que Sócrates fuera enjuiciado y condenado a muerte, Platón abandona Atenas para ir a Megara, donde comenzaría su actividad filosófica.

Filosofía de Platón:

La filosofía de Platón fue muy de carácter ontológico y con fines políticos (que se evidencia en unas de sus obras más famosas, La República.)

El más célebre de sus trabajos, es la elaboración de la Teoría de las ideas, con la cual trata de explicar cómo son las cosas y cómo podemos alcanzar el conocimiento basándonos en este modelo. Platón nos propone en esta teoría la existencia de dos mundos: el mundo inteligible, o de las ideas, que es donde residen estas ideas (también llamadas formas), que son entidades eternas, inmutables e individuales, por lo que son los verdaderos seres. Es para platón el mundo real. Existe también otro mundo, el mundo sensible, que es en el cual nos encontramos, y donde residen las cosas. Este mundo imita y participa del mundo de las ideas. Las cosas son imitaciones imperfectas de las ideas. Estos dos mundos no entran en contacto, puesto que están separados por un abismo. Platón expone que mediante el conocimiento, podemos llegar a conocer el mundo de las ideas. Es necesario señalar también que en el mundo sensible existe el cambio (idea de Heráclito). Las ideas poseen una jerarquización, siendo las tres ideas últimas, la de belleza, justicia y bien. Mediante esta teoría, Platón logro conciliar las ideas de Parménides y Heráclito. Mediante el Mito de la Caverna, el filósofo consigue explicar dicha teoría. Imaginemos que somos seres que han pasado toda su vida encerrados en una caverna, donde estamos encadenados mirando a la pared. Toda la vida no hemos visto más que sombras y reflejos, que son proyectados por un fuego que está detrás de nosotros. Consideraremos esto como lo real, puesto que es lo único que hemos visto en nuestra vida. Por cierta circunstancia, logramos romper estas cadenas, y comenzamos salir de nuestro encierro. Veremos en nuestro camino charcos de agua en el suelo que se encuentran cerca de la salida, que reflejan lo que se ve en el exterior de la caverna. Cuando logramos salir de

esta cueva, podremos apreciar el paisaje y el sol que lo ilumina. Este mito está lleno de metáforas para explicar la idea de llegar al bien. El rompimiento de las cadenas simboliza el comenzar a filosofar, el paso del mito al “logos”, las sombras que se proyectan sobre nosotros son las cosas, el mundo sensible. El camino que seguimos para salir de nuestra cueva es la búsqueda del conocimiento que comenzamos a seguir para llegar a la verdad. El charco de agua representa a las matemáticas, que según Platón, participan de ambos mundos y es un reflejo de las Ideas. El paisaje que encontramos al exterior de la caverna será el mundo de las ideas que están iluminadas por el Sol, que representa la idea última del Bien.

Otra teoría platónica importante es la del Conocimiento. El filósofo asegura que “todo conocimiento no es más que un recuerdo”. Esto se explica con la afirmación de que las Ideas son eternas, siempre han existido. Platón asegura que poseemos un alma, que cuando el cuerpo muere, el alma se eleva hasta alcanzar el mundo Inteligible, donde conoce las ideas y se llena de ellas. Pero al momento de reencarnar, el alma olvida la mayor parte de este conocimiento. Es preciso para poder “recordar”, la utilización del método del diálogo socrático para adquirir este conocimiento que olvidamos. Esto viene también a fundamentar el principio de la inmortalidad del alma. Platón hace una distinción entre los distintos conocimientos, clasificándolos por grado, los cuales son la Doxa (opinión), que incluye la conjetura (ekasía) y la creencia (pistis), que se representan en las sombras y las cosas respectivamente, y la Epísteme (ciencia), que incluye el razonamiento (diánoia) y la inteligencia (noesis), que van relacionados con las matemáticas y con las ideas respectivamente.

También es importante destacar el “estado platónico”, que es una organización política y social basada en la existencia de tres tipos de alma en los individuos, en los cuales siempre destacará una sobra las demás. Según el predomino del alma, se podrá clasificar a las personas en tres clases: los gobernantes/filósofos (en quienes predomina el alma racional, que es inmortal, reside en la cabeza y cuya principal virtud es la prudencia), los guerreros (en quienes sobresalta el alma irascible, que es mortal, reside en el tórax y cuya virtud es la fortaleza), y los comerciantes, artesanos y resto de la población (en quienes domina el alma concupiscible, que es mortal, reside del abdomen hacia abajo y cuya principal virtud es la templanza). Platón también propone modelos de gobierno, ordenándolos de mejor a peor. Para el filósofo, la mejor forma de gobierno es la monarquía, entendida como el gobierno de uno solo, del mejor, el más sabio, aquel que conoce las ideas y sabe que es lo mejor y más justo para todos. En caso no haber tal filósofo, se procede a la aristocracia, que es el gobierno de los mejores, los filósofos que también se acerquen al mundo de las ideas. En suplencia de este, está la oligarquía, que es el gobierno de unos pocos “mejores”, que también se acercan al conocimiento. Luego siguen las formas erróneas de gobierno, como son la democracia, que es el gobierno del pueblo. Estos , al carecer del alma racional, no son capaces de conocer y valorar las ideas, gobernaran de forma deficiente, y la tiranía, que es el gobierno de uno que se ha tomado el poder, al carecer también de alma racional, gobernará de forma deficiente. En esta teoría se refleja el origen aristócrata de Platón y el fin político de su filosofía.