políticamente incorrecto

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POLÍTICAMENTE INCORRECTO EDICIÓN NO. 1 ENTRE DOMINANTES Y SUMISOS FOTOGRAFÍA POR JAMES NACHTWEY Por cada despótico que existe, hay un sumiso dispuesto a sostener el peso de su bota . El rencor de 6 siglos expresado en una calamidad social que dejaría su marca en la historia. ¿Dónde está la línea entre el medir, mediar y actuar, cuando de vidas humanas se trata? POR CADA DESPÓTICO: UN SUMISO Y UN ADULADOR PAPAOUTAI CUESTIONES DE DIPLOMACIA

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Evaluación de Sociología Política. Grupo 1. Sección 04. Segundo año de Estudios Políticos.

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Page 1: Políticamente Incorrecto

POLÍTICAMENTEINCORRECTO

EDICIÓN NO. 1

E N T R E D O M I N A N T E S Y S U M I S O S

FOTOGRAFÍA POR JAMES NACHTWEY

Por cada despótico que existe, hay unsumiso dispuesto a sostener el peso de su

bota .

El rencor de 6 siglos expresado en unacalamidad social que dejaría su marca

en la historia.

¿Dónde está la línea entre el medir, mediary actuar, cuando de vidas humanas se

trata?

POR CADA DESPÓTICO: UNSUMISO Y UN ADULADOR

PAPAOUTAI CUESTIONES DEDIPLOMACIA

LOJER
Sello
Page 2: Políticamente Incorrecto

in correcto

sección 04

07 09

11 03

50 05

tabla decontenidos

02 Nota deleditor

03Papaoutai

05Por cadadespótico: unsumiso y unadulador

07

cuestiones dediplomacia

09

La guerra acabó11

No es extraño

13We want ourcountry back

Segundo año de Estudios PolíticosFacultad de Ciencias Jurídicas y Políticas

Sociología Política

1316anexos

Page 3: Políticamente Incorrecto

NOTA DELEDITORP O RE N D E R S O N S E Q U E R A

Enfocada en la redacción de artículos donde seexpongan casos documentados, de relevanciahistórica, sobre las relaciones de dominación-sumisión, en el marco de la política internacional.En esta publicación, no le huimos ni a los datos, nia la crudeza de la argumentación. En las páginassiguientes, no encontrará el lector algúneufemismo, ni algún recurso literario o retorico quetrate de hacer más digerible la crueldad de loshechos que aquí pretendemos relatar.Aquí, expondremos casos tan complejos dedominación-sumisión, que van desde, el exterminiode los judíos por parte del partido nazi, enAlemania, pasando por el genocidio de Ruanda,atrocidad que hoy le da portada a nuestrapublicación, porque sí, las tragedias también tienenrostro. Y cada uno de ellos, en tan solo unacuartilla.Por último, estos serán descritos con firmeza y sinvacilaciones. Tanto así, que a veces pensará ellector que el trato que le damos a los mismos espolíticamente incorrecto. N O M A D I C | 2 4

P.02

Page 4: Políticamente Incorrecto

30..Papaoutai...000 mil habitantes en Ruanda sonhoy fruto de una violación, África esun continente tan escarificado como supueblo. En 1994, 600 siglos de odio explotaronen una vorágine de violencia y unahecatombe de sangre que bien pudo seruna orgía. Un torbellino de muerte queno respeto a la inocencia de la infancia.Esta es su historia.

Escrito por Augusto Arvelo

P.03

"La guerra, como en elsexo, no vence quien

penetra sino quienresiste más".@AugustTheHuman­

Page 5: Políticamente Incorrecto

Papaoutai e supone que no

se debe confundir los

conceptos de

dominantes y sumisos cuando

están dentro del campo de la

sociología con términos

sexuales, pero si observas el

caso del genocidio de Ruanda,

tienes la viva encarnación del

burdel de las parafilias.

Además del exterminio a la

población Tutsi, en la que

murieron entre 500.000 y

1.000.000 de personas, por

parte del gobierno Hutu. Las

violaciones ocurridas a todas

las mujeres que sobrevivieron,

algunas incluso fueron

asesinadas luego de ser

violadas, se estiman entre

100.000 a 250.000 durante los

tres meses de genocidio en

1994.

Consecuencias como,

infectar de VIH, cambio de los

rasgos étnicos, destrucción de

familias consolidadas, fueron

los motivos por el cual los

perpetradores de las

violaciones, tanto hombres

como mujeres, llevaron a cabo

su cometido, una

aproximación de 10.000 a

50.000 infantes nacieron de esos actos, de los cuales 5.000 fueron

inmediatamente asesinados al nacer, lo que hace que para 2016

existen unos 30.000 habitantes adultos que son fruto de una violación.

La relación de dominante y sumiso entre los Tutsis y los Hutus

data desde hace más de 600 años, cuando eran tribus, junto a los

Twas. manteniendo una relación simbiótica de ganaderos,

agricultores y cazadores, los Tutsis reclamaban el “dominio” sobre

los Hutus alegando que aportaban más a las tribus por su calidad de

ganaderos, despreciando su labor de agricultores, lo que llego a que

los jefes Tutsis asesinaran a los príncipes Hutus para establecer de

una vez por todas el sometimiento hacia los Hutus. Fue así hasta

1959, donde empiezan las movidas Hutus para liberarse del

sometimiento Tutsi. Fue de tal manera que terminó en la carnicería

de 1994, el rencor de 6 siglos expresado en una calamidad social que

dejaría su marca en la historia.

¿Quién domina a quién, quien puede decirse el culpable de

esos hechos, el domino Tutsi y la sumisión Hutu o viceversa? Incluso

están sumisos y dominados, no solo entre personas, también entre

pasiones y sentimientos, los Hutus se dejaron dominar por la ira y el

rencor, los Tutsis fueron sumisos de su propio poder adquirido

durante años.

Las razones sean las que sean al final solo dejaron a miles de niños preguntándose. ¿Dónde

está mi padre?

S

LOJER
Texto escrito a máquina
P.04
Page 6: Políticamente Incorrecto

POR CADADESPÓTICO:UN SUMISO YUNADULADORSOLEMOS FIJARNOS EN LOS QUE DOMINAN, SIN DARNOS CUENTA QUE,DETRÁS DE ELLOS, HAY MILLONES DE CÓMPLICES QUE APLAUDEN YASIENTEN COMPLACIDOS -@SEQUERAUC

ESCRITO PORENDERSON SEQUERA

P. 05

1932-1945

EN ALEMANIA, SEPRODUJO UNO DE LOSCASOS DE DOMINACIÓNMÁS ABERRANTES Y

DOCUMENTADOS DE LAHISTORIA MODERNA

Page 7: Políticamente Incorrecto

Por cada despótico: un sumiso y un adulador

ara los

teóricos marxistas, la

historia de la

humanidad podría resumirse a

la historia de una lucha de

clases. Si quisiéramos

delimitar aún más los actores,

podríamos argüir que dicha

historia, al menos la que ha

acaparado las páginas

oficiales, ha girado alrededor

de dos variables

fundamentales: los

dominantes y los dominados.

Pero, ¿qué es la

dominación?

Para el destacado politólogo y

sociólogo alemán, Max Weber,

esta no es más que “la

probabilidad de encontrar

obediencia dentro de un grupo

determinado para mandatos

específicos (o para toda clase de

mandatos)”. En el mismo orden

de ideas, éste plantea que la

misma “puede descansar en

los más diversos motivos de

sumisión: desde la habituación

inconsciente hasta lo que son

consideraciones puramente

racionales con arreglos a

fines.”

En Alemania, entre los años 1932 y 1945, se produjo uno de

los casos de dominación más aberrantes y documentados de la

historia moderna. Con la asunción de Adolf Hitler al poder en la

nación teutona, éste implantó, de la mano de la ideología

nacionalsocialista, uno de los regímenes de dominación más crueles

e inhumanos contra todas aquellas minorías que habitaban en el país

europeo por aquellos años: gitanos, homosexuales, campesinos,

personas con discapacidad, pero muy especialmente, judíos.

Argumentando estar en búsqueda de la llamada “supremacía de la

raza aria”, por lo cual debía aniquilar a las minorías que retardaban

el avance de la sociedad que se proponía construir, Hitler ordenó

ejecuciones, torturas, violaciones, y todo tipo de humillaciones

contra estas poblaciones, hasta desembocar en el asesinato de 6

millones de judíos durante la Segunda Guerra Mundial, en lo que se

denominó El Holocausto.

No obstante, ¿Qué permitió que dicha relación de dominación

se llevase a tal extremo? La respuesta es tan cruda que pudiese

incluso erizarnos la piel: la permisividad y aprobación del pueblo

alemán. Un pueblo que necesitaba un culpable por la humillación no

superada del Tratado de Versalles de 1919, y que estaba en medio de

la peor crisis económica de su historia, en donde un kilo de pan llegó

a costar 54 millones de marcos. A esa población, Hitler, en medio de

vibrantes piezas de oratoria y simplistas análisis sobre los causantes

de los problemas de la sociedad, les mostró un culpable: los judíos,

los discapacitados, los homosexuales; y dicha sociedad lo aceptó. Y al

hacerlo, se convirtieron, a su vez, en justificadores de la dominación

y en cómplices de la masacre. Porque por cada despótico que existe,

hay un sumiso dispuesto a sostener el peso de su bota y un adulador

que se ensangrenta las manos aplaudiendo, deshaciéndose en

halagos y consignas, porque dicha dominación le es favorable a sus

intereses. Y mientras tanto, la lógica de los despóticos parece

responder a aquella famosa y lapidaria frase de Iósif Stalin. Porque

para ellos, “una muerte es una tragedia”, pero un millón de muertes,

parece ser: una estadística.

P

LOJER
Texto escrito a máquina
P.06
Page 8: Políticamente Incorrecto

POR

- @ELIASTOVARD

"Este es un caso ejemplaren el que la víctima seconvierte en victimario"

ELÍAS TOVAR

NO ES EXTRAÑONo es extraño que todos lostitulares sobre Palestina e Israelestén tintados de sangre. Ya es eldía a día en Medio Oriente. ¿Quéimportan unas cuantas miles devidas?Todavía hay petróleo.

P.07

Page 9: Políticamente Incorrecto

No es extraño

o es extraño.

Casi siempre que

aparece la palabra

Palestina en los medios de

comunicación viene en alianza

con términos como “guerra”,

“terrorismo”, “violencia en

Medio Oriente”, “aumenta la

tensión…”.

No es extraño, y no lo es

porque desde la retirada de

Reino Unido en 1948 de los

territorios que le habían sido

asignados por la Sociedad de la

Naciones para administrar en

1920, Palestina ha sido una zona

tan bélicamente activa como

sísmicamente lo ha sido Chile,

incluyendo, claro, sus picos y

valles.

Ahora, ¿por qué tan

convulsionada ésta zona? En

principio por una doble

promesa de los británicos,

relacionada con el futuro

político de la región, a

sociedades envueltas en

mantos religiosos que habían

mostrado ya anteriormente la

intolerancia entre los unos y

los otros: judíos y

musulmanes. Entre este par de

sociedades fue -quizás en un

intento de armonización intentado por Reino Unido y la ONU-

dividido el territorio en un Estado Judío, cuyo nombre se convirtió

en Israel; y en un Estado árabe, cuyo nombre es Palestina.

Lo interesante es que desde el mismo momento de la

declaración de independencia de ambos, estalló una guerra árabe-

israelí en la que una alianza entre Egipto, Líbano, Siria, Irak y

Jordania, en un intento de destruir el naciente Estado de Israel y

conservar el dominio musulmán en la región, culminaron derrotados

y con un enemigo fortificado que ocupó y se asentó en regiones más

allá de sus límites oficiales constriñendo al estado de Palestina y a su

gente a dos zonas desconectadas entre sí: Gaza y Cisjordania. Una

zona y la otra con direcciones políticas diferentes -Gaza con el

movimiento Hamás, considerado terrorista; y Cisjordania con la

autoridad nacional palestina y el movimiento, menos belicoso, Fatah-

, pero con condiciones socioeconómicas muy similares y violaciones

comunes a los DD.HH: escasez de agua potable, la cual es

proporcionada por canales subterráneos y a veces restringida desde

sus fuentes por Israel; ejecuciones extrajudiciales por parte de

fuerzas militares israelíes a poblaciones civiles palestinas, además de

arrestos y detenciones arbitrarias; sistemas de salud pública

precarios y la negación de la fuerza ocupante a prestar acceso a sus

hospitales -incluso en caso de mujeres embarazadas de origen

palestino que se ven obligadas a parir en condiciones inhumanas y

humillantes-; cierre de fronteras -incluyendo el levantamiento de

muros entre las fronteras construidas por la guerra- y graves

limitaciones a la circulación de personas y mercancías; y la

demolición de viviendas de ciudadanos palestinos.

Este es un caso ejemplar en el que la víctima se convierte en

victimario: Un pequeño estado recién formado se enfrenta a una liga

de países de afamada trayectoria bélica y no solo los vence, sino que

subyuga a sus miembros más débiles.

N

LOJER
Texto escrito a máquina
P.08
Page 10: Políticamente Incorrecto

CUESTIONES DEDIPLOMACIA

P O R

¿Qué sucede cuando los tiempos de la diplomacia no dan con lostiempos de las víctimas? - @JoseDavidTR

J O S É D A V I D T O R R E S

P.09

Page 11: Políticamente Incorrecto

Cuestiones de diplomacia

orría 1980 cuando la

muerte se lleva

consigo a uno de los

últimos remanentes del

totalitarismo soviético

personificado, Josip Broz

“Tito”. Al igual que en muchos

otros casos en distintas

latitudes y distintas épocas, la

muerte del tirano marca el fin

de un régimen. En el caso de

Tito era un régimen totalitario

de corte soviético-socialista,

aunque en inicios de la Guerra

Fría se aleja de la doctrina

stalinista.

Con la muerte del

tirano se rompe con un orden

instaurado desde fines de la II

Guerra Mundial, republicas

empiezan a declararse

independientes y se resquebraja

la identidad yugoslava -si es que

alguna vez hubo tal cosa-.

Surge la figura de Slobodan

Milosevic en Serbia y la de

Radovan Karadzic en Bosnia.

Milosevic como presidente de

Serbia tiene a su mando la

facción más numerosa y

poderosa de lo que antes conformaba el ejército Yugoslavo.

Pero es en Bosnia donde el horror de la Guerra Yugoslava

decide tomar su más pavoroso antifaz. Como cosa natural en

conflictos bélicos, afectados buscan moverse a otras ciudades dentro

de Bosnia, una de estas fue Srebrenica. Gran parte de la población de

Bosnia era étnicamente Bosnia y musulmana, conocidos como

Bosniacs. Luego de tomar gran parte del territorio bosnio con la

ayuda del ejército serbio de Milosevic, Karadzic rodea Srebrenica con

sus tropas, establece una forma de bloqueo; las primeras muertes

entre bosniacs empiezan a darse en los mayores y en los niños, por

falta de comida y medicamentos; luego, el horror.

Una masacre total, una limpieza étnica de horripilantes

proporciones. La mayoría de las mujeres y niñas se les deja huir

como estas puedan, pero son hombres y niños los que sufren las

peores consecuencias. En el mes de julio de 1995, más de 8000

bosniacs fueron vilmente asesinados por el ejército serbio. Ante esto

se da en el CS (Consejo de Seguridad) de la ONU una iniciativa

impulsada por el entonces embajador venezolano Diego Arria, y se

declara la zona bajo administración de las Naciones Unidas; poco

efecto surgió, siguieron los atropellos y la hambruna.

Finalmente debe

intervenir la OTAN con su

poderío militar y obliga a Serbia

a ir al campo de la negociación.

Cabe pues, preguntarse, ¿cuál

debe ser el rol de los organismos

multilaterales en los conflictos

bélicos? ¿Es concebible que la vida de un grupo de seres humanos

tenga que ser puesto en espera por cuestiones de diplomacia y sus

tiempos? ¿Dónde está la línea entre el medir, mediar y actuar, cuando

de vidas humanas se trata? Creo firmemente que son preguntas que

hay que hacerse, aunque perturben en lo más profundo de la psique

y en el hondo pozo de las ideologías.

C

Una masacre total, una limpieza étnica de horripilantes proporciones. La mayoría de las mujeres y niñas se les deja huir como estas puedan, pero son hombres y niños los que sufren las peores consecuencias.

LOJER
Texto escrito a máquina
P.10
Page 12: Políticamente Incorrecto

LAGUERRAACABÓ

P.11

PorLorenzoRodríguez

REPARTIRSE EL MUNDO DEBE SERSENCILLO, SOBRE TODO SI TIENESARMAS NUCLEARES -@LORENZOERV

Page 13: Políticamente Incorrecto

La guerra acabó

n 1945 cuando

en el ocaso del

poderío europeo se

erigían como los nuevos

pilares antagónicos del mundo

los Estados Unidos y la Unión

de Repúblicas Socialistas

Soviéticas, el viejo continente

todavía conservaba una

última carta bajo la manga.

Esta artimaña no fue otra que

la reconfiguración mundial a

través de la creación de un

organismo multilateral que, si

bien en principio ha sido la

institución más efectiva como

árbitro internacional, presenta

un vestigio imborrable del

antiguo orden.

Uno de sus órganos

característicos: El Consejo de

Seguridad, se presenta ante

nosotros como un botín de

guerra, un recordatorio de la

primera mitad del siglo XX.

Observando detenidamente a

los cinco Estados permanentes del Consejo, sale a relucir que esta

membresía distintiva se debe a que los integrantes son los

vencedores de la Segunda Guerra Mundial.

En base a esto, y con la teoría weberiana como sustento

académico se puede abordar

el dominio del Consejo de

Seguridad sobre la comunidad

internacional desde los tres

tipos de legitimación.

En principio, la

legitimación tradicional de este bloque puede notarse a simple vista;

países que consuetudinariamente han sido imperios, referentes

culturales y económicos ¿Parecería extraño no darles su asiento, no

es así? Ciertamente, expresiones de poder suave como el anterior se

complementan con dosis de legitimación carismático-caudillista que

no requieren más fundamentación que remitirse a la tesis del

Gendarme necesario de Vallenilla Lanz, solo que esta vez se tiene una

compañía entera.

Por último, en la legitimación legal basta acercarse a la Carta

de Naciones Unidas y a todo el aparataje jurídico emanado por el

Consejo para vislumbrar como cada acción coercitiva llevada a cabo

desde esa sala no es solo legitima, sino legal.

En 1945 la guerra acabó y ese año cinco gobiernos se

repartieron el control político de la comunidad internacional como

si hubiera sido una partida de baraja; poco importó, nadie dijo nada

a tiempo.

E Sale a relucir que esta membresía distintiva se debe a que los integrantes son los vencedores de la Segunda Guerra Mundial.

LOJER
Texto escrito a máquina
P.12
Page 14: Políticamente Incorrecto

Brexit

We want ourcountry back

Las razones que han traído la secesión a Europa. El comienzodel fin dicen muchos, veamos que dicen los britancos

P. 13

El ocaso de Occidente-@DouglasVT

Escrito por Douglas Villasmil

Page 15: Políticamente Incorrecto

We want our country back

ace poco menos de

un mes, el 23 de

junio, aconteció en

el Reino Unido un hecho de

histórica trascendencia para el

esquema geopolítico de la

Unión Europea, cuyos efectos-

especialmente económicos- no

han tardado en impactar las

relaciones de poder y el

sistema político británico e

internacional. Me refiero,

pues, a la salida del Reino

Unido de la Unión Europea, a

través de un referéndum -

propuesto por el líder del

Partido Conservador Británico

David Cameron, y promovido

por el Partido de

Independencia del Reino

Unido (UKPI)- que arrojó

como resultado la victoria del

abandono regional, con un

51,9% de los votos, frente a un

48,1% en favor de la

permanencia. Tal hecho

devino, en concatenación, en

dos consecuencias principales:

a) la caída en los rendimientos

de bonos financieros más alta

en la historia británica desde

1703, y la depreciación de la moneda nacional hasta mínimos de

1985; y b) el anuncio de dimisión del primer ministro Cameron para

antes de octubre. Ergo, el Brexit ha constituido, a posteriori, un

fenómeno generador de tensiones, polarización e inestabilidad en la

dinámica político-económica de esta nación.

Empero, la legitimidad de este proceso (todavía en curso, en

anuencia al artículo 50 del Tratado de Maastricht) ha de entenderse

más allá de los aspectos electorales, definida antes bien, con mayor

amplitud por los elementos de dominio esgrimidos por Max Weber

en su obra El Político y el Científico (1919), con arreglo a los cuales

toda legitimidad procede bien de la tradición, del carisma o la

legalidad.

Así, una examinación histórica de la composición del Estado y

la nacionalidad británica, desde los siglos XIV y XV hasta el presente,

dará cuenta de que en el RU existen fundadas razones para sostener una

idiosincrasia anti-europeísta, que incluyen guerras, conflictos, rivalidades

armamentísticas y culturales con Francia y Alemania -principales

promotores de la Comunidad Económica Europea (CEE) y de la UE-

y diversos movimientos socio-políticos que, bajo el orgullo del

carácter “insular y diferenciado” de la Gran Bretaña, rechazan la

unión, calificándola de “Cuarto Reich” o de “Nuevo Napoleón”.

En palabras de Weber, existe un “eterno pasado de la

costumbre consagrada por su inmemorial validez y por la

consuetudinaria orientación de los hombres hacia su respeto”, esto

es, la tradición histórica británica fundamenta legitimidad al Brexit,

como dominio de la expresión euroescéptica o nacionalista. En este

sentido, el carisma es otro significante elemento de legitimidad en

este fenómeno, contenida en la <<autoridad de la gracia>> del jefe de

partido, que, dado el sistema parlamentario británico y su inherente

democracia de partidos, representa una figura esencial en la

formación del referéndum. Difícilmente habría resultado victorioso

el Brexit de no ser por la campaña propagandística del UKPI y el ex

H

LOJER
Texto escrito a máquina
P.14
Page 16: Políticamente Incorrecto

alcalde de Londres Boris Johnson, con proclamas como “We want our country back”, que apelaban a la

vocación de los jefes de partidos para conducir este proceso de secesión. La legalidad es la fuente de menor

legitimidad aquí, puesto que el referéndum no es vinculante a los actos ejecutivos del gobierno, y es

susceptible de anulación por el parlamento con voto mayoritario simple. Finalmente, si reducimos las

implicaciones de legitimidad a la cuestión electoral, encontraremos un crítico escenario de polarización y

división, tomando en cuenta el estrecho margen de diferencia entre ambas opciones, que en cierto modo

vendría a ser lo que el filósofo socioliberal inglés J.S. Mill llamaba “tiranía de las mayorías”, en tanto

imposición irrevocable de la regla mayoritaria sobre las decisiones que comprometen a toda una nación,

en desmedro de un importante 48% de la población.

LOJER
Texto escrito a máquina
P.15
Page 17: Políticamente Incorrecto

Diseño y diagramación

Lorenzo Rodríguez

caricaturista

Augusto Arvelo