por: abelardo monroy ríos* gacetarepublicana · el mundo aparte publicación de la corporación...

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Dialogo y conflicto conflicto y excluyen al pueblo. Así la paz depende solo de los beneficios que obtengan quienes generan la guerra y no depende de lo que realmente desea y necesita el pueblo. parte no tardó en contestar el gol- pe: Los docentes del Departamen- to de Literatura de la Nacional soltaron la bola de nieve: según ellos Colciencias desconoce la naturaleza de las humanidades. así mejorar su vida cotidiana, su situación económica y social. ¿Cómo lograrlo? Los colom- bianos no se han puesto de acuerdo, en cierta medida por- que alrededor de la paz hay muchos intereses que favore- cen a los actores armados del llos que ga- lopan bajo asombro - sas ramas”. Son, en palabras del poeta, “las vastas noches alumbradas por una estrella de menta que enciende toda sangre”; es también “la hoja sola en que vibran los vientos que corrieron por los bellos países donde el verde es de todos los colores, los vientos que cantaron por los países de Colombia”. En el caso de Bogotá la agri- cultura urbana se practica con fines alimentarios, educati- vos, ambientales, recreativos, terapéuticos y comunitarios. En muchos casos, el deseo de crear un jardín también está li- gado a la preocupación por la calidad de los alimentos, en un escenario de productos trans- génicos, producción en masa y cambio climático. En Bo- gotá existen ya innumerables huertas informales, que se han convertido para muchas per- sonas en punto de encuentro, actividad cultural y experien- cia ecológica. Las huertas urbanas de Bogotá En Bogotá hay cada vez más huertas urbanas. Ellas producen alimentos sanos y fomentan la conciencia ambiental. Visitamos tres de ellas, que muestran que en Bogotá también hay un espacio para la naturaleza esde La Habana. El pasa- do 23 de marzo, se- gún habían pactado el presi- dente Juan Manuel Santos y el número uno de las FARC Timochenko, se firmaría al acuerdo final derivado de los Diálogos de Paz que sostie- nen ambas partes en La Ha- bana, Cuba, desde noviembre de 2012. gaceta El mundo aparte Publicación de la Corporación Universitaria Republicana Año 4 No. 16 - 2016 Abril / Mayo Bogotá, D.C. Colombia ISSN 2382-400X republicana 5 Las trabas jurídicas del proceso de paz Consideraciones sobre el Islam y el EI 6 D 3 Conferencia de Contabilidad El 2015 fue un año muy mo- vido en el ya proverbial combate entre los académicos y Colcien- cias. El primer jab lo conectó el organismo estatal al formular la serie de requerimientos de la convocatoria 693-2014, que dejó de una pieza a muchos. La otra as huertas urba- nas son espa- cios de cultivo en las ciuda- des, destinados a la producción limpia de alimentos. Suelen desarrollarse en jardines, balco- nes, terrazas o espacios comu- nitarios no productivos, como terrenos baldíos. La idea de cultivar en las ciudades moder- nas ha estado ligada, histórica- mente, a suplir las necesidades alimentarias de la población en contextos de crisis económica o guerra, pero también ha surgido como la exigencia de espacios verdes por parte de la sociedad civil ante el incesante creci- miento de las ciudades. Por María Alejandra Navarrete* De estudiante a joven investigador Por Breiner Francisco Quiroga López* Centenario L 4 Polémica entre humanistas y cienficos. ¿Hay, hoy por hoy, humanistas en la Universidad colombiana? Por Ángel Castaño Guzmán* Feria del libro, lectura desde su historia La Corporación Universitaria Republicana parcipará en la próxima Feria Internacional del Libro de Bogotá, FILBO. Esta es una historia de ese evento tradicional y su significado en la vida cultural colombiana. Por: Abelardo Monroy Ríos* En el caso de Bogotá la agricultura urbana se pracca con fines alimentarios, educavos, ambientales, recreavos, terapéucos y comunitarios. Experiencias en el semillero de ingeniería de sistemas del grupo GIDIS e decidido em- pezar con esta reflexión de Henri Poin- caré, científico conocido por contribuir en todos los ámbitos de las matemáticas; considero que refleja mi forma de pensar a la hora de trabajar en mi pro- yecto de grado, pero antes de iniciar, me presentaré como cor - tesía, para que todos los lectores conozcan un poco a este hom- bre que describe con alegría, la grata experiencia vivida en el semillero de investigación. H Republicanismo, Laicidad, Fundamentalismo Para entender el mundo en crisis Dentro de la búsqueda por definir mejor la concepción de Estado, las anguas civilizaciones dieron sus primeros pasos en la idenficación de los elementos que lo constuyen Los peligros de mezclar políca con religión Por: Doris Parra Salas* Por Gerardino Vivas Hernández* Para entender al país en crisis Por Katalina Vásquez Guzmán* ado que he tenido la oportunidad de ser entre- vistado en la Emisora de la Universidad Re- publicana, para hablar sobre el diálogo, procuraré hacer algu- nas precisiones sobre este tema. D Por Jesús Fernando Acosta Cobos* MORADA AL SUR Una semblanza al campo colombiano henchido de belleza y lozanía o es el deseo de querer dete- ner el tiem- po, mediante el musical vuelo de un cón- dor milenario, perdido en la espesura del llano o en el selvático ámbito de una or- quídea, lo que hace que el poeta Aurelio Arturo intente recrear “las voces manchadas del tenaz paisaje, llenas del ruido de tan hermosos caba- N Por Pablo Uribe Ricaurte* Teaching prespective Teaching, learning and motivation El presente arculo se ha escrito en ingles, y se publica sin traducción, como parte del propósito instucional de la Cor - poración Universitaria Republicana, de fortalecer el manejo de la segunda lengua en todos nuestros programas, espe- cialmente en el de Finanzas y Comercio Internacional By Viviana Quintín Lizcano* En el pasado mes de febrero se efectuó en el Auditorio de la Corporación Universitaria Rebublicana una conferencia internacional de Contabilidad en lo relacionado con Au- ditoría Financiera de PYMES, con parcipación de la Universidad de San Carlos de Gua- temala y Centro Universitario de Occidente, en la foto Dr. Gerardino Vivas - Rector (e), Dr. Alejandro Casllo - Vicerrector Académico, Dr. Percy Ivan Aguilar - Conferencista, Dra. Maria Cecilia Galindo - Decana Facultad Contaduría. ¿QUÉ NOS FALTA? Si los colombianos buscamos la paz L Por Angie Katherinne Orjuela Rocha* Los de abajo Por Harold Alvarado Tenorio Como ven los estudiantes republicanos el posconflicto Los caminos ocultos del Libertador. Ensayo Por Armando Orozco Tovar 7 2 a población en Colombia lleva décadas en un conflicto ar- mado interno que ha causado muertes, victimas y dolor, el pueblo anhela una solución, tie- ne deseos de encontrar el cami- no para llegar a vivir en paz y 4 2 4 3 Encuesta 6 En nuestro próximo número: 5

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Dialogo y conflicto

conflicto y e x c l u y e n al pueblo. Así la paz depende solo de los beneficios que obtengan quienes generan la guerra y no depende de lo que realmente desea y necesita el pueblo.

parte no tardó en contestar el gol-pe: Los docentes del Departamen-to de Literatura de la Nacional soltaron la bola de nieve: según ellos Colciencias desconoce la naturaleza de las humanidades.

así mejorar su vida cotidiana, su situación económica y social.

¿Cómo lograrlo? Los colom-bianos no se han puesto de acuerdo, en cierta medida por-que alrededor de la paz hay muchos intereses que favore-cen a los actores armados del

llos que ga-lopan bajo a s o m b r o -sas ramas”. Son, en palabras del poeta, “las vastas noches alumbradas por una estrella de menta que enciende toda sangre”; es también “la hoja sola en que vibran los vientos que corrieron por los bellos países donde el verde es de todos los colores, los vientos que cantaron por los países de Colombia”.

En el caso de Bogotá la agri-cultura urbana se practica con fines alimentarios, educati-vos, ambientales, recreativos, terapéuticos y comunitarios. En muchos casos, el deseo de crear un jardín también está li-gado a la preocupación por la calidad de los alimentos, en un escenario de productos trans-génicos, producción en masa y cambio climático. En Bo-gotá existen ya innumerables huertas informales, que se han convertido para muchas per-sonas en punto de encuentro, actividad cultural y experien-cia ecológica.

Las huertas urbanas de BogotáEn Bogotá hay cada vez más huertas urbanas. Ellas producen alimentos sanos

y fomentan la conciencia ambiental. Visitamos tres de ellas, que muestran que en Bogotá también hay un espacio para la naturaleza

esde La H a b a n a . El pasa-do 23 de marzo, se-

gún habían pactado el presi-dente Juan Manuel Santos y el número uno de las FARC Timochenko, se firmaría al acuerdo final derivado de los Diálogos de Paz que sostie-nen ambas partes en La Ha-bana, Cuba, desde noviembre de 2012.

gaceta

El mundo aparte

Publicaciónde la CorporaciónUniversitariaRepublicana

Año 4 No. 16 - 2016Abril / MayoBogotá, D.C. Colombia ISSN 2382-400X

republicana5

Las trabas jurídicas del proceso de paz

Consideraciones sobre el Islam y el EI6

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3Conferencia de Contabilidad

El 2015 fue un año muy mo-vido en el ya proverbial combate entre los académicos y Colcien-cias. El primer jab lo conectó el organismo estatal al formular la serie de requerimientos de la convocatoria 693-2014, que dejó de una pieza a muchos. La otra

as huertas urba-nas son espa-cios de cultivo en las ciuda-

des, destinados a la producción limpia de alimentos. Suelen desarrollarse en jardines, balco-nes, terrazas o espacios comu-nitarios no productivos, como terrenos baldíos. La idea de cultivar en las ciudades moder-nas ha estado ligada, histórica-mente, a suplir las necesidades alimentarias de la población en contextos de crisis económica o guerra, pero también ha surgido como la exigencia de espacios verdes por parte de la sociedad civil ante el incesante creci-miento de las ciudades.

Por María Alejandra

Navarrete*

De estudiante a joven investigador

Por Breiner Francisco Quiroga López*

Centenario

L4

Polémica entre humanistas y científicos.¿Hay, hoy por hoy, humanistas en la Universidad colombiana?

Por Ángel Castaño

Guzmán*

Feria del libro, lectura desde su historiaLa Corporación Universitaria Republicana participará en la próxima

Feria Internacional del Libro de Bogotá, FILBO. Esta es una historia de eseevento tradicional y su significado en la vida cultural colombiana.

Por: Abelardo Monroy Ríos*

En el caso de Bogotá la agricultura urbana se practica con fines alimentarios, educativos, ambientales, recreativos,

terapéuticos y comunitarios.

Experiencias en el semillero de ingeniería de sistemas del grupo GIDIS

e decidido em-pezar con esta

reflexión de Henri Poin-

caré, científico conocido por contribuir en todos los ámbitos de las matemáticas; considero que refleja mi forma de pensar a la hora de trabajar en mi pro-yecto de grado, pero antes de iniciar, me presentaré como cor-tesía, para que todos los lectores conozcan un poco a este hom-bre que describe con alegría, la grata experiencia vivida en el semillero de investigación.

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Republicanismo, Laicidad, Fundamentalismo

Para entender el mundo en crisis

Dentro de la búsqueda por definir mejor la concepción de Estado, las antiguas civilizaciones dieron sus primeros pasos en la identificación de los elementos que lo constituyen

Los peligros de mezclar política con religiónPor: Doris Parra Salas*

Por Gerardino Vivas Hernández*

Para entender al país en crisis

Por Katalina Vásquez Guzmán*

ado que he tenido la oportunidad

de ser entre-vistado en la

Emisora de la Universidad Re-publicana, para hablar sobre el diálogo, procuraré hacer algu-nas precisiones sobre este tema.

DPor Jesús Fernando

Acosta Cobos*

MORADA AL SURUna semblanza al campo colombiano

henchido de belleza y lozanía

o es el deseo de

querer dete-ner el tiem-

po, mediante el musical vuelo de un cón-dor milenario, perdido en la espesura del llano o en el selvático ámbito de una or-quídea, lo que hace que el poeta Aurelio Arturo intente recrear “las voces manchadas del tenaz paisaje, llenas del ruido de tan hermosos caba-

NPor Pablo Uribe

Ricaurte*

Teaching prespectiveTeaching, learning

and motivationEl presente artículo se ha escrito en ingles, y se publica sin

traducción, como parte del propósito institucional de la Cor-poración Universitaria Republicana, de fortalecer el manejo de la segunda lengua en todos nuestros programas, espe-

cialmente en el de Finanzas y Comercio Internacional

By Viviana Quintín Lizcano*

En el pasado mes de febrero se efectuó en el Auditorio de la Corporación Universitaria Rebublicana una conferencia internacional de Contabilidad en lo relacionado con Au-

ditoría Financiera de PYMES, con participación de la Universidad de San Carlos de Gua-temala y Centro Universitario de Occidente, en la foto Dr. Gerardino Vivas - Rector (e),

Dr. Alejandro Castillo - Vicerrector Académico, Dr. Percy Ivan Aguilar - Conferencista, Dra. Maria Cecilia Galindo - Decana Facultad Contaduría.

¿QUÉ NOS FALTA?Si los colombianos buscamos la paz

L Por Angie Katherinne

Orjuela Rocha*

Los de abajoPor Harold

Alvarado Tenorio

Como ven los estudiantes

republicanos el posconflicto

Los caminos ocultos del Libertador.

EnsayoPor ArmandoOrozco Tovar

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a población en Colombia lleva

décadas en un conflicto ar-

mado interno que ha causado muertes, victimas y dolor, el pueblo anhela una solución, tie-ne deseos de encontrar el cami-no para llegar a vivir en paz y

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3Encuesta

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En nuestropróximo número:

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Las trabas jurídicas del proceso de paz

ria más humanitaria que acabar una guerra. Esto encaja también con las doctrinas más modernas de la aplicación del Derecho In-ternacional Humanitario (DIH) vinculado a lo que se viene de-nominando la lex posconflicto. Es decir, el DIH es una herra-mienta eficaz para la construc-ción del posconflicto.

¿Cuáles son las ventajas de un Acuerdo Especial Humanitario?

En primer lugar, en Colom-bia existe una doctrina juris-prudencial de larga data que se denomina bloque de constitu-cionalidad que incorpora como valores supraconstitucionales los derechos fundamentales y el contenido de los principios rectores constitucionales que garantizan derechos funda-mentales a las personas. Ade-más de eso, la doctrina cons-titucional en Colombia viene declarando desde hace años que las convenciones de Gi-nebra son parte del bloque de constitucionalidad, con lo cual no cabe duda que si utilizamos un figura jurídica contemplada en las convenciones de Gine-bra para alcanzar el acuerdo final, inmediatamente el con-tenido garantista de derechos fundamentales que se incluye en ese AEH formaría parte del bloque de constitucionalidad. Y esto, además, nos permite un mecanismo de aprobación par-lamentaria sumamente simpli-ficado porque sin ser un acuer-do o un tratado internacional, el mecanismo constitucional más adecuado para tramitar legislativamente el AEH es el mecanismo es el previsto para la ley ordinaria que aprueba un tratado internacional. No hay que perder de vista que sin ser un tratado internacional, los requisitos de tramitación deben cubrirse porque todos los acuerdos que salgan de La Habana se firman al menos por tres sujetos de derecho interna-cional: el Estado colombiano, Noruega y Cuba, como países garantes. (Página/12)

*Periodista, reportera del diario Pá-gina/12 de Buenos Aires, Argentina.

gacetarepublicana gacetarepublicana / abril / mayo 20162 /

Oficinas: Cra. 7a No. 19-38Avenida de la República - Bogotá, D.C. - Colombia

Consejo de RedacciónCarlos Alberto Álvarez Andrade

Simón SantosDiana Josefina Téllez Fandiño

Ricardo Motta Vargas

DirectorEnrique Santos Molano

EditorCorporación Universitaria Republicana

Institución de Educación Superior sometida a la inspección, vigilancia y control del Ministerio de Educación Nacional.

Diseño y diagramaciónPatricia Díaz Vélez

ImpresiónEditorial La República

Corporación Universitaria Republicana

DirectivasRector, Gustavo Adolfo Téllez Fandiño

Vicerrector General, Gerardino Vivas HernándezVicerrector Académico, Alejandro Castillo Rivas

Decanos:Derecho, Iván Alfonso Cancino González

Contaduría Pública, Alejandro Castillo (Decano encargado)Finanzas y Comercio Internacional, Leidy Viviana Quintín Lizcano

Ingenierías y Ciencias Básicas, Harold Hernández CruzTrabajo Social, Jazmín Alvarado González

Director de Investigaciones, Rodrigo Plazas EstepaSecretario General, Esperanza Rodríguez

Asistente de Coordinación Administrativa, Diana Rojas

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esde La Haba-na. El pasado 23 de marzo, según habían

pactado el presidente Juan Ma-nuel Santos y el número uno de las FARC Timochenko, se firmaría al acuerdo final deriva-do de los Diálogos de Paz que sostienen ambas partes en La Habana, Cuba, desde noviem-bre de 2012. Pero el anuncio no llegó. Cada delegación se pro-nunció por separado reafirman-do que hay diferencias de fondo que no han facilitado pactos en los dos temas que faltan por firmar: Fin del Conflicto e Im-plementación, Verificación y Refrendación de los mismos. El primero tiene que ver, propia-mente, con el fin de la guerra: el cese bilateral del fuego, la de-jación de armas y la seguridad de los guerrilleros en zonas de concentración o territorios de paz donde realizarían trabajo comunitario, agrario y social para resarcir los daños causa-dos a la sociedad, lejos de las cárceles. El segundo, se refiere al entramado jurídico colom-biano e internacional median-te el cual cobrarán validez los acuerdos entre Farc y gobierno colombiano alcanzados en La Habana. Al respecto, el asesor jurídico de las Farc, el español Enrique Santiago habló con Página/12 explicando en qué están trabadas las discusiones en tal sentido y detallando cuál es la propuesta de esa forma-ción guerrilla para incorporar con seguridad jurídica los tratos firmados en tres años y medio, quizá cuatro, de esta histórica negociación.

¿En qué está hoy la subcomisión jurídica creada para concretar la propuesta de Justicia o Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) que ya se anunció en diciembre?

Esa subcomisión tenía el fin, además de discutir la JEP, rea-lizar una propuesta sobre la ley de amnistía, que debe aplicar-se a todo proceso de paz. Sin embargo, después de la firma del acuerdo en Justicia la Sub-comisión Jurídica ha dejado de funcionar porque el gobierno ha entendido que no correspon-de que siga realizando sus ta-

reas conjuntamente. Allí debe-mos avanzar en una propuesta sobre la amnistía y el indulto de los combatientes, tanto guerri-lleros como agentes del Estado, sino también de las personas condenadas por la protesta so-cial, liderazgo social, y defensa de derechos humanos...Ahora mismo no se está discutiendo esta materia, que ha pasado a ser discutida directamente en la Mesa de Conversaciones. Re-cordemos que la amnistía es un mandato del derecho interna-cional. El artículo 6.5 del proto-colo adicional segundo regula el derecho aplicable a los con-flictos armados internos, donde se cita que el gobierno conce-derá la más amplia amnistía que permitan leyes, respetan-do por supuesto los delitos no amnistiables como crímenes de lesa humanidad, genocidio y graves crímenes de guerra.

¿Por qué la Mesa y la comisión jurídica no avanzan con los acuerdos?

Esa es una gran discusión que atraviesa la Mesa en estos momentos. La implementación es una materia claramente esta-blecida en el punto sexto de la agenda, pero el gobierno ha ac-tuado unilateralmente al respec-to, lo que no ayuda propiamente a la confianza entre las partes. Por los medios de comunicación la delegación de las FARC ha conocido que el gobierno trami-ta una serie de reformas (como la reforma a la ley de orden pú-blico) y un nuevo mecanismo legislativo rápido para otorgar poder al Presidente y otras ins-tituciones para que puedan ex-pedir leyes con rapidez. El go-bierno quiere aprobar normas de desarrollo de los distintos con-tenidos del acuerdo final. Ese itinerario, además de unilate-ral, tiene dos graves problemas técnico-jurídicos: en ningún momento contempla la incorpo-ración al ordenamiento jurídico interno colombiano a las leyes surgidas del acuerdo. Además, regula unas atribuciones espe-ciales a las cámaras para desa-rrollar lo que el gobierno crea necesario del acuerdo final.

¿Una Constituyente para implementar los acuerdos?

Ese es un equívoco muy común en la sociedad colom-biana. La Constituyente no es un mecanismo para aprobar o implementar los acuerdos. La Asamblea Constituyente sería un mecanismo para poner en vigor un tiempo después de ha-berse firmado el acuerdo cuan-do ya se hayan aprobado los desarrollos legislativos que po-nen en funcionamiento la esen-cia, el núcleo fundamental de lo acordado. Muchos acuerdos incluidos en el acuerdo final deberán ser concretados en un mediano o largo plazo que a su vez exigen multitud de refor-mas constitucionales, entonces la opción es incluirlos en una Asamblea Constituyente que además construya ese nuevo modelo de país que tiene que surgir del fin del conflicto que ha durado más de 50 años. Para ese momento ojalá también se haya cerrado el proceso de con-versaciones con la otra fuerza guerrillera que queda todavía sin iniciar diálogos: el Ejército de Liberación Nacional.

¿Cómo es la propuesta de las Farc sobre un Acuerdo Especial Humanitario?

Es un mecanismo rápido de incorporación del acuerdo final al ordenamiento jurídico inter-no. El Acuerdo Humanitario está previsto en las Convencio-nes de Ginebra. Es un mecanis-mo muy usado en los conflictos para regular aspectos humani-tarios del enfrentamiento. Este tipo de acuerdo únicamente necesita dos requisitos. Prime-ro, que ambas partes quieran firmarlo como acuerdo especial humanitario, y, en segundo lu-gar, su contenido debe ser hu-manitario. Esto está expresa-mente previsto en la regulación que establece la convención de Ginebra que dice que, además de los supuestos previstos en la Convención, las partes podrán fijar acuerdos especiales so-bre cualquier otra materia que consideren. En todo caso, es evidente que no hay una mate-

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La historia del conflictov ar-mado en Co-

lombia tiene sus orígenes en el siglo XIX, justo después de la independencia, las gue-rras civiles entre federalistas y centralistas, entre liberales y conservadores dejaron a la po-blación un legado de odios, in-tereses, pobreza y desarraigo; una de las consecuencias de la guerra de los mil días fue la pérdida del canal de Panamá, hecho ocurrido en los inicios del siglo XX.

La historia más reciente, la que han vivido las generacio-nes de la última década del siglo XX y los años transcu-rridos del siglo XXI, muchos estudiantes universitarios, pue-den recordar desde la presiden-cia de Andrés Pastrana Arango con el Plan Colombia, que es un acuerdo bilateral constitui-do entre los gobiernos de Co-lombia y Estados Unidos, los diálogos en San Vicente del

Caguán. Álvaro Uribe Vélez con el Tratado de paz con los paramilitares, el proceso de la seguridad democrática, que fue su lema de gobierno. Y ahora, Juan Manuel Santos con Paz, equidad, educación, este como su plan de gobierno.

Esto evidencia que la paz es un asunto que preocupa a este gobierno, razón por la cual se está dando en Cuba las mesas de negociación con el grupo subversivo alzados en armas: Fuerzas Armadas Revolucio-narias de Colombia (FARC) que pretende llegar a acuerdos para su desmilitarización y po-der participar en política.

Ahora, se debe determinar la razón por la cual las medidas e intenciones que han tenido los gobiernos ya mencionados no han sido definitivos, no han aportado para que el estado colombiano viva en paz, los tratados no han sido un camino para la convivencia donde se

respeten los diferentes puntos de vista de sus habitantes. Te-niendo en cuenta que estas me-didas o acuerdos no han sido definitivos, se deben evaluar los resultados, porque la paz es una construcción social y es el resultado de la justicia, la paz no puede ser una respues-ta efímera a una problemática que aparentemente no tiene únicamente sus orígenes en las guerrillas, sino que la tiene también en la desigualdad, la pobreza, la ignorancia y la ven-ta del patrimonio de la nación.

No solamente los factores políticos o económicos influ-yen en este proceso, se deben tener en cuenta el narcotráfico y la corrupción, estos también son actores que impiden que el pueblo viva en paz. Los co-lombianos se preguntan: Co-lombia, siendo un país tan di-verso en espacies con riqueza en flora, fauna agua, recursos naturales, ¿Por qué no es una potencia mundial? ¿La pobreza

e ignorancia, en los colombia-nos los lleva a no poder solu-cionar su conflicto interno? ¿Por qué el individualismo es tan grande? Es hora de pensar que si afecta al otro me afecta a mí, es necesario no olvidar, re-cordar la historia, bien lo dijo Eduardo Galeano: “Un país sin memoria está condenado a re-petir su historia”. El problema del pueblo colombiano es que quiere un cambio, pero no es capaz de hacer algo para que pase. ¿Por qué? Porque cree que todo está en manos de los demás y se acostumbró a que si algo sale mal es culpa de todos menos de él mismo.

La desigualdad económica y social es otro factor que entra a jugar en contra de la paz, en un país en el que si se mira a la derecha se puede encontrar un hombre con tres o cuatro carros, una mansión en la ciu-dad y dos finquitas en tierra ca-liente para descansar los fines de semana y hacia la izquierda

hay un hombre que no ha podi-do comer nada en todo el día, que durmió toda la noche en un andén resguardándose del frio con papel o cartón. Y ¿a quién le interesa? Aquí algo está fa-llando, pero ¿qué será? hay desigualdad en todo el país, los ingresos no están bien distri-buidos, el pueblo colombiano continua sus días con nada, entonces comienza a crecer el problema, porque las personas que no tienen nada siguen con la ignorancia y la pobreza que no les permite soñar en gran-de, que no les permite querer levantarse para buscar mejo-res oportunidades, un pueblo en estas condiciones tiene un bajo autoestima, culpa de sus desgracias al estado, el go-bierno en parte tiene la razón, pero el pueblo debe asumir la responsabilidad por sus actos y dar todo de sí para aportarle algo al país y así mismo, claro está que, esto se logra con una verdadera educación y con una

¿QUÉ NOS FALTA?Si los colombianos buscamos la paz

cultura de la disciplina, una cultura del cuidado y respeto por la naturaleza. Es necesario dejar el facilismo, (este es el primer paso a la corrupción), aprender con esfuerzo, dedi-cación y principalmente con educación, se debe aprender a elegir, así se construyen las democracias y se vive en paz.

La solución está en luchar por un país mejor, en ver y preocuparse por la persona que está al lado, en entender que si se hace daño a alguien más ha-brá consecuencias negativas no para una persona sino para todo el país, porque es una comuni-dad, un pueblo, una nación y cuando Colombia entienda eso podrá tener verdadera paz. La paz es un camino que constru-yen los seres humanos.

* Facultad de Derecho I-SemestreCorporación UniversitariaRepublicana

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necesariamente por la agresión, sino por el reconocimiento del otro. De esta forma de entender el conflicto vienen consecuencias muy pertinentes como el respeto al otro, su aceptación y al acercamiento tranquilo. La agresión en el conflicto nace precisamente por la idea de la negación del mismo conflicto.

Tal vez el diálogo requiere el ejercicio mayeútico de Sócra-tes de la ironía ante la certeza que nos alimenta y nos hace sentir con superioridad ante el otro. Paradójicamente diría que solo en el conflicto reconocido y valorado críticamente se puede vivir en una paz real, la otra es la paz de la sumisión, de ese orden hegemónico, la falsa paz de la quietud.

En nuestra sociedad aún estamos lejos de aprender a manejar el conflicto, estamos acostumbrados a quitarle al otro, al que se en-frenta a nosotros, cualquier credibilidad, a tratar de entender solo desde nuestra mirada, por qué actúa como actúa.Estamos lejos de

reconocer nuestras inconsistencias, injusticias, sin el sen-timiento tradicionalista de la culpa, sino con la actitud de apertura y autocrítica como base de acercamiento al otro y hacer reposicionamiento, una reubicación que nos permita asumir un destino compartido.

Desde la perspectiva del Derecho, este puede aportar elementos claves para comprensión dinámica y constructi-va del conflicto, dada su presencia continua e inevitable en el ámbito de la resolución de los mismos; puede significar entre otras cosas el incentivar y exigir el reconocimiento de la posibilidad real de cada actor en el conflicto de ex-presarse y de ser tenido en cuenta y con ello, no sólo el derecho a ser cada uno escuchado, sino a ser realmente tenido en cuenta y simultáneamente el respeto a la pala-bra del otro, de la otra u otras partes e intrínsecamente en este ejercicio a asumir todos estos elementos que se han venido mencionando como el reconocimiento de las diferencias y de superar la solución de los conflictos por la mera vía del pleito, de la judicialización y de asumir a cambio el Derecho como ejercicio propio y comprometido consigo mismo y con el otro, sin obviar las consecuencias jurídicas de los actos, sino de asumirlas con autonomía. Asumir realmente la responsabilidad, como lo plantearía Emanuel Levinas, que tenemos siempre ante el otro, que lo que pasa con el otro pasa con nuestra responsabilidad.

El Derecho como se establece en su esesencia, como una búsqueda de regulación de la convivencia humana, tiene un inmenso deber de aportar en este campo, en especial en sociedades como la nuestra caracterizadas por la agresividad cuando surgen conflictos en cual-quier ámbito, ya sea el familiar, en los espacios citadinos como la calle, transporte público, tráfico vehicular o en los espacios políticos que nos dejan esa triste huella descrita y narrada por autores como Alfredo Molano en su texto “Los años de tropel”, o los execrables crímenes del paramilitarismo, episodios en donde la Instituciona-lidad ha estado desafortunadamente comprometida en y la fallida lucha armada de la guerrilla que terminó convirtiéndose en muchas ocasiones en violación de los derechos humanos de las mismas po-blaciones a quienes decían defender.

Es especialmente en este conflicto armado que hunde lejana-mente sus raíces en la vilolencia política en Colombia en donde se requiere una comprensión lúcida del sentido del diálogo y su di-mensión conflictiva, de manera que no se reduzca a comprensiones simplistas e inmediatistas lideradas por ópticas que no permiten la superación de esa comprensión de sometimiento y señalamientos, de alimentar la intolerancia o a otras visiones aparentemente más positivas pero que también reducen su visión “a la superación del conflicto” desconociendo que esos elementos que están inmersos en el mismo deben ser asumidos con criticidad y dinamismo para que sean esa levadura, al modo evangélico tal vez, de esa sociedad que escuche con honestidad y respeto a todas estas poblaciones que han sido víctimas del desarraigo y la marginación, con las consecuencias que ello exija, como pueda ser el cambio de modelo económico y social.

El diálogo es el pleno uso de la palabra, la posibilidad de ex-presar al otro lo que pensamos y escucharlo, entendiendo así que nuestro modo de pensar y el del otro son relativos y deben ir al en-cuentro o desencuentro. Entender que hay otros modos de pensar que pueden ser válidos y ante los cuales debemos ser atentos, Uso de la palabra propio y común.

Los dominios y las intimidaciones y represiones se vuelven in-soportables: indeseables. Ciertamente seguirán, pero ya no se aco-gen ciegamente por las mentes que buscan lucidez y plasticidad. El diálogo es vida.

REFERENCIASLEVINAS, Emmanuel, Filosofía del DiálogoHABERMAS, Jurgen, Ética del discurso y la cuestión de la verdad. DELEUZE, Gilles, Diferencia y Repetición.

*Licenciado en Ciencias Religiosas, Maestría en Filosofía del De-recho, Docente de la Corporación Universitaria Republicana.

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abril / mayo 2016 / gacetarepublicana / 3

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ado que he tenido la oportunidad de ser entrevis-tado en la Emisora de la Universidad Republica-

na1, para hablar sobre el diálogo, procuraré hacer algunas precisiones sobre este tema.

l tema del diálogo y su comprensión es relevante por la actualidad colombiana (no por moda, ni oportunismo), en mi caso lo vengo desarrollando desde hace años a través de lecturas, reflexiones e intentando construir y generar un concepto válido y amplio de un aspecto coyuntural que como muchos otros, se toman en muchas ocasiones sin la profundidad y criticidad necesarias, no quiero de-cir que yo lo he logrado plenamente, sería arrogancia, pero siento que algún intento serio si he realizado al respecto. Invito al lector a entrar en interacción en este tema y a discutirlo cuando sea posible.

En la cultura occidental el ejercicio del diálogo tiene su referen-te en Sócrates y Platón, quienes condensando los planteamientos y desarrollo de filósofos precedentes y contemporá-neos como Zenón y los mismos sofistas (gestores de la retórica), establecen el ejercicio de esta modalidad dialogal como una forma de conducir al interlocutor hacia la verdad (específicamente Sócrates)y diseñar una forma de razonamiento inductivo que permita la postulación de los conceptos que fundamenten el conocimiento y la Verdad (Platón). Estanislao Zule-ta en un seminario realizado en la Universidad del Valle en 1976 en el que hace una presentación de la Lógica y publicado en el Texto “Lógica y Crítica”2 en la cual presenta el método del diálogo socrático, como un ejercicio crítico y creativo. En este ejercicio el elemento dinamizador es la pregunta que hace el papel mayéutico de propiciar un alumbramiento en el interlocutor, en cuanto lo lleve a descubrir su igno-rancia y a entrar en una dinámica de cuestionamiento y de descubrimiento de la verdad a través del razona-miento, este ejercicio mayéutico es doloroso, supone “parir”, sentir el dolor del alumbramiento. Comparto este planteamiento de Zuleta en cuanto al dinamis-mo mismo del diálogo, sin adherirme al concepto de Verdad socrática, pero esta discusión no es del todo de este artículo, aunque con las afirmaciones que hago más adelante se entreverá el por qué.

Etimológicamente diálogo significa “a través de la palabra” (día: a través, logo: palabra), esto puede interpretarse para aquel que es dialogante, como aquel que opta por resolver sus conflictos a través de la razonabilidad del habla, de la argumentación y la persuasión.

De acuerdo a lo expresado en los párrafos anteriores sobre el concepto de diálogo platónico y la etimología de esta palabra, más las consideraciones que haré posteriormente, puedo plantear la hi-pótesis que pensar en diálogo conlleva en pensar en conflicto. Usualmente cuando pensamos en dialogar es debido a desacuer-dos, a conflictos, que se está en conflicto con alguien que se debe convertir en interlocutor y este alguien cobra una dimensión del otro diferente a mí, con sus visiones, su lógica, su forma de actuar, frente a mis visones, mi lógica y mi forma de actuar, diferencias que nos llevan a chocar porque coincidimos en un espacio y en un tiempo. Sin entender el papel del conflicto en el diálogo, no se puede entender el diálogo, o su comprensión se convierte en algo pasivo y reductiva y es que en realidad es muy frecuente entender el diálogo con un sentido demasiado dulce y apaciguado. Por la naturaleza biológica, instintiva, de supervivencia, tendemos a de-fender en principio lo nuestro, nuestros intereses y para ello la vía es el dominio, la imposición y hasta la eliminación del otro.

El problema que debe asumir el diálogo es precisamente el conflicto que genera la diferencia, concepto relacionado con lo heterogéneo. La etimología de conflicto es “golpe entre varios”, el golpe implica, choque, dolor, confrontación y el diálogo es una respuesta a esto, pero no es una respuesta para negar, ni adorme-cer, no es un calmante o paliativo, en cambio como lo podemos asociar con su etimología podría decirse: dialogar es resolver los conflictos a través de la palabra.

Sin embargo, y aquí comienza mi planteamiento y punto de discusión y reflexión: la función del diálogo es aceptar la realidad del conflicto, no negarla, es aceptar que existen diferencias y que el procedimiento dialogal no es censurar dichas diferencias solo por el hecho de ser diferencias. El conflicto en esencia no es un fenómeno negativo. El diálogo requiere un cambio importantísi-mo en la idea errónea que tenemos del sentido del conflicto, pues de alguna manera aprendimos que el conflicto es destructivo y de hecho indeseable. Es una idea muy errónea: pues la vida es conflictiva, y entre más pensantes somos, es posible que seamos más conflictivos, pues el pensar lleva al cuestionamiento, cuando

Dialogo y conflictoeste pensar se hace crítico, es decir descubre las inconsistencias, las fisuras, y ello nos lleva a desacuerdos y a enfrentamientos in-evitables; pero como no tenemos la capacidad de entender los conflictos y la diferencias que llevan implícitas, simplemente los convertimos en indeseables y solo vemos dos posibilidades: o eli-minar, dominar, someter a quien se enfrenta con nosotros o dialo-gar para eliminar el conflicto a través también, ya no de la coac-ción física, sino racional, moral o ética, de manera que signifique arrepentimiento, un sentimiento de culpa y al final una negación de las razones de una de las partes, y esta parte a la postre quedará sometida, perdiéndose la riqueza del conflicto y además quedando incubada la problemática no reconocida, ni resuelta que en un mo-mento cualquiera llevará a la lucha de poderes y de desacuerdos.

Tener una mentalidad dialogal implica pensar de otra manera, pues crecimos en una cultura de lo homogéneo, de la uniformidad, de la verdad suprema, de los modelos y las escalas de valores, de

la competencia y de la exclusión, de la auto-afirmación, del sujeto supremo, y allí por supuesto no hay convivencia en lo múltiple, en lo diverso, en la pluralidad, sino en la reductibilidad del otro en función mía o de la solidaridad fingida o excepcional. Al mismo tiempo que nos inculcaron el sometimiento ciego a la autoridad, a las normas, a las instituciones, con una mentalidad entre sumisa y conforme por interés propio en cuanto, valga la redundancia, este sometimiento nos convenga. Desde esta cultura del sometimien-to, de no criticar, de no expresarnos, renunciamos a reconocer los conflictos y ello nos ha llevado a que estos queden latentes y algu-nos momentos estallen en forma ya incontrolada.

El diálogo entendido desde una perspectiva sociológica y filosó-fica supone la crítica y autocrítica, la deconstrucción y la reelabo-ración de esquemas, asumir la vida desde lo conflictivo para crecer desde lo negativo, en el riesgo de la muerte y de la diferencia. Así pretender que se asuma una filosofía del diálogo sin la crítica, sin las reeelaboraciones, no es más que absorber el sentido del diálogo a un ejercicio ajeno al diálogo mismo en cuanto no se entra en el terreno de la crítica de sí, ni del entorno, sino que se busca meramente el acuerdo estratégico, es un intento, en el mejor de los casos tímido de acercamiento, pero sin rupturas, sin asumir lo cambiante.

Decía atrás que para dialogar había que pensar diferente, y ese pensar diferente es aceptar que no hay una única forma de pensar, ni de actuar, ni de comportamientos iguales, desde esta perspec-tiva lo supremo, lo metafísico, lo único, lo totalizante tiene que dejarse, pues van aliados a lo dominante, a la idea del leviatan, de la sumisión, del sueño reduccionista, de la cárcel de uno mismo, especie de fortaleza en donde nos refugiamos, o de la armadura que tomamos cuando vamos hacia quien es diferente a nosotros con la idea que debemos enfrentarcos a él, para eliminarlo o míni-mamente someterlo.

El ser dialogante nos debe dirigir a lo móvil, lo elástico, lo flexible; posiblemente en el discurso del pensamiento débil de Va-ttimo, pero también en nuestra mismisidad, pues dialogar es tener la posibilidad de expresar lo que se siente y lo que se piensa en un terreno de ablandamiento en donde se llega de alguna manera a que se aprecie la diferencia..

Si se pudiese entender el conflicto como una realidad y una fuen-te de riqueza, se entendería el diálogo no como un ejercicio simple y llano para eliminar el conflicto, sino para entender el conflicto de forma crítica y dinámica, lo cual conlleva a su valoración en el reco-nocimiento de la razón de ser de las diferencias y del aprendizaje de nuevas formas de relación, de entendimiento a partir de estas dife-rencias. Implica que cuando diálogo reconozco que hay derecho a la diferencia, a la disidencia y al desacuerdo y que es desde allí y solo desde allí que se puede generar una convivencia real y equilibrada con el otro y que conflicto no significa algo indeseable y asumido

es que Aure-lio Arturo quie-

re apaciguar el agreste paisaje de

las montañas, también hechas de sueños, donde un grito persiste entre las alas de pa-lomas salvajes, para detener su canto ahí, entre la espe-sura, donde todos los cedros callan, donde todos los ro-bles callan, para compartir su poema con un lector ingenuo que ignore el significado del picotazo alado de una iguana que nace escondida entre las grandes lunas llenas de silen-cio y espanto.

¡Oh poeta! Enséñanos a reconocer en el paisaje de

esa tierra protegida por un ala perpetua de palomas, el clamor de una raza milena-ria, alimentada por el canto melodioso de los muiscas, y fortalecido por espumas de maíz y vértebras de esencias tropicales, la razón de ser de nuestros antepasados adora-dores del sol “junto al árbol rojo donde el cielo se posa”, “donde hay un caballo negro con soles en las ancas, y en cuyo líquido habita una cen-tella”.

Aprender de la adusta ma-jestad del vuelo de un cóndor que se eleva entre la neblina que envuelve la cordillera de los Andes, para regresar

a la “Morada al sur”, cuando Aurelio Arturo “pretende su-cumbir ante unas manos de cera que vuelan sobre la fren-te donde murmuran las abejas doradas de la fiebre”.

Y después de sucumbir ante el encanto femenino que yace en nuestras tierras, el poeta se detiene para afirmar que “tantas, tantas mujeres bellas, fuertes, no, no eran brisas visibles, no eran aro-mas palpables”, y después preguntarse: “la luz que ve-nía con tan cambiantes tra-jes, entre linos, entre rosas ardientes, ¿era tu dulce tierra cantando, tu carne milagrosa, tu sangre? Sí, poeta, esta es

Colombia. Con sus mujeres cuya calidez envuelve la piel de la luna con ardientes ríos volcánicos; con sus selvas, cordilleras y montañas, que esconden la riqueza de una raza indómita forjadora de hermosos mitos y leyendas en cuyas historias yace la noble-za de su gente compenetrada en la defensa de su hábitat circundado por extensos ca-fetales y cálidos almendros y robledales.

*Profesor de Humanidades en la Corporación Universitaria Republi-cana. Miembro correspondiente de la Academia de Historia de Bogotá.

1. Entrevista hecha en el Programa “Momento Académico” que se trans-mite los días Jueves a las 2 PM, con el nombre “Dialogando sobre el diálogo”, en la Emisora Virtual de la Corporación Universitaria Republicana”.

2 LOGICA Y CRÍTICA, Estanislao Zuleta, Quinta Edición, Medellín 2010Hombre Nuevo Editores, Lección uno y Lección dos, pp 17-33.

YMORADA AL SUR

Una semblanza al campo colombiano henchido de belleza y lozanía

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sentation without the guidance and the teaching company. To this extent, my teaching is showing students, how to im-prove their knowledge through a presentation. Since they must collect information, study the issue, create a Power Point presentation, give, understand and express the best possible way to his/her companions, then through the debate as a teaching and training guide and owner of the experience of the topic, accompany each of my students until the end of his/her presentation.

As a conclusion, for me ed-ucation should not be limited to transmitting knowledge, but must also be capable of trans-mitting positive values and atti-tudes. These motivate students to improve their learning channels, to encourage them to require a little more than they believe normal, students do not have to eat a whole or what teachers can teach, they have to improve their argumentative capacity.

*Dean – Faculty of finance and in-ternational trade.

Las huertas urbanas de Bogotágacetarepublicana / abril / mayo 20164 /

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Visitamos tres de ellas, que muestran, cada una a su manera, que en Bogotá, esta ciudad con millones de

habitantes, vehículos y edificios de concreto, también hay un espacio para vivir la naturaleza.

Un techo lleno hortalizas

En Bogotá hay cada vez más huertas urbanas. Ellas producen alimentos sanosy fomentan la conciencia ambiental. Visitamos tres de ellas, que muestran que en

Bogotá también hay un espacio para la naturaleza

En el piso 11 del edificio de la Caja de Sueldos de Retiro de la Policía Nacional (Casur), en la carrera 7 con calle 12B, se encuen-tra un verdadero paraíso de lechugas, cilantro, perejil y cebolla. Es una huerta-terraza en pleno centro de Bogotá. El mayor Felix Vera, secretario del director de Casur, decidió que era mejor apos-tarle a la agricultura urbana y al reciclaje que al cemento gris de esta terraza que permaneció vacía por casi sesenta años.

257 llantas de automóvil, así como cajas de Icopor, latas de pintura y botellas de gaseosa sirven de macetas para las plantas que se cultivan en esta huerta: desde girasoles y calabazos hasta fresas y aromáticas. El estiércol compostado de los caballos de la policía es utilizado como abono y todos los días vienen abejas de los cerros orientales a visitar las plantas, a reconectar el ciclo de vida que se ha perdido por la urbanización.

“Estamos mejorando la calidad de vida al alentar el consumo de alimentos limpios y, al mismo tiempo, utilizamos material reci-clado y educamos a nuestra comunidad”, dice el mayor Vera. Se-gún él, “reciclar y cultivar también es educar”. El objetivo del pro-yecto ha sido vincular a los retirados de la policía y a la ciudadanía con la agricultura urbana. Además, se espera que de esta huerta se deriven procesos productivos para los casi tres mil miembros de la policía que han sido víctimas del conflicto armado en Colom-bia. La idea es que puedan encontrar en el trabajo agrícola una herramienta para su rehabilitación. El compromiso ambiental de la huerta es su eje. “Si replicamos esto en todos los edificios de Bogotá, se contribuiría de alguna manera a combatir los efectos del cambio climático”, piensa el mayor Vera. “Y eso es lo que bus-camos: construir entre todos la ciudad y el planeta que queremos”.

La huerta de MutisEn el Jardín Botánico de Bogotá José Celestino Mutis (JBB)

crece una huerta tan variada y hermosa que, de haberla conocido, el mismo José Celestino Mutis –sacerdote y botánico español, quien en 1783 inició una expedición botánica por Colombia, la cual duró treinta años– la hubiera incluido en sus viajes científicos. La huerta del Jardín Botánico es un espacio amplio, lleno de senderos que permiten ver la variedad de más de cien especies de plantas aro-máticas, medicinales, hortalizas y frutales. Caminar allí es sentir la vida de la semilla que crece y respirar los olores de la cosecha.

Desde el 2004, el JBB –en el noroccidente de Bogotá, en la ave-nida calle 63 con carrera 68– ha liderado el programa de agricultura urbana en la capital colombiana. Ofrece talleres y capacitaciones gratuitas a quienes están interesados en saber cómo sembrar en casa y en espacios comunitarios. “Los participantes aprenden a preparar el suelo, abonos orgánicos, a cuidar sus plantas y, finalmente, verlas crecer, cosecharlas y consumirlas”, explica el coordinador del Pro-yecto de Agricultura Urbana del JBB, Diego Gutiérrez. “En medio de tanta contaminación de la ciudad”, añade, “nos interesa ver cómo la gente puede aprovechar esa producción orgánica para su salud”.

Una casa para sembrarEn una distinguida esquina del norte de Bogotá, calle 82 con

carrera 7, se encuentra una casa blanca rodeada de árboles. En su jardín crece una huerta comunitaria organizada por el Goethe-Ins-titut en Bogotá, con el objetivo de enseñarle a los bogotanos y vecinos de la zona a cultivar sus propios alimentos, todo bajo una perspectiva de conciencia ambiental.

La casa, que evoca el estilo de la Bauhaus alemana, tiene una larga historia. Construida a mediados de siglo XX, fue primero un lugar residencial, luego la embajada de la antigua República Demo-crática Alemana en Colombia, y hasta hace poco tiempo fue la sede del Goethe-Institut en Bogotá. Actualmente se encuentra en renova-ción y recibe a vecinos y ciudadanos en general que buscan un res-piro en medio de la ciudad y reconectarse con su esencia agrícola.

Consumir lo que sembramos “es volver a la tierra, hacer un alto en el camino y dejar de pensar en modo automático para saber de dónde viene nuestra comida”, afirma Diana Lara, ingeniera fores-tal y voluntaria en el proyecto. Plantas aromáticas y medicinales, fresas, curubas, pimentón, lechuga y brócoli son algunos de los alimentos que produce la huerta. Está construida en forma circular y cuenta con una sección de lombricultura, un semillero y zona de compostaje. La directora del Goethe-Institut en Bogotá, Katja Kessing, explica que este espacio está abierto para todos los bogo-tanos, “solo se requiere buena voluntad para entrar a esta comuni-dad. Son bienvenidos todos los que quieran aportar o aprender”.

Yoga y mercados sostenibles son algunas de las actividades que ofrece el “Jardín comunitario y educativo Casa 82”. Ricardo Guzmán, vecino de la huerta, afirma: “Poner en la mesa productos más sanos, saber de dónde vienen y tener la posibilidad de mejorar todo el entorno de la ciudad es fantástico”.

La cosechaAdemás de ofrecer independencia alimentaria, la agricultura

urbana fomenta el bienestar del individuo y es una herramienta para la reconstrucción del tejido social. En Bogotá existen nume-rosas experiencias de huertas urbanas que incluyen poblaciones como madres cabeza de familia, comunidad estudiantil, discapa-citados y jóvenes con problemas de drogadicción.

El 27 de agosto del año pasado se firmó el acuerdo 605, docu-mento que expone los lineamientos para institucionalizar el pro-grama de agricultura urbana y periurbana agroecológica en Bo-gotá. Es el mayor soporte jurídico que se ha logrado en el tema. Los bogotanos están sembrando y han empezado a recolectar su cosecha: alimentos sanos, conciencia ambiental y la reconexión con sus raíces agrícolas.

*Periodista

Copyright: Goethe-Institut

Marzo 2016

any people believe that teaching is

to transmit knowledge from mind to mind or to provide a new concept to the people who do not have it; but teaching is more than that. Teaching is planning daily a new way to create awareness of thinking an improvement into a human being. Therefore, as a teacher through teaching it is necessary to find a suitable space, a channel to disseminate knowledge intertwined the stu-dents with the subject.

When teachers find the right space, and how to teach or stu-dents themselves understood, comes as new concept that is learning. Then, students will be able to find a way to learn about the subject, where it must relate the new information to prior knowledge and organize it.

Subsequently, it is import-ant to get the motivation, so the student will be able to contin-ue working on the issue in the classroom. That is, what will emerge taking into account the

desire for improving their learn-ing by creating new alterna-tives for the same knowledge. Having a motivated student will help to understand that the based on above, how to teach the subject of geopolitics and costs is through presentations, created by the students, in com-panionship and guidance of the teacher. The purpose is to find that they can pass on the knowl-edge to their peers through the interaction of prior knowledge of the theme with the knowl-edge possessed by the teacher. After the presentation, we have a debate to improve arguments and concepts that were not clear in the presentation.

This allows students, to im-prove their public speaking, im-proving the interpretation of the information, getting feedback, since having to know the theme to express to their classmates, to inquire and ask the how, what and why of each of the top-ics according to the proposed teaching curriculum.

It is important to remember that students cannot make a pre-

Teaching prespectiveTeaching, learning

and motivationEl presente artículo se ha escrito en ingles, y se publica sin traducción, como

parte del propósito institucional de la Corporación Universitaria Republicana, de fortalecer el manejo de la segunda lengua en todos nuestros programas,

especialmente en el de Finanzas y Comercio Internacional

Conferenciade Contabilidad

En el pasado mes de febrero se efectuó en el Auditorio de la Corporación Universitaria Rebublicana una conferencia internacional de Contabilidad en lo

relacionado con Auditoría Financiera de PYMES, con participación de la Universidad de San Carlos de Guatemala y Centro Universitario de Occidente, en la foto Dr.

Gerardino Vivas - Rector (e), Dr. Alejandro Castillo - Vicerrector Académico, Dr. Percy Ivan Aguilar - Conferencista, Dra. Maria Cecilia Galindo - Decana Facultad Contaduría.

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Feria del libro,una lectura desde su historia

El mundo aparte

abril / mayo 2016 / gacetarepublicana / 5

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mediados de la década de los

años 30 del siglo XX, pe-

riodo de la segunda república liberal, siendo más precisos, el 3 de octubre de 1936 y en la al-caldía de Jorge Eliecer Gaitán se inauguró en Bogotá la pri-mera feria del libro, en la foto-grafía del periódico El Tiempo (foto 1) se ve al alcalde en el acto de inauguración con los ministros de Argentina, Ecua-dor y Cuba, asistió también el gobernador del departamento, el evento se realizó en el patio de la gobernación (foto 2). El hijo de la maestra de escue-la doña Manuela Ayala y el vendedor de libros don Elie-cer Gaitán Otálora tenía claro que leer es acceder al conoci-miento, al arte y la cultura; y en consecuencia, como gober-nante dirigió sus acciones a la realización de la feria del libro, conciertos públicos y otros es-pacios culturales.

La Bogotá de esta época vivía el arte y la cultura, no en vano se le denominó la Atena suramericana, los conciertos en el teatro Colón se anuncia-ban en los periódicos y aunque los costos eran considerables como alternativa el conservato-rio de la Universidad Nacional ofrecía conciertos populares patrocinados por la alcaldía, así mismo, había variedad de conferencias sobre escritores clásicos y contemporáneos. Al comparar con lo que sucede en la actualidad en la ciudad no es algo novedoso, pero si consideramos los medios y las condiciones de ese momen-to, se puede decir que es un acontecimiento. Cabe anotar el comentario que hace el perio-dista del Tiempo (foto 4) el día 5 de octubre de 1936, en pleno desarrollo de la feria del libro, comenta sobre lo acontecido con el auxilio para la orquesta Sinfónica Nacional el cual fue negado por la cámara, el comu-nicador lamenta la decisión de haber votado en contra, mani-fiesta que “es un golpe en con-tra de la cultura, no por la falta de presupuesto sino por intere-ses de los partidos y las ideolo-gías, no lo votaron a favor por no representar ganancias para los congresistas en dietas par-lamentarias o viáticos”. Se ob-serva que las prácticas no han cambiado, la historia se repite, unos defendiendo la cultura, y otros desde el gobierno nacio-nal desconociéndola, negándo-la, porque esta no genera “ga-nancias” personales.

Volviendo al tema, en los comentarios sobre el desarro-llo de la feria se destacan los libros más leídos, las preferen-cias y el público (fotos 5 y 6). Entre los autores se encuentran “Arturo Suarez y Vagas Vila” siendo estos los de mayor de-manda en el mercado, la pre-ferencia por las novelas pa-sionales y los folletos dejan a los clásicos de la literatura en desventaja. El público es va-riado, las personas del común, el pueblo, los trabajadores, los jóvenes estudiantes, las damas y los caballeros de todas las condiciones sociales y econó-micas se reunieron alrededor de los libros. En el pie de la fo-tografía del tiempo se lee:

“La feria del libro ha sido un éxito, cerca de cincuenta mil volúmenes han encontrado fácil mercado. El primer ensa-yo en la divulgación cultural es bastante satisfactorio. Han tenido preferencia las novelas románticas. Los puestos impro-visados en los edificios públi-cos, algunos de ellos servidos por bellas muchachas, han sido todo un acierto. Esta fotogra-fía muestra los expendios más centrales de la cuidad.”

La primera feria del libro en Bogotá fue corta (una se-

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La Corporación Universitaria Republicana participará en la próximaFeria Internacional del Libro de Bogotá, FILBO. Esta es una historia de ese evento tradicional y su significado en la vida cultural colombiana.

mana), por la falta de interés, por la poca importancia que los alcaldes posteriores a Gaitán le dieron a la lectura el evento no se volvió a repetir. Pasaron cincuenta y dos años para po-der realizar oficialmente la pri-mer feria internacional del libro en Bogotá el día 29 de Abril de 1988, esta vez la sede es el cen-tro internacional de negocios y exposiciones Colferias, centro que abrió sus puertas el 29 de octubre de 1954 y que desde sus inicios su propósito ha sido dar una buena imagen de Co-lombia e impulsar el desarrollo de la industria nacional, de ma-nera adicional ha contribuido a la divulgación de la cultura; un ejemplo de esto es la feria del libro. Este evento es de carác-ter internacional y convoca una gran variedad de público, desde científicos, académicos, estu-diantes, artistas y especialmen-te a las niñas y niños quienes gozan de pabellón y eventos especializados, oficialmente se realiza cada año entre los meses de abril y mayo y se ha conso-lidado como uno de los eventos culturales más importantes y representativos del país.

Es de resaltar que de 1988 a 1990 la feria no estableció invi-tados de honor, fue a partir de 1991 que se contó con invitados de esta clase siendo Venezuela en primero, desde entonces se ha contado con esta figura, en su orden, después de Venezuela se destaca Trinidad y Tobago, Mé-xico, Argentina, Brasil, Fran-cia, Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Italia, países de Centroamérica, (Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Hondu-ras, Nicaragua, Panamá) estos en el mismo año 2001. Al año siguiente se contó con los paí-ses de la región Caribe (Cuba, Jamaica, Puerto Rico, Repúbli-

ca Dominicana, Venezuela y los departamentos de la región Ca-ribe del país). En el 2003 Pises Bajos, siguiendo en orden Perú, China, así se llegó al 2006 año en el que los invitados de honor fueron las capitales mundiales del libro (Madrid, Alejandría, Nueva Delhi, Amberes, Mon-treal, Turín).

En el 2007 Bogotá fue nom-brada capital mundial del libro por la Unesco y se le rindió ho-menaje al escritor colombiano Gabriel Jarcia Márquez, dos acontecimientos importantes para la feria, cabe resaltar que el país invitado de honor fue Chile. Al año siguiente el invi-tado de honor fue Japón, le si-guió México país que ya había contado con este privilegio; en el 2010 con motivo del bicen-tenario el invitado de honor es el departamento de Boyacá, es de anotar que en este año y en el 2009 la feria se realizó en el mes de agosto.

En su orden siguieron Ecua-dor, Brasil, Portugal; en el 2014 se le rinde homenaje pós-tumo al escritor Gabriel García Márquez quien falleció el 14 de Abril de ese año, el invitado de honor fue Perú; en conse-cuencia el invitado de honor del 2015 fue Macondo. Así se ha llegado a la feria número 29 que se realizará del 19 de Abril al 2 de Mayo de 2016, en esta se cuenta con Holanda como país invitado.

Aunque suene repetitivo, hay una relación especial entre los seres humanos y los libros, cada vez que se lee se descu-bre algo nuevo, se puede leer muchas veces el mismo libro y es como cuando se escucha una melodía en la que se des-cubren sonidos nuevos, los libros cuentan historias, acon-

l inconformis-mo llegó al pun-to de quiebre: no someter el

trabajo de sus semilleros al pe-ritaje de Colciencias. El coraje de los literatos fue bien reci-bido por no pocas personas. La ruptura motivó, incluso, el apoyo de otras universidades, tanto públicas como priva-das. Luego, ya es costumbre, el asunto perdió el interés del público y terminó en un punto muerto. El debate apenas duró un parpadeo: el mundo no da tiempo para detenerse a mirar en detalle las cosas. También, y es una de las mejores ironías del capitalismo, las cosas se re-ciclan para desaparecer de in-mediato: así, en breve, volverá a ocupar la parrilla informativa otro altercado entre los púgiles que no se animan a noquear al otro, a dar el golpe final.

Minucias mediáticas apar-te, el viejo recuerdo me sirve para traer a la palestra unas inquietudes: ¿hay pensamien-to humanista en las aulas de clase y en las oficinas de las dependencias universitarias? ¿Las universidades son, en el fondo, fortines de la burocra-cia o reservorios de las ideas y los conceptos? ¿Acierta quien emplea el término humanistas para referirse a los catedráti-cos? En un principio, sí. ¿Aca-so no merecen dicha distinción Pedro Henríquez Ureña, Ha-rold Bloom, George Steiner, Rafael Gutiérrez Girardot, in-signes botones de muestra del humanismo y a la par docen-tes de prestigiosos claustros? ¿Hay hoy por hoy humanistas en la Universidad colombiana? ¿Qué elementos debe reunir una persona para merecer el calificativo? ¿Basta dar clases en una facultad de humanida-des para serlo?

Soy claro: creo inoportuno amén de injusto llamar huma-nistas a todos los doctores y magísteres que vegetan en las facultades de humanidades, bendecidos con suculentos sa-larios – La República publicó el año anterior un informe interesante: en Colombia los profesores universitarios con estudios de posgrado pueden ganar entre 9,3 y 30 millones al mes, una cifra, la verdad, nada despreciable si se tiene en cuenta lo obvio, los índices de pobreza del país–. Dejo de lado las odiosas cuestiones monetarias pues, dice la comparsa de Perogrullo, nadie gana tanto como cree merecer. Voy a lo importante: la producción académica y sus repercusiones en el diálogo social y cultural. El humanista con su labor intelectual eleva el debate público, ofreciendo luces e incógnitas. Ahí están los casos de Sanín Cano y Gaitán Durán, personajes cuyo magisterio estuvo más bien vinculado a las páginas de los periódicos y a la vida de la imprenta: el primero apor-tó una mirada novedosa a la crítica literaria, distinta a la impuesta por la escuela con-servadora; el segundo, por su parte, le abrió las puertas del mundo europeo a una hornada de colombianos. ¿Hacen algo parecido los docentes de edu-cación superior? Sí, pero no… En otras palabras, lo hacen unos cuantos, las famosas ove-jas descarriadas. Y, lo peor, lo hacen en contra de las normas, del espíritu institucional de la Universidad que bendice a los conformes, a los sacerdotes de la mediocridad. Un repaso a vuelo de pájaro a los catálogos virtuales de las editoriales uni-versitarias y a los índices de las revistas indexadas –me limité a ojear los datos relacionados con la literatura por aquello de la frase popular: zapatero a tus zapatos– deja una conclusión

en borrador. Los profesores ol-vidaron una regla elemental de la cortesía literaria: la claridad beneficia la salud de los argu-mentos. De un tijeretazo, cor-tan toda posibilidad de réplica o controversia. Quien se le mida a la tarea de leer muchos de esos “ensayos” –las comi-llas, por dios, no son gratuitas– se topará con acertijos a modo de títulos y prosas indigestas. Van ejemplos de los trabalen-guas –ojo, no en el espíritu tra-vieso de Cabrera Infante–:

1) Sobre las políticas de los cuerpos y las emociones para la construcción del proyecto de nación en la novela María de Jorge Isaacs (1868) y en la prensa* de 1900 a 1920 (El asterisco está en el original).

2) Literatura y existencia: hacia una hermenéutica literaria basada en los presupuestos de una

filosofía existencial.

3) De una sujeto femenina a una sujeto mujer-crítica. Pedagogías del cuerwpo en Languidez y Ocre de

Alfonsina Storni

4) El sentido religioso de la historia y valores eternos. Motivos religiosos, místicos y apocalípticos en La guardia blanca de

Mijaíl Bulgákov

5) Una teoría del cielo para el neobarroco: interpelaciones entre la ‘ficción autobiográfica’ y el

biografema.

No hace falta el olfato de un sabueso de Scotland Yard para darse cuenta que algo de cierto hay detrás de la cantine-la según la cual la Universidad vive de espaldas a la sociedad, en una especie de pecera teó-rica. La jerga de especialista aleja sus trabajos de donde se cuecen los huevos: la agenda de opinión nacional. Encerra-dos en el estrecho círculo de las especulaciones abstractas, casi siempre terminan siendo glosas del pontífice de turno, llámese Lacan, Bajtín o Derri-dá. Los artículos académicos, en su mayoría, no responden a las lógicas del debate sino a las de la indexación, soslayando, de paso, la responsabilidad de los miembros del Alma Mater de construir una crítica cultural sesuda y al tiempo al alcance de los lectores. Ya es momen-to de dejar atrás el prejuicio de la ignorancia de la audiencia y de confundir la hondura con la aridez. Las ventas de El Capi-tal del siglo XXI, no compara-bles a las del fenómeno E.L. James mas al fin y al cabo sig-nificativas, demostraron, entre otras cosas, el interés ciudada-no en temas que escapen de la ligereza de los medios masivos y de las redes sociales. El éxi-to editorial de los volúmenes de Alain de Botton, de Michel Onfray, de Enrique Krauze o de Christopher Hitchens está, en buena medida, cimentado en una escritura digerible cuan-do no estimulante.

El problema, sin duda, no se reduce a la falta de elegan-cia prosística de los profesores. Ellos –muchos de ellos– caye-ron en la trampa de la docencia burócrata, se convirtieron en oficinistas del conocimiento, petimetres hábiles para atorni-llarse en sus mullidos puestos de comisiones curriculares. Condenan los eruditos la ba-nalidad del discurso social y lo califican de síntoma preocu-pante. No obstante pocos salen de la molicie del otro mundo, como con malevolencia no desprovista de agudeza el pre-sidente Lleras Restrepo llama-ba a la academia.

*Escritor, periodista y crítico literario

Polémica entre humanistas y científicos. ¿Hay, hoy por hoy, humanistas en la Universidad

colombiana?

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sejan enseñan, llevan a otros mundos, hacen reír, llorar y pensar, se conoce y se admi-ran a sus escritores-autores, en ocasiones se discute con ellos sin importar el tiempo y la dis-tancia. En la actualidad el libro digital, aunque ofrece muchas ventajas entre las que se pue-de mencionar la ecológica, no ha desplazado el libro en físi-co, en cierta medida porque lo mejor es abrazar a los amigos, sentirlos y esto es lo que inspi-ran los buenos libros.

La feria, además de ser un espacio en el que se promueve la lectura, también impulsa la industria editorial y gráfica, así como la producción intelectual y cultural; cuenta con espacios para conferencias, conciertos y actividades que promueven la música el arte y la cultura; la Corporación Universitaria Republicana participa en la vigésima novena feria interna-cional del libro, del 19 de abril al 02 de mayo del 2016, con diferentes eventos literarios y culturales a los que invitamos a toda nuestra comunidad uni-versitaria de manera cordial.

Fuentes: feriadellibro.com.Royo fílmico NP1152 El Tiempo, Nos 8955-9017 del 4 de octubre al 9 de octubre 1936 Biblioteca Luis Ángel Arango. BogotáRollo 9165 El Espectador, octubre 01 a octubre 31, 1936 Biblioteca Luis Ángel Arango. Bogotá.Universidades.com - Agencia EFE (ed.). «Bogotá será procla-mada “Capital Mundial del Libro 2007”».www.portalferias.com/filbo

Licenciado en educación - Especia-lista en gerencia social.Magister en Educación y Pedagogía. U.P.NDocente Universidad Republicana.

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El Alcalde de Bogotá, doctor Jorge Eliécer Gaitán, inaugura la 1 Feria Internacional del Libro de Bogotá, el 3 de octubre de 1936. Lo acompañan los embajadores de Argentina, Ecuador y Cuba, y el Gobernador de

Cundinamarca. En la foto siguiente, público asistente a la Feria del Libro en el patio de la Gobernación.

Definición de Estado

sta definición ha sufrido diferentes transformacio-nes a través del tiempo, siendo en nuestro criterio, su más completa acepción la de “una forma de or-

ganización social, económica, política soberana y coercitiva, formada por un conjunto de Instituciones no voluntarias, que tiene el poder de regular la vida comunitaria nacional, generalmente en un territorio, aunque no necesariamente. Suele adherirse a la de-finición del Estado el reconocimiento por parte de la comunidad internacional como sujeto de Derecho internacional.”1

Dentro de esta búsqueda por definir mejor la concepción de Estado, las antiguas civilizaciones dieron sus primeros pasos en la identificación de los elementos que lo constituyen, es así como en Grecia el término “polis” estaba asociado a un fenómeno espacial y social circunscrito a cada Ciudad, en Roma el concepto “civitas” refería la extensión territorial de la ciudad, así como en la “res pública” (República) nació el concepto de comunidad de intere-ses. Durante la Edad Media se le dio al Estado la connotación de “Poder”, debido a la protección brindada por los señores feudales a los siervos que habitaban sus feudos (Ciudad-Estado); Y final-mente, el Estado moderno incorpora a la legitimidad heredada del feudal, la noción de soberanía.

Características del EstadoSoberanía: es el reconocimiento dado al Estado de poder Absolu-to o Superior, dentro de un territorio delimitado.

Territorio: ámbito espacial y/o límite geográfico en el cual se extiende el Estado y en donde ejerce su poder.

Población: es la sociedad sobre la cual el Estado ejerce poder a través de sus Instituciones.

Poder Público: Régimen o forma de Gobierno que el Estado ten-ga, para organizarlo y buscar la consecución de sus fines.

Regímenes IslámicosEn este tipo de régimen político existe una relación estrecha

entre la política y la religión del Islam, por ende, la división entre poder político y religioso no tiene sentido en la comunidad islámi-ca, ya que su legitimidad proviene del ámbito religioso.

Para entender lo que es el Islam, es necesario partir de sus cin-co pilares:

1. Fe en su único Dios y su profeta Mahoma.2. Oración ritual diaria.3. Todos los años limosna a los pobres o impuesto de beneficencia.4. Todos los años el mes de ayuno (Ramadán) desde la salida hasta la puesta del sol. 5. Una vez en la vida la peregrinación a la Meca.

Los tipos de régimen político islámico son:

1. Régimen islámico tradicionalista.2. Régimen islámico fundamentalista.3. Régimen islámico islamista.

Mahoma nace en la Meca, hacia el año 570 d.C. en la Tribu de los Qurays, fue fundador de la tercera religión Monoteísta y escribió el Corán siendo revelado a Mahoma directamente por Dios, según la fe islámica, entre los años 610 y 622 d.C., donde considera que la palabra divina es irrefutable cuando es emitida directamente por Dios (Alá).

Consideraciones sobre el Islam y el EI

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Hacia el año 750 d.C. el Califato había logrado su máxima ex-tensión, que comprendía Persia (Califato Omeya), Arabia, Egipto, parte de África e Hispania, a pesar que en Francia, Carlos Martel Duque de Austrasia, detuvo la invasión árabe en la batalla de Poi-tiers en el año 732 d.C., destacándose como uno de los personajes más importantes de la Historia de ese País y en cierto modo dicha victoria detiene al invasor musulmán, por lo tanto se considera un salvador de la cristiandad. Posteriormente en el año 1492 los Re-yes Católicos expulsan a los musulmanes de la Península Ibérica.

Qué es el Fundamentalismo Islámico?Es un grupo radical que ha convertido el Islam en su bandera

política, siendo este el elemento vital de su accionar político; bus-can crear un Estado con vocación Islámica, cuya fuente de orien-tación en todos los ámbitos de la vida humana incluya la Política.

El Fundamentalismo Islámico propone institucionalizar un Es-tado con los siguientes elementos:

1. El Corán como pacto social fundamental.2. El Califato como forma de organización política.3. La Sharía como sistema Jurídico para legislar y castigar.4. El Faquí como el guía de la Sociedad.

Los diferentes grupos fundamentalistas no se han puesto de acuerdo sobre cuál es el elemento más importante de los anterior-mente mencionados o cuál se debe aplicar y cual no. Estas discu-siones han desatado la guerra en Siria e Irak, con el fin de fundar el Califato Musulmán.

En 1928 nació una cofradía musulmana denominada los Her-manos Musulmanes, la cual declaró que el Corán es la Constitu-ción y que el Pacto Colectivo de los fundamentalistas está en fun-ción del libro sagrado. Consideran que el Corán es un Código de conducta que ayuda a constituir valores al interior de la Sociedad y que concentra los principios básicos sobre los cuales los hombres deben llevar a cabo el mandato divino en la tierra.

En la tradición musulmana el Califa, Emir o Iman, era el suce-sor directo de Mahoma, quien orientaba y dirigía a la comunidad. Este concepto generó una división EN EL interior del pensamiento islámico, a partir del cual se crearon dos grupos antagónicos, así:

Cuando murió Mahoma, surgió un grupo de seguidores que consideraron que el Califa podía ser cualquier hombre piadoso. A este movimiento se les llamo Sunitas, los que acogen las ense-ñanzas del profeta.

Dentro de la búsqueda por definir mejor la concepción de Estado, las antiguas civilizaciones dieron sus primeros pasos en la identificación de los elementos que lo constituyen

Otro grupo consideraba que el Califato debía estar en manos de los descendientes directos de Mahoma, a los cuales se les llamo Shiítas, seguidores de Ali, primo y yerno del profeta.

Este sisma se viene presentando desde el año 632 d.C. (muerte del profeta) hasta nuestros días.

El Califato ha sido el modelo político que pretende instaurar la cultura islámica a la Sociedad, como la forma de administración política de los vastos territorios conquistados por los árabes.

La Sharía es el código jurídico que regula la Vida, la Propie-dad y el Estado, siendo un código normativo de las sociedades musulmanas, que adicionalmente regula los asuntos litúrgicos y religiosos.

El Faquí, se presenta como la necesidad de mantener un líder social (profeta), quien conduzca a la comunidad en el camino rec-to y puro y que Alá (Dios) ha destinado para que guíe rectamente a la Sociedad.

Estado IslámicoNo es un Estado reconocido, es una agrupación de musulmanes

que aspira reunir bajo un solo gobierno a todos los musulmanes del mundo sin límites territoriales definidos, no reconociendo ninguna autoridad política, ni gobierno diferente al suyo. El Estado Islámico como facción fundamentalista determina la “negación sistemática de los derechos de las mujeres, la prohibición del internet, el asesinato de homosexuales y la persecución abierta a los no musulmanes”2.

aris, 13 de no-viembre de 2015.

Luego de cuatro años de haber co-

menzado mis estudios de más-ter y de doctorado en la ciudad de Paris, y de haber presen-ciado los acontecimientos de enero de 2015, cuando el re-cinto del semanario Charlie Hebdo fue objeto de un aten-tado que dejó a sus principa-les periodistas muertos, no me esperaba que nuevos hechos de violencia y muerte sacu-dieran esta ciudad, que para mí siempre ha significado co-nocimiento y cultura.

Era un viernes 13 y la jor-nada transcurría normalmente. En la noche, el partido de fut-bol entre Alemania y Francia, y transmitido en directo por la televisión, era el centro de la atención de muchos habitan-tes que esperaban finalizar una semana más de actividades. Francia ganaba 2 -0. Yo, que no entiendo mucho de futbol, me encontraba sin embargo, al frente del televisor, tratando de comprender las jugadas. El na-rrador, en medio de la euforia, utilizó un tono lacónico para informar que al finalizar el en-

cuentro no habría declaracio-nes a los periodistas por parte de los jugadores, sino que se pasaría de inmediato a las noti-cias, para tratar sobre los aten-tados que acababan de ocurrir en pleno centro de Paris……..

- “Atentados que acababan de ocurrir en pleno centro de Paris”. Yo pensé que no ha-bía entendido bien…. Atenta-dos… ¿Cuándo? ¿A qué horas? ¿Cómo?

Pocos minutos después, el partido terminaba y efectiva-mente en las noticias el pre-sentador explicaba los hechos ocurridos.

El teatro “Bataclan” y varios cafés, entre ellos el “Carrillon” y el “Petit Cambodge”, ubica-dos muy cerca de la Place de la Republique, en pleno corazón de Paris, fueron atacados, con saldo de decenas de heridos y muertos. Así mismo, en las inmediaciones del Estado de Francia, uno de los más gran-des del país, y donde se realiza-ba justamente el partido Fran-cia- Alemania, dos hombres se inmolaban dejando igualmente destrucción y muerte.

Miles de preguntas llegan al instante. Ninguna explicación es definitiva ni certera. Nadie sabe. Pocos minutos después, el presidente de la República, Francois Hollande, quien se en-contraba como espectador jus-tamente en el Estado de Francia y que había sido evacuado mi-nutos antes, se dirige a la nación en una alocución televisada. Sus palabras intentan devolver la esperanza a los televidentes. Francia es un país que sabrá ha-cer frente a los acontecimientos y que empleará diferentes me-didas de seguridad para luchar contra los agresores.

Y quienes son los agresores? Porqué varios jóvenes se ha-cen inmolar llevando con ellos muerte y destrucción a personas inocentes?

La respuesta nos deja nuevas preguntas: el agresor es el Esta-do Islámico.

Para nosotros como colom-bianos, quizás los motivos de

estos atentados pueden parecer extraños. ¿Quien o qué es el Estado Islámico y porqué ataca a Francia? ¿Es una guerra reli-giosa? ¿Qué es el islam y por-qué pareciera ser sinónimo de muerte, si todas las religiones tienen un sistema de valores y principios para vivir mejor? Es-tas y otra preguntas más pueden surgir, sin que nadie tenga una respuesta definitiva.1

Por lo anterior, y con la finalidad de hacer un breve aporte al análisis de la situa-ción, me permito hacer una reflexión sobre el origen de la población musulmana en Francia, el cual se remonta a los siglos XIX y XX.

En efecto, no hay que olvi-dar que Francia ha sido un país colonizador, especialmente des-de su participación en la deno-minada “Conferencia de Ber-lín”, que tuvo lugar entre el 15 de noviembre de 1884 y el 26 de febrero de 1885. Dicho en-cuentro tenía como finalidad el

que países como Bélgica, Gran Bretaña, Alemania, Italia y la misma Francia, principalmente, se pusieran de acuerdo frente a los criterios para tener en cuenta con respecto a la colonización de África. A partir de allí, Fran-cia colonizó los países del norte de África, que se conocen como el Magreb (Argelia, Túnez y Marruecos), pero también a paí-ses como Senegal, Malí y Costa de Marfil, entre otros, los cua-les tenían no solo una tradición musulmana arraigada, sino cos-tumbres y tradiciones diferentes a las francesas y europeas.

Esta situación de país colo-nizador, le permitió a Francia en diferentes momentos de su historia reciente, proponer políticas favorables a recibir inmigrantes, proveniente es-pecialmente de dichos países. Inicialmente fue el proceso de industrialización de finales del siglo XIX, pero fue especial-mente en el siglo XX cuando muchos inmigrantes llegaron a Francia atraídos por los bene-ficios que este país les ofrecía ante su necesidad de mano de obra para los diferentes sec-tores de la economía. Dos

Guerras Mundiales, habían diezmado la población y la re-construcción requería trabaja-dores adicionales.

Fue así como Francia fue acogiendo no solo hombres, sino paulatinamente familias completas, muchas de las cua-les han continuado mantenien-do sus propias creencias reli-giosas y tradiciones culturales, al margen de la sociedad fran-cesa mayoritaria. Y pese a las numerosas ayudas económicas y de subsidios, esta población de inmigrantes se ha ido ubi-cando en barrios denominados “sensibles” que se caracterizan por problemáticas como el fra-caso escolar, el desempleo y la delincuencia, entre otras. De esta forma, hoy se habla de la “Tercera Generación de Inmi-grantes” en Francia, para hacer referencia a muchos de estos jóvenes nacidos en Francia,

1 Real Academia Española (2005). «Estado» (en español). Diccionario pan-hispánico de dudas. Madrid: Santillana.

2 Fuente: Revista Diners.3 Fuente: Revista Semana.4 Fuente: Revista Semana.

SimbologíaBandera: de color negro, personifica la Yihad, en ella se lee “no hay más Dios que Alá”. Saludo: el dedo índice hacia el cielo indicando “no hay más Dios que Alá y Mahoma su profeta”. Barba: siguen el ejemplo de Mahoma y son los mensajeros de Dios.Lugares sagradosLa Meca: Ciudad donde nació Mahoma y donde se encuentra la Kaaba, piedra mística en donde se encuentra inscrita la declaración de la fe islámica3.Medina: Ciudad donde Mahoma se trasladó cuando fue desterrado.

El Estado Islámico a través del fundamentalismo extremista que practica, en donde consolida la religión con la política, ha logrado sembrar el pánico en los países Europeos (Inglaterra, Es-paña, Francia y Bélgica), buscando a través de atentados indiscri-minados, ejecuciones selectivas, etc., crear impacto mediático y psicológico de poder, convirtiéndose en “una máquina de matar alimentada por el fanatismo islámico, los errores de Estados Uni-dos y Europa, los conflictos sectarios y religiosos entre Chiítas y Sunitas, y la exclusión de los musulmanes en el viejo continente”4.

*Vicerrector Corporación Universitaria Republicana

Republicanismo, Laicidad, FundamentalismoLos peligros de mezclar política con religión

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1 Véase en esta misma edición el artículo del doctor Gerardino Vivas Hernández, que ensaya una respues-ta a esas preguntas. (Nota de GR)

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La idea general del proyecto es diseñar un sistema interac-tivo terapéutico para niños con déficit de atención e hiperactivi-dad (TDAH) en edades entre los 4-7 años mediante el empleo de herramientas de hardware y sof-tware que facilite en ellos:

La concentración

El desarrollo y finalización de tareas

El control de la impulsividad

El comportamiento destructivo y refuerzo del

aprendizaje escolar.

El conjunto de módulos di-señados son controlados física-mente con el apoyo de un juego virtual (software). A continua-ción se muestran algunas imáge-nes de los módulos en desarrollo.

Este proyecto no lo he reali-zado solo, pasado el tiempo se vincularon dos compañeros que también estaban interesados en trabajar en el semillero de inves-tigación, mis compañeros Án-gela Medina y Pedro Miranda, quienes me han ayudado mucho en el desarrollo del mismo, ya que solo me hubiera demorado más tiempo del presupuestado; gracias a la excelente orienta-ción de nuestra docente y el apo-yo de mis compañeros de grupo, este trabajo ha dado buenos resultados. Estando en el semi-llero he tenido no solo el apoyo de la directora de grupo sino el apoyo de la Corporación Uni-versitaria Republicana, inclusi-ve, me darán todo el apoyo para registrar la propiedad intelectual de mi proyecto y de todo lo que se desarrollará en el.

La Corporación Universita-ria Republicana es una institu-ción jóven que ha ido creciendo a lo largo del tiempo y he sido testigo de este crecimiento, se ha invertido poco a poco para contar con equipos adecuados

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pero que conservan su identi-dad como inmigrantes, sin que el proceso de “asimilación” a la cultura francesa se haya hecho de forma completa.

Esta situación es aprovecha-da por el Estado Islámico, gru-po con pretensiones políticas totalitarias que utiliza una inter-pretación radical de la religión musulmana para justificar sus acciones, y que logra conven-cer a dichos jóvenes para que se unan a sus fuerzas. En el Estado Islámico, ellos, a su vez, logran encontrar respuestas a la bús-queda de sentido de pertenencia y de seguridad que sus entornos locales no les ofrecen.

La vida intenta continuar y día tras día, una tensa cal-ma puede sentirse en Paris, la ciudad luz. Las medidas de seguridad se han incrementa-do, incluso en la universidad, pues todos debemos estar aler-tas ante un potencial nuevo atentado. Yo continúo hacien-do frente a la responsabilidad que los estudios de doctorado en filosofía requieren, pues mi responsabilidad como docente e investigadora en Colombia, así lo amerita.

Las noticias no dejan de ha-cer referencia a las diferentes acciones que las autoridades realizan para encontrar a los otros responsables de los he-chos, así como para prevenir nuevos atentados, que se ha anunciado, serán esta vez en Bruselas2.

Para nosotros como colom-bianos, con una tradición cul-tural de origen católico y lue-go de haber vivido diferentes actos de terrorismo, los argu-mentos radicales del islam, nos parecen totalmente ilógicos. Y además, como seres humanos, en un entorno globalizado, en donde los ciudadanos somos cada vez más cosmopolitas, lo acontecido en Paris nos duele, nos duele mucho.

En Francia, este principio ha ido adquiriendo una impor-tancia cada vez mayor, debido no solo a sus orígenes, sino sin duda a la situación contemporá-nea en donde las creencias fun-damentalistas religiosas, prove-nientes en particular del mundo musulmán, evidencian cada vez más los potenciales peligros de mezclar la política y la fe.

Pero en 1905, era el senador Republicano Aristide Briand quien proponía una ley, fruto de un trabajo previo por parte de una comisión de senadores en-cargados de encontrar un punto de equilibrio que permitiera la convivencia del Estado y de la religión católica.

Esta situación se hace más clara si se tiene en cuenta que aunque Francia ha sido un país con una amplia tradición ca-tólica, también ha conocido momentos de ruptura con di-cha tradición. La primera y tal vez más importante ha sido la ocurrida en 1794, poco tiempo después de haber guillotinado al rey Luis XVI en 1793, cuando la Convención Nacional decide suprimir la amplia gama de be-neficios económicos que la igle-sia recibía por parte del Estado, y que hacían de esta un verda-dero poder paralelo al poder po-lítico ejercido por la monarquía y la nobleza.

Esta decisión era para la épo-ca una medida no solo drástica sino innovadora y excepcional. Era la expresión del pensa-miento de la Ilustración, que proponía una total autonomía

y autodeterminación para los seres humanos eliminando así la necesidad de acudir a la re-ligión o a la fe como principio de gobierno, explicación de la realidad o fundamento moral. Esto implicó en consecuencia, una ruptura total con el Antiguo Régimen, fundamentalista y tradicional, en donde la nobleza y el clero, se fusionaban en una sola y misma clase social, que gozaba de todos los privilegios y beneficios que el pueblo raso no conocía.

Un hecho emblemático que ilustra lo anterior, fue el saqueo y profanación de las tumbas reales de la Basílica Catedral de Saint- Denis, en 1794. Esta Basílica, situada en el norte de Paris y con una historia que data de comienzos de la Edad Me-dia, era el mausoleo de los Re-yes de Francia. Pero justamente en un ambiente de ruptura con el pasado y la tradición religio-sa, una horda de revoluciona-rios, decide no solo saquear las tumbas, sino exhumar los cuer-pos de los reyes y exhibirlos públicamente. Evidentemente, poco tiempo después, la Basíli-ca fue restaurada y hoy en día conserva no solo su significado religioso, sino que es conside-rada un monumento histórico y cultural de gran importancia.

Esta serie de episodios de ruptura con la iglesia católi-ca concluyó en 1801, cuando Napoleón Bonaparte, luego de tomarse el poder, decide firmar un acuerdo con el Va-ticano, que restableciera las relaciones entre el Estado

francés y la iglesia católica y que generara estabilidad para su gobierno. Este acuerdo o Concordato, estará en vigen-cia, hasta la promulgación de la ley de 1905, cuyo punto de partida y núcleo es la garantía que ofrece el Estado francés de respetar la libertad de con-ciencia, es decir, de respetar la libre decisión de sus ciudada-nos de no escoger credo reli-gioso o de escoger el que me-jor consideren. A su vez, esto implicaba que la iglesia católi-ca perdía su lugar privilegiado en la sociedad, pasando a ser una opción más entre muchas otras y que el Estado francés no privilegiaría a ningún cre-do religioso. Todo esto en su conjunto es la laicidad.

En la vida práctica de la so-ciedad francesa contemporánea, la ley de 1905 se sigue eviden-ciando de muchas formas. Así por ejemplo, se busca consoli-dar cada vez más un orden po-lítico basado solo en el respeto de la norma jurídica y libre de cualquier influencia religiosa; la educación que imparte el Es-tado es estrictamente laica y la enseñanza religiosa es opcional, y la utilización de símbolos o alusiones religiosas en las ins-tituciones de la administración pública está prohibida, como lo está cualquier comportamien-to discriminatorio por motivos étnicos, religiosos o culturales.

En el mundo Occidental, estos principios se encuentran presentes en casi todos los siste-mas políticos contemporáneos que han seguido el camino pro-

puesto por la historia francesa. Los principios de la laicidad se han ido adaptando a cada cir-cunstancia en particular, pero en general defienden la libertad de conciencia y la separación entre el Estado y la religión.

Pero esto no es así en otros países en donde todavía el ámbito político se basa en los postulados propuestos por la religión. Tal es el caso concreto de muchos de los países musul-manes que siguen siendo regí-menes teológico-políticos, que no han hecho tal separación, y que obligan a sus ciudadanos no solo a creer en un único sis-tema religioso, sino a defender principios totalitarios, inclu-so con sus propias vidas y en nombre de la fe.

Así pues uno de los grandes retos que afronta la sociedad francesa contemporánea, es ¿cómo convivir con una tradi-ción laica y al mismo tiempo, hacer frente a grupos de perso-nas que en su mismo territorio defienden casusas fundamen-talistas y que en su afán de imponerse a la fuerza, generan muerte y destrucción? 110 años después de la promulgación de la ley sobre la laicidad, el mundo entero está llamado a reflexionar sobre la importancia de preservar la libertad de con-ciencia y la separación entre el Estado y la religión.

Mi nombre es Breiner Fran-cisco Quiroga López, estu-dio ingeniería de sistemas en la Corporación Universitaria Republicana, hago parte de la primera promoción de ésta in-geniería en la institución, he culminado a satisfacción con todo el pénsum académico y estoy vinculado a la Corpora-ción con mi proyecto de grado en el semillero de investigación GIDIS, esperando terminar con éxito, y lograr mi graduación con todos los honores.

Desde joven había desperta-do gran interés por las compu-tadoras, mis metas siempre han estado orientadas en diseñar tecnología a cualquier nivel, podría decirse que me gusta en todo sentido la investigación; no me incomoda para nada rea-lizar todo el trabajo que concier-ne al desarrollo de un proyecto; somos ingenieros, nacimos para ello, y si escogimos esta profe-sión como proyecto de vida, es porque somos científicos natos y nos gusta todo lo referente a la ciencia, la tecnología y la in-novación.

Siguiendo con mi relato y aunque no me lo están pre-guntando quiero decirles que soy un militar retirado en buen uso de retiro por discapacidad médica, tengo una fuerte lesión ocular en ambos ojos y en mi oído derecho, causadas por una mina; cuando vi la oportunidad de estudiar ingeniería de sis-temas no lo pensé dos veces, aunque todos me indicaban que estudiara una profesión que tuviera menos contacto con las computadoras, esto debido a mis condición clíni-ca, pero hay una frase célebre de Seth Godin, un empresario estadounidense que dice “en vez de estar pensado cuando serán tus próximas vacaciones, porque no te haces una vida de la que no quieras escapar”, y eso es lo que estoy haciendo, hacerme una vida de la que no quiero escapar, encontré mi lu-gar y me estoy posesionando en él. Esto se los conté porque espero con ansias que ustedes estén haciendo lo mismo, que le estén poniendo todo el inte-rés personal a su proyecto de vida y que de esta gran insti-

De estudiante a joven investigadorExperiencias en el semillero de ingeniería de sistemas del grupo GIDIS

“El científico no estudia la naturaleza por la utilidad que le puede reportar; la estudia por el gozo que le proporciona, y este gozo se debe a la belleza que hay en ella. La belleza intelectual se basta a sí misma, y es por esa belleza, más que

quizá por el bien futuro de la humanidad, que el científico consagra su vida a un

trabajo largo y difícil”. Henri Poincaré.

tución educativa salgan inge-nieros dispuestos a darlo todo por transformar este mundo en algo mejor. ¡Adelante colegas y seamos exitosos como cien-tíficos natos que somos!.

Por otro lado, aunque ten-ga una pensión por invalidez, no soy rico, soy como ustedes, uno más a los que no le sobra el dinero; gracias a la institu-ción militar en donde trabajaba tuve conocimiento de la Cor-poración Universitaria Repu-blicana, de sus facilidades de pago y su programa de becas, fue asi como pude financiarme toda mi carrera; hoy estoy muy agradecido con la institución por brindarme la oportunidad de pertenecer a su primera pro-moción de Ingeniería de Siste-mas.

Desde que comencé mis es-tudios universitarios tenía algo de ansiedad, no tenia idea de qué iba a realizar como proyecto de grado, pero cuando me ente-ré que había la posibilidad de ser parte de un semillero mediante un grupo de investigación, quise ser parte de este, mi otra opción era una monografía, proyecto de investigación individual o prác-ticas laborales, estas últimas son favorables, ya que uno se va dando a conocer en el ámbi-to laboral y se gana dinero por el trabajo desarrollado siendo la opción más económica en tiempo y dinero; es obvio, pensé en tomar ese camino, pero, mis metas están muy definidas y mi objetivo principal es formarme como investigador y desarro-llar ideas innovadoras. Desde comienzos del año pasado, me puse en contacto con la Direc-tora del grupo de investigación de Ingeniería de Sistemas GI-DIS, la Docente investigadora Evelyn Garnica, tuvimos una reunión para discutir en una llu-via de ideas algunas que podrían servir de tema de investigación, la profesora me mostró algunas herramientas de electrónica con las que cuenta la Corporación, y me surgio una idea dada mi pre-ocupación por un sobrino el cual presenta un cuadro de hiperacti-vidad compulsiva y algo de ina-tención, esto genero el impulso que me llevo a empezar con este proyecto de investigación.

para mejores prácticas de inves-tigación, además puedo contar con el apoyo de profesionales en el área que me ayudan en cosas técnicas que no domino.

Al ser una institución en crecimiento, desde mi punto de vista, considero que es una ex-celente oportunidad para incu-bar y crear ideas que se podrían financiar para seguir fortale-ciendo la excelencia educativa dentro de la institución. Como consejo resalto la frase “hay cientos de problemas en todo, pero por fortuna existen millo-nes de soluciones, el hombre de éxito ve la oportunidad en don-de los comunes solo ven obstá-culos”, veamos nuestra institu-ción como una oportunidad para brindar soluciones que podrían mejorarla cada día, ¿Por que no? serviría como un gran proyecto de investigación que impulsaría su carrera profesional como un gran emprendedor y estarían ayudando al mismo tiempo a la universidad a consolidad la ex-celencia educativa.

Si no están convencidos de lo que les digo, déjenme contarles que en el mes de febrero y con apoyo total de la Corporación y la gran gestión que realizó la di-rectora del grupo GIDIS, clasifi-camos con nuestro proyecto a la Convención “Universidad 2016, 10° congreso internacional de educación superior” celebrado en la Habana Cuba, no solo tuve la fortuna de codearme con do-centes y profesionales de la edu-cación superior, ya que a decir verdad, si había otros estudian-tes, no los vi, literalmente era el único alumno que se paseaba en el palacio de convenciones don-de se realizaba el evento, además presenté mi proyecto de grado como ponencia ante cientos de docentes investigadores que en su mayoría eran doctores en sus ramas o estaban estudiando un doctorado; además, me relacio-né con docentes de diferentes partes de Latinoamérica como Costa Rica, Brasil, Ecuador, Panamá y Colombia, con ayuda del docente investigador Harold Hernández, quien me acompa-ñó al evento como ponente, en fin, fue algo muy enriquecedor para mi desarrollo profesional y

personal, pues tuve la fortuna de conocer un poco la ciudad de La Habana.

Las imágenes a continuación muestran algunas de las expe-riencias vividas en el congreso celebrado en La Habana Cuba.

En la siguiente imagen, se observa el salón en donde se ce-lebró el cierre del evento.

¿Qué podría decir de La Ha-bana?, En una palabra, “exóti-ca”, maravillosamente exótica.

La Habana es una ciudad que me hechizó con su arquitectura antigua, llena de casas y sitios de antes de la revolución. Había una avenida que en mi mente la apodé la avenida de las mansio-nes, casas de máximo dos pisos, enormes y con solares osten-tosos y abrumadores, cuando recorría estos lugares mágicos me retrocedían al pasado, ¡si amigos!, una ciudad que se ha quedado en el pasado, pero con el encanto de un diamante que roba las miradas de cualquiera que admire la belleza.

Pero no solo su arquitectura me tenía cautivado, cuando está-bamos en un parque para tomar un taxi, veia las hileras de vehí-culos, que me hacia sentir estar en medio de una feria de carros antiguos, que en su mayoría es-taban bien cuidados, más de lo normal. Por otro lado, el clima, “templado”, como la primave-ra, aunque según los habitantes locales tuve la fortuna de estar en su tiempo de invierno, ya que por ahí en septiembre, hace un calor de los mil infiernos, pero creo que esto lo compensan sus calles románticas, que me ha-cían preguntar, ¿a qué hora lle-gue a mi pueblo natal de Hon-da, no estábamos en Cuba?...La gran cultura de las perso-nas, la cordialidad de su gente, una ciudad como de pueblo sin mucho agite ni los problemas descomunales de una gran ciu-dad como lo puede ser Bogotá; podía sacar mi telefono celular sin sentir miedo de que me lo iban a robar o que me podrían lastimar gravemente, además, sus playas maravillosas, aunque no me bañé en el mar de la Ha-bana, cada vez que estaba cerca de la orilla del mar me sentía en

el cielo, relajado, sin pensar en otra cosa, era como trasladarse a otro mundo, me nublaba su inmensa y cautivante superiori-dad, innegable, el mar me hechi-zaba con su belleza.

Pero no crean que no me bañé en las playas de Cuba. Estuvi-mos en una de las plazas de un lugar iconico de cuba llamado “Varadero”, una hermosa playa, en donde además de tomar algo de agua salada, me divertí com-pletamente bañándome en las refrescantes aguas de esa playa; no faltó el descuido, me quemé la espalda y los brazos, pero no fui el único, los otros también se quemaron y eso que usaron blo-queador, pero en general, una isla que me enamoró y me dejó con ganas de más.

“Aquí los dejo con las ganas de hacer turismo por Cuba, pero les sugiero que no se demoren para que puedan apreciar la cordialidad su gente y su gran cultura”.

No me puedo despedir sin dar otro consejo, un científico cambia el mundo, lo moldea a su imagen con todo lo que inventa, con todo lo que innova, no pier-dan la chispa creativa, los invito a escoger una ingeniería como parte integral de su formación, para que una idea que salga de su mente, no se quede en idea sino que se convierta en una realidad transformadora del mundo.

Para terminar, es un gusto invitarlos a que sean parte de los semilleros de los grupos de investigación presentes en la Corporación Universitaria Repu-blicana. Esta es una experiencia enriquecedora para nuestro desa-rrollo profesional, para que poda-mos explotar nuestro potencial al máximo, superar nuestros límites y ser parte de quienes pueden transformar el mundo, y como indiqué al principio, nosotros los ingenieros somos científicos y nuestra profesión es la investi-gación y el desarrollo, ¡dejemos nuestra huella!.

*Estudiante de Décimo Semestre de Ingeniería de Sistemas Investigador + Apasionado por la ingeniería Corporación Universitaria Repu-blicana

2 Como ocurrió, en efecto, el pa-sado 22 de marzo de 2016, cuatro meses después de los atentados de Paris.. (Nota de GR)

IISobre el Principio de Laicidad en Francia

El 9 de diciembre de 2015, se conmemoran en Francia los 110 años de la promulgación de la ley sobre la laicidad. Pero ¿qué es la laicidad y porqué puede ser importante? Según el Diccionario de la Real Acade-mia Española, la laicidad es un principio de separación entre la sociedad civil y la sociedad re-ligiosa. Es decir, es un principio que establece que en las deci-siones del Estado, la iglesia se mantendrá alejada y viceversa.

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gacetarepublicana / abril / mayo 20168 /