año 1, no. 1

ISSN en trámite

FotografíaIlustración

PoesíaRelatos

Revista de Arte

El alma tiene una pasión enorme que no puede contenerse y el arte es una expresión latente de dichapasión. La Pasión del alma está envuelta en sentidos finos diferentes e incluso opuestos entre si. Por esto en el

primer número de la Revista de Arte Fragmento no quisimos discriminar entre una expresión y otra ensecciones confusas, porque el amor, la vida, la muerte y un gran etcétera son expresiones inherentes del alma.

La es una publicación mensual la cual está desarrollada Revista de Arte Fragmentocomo plataforma para nuevos autores de literatura, teatro, ilustración y fotografía. Secritica al posmodernismo del arte y sus efectos sociales sin la confrontación directasino como la presentación de una alternativa racional.

Los editores de la somos responsables del contenidoRevista de Arte Fragmentopublicado, aun no siendo, en muchos casos, de nuestra autoría.

R E V I S T AD E A R T E

Página Legal

Director y editor: Alejandro AgudeloCarlos TinocoSubdirector y diseño:

REVISTA DE ARTE FRAGMENTOCalí, Valle del Cauca. Diciembre de 2017revistadeartefragmento.blogspot.comfragmentorevista@gmail.com

R E V I S T AD E A R T E

Aportan en este número

Literatura

Fotografía e Ilustración

Antonia Rodríguez Ferreiro - El vientoJosué Iván Galván Ortega - La ciudad es ellaYanela Cervantes Ferreyra - VivirMaría Adelina - Hechizo de tu miradaAlex Carpio - No sigas cayendoHumberto Ruiz - Para qué sirve la historiaSebastián González Torres - El abrilJuan Salazar Gonzáles - Recinto infructuoso

Walter AgudeloDiana CortésNadine ValerioSathielFavia Yanina Ortiz

Fragmentos, todo está hecho de fragmentos.

RecintoInfructuosoJuan SalazarGonzáles Siento celos por la brisa que destila lentamente tu cuerpo.

Siento celos por el tiempo que amolda tu belleza al compás delsilencio.

Siento celos por la gente que mira sin contemplación alguna ymis emociones se confunden al impregnar una sonrisa.

Siento celos al destino que juega con los sentimientos engañandocualquier evidencia de estar a mi lado.

Siento celos de un suspiro que sin sentido revolotea teniendo algúndestinatario pertinente.

Siento celos de un amanecer porque contempla tu mirada al irradiarel día.

Siento celos hacia Morfeo porque te envuelve en su manto de graciacayendo hacia un descanso momentáneo.

siento celos de tus planes porque no sé si me tienes presente entu futuro.

Siento celos a tus preguntas porque no sé si mi amor satisfacetus respuestas.

Siento celos por la música porque deslizas tu cuerpo al compásde un ritmo y mi presencia no es testigo de aquel momento.

Siento celos de tus labios porque realza un miedo constantede nuestro adiós.

Siento celos de la muerte porque llevará tu alma haciala eternidad…

No sigascayendoAlex Carpio

No sigas cayendo. Pensarás que no hay salida, creerás que nunca lahabrá. Te sentirás como la rata atrapada en la trampa, como el moribundodebajo del puente. Creerás que sus manías, sus gestos, sus actitudes y susdefectos encajaban perfecto contigo y que no hay forma de encontraralgo parecido, es más, no tendrás intención de encontrarlo. Pensarás que tuvida se arruinó, quizá sea cierto. Cuando abres los ojos te das cuenta quehay otras almas rotas como tú a la orilla del río. Me gustaría asegurar quehabrá un final, pero no lo verás llegar. De nada servirá tu positivismo ymierdas a fin, tiempo, zen, putas, hierbas, yoga, música, psiquiatras, pasear,conocer, leer, bailar, budismo. Pasará cuando creas que ha terminado. Perono sigas cayendo, voltea hacia atrás si tienes que hacerlo, pero sólo paramirar viejos errores no a caer en el mismo hoyo, ten un poco de dignidady orgullo y deja de pensar en el suicidio. Bebe lo que tengas que beber,fuma lo que tengas que fumar, inhala lo que tengas que inhalar, porqueninguna droga te hará peor persona de la que ya eres, ni mejor de la queeres tampoco. Enciérrate en ese cuarto oscuro, corre, patalea, llora, sangra,grita, duerme y sufre lo que tengas que sufrir pero ya no caigas en ese hoyonegro. Un día despertarás y ya no te sentirás una escoria, un olvidado,un nadie, esa percepción se irá, desaparecerá, entonces verás la mugre,la grasa, la flaqueza, las ojeras, la fealdad y las palabras que laceraban tuamor propio, sólo otro pedazo de carne en este mundo. Ya no te sentirásherido por que no te amen como antes lo hacían, ya no te sentirás roto porel olvido, te sentirás herido por seguir amando hasta el último centímetrode tu intestino, te sentirás quebrado por la salida abrupta de una vida,porque si al final todo está basado en cimientos falsos es fácil que sederrumbe en segundos. El mundo se derrumba en segundos. Cualquiercosa estructurada se puede derrumbar en segundos, así como acabo dehacerlo mientras escribo esto. Pero rendirse también está bien.

El VientoAntonia RodríguezFerreiro

En la distancia el viento habla a veces coplas, ó sevillanas,melodiosas son sus cálidas palabras

recordando la separación de las almas!¡Nexo de seda que todo ata en el bastidor

con hilo de plata, la brisa que atraviesa montañas,susurrando se encuentra en lejana playa!

¡El viento poeta también canta sinfonías de recuerdo que el corazóndesgarra, en el aliento

que sopla en nuestra morada!¡El viento el sueño ultrapasa sembrando la semilla de rosa pálida,

uniendo los corazones de la esperanza¡

21 Noviembre 2017CHAVES

Fotografía

Parque de las garzas,Cali

Walter Agudelo

La ciudad es ella

Me hacía perder el habla, a su lado era torpe y

balbuceaba. En ocasiones me dejaba caminar junto a

ella, mientras intercambiábamos un par de miradas y

una que otra sonrisa, sin embargo cada sonrisa y

miradas suyas eran, de alguna manera, formas sutiles

de rechazarme, que dejaban, sin embargo, un poco de

esperanza para volver a hablarle, a pesar de mi

extrema timidez.

La conocí en una tarde calurosa y lluviosa de finales de

julio, el olor a tierra mojada inundaba toda la alameda.

Yo caminaba a pesar de la intensidad del agua y ella

estaba ahí parada en un quiosco, sin embargo aquella

mujer de piel traslúcida y con una sonrisa que sostenía

en vilo al mundo me miraba, parecía un poco de

primavera de anticipo que hacía afrenta a la vida

bullente que llevaba. De repente me detuve y me

quede parado a su lado, nos miramos un instante sin

dirigirnos ni una sola palabra, de mi brazo asomaba

tímidamente un volumen de libertad bajo palabra de

Octavio Paz que durante largas horas me ha

acompañado, ella al verlo abrió los ojos muy

sorprendida, lo arrebato de mi brazo, yo sólo reía un

poco sorprendido y avergonzado, y después de buscar

por un par de minutos me señalo con su dedo índice un

verso que decía: óyeme como quien oye llover, ni atenta

ni distraída. Tras pasar unos minutos impávido frente

al poema, alcé la vista y atónito descubrí que ella se

había ido.

Tras pasar un par de semanas caminando y recorriendo

las calles y avenidas, los parques y glorietas, los zócalos

y plazas buscando a tientas, buscando sin encontrar el

rostro de la joven de los poemas, así decidí referirme a

ella puesto que no sabía su nombre, desistí. Y ahí estaba

yo tomando un café, era ya tarde y apenas briznaba,

enfrente de mí una joven hermosa que me hablaba

palabras ininteligibles e indescifrables; a mi lado

izquierdo una pareja discutiendo, ella se quería

divorciar de él, él la había engañado con la mejor

amiga de ella, trataban de no alzar la voz pero la

señora rompió en llanto; a mi lado derecho un chico

solitario que observaba continuamente su reloj,

esperaba a alguien que jamás llego y tras un largo

tiempo se fue. Ella me hablaba y yo me limitaba a

asentir, a veces le sonreía, reía cuando ella reía, ponía

una expresión sería cuando ella fruncía el ceño. Volteo

un par de segundos, ella se acerca, quiere besarme, yo

alzo la vista y tras el cristal veo a la joven de los

poemas así que me levanto de prisa y dejo un billete

en la mesa, me disculpo con mi acompañante y corro

lo más rápido que mi cuerpo me lo permite, ella

avanza dos calles en línea recta, dobla a la izquierda

en la esquina, me ha traído a la alameda -pienso, el

lugar está lleno de gente, la pierdo de vista, tras tomar

unas bocanadas de aire y fallar en mi misión camino

por toda la alameda y al final de mi recorrido me

encuentro con aquel quiosco dónde la vi por primera

vez y ahí encuentro en una hoja un poema de Octavio

Paz escrito a mano por la joven de los poemas, esta vez

se trataba de habla ciudad y tras leerlo encuentro

algunos versos escritos de la siguiente manera: Hablo

de nuestra historia pública, y de nuestra historia

secreta, la tuya y la mía, la ciudad que brota de los

párpados de la mujer que duerme a mi lado y se

convierte en sus calles y avenidas, autobuses, taxis y

cines y TEATROS.

Tras haber leído varías veces el poema pensé que tal

vez la joven de los poemas escribió en mayúscula la

Cuento de Josué Iván Galván Ortega

palabra teatro porque quería que fuera a ver una

función en especial, decidí por último ir al teatro de

San Ignacio de la llave, las razones que me motivaron

a ir a este lugar sobra decirlas, ya que, era el único

teatro de la ciudad donde se iba a presentar la hija de

Rapaccini, la única obra de teatro escrita por Octavio

Paz.

La obra se iba presentar ese mismo día, así que salí

corriendo al teatro san Ignacio de la llave para

encontrarme con la joven de los poemas. Compre el

boleto. Faltaban un par de horas para que la función

iniciará, así que decidí esperar sentado en una banca

de hierro, al sentarme me di cuenta de que estaba

mojada, no me importo y seguí sentando, saqué mis

cigarrillos y empecé a fumar. Observe por todos lados

para ver si por los alrededores estaba la joven de los

poemas, no la vi, en cambio había un viejo sentado en

una banca frente a mí, hablaba a solas ¿Con quién

hablamos al hablar a solas? ¿Había recordado su

pasado u olvidado su presente? Había carros que iban

y venían, transitando por la ciudad y alrededor del

teatro, rompiendo el viento y zumbando mis oídos,

yendo de prisa ¿Adónde vamos cuando vamos de

prisa? No sé, no sé ni lo que va a pasar después de

esta noche, que triste pasan nuestras vidas, miro el

reloj sin comprender nada en absoluto, ya es hora de

la función. Apago mi cigarro. Voy a la función.

Entro al teatro y dan la tercera llamada, la obra inicia,

no veo a la joven de los poemas, quizá me equivoque e

intérprete mal su mensaje, si es así no es mi culpa, el

amor es un intérprete obsesivo el cual a veces a cierta,

el cual a veces se equivoca. Como sea la obra avanza y

así como la obra de teatro avanza así avanza mi vida, de

escena en escena. Beatriz fue creada por el doctor

Rapaccini, la joven de los poemas existió para mí un

día lluvioso y caluroso; por las venas de Beatriz hay

veneno que es vida y muerte, los ojos de la joven de

los poemas vida y muerte me deparan. Juan le dice a

Beatriz: «Perderme en ti, para encontrarme en mi

mismo, en la otra orilla, esperándome...» ¿Tras esta

noche al encontrarte me encontraré? ¿El buscarte es

buscarme joven de los poemas? Viene la última escena

y tras esta maravillosa elegía de amor viene lo

inesperado, Juan no decide sacrificarse por Beatriz y

junto al doctor Rapaccini lloran su muerte, si amar es

morir, revivir y remorir ¿Por qué Juan no se sacrificó?

La función acaba. Me voy.

Camino por las calles de Orizaba, es ya de noche y

hay neblina, el frío penetra mis huesos, meto mis

manos a las bolsas del saco, camino dos calles y

decido acortar camino por la alameda, camino toda la

alameda y no está la joven de los poemas, sigo

caminado, estoy ya cansado, pienso que me equivoqué,

fui un mal lector de sus poemas, fui un mal intérprete

de sus señales. Doblo a la derecha y enfrente está ella,

la luna nos miraba, la noche se volvió eterna en

aquella callecita desierta.

-¿Quién eres? -le pregunto-

-Soy Beatriz y tú Juan -respondió ella-

-No entiendo-respondí todo confundido-

-No se trata de entender si no de sentir -me dijo-

Doy un paso al frente la tomo de las manos y la beso,

al besarla entiendo que la joven de los poemas es la

ciudad que cada cien años se despierta y se transforma,

la joven de los poemas es aquello que me espera a la

otra orilla del camino.

Fotografía

Balsa

Fabia Yanina Ortiz

El abrilSebastián GonzálezTorres

Que a ti, el afligido, vano se mallugue.

En la inmensidad y la elegía nos trate,

Y nos llague añoro sin roce.

En la liquidez del lirio,

yace austero canto al río.

Y yacimos nosotros y labramos rezo.

A tiempo frío de un yugo sin yedras.

San Felipe se vació en tu arroyo, posó tus ojos,

en la virtud fechada y mi tibia súplica.

De cuando tu boca supo a sidra y ajamos prosas.

Fotografía

Una tarde en lavida

Diana Cortes

Hechizode tumiradaMaría Adelina

Sólo tuya una mirada.Solamente una mirada.

¡Ya no pido yo más nada!¡Mas que una sola mirada!

¡Tu mirada me ha hechizado!Ese brillo fascinanteafilado, penetrante,

en mi mente se ha grabadoy de mí se ha apoderado…A ella estoy consagrada

y por siempre a ella atada…Por eso ten compasión,bríndale ya a mi razón

sólo tuya una mirada,

¡que ya en mi ser dejó huella!Si el día que yo los vifrente a mí, enmudecícon esa mirada bella,

que como estrella destella…¡A tus pies me dejó hincada

esa mirada malvada,que de magia califico!

Razón por la que suplico,solamente una mirada.

Te pido tengas clemencia.No me niegues la fruiciónel placer, grande pasión,de tu mirada la esencia.Te juro tendré prudenciaal contemplar tu mirada;

¡esa bendita mirada!Bríndame ya ese gozo

la alegría, el alborozo…¡Ya no pido yo más nada!

Solamente ya el placerde nuevo por un segundosentir en lo más profundotu mirada… Y embeber

por completo así mi ser.Quiero quedar empapada

por siempre de tu mirada…Porque imposible es pedir,

suplicarte, ni exigir…¡Mas que una sola mirada!

Ilustración

Esta bonitaaberración

Sathiel

VivirYanela Cervantes

Vivir es reír, pero a la vez llorar, llorar tan fuerte desde lo más profundo,

hasta quedarte sin respirar, aunque sientas que todo esté terminando, no

te preocupes, solo estas sintiendo, quédate tranquilo; Estás viviendo.

Vivir es esto, es soñar, incluso no poder cumplir sueños y que quede sólo

en anhelar, vivir es amar, abrazar tan fuerte sin pensar en soltar, a veces

llorar pérdidas forma parte de esto que lo llaman: amar, incluso todo esto

es sinónimo de respirar, no te preocupes sólo estás viviendo algo que

otros dejaron de hacerlo, y algunos ni siquiera nacieron para cantar o

bailar.

El éxito y el fracaso forman parte de todo esto, forma parte de que hayas

nacido y que algún día seamos muertos, no desperdicies ningún segundo

más, pues cuando duermes 60 segundos de cada minutos se van, el

tiempo y las lágrimas de atrás ya no volverán, pero si vendrá otro tiempo

en el tendrás oportunidad, de reír, gritar, incluso llorar, porque vivir es

esto, experimentar tan fuerte los múltiples sentimientos que en otro

tiempo no lo volveremos a sentir jamás.

Para quésirve lahistoriaRelato deHumberto RuizReynaga

Las conversaciones que tenía con personas que acababa de conocer eran todas iguales.

Las preguntas para saber lo básico de una persona van desde el nombre, edad, música qué

escucha, lecturas, y ocupación. En el momento en que a mi me preguntaban acerca de mi

ocupación, sabía que si no rescataba la conversación, terminaría en algo como…

-¿A qué te dedicas?

-Estudio historia

-Oh, para maestro de historia

-Claro, para qué más sirve la historia.

*

Traté de conseguir un empleo al momento en que cursaba el último semestre de la carrera,

a lo que me podía postular era ser profesor. También llegué a encontrar en mi búsqueda

con un número considerable de becas, pero esto era tarea para gente con buen desempeño

académico, el cual no era mi caso, así que mi opción de ser una persona económicamente

productiva fue dar clase en una escuela particular.

-Mire profe –dijo la directora- aquí pagamos cincuenta pesos la clase

-¿cincuenta?

-Sí profe, así es en la mayoría de los colegios, pero no se preocupe, va a tener siete horas a

la semana. Si le parece bien empieza hoy mismo. Así comencé mi vida laboral, pero a la

semana vi que el salario no compensaba todo el trabajo, preparar la clase, buscar formas de

mantener a los alumnos con interés, revisar tareas. Necesitaba encontrar otro empleo en el

que fueran necesarios los conocimientos adquiridos en esos cuatro años de estudio, algo en

donde no sólo fuera indispensable la memorización de fechas ni la comprensión de sucesos

del pasado.

Me encontraba en la hemeroteca del estado al tiempo en que pensaba en una solución,

fueron los mismos periódicos los que me dieron la respuesta, para ser más precisos, la

sección policíaca de El Sol de San Luis en la página A-5 con fecha de 12 de noviembre de

1987. Ahí estaba mi futuro, realizar una investigación de la zona que más era afectada por la

delincuencia desde el año de 2000, año en que ya existían arcaicas cámaras de seguridad.

En ese momento pasó por mi mente aquella frase de Ciceron, Lahistoria magistra vitae est.

historia sería mi maestra para este designio, a través de ella vería los puntos más vulnerables,

analizaría las fallas que habían tenido los delincuentes capturados, solo así lograría lo que

ellos no. Cambié los periódicos de 1987 por los del 2000, tomaba nota de lo sobresaliente y

en cuestión de un mes terminé de leer los periódicos de mi interés en la hemeroteca. Pensé

en ir a la ciudad judicial y pedir expedientes de casos, pero podrían relacionar mi

investigación con mi propósito, no me quedó más que prescindir de ellos.

Ya tenía la zona, lo que hacía falta era ir y elegir el comercio en el que llevaría a cabo mi plan. Me decidí

por un negocio que formaba parte de una cadena nacional, entonces sabía que necesitaba otra persona

que se adentrara al lugar y platicara sobre la inseguridad. Es allí donde entró en la historia José, antropólogo

que conocí en la facultad de Ciencias Sociales, con él seguí mi mentira de la investigación acerca de la

inseguridad en la zona oriente de la ciudad a partir del año 2000.

A José, un amigo cercano, le pedí ayuda para hacer algunas observaciones de campo, entablar

conversaciones con los colonos de la zona y en particular con la sucursal de una empresa, porque esa era la

más afectada, le dije. Él aceptó, me pidió dos semanas para hacer rapport y entonces ya existiría confianza

con los colonos y empleados del lugar para preguntarles todo lo que yo quería saber. A él no iban conectarlo

con el asunto que tenía, ya que la única información que daría a los entrevistados sería su nombre y

profesión, por otro lado es un rasgo de cualquier investigador que solo obtienen los datos que necesitan de

sus informantes, y ya nunca se vuelven a aparecer por esos lados.

Después de otro mes de esperar la indagación de José, agrupé todos los datos obtenidos y los organicé.

En el estudio de la historia, los datos por si solos no son interesantes, es trabajo del historiador convertirlos

en información útil, así que hice estadísticas, 85% de los asaltos frustrados eran en finales de año, y la policía

estaba muy ocupada en esas fechas como para darle seguimiento a los delitos menos importantes, 69% de

los asaltantes iban drogados o ebrios, 92% iban en grupos de 2 o más asaltantes, el 87% de los robos eran

por menos de mil pesos. Aparte se encontraban los datos arrojados por las entrevistas abiertas de José: el

encargado del lugar no guardaba armas, tenían un botón de pánico que la empresa no había mandado

componer desde hace 2 años, el empleado más joven trabajaba el turno de la tarde. Todo eso me sirvió para

llevar a cabo mi plan. No me arriesgaría por menos de mil pesos, en la acción me comportaría como si

estuviera bajo los efectos de alguna droga, haría creer que un cómplice me esperaría afuera y daría el golpe

cuando el empleado más joven, que se traduce en fuerte, no estuviera en su turno.

En Diciembre llevé a cabo mi plan, resultó perfecto. En una reunión me encontré a José.

- ¿Cómo vas con esa investigación que tenías sobre los robos en el año dos mil?

Me enteré que robaron a finales de año en la empresa que andabas investigando, un monto

grande, supe.

- Estoy tras una investigación mejor que me llevará más tiempo- Le dije a José

-Oye pues si es tan buena debería ayudarte, pero esta vez quiero participar más a fondo

-Claro- le dije – investiga sobre narcotráfico en la zona centro del país.

José sonrió y estrechamos las manos. Dalo por hecho, dijo al fin.

Ahora mis conversaciones suelen ser como

-¿A qué te dedicas?

-Estudio historia

-Oh, para ser maestro

-No, también puedes trabajar en museos, realizar investigaciones para empresas privadas, hacer

divulgación histórica

-Ah, ok

-En serio, deja que te explique…R E V I S T AD E A R T E

Nadine Valero

Gracias Nadine, por recordarnos que somos seresracionales. También por demostrar la intolerancia de los

“tolerantes”

El equipo de la Revista de Arte Fragmento agradece el apoyo de los autores quecolaboraron en este número. Gracias por creer en el proyecto, incluso más que

nosotros mismos.