¿SE DEBERÍAN DE RESPETAR LOS DERECHOS HUMANOS A UN DELINCUENTE?

BENEMÉRITA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE PUEBLA PROFESORA: ALEJANDRA GUZMÁN VEGAALUMNA:ANDREA SALINAS ROMANODHTIC

“El grado de civilización de una sociedad se mide por el trato a sus presos” -Fiódor Dostoyevski

OBJETIVO Aludiré señalando que el objetivo al

efectuar este trabajo de investigación se limita no solamente a indagar respecto si se deberían respetar los derechos humanos de un delincuente, al contrario lo que intento es demostrar una postura ya sea positiva o negativa.

Mi posiciuón la implanto a favor de respetar los derechos humanos de los delincuentes ya que, aun cuando hayan cometido las más atroces violaciones a los derechos humanos igualmente deben ser considerados como personas y merecen el respeto de su dignidad

Un problema que se ha venido presentando desde tiempo atrás es el trato que les dan a los presos, no en todos los medios la relación que les proporcionan es adecuada; al contrario algunos recurren a la tortura, a la agresión física y psicológica para ejercer sus labores.

Este tema es de vital importancia, sin embargo no cuenta con la primacía que debería tener, al contrario es un tema de desinterés social e incluso político

Cuando escuchamos la palabra presos inmediatamente tenemos una palabra condenatoria y de rechazo

Aunado al problema de como es el trato que les dan a los presos en prisión, y si se respetan sus derechos o no, esto conlleva a vivir un estancamiento social, puesto que no se obtiene una respuesta favorable por medio de la sociedad, cuando escuchamos a los diferentes medios de comunicación que existen.

La desinformación que se tiene sobre el tema, no sólo es culpa de la persona que ignora lo que sucede, sino de los medios de comunicación que recurren a perturbar la información que se emite. Ocasionando desidia por parte de la sociedad que cohabitamos

Preguntémonos ¿cómo reaccionan las personas que se encuentran con un ex presidiario? claro está, con desprecio, y con temor, la sociedad ya no los acepta, los deshonra.

Les cuesta más trabajo adaptarse a la sociedad que a la vida en prisión, para conseguir un trabajo digno después de haber estado en prisión es un fenómeno de salvajismo

CONCLUSIÓN El problema no está en la garantía de los mismos; sino en la impunidad

y en la corrupción, que no se violen los derechos humanos de un delincuente no quiere decir que no tengan que cumplir con las penas establecidas por la ley, se debe de ejercer justicia, privación de libertad al que realmente la merezca, pero el Estado debe, sin excepción alguna, tratarlos con la dignidad y el respeto que les da el simple hecho de ser individuos.