tarea de cristologia upoli mayo 2015

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Carlos Palacios. Pág. 15-57. ¿En qué consistió la búsqueda del Jesús Histórico desde la ilustración hasta Martín Kӓler? La investigación formal del Jesús histórico surge como resultado de la Ilustración. Esta formó una nueva cosmovisión que sirvió de lente para una nueva lectura de la realidad en general y de la religión en particular. El racionalismo interpretaba la realidad como una serie de causas y efectos que podrían ser estudiados con el método científico. No se podía ya postular simplemente una agente divino como causa inmediata. El racionalismo no excluye una creencia en Dios necesariamente, pero le relega a una intervención directa solamente en la creación, y no después. Realmente no se trata solamente de la posibilidad de una investigación sobre la figura del Jesús terrestre. Lo que está en juego es su necesidad teológica. Dicho de otra manera, se necesita establecer la función teológica permanente de la figura de Jesús para la fe. El teólogo alemán Karl Martin August Kӓler (1835-1912) en su libro: El Así llamado Jesús de la historia y el Cristo Bíblico histórico (1892-1896) hizo la primera llamada de atención sobre el optimismo de la escuela liberal y el racionalismo alemán que hasta ese momento había marcado la antigua búsqueda del Jesús Histórico. Cada autor presentaba una imagen diferente de Jesús de Nazaret, en función de las premisas personales que cada uno planteaba. De este modo fue el primero en distinguir entre el Jesús Histórico y el Cristo de la fe. El Jesús histórico es la imagen que surge de la investigación crítica. El cristo dela fe es lo que presentan los evangelios y lo predica la comunidad de creyentes. Para Kӓler le interesa el cristo de la fe porque trae el mensaje de salvación, el Jesús de la historia pertenece al pasado y no interesa. Estas ideas, junto con las aportaciones de Wilhem Wrede y Karl Ludwig Schmidt, será el comienzo del escepticismo que marcó la última etapa de la antigua búsqueda del Jesús Histórico. El esfuerzo para rescatar la verdadera imagen del “Jesús histórico” de las garras del dogma había comenzado con la Ilustración y prosiguió, sin grandes resultados, a lo largo del siglo

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JESUS HISTORICO

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  • Carlos Palacios. Pg. 15-57.

    En qu consisti la bsqueda del Jess Histrico desde la ilustracin hasta Martn

    Kler?

    La investigacin formal del Jess histrico surge como resultado de la Ilustracin. Esta

    form una nueva cosmovisin que sirvi de lente para una nueva lectura de la realidad en

    general y de la religin en particular. El racionalismo interpretaba la realidad como una

    serie de causas y efectos que podran ser estudiados con el mtodo cientfico. No se poda

    ya postular simplemente una agente divino como causa inmediata. El racionalismo no

    excluye una creencia en Dios necesariamente, pero le relega a una intervencin directa

    solamente en la creacin, y no despus.

    Realmente no se trata solamente de la posibilidad de una investigacin sobre la figura del

    Jess terrestre. Lo que est en juego es su necesidad teolgica. Dicho de otra manera, se

    necesita establecer la funcin teolgica permanente de la figura de Jess para la fe.

    El telogo alemn Karl Martin August Kler (1835-1912) en su libro: El As llamado Jess

    de la historia y el Cristo Bblico histrico (1892-1896) hizo la primera llamada de atencin

    sobre el optimismo de la escuela liberal y el racionalismo alemn que hasta ese momento

    haba marcado la antigua bsqueda del Jess Histrico.

    Cada autor presentaba una imagen diferente de Jess de Nazaret, en funcin de las

    premisas personales que cada uno planteaba. De este modo fue el primero en distinguir

    entre el Jess Histrico y el Cristo de la fe.

    El Jess histrico es la imagen que surge de la investigacin crtica.

    El cristo dela fe es lo que presentan los evangelios y lo predica la comunidad de creyentes.

    Para Kler le interesa el cristo de la fe porque trae el mensaje de salvacin, el Jess de la

    historia pertenece al pasado y no interesa.

    Estas ideas, junto con las aportaciones de Wilhem Wrede y Karl Ludwig Schmidt, ser el

    comienzo del escepticismo que marc la ltima etapa de la antigua bsqueda del Jess

    Histrico.

    El esfuerzo para rescatar la verdadera imagen del Jess histrico de las garras del dogma

    haba comenzado con la Ilustracin y prosigui, sin grandes resultados, a lo largo del siglo

  • XIX. Ante los ataques del racionalismo, la dogmtica clsica perda cada vez ms terreno;

    por su parte, la Filosofa teolgica de Hegel, a travs de David Friedrich Strauss (1808-

    1874), se haba apoderado del problema histrico de Jess, amenazando el fundamento

    histrico del cristianismo. La teologa se debata entre dos polos aparentemente

    irreconciliables: la historia y la idea.

    Cul fue la postura de Rudolf Bulmann ante el fracaso de la primera bsqueda del Jess

    Histrico?

    La primera constatacin es el fracaso de la crtica histrica en su intento de reconstruir

    una figura de Jess que superase el campo de las suposiciones, de las conjeturas, y de las

    construcciones psicolgicas. Por qu afanarse todava en rescatar un pequeo botn de

    este fabuloso incendio? A partir de las fuentes existentes, es imposible trazar con cierta

    seguridad histrica los rasgos principales de la figura y de la personalidad ntima de Jess.

    Por eso Bultmann la declara sin valor salvfico y sin significacin teolgica.

    Cul fue la postura de Karl Bart?

    La respuesta de Bart a la teologa liberal fue una contestacin de sus presupuestos

    metodolgicos (sustitucin del primado absoluto de la revelacin por la subjetividad

    religiosa, reduccin de la fe a una posibilidad de la razn). Al establecer el primado de la

    revelacin, Bart era consciente de someter su sistema a una norma objetiva y

    objetivamente construida.

    La concentracin cristolgica, desde la que Bart examina y ordena todos los caminos

    del pensamiento humano, es una afirmacin del primado absoluto de Dios y de la

    revelacin.

    Cul es el aporte de Ernst Kseman?

    Se percat de un problema importante. Segn N. T Wright, Kseman comprendi que si se

    elimina la base histrica de la proclamacin de la iglesia, se puede apelar a Jess para

    apoyar cualquier programa teolgico, sociolgico y poltico. Por este motivo, Kseman y

    los investigadores de la denominada NUEVA BUSQUEDA DEL JESUS HISTORICO buscaba

    identificar el vnculo entre la proclamacin cristolgica de la iglesia y la proclamacin de

    Jess. Adems observaron que la identificacin del Jess terrenal con el cristo exaltado es

  • una premisa inherente a los evangelios. Si el kerigma cristolgico se refiere a un personaje

    terrenal, en cierto sentido es el propio kerygma el que impulsa la investigacin histrica.

    Esta nueva bsqueda introduce un nuevo elemento metodolgico que tendr mucha

    importancia para el anlisis del Jess Histrico. Se aplica el criterio de la desemejanza para

    evaluar si el material sobre Jess podr ser autentico o no. Este criterio puede resultar

    chocante, pues si el material es coherente con el judasmo de su poca, se rechaza su

    autenticidad porque no se puede distinguir histricamente si es de Jess o de una

    influencia juda. Si el material es coherente con la fe de la iglesia primitiva, tambin se

    rechaza su autenticidad.

    El propsito de este criterio es recuperar con un elevado nivel de confianza un mnimo

    de material particular o exclusivo del movimiento de Jess. El resultado de su

    aplicacin, sin embargo fue el distanciamiento de Jess del judasmo. Produce un Jess

    idiosincrsico que no pertenece al mundo judo de su entorno y poco tiene que ver con la

    iglesia primitiva.

    Cul es el aporte de Gnther Bornkamm?

    La gran diferencia con relacin a Bultmann es que Bornkamm no se limita al mensaje

    doctrinal de Jess, sino que analiza su comportamiento, para llegar a travs de l, hasta el

    misterio de la persona de la misin de Jess. La irrupcin del reino de Dios en el tiempo y

    en el espacio adquiere una figura visible en la persona de Jess. El mismo, en sus palabras,

    en sus actitudes, en su comportamiento es la parbola viva del grano de mostaza, del

    puado de levadura, de la irrupcin oculta y misteriosa del Reino en el mundo. De esa

    inminencia vive el mensaje de Jess, la novedad de su doctrina, su manera de ensear, su

    libertad absoluta, su autoridad y pretensin, su llamamiento a seguirle, su entrada triunfal

    en Jerusaln hacia la muerte; de esa presencia se escandalizan los escribas y fariseos,

    sufren los demonios, se admira el pueblo y alaban a Dios los que son salvados.

    Aqu radica la solucin de Bornkamm a la cuestin mesinica. Con la tradicin

    evanglica l est de acuerdo en el hecho: Jess es el Mesas.

    Cul es el planteamiento de Edward Schweizer?

    La vuelta al Jess histrico, requiere una atencin particular. Es una cuestin legitima y,

    desde el punto de vista teolgico, necesaria. Exige, sin embargo, un planteamiento

    teolgico correcto para que resulte fecunda y benfica. Schweizer no pone en duda la

  • significacin de la historia de Jess para la fe. El problema de fondo es pertinente. Lo que

    suscita reservas son los presupuestos filosficos-teolgicos, ocultos en la manera de

    abordar y resolver el problema, tanto en la Leben-Jesu-Forschung como en la nueva

    bsqueda.

    El punto de partida debe ser el kerygma cristolgico de la comunidad pospascual.

    Por ms diferentes que sean las perspectivas y los esquemas teolgicos de los autores del

    N.T., todos convergen hacia un centro que es tambin punto de partida y catalizador de su

    reflexin cristolgica: Pascua, como expresin del misterio del crucificado y exaltado. Por

    eso Pascua debe ser tambin el punto de partida, fundamento y contenido del Kerygma

    cristolgico y de la fe.

    Schweizer sustituye el planteamiento abstracto por un planteamiento concreto. La

    teologa que alimentaba la vida de estas comunidades (Cristologa, soteriologa,

    eclesiologa) se ha desarrollado a partir de un ncleo original: el kerygma, cuyo centro de

    referencia es una figura concreta: Jess de Nazaret. Es el contenido de la predicacin y el

    misterio del que participan los creyentes en el bautismo y en la cena.

    Al aumentar la distancia temporal y la separacin espacial de aquel rincn perdido de

    Israel, la teologa del kerygma como la llama Schweizeradquiere mayor autonoma.

    El inters se concentra en la dimensin trascendental del misterio de Jess. El contenido

    de la predicacin no son sus palabras, actos o gestos, sino la nueva vida en Cristo, la

    reconciliacin entre Dios y el hombre.

    Cul es la diferencia entre Kerigma y Jess Histrico?

    Segn Bultmann, La predicacin y de Jess pertenece a los presupuestos de la teologa

    del NT y no constituye una parte de esta. Bultmann quiere decir que los evangelios

    presentan ms el kerygma (esto es la proclamacin de la iglesia primitiva) que la

    proclamacin de Jess mismo. La predicacin de Jess queda relegada al presupuesto, al

    punto de partida, porque el kerygma de la iglesia se basa en la accin salvfica

    escatolgica de Dios (ibdem) efectuado en la crucifixin y la resurreccin de Jess. En

    resumen, el Jess histrico ya no es accesible, porque ha sido transformado

    profundamente por el kerygma de la iglesia.

  • Manuel Antonio Cerda Guerrero.

    Iglesia Hermanos en Cristo, San Fernando, Masaya.

    Estudiante del Diplomado en Cultura Bblica.

    UPOLI SEPT. 2015-MAYO 2015.