tulipan, leucaena, cocohite y guasima, arbustos …
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ISBN 978-970-43-0190-0
INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES FORESTALES, AGRICOLAS Y PECUARIAS
CENTRO DE INVESTIGACION REGIONAL DEL NORESTE SITIOEXPERIMENTAL EBANO
TULIPAN, LEUCAENA, COCOHITE Y GUASIMA, ARBUSTOS TROPICALES CON POTENCIAL
FORRAJERO BAJO CONDICIONES DE RIEGO EN LA PLANICIE HUASTECA
FOLLETO TECNICO No. 13 JUNIO DE 2007
SECRETARIA DE AGRICULTURA, GANADERIA,
DESARROLLO RURAL, PESCA Y ALIMENTACION
Ing. Alberto Cárdenas Jiménez Secretario
Ing. Francisco López Tostado
Subsecretario de Agricultura y Ganadería
Ing. Antonio Ruiz García Subsecretario de Desarrollo Rural
Lic. Jeffrey Max Jones Jones
Subsecretario de Fomento a los Agronegocios
C. Ramón Corral Avila Comisionado Nacional de Acuacultura y Pesca
INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES FORESTALES,
AGRICOLAS Y PECUARIAS
Dr. Pedro Brajcich Gallegos Director General
M.C. Jaime Piña Razo
Encargado de Despacho de la Coordinación de Investigación Innovación y Vinculación
Dr. Enrique Astengo López
Encargado de Despacho de la Coordinación de Planeación y Desarrollo
Lic. Marcial A. García Morteo
Coordinador de Administración y Sistemas
CENTRO DE INVESTIGACION REGIONAL DEL NORESTE
Dr. Francisco Javier Padilla Ramírez Director Regional
Dr. Jorge Elizondo Barrón Director de Investigación
C.P. José Cruz González Flores
Director de Administración
M.C. José Luís Barrón Contreras Director de Coordinación y Vinculación en San Luis Potosí
INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES FORESTALES, AGRICOLAS Y PECUARIAS
CENTRO DE INVESTIGACION REGIONAL DEL
NORESTE
CAMPO EXPERIMENTAL SUR DE TAMAULIPAS
SITIO EXPERIMENTAL EBANO
TULIPÁN, LEUCAENA, COCOHITE Y GUASIMA, ARBUSTOS TROPICALES CON POTENCIAL FORRAJERO BAJO
CONDICIONES DE RIEGO EN LA PLANICIE HUASTECA
M.C. Alberto González Jiménez Investigador del Programa de Forrajes y Riego
Campo Experimental Sur de Tamaulipas-Sitio Experimental Ébano
Dr. Marco Vinicio Velarde Hermida Maestro Investigador en Suelos y Forrajes
Instituto Tecnológico de Ciudad Valles
Folleto Técnico Núm. 13 San Luís Potosí, S.L.P., México.
Junio de 2007
TULIPAN, LEUCAENA, COCOHITE Y GUASIMA, ARBUSTOS TROPICALES CON POTENCIAL
FORRAJERO BAJO CONDICIONES DE RIEGO EN LA PLANICIE HUASTECA
No está permitida la reproducción total o parcial de este folleto, ni la transmisión de ninguna forma o por cualquier medio, ya sea electrónico, mecánico, por fotocopias, por registro u otros medios, sin permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright. Derechos reservados © 2007, Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias. Av. Progreso No. 5 Col. Del Carmen Delegación Coyoacán C. P. 04100 México, D. F. Tel. (55) 54 84 19 00 Primera edición Tiraje 1,000 ejemplares Impreso en México Clave INIFAP/CIRNE/P-92 ISBN 978-970-43-0191-0 Folleto Técnico Núm. 13, Junio de 2007 CAMPO EXPERIMENTAL SUR DE TAMAULIPAS - SITIO EXPERIMENTAL EBANO Km. 67 Carretera Valles -Tampico Apdo. Postal # 87 Ebano, San Luis Potosí, México Tel. y Fax 01 (845) 263 30 90 La cita correcta de este folleto es: González J. A. y Velarde H. M. V. 2007. Tulipán, Leucaena, Cocohite y Guasima, arbustos tropicales con potencial forrajero bajo condiciones de riego en la Planicie Huasteca. Campo Experimental Sur de Tamaulipas-Sitio Experimental Ébano. INIFAP-CIRNE. Folleto Técnico Núm. 13. San Luis Potosí, México. 20 p.
CONTENIDO
Página INTRODUCCIÓN 1 Obtención de la información 2 TULIPÁN Hibiscus rosa-sinensis 3 Descripción 3 Ecología 4 Producción de forraje de Tulipán 4 Calidad nutritiva del forraje de Tulipán
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COCOHITE Gliricidia sepium 7 Descripción 7 Ecología 8 Producción de forraje de Cocohite 9 Calidad nutritiva del forraje de Cocohite
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LEUCAENA Leucaena leucocephala 11 Descripción 11 Ecología 12 Producción de forraje de Leucaena 12 Calidad nutritiva del forraje de Leucaena
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GUASIMA Guazuma ulmifolia 14 Descripción 14 Ecología 16 Producción de forraje de Guasima 16 Calidad nutritiva del forraje de Guasima
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CONCLUSIONES
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LITERATURA CITADA
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INDICE DE FIGURAS
Pág. Figura 1 Temperatura máxima, mínima y relación
precipitación evaporación que ocurrieron en Ébano, S.L.P., de febrero a diciembre de 2005 y enero de 2006.
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Figura 2 Plantas de Tulipán con riego en suelo vertisol de Ébano, S.L.P.
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Figura 3 Producción total anual de forraje seco de Tulipán en tres frecuencias de cosecha en Ébano, S.L.P.
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Figura 4 Distribución anual de la producción de forraje seco de Tulipán en Ébano, S.L.P.
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Figura 5 Plantas de Cocohite con riego en suelo vertisol de Ébano, S.L.P.
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Figura 6 Producción de forraje seco de Cocohite en tres frecuencias de cosecha en Ébano, S.L.P.
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Figura 7 Distribución anual de la producción de forraje seco de Cocohite en Ébano, S.L.P.
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Figura 8 Plantas de Leucaena con riego en suelo vertisol de Ébano, S.L.P.
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Figura 9 Producción de forraje seco de Leucaena en tres frecuencias de cosecha en Ébano, S.L.P.
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Figura 10 Distribución anual de la producción de forraje seco de Leucaena en Ébano, S.L.P
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Figura 11 Plantas de Guasima con riego en suelo vertisol de Ébano, S.L.P.
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Figura 12 Producción de forraje seco de Guasima en tres frecuencias de cosecha en Ébano, S.L.P.
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Figura 13 Distribución anual de la producción de forraje seco de Guasima en Ébano, S.L.P.
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TULIPAN, LEUCAENA, COCOHITE Y GUASIMA, ARBUSTOS TROPICALES CON POTENCIAL FORRAJERO BAJO
CONDICIONES DE RIEGO EN LA PLANICIE HUASTECA
Alberto GONZALEZ JIMENEZ1
Marco Vinicio VELARDE HERMIDA2
INTRODUCCIÓN
En las regiones tropicales, las especies arbustivas y árboreas solas o en asociaciones con gramíneas han tomado importancia como fuente de forraje para rumiantes domésticos, (Benavides, 2001). La importancia de estas especies no convencionales radica en su abundancia de forraje y disponibilidad durante la mayor parte del año (Meléndez, 2001). En el área de riego de la Planicie Huasteca se dedican a la ganadería más de 15 mil hectáreas, en las cuales predominan las praderas con nula o muy baja densidad de árboles, ya que éstos son eliminados. Sin embargo, el ganado bovino se alimenta de hojas o frutos de árboles como la Guasima (Guazuma ulmifolia), el Mezquite (Prosopis juliflora), etc. durante las épocas de invierno y de seca ya que el pasto por lo general escasea. En la región existe una diversidad de arbustos y árboles que pueden ser empleados con la finalidad de obtener forraje; aunque la información acerca de ellos es escasa.
1 M.C. Investigador del Campo Experimental Sur de Tamaulipas. Sitio
Experimental Ébano. CIRNE. INIFAP. 2 Dr. Maestro Investigador del Instituto Tecnológico de Ciudad Valles, San
Luis Potosí.
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La presente publicación tiene la finalidad de difundir los resultados experimentales de producción de forraje de corte de arbustos tropicales con potencial forrajero bajo condiciones de riego en la Planicie Huasteca.
Obtención de la información
La producción de forraje que se presenta en esta publicación para cada uno de los arbustos se obtuvo con una densidad de 25 mil plantas por hectárea, distribuidas a un metro entre hileras y 0.40 m entre plantas. Cuando los arbustos estaban bien establecidos, se realizó la cosecha de forraje y las plantas quedaron a una altura de 40 centímetros después del corte, se efectuaron deshierbes manuales para mantenerlos libres de maleza y no se utilizó fertilización. El clima de la región es cálido subhúmedo de tipo AW0 y el suelo es clasificado como Vertisol con un contenido mayor al 50 % de arcilla y drenaje interno lento. Las condiciones de temperatura máxima, mínima y relación precipitación evaporación que ocurrieron de febrero a diciembre del 2005 y enero del 2006 en el Sitio Experimental Ébano, se presentan en la Figura 1. La temperatura mínima menor a 18 °C ocurrió en los meses de enero a abril, noviembre y diciembre. Las condiciones de deficiencia de humedad ocurrieron en un período de siete meses que comprendió los meses de enero a abril, junio, noviembre y diciembre, en los cuales se hace necesaria la aplicación del riego.
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Figura 1. Temperatura máxima, mínima y relación
precipitación evaporación que ocurrieron en Ébano, S.L.P., de febrero a diciembre de 2005 y enero de 2006.
TULIPÁN Hibiscus rosa-sinensis L.A.
Descripción
En la Planicie Huasteca el uso actual del Tulipán es como planta de ornato; sin embargo, sus hojas se encuentran entre los mejores forrajes (Benavides, 2001).
El Tulipán pertenece a la familia de las Malváceas, es un arbusto (árbol pequeño) que alcanza una altura de 1 a 3 m, las hojas son caducifolias, ovaladas y dentadas de 3 a 12 cm de longitud con el ápice agudo y el haz verde brillante. Sus tallos son fuertes (Figura 2). Las flores son de color rojo, rosa o blanco, llegan a medir hasta 15 cm de diámetro, tiene cinco pétalos grandes y cáliz largo, que le da apariencia "de trompeta".
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Figura 2. Plantas de Tulipán con riego en suelo vertisol de
Ébano, S.L.P.
Ecología
El Tulipán se puede encontrar en elevaciones desde nivel del mar hasta 2,100 msnm, en climas que van desde secos hasta muy húmedos, especie nativa desde el Sureste de México, las Antillas y Noroeste de América del Sur (Ordetx Ros,. 1952 citado por Meléndez, 2001), se desarrolla en la mayoría de los suelos con buena fertilidad y que no se inunden por períodos prolongados. Se desarrolla óptimamente con una temperatura promedio de 26 °C y precipitaciones pluviales de 900 mm anuales.
Producción de forraje de Tulipán
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En la Planicie Huasteca bajo condiciones de riego la producción de forraje total anual en base seca del Tulipán varía dependiendo de la frecuencia de cosecha (Figura 3).
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Cuando se corta cada cuatro semanas el rendimiento es de 8.1 toneladas por hectárea, de las cuales 78% son hojas y 22% tallos, cuando se cosecha cada ocho semanas el rendimiento asciende a 9.4 toneladas por hectárea, conformadas de 71% de hojas y 29% de tallos y cuando la cosecha se efectúa cada 16 semanas el rendimiento de forraje es de 10.4 toneladas por hectárea, de las que 59% son hojas y 41% tallos. A medida que se incrementa el período de tiempo entre cosechas (descanso) el rendimiento aumenta y la mayor producción de forraje se obtiene cuando los períodos de descanso son de 16 semanas. Sin embargo, a medida que se prolonga el período de descanso la proporción de hojas (parte comestible) disminuye y los tallos aumentan, por lo que es más recomendable realizar la cosecha entre cuatro y ocho semanas, ya que la mayor parte del forraje es comestible. Cuando el Tulipán se cosechó cada cuatro semanas la producción de forraje osciló de 47 kilogramos de materia seca por hectárea en noviembre a más de tres toneladas por hectárea en mayo, el 68.7% de la producción se concentró en los meses de enero a mayo (Figura 4).
En otras regiones de México al Tulipán se le ha evaluado la producción de forraje, en Tabasco cuando fue cosechado cada 30 y 60 días la producción anual de forraje seco fue de 8.2 y 13.9 t/ha; con una cantidad de hoja de 92 y 81%; respectivamente; pero del total del forraje el 47% se produjo durante la época de lluvias (Meléndez, 2001), y en Yucatán la producción de forraje (materia seca) fue de 19.2 t/ha cuando se efectuó el corte cada 70 días (Bolio, et. al. 2006). La producción de forraje por época del año y anual es diferente en cada región del país; sin embargo, cuando se cosecha cada cuatro semanas la producción es similar a la obtenida en Tabasco.
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Figura 3. Producción total anual de forraje seco de Tulipán en
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Figura 4. Distribución anual de la producción de forraje seco
de Tulipán en Ébano, S.L.P.
Calidad nutritiva del forraje de Tulipán
El forraje de Tulipán presenta un contenido de proteína cruda mayor al 18% y una digestibilidad de la materia seca superior a 65%. (Benavides, 1993 citado por Meléndez, 2001). El forraje del Tulipán de la Planicie Huasteca presenta 14.5% de proteína cruda, 11.9% de
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ceniza, 3.8% de grasa y 34.6% de fibra cruda. Con una producción anual de proteína cruda de 1.16 t/ha.
COCOHITE Gliricidia sepium (Jacq.) Kunth ex Walp.
Descripción
El Cocohite (Figura 5) es una leguminosa que pertenece a la familia de las Papilionaceae, perenne y de rápido crecimiento, que posee raíces profundas. Es un árbol que se encuentra ampliamente difundido en forma natural en México, con propiedades nutritivas atractivas para utilizarlo como un sustituto proteico en las dietas de bovinos en pastoreo o en sistemas de corte y acarreo (Palma, 2001), aunque el ganado bovino lo consume bien después de un período hasta de 11 días, tiempo que tardan en adaptarse al consumo de esta especie, también puede usarse como cerco perimetral, sombra, abono verde, control de la erosión y la madera para construcción de viviendas y combustible. En la región de la Huasteca el nombre común es Cocohite, palo de sol o primavera.
El Cocohite es un árbol de tamaño pequeño a mediano que alcanza alturas de 10 a 15 metros. Puede ser un árbol ya sea de tallo sencillo o tallos múltiples con troncos de 30 cm de diámetro dependiendo del ecotipo. Su copa es irregular y extendida, sus hojas son compuestas, imparipinnadas de 10 a 25 cm de largo, las hojas tiernas son generalmente opuestas en su arreglo, de forma oblonga y puntiaguda, pero en algunos especimenes pueden ser elípticas con puntas redondeadas (Gómez, et. al., 2002). Las flores son amariposadas de color entre rosa y púrpura claro, de una longitud aproximada de dos centímetros y agrupadas en racimos, la floración se presenta al comienzo de la estación seca, cuando los árboles han perdido sus
hojas. Los frutos son vainas dehiscentes aplanadas. La corteza es entre gris-café y blanquecino y puede ser profundamente corrugada en los árboles viejos de grandes diámetros.
Figura 5. Plantas de Cocohite con riego en suelo vertisol de
Ébano, S.L.P.
Ecología
El Cocohite es natural de los bosques de tierras bajas secas desde el nivel del mar hasta los 1,200 m. Es sensible al frío, su rango óptimo de desarrollo es de 20 a 30 ºC y se desarrolla pobremente abajo de este rango pero tolerará las temperaturas tan altas como los 42 ºC (Skerman, et. al., 1991). Se desarrolla adecuadamente esta especie con precipitaciones de 900 a 1,500 mm/año, pero prospera en áreas con precipitaciones bajas de 600 mm o abundantes de 3,500 mm (Gómez, et. al., 2002). Crece en suelos Vertisoles, tolera los suelos ácidos (pH > 4.5), pero no la saturación alta de aluminio (> 60%).
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Producción de forraje de Cocohite
En la Planicie Huasteca Potosina la producción anual de forraje de Cocohite en condiciones de riego es de 6.6 toneladas de materia seca por hectárea cuando se cosecha cada cuatro semanas y de 10.2 toneladas de materia seca cuando se efectuó la cosecha cada ocho semanas (Figura 6). Si se incrementa el tiempo de cortes aumenta la producción de forraje; sin embargo, la proporción de hojas disminuye y la de tallos aumenta, y con los periodos de dieciséis semanas los tallos se lignifican. Cuando la frecuencia de corte fue de cuatro semanas el rendimiento de forraje correspondiente a las hojas fue de 59% y el 41% restante son tallos. Al incrementar la frecuencia de corte a ocho semanas el 45% del forraje son hojas y el 55% son tallos. Por lo que los cortes deben efectuarse dentro del rango de cuatro a ocho semanas.
La máxima producción de forraje se presenta en mayo con 3.4 toneladas de materia seca por hectárea y la mínima entre los meses de octubre a diciembre cuando disminuye drásticamente de 38 kg /ha hasta cero (Figura 7), la razón de ellos es porque es un árbol caducifolio. Podar los árboles antes de la estación seca permite que el rebrote crezca para ser guardado para uso como alimento en la estación seca (Palma, 2001; Skerman, et. al., 1991).
En otros estados de la Republica Mexicana al Cocohite se le ha evaluado la producción de forraje, en Colima presenta producciones anuales de materia seca de 9 a 11 t/ha (Palma, 2001) y en Tabasco, la producción de materia seca acumulado en dos años varió de 18 a 36 t/ha dependiendo de la densidad de siembra y frecuencia de corte, los rendimientos más altos de biomasa total se tienen cuando se realizan los cortes cada 90 días, sin embargo los porcentajes de material comestible de la biomasa total son siempre por arriba del 90% cuando el Cocohite se cortó cada 60 días, cuando los cortes fueron con una frecuencia de 90 días este porcentaje fue menor del 60% (Meléndez, 2001). La producción de forraje anual que se obtiene en
diferentes regiones de México es similar cuando se cosecha cada ocho semanas.
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Figura 6. Producción de forraje seco de Cocohite en tres
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Figura 7. Distribución anual de la producción de forraje seco
de Cocohite en Ébano, S.L.P.
Calidad nutritiva del forraje de Cocohite
El Cocohite produce forraje de alto valor nutritivo que contiene de 18 a 25% de proteína cruda y la digestibilidad de la MS en un rango de variación de 57.5 a 62.9% (Palma, 2001; Meléndez, 2001). A el forraje de Cocohite que se produjo en la Planicie Huasteca se le
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determinó 24.8% de proteína cruda, 8.7% de ceniza, 9.4% de grasa y 32.9% de fibra cruda. Lo que se traduce a una producción anual de 1.5 t/ha de proteína cruda.
LEUCAENA Leucaena leucocephala (Lam.) de Wit.
Descripción
La Leucaena es una leguminosa que pertenece a la
familia de las Mimosaceas, las especies de leucaena (Figura 8) varían ampliamente en tamaño, de arbustos pequeños a árboles que crecen de 7 a 18 m. Es un árbol fijador de nitrógeno, y de entre las cerca de 700 especies de árboles que ahora son conocidos como fijadores de nitrógeno, es el más versátil. Esta leguminosa, originaria de las tierras bajas tropicales americanas, circundó el globo terráqueo hace cuatro siglos. En América Latina sirvió como fuente alimenticia (las semillas tiernas); ahora sirve en todo el mundo como una fuente de forraje, sombra, fertilizante, postes, pulpa para papel, leña, carbón y madera para construcción.
Figura 8. Plantas de Leucaena con riego en suelo vertisol de
Ébano, S.L.P.
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La Leucaena tiene hojas bipinnadas de 6 a 9 pares, raquis pinular de 5 a 10 cm de largo, con foliolos de 9 a 16 mm de largo y de 13 a 21 pares de pinnas ligeramente asimétricas, agudas en la punta y de redondeadas a obtusas en la base. Las flores son blancas o blanco-crema pálido de forma globular de 12 a 21 mm de diámetro. Sus vainas son delgadas y planas, hasta de 20 cm de largo y 2 cm de ancho, acuminadas. Las semillas son elípticas comprimidas, color café, un kilogramo contiene de 10,000 a 20,000 semillas. Tiene un sistema radical muy profundo con raíces laterales que crecen hacia abajo en ángulo agudo con respecto a la raíz primaria. Las raíces alcanzan los 2 m en un año, y 5 m a los cinco años (Skerman, et. al., 1991).
Ecología
La Leucaena se originó probablemente en los suelos bajos calcáreos de la península de Yucatán de México y Guatemala. Germina en suelos ricos en piedra caliza (incluyendo suelos altamente alcalinos) y fracasa donde el pH es inferior a 5, especialmente si la saturación de aluminio es alta. La Leucaena es altamente tolerante a la sequía una vez establecida, y prospera en regiones con fluctuaciones de lluvia de 500 a 2000 mm (Skerman, et. al., 1991).
Producción de forraje de Leucaena
En la Planicie Huasteca la producción anual de forraje seco de Leucaena bajo condiciones de riego fue de 7.4 toneladas por hectárea cuando la cosecha se realizó cada cuatro semanas y de 14.6 toneladas cuando se cosechó cada ocho semanas (Figura 9). Si se incrementa el tiempo de cosecha aumenta la producción de forraje; sin embargo, la proporción de hojas disminuye y la de tallos aumentan y con los periodos de 16 semanas los tallos se lignifican. Cuando la frecuencia de corte fue de cuatro semanas el rendimiento de forraje correspondiente a las
hojas fue de 63% y 37% a tallos, y con una frecuencia de cosecha de ocho semanas el 45% del forraje son hojas y el 55% son tallos. Por lo que los cortes deben efectuarse dentro del rango de cuatro a ocho semanas.
La producción de forraje en los meses de noviembre y diciembre disminuye drásticamente a 26 y cero kilogramos por hectárea, respectivamente; en febrero es de 153 kilogramos de materia seca por hectárea y en mayo se presenta la máxima producción de cuatro toneladas por hectárea (Figura 10). La Leucaena constituye una buena fuente de forraje durante los primeros periodos de sequía. En el departamento del Valle del Cauca, Colombia, con una precipitación de 700 mm anuales, la Leucaena cuando se aprovechó mensualmente en el período de julio a marzo obtuvo una producción acumulada de materia seca aprovechable de 3.2 t/ha (Mahecha, L, et. al. 1993), producción inferior a la que se obtuvo cuando se cortó la Leucaena cada cuatro semanas en la Planicie Huasteca Potosina.
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Figura 10. Distribución anual de la producción de forraje seco
de Leucaena en Ébano, S.L.P.
Calidad nutritiva del forraje de Leucaena
El forraje de Leucaena que se produjo en la Planicie Huasteca se le determinó 18.8% de proteína cruda, 7.9% de ceniza, 12.6% de grasa y 26.8% de fibra cruda. Lo que se traduce en una producción de proteína cruda de 1.3 t/ha. Además, se ha reportado por Skerman, et. al. en 1991 que el follaje tiene alta digestibilidad (de 60 a 70%) para rumiantes.
GUASIMA Guazuma ulmifolia Lam.
Descripción
La Guasima pertenece a la familia de las Ulmaceae, es un árbol que alcanza hasta 30 m de altura y el tallo de 30 a 40 cm de diámetro y posee una copa de forma redonda, está ampliamente distribuido a través del Caribe, México y América Central y América del Sur. Es una importante fuente de forraje para el ganado en muchas áreas, particularmente durante la estación seca cuando los pastos son escasos, la madera es usada para postes, carpintería
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en general, construcciones ligeras y carbón. Los nombres comunes en México son: Guásima, guásimo (Little y Wadsworth 1964).
Las hojas son alternas de formas aovadas ó lanceoladas de 5 a 7 cm de largo y 2 a 5 cm de ancho, y tienen un margen finamente dentado (Figura 11). Las flores son marrón-amarillento y se forman en racimos en la base de las hojas. Las semillas son negras de 3 a 5 mm de diámetro que están contenidas en cápsulas duras de forma redonda ó elíptica de 1.5 a 3 cm de largo, tienen 5 celdas y se abren en el ápice (Little y Wadsworth, 1964, López et al., 1987). Las ramas jóvenes están cubiertas con pelos de forma estrellada de color marrón rojizo ó gris-marrón. La corteza es gris ó gris-marrón y se vuelve estriada y áspera ó ligeramente hirsuta (Little y Wadsworth, 1964).
Figura 11. Plantas de Guasima con riego en suelo vertisol de
Ébano, S.L.P.
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Ecología
La Guasima está ampliamente adaptada en México, crece en suelos aluviales y arcillosos, y en climas húmedos y secos. Es una especie pionera que crece mejor en plena luz solar, coloniza áreas recientemente alteradas y también se le encuentra creciendo en las orillas de los arroyos y en potreros. Es una especie común en sucesión secundaria de los bosques. Esta especie crece mayormente en elevaciones por debajo de los 400 m con temperaturas promedio por encima de los 24º C (Dunsdon et. al., 1991). Requiere una precipitación pluvial anual entre los 500-2000 mm (Gómez, et. al., 2002).
Producción de forraje de Guasima
En la Planicie Huasteca en condiciones de riego la producción anual de forraje seco de Guasima es de 11.6 toneladas por hectárea cuando se cosechó cada cuatro semanas y de 15.6 toneladas por hectárea cuando la cosecha se realizó cada ocho semanas (Figura 12), si se incrementa el tiempo de cosecha aumenta la producción de forraje; sin embargo la proporción de hojas disminuye y la de tallos aumenta y con los períodos de 16 semanas los tallos se lignifican. Cuando la frecuencia de corte fue de cuatro semanas 72% del rendimiento de forraje correspondió a hojas y el 28% a tallos, al cosechar cada ocho semanas 60% del forraje son hojas y un 40% son tallos. Por lo que los cortes deben efectuarse dentro del rango de cuatro a ocho semanas.
En noviembre la producción de forraje (materia seca) disminuye drásticamente a 31 kg/ha y en mayo presenta la máxima producción de 4.9 t/ha (Figura 13).
En Tabasco; México, cuando la Guasima se cosechó cada 60 y 90 días la producción de forraje (materia seca) fue de 25.9 y 45.2 t/ha (de las cuales, el 65 y 56% son hojas); respectivamente, sin embargo en promedio más del 50% de la producción se obtuvo en la época de lluvias
(Meléndez, 2001). La producción de forraje varia entre regiones en México, ya que en Tabasco la producción de forraje es mayor a la que se obtuvo en la Planicie Huasteca Potosina.
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Figura 12. Producción de forraje seco de Guasima en tres
frecuencias de cosecha en Ébano, S.L.P.
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Figura 13. Distribución anual de la producción de forraje seco
de Guasima en Ébano, S.L.P.
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Calidad Nutritiva del forraje de Guasima
El follaje de la Guasima presenta un promedio de 23.1% de proteína, 56.6% de digestibilidad de la MS, con un 58.9% de pared celular y 3.42% de taninos (Araya et al, 1993 citado por Meléndez, 2001). Al forraje que se produjo en la Planicie Huasteca se le determinó 16.7%, de proteína cruda, 9.3% de ceniza, 4.7% de grasa y 22.8% de fibra cruda. Lo que se traduce a una producción de proteína cruda de 1.16 t/ha.
CONCLUSIONES
Tulipán, Leucaena, Cocohite y Guasima presentan potencial agronómico para ser utilizados como arbustos forrajeros de alta calidad en la región tropical.
La producción de forraje en condiciones de riego de
Tulipán, Leucaena, Cocohite y Guasima se incrementa a medida que se aumenta el período entre cosechas.
En los arbustos estudiados al aumentar el período
entre cosechas, la cantidad de hojas disminuye y la de tallos lignificados se incrementa.
La frecuencia óptima de cosecha de forraje de estos
arbustos es de cuatro a ocho semanas ya que la cantidad de forraje comestible (hojas) es alto.
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