Documento reservado Informe técnico RP/1981-1983/5/10.1/05 VENEZUELA

Fomento de la formación teórica y práctica de los especialistas y los usarios de la información

U n programa regional posgrada de formación para especialistas en biblioteconomía y información

por R. C. Swank

N.° de serie: FMR/PGI /82 /1 71

II u 1

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Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura

París, 1 9 8 3

V E N E Z U E L A

UN PROGRAMA. REGIONAL POSGRADA

DE FORMACIÓN PARA ESPECIALISTAS

EN BIBLIOTECONOMIA Y INFORMACIÓN

por R. C . Swank

Informe preparado para el Gobierno de Venezuela por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco)

U N E S C 0

Informe técnico RP/1981-1983/5/10.1/05 FMR/PGl/82/171(Swank) 28 de febrero de 1983

© Unesco 1983 Printed in France

i)

CONTENIDO

Página

INTRODUCCIÓN i

ANTECEDENTES 2

Planeamiento nacional 2 Logros alcanzados 3 Implicaciones para la región 4

ALGUNOS ASPECTOS BÁSICOS DE UN PROGRAMA REGIONAL 4

LOS ESTUDIANTES 6

Requisitos de admisión 6 Comentarios

ENSEÑANZA Y PROFESORES

6

Métodos y enfoques pedagógicos 7 Profesores 7

PLAN DE ESTUDIOS 8

Problemas especiales 8 Contenido general. 9

MATERIAL PEDAGÓGICO, INSTALACIONES Y EQUIPO 13

Material pedagógico 14 Instalaciones 14 Equipo 15

LA UNIVERSIDAD SEDE 15

Criterios de selección 15 Comentarios sobre los criterios 'y las posibles universidades sede 16 Sugerencia 19

APÉNDICE. Lista de personas entrevistadas 2Q

INTRODUCCIÓN

1. SI presente informe se elaboró atendiendo a una solicitud hecha a la Unesco por el Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Biblioteca de

Venezuela (IABN); a fin de que nombrara un consultor para un programa de formación de postgrado para especialistas en información y bibliotecas. El programa se propone prestar asistencia no sólo a Venezuela, sino también a otros países de la región, entre los cuales ya han señalado oficialmente su interés Costa Rica, Ecuador, Nicaragua, Panamá y la República Dominicana.

2. La misión se realizó del 2 de julio al 4 de agosto de 1982 de acuerdo con el programa de la Unesco para 1981-1983. El mandato inicial del consultor era el

siguiente:

asesorar a las autoridades en la preparación de un anteproyecto regional para estudios de postgrado en ciencias de la información. En estrecha colaboración con los responsables del proyecto, el consultor ayudará a elaborar proyectos de planes de estudio novedosos, concebidos para satisfacer las necesidades de infor­mación en una sociedad determinada, preparará una descripción general de los cur­sos, asesorará sobre la bibliografía básica necesaria para fundamentar los estu­dios y ayudará a determinar los criterios para la selección y matrícula de los estudiantes.

3. Este mandato se elaboró refiriéndolo implícitamente a una propuesta-, ya presenta­da a la Unesco, para un programa que debía realizarse en la Universidad de Zulia

(LUZ) situada en Maracaibo. Sin embargo, después de la llegada del consultor a, Caracas, las autoridades locales propusieron un mandato revisado que volvía a dejar abierto el problema de la sede y la naturaleza del programa.

4. El mandato revisado era el siguiente: En estrecha colaboración con los responsables del proyecto el consultor asesorará

sobre los aspectos básicos del programa de postgrado y, en particular, ayudará a:

- esbozar el contenido general (definir las principales áreas de estudio y su se­cuencia) ;

- definir los beneficiarios del programa y establecer los criterios para la selec­ción de los estudiantes;

- establecer los criterios para la selección de la institución sede y prestar ase­soría al respecto;

- determinar los títulos y aptitudes de los profesores;

- prestar asesoría en cuanto a materiales, instalaciones y equipo, necesarios para el apoyo a los estudios, teniendo en cuenta los recursos existentes en el medio local.

5. A raíz de los cambios introducidos en el mandato, se visitaron todas las princi­pales universidades: la Universidad Central de Venezuela (UCV), la Universidad

Simón Bolívar (USB), la Universidad Simón Rodríguez (USR), la Universidad de Zulia (LUZ) y el Instituto de Estudios Superiores- de Administración (IESA). Se incluyeron en el ámbito de la misión los programas de pregrado de bibliotecología y archivología de la UCV y LUZ. En las diferentes universidades, se entrevistó a los coordinadores de estudios de postgrado y se procuró examinar, al menos someramente, y a veces sin obtener resultados satisfactorios debido a la falta de tiempo, los recursos de bi­blioteca, las instalaciones de computadoras y demás instalaciones. Para examinar

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otros aspectos relativos a Información y Bibliotecas, se visitaron varias divisiones del IABN y del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas (CONICIT) ambos asociados administrativamente al Sistema Nacional de Servicios de Bibliotecas e Información (SINASBI). También se visitaron el Banco de Libro, el Centro de Infor­mación Técnica del Instituto Técnico Venezolano del Petróleo (INTEVEP)", el Sistema Nacional de Documentación e Información Médica (BLREME)" , el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC)", la Biblioteca Pública del Estado de Zulia y la Asociación Venezolana de Bibliotecas de Caracas. Estas visitas y entrevistas permitie­ron obtener un panorama de los servicios y necesidades de información de Venezuela. Al final del documento figura una lista de las personas entrevistadas, ordenadas por ins­titución.

6. Además de visitas y entrevistas, el consultor utilizó como elemento de juicio (en la medida de lo posible)" documentos de las instituciones visitadas, como

planes de estudios de postgrado, estatutos académicos y folletos descriptivos. Tam­bién dispuso de numerosos informes de conferencias internacionales, que en su mayoría trataban de las necesidades de información científica y tecnológica. Dichos informes no se examinarán en el presente documento; bastará señalar la recurrencia de recomen­daciones sobre la importancia de la preparación de personal para centros y redes de información científica.

7. De importancia más inmediata, como antecedentes del presente informe son las cuatro primeras propuestas para un programa de estudios de postgrado en informa­

ción y bibliotecología que se realizaría en Venezuela. El primero, que el consultor examinó hace ya varios años, y del que lamentablemente no posee copia, fue elaborado por Carlos Víctor Penna para la USB. El segundo fue una propuesta preparada por Rosario Horowitz para el IESA. Rosario. Horowitz y Félix Coogan prepararon el tercero para la USR, a solicitud del IABN. El cuarto es una propuesta para un programa en la Universidad de Zulia, y se encuentra actualmente en proceso de revisión de acuerdo con el nuevo mandato. Otro documento anterior que el consultor ha estudiado cuidadosamen­te es el programa regional para el Sudeste asiático, con sede en el Instituto de Bi­bliotecología de la Universidad de Filipinas.

8. Las opiniones expuestas en el presente informe son, en su totalidad, las del con­sultor. Hasta cierto punto, se inspiran en documentos, folletos, etc., pero,

primordialmente, se basan en entrevistas personales y en la observación directa.

ANTECEDENTES

9. Aunque conocidas de las autoridades venezolanas, las observaciones siguientes se incluyen debido a su posible interés para funcionarios de otros países de la re­

gión en lo que atañe a Venezuela como país sede de un programa regional.

Planeamiento nacional

10. Venezuela ha reconocido oficialmente a los servicios de información como compo­nente esencial del desarrollo nacional, a través de CORDIPLAN, el organismo de

planeamiento nacional, y SINASBI, el sistema nacional de información. El IABN, que forma parte de SINASBI, es el organismo ejecutor del programa de estudios de postgrado.

11. De conformidad con el plan nacional actual para 1381-1985, se continúan mejoran­do los servicios de información que responden a las necesidades reales de todos

los grupos de usuarios del país, sea cual fuere su situación histórica, cultural, eco­nómica y educacional. El logro de ese objetivo exige el fortalecimiento no sólo de los servicios de información científica y técnica, sino también de los: de las

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bibliotecas universitarias, escolares, infantiles, públicas y de cualquier otra cla­se, todo ello integrado en una red cuyos elementos se sustentan mutuamente en prove­cho general del país. Además, se entiende que la creación de una red nacional de información es producto no sólo de la planeación centralizada y de la ayuda de los organismos gubernamentales a su más alto nivel (es decir, de arriba-abajo);, sino tam­bién del fortalecimiento descentralizado (de abajo-arriba)" de bibliotecas y centros de información populares que desempeñan sus funciones localmente.

Logros alcanzados

12. Aunque la diferencia entre las metas y la realidad actual de una red nacional de información es todavía grande, ya se ña avanzado bastante en varios frentes.

a) Banco del Libro. Esta organización privada, fundada hacia los años 1960, sigue siendo uno de los programas más creativos e innovadores que ha visto este con­sultor. Fue anterior al IABN, que se inspiró en él y todavía sigue recogiendo sus ideas. Sus programas actuales abarcan una red experimental de bibliotecas públicas en Caracas, cuyos servicios llegan hasta los barrios; una red piloto de bibliotecas escolares; formación de paraprofesionales de bibliotecas públi­cas y escolares; un programa de bibliotecas infantiles; un programa de publi­caciones y un centro de documentación de bibliotecología y pedagogía. Sus pro­gramas serían considerados de avanzada en cualquier lugar del mundo.

b) IABN. El Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Bibliotecas, creado en 1977 es, como su nombre lo indica, mucho más que una Biblioteca Nacio­nal Latinoamericana de tipo tradicional. En efecto, es único porque sus respon­sabilidades- incluyen no sólo la Biblioteca Nacional misma, para la cual se cons­truye actualmente un magnífico edificio nuevo en un sitio excelente, que forma parte del conjunto central histórico y gubernamental de Venezuela, sino también-la creación de una red nacional de bibliotecas públicas y escolares, que incluye bibliotecas departamentales, distritales y municipales, y servicios técnicos cen­tralizados para la adquisición, catalogación y distribución de libros, revistas, materiales audiovisuales y otras fuentes de información a través de toda la red. Estos servicios técnicos están ahora automatizados para la producción de fichas de catálogo y un catálogo nacional común; muy pronto dispondrá de servicios en línea. Varias universidades y centros de información científica se proponen asociarse a esa base nacional de datos.

c) INTEVEP. Este centro de información sobre el petróleo es uno de los más avanza­dos de Venezuela. Dispone de una biblioteca técnica excelente, aunque pequeña, con personal y servicios muy valiosos. Sus sistemas automatizados de información están creciendo rápidamente; actualmente existen 35 terminales en línea, situa­dos en pequeñas poblaciones, y están previstas 91 para 1985. Tiene acceso por telecomunicación a Dialog, Orbit y otros bancos internacionales de datos, y ha firmado convenios con IVIC, USE, UCV y TESA en Venezuela y con diversos organis­mos extranjeros como la British. Lending Library, la Linda Hall Library y la Bi­blioteca del Congreso. INTEVEP se propone asociarse al IABN en un futuro próximo.

d) IVIC. El Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas posee una magnífica biblioteca tradicional, pero no cuenta aún con servicios automatizados. IVIC es también un importante recurso científico y tecnológico,

e) BIREME. La biblioteca biomédica (que tiene su sede en la UCV): es el núcleo de la red nacional de documentación e información biomédicas de Venezuela, Posee una importante biblioteca de libre acceso con las colecciones completas de Index Medicus, Biological Abstracts, etc. De 82 bibliotecas médicas que existen en

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el país, 25 son miembros de la red, que cuenta con comunicación por télex con Sao Paulo, Brasil, que a su vez tiene comunicación en línea con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos de América,

f) Las principales universidades de Venezuela: UCV, IESA, US3, USR y LUZ, son tam­bién recursos que contribuyen en diverso grado a la red nacional de información que se está creando.

13. Tomados en conjunto estos recursos forman un ambiente adecuado para estudios de postgrado en sistemas y servicios de información. Los vínculos de cooperación

que existen entre las diversas clases de organismos y servicios ofrecen oportunidades de estudios de observación y sobre el terreno para estudiantes de postgrado. El am­biente es creativo, estimulante y entusiasta.

14. Hacp años que existe el pleno convencimiento de la necesidad de un programa de estudios de postgrado en Venezuela. Baste decir que los programas existentes de

pregrado no han producido, por lo general, la nueva clase de liderazgo necesaria, y que presentan deficiencias en áreas tales como información científica y automatización. Es baja la calidad de la bibliotecología tradicional y el nivel general de los nuevos estudiantes. Aunque muchos bibliotecarios de Venezuela han viajado al exterior para realizar estudios de postgrado, el problema no puede resolverse de esa manera. Por el momento el IABN, que es la institución del país que emplea el mayor número de bi­bliotecarios, ha ampliado sus servicios para abarcar la capacitación de biblioteca­rios para su participación en las operaciones técnicas y en las redes de bibliotecas públicas y escolares, como también lo ha hecho INTEVEP para su red y sus servicios científicos y técnicos. Pero esos organismos no pueden suplir a un programa de post­grado.

Implicaciones para la región

15. El consultor no tuvo oportunidad de explorar, salvo a través de informes publica­dos, las aspiraciones, necesidades y actividades de otros países de la región en

cuanto a educación de postgrado como apoyo del desarrollo nacional y de redes regiona­les. Al parecer los demás países tienen necesidades de información más o menos seme­jantes debido a sus antecedentes comunes, tanto culturales como coloniales. Su nivel y sus programas académicos parecen muy afines a los de Venezuela. Las actividades realizadas en Venezuela, anteriormente descritas/ parecen ofrecer un ambiente favora­ble, variado y acogedor para cursos de postgrado que pueden ser atractivos para otros países de-la región.

ALGUNOS ASPECTOS BÁSICOS DE UN PROGRAMA REGIONAL

16. Todas las personas entrevistadas que trabajan en información en Venezuela estu­vieron de acuerdo en que lo más urgente era un programa que hiciera hincapié en

la gestión de centros de información, bibliotecas y sistemas de cooperación -es decir, para la formación de personas que puedan planear, diseñar, organizar y poner en marcha centros de información, y convertirse en líderes de la profesión. Este es el consenso unánime de las comunidades de información científica y tecnológica, y de bibliotecas públicas, universitarias y de otra índole. Lo que se necesita es la enseñanza no sólo de las técnicas de administración y gerencia per se sino también de métodos de infor­mación y de bibliotecas desde el punto de vista del administrador. En efecto, el pro­ducto que se busca es un nuevo tipo de bibliotecario, que sin ser un especialista, co­nozca el funcionamiento diario de una biblioteca y pueda tratar a alto nivel materias tales como políticas de la información, relaciones públicas, finanzas, creación de re­des y organización y superación del personal.

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17. También hay acuerdo general en cuanto a la conveniencia de emplear un enfoque interdisciplinario para diseñar programas de postgrado, recurriendo a la ayuda

-tanto en calidad de profesores como de estudiantes- de humanistas y especialistas en ciencias sociales, biología y física, ya que sus conocimientos, metodologías e intereses ejercen influencia sobre la solución de los problemas de información.

18. La naturaleza misma de las políticas nacionales de información en Venezuela re­quiere un enfoque multisocial que ayude a la difusión de Is información a todos

los sectores de la sociedad mediante toda clase de bibliotecas y centros de informa­ción, incluida la extensión de los servicios a los menos privilegiados.

19. Es necesario, además, que el nuevo plan de estudios insista en el carácter común de las funciones -el agenciamiento de fuentes de información, su organización

"bibliográfica" y su recuperación para el uso- tanto de los centros de información como de las bibliotecas de todas clases. A ello hay que agregar la aplicabilidad común de muchas tecnologías, como la micrografía, las ayudas audiovisuales, la infor­mática y las telecomunicaciones.

20. Al mismo tiempo, se requiere un programa que procure algún grado de especializa-ción en el ejercicio de dichas funciones y la aplicación de dichos instrumentos

atendiendo a las diferencias derivadas de la naturaleza de las esferas temáticas y las necesidades de información de grupos particulares de usuarios.

21. El programa también hace falta para familiarizar a los estudiantes con los obje­tivos, métodos y tecnologías de la creación de redes de cooperación e informa­

ción entre bibliotecas, que permitan vincular a los sistemas locales con los departa­mentales y nacionales y, a la larga, con sistemas regionales e internacionales. De­berá señalarse también la importancia de la correspondencia y compatibilidad de los estándares y las tecnologías.

22. Sería muy conveniente que el programa creara en los estudiantes el hábito de seguir la evolución de la literatura profesional y contribuir a ella, y también

de mantenerse informados sobre los problemas de importancia nacional y regional rela­tivos a las necesidades y oportunidades de información, a todos los niveles sociales y gubernamentales.

23. Por último, todos están de acuerdo en que el programa debe ser flexible y tener en cuenta las diferencias educacionales culturales y de experiencia práctica de

los estudiantes tanto de Venezuela como de otros países y, además, en que la flexi­bilidad de la universidad anfitriona para diseñar un plan de estudios adecuado y nom­brar a los profesores correspondientes, es esencial para el éxito del programa.

24. Los párrafos anteriores comprenden, en efecto, un conjunto de metas generales. Para lograr dichas metas se requiere un nuevo tipo de programa con profesores y

estudiantes altamente calificados. El consultor está de acuerdo con las propuestas anteriores en el sentido de que el programa deberá permitir la concesión del título de "Master", al menos inicialmente, que deberá tener una duración de un año o año y medio, según los requisitos de la universidad sede, y que el número inicial de estu­diantes deberá ser pequeño, unos 25 a 30, aunque durante el primer año experimental podría ser conveniente fijar un máximo de .10.

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LOS ESTUDIANTES

Reauisitos de .admisión

— 25. El requisito de admisión para estudiantes tanto de Venezuela como de otros paí­

ses será la Licenciatura.

26. Se pedirá que los aspirantes que tengan una licenciatura o una especialización en bibliotecología o archivología que cuenten con una buena experiencia en bi­

bliotecas o centros de información a nivel medio o alto de gestión, y que den mues­tras de capacidad administrativa y de comprensión del empleo de la información para fines educacionales e investigativos.

27. Se exigirá que los aspirantes que tengan una licenciatura o una especialización en campos distintos de la bibliotecología o la archivología muestren un interés

previo en el programa y alguna dedicación a sus objetivos con experiencia administra­tiva en bibliotecas o centros de información, o a través de estudios en campos como sistemas de información, informática, educación o comunicaciones, campos éstos que se relacionan directamente con el programa.

28. También se exigirá una comprensión del inglés escrito a un nivel adecuado para estudios de postgrado, ya que la mayoría de los materiales de instrucción están

escritos en ese idioma.

Comentarios

29. Al exigir los requisitos anteriores, la universidad sede sería tan flexible co­me^ fuera necesario para admitir únicamente a los estudiantes mejor calificados

y más promisorios, y eliminar a los interesados en inscribirse por motivos inadecua­dos o espúreos.

30. La aplicación de los mismos requisitos de admisión a estudiantes tanto de Venezuela como de otros países, se funda en el supuesto de que los países lati­

noamericanos que participarían en el programa son, como se indicó anteriormente, más semejantes en su nivel y títulos académicos (incluidas las licenciaturas en biblio­tecología y ciencias de la información)", que los países de otras partes del mundo, como el Sudeste asiático.

31. A juicio de este consultor, el requisito de que los estudiantes tengan un cono­cimiento adecuado del inglés escrito, de ser viable, debe cumplirse antes de la

admisión y no después. Parece que algunas universidades de Venezuela exigen dos idio­mas extranjeros para la admisión a estudios de postgrado: inglés, y francés o ita­liano. Al seleccionar la Universidad sede podría tenerse en cuenta este punto.

32. Como inicialmente el programa será pequeño y admitirá únicamente a estudiantes cuidadosamente seleccionados y que den pruebas de dedicación, podría ser un pro­

grama "cerrado", en el sentido de que todos los estudiantes serían de tiempo comple­to, entrarían al mismo tiempo, harían los estudios juntos, y terminarían juntos. (Este punto se ampliará más adelante en "enfoques pedagógicos")^, Se supone que la mayoría de los estudiantes, tanto venezolanos como de otros países de la región, re­cibirían becas de una u otra fuente, para aligerar en esa forma los problemas que plantean los estudiantes que trabajan. Sin embargo, una vez que el programa esté bien establecido, puede "ampliarse" a estudiantes de tiempo parcial y a otros que in­gresen a diferentes alturas del programa. La capacidad de la Universidad para ofre­cer estas posibilidades dependerá en gran medida del número de estudiantes.

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ENSEÑANZA Y PROFESORES

Métodos y enfoques pedagógicos

33. La enorme falta de materiales pedagógicos de Bibliotecología -más en LUZ, que en la UCV, pero importante en ambas "universidades- parece (el consultor no tuvo

oportunidad de visitar clases)_ impedir cualquier clase de estudio independiente de la literatura pertinente. Se supone, por lo tanto, y asi lo confirmaron diversas entrevistas, que la enseñanza se realiza principalmente mediante conferencias y me­morización. Se señaló que el acceso a la literatura, por si solo, no implicaría cam­bios en los métodos pedagógicos, pero sería una condición importante del cambio. Con materiales pedagógicos adecuados, podrán y deberán desarrollarse diferentes clases de métodos de enseñanza y aprendizaje, basados en un estudio dirigido de la literatura, la participación mutua en los resultados de dicfios- estudios y el desarrollo de la ca­pacidad de los estudiantes para aprender y pensar por sí mismos.

34. La meta de la enseñanza en un campo profesional es eminentemente práctica. Pa­rece que en la UCV y LUZ se tiende a empezar con la teoría y a continuar con

abstracciones tomadas de la práctica. La teoría es importante, pero lo es particu­larmente para predecir y explicar las realidades de la práctica. Debe prestarse ma­yor atención a la solución de los problemas de la vida real, no sólo mediante el es­tudio de las obras pertinentes, sino también mediante discusiones en el aula de clase, observación y estudios sobre el terreno, análisis de casos y experiencias personal en el funcionamiento de bibliotecas y centros de información. El consultor cree que la mayoría de las bibliotecas y centros de información acogerían a estudiantes que fue­ran a enterarse de sus^problemas y, eventualmente, a tratar de solucionarlos.

35. A fin de facilitar mejores enfoques pedagógicos, sería importante que la univer­sidad sede pudiera y estuviera dispuesta a: a) permitir que profesores de cual­

quiera de las disciplinas pertinentes enseñen en el programa, b) permitir que los estudiantes sigan cursos en otros programas o departamentos,• c) permitir que los es­tudiantes sigan cursos que equivalgan a un determinado número de créditos en otras instituciones, cuando dichos cursos no se puedan seguir en la institución sede, y d) aceptar y estimular estudios sobre el terreno como parte del plan de estudios. También en este aspecto, la flexibilidad sería el punto más importante para el éxito del nuevo programa.

36. Se supone que el programa formal de estudios de postgrado estará precedido, y sería complementado y perfeccionado mediante reuniones de trabajo y seminarios

cortos, y conferencias sobre temas especiales de interés tanto para los estudiantes, como para quienes ya ejercen la profesión, en particular cuando es posible recurrir a distinguidos profesores visitantes del país o del extranjero. Dichos programas es­tarían patrocinados no sólo por la universidad sede, sino por el IABN, diferentes bibliotecas y centros de información y la Asociación Venezolana de Bibliotecas.

Profesores

Criterios de selección

37. Se sugieren los siguientes criterios, de selección reconociendo, sin embargo, que pueden representar una meta imposible de alcanzar plenamente por ahora. Su

aplicación podría ser menos severa para los profesores de tiempo parcial que para los de tiempo completo. En principio, será la universidad sede la que determine los criterios definitivos.

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a) Todos los profesores de tiempo completo deberían tener el titulo de Master (en algunos casos el de Doctor): y en la mayor parte de los casos deberían poseer experiencia práctica en su campo de especialización,

b). Deberían dar pruebas de capacidad. Dicñas pruebas podrían ser una experien­cia docente anterior satisfactoria o podrían deducirse de un desempeño sa­tisfactorio en actividades semejantes- a la enseñanza, por ejemplo, la pre­sentación de ponencias en conferencias, la participación en seminarios y la dirección de grupos de debate,

c) Deberían dar pruebas de su capacidad o su. potencial para hacer investigacio-ciones, en particular de índole profesional aplicada, mediante estudios an­teriores, experimentos o ponencias, publicadas o no.

d) Por último, el cuarto criterio, aunque menos importante, serían los servi­cios profesionales y públicos prestados, es decir, la participación en or­ganizaciones profesionales y actividades comunitarias, y el interés por la utilización social de la información.

El cuerpo docente inicial

38. Parece posible que se pueda nombrar director del programa a un venezolano cali­ficado y tal vez uno o dos venezolanos más como profesores de tiempo completo.

Junto con ellos, formaría parte del equipo, de acuerdo con los recursos de la insti­tución sede, un número indeterminado de miembros del cuerpo docente de departamentos afines (por ejemplo, sistemas de información, informática, administración y comunica­ciones) . También se podrían encontrar profesores calificados de tiempo parcial entre el personal que trabaja en información científica y en bibliotecas. Sean cuales fue­ren los recursos humanos con que pueda contarse, el nombramiento de algunos expertos extranjeros durante algún tiempo, en especial oriundos de otros países participantes de la región, sería conveniente, por cuanto podrían tenerse en cuenta inmediatamente en el programa las necesidades, perspectivas y supuestos regionales comunes. Todo esfuerzo del consultor por especificar en detalle la configuración del cuerpo docen­te sería presuntuoso e inútil, ya que sólo podrá determinarse de acuerdo con la uni­versidad sede, una vez seleccionada ésta.

PLAN DE ESTUDIOS

Problemas especiales

39. El consenso de que el programa debe insistir en aspectos relacionados con la gestión tiene que traducirse en términos del plan de estudios. Las funciones

de gestión son en sí mismas universales en cuanto se aplican a todos los niveles de supervisión en las empresas de toda índole, y son transferibles de una clase de em­presa a otra. Sin embargo, la gestión de toda empresa requiere un buen conocimiento del contexto, contenido y métodos de dicha empresa. Se plantea entonces el problema de determinar qué nivel de competencia administrativa se pretende alcanzar, frente a los conocimientos especializados en ciencias de la información y bibliotecología. ¿Cuál es el equilibrio conveniente en el corto periodo de un programa de faster? En opinión del consultor, los cursos necesarios de teoría de la gestión podrían limitar­se a dos o tres, con cursos, adicionales, sobre métodos e instrumentos-, y la mayor par­te del plan de estudios podría, dedicarse al contenido de la ciencia de la informa­ción y la bibliotecología, estudiadas desde el punto de vista del administrador. No cabe esperar que el programa forme especialistas en catalogación de bibliotecas y diseño de sistemas de computación, aunque ofrecerla unas pocas especializaciones en el sentido lato del término. Una vez más, la meta sería (véase párrafo 16): formar

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un nuevo tipo de especialista que pueda dirigir un centro de información, una biblio­teca y una red de información y que tenga una amplia comprensión de sus finalidades, funciones, problemas y potencialidades en sus contextos culturales específicos y en el contexto de las limitaciones y oportunidades políticas, financieras y de desarrollo.

40. Un problema delicado que se presenta es la "nivelación", mediante procedimien­tos curriculares, de las diferencias de.antecedentes educacionales y experien­

cias de los estudiantes cuando comienzan el programa, por ejemplo, las diferencias entre a) bibliotecarios con deficiencias en ciencias de la información, b)~ especia­listas de información con deficiencias en bibliotecologia, c)" administradores con de­ficiencias tanto en bibliotecologia como en ciencias de la información, y d) educado­res, analistas de sistemas o historiadores que, aunque interesados en la cuestión y con mucho que ofrecer, son deficientes en bibliotecologia, ciencias de la información y administración. En términos generales, este consultor sugiere que dicho problema, por agudo que sea, tal vez sea en gran medida más aparente que real en el programa de postgrado propuesto. Parece preocupar, en primer lugar y con mucha razón, a los bi­bliotecarios (con licenciatura de la UCV o LUZ)", que ya estudiaron cuatro o cinco años de bibliotecologia. Por consiguiente, propuestas anteriores habían incluido cursos

de "nivelación" para estudiantes que no tuvieran licenciatura en bibliotecologia. Es­te consultor y algunos bibliotecarios que entrevistó no están de acuerdo con el enfo­que de "nivelación", porque a) el programa de postgrado no deberá ser primariamente una extensión de los actuales programas de licenciatura, b) se necesitan estudiantes que tengan licenciatura general o especialización en otros campos y éstos deben admi­tirse al nuevo programa sin sancionarlos y, c)" el verdadero problema no es la "nive­lación", sino la fusión de estudiantes con diferentes antecedentes, todos con "defi­ciencias" de alguna clase, incluidos los bibliotecarios, dentro de un todo coherente cuyos elementos- se respaldan mutuamente. La solución que se sugiere para este pro­blema es una especie de curso (o cursos}" "informales" de orientación, en que' los es­tudiantes, en una discusión abierta pero estructurada, conocerían sus antecedentes, intereses y definición frente al programa, examinarían las similitudes y diferencias de los distintos tipos de servicio de información y bibliotecas, compararían y escla­recerían las terminologías y metodologías, y llegarían a una comprensión mutua que, a medida que avancen en el programa, permitiría que cada uno de ellos hiciera su pro­pio trabajo de nivelación. Otra razón, en realidad la principal de estas sugerencias, es crear desde el primer día una universalidad de perspectivas y objetivos, que im­pregne todos los planes de estudio.

41. Como se indicó anteriormente (párrafo 20)", el nuevo programa debería ofrecer es-pecializaciones. Sin embargo, en el corto periodo de un programa de Master,

tales especializaciones no podrían ser lo suficientemente sustanciales para justifi­car una mención en el título mismo, como propone LUZ. Se sugiere la siguiente alter­nativa. En primer lugar, algunos cursos serán, sin duda alguna, optativos, y muchos otros ofrecerán una selección de áreas de estudio personal. Así pues, en el plan principal de estudios se dispondrá de un cierto grado de especialización. En segun­do lugar, se podría o, más aún, se debería asignar a cada estudiante un consejero que velara para que sus secuencias de estudios se conviertan en un todo racional, que podría incluir "trochas" de especialización. En tercer lugar, como se afirma que mu­chos estudiantes tienen dificultades para escribir ensayos y, en particular, su tesis, se podría exigir en cada curso un ensayo al final de cada periodo de estudios. El consejero podría entonces cerciorarse de que dichos ensayos, tomados en su conjunto, contribuyen sistemáticamente a una especialización y forman la base para una tesis.

Contenido general

42. Se estudiaron y compararon las propuestas, anteriores para planes de estudio de postgrado en el IESA, LUZ y USR,

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a) IESA. Esta propuesta sugería, sin elaborarlas detalladamente, tres vastas áreas de contenidos. La primera sería el libro y sus lectores, que comprenderían his­toria del libro, selección de libros y formación de fondos, necesidades e inte­reses de los usuarios, servicios de referencia, etc. La segunda sería la orga­nización, de libros y otras fuentes- de información, incluyendo bibliografías, ca­talogación, clasificación, indización y sistemas automatizados. La tercera se­ría las instituciones, incluso sus objetivos sociales y su gestión, que prestan servicios de información.

b) LUZ. El plan de estudios propuesto para LUZ es algo más específico, pero es ambiguo en cuanto trata más de procedimientos y formalidades académicas que de contenido. Se proponen tres niveles de estudio: un nivel básico (infor­mativo e- instrumental), uno intermedio (de actualización)" y uno de postgrado (es-pecialización y tesis). El consultor no ha logrado entender todavía los objeti­vos de los dos primeros niveles (de licenciatura), su relación con la especiali-zación en bibliotecología a nivel de licenciatura de LUZ y sus implicaciones de "nivelación" para no bibliotecarios y estudiantes de otros países. Para el ter­cer nivel (de postgrado) se propone un núcleo común que incluye los tres elemen­tos de procesamiento de la información (generación, transferencia y uso), la tecnología moderna aplicada en los campos de la información y la comunicación, la gestión (planeamiento, administración y evaluación de sistemas y servicios de información) y necesidades de los usuarios en cuanto a información. Sigue una lista más o menos al azar de posibles especializaciones, sin entrar en de­talles.

c) USR. Esta es la única propuesta que incluye un plan de estudios en términos de áreas detalladas- del desarrollo de los cursos. Es, por lo tanto, el modelo más claro de lo que podría ser un plan de estudios de postgrado para Venezuela y la región. Propone cuatro áreas de estudio. La primera es un programa preparato­rio de "nivelación" para estudiantes que no tengan licenciatura o especializa-ción en bibliotecología -propuesta que este consultor pone en tela de juicio (párrafo 40). La segunda son las Técnicas Administrativas, que incluyen los di­ferentes aspectos de la gestión y sus instrumentos administrativos, como esta­dísticas y presupuesto. La tercera es Bibliotecología, que se divide (cada una en detalle) en i) acopio de fondos, ii)" (organización de fondos), iii)" interpre­tación y uso de fondos, iv) preparación, mantenimiento, ubicación y entrega, y v) estructuras e instituciones. La cuarta es el área contextual, que trata en su mayor parte de-la historia de la sociología, la política, y la economía de América Latina y, además, de administración pública y educación.

43. A continuación figuran las sugerencias del consultor que se asemejan en algo ay

todas las anteriores, en particular porque conserva tres áreas básicas de estu­dio, además de la gestión, con distintas formulaciones, se vinculan más claramente a la propuesta de la USR, tal vez porque ésta es la más detallada. Sin embargo, para que las sugerencias sean más claras, se presentan de manera algo distinta, con dife­rencias de contenido y énfasis. También en este caso las autoridades responsables deberían elaborar, en estrecha colaboración con la universidad sede, cuando ésta se designe, una propuesta definitiva de. plan de estudios. Nota: - ésta no es una lista de cursos o secuencia de cursos; es una lista de áreas para el desarrollo de los diferentes cursos.

I. Orientación

a); El seminario "informal" mencionado anteriormente (párrafo 40);, estructurado de manera que trate de todos los aspectos del plan de estudios que se ela­bore, con referencia a las diferencias de antecedentes y especializaciones

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de los estudiantes, de terminologías y metodologías, de los puntos de los objetivos y funciones, y de las distintas prácticas de los diferentes tipos de centros de información y bibliotecas-.

Información y sociedad

a) El contexto latinoamericano. Se podrían ofrecer uno o más cursos sobre las condiciones históricas, sociológicas, políticas y económicas de América Latina, y sobre la naturaleza única de sus necesidades de información en el contexto de planeamiento nacional, prestando especial atención a las carac­terísticas educacionales, culturales, de erudición y tecnológicas, y a las bases históricas para una acción común.

b) Usuarios y necesidades de información. Características demográficas de la población actual. "Estudios de usuarios" de determinados sectores de la po-plación, con referencia a necesidades y fuentes de información, y a las pau­tas de su transferencia y empleo.

c) La historia y la situación actual de las bibliotecas y centros de información y de la industria editorial en América Latina.

d) Estudios comparados e internacionales de bibliotecas y centros de informa­ción, y de la industria editorial, con referencia a factores culturales, eco­nómicos, educacionales, políticos y otros que ayuden a explicar las diferen­cias, en especial entre sociedades "desarrolladas" y "en desarrollo".

. Selección, adquisición, conservación

a) Formac ion de fondo s. Evaluación y selección de fuentes de información que satisfagan las necesidades de los usuarios. Políticas y prioridades, inclui­do el acceso a Las fuentes de que se dispone mediante sistemas y redes co­operativos. Diferentes tipos de fuentes: libros y revistas, material audio­visual, microformas y colecciones de fichas, bancos de datos.

b) Adquisición. El mercado del libro: disponibles, de segunda mano y en el comercio de antigüedades, nacionales y extranjeros. Procedimientos de pedi­dos, descuentos, pedidos generales para determinadas clases de materiales. Regalos e intercambios.

c) Conservación de los recursos. Control de la temperatura y la humedad. Res­tauración de material deteriorado, dañado accidentalmente (por ejemplo por inundación) o estropeados. Conservación en microfilmes.

Gestión: funciones, métodos, instrumentos, responsabilidades. El funcionamien­to de instituciones que ofrecen servicios de biblioteca e información.

a) Teoría y práctica de la gestión,

i) Funciones básicas de la gestión, ..comunes, a .toda .clase de empresas.- Pla­neamiento, organización.,, nombramiento de personal y control. Se reco­mienda la utilización de esrtudios de casos, en particular de problemas propios de bibliotecas y centros de información, Toma de decisiones.

ü l Comportamiento organizativo. Estilos de liderazgo, motivación de los empleados, realce del interés del trabajo, grupos de trabajo formales e informales, comunicación entre el personal, etc. Participación del per­sonal en la toma de decisiones.

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iii). Contabilidad y presupuesto. El presupuesto como plan.

iv)_ Gestión del personal. Clasificación del personal. Planes de pago. Procedimientos de nombramiento.,, despido y promoción. Evaluación del rendimiento. Procedimientos de reclamos administrativos. Sindicatos.

v). Cooperación y redes de información entre bibliotecas. Organización, administración, finanzas.

b) Instrumentos metodológicos y técnicos, aplicables a todas las áreas del plan de estudios.

i) Análisis de sistemas. Los sistemas aplicados al análisis de los proble­mas de bibliotecas y de información. Investigación operacional.

ii) Estadística elemental.

iii) Procesamiento de datos. Introducción a la naturaleza y aplicabilidad de la automatización a bibliotecas y centros de información.

iv) Instrumentos y métodos micrográficos, audiovisuales y otros para docu­mentación.

v) Preparación de informes. El acopio de datos, la organización de las ideas y la composición de informes, para una presentación eficaz de pre­supuestos , programas, justificaciones, logros, etc.

c) Responsabilidades -sociales de los administradores. La promoción de servicios de bibliotecas e información. Aspectos de administración pública, políticas de información y metas nacionales. Liderazgo en el desarrolla nacional. Condición, prestigio, influencia, etc.

V. Organización "bibliográfica" de los fondos. La concepción y el funcionamiento de los sistemas de información, considerados desde el punto de vista del admi­nistrador.

a) Estudios teoréticos e históricos. Por ejemplo: teoría de la clasificación, evolución de los principios y la práctica de la catalogación de bibliotecas,

• y de los sistemas modernos de indización y de almacenamiento y recuperación automatizados. Problemas teóricos.

b) Catalogación, clasificación e indización.

i) Descripción bibliográfica, basada en los códigos ordinarios de cataloga­ción, formas alternas de descripción y codificación de registros para su recuperación por máquina,

ii). Análisis y descripción de materias. Presentación del contenido mediante indización, encabezamiento por materia y clasificación. Sistemas norma­lizados de catalogación y clasificación de bibliotecas,

iii). Organización de registros bibliográficos. Elaboración y mantenimiento de catálogos e instrumentos de acceso similares para bibliotecas. Fuen­tes de documentación; integración, control editorial y presentación de la documentación; tecnología de producción de catálogos; forma física de presentación de los instrumentos de acceso.

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c) Concepción y ejecución

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i) Sistemas de información computadorizados. Concepción del lenguaje de consulta, conceptos de telecomunicación, organización de ficheros. Diseño por los estudiantes de un sistema sencillo de recuperación de la información.

ii) Organización del material distinto de los libros en bibliotecas y cen­tros de información. Métodos de organización, acceso y recuperación.

iii) Diseño de catálogos. Insistencia en opciones de acceso por materia a sistemas de recuperación Bibliográfica; clasificación comparada, indi-zación, elaboración de tesauros y diseño de sistemas de recuperación para fines determinados.

iv) Sistemas de archivo.

VI. Servicio de información. La interpretación y utilización de los fondos.

a) Interacción entre intérpretes y usuarios. Comportamiento en contextos de información. Análisis de consultas, estrategias de búsqueda, etc., tanto en sistemas tradicionales como automotizados. DCI.

b) Servicios de blbliografía, referencia e información.

i) Materias optativas en determinados campos, por ejemplo humanidades, ciencias sociales y comercio, ciencia y tecnología, ciencias de la sa­lud, publicaciones gubernamentales, archivos, derecho, etc., tanto con métodos manuales como automatizados.

ii) Servicio de información computadorizado. Búsqueda por lotes y en linea de bases de datos bibliográficos. Experiencia práctica.

iii) Estudios particulares de servicios a grupos especiales. Por ejemplo, organizaciones comerciales, industriales y gubernamentales; los usua­rios de bibliotecas públicas, escolares e infantiles; grupos de biblio­tecas de facultades y centros de investigación. Trazado de perfiles de necesidades de información e ideación de maneras novedosas de satisfa­cerlas. Estudios orientados a la solución de los problemas de los pue­blos latinoamericanos culturalmente desvalidos.

iv) Evaluación de servicios de bibliotecas e información.

VII. La profesión. Los criterios de profesionalismo y el grado en que pueden alcan­zarse. Organizaciones profesionales, locales, nacionales, regionales e interna­cionales. IFLA, FID, etc. Literatura profesional. Deontología. La condición de la educación profesional en Latinoamérica. Actitud de servicio.

VIII. Tesis (véase el párrafo 41)..

MATERIAL PEDAGÓGICO, INSTALACIONES Y EQUIPO

44. Este campo es tan vasto que sólo se formularán unas pocas observaciones. Este consultor no pudo evaluar, y en muchos casos ni siquiera observar, los recursos

físicos con que se cuenta. Sin embargo se obtuvieron muchos comentarios útiles de las personas entrevistadas.

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Material pedagógico

45. Uno de los problemas básicos que es común a los estudios y servicios de informa­ción y bibliotecas, y tal vez a todos los demás campos de estudio, es la escasez

de libros, revistas, bibliografías, etc., en español. La industria editorial de Venezuela (y de muchos otros países latinoamericanos)" y el mercado del libro son in­cipientes y están mal organizados. Se dispone de algunas traducciones (¿hechas prin­cipalmente en México?) del inglés y de otros- idiomas-, pero de ningún modo en número suficiente. Este es un problema cultural tan amplio y generalizado que debería lla­mar la atención de CORDIPLAN, SINASBI, IABN, y los- otros organismos del más alto ni­vel de planeamiento nacional. Por ahora, es- indispensable la adquisición de material específico y de lectura en general en otros- idiomas, en particular en inglés, y la exigencia de poder leer adecuadamente textos en este idioma.

46. Un segundo problema muy vasto es el del esfuerzo, que deben hacer primordial, aunque no únicamente, las universidades, para mejorar los recursos de bibliote­

cas e información, tanto con fines pedagógicos como de cultura general. En las uni­versidades, este problema se relaciona con la importancia que se da al material peda­gógico. Este consultor tiene la impresión general de que probablemente sea poco el esfuerzo realizado por las universidades para mejorar su servicio de bibliotecas, si se considera el porcentaje del presupuesto de operaciones de la universidad (exluidos los gastos de capital) que a ellos se destina. En este caso, pueden ser útiles las comparaciones con las universidades norteamericanas, en que la vitalidad de las bi­bliotecas, sea que se la considere como causa o como efecto, es un índice fiable de nivel académico. En las universidades norteamericanas maduras, que hace ya mucho tiempo que han establecido sus fondos y servicios de biblioteca, el porcentaje del presupuesto de operaciones que se les destina es de 3% a 4%. En universidades más nuevas que todavía están en pleno desarrollo, dicho porcentaje puede llegar al 6%, 7% y hasta el 10%, mientras se esfuerzan por alcanzar el nivel de las otras. Se sugiere que las universidades tomen muy en serio este problema al planear los estudios de postgrado, y en especial de investigación, en todos sus campos de' interés, y en par­ticular en los estudios de bibliotecología e información.

47. El panorama universitario es especialmente sombrío en cuanto a material pedagógi­co para estudios de información y bibliotecología. Dicho material parece ser más

adecuado en centros tales como INTEVEP y IABN que en las universidades, con una o dos •posibles excepciones.. En las universidades parece que el material pedagógico para campos interdisciplinarios afines a los estudios de información es mucho más abundan­te que el que se refiere a bibliotecología tradicional aunque, en el contexto del pro­grama propuesto, esos dos campos no pueden separarse.

48. Sin embargo, la universidad sede no necesita disponer del material pedagógico para el programa de postgrado, salvo las fuentes básicas en cualquier idioma, con

tal que haya fácil acceso a fuentes existentes en otros lugares de la misma zona. Las políticas de adquisición deberían tener en cuenta a); el material pedagógico básico-de que se puede disponer inmediatamente, hï las fuentes bibliográficas generales y otras fuentes de referencia para estudios de servicios de información en campos especializa­dos como ciencia y tecnología, humanidades y ciencias sociales, y c); las fuentes peri­féricas de que se dispone en otras instituciones de la zona. En efecto, en sentido lato, las fuentes necesarias para un programa de postgrado de información y bibliote­cología comprenden todas las fuentes disponibles para el estudio en todos los campos, cada uno de los cuales tiene problemas y necesidades de información.

Instalaciones

49. Con este término designamos el espacio necesario para aulas-, oficinas, laborato­rios, etc. Todas las universidades visitadas disponen de espacio adecuado, aun­

que algunas más que otras.

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Equipo

50. El problema más importante que se plantea es- el del equipo de computadorización. El consultor no es experto en este campo, pero sabe qué clase de equipo se nece­

sita. Los coordinadores de todos los programas de postgrado hablaron de sus centros de computadorización, y uno admitió que el centro de su universidad no era adecuado para estudios de información y bibliotecología. El consultor no visitó el centro de computadorización de ninguna universidad, pero se enteró de las instalaciones que existen en INTEVEP e IABN, ambas adecuadas- Los equipos que se requieren son los que elaboran bases de datos bibliográficos, forman redes para la difusión y retroalimen-tación de la información y recurren a las bases internacionales de datos. En el caso ideal, la universidad sede debería poder adaptar, si aún no lo ha hecho, su sistema de computadorización a dicha clase de servicio o, si ello no fuere posible en un fu­turo inmediato, ofrecer a sus estudiantes la posibilidad de adquirir experiencia prác­tica en INTEVEP e IABN sin pasar por el alto el costo del tiempo de computación o las interrupciones del servicio normal. La experiencia práctica consiste sencillamente en manejar los aparatos y en practicar búsquedas por lotes y en línea, con referencia al análisis de consultas y a estrategias de búsqueda y fuentes de datos para el aco­pio, catalogación, indización y otros procesos.

51. El equipo restante es comparativamente de poca importancia. Se requiere equipo de oficina microfotográfico y de duplicación, así como ayudas audiovisuales,

como proyectores periscópicos, proyectores de diapositivas y cámaras de video.

LA UNIVERSIDAD SEDE

Criterios de selección

52. Ubicación. Variedad de bibliotecas y programas de información de toda clase en la zona, para el posible apoyo al plan de estudios de postgrado y para atraer

estudiantes de todo el país y dé la región. Existencia de fondos de biblioteca y de información, de servicios e instalaciones de computadorización y redes operacionales, y de especialistas para dar clase a tiempo parcial. Otros criterios son los siguientes:

a) las especializaciones correspondientes de postgrado en la universidad, el nivel de sus profesores y estudiantes y la reputación nacional e interna­cional de sus estudios de postgrado;

b) la calidad y cantidad general de los recursos y servicios de la biblioteca de la universidad, así como la pertinencia de su material pedagógico en ciencias de la información, bibliotecología y otros campos conectados con el nuevo programa de postgrado. Además, el equipo y los servicios de compu­tadorización y documentación de que dispone, el espacio y las demás insta­laciones;

c) la flexibilidad de la universidad en cuanto a innovación en los planes de estudio, con un mínimo de limitaciones burocráticas para la reorientación de las especializaciones existentes y de los recursos docentes, y para la contratación de profesores en nuevas, áreas de especialización (por ejemplo bibliotecología). de acuerdo con las necesidades del nuevo programa. Además, su flexibilidad para identificar otros recursos de la zona y estimular el acceso a ellos en régimen de cooperación con fines de consulta de material pedagógico, observación y sobre el terreno estudios relacionados con progra­mas experimentales, cuando sea necesario o conveniente, con terminales de computadoras en el contexto de la búsqueda de información;

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d). si grado de interés de la universidad por el nuevo programa y su dedicación a él. Su voluntad y capacidad para continuar el programa una vez se hayan agotado los fondos externos que se aporten para establecerlo. Su compren­sión y aceptación de la responsabilidad de emprender un programa regional. En los casos de UCV y LUZ, que ya tienen programas de pregrado de bibliote-cología y archivología, se pueden considerar además los antecedentes de su apoyo a dichos estudios.

Comentarios sobre los criterios y las posibles universidades- sede

53. Con arreglo al nuevo mandato, se pedía al consultor que estableciera "los cri­terios para la selección de la institución sede" y prestara su asesoría al res­

pecto. Sin embargo, la evaluación de las diferentes universidades candidatas a ser sedes,todas las cuales demostraron su interés por el programa, era una tarea que im­plicaba mucho más que un análisis somero por el consultor. Pero es posible hacer al­gunas recomendaciones, que se desprenden principalmente de entrevistas y documentos y, en menor escala de la observación. El consultor dará cuenta pues, a continuación, de cómo juzga la situación siempre que disponga de elementos para hacerlo, y no lo hará si no los tiene. La selección de la universidad sede podrá hacerse únicamente cuando el IABN y demás autoridades hayan examinado a fondo la situación, efectuado negociaciones con los candidatos más prometedores y llegado a un acuerdo sobre los criterios pertinentes.

54. Queda fuera de estos criterios el problema de decidir si la universidad sede de­bería ser una (por ejemplo LUZ o UCV); que ya cuenta con un programa de pregrado

en bibliotecología, que pudiera servir de base al programa de postgrado. Este es otro problema delicado que pone en juego el orgullo de los bibliotecarios, posiblemen­te su condición a corto (no a largo)" plazo, así como las preocupaciones de los espe- . cialistas en información. Por razones que resultan claras a todo lo largo de este informe, el consultor ha llegado a la conclusión de que el programa de postgrado no debería ser una extensión o expansión de un programa de pregrado ya existente; su base conceptual deberá ser mucho más amplia. Sin embargo, el hecho de que ya exista un programa de pregrado en bibliotecología en una universidad no deberá ni favorecer, ni desfavorecer su selección como sede del nuevo programa.

55. En primer lugar, en cuanto a ubicación, Maracaibo no cuenta con recursos de bi­bliotecas e información en la zona comparables a los de Caracas. La conclusión

sacada de las entrevistas es que los estudiantes de Caracas, de otras partes de Venezuela y del extranjero se mostrarían renuentes a estudiar en dicha ciudad. El clima constituye otro problema. Estas observaciones no tienen nada que ver con la idoneidad de LUZ como universidad, pero indican claramente que el sitio más favorable para el programa es Caracas, donde es-tán situadas las otras cuatro universidades.

I. LUZ

a) No hay bases suficientes para hacer un comentario a fondo.

b) No se tuvo ocasión de observar los recursos de biblioteca como un todo, pero se comprobó que los recursos con que. cuenta para estudios de pregrado en bi­bliotecología son muy escasos.. No hubo oportunidad de examinar los fondos sobre ciencias de la información o las instalaciones y servicios de compu-tadorización. El espacio de que se dispone es adecuado,

c) Sólo se comprobó de palabra la voluntad que existe de establecer un progra­ma interdisciplinario. Hay indicios de cooperación prospectiva con el pro­grama de computadorizacion del IABN.

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d) El consultor tuvo la impresión de que existía poco interés o disposición por parte de la universidad. Si comprendió bien, el Consejo de la Univer­sidad convino en que LUZ fuera sede del programa con la participación de tres departamentos: humanidades, economía y ciencias. Sin embargo, des­pués de dos años, no se ha dado el paso siguiente, a saber, la creación de un comité que estudiara la naturaleza de la propuesta e informara al res­pecto, tanto al IABN como al Consejo de la Universidad. Entretanto el pro­grama de pregrado de especialización en bibliotecología apenas si subsiste, el de archivología dejó temporalmente de existir hace dos o tres años. En el programa de especialización en biSliotecología, hay únicamente siete profesores de tiempo parcial -un grupo abnegado, talentoso y digno de admi­ración. Todos los estudiantes son de tiempo parcial y sólo se ofrecen cla­ses nocturnas. No hay, pues, muchos elementos que muestren interés por la bibliotecología o las ciencias de la información, aunque las deficiencias del programa de pregrado de LUZ podrían deberse tanto a que Maracaibo sea la sede como la falta de interés por parte de la administración.

II. IESA

Si se tiene en cuenta el criterio d)', no ofrece buenas perspectivas, a pesar de que es una excelente facultad de administración. Sin embargo, su interés principal es la administración en sí y su meta primordial la formación de administradores de empresas. Es un producto del comercio y la industria, que parecen haber tenido una influencia determinante en la creación de sus programas y seguir dominándolos.

Hace algún tiempo, bajo una dirección diferente, el IESA se interesó por progra­mas de administración en campos distintos al comercio y la industria y fue considera­do como una sede posible del programa propuesto. Realizó algunos programas experi­mentales de administración de la enseñanza superior, por ejemplo, y todavía recibe propuestas para programas tales como la administración de los medios de comunicación de masas. Dichos experimentos fracasaron y se cancelaron. Su fracaso se debió apa­rentemente a que el IESA exigía que sus estudiantes, fueran cuales fueran las áreas optativas de sus programas, cumplieran ante todo con los requisitos básicos de un Master en Administración de Empresas. Después que los estudiantes hubieran hecho esos estudios, encontraban mejores puestos en el comercio y la industria que en las áreas optativas. Además, eran pocos los candidatos que podían llenar los requisitos de adminisión del IESA para dichos programas. Así pues, el IESA es actualmente una facultad de administración para la industria y el comercio, y un modelo para toda Latinoamérica, pero no es compatible con la administración de bibliotecas y centros de información, ni tampoco con una formación interdisciplinaria de administradores de bibliotecas e información, que puedan prestar sus servicios a todos los sectores de la sociedad latinoamericana.

III. UCV

a) En lo-que atañe al primer criterio, el consultor estuvo preocupado durante las primeras entrevistas, al enterarse de que la UCV era primordialmente una universidad de pregrado, con exceso de estudiantes, muy politizada, que contaba con estudiantes de muy bajo nivel (por lo general apenas llenaban los requisitos académicos mínimos de admisión):. Se decía que los programas de postgrado eran deficientes.

b): No se pudo observar la calidad ni el volumen de los recursos de biblioteca de la universidad, ya que están repartidos entre unas sesenta bibliotecas de los diferentes departamentos, no coordinados entre sí. El material pe­dagógico para bibliotecología, archivología e información parece ser mejor

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que en LUZ, pero sigue siendo insuficiente. Se decía que hah.ía un centro de computadorizacion, aunque no adecuado para estudios de bihliotecología e información. Hay espacio para los estudios de postgrado en un edificio nuevo de muchos pisos.

c) Parece que actualmente es real la flexibilidad en materia de innovación en los planes de estudio de postgrado. La UCV ha creado recientemente una di­visión de postgrado que es independiente de sus programas de pregrado y no está afectada por los problemas- de reputación, exceso de estudiantes y po­litización de los mismos.• Las primeras- impresiones del consultor cambiaron favorablemente a raíz de una entrevista posterior con el coordinador de los estudios de postgrado.

d) En cuanto a muestras de interés por estudios de bibliotecología e información, no se observó nada especial fuera de lo siguiente. Se comprobó que la UCV y el IABN habían firmado un acuerdo, el 4 de febrero de 1982, por el cual el IABN ayudaría a la capacitación del personal de la biblioteca de la UCV en distintas áreas, incluida la consulta de los ficheros bibliográficos compu-tadorizados del IABN. También se informó que existían buenas relaciones con el INTEVEP. Además, a raíz de la visita del consultor a la Facultad de Bi­bliotecología de la UCV, y cuando se supo que ya no era seguro que LUZ fuera la universidad sede del programa, se convocó a una reunión, promovida por el . Director de la Facultad de Bibliotecología en la que tomaron parte el Coor­dinador de estudios de postgrado, el Decano de humanidades y el Vicerrector de asuntos académicos y se expuso su interés en el programa propuesto. Cabe señalar que la UCV, aunque en el pasado lo haya hecho.con poco interés y de­dicación, ha mantenido durante varios decenios el principal programa de pre­grado de bibliotecología de Venezuela.

IV. USB

El consultor tuvo sólo una entrevista, aunque muy promisoria con el Coordinador de estudios de postgrado de la USB. Se canceló una segunda visita para examinar los servicios e instalaciones de biblioteca y computadorización porque la Universidad había cerrado por vacaciones.

a) Principalmente como resultado de entrevistas con científicos y técnicos de la información, todo indica que la USB cuenta con todas las especializacio-nes de postgrado esenciales para el programa propuesto, aunque no tiene pro­grama de pregrado en bibliotecología. Si bien es una universidad "técnica" y sus programas de pregrado son técnicos, los de postgrado se están exten­diendo rápidamente a las humanidades y ciencias sociales de manera delibe­rada, integral e interdisciplinaria. Se informó que la calidad de sus pro­gramas de postgrado y de sus profesores era muy alta (por ejemplo, nombra­miento de venezolanos brillantes titulares de doctorados obtenidos en el extranjero).

b). No se pudo observar el volumen y calidad de los recursos de la biblioteca, ni de las instalaciones y servicios de computadorización de la USB. Se puede suponer razonablemente que los recursos de bibliotecas son mejores en información científica y técnica que en bibliotecología tradicional. Un hecho importante es que la USB tiene únicamente una biblioteca central, sin bibliotecas de departamento. Este punto es importante para el programa pro­puesto ya que los estudiantes tendrían un acceso centralizado a todas las colecciones y servicios de.la biblioteca en los diferentes campos de estu­dio y no deberían recurrir a diferentes bibliotecas dispersas, con posibles restricciones a la utilización. La ciudad universitaria es amplia y atrac­tiva.

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c)_ Hay una gran flexibilidad para lograr una nueva configuración de los estu­dios interdisciplinarios de postgrado, recurriendo a profesores ya nombra­dos y nombrando nuevos-, según las necesidades, (por ejemplo en biblioteco-logía).;. No se ve que existan problemas para concluir acuerdos de colabora­ción con otras universidades, bibliotecas y centros de información que podrían prestar su ayuda.

d) Son muy grandes el interés y la dedicación del Coordinador de estudios de postgrado, que hizo su doctorado en sistemas de información en el Georgia Institute of Technology. Dijo que le interesaba mucho ese tipo de progra­ma y que lo crearía con ayuda externa o sin ella. (Sin embargo, para crear un programa regional necesitaría ayuda);.

V. USR

Esta nueva universidad experimental se parece al IABN porque llega la población menos privilegiada del país. . Cuenta con buenos profesores, algunos de ellos extran­jeros, y ha extendido sus programas a centros situados lejos de Caracas mediante cur­sos de divulgación y acuerdos con instituciones de fuera de la capital. Sus especia-lizaciones de postgrado son, entre otras, programas de Master en educación superior, tecnología educacional y asistencia social. Sus recursos de biblioteca son muy defi­cientes y están muy dispersos. El Coordinador de estudios de postgrado y uno de los profesores fueron muy francos respecto a los problemas actuales y a las perspectivas futuras de los programas de postgrado. Al igual que la USV, la USR cuenta felizmente con una gran flexibilidad para elaborar planes de estudio novedosos. Pero está per­diendo dicha flexibilidad a causa de intrusiones políticas y administrativas. Se está preparando un nuevo plan quinquenal. Es una universidad que Venezuela debería apreciar en lo que vale y ayudar a que se desarrolle, en pro de su interés cultural nacional. Pero hay dos aspectos que parecen descartar su selección como sede del programa en cuestión. En primer lugar, su finalidad, como la del IESA,es demasiado especializada. En segundo lugar, sus perspectivas actuales, políticas y administra­tivas, aunque prometedoras, son demasiado inciertas, al menos por ahora.

Sugerencia

56. En resumen, se sugiere que las autoridades venezolanas realicen discusiones y negociaciones con la USB, que parece ser actualmente la universidad sede de

mejores perspectivas, y que continúen examinándose las posibilidades con la UCV y con LUZ, si no se considera imprescindible que la sede esté en Caracas. El objetivo inmediato sería elaborar rápidamente una nueva propuesta que incluya objetivos, per­sonal y detalles respecto al plan de estudios y presupuesto, a fin de presentarlo a la Unesco. Para realizar esto no parece probable que se necesiten más consultores externos, a no ser que en el proceso de ejecución se requieran, como profesores, es­pecialistas en diversos aspectos del plan de estudios, que ayuden a iniciar el pro­grama. Venezuela ya cuenta con un núcleo de especialistas en información y bibliote­carios, altamente competentes, que están bien informados sobre lo que se necesita y que pueden ayudar a negociar una nueva propuesta con una universidad adecuada.

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APÉNDICE

Lista de personas entrevistadas

El asterisco indica que se entrevistó a esas- personas dos o más veces.

"Entrevistado" significa que esas personas estuvieron por lo menos presentes en una reunión. En la mayoría de los casos, durante las reuniones en grupo, los entrevistados tomaron parte en las conversaciones. Además, se entrevistó perso­nalmente a la mayoría de las personas clave que participaron en reuniones de gru­po, lo cual se indica con asterisco. Se entrevistó a muchos otros sólo indivi­dualmente y si ello ocurrid varias veces ese hecho también se señala con un aste­risco.

IABN

"Virginia Betancourt, Directora General

Guadalupe Viloria, Directora Ejecutiva

"Alfonso Quintero, Director de los Servicios de Biblioteca

«Maritza Turupial, Oficina de Relaciones Internacionales

"Rosario Gassol de Horowitz, Directora de Desarrollo de Recursos. Humanos

Julio Cornieles, Director de Planeamiento

«Thomas McGinn, Coordinador de Servicios Técnicos y Consejero de Automatización

Yolu Medina, Director de Servicios Técnicos

Aurelio Alvarez

CONICIT

Erasmo Filosa, Director del Centro de Información

UNESCO

•••Ursula Albertus, Consultora Regional, PGI

BANCO DEL LIBRO

Rómulo Navea, Director de los Servicios Públicos de la Biblioteca

INTEVEP

José Luis Peniza, Director del Centro de Información Técnica

IVIC

Hana M. de David, Directora de la Biblioteca

IESA

Moisés Nairn, Director Académico del Instituto de Estudios Superiores de

Administración

Ramón Piñango, Director de Investigaciones

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ucv

"Luisa Villalba, Subdirectora de la Biblioteca Central

María Magdalena Hernández, Directora de la Facultad de Bibliotecología y

Archivología

"•Rafael Vélez, Profesor

"Alberto Villalón, Profesor

Alicia de Acosta, Directora de la Biblioteca Biomédica

Víctor Morales, Coordinador de los Estudios de Postgrado

LUZ (Maracaibo)

Gastón Parra Luzardo, Vicerrector Académico

Ana Mireya Uzcátegui, Decana de Humanidades

'•José Godsuno Óchela, Director de los Estudios de Postgrado de la Facultad de

Humanidades y Educación

José Enrique Finol, Director de los Estudios de Pregrado de la Facultad de

Ciencias

"Flor Urdaneta, Director del Programa de Especialización en Bibliotecología y

Archivología

Aura Frenchi, Profesora

Duria García de Rincón, Profesora

"Nelly Santander, Profesora

Alidia de Molina, Profesora

BIBLIOTECOLOGÍA PUBLICA DEL ESTADO DE ZULIA (Maracaibo)

"Nelly Primera, Directora

ASOCIACIÓN DE BIBLIOTECARIOS Y ARCHIVISTAS DE ZULIA' (Maracaibo)

Nancy Villarroel de Negrón, Presidenta

USR

Elizabeth. Caldera, Coordinadora de los Programas de Postgrado

Ricardo Szikora, Profesor

USB

Jorge Baralt Torrijos, Coordinador de los- Cursos de Graduados

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ASOCIACIÓN DE BIBLIOTECARIOS Y ARCHIVISTAS DE VENEZUELA (Caracas),

Florencia Fuentes, Presidenta

Omaira Vegas, Vicepresidenta

Luis Padrón, Presidente del Comité Disciplinario

Rebeca Arias, Tesorera

Aída Espinosa, Secretaria