un viaje maravilloso

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Un viaje maravilloso: Reyes Magos llegan a Belén a adorar a Jesús recién nacido Estos hombres sabios llegaron desde oriente siguiendo una estrella que los guió. Una gran expectación provocó la llegada de tres reyes a Belén buscando al rey de los judíos que acababa de nacer. ¿Quiénes son?, sus nombres son Melchor, Gaspar y Baltazar, realizaron una gran procesión desde oriente, guiándose por una estrella que los condujo hasta Belén. Pero este viaje no fue nada de fácil, ya que cuando llegaron a Jerusalén y, tras perder de vista la estrella, entraron al palacio del rey Herodes – “un hombre de poder” – y afrontaron su engaño, “una tentación puesta ahí por el diablo” con la intención del eliminar a Jesús. Pero estos reyes sabios, tuvieron una aparición de un ángel que les advirtió el peligro que corría Jesús, si ellos obedecían el deseo del rey Herodes, que era saber el sitio exacto donde nació Jesús. Cuando llegaron a Belén la estrella que seguían se detuvo debajo de un establo, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro (presente conferido a los reyes), incienso (empleado en el culto en los altares de Dios) y mirra (un compuesto embalsamador para los muertos).

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Noticia de Religiòn

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Un viaje maravilloso:

Reyes Magos llegan a Belén a adorar a Jesús recién nacido

Estos hombres sabios llegaron desde oriente siguiendo una estrella que los guió.

Una gran expectación provocó la llegada de tres reyes a Belén buscando al rey de los judíos que acababa de nacer. ¿Quiénes son?, sus nombres son Melchor, Gaspar y Baltazar, realizaron una gran procesión desde oriente, guiándose por una estrella que los condujo hasta Belén. Pero este viaje no fue nada de fácil, ya que cuando llegaron a Jerusalén y, tras perder de vista la estrella, entraron al palacio del rey Herodes – “un hombre de poder” – y afrontaron su engaño, “una tentación puesta ahí por el diablo” con la intención del eliminar a Jesús. Pero estos reyes sabios, tuvieron una aparición de un ángel que les advirtió el peligro que corría Jesús, si ellos obedecían el deseo del rey Herodes, que era saber el sitio exacto donde nació Jesús.

Cuando llegaron a Belén la estrella que seguían se detuvo debajo de un establo, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro (presente conferido a los reyes), incienso (empleado en el culto en los altares de Dios) y mirra (un compuesto embalsamador para los muertos).

Estos reyes volvieron a sus lugares de origen por un camino distinto al que realizaron en un comienzo, para así evitar de hablar con el rey Herodes y proteger la vida de este niño recién nacido.