utilitarismo marcos schotborgh

22
REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACION UNIVERSITARIA UNIVERSIDAD FERMIN TORO FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS Y POLITICAS ESCUELA DE DERECHO BARQUISIMETO ESTADO LARA UTILITARISMO UTILITARISMO Facilitador:

Upload: marcosrodolfo97

Post on 17-Feb-2017

197 views

Category:

Education


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELAMINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACION

UNIVERSITARIAUNIVERSIDAD FERMIN TORO

FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS Y POLITICASESCUELA DE DERECHO

BARQUISIMETO ESTADO LARA

UTILITARISMOUTILITARISMO

Facilitador:

Nombre: Marcos Schotborgh

C.I. 27212634

Barquisimeto, Septiembre 2015

Page 2: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

.- Utilitarismo

El utilitarismo es una teoría ética que asume las siguientes tres

propuestas: lo que resulta intrínsecamente valioso para los individuos, el

mejor estado de las cosas es aquel en el que la suma de lo que resulta

valioso es lo más alta posible, y lo que debemos hacer es aquello que

consigue el mejor estado de cosas conforme a esto. De este modo, la

moralidad de cualquier acción o ley viene definida por su utilidad para los

seres sintientes en conjunto.

Según, Sergio Sánchez-Migallón Granados, el utilitarismo “es una

doctrina ética formulada explícitamente a finales del siglo XVIII y desde

entonces ha contado con numerosos partidarios, particularmente en el

mundo anglosajón”. Como su nombre indica, su contenido esencial es definir

la corrección de toda acción por su utilidad, es decir, por los resultados o

consecuencias producidos por ella. De ahí que esta doctrina se conozca

también con el nombre de consecuencialismo.

Utilidad es una palabra que refiere aquello que es intrínsecamente

valioso para cada individuo. En la economía neoclásica, se llama utilidad a la

satisfacción de preferencias, en filosofía moral, es sinónimo de felicidad, sea

cual sea el modo en el que esta se entienda. Estas consecuencias

usualmente incluyen felicidad o satisfacción de las preferencias. El

utilitarismo es a veces resumido como "el máximo bienestar para el máximo

número". De este modo el utilitarismo recomienda actuar de modos que

produzcan la mayor suma de felicidad posible en conjunto en el mundo.

.- Tipos de utilitarismo

Utilitarismo negativo

Muchas teorías utilitaristas defienden la producción del máximo

bienestar para el máximo número de personas. El utilitarismo negativo cree

Page 3: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

necesario evitar la mayor cantidad de dolor o daño para el mayor número de

personas. Los defensores de esta interpretación del utilitarismo argumentan

que ésta propone una fórmula ética más eficaz, pues hay más posibilidades

de crear daños que de crear bienestar, y los daños mayores conllevan

suicidio a los más grandes bienes. Es lo contrario del utilitarismo positivo.

Defienden la producción del mínimo malestar para el máximo número de

personas. David Pearce es uno de sus principales representantes.

.- Utilitarismo del acto contra el utilitarismo de las normas

Se han propuesto otras formas de utilitarismo. La forma tradicional de

utilitarismo es la del utilitarismo del acto, que afirma que el mejor acto es el

que aporta la máxima utilidad. Una forma alternativa es el utilitarismo de las

normas, que afirma que el mejor acto es aquel que forme parte de una norma

que sea la que nos proporciona más utilidad.

Muchos utilitaristas argumentarían que el utilitarismo no sólo

comprende los actos, sino que también los deseos y disposiciones, premios y

castigos, reglas e instituciones.

Por su parte, el utilitarismo se entiende una concepción de la moral

según la cual lo bueno no es sino lo útil, convirtiéndose, en consecuencia, el

principio de utilidad en el principio fundamental, según el cual juzgar la

moralidad de nuestros actos. Es posible encontrar algunos esbozos de la

doctrina utilitarista en A. Smith, R. Malthus y D. Ricardo, si bien se trata de

una doctrina moral y social que halla sus principales teóricos en J. Bentham,

James Mill y J. Stuart Mill. Para estos autores, de lo que se trata es de

convertir la moral en ciencia positiva, capaz de permitir la transformación

social hacia la felicidad colectiva.

Page 4: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

.- Los principales autores del movimiento filosófico del utilitarismo.

James Mill nació el 6 de Abril de 1773 y murió el 23 de Junio de 1836.

Fue un gran historiador, economista, pitólogo y filósofo escocés. James fue

uno de los que desarrolló la corriente filosófica del utilitarismo junto a su

amigo y admirador Jeremy Bentham, también fue fundador del llamado

“radicalismo filosófico”, que lo prosiguió su hijo mayor John Stuart Mill. La

más notable contribución filosófica de James consistió en la fundación y

desarrollo de la psicología”. James decía que:”son buenas las acciones que

conducen a mayor felicidad y bienestar” – “una acción es útil si tiende a

producir felicidad o bienestar”.

Jeremy Bentham, nació en Houndsditch, 1748 y murió en Londres en

1832. Fue un pensador inglés, padre del utilitarismo junto a James Mill.

Estudió en la Universidad de Oxford y con 19 años empezó a ejercer como

abogado, pero enseguida cambio y se dedico a las tareas intelectuales.

Su trabajo inicial atacando el sistema legal y judicial inglés le llevaron

a la formulación de la doctrina utilitarista, en su obra principal: Introducción a

los principios de moral y legislación. En ella preconizaba que todo acto

humano, norma o intuición, debe ser juzgados, según la utilidad que tienen,

según el placer o el sufrimiento que producen en las personas. Así se

fundamentaría una nueva {ética, basada en el goce de la vida y no en el

sacrificio ni el sufrimiento.

Jeremy Bentham Padre de la Escuela Utilitarista, planteaba:

El individuo persigue siempre lo que cree que es su felicidad.

Lo bueno es aquello que produce felicidad.

El deber del legislador es buscar la armonía entre el interés público y

el privado.

Page 5: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

El criminal no debe ser castigado con odio, sino sólo para prevenir el

crimen.

Es más importante que el castigo sea seguro a que sea severo.

La ley civil debe tener 4 objetivos:

1.  Subsistencia (no cambie con el tiempo)

2. Abundancia (cubra todos los aspectos de las relaciones)

3. Seguridad (no se preste a ambigüedades)

4. Igualdad (considere a todos por igual)

Entre sus amigos y seguidores más cercanos se encontraban James

Mill, y su hijo John Stuart Mill, que fue su heredero al frente de este

movimiento.

John Stuart Mill, nació en Gabriville (Londres), su padre James Mill,

puede ser considerado un precursor del utilitarismo. Fue el mayor de los hijos

del filosofo e historiador James Mill, a la edad de tres años le enseñaron el

alfabeto griego, a la edad de ocho años empezó a estudiar latín y algebra,

pero a los 20 años se rebeló contra su estricta educación, contra el

utilitarismo (aunque sin romper con él), y se abrió a nuevas corrientes

intelectuales como el positivismo de Comte, al pensamiento romántico y al

socialismo. En 1861, publicó utilitarismo, texto en que estudia el tema de la

felicidad para Mill, en cambio, dado el estado actual de nuestras sociedades,

debe distinguirse entre la satisfacción puramente privada y el bien público.

Ciertamente debe trabajarse para reducir la diferencia entre ambos, pero

entre tanto, el sacrificio de un individuo por el bien público debe considerarse

la virtud más alta. De aquí se designe su posición como utilitarismo altruista.

Según Mill la vida de los hombres se rige por el imperio de dos tipos de

leyes: las materiales, de tipo causal y determinista (es decir, regidas por el

criterio de necesidad), y las psicológicas, cuya causalidad no es rígida y que

Page 6: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

en consecuencia permiten fundamentar la libertad, sin ello considerarla, cual

un ente abstracto, al margen de la necesidad.

John Stuart Mill (Ética Utilitarista), planteaba

Quienes pregonan la moral del sacrificio sólo buscan que otros se sacrifiquen por ellos.

El orden moral es resultado de un equilibrio de intereses.

Los legisladores obran siempre en su propio interés. Solamente el equilibrio de poderes y la opinión pública los orientan hacia el bien común.

Lo bueno es aquello que produce placer y esto se logra sólo mediante la satisfacción de una necesidad que puede ser del orden físico, emocional, afectivo, intelectual o espiritual.

Los deseos pueden ser buenos o malos según acarreen o no la felicidad general.

La valoración de una acción depende primordialmente de sus consecuencias y no de la intención de la misma.

 La sociedad perfecta es aquella en que  coincida lo más posible el bienestar general y la felicidad personal.

.- Críticos del utilitarismo

Los críticos argumentan que esta visión se enfrenta a muchos

problemas, uno de los cuales es el de la dificultad de comparar la utilidad

entre diferentes personas. Muchos de los primeros utilitaristas creían que la

felicidad podía ser medida cuantitativamente y ser comparada a través de

cálculos, aunque ninguno consiguió hacer un cálculo semejante en la

práctica.

Se ha argumentado que la felicidad de personas diferentes es

inconmensurable, y que este cálculo es imposible, pero no solo en práctica

Page 7: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

sino como principio. Los defensores del utilitarismo responden a esto

afirmando que ante este problema se encuentra cualquiera que tenga que

escoger entre dos estados alternativos que imponen serias cargas a las

personas implicadas. Si la felicidad fuera inconmensurable, la muerte de

cientos de personas no sería peor que la muerte de una.

Otro de los argumentos en contra del utilitarismo, según James

Rachels en su Introducción a la Filosofía Moral, es la acusación de que esta

forma de actuar es demasiado exigente y elimina la distinción entre deberes

y acciones supererogatorias. Para sustentar esto los antiutilitaristas parten de

lo que reconoce el propio filósofo utilitarista John Stuart Mill: "el utilitarista

obliga a ser tan estrictamente imparcial como un espectador desinteresado y

benévolo".

Tomando en cuenta como palabra clave "obliga", los filósofos

adversos a Bentham y Mill plantearon a través de ejemplos imaginarios, dos

maneras de distinguir las acciones caritativas de las personas: aquellas que

adoptan una posición utilitaria, deben forzosa y obligatoriamente deshacerse

de sus bienes para contribuir al bienestar de los demás, aun si por esta

causa su estatus social queda a la altura de los más pobres.

El utilitarista congruente debería por decisión propia o por conciencia

donar parte de sus riquezas si estas producen más felicidad que al

conservarlas para s í, o utilizarlas como medio para generar más riqueza

destinada a aumentar la felicidad de manera indefinida.

Por otro lado, los utilitaristas responden a tales críticas con el

argumento que los ejemplos propuestos son totalmente imaginarios y sólo en

la mente de algunos filósofos sucederían tales cosas, siendo que la utilidad

se encarga de decir por qué son o no son convenientes en la vida real.

Page 8: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

El filósofo utilitarista australiano J. J. C. Smart nos aclara que

debemos de tener mucho cuidado con el sentido común, porque en

ocasiones éste está influenciado por nuestros sentimientos, o sea que a

veces la interpretación que hacemos de una situación determinada puede

estar inspirada por las costumbres y preceptos aprendidos de nuestros

padres, la sociedad, etc. Tal vez, ésta sea la más grande aportación del

utilitarismo, su puesta en duda del sentido común como fuente de la moral.

El utilitarismo ha sido también criticado por llegar a tales conclusiones

contrarias a la moral del "sentido común". Por ejemplo, si estuviéramos

forzados a escoger entre salvar a nuestro propio hijo o salvar a dos hijos de

gente a la que no conocemos, la mayoría de gente escogería el salvar a su

propio hijo. En cambio, el utilitarismo defendería salvar a los otros dos, pues

dos personas tienen un potencial mayor de felicidad futura que una.

Los utilitaristas responden a este argumento diciendo que el "sentido

común" ha sido utilizado para justificar muchas posiciones en temas

controvertidos y esta noción de sentido común varía según el individuo,

haciendo que no pueda ser una base para una moralidad común.

John Rawls (1921-2002) rechaza el utilitarismo, tanto el normativo

como el de los actos, pues hace que los derechos dependan de las buenas

consecuencias de su reconocimiento, y esto es incompatible con el

liberalismo. Por ejemplo, si la esclavitud o la tortura son beneficiosas para el

conjunto de la población podría ser justificada teóricamente por el

utilitarismo. Rawls defiende que la ética política debe partir de la posición

original.

Los utilitaristas argumentan que Rawls no tiene en cuenta el impacto

indirecto de la aceptación de políticas inhumanas.

Page 9: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

Es importante destacar que la mayoría de críticas van dirigidas al

utilitarismo de los actos, y que es posible para un utilitarista de las normas

llegar a conclusiones que sean compatibles con los críticos.

De hecho, John Stuart Mill consideró que Immanuel Kant (1724-1804)

era un utilitarista de las normas. Según Mill los imperativos categóricos de

Kant solo tienen sentido en casos de violencia si consideramos las

consecuencias de la acción. Kant afirma que el vivir egoístamente no puede

ser universalizado pues todos necesitamos el afecto en algún u otro

momento. Según Mill este argumento se basa en las consecuencias. Puede

observarse que algunas forma s de utilitarismo son potencialmente

compatibles con el kantianismo y otras filosofías morales.

R. M. Hare es otro ejemplo de utilitarista que ha adaptado su filosofía

al kantianismo. No basa su teoría en el principio de la utilidad. Cree que

podemos hacer consideraciones utilitaristas al formular juicios universales. A

esta filosofía él la llama prescriptivismo universal.

Cabe destacar, que el utilitarismo es aquella concepción según la cual

bondad y utilidad coinciden y, en consecuencia, también deber y utilidad.

Esta idea, no obstante, tiene sus dificultades. En efecto, la utilidad es una

relación tríadica entre aquello de lo que se dice la utilidad, los intereses de la

persona respecto de los cuales se dice ser útil aquello, y la circunstancia en

la que se lleva a cabo la valoración o cálculo de utilidades. Siendo esto así,

cabe legítimamente hacerse algunas de las siguientes preguntas: a) ¿útil

para quién?; b) ¿respecto a qué intereses?; c) ¿no puede esta concepción

confundir intereses personales o colectivos con postulados morales?; d)

¿cómo justificar, en última instancia, lo que es moralmente correcto hacer, a

partir de cálculos utilitarios sobre opciones particulares?; e) ¿no nos lleva el

utilitarismo a un relativismo ético absoluto, al cambiar las ideas y los

sentimientos de una sociedad en la distancia y en el tiempo?; etc. En vistas

Page 10: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

a solucionar estas dificultades, el utilitarismo tradicional ha adoptado en la

actualidad la forma de un utilitarismo racionalista, según el cual los principios

y valores morales coinciden, en última instancia, con los criterios racionales

de un, así denominado, «egoísmo ilustrado».

Esta nueva forma de utilitarismo, ha adoptado los métodos de análisis

propios de las teorías matemáticas de la decisión y de la teoría de juegos.

Algunos autores significativos dentro de esta original forma de análisis ético,

son J. Rawls (quien elabora una teoría de la /justicia, basándose en tales

modelos de investigación), J. C. Harsanyi (para quien los juicios correctos

acerca de la justicia derivan de una situación de imparcialidad e igualdad de

oportunidades, ambas definidas según el aparato formal de la teoría de la

decisión y juegos), D. Gauthier y D. Parfit (quienes han analizado la

moralidad como resultado de la conducta racional, en contextos de

interacción estratégica), etc.

Esquemáticamente, los argumentos del utilitarismo racionalista

respecto a las dificultades señaladas, podemos enumerarlos como sigue: a)

Dada la naturaleza comunitaria de la existencia de cada /persona, todo lo

que favorece los intereses comunitarios es, a fortiori, algo que favorece el

interés individual. De donde se sigue, por ejemplo, que (racionalmente)

nadie estaría interesado en comportamientos que perjudiquen el /bien

común y, viceversa, que toda persona (racional) estaría interesada en

promover conductas que favoreciesen el bien común. b) Aunque hay ciertos

intereses que toda persona podría satisfacer independientemente de la

cooperación de los demás, o de la situación en que otras personas se hallen,

no con todos los intereses sucede así. Es más, esto último suele suceder

precisamente con aquellos intereses personales más importantes o

significativos. Así, nuestro bienestar y felicidad depende (en muchos casos)

del bienestar o felicidad de otras personas, y no podemos ser felices a

menos que estas lo sean (por ejemplo, de nuestros hijos, amigos o, en

general, de todos aquellos a quienes amamos). c) Finalmente, respecto del

Page 11: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

presunto relativismo en que podría incurrir la ética utilitarista, hay que decir

que, pese a la influencia en la elaboración de la teoría de la racionalidad

colectiva del análisis de decisiones, en situaciones de interacción, no se

excluye el postulado de existencia de una naturaleza humana común a todos

los hombres (como hiciesen Aristóteles, el estoicismo, Espinosa, etc.), y en

virtud de cuya realización deviniesen los máximos bienes esperables y la

"felicidad.

Por un lado, las tesis utilitaristas del siglo XIX (Bentham y Mill)

pretendían ser, antes que un sistema teórico abstracto, un instrumento de

reforma social y política, vinculadas a reivindicaciones de corte socialista, en

una realidad caracterizada por la explotación, la miseria o indigencia de las

clases obreras (D. Ricardo) y el problema del crecimiento indiscriminado de

la población en un medio adverso (Malthus).

En este sentido, podemos considerar el utilitarismo

(independientemente de las singularidades de su sistematización teórica y

de su suficiencia o no suficiencia) como una sensibilización filosófica hacia la

realidad social, y como una defensa del /individuo frente a su disolución

/ética, económica y política.

Por otro lado, el utilitarismo (en cuanto moral consecuencialista o

teleológica) se opone a la moral superflua, al /deber por el deber (ética

kantiana), al dogmatismo, al precepto moral que no se halla legitimado o

justificado teóricamente (en función de sus consecuencias); en definitiva, se

halla opuesto a toda moralidad que obstaculiza al hombre el gozo terreno y

su felicidad. El utilitarismo, en su modalidad racionalista, implica y fomenta

asimismo el análisis y la reflexión sobre nuestra conducta moral, el /diálogo y

el /consenso (es decir, la tolerancia), sin reconocer otra instancia superior a

la razón como legitimadora de lo moralmente correcto.

Page 12: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

En otros términos, se trata de una moral que sitúa en primer lugar la

/autonomía del sujeto, dentro de un marco de racionalidad: no de una

racionalidad concreta y dogmática, sino de una racionalidad abierta,

tolerante y dialógica.

.- En la actualidad:

Para la aplicación actual de este modelo ético, primero asumamos que

el  utilitarismo se basa en la teoría económica de la relación costo-beneficio,

donde una persona está dispuesta a invertir en un proyecto solo si su retorno

es mayor a la inversión inicialmente realizada. El utilitarismo cumpliría su

función permitiéndonos identificar, entre varias opciones, cuales son viables

y más importante aún, cual genera mayor beneficio para la comunidad.

Por otra parte, el utilitarismo se puede aplicar en el establecimiento de

políticas de precios, donde se busque un equilibrio entre el uso y la

satisfacción por el precio pagado. También podemos aplicar el utilitarismo a

una palabra muy de moda en el mundo empresarial colombiano actual, la

eficiencia, que dicho en términos utilitaristas, es obtener mayores “placeres”

con los menores  “sufrimientos” posibles. Esto nos indica que para el

utilitarista, la acción más eficiente es la acción más adecuada para la

obtención de beneficios que aumentan el placer, lo que conllevaría a una

mayor utilidad y al cumplimiento del fin socioeconómico de la empresa con el

respectivo bienestar social.

En la actualidad, esta escuela de pensamiento filosófica proporcionaría

el mejor modo de evaluar el carácter ético de una decisión cotidiana, ya que

nos permite determinar qué actuación proporciona el mayor beneficio para la

sociedad o en dado caso, cual causa el menor daño. En otras palabras, si se

nos presenta la posibilidad de tomar una decisión, podemos aplicar el

utilitarismo para saber ¿que hacer? (lo que genere mayor beneficio) y saber

¿como hacerlo? (uso eficiente de los recursos). Si llevamos esto al ámbito

Page 13: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

empresarial, nos aclararía qué debemos producir? (bienes necesarios), cuál

sería su precio adecuado? (beneficio mutuo) y ¿cual es la mejor forma  de

hacerlo? (eficiencia y utilidad).

Por otra parte, siguiendo los objetivos que plantea Bentham sobre el

utilitarismo, se observa como la tendencia de los modelos económicos

actuales, pueden fundamentarse en su modelo. Esta tendencia es la mezcla

entre el socialismo y el capitalismo económico, en donde el estado debe

asegurar la igualdad del modelo socialista (En oportunidades) y la

abundancia del modelo capitalista, enmarcado en un medio justo, de manera

permanente y sostenible en el largo plazo.

En la práctica, un buen ejemplo de cómo se puede aplicar el utilitarismo

a los negocios de una manera eficiente es el siguiente ejemplo: en el

aeropuerto Tegel en Berlín, los anuncios de las llegadas y las salidas que se

hacen después de las seis de la tarde son realizados desde una central de

comunicaciones en el estado de California – USA. Esto se hace para generar

mayor utilidad dentro de los participantes del proceso. Los beneficios de este

ejemplo son los siguientes: los operadores del aeropuerto reducen costos ya

que no tienen que pagar sobrecostos generados por los recargos nocturnos y

además utilizan en mayor proporción la tecnología instalada en el mismo,

disminuyendo costos en el total de la operación y aumentando la eficiencia

del mismo.

Es por ello, las diferentes escuelas éticas nos ensañan modelos que

permiten reducir la complejidad de las decisiones con las que nos

enfrentamos diariamente ya que nos esclarecen el límite de lo bueno y lo

malo. Estas decisiones pueden ser de tipo personal, social, legal, ético,

económico, religioso o moral; pero sin importar su procedencia, debemos

tener un conocimiento que soporte nuestra decisión. La ética, y su escuela

utilitarista nos indica como llevar a cabo una acción ética desde el punto de

Page 14: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

vista del placer y el beneficio que causemos con dicha acción para nosotros

y para la sociedad.

El utilitarismo es viable en la sociedad actual, siempre y cuando exista

un buen paradigma social a seguir y mientras los objetivos comunes sean

socialmente rentables y sostenibles.

Para que el utilitarismo sea aplicado con éxito, los estados deben

generar espacios propicios para que la sumatoria de actuares individuales

sea socialmente rentable; lo que significa que se debe procurar que los

resultados individuales aporten al agregado de la sociedad para que se

propenda por el bien común.

En síntesis, lo que se debe buscar es el equilibrio comunitario por

medio del actuar individual dentro de la sociedad. El utilitarismo moderno

debe tener en cuenta que el actuar individual tiene consecuencias en el

tiempo por lo que se debe tomar la responsabilidad moral de los actos

individuales en el desarrollo de la sociedad. 

Page 15: UTILITARISMO MARCOS SCHOTBORGH

Referencias Bibliográficas

Sánchez-Migallón Granados, Sergio, Utilitarismo, en Fernández

Labastida, Francisco – Mercado, Juan Andrés (editores), Philosophica:

Enciclopedia filosófica on line, URL:

http://www.philosophica.info/archivo/2012/voces/utilitarismo/Utilitarism

o.html

Información bibliográfica en formato BibTeX: ssm2012.bib

Rodríguez Duplá, L., Capítulo Utilitarismo y deontologismo, en Ética, BAC, Madrid 2001, pp. 115-131.