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FICHA CATALOGRÁFICA

HERNÁNDEZ PÉREZ, Mauro S.

Plà de Petracos : patrimonio de la humanidad:

Autores, Mauro S.Hernández Pérez, Pere Ferrer i Marset, Enrique Català Ferrer, Jorge A. Soler Díaz y RafaelPérez Jiménez -- Alicante : Marq. Diputación.Provincial de Alicante, 2004. -- 72 p. : il. en b. y n. y en col.; 30 cm.

I.S.B.N: 84-96206-34-3D.L.:A-942-2004

1. Sociedades Primitivas-Arte Rupestre-España-Alicante 2. Plà de Petracos-Castell de Castells (Alicante, España)-NeolíticoI. Ferrer i Marset, Pere II. Català Ferrer, Enrique III. Soler Díaz, Jorge A. IV. Pérez Jiménez, Rafael. V. MARQ(Alicante) VI. Alicante. Diputación Provincial VII. Título.

903'13-"6343"903'13-7.031.1 "634"

El yacimiento del Pla de Petracos es uno de los enclaves de arte rupestre másimportantes del Neolítico de la Península Ibérica. Contiene manifestacionespictóricas del todo vinculadas a las creencias que portaban los primeros gruposde agricultores y ganaderos que llegaron a las tierras del norte de Alicante, haceahora unos 8.000 años.Descubierto en 1980, por el Centre d'Estudis Contestans, es desde 1998 un

bien reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. En los últi-mos años la Diputación Provincial de Alicante ha puesto un especial esfuerzo enla protección y difusión de los contenidos de Arte Macroesquemático y de ArteLevantino representados en los distintos abrigos que integran el conjunto del Plade Petracos. En coordinación con los científicos que descubrieron e investigaronestas magníficas pinturas, nuestros técnicos del Museo Arqueológico Provincial ydel Área de Arquitectura supieron llevar de la mano un proyecto que ha termi-nado materializándose en una infraestructura cultural de primer orden.Primero se valló y se mejoró el acceso al conjunto, instalándose paneles que

facilitaran a los visitantes la mejor comprensión del mismo; más tarde se proce-

dió a la instalación y apertura en el municipio de un montaje expositivo que,valiéndose de medios de vanguardia, recrease tanto los valores y creencias deaquellos primeros agricultores, como la vida cotidiana de cuantos habitaronCastells en la primera mitad del s. XX.Ahora, en coincidencia con el 25 aniversario del descubrimiento de este encla-

ve, que fue santuario, lugar de encuentro y culto, es un buen momento para pre-sentar esta publicación que hoy llega a nuestras manos Pla de Petracos.Patrimonio de la Humanidad, recogiendo de la mano de sus descubridores einvestigadores las nuevas interpretaciones sobre sus contenidos y dando a cono-cer los trabajos desarrollados por la Diputación de Alicante en colaboración conel Ayuntamiento de Castell de Castells.Convirtiendo, esta actuación, junto a las desarrolladas en el Tossal de Manises

de Alicante y l'Illeta dels Banyets en Campello, entre otras muchas, en claro ejem-plo de la decidida apuesta de esta Institución Provincial, que me honro en presi-dir, por la consolidación, recuperación, puesta en valor, divulgación y promociónde nuestro Patrimonio; sin duda, uno de los mayores legados recibidos y del quetodos nos debemos sentir particularmente orgullosos.

José Joaquín Ripoll Serrano

Presidente de la Diputación de Alicante

Queda en el término municipal de Castell de Castells el Pla de Petracos, unbello e impactante paraje montañoso donde se emplaza un conjunto de

representaciones artísticas de excepcional importancia por su carácter prehistó-rico, buena conservación y reconocimiento internacional. Sin duda estos abrigos rupestres son el bien más importante del Patrimonio

Cultural de este municipio. Su puesta en valor por parte de la DiputaciónProvincial de Alicante permitió además potenciar la oferta turística de interior quedisfruta nuestro pueblo, ampliada enormemente por la instalación junto a nues-tro Ayuntamiento de una Sala de Arte Rupestre y de una Sala de la ColecciónEtnográfica, donde se muestran objetos cedidos por nuestros vecinos.Son 15.000 los visitantes que anualmente se acercan a Pla de Petracos y a la

exposición permanente de Castell de Castells, y ello es para nuestro municipio deexcepcional importancia, teniendo en cuenta que por toda esa instalación recien-temente hemos obtenido el Premio al Mérito Turistico en su categoría especialotorgado por el Patronato Provincial de Turismo, Costa Blanca.

Nada de esto hubiera sido posible sin la colaboración e impulso de laDiputación Provincial, sin la voluntad de quién la preside y sin la perseveracia delos técnicos que han desarrollado estos proyectos. Como Alcaldesa de Castell deCastells prologar este libro Pla de Petracos. Patrimonio de la Humanidad es unhonor que además me permite expresar mi agracedimiento al Ilmo Sr. Presidentede la Diputación de Alicante y a todos los que lo subscriben, como impulsores ydefensores del Bien de Interés Cultural más importante de nuestro pueblo. Agradecimiento que hago extensivo no sólo a todos mis vecinos, sino a todos

cuantos se acercan a nuestro municipio y comparten con nosotros un mismo sen-timiento, orgullo y compromiso: el amor y la defensa de nuestra Tierra, Historiay Cultura; reconocidos universalmente como Patrimonio de la Humanidad.

Maria Rosa Pérez Gadea

Alcaldesa de Castell de Castells

FICHA TÉCNICA. CATÁLOGO 2004.

Textos: Mauro S. Hernández Perez; Enrique Català Ferrer; Pere Ferrer Marset; Jorge A. Soler Díaz; Rafael Pérez Jiménez.

Fotografías: Archivos del MARQ, del Área de Arquitectura y Conservacióny del Centre d’Estudis Contestans.

Diseño: Pepe Gimeno.Imprime: Gráficas Estilo, S.C.

ÍNDICE

PLA DE PETRACOS(CASTELL DE CASTELLS, ALICANTE)Imágenes de los primeros agricultores de nuestras tierras

EL SANTUARIO DE PLA DE PETRACOSSU PROTECCIÓN Y DIFUSIÓN

SEIS ABRIGOS EXCEPCIONALES (Y DOS MÁS)

DOS TIPOS DE IMÁGENES

ARTE MACROESQUEMÁTICOARTE LEVANTINO

IMÁGENES Y CREENCIAS

LA PUESTA EN VALOR DEL SANTUARIO DE PLA DE PETRACOS

LAS SALAS DE ARTE RUPESTRE Y DE LA COLECCIÓNETNOGRÁFICA DE CASTELL DE CASTELLS

LA VISITA A LA COLECCIÓN ETNOGRÁFICA

LA VISITA A LA SALA DE ARTE RUPESTRE

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Pla de Petracos, Castell de Castells, Alicante

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El Patrimonio Arqueológico Valenciano -y en especial el alicantino- seincrementó en las dos últimas décadas del pasado siglo con el descu-brimiento de más de un centenar de yacimientos con pinturas y grabadosrupestres de cronología prehistórica, cuyo calco y estudio impulsó el de otrasmanifestaciones similares que en castillos, torres, casas e iglesias habíansido ignoradas a esos momentos.Por otro lado, unas excepcionales circunstancias permitieron analizar

todas estas manifestaciones culturales prehistóricas -también las medievalesy modernas- desde nuevas perspectivas al descubrirse -también en Alicante-en las decoraciones de cerámicas con un precisa e indiscutible cronología-al menos para la mayoría de los investigadores- muchos de los motivos queaparecían pintados en nuestros abrigos. Se identificaron así varios horizon-tes artísticos, dos de ellos con más de un siglo de descubrimientos y estudios-artes Levantino y Esquemático-, otro ya conocido pero inexistente en nues-tras tierras en su soporte rupestre -arte Paleolítico- y uno nuevo -arteMacroesquemático-, que tras diversas discusiones, no siempre científicas,permitirían plantear desde nuevas perspectivas el estudio del pasado prehis-tórico de las tierras que hoy constituyen nuestra Provincia y nuestraComunidad.Entre estos descubrimientos destaca por su singular valor un conjunto de

abrigos situados en la margen izquierda del Barranc de Malafí, en Castellde Castells (Alicante). Es el Pla de Petracos, que la UNESCO incluyó el 5 dediciembre de 1998 en la lista de Patrimonio Mundial, conjuntamente conotros lugares con arte rupestre del Arco Mediterráneo español.

1 Departamento de Prehistoria. Universidad de Alicante.2 Centre d'Estudis Contestans (Cocentaina, Alicante).3 Centre d'Estudis Contestans (Cocentaina, Alicante).

PLA DE PETRACOS(CASTELL DE CASTELLS, ALICANTE)Imágenes de los primeros agricultores de nuestras tierras

MAURO S. HERNÁNDEZ PÉREZ 1

PERE FERRER I MARSET 2

ENRIQUE CATALÁ FERRER 3

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Las pinturas del Pla de Petracos se distribuyen en 8 abri-gos, en dos de los cuales no se pueden identificar losmotivos al estar cubiertos por gruesas capas de concrecionesde color gris que también afectan a los motivos de los restan-tes abrigos, en especial el Abric III.

SEIS ABRIGOS EXCEPCIONALES(Y DOS MÁS)

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tarse de un antropomorfo en cuclillas, aun-que también podría corresponder a un zoo-morfo. Color: M.10R 3/4

Panel 2

A 0,60 m a la izquierda del anterior.Superficie cubierta por concreciones.

2.1. Conjunto de tres pequeñas y delga-das barras, paralelas y verticales, cortadasen el extremo inferior por desconchado.Color. M.10R 3/6.

2.2.- Figura humana de tipo levantino enactitud de disparo hacia la derecha, amodo de un zig-zag vertical. Conserva unode los brazos doblados por el codo como si

Abric I

En la pared rocosa que por el E cierra elespacio donde se concentran los restantesabrigos se abre el de mayores dimensiones-20 m de largo y 6 m de profundidadmáxima-, con un suelo rocoso de acusadapendiente, en especial en el punto dondese localizan las pinturas que se concentranen tres paneles próximos en el extremosuperior de la pendiente.

Panel 1

Superficie cubierta por concreciones decolor gris 1.1.- Restos de pintura de tipo levantino.

Por su deficiente grado de conservación esdifícil precisar el motivo, ya que podría tra-

Abric I. Sección.

Abric I. Planimetría.

largo, que podría corresponder a una figu-ra humana. Color: M. 10R 3/6.

3.2.- Pequeño ciervo de tipo levantino enactitud de marcha hacia la derecha y enligera posición ascendente. Las patasdelanteras se inclinan hacia atrás y la cabe-za gira hacia arriba sugiriendo, quizás,encontrarse herido por varios trazos que amodo de fechas se clavan en su espalda.Color: M.10R 3/4.

Abric II

Pequeño abrigo con la pared cubiertapor concreciones y desconchados. Conser-va restos informes de pinturas macroesque-máticas.

tensara arco y flechas, representadas estasúltimas por dos cortos trazos paralelos, elcuerpo, proyectado hacia atrás, y las pier-nas dobladas. En la parte posterior deltronco una pequeña prolongación podríatratarse de un adorno. Bajo las piernas sepueden identificar otras barras, una máslarga y en parte perdida en algunos tramosy otras dos cortas, paralelas y de tendenciavertical. Color: M.10R 3/6.

2.3.- Barras verticales de tipo levantinode diferente tamaño y grosor. Color: M.10R 3/6.

Panel 3

A 0,90 m a la izquierda del anterior.

3.1.- Restos de pintura levantina a modode un serpentiforme vertical de 6,2 cm de

Abric I. Panel 1.

Abric I. Panel 2.

Abric I. Panel 3.

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de la pintura es más intenso en la partesuperior -M. 10R 3/4-, mientras en la partedifuminada es más claro.

Abric III

Abrigo de 6,50 m de largo, 1,75 m deprofundidad máxima y 2,60 m de altura. Lapared se encuentra cubierta por abundan-tes concreciones que sin duda cubren pin-turas.

Panel 1

En la pared izquierda del abrigo.

1.1.- Barra oblicua de tipo macroesque-mático de 8,5 cm de largo y bordes irregu-lares. Color: M. 10R 4/8.

Panel 2

En el centro del abrigo y a unos 1,90 mdel suelo del abrigo.

2.1.- Restos de pinturas macroesquemá-ticas, entre los que se puede identificar unabarra de 5 cm de ancho, apenas percepti-ble en su parte inferior, rodeada en suextremo superior por otros restos, el dere-cho de tendencia oval. El color y densidad

Abric III. Panel 2.

Abric III. Planimetría y sección.

Abric III. Panel 1.

Abric IV

Pequeño abrigo de 7 m de largo, 2,25m de profundidad máxima y 2,75 m dealtura en la parte central, situado bajo elAbric III. Carece de relleno con el sueloinclinado hacia la derecha. En la paredcentral del abrigo se localizan las pinturasque ocupan la practica totalidad de lasuperficie de color amarillento-rojizo rode-ada y en parte invadida por la pared grisá-cea de la meteorización de la roca.

Panel 1

1.1.- Conjunto de motivos macroesque-máticos. En el lado derecho una anchabarra vertical de tendencia curva enmarcauna escena formada por tres figuras huma-nas asexuadas, en diferente estado de con-servación. La central se representa median-te una barra vertical, a modo de tronco, de54 cm de largo y 7,5-9 cm de ancho, conla cabeza en forma de aro de 5,5 cm dediámetro. Las otras dos figuras humanaspresentan idéntico convencionalismo entronco y cabeza, aprovechando el antropo-morfo de la izquierda una oquedad naturalde forma oval para rodeándola de pinturarepresentar la cabeza. Entre los troncos deestos antropomorfos sendos motivos en

doble Y podría corresponder a los brazosenlazados o a otras figuras humanas. Sobrela cabeza del antropomorfo central condiez gruesos puntos se ha dibujado unmotivo triangular con el vértice hacia arri-ba. Otros gruesos puntos rodean la parteinferior de estos antropomorfos. Color: M.10R 4/6.

Panel 2

Bajo la capa meteorizada de la roca.

2.1.- Restos informes de pinturas macro-esquemáticas.

Abric IV. Planimetría y sección.

Figuras humanas del Abric IV

Abric IV. Panel 1.

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Abric V

Pese a su reducido tamaño -2 m delargo y 1 m de profundidad máxima conuna plataforma de apenas 0,35 m abiertaen una pared vertical de 10 m de alturasobre la base de la pared rocosa, constitu-ye por su situación y motivos el conjunto depinturas más importante y significativo deeste conjunto.Las pinturas ocupan prácticamente toda

la superficie disponible en la parte centraldel techo y pared del abrigo. El motivo cen-tral es una figura humana asexuada con losbrazos levantados en posición de orante yla mano abierta con indicación de losdedos. El tronco, sin detalles anatómicos deahí que en ocasiones se ha supuestocubierto de una túnica, enlaza sin cuellodiferenciado, con la cabeza formada porun elipsoide horizontal con, al menos 16pequeñas barras perpendiculares al bordeexterno de la parte superior y 7 a la internadel arco inferior, similares a otras 21 per-pendiculares a borde izquierdo del tronco.Las piernas adoptan un extraordinario ycomplejo desarrollo, ya que se doblanhacia arriba para dividirse en un dobletrazo, uno corto que continúa paralelo altronco y se remata a la altura de las axilaspor un pequeño motivo circular, encajado,al menos el de la izquierda, en un arcosemicircular, y el otro se abre en arco pararodear la parte superior del tronco y lacabeza, sobre la cual y a diferente altura seindican los dedos de los pies. Estas extremi-dades inferiores presentan pequeños trazosperpendiculares a sus bordes, primero en elexterno y cuando las piernas se abren enarco en ambos. Paralelos al borde del arcode la pierna derecha se pintan puntos dediferente tamaño, tres en la cara externa, ycuatro entre la pierna y el brazo. Entre sus brazos surge otro antropomor-

fo, también asexuado y en posición deorante con la indicación de tres dedos en elextremo del brazo derecho mientras elizquierdo del que cuelga un motivo semicir-cular se toca la cabeza, representa median-te un aro de tendencia circular. El tronco,

Abric V. Planimetría y sección.

sin detalles anatómicos, presenta una lige-ra curvatura y las piernas, en este caso, soncortas y gruesos y se abren hacia abajo. Elborde externo de pierna, tronco y brazoderecho se distribuyen de manera irregularpequeñas barras, mientras en el brazoizquierdo solo se pintó una de estasbarras.Varios motivos geométricos rodeanal antropomorfo mayor. A la derecha, ochobarras paralelas y ligeramente inclinadas,seis de las cuales acaban en pequeño cír-culo en el extremo próximo a la figurahumana, mientras las dos inferiores seencuentran cubiertas por concreciones decolor blanco. Sobre ellas se pintan dos ser-pentiformes paralelos de desarrollo vertical,tres de cuyos extremos acaban en peque-

ños círculos y el cuarto, en la parte inferiordel externo, en dos barras más delgadas, amodo de prolongación de sus bordes exter-nos. En el lado izquierdo son tres los ser-pertiformes paralelos y vertical, unidos dosde ellos por sus extremos inferiores y rema-tados el superior por pequeños círculos.Además de estos motivos, que presentanuna misma textura y coloración -M. 10R4/6-, se han pintado otras tres barras verti-cales con pintura menos densa y de uncolor más claro -M. 10 5/6-. Dos de ellasen la parte superior de los serpentiformesde lado izquierdo y la tercera entre la cabe-za y el brazo izquierdo de antropomorfosuperior.

Abric V. Panel 1.

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Abric VI

Pequeño abrigo situado en la parte bajade la pared, cuyas paredes presentan unaspecto rugoso de color gris resultado de lameteorización de la roca con la excepciónde su parte central, donde se conservanrestos de pintura macroesquemática, inten-samente afectada por desconchados quedificultan la identificación de los motivos.

Abric VII

Abrigo de reducidas dimensiones -3,5 mde largo, 2 m de profundidad máxima y 2m de altura-, carente de relleno.

Panel 1

En el techo y parte alta de la pared dere-cha del abrigo.

1.1.- Restos de serpentiformes verticalesy de motivos curvilíneos macrosquemáticos.Color: M.10 4/8.

Panel 2

Ocupa la pared central del abrigo.

2.1.- Dos barras paralelas macroesque-máticas unidas en sus extremos para formarun circuliforme alargado, dividido en suinterior por otras tres barras. En la parteinferior, pequeña mancha dentro de undesconchado. Color: M. 10R 4/8.

Abric VII. Secciones.

Abric VII. Planimetría. Abric VII. Panel 1.

2.2.-Conjunto de serpentiformes macro-esquemáticos de desarrollo vertical, consti-tuidos por anchas barras acabadas en suextremo superior en pequeños trazos amodo de dedos. El motivo central esta for-mado por tres serpentiformes verticalesparalelos, de diferente grosor y desarrollo.

El central es más grueso y los lateralesarrancan de un motivo geométrico cerradoformado por delgados y bien perfilados cír-culos concéntricos, sustituido en central deuno de ellos por una oquedad natural.Color: M. 10R 3/3 y M.10R 3/4.

Abric VII. Panel 2.

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24Abric VIII

Pequeño abrigo -3 m de boca, 2,25 mde altura, 1,30 m de profundidad máximay una plataforma de apenas 1 m de ancho,cuyas paredes, muy irregulares, se encuen-tran cubiertas en las partes inferiores porsuciedad y concreciones.

Panel 1

En el techo del abrigo.

1.1.- Manchas informes y figura geomé-trica alargada y cerrada, parcialmente per-dida. M.10R 3/6.

Panel 2

En la pared derecha.

2.1.- Figura humana asexuada macroes-quemática, con las piernas abiertas en V ybrazos en cruz, uno de ellos -el más largo-,con el extremo ligeramente incurvado.Color: M.10R 3/6.

Panel 3

Complejo conjunto de pinturas macroes-quemático que ocupan la pared central de

abrigo, constituido por tres motivos de difí-cil identificación, además de pequeñasbarras y puntos dispersos por todo el panel,las primeras siempre con menor densidadde pintura y de color rojo claro.

3.1.- A la derecha, cuatro barras parale-las incurvadas en su extremo superior y unmotivo central formado por una anchabarra que se bifurca en su extremo superiorpara abrirse en dos arcos, uno de ellos cor-tado por desconchado. A cada lado de estabarra se pinta otra, mas delgada cuyoextremo superior acaba en un motivo geo-métrico cerrado, mientras el inferior se pro-longa hacia el exterior. Color: M. 10R ¾ yM. 10r 4/6.

Abric VIII. Planimetría.

Abric VIII. Sección.

Abric VIII. Panel 1.

3.2.- Posible representación femeninaacéfala, en el que se puede identificar eltronco, sin detalles anatómicos, y unafalda con el característico convencionalis-mo en el abultamiento de las nalgas quepresentan algunas féminas levantinas.Uno de los brazos, corto y cortado pordesconchado, podría relacionarse con elmotivo anterior y/o con las cuatro barrasque a modo de dedos se encuentra sobreéste, mientras lo que podría correspondercon el lado derecho adopta un extraño ycomplejo desarrollo como si sostuvierados objetos con el extremo incurvadohacia abajo y le colgaran otros dos, unocerrado y otra en forma de gancho. Color:M.10 R ¾ y M.10R 4/6.

3.3.- Gruesos trazos curvilíneos entrela-zado. M.10 R 4/6.

Panel 4

En la pared izquierda.

4.1.- Figura humana macroesquemáticaen forma de Y, con uno de los brazos comoprolongación del tronco. Color: M.10R3/6.

Abric VIII. Panel 2.

Abric VIII. Panel 4.

Abric VIII. Panel 3.

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ARTE LEVANTINO

ARTE MACROESQUEMÁTICO

El Pla de Petracos se convirtió, prácticamente desde elmismo momento de su descubrimiento en 1980 y la pos-terior exposición -1982- de sus calcos en la Universidad deSalamanca con ocasión del I Symposium Internacional sobreel Arte Esquemático de la Península Ibérica, en un referentesiempre presente en todos los estudios sobre el arte rupestrepostpaleolítico peninsular, ya que en las paredes de sus abri-gos se pintaron, además de varios motivos que pertenecían alArte Levantino, otros para los que no existían similitudes en elarte rupestre mundial. Pronto se localizaron motivos similaresen otros abrigos y en las decoraciones cerámicas, lo que per-mitió su datación y su integración como un elemento más enla Prehistoria regional.

DOS TIPOS DE IMÁGENES

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El Pla de Petracos es, sin duda, el yaci-miento clave para identificar el llama-do Arte Macroesquemático, hasta el puntoque en ocasiones se ha propuesto utilizar ladenominación de Arte tipo Petracos que sedescartó ante su presencia en otros lugares.En efecto, se ha localizado en veinte abri-gos agrupados en diez conjuntos con unasignificativa concentración en el términomunicipal de Castell de Castells - dos abri-gos en Barranc de Famorca, uno enCovalta, uno en el Racó de Sorellets y 8 enel Pla de Petracos-, con los que podríanrelacionarse en la misma cuenca delBarranc de Malafí los dos abrigos de CovesRoges de Benimassot y otro en las CovesRoges de Tollos. En otros valles se ubicanun abrigo en el Barranc de Benialí, en laVall de Gallinera, los dos del Barranc del'Infern, en la Vall de Laguart y tres en LaSarga, en Alcoy, todos en tierras de laactual provincia de Alicante. Asimismo esposible incorporar a este registro, elBarranc del Bosquet, en Moixent, ya en laprovincia de Valencia, que conecta conotros yacimientos con arte rupestre en lacuenca del Júcar, tanto en Valencia comoen Cuenca.En todos los casos se localizan en abri-

gos poco profundos, ocupando, como ocu-rre en el Pla de Petracos, la casi totalidad dela pared y en los de mayores dimensiones laparte más visible. Utiliza la pintura de colorrojo oscuro de aspecto pastoso para reali-zar motivos de gran tamaño y trazo gruesotrazo de bordes irregulares, aunque, comose puede comprobar en el Abric VII del Plade Petracos, también se se emplea un trazofino y bien perfilado.Las imágenes pintadas en estos abrigos

corresponden a figuras humanas y a moti-vos geométricos. Entre las primeras la másconocida es, sin duda, el motivo central delAbric V del Pla de Petracos que, conocidocomo "el orante" ha servido para identificar

internacionalmente al Arte Macroesque-mático. Esta misma posición de brazoslevantados con dedos indicados se repite

Abric VIII

Abric VII

Abric VII

Abric VII

ARTE MACROESQUEMÁTICO

en las figuras geminadas del Barranc delInfern. Otras comparten, asimismo, diver-sos convencionalismos en la representa-ción de tronco -a modo de ancha barra quepodría tratarse de una vestimenta a modode túnica-, la cabeza en forma de aro o lospequeños trazos perpendiculares al troncoo a la cabeza, sustituidos en el denomina-do "brujo" por dos apéndices a modo decuernos. Algunos motivos formados por dosgruesas barras en forma de aspa o por unavertical abierta en V en sus dos extremos amodo de doble Y. También se constata una extraordinaria

diversidad formal entre los motivos geomé-tricos, muchos de ellos en forma de serpen-tiformes verticales que se rematan con

pequeños trazos similares a los dedos delos orantes, que como éstos también serodean de gruesos puntos, de los que es unbuen ejemplo el Abric VII. Estos motivospodrían identificarse como "serpentiformesorantes".Los dos motivos del Abric VIII presentan

una difícil identificación, aunque uno deellos por la forma de cuerpo, en especial dela estructura del tronco y caderas y la posi-ble existencia de una falda podría corres-ponder a una mujer, al presentar algunosde los convencionalismos de las féminaslevantinas, mientras el otro, no sin ciertasdudas, ha sido considerado representaciónde la cabeza de un animal, posiblemente,de un toro.

Abric V Abric V

Abric V

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En el momento del descubrimiento deeste tipo del pinturas en el Pla de Petracos,ante la ausencia de representaciones simi-lares, surgió la duda acerca de su autoría ycronología. En aquellos mismos años unarelectura del conjunto alcoyano de LaSarga, conocido desde 1950 y publicadoen extenso por Antonio Beltrán en 1974, yla revisión de los materiales cerámicos pro-cedentes de antiguas excavaciones en losyacimientos de la Cova de l'Or (Beniarrés,Alicante) y Cova de la Sarsa (Bocairent,Valencia) permitió, no sin iniciales titubeos,dudas y recelos, fecharlas hace unos sietemil años y relacionarlas con los primerosagricultores y ganaderos que vivieron ennuestras tierras.En efecto, en el Abric I de La Sarga varios

ciervos naturalistas, incuestionablementepertenecientes al Arte Levantino, se habíanpintado sobre un orante y varios serpenti-formes verticales, considerados hasta esemomento como "trazos gruesos", "trazogeométrico" o "meandros de trazo disconti-

nuo", y que ahora, tras el descubrimientodel Pla de Petracos, correspondían al ArteMacroesquemático, al igual que los gran-des meandriformes -verticales y horizonta-les- y la figura humana con cuernos -eldenominado brujo- del Abric II. Los motivosmacroesquemáticos eran, por tanto, másantiguos que los levantinos, sin que sepudiera precisar el tiempo transcurridoentre la realización de ambos que, posible-mente, no sería mucho si se tiene en cuen-ta que los segundos no se superponen a laspartes las significativas -cabeza o termina-ciones con dedos- de la figura humana ode los serpentiformes orantes, como sitodavía fueran conscientes de su valor sim-bólico que desean mantener o recuperarcon la incorporación de nuevas imágenes,formal y técnicamente muy diferentes.Por otro lado, en las decoraciones cerá-

micas de la Cova de l'Or y, en menor medi-da, en las de La Sarsa se identificaronvarias figuras humanas que en ocasionesse rodeaban de bandas a modo de horna-30

Vaso cerámico.Cova de l’Or (Beniarrés)

“Brujo”. La Sarga (Alcoy)

Detalle de orante impreso,Cova de l’Or (Beniarrés)

cina como ocurre en las pintadas del AbricIV del Pla de Petracos. Entre el extensorepertorio decorativo destacan los orantes,con la cabeza y el tronco resuelto con dife-rentes convencionalismos y los brazos siem-pre levantados con la indicación de losdedos, y los motivos en doble Y. Entre losprimeros la única completa tiene entre laspiernas, resueltas con dos trazos haciaabajo como el antropomorfo asexuado dela parte superior del Abric V del Pla dePetracos, la impresión de natis, es decir deextremo que une los dos caparazones delberberecho -cardium edule-, con cuyoborde dentado se realizó el resto del cuer-po. El vaso, en la actualidad expuesto en elMuseu Arqueològic Municipal Camil VisedoMoltó d'Alcoi, se recuperó en las excava-ciones de la Cova de l'Or, junto a otrosmuchos ejemplares decorados con impre-siones cardiales, entre ellos otras figurashumanas, asociados a los primeros cerea-les cultivados en nuestras tierras que seconservan carbonizados y, también, a los

primeros animales domésticos, cuyos hue-sos muestran señales de su troceado y des-carnización. Estas primeras cerámicas cardiales, junto

a otros objetos que les acompañan comocucharas de hueso, hachas de piedra puli-mentada o las láminas de sílex, además delas plantas cultivadas o los animalesdomésticos, se localizan en un reducidoespacio de las comarcas centromeridiona-les valencianas. En este mismo lugar -deli-mitado por el mar y las sierras de Aitana,Mariola y Benicadell- se distribuyen losabrigos con Arte Macroesquemático. Existe,por tanto, un territorio macroesquemáticoque coincide con el territorio cardial másantiguo en las tierras valencianas y que, asu vez, se asocia a los primeros gruposhumanos que cultivan nuestros campos ycuidan cabras y ovejas que proceden, aligual que el trigo y la cebada, de otros pun-tos del Mediterráneo.

Cerámica impresa. Antropomorfo. Cova de l’Or

Pla de Petracos. Abric IVCerámica impresa. Antropomorfo en doble Y. Cova de l’Or

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Todos los motivos pintados en el Abric Ipertenecen al Arte Levantino. Se trata de unciervo, un arquero y otros motivos no iden-tificados por su deficiente estado de con-servación, aunque es posible que corres-pondan a otras figuras humanas y/o de ani-males.El Arte Levantino, descubierto hace más

de un siglo en tierras aragonesas y catala-nas y desde 1950 en las alicantinas, secaracteriza por el acusado naturalismo ycuidada ejecución de motivos pintados enlas paredes de paredes, abrigos y cuevaspoco profundas, en el que los hombres -yen menor medida las mujeres- y los anima-les se convierten en protagonistas, en oca-siones de manera aislada y en otras for-mando escenas de contenido diverso. Setrata, sin duda, de la manifestación másviva de cuantas nos legaron las poblacionesprehistóricas europeas.El ciervo y el arquero son dos excepcio-

nales ejemplos de Arte Levantino y, almenos el primero, se encuentra entre losmejores ejemplares de esta manifestaciónartística que se extiende por la fachadaoriental de la Península Ibérica, desdeHuesca y Lérida a Jaén y Almería, con unaexcepcional presencia -en número de abri-gos conocidos y calidad de las representa-ciones- en las tres provincias de laComunidad Valenciana, aunque no se hayalocalizado en muchas de sus comarcas,como ocurre con las alicantinas delVinalopó o Segura.

El ciervo, con varias trazos a modode flechas clavadas a su espalda, gira lacabeza hacia arriba y parece arrastrar laspatas delanteras, sugiriendo encontrarseherido. Pese a su deficiente estado de con-servación, el antropomorfo del panel 2, porla posición del cuerpo y de uno de sus bra-zos, debe corresponder a un arquero enactitud de disparo hacia la derecha. Una yotra figura, que no se relacionan entre si al

encontrarse en diferentes paneles, sugieren,como tantas otras en el Arte Levantino, acti-vidades relacionadas con la caza de ani-males salvajes. Son precisamente estasescenas cinegéticas las utilizadas tradicio-nalmente para situar el inicio y gran partedel desarrollo de esta manifestación artísti-ca en el Epipaleolítico, que algunos investi-gadores fijan hacia en el X y el VIII milenioa.C. para sus inicios, que otros rebajan alVII e, incluso, al VI milenio, también antesde nuestra Era, y todos coinciden en hacer-lo perdurar hasta, al menos, el Neolítico,hace siete mil años. Sin embargo, la distri-bución del Arte Levantino, su relación con elpoblamiento humano de la diferentes áreasgeográficas, los discutidos paralelos mue-bles en unas decoraciones cerámicasimpresas no cardiales de la Cova de l'Or.(Beniarrés, Alicante) y, en este caso, lasindiscutibles superposiciones en el Abric Ide La Sarga (Alcoy, Alicante), donde seencuentra infrapuesto al Arte Macroesque-mático, permiten fechar el Arte Levantino enmomentos neolíticos, ya en el V milenioantes de nuestra Era.

ARTE LEVANTINO

Pla de Petracos. Abric I

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Pla de Petracos. Vista general

Resulta extraordinariamente difícil determinar las activi-dades religiosas o civiles que se realizaban en el Pla dePetracos. Más comprensible es la elección del lugar: unaespectacular pared rocosa a modo de anfiteatro natural conuna especial orientación para difundir el sonido y una serie depequeños abrigos con paredes de color amarillento rojizo quecontrastan con el gris del resto de la roca. Se encuentra, ade-más, en el borde exterior del territorio cardial/macroesque-mático, como también ocurre con los santuarios del Barrancde l'Infern y La Sarga, precisamente los únicos en los que sehan pintado orantes, mientras los del interior se dedican exclu-sivamente a diferentes tipos de serpentiformes.

IMÁGENES Y CREENCIAS

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La pared del Pla de Petracos se con-vierte en un retablo organizado a par-tir de una hornacina central que desde sualtura preside todo el conjunto, donde sepinta una figura humana con los brazoslevantados y las piernas abiertas, rodeadade puntos, pequeños trazos a modo derayos de luz o potencias que parten delcuerpo, barras paralelas y y serpentifor-mes. Sobre ella, como si surgiera de susmanos, se pinta otra figura humana, máspequeña. A ambos lados y a distinta alturase utilizan varios abrigos, en dos de los cua-les apenas quedan vestigios de sus pinturas.En los otros y a un lado, tres figuras huma-nas en una hornacina interrumpida en laparte central para colocar un motivo trian-gular a base de gruesos puntos. En el otrolado, un conjunto de "serpentiformes oran-tes" en el Abric VII y dos extraños motivosdel Abric VIII que podrían corresponder auna mujer acéfala y a un toro . Y delante dela pared, en línea con el abrigo central, unagran piedra, la única del entorno con las

superficies laterales y superior planas.Contemplado desde el cauce del barrancoo desde la otra ladera, desde donde conclaridad se pueden divisar las pinturas, elconjunto de los abrigos y la piedra parecenconstituir un todo orgánico.En todo el Mediterráneo, con el que

indudablemente se deben relacionar las pri-meros grupos de agricultores y ganaderosde nuestras tierras, desde los momentos ini-ciales del Neolítico se utilizan imágenes demujeres, en ocasiones en actitud de orante,como protectoras de la fertilidad de las tie-rras, animales y personas. El descubrimien-to del Pla de Petracos llenó un extraño vacíoen la Prehistoria de la España mediterrá-nea, donde no se habían identificado imá-genes -y, por tanto, tampoco creencias-asociadas al más temprano Neolítico. Enninguno de los yacimientos con arte rupes-tre Macroesquemático se han podido deter-minar con absoluta seguridad la presenciade mujeres entre sus pinturas, aunque nosin ciertas dudas se ha identificado como

Pla de Petracos, “Retablo”.

mujer uno de los motivos del Abric VIII ytambién puede corresponder a otra "el" -eneste caso "la"- orante del Abric V si se tieneen cuenta que la posición y desarrollo desus piernas evoca las figuras de las llama-das "mujeres piernabiertas" del Mediterrá-neo oriental. Por otro lado, la representa-ción humana que decora el vaso de laCova de l'Or parece tratarse de una mujerorante, género que podría hacerse extensi-vo al resto de representaciones muebles, deninguna de las cuales se conserva la parteinferior del tronco, y en las rupestres, sinperjuicio de que éstas estuvieran cubiertaspor una túnica que ocultara el sexo. De serasí, estas imágenes corresponderían amujeres, ya sean diosas o sacerdotisas,relacionadas con rituales de fecundidad delas tierras y cosechas. En este sentido, tam-bién en diversos puntos del Mediterráneojunto a la diosa se representa el toro que seinterpreta con la fuerza que contribuye a lafecundidad de la tierra. Si se acepta que elotro motivo del Abric VIII recuerda, demanera esquematizada, la cabeza de untoro, todos los temas mediterráneos rela-cionados con la agricultura estarían repre-sentados en nuestro yacimiento. También las imágenes de los "serpenti-

formes orantes" podrían relacionarse con laagricultura si tenemos en cuenta que, comoocurre en el Abric VII, se inician en círculosconcéntricos para desarrollarse hacia arri-ba y finalizar en dedos como si se tratarande las manos de orantes. Quizás simbolicenplantas que surgen de las semillas a modode círculos concéntricos y se elevan haciael cielo para con sus manos abiertos solici-tar protección y ayuda.Todo parece indicar que el Arte

Macroesquemático tuvo vigencia durantevarias generaciones, no se sabe cuántaspero es posible que no muchas a juzgar porel desarrollo del Neolítico. En un momentodado, posiblemente todavía dentro del VImilenio a.C., las imágenes macroesquemá-ticas habían perdido su sentido simbólico ysurgen otras nuevas donde ahora, comoocurre en el Arte Levantino, el hombre y el

animal se convierten en protagonistas aso-ciándose de manera simbólica de diferentesmaneras para reflejar sus tradiciones y lasnuevas creencias, en este momento no bienconocidas. Sus autores son conscientes devalor las imágenes anteriores, que quizáshan perdido su sentido y ya no las entien-dan, pero las respetan. Pintan sobre ellassin destrozarlas ni anular sus partes mássignificativas, como ocurre en La Sarga, oeligen un abrigo donde no existían pinturasanterior. Es el caso del Pla de Petracos.Cuando siguiendo el Barranc de Malafi

nos encontramos con la imponente pareddel Pla de Petracos con sus abrigos yextraordinarias imágenes el visitante sesiente impresionado por la belleza del lugare inmediatamente viene a la memoria otroslugares que las distintas religiones han ele-gido como santuarios donde sus visitantesrealizan los ritos que acompañan a sus cre-encias y se sienten identificados comogrupo, aunque unas imágenes se sustituyanpor otras a medida que cambian las cir-cunstancias que las sustentan y dan sentido.Pla de Petracos es, sin duda, un yaci-

miento con arte rupestre prehistórico conimágenes de extraordinario belleza, bienpintadas y excelentemente conservadas. Plade Petracos es, ante todo y por encima detodo, un lugar que nuestros antepasados dehace varios milenios -los primeros quepracticaron aquí la agricultura y la ganade-ría- eligieron como santuario. La UNESCOha reconocido su valor incluyéndolo en lalista de Patrimonio Mundial, ya que "se tratade un sitio cultural que debe ser protegidopara beneficio de la humanidad". Así lo haentendido la Diputación de Alicante y elMARQ -Museo Arqueológico Provincial deAlicante-, realizando una extraordinariaadecuación del espacio para la visita públi-ca, con un cuidada información y un exqui-sito respeto del paisaje, al tiempo que, con-juntamente con el Ayuntamiento de Castellde Castells, dotó con una excelente Sala deArte Rupestre al municipio.

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En 1993, poco tiempo después del expolio al que se vio sometido elyacimiento con arte rupestre del Abric de Benirrama, La Vall deGallinera, desde el Museo Arqueológico Provincial de Alicante se presen-taba a la Consellería de Cultura un informe para la creación de unas Rutasde Arte Rupestre, un proyecto que pretendía mejorar la protección de unPatrimonio declarado Bien de Interés Cultural, a la vez que fomentar suconocimiento. Se trataba de aunar esfuerzos y en ese mismo documento en el que,

desde la Diputación de Alicante se solicitaba la colaboración de laGeneralitat Valenciana, se hacía constar la necesidad de emprender accio-nes de cooperación y coordinación con los municipios que contuvieranemplazamientos con arte rupestre en sus términos, como administraciones alas que por su cercanía, debía implicarse del todo en la protección de unPatrimonio muy frágil en su conservación y amenazado por distintos facto-res, entre los que destacaban acciones causadas por visitantes, por pocoinformados, nada respetuosos con un legado ancestral, o, tras lo deBenirrama, por auténticos desaprensivos. De manera obvia, desde esa pers-pectiva también los municipios debían resultar los primeros beneficiarios detodo lo que, desde administraciones con medios técnicos y económicos ade-cuados, se hiciera para difundir los contenidos de los yacimientos con arterupestre. El proyecto que pretendía lo que hoy se reconoce como MARQ encontró

inmediatamente apoyos desde los ámbitos de la investigación, de donde porotra parte, habían partido hasta ese momento las principales iniciativas refe-ridas a la protección, conocimiento y divulgación del arte rupestre de

EL SANTUARIO DE PLA DE PETRACOSSU PROTECCIÓN Y DIFUSIÓN

JORGE A. SOLER DÍAZ1RAFAEL PÉREZ JIMÉNEZ2

1 MARQ. Museo Arqueológico Provincial de Alicante.2 Área de Arquitectura. Diputación Provincial de Alicante.

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Alicante, como una realidad que empezabaa conocerse bien a partir de los de los añosochenta del s. XX y que, tras su arduo ymodélico estudio, iba a constituir todo unreferente en la Prehistoria Europea. De estemodo en las Segundas Jornadas deArqueología, celebradas en Alfaz del Pi,quien había resultado figura principal enese proceso, el Dr. Mauro Hernández,defendía la intención del Museo, indicandola necesidad de poner en marcha las Rutas,desde la asunción no solamente de estable-cer una política coherente de cierre y vigi-lancia de los yacimientos con manifestacio-nes artísticas, sino también de promover,desde un cierto control las visitas, prestan-do una especial atención a las que pudie-ran realizar los centros docentes y a las queprovocaran el cada vez más pujante turismointerior. En la propuesta del Museo Arqueológico

Provincial de Alicante se asumía la fórmula

del vallado con información, entendiendoque muchas de las agresiones que veníasufriendo al arte rupestre podían paliarse, siel visitante ocasional era consciente de laimportancia de lo que se representaba enlos paneles rocosos, entendía su contenidoy era advertido de la figura legal que, anivel de protección, gozaban dichas mani-festaciones. Con ese ánimo se perfiló loque devendría en una estrecha colabora-ción entre el Museo y el Área deArquitectura de la Diputación de Alicante,empezando a redactar un proyecto suscritopor Enrique Llobregat, Jorge A. Soler yRafael Pérez en el que se asumía como pri-mera actuación la puesta en valor del yaci-miento de Pla de Petracos, contando para

MARQ. Museo Arqueológico Provincial de Alicante

Folleto, 1998

la ejecución del mismo con el asesoramien-to científico del Dr. Mauro Hernández y conla colaboración, de Pere Ferrer Marset yEnric Català Ferrer. Ambos, en 1980 habí-an descubierto las pinturas rupestres de Plade Petracos, enclave que a partir de 1998,del mismo modo que la totalidad de losemplazamientos con arte rupestre del deno-minado Arco Mediterráneo, añade a lamáxima figura de protección de laAdministración del Estado (BIC núm. R-I-51-9819 a R-I-51-9824), el reconocimien-to como Patrimonio de la Humanidad porparte de la UNESCO. La elección de Pla de Petracos resultaba

idónea por varios motivos. Además de suimportante significación cultural, la acciónde la Diputación de Alicante ahí encontra-ba del todo su sentido por cuanto que seactuaba en un pequeño municipio, Castellde Castells, no dotado de los medios eco-nómicos y técnicos necesarios para unaempresa de cierta envergadura. De otraparte, la actuación que se iba a desarrollaren Petracos permitiría, por la disposición ytamaño de los motivos, su comprensiónmediante la instalación de paneles con tex-tos, sin la necesidad de contar siempre conuna fórmula de visita guiada, acaso costo-sa para el Ayuntamiento y de difícil realiza-ción por parte de la institución museísticapromotora, al determinarse una considera-ble distancia geográfica entre la misma y elyacimiento. Aparte de los esfuerzos quepudieran realizar los centros docentes, eraevidente que el público potencialmente visi-tante del Pla de de Petracos era adulto ofamiliar y que iba a desplazarse al enclaveen fin de semana o aprovechando vacacio-nes. En el mismo Castell de Castells, sehabía emprendido a la vez nuevas fórmulasde turismo rural, dotándose el municipio deservicios del todo acordes con la intenciónque se guardaba con la puesta en valor delsantuario prehistórico. Se quería actuar por fases, procurando

primero la protección y puesta en valor delenclave y después la instalación de un cen-tro de interpretación donde un público visi-

tante en el que debía figurar un porcentajeimportante de extranjeros pudiera obtenertodavía más información, que encardinaralas labores de divulgación y que sirvierapara atraer hacia el mismo municipio losbeneficios que pudieran derivarse de unaacción del todo relacionada con el turismointerior. Dichas acciones debían completarse con

una buena política de mantenimiento detodo lo que se ejecutara y con una adecua-da campaña de promoción en coordina-ción con el Ayuntamiento e impulsada porel Museo Arqueológico Provincial deAlicante, hoy reconocido como MARQ. Lacomplejidad de todo lo planteado, la enor-me importancia del santuario y su consecu-ción en distintas fases hicieron que la ideaglobal de un proyecto, en principio aplica-ble a distintos yacimientos con arte rupestre,terminara centrándose en la consecuciónen 1998 de un auténtico Museo de sitio enun soberbio paraje del área de montaña dela provincia de Alicante, y después, en2003, de un centro de interpretación dota-do de un montaje expositivo de vanguardiadispuesto en un edificio anexo al de la pro-pia casa consistorial donde también seexhiben materiales de una ColecciónEtnográfica, reunida por los mismos vecinosal amparo de las acciones impulsadas porel MARQ y la Unidad de Arquitectura de laDiputación Provincial en el municipio.

Castell de Castells

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PUESTA EN VALOR DEL YACIMIENTO CON ARTE RUPESTRE

DE PLA DE PETRACOS. FICHA TÉCNICA.

Diputación Provincial de Alicante.

ACTUACIONES. 1998.

Dirección del proyecto:

Jorge A. Soler DíazRafael Pérez Jiménez.Coordinación:

Rafael Azuar Ruiz Manuel Olcina Domenech

Asesoramiento científico:

Mauro S. Hernández PérezJean Clottes

Documentación Gráfica y Fotográfica:

Enrique Català FerrerPere Ferrer Marset Mauro S. Hernández PérezRafael Pérez Jiménez

Colaboradores:

Fernando Casarrubios Moreno Juan Antonio López PadillaJose Luis Nicolau Castro

Gestión administrativa:

Área de Arquitectura y Conservación de la Diputación Provincial de AlicanteMuseo Arqueológico Provincial de Alicante. MARQ

Textos paneles y folletos:

Jorge A. Soler Díaz

Diseño paneles y folletos:

Pepe Gimeno

Empresa constructura:

Esclapes S.L.

Pla de Petracos.Pared con abrigos

El yacimiento de Pla de Petracos toma el nombre de lapartida donde se encuentra. Se trata de un conjunto deocho abrigos y una cueva ubicada en la margen izquierda delBarranc de Malafí. Su acceso se realiza a través de una pistarodada que partiendo del km 7 de la carretera de Benichem-bla a Castells de Castells, comunica la partida donde seencuentra el yacimiento con el término de La Vall d'Ebo. Distaunos 5 km del municipio de Castell de Castells y se disponeen el paisaje de un entorno montañoso sólo modificado porla presencia de una vivienda en sus inmediaciones y por losbancales de cultivo dispuestos de forma escalonada debajodel frente rocoso en el que quedan los abrigos con pinturas.

LA PUESTA EN VALOR DEL SANTUARIO DE PLA DE PETRACOS

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De un total de ocho, los abrigos IV, V,VII y VIII presentan motivos pintados

en un rojo intenso, por su buen tamañoperfectamente visibles a distancia, confor-mando representaciones adscritas al deno-minado Arte Macroesquemático, manifesta-ción prehistórica previa al Arte Levantinopor la constatación en otros yacimientos(Abric IV del Barranc de Benialí y el Abric Ide la Sarga -Alcoy- ) de superposiciones demotivos pintados de éste por encima deotros similares a estos de Pla de Petracos, yvinculada a la fase más antigua delNeolítico Valenciano, una vez que se hanreconocido motivos impresos, en su con-cepto similares a los rupestres, dentro delrepertorio decorativo de las cerámicas másantiguas del área. El abrigo V guarda una disposición cen-

trada, tratándose de una oquedad de 2 mde largo y 1 m de profundidad, abierta auna pared vertical de unos 10 m de alturadonde puede apreciarse, entre una serie demotivos geométricos, un orante de conside-rables dimensiones, por debajo de unafigura humana más pequeña. Enfrente delmismo, a unos metros de la pared rocosa

Indicador de acceso

Situación geográfica de Pla de Petracos

Pla de Petracos

sobresale en el terreno una gran piedra quepodría haber guardado relación con el sig-nificado de las representaciones pictóricas. A la izquierda de este abrigo central se

disponen los abrigos VII y VIII. En el prime-ro de 3,5 m de largo, 2 m de máxima pro-fundidad y 2 m de altura, destacan motivosgeométricos de desarrollo vertical (serpenti-formes) que parten de pseudocírculos y cul-minan en manos. Se han considerado unarepresentación sacralizada de la vegetaciónen la que se percibe a la semilla como ger-men creador. En el Abric VIII, de 3 m deancho, 2,25 m de altura y 1,30 m de pro-fundidad, se aprecia un complejo conjuntoen el que identifica la cabeza de un posibletoro y una figura femenina, acéfala por unproblema de conservación.

El abrigo IV queda a la derecha del central,midiendo 3,5 m de largo, 2,25 m de pro-fundidad y 2, 75 m de anchura. Acoge atres antropomorfos en diferente estado deconservación, inmediatos a una anchabanda de disposición vertical que puedeinterpretarse como la pared de una cueva.El antropomorfo central tiene encima de sucabeza una serie de puntos que, en su dis-posición, conforman un triángulo.Separado y a la derecha del conjunto

expuesto se ubica el Abrigo I, de 20 m delargo, 6 m de profundidad y unos 14 m dealtura. En este abrigo se pudo descubriruna representación de Arte Levantino dereducidas dimensiones. Se trata de un cier-vo herido por flechas que seguramente for-maría parte de una escena de caza.

Abric VIII Abric VII Abric V Abric IV Abric I

Panorámica del conjunto de Arte Rupestre de Pla de Petracos

VIII VII

V

IV

I

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Las acciones que se emprendieron parala puesta en valor de este yacimiento, únicopor la calidad y buena conservación de losmotivos que recoge, se centraron en la sus-titución de un vallado de urgencia que pre-viamente había sido sufragado por elMinisterio de Cultura, la mejora de losaccesos y la disposición de una plataformaque permitiera la observación de las repre-sentaciones rupestres, a la vez que la lectu-ra de paneles instalados tras el vallado.

Para su ejecución, tras la autorizacióncorrespondiente de la Consellería deCultura, se obtuvo de aprobación de laDiputación Provincial de Alicante en marzode 1997, realizándose las obras entreagosto y diciembre de aquel año.Finalmente, el 3 de marzo de 1998 se abrióal público el enclave en un acto presididopor la Directora General de Patrimonio, elPresidente de la Diputación de Alicante y laAlcaldesa de Castell de Castells.

En los trabajos realizados para protegeral yacimiento a la vez que adecuarlo a lavisita se tuvieron en cuenta dos principiosbásicos: la integración de las obras y equi-pamientos con el entorno o medio físico delyacimiento, cuestión altamente comprome-tida cuando se trata de un vallado en elmonte y la reversibilidad de la actuación, encuanto que debía poder ser desmontada sinconsecuencias para la topografía natural. Ahora puede visitarse el yacimiento de

Pla de Petracos, accediendo al mismo poruna senda mejorada en alguno de sus tra-mos ascendentes con la introducción depeldañeados localizados realizadosmediante piedra del lugar recibida conmortero de cemento blanco y arena. A lolargo de un recorrido que salva desnivelesexistentes entre abancalamientos, se handispuesto barandillas de protección en tra-mos que entrañan riesgos de caída, y capasde gravas filtrantes para rellenar depresio-nes del terreno. Las papeleras que se dis-ponen en este acceso son vaciadas por per-sonal del Ayuntamiento de Castell deCastells. Recibiendo un número considera-ble de visitantes anuales, el trazado se man-tiene en unas condiciones óptimas por lastareas de mantenimiento que de maneracontinuada se realizan y, sobre todo, por elenorme respeto que el paraje impone aunos visitantes, por informados, del todorespetuosos con los contenidos culturalesque se ofertan y con el medio ambiente del

Indicador de acceso

Inicio del recorrido

Senda

Escalera y papelera de mantenimiento

entorno de las representaciones prehistóri-cas. La mejora del acceso al yacimiento dePetracos ha posibilitado la visita de gruposinfantiles y de la tercera edad.Hacia la mitad de su recorrido la senda

se divide en dos tramos que culminan ensendas plataformas de observación plante-adas delante de la representación de ArteLevantino y del conjunto de Arte Macroes-quemático. El acceso a ambas se consiguemediante escaleras fabricadas en piedra. Lainstalación que permite la contemplacióndel motivo de Arte Levantino consiste enuna plataforma de 1,20 m de anchura útily unos 2,50 m de longitud. Las pequeñasdimensiones del ciervo y su deficiente con-servación han hecho que, al objeto de faci-litar su visión, resultara necesario su señali-zación mediante una varilla de acero inoxi-dable. Con un firme de hormigón de unos 10

cm de espesor, la plataforma de observa-ción del conjunto de Arte Macroesque-mático tiene 1,20 m de anchura útil y 28m de longitud. Su firme es de hormigón deunos 10 cm de espesor. Para la construc-ción de la plataforma resultó necesario sal-var los pequeños accidentes topográficos ycrear un terraplén con piedra del lugar for-mando un talud mediante la mamposteríaen seco, imitando los abancalamientosexistentes en la zona para usos agrícolas.Sobre un lateral del firme se eleva un mure-te de unos 40 cm de altura sobre el plano

circulación, a modo de banco corrido plan-teado como protección e idóneo para des-cansar y observar sosegadamente las pintu-ras.En la banda interior de ambas platafor-

mas quedan vallados compuestos porsoportes verticales o barras metálicas gal-vanizadas (HEB-100) de 2,60 metros dealtura, con sus últimos 50 cm curvadoshacia el exterior, dispuestos cada 2,5 m. Elcerramiento entre los mismos consiste enuna malla metálica galvanizada cuadrada,formada por varillas electrosoldadas de 6mm de diámetro con un bastidor a base deangulares de 40 x 40 x 5 mm, cuyos ladosverticales son soldados a los soportes delcerramiento por su interior. El vallado seremata superiormente por un conjunto decinco cables de acero trenzado inoxidablede 5 mm de diámetro que se disponen entresoportes, en su parte curva, con objeto dedificultar el acceso al recinto escalando lavalla metálica. La entrega del vallado a lasparedes más o menos verticales de los cor-tes rocosos, se resuelve con muros de mam-postería de piedra recibida con mortero decemento M-40, de unos 30 cm de espesor.Toda la estructura planteada para impedirel acceso al recinto en ningún caso dificul-ta la perfecta observación de los motivos dearte, dado que los mismos pueden contem-plarse de una manera del todo nítida a dis-tancia y muy por encima del vallado. Al objeto de ayudar a la comprensión de

Escalera de acceso a la plataforma deobservación

Vallado del conjunto de arte macroesquemático

Vallado del abric I de ArteLevantino

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este santuario y a las significaciones expre-sadas en pintura parietal que se conservanen el Pla de Petracos, tras los vallados sedisponen, guardando una disposición ali-neada con respecto a los abrigos un totalde 6 paneles informativos cuyo contenidotextual y gráfico intenta despertar en el visi-tante la experiencia sensitiva dominadoradel espacio, así como el encuadre históricoy funcional (ritual) del lugar en que seencuentra. Los paneles miden 80 x 90 y 80x 130 cm, consisten en una chapa com-puesta por dos láminas de aluminio de 0,5mm de espesor y un núcleo central depolietileno de 4 mm espesor. Esta chapa,mediante plegado en sus cuatro lados, sefija a un bastidor formado por perfiles tubu-lares de aluminio con nervios centrales quesirven para anclar el conjunto del panel aun pie o soporte vertical de hormigón. Lachapa recibe una lámina plástica que inclu-ye los contenidos, optándose por esta solu-ción tras comprobar que la serigrafía noresiste bien la irradiación solar en el yaci-miento, resultando muy fácil reimprimir yreinstalar la lámina cuando al cabo de uncierto tiempo se deteriora. Uno de los paneles, el primero que reci-

be al visitante en el conjunto de ArteMacroesquemático recoge un contenidogeneral sobre esta manifestación artística,así como la importancia del enclave y laprohibición expresa de traspasar los valla-dos. Los demás paneles reproducen losmotivos de los abrigos con los que se rela-cionan y sucintos textos en valenciano ycastellano (con resúmenes en inglés) en losque, de manera divulgativa, se recoge todala interpretación científica del santuario. Deeste modo en el panel que trata los motivosdel abrigo V se indica la evidencia del unculto astral al quedar el orante con lasmanos orientadas al sol poniente; en losque se recogen los motivos del del VII y elVIII se aborda la importancia que tendría elciclo agrícola y los valores de fertilidad yfecundidad de la tierra y de los animales; yen el que trata los del IV el valor que aque-llos agricultores y ganaderos, llegados a

Panel institucional

Panel del abric V

Panel del abric VII

Disposición delos paneles trasel vallado

estas tierras hace 8.000 años, darían algrupo y la cohesión social. Con todo, sequiere transmitir el carácter sacro del lugary la existencia de distintos contenidos soste-nidos por creencias y rituales, de los quequedan grandes imágenes, dispuestas amodo de gran retablo aprovechando oque-dades de un magnífico frente rocoso, en unentorno del todo sugestivo y dotado de unaacústica especial.En la actualidad el Pla de Petracos es

visitado por innumerables grupos de perso-nas: familias en excursión del domingo,

grupos escolares, senderistas, turistas aloja-dos en la zonas costeras o en el interior,universitarios, etc., de manera que su pues-ta en valor ha permitido disponer de unequipamiento cultural de excepcionalimportancia en un medio rural, a un costerazonable, teniendo en cuenta que para sumantenimiento la Diputación Provincialcontempla una mínima partida anual, quese destina a la renovación de los paneles ya las reparaciones de la senda, valla yestructuras; que los costes de la edición defolletos los sufraga el MARQ , y que, porconvenio, solamente es responsabilidad delAyuntamiento el cuidado y limpieza cotidia-na de un emplazamiento que viene a recibirunos 15.000 visitantes anuales, sin necesi-dad de disponer de un guía para contem-plar las manifestaciones artísticas. Sin duda, el éxito de la visita también

también favorece conservación del recinto,por cuanto que quienes acceden al conjun-to alcanzan a comprender sobradamente laimportancia del Patrimonio que contiene y,de manera general, el enorme alcance queen lo cultural vienen a significar estas reali-zaciones prehistóricas vinculadas a los ini-cios de la práctica de la agricultura y laganadería en estas tierras de la orilla occi-dental del Mediterráneo.

Inauguración de las instalacionesen 1998

Panel del abric VIII

Panel del abric IV

Panel del abric I

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SALA DE ARTE RUPESTRE Y DE LA COLECCIÓN ETNOGRÁFICA

DE CASTELL DE CASTELLS.FICHA TÉCNICA.

Diputación Provincial de Alicante; Ayuntamiento de Castell de Castells.

MONTAJE PERMANENTE. 2003.

Dirección:

Jorge A. Soler Díaz; Rafael Pérez Jiménez. Ayudante de Dirección:

Ester Torregrosa Pérez.Asesoramiento científico:

Mauro S. Hernández Pérez; Enrique Catalá Ferrer; Pere Ferrer i Marset. Leopoldo Bellver Solar.Coordinación de equipos:

Rafael Azuar Ruiz; Manuel Olcina Domenech.Equipo técnico y de documentación:

Juan López Padilla; José Nicolau Castro; José Ramón Fuentes Rubio;Teresa Llópis García; Anna García Barrachina.Gestión administrativa:

Área de Arquitectura y conservación de la Diputación Provincial de Alicante. Museo Arqueológico Provincial de Alicante. MARQ.Dirección del diseño museográfico:

Joan Bohé.Diseño de interiores:

Tono Lledó; Esperanza Ivorra; Ángel F. Marco Villena; José A. Valero Falçó; Tono Lledó INTERIORISTAS S.L.Diseño de ingeniería y montaje:

Josep Figuls,Josep Lluís Centelles, Quim Martino y SEDD- DATATON LATINA, S.L.Diseño de espectáculo y producción museográfica:

Josep Lluís Centelles y Núria Sabaté; BOHÊMIA projectes de comunicación audiovisual, S.L.Realización de videos:

Pep Garrido.Diseño y dirección escenografica de la producción de "El Santuario de Pla de Petracos":

Gina Cubeles.Tratamiento de iluminación y escenográfico:

La Cònica/ Lacònicas.Banda sonora original de "El Santuario de Pla de Petracos":

Laura Teruel.Tratamiento 3D:

Juli Pla.Diseño gráfico:

Núria Gari.Guión audición Sala de la Colección Etnográfica:

Eulàlia Domènech.Voz valenciano/castellano de la Sala de la Colección Etnográfica:

Pepa López.Voz inglés de la Sala de la Colección Etnográfica:

Lina Lambert.Fotografías de la Sala de la Colección Etnográfica:

Gonzalo Santomà.Traducción:

Teresa Llópis García.Restauración:

Mar Echegoyen; Faustino Vaquer.Aportación documental, grafica fotográfica y científica:

Servicio de Investigación Prehistórica,Valencia; Museu Arqueològic Municipal Camil Visedo Moltó, Alcoy; Museo ArqueológicoProvincial, Alicante ; Centre d´Estudis Contestans.Agradecimientos:

Eugeni Gay, banda de música "La Primitiva" de Castell de Castells, Sherezade Bardagí, Marc Comedran, Marc Muntaner, Anna Mena,Augusto Flores, Joan Prats, Gabriel Feliu, Ángel Sabaté, Àlex Ortolà.A todos los vecinos de Castells de Castells que han cedido piezas y fotografías de carácter etnológico.

Fachada del Museo. Castell de Castells

En la instalación museográfica realizada en Castell deCastells se ha pretendido acercar todavía más el yaci-miento de Pla de Petracos al público, incidiendo del todo enlos contenidos de las representaciones artísticas. La presenciade esta Sala de Arte Rupestre dotada de potentes mediosaudiovisuales en el municipio completa de una manera ade-cuada el proyecto que pretende una puesta en valor de unconjunto de arte rupestre, por cuanto que con su funciona-miento se transmite a los vecinos de una manera cotidianaimportancia del enclave, lo que resulta un factor clave en elcuidado y protección del yacimiento arqueológico; y porquetratándose de una instalación museográfica sugestiva y únicaen su concepto, en sí misma constituye toda una oferta deturismo interior, lo que de manera obvia incide en el progresoeconómico de la pequeña población que la recoge. Graciasal cuidado montaje etnográfico que complementa la muestrase refuerza el vínculo de la instalación con el municipio, unavez que se exponen piezas cedidas por los mismos vecinos yse tratan valores del todo reconocidos en la población.

LAS SALAS DE ARTE RUPESTRE Y DE LA COLECCIÓN ETNOGRÁFICA

DE CASTELL DE CASTELLS

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Esta segunda fase del Proyecto de Puestaen Valor de Pla de Petracos, se inició ofi-cialmente el 17 de noviembre de 2000,cuando la Diputación Provincial de Alicantey el Ayuntamiento de Castell de Castellssubscribieron un convenio de colaboracióna los efectos de dotar al municipio de unainstalación museística con dos intenciones:dar a conocer a la vez que incrementar laColección Museográfica del Ayuntamientoy potenciar del todo los contenidos de ArteMacroesquemático y de Arte Levantino delsantuario de Pla de Petracos.Desde los mismos departamentos de la

Diputación de Alicante que habían desarro-llado el vallado con información de Pla dePetracos se procedió, bajo la dirección delos que subscriben a la redacción del pro-yecto museológico, contando primero conla colaboración de una empresa especiali-

zada en el diseño y adecuación de espacios-Tono Lledó. Interioristas- y después conotras con una amplia experiencia en elmontaje de museos y en la dotación demedios audiovisuales -Bohemia y SeddDatatón Latina-, aprovechando bien losconocimientos que para este tipo de insta-lacioens museográficas ha venido desarro-llando Joan Bohé y toda la experiencia dela escenógrafa Gina Cubeles. Con los recursos audiovisuales se ha

pretendido de una parte informar mejor alvisitante y de otra provocar su emoción contoda una serie de valores, hechos y circuns-tancias del todo acordes con la interpreta-ción científica que vincula el origen delNeolítico en estas tierras con la difusión dela agricultura y la ganadería, hecho queencuentra su último origen en PróximoOriente y que aprovecha en su recorrido lacosta norte del Mediterráneo. Quedandoestablecido entre el norte de la provincia deAlicante y el sur de la de Valencia lo que seconsidera uno de las primeras áreas de laimplantación Neolítico en la PenínsulaIbérica - el territorio cardial -, puede recre-arse bien la llegada de nuevas gentes desdeel mar, la conformación de un nuevo paisa-

Sede de la colección etnográficay de la sala de arte rupestre.Inauguración 2003

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je tras la quema y tala del bosque, los pri-meros pasos de la agricultura y la domesti-cación en estas tierras, las realizacionesartísticas o el mismo concepto de santuariocomo lugar de encuentro y culto.En el ámbito de la exposición de etno-

grafía, son los objetos los que constituyen elprincipal atractivo del montaje, si bien lejosde considerarse su mera muestra, medianteun recurso de audio y cuidados efectos deiluminación se hace entender de una mane-ra muy directa al visitante la vida cotidianade un pueblo de montaña en la primeramitad del s. XX, contando para ello con lavaliosa información que, sobre los cultivostradicionales, en los últimos años ha veni-do reuniendo el Centre d'Estudis Contestansy con la aportada por un magnífico trabajode campo y de catalogación que, de lamano de Ester Torregrosa, se centra en losobjetos y fotografías que integran laColección Museográfica. La Sala de Arte Rupestre y la Colección

de Etnografía de Castell de Castells fueroninaguradas el 14 de abril de 2003 porparte del Presidente de la Diputación y laAlcaldesa de Castell de Castells. Ahoraqueda el reto que supone mantener enbuen estado las obras realizadas, desper-

tando de manera continuada el interés delos visitantes, y proponiendo la creación demecanismos que permitan de manera ágil yeficaz la continuidad de la colaboraciónentre administraciones, lo que en definitivaes la única garantía de la perduración deestos logros. Este nuevo y potente equipamiento cultu-

ral se ha dispuesto en un espacio anexo alde la propia sede el Ayuntamiento deCastell de Castells, destinando 160 m2para los contenidos etnográficos y 190 m2para los de Arte Rupestre. Para ello se hanrealizado las reformas pertinentes en doscasas, una de ellas de gran valor arquitec-tónico para el municipio, por cuanto que setrata de una vivienda tradicional compues-ta por planta baja, piso y cambra, que con-serva su distribución interior, sobre todo enla planta baja, circunstancia que se ha ser-vido aprovechar bien para el montaje etno-gráfico. Ambas casas se hallan ahoracomunicadas interiormente con un accesocomún, que se ha tomado como el únicopracticable, manteniendo otros dos comosalidas de emergencia y acceso de servicio.Toda la instalación dispone de medios quefavorecen la visita de personas afectadaspor minusvalías.

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Para la visita se ha optado por ofrecer unúnico recorrido. Aprovechando la entradaprincipal del Ayuntamiento se dispone elacceso, haciéndose bajar al visitante a esaparte conservada de la vivienda tradicionaldonde se muestran los contenidos de etno-grafía y luego haciéndolo subir dos pisos.

En el primero queda una introducción alArte Macroesquemático y en el segundodos montajes audiovisuales, uno dedicadoa la difusión del Neolítico y el segundo,espectacular, al mismo santuario neolíticodel Plá de Petracos.

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PLANTA BAJA

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PLANTA SEGUNDA

PLANTA PRIMERA

Al inicio, en una luz de penumbra el público queda reu-nido junto a una mecedora y otros enseres. Ahí y segúnla opción elegida (valenciano, castellano o inglés) comienzaun audio con una narración que recurre a la voz de unaanciana que habla de su vida y el pueblo de Castell deCastells mientras viste a su nieto y lo prepara para salir a lacalle. Conforme avanza la narración los visitantes van descu-briendo rincones de una hacienda, ayudados por el encendi-do paulatino de focos. Al final de un relato que permite cono-cer las dificultades de la vida cotidiana en un pueblo de lamontaña alicantina en la primera mitad del s. XX, suena unamúsica de banda de pueblo y se ilumina toda la estancia, demanera que los visitantes pueden contemplar un buen núme-ro de objetos y fotografías dispuestos en el interior de unacasa tradicional que conserva de manera original distintosambientes: comedor, dormitorio, una cocina y su hogar, losalmacenes y los pesebres.

LA VISITA A LA COLECCIÓN ETNOGRÁFICA

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Como quiera que la narración recogecanciones del mismo pueblo y retazos dehistorias reconocidas por los más mayores;que la música que suena al final de relatoes propia de una banda que en Castell deCastells se remonta a 1921 y que en laactualidad es protagonista de una impor-tante actividad docente y cultural; y que enlas fotos seleccionadas recogen a distintasfamilias y vecinos en la primera mitad delsiglo pasado, es claro que con todo ello seconsigue de una parte una estrecha identi-ficación de los habitantes del municipio conel museo y, de otra, que el público accedaa esa memoria colectiva que de manerairremediable el paso del tiempo va desdi-bujando.

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Interior Sala de Etnografía

Cocina

Fotografías expuestasen la Sala de Etnografía.Selección

Pesebre

Taczim y AlcasseriaElementos de aseo personal

Cantarera Mesa de picar almendras y exposición fotográfica

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Con todo ello se consigue un montajesingular, propio de Castell de Castells,como característica añadida a una exposi-ción de carácter siempre más amplio quehace alusión a la trilogía de cultivos esen-ciales en una economía de autoconsumode la agricultura tradicional mediterránea:trigo, aceite y vino, y su relación con la vidacotidiana de un municipio del interior.

Medida de aceite

Recogida de la aceitunaPrensado de aceite

Hoces

Podadera

Siega y aventado del trigo Vendimia y prensado de uva

En lo que se refiere a los objetos, en elcomedor donde se inicia la narración, porser un espacio polivalente, quedan materia-les diversos propios de las actividades coti-dianas femeninas y algunas referidas almundo infantil, entre ellas destaca, lamecedora, una máquina de coser, instru-mentos para el fuego, candiles, una mesa,barxes o pequeños bolsos realizados enpalma con sus agujas correspondientes decostura y algunos juguetes. En lo que originalmente era la entrada

de carruajes, además de las fotografías, sedispone una mesa de picar almendras yuna selección de instrumentos musicales;en el cuarto-habitación se ha recreado undormitorio con todo su ajuar, y en el inte-rior de la cocina quedan útiles propioscomo, morteros, ollas y así como cerámi-cas aportadas por los vecinos y que E.Torregrosa, T. Llopis y A. García han podi-do identificar procedentes principalmentede otras localidades de Alicante: Orba,Agost y Callosa d´Ensarrià.La bodega ha quedado intacta después

de la rehabilitación y permite contemplaruna forma de almacenamiento típica pormedio de un banco de obra con tinajasincrustadas. En esta sala quedan distintoselementos relacionados con la elaboracióndel vino, el cultivo de la oliva y la fabrica-ción de aceite. Otro espacio que práctica-mente ha quedado intacto han sido las cua-dras y pesebres. En él se han dispuestomateriales relacionados propios del trans-porte agrícola y distintos aperos. Como cui-dado efecto final se proyecta en una paredde piedra y sobre un arado vistas del muni-cipio y de su entorno, que incluyen algunasde los alredores de mismo Pla de Petracos.

BodegaÚtiles de cocina. Metal

Candiles

Útiles de cocina.Cerámica y madera

Vajilla

Gerra

Alcasseria

Mecedora

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En un piso superpuesto al de la Colección Etnográficaqueda un primer espacio destinado a introducir al visi-tante en los contenidos del Arte Macro-esquemático y en todosu proceso de descubrimiento e investigación. A modo decuadros se disponen los motivos más representativos del ArteMacroesquemático, reservándose una pared a los antropo-morfos, otra a los geométricos y otra al calco del panel 2 delAbrigo I de la Sarga, tan trascendental para la investigación,por contener motivos de esta manifestación artística infra-puestos a otros de Arte Levantino.

LA VISITA A LA SALA DE ARTE RUPESTRE

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Con este recurso que también acogefotografías y dibujos de los motivos deantropomorfos impresos en recipientescerámicos, se quiere subrayar el carácterartístico de esta manifestación prehistóricabien determinada en la parte septentrionale interior de la provincia de Alicante,haciendo que el visitante comprenda desdeun primer momento que está frente a reali-zaciones del todo singulares e impactantes,accediendo a calcos de pinturas de hace8000 años del mismo modo que se visitauna exposición monográfica de arte con-temporáneo.

Calcos de antropomorfos. Arte Macroesquemático

Exposición de calcos

Motivos de Arte Macroesquemático sobre cerámica

Abric I de la Sarga. Alcoy

Abric II de la Sarga. AlcoyBarranc de Benialí. Abric IV

CALCOS DE MOTIVOS GEOMÉTRICOS:

Abric de Coves Roges (Tollos)

Esa muestra se complementa con unrecurso visual que permite comprender laimportancia de este arte del NeolíticoAntiguo, a la vez que introducir como temaprincipal todo lo que afecta al yacimientode Pla de Petracos. Es el Pla de Petracos.Especial Descubrimiento, atractivo docu-mento gráfico que incluye textos, dibujos,fotografías, fotocopias de documentos yrecortes de periódico que, guardando elformato de un dossier de prensa disponibleen castellano, valenciano e inglés, se pro-yecta en una pared. De este dossier se des-tina una página doble a explicar las carac-terísticas generales y la atribución cronoló-gica y cultural del Arte Macroesquemático,otra similar al descubrimiento en 1980 delyacimiento del Pla de Petracos por parte demiembros del Centre d'Estudis Contestans,quedando en una tercera a un lado el pro-ceso de investigación de éste y a otro, lapuesta en valor del conjunto dando a cono-cer los trabajos de protección y divulgaciónque 1998 impulsó la Diputación Provincialde Alicante.

Proyección del dossier “Pla de Petracos.Especial Descubrimiento”

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Expuesto el carácter artístico de las reali-zaciones macroesquemáticas, su cronolo-gía y el carácter científico que soporta sudefinición, queda preparado el visitantepara acceder al hecho histórico que explica

la presencia de estas pinturas en un parajede una montaña próxima a la costa. En esteaspecto se opta sin ambages por el mode-lo difusionista aceptando la presencia denuevas gentes portadoras de una culturadel todo diferenciada de la propia del sus-trato epipaleolítico.Se explica la presencia del Neolítico,

aceptanto del todo la propuesta trazadaentre otros por Bernat Martí Oliver, comoun proceso de difusión costera mediterrá-nea que encuentra su último origen enPróximo Oriente, donde de manera definiti-va existen no solamente las primeras evi-dencias de agricultura y la domesticaciónsino también los agriotipos de las primerasespecies domesticadas. Sin profundizar en toda la complejidad

del modelo, un audiovisual recoge unmapa del Mediterráneo, para situarse en suparte oriental, señalar los yacimientosarqueológicos más significativos y apoyarcon imágenes la leyenda Proximo Oriente.Hace 10.000 años. Práctica de la agricultu-ra y la ganadería. Luego, se recogen losenclaves del primer neolítico delMediterráneo Central y Occidental, cen-trándose en la costa propia del NeolíticoCardial en tierras valencianas, indicándosedos yacimientos: Cova de l'Or y Pla dePetracos. Las mismas imágenes soportanaquí la leyenda Costa oeste delMediterráneo. Hace 8.000 años. Prácticade la agricultura y la ganadería, para a con-tinuación recrearse en vistas aéreas primerode la costa y después de todo el entorno delenclave del yacimiento más significativo deCastell de Castells. Como elementos derefuerzo, sobre el suelo queda pintado unmapa del Mediterráneo que el visitante pisaen dirección hacia la Península Ibérica y untexto que muy sucintamente expone el pro-ceso de difusión del Neolítico en las treslenguas que soporta el montaje: valencia-no, castellano e inglés. Con todo el visitante ya está preparado

para acceder al ámbito donde se intentatratar al yacimiento con arte rupestre comolo que fue, como un lugar de encuentro yProyección del audiovisual de la difusión del Neolítico

culto de gentes de tribus o fratrías con unacultura común, bien determinada por lapráctica de una primitiva agricultura yganadería, hoy reconocible por resultarportadora de elementos materiales caracte-rísticos. Precisamente el arte es buena prue-ba de que esa cultura resultara segurogeneradora de ritos y creencias que, vincu-ladas a los modos de vida, cohesionaranlos lazos sociales, regularan la reproduc-ción y por ello, fueran remedio para paliarlas seguras dificultades de subsistencia enun medio que, en los momentos iniciales

del Neolítico, resultaría en buena parteignoto y, en cualquier caso, escasamenteexplotado.Aunque la información científica básica

se recoge en distintos paneles dedicados ala vida y creencias de los primeros agricul-tores y ganaderos y al contenido de losmotivos de los 4 abrigos principales del Plade Petracos -IV, V, VII y VIII-, en el ámbito delsantuario se pretende implicar del todo alvisitante en las preocupaciones de las gen-tes neolíticas mediante un potente recursoaudiovisual.

Panel sobre la vida y las creencias del Neolítico

Paneles en la sala del Santuario

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Paneles de los motivos de Pla de Petracos

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A un nivel técnico este recurso resultaverdaderamente ingenioso, una vez quepermite la proyección ocupando partes dela pantalla, o bien su totalidad, acompá-ñandose de efectos de iluminación dispues-tos detrás de la misma y de una excelentebanda sonora. Compuesto básicamentepor una escenografía envolvente de la sala,desarrollada en el interior de un plano deplanta curvada que irá desvelando el dis-curso, vídeo-proyectores, pantalla gobelín yfilmación, el recurso audiovisual nos con-duce a los temas principales de la proyec-ción "El santuario". La escenografía desoporte (el plano curvado) se compone detres piezas realizadas en fibra de vidrio(material translúcido), de 17 m2, 13 m2 y 12m2, unidas entre sí y suspendidas dos deellas del techo, y otra apoyada sobre basti-dores de madera en el suelo, dispuestastras una pantalla de gobelín junto con finostroncos de arbustos.Con la fibra de vidrio se imitan las carac-

terísticas del paisaje a base de cambios dedensidad en su superficie, consiguiendoexcelentes efectos de texturas y relieves alproyectar luces y sombras sobre ella.Mediante la instalación de diferentes juegosde luces detrás del plano curvo de la esce-

nografía, situadas a diferentes distancias ycon filtros diversos, se obtienen ambientesque se interrelacionan con la proyecciónsobre los diferentes planos. Las luces sondel tipo panorámico, controladas conjunta-mente con los videoproyectores y el proyec-tor de diapositivas mediante un sistema decontrol Dataton. Delante de la pantalla, el espacio de

tránsito y permanencia del espectador sepavimenta con tablas de madera, mientrasque el suelo próximo al plano curvo de laescenografía se cubre con arena y piedras.

El techo y las ventanas de la sala se cubrencon tela "foscurite" para facilitar la creaciónde una cámara oscura demandada por losrequerimientos técnicos de la proyección ydel ambiente que se pretende crear.Los conceptos llegan bien expresados

mediante una sucesión de palabras (aquíreferenciadas en cursiva) en castellano,valenciano o inglés, acompañadas de imá-genes que poco a poco, bien combinadascon ruídos y sugestivos efectos sonoros, cul-minan, tras un impactante "crescendo", conla proyección de los motivos del arte delsantuario envueltos en una emotiva bandasonora. El recurso audiovisual se inicia con los

conceptos alusivos a la difusión -oriente /viaje / occidente- sobre vistas del mar, lacosta y sonidos de ambiente- y a la llegadade nuevos pobladores - hombres / mujeres-sobre detalles de pies caminando por laplaya. De manera inmediata se introduce elpaisaje montañoso propio del interior en el

Tras del gobelín. Recursos escenográficos dispuestos

Escenas del audiovisual de “El santuario” de Pla de Petracos

que se asienta el Pla de Petracos: sobre eldetalle de un ojo humano que observa elmedio surgen palabras - territorio/nuestroentorno- ahora acompañadas de los soni-dos de un bosque de noche bien resueltopor la escenografía que se conforma tras lagasa o gobelín que soporta la proyección.Su espectacular incendio - transformación /paisaje- apagado por una lluvia propicia -fertilidad-, da paso a un detalle concretosobre la elaboración de un hacha pulimen-tada, y a toda una sucesión de golpes detala que ilustran sobre la primera aperturade campos de cultivo -nuestra tierra / nues-tros campos-.La siembra de trigo -semilla- se consigue

con una escena con el detalle del uso de unpalo cavador sobre un campo abierto del

todo ambientado por el ruido que producenlos insectos. Crecido el trigo, se pasa la hozde madera y sílex - siega-, para a continua-ción, presentar al espectador en unasmanos las simientes -frutos-. Las prácticasganaderas se introducen con vistas de ove-jas ramoneando. La visión de un rebañosugiere la fecundidad . Con todo, ya puedepresentarse la noción de grupo y para ellose recurre a la contemplación sucesiva deescenas de actividades cotidianas en planospróximos referidas al ordeño, la talla delsílex, el modelado alfarero y la elaboraciónde los alimentos. El incremento del ritmo detodas esas actividades, acompañadas deun adecuado efecto sonoro, el "crescendo"al que se aludía, permite introducir el con-cepto sociedad.

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Ahora es cuando, de una manera relaja-da, el espectador recibe el mensaje de susituación frente a realizaciones de un grupohumano provisto de una organización yportador de creencias. Mientras un pincelde fibras traza motivos gruesos en rojo,similares a los macroesquemáticos, surgenpalabras clave -creencia, pensamiento,devoción, rito, religión- y finalmente conuna música ciertamente emotiva, el con-cepto arte.Como colofón del audiovisual, y en la

intención de ayudar a comprender el signi-ficado que la investigación ha venidodando a los motivos principales se vincula:con el abrigo VIII la imagen de un toro, uncampo de trigo con el serpentiforme del VII,unos brazos extendidos con los antropo-morfos del V y una escena de amamanta-

miento de una madre y su niña con elgrupo humano del IV. Luego quedan sola-mente frente al espectador los cuatro gru-pos de imágenes principales del Pla dePetracos, guardando una composición simi-lar a la que presentan en el yacimiento. Esel momento para una música que evoca elcarácter sagrado del emplazamiento y paraque se contemplen unas pinturas que en si

Escenas del audiovisual del santuario de Pla de Petracos

mismas provocan todo el montaje. Poco apoco se van iluminando los textos que enlas paredes describen cada uno de losmotivos y de esta forma el espectador com-prende, de una manera global, la impor-tancia y el significado del Pla de Petracos.Como elemento de refuerzo y en la

intención de vincular el montaje expositivocon el yacimiento arqueológico, a la salidadel ámbito de la proyección se dispone unsugestivo panel con el título ¿Todavía nohas visto las pinturas? donde se reproducenimágenes del vallado y de la señalética delemplazamiento. Junto al mismo y en laintención de que los más interesadosconozcan piezas y contenidos del Neolítico

Antiguo se anuncian cuatro museos dondereforzar lo aprendido en la visita: el MARQ,el Museo de Prehistoria de Valencia, elMuseo del Centre d'Estudis Contestans y elMuseo de Alcoy. A día de hoy las pinturas rupestres de Pla

de Petracos son visitadas por unas 15.000personas al año, la instalación se encuentraen un estado de conservación del todoaceptable y la exposición planteada en elmunicipio, abierta los fines de semana,tiene un éxito más que notable, consiguien-do que los vistantes comprendan la impor-tancia de un legado que también debenconocer las generaciones de futuro.

Panel de anuncio de las pinturas de Pla de Petracos.

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Este libro “PLA DE PETRACOS.

PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD”se acabó de imprimir

el dia 25 de Octubre de 2004 en el taller de Gráficas Estilo, S.C. Alicante