A re í t o Zona de laCultura y de

las ideas

w w w. h oy.co m .d oEditor: BavegadoDiseño: Aimée PiccirilloS Á BA D O 21.02.2 015

RRRooobbbeeerrrtttooo MMMaaarrrcccaaallllllééé AAAbbbrrréééuuuNovelista galardonado con elPremio Nacional de Literatura 2015

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EUGENIO GARCÍA CUEVAS

Más sobre la poeta Julia de Burgos,Juan Bosch y Juan Isidro Jimenes Página 7

Siete cielos abiertospara sepelio de la Anaconda

Largo de mi silencio!...Que no se acerquenadie. Estoy litigandocon la oscuridad. Yosoy un conspiradorestelar. Todas lastrincheras me quedanpequeñas: estoysitiando a la eternidad.Pá g i n a 3

En algún momento de 1973se creyó que Caamañoestaba en la ciudadEl presidente JoaquínBalaguer estuvo sometidoa un bombardeo deinformaciones en tornoal desembarco deCaamaño desde queera quizá un rumor sinconfirmar en losprimeros días defe b re ro. . . ” Pá g i n a 6

BULLUMBIARTE LA VIDAOver The Royal String, desde MarkMessenger hasta la música del alma

La casa se llenaba deseres que iban llegandoa la pequeña sala dondeel rostro de JackelineKennedy Onassisdominaba el ambientea golpe de visualidadcasual y sonreía parauna eternidadi n d i s cu t i b l e. . . ” Pá g i n a 8

2 Sábado 21 de fe b re rode 2 015H OY A RE Í TO

Estamos en un minúsculo planeta, saté-lite de un Sol de los suburbios, astro pigmeoperdido entre miles de millones de estrellasde la Vía Láctea, a su vez galaxia periféricaen un cosmos en expansión, formados porpartículas, átomos, moléculas del mundo fí-sico. Y no solamente somos marginales sinoque estamos casi perdidos en el cosmos, so-mos casi extranjeros, justamente a causa denuestro pensamiento y nuestra concienciaque permiten consideremos esto.

Así como la vida terrestre es extremada-mente marginal en el cosmos, también so-mos marginales en la vida. El hombre apa-reció de una manera marginal. Somos losúnicos (aparentemente) que entre los seresvivos de la tierra poseemos un aparato neu-rocerebral hipercomplejo, los únicos queposeemos un lenguaje doblemente articu-lado que permite comunicarnos de indivi-duo a individuo, los únicos que dispone-mos conciencia. (Edgar Morín, La Cabezabien puesta)

Debemos, como bien afirmaMorín en este interesantísi-mo libro al que le hemos de-dicado varios Encuentros,abrirnos al cosmos e iniciar laaventura desco-

nocida hacia las profundidadesde la condición humana mis-ma. Debemos ampliar las mi-radas, porque abrirnos hacia lavida es también una aperturahacia la exploración de nues-tras propias vidas, sentirnosagentes y objetos de la búsque-da. Es sentirnos partes de pa-labras tan simples como pro-fundas: ser viejo, o joven, hom-bre o mujer, ser padres o no ser-los, nacer y morir. “La antropo-logía que envía la vida a la vidaprivada es una antropologíaprivada de vida”. (P.38) Y esto esasí porque en el simple YO, lle-vamos al mismo tiempo, elmundo físico, químico, nuestra conciencia,nuestros pensamientos y nuestra propia cul-tura, porque cada uno es un todo, que a suvez forma parte de un TODO superior. Asípues, de esta manera podemos situar la do-ble condición humana natural y metanatu-ral. Conocernos supone que podamos avan-zar, y al caminar y realizar nuevos conoci-mientos, nuevos descubri-mientos, seamos capaces dedesaprender para reaprender,de arraigarnos para desarrai-garnos al mismo tiempo:

En el centro de la aventuracósmica, en la punta del desa-rrollo prodigioso de una ramasingular de la auto-organiza-ción viva, seguimos, a nuestromodo, la aventura de la orga-nización. Esta epopeya cósmi-ca de la organización, sin cesarsujeta a las fuerzas de la desor-ganización y de la dispersión,es también la epopeya de la co-nexión, que impidió que el cos-mos se dispersara o desapare-ciera en el momento de nacer. Nosotros, se-res vivos y, por consiguiente, humanos hijosde las aguas, de la Tierra y del Sol, somos unabrizna de la diáspora cósmica, algunas mi-gajas de la existencia solar, un brote peque-ño de la existencia terrestre.

Estamos, al mismo tiempo, dentro y fuerade la naturaleza. Somos seres al mismo tiem-po cósmicos, físicos, biológicos, culturales,cerebrales, espirituales. Somos hijos del cos-mos, pero a causa de nuestra propia huma-nidad, de nuestra cultura, de nuestro espí-ritu, de nuestra conciencia, somos extran-jeros en este cosmos del que provenimos yque sigue siendo para nosotros secretamen-te íntimo. (P. 40)

Partiendo de esta nueva concepción, Mo-rín propone la urgente necesidad de una nue-va cultura, no solo en el plano científico, sinoen todos los ámbitos; de tal manera que po-damos integrar y distinguir el destino huma-

no dentro del universo; pues desde siempre,desde la prehistoria misma se ha planteado elproblema de la condición humana. Urge unarespuesta distinta a esta eterna pregunta quese ha formulado la humanidad.

La forma más efectiva de crear esa nuevacultura, plantea el autor, es que desde la edu-cación se contribuya al desarrollo de unaconciencia humanística y ética, en la cual elnudo gordiano es la conciencia de que per-tenecemos a la especie humana, que secompleta con la visión de que la Tierra espara la vida, y la vida es simplemente para lahumanidad.

La Tierra, el planeta que nos pertenece, ynos acoge, a pesar de que lo golpeamos ydestruimos permanentemente, debe ser vis-ta no solo como un espacio físico, sino comouna totalidad que engloba todo: lo físico, lobiológico y lo antropológico, porque la vida“es una emergencia de la Tierra y el hombreuna emergencia de la historia de la vida te-r re s t re” (P. 42), por esta razón la relación de lahumanidad con su entorno, no puede versede forma reductora, porque los seres huma-nos somos entidades planetarias y biosfé-ricas. “El ser humano, al mismo tiempo na-tural y sobrenatural, tiene su fuente en la na-turaleza viviente y física, pero emerge y sedistingue de ella por medio de la cultura, el

pensamiento, la concien-cia. Todo esto nos enfren-ta al carácter doble y com-plejo de lo humano: la hu-manidad no se reduce deninguna manera a la ani-malidad pero sin anima-lidad no hay humanidad”.( P. 4 2 )

Así pues, en la perspec-tiva de Morín, el ser huma-no es totalmente biológi-co, pero también total-mente cultural, y ambosestán entrelazados. Accio-nes como comer, hablarque son biológicas, tienenen sí elementos culturales;pues cada sociedad te

aporta o te dice cómo hacerlo, cuáles son per-mitidas en público y cuáles no. Pero tener lacondición de humanos es más amplio que lonetamente físico o lo netamente cultural. So-mos seres singulares, tanto así, que nuestrasexistencias también se ven envueltas en elmister io.

Una nueva cultura científica implica, ne-cesariamente, una visiónhumanista de la ciencia.En la actualidad, afirmaMorín, las ciencias huma-nas hacen muy poco porrevalorizarse aportar unavisión distinta. Ellas tam-bién se han quedado re-zagadas. Por esta razón,Morín plantea una revo-lución de estas ciencias.La sicología, por ejemplo,debería ser orientada aldestino universal y subje-tivo del ser humano a finde demostrarnos que:

Homo sapiens es tam-bién indisolublemente,

Homo demens; que Homo faber es al mismotiempo Homo Ludens; que Homo economi-cus es al mismo tiempo Homo mitologicus;que Homo prosaicus es también Homo pa-oeticus. (P. 44)

La sociología, sigue diciendo el francés,debería orientarse a nuestro destino social; laeconomía a nuestro destino económico, y lahistoria al conocimiento de la condición hu-mana desde la perspectiva del tiempo de-terminado y aleatorio de la humanidad, puesla historia está sujeta a los accidentes y per-turbaciones, tomando en cuenta que noexisten leyes históricas, sino una lógica dia-lógica y caótica, aleatoria, y sobre todo in-cierta, entre fuerzas desordenadas y en unjuego a menudo alternado y rotatorio de loeconómico, sociológico, mitológico y políti-co. En fin, todas las ciencias, las humanas ylas naturales deben revisarse para convergeren una única mirada: la condición humana.

De vuelta conEDGAR MORÍNLa cabeza bien puesta y la condición humana.Dedicado a mi hermana-amiga mexicana, Patricia Gascón Muro

‘‘ En la perspectivade Morín, el ser

humano es totalmentebiológico, pero tambiéntotalmente cultural, yambos estánentrelazados. Accionescomo comer, hablar queson biológicas, tienenen sí elementosculturale s...”

‘‘ La sociología,sigue diciendo el

francés, debería orientarsea nuestro destino social;la economía a nuestrodestino económico, y lahistoria al conocimientode la condición humanadesde la perspectiva deltiempo determinado yaleatorio de lahumanidad...”

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Familia GómezGrateró de La Vega

Por Milcíades H. Núñez Núñez(1 de 4)

S obre los Gómez de La Vega mu-chos creen que descienden deuno de los hermanos Gómez Gra-teró que se estableció allí después

de la independencia o que hay familiasindependientes que descienden de dis-tintos troncos.

Lo cierto es que los Gómez de La Vegadescienden de cuatro hermanos GómezGrateró, tres de los cuales, José Rafael,Manuel Joaquín y Nicolás de Jesús Joa-quín Gómez Grateró, se establecieron yvivieron en La Vega. El cuarto hermano,Juan Bautista Gómez Grateró, nunca re-sidió allí, pero parte de su descendencia sílo hizo.

Estos Gómez Grateró formaban partede los doce hijos procreados en el ma-trimonio de don Joaquín Gómez Márquezy doña Juana Carlota Grateró García. Erannietos del capitán Francisco Gómez, na-tural de Portugal, y de Dominga Márquez.En línea materna, por los Grateró, erannietos del francés Francisco Grateró y deMaría Sánchez-Lazareno.

Entre los otros hijos de esta pareja es-tán Filomena Gómez Grateró de Cova, fe-brerista y duartista, quien trajo al país laflor filoria o gardenia jasminoide, la que seconvirtió en un símbolo de Los Trinita-rios, y Fernando Joaquín Gómez Grateró,quien casó con María Guadalupe AlfauBustamante, hermana del trinitario y lue-go anexionista Felipe Alfau Bustamante.Un hijo de este, Manuel Emilio Gómez Al-fau, también vivió en La Vega y para 1868era Comandante de Armas.

Los hermanos Gómez Grateró se asen-taron en La Vega muy probablemente in-fluidos por las redes familiares. En efecto,ya en 1818 residía allí su tío Antonio Ru-fino Grateró García, hermano de su ma-dre Juana Carlota Grateró García.

El primero del que tenemos noticiasfue H1 José Rafael Gómez Grateró (don

Pepe Gómez), médico, militar y político.Rufino Martínez, en su Diccionario His-tórico-Biográfico, afirma que se estable-ció en La Vega luego de la Independencia,pero hemos encontrado registros en losque figuraba allí antes de la misma. Fueteniente coronel, regidor y Oficial de Es-tado Civil. Es mencionado por don Fede-rico García Godoy en su “Ru f i n i t o” comouno de los “D o n e s” febreristas y prota-gonista de hechos en apoyo a la Indepen-dencia e ideas de los trinitarios.

José Rafael Gómez Grateró casó en LaVega con su prima hermana Juana del Ro-sario Grateró Suriel, hija de su tío maternoAntonio Rufino Grateró y María Suriel.Hijos de este matrimonio fueron:

N1.- Lorenzo Rosario Gómez Grateró(o Gratereaux), miembro fundador teso-rero de la primera directiva de la sociedadLa Progresista en 1878. Dejó descenden-cia con Mónica Núñez, Juana Núñez, yLuisa Batista Grullón, esta última hija deEncarnación Batista y Estebanía Grullón,con quien casó en La Vega el 21 de julio de1915. Ejerció como notario desde 1891hasta su muerte en 1923. Su hijo PorfirioAntonio Gómez Batista (1909-1980) fuepresidente de la sociedad La Progresista ydiputado representando a La Vega. De éldescienden los Gómez Núñez, Ureña Gó-mez, Gómez Jiménez, Gell Gómez, Gó-mez Rodríguez y Herrera Gómez.

Instituto Dominicano de Genealogía

Calle Igualdad La Vega.

A RE Í TO 3Sábado 21 de fe b re rode 2 015 H OY

Siete cielos abiertosPARA EL SEPELIO DE LA ANACONDA

L argo de mi silencio!... Que no se acer-que nadie. Estoy litigando con la os-curidad. Yo soy un conspirador este-lar. Todas las trincheras me quedan

pequeñas: estoy sitiando a la eternidad. Miprovisión de furias da para otra vida. Todosmis colosos están en pie. Día a día me ade-lanto a la sombra del Transeúnte Sagrado. Yosoy de la estirpe de los renegados y los dei-cidas, un heresiarca enloquecido a pruebade cualquier desprecio. Tengo que aborrecerel colapso de los designios. Tengo que de-pravar mis dones. Tengo que hostigar Seño-ríos. Tengo que acosar auras. Tengo que ta-char en cruz el universo. Tengo que destruirpara crear y qué. Me fascina profanar. Mefortalece la venganza. Me regocija lo obsce-no. Solo alcanzo el éxtasis maldiciendo lospalacios de la crápula insigne. Hay honor enmi ira. Vivos o muertos tomaremos por asal-to el nuevo milenio. Cada exterminio redimemi soledad. Me excitan las correntías de lasangre. El mundo o yo, ebrio con mis sierpesy delirios. Jamás siento vergüenza de mis in-cendios. Que no quede piedra sobre piedra.Después vendrá el amor de rodillas en la vic-toria. Que nadie pretenda cruzar a solas mistatuajes. Vengo de vuelta de las demolicio-nes más puras.

Tengo que seguir bramando en la vorá-gine y el festín. Nadie me podrá imponer susverbos de guiñapos errantes. Nada podrá su-perar la épica de mis reveses. Si pudiera em-balsamar los cielos. Si todo muriera con uno.Pero nunca acaba nada. Esa es la desgracia.Ahí está la brasa de la memoria para recor-dártelo, los huéspedes del limo y la púrpurarex, sus postillones fuera de ruta, la grisallade cada edad abatiéndote, levantando anteti la pátina del fin del mundo, desafiando tusofrendas, intimidando tus bestiarios, tu pro-pia vida, la única gema en el tumulto. Todoestá perdido en manantiales y centellas.Cualquier destino es un injerto más en lapodredumbre. Nos aguarda descubrir unacivilización atroz en los primeros antros delparaíso. La Evolución solo ha sido una lápidafértil de rémoras y guadañas en flor.

Aquí vengo a pastar mi euforia en la gransequía de la fe. Hay que rugir antes que dia-logar. Yo soy la única presa alucinada en micacería de espectros. Nada ha cambiado: eldiscurso del odio no cede sus escaños, nodespilfarra su mala conciencia sin antes ce-ñirse sus investiduras. Esta Centuria nos haconvencido de que el genocidio conllevahondas, misiones, virtudes compensatorias,una higiene periódica para barrer la piltrafa

humana de tugurios y barricadas. Los pue-blos nacieron para el sacrificio. Hay queajusticiar multitudes en nombre del maña-na. De por sí la posteridad tiene sus canallasfavoritos. La historia es una ceremonia defantasmas. Será tarea vana levantar un censode sicarios. Al final a nadie le importará quesolo hayan hojas en blanco.

El mundo no lo han transformado loshombres felices -y nadie lo es colgado en unacruz-, pero sí han removido cimientos la vie-ja laya de sediciosos, de inconformes y re-beldes, los alucinados que empuñan la es-pátula vómica contra el orden y la normainstituidos, los videntes del terror, los per-seguidos y los vituperados, los que patean alos “perros guardianes” de su época, a losmoralistas de un solo brazo, porque dos milaños después pretenden legitimar una “con -ciencia colectiva” degradada por el optimis-mo incondicional. Los artificios del diálogo yla retórica de la conciliación. Que nadie nosgobierne en nombre de nadie. Esa es la únicaliberación real y posible y por la que ningunautopía ha podido sobrevivir. El pueblo es unanimal acorralado que de tiempo en tiempolo sueltan y se cree libre en su misma pocilgaelectoral. Ha llegado la hora de lavar los pa-tíbulos para los tutores de la democracia y sugangrena dirigencial.

Nosotros, los pesimistas, siempre esta-mos a vuelta de correo con los cerdos. A to-dos los que propagan las verdades polvo-rientas que hemos heredado les adviertoque cada día sigo más descreído y altanero.Sólo los que capitulan llevan en sus quinasprofundas los desechos de sus ideales muer-tos. Alto a la moral autoritaria. Los hombresde “buena voluntad” son los que han des-truido el mundo. Los que han sido jauría dequimeras. Esos “grandes seres humanos”que viven a sueldo de sus íconos, de la pie-dad y la misericordia, y algunos que pulenliderazgos con la carnada de su mansedum-bre en el banquete del Cristo hecho pedazos.Testaferros de la Decencia y las Buenas Cos-tumbres. Invoco sospecha legítima a todoese catálogo de adefesios excelsos.

Que no me contaminen los castos ni losabstemios, los probos ni los conversos. Yosoy un tránsfuga del Bien y del Mal. No haynada fiable después del horizonte y menos sies oficial y mucho menos si es sagrado. Hayque deshabitar la esperanza. Todavía la po-breza camina un paso por delante del amor.Nos gobernarán hordas transexuales. Ven-drán a jubilar a los inmortales y a recusar las“vidas ejemplares”, a los respetables por sus

insignias y atavíos, a los honorables medio-cres que siempre buscan prestigio y primeraplana en la agenda política más mugrientade la Nación. Son ya muertos de medio tiem-po, unos son lapa de solios y otros son pre-bendados, que esconden la ponzoña de supaz interior tras la silla gestatoria, esos queconvierten en fárrago y glosa estéril las Es-crituras. Basta ya de estos notarios de reden-tores, de su halitosis espiritual, de esa pa-santía de místicos y dechados que guardanen la cripta de sus virtudes más abomina-ciones que renunciamientos.

Antes prefiero vivir desquiciado en mi Hé-bridas. Somos demasiados para venerar unplaneta senil y seguir reproduciéndonos conun nuevo prójimo de la peste. No podemosirnos de este mundo sin hacer ruido, sin de-jar un testimonio escandaloso, sin licitar otrahistoria, sin pedir franquicia para más diosesde hecatombes. Paso al lujo de mis cóndores.Igual dará delinquir entre cayenas que darleun voto de confianza a las nuevas masacres.Apenas somos fugitivos de las insanias delser. El que no va a la deriva está muerto fren-te a sus diplomas, junto a sus libros, con suscredenciales al día y en orden sus abaloriosde buen ciudadano. En la apoteosis de midesarraigo arremeto con los contingentesdel vándalo y los estigmas del paria. Nos unemás de una demencia, los convites del terror,el insomnio feroz y el zumo malvado de lastribulaciones. Una insospechada decrepitudredobla mi insurgencia irredenta y blasfema.La rabia me levanta y me crezco en la luz dela tragedia. Voy abriendo con los puños misexequias. No habrá mortaja suficiente paracubrir la beldad de mis demonios.

Ahora solo vivo encanallado en el seno dela hechicera. Me he derramado tantas vecesen su inocencia. En cada aventura me deja ellegado de sus uñas. He sabido crecer con susvenenos, olfatear la oscuridad de su cuerpo ylevantarme invicto al pie de cada enigmacon la promesa de una nueva perversión. Ex-traviado quedará en sus laberintos quien va-ya a emboscarla rastreando alguna ternura.Por encima de todo aprendí que la hembranecesita celar para rendir sus entrañas. Y quenada se puede contra una sabiduría de po-sesas. Ya solo me interesa la garra de misvisiones, el rapto de la carne ida, el estrépitode la copa de oro y el as de la muerte des-lizado bajo la losa del sol poniente.

(Legajos del Tenebrario: compendio de ensayos, afo-rismos, artículos y crónicas y otras escrituras del di-senso, Libro in crescendo, de Pedro Peix. -1972-2015-).

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6 Sábado 21 de fe b re rode 2 015H OY A RE Í TO

En algún momento de 1973se creyó que Caamañoestaba en la ciudad

E l presidente Joaquín Balaguer estuvosometido a un bombardeo de infor-maciones en torno al desembarco deCaamaño desde que era quizá un ru-

mor sin confirmar en los primeros días defebrero, hasta enero de 1974 cuando el con-tralmirante Ramón Emilio Jiménez hijo, se-cretario de las Fuerzas Armadas, le envió unreporte sobre el destino que se dio a las pro-piedades ocupadas a los guerrilleros.

El general de brigada Braulio Álvarez Sán-chez y el comodoro Francisco AntonioAmiama Castillo, subsecretarios de las Fuer-zas Armadas, le habían enviado la relación aJiménez el 1 de diciembre de 1973.

Hasta ahora solo se había hecho referen-cias a los memorándums del jefe de la PolicíaNacional, general José Ernesto Cruz Brea, porla exagerada cantidad que remitía a diario almandatario, a veces sobre situaciones apa-rentemente insignificantes. Pero Jiménez hijoy el general Enrique Pérez y Pérez emitierontambién considerable número de informes.

Hechos de gran impacto, sin embargo, nofiguran en estos expedientes. Quizá se lostransmitieron personalmente a Balaguer o lospasaron en clave por radiofonía. La muerte deCaamaño, por ejemplo, solo se ha encontradoen los recortes de prensa que embajadoresdominicanos acreditados en otros países en-viaron a Balaguer. Hasta ahora no ha apare-cido un parte oficial aunque es tan volumi-noso ese fondo que probablemente se loca-lice en el avance de las consultas.

Estos documentos, empero, son una granfuente para el estudio de ese acontecimientoen el que los combatientes no fueron los úni-cos protagonistas ni los altos mandos po-liciales y militares sino también la mayoríade los funcionarios, muy celosos de “la paz,del anticomunismo, del orden impuesto porSu Excelencia”.

También una representativa parte del em-presariado que ofreció su apoyo “a la obra deGobier no” a través de tal cúmulo de mensajesque Balaguer les tuvo que agradecer por me-dio de varios “cablegramas múltiples”.

Militares de inteligencia fueron actores deprimer orden, como José Indalecio PeralBrea y otros de menor rango.

El general Juan N. Folch Pérez aparece eneste acopio dando pormenores de un acci-dente de helicóptero en el que iban, entreotros, Pérez y Pérez y el coronel Julio CésarLópez Pérez, quienes salvaron sus vidas mi-lagrosamente al intentar aterrizar en la sec-ción La Nuez, de San José de Ocoa. Se ofre-cen todas las especificaciones del caso perono dice en qué diligencia andaban ya el 22 defebrero. Folch Pérez es solo el remitente de lacarta a Jiménez hijo, quien luego la mandó aBalaguer. El autor del minucioso informe esel mayor piloto Román Ramiro CaamañoSánchez, a quien quizá le encomendaron ex-plicar el suceso por la coincidencia de suapellido pues él no andaba. El experto pilotoera el teniente Luis Alberto Pagán Barinas.De Caamaño apenas se escribe debajo delnombre: “En c a rg a d o”.

Los viajeros del “Astazou 307” re a l i z a b a nuna “misión ejecutiva”. Los fuertes vientosen turbulencias provocaron que la aeronavese estrellara, pero Pagán “apeló a la máxima

potencia del aparato y pudo llegar al planode arriba de la carretera, debido a esta de-manda en la turbina, esta se quemó, pero éllogró salvar la vida de los pasajeros y salvar elhelicóptero de daños mayores… ”, afirmaCaamaño Sánchez.

El 9 de febrero Jiménez hijo reportó a Ba-laguer otro percance aéreo: una avionetaque cayó en un cañaveral del ingenio Con-suelo, pilotada por José Camilo García querealizaba trabajos de fumigación. La avione-ta se destruyó pero Camilo salió ileso.

Aunque desvinculado del acontecimien-to y físicamente oculto, Juan Bosch fue elnombre más pronunciado y escrito, quizásuperó a Caamaño que era el personajeprincipal de este episodio. Con su casa vio-lentada y ocupada por la Policía, fue bus-cado hasta en Bonao en la allanada residen-

cia de su pariente Genoveva Gaviño de Pérezy en todas en las que lo suponían oculto. Fueinjuriado, difamado y burlado en la prensainternacional por embajadores que entrega-ban acomodados comunicados de prensa.Cirilo José Castellanos, embajador en Brasil,entregó uno a periódicos de Rio de Janeiro.

“Es falso que el Gobierno persiga al pro-fesor Bosch. Este se escondió cuando tuvoinformes del desembarco. No es cierto que élsea un líder pacifista… él fue instigador de larevolución de abril de 1965 y después de de-satada la ola de violencia no tuvo el valor deregresar a su patria y defender su causa. Poreso el pueblo le ha perdido la fe. Por eso noalteraron el orden”, escribió Castellanos.

Pero los más golpeados fueron estudian-tes y militantes de la oposición detenidossorpresivamente en sus hogares o en ajenosy despojados de sus libros y armas, aunqueestas fueran de colección. Apresaron perso-nas hasta por ingerir Barbancourt y clerén“de procedencia haitiana”. De todo esto erainformado Balaguer no solo por Cruz Breasino por el secretario de las Fuerzas Arma-das, el jefe del Ejército, el G-2.

“Co n fide n c ia l ”. Si es cierto que el Gobiernoy sus servicios de seguridad tenían conoci-miento del desembarco ¿por qué el 13 defebrero, a tres días de la muerte de Caamaño,se confirió tal importancia a una comuni-cación de inteligencia en la que se informa-ba que el líder de abril estaba aquí, pero noen San José de Ocoa? José Indalecio PeralBrea, del G-2, se la envió a Jiménez hijo como“Co n f i d e n c i a l” y este a Pérez y Pérez. J. Ri-cardo Ricourt la dio por recibida o sea quetambién la leyó el Presidente.

“Según nos comunica el S-2 Oficial de In-teligencia del Tercer Batallón “Ramón MatíasMe l l a”, E.N., con asiento en San Cristóbal…ayer viajaron a dicha ciudad tres elementosde la UAD en un vehículo propiedad de unfamiliar del presidente del Senado, quienesse desmontaron en la calle Santomé esquinaFrancisco J. Peynado, de allí, y hablaron conun señor de nombre Moncito Rivera paraque este le sirviera de portavoz con el pre-sidente del Partido Popular Dominicano ins-talado en la referida ciudad para que le dijeraque ciertamente el excoronel Francisco Al-berto Caamaño Deñó se encuentra en el paíspero que no está en las montañas sino en unpueblo, el cual le informarán próximamente,y que el propósito del grupo insurgente esllevar a cabo secuestros de personas impor-tantes las cuales eliminarán físicamente, a loque el señor Rivera se negó diciéndole queaquella ciudad es muy pequeña para llevar acabo estos actos; que según el informante,varios jóvenes de allí están en la loma de-nominada El Cacao, jurisdicción de San Cris-tóbal, la cual colinda con San José de Ocoa”.Que se dispuso tomar medidas y se envióuna patrulla compuesta por un oficial y va-rios alistados a la referida loma.

El documento parece un invento para sa-crificar a instituciones y personas. Pero ¿có-mo es posible que le dieran crédito los altosmandos militares hasta el colmo de hacerlollegar a su comandante en jefe? A menos quetodos fueran cómplices de la falsedad.

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NAPOLEÓN MARTE

A RE Í TO 7Sábado 21 de fe b re rode 2 015 H OY

Julia de Burgos,Juan Isidro y Juan Bosch:

A finales de 1939 Juan Isidro sale dePR rumbo a NY. Julia se reunirá conél en enero de 1940. Por carenciaseconómicas en un principio viven

separados en casas de amigos. Es solo des-pués, y por poco tiempo, que comparten unmodesto espacio privado.Al no poder ejercersu profesión de médico en los EE.UU.JuanIsidro se gana la vida como conferencista yescribiendo para un periódico antifascistaen NY. Juliarecibe algún dinero porsus re-citales y realiza trabajos ocasionales, talescomo entrevistadora para el Censo de losEE.UU. Fue una vida precaria para ambos.

Desde que conoce a Juan Isidro, Julia seinvolucra en las luchas del exilio antitruji-llista. Por ser su amadouna figuraprominen-tedel exilioéste tiene quedesplazarse conti-nuamente de un lugar. Hay algunos pasajesde los segmentos de cartas citadaspor IvetteJiménez de Báez en donde Julia se queja consu hermana del movimiento de un lugar aotro que no le permiten estabilizarse. Peroen el fondo de esos desplazamientos está elJuan Isidro militante que en cualquier mo-mento podía ser objeto de un ataque por losagentes que tenía Trujillo en el extranjero,que de hecho asesinaron a algunos exiliadosentre ellos al líder símbolo del sindicalismodominicano Mauricio Báez.

Se quisieron en PR y NY, pero es en Cubadonde Julia y Juan Isidro viven su momentodorado. Sería otra mezquindad rebajar eseamor. Luego de su rompimiento, por razo-nes u motivos que nunca han sido expli-citados, pero sí insinuados por Juan Isidro,ambos se casan en 1944:él con Amada Ma-ría Sabatery ella con Armando Marín. Me-ses después de la ruptura, en carta enviadaa Consuelo el 14 de noviembre de 1942, Ju-lia le cuenta a su hermana que ya habíasuperado el amor que había sentido porJuan Isidro: “… ya aquel pasado amor estácompletamente liquidado en mi alma,pues ya no me es indispensable. Es más tedaré la sorpresa de que está aquí desde ha-ce un mes, y solo nos hemos visto dos veces,en plena objetividad de cariño”. El ponerpunto a final a su relación con Juan Isidrono alejaron, sin embargo, a Julia de las cau-sas del exilio dominicano. Una muestra deelloes su conocido poema de 1944 “Hi m n ode sangre a Trujillo.

En torno a que la discordia entre Juan Isi-dro y Juan Boschtuvo como centro el amorpor Juliala versión fue desmentidapor am-bos exiliados en 1982 en dosreveladoras en-trevistas que le hizo Chiqui Vicioso a los dosescritores. Pero como ciertas calumnias noson tan fáciles de erradicar, todavía en 1999,la periodista Ana Mitila Lora en su artículo“La guerra de los juanes”, revivía las viejasdudas que parecían superadas.En 2011, Ful-gencio Espinal, historiador del PRD, seguíainsistiendo en esta trama.

Hay, sin embargo, varias cartas enviadaspor Juan Isidro a Consuelo, tras su separa-ción que evidencian que Julia no pudo habersido el origen de aquella enemistad. Así leescribe en marzo de 1942: “Te supongo yaenterada por Julia de la dolorosísima deci-sión que me he visto forzado a tomar conrelación a nuestro amor y nuestra relación.No sé si ella te habrá expuesto los motivosaunque presumo que no. En verdad se mehace del todo imposible expresártelos poresta vía, cuando te vea… o cuando Juan Bos-ch, quien va para allá, lo haga por mí, podrásenterar te”.En otra carta del 23 de junio de1942 le dice nuevamente a Consuelo: “E llano podrá recibir… el dinero que tú le man-das, lo que no debe preocuparte pues or-dené a Juan Bosch, que está en N.Y. de en-tregarle lo que ella necesitara…” El 25 de ju-niole dice: “De New York no he tenido no-ticias… Ni siquiera de Juan Bosch…. Espero,no obstante, que de momento me escriba.Su presencia en N.Y. será sumamente útil atu hermana, pues él hará con toda seguridadun esfuerzo importante por orientarla… Deno obtener un triunfo cabal en el empeño, esdecir, si ella, a pesar de su promesa y de la

influencia de Juan, persiste en actitudes in-convenientes o desviadas, sigo creyendo quelo mejor sería que la estuvieras a tu lado”.

De estas cartas se colige que de haber sur-gido algún conflicto sentimental mientrascompartían la misma vivienda en La Haba-na, Juan Bosch con labelga Lili y su hija yJuan Isidro con Julia; para 1942 cuando leescribe a Consuelo, ya amboshabrían roto suamistad por deslealtad y se habrían enemis-tados. Lasconfrontaciones entre Bosch yJuan Isidro se originan después de esta fechapor razones políticas y luchas de liderato.

Retomando el amor que sintió por JuanIsidro, hay varias cartas que entre 1943 y1945 le envía Julia a doña Celes la madre desu esposo Armando Marín que apoyan loque decimos sobre esa superación. Vea-mos:“…Quien hubiese dicho que iba a seren Vieques,… el nacimiento de quien condesmesurada voluntad y un corazón gigan-te iba a lograr en mí un amor tan robusto,tan bello y santo... Nos amamos, sencilla ybellamente… Ese logro infinito de dos al-mas que de verdad se aman quiero que seausted la primera en sentirlo…” (Revista APropósito, marzo de 1996).Desde el 14 denoviembre de 1942 hasta mayo de 1947 encasi todas las cartas que le envía Julia a Con-suelo hace mención del amor que está vi-viendo en plenitud con Armando Marín.

Por lo dicho es evidente que Julia sí superóla apasionado relación que la unió a JuanIsidro. Entonces no es convincente, ni justopara ambos enamorados y desterrados--aunque por razones distintas--, que portantas décadas un sector de la crítica insis-tieraen culpar únicamente a Juan Isidro demuchas de las desventuras de Julia posteriora su separación. Cúlpese a Juan Isidro de loque sea --si es hay que adjudicar culpas sim-plistas-- durante el tiempo que vivió con Ju-lia, pero no le adjudiquemos culpas que nole corresponden.Además de lo oral que a ve-ces tiene más peso que la escritura,muchasde esasdistorsiones las levantó Ivette Jimé-nez de Báez en su libro “Julia de Burgos, viday obra” (1966) y siguen siendo repetidas, en-tre otros y otras, por Mayra Santos Febles yJuan Manuel Torres Santiago en sus libros-publicados en 1914 en el contexto del cen-tenario de la poeta.

Hablar de Juan Isidro, con sus defectos y

virtudes, alcances y limitaciones obliga a sa-ber que fue autor de más de 20 libros his-tóricos, sociológicos, políticos, críticos y depensamiento. Estamos ademasante quienparticipó en 1947 y 1959 en la organizaciónde dos invasiones armadas para intentar de-rrocar a Trujillo. Precisa saber también quecuando Juan Isidro conoce a Julia ya no era elhombre económicamente estable que habíasido en la República Dominicana sino soloun exiliado con limitadísimas condicioneseconómicas. Aún así, y solo como vendedorde medicina en Cuba, tuvo que hacerse car-go del apoyoeconómico de sus padres en elexilio, que posiblemente vieron en Julia unacompetencia para ellos, ya que sobre éltam-bien recaíala responsabilidad mayordel sos-tén de la pareja mienstras viven en Cuba,amén de tambien asistir modestamente enmuchos momentos a parte su familia enPuerto Rico.Todo esto mienstras tambienhacía vida intelectual y política directa paraderrocar a la dictadura de Trujillo con todoslos riesgos y peligros que eso implicaba.

Estas cartas, escritas muchas veces desdeun “n o s o t ro s” tienen muchos rostros. Julia yJuan Isidro, además de escritores de valíaenlas modalidades literarias que asumieron fue-ron demasiada pasión, energía, compromisopolítico e histórico, libertady paradoja huma-na para reducirlos al papel de víctima y vic-timario. Ambos fueron hijos de un cierto ro-manticismo social, político y sentimental,aunque en gradaciones distintas. No obstantecarecer de estas cartas digitalizadas, de los-manuscritos originales casi ilegibles --queMerced incluye como apéndice en su tesis--hemos podido olfatear a una Julia sufrida, an-gustiada existencialmente y en soledadmuypreocupada por su obra y familia en PuertoRico, pero también descuidada por una partede sus parientes. Me sospecho, sin excluir losentimental, que la imposibilidad de que Juliay Juan Isidro formaran pareja duradera tieneen el fondo una raíz política.

(Nota: En una terceraentrega me ocuparédel libro de las cartas de Julia a su hermanaConsuelo,que después de mucha esperapor fin acaba de llegar a las librerías delpaís. De seguro que tendremos otras mi-radas y perspectivas de lo que se ha dichohasta ahora)

EUG

ENIO

GAR

CÍA

CUEV

ASL i

t e ra

t u ra

amor, amistad y enemistad(Ultima parte)

8 Sábado 21 de fe b re rode 2 015H OY A RE Í TO

BULLUMBIARTE LA VIDA

S i una tarde sale Bullumbiarte la vida,invitas a unos amigos y amigas, elmediodía se hace ligero y frugal, bus-cas uvas romanas, adornas tu mesa

con un fuerte espíritu de alegría y cariño.Entre lo gris y lo no gris, el sol era un niño

dorado y juguetón, que apenas quería en-sayar en la piel del Caribe sus claves cálidas,un nimbus enamorado remontaba, justo enel umbral de tu casa.

La Ciudad Colonial con sus juegos de ca-lles y luces a pleno mediodía, anuncia que es14 de febrero, estalla el corazón que mejorlate sin el disfraz de fuera, aunque la fraseamericana hecha canción de jazz, es impo-sible olvidarla: My Funny Valentine, or BeMy Valentine.

Entonces, cruzando la Ciudad Colonial co-mo si toda fuera suya, un caballero de gafasgigantes y mirada altiva, bastón en ristre dejabasu estela al caminar, en su espalda así enjuta,llevaba encima los años y la bella conjura de untalento prodigioso, apenas conocido en su pro-pio país, República Dominicana: había llegadoRafael -Bullumba- Landestoy. Que no nació enBaní, sino en La Romana en 1924 y con guasaadmirable afirmaba tener 90 y medio.

Si una tarde sales a Bullumbiarte, los ami-gos llegan justo en el tiempo convenido, in-vitado de honor, Rafael -Bullumba- Landes-toy, Iván Domínguez, Embajador Cuello Ca-milo y su esposa Natalia Federighi de Cuello,Angelines Gracia, Aisha Syed Castro, violi-nista, el Señor Cuqui Mejía, el otro invitadode honor, Mark Messenger director de la sec-ción de cuerdas del Royal College of Musicde Londres[2], y María del Carmen MéndezRuiz, anfitriona.

La cita era en mi casa, ese 14 de febrero,

había sido planificada desde la Embajada Do-minicana en Londres, donde tiene su asientoel Embajador Federico Cuello Camilo, otroadmirador encendido, como yo, de la obrainmensa de Rafael -Bullumba– L a n d e s t oy.

La casa se llenaba de seres que iban lle-gando a la pequeña sala donde el rostro deJackeline Kennedy Onassis dominaba el am-biente a golpe de visualidad casual y sonreíapara una eternidad indiscutible: eje centro yhechizo visual de la sala.

(Retrato de un afiche de la famosa expo-sición de Warhol, Joseph Beuys de 1997, en elKuns-Forum de Viena, Austria)

De fondo el Vals de Santo Domingo de donRafael -Bullumba- Landestoy, los primerosacordes con brío en las manos de Martin Sö-derberg, el pianista preferido del compositor,que pronto estará en Santo Domingo[3]...

Un bullicio amistoso cubría la sala y la so-noridad excelente del Vals, los envolvía a to-dos y se creaba la atmósfera para la memoriaposter ior.

Fue un mediodía para Bullumbiar recuer-dos y celebrar la vida del maestro advirtien-do él, en su inglés preciso, una alta empatíacon Mark Messenger, cuyo enamoramientocon la República Dominicana ha sido total ydará grandes frutos musicales a este país denuestras grandes penas y alegrías, estas úl-timas son las que debemos prolongar, comolo hicimos ese 14 de febrero, del 2015.

Mark Messenger, a su vez, amenazó conretornar montado por los aires desde Ingla-terra hacia República Dominicana (sin ol-vidar la frase Attack), en su mágico violín,como si fuera una alfombra voladora de losiluminados cuentos árabes.

En fin, si una tarde sales a Bullumbiarte lavida, recuerdas ciertos momentos, el furor yardiente deseo de la música, te devuelve la ilu-sión y la esperanza por la vida de todos los díasen país que apenas tiene nubes, para enga-ñarse en altos y vaporosos espejos de sueños.

Estábamos convencidos de que este paísasciende su valor con Rafael - Bulllumba-Landestoy y su gran obra.

En rostro del Maestro, aquella tarde Bu-llumbeada, se quedó estampada esa alegríay el gran deseo de todo lo que aún añorare a l i z a r.

De espaldas le vimos marcharse, como unCharlot risueño, caminó feliz toda la SaloméUreña en dirección a la calle Hostos, se esfumó,bastón en ristre y con el alma ardorosa (CFE).

CARL

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OVER THE ROYAL STRING, DESDE MARKMESSENGER HASTA LA MUSICA DEL ALMA

‘‘ ...y yo asisto al milagro -séque todo es fiado-, y no

quiero pensar si podremos pagarlo; ycuando sin medida bebemos ycharlamos, y el amigo es dichoso,cree que somos dichosos, y lo somosquizá burlando así la muerte, ¿no esla felicidad lo que trasciende?..Gabriel Celaya, poema “MomentosFe l i ce s”[1]

Rafael-Bullumba-Landestoy en un momento gratodisfruta del encuentro celebrado en su honor y enel de Mark Messenger, el pasado 14 de febrero encasa del autor de este texto.

Rafael-Bullumba-Landestoy y Mark Messenger,director de la sección de cuerdas del Royal MusicCollege de Londres.

El Royal College of Music fue fundado en 1882, abre en 1883 bajo la dirección de George Grove. En este lugar el brillante músico Mark Messenger dirige eldepartamento de (String) de Cuerdas. Messenger fue invitado a República Dominicana por Aisha Syed castro y la Embajada Dominicana en Londres, paraparticipar en los proyectos de sociales de la Señorita Syed Castro.

DAVID ILIFF

FUENTE EXTERNA

De Izquierda a Derecha Carlos Francisco Elias,Angelines Gracia,el embajador Federico CuelloCamilo y su esposa Natalia Federighi de Cuello, elprofesor Iván Domínguez y de espaldas el maestroBullumba Landestoy.

No ta s

[1] Gabriel Celaya digno poeta de la Post Guerra española. Fue amigo de Federico García Lorca. Se le conoce como miembro de la llamada poesía comprometida. Pa coIbáñez, el cantautor otrora exilado en Francia, puso música a varios de sus poemas, y ayudó a difundir su obra.[2] La foto del Colegio Real de Música de Inglaterra, ubicado en Kesinngton, Londres fue tomada por David Iliff.El Royal College of Music fue fundado en 1882, abre en 1883 bajo la dirección de George Grove.En este lugar el brillante músico Mark Messenger, dirige el departamento de (String) de Cuerdas. Messenger fue invitado a República Dominicana por Aisha Syed castro yla Embajada Dominicana en Londres, para participar en los proyectos de sociales de la Señorita Syed Castro.[3] Martin Söderberg, es un pianista, que nació en Suecia y se crió en Las Islas Canarias. Se traslado a New York, donde aún reside, amigo del profesor Iván Domínguez,puente esencial para que este pianista conociera la obra de Rafael -Bullumba- Landestoy.Fruto de ese encuentro es el CD Romántico, grabado en el año 2000 (¿?).Hay la expectativa de que para el mes de Junio del 2015, este pianista rinda homenaje a la obra de Rafael -Bullumba- Landestoy. En más de una ocasión, el maes t roLandestoy ha expresado su agrado y placer por estas interpretaciones de Martin Söderberg.