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Cómo gestionar el

CO2AENOR acaba de conseguir la reacreditación, por parte de la Junta Ejecutiva del Mecanismo de Desarrollo Limpio, como Entidad Operacional Designada (DOE) para la validación y verificación-certificación de proyectos MDL en los 15 alcances sectoriales. Además, ya cumple con las exigencias establecidas para realizar las verificaciones de Huella de Carbono indicadas en el Real Decreto 163/2014, aprobado el pasado mes de marzo.

CAMBIO CLIMÁTICO

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proyectos de reducción de emisio-nes de gases de efecto invernadero que, por ejemplo, permiten equilibrar la cuota asignada de emisiones a em-presas que la superen, al generar cré-ditos de carbono. La diferencia esen-cial entre AC y MDL es que los prime-ros se desarrollan en países incluidos en el Anexo I del Protocolo de Kioto (aquellos con obligación de reducción o limitación de emisiones) y los MDL se emplazan en países sin obligaciones de reducción o limitación de emisio-nes (los conocidos como No Anexo I del Protocolo). Los proyectos MDL tie-nen que demostrar su contribución al desarrollo sostenible del país que los acoge, y facilitar la transferencia y el empleo de tecnologías limpias.

Actualmente, AENOR desarrolla la validación y verificación de 428 pro-yectos en diversos países de Latinoa-mérica, Asia y África, varios de ellos con el Banco Mundial, colaborando con empresas líderes europeas y de todo el mundo, energéticas y de otros sectores.

Pero hay otras actividades asociadas a la lucha contra el cambio climático y la gestión empresarial del carbono, como comercio de derechos de emi-sión, Huella de Carbono o Proyectos Clima; y AENOR también ayuda a las empresas en estos procesos.

Comercio de Derechos de EmisiónAENOR realizó las primeras verifica-ciones de gases de efecto invernadero en 2005 y viene realizando cada año esta actividad a más de un tercio de las instalaciones afectadas. El primer pe-riodo de comercio, que concluyó en el año 2008, sirvió de experiencia para que estas instalaciones, las administra-ciones competentes y los propios veri-ficadores entraran en contacto con la realidad de un esquema complejo en el que todas las partes involucradas tienen parte de responsabilidad. Las instalaciones afectadas deben reportar un dato de emisiones de CO2 por ca-da periodo de notificación; y este dato debe ser sometido a una verificación antes de darse por bueno por parte de la administración y registrar las corres-pondientes toneladas.

Durante el siguiente periodo de co-mercio de emisiones (2008-2012), se incluyó como novedad que las insta-laciones debían reportar sus emisiones

Desde la aprobación del Proto-colo de Kioto en 1997, y muy especialmente desde su entra-

da en vigor en 2005, las empresas, in-dependientemente de su tamaño y lo-calización geográfica, han ido incorpo-rando la variable carbono a su gestión. Términos como derechos de emisión, compensaciones, huella de carbono, cambios tecnológicos, mercados de emisiones o aumento de eficiencia han ido incorporándose al vocabula-rio empresarial y a los conceptos aso-ciados a la reducción de las emisiones de dióxido de carbono y del resto de gases de efecto invernadero.

Entre las actividades relacionadas con el Protocolo de Kioto, la Junta Eje-cutiva del Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL) ha confirmado la rea-creditación de AENOR como Entidad Operacional Designada (DOE) para validación y verificación-certificación de proyectos MDL en los 15 alcan-ces sectoriales. Esta reacreditación es válida para un periodo de cinco años.

AENOR es una de las pocas DOE que cuenta con 15 alcances sectoriales en su acreditación, lo que demuestra su capacidad técnica para prestar ser-vicios a sus clientes en todo el mun-do. Mediante los proyectos MDL y AC (mecanismo de Aplicación Con-junta) las organizaciones desarrollan

José Magro y Luis RoblesGerentes de Medio Ambiente y de Cambio ClimáticoAENOR

Requisitos clave de la Norma ISO 14064-1

Identificación de límites de la organización

Identificación de unidades operacionales

Posibilidad de acciones de reducción “acciones dirigidas”

Informes de emisiones

Cuantificación de emisiones y remociones

• Identificación de fuentes y sumideros• Selección de metodología de cuantificación• Recopilación de datos de actividad• Selección de factores de emisión y remoción• Cálculo

DESARROLLO Y GESTIÓN

DEL INVENTARIO

GESTIÓN DE LA CALIDAD DEL INVENTARIO

anuales de CO2 determinadas de acuerdo con un plan de seguimiento aprobado por el organismo compe-tente. Por lo tanto, el verificador -ade-más de verificar que el dato comuni-cado por la instalación en el informe de emisiones era correcto- debía com-probar que la determinación se hacía siguiendo el plan de seguimiento es-tablecido por la administración para la propia instalación.

Hasta este periodo se habían asig-nado gratuitamente derechos de emi-sión a las instalaciones en España, bá-sicamente sobre la base de solicitu-des presentadas por las instalaciones. Para el periodo 2013-2020, las solici-tudes de derechos tendrán que reali-zarse mediante un proceso de verifi-cación de un informe metodológico y un formulario de datos que, a par-tir de información real de las instala-ciones, calcula los derechos corres-pondientes a cada instalación. En Es-paña, la verificación debe hacerla un verificador acreditado específicamente para esta actividad. AENOR es la pri-mera entidad que ha obtenido la acre-ditación para la realización de la activi-dad de Verificación del Informe Meto-dológico y los datos presentados por las instalaciones según lo establecido en la Decisión 2011/278/UE y el RD 1722/2012, a efectos de la Solicitud de Asignación de Derechos de Emisión para el periodo 2013-2020. Por otra

parte, el seguimiento y notificación de las emisiones en el periodo 2013-2020 debe hacerse siguiendo los requisitos del Reglamento (UE) Nª 600/0212. Las verificaciones de los informes de noti-ficación se llevan ya a cabo conforme al Reglamento (UE) Nº 601/0212. Co-mo resultado de la aplicación de am-bos reglamentos, en este nuevo perio-do de comercio que acaba de empezar se han unificado todos los formularios del proceso en el ámbito europeo (pla-nes de seguimiento, informes de noti-ficación, informes de verificación, etc.), de tal forma que el tratamiento de la in-formación se simplifica muchísimo en todas las partes de proceso.

Mecanismo de Desarrollo LimpioEl MDL constituye el más importante de los éxitos en el ámbito de la inte-gración de la lucha contra el cambio climático en la gestión corporativa. Y es que, desde 2005 se han registra-do 7.472 proyectos y se han certifi-cado 1.440.699 kt CO2. Teniendo en consideración el volumen de proyec-tos registrados y de Reducciones Cer-tificadas de Emisiones (RCE), podrían diferenciarse tres grandes grupos o ti-pologías de proyectos:• Proyectos relacionados con la gene-

ración de energía: bajo este esque-ma se agrupan las inversiones rela-cionadas con la utilización de fuentes

renovables, lo que reduce no só-lo la huella de carbono del kW/h generado en el país, sino el volumen total de GEI emitido a la atmósfera.

• Proyectos relacionados con las tec-nologías de abatimiento: reúne a un amplio conjunto de proyectos cuya característica común es la depen-dencia financiera casi total de los ingresos procedentes del MDL. Y es que, en muchos casos o no apor-tan una ventaja competitiva para el inversor o los retornos económicos sin contemplar la comercialización de los RCE no compensarían la in-versión requerida.

• Proyectos domésticos y eficiencia: es el que posee un impacto mayor y más distribuido, con derivadas mu-cho más amplias. No sólo sirven para la financiación de nuevas em-presas locales y el impulso de los emprendedores, sino que también tienen un papel determinante en la mejora de la calidad de vida de mi-llones de personas a lo largo de to-do el planeta.

Proyectos ClimaPromovidos por el Ministerio de Agri-cultura, Alimentación y Medio Am-biente (MAGRAMA), los Proyectos Clima persiguen promover la reduc-ción de emisiones GEI en los sectores denominados difusos (transporte, resi-dencial, residuos, agricultura, etc.); esto

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es, los que no están regulados por el sistema de comercio de derechos de emisión. Tienen un carácter estricta-mente español, y son un ejemplo pa-ra otros países europeos que buscan potenciar las reducciones internas de emisiones GEI.

Las reducciones producidas por es-tos proyectos, tras ser verificadas por una entidad autorizada por el MA-GRAMA, como es el caso de AENOR, las compra el Gobierno de España y se detraen del Inventario Nacional de Gases Efecto Invernadero. De las dos convocatorias finalizadas realizadas hasta ahora, de los años 2012 y 213, se han seleccionado casi 100 proyec-tos en todas las comunidades autóno-mas españolas.

Huella de CarbonoEn un segundo orden de magnitud hasta el momento, aunque con un po-tencial de gran recorrido, asistimos con expectación a la irrupción de nuevos esquemas en la integración del carbo-no en la gestión corporativa. Es el caso de la gestión de la Huella de Carbono

en sus diferentes alcances: organiza-ción, producto, servicio, etc. El térmi-no Huella de Carbono se puede em-plear para determinar la cantidad de Gases de Efecto Invernadero emitida y absorbida por efecto directo o indi-recto de una organización, producto, evento, proyecto o individuo.Huella de Carbono de Organización Su adecuada gestión, además del con-sabido compromiso ambiental, puede aportar ventajas competitivas a las em-presas en forma de acceso a nuevos mercados, reducción de costes vincu-lados a un ahorro de energía, adap-tación a futuras normativas y respon-sabilidad corporativa, entre otras. Así, las grandes multinacionales han visto como esta gestión se hace imprescin-dible para obtener buenos resultados en los índices de sostenibilidad y repu-tación corporativa.

El pasado 14 de marzo se aprobó el Real Decreto 163/2014, por el que se crea el registro de Huella de Carbono, compensación y proyectos de absor-ción de dióxido de carbono. Mediante este Real Decreto a finales de mayo

AENOR desarrolla la validación y verificación de más de 400 proyectos MDL en diversos países de Latinoamérica, Asia y África, varios de ellos con el Banco Mundial, colaborando con empresas líderes europeas y de todo el mundo, energéticas y de otros sectores

Antonio GarridoResponsable de Calidad y Medio AmbienteAzkar, Member of Dachser Group(España)

Azkar, miembro del grupo internacional Dachser, es un operador de transporte, distribución y logística que ofrece a sus clientes soluciones personalizadas para una gestión más eficiente de su cadena de sumi-nistro. En línea con su estrategia corporativa, es una empresa comprometida con la sociedad y con el medio ambiente, consciente de los impactos ambientales de-rivados de su actividad y que apuesta por el desarrollo sostenible. Teniendo en cuenta estos valores, Azkar ha querido calcular sus Emisiones de Gases de Efecto Invernadero incorporando el control de la emisión del dióxido de carbono a sus objetivos y a su estrategia empresarial. Como parte de la motivación de la com-pañía para realizar el cálculo, Azkar quiere reforzar la transparencia frente a sus clientes e implicarles en el proceso, reportándoles las emisiones derivadas de los envíos que realicen. Para ello, la compañía ha elabo-rado una herramienta que no sólo permite calcular las emisiones totales de la organización, sino que puede aportar datos sobre expediciones individuales.

Azkar ha desarrollado una metodología propia para el cálculo de las emisiones de su organización, basada en las directrices de la Norma UNE EN ISO 14064. Esta norma permite contabilizar las emisiones de centros fijos además de las derivadas del transporte, incluyen-do tanto las emisiones directas como las realizadas por los vehículos de conductores externos a la compañía.

Azkar ha llevado a cabo el cálculo del indicador dos años consecutivos, y los resultados obtenidos en es-te último han permitido cuantificar los esfuerzos de la organización en términos de CO2, mostrando una reducción del 7,64% en la huella de carbono por kilo transportado. Esto ha sido posible gracias a la optimi-zación de las rutas de tránsito terrestre, a la reducción del consumo eléctrico y a la disminución de los kilos transportados en tránsito aéreo.

Con la verificación del cálculo de nuestra huella de carbono se ha reforzado la estrategia de venta en el ámbito comercial e, internamente, ha permitido crear nuevos procesos que dan soporte a nuestras operati-vas de negocio.

Estrategia sostenibleEXPERIENCIAS

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estará disponible un registro con la finalidad de que las organizaciones cal-culen, reduzcan y compensen su Hue-lla de Carbono de forma voluntaria, fa-cilitando el cumplimiento de los com-promisos internacionales asumidos por España en materia de cambio climáti-co. AENOR ya cumple con las exigen-cias establecidas para realizar las verifi-caciones indicadas en dicho texto legal.

La Huella de Carbono de organi-zación se utiliza para determinar las emisiones que son consecuencia de las actividades de la propia organiza-ción. Entre ellas cabe destacar, por ser las más frecuentes, las emisiones pro-cedentes de vehículos propiedad de la organización, de calderas alimentadas por combustibles fósiles, del consumo eléctrico o de los desplazamientos de los empleados.

Como consecuencia del creciente interés de las organizaciones en la ges-tión de esta huella, se han desarrolla-do diversos referenciales para cuantifi-car, reducir, reportar y verificar la Hue-lla de Carbono de una organización. Inicialmente fue el GHG Protocol, una iniciativa conjunta de WRI (World Re-sources Institute) y de WBCSD (World Business Council for Sustainable Deve-lopment), el referencial más utilizado por ser el pionero en este materia.

Sin embargo, a raíz de su publica-ción en el año 2006, la Norma ISO 14064, que consta de tres partes, ha cobrado un especial protagonismo en este campo. La parte 1 está enfocada a organizaciones, la parte 2 a proyec-tos de reducción de emisiones o de aumento de remociones, y la parte 3 es la que determina cómo llevar a ca-bo las verificaciones, ya sean de tipo interno o externo.

De manera adicional, algunos sec-tores de actividad particulares han desarrollado nuevos referenciales con la finalidad de establecer unos criterios más específicos a su reali-dad y al mismo tiempo proporcio-nar una guía para las organizaciones del sector correspondiente. Es el ca-so de Airport Carbon Accreditation, referencial desarrollado por ACI (Air-ports Council International) EUROPE and ACI ASIA-PACIFIC, centrado en la gestión de aeropuertos; el Proto-colo ENCORD, desarrollado por los

miembros de ENCORD (European Network of Construction Companies for Research and Development) orien-tado al sector de la construcción; y el protocolo para la cuantificación de emisiones de gases de efecto in-vernadero en actividades de gestión de residuos, desarrollado por el gru-po de trabajo de Entreprises pour l’Environnement, compuesto por las empresas Seche Environnement, Suez Environnement y Veolia Environmen-tal Services. Hay que resaltar que to-dos estos referenciales sectoriales es-tán basados tanto en la Norma ISO 14064-1 como en el GHG Protocol.

Hasta el momento, más de 50 or-ganizaciones de todo tipo han deci-dido verificar con AENOR su Huella de Carbono de manera voluntaria. En-tre ellas se encuentran grandes multi-nacionales como Telefónica, Iberdro-la, Endesa y Abengoa, que incluyen en su alcance todas sus actividades en el ámbito mundial. O FCC Construc-ción y Grupo Ortiz para sus activida-des en España en el sector de la cons-trucción; Repsol Química con alcan-ce en España y Portugal; Enagás en el sector del gas y Ercros con alcance en España para el sector químico. Tam-bién hay organizaciones en el ámbito alimentario, como Domecq, Freixenet

AENOR es la primera entidad que ha obtenido la acreditación para la Verificación del Informe Metodológico y los datos presentados por las instalaciones según lo establecido en la Decisión 2011/278/UE y el RD 1722/2012, a efectos de la Solicitud de Asignación de Derechos de Emisión para el periodo 2013-2020

CURSOS Y PUBLICACIONES DE AENOR RELACIONADAS

• Cálculo y gestión de la Huella de Carbono

• Huella ecológica y desarrollo sostenible. 2ª edición

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y el Grupo Sada; y en el del transpor-te, como Alsa e Interbus; Unipapel en la industria papelera; y la Confedera-ción Hidrográfica del Guadiana en las Administraciones Públicas. Dentro de la gestión de los aeropuertos, AENOR ha verificado la Huella de Carbono de los aeropuertos de Madrid, Barcelona, Lanzarote, Málaga y Palma de Mallor-ca gestionados por AENA.

En el ámbito internacional, ha verifi-cado la Huella de Carbono de varias or-ganizaciones como la editora Posigraf en Brasil, la minera Collahuasi en Chile, Pacífico Seguros en Perú, LATAM Air-lines Group y Cementos Progreso en Guatemala.Huella de Carbono de Producto El cálculo y gestión de la Huella de Carbono se perfila como una herra-mienta focalizada a la mejora de la competitividad empresarial en dos ám-bitos fundamentales: la mejora en la eficiencia en el uso de recursos y ener-gía; y la mejora en la imagen y marke-ting corporativo.

Para cubrir el primero de los ob-jetivos, hay que recurrir al viejo ada-gio contable “lo que no se mide no se puede mejorar”. Así pues, la si-guiente etapa pasa necesariamen-te por saber cómo se mide un ele-mento tan aparentemente tenue e

intangible como el carbono asocia-do a un producto. La clave está en los procesos de Análisis de Ciclo de Vida. Es decir, el empleo sistemáti-co de indicadores y el control cer-tero de las fuentes y las asunciones permiten dibujar, con una precisión muy ajustada, la mochila de carbono que un producto lleva asociada. Si al cálculo, además, se le aplica una re-visión independiente de tercera par-te, dispondremos de una valiosa he-rramienta que permite no sólo ajus-tar el conocimiento sobre el ciclo de elaboración de un producto, con es-pecial énfasis en el uso de energía y recursos; sino también y más impor-tante: ajustar el empleo de los recur-sos para la reducción de los costes y el incremento de la productividad y retornos financieros.

El segundo de los ámbitos en los que la Huella de Carbono juega un papel relevante es en la comercializa-ción de los productos y en el campo del marketing. En un mundo globali-zado, en el que una parte significati-va de la población con poder de com-pra está localizada en regiones cuyas necesidades básicas han sido cubier-tas hace tiempo, ha surgido paulati-namente la voluntad de adquirir pro-ductos que no sólo cumplan con las especificaciones técnicas y de calidad que garanticen su usabilidad o su sa-lubridad, sino que también permitan al consumidor tomar decisiones racio-nales para reducir el impacto ambien-tal asociado. Se trata, por tanto, de po-ner la información en manos del con-sumidor, de permitir que se involucre en el engranaje de una economía baja en carbono y convertir el gesto de la compra en una llamada de atención a productores y legisladores. El objetivo es avanzar para alcanzar fórmulas que permitan reducir el impacto de la acti-vidad económica sobre el medio am-biente en general y el cambio climáti-co en particular. AENOR en este ámbi-to ha verificado más de 40 referencias de producto, fundamentalmente en el ámbito de la alimentación. ◗

Marisol RodríguezDirectora de Calidad e InnovaciónGrupo Faustino(España)

El Grupo Faustino, empresa familiar de cuarta ge-neración dedicada a la elaboración y exportación de vinos de alta gama, se convirtió en el 2012 en el primer grupo bodeguero español en certificar su huella de carbono con AENOR. Esta certificación se emitió para el cálculo de la huella de carbono en ocho vinos de sus seis bodegas de cuatro denomi-naciones de origen (Mancha, Navarra, Ribera de Duero y Rioja).

La verificación de la huella de carbono se enmar-ca dentro del Plan de Sostenibilidad Medioambien-tal (2005-2015) de Grupo Faustino. En este ámbito ya se han conseguido algunos retos, como reducir el peso de envases y embalajes en un 30%, o el desarrollo de depuradoras de alta gama capaces de depurar el agua para convertirla nuevamente en potable. Así pues, esta certificación de AENOR constituye un reconocimiento al compromiso con el respeto por la naturaleza y el medio ambiente como uno de los pilares fundamentales de la estrategia empresarial de Grupo Faustino.

Este certificado ha permitido disminuir en un 30% el consumo de energía eléctrica, de agua, de residuos y vertidos. En la actualidad, se está traba-jando desde el departamento de I+D+i del grupo en nuevos proyectos que supondrán reducir el impac-to medioambiental. Se trata de la reutilización de lodos de depuradora como abono para las viñas, in-vestigación de energías alternativas o sustitución de sulfuroso para evitar emisiones.

El cálculo de la huella de carbono ha supues-to demostrar al mercado el compromiso de Grupo Faustino con el medio ambiente. Gracias a esta ve-rificación, se ha conseguido identificar oportuni-dades de ahorro de costes, implantar políticas de reducción de emisiones más efectivas e iniciativas de ahorro mejor dirigidas, demostrando así nues-tra apuesta por la responsabilidad empresarial y medioambiental.

Identificar oportunidades

EXPERIENCIAS

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La economía del carbono ¿en qué medi-da es obligación y/u oportunidad para las empresas?Todas las empresas, y de manera especial las del sector energético, tienen que cum-plir con una cada vez mayor y más exigen-te legislación en materia medioambiental, entre la que se incluye la normativa rela-cionada con los gases de efecto inverna-dero (GEI). Así, y como ejemplo, la obliga-da participación en el régimen de comer-cio de derechos de emisión ha conllevado una serie de esfuerzos y de recursos eco-nómicos tanto en las instalaciones afecta-das como en las áreas de apoyo y en las de gestión del trading de derechos. Toda una revolución a la que ha habido que hacer frente para poner en marcha un sistema nuevo de gestión. Por otra parte, y tam-bién en el lado de los nuevos costes obli-gados, han aparecido determinados regí-menes fiscales asociados a las emisiones de CO2 y de otros GEI.

Junto a estas obligaciones legales, ca-da vez hay más empresas que entienden que tienen también una obligación mo-ral de preservar el medio ambiente, es-tán concienciadas y actúan en consecuen-cia. Esto les obliga a invertir en medidas para mitigar y reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero, inversiones que, por otro lado, a veces se alinean con sus propios intereses económicos dado sus efectos en mejora de rendimientos, aho-rro energético, reducción de pérdidas, etc. Igualmente deben responder a demandas

sociales cada vez más acentuadas, como la transparencia en materia de cambio cli-mático, participación en índices internacio-nales, etc.

Pero además de las obligaciones men-cionadas, claramente pueden surgir opor-tunidades empresariales asociadas a la re-volución tecnológica que deberá ir asocia-da a la lucha contra el cambio climático. En nuestro sector se traduce en desarrollo de energías renovables, movilidad eléctri-ca, eficiencia energética, redes y ciudades inteligentes, etc.

También en materia de adaptación al cambio climático pueden encontrar las empresas posibles oportunidades que, por ejemplo, en el caso de una empresa eléctrica podrían consistir en la obtención de fuentes de financiación internacionales.

¿Qué valoración hace de los proyectos MDL como opción para las empresas y desde su impacto en los países en que se desarrollan?El desarrollo de una cartera de proyec-tos del Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL) y de Acción Conjunta (AC) ha sido durante los últimos años uno de los pilares de la estrategia ante el reto del cambio cli-mático dentro del Plan de Sostenibilidad de Endesa. Este hecho ha permitido refor-zar el liderazgo de la Carbon Strategy Unit de ENEL en este mercado, garantizando la cobertura de las emisiones de ENEL y de ENDESA, e incluso generando un ex-cedente. De hecho, ENDESA y ENEL se

mantienen en cabeza en el ranking mun-dial del mercado de carbono. A pesar del negativo escenario actual para el mercado de emisiones, los proyectos en cartera exis-tentes han continuado operando y gene-rando reducciones de emisiones.

Endesa tiene calculada la Huella de Carbo-no para el conjunto de su actividad ¿por qué se han decido a dar ese paso? Nos decidimos a dar ese paso en 2010 con objeto de adaptarnos y anticiparnos a las iniciativas de la Comisión Europea y de Oficina Española de Cambio Climático que proponen que se reporten datos de emisiones de GEI más allá del Alcance 1 (emisiones directas).

Entre las iniciativas europeas destaca la elaboración por la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea de dos guías metodológicas para el cálculo de la huella ambiental de productos y em-presas; y en España la reciente aprobación de un Real Decreto para la creación de un Registro Nacional de Huellas de Carbono.

Además, entre las principales motivacio-nes que nos llevaron a abordar el cálculo de la Huella de Carbono, destacaría, entre otras, continuar con la integración del fac-tor carbono en la estrategia empresarial de la compañía, valorando su influencia a lo largo de la cadena de valor (ciclo de vida) de los negocios del Grupo. También per-mite a la empresa seleccionar con mayor eficacia sus acciones e inversiones, reducir sus costes y mejorar su imagen mediante

Integramos la Huella de Carbono en la estrategia empresarial de la compañía

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David CorregidorSubdirector de Medio Ambiente y Cambio ClimáticoEndesa

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un comportamiento comprometido con la preservación del medio ambiente. Igual-mente, ayuda a evaluar el potencial para establecer actuaciones de mitigación y/o compensación de emisiones de GEI ha-cia otros agentes implicados en los proce-sos, como proveedores y clientes, así como complementar la política de información con los mismos. Al mismo tiempo, detalla información para dar cobertura a las ne-cesidades de reporte de datos relaciona-dos con el cambio climático, y nos ayuda a posicionarnos como líderes en índices de referencia como el CDP.

¿Cómo estructura Endesa su trabajo en el campo de los GEI?, ¿estructura centraliza-da o descentralizada? Definir la gestión de los GEI en una em-presa eléctrica sería más o menos equiva-lente a explicar su estrategia ante el cam-bio climático, que afecta a un amplio aba-nico de sus líneas de negocio y áreas de apoyo; esto es, seguimiento y posiciona-miento regulatorio, gestión del cumpli-miento (cálculo y verificación de emisio-nes), participación en el mercado de de-rechos de emisión, gestión de créditos internacionales, participación en proyec-tos de investigación (captura, transporte

y almacenamiento de CO2), inversión en mejoras de rendimiento y reducción de pérdidas, visión de las oportunidades aso-ciadas (eficiencia energética, vehículo eléc-trico, energías renovables), o la atención a las tendencias emergentes en la mate-ria (índices voluntarios, huella de carbo-no, adaptación al cambio climático, etc.).

Por lo tanto la gestión de los GEI afec-ta, de manera más o menos directa e indi-recta, según los casos, a numerosas áreas de la compañía. La lucha contra el cambio climático, en definitiva, se considera trans-versal a todas las áreas de la organización; y si bien cada una de ella es plenamente responsable y autónoma en el desarrollo de sus funciones, la labor de coordinación que permite una visión global de la actua-ción de la empresa en materia de GEI co-rresponde a la Dirección de Medio Am-biente y Cambio Climático.

¿Cómo cree que será el post-Kioto? Aunque no es tarea fácil y quedan aún muchas dificultades por superar, sería de-seable que el tan esperado acuerdo inter-nacional vinculante para lograr un com-promiso firme de reducción de emisiones por parte de todos los países, en el marco de Naciones Unidas, fuera una realidad

tras la COP 21 que tendrá lugar en París a finales de 2015.

La Unión Europea, cuyo papel impulsor en la lucha contra el cambio climático ha sido y sigue siendo muy importante, se-guirá siendo uno de los principales acto-res internacionales para la consecución de compromisos ambiciosos de reducción de emisiones de GEI y podrá desempeñar un importante papel mediador entre EE.UU y China (principales países emisores) para la consecución de acuerdos. Si se involu-cran y comprometen estos dos países, así como otros con un importante nivel de emisiones, en un acuerdo global con ob-jetivos claros y obligatorios de reducción de emisiones a medio y largo plazo, hay motivos para ser relativamente optimistas.

La economía del carbono, ¿ha potenciado el papel del profesional ambiental en las organizaciones?Indudablemente; aunque me gustaría re-saltar que en el sector energético la cues-tión medioambiental ya había alcanzado un valor estratégico en la gestión empre-sarial de forma previa a la aparición de las obligaciones relativas a los gases de efecto invernadero. Tan sólo teniendo en cuenta una de las herramientas fundamentales en la gestión del carbono, como es el régimen de comercio de derecho de emisiones, se podrían enumerar nuevas necesidades y funciones que han tenido que desarrollar los profesionales ambientales de la empre-sa (y también de los pertenecientes a sus colaboradores como ingenierías, verifica-dores, laboratorios, etc.). Se trata de ges-tión internacional de proyectos del Me-canismo de Desarrollo Limpio, obtención de Autorizaciones de Emisión de Gases de Efecto Invernadero ante las Comunidades Autónomas, o cálculo y seguimiento de las emisiones de CO2 en las instalaciones, entre otros. Todo ello ha elevado, si cabe, la relevancia de la función ambiental en la empresa y por lo tanto, la valoración de sus profesionales en ese campo. ◗◗

Las empresas pueden encontrar posibles oportunidades en materia de adaptación al cambio climático

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