el libro ilustrado de misantropía gráfica

· El libro ilustrado de Misantropía Gráfica ·

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EEll lliibbrroo iilluussttrraaddoo ddee MMiissaannttrrooppííaa

GGrrááffiiccaa


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ÍÍNNDDIICCEE::

. El origen de Misantropía Gráfica pág. 3

. Intenciones de este libro pág. 5

. Agradecimientos pág. 6

. Sección I: La mentira y los secretos entre todos pág. 7

. Sección II: Situaciones incómodas pág. 13

. Sección III: Computadoras y redes sociales: pág. 18

. Sección IV: Palabras y expresiones pág. 23

. Sección V: gustos, intereses, freaks y geeks pág. 28

. Sección VI: Auto-concepto y auto-estima pág. 33

. Sección VII: Estupidez e ignorancia pág. 38

. Sección VIII: Amor, sexo y cuestiones de género pág. 43

. Sección IX: Cuestiones académicas pág. 48

. Sección X: Ruperto, el misántropo pág. 53

. Sección XI: Rogelio, el famoso que dice pelotudeces pág. 57

. Sección XII: Marcia, la enamoradiza pág. 60

. Sección XIII: Parte final del libro pág. 64


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EEll oorriiggeenn ddee MMiissaannttrrooppííaa GGrrááffiiccaa::

El origen de mis viñetas – y posteriormente la creación de la página en sí – surgió por mi necesidad de querer expresar puntos de vista sobre nuestras conductas y nuestras actitudes con los demás, las cuales muchas veces me resultaban molestas o realmente insoportables, vinieran de un pariente, un docente, un jefe, un conocido o inclusive un amigo cercano de hace años. Por lo visto a varios de mis contactos de Facebook mis estados donde criticaba y señalaba actitudes propias y de los demás no les hizo ninguna gracia, así que para expresarme mucho mejor preferí usar algo de humor y ser más gráfico (he ahí el porqué mis personajes y sus caras son tan expresivos): comencé a dibujar viñetas, cosa que siempre quise hacer en mi vida desde que era chico.

Primero comencé con un par de imágenes sueltas y a medida que iba dibujando los personajes y las cosas que decían o hacían, me di cuenta que se me ocurrían cada vez más y más ideas para agregar y señalar de la gente, pero el problema era que en una sola viñeta era imposible abarcar tanto, así que tenía que pensar bien en qué enfocarme para desarrollar posteriormente otras ideas.

Así comenzaron a surgir viñetas con diferentes tipos de contenido sobre diferentes temas, de todo lo que se puedan imaginar: desde críticas a la gente que vive malhumorada hasta parodias a personas “enamoradizas”, como así también a autores que escriben libros de auto-ayuda o personas que no les viene bien nada nunca. Esto produjo entonces que no solamente exprese sentimientos y pensamientos personales sobre las cosas que me rodeaban, sino que también comencé a reproducir y burlarme de discursos populares o de ciertos grupos de personas: sexistas, vegetarianos, nacionalistas, fanáticos religiosos, “metaleros”, defensores de la marihuana, “gamers”, etc.

Muchos me han preguntado qué intenciones tenía yo con mis viñetas, porque más de uno consideró que eran un ataque o crítica directa a su persona o inclusive una humillación pública por desquite o rencor. Mi respuesta en realidad es que a las viñetas las realizo porque son mi manera de expresarme, mi vía regia para mantenerme cuerdo (de alguna forma) y tolerante ante las personas, como así también intento hacer que todos tomemos consciencia de cómo muchas veces nos pasamos de la raya con nuestras actitudes con los demás, señalando las cosas con extremos o parodias para resaltar más a lo que apunto en cada viñeta en particular. En otras palabras: no es un ataque personal a nadie, sino una crítica explícita a actitudes que encontramos en decenas o miles de personas que conocemos y que vamos a conocer en nuestras vidas.

A veces creo que mis ideas se van a acabar, pero siempre encuentro algún comentario o conducta rompebolas de alguien que conozco y termino dedicándole una viñeta, con la cual de manera no muy sorpresiva muchos se terminan identificando, sea con quien ejecuta dicha conducta como en otros casos con quien la sufre, la “víctima” de la situación. No sé si soy rencoroso, resentido o si tengo algún problemita para elaborar mis emociones respecto a los demás, pero definitivamente no soy un misántropo que vive encerrado acariciando a su gato, mirando hacia la ventana y diciendo “Oh, este mundo gris no tiene nada interesante para mí”, así que el que me imaginó así está equivocado: simplemente soy una persona promedio a la que le gusta criticar a su manera.

En cuanto a ciertos personajes, Ruperto, Marcia, Fermín, Cirilo o Crispín son parodias y extremos de actitudes que uno puede ver en la gente si se pone a observarla bien, y claramente sus discursos o actitudes son extremos y exageraciones para poder ilustrar bien lo que estoy criticando: son un estereotipo, un estereotipo con el que, en ciertos rasgos, nos podemos identificar y no estamos muy lejos de parecernos a ellos.


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No todas las viñetas que hice tienen un intento de hacer reír a carcajadas a quien las vea, puesto que la mayoría o casi todas intentan hacernos reflexionar cosas un tanto “obvias” pero que por costumbre se hacen invisible ante nuestros ojos, teniendo como resultado dejar de observarnos a nosotros mismos, haciendo y diciendo cosas de manera inconsciente sin una real consideración de cómo pueden afectar al otro a la hora de entablar vínculos o una simple conversación de pasada.

¿Qué quiero decir con esto en términos más sencillos? Que algunas viñetas pueden resultar graciosas y otras muy serias para cada uno, puesto que el humor particular de cada persona puede tener como base el sarcasmo, la ironía, la parodia o inclusive la identificación con un personaje realizado por un desconocido que acertó en varios de sus rasgos, siendo un reflejo muy fiel de acuerdo a cómo nos vemos las personas muchas veces, lo cual inquieta a algunos y hace reír justamente a otros.


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IInntteenncciioonneess ddee eessttee lliibbrroo::

En este libro no pretendo expresar verdades universales ni tampoco me la tiro de sociólogo, psicólogo o antropólogo profesional. Solamente expreso mis puntos de vista y pensamientos, los cuales muchas veces obviamente son totalmente subjetivos y condicionados por mi experiencia, pero intentando de todas formas reflejar - por medio de la parodia o el ridículo - actitudes de la gente que realmente me molestan a diario.

Tampoco me considero un misántropo que desprecia al ser humano, recluido de todo el mundo en mi casa acariciando a una mascota que ni me lleva el apunte: simplemente soy una persona que encontró una manera muy particular de descargarse de toda la tensión social, la cual todos acumulamos en nuestras vidas. Si te sentiste ofendido con alguna viñeta mía, no lo tomes como una ofensa dedicada exclusivamente a vos, porque hay miles de personas con tus mismos pensamientos o actitudes sueltas en el mundo.

En este libro me propuse usar viñetas un tanto viejas, no solamente porque no tendría sentido colocar las últimas que he hecho, sino también para que aquellos que todavía no vieron todos los álbumes desde las primeras fotos subidas, puedan conocer muchas viñetas que les van a parecer nuevas. No solamente que dividí en diferentes temas o cuestiones el contenido de este libro, sino que también hice una recopilación de los personajes más populares de las viñetas, como un obsequio a todos ustedes.

No esperen tampoco que hable 100% en serio y formalmente en el texto que acompañe o complemente a las viñetas, esto no es una obra de arte de la literatura ni tampoco tengo una editorial que me exija cierta estructura o prolijidad. Esto fue una idea de varias personas que querían que recopile viñetas en alguna clase de formato, con textos que reflejen un poco más mi forma de pensar respecto a muchas situaciones que todos atravesamos.


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AAggrraaddeecciimmiieennttooss::

Primeramente agradezco a todas las personas que conozco o de las cuales escucho hablar, porque me inspiran con sus comentarios o actitudes a realizar viñetas donde reflejo cuánta risa o pena me dan (dependiendo cada caso).

Segundo: agradezco a quienes siempre me dieron su apoyo a través de estos casi tres años, por más que alguna que otra vez se hayan sentido tocados u ofendidos con mis viñetas o referencias breves dentro de ellas. Recuerden y consideren que me baso en cosas muy generales de la gente y que no ando poniendo cámaras en su inodoro para saber todo de su vida íntima para hacerla pública, dedicándome a atacar personalmente a ciertas personas o algo así.

Tercero: agradezco a la fortuna o a algún dios/deidad/Monstruo de Spaguetti Volador por ahí escondido que me permitió tener - a estas alturas de mi vida - manos y pulso para dibujar en Paint, como así también por mantener mi cerebro despierto y activo para poder pensar diálogos y poder concentrarme en diferentes temas por viñeta, sin que salga un mamarracho que sea inentendible o poco claro.

Por último y resumiendo: le agradezco a toda persona que me hizo el aguante, siendo la excepción personas que jamás me escuchaon ni comprendieron, como así también aquellas que se encargaban de tirarme abajo mis viñetas a la hora de querer expresarme. Gracias por nada, manga de pelotudos que bardean por amor al ocio.

Dicho todo esto, vamos a desarrollar este libro que fue idea de muchos de ustedes.


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SSeecccciióónn II:: LLaa mmeennttiirraa yy llooss sseeccrreettooss eennttrree ttooddooss::

“Alberto era un muchacho que vivía angustiado y perseguido por cierta clase de pensamientos, los cuales por cierto pertenecían más al reino de la realidad que al de la fantasía. Estos pensamientos, que quebraban su espíritu a diario, se imponían con insistencia en toda oportunidad donde tuviese que interactuar con diferentes personas tal como su rutina semanal le dictaba. Sensaciones de culpa, vergüenza y humillación acompañaban sus fantasías en donde comenzaba a contar compulsivamente secretos de otras personas, como si su boca tuviese vida y voluntad propia, oponiéndose a su deseo de conservar aquellas amistades que hasta entonces disfrutaba tener en su vida. Por lo tanto, además de padecer angustia y sensaciones desagradables, se la pasaba varias noches sin poder conciliar el sueño fácilmente, procesando y elaborando – disfuncionalmente - todo lo que acontecía en su vida diurna.

Pero cuando esta fantasía recurrente se hacía extrañar con su ausencia, Alberto se imaginaba a sí mismo en una incómoda y particular escena, en la cual todos le miraban directamente a los ojos, descubriendo así sin esfuerzo alguno aquellos secretos y pensamientos que escondía y refugiaba en su interioridad, con tal de preservar una vida social relativamente estable. Aquellas eran producciones mentales que nunca habían escapado de los confines de su psique por tal o cual razón, que iban desde imágenes retorcidas o inapropiadas con ciertas personas, secretos que enterraba a la hora de dirigir su conducta o sentimientos pujantes que intentaba asfixiar o amortiguar, siendo todas ellas habitantes del mundo interior de este pobre zoquete.

Había muchos pensamientos que él tenía que evacuar de su conciencia ante ciertas personas, e incluso por cada una en particular tenía cierto repertorio de pensamientos que consideraba “apropiados” o “inapropiados” para que fluyeran en su mente durante ciertas situaciones. Para Alberto, su mejor amigo tenía un aliento horrible y por ello nunca quería tenerlo muy cerca, su hermana era una fracasada que iba a terminar con el primer pelotudo que le lleve diez años y que ofreciera mantenerla, y su profesora de Antropología era lo que más se parecía a una diosa griega a la hora de fantasear con ella, a diferencia de su desdichada amiga Jacinta: aquella que se encerró en su pieza a ver películas de Ryan Gosling para intentar mitigar el rechazo de Alberto, el cual la tildaba – secreta y llanamente – como “gorda” y “fea”.

Un pobre sujeto enredado en sus pensamientos, limitado en su expresión conductual y esclavo de la apariencia, quien así complica su existencia disimulando, mintiendo, ocultando, fingiendo o aparentando; todas conductas que otros optarían por no aplicar con tal de ser ellos mismos, expresándose con honestidad en todo momento independientemente sorprendan, ofendan o molesten a ciertas personas que los rodean.”

Moraleja: es rompebolas vivir en sociedad y tener que lidiar con el manejo de ciertas informaciones o actitudes.


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De por sí siempre pensé que la gente cuando está con otros es falsa o mentirosa al menos en una fracción, por el simple hecho de que estando frente a alguien o al sentirse observada, cambia su conducta y restringe su desenvolvimiento natural. Es decir: se amoldan al contexto y las expectativas de los demás sin expresarse plenamente, o incluso fingiendo ser todo lo contrario a lo que uno es. Pero no solamente está el tema de aparentar la naturaleza propia, sino también que hay otras situaciones bastante molestas donde hay que ocultar, disimular, fingir, tolerar, pretender y otros verbos más que, si bien no enloquecen a uno, le agotan bastante en determinadas situaciones.

1 Pobre alcohol, lo culpan de todo, todo para mantener cierta

imagen o decencia en cierto nivel.

2 Éste ejemplo es muy gráfico,

pero no deja por ello de ser

cierto.

3 Esto es consecuencia de ciertas

relaciones simétricas


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Pero no solamente está la cuestión de uno pretender ser algo que no es, sino que también se presentan situaciones donde atestiguamos cómo la gente dice y actúa en contradicción a lo que – supuestamente – siente y piensa respecto a otras personas en particular. Una cosa es tener opiniones sobre alguien, otra es despreciarlo en voz alta cada vez que no está y luego en persona abrazarlo y sacarse una foto con él. La peor hipocresía de todas, donde el otro se pone una careta y no se sabe en qué momento (o con quién) realmente la está usando.

4 Ejemplos concretos de esa dualidad presente fuertemente en algunos.

5 Dicen que cuando hablan mal de

nosotros se nos tapan los oídos. Si

tenés otitis, ya sabés por qué.


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Está bien que uno tiene derecho a reservarse comentarios para sí mismo, como así también es cierto que no está obligado a dar explicaciones ni a contar minuto a minuto todo aquello que se le cruce por la cabeza, pero hay situaciones en las cuales si se pudiese contrastar lo que uno piensa y lo que hace, resultarían muy graciosas o turbias:

6 Si te estás meando, no seas pelotudo y andá al

baño, puede ser una urgencia fisiológica

7 La más común es mancarse el mal aliento del

otro

8 Si existen los psíquicos, nadie se

salva


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Otra cosa a remarcar del asunto, es que quedarse callados tiene sus consecuencias, tipo “hable ahora o calle para siempre”, sean buenas o malas. Podés quedarte con dudas (de ahora en adelante eternas), con bronca o frustración por no devolver un comentario, como así también podés quedar como una persona súper reservada o misteriosa, sea para bien o para mal:

9 Quedarnos callados para no

quedar como lentos

10 Gente como ésta elabora terribles

venganzas después

11 Cuentes de tu vida o no,

inventan cosas igual


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Comentarios y reflexiones adicionales sobre el tema:

- Relacionarte con gente supone que, de vez en cuando, te guardes cosas o no puedas expresarlas plenamente

- Algunos por decirlas viven armando quilombo o andan haciendo llorar a la gente

- Otros por ser más amables se quedan calladitos para no herir susceptibilidades, pero se la tienen que bancar

- Algunos abusan de la mentira, y son unos forros de dudosa moralidad porque actúan acorde a como les convenga en la situación

- Hay gente que ves seguido que no te banca

- Si vas a mentir, hacelo bien y aguantate la posible culpa o remordimiento, dependiendo de tus motivos y cuán caradura seas

- Hay alguien que te tiene ganas y se lo reserva, como así también hay alguien a quien seguramente le producís asco con ya mostrarle tu cara

- Inclusive tu cuerpo puede sufrir las consecuencias de tener que reservarte opiniones o pensamientos: te tirás de los pelos, tenés ataques nerviosos, insomnio, dolores de cabeza, náuseas, nudillos lastimados por golpear una pared, etc.; todo dependiendo de cuán enfermito seas a la hora de desquitarte físicamente o somatizando

- Muchos dicen que mentir y ocultar información son lo mismo, así que pensá al respecto cómo es en tu situación.


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SSeecccciióónn IIII:: SSiittuuaacciioonneess iinnccóómmooddaass::

“María Conchita tenía el mismo problema una y otra vez: ante ciertas situaciones de índole social donde se sintiera observada, comenzaba a ponerse nerviosa sin saber cómo reaccionar ante dicha escena, sintiendo ganas de desaparecer instantáneamente y sin que nadie recordase dicho incidente. No se necesitaba de un psicólogo que la diagnosticara para saber que era muy ansiosa, puesto que María Conchita era de esquivar, además, muchas situaciones que supusieran un elemento o factor sorpresa. Cada vez que aparecía un sujeto que ella consideraba atractivo o intimidante, María Conchita sentía un retorcijón en el estómago, pero a diferencia de la mayoría de las personas su problema no se limitaba a ello: sufría de diarrea, por lo que siempre debía llevar papel higiénico a todos lados, en caso de que un sexy sujeto apareciese espontáneamente y la tratase amablemente.

El problema de María Conchita, de más está decir, no residía en las personas en sí, sino en aquello que las personas podrían llegar a sentir y pensar respecto a ella, siendo los verdaderos responsables de su padecer sus propios pensamientos. Siempre imaginaba que toda persona que tuviese en frente la enjuiciaba con su mirada, dictando una sentencia silenciosa que solamente podía resonar a nivel de pensamientos del mismo juez, sintiéndose de manera constante acusada o condenada por los demás, pero sin saber precisamente por qué motivos o con qué intenciones. El misterio y la ambigüedad de sus fantasías eran como bromas pesadas de una fortuna, una deidad que nunca se tomó en serio a esa niña pobre y desgraciada.

Pero más allá de su inseguridad, problemas de autoestima, un autoconcepto bastante flojo, un yo débil y sus fantasías que confundía con la realidad, María Conchita se despreciaba a sí misma por su timidez, aquella que la hacía actuar torpemente y tartamudear, que le producía angustia y malestares físicos cuando se observaba a ella misma interactuando con gente. Uno puede sentirse un inútil condenado a la mediocridad toda su vida, pero no tiene que necesariamente quedarse mirando al vacío cuando le preguntan qué hizo durante el fin de semana. María Conchita se consideraba sinónimo del aburrimiento, como así también de toda cosa poco interesante que existiera; y por esa misma razón creía que la gente se burlaba de ella cuando le prestaban atención, como si fuese la atracción principal de un espectáculo retorcido y de muy mal gusto, en un circo lleno de suciedad y miseria.

Así, esta pobre muchacha condenada a su falta de carácter y su exceso de imaginación, se lamenta todos los días por haber sido dotada de nervios tan sensibles, responsables de respuestas de alerta, defensa o protección ante un simple saludo ajeno, como si estuviese en una jungla llena de bestias que fuesen a devorarla. María Conchita es, pues, un cordero entre lobos… o una mojigata entre impuras que se abren de piernas para cualquiera en peñas universitarias”.

Moraleja: hay situaciones incómodas en sí mismas, pero si además sos tímido, sensible o nervioso cagaste


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Las situaciones incómodas no solamente se deben a personas que tienen problemitas y buscan complicar todo, sino también porque sus comentario o actitudes no eran los más apropiados en ciertos contextos. Por otro lado, puede ser también que la sensibilidad o susceptibilidad propia en ciertos asuntos nos predisponga a ponernos mal o sentirnos avergonzados o intimidados por ejemplo si sos tímido, reservado o si no sabés cómo reaccionar ante un chiste:

1 Éste sos vos cuando te cantan en tu cumple

2 Hay veces que la gente te exige

ciertas condiciones para una

charla

3 Mientras más se observe uno a

sí mismo, más pierde la

espontaneidad


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Las situaciones incómodas son insoportables porque uno no sabe qué decir o hacer, generalmente porque hay un tema jodido en medio de la charla o porque simplemente las sorpresa nos tomó desprevenidos y con la cabeza en otra parte. Si recibís una puteada de alguien, por ejemplo, van estar presentes las variables tales como qué venís haciendo mientras, quién te lo dice, de qué manera, con qué motivo, etc.; y a veces esa es mucha información para tu cerebro, quedando tu mente en blanco como si no encontrara una reacción adecuada y espontánea:

6 Otra situación donde es mejor cuidarse

de lo que uno dice

4 Otra situación incómoda es cuando en el

supermercado te enchufan cumbia villera

5 Clásica situación a donde a uno se le

escapa algo que no tendría que haber

dicho


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Discusiones en un lugar donde no nos podemos ir fácilmente, un chiste de mal gusto o silencios incómodos son ejemplos populares de estas situaciones horrendas. La gente mira para abajo, se rasca la cabeza, se sonroja o se quiere ir a la mierda porque no saben cómo reaccionar o qué deberían hacer, puesto que muchas veces son simples espectadores que se comen el garrón de atestiguar una escena que no buscaron (y que es ajena a su control).

8 "¡Cuando lo vea le tengo que contar!" NOPE

7 Silencios incómodos que intimidad a la gente y hacen que se rasquen

o miren para otro lado


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- El grado de incomodidad de una situación es directamente proporcional al sentimiento de duración de dicha experiencia

- Las situaciones incómodas suelen darse por un tercero, aunque también hay situaciones donde uno puede sentir vergüenza de sí mismo, sin que haya testigos o personas involucradas

- Si hay quilombo o una situación tensa entre otros, no te comprometas con ninguna de las partes y dejá que se maten, salvo que te paguen y seas terapeuta, mediador, abogado o algo así

- Hay personas que de por sí son tímidas, desconfiadas y reservadas; por lo tanto una simple charla donde tengan que exponerse les resulta incómoda, y por más que uno esté a 20 metros y no las mire a la cara

- Por más que intentes olvidar alguna manqueada que cometiste, siempre va a haber alguien que se va a acordar de lo que hiciste (o lo que no) para cagarse de risa de vos, y en voz alta

- La humillación es bastante popular entre nosotros: siempre que insultamos a alguien buscamos hacerlo sentir mal, buscándole debilidades, fallas o errores que lo hagan sentir menos o inferior, y más todavía si es en frente de muchas personas (como en Internet)

- No solamente que sufrimos incomodidad “gracias” a otros, sino que nosotros también podemos producirla sin darnos cuenta, así que ojo a eso también


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SSeecccciióónn IIIIII:: CCoommppuuttaaddoorraass yy rreeddeess ssoocciiaalleess::

“Felipa se encontraba, como de costumbre, matando las horas durante las vacaciones revisando su Facebook. Pero lo que ella no esperaba ese sábado a las 10 de la mañana, era encontrarse con unas cuantas sorpresas y disgustos al actualizarse en dicha red social: su mejor amiga abrazada con su peor enemiga en un recital al que fueron juntas, una publicación de su ex-novio en el Muro de una compañera suya de la facultad que decía “Conectate queriditaaaa”, y 120 comentarios en un estado que había publicado respecto al aborto, entre los cuales figuraban su madre y su profesora opinando al respecto. Por otra parte, al revisar su casilla de mensajes se encontró con varios mensajes privados sin abrir, los cuales comenzaban con “hola, todo bien? Tendrás un resumen d…”, “Hola linda k rica eres quieres ser mi...” y “Boluda no sabes lo que me entereeeee…”, saturando la pobre mente recién despierta de Felipa durante el fin de semana.

Pero lo que más le dolía a ella eran dos mensajes en particular sin contestar: uno en el cual intentó iniciar charla con aquel chico que le gustaba hace meses, y otro de tipo grupal en donde preguntaba a sus amigos si querían hacer algo… el día anterior. Sufría del “check” que demostraba que efectivamente los destinatarios habían leído sus mensajes, pero que no se tomaron la molestia de tipear una devolución en lo más mínimo. ¿Facebook habrá andado mal, marcando mal el “Visto” para ella? ¿No será que estaban ocupados cuando leyeron sus mensajes, sin poder contestar como se debe? ¿No será que enviaron una respuesta pero no llegó nada? Felipa comenzaba a sentir retorcijones en el estómago y a ponerse ansiosa, tanto por obtener respuestas de los demás infelices que se hacían los importantes, como así también por saber de una vez qué opinaron su madre y su profesora en su estado, intentando encontrar a ambas entre los nombres de las otras 40 personas que decidieron opinar, quizá indignadas.

La pobre muchacha, además, se encontraba cansada de ver publicaciones para nada originales, entre las cuales se encontraban viñetas de Liniers, letras de canciones de Arjona, fotos de Instagram con filtros que le hacían doler sus ojos, “veganos” acusando a todos de ser “carniceros” y mujeres sin depilar justificando – agresivamente - el concepto de “patriarcado”. A éstas publicaciones se les sumaban saludos de cumpleaños cliché tales como “feliz cumple. Besitos”, fotos de perros y gatos siendo besados en sus hocicos por sus respectivos dueños, o gente diciendo “bien hecho” al publicar noticias de delincuentes apaleados por vecinos. Era una sopa de informaciones - diversas y variopintas - que saturaban la mente de cualquier sujeto que las leyera comprimidas en la sección de “Inicio” de Facebook.

Y allí estaba Felipa, alterada y sensible por un bombardeo constante de signos y símbolos que la superaban, intentando procesar qué significaba que su mejor amiga estuviera abrazada con una forra manipuladora que desprecia, o cuánto vale realmente que su ex-novio le publique pelotudeces a una compañera suya que hasta ese momento le caía muy bien. Felipa es así una de las tantas víctimas que sufre pasivamente por la actividad (o inactividad) de sus contactos o amigos en el mundo digital”

Moraleja: no te pongas como pelotudo en redes sociales ni por viciar online, al menos no tanto


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Últimamente la gente está histérica por el tema de las redes sociales y qué publica uno o qué no o si le contestan un mensaje o no; y ni hablar de celos, disgustos, chismes y discusiones que se arman por las publicaciones. Pero independientemente de las redes sociales, las personas se la pasan en la computadora y hacen de ella un estilo de vida, fomentando el sedentarismo enriqueciendo sus conocimientos y encontrando nuevas formas de interactuar y conocer personas:

2 Hay gente que cada vez se va

más a la mierda

1 Esta viñeta la hice cuando el MSN

todavía existía, típicos contactos

densos

3 El auto-estima también se ve

afectada por pelotudeces


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Más allá del chat y las redes sociales, la computadora también sirve para otras cosas: ver series, dibujar, leer, escuchar música, estudiar, ver porno libanés vintage, amenazar con cuentas ajenas, jugar algún MOBA con tus amigos mancos, etc.; por lo cual le terminamos tomando mucho cariño a esta creación tecnológica, siendo nuestra fiel compañera y una parte de nuestra rutina diaria:

4 Algunos quedan sumidos en su

digimundo por la aburrida realidad 5 Tu cara cuando termina la temporada

de una serie que capaz terminan

cancelando

6 Lo que todos hacen los fines

de semana: nada

7 Cuando la gente prefiere de

compañía una PC antes que a otros


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Otras situaciones inherentes a dar vueltas por internet con un perfil o una cuenta, donde más que disfrutar tu tiempo de vicio quedás con el culo cuadrado, con el ánimo en el piso o con la cabeza agotada:

8 El bloqueo sirve hasta ahí

nomás 9 Resumen de páginas como 9GAG 10 "che boluda pasame las fotos

xD" a tu director de tesis 11 Cuando empiezan la facultad

aflojan a escribir así, creo


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- Estar en la computadora todo el día te puede dejar medio sensible, malacostumbrado o pelotudo

- Que te claven “visto”, que te contesten con monosílabos o incluso dos meses después es esperable muchas veces, incluso si era algo importante

- A este paso, la humanidad va a mutar a tal punto de tener culo cuadrado y dedos largos y rápidos, con una vista súper desarrollada para estar frente a monitores todo el día

- La gente es hipócrita y cambiante, así que preparate para ver puro humo en publicaciones o por chat

- En vez de pelotudear todo el bendito día emocionándote con series o pelis, podrías dedicarte a relacionarte con gente macanuda que existe por ahí

- Parece mentira que haya pequeños que aprendan a tipear y escribir a mano en simultáneo a estas alturas

- Hay gente que se la tira de importante u ocupada y nunca contesta para pretender eso, siendo que se ven cuatro temporadas seguidas de alguna serie

- Las fotos de perfil no son lo mismo que la realidad, acuérdense de eso

- Si tenés el culo cuadrado de tanto estar sentado, salí a caminar media hora aunque sea

- Si te deja de andar internet, ponete a leer un libro o limpiá tu pieza


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SSeecccciióónn IIVV:: PPaallaabbrraass yy eexxpprreessiioonneess::

“Ramón siempre fue visto por sus parientes, amigos, compañeros de la facultad y conocidos como una persona complicada o “jodida” a la hora de tratar con él. Era un sujeto muy particular, puesto que tenía muy poca paciencia para explicar, desconocía los eufemismos, respondía inmediatamente cualquier comentario y además carecía de una noción de contexto o situación para expresarse “ubicadamente”. No solamente que era despreciado por personas en particular, sino también por grupos enteros, puesto que el tono y las palabras que siempre utilizaba para expresarse eran incómodos, agresivos, “desubicados”, dignos de un “forro egocéntrico” que “nunca piensa en cómo el otro recibe las palabras que expresa”. Pero la realidad de Ramón no coincidía con lo que todos denunciaban de él y sus comentarios, puesto que él jamás tenía intención alguna de herir a nadie ni mucho menos de causar problemas: él veía a todos como personas que se ofenden fácilmente por ser él mismo y “transparente” a través de su discurso, por “denunciar verdades” que “por alguna razón” nadie se atrevía a expresar.

Quizá tuvo una educación muy particular, quizá era muy inocente para desconocer los resultados de sus comentarios, o incluso tenía – quizá hasta el día de hoy - algún desorden hormonal o neurológico que le impidiera tener “filtros” o realizar rodeos para expresarse, encarando de maneras distintas lo que quería transmitir, intentando “suavizar” el impacto de sus palabras. Él no tenía problema en señalarle a alguna señorita que mostraba demasiado su busto o a un sujeto que tenía dientes chuecos y amarillos que llamasen su atención, sino que tampoco se hacía drama alguno en comunicarlo en frente de otras personas, en voz alta y sin haber tenido trato previo con ellas. Sin embargo, Ramón contaba con alguien que siempre intentaba comprenderlo e inclusive defenderlo: su amigo Aurelio.

Aurelio siempre observaba con curiosidad cómo Ramón era rechazado por hombres y mujeres en diferentes situaciones y por distintos temas, intentando sumergirse en la mente de su sincero amigo para descubrir – quizá - qué motivos subyacían en su interioridad para actuar de semejante manera. Aurelio notaba que Ramón siempre era directo y claro para decir las cosas, pero su descubrimiento más importante fue el siguiente: notó que el rostro de Ramón no decía mucho, puesto que no se sabía si estaba expresando un sarcasmo, una opinión, un chiste o una crítica agresiva y resentida contra el otro, lo cual podía ofender o confundir a quien estuviese frente a él. Para Aurelio incluso Ramón no era maleducado ni malhablado: simplemente no encontraba expresiones populares que pudiesen transmitir mejor sus ideas, como así tampoco se servía de chistes, metáforas, dichos o anécdotas para enriquecer lo que decía.

¿Sobrevivirá Ramón a un mundo donde las expresiones y las palabras son importantes para conmover u ofender al otro? ¿Logrará adaptarse a la actitud general de esperar cierta clase de comentarios en ciertas situaciones? ¿O será él la prueba viviente de que las personas muchas veces no estamos abiertas a ciertos discursos de otras personas? Aurelio espera lo mejor de él, por más que a veces crea que es un inepto social.”

Moraleja: las palabras crean, transmiten, modifican, estructuran, conmueven e inclusive te suscitan ganas de romperle la cara al otro muchas veces


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Las palabras son muchas veces un reflejo o manifestación de nuestra interioridad, séamos muy interesantes o no, pero la gente muchas veces entiende lo que se les raja (o uno no es claro), surgiendo así situaciones incómodas (véase la Sección I), donde se malentiende lo que dijimos por una simple palabra fuera de contexto o que elegimos mal. Es difícil elaborar un discurso claro y prolijo en una situación espontánea a medida se nos ocurren ideas o las vamos ubicando en nuestra línea de pensamiento, y es por eso que la gente se va a extremos interpretando nuestras palabras:

1 Nunca se guíen por fuentes

secundarias

2 Algunas expresiones nuestras no son

literales… y menos mal

3 A veces hay que ser bien específicos

para defendernos 4 No importa solamente el

contenido de lo dicho, sino

también el contexto y cómo nos

llevemos con el otro


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De todas formas no solamente hago referencia a expresiones o palabras en voz alta, sino también por escrito, lo cual muchas veces es PEOR. Es mucho peor o complicado porque si no tirás una fucking “:)” o “:D” a tu chiste, tu oración queda más como un ultimátum o una amenaza mafiosa a esa persona, y los errores ortográficos también aportan su cuota al asunto (esto se relaciona con la Sección III):

5 Esos "jajajajajaja" son más

truchos que la mierda

8 Hay gente exigente, como así también

gente seca 7 Dicen por ahí que el 90% de las

discusiones se originan por cómo

decimos las cosas y no por lo que

decimos en sí 6 Más ejemplos


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Y como ya dije antes, el contexto o el momento en donde se lleva a cabo la comunicación también es importante (véase la Sección II), aunque siempre hay gente que no se expresa bien, como así también personas que interpretan lo que en el fondo quieren o les conviene:

9 Hay conversaciones que mejor si

se desarrollan en una pieza, con

paredes aislantes de sonido

10 Comentarios que descolocan 11 Acá directamente hay una

comunicación bastante complicada


27


- Las palabras transmiten cosas, sean ciertas o no, y también son capaces de marcar a alguien durante todo el día o incluso su vida, sos capaz de traumarla o hacer que no tenga novio nunca. Y todo por tu culpa, forro

- Si alguien te dice algo y no le entendiste bien, no seas pelotudo de asentir con la cabeza y preguntale qué quiso decir. No hay peor cosa que una persona te diga “sí, entendí” y después nada que ver, quedando como retrasada o como que ni te escuchó

- Algunas expresiones pueden ser tomadas literalmente muchas veces, así que mejor sacarse la duda pidiendo que el otro reformule lo que dice

- Tratá de expresarte con claridad por más que el mundo se esté por venir abajo, una palabra precisa muchas veces es mejor que toda una oración

- No te guíes por chismes de comentarios ajenos, y mucho menos si no se conoce el contexto de la frase o el tono en la que se expresó

- Si los sordomudos incluso pueden hacerse entender, no seas forro y hacé el esfuerzo de lograrlo vos también

- Cada vez que digas algo de alguien, para evitar puteríos, sé bien específico con lo que decís de la persona y aclará lo más que puedas, así el otro no tiene cómo cagarte si quiere ir a chusmear. O mejor: ocupate de tus cosas y tratá de no opinar sobre los demás

- Para las personas que viven con cara de culo y que no sabés si están siendo sarcásticas o realmente sinceras: podrían de vez en cuando expresar cómo se sienten así se las entiende mejor, bastante que son caricúlicas (y poco simpáticas) y uno las que tiene que bancar

- Hay gente que usa palabras complicadas solamente para marear y confundir, como así también que las usan porque ni ellas saben lo que significan

- Problemas o malentendidos vas a tener de vez en cuando por más que intentes ser claro, así que preparate


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SSeecccciióónn VV:: gguussttooss,, iinntteerreesseess,, ffrreeaakkss yy ggeeeekkss::

“Arminda se la pasaba, a sus 21 años de edad, todo el día frente a la computadora y casi sin salir a la calle, por lo cual uno podía deducir que no era una chica muy sociable ni tampoco poseedora de una imperiosa necesidad de estar con gente todo el tiempo. Guiándose por lo que sentía y pensaba, creía que las personas en general eran muy “normales” a comparación de ella, quien se consideraba a sí misma como “metalera”, “friki”, “otaku”, “geek” y “gamer”… todo al mismo tiempo.

Sus intereses iban desde fenómenos sobrenaturales, casos de asesinos seriales, metal sinfónico que muchos confundían con música diabólica o religiosa, animes que contenían escenas sexuales con niñas de 10 años involucradas, y también videojuegos de temática “medieval” cuyos protagonistas eran elfos, magos o caballeros. Esta muchacha se la pasaba todo el día en su mundo, ensimismada y distanciada inclusive de sus familiares, puesto que era feliz haciendo maratones de series o películas, estando tirada en su cama devorando libros o tocando en el teclado composiciones propias durante horas y horas.

Era experta en analizar historias, personajes, escenas de películas o la estructura de composiciones musicales, pero también era instruida y habilidosa en el arte de esquivar gente y desentenderse de todo el mundo: nadie que no fuera alguno de sus personajes favoritos era capaz de emocionarla o llamar su atención, se desligaba de todo compromiso social que fuese organizado con una semana de anticipación, se sentía incapaz de extrañar a cualquier persona por más que le cayera bien, y para colmo controlaba su apetito sexual fantaseando toda la madrugada con sus actores favoritos, permitiendo así mantener su imagen de “asexuada” con la cual se mostraba orgullosa ante todo el mundo.

Habiendo ido a tres psicólogos y dos psiquiatras, ellos compartían la opinión de que Arminda era una muchacha introvertida, con rasgos infantiles y con un narcisismo muy marcado, el cual le iba a complicar (obviamente) las cosas por el resto de su vida. Por lo tanto, se podía suponer que Arminda intentaba encontrar su lugar en el mundo sirviéndose de estereotipos, los cuales consistían en gustos e intereses muy marcados, como así también en la actitud de despreciar de igual forma a las personas y los colores, optando de esta forma por usar ropa oscura de pies a cabeza y vivir como una ermitaña a salvo en sus cuatro paredes. En términos simples, Arminda era una pelotuda crónica.”

Moraleja: a nadie le importa si sos un metalero-gamer-hardcore-hipster-chavista-otaku


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Los gustos e intereses muchas veces marcan demasiado a alguien, a tal punto de convertirlo en una persona fanática, ridícula, o simplemente plana y aburrida que solamente habla de lo mismo, sin interesarle nada más que su serie/libro/banda/anime favorito. Los fanboys y fangirls están por todos lados y viven demostrando orgullosamente cuán aficionados o “expertos” son en su materia, pero el problema es que a veces abusan demasiado:

1 En las convenciones encontrás

desde aficionados hasta pibes que se

la tiran de ponjas

2 El "metal" estigmatizado por caretas

de MTV

3 Todos tenemos gustos o intereses

que suponen algo de fantasía


30

Fans hay de todo: del faso, del sexo, del anime retorcido, de youtubers pelotudos, de cultos que mezclan creencias a conveniencia, de videojuegos, libros, pelis, música, animales o cualquier cosa que te imagines que se pueda comer, tocar, leer o ver; y por lo tanto es inevitable cruzarse con esta gente obsesiva, con mucho tiempo libre o devota a aquello que le da algún sentido a su vida:

4 Marcia en un clásico intento de

ligar novio

5 Muchas veces cuesta relacionarte

con gente que te considera ridículo

6 Prejuicios: vienen de ambos lados


31

Más ejemplos de estas situaciones, donde una persona con su simple forma de hablar o apariencia puede darnos una idea - certera o no - de su posible personalidad y su estilo de vida:

7 Gente pasada de vicio que tiene la

mente contaminada por el mismo

8 Tener los mismos gustos con otro

no significa que tengan que llevarse

bien

9 Esto ya puede ser un poquito

preocupante, a nivel

psicopatológico muchas veces


32


- Todos tenemos aficiones que demostramos con orgullo y que pretendemos que otros conozcan para disfrutarlas, pero tampoco para insistir

- Hay gente que vive al pedo y por eso vive de sus hobbies o pasatiempos, otras personas con vida trabajo y familia no tienen tanto tiempo para eso, salvo que sean dibujantes de cómic o músicos efectivamente

- Como ya dije previamente, que tengas el 90% de gustos e intereses en común con alguien no significa que vayas a llevarte bien ni menos que esa persona te inspire cariño o respeto

- A algunas personas les puede gustar un poco de todo y sin embargo detestar las etiquetas

- Al contrario del caso anterior, hay gente que desesperadamente busca etiquetas careteando/figura sus gustos y demás (los famosos “posers” en internet)

- Los gustos e intereses sirven para conocer al otro y tener acercamientos en conversaciones de todo tipo, pero eso no es garantía de nada

- El desprecio o los prejuicios tienen su base en todo tipo de rasgos, solamente que en éstos se puede evidenciar un poco más

- Te puede gustar el anime, los libros de ciencia ficción o la música avant-garde, pero tampoco da hacer promoción TODO el tiempo a lo que te gusta o lo que te importa, porque así no vas a lograr que te tomen en serio. Mirá a los Testigos de Jehová al lado de otros credos, son hinchahuevos y nadie se los toma en serio, y literalmente ni les abren la puerta ya


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SSeecccciióónn VVII:: AAuuttoo--ccoonncceeppttoo yy aauuttoo--eessttiimmaa::

“Benito sufría por problemas de auto-estima todo el tiempo, y eso podía deberse – entre varias cosas – a que en la escuela solían hacerle BULLYING por ser el más pequeño del curso, por manquearla una y otra vez en toda cosa que intentó practicar durante la adolescencia (artes, deportes y otras actividades) y por irle para la mierda en sus estudios ya entrado en la adultez joven. Se miraba al espejo y se consideraba una persona aburrida, ñoña, torpe, poco práctica, débil y que no valía ni siquiera el aire que respiraba, pensando incluso cosas tales como “hasta un moribundo necesita este aire más que yo”, “como espermatozoide era más lindo seguro” o “no entiendo cómo mis viejos me quieren todavía”.

Cuando lo halagaban por ser dulce, atento o bueno creía que la persona le estaba tomando el pelo, cuando lo saludaban por la calle ignoraba el saludo creyendo que el mismo iba dirigido a otra persona, y cuando intentaba por primera vez realizar algún trabajo manual se retiraba de la situación gritando que era un pelotudo y que no iba a poder. El pobre infeliz se lavaba los dientes y se bañaba para hacerle un favor a los demás y no a él mismo, estudiaba porque realmente quería recibirse de ingeniero por más que fuera un inútil para matemáticas, y se la pasaba durmiendo para olvidar cuán miserable y mediocre se sentía en su vida.

Envidiaba a todo aquel que tocase música, que tuviese novia, que hiciese buenos chistes en grupo y que incluso fuese más alto que él, puesto que el mundo para Benito era una burla constante de la vida misma, la cual le mostraba cruelmente cómo los otros que lo rodeaban tenían todo lo que él quería - aunque fuera en sobras o migajas - para incoporar a su incompleto ser. Sentía que su carácter era débil, que su cuerpo era frágil y que su mente en cualquier momento iba a bajar un par de peldaños para ser considerado un retrasado mental, observando cómo todos aprendían por medio de la práctica y el estudio cualquier cosa que se propusieran, dominando el arte, ciencia o técnica al cabo de un breve período de tiempo.

Benito se encontraba condenado y condicionado por una acumulación de experiencias negativas que nunca le permitieron conocer sus potencialidades o facilidades – en caso de tenerlas, quizá ni las tiene -, llevando una vida lo más cómoda y estereotipada posible, sin abrirse a nuevas experiencias por miedo al rechazo, fracaso o el ridículo frente a miles de personas. Su mente estaba contaminada de pensamientos y sentimientos incómodos que constantemente lo juzgaban y acusaban de cualquier cosa que hiciese o se le cruzase a otro sector de su mente. Benito es, ni más ni menos, un esclavo del amargo sabor de la derrota.”

Moraleja: las dificultades y los obstáculos en la vida existen y no siempre son fáciles de superar o elaborar, no todo es color de rosa.


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La gente busca reconocimiento, atención y sentirse valorada o querida de alguna u otra forma. Considerarse sexy o un deforme, interesante o repetitivo, gracioso o denso son cuestiones que nos afectan a todos a la hora de tratar con otros, y en muchas situaciones eso puede verse claramente, más porque hay gente que se va al carajo y a extremos:

1 Nada contra las rubias, es para ejemplificar nada

más

2 Es más fácil considerarse feo

que considerarse un Zoolander,

salvo que tengas el ego por las

nubes 3 Estos pelotudos existen,

posta


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Aunque hablando en serio, el auto-estima baja y el auto-concepto disfuncional son productos, tanto de terceros que nos traumaron con sus opiniones como así también de experiencias negativas que hemos tenido. Quizá es una defensa para no ilusionarnos y no salir heridos por si nos demuestran lo contrario, quizá es una manera de llamar la atención para que nos halaguen, pero lo que es innegable es que pueden llegar a afectarnos seriamente, a tal punto de estar viviendo bajo un puente por no animarnos a superarnos a nosotros mismos. Es como si las personas en general tuviésemos una tendencia pelotuda a ponerle énfasis a lo malo y a refugiarnos en un rincón sin querer enfrentar al mundo o los demás, siendo unos pusilánimes o “maricones” en la vida:

4 Éste por ejemplo es un pelotudo,

porque tampoco la pasión 5 El creerle al otro lo que nos dice

no siempre es una sabia decisión 6 Otra característica de los

sensibles: se les viene el

mundo abajo por cualquier

cosa


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Las personas con problemitas de este tipo pueden ser tímidas y retraídas, como así también agresivas, criticonas o caricúlicas, así que es imposible encajarlas en un estereotipo o comportamiento típico. Lo que sí tienen en común es que son muy sensibles a ciertos comentarios o gestos, y el resultado puede ser tanto una puteada épica como así también tener en frente tuyo a una persona llorando que se pega media vuelta y se va a la mierda:

7 Clásica situación

8 Muchos puntos de vista

negativos o disfuncionales vienen

de esa carencia

9 Algunos no admiten cuánto los

afectan los demás


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- Si tenés auto-estima baja, no andes dando lástima por todos lados diciendo cuán feo, desafortunado o inútil sos, porque aparte de todo eso encima sos pesado.

- Si sos de esos creídos que tiene el ego por las nubes, ya te van a bajar de un hondazo y vas a tener una especie de crisis por loco

- Si te tenés bronca y lo único que hacés es desquitarte criticando todo lo que rodea, no hacés otra cosa que plasmar tu propia miseria a tu alrededor, lo cual demuestra que sos bastante infantil

- Uno muchas veces necesita reafirmar las cosas buenas que cree de uno mismo, y está bueno que otro cada tanto las confirme; pero si vas a ser un gil que vive llamando la atención onda “attention whore”, te va a ir para la mierda en la vida, por el simple hecho de que hay que aprender a vivir con uno mismo e independientemente de otras personas.

- Problemas de auto-concepto o autoestima pueden ser consecuencia de comentarios muy forros, una educación estricta o gente que te la hizo pasar mal repetidas veces, pero tampoco da hacerse la víctima de la vida por cosas que te pasaron cuando tenías tres años

- Hay personas que se esfuerzan por superar sus propios prejuicios o preconceptos (respecto a ellos y los demás), y está bueno demostrarles que se equivocan y que tienen más capacidades u oportunidades de las que creen


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SSeecccciióónn VVIIII:: EEssttuuppiiddeezz ee iiggnnoorraanncciiaa::

“Filemón era una persona un tanto repetitiva y que no aspiraba a demasiado en su vida, y esto se evidenciaba en su rutina diaria. Filemón comenzaba su día tomando unas pastillas que - según su médico - iban a incrementar su cociente intelectual considerablemente, para luego rezar en dirección al sol unos mantras que eran una mezcla de griego, chino y esperanto para activar su vigésimo chakra. A dichas actividades se le sumaban actividades tales como ver documentales inspirados en Zeitgeist por YouTube, persuadir gente por Facebook de que la Cienciología era el futuro de la humanidad, y por las noches leer frases célebres de Coelho, las cuales se encontraban adornando las páginas de una agenda oficial que él tenía del amigo Paulo.

Filemón era una persona ingenua que prefería guiarse por sentimientos e intuiciones, los cuales – a su criterio - superaban la razón y cualquier explicación producto del sentido común (o del trabajo mental de una persona con cociente intelectual normal), por lo que en las discusiones prefería detenerse en el momento exacto en donde procedían a cerrarle el culo con argumentos claros. También se la pasaba escuchando canciones con ritmo repetitivo y con letras que hablaban sobre las nalgas de mujerzuelas con un fuerte apetito sexual, cuyos álbumes estaban repletos de canciones con invitados especiales tales como El Latino Monster o Frederick Con Mucho Prrra, lo cual influía en su opinión de que Beethoven y Mozart eran música aburrida para viejos.

Pero Filemón no solamente hacía saber a medio mundo que apoyaba el consumo de sustancias sintéticas todo el puto tiempo, sino que también solía sacarse selfies con su grupo de amigos durante sus andanzas nocturnas, a los cuales se podía ver drogados y sonriendo con anteojos de sol… en plena madrugada. A esto se le podría sumar el hecho de que Filemón no se lavaba los dientes, afirmando que las fábricas de pastas dentales complotaban contra la humanidad, usando compuestos químicos corrosivos para los dientes para enriquecer así secretamente a los dentistas; y en el caso del desodorante, evitaba usarlo para no morir joven de cáncer de axila.

Como podrán ver, Filemón es un corto de los tantos que existen en este mundo.”

Moraleja: la verdad que no se me ocurre qué más decir sobre ésta gente, aparte de no entender cómo sobreviven en esta vida


39

Sé que los términos “estupidez” e “ignorancia” son muy vagos, y sé que pueden abarcar un amplio abanico de actitudes o rasgos de la gente, pero yo hago referencia a actitudes de gente que habla sin saber, que se deja llevar por ideas extremas o pensamientos primitivos, como así también me refiero a quienes se comportan de manera infantil. Todos tenemos algún momento en donde nos ponemos en “modo pajero”, pero hay personas que lo son todo el tiemo, como si fuera parte de su condición. Obviamente que depende del criterio personal el discernir si una persona puede considerarse “pelotuda” o no de acuerdo a lo que dice o hace, pero yo seleccioné varias actitudes que me parecen bastante pelotudas a mi parecer:

1 Dejarse guiar por estereotipos es

poco conveniente y de cómodo

2 Hay gente que no sabés cuánto

ejercita su cerebro

3 Posturas como éstas son mediocres

y egoístas


40

La estupidez y la ignorancia son actuar sin escuchar al otro ni pensar las cosas, sin dudar de uno mismo ni calentarse en querer mejorar o progresar en tal o cual aspecto a lo largo de la vida. Ambas pueden ser asociadas al egocentrismo, el egoísmo, la ignorancia y la comodidad, imponiendo uno su manera de manejarse en el mundo a los otros:

4 En el periodismo actual se ve la

tendencia a la pelotudez

5 Como dije: todos nos tendemos

a comportar como pelotudos o

malcriados

6 Gente cómoda cerrada en lo que

les conviene creer, sin criterio

alguno


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Más ejemplos todavía de lo mismo, donde la gente se maneja con pensamientos infantiles, primitivos o estúpidos que impone o aplica de manera universal en su vida:

9 Nunca entendí cómo siguen esas

charlas aparte de un “ah, ¡mirá vos!”

7 La ignorancia pone cómodo a uno,

desperdiciando su cerebro

8 Disculpen por insistir, pero en el

tema "creencias" este asunto se ve

claramente


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- Todos tenemos ciertos pensamientos que pueden ser dignos de un tonto, ignorante, ingenuo o egocéntrico, pero hay gente que constantemente se maneja con esquemas mentales que para su edad ya no son necesarios (o que debería superar)

- En el fanatismo y las creencias suele verse claramente cómo la gente se ridiculiza a sí misma a la hora de tener pensamientos absurdos, ilógicos o dogmáticos, perdiendo así su flexibilidad para adaptarse a ciertas situaciones o contextos

- En todos lados podés encontrarte gente racista, sexista, ultra-religiosa, fanática o ignorante que intenta imponer su subjetividad a todos, pero tenemos la capacidad de pensar y cuestionarnos a nosotros mismos, cosa que realmente hay que valorar y poner a trabajar de vez en cuando, al menos cuando estamos al pedo o de vacaciones

- Si te tenés bronca y lo único que hacés es desquitarte criticando todo lo que rodea, no hacés otra cosa que plasmar tu propia miseria a tu alrededor, lo cual demuestra que sos bastante infantil

- Uno muchas veces necesita reafirmar las cosas buenas que cree de uno mismo, y está bueno que otro cada tanto las confirme; pero si vas a ser un gil que vive llamando la atención onda “attention whore”, te va a ir para la mierda en la vida, por el simple hecho de que hay que aprender a vivir con uno mismo e independientemente de otras personas.

- Problemas de autoconcepto o autoestima pueden ser consecuencia de comentarios muy forros, una educación estricta o gente que te la hizo pasar mal repetidas veces, pero tampoco da hacerse la víctima de la vida por cosas que te pasaron cuando tenías tres años

- Hay personas que se esfuerzan por superar sus propios prejuicios o preconceptos (respecto a ellos y los demás), y está bueno demostrarles que se equivocan y que tienen más capacidades u oportunidades de las que creen

- En el caso de los autodenominados “misántropos”: si bien todos tenemos derecho a enojarnos o bajonearnos por cosas de la vida misma, tampoco da vivir con tu peor cara siempre, maldiciendo a Dios y a medio mundo por lo imperfectos y basuras que somos.


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SSeecccciióónn VVIIIIII:: AAmmoorr,, sseexxoo yy ccuueessttiioonneess ddee ggéénneerroo::

“Ofelia últimamente venía con una sensación que la venía molestando todos los días. Para ella el amor romántico no existía, un amigo era simplemente un amigo y no lo veía como otra cosa más, y consideraba además que toda relación “especial” entre hombre y mujer se reducía a lo sexual, factor que era idealizado o confundido con sentimientos y pensamientos de compromiso por gente “tonta” o “débil”. Por estas mismas razones, Ofelia se sentía extraña ante sí misma y se observaba como una desconocida: sentía “algo” por su amigo de hace años, a quien comenzó a “ver” de una manera diferente. Él la despejaba de su sensación de vacío y soledad muchas veces, comenzó a notarlo más alto y con una sonrisa encantadora, y cada vez que se iba a dormir recordaba los chistes que él solía hacerle por cada vez que ella se sentía desanimada.

Ella sospechó que quizá sería una obsesión pasajera o simple curiosidad con este muchacho, a quien ahora veía como un compañero más allá de un simple amigo, pero su teoría o suposición era refutable por el simple hecho de que hacía diez meses que le pasaba esto, y cada vez que un muchacho intentaba coquetear con ella para luego separarle las piernas, ella se sentía asqueada y como si estuviese haciendo algo “incorrecto”. De más está decir que cuando veía a su amigo sentía mucha ternura por dentro, sintiendo que un abrazo ya no bastaba o alcanzaba para expresar el cariño que sentía por él; y por esta misma razón no podía mirarlo a los ojos, temiendo que él descubriera con algún descuido de ella el secreto que se reservaba para ella y nadie más.

Para ella él no era el hombre perfecto o ideal, pero sí aquel que superaba en muchos aspectos a todos los demás que ella conocía, y sentía que su personalidad “encajaba” perfectamente con la de él, a quien creía conocer profundamente luego de tantos momentos inocentes y amistosos entre ambos, lo cual por cierto no la ayudaba en nada para intentar sofocar aquellas mociones tiernas que surgían de su interior. Pero siguiendo con su terca postura de que era algo pasajero y que no tenía sentido llevarlo al siguiente nivel – lo cual podría arruinar su amistad en un instante -, optó por callarse y esperar que apareciese un macho apetecible que desplace los tiernos pensamientos que tenía con su amigo.

Ofelia se encuentra en un limbo indefinidamente prolongado, en un estado interior donde este muchacho no es solamente su amigo pero tampoco es algo más, reconociendo cómo sus sentimientos hacen presión por exteriorizarse y ser dirigidos hacia él y nadie más.”

Moraleja: cuando te cabe alguien, sea quien sea, te cabe y punto


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El tema del “sexo/género” está de moda como nunca. Y esto se evidencia en el abuso de la palabra “femicidio” para ciertos crímenes, como así también en las marchas y movimiento que luchan contra la discriminación sexual. Por otro lado, en lo concerniente más a la afectividad, el concepto de “friendzone” en internet también provoca polémica a su manera, principalmente en hombres. El abuso de memes, movimientos en redes sociales, y que hasta los pendejos de 10 años ya básicamente la pongan, incrementa más las voces y discursos presentes en todos estos temas del pipí y la pochola:

1 A algunas les cabe que les chiflen como

garantía de su belleza 2 ¿Amistad previa o no para una

relación amorosa?

3 Factores que producen atracción o

rechazo de una persona a otra


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Pero no solamente está presente el tema de la atracción y el rechazo para un género u otro (dependiendo la orientación sexual de cada persona), sino que también dicen “presente” ciertos estereotipos o prejuicios en lo referido a lo masculino y lo femenino:

4 Hay mucha gente resentida con

el sexo opuesto

5 El uso de ciertas palabras puede

chocar también a los demás

6 "Nunca se le dice 'te amo' a un

amigo"


46

El hecho de ser seres sexuados produce ambigüedad, expectativas, tensiones y confusiones con personas con la misma orientación sexual, y por esta misma razón – salvo que seas asexuado – vas a tener vínculos un tanto complejos con personas que te rodeen:

7 Juntadas a solas que hacen dudar a

uno 8 El rechazo sentimental de

alguien que nos atrae

9 Cuando el otro nos impone su

estereotipo de hombre o mujer


47


- La creencia de que todos los hombres son básicos, violadores y agresivos, como así también que las mujeres son todas histéricas, bipolares o sentimentales, no nos llevan a ningún lado. Aflojen a esos pensamientos, salvo que no quieran ponerla más

- Todos tienen una definición distinta de sentirse “atraído”, “gustar” o estar “enamorado” de alguien, y muchas veces la gente habla de cosas diferentes con los mismos términos

- Algunas personas se “enamoran” porque se revolcaron en la cama con alguien, otras por tener una amistad previa durante años incluso, y otras simplemente porque les pusiste una mano en el hombro. Solamente hay que “encontrar” a alguien que se maneje más o menos como nosotros

- Tanto el hombre como la mujer tienen ventajas y desventajas propias de cada sexo (biológicas, culturales, psicológicas, bla bla), y quejarse todo el día o decir cuán mierda es el otro sexo o género lleva al resentimiento y quedar más solo que Schopenhauer cuando se murió. Dejen de romper las pelotas que los genitales no le dan corona a nadie

- La ambigüedad de qué le pasa al otro con nosotros es cuestión de tiempo y de comunicación sincera, no de andar adivinando y perseguirse como pelotudo/a por toda cosa que esa persona haga o no haga con nosotros

- La gente siente cosas pero las puede interpretar de diferentes maneras o incluso negarles, siendo dichos sujetos reprimidos o cagones en muchos casos

- La amistad entre dos personas con la misma orientación sexual no siempre supone querer saltarle en el cuello al otro. Bueno, quizá la mayoría de las veces sí, pero no siempre supone que algo suceda, ustedes entendieron

- El rechazo, el histeriqueo, las rupturas y las reconciliaciones son parte de vivir en interacción con otros, por lo tanto hay que bancársela y punto.


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SSeecccciióónn IIXX:: CCuueessttiioonneess aaccaaddéémmiiccaass::

“Mamerto, desde que comenzó la facultad, empezó a distanciarse paulatinamente de aquellos que alguna vez fueron amigos y conocidos suyos, e inclusive de su propia familia. De repente sintió aburrimiento por las personas y sus predecibles discursos, desviando así su atención y sus energías en textos que expresaban teorías que pretendían explicar la naturaleza del hombre, el origen de las sociedades y qué factores influían para la estructuración e institucionalización de la misma, los cuales él consideraba como “interesantes”. Durante muchos fines de semana se quedaba en su casa alquilada y sin salir o volver a su hogar a kilómetros de distancia, envuelto en apuntes y esquemas conceptuales que hacía tanto como pasatiempo como para preparar exámenes, distanciándose emocional y mentalmente de toda persona que le escribía mensajes o que pasaba a saludarla.

Pero Mamerto no solamente manifestaba desinterés y una especie de desprecio hacia las personas, sino que al momento de relacionarse – inevitablemente – con sus compañeros o conocidos, demostraba aires de grandeza y una confianza excesiva en sí mismo, una actitud que para muchas personas delataba desde un “narcisismo” hasta la condición de ser un “pelotudo de mierda” y “creído”. Mamerto siempre creía tener la razón: justificaba todo desde su carrera y futura profesión, criticaba las epistemologías, el plan de estudio o materias de las carreras de sus ahora ex-amigos, y además se reía o gritaba cada vez que una persona tuviese un mejor argumento que él, para luego retirarse de la escena con indiferencia y afirmando que no tenía tiempo para discutir con “cerrados”.

Si hiciéramos una analogía desde la medicina, Mamerto comenzaba a manifestar cada vez más síntomas de una corrupción en él, una enfermedad cuyo germen brotó durante su cursado, incrementando exponencialmente su condición mórbida a tal punto de transformarse en otra persona diferente a la que fue años atrás, dejándose consumir por su carrera y adoptándola como centro y base de su ahora nueva vida. No extrañaba a las personas, comenzó a manifestar frialdad y falta de modales para con los demás, demostró ser muy intolerante y poco paciente en discusiones, y comenzó a adoptar la postura de ‘contesto mensajes cuando quiero’.

Mamerto, un sujeto desesperado por ser alguien pretendiendo ser superior a los demás, abusando de sus conocimientos académicos y de su razón, a expensas de ya sea pasar un buen rato con los demás, cultivar nuevas amistades o - quién dice - de conocer a una persona especial en su vida. Un pelotudo bárbaro.”

Moraleja: No dejes que tu carrera te vuelva un pelotudo de mierda o que despierte tu pelotudez latente.


49

Para aquellos que se encuentran en la facultad, ya se habrán dado cuenta que es un mundo totalmente diferente que supone – entre varias cosas – comer mal, dormir mal, rendir mal, sentirte mal y pasarla mal. La gente de repente no habla de otra cosa que no sean exámenes, materias, profesores o algún compañero o compañera que quieren garcharse, y muchos inclusive sufren una transformación horrorosa en sus vidas: pasar a vivir para la facultad y nada (o nadie) más…

1 Personas cebadas o

manijeadas que se la re

mandan

2 "Te cuento un chiste sobre la recursividad

jajaja"

3 Gente traumada, haragana o

burra que no aprueba


50

A ello además se le pueden sumar situaciones particulares que conciernen a las personas que te rodean o quejas sobre profesores y maneras de funcionar de la institución, como así también pelotudos que hablan de tu carrera sin saber. Es decir, no todo se reduce a rendir exámenes y aprobar:

4 Prejuicios de personas que no

saben una mierda

5 Solidaridad grupal ante el miedo

o cagazo

6 Debates sobre informaciones y su

veracidad


51

Profesores degenerados, compañeros de curso que no hacen un carajo para trabajos grupales, colectivos que no llegan más, parciales donde te toman

cosas que supuestamente no entraban y otros factores de mierda conforman el mundo académico:

7 La ironía de estudiar ciertas

carreras

8 Muchachas que aprovechan su

condición

9 "¿Y ahora con quién rendimos?"


52


- La vida académica consume gran parte de tu vida y energía, y muchas veces es la responsable de tu vida sentimental y social

- Hay gente que lamentablemente se pone súper estúpida por empezar una carrera, como así también hay gente que se recata bastante porque le pega la madurez

- Pensá que el paso por una facultad supone un pasaje hacia la adultez y el mundo del trabajo y la independencia, porque ya dejaste la adolescencia hace tiempo atrás

- Si solamente vivís por la facultad, la vas a pasar mal o te van a terminar confundiendo con un docente o uno metido en el centro de estudiantes

- Si tenés otros pasatiempos o actividades aparte de estudiar mejor, porque la verdad que no da ser una persona que solamente habla de los apuntes que lee todo el puto tiempo

- Bancate que gente ignorante o cerrada critique la epistemología de tu carrera, como así también la modalidad de tu institución o el estereotipo de personas que cursan con vos

- Que tengas buenas notas no es garantía de que consigas trabajo en tiempo y forma, así que a estar atentos a la cruda realidad del mundo laboral


53

SSeecccciióónn XX:: RRuuppeerrttoo,, eell mmiissáánnttrrooppoo:: Ruperto, polémico y querido personaje de Misantropía Gráfica, al quien di vida depositándole los rasgos y actitudes que más repugno de las personas, pero que a la vez logró (de alguna manera misteriosa) que la gente se identificara con él y lo considere una especie de “héroe”. Un bocón que denuncia - de manera poco educada - aquello que muchos tienen que aguantar todos los días de su vida, con la diferencia de que él tiene el coraje y los recursos para efectivizar dichas quejas, en lugar de quedarse callado y cediendo a la estupidez diaria como la mayoría de sus fans debe hacer:

1 Inmune a las indirectas 2 Ácido y pesimista 3 Siempre sincero 4 Consciente de sus defectos


54

Creo que muchas personas se identifican con Ruperto porque quizá representa para ellas valentía, fortaleza, congruencia con lo que hace y dice, firmeza

en sus convicciones, como así también una agresividad que le permite imponerse por sobre los demás y de alguna forma intimidar o repulsar. Ruperto es una exageración de aquellos que muchos querrían ser, al menos en ciertas situaciones donde les vendría muy bien:

5 Independiente y solitario 6 Sabe siempre lo que quiere 7 Humorista de alguna manera 8 Indiferente ante lo cotidiano


55

Esta sección fue hecha a pedido de todos ustedes, así que agrego más viñetas para ilustrar características de este personaje, que de a ratos roza lo cliché, hueco, predecible o repetitivo:

9 Siempre práctico 10 Analizando al otro 11 Justificando sus opiniones 12 Odiando a las fangirls


56

¿Más Ruperto? Entonces les doy más Ruperto: Terminada aquí la sección de Ruperto, pasemos a la sección de Rogelio, el famoso que dice pelotudeces.

13 No le gusta sentirse usado 14 Educando a sus pares 15 Detestando compromisos sociales

16 Despreciando afecto


57

SSeecccciióónn XXII:: RRooggeelliioo,, eell ffaammoossoo qquuee ddiiccee ppeelloottuuddeecceess::

Hay gente que lamentablemente consume las cosas no por su calidad o utilidad, sino más bien para producirse sensaciones agradables o para convencerse a sí misma de la existencia de un mundo lleno de esperanza, amor, simplicidad, oportunidades para cumplir sueños y vivir debajo de un arcoíris, siendo la literatura es un claro de ejemplo de ello. A estas alturas todos sabrán de quién es reflejo Rogelio, “el famoso que dice pelotudeces”:

1 Para algunos, la vida es

sufrimiento constante 3 Escribir cosas obvias no necesita

inspiración 2 Metáforas pedorras que dan

pena


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Hago de paso una pequeña aclaración respecto a Paulo Coelho y sus obras: muchas personas que adoran su trabajo (o que simpatizan con el mismo) no se guían por una actitud crítica o analizando la calidad del mismo, sino que simplemente se limitan a compartir frases sueltas de él que no paran de repetir que la vida es hermosa y que todo es posible. El problema es que muchas de estas personas quizá son susceptibles a cualquier dificultad o fracaso en la vida, y palabras tan ordinarias y generales suponen un aliento de esperanza para ellas, lo cual muchas veces es triste o preocupante. Cada cual puede leer lo que se le cante, gastando así su dinero y tiempo en los libros que quiera, pero el caso de Coelho es especial: sus obras rompen récord a nivel mundial (inclusive en descargas gratuitas), su cara aparece en todos lados hasta el cansancio, mucha gente le hace promoción gratuita (yo inclusive con éstas viñetas), y hay una sobrevaloración y exageración respecto a este ser humano que moviliza a millones, conmoviendo con sus palabras, historias y “enseñanzas”. Inclusive “El alquimista” es votado por muchos como un libro infaltable en toda biblioteca personal, ¿QUÉ CARAJO LE PASÓ A ESTE MUNDO?

4 Más metáforas pelotudas que apuntan a lo mismo 5 Hay gente que aplica mal frases muy ambiguos o generales


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Otra queja mía referida hacia la admiración a Coelho, es que las personas lo admiran como si fuese un genio iluminado que cumple una misión súper importante en su vida, la cual es motivar y ayudar a todos con sus pensamientos y fantasías plasmadas en sus libros. Sinceramente no veo nada de genialidad en este sujeto y solamente escribe cosas que suenan lindas, y que cualquiera podría escribir y supe rar con muy poco esfuerzo:

Puesto que ya no hay nada más que agregar de Rogelio y su representante en la vida real, pasemos a la sección dedicada a la muchacha más insoportable y tierna de todas: Marcia, la enamoradiza.

8 Agatha quizá esté en el próximo libro, no me odien

7 Pensamientos y conducta tienen

que ir de la mano

6 El tipo rebalsa de tanta

originalidad...


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SSeecccciióónn XXIIII:: MMaarrcciiaa,, llaa eennaammoorraaddiizzaa:: Marcia es una de las preferidas del público en Misantropía Gráfica, y esto puede deberse a que muchos se sienten reflejados en ella, no solamente por fantasear fácilmente con personas o enamorarse dos veces por mes, sino también por la ternura y la devoción que ella ofrece a todo muchacho que le produzca lindas sensaciones de pies a cabeza:

1 "Quien posee tu tiempo, además

posee tu mente" dice una canción

2 La palabra "amistad" es mala

palabra para Marcia

3 Ternura acumulada y siempre disponible


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Marcia no solamente afirma sentir cosas intensas y constantes por más de un muchacho, sino que también expresa sufrimiento ante el rechazo y la indiferencia, luchando por aquello que quiere y sin darse por vencida hasta concretar una relación amorosa. Existen muchas personas que una y otra vez sufren lo mismo, pero lo atribuyen a una persona diferente todo el tiempo:

4 Fantasías aleatorias con

desconocidos

5 Reduciendo una persona a sus

rasgos

6 "El amor no se razona" dicen


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Marcia, una muchacha persistente que no aprende más la lección, siendo poco sutil con los muchachos y poniéndose en “modo rompepelotas” con

cualquier ser humano que tenga dos bolas y un pene colgando. Su voz chillona, sus escenas de celos, sus gritos y llantos son un rasgo distintivo de esta chica y todas aquellas que se parecen a ella en algún grado o forma:

7 El destino le juega una mala

pasada a Marcia 8 Acosando en tiempo libre 9 El fenómeno "wishful thinking"


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Más Marcia para el público que siempre pide:

10 Marcia ve la realidad de otra

forma

11 Practicante de Manuela

12 Devota y algo masoquista


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SSeecccciióónn XXIIIIII:: PPaarrttee ffiinnaall ddeell lliibbrroo:: Luego de un recorrido por este libro - el cual estoy consciente que está mal escrito en muchas partes y mal editado en cuanto a la organización de las viñetas y sus tamaños dispares -, quiero agradecer nuevamente a todos los que ven en mis historietas un intento de reflexión y autocrítica a todas aquellas actitudes de mierda, de las cuales por lo visto no podemos escapar. Somos imperfectos, la manqueamos, nos cuesta aprender de los errores y a todos nos salta la térmica en diferentes situaciones, y por todas estas razones comencé esta colección de viñetas que ilustran lo repetitivos o mediocres que podemos llegar a ser en nuestra vida cotidiana. Creo que la actitud de ser crítico, disconforme y un tanto rebelde ante muchas cuestiones diarias o “normalizadas” por todos es algo bueno, pero el exceso de prejuicios, el mal humor o tener un carácter fuerte, muchas veces pueden terminar en una combinación bastante desagradable y poco funcional, tanto para nosotros como para quienes nos rodean. Por esta misma razón invito a todos a mi página para que reflexionen sobre ustedes mismos y sus conductas, como así también sobre aquellas cosas que sienten, piensan y hacen de manera mecánica, sin pensar o cuestionarse demasiado. Muchos seguidores de Misantropía Gráfica seguramente son extremistas, prejuiciosos y quizá un tanto retorcidos, pero por otro lado sé que también hay gente que está en un proceso de madurez, lucidez y cambio; y por esta misma razón agradezco a mi amplio público por tenerme paciencia y fe a lo largo de estos meses. Como muestra de mi gratitud, a continuación los comentarios de una publicación que hice hace poco, en la cual preguntaba si la página había servido de algo a quienes suelen visitarla:


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Como verán, mi página está llena de personas de todos los gustos y colores, y eso es algo que me hace sentir orgulloso. Inicié Misantropía Gráfica hace dos años y ya tengo 17.600 seguidores, lo cual me parece un logro increíble si lo comparo con mis cálculos de llegar a como mucho 2.000 fans. Como ya dije hace poco, estamos en un mundo donde dibujantes con viñetas muy pedorras hacen guita y cualquiera escribe libros, así que… ¿por qué yo no? Ojalá varios se prendan con las donaciones, quién les dice no llego a una Playstation 3…

Y acá es donde me despido desde este espacio, puesto que nos vamos a seguir viendo en la página…

Saludos y muchas gracias por todo, gente :)

Facebook: https://www.facebook.com/misantropia.grafica

Ah, y por el copyright y todo eso: cualquier pelotudo que intente tomar varias de estas ideas o viñetas como propias, que tenga presente que me voy a terminar enterando. No sean forros.

el libro ilustrado de misantropía gráfica

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